Carrera Andrade - El Tiempo Manual
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Bodegas de Berlín.
He aquí la cerveza de ojos iluminados.
La plaza de Lutero es mercado de legumbres.
Se ha heoho una estadística del consumo de pan por las
[gaviotas.
Iü1 la nieve-primera comunión de la tierra-
hombres y mujeres hacen el deporte de invierno.
Catedral de Colonia :
Los esbeltos volúmenes
subiendo de hombro en hombro circundados de azul.
En la línea Colonia-París
nos salían al paso los campos mozos.
Los sembrados sin memoria de la guerra
lucían cabellos de oro.
Los esqueletos más jóvenes tenían ya doce años.
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Carros de piedras :
los adoquines son el pan de las huelgas.
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Ametralladora de palabras,
la máquina de escribir dispara contra el centinela invisi-
[ble de la campanilla.
Los ·yunques fragmentan un sueño sonoro de herra-
[duras
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Regimientos de frío
dispersan los grupos de vagabundos y mendigos.
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JuAN, el de las manos que hacen girar las ruedas,
Pedro, que norma el hondo pulso de los motores,
y otros cien compañeros
salieron de la fábrica con rumbo hacia los hombres.
Amaestrador de máquinas, .
habitante de los rascacielos.
Estás al N orté y al Sur, al Este y al Oeste:
Hombre blanco, hombre amarillo, hombre negro.
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El Hombre grita
en México y Berlín, en Moscú y Buenos Aires
y sus radiogramas cubren el planeta.
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Cordillera {novela).