Reporte de Lectura de La Unidad 6

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GRUPO 4

JOSÉ ALBERTO SÁNCHEZ ZAPATA 100508071

YASMIN GUZMÁN MARTÍNEZ 100526180

MARCELA TORRES FIGUEREO 100533225

ANDY FRANCISCO LUNA MATIAS 100583309

OSMIL PEÑA 100519029

MERCEDES DE JESÚS GARCÍA 100531583


Informe de lectura de la unidad 6.

Adultos de edad madura: desarrollos físicos y cognoscitivos.

Madurez: desarrollo de la personalidad y socialización.

Desarrollo de la madurez:

Las teorías del desarrollo discrepan mucho en la cuestión de cuándo comienza


y termina la madurez. En gran parte la respuesta depende de las experiencias
por las que pasé el individuo, se considera rama dura una mujer de 43 años
que acaba de tener un hijo, un hombre de 41 años que asiste a un programa de
capacitación en el trabajo considera que está en la madurez de su carrera y de
su vi da o piensa que está comenzando una vida nueva.

Hay además algunas señales psicológicas, la mayor parte de las cuales se


refieren a aspectos de continuidad y cambio. Nos damos cuenta de haber
tomado algunas decisiones básicas relativas a nuestra carrera o a nuestra
familia, decisiones que ahora están firmemente establecidas y que es
necesario cumplir. Nunca conocemos el futuro, pero ya no nos ofrece tantas
posibilidades como antaño. Las señales también provienen de nuestra carrera;
tal vez se interrumpa el progreso.

En la concepción que se tiene de la edad madura influyen condiciones


económicas, la clase social y la época en que se vive. Muchos se dan cuenta
de que han dejado de ser jóvenes; pero se sienten satisfechos y piensan que
se encuentran ahora en la plenitud de la vida.

Las capacidades físicas de muchos posiblemente estén un poco deterioradas,


pero la experiencia y el conocimiento personal les permiten controlar su vida
mejor que en cualquier otra edad. Pueden tomar decisiones con una facilidad,
una pericia y una seguridad que estaban antes fuera de su alcance.

Muchas personas de edad madura no toman decisiones tan importantes ni


dirigen empresas u organismos gubernamentales. Hay quienes ni siquiera
piensan que controlan su propia vida, mucho menos la de otros. Algunos
pierden su vitalidad a los 40 años.

La mayoría de las personas experimenta cierta ambivalencia durante la edad


madura. Tal vez sea el mejor momento de la vida en relación con la familia, la
carrera o el talento creativo; pero casi todos los de esta generación también
están plenamente conscientes de su mortalidad y con frecuencia piensan que
se les está acabando el tiempo; por lo demás, los años parecen transcurrir con
Mayor rapidez. Algunos empiezan a preocuparse por cuestiones de creatividad
y sus aportaciones a la siguiente generación; temen estancarse o perder
oportunidades; de sean conservar las relaciones íntimas con su familia y sus
amigos.

Algunos investigadores consideran que los adultos perciben la edad madura


como un periodo en que algunas esperanzas se frustran y algunas
oportunidades parecen haberse perdido para siempre; sin embargo, un número
considerable de investigaciones convincentes indica lo contrario. Se ha
comprobado que para los adultos estos años son simplemente un periodo de
transiciones graduales positivas y negativas relacionadas con el
envejecimiento.

El modelo de la crisis presenta, además, ciertas debilidades metodológicas que


reducen su atractivo. Muchos de los trabajos que lo apoyan se realizaron con
poblaciones clínicas más que en muestras de sujetos normales, las cuales son
más representativas de la población adulta.

La madurez es el periodo en que las personas comienzan a hacer un inventario


de su vida. Algunas se sienten eficientes, competentes y en la cima de sus
facultades. A otras les causa dolor examinar su vida. Si bien los factores
normados por la edad, como el encanecimiento, el abultamiento del vientre o la
menopausia, se combinan a veces con sucesos no normativos como el divorcio
o el desempleo, lo que desencadena una crisis, es menos probable que estas
influencias provoquen una crisis si se prevén o si se ve en éstas un proceso
normal.

Los que están más propensos a sufrir una crisis de madurez rehúyen la
introspección y recurren a la negación para no pensar en los cambios de su
cuerpo y su vida. un hombre de 45 años que todavía cree ser un gran atleta se
sentirá devastado cuando su hijo de 15 años le gane en el baloncesto. Es tos
individuos necesitan esforzarse mucho para mantener sus ilusiones,
observada. De dican mucha energía al intento cognoscitivo del autoengaño,
hasta que por fin interviene la realidad.

Continuidad y cambios fiscales

Los cambios más palpables de la madurez son la naturaleza física. Así que
sobre en esta etapa en la que recibimos los primeros recordatorios claros que
nuestro cuerpo comenzó a envejecer.

La edad es como el amor; No podemos ocultarlo, escribió un dramaturgo del


siglo XV. Para muchas personas maduras, llega el” momento de ver la verdad”
cuando el espejo les muestra nuevas arrugas, la bombilla de la tristeza del
vientre a la que otros, según la actitud que tengan ante el envejecimiento y la
muerte.

Algunos hechos biológicos obvios, como la menopausia en las mujeres, como


la dificultad de lograr la erección en el hombre y la disminución de la agudeza
visual en ambos sexos son hechos que imponen un cambio en la autoimagen o
las actividades y es necesario integrarlos en un estilo de vida satisfactorio
(Newman, 1982; Timirates, 1994). Si esto se tiene en cuenta, podemos aligerar
el proceso y aliviar a muchos de sus efectos negativos.

Cambios en las capacidades.

Sensación.

La audición pierde agudeza después de los 20 años y disminuye de modo


gradual, sobre todo en lo relacionado con los sonidos de alta frecuencia. En
cualquier caso, rara vez pocas veces es lo bastante grave como para afectar la
conversación normal en la edad madura. El gusto, el olfato y la sensibilidad a
los graduales y menos perceptibles que los visuales o auditivos.

Habilidades motoras y tiempo de reacción

Estas dos capacidades tienden a disminuir. Es posible que se deterioren las


habilidades motoras, pero el desempeño se mantiene constante, tal vez debido
a la experiencia y a la práctica constante. En cambio, conforme pasan los años,
cada día resulta más difícil aprender habilidades nuevas.

Cambios internos

Se reduce la actividad del sistema nervioso, sobre todo después de los 50


años. El esqueleto se vuelve rígido y se encoge un poco en el curso de la
adultez; pero poco a poco la gravedad se hace sentir y la estatura disminuye.
El corazón bombea hacia el cuerpo un promedio de ocho por cientos menos de
sangre por cada decena una vez iniciada la adultez; el calibre de las arterias
coronarias se reduce casi a un tercio del tamaño que tenia entre los 20 y los 30
años.

La menopausia y el climaterio

en la mujer, el cambio interno mas importantes sece de la ovulación y la


menstruación, con diversas consecuencia físicas y psicológicas. La
menopausia forma parte de del climaterio, que desina la totalidad de los efectos
físicos y psicológicos que acompañan a las alteraciones hormonales de la
madurez. No existen algo equivalente a una “menopausia masculina”, pero
muchos expertes consideran que los varones maduros pasan por cambios
biológicos que se caracterizan por reajustes y modificaciones de su conducta
sexual.

Cambios y síntomas físicos

La menopausia comienza entre los 48 y 51 años, aunque en algunas mujeres


puede ocurrir un poco antes o muchos menos después. Las investigaciones
señalan que, de todos esos síntomas, solo los bochornos y los sudores
nocturnos se deben directamente a la menopausia, en concreto por la
disminución de los niveles de estrógenos. En conclusión, quizás apenas 15 por
ciento de las menopaúsicas necesitan tratamientos médicos para sus síntomas.

