Técnicas Educación Ambiental - Esther López

C!. Introducción a la EA

T1. INTRODUCCIÓN A LA EDUCACIÓN AMBIENTAL

Marco histórico de la educación ambiental

La educación ambiental como corriente de pensamiento y acción, de alcance internacional,

adquiere gran auge a par7r de los años 70, cuando la destrucción de los hábitats naturales y la
degradación de la calidad ambiental empiezan a ser considerados como problemas sociales.
Se acepta comúnmente que el reconocimiento oficial de su existencia y de su importancia se
produce en la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Humano (Estocolmo, 1972), aunque
ya aparezcan referencias explícitas en documentos de años anteriores.
Desde mediados de los años 70, se han celebrado diversos congresos y conferencias
internacionales sobre educación ambiental, entre ellos:
• el Coloquio Internacional sobre Educación rela7va al Medio Ambiente (Belgrado, 1975),
• la Conferencia Intergubernamental sobre Educación rela7va al Medio Ambiente (Tbilisi,
1977),
• el Congreso Internacional de Educación y Formación sobre Medio Ambiente (Moscú, 1987)
• la Conferencia Internacional Medio Ambiente y Sociedad: Educación y Sensibilización para
la Sostenibilidad (Tesalónica, 1997).
La mayoría de los planteamientos teóricos y recomendaciones que surgen de estos
encuentros siguen teniendo vigencia y no han sido todavía desarrollados en profundidad,
habiéndose constatado dificultades importantes para la puesta en prác7ca de los planes que
sugieren.

De todos estos congresos y convenciones sale una de las definiciones de educación ambiental
más aceptadas, a pesar de la dificultad de asemejar un concepto tan amplio a una sola definición:

"La educación ambiental es un proceso permanente en el cual los individuos y las comunidades
adquieren conciencia de su medio y aprenden los conocimientos, los valores, las destrezas, la
experiencia y también la determinación que les capacite para actuar, individual y
colecJvamente, en la resolución de los problemas ambientales presentes y futuros". (Congreso
Internacional de Educación y Formación sobre Medio Ambiente. Moscú, 1987

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⇒ A nivel nacional, la educación ambiental en España surge ligada estrechamente al

conservacionismo ya los movimientos de renovación pedagógica.
⇒ Más tarde, ya en los años ochenta, con la creación del Estado de las Autonomías, se generaliza
la puesta en marcha de programas y equipamientos de educación ambiental.
⇒ En los años noventa se ex7ende una nueva visión del papel que debe jugar la educación
ambiental como herramienta para colaborar en la solución de los problemas ambientales. Se
subraya la necesidad de una educación que implique a toda la sociedad y camine hacia la
sostenibilidad. Se refuerza la idea de que la educación ambiental debe ayudar a transformar la
realidad y de que educación y ges7ón ambiental son complementarias.

La educación ambiental nace con la vocación de dar respuesta a la degradación del medio cuando
empieza a ser entendido como un problema social. En este sen7do, la Conferencia de las
Naciones Unidas sobre el Medio Humano celebrada en 1972 en Estocolmo, reconoció el origen
social de los conflictos ambientales y propuso la educación ambiental como estrategia
imprescindible de acción para par7cipar en su resolución.

EL LIBRO BLANCO DE LA EDUCACIÓN AMBIENTAL

El Libro Blanco de la Educación Ambiental en España (ADJUNTO EL PDF) es una inicia7va de la

Comisión Temá7ca de Educación Ambiental, formada por las Comunidades y Ciudades Autónomas
y el Ministerio de Medio Ambiente.
⇒ Consta de una primera parte, que desarrolla los principios, obje7vos e instrumentos de la educación
ambiental según se ha construido a par7r de las recomendaciones de las conferencias
internacionales y el análisis de una prác7ca diversificada de más de 20 años, a la que se han ido
incorporando nuevos contenidos, promotores y des7natarios, con una mirada puesta en el siglo XXI.
⇒ La segunda parte analiza y promueve las acciones pro-ambientales y su extensión en los contextos
vitales de los ciudadanos: hogar, trabajo, escuela, ocio y comunidad.

Tal y como se define en el Libro Blanco de la Educación Ambiental en España, la calidad de vida es
el obje7vo común de gobiernos y poblaciones. En siglo el XX, se reconoce que uno de los
obstáculos más importantes para el mantenimiento o la mejora de la calidad de vida es el
deterioro de los sistemas vitales, de los que depende la existencia de la especie humana en el
planeta.

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Principios básicos de la educación ambiental (CITADOS EN EL LIBRO BLANCO)

Los principios básicos de la educación ambiental se citan en el Libro Blanco de la Educación
Ambiental, y son los siguientes:

■ Implicar a toda la sociedad

- La educación ambiental debe alcanzar a todos los sectores de la población, en tanto que
des7natarios y, a la vez, agentes educadores. Pero especialmente debe alcanzar a aquellos en
quienes recae la toma de decisiones o ejercen mayor influencia social y 7enen, por tanto, mayor
responsabilidad: administraciones, legisladores, empresas, educadores, medios de comunicación,
etc.
- La educación ambiental 7ene que crear unas nuevas referencias é7cas de respeto al
entorno y un sen7miento de responsabilidad compar7da sobre su estado, desde lo local a lo
global. Para ello, debe estar integrada en la acción co7diana de los ciudadanos, los grupos sociales
y las diferentes en7dades.
- La educación ambiental debe generar en las personas conciencia de su capacidad para
intervenir en la resolución de los problemas, superando la impresión de impotencia que provoca la
información teñida de catastrofismo o fatalismo. En este sen7do, ha de mostrar y ayudar a
construir alterna7vas de acción posi7va.
- La educación ambiental es un proceso de aprendizaje con7nuado que puede darse en
contextos diversos, en cualquier momento y sobre cualquier aspecto de la vida. Las estrategias,
por tanto, deben ser múl7ples: la incidencia en el sistema educa7vo formal en su conjunto, las
campañas de comunicación dirigidas al gran público, los programas des7nados al sector
empresarial y sindical, el desarrollo de una ges7ón ambiental par7cipa7va por parte de las
administraciones, la integración de la educación en los planes de desarrollo, la realización de
proyectos por parte de las asociaciones, la u7lización de técnicas de interpretación ambiental en
contextos de ocio y recreación, etc.

■ Adoptar un enfoque amplio y abierto

- Cualquier intervención en educación ambiental debe abordar las situaciones y los
problemas con mentalidad abierta, considerar los diferentes puntos de vista sobre los conflictos y
sopesar los diversos factores que influyen en ellos, incluyendo los aspectos sociales, culturales y
económicos, así como los valores y sen7mientos de la población.
- Para trabajar en esta línea, la educación ambiental debe par7r de un enfoque y una
prác7ca intercultural, interdisciplinar e interdepartamental. Es necesario acabar con las barreras
que limitan la acción educa7va a ciertos profesionales (como únicos agentes idóneos para llevarla
a cabo), determinadas ins7tuciones -o departamentos, dentro de las ins7tuciones- (como únicos
lugares desde donde promoverla) o sectores sociales (como únicos des7natarios o parbcipes), y

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favorecer los procesos de encuentro, intercambio y cooperación entre diferentes actores y

enfoques.

- Un aspecto fundamental de la mentalidad abierta con la que hay que trabajar viene dado
por el hecho de que no se conocen con exac7tud las claves de solución de la crisis que afrontamos.
Por eso, hay que subrayar la importancia del proceso educa7vo, que debe proporcionar, más que
recetas, los recursos personales y colec7vos para hacer frente a los retos que vayan surgiendo y
para incorporar los cambios que vayan haciéndose necesarios.

■ Promover un pensamiento crí7co e innovador

- La educación ambiental debe propiciar la comprensión adecuada de las principales
cues7ones socio-ambientales y permi7r a las personas formarse opiniones fundadas, para lo cual
es indispensable el acceso a información a la vez comprensible y rigurosa.
- La educación ambiental debe contribuir a que las personas sean capaces de analizar,
interpretar y valorar dicha información, promoviendo un pensamiento crí7co e innovador, que
cues7one, de forma construc7va, los hábitos y estructuras vigentes.
- La educación ambiental está unida a la educación para el desarrollo sostenible y procura los
mismos obje7vos de equidad, solidaridad y jus7cia social.

■ Desarrollar una acción educa7va coherente y creíble

- La falta de coherencia es uno de los factores que merman e incluso anulan la acción
educa7va. Es necesario subrayar la importancia de la congruencia entre mensaje y acción, de la
adecuación entre fines y medios, de la conexión entre educación y ges7ón ambiental, de la
armonía entre los diferentes recursos e instrumentos u7lizados, de la idoneidad de los temas
tratados, de la oportunidad de los momentos de actuación...
- La falta de credibilidad es otro grave obstáculo para la eficacia educa7va. El problema
afecta a menudo a las administraciones y otros grupos sociales, mientras que, por el contrario, las
organizaciones cívicas cuentan con mayor crédito. En todo caso, ha de ser mo7vo de preocupación
para todos los sectores, que deben aumentar su credibilidad a través de la transparencia
informa7va y del esfuerzo honesto por actuar de forma coherente.

