Desarrollo Del Telencéfalo y El Diencéfalo
Desarrollo Del Telencéfalo y El Diencéfalo
Desarrollo Del Telencéfalo y El Diencéfalo
PROSENCÉFALO:
A medida que tiene lugar el cierre del neuroporo rostral,
aparecen dos zonas protruyentes laterales, las vesículas
ópticas, una a cada lado del prosencéfalo. Las vesículas
ópticas son los primordios de las retinas y los nervios
ópticos. Al poco tiempo aparece un segundo par de
divertículos, las vesículas telencefálicas en una localización
más dorsal y rostral. Estas últimas vesículas son los
primordios de los hemisferios cerebrales, y sus cavidades
se convierten en los ventrículos laterales.
DIENCÉFALO
En las paredes laterales del tercer ventrículo aparecen
tres protrusiones que más adelante se convertirán en el
tálamo, el hipotálamo Y el epitálamo.
GLÁNDULA PINEAL O EPÍFISIS (CUERPO PINEAL) = desarrolla en forma de un divertículo medio en la parte caudal del
techo del diencéfalo. La proliferación de células en sus paredes convierte rápidamente este divertículo en una glándula
sólida y con forma cónica. Involucrada en el ritmo circadiano, que secreta melatonina.
HACIA LA TERCERA SEMANA, el divertículo hipofisario se proyecta desde el techo del estomodeo y queda situado
en una zona adyacente al suelo (pared ventral) del diencéfalo. Se forma desde el piso del tercer ventrículo, y
conectada con el hipotálamo, el infundíbulo.
La secreción de BMP-4 y FGF-8 por parte del diencéfalo induce a la aparición en el techo del estomodeo de una
placoda ectodérmica que se invagina para forma la bolsa hipofisiaria (de Rathke). La bolsa espresa los henes home-
secuencia Lhx-3, Lhx-4 y Hesx-1, y se desprende del ectodermo para formar una pequeña vesícula de la que deriva
la adenohipófisis, para que finalmente ambas estructuras se fusionen y den lugar a la hipófisis. (ARTEGAGA)
HACIA LA QUINTA SEMANA, este divertículo aumenta de longitud y se constriñe en su zona de unión al epitelio
oral, mostrando ahora un aspecto similar al de un pezón. Para esta fase ha establecido contacto con el
infundíbulo (derivado del divertículo neurohipofisario), una protrusión ventral del diencéfalo que crece en
dirección inferior.
TALLO DEL DIVERTÍCULO HIPOFISARIO = discurre entre los centros de condrificación de los huesos craneales
preesfenoides y basiesfenoides en desarrollo.
SEXTA SEMANA = la conexión del divertículo con la cavidad oral experimenta degeneración.
Las CÉLULAS DE LA PARED ANTERIOR del divertículo hipofisario proliferan y dan lugar a la parte anterior de la
hipófisis. Más adelante, alrededor del tallo infundibular crece una extensión que se denomina parte tuberal. La
proliferación extensa de la pared del divertículo hipofisario reduce el calibre de su luz hasta convertirlo en una
hendidura estrecha. Esta hendidura residual no suele reconocerse en la hipófisis del adulto, pero puede estar
representada por una zona de quistes.
Las CÉLULAS DE LA PARED POSTERIOR de la bolsa hipofisaria no proliferan; dan lugar a la delgada parte
intermedia, una estructura mal definida.
Finalmente, la hipófisis asciende y cruza el mesénquima que dará lugar al esfenoides, alojándose en una drepresión que
forma en su cara superior la silla turca. (ARTEAGA)
La EFRINA-B2 Y LA SEÑALIZACIÓN DE OTRAS MOLÉCULAS (p. ej., FGF8, BMP4 y WNT5A) desde el diencéfalo implicados
en la formación de los lóbulos anterior e intermedio de la hipófisis; el gen LIM-homeobox LHX2 parece controlar el
desarrollo del lóbulo posterior.