Salud y Enfermedad.

Podemos observar que con los cambios físicos normales que ocurren durante
la madurez se relacionan los cambios en la salud, algunos de los cuales están
vinculados a enfermedades propias de esta etapa de la vida. Que puede ser
conforme el cuerpo empieza a envejecer y se hace cada vez más vulnerable a
la enfermedad. Se dice que las personas de edad madura se percatan de su
mortalidad cuando ellas o sus amigos se enferman.

El envejecimiento y la salud.

Según el estudio longitudinal del envejecimiento de Baltimore:

1. Es posible detener o disminuir muchas pérdidas de función


asociadas con el envejecimiento.

2. Aun después de los setenta años, solo de 20 a 30 por ciento de las


personas muestran síntomas de cardiopatía.

3. Apenas 10 por ciento de las personas mayores de 65 años contraen


la enfermedad de Alzheimer; gran parte del deterioro cognoscitivo de
los ancianos.

4. Es bueno para la salud ganar un poco de peso a partir de los 40 años


, claro que las personas de edad madura deben evitar la obesidad,
pero no vale la pena preocuparse por perder dos o cinco kilogramos.

5. Una pequeña aclaración es que las personas no se vuelven más


caprichosas al envejecer. Quienes son caprichosas en la edad
madura también lo fueron en su juventud.

Principales enfermedades en la madurez.

Se dice que en los EE. UU los accidentes son las principales causas de la
muerte entre la gente de edad madura. Sin embargo, en ese mismo periodo
empiezan a aumentar los fallecimientos a causa de las enfermedades.

Algunas afecciones se convierten en grandes problemas y otras afectan a un


sexo más que otro. A lo largo de un gran parte del ciclo vital, la mortalidad de
los varones en cualquier edad duplica a la de las mujeres de la misma edad, en
parte porque suelen trabar más en ocupaciones peligrosas que ellas, pero
también intervienen factores psicológicos suelen preocuparse menos por su
salud porque les han enseñado que el hombre debe ignorar el dolor, es menos
probable que visiten al médico cuando se sienten enfermos o para que les
haga un examen general.

Enfermedades cardiovasculares: Estas afecciones, que entren otras incluyen


cardiopatías, arteriosclerosis e hipertensión, son la causa principal de muerte.
Las cardiopatías representan 35 por ciento de los fallecimientos y el 28 por
ciento de las muertes de personas cuya edad fluctúa entre 45 y 64 años.

Cáncer: El cáncer es la segunda causa principal de la muerte entre toda la


población, pero en los últimos años se ha convertido en la primera causa de la
muerte entre las personas de 45 a 64 años. Sigue creciendo la mortalidad
global por cáncer. Afecta más a los hombres que a las mujeres, pero la
diferencia no es tan grande como en el caso de las cardiopatías.

Diabetes: Es otra afección cuyo índice y gravedad aumentan durante la


madurez; puede complicar otros problemas físicos, con consecuencias fatales.
La mitad de los tres millones de diabéticos que viven en EE. UU tienen de 45 a
64 años.

Enfermedades respiratorias: Estas afecciones representan un problema en la


edad madura. Los hombres están mucho más propensos a la bronquitis, el
asma y el enfisema.

Efectos acumulativos de los hábitos de salud.

Comienza hablando de la mayoría de las personas de edad madura nos


sufrirán ninguna enfermedades serias y mortales que acabamos de redactar,
sin embargo, en EE. UU la esperanza de vida para los que cumplen 45 años es
de unos 79 años. Más de 80 años por ciento de los que llegan a los 45 años
sobreviven y se mantienen en buena salud por lo menos hasta los 65 años.
Varios investigadores han señalado que, aunque el promedio de vida no ha ido
mucho más allá de los 85 años para cualquier subgrupo de la población, una
proporción considerable conserva una salud relativamente buena en esta etapa
de la vida.

