Ensayo Herencia y Ambiente

HERENCIA Y AMBIENTE
Se sabe que la vida del ser humano se encuentra marcada por la herencia desde un
punto de vista biológico y psicológico, sin embargo, esta no determina por completo la
personalidad, ya que el medio ambiente en que la persona crece cuenta con una serie
de factores que pueden ser favorables o desfavorables al afectar en el desarrollo infantil.
En otras palabras, cada ser humano es el producto de su naturaleza, donde intervienen

los rasgos heredados, y la crianza que están basadas en las experiencias de cada uno,
ambos factores van a interactuar entre sí para hacer a cada persona única.
La herencia viene a ser un conjunto de genes que van a determinar la gran mayoría de
las características físicas de la persona, como puede ser la estatura, color de piel, color
de ojos, color de cabello, contextura, etc. También da a conocer ciertos rasgos de la
personalidad como, por ejemplo, ser introvertido o extrovertido; alguna inclinación
artística e intelectuales que se heredan de los padres. Este factor nos predispone y nos
limita frente a ciertos comportamientos, pero el ambiente puede determinar su
expresión.
El ambiente cuenta con distintas variables que influyen en el desarrollo del niño, ya sean
sus experiencias, cultura, medio social como su familia, amigos, profesores, etc. Las
cuales estarán constantemente en contacto con el menor y serán sus modelos; a esto
se le suma los medios de comunicación, la tecnología o hasta el clima, las cuales van a
tender a moldear al individuo a partir del primer contacto con su entorno, por ejemplo,
un niño del medio rural no va a ser igual al niño del medio urbano o un niño americano
será distinto a un niño africano.
Por lo que durante años surgió el dilema entre herencia y ambiente sobre cuánto influyen
al moldeado del desarrollo del cerebro, siendo así uno de los temas más debatidos en
el campo del desarrollo humano; este interés por estudiarlo científicamente tiene una
historia de casi un siglo y medio.
Es así que se dará a conocer la relación que existe entre herencia y ambiente, si es
determinante o no alguno de estos factores y si es que existe alguna influencia entre
ambos.
Actualmente las investigaciones muestran al cerebro como operando de forma plástica

y autoorganizada y estando menos constreñido por límites predeterminados de lo que
se había pensado previamente. La información en el cerebro es representada y
procesada por grupos de neuronas que mantienen una interconexión funcional basada
más en las exigencias de la experiencia que en estrictos esquemas genéticamente
determinados. En otras palabras, las experiencias con el medio ambiente determinan
qué información se queda guardado en la memoria por ser directo.
Herencia y ambiente se influencian entre sí ya que existe una correlación entre los
factores genéticos y ambientales. Existen tres tipos de interacción o correlación
genotípica/ambiental:
• Correlación pasiva: El niño pequeño tiene poca influencia sobre su ambiente.

