TALLER PRELIMINAR – SEMINARIO TECNICAS DE ENTREVISTA

Fernando Pérez Muñoz, Residente de primer año, Programa de psiquiatría,

Universidad del Valle.

Personaje seleccionado: Jesse.

DESARROLLO:

1. TRANSFERENCIA Y CONTRATRANSFERENCIA

Para facilitarme el desarrollo de este análisis preliminar a la relación terapéutica

ficticia que se establece entre el doctor Paul Weston y su paciente Jesse D’Amato

voy a iniciar por describir las emociones que sentí como espectador de su

interacción. Debo decir que para eso es necesario aclarar que la selección de los

personajes la hicimos de forma totalmente aleatoria, a pesar de que pareciese una

jugada de mi inconsciente para tener que ver mas a fondo al personaje con quien

tal vez mas conexión haya podido hacer. Mi primera reacción emocional fue de

curiosidad, tuve que regresarme a observar la lista de capítulos de la segunda

temporada de la serie para estar seguro de que el proceso de Jesse recién

iniciaba en el capítulo que yo estaba observando, esto ocurrió porque sentí, como

evidentemente se confirmaría mas adelante, que este personaje ya tenía un

camino recorrido con su terapeuta, me sentí perdido inicialmente al no entender de

que estaban hablando en los primeros cinco minutos de la sesión del primer

miércoles que se proyecta en la serie. Sin embargo, luego de retrocederla en dos

ocasiones, logré entender mejor y en los primeros diez minutos este adolescente

me hizo sentir miedo de estar en el lugar de su tratante, su actitud desafiante y

altiva genera sin duda algo de incomodidad porque en ocasiones solemos creer

que nuestros pacientes en general van a entrar al consultorio dichosos de estar

ahí y teniéndonos en una posición jerárquica de respeto, por lo cual estos

pacientes se convierten en un reto cuando se convierten en realidad.

Sin embargo, como espectador me sentí complacido de ver como Weston tomó

una distancia prudencial al inicio para entender el comportamiento de Jesse, sin

desacreditarlo desde su entrada, como muchos otros hubiesen podido hacer

cuando le explotó su flash en la cara a la entrada del consultorio. Por el contrario,

en estos valiosos primeros minutos vi como de forma respetuosa intentó

congraciarse con la jerga juvenil de Jesse, mostró interés en sus dotes artísticos,

los exploró y validó las emociones de su paciente a medida que iban saliendo

como disparos de diferente calibre. El doctor condujo la entrevista por la persona

de Jesse sin que el siquiera sintiera el camino, nos mostró que padece de TDAH,

le gusta la fotografía, que es homosexual, que tiene problemas con su conducta y

una relación por lo menos dificultosa con sus padres adoptivos.

A medida que la relación fue avanzando sentí como cada vez mas Jesse

comenzaba a identificar en Paul la figura paternal que estaba necesitando y

extrañando en su hogar, pero también sentí como su terapeuta de forma

progresiva dejó que los límites que había establecido en su relación se fueran

rompiendo, sentí que poco a poco encontró en Jesse la imagen de su hijo,

atormentado por los problemas de su relación con dos núcleos familiares que se
encontraban en una disputa no tan soterrada. Fue tomando posturas no del todo

ortodoxas como atenderlo en un horario diferente al de su consulta, bien entrada

la noche, dejando a su hijo sin cuidado en la cocina, le permitió mentir en frente de

su madre, le contó detalles sobre su relación con su hijo. Fuera de lo adecuado o

inadecuado de esta dinámica, como mero observador sentí alegría de ver que

Jesse recibía la atención que yo sentía que tanto necesitaba, me sentí incluso

triste cuando Paul se negó a ir con Jesse a celebrar su cumpleaños y cuando no

avisó a sus familiares del posible riesgo suicida que podría correr en ese

momento. Entiendo que su conducta de fijar ese nuevo límite de no salir con él fue

la reacción normal y adecuada porque se dio cuenta cuando le explotó en la cara

que ambos podían estar llevando su relación de otra forma diferente a la

terapéutica, pero no pude evitar sentir esa tristeza.