TELENCÉFALO
Constituido por una parte media y dos
divertículos laterales, las vesículas cerebrales.
Estas vesículas son los primordios de los
hemisferios cerebrales. La cavidad de la porción
media del telencéfalo forma la parte anterior
extrema del tercer ventrículo. Al principio, los
hemisferios cerebrales muestran una
comunicación amplia con la cavidad del tercer
ventrículo a través de los agujeros
interventriculares.
Los futuros hemisferios cerebrales emergen
del telencéfalo como vesículas telencefálicas a
mediados de la QUINTA SEMANA. (ARTEAGA)
A lo largo de la fisura coroidea, parte de la pared medial del
hemisferio cerebral en desarrollo muestra un adelgazamiento
importante. Inicialmente, esta porción ependimaria se localiza en
el techo del hemisferio y se continúa con el techo ependimario del
tercer ventrículo. Más adelante, en esta localización se forma el
plexo coroideo del ventrículo lateral, que está unido a la pared a
través de la cisura coroidea. Por arriba de esta, la pared está
engrosada formando el hipocampo.
A medida que se diferencia la corteza cerebral, las fibras que van y vienen a ella
atraviesan el cuerpo estriado y lo dividen en los NÚCLEOS CAUDADO Y
LENTICULAR. Esta vía de fibras nerviosas, la cápsula interna, adquiere una forma
en «C» a medida que los hemisferios cerebrales adoptan su configuración
definitiva. El NÚCLEO CAUDADO presenta alargamiento y una forma en «C»,
adaptándose al borde del ventrículo lateral. Su cabeza con forma de pera y su
cuerpo alargado se sitúan en el suelo del asta frontal y en el cuerpo del ventrículo
lateral, mientras que su cola hace un giro en «U» hasta alcanzar el techo del asta
temporal o inferior.
La corteza cerebral se divide en la corteza antigua, el arquipalio (paleopalio), que es la primera en aparecer durante la
evolución, y la corteza nueva, el neopalio, de aparición posterior y cuya complejidad va aumentando de acuerdo a la
posición. El arquipalio es también llamado corteza olfatoria, está representado por el hipocampo, estructura situada en
las porciones caudales y mediales de la pared interna de los hemisferios cerebrales. El neopalio es el resto (paredes y
techo) de las vesículas telencefálicas. En el suelo, la otra región de esas vesículas se localiza en un abultamiento de
neuronas que sobresale hacia el sistema ventricular; es en ese sentido donde se formarán los ganglios basales: el globo
pálido y el cuerpo estriado. Por la fusión del telencéfalo y diencéfalo, el cuerpo estriado se ubica ahora ente la corteza
cerebral (neopalio) y el tálamo. De la corteza cerebral emergen fibras que van a hacer sinapsis con el tálamo y viceversa;
dichas fibras son la cápsula interna, que en su camino cruza al cuerpo estriado y lo divide en dos estructuras: el núcleo
caudado (dorsomedial) que se alarga y toma la forma de una herradura, su cabeza queda situada en el piso del asta o
cuerno frontal del ventrículo lateral, y su cola en el techo del asta o cuerno temporal del ventrículo lateral; y el núcleo
lenticular (ventrolateral). (ARTEAGA)
COMISURAS CEREBRALES
A medida que se desarrolla la corteza cerebral, aparecen grupos de fibras nerviosas,
las COMISURAS, que conectan las áreas correspondientes de los hemisferios
cerebrales. La más importante de estas comisuras atraviesa la LÁMINA TERMINAL, es
decir, el extremo rostral (anterior) del prosencéfalo. Esta lámina se extiende desde la
placa del techo del diencéfalo hasta el quiasma óptico (decusación o cruce de las
fibras del nervio óptico). Esta lámina es la vía natural de comunicación entre los dos
hemisferios.
La COMISURA ANTERIOR conecta el bulbo olfatorio y las áreas relacionadas de uno de los hemisferios con los
del hemisferio contralateral.
La COMISURA HIPOCAMPAL une los hipocampos de ambos hