Central Termicas
Central Termicas
Central Termicas
Central termoeléctrica
Concepto:
La central termoeléctrica es una instalación
empleada para la generación de energía eléctrica a
partir de la energía liberada en forma de calor.
Generalidades
Todas las centrales eléctricas de carbón, nucleares, geotérmicas, de energía solar, térmica o de
combustión de biomasa, así como algunas centrales de gas natural son centrales termoeléctricas. El
calor residual de una turbina de gas puede usarse para producir vapor y a su vez
producir electricidad en lo que se conoce como un ciclo combinado lo cual mejora la eficiencia. Las
centrales termoeléctricas no nucleares, particularmente las de combustibles fósiles se conocen
también como centrales térmicas o centrales termoeléctricas convencionales.
Centrales termoeléctricas
De ciclo convencional
Se llaman centrales clásicas o de ciclo convencional a aquellas centrales térmicas que emplean la
combustión del carbón, petróleo (aceite) o gas natural para generar la energía eléctrica. Son
consideradas las centrales más económicas y rentables, por lo que su utilización está muy extendida
en el mundo económicamente avanzado y en el mundo en vías de desarrollo, a pesar de que estén
siendo criticadas debido a su elevado impacto medioambiental.
De ciclo combinado
En la actualidad se están construyendo numerosas centrales termoeléctricas de las denominadas de
ciclo combinado, que son un tipo de central que utiliza gas natural, gasóleo o incluso carbón
preparado como combustible para alimentar una turbina de gas. Luego los gases de escape de la
turbina de gas todavía tienen una elevada temperatura, se utilizan para producir vapor que mueve una
segunda turbina, esta vez de vapor. Cada una de estas turbinas está acoplada a su
correspondiente alternador para generar energía eléctrica. Normalmente durante el proceso de partida
de estas centrales solo funciona la turbina de gas; a este modo de operación se lo llama ciclo abierto.
Si bien la mayoría de las centrales de este tipo pueden intercambiar el combustible (entre gas y
diésel) incluso en funcionamiento. Como la diferencia de temperatura que se produce entre la
combustión y los gases de escape es más alta que en el caso de una turbina de gas o una de vapor,
se consiguen rendimientos muy superiores, del orden del 55%.
En los últimos tiempos se viene desarrollando una nueva tecnología, la gasificación integrada en ciclo
combinado (GICC), que mediante un sistema de gasificación del carbón, reduce ostensiblemente las
emisiones contaminantes a la atmósfera.
Impacto ambiental
La emisión de residuos a la atmósfera y los propios procesos de combustión que se producen en las
centrales térmicas tienen una incidencia importante sobre el medio ambiente. Para tratar de paliar, en
la medida de lo posible, los daños que estas plantas provocan en el entorno natural, se incorporan a
las instalaciones diversos elementos y sistemas.
Ventajas
Son las centrales más baratas de construir (teniendo en cuenta el precio por megavatio instalado),
especialmente las de carbón, debido a la simplicidad (comparativamente hablando) de construcción y
la energía generada de forma masiva. Las centrales de ciclo combinado de gas natural son mucho
más baratas (alcanzan el 50%) que una termoeléctrica convencional, aumentando la energía térmica
generada (y por tanto, las ganancias) con la misma cantidad de combustible, y rebajando las
emisiones citadas más arriba en un 20%, quedando así en 0,35 kg de CO2, por kw/h producido.
Inconvenientes
El uso de combustibles calientes genera emisiones de gases de efecto invernadero y de lluvia ácida a
la atmósfera, junto a partículas volantes que pueden contener metales pesados. Al ser los
combustibles fósiles una fuente de energía finita, su uso está limitado a la duración de las reservas y/o
su rentabilidad económica. Sus emisiones térmicas y de vapor pueden alterar el microclima local.
Afectan negativamente a los ecosistemas fluviales debido a los vertidos de agua caliente en éstos. Su
rendimiento (en muchos casos) es nulo (comparado con el rendimiento ideal), a pesar de haberse
realizado grandes mejoras en la eficiencia (un 90-91% de la energía liberada en la combustión se
convierte en electricidad, de media).
Centrales de Ciclos Combinados
La planta de ciclo combinado es una planta de generación de energía eléctrica que combina dos procesos de conversión de
la energía. Esto es, conjunta un proceso usando una o varias turbinas de gas que funcionan bajo el ciclo termodinámico de
Brayton, con una eficiencia entre 30% y 36%, con un proceso utilizando una turbina de vapor que opera bajo un ciclo
termodinámico de Rankine, con una eficiencia entre 34% y 40% [1]. La operación en ciclo combinado de ambos procesos
termodinámicos eleva la eficiencia total a valores entre el 58% y el 64%. La configuración de estos dos ciclos
termodinámicos en una Central de Ciclo Combinado da como resultado una planta con mayor flexibilidad de operación, alta
disponibilidad y con un costo de inversión mucho menor en comparación a plantas eléctricas de capacidad similar de
generación que usan combustibles fósiles, tipo hidroeléctrico o nuclear.