Ahora bien, entendiendo mis emociones me resulta mas fácil entrar a explicar las

respuestas emocionales que percibí en Jesse en los diferentes momentos de esta

relación como parte del proceso de transferencia. En primer lugar debo decir que

la serie nos muestra como este paciente ha crecido retando y poniendo pruebas a

sus padres adoptivos para buscar sus puntos de quiebre o para justificar sus actos

y emociones a lo largo de su vida, de forma que estas conductas son traídas

nuevamente a la terapia sobre el doctor Weston, que en esta ocasión representa

la autoridad y el cuidado que antes representaban sus padres, de modo que lo

reta con comentarios sexuales explícitos, tratando de desestabilizarlo con el flash

o con acciones como tomar sus objetos personales y mentir sobre tirarlos por la

ventana. Para mi fue claro que ese patrón de relación con figuras de autoridad se
traslada aquí. Respecto a las expectativas de Jesse en un momento de la

interacción deja claro que asiste a la terapia porque la consejera de su colegio se

lo había puesto como condición para evitar su expulsión, sin embargo, a lo largo

del proceso es evidente que espera muchas mas cosas de su terapeuta que el

solo cumplir con un requisito. Este paciente transfiere sus experiencias previas

con figuras similares como su consejera, de modo que espera que al igual que lo

que siente con ella, el doctor le guarde su espalda y pueda ser alguien que lo

entiende a pesar de todo lo monstruoso que el pueda expresar, espera sus

consejos, su opinión, con la cual constantemente discute, pero termina por aceptar

en la mayoría de las veces cuando se da cuenta que mas que una opinión es un

análisis de sus situaciones personales.

Es al menos curioso que la relación previa de Jesse con su madre adoptiva sea

tan tormentosa y es aún mas interesante tratar de entender su creencia de que su

madre no se interesa en lo mas mínimo por él porque reacciona con indiferencia

ante las cosas que le suceden, pareciera que su madre es capaz de observar el

ser oscuro que guarda en su interior, por lo cual lo rechaza. Esa creencia respecto

a su madre regresa la terapia en la continua expresión explícita del paciente de

todos esos aspectos de su vida que supuestamente su madre considera malos, de

modo que tal vez sea su terapeuta quien los pueda validar, explicar o al menos

entender. Jesse busca que el doctor tome su lado, espera que reaccione en contra

de su mamá, que la vea como él la ve, cuando realmente quiere tratar de entender

la verdadera razón de esa lejanía. Esa ambivalencia se hace mas evidente cuando

la carta de su padre biológico llega, de modo que al responderla por primera vez
se refiere a sus padres como “mis padres” y no por sus nombres de pila y además

identifica en ellos un sentimiento de malestar y tristeza por la llegada de la carta y

no solo lo valida, sino que busca defenderlos de ese sufrimiento. Es ahí entonces

que su madre puede ser tanto la mujer que lo cuidó y protegió ante el abandono

sus progenitores, pero al mismo tiempo la misma que lo detesta y lo rechaza

constantemente. Su terapeuta nuevamente tiende a adquirir esas características al

igual que otras figuras relevantes en su vida como Josh y Klaif, quienes lo “joden”

al tiempo que le dan entendimiento. Por otro lado, también es clara la respuesta

emocional de Jesse ante la figura paterna, desde sus mentiras sobre su verdadero

padre, el médico, piloto, científico o escritor desconocido, hasta el verdadero padre

electricista que se ausenta física y emocionalmente del hogar desde su

adolescencia temprana, pero esta vez si de forma justificada, sin tanta crítica

como hacia su madre, por eso a la mínima demostración de interés de su parte se

siente llenado un vacío que desea llenar con muchas ansias. Es por eso que su

terapeuta nuevamente es observado desde esa perspectiva, tal vez esperando y

creyendo que puede llenar esos vacíos, como hacia el final comienza a sentirlo,

pero al sentirse nuevamente rechazado ante las limitaciones de Paul, acude

nuevamente en un grito desesperado por su padre, dejando de lado a Paul y

terminando su proceso terapéutico, pues su padre toma su lado, en contra de su

madre y sus padres biológicos y en una pequeña medida satisface ese

requerimiento emocional que Weston se negó a llenar.

