Derecho Positivo
Derecho Positivo
Derecho Positivo
Conjunto de normas jurídicas escritas por una soberanía, esto es, toda la creación
jurídica del órgano estatal que ejerza la función legislativa. El derecho positivo
puede ser de aplicación vigente o no vigente, dependiendo si la norma rige para
una población determinada, o la norma ya ha sido derogada por la promulgación
de una posterior. No sólo se considera derecho positivo a la ley, sino además a
toda norma jurídica que se encuentre escrita
El Derecho Positivo
Los romanos no necesitaron del término "ius positivum" pues las normas del
mismo quedaban implícitas en el "ius civile" que era el derecho romano por
excelencia; él se contraponía al "ius Gentium" o derecho de los otros pueblos.
En la actualidad el derecho positivo es propio de un estado que se origina de la
actividad legislativa en los ordenamientos jurídicos de tradición romanista siempre
que la misma se realice de conformidad con los preceptos constitucionales que
regulan la producción de la ley escrita. El derecho positivo también se puede
derivar de la costumbre en aquellos países que la conocen como fuente del
derecho.
Cuando tal cosa sucede generalmente suele ser considerada como una fuente
superlativa de la ley escrita y con algunas limitaciones.
Como un sistema de legalidad nacional el derecho positivo está formado por leyes
de diversas naturalezas jerarquía y origen sin embargo y no obstante esta
heterogeneidad esta constituye una unidad normativa racional cuyo objetivo final
es contribuir a posibilitar la existencia y el desarrollo de la vida social.
También forman parte del derecho positivo las normativas derivadas de sentencias
judiciales, de los contratos, de los testamentos, y de las decisiones de autoridad
fundadas en la ley.
Según su origen
Si se atiende al origen según las leyes que confirman el Derecho Positivo las
normas judiciales aparecen como consecuencia de la actuación de los jueces y se
encuentran en las respectivas sentencias que a diferencia de las legislativas y de
forma correlativa son particulares y concretas lo primero porque afectan a una o
varias personas en particular sobre quien o quienes recae el fallo judicial, lo
segundo por referirse a un supuesto especifico que sucedió en la vida real del cual
el juzgador se pronunció en su sentencia.
Cfr. Herbada, Javier, Historia de la ciencia del derecho natural, 2a. ed.,
3) claro —sin oscuridades; c) donde el juez, sometido a la ley, sólo aplica a los
hechos conocidos las reglas positivas para obtener la sentencia método de la
subsunción); y d) donde el jurista dogmático ("la doctrina") se ha de limitar a
proporcionar los "conceptos" jurídicos fundamentales inducidos del sistema creado
por el legislador. Si el texto de la ley no fuese claro, habría que interpretarlo, para
lo cual se ha de buscar la voluntad histórica del legislador. Junto al legalismo de la
Escuela de la Exégesis, y por la misma época e incluso antes, se plantea una
forma de "positivismo jurídico" que tiene por objeto obtener la obediencia absoluta
de los ciudadanos y de los jueces al legislador, bajo el pretexto de que la opinión
subjetiva sobre su justicia o injusticia se ha de someter al criterio objetivo y
determinable establecido en la ley. En síntesis, la incapacidad para determinar con
certeza una solución basada en criterios de justicia, y la necesidad de conseguir
esa certeza para una pacífica convivencia, obligan a tener como "derecho" lo
establecido en la ley. "La ley es la ley".
El positivismo legalista entró en crisis ya a fines del siglo XIX en Europa. Entre
1890 y 1945 tuvieron su apogeo las escuelas funcionalistas, teleológicas y
sociológicas del derecho. Las orientaciones mencionadas han abandonado los
dogmas de la "plenitud", "claridad" y "coherencia" del ordenamiento jurídico, para
proponer medios de llegar a una solución jurídica que no se "deduce" de premisas
generales claras. Entonces se recurre a la "voluntad del legislador", real o
presunta o ficticia. Las tesis funcionales y sociológicas sostienen que el derecho
sólo se comprende a la luz de un fin buscado por el legislador y a la luz del
contexto social en que existe la norma. Como el contexto social cambia, los
juristas y los jueces acuden a presunciones y ficciones jurisprudenciales que dan a
las normas un sentido nuevo adaptado a las necesidades o exigencias de la
solución que se considera "justa". De más está decir que estas formas de arribar a
la justicia se oponen a los ideales de certeza jurídica y de sumisión de los jueces
al poder legislativo; es decir, contravienen los dogmas de la racionalidad
sistemática del derecho y de la separación de los poderes públicos.
Por su parte, el legalismo que exigía la obediencia ciega a la ley aun sacrificando
la conciencia, como dice con fuerza Karl Bergbohm (1849-1927) que tenía tras de
sí los fundamentos no despreciables del pensamiento hobbesiano, entró
claramente en crisis a partir de 1945. El argumento conocido como reductio ad
hitlerum vino a culpar al positivismo jurídico legalista y al funesto eslogan "la ley es
la ley" de la facilidad con que el estamento jurídico, político y académico, se plegó
a la ideología totalitaria del nacionalsocialismo. La situación, como ha mostrado
lúcidamente Arendt, no puede explicarse tan cómodamente.
Los derechos positivos, en plural, son por tanto conceptualmente diferentes de los
derechos naturales.
Las clases del Derecho están divididas por varios autores de una manera poco
uniforme y muy arbitraria a su concepto y punto de vista. No existe una regla clara
de esta división. Así también, los diferentes países y culturas tienen muy
diferentes acepciones del derecho y sus divisiones.
Derecho Interno: conjunto de normas jurídicas que rigen los actos de los
individuos cuando se realizan dentro de un territorio nacional o estado.
Derecho Externo: conjunto de normas jurídicas que rigen las relaciones entre
estados.
Derecho Público: conjunto de normas jurídicas que regulan las relaciones del
estado, como ente soberano, con los ciudadanos o con otros estados.
Derecho Privado: conjunto de normas jurídicas que regulan las relaciones de los
particulares entre sí.
El mundo jurídico actual induce a creer que el Derecho es una creación reciente.
Realmente, las primeras manifestaciones del Derecho se dan en tiempos de la
prehistoria, principalmente en la forma en que nuestros antepasados hicieron valer
sus derechos. Ejemplo de ello son las sociedades regidas por parentesco, o el
mandato de los ancianos de una tribu.
Entonces, el origen del Derecho ha sido una ardua tarea entre los diversos
estudiosos de la materia. Actualmente, se acepta como posibles orígenes del
Derecho lo siguiente:
Nace para resarcir una ofensa física o moral que una persona inflige a otra. De
esta manera, el Derecho asegura una penitencia a quien transgreda lo físico o
moral a otro.
Nace como una reacción del Estado ante la auto tutela individual (venganza
privada), monopolizando o, más bien, pretendiendo monopolizar el uso de la
violencia como instrumento de coerción y de resolución de conflictos.
Derecho Natural
Ese convivir establece una dinámica entre el deber que poseen los hombres de
respetarse mutuamente, no impidiendo la realización humana individual, y el
derecho que poseen ellos mismos para exigir ese respeto. Esta dinámica está
sustentada en la naturaleza humana, en donde todo hombre entiende y percibe
cuáles son sus derechos naturales y los de sus seres semejantes.
Todo derecho debe basarse sobre la naturaleza humana, debe proteger la vida y
la integridad física de los hombres, favorecer la unión de los sexos para la
propagación de la especie, garantizar la educación de los hijos, dar soporte e
institucionalidad al matrimonio y a la familia, organizar un gobierno que mantenga
el orden en la comunidad y oriente la conducta de sus miembros hacia el bienestar
común, exigiendo los sacrificios necesarios para ello.
Luis María Olaso se refiere al Derecho Positivo como "el sistema de normas
emanadas de la autoridad competente y promulgadas de acuerdo con el
procedimiento de creación del Derecho imperante en una nación determinada". (4)
Sin embargo, la divergencia entre estos dos sistemas es muy relativa, pues la
mayor parte de los principios que integran al Derecho Natural se incorpora al
Derecho Positivo. En otras palabras, el Derecho Positivo se ajusta en gran parte al
Derecho Natural.
Las denominadas fuentes del Derecho son fundamentos e ideas que ayudan al
Derecho a realizar su fin. Dicho de otro forma, las fuentes del Derecho son los
actos o hechos de los que deriva la creación, modificación o extinción de normas
jurídicas, incluyendo a los órganos de los cuales emanan dichas normas que
componen el ordenamiento jurídico. Conforma parte de esto los factores históricos
que han incidido en la creación y evolución del Derecho, donde existieron factores
políticos, sociales, y económicos que fueron tomados en cuenta al momento de
crear las normas jurídicas.
Estas fuentes del Derecho han sido identificadas primero como materiales,
constituyendo las causas que históricamente han influido en la generación de
ciertas normas, tales como factores ideológicos, sociales, económicos, etc., y
luego como formales, constituyendo los actos a través de los cuales se producen
las normas, siendo ello el modo de expresión o documento que se emplee para
exteriorizar el producto de un acto normativo.
Así mismo, las fuentes de Derecho son distinguidas en otras formas citadas a
continuación:
Fuentes estatales: normas o leyes creadas de forma directa por los órganos del
estado. Leyes de las cortes: ley de montes.
La Constitución.
La Jurisprudencia.
Los Principios generales del Derecho, para poder interpretar las normas a aplicar.
La costumbre internacional.
Es importante afirmar que todas las fuentes del Derecho recaen siempre y
necesariamente en el pueblo como titular de los derechos y obligaciones que
contienen las normas. En este sentido, y citando a Del Vecchio "Hay una fuente de
la fuente del derecho, y es el espíritu humano y su propia fuerza y naturaleza;
pues de ningún modo puede prescindirse del concurso de aquellas fuerzas vivas
de la conciencia de las que nace realmente el derecho".
Es dicho que el Derecho se relaciona con las demás ciencias por su objetividad,
sea ésta pública o privada.
En este sentido, podemos mencionar las ciencias auxiliares del Derecho Público:
Derecho Electoral: Derecho que rige las leyes electorales del Estado para con el
Ciudadano y viceversa, y a la vez reglamenta la estructura electoral del Estado y
la ciudadanía.
Derecho Militar: rige las relaciones entre el Estado Militar y la sociedad civil, así
como sienta las reglas y códigos militares, coordinando su legalidad estatal y
mundial.
Derecho Judicial: concreta las reglas que han de seguirse para hacer valer ante
los tribunales.
Derecho y La Ciencia Médica: la medicina tiene como objetivo dar el debido valor
y significación genérica a ciertos hechos del hombre, los cuales contribuyen a la
ilustración de los entes jurídicos en la aplicación de la ley y la administración
judicial. Se pueden identificar aquí a las siguientes divisiones:
Derecho Medio Ambiental: rige y concreta las leyes que han de seguirse en
materia medio ambiental, incluyendo el cuidado y conservación del medio
ambiente.
Derecho Civil: contiene las reglas del Derecho Común que se aplican a las
relaciones de los particulares entre sí.
Derecho Comercial: contiene las reglas cuya aplicación está reservada los actos
de comercio u operaciones mercantiles, dividiéndose en:
Derecho Financiero: determina y estudia las reglas del sector financiero y bancario
de una sociedad determinada.
Conclusiones