Los ciclos combinados se pueden clasificar de acuerdo a su configuración mecánica en mono-eje, estando constituidos por
una turbina de gas, una turbina de vapor y un generador, los cuales están montados en el mismo eje o flecha; y en
configuración multi-eje, siendo aquellos donde la turbina de gas y su generador están montados en un eje y la turbina de
vapor y su generador en otro eje.
Una breve descripción de los componentes de una Planta de Ciclo Combinado se realiza a continuación con un arreglo de
una turbina de gas, un generador de vapor por recuperación de calor (GVRC) y una turbina de vapor (ver figura 1). En los
arreglos de planta donde hay dos o más turbinas de gas, cada turbina de gas tendrá asociado un GVRC.
Figura 1: Ciclo Combinado de una turbina gas y una turbina de vapor.
Adicionalmente, las Plantas de Ciclos Combinados requieren considerar una serie de servicios auxiliares denominados
Balance de Planta. Entre los principales servicios auxiliares se encuentra el Sistema de Agua de Alimentación que
típicamente incluye una planta de tratamiento de agua, al sistema de enfriamiento, al sistema de dosificación de químicos,
entre otros [2].
TURBINA DE GAS
El aire es tomado del ambiente, pasa a través de un filtro para eliminar impurezas y, posteriormente, se comprime hasta la
presión requerida para llevar a cabo la combustión. Como en todo proceso de compresión de gas, el incremento de la
presión va asociado con un incremento en la temperatura; por lo tanto, se obtiene aire caliente a presión.
En la cámara de combustión, se mezcla el aire comprimido con combustible en estado gaseoso y se produce la combustión.
Los gases calientes a presión se envían a la sección de la turbina donde se produce la expansión de los mismos hasta llegar a
una presión aproximada a la presión atmosférica (ver figura 2). Los gases calientes aún con mucha temperatura, son
enviados al GVRC.
La función del GVRC es generar vapor sobrecalentado a las condiciones que requiere la turbina de vapor (ver figura 3).
Para incrementar su eficiencia, comúnmente, la operación de la turbina de vapor se diseña para trabajar con dos o tres
niveles de presión.
Figura 3: GVRC.
La diferencia principal entre un GVRC y una caldera convencional consiste en que los GVRC no requieren quemar
combustible para producir vapor, lo generan a partir de la energía contenida en los gases de combustión de la turbina de gas.
En algunas ocasiones se instala un quemador suplementario en el GVRC con el fin de incrementar la cantidad de vapor
producido o incrementar la temperatura de los gases provenientes de la turbina de gas. Esta situación es cada vez menos
frecuente debido a los avances en el diseño de las turbinas de gas.
TURBINA DE VAPOR
Los Ciclos Combinados usan turbinas de vapor de tipo axial con varios componentes que trabajan a diferente presión. En la
figura 4 se representa una turbina de vapor de tres niveles de presión. El vapor de alta presión entra a la sección de alta
presión (AP) y después de expandirse, retorna al GVRC para recalentarse y, posteriormente, es enviado a la turbina como
vapor recalentado de media presión. El vapor de recalentado alimenta la sección de media presión (MP) y su descarga se
une a la corriente de vapor de baja presión (BP) que alimenta la última sección de la turbina. Finalmente, el vapor agotado
que sale de la sección BP se condensa y se recupera para alimentar al GVRC.
Figura 4: Turbina de Vapor.
Debido a la cantidad de señales manejadas en el sistema de control de un Ciclo Combinado (entre 3,000 y 6,000 señales
dependiendo del tamaño y configuración de la planta) es recomendable usar un Sistema de Control Distribuido. El cual
deberá ser capaz de dar respuesta rápida y eficiente a los requerimientos de arranque, paro y variaciones de carga de la
Central [1] y deberá contar con las facilidades para enviar y recibir señales desde el Centro Nacional de Control de Energía
(CENACE); organismo que controla a nivel nacional la generación de energía eléctrica.
Los equipos principales, como son las turbinas de gas y vapor y algunos equipos auxiliares, son suministrados con sus
propios sistemas de control. Por lo tanto, el sistema de control de la Central debe contar con los protocolos y facilidades
necesarias para comunicarse con estos sistemas de control y poder coordinar todas las operaciones del Ciclo Combinado.
Los periodos de arranque y paro son muy importantes y requieren de un cuidado muy especial [2]. Un algoritmo,
denominado Control Maestro, es configurado con una serie de lógicas que controlan y protegen los equipos durante los
periodos de arranque y paro. El sistema de control debe ser capaz de arrancar en forma automática todos los equipos de la
Central y controlar la carga eléctrica desde 0\% hasta un valor predefinido durante el diseño de la planta, suficientemente
estable para su transferencia del control Maestro al control Automático de Carga.