Ahora, desde el punto de vista contratransferencial me parece adecuado resaltar

los cambios percibidos durante todos los capítulos. Iniciamos con un terapeuta
que establece límites precisos a su paciente, confronta sus posturas

contradictorias, las escucha atentamente y se permite conectar con opiniones

mesuradas de ciertos aspectos trascendentales para Jesse, pero a medida que

avanza la serie es casi evidente que para Paul se hace cada vez mas difícil tratar

a su paciente porque su vida personal comienza a verse reflejada en esta relación.

Lo retador de su actitud se asemeja en cierta parte a la relación con su hijo, la cual

encuentra difícil por el espacio que siente entre ellos, no físico sino emocional por

años y años de una supuesta distancia establecida por él mismo a medida que se

adentraba cada vez mas en sus pacientes y alejaba a sus familiares cercanos. En

cierta forma se identifica con los padres de Jesse, a quienes también les cuesta

acercarse a entender a su hijo, además ellos perciben también la amenaza de que

les puedan arrebatar a Jesse personas completamente ajenas a ellos, desde el

lado de Paul el nuevo prometido de su exesposa y de los señores D’Amato se

trata de los padres biológicos tratando de contactarlo con tanta intensidad.

Por otro lado, en la serie se resalta mucho que Paul ha sido un terapeuta que deja

romper los límites entre sus pacientes y él, lo ha hecho en el pasado y es muy

probable que nuevamente lo haga en su relación con Jesse, al menos eso percibo,

sus experiencias previas regresan a esta terapia, incluida su difícil relación

multifacética con su “todera” académica Gina Toll, por eso luego pude percibir al

terapeuta tomando actitudes similares a las que tomaba ella con él en el pasado.

Paul transfiere en Jesse esas necesidades y sentimientos previos y comienza a

atenderlo fuera de contextos terapéuticos, poniendo incluso en situaciones de

riesgo a su hijo cuando lo hace o se expone a situaciones legales al no anunciar

su riesgo suicida a los padres de Jesse. Estas reacciones sin duda afectan la

relación terapéutica pues si bien no hay duda del avance clínico en Jesse durante

la temporada, también son la clave de por qué el proceso termina de forma

abrupta y sin terminar, debido a lo que Jesse interpretó como una traición de su

parte cuando trató de poner nuevamente límites.

2. TÉCNICA DE ENTREVISTA

Siguiendo ahora con las técnicas de entrevista me gustaría resaltar que para mí

uno de los criterios fundamentales y que seguramente me han generado dificultad

es el manejo del tiempo, sin embargo por mas evidente que sea, es claro que este

criterio se ve limitado para ser analizado, porque estamos hablando de una serie

de televisión con restricciones claras, por lo cual entrar a decir si la duración

resulta adecuada o insuficiente podría ser engañoso porque básicamente todas

duran el mismo tiempo y están hechas con la dinámica necesaria para cumplir con

un tiempo específico. A pesar de eso si caben opiniones en cuanto al uso de los

tiempos que debe durar cada fase de la entrevista, en este sentido siento que Paul

logra abordar el inicio, desarrollo y cierre de forma adecuada, en general siempre

comienza por abordar el estado de ánimo, las hechos o sentimientos importantes

en Jesse al inicio de la entrevista, lo hace sentir cómodo y se fijan unos temas a

abordar, de modo que logra pasar más o menos rápido a la siguiente fase,

permitiendo desarrollar estos objetivos, sin embargo donde siento que en algunas

ocasiones pudieron existir fallas fue en el cierre de las entrevistas, porque si bien

en la mayorías de las sesiones se daba un espacio de reflexión y comentarios

finales, en capítulos específicos como cuando Jesse llega en la noche previa al

día de su consulta no se logra cerrar adecuadamente la sesión, es muy corto el

tiempo dedicado a esto y no logra cumplir la finalidad de esa interacción, sentí que

Jesse se fue con mas dudas a su casa. Por otro lado, a lo largo de las siete

sesiones se logra abordar temas específicos y separados de forma completa en

cada una de ellas, evitando alargar o acortar innecesariamente el entendimiento

de cada situación en particular.