■ Impulsar la par7cipación
- La educación ambiental debe favorecer la aplicación prác7ca de los aprendizajes a
través de acciones orientadas a solucionar problemas concretos. Para ello es necesario revisar los
cauces de par7cipación que actualmente ofrece la norma7va vigente, mul7plicarlos y profundizar
en su desarrollo. Cauces que deben ser más amplios y accesibles a medida que se desciende al

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ámbito local. Se trata de promover la implicación, tanto individual como colec7va, y desde el inicio,
en los procesos de toma de decisiones y en la realización de actuaciones posi7vas.
- La par7cipación ciudadana en los planes y actuaciones ambientales 7ene, en sí misma, un
fuerte componente educa7vo, de concienciación, de aprendizaje de destrezas y de compromiso.
Pero requiere 7empo, predisposición, responsabilidad y ac7tud abierta. Exige, además, un
aprendizaje no sólo de habilidades sociales sino también de métodos.
- Desde el punto de vista de las administraciones, la consolidación de formas de ges7ón
par7cipa7va exige un esfuerzo para cambiar los modos de hacer tradicionales y una ac7tud
transparente y abierta. Como contrapar7da, facilita la prevención de conflictos y garan7za la
responsabilidad compar7da con la comunidad sobre los asuntos colec7vos. Este nuevo modelo de
ges7ón debe entenderse como la respuesta social necesaria ante la urgencia de acometer cambios
muy importantes a través de la profundización del funcionamiento democrá7co.
- Es fundamental apoyar al movimiento asocia7vo y fomentar el voluntariado como vías de
par7cipación comunitaria. La colaboración en actuaciones concretas permite a las personas tomar
conciencia de su poder de influencia en la resolución de los problemas que más directamente les
conciernen, facilitando la implicación progresiva en retos más complejos.

■ Incorporar la educación en las inicia7vas de polí7ca ambiental

- Para procurar el éxito y la eficacia de cualquier polí7ca ambiental debe integrarse la
educación ambiental como un componente esencial de todas las fases y acciones de su desarrollo
(planes de actuación, campañas de sensibilización, evaluaciones de impacto ambiental, etc.).
- Incorporar la educación ambiental significa contar con las poblaciones a las que van
dirigidas las actuaciones y hacerles parbcipes de los procesos que conducen a la adopción de
medidas. Por ello, la educación ambiental debe estar incluida, de manera explícita, en las dis7ntas
fases de planificación, ges7ón y evaluación de las inicia7vas ambientales.
- Las administraciones, por otra parte, deben asumir un papel demostra7vo y ejemplificador
en materia ambiental, comenzando por un esfuerzo forma7vo de sus cuadros técnicos y polí7cos, y
con7nuando con la asunción de la sensibilidad ambiental en sus dis7ntos ámbitos de actuación.

■ Mejorar la coordinación y colaboración entre agentes

- Para mul7plicar la efec7vidad de las acciones educa7vas es necesario mejorar la
coordinación y la cooperación entre los agentes sociales, en el sen7do de garan7zar la
comunicación fluida, aumentar el aprovechamiento de los recursos disponibles y buscar el máximo
apoyo a los esfuerzos realizados.
- La educación ambiental debe promoverse a diferentes escalas: internacional, estatal,
autonómica y local. Para ello, es necesario apoyar las vías de relación y organización de los agentes
promotores: consejos o comisiones temá7cas, asociaciones de educadores, redes de ac7vidad,
etc. Estas estructuras deben facilitar el intercambio de ideas y experiencias, la puesta en marcha de
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actuaciones conjuntas, el debate en torno a nuevos planteamientos teóricos, así como la

evaluación del propio trabajo, lo que permi7rá ir formulando un modelo más completo y
solventar las carencias hoy existentes.

■ Garan7zar los recursos necesarios

- Sin los medios necesarios -económicos, técnicos y humanos- no es posible poner en
marcha planes y programas efec7vos. Es necesario, pues, el incremento y mejora de los recursos
existentes (inversiones, equipamientos, programas, materiales...), junto a un aumento sustancial
del número, la diversidad y la capacitación de los educadores ambientales.