hábitos de buena salud: En parte, la longevidad se atribuye a los hábitos de


buena salud. Con una dieta balanceada y nutritiva, con suficiente ejercicio y un
cuidado regular de su salud, muchos viven una adultez activa y prolongada. En
efecto, muchos expertos en el área de la salud piensan que, con un programa
de ejercicio regular, con un menor estrés y una dieta sana es posible disminuir
el proceso del envejecimiento y seguir funcionando con vitalidad juvenil y con
un sentido de bienestar durante la madurez y después de esta. Numerosos
estudios han demostrado que el ejercicio, antes y después de la madurez,
pueden mejorar la resistencia y las capacidades físicas. Ciertos tipos de
ejercicios, sobre todo los aeróbicos, tienen por objeto aumentar la capacidad
cardiaca y pulmonar lo que suministra al organismo más oxígeno y por lo
mismo, más energía. Incluso los programas de ejercicios físicos ligeros a corto
plazo, destinados a adultos mayores sedentarios, producen un impresionante
aumento de la fuerza y la actividad cardiaca y pulmonar. Con el ejercicio
regular es posible disminuir el deterioro del tejido muscular, reducir la grasa del
cuerpo, ayudar a prevenir el deterioro de las articulaciones y combatir algunas
clases de artritis.

Continuidad y cambio cognoscitivos.

Si bien los estudios longitudinales han indicado una y otra vez que el
envejecimiento se acompaña de un deterioro de la actividad cognoscitiva,
ahora sabemos que el deterioro es mucho más gradual de lo que los
investigadores habían supuesto hace apenas 30 años.

Inteligencia fluida frente a inteligencia cristalizada.

Una forma de ver los cambios cognoscitivos que se operan en la madurez y en


años posteriores es la propuesta por John horn (1982) quien distinguió entre
inteligencia fluida e inteligencia cristalizada. Ambos tipos influyentes en las
puntuaciones de las pruebas de inteligencia, pero Analicémoslo por separado.

La inteligencia fluida consta de las capacidades que aplicamos al nuevo


aprendizaje; la memorización, el razonamiento inductivo y la percepción de
nuevas relaciones entre los objetivos y los hechos. La designación inteligencia
fluida es una metáfora en el sentido de que estos procesos básicos fluyen
hacia otras actividades intelectuales: reconocimiento, aprendizaje, análisis y
resolución de problemas (horn 1982); neugsrten, 1976).

Consecuencias para el funcionamiento intelectual:


Así, pues al parecer muchos adultos conservan, durante la edad madura un
elevado nivel de actividad dentro de un amplio espectro de capacidades
intelectuales, se observan además amplias diferencias individuales.

Experiencia y perecía.

Cómo hemos visto, algunos aspectos del funcionamiento cognoscitivo se


deterioran de manera gradual a partir de la madurez así, pues, la perecía
compensa el deterioro cognoscitivo de la madurez. Esto lo corroboran
investigaciones exhaustivas.

La continuidad y el cambio de personalidad.

Ciertas tareas de desarrollo definen el Madrezre, se dividen con aquellos con


jóvenes y vejez pueden mezclarse con las de la madurez. Estas tareas también
difieren en el hombre y las mujeres. Carl Jung (1993/1960) fue uno de los
primeros teóricos para subrayar la mitad importante de la vida de la vida:
estaba convencido de que los ancianos tienen una gran necesidad de
encontrar significado en su vida.

Desde entonces, se han propuesto varios modelos de desarrollo de adultos que


indican el complejo que este período y los años más tarde pueden ser. La
mayoría de las personas maduras tienen hijos que están en adolescencia en
los jóvenes y los padres mayores (Troll, 1989). Pero un número creciente de la
población, entre los que son individuales de 40 a 50 años con niños muy
pequeños, pasa a través de muchos eventos normativos a una edad superior a
la mayoría de los miembros de su generación. Tener pequeños niños en el
maduro. Es muy común entre los manifestantes que posponen la procreación y
entre los divorcios que están casados con las mujeres más jóvenes que están
dispuestas a tener un niño.