Respecto al manejo de los espacios, siento que se hace de forma muy adecuada,

se establecen lugares precisos de espera en ambientes tranquilos, no se hace

esperar al paciente mas de lo esperado por la atención, el consultorio es limpio, se

ve cómodo, tiene por donde deambular, si bien la iluminación es limitada, a mi

parecer es adecuada para un proceso de psicoterapia. Algo que probablemente

pueda llegar a ser debatible es el uso de un espacio dentro de su propia casa

como sitio de consulta, porque eso da paso a que se borren ciertos límites, como

lo hizo Jesse al acudir en la noche a sabiendas que el doctor siempre iba a estar

en su casa o cuando llego a insultar a su hijo en tono de voz elevada y que muy

probablemente eso haya llegado a oídos de su hijo, pudiendo causar más

problemas dentro de su núcleo familiar. A pesar de eso en esta relación

terapéutica Paul pone mas límites en el uso de los espacios, evita que Jesse tome

objetos que le pertenecen y en ningún momento entra a la casa, como tal vez

ocurrió en el pasado con otras pacientes. Por otro lado, las sesiones se llevan a

otros espacios como el pórtico de su casa cuando Jesse huye de la sesión de

forma repentina, en ese momento Paul pudo no ser del todo ortodoxo, pero sin
duda evitó que Jesse se fuera cargado de rabia y enojo hacia si mismo, al menos

de una forma limitada.

En cuanto a la toma de notas no hay mucho que describir, Weston no lleva notas

mientras transcurren las sesiones, conoce sus capacidades y limitaciones y de

forma libre se nota durante toda la serie que no tiene esta práctica y confirmamos

que la información importante la retiene adecuadamente, pues en sus sesiones

con Adele expresa en múltiples ocasiones la información crucial de sus pacientes,

que muchos no lograríamos recordar sin recurrir a los datos de historia clínica.

Las transiciones de tema se hacen de manera organizada durante la entrevista,

Paul lleva el hilo de las sesiones de manera consciente, cuando percibe molestia y

malestar emocional en Jesse respecto a un tema trata de entender el por qué de

esa respuesta, pero cuando eso llega a un límite propone de forma activa cambiar

a otro tema e incluso llegar a proponerle al paciente que decida de que tema le

gustaría hablar, no sin antes dar un cierre al tema previo, explicando por qué lo

tocó de esa forma y con qué fin, es decir no es abrupto y sin sentido, cosa que

puede ser a veces bastante difícil para no generar tedio en el paciente que se

puede sentir agobiado por como uno puede tratar de acaparar muchos temas sin

explicar sus razones de forma indirecta o directa, generando suspicacia o temores

a hablar. También al respecto es preciso decir que tampoco se llega al extremo de

dejar que el paciente conduzca al terapeuta, pues no se puede hacer una

transición de tema en cada tema que pueda resultar mínimamente incomodo y

para eso es importante como Paul logra entender e interpretar las emociones de

Jesse, mas sin embargo cuando hace cambios de tema suele hablar de cosas
más tranquilizantes antes de entrar en otro tema de fondo tales como “como

estuvo la escuela esta semana, cómo estás durmiendo”, entre otros, para facilitar

el proceso.

Respecto al lenguaje utilizado hay algunas cosas que resaltar, en general es muy

respetuoso y adecuado para el contexto terapéutico por mas que en ocasiones

Jesse trata de sacar expresiones contrarias con sus múltiples provocaciones a

Paul. Sin embargo, en algún momento también trata de mejorar la relación usando

lenguaje mas coloquial para relacionarse mejor con su paciente como cuando

hace un saludo similar a Jesse y su “what´s up dog” con un “what’s up with you” y

este agradece el esfuerzo hecho por su terapeuta. También es interesante como

trata de establecer una diferencia entre las expresiones subidas de tono de su

paciente, con las formas que él debe usar por su posición jerárquica de respeto y

conocimiento, usando la palabra “felación” en lugar del coloquial “mamada” de

Jesse. A pesar de esto, su lenguaje es entendible en términos generales,

facilitando el entendimiento del paciente y sus familiares, no usa términos técnicos

o teóricos confusos.

En repetidas ocasiones nuestro paciente da información contradictoria, resultaría

difícil entrar a analizar cada una de esas ocasiones, sin embargo es evidente una

forma adecuada de parte de Paul para responder ante estas situaciones, cuando

encuentra esas inconsistencias repite nuevamente la pregunta en otras palabras,

de forma que obtenga validación de la información o nuevamente información

errónea, cuando ocurría lo segundo inmediatamente procedía a expresar como la

información no coincidía e indagaba el por qué ocurría esto, transmitiendo frases

para que el paciente se sintiera seguro en ese espacio para contar lo que sea con

sinceridad y cuando continuaba el error mostraba de forma directa las dos

versiones que había dado en el pasado y ahora, de modo que confrontaba

directamente y pedía la respuesta real sin titubear. Un ejemplo de esto es cuando

Jesse miente sobre en que fecha tomó las fotos en el bar de sus amigos y

finalmente luego de ser confrontado termina diciendo la verdad, para eso se

necesitó un alto grado de atención de parte del terapeuta a los detalles pequeños

de la relación terapéutica que no siempre el paciente expresa de forma verbal, en

este caso la fecha real exhibida en la cámara.

3. FASES DE LA ENTREVISTA

A. INICIO

Como la había hablando antes, el inicio de la relación terapéutica esta

parcialmente desconocido, pues al transcurrir de la serie es que vamos obteniendo

datos de cómo llegó el paciente a la consulta de su terapeuta y con qué objetivos.

En este punto debo resaltar que noto un error en como el doctor condujo en ese

inicio desconocido las entrevistas iniciales, porque aunque lo desconozco al no

haberlo presenciado, es claro que Jesse luego de muchas sesiones no tiene

realmente claro el por qué se encuentra haciendo ese proceso terapéutico e

incluso tiene confusiones en lo que podrá obtener al final, es ya entrados en

sesiones mas avanzadas cuando realmente Paul le aclara que si bien llegó ahí por

solicitud de su escuela para permitirle continuar estudiando luego de unos

problemas de conducta, han sido sus padres quienes han continuado costeando

las sesiones y han esperando encontrar mejoría en la conducta y comunicación

con su hijo. Algo diferente se percibe en Jesse, que llega a expresar que “se

supone que estoy aquí para que me digas que hacer”, realmente se logran

evidenciar diferentes motivos de consulta que se logran encuadrar mas

claramente por parte de Weston cuando ya se hace evidente el enredo que existe

respecto a esto. Es probable que esto se haya podido evitar si desde el inicio se

hubiese dejado mas claro cual era el motivo por el cual el paciente realmente

consultaba y se hubiesen dejado más explícitos los objetivos a alcanzar en ese

proceso, en especial si se hacía un consenso entre las diferentes intenciones que

hubiese podido esperar por los diferentes participantes de esta relación

terapéutica.

A pesar de eso, antes ya mencioné que el primer encuentro que observamos es

muy diciente, pues logramos ver como el observador saca información muy

valiosa sobre quien es Jesse, sus intereses y conflictos principales, se da de forma

respetuosa a pesar de las acciones provocadoras de Jesse y se logra marcar unos

límites necesarios para continuar con la terapia, al menos esto es lo que vemos en

el primer episodio. Además, es claro que en este contacto inicial se logró que

Jesse se sintiera cómodo, lo saludó a su manera particular, le habló de temas

comunes como el diccionario web, se despidió también con sus gestos juveniles,

le permitió establecer de qué temas quería hablar y en general creó un ambiente

adecuado para que se diera una conversación fluida al menos en este inicio.

Ahora bien, creo que si hablamos de cada uno de los inicios de las diferentes

entrevistas observadas podemos ver cómo en los primeros minutos Paul trata de

preguntar y/o entender las reacciones emocionales de Jesse respecto a lo que

ocurre esa semana en su vida y de forma más indirecta evalúa como ciertos temas

o preguntas a hacerle generan así mismo sentimientos específicos que le permiten

encuadrar su entrevista y dirigirla hacia los temas mas relevantes del momento,

incluso en varias ocasiones el paciente expresa molestia o agrado hacia ciertos

puntos de la entrevista y Paul sabe manejar eso de forma adecuada según la

situación específica, no presionando excesivamente ante momentos dolorosos.

Sin embargo si debo aclarar que parece que existe un vacío respecto a los

sentimientos que Paul ya debía saber que provocaba en Jesse la realización de la

terapia porque omitió relacionar a sus padres como conductores y causantes

primordiales de su asistencia al consultorio, solo de forma tardía dejó eso en claro

y se hizo evidente que eso generó preocupación en Jesse por no saber como sus

padres podrían costearlo, pero otro lado se evidenció un grado de interés que no

había sentido antes de sus padres, creo que eso debió hacerse de forma precoz.

Finalmente, el encuadre de cada entrevista como ya mencioné es muy claro, se

establecen de forma conjunta entre los dos participantes y se desarrollan a

continuación, sin embargo, los límites que se establecen en estos inicios

terminarán por hacerse mas laxos después, en ocasiones facilitando la

interacción, pero en otras generando respuestas negativas como la que causa el

final de la terapia.

B. DESARROLLO

Respecto a la exploración de los síntomas siento que difícilmente podría resaltarse

errores sistemáticos en estas entrevistas, es claro que cada episodio busca

mostrar no solo una serie de conflictos y deseos, sino también de síntomas, los
cuales se exploran también desde una perspectiva clínica. Tomemos por ejemplo

cuando observan a Jesse con movimientos adaptativos de golpes con los puños y

distraído en una entrevista, Paul comienza a indagar de forma completa por

síntomas de ansiedad, pregunta a cerca del patrón de sueño, del grado de

atención y sobre la adherencia farmacológica precisamente para establecer si ese

síntoma pudiese estar relacionado con mal control de su patología de base, que

era un TDAH, de manera que pudiese tomar conductas a partir de ahí.

También es importante la forma en que explora desencadenantes, cuando nota a

Jesse triste, ansioso o irritable, comienza a preguntar “cosas fuera de lo normal

que te hayan ocurrido esta semana”, pregunta a cerca de que tanto habló con su

mamá esta semana, de si sus padres biológicos lo volvieron a llamar, si Nate ha

seguido contactándolo o si ha seguido frecuentando a sus amigos Josh y Klaif.

Pregunta ampliamente buscando detonantes de los síntomas que se hacen

evidentes, no toma al síntoma como un mal a tratar únicamente, sino como una

consecuencia de otra causa subyacente que puede ser también susceptible de ser

intervenida.

Por otro lado, en el desarrollo de varias entrevistas Jesse trata de sobrepasar los

límites ya dejados en claro por su terapeuta con respecto a la forma en que se

lleva la sesión, por ejemplo el uso del celular, en una ocasión lo reta de forma

directa sacándolo en repetidas ocasiones a pesar de las indicaciones de Paul que

en un momento dado se torna serio e incluso aumenta el volumen de su voz para

lograr recuperar la atención y respeto de su paciente por lo pactado anteriormente,

sin embargo, cuando se da cuenta que el verdadero motivo por el cual Jesse
continuaba sacando tan insistentemente su celular era porque le quería mostrar

algo que para él era un tema muy relevante como los mensajes de voz dejados en

su contestador del celular por parte de su madre biológica, posterior a esto Paul le

da el espacio necesario para que exprese en ese momento sus emociones, lo

escucha, trata de entender y dar posibles explicaciones de por qué ocurre esto a

Jesse, interpreta sus reacciones y le permite extenderse cuanto pueda sobre el

tema por su relevancia, a pesar de que de cierta manera transgrede el límite no

usar el celular durante la sesión, en esta ocasión esa conducta facilitó un

desarrollo adecuado. Así mismo ocurre repetidamente, no hay temas tabúes o

vedados para Paul, le permite a Jesse abordar los temas que desee, aunque en

ocasiones le generen cierta incomodidad personal, pues como terapeuta no puede

ser una maquina receptora de palabras las cuales no analiza ni siente, sino que se

debe presentar como un sistema complejo cuya objetividad si bien está

contaminada por su subjetividad, ésta siempre se limita ante las necesidades del

paciente.