- No sólo debe garan7zarse la disponibilidad de los medios materiales y de los equipos

humanos, sino también su estabilidad en el 7empo, a través de programaciones a medio y largo
plazo. En caso contrario, no será posible ofrecer ni la con7nuidad ni la calidad necesarias para
conseguir resultados posi7vos.
- La calidad de las intervenciones en educación ambiental y, como consecuencia de ello, su
demanda social, depende de la existencia de controles por parte de las en7dades promotoras o
financiadoras, pero también de las personas y empresas que las desarrollan efec7vamente. Las
empresas especializadas y los educadores ambientales deben asumir su parte de responsabilidad
en la con7nuidad de los programas, trabajando con profesionalidad y crea7vidad, y u7lizando de
manera eficiente los recursos a su disposición.

ObjeHvos de la educación ambiental (CITADOS EN EL LIBRO BLANCO)

El Libro Blanco de la Educación Ambiental en España asume como propios los siguientes obje7vos
de la educación ambiental, entendiendo, no obstante, que la permanente evolución de los
enfoques teóricos y el replanteamiento de las prioridades de acción pueden exigir, en un futuro, la
incorporación de nuevas metas.

1. Contribuir a la construcción de un nuevo modelo de sociedad basado en los principios de la

sostenibilidad. La educación ambiental debe ser un instrumento en favor de una forma de vida
sostenible.
2. Apoyar el desarrollo de una é7ca ambiental que promueva la protección del medio desde
una perspec7va de equidad y solidaridad.
3. Ampliar la comprensión de los procesos ambientales en conexión con los sociales,
económicos y culturales.
4. Favorecer el conocimiento de la problemá7ca ambiental que afecta tanto alpropio entorno
como al conjunto del planeta, así como de las relaciones entre ambos planos: local y global.
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5. Capacitar a las personas en estrategias de obtención y análisis crí7co de la información

ambiental.
6. Favorecer la incorporación de nuevos valores pro-ambientales y fomentar una ac7tud
crí7ca a la vez que construc7va.
7. Fomentar la mo7vación y los cauces para la par7cipación ac7va de las personas y grupos en
los asuntos colec7vos, y potenciar el sen7do de responsabilidad compar7da hacia el entorno.
8. Capacitar en el análisis de los conflictos socioambientales, en el debate de alterna7vas y en
la toma de decisiones, individuales y colec7vas, orientadas a su resolución.
9. Favorecer la extensión de prác7cas y modos de vida sostenibles en los dis7ntos contextos
vitales, basados en la u7lización racional y solidaria de los recursos así como en el disfrute
respetuoso del medio.

NUEVOS RETOS

El cambio climáJco, la contaminación de los océanos, el efecto invernadero, el agujero en la

capa de ozono, la deserJzación, el deshielo, el agotamiento de los recursos, la perdida de
biodiversidad se han constatado como algunos de los graves problemas ambientales que hacen
inviable, para muchas personas, o amenazan, en nuestro caso, el disfrute de una vida digna.

Sin embargo, estos problemas son resultado de acciones concretas. Un mosaico de pequeñas o
grandes acciones de contaminación, de aprovechamiento excesivo o de descuido, de destrucción.
Acciones determinadas por los modelos de producción y consumo y por los hábitos de vida,
especialmente los de la sociedad occidental.

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Resolver los problemas ambientales o, mejor aún, prevenirlos implica la necesidad de ir cambiando
cada acción, de manera que se modifiquen los efectos de nuestra ac7vidad individual y colec7va,
para obtener un nuevo mosaico de fuerzas encaminadas en una dirección dis7nta: la
sostenibilidad.

Las funciones de la educación ambiental

La principal función de la educación ambiental es conseguir que la sociedad sea consciente de la
complejidad de la naturaleza y del medio ambiente, así como hacer que las personas adquieran
conocimientos, valores y habilidades que permitan que tomen acción de forma ac7va en la
prevención y la solución de los problemas ambientales actuales, así como la ges7ón responsable y
de calidad del medio ambiente.
Un punto clave de la educación ambiental es que expone la relación que existe entre el medio
natural y los sistemas sociales. Es más que un proceso educa7vo, es la base para que futuras
generaciones creen un es7lo de vida más sensibilizado hacia el medio ambiente, en el cual deben
par7cipar los miembros de la sociedad para mejorar la relación entre la humanidad y el medio en
el que vive.

ObjeHvos de la educación ambiental

Los principales objeHvos de la educación ambiental quedan recogidos en la Carta de Belgrado del
Seminario Internacional de Educación Ambiental de Belgrado, 1975, cuyos des7natarios son todo
el público general.
De forma general, la principal meta es que la población de todo el mundo, a través de la
formación, sea consciente y tenga preocupación por el medio ambiente en el que vivimos y sus
problemas. Con ello se pretende que la población tenga conocimientos y herramientas suficientes,
así como mo7vación y compromiso para trabajar tanto individual como conjuntamente en la dihcil
tarea de encontrar soluciones a los problemas del medio ambiente tanto actuales como para
prevenir futuros.
Con todo ello, según la Carta de Belgrado, los obje7vos de la educación ambiental son los
siguientes:
• Crear conciencia haciendo que las personas ganen sensibilidad hacia el medio ambiente y
sus problemas.
• Generar conocimiento en las personas para la comprensión básica del medio ambiente en
su conjunto, de los problemas asociados a él y del efecto que 7ene sobre el mismo la
humanidad, lo cual supone adoptar un punto de vista crí7co.
• Crear acHtudes en la sociedad a través de valores sociales, así como creando interés por el
medio natural que les conduzca a la par7cipación en su protección y mejora.
• Crear apHtudes en las personas que las hagan capaces de resolver los problemas
ambientales que se suceden.
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• Otorgar la capacidad de evaluación necesaria para poder valorar las medidas y programas
de educación ambiental que deben establecerse según los factores ecológicos, polí7cos,
esté7cos, sociales y educa7vos.
• Promover la parHcipación de las personas y grupos sociales en el desarrollo de su propio
sen7do de la responsabilidad, así como en la toma de conciencia de que existe urgencia en
la necesidad de atender a los problemas ambientales asegurando que las medidas tomadas
para afrontarlos sean las adecuadas.

Los componentes de la educación ambiental son:

• Conciencia y sensibilidad ante el ambiente y los desahos ambientales.

• Conocimiento y entendimiento del ambiente y los desahos ambientales.
• Ac7tudes de preocupación por el ambiente y de mo7vación por mejorar o mantener
• la calidad ambiental.
• Habilidades para iden7ficar y contribuir a resolver los desahos ambientales.
• Par7cipación en ac7vidades que contribuyan a resolver los desahos ambientales.
• La educación ambiental no defiende opiniones ni procedimientos par7culares. En cambio, les
enseña a los individuos a sopesar los dis7ntos lados de una problemá7ca mediante el
pensamiento crí7co, y es7mula sus propias habilidades para resolver problemas y tomar
decisiones.

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Perfil profesional del educador ambiental. Salidas profesionales

La competencia general que presenta un perfil como el del educador ambiental radica en
sensibilizar y educar a la población, promoviendo ac7tudes que contribuyan a la conservación y
mejora del medio, informando sobre sus valores y los diversos problemas ambientales,
capacitando para una correcta toma de decisiones, diseñando ac7vidades para su conocimiento
y uso basado en principios de sostenibilidad. Es el caso del desarrollo de programas de educación
ambiental (información, comunicación, formación, interpretación y par7cipación ambiental), la
realización de ac7vidades de guía-intérprete y el acompañamiento por el entorno o la ges7ón
ambiental.

Traduciendo la competencia general en términos laborales y profesionales, el educador ambiental

7ene competencia y capacidad profesional, personal y social para las siguientes tareas:
- Recopilar y seleccionar documentación para difundir información ambiental.

- Informar sobre el medio ambiente, u7lizando las técnicas de comunicación apropiadas.

- Diseñar ac7vidades de educación ambiental.

- Desarrollar programas y proyectos de educación ambiental.

- Evaluar el desarrollo de programas de educación ambiental.

- Guiar visitantes por el entorno, realizando operaciones de interpretación.

- Resolver con7ngencias en el recorrido por i7nerarios, aplicando los protocolos

establecidos.
- Caracterizar problemas ambientales, proponiendo soluciones sostenibles al mismo.

- Ges7onar ac7vidades de uso público, aplicando criterios de compa7bilidad con la

conservación del entorno.

- Promover los valores del patrimonio en el medio natural, desarrollando ac7vidades de

interpretación.
- Elaborar productos cartográficos para el desarrollo de ac7vidades en el medio natural.

- Realizar operaciones de control de los hábitats de un entorno, informando de sus

alteraciones.

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Las ocupaciones y puestos de trabajo más relevantes relacionadas con la educación ambiental son
los siguientes:
o Educador ambiental.
o Informador ambiental.
o Monitor de educación ambiental.
o Documentalista ambiental.
o Guía ambiental.
o Programador de ac7vidades ambientales.
o Monitor de campañas ambientales.
o Guía-intérprete del patrimonio natural.
o Monitor de la naturaleza.
o Monitor de equipamientos ambientales.

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