Generatividad frente a estancamiento de acuerdo con Erik Erikson (1981), el


problema fundamental que enfrenta en este momento de la vida es el del radio
de genes frente al estancamiento. El productivo, que consiste en integrar el
trabajo a la vida familiar y cuidar la próxima generación de la creativa, que
consiste en hacer contribuciones a la sociedad a gran escala.
Además, la generatividad se expresa tradicionalmente en mujeres, que son
actividades sociales importantes, trabajo e inmersión en maternidad y en el
cuidado de los seres queridos (Peterson y Klohnen, 1995).

La investigación más reciente proporciona más evidencia de que la generosa


de mujeres se manifiesta en numerosos roles, incluidos los de la familia y los
de trabajo (Macdermid y otros, 1997).

La alternativa de ambos sexos es el estancamiento y el sentido de


ensimismamiento y tedio. Algunos no perciben el valor de ayudar a la próxima
generación y atar en los sentimientos recurrentes para perder una vida
insatisfactoria. Alcanzar algunos logros o derivamos a aquellos que han
obtenido (Monte, 1987) el modelo Havighurst, tal como se aplica a la edad
madura (ver Capítulo 12), parece que Erikson. Sin embargo, según Erikson, las
responsabilidades más importantes provienen del simple de haber sido
"literalmente de la vida", entre la mayor generación y el más joven. Nos
referiremos a las consecuencias de este más adelante en el capítulo.

La madurez, sin embargo, plantea otros aspectos importantes. Robert Peck


(1968) está interesado en mucho tiempo para expandir la concepción de la
segunda mitad de la vida que Erikson nos propone. Los seis problemas del
desarrollo de estos períodos de confianza frente a la desconfianza, de forma
autónoma frente a la vergüenza y la duda, la falla de la iniciativa, el tejido
contra el trabajo de obra, la identidad interior frente a su difusión y intimidad
que se refiere el aislamiento. En serio crisis, es necesario resistir en los
primeros años.

En este período de madurez, todas las dificultades anteriores y su solución


reaparecen de cuando están en tiempo, especialmente en períodos de estrés y
camping. Un problema físico repentino, digamos un ataque al corazón, puede
revivir las luchas con autonomía y dependencia a los 45 años. La muerte del
cónyuge a veces renueva las profundas necesidades de intimidad en las
personas.

Reacciones personales antes la madurez


en el madurez, hombres y mujeres evalúan sus objetivos y reflejan si han
alcanzado o no sus objetivos originales. Durante Juventud, tomaron decisión y
consolidaron su carre;

Casi todos se da cuenta de que, para bien o por mal, continuará la carrera que
eligieron. Aquellos que no están satisfechos con su trabajo, están
desempleados o no han progresado tanto como querían, tal vez se sienten
amargo o desmontados. Otros están limitados a reorganizar sus prioridades.
Por ejemplo, algunos deciden pasar más tiempo a su familia y otros
compromiso interpersonales e incluso morales y menos a la profesión
profesional (FISKE, 1980).

Reacciones de los varones antes la madurez

Descubrieron que reaccionaron en la madurez de maneras individuales, pero


con algunas semejanzas. Casi todos ellos se sentían comprometidos con el
trabajo y la Familia. Muchos se enfrentan a las mismas dificultades: cuídate a
los primeros como los dependientes de los ancianos, y sean tratando con niños
adolescentes, aceptan sus límites personales y reconocen su creciente
vulnerabilidad física.

Aunque el bienestar psicológico del varón tradicionalmente ha vinculado a su


papel laboral, ahora se sabe que las relaciones familiares también son
importantes en esta etapa. Tal interacción entre los procesos del desarrollo del
individuo y la familia representa un elemento esencial de su experiencia en esta
fase de la existencia "(Farrell y Rosenberg 1981).

En efecto, la madurez se ha caracterizado como la "Cumbre del padre, como


entonces la entidad en el adulto generalmente aumenta (NYDegger y
Mittenness, 1996). Otra investigación corroboró la importancia de la familia en
los hombres durante la madurez. En uno de estos estudios, la calidad de sus
roles conyugales y de los padres predicó con precisión el nivel de problemas
psicológicos e intitulares en el cuidado experimentado en el trabajo (Barnett et
al., 1992).

El primero es el del hombre transcendente-Generativo. La segunda ruta es la


de la prueba seudodesarrollodo. Es un individuo que resuelve los problemas al
aplicar que todo está bajo control, aunque no es; En profundidad de su ser él
se siente perdido, confundido o aburrido. No puede satisfacer las demandas y
resolver el problema.

Familia y amigos: Contextos interpersonales

Durante la madurez las relaciones personales son esenciales para hombres y


mujeres. Podemos afirmar que el elemento fundamental que la define son las
relaciones con los miembros de la familia y con los amigos.

Las personas de edad madura sirven de puente entre la generación más joven
(generalmente sus hijos) y la generación mayor (sus padres ancianos). A
medida que se ajustan a los roles cambiantes en estas relaciones, a menudo

obtienen una nueva perspectiva acerca de su vida personal. Representan


ahora la generación que debe asumir el control. La nueva responsabilidad
exige examinar el pasado. Tal vez les moleste no haber conquistado ciertas
metas y tengan que admitir que algunas nunca las alcanzarán. Más que
cualquier otro grupo, deben vivir en el presente. El joven puede ver hacia
adelante y los ancianos a menudo vuelven la vista atrás; en cambio, los de
edad madura deben vivir aquí y ahora, pues tienen la responsabilidad de dos
generaciones, además de la propia. Al hacerlo, realizan la función de
guardianes de la estirpe: son los que mantienen los rituales familiares, celebran
los logros, conservan vivas las tradiciones familiares, se ponen en contacto con
los familiares que están lejos y reúnen a la familia para celebrar las fiestas.

Las relaciones con los hijos adultos incluyen, entre otras cosas, lanzarlos a la
vida independiente. Se trata de una transición importante para los progenitores.
Pueden sentirse tristes durante ésta, pero una vez que los hijos se hayan
marchado disfrutarán de más libertad, intimidad e ingreso discrecional.

Muchos estadounidenses crían solos a sus hijos y pueden verse agobiados


por profundos conflictos o por relaciones cambiantes con los hijos
adolescentes.
Luego de lograr la independencia de su último hijo, los progenitores empiezan
a cultivar roles e intereses ajenos a la paternidad /maternidad. A esta etapa de
la vida familiar se le da a veces el nombre de nido vacío.

En la madurez, la relación entre progenitores e hijos es más recíproca que en


cualquier otra fase.

La conducta de los hijos con sus padres dependerá de las experiencias y de la


etapa del ciclo de la vida familiar en que se encuentren. La mayoría de las
personas maduras mantienen una relación constante con sus padres ancianos
que abarca contacto regular, recuerdos compartidos e intercambio de ayuda.

Con los años poco a poco se invierten los roles entre las personas de edad
madura y sus progenitores. Es una etapa en que las personas maduras se
convierten en la generación al mando.

La mayoría de las personas maduras se encargan de cuidar a sus padres


durante mucho tiempo. Les ofrecen apoyo social, afecto y alguien en quien
confiar. Las hijas están más dispuestas que los hijos a cuidarlos.

La mayoría de los estadounidenses se convierten en abuelos en el periodo de


la madurez. Aunque este rol es individual, el abuelo cumple cuatro funciones:
da estabilidad, está presente en momentos de emergencia, sirve de árbitro y
conserva la memoria histórica de la familia.

Las amistades son a menudo parte central de la vida de las personas maduras.
Satisfacen muchas necesidades emocionales básicas de las personas mayores
cuyos hijos ya crecieron o enviudaron.

José Alberto.

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