Finalmente, ni hay duda de que el doctor se toma buena parte del tiempo de sus

entrevistas para conocer a Jesse mas allá de sus síntomas, realmente entra a

fondo a conocer su historia personal tales como sus relaciones afectivas, sus

relaciones con sus padres, con la autoridad, con sus amigos, con sus amantes.

Entra en detalles socioculturales como la forma en que se practica la religión en su

casa, los orígenes italianos de la familia D’Amato, la forma en que funciona el

negocio familiar, los gustos artísticos del paciente, sus deseos, sus capacidades

económicas, sus resultados académicos, destrezas y habilidades, en general me

doy por bien servido al entender a Jesse con todo su trasfondo personal. Muchas

veces otras series se centran de forma facilista en la orientación sexual de los

personajes, que, si bien llama la atención al espectador, casi siempre se explora

de forma superficial este tema como invariablemente promiscuo y sin sentido, sin

duda en Jesse logramos entender como un montón de variables sociales

intervienen para configurar a este personaje tan atractivo a quienes lo observamos

como paciente.

C. CIERRE

Los cierres en general son adecuados, se validan emociones encontradas durante

la sesión, se confrontan emociones ambivalentes o discordantes y se orienta en su

resolución final y además se resumen los conflictos evidenciados, se da un plan

de trabajo a seguir, unas expectativas para las siguientes sesiones e incluso se la

da la libertad de proponer opciones para continuar a medida de las necesidades

del paciente, salvo por la excepción ya mencionada en un capítulo. Debo resaltar

aquí que es frustrante como por más de que Paul trata de continuar el proceso

terapéutico aun inconcluso de Jesse al final de la temporada justo en el momento

en que ha logrado entender sus limitaciones como terapeuta y las necesidades

mas apremiantes de Jesse respecto a las relaciones disfuncionales en su hogar,

pues simplemente no lo logra. Tal vez un cierre inadecuado al explicar las razones

por las cuales no podía acceder a celebrar el cumpleaños de su paciente, quizás

con un poco mas de tiempo y argumentos más claros o presentación de planes

alternos pudo haber permitido continuar un tiempo más su proceso terapéutico sin
la rotura de confianza que se había establecido, muy probablemente sobre unos

límites muy borrosos.

4. OBJETIVOS DE LA ENTREVISTA

Para finalizar, sería muy repetitivo volver a hablar de si se cumplieron los objetivos

básicos de una entrevista en este proceso, pues a lo largo de lo que he expresado

efectivamente Paul Weston obtiene una adecuada información sobre las

características clínicas del padecimiento de Jesse, desde los aspectos mas

biológicos hasta los aspectos dinámicos al final de la serie. Paul concluye con una

imagen mucho más amplia de su paciente que la que tenía al inicio como un

adolescente problemático y desafiante que le causaba dolores de cabeza al

finalizar su semana. El paciente del último capítulo tiene un trasfondo personal,

familiar y social mucho más complejo que permite entender las causas de esos

comportamientos en ocasiones tan molestos y el terapeuta de seguro se quedó

corto en tiempo para tratar de abordar y tal vez modificar esas causas. Esta

relación sin embargo sin duda logró una mejoría clínica en Jesse, no solo su

terapeuta, sino que él también logró darse cuenta de que tenía miedo de sacar

esas partes oscuras de su ser ante los demás por miedo al rechazo que había

percibido en su hogar, tal vez solo el tiempo le permitirá entender quien es

realmente y cual es su verdadero origen. La empatía de Paul logró que Jesse

calmara su malestar psíquico hasta cierto punto, le permitió expresar sus

sentimientos y preocupaciones, pero sin duda al final se perdió la alianza

terapéutica para continuar el tratamiento, por factores externos como su padre,

pero también por las dinámicas de la terapia que permitieron que se entendiera la
confianza entre el medico y el paciente como un apoyo más personal que

profesional, de modo que ante un rechazo “profesional” se cortó una relación de

confianza personal.