Este documento describe las estrategias de intervención socioeducativa con familias. Explica que el objetivo es obtener una visión global de la familia y su funcionamiento para diagnosticar problemas y mejorar las relaciones entre los miembros. El educador familiar juega un papel clave al trabajar directamente con las familias, ofreciendo apoyo y recursos mientras evalúa la dinámica familiar. La intervención se centra en cuatro áreas principales: relaciones familiares y con la comunidad, educación para la salud, organización del hogar y ajuste al entorno escol
Este documento describe las estrategias de intervención socioeducativa con familias. Explica que el objetivo es obtener una visión global de la familia y su funcionamiento para diagnosticar problemas y mejorar las relaciones entre los miembros. El educador familiar juega un papel clave al trabajar directamente con las familias, ofreciendo apoyo y recursos mientras evalúa la dinámica familiar. La intervención se centra en cuatro áreas principales: relaciones familiares y con la comunidad, educación para la salud, organización del hogar y ajuste al entorno escol
Título original
_Estrategias de Intervención Socioeducativa con Familias
Este documento describe las estrategias de intervención socioeducativa con familias. Explica que el objetivo es obtener una visión global de la familia y su funcionamiento para diagnosticar problemas y mejorar las relaciones entre los miembros. El educador familiar juega un papel clave al trabajar directamente con las familias, ofreciendo apoyo y recursos mientras evalúa la dinámica familiar. La intervención se centra en cuatro áreas principales: relaciones familiares y con la comunidad, educación para la salud, organización del hogar y ajuste al entorno escol
Este documento describe las estrategias de intervención socioeducativa con familias. Explica que el objetivo es obtener una visión global de la familia y su funcionamiento para diagnosticar problemas y mejorar las relaciones entre los miembros. El educador familiar juega un papel clave al trabajar directamente con las familias, ofreciendo apoyo y recursos mientras evalúa la dinámica familiar. La intervención se centra en cuatro áreas principales: relaciones familiares y con la comunidad, educación para la salud, organización del hogar y ajuste al entorno escol
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Estrategias de Intervención Socioeducativa con Familias
La finalidad es conseguir una visión global de la familia, para operativizar la asimilación de
conocimientos. La familia es una estructura compleja tanto en su composición como en su funcionamiento. Desde la edad antigua hasta nuestros días la familia ha sufrido muchos cambios en todos los niveles; sin embargo, sigue considerándose la célula básica de toda sociedad y en la cual se forman los individuos y aprenden sus estrategias básicas de relación. Es desde este punto de vista que se enfoca el presente curso de tal forma que se pueda obtener una visión general de esta compleja estructura, su funcionamiento y sus disfunciones. Es importante hacer hincapié en este último punto: el curso se centrará en diagnosticar y evaluar los fallos y problemas de la familia para poder paliarlos o eliminarlos, de tal forma que cada uno de los miembros pueda mejorar sus relaciones. Las familias multiproblemáticas van a ser el objeto de estudio y sobre el que se van a establecer los principios teóricos; sin olvidar, por supuesto, a los sujetos que conforman el grupo y las relaciones comunitarias que establecen. Sujetos con disfunciones y relaciones patológicas. patológicas.
En el trabajo diario del educador familiar, es fundamental conocer de forma
global y tener una visión amplia de las relaciones que los miembros que conforman la familia establecen entre ellos; tener presente el funcionamiento normalizador y las desviaciones que pueden aparecer; reconocer los patrones de comportamiento establecidos, la etapa en la que se encuentra la familia, el cambio que se está operando en un momento concreto; señalar los puntos fuertes y los débiles; saber establecer un programa de intervención; introducir elementos externos para mejorar las relaciones; evaluar el momento inicial de la intervención y analizar el final del trabajo; operativizar los conocimientos, conceptos y planes de trabajo. Todo ello implica sistematizar las diferentes teorías y aplicarlas al trabajo diario con las familias.
El educador familiar es el catalizador de todos los recursos
de los que puede disponer la familia y el que puede crear una red de relaciones alternativas que mejoren su funcionamiento.
El hecho de trabajar en contacto directo con la familiar, conocer las
relaciones sociales, las relaciones interpersonales e introducirse en el domicilio, sitúa al educador familiar en una posición privilegiada de la que no dispone ningún otro profesional que trabaje en este ámbito. La información que se puede extraer desde esta posición, permite intervenir de una manera más eficaz y directa. Por eso, es muy importante que el educador familiar sea capaz de ganarse la confianza de la familia, que establezca vínculos profesionales estables, que empatice con cada uno de los miembros de la familia, que sea objetivo y no tome partido por ninguno de ellos en especial. Y, sobre todo, que no permita que sus propias relaciones familiares interfieran en su trabajo. CONTENIDO DEL PROGRAMA
El programa de intervención socioeducativa en el ámbito familiar se lleva a cabo medíante
la intervención directa en la familia a través de un profesional, el educador. El educador orienta y apoya a la familia en su función socializadora, y en la potenciación de los niveles de autonomía de cada individuo y del grupo familiar, como unidad dentro de la comunidad. En líneas generales, la función del educador consiste en apoyar a los miembros de la familia, especialmente a las figuras parentales, tratando de modificar la dinámica de sus relaciones, hábitos disfuncionales, facilitando las relaciones externas y el acceso a los recursos que la sociedad les ofrece. Esta intervención tiene carácter terapéutico en unos casos y preventiva en otros, para evitar problemas posteriores y con la meta final de conseguir que en el futuro se eliminen/extingan las factores de marginación. Las funciones del educador familiar son amplias, diversas, complejas como se desprende de su relación directa y continuada con aspectos frágiles de la vida cotidiana. Implican el constante flujo y reflujo entre la observación de la dinámica familiar y la potenciación de los recursos personales, reforzando sus logros y motivando al cambio, sin sustituir las funciones de la familia si no motivando a la acción constructiva, apoyando emocionalmente y sirviendo de modelo en el desarrollo de habilidades.A modo de síntesis, y con el fin de concretar la amplia variedad de funciones del educador centramos su actividad en torno a cuatro grandes áreas fundamentales:
1. relaciones de convivencia familiar y con el entorno.
2. educación para la salud. 3. organización del hogar y de la economía familiar. 4. ajuste al medio escolar. La intervención directa y continuada del educador en la familia, precisa de apoyo y supervisión técnica constantes, fundamentalmente de carácter social y psicológico. Igualmente, es imprescindible la coordinación entre los equipos de apoyo técnico, educadores y servicios sociales generales, por su proximidad al marco de intervención.
PROCESO DE LA INTERVENCIÓN
Evaluación En el abordaje de una familia desde la intervención socio-educativa se parte de
un estudio completo sobre la problemática familiar como elemento esencial que permite determinar sus puntos fuertes y los frágiles, y que son por tanto, tributarios de intervención. Esta evaluación ha de ser dinámica, holística, que analice la estructura, organización, clima familiar tal y como se desarrolla en un determinado contexto social. Es preciso conocer las características de cada figura parental, sus percepciones, valores, habilidades, puntos de posible cambio, ya que la clave del trabajo con familias en su contexto reside en una correcta identificación de sus necesidades y en el posterior apoyo, enfocado a su reducción o eliminación. Antes de decidir la aplicación de este programa a una familia determinada, además de la exhaustiva evaluación socio-ambiental del grupo familiar que se viene realizando en. todos los casos y de la evaluación psicológica individual de aquellos miembros del grupo que se considere conveniente, es necesario conocer: — el nivel de conciencia que la familia tiene del problema. — el grado de motivación de la familia para iniciar el programa. — las posibilidades de mejora de la familia tras la aplicación del mismo. — existencia de relación afectiva entre los hijos y al menos uno de los padres. — grado de aceptación que la familia tiene del niño o niños. — grado de capacidad que la familia tiene para asumir las funciones, siendo imprescindible que puedan beneficiarse de la acción educativa a partir de su capacidad psicofísica. 50 pues estos factores serán los que nos indicarán si el programa va a resultar o no eficaz y, por tanto, si conviene implantarlo o no en determinado grupo. Las familias que reúnen este perfil son el ámbito de intervención, es decir aquellas cuyo grado de desestructuración y nivel de deterioro pueden subsanarse mediante la intervención y apoyo socioeducativo y presentan un nivel mínimo de motivación y adhesión al programa.