Los padres determinan las condiciones de vida y proveen ambientes de crianza
que sean compatibles con sus propios genotipos. Por ejemplo, si a los padres
les gusta leer, proveerán a sus hijos con un ambiente rico en lectura.
• Correlación genética/ambiental evocativa: "Los niños evocan respuestas de
otros que son influenciados por los genotipos de los niños, y las respuestas
actúan para fortalecer su predisposición original". Por ejemplo, un niño amigable
y sociable recibirá mayores respuestas sociales y estimulación que un niño
tranquilo y pasivo.
• Correlación genotípica/ambiental activa: A medida que los niños crecen, van
al colegio y extienden sus experiencias más allá de sus familias, están cada vez
más buscando ambientes y situaciones que sean compatibles con sus
inclinaciones genéticas y que tengan las características de "bondad de ajuste".
Scarr y McCartney denominan "esta tendencia de individuos para escoger
activamente ambientes que sean compatibles con sus predisposiciones
genéticas niche-picking" que significa selección de nichos. Por ejemplo, ellos
buscan de manera cada vez más activa por amigos con los cuales comparten
intereses como deportes, música o intereses intelectuales.
Uno de los autores del campo psicológico se interesó por saber las influencias entre la
herencia y el entorno, cómo estas pueden llegar a moldear la personalidad de las
personas. Raymond Cattell realizó una investigación entre gemelos que viven juntos y
entre gemelos que viven separados, hermanos no gemelos que viven juntos y entre
hermanos no gemelos que viven separados; para saber en qué medida las diferencias
de los rasgos se podrían atribuir a factores genéticos o ambientales. Como resultado se
obtuvo que la herencia influye en algunos rasgos de la personalidad, pero no en todos;
siendo así que solo una tercera parte de la personalidad cuenta con origen genético
(hereditario) y las dos terceras partes están influidas por factores sociales y ambientales.
Las crías de ratas separadas de sus madres en las dos primeras semanas de vida
muestran un incremento permanente en la expresión (manifestación en rasgos) de
genes encargados de controlar la secreción de FLC (factor liberador de corticotropina),
una de las hormonas del estrés (Plotsky y Meaney, 1993). Sin embargo, esta
vulnerabilidad al estrés, que dura toda la vida, se invierte si las madres demuestran un
mayor cuidado físico a las crías una vez que se las reúne (Liu y col., 1997). Por lo que
algunos factores del entorno van a influir en la manera en que se pueda controlar estos
mecanismos de conducta. Cuando un niño con una madre esquizofrénica es separado
de ella y adoptado por otra familia, por ejemplo, disfuncional y con muchos problemas,
puede llegar a surgir y darse a conocer la esquizofrenia heredada de su madre por el
ambiente cargado de estrés en el que vive, sin embargo, cuando ambos viven juntos y
no son separados, es posible que el niño llegue a controlar este trastorno heredado, ya
que puede observar a la madre cómo lo supera y el ambiente será más tranquilo.
Así mismo, además de heredar color de ojos, de cabello, piel, etc. es posible que los
hijos de padres con antecedentes psicológicos puedan también heredar dichos
trastornos o tendencias a estos que se pueden anticipar. En un estudio del King's
College of London, se analizó a casi 4.000 personas con problemas mentales, en su
mayoría pacientes de depresión; se les preguntó sobre posibles trastornos o el pasado
de sus padres, por otro lado, se investigó sobre alguna situación traumática que pudo
pasar en su niñez que pueda dar respuesta; se encontró 27 genes que podrían explicar
la presencia de problemas mentales en los pacientes analizados y que se heredan de
padres a hijos. Esta investigación da pie a que los problemas mentales tienen una mayor
fuerza por el factor genético que ambiental, sin embargo, esto puede ser tratado por
medio de psicoterapias, en donde el factor ambiental va a jugar un importante papel
para poder controlar dicho problema.
CONCLUSIÓN:
La herencia y el ambiente son igual de importantes, no hay herencia sin ambiente, y no
hay ambiente sin herencia. Ya que toda herencia influye en el modo que lo hace, porque
el ambiente en que tiene lugar influye; y todo ambiente va a producir cierto efecto,
porque incide sobre un proceso genéticamente codificado.
Por lo general no es posible separar los factores genéticos y ambientales debido a que
a menudo se relacionan unos con otros. Lo cual significa que las predisposiciones
genéticas tienen alguna influencia en el ambiente al que estamos expuestos. Es
importante el ambiente y las experiencias que le proveerán los padres al niño durante
su desarrollo, ya que estas van a llegar a estimular el aprendizaje y la formación de su
personalidad, muy a parte del carácter a los que se encuentran predeterminados, ya
que estos pueden ser reforzados y parecerse más a uno de los padres o pueden
cambiar.
Sin embargo, el carácter no es lo único que se puede heredar de los padres, también
se encuentran los trastornos genéticos o psicológicos que se pasan de generación en
generación y que pueden aparecer en un momento dado o puede que no, aquí también
entra en juego el ambiente y el factor social en el que irá creciendo el niño.
BIBLIOGRAFÍA
Dio, E. (2004). Estudios sobre la relación herencia-ambiente en la temprana infancia.

Revista Internacional de Psicoanálisis Aperturas, 017 2004.
Hacerfamilia. (2018). ¿Influye la herencia genética en la aparición de problemas

mentales?. Recuperado de: https://www.hacerfamilia.com/psicologia/influye-herencia-
genetica-aparicion-problemas-mentales-20180113191222.html
Liu, D., Diorio, J., Tannenbaum, B., Caldji, C., Francis, D., Freedman, A., Sharma, S.,
Pearson, D., Plotsky, P. M. & Meaney, M. J. (1997). Maternal care, hippocampal
glucocorticoid receptors, and hypothalamic-pituitary-adrenal responses to stress.
Science, 277:1659-1662.
Monks F. (1996). Herencia y ambiente: una aproximación interactiva hacia el talento.

Revista de Psicología de la PUCP. Vol. XIV. No 2.
Plotsky, P. M. & Meaney, M. J. (1993). Early, postnatal experience alters hypothalamic

corticotropin-releasing factor (CRF) mRNA, median eminence CRF content and stress-
induced release in adult rats. Brain Res.: Mol. Brain Res., 18:195-200.

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En otras palabras, cada ser humano es el producto de su naturaleza, donde intervienen

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Plotsky, P. M. & Meaney, M. J. (1993). Early, postnatal experience alters hypothalamic

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