Para controlar las variaciones de carga, se incluye otro algoritmo, denominado Control Automático de Carga, el cual tomará
el control de la Central una vez que el control Maestro haya terminado la secuencia de arranque y la planta y la carga hayan
alcanzado el valor adecuado para la transferencia de controles. El control de carga llevará la Central al 100\% de su
capacidad o al valor de ajuste prefijado y controlará todas las variaciones de carga durante la operación de la central. Esto se
logra controlando la carga parcial del generador de cada turbina.
Algunos puntos que se deben tener en cuenta para implementar el sistema de control de un Ciclo Combinado son [1]:
Las variables críticas de protección y control deben contener circuitos de control y protección de triple
redundancia (lógica 2oo3).
Las variables no críticas se pueden controlar con circuitos redundantes (lógica 1oo2).
Las variables de solo medición o alarma pueden incluirse sin redundancia.
Una cantidad suficiente de tarjetas de entrada con tiempo de resolución menor a las normales deben ser
incluidas para el registro de variables críticas que puedan generar un paro de planta.
Un reloj satelital debe ser incorporado para permitir la sincronización de tiempo de todos los sistemas de control
existentes en la Central
Adicionalmente, el sistema de control debe tener las estaciones de trabajo suficientes para la operación adecuada de la
central. Una cantidad suficiente de gráficos deben ser incluidos para tener centralizados todos los datos de operación,
alarmas y facilidades requeridos por los operadores para el completo control de la Central. También, se deberá contar con
gráficos para el análisis y la revisión de las condiciones de la planta.
CONCLUSIONES
La gran actividad industrial, así como, la demanda de servicios por parte de la sociedad, demandan un suministro de energía
eléctrica continuo, confiable, y a un precio razonable, además de ser amigable con el medio ambiente. Comparando las
plantas de ciclo combinado con otro tipo de plantas podemos observar que tienen la misma confiabilidad y continuidad de
operación que las plantas termoeléctricas convencionales y las plantas nucleoeléctricas, pero sus costos de inversión y de
operación, así como sus emisiones de contaminantes al medio ambiente son mucho menores que estas. Comparadas con las
plantas solares y eólicas, los ciclos combinados tienen más emisiones a la atmósfera, pero no sufren la intermitencia de
operación que tienen esas plantas ante la falta de energía solar o de viento. Estas características colocan a las plantas de
ciclo combinado como la alternativa más viable para producir energía eléctrica a gran escala en la actualidad.
Sin duda alguna el mayor logro de Guaracachi en la gestión 2012, que marcará un hito en su vida
institucional y en todo el sector eléctrico boliviano, fue la exitosa puesta en marcha del Ciclo
Combinado.
Con el objeto de continuar atendiendo la creciente demanda de energía eléctrica del país, Guaracachi bajo la
permanente supervisión de su Casa Matriz ENDE Corporación, encaró la compleja conclusión del proyecto de
Ciclo Combinado, habiendo entrado en operación comercial el 24 de marzo, inyectando inicialmente una
potencia de 60 MW, la cual al 5 de julio se incrementó a 82 MW.
Vencido exitosamente el período de prueba por el personal de ENDE Corporación el 22 de septiembre de 2012
el ciclo combinado fue oficialmente inaugurado.
El sistema de ciclo combinado consiste en unir dos métodos de conversión de energía, dos turbinas de ciclo
Brayton (GCH-9 y GCH-10) y una turbina de ciclo Rankine (GCH-12). Esta combinación en la práctica consistió
en conectar a las unidades de generación de ciclo simple, dos recuperadores de calor que a la vez son
generadores de vapor (HRSG). Los gases calientes de escape de las unidades GCH-9 y GCH-10, en lugar de
ser emitidos y desperdiciados en la atmósfera, son enviados a cada uno de los HRSG y el vapor producido en
ellos es inyectado en la turbina de vapor para producir energía mecánica y luego energía eléctrica por medio del
generador que está directamente acoplado al eje de la turbina de vapor GCH-12.
El generador acoplado a la turbina de vapor tiene una potencia instalada de 96 MW y una potencia
efectiva de 82 MW, lo que significa que el ciclo combinado, completo es decir las unidades GCH-9 +
GCH-10+GCH-12, tiene una capacidad de producir 200,00 MW, con un rendimiento de 6.752 BTU/kWh a
plena potencia.
Equipamiento del ciclo combinado
Dos recuperadores de calor (OTSG), uno en la turbina a gasGCH-9 y otro Idéntico en la turbina a gas
GCH-10, con la instalación de un quemador suplementario en cada unidad.
Una turbina de vapor y un generador de % MW, la más potente de Bolivia.
Un transformador de potencia principal de 125 MvA (el de mayor capacidad en BolMa) y uno auxiliar.
Un condensador de agua.
Dos pozos de agua de seiscientos metros de profundidad.
Una planta de tratamiento de agua con tres tanques de almacenamiento.
Una torre de enfriamiento.
Obras complementarias, civiles y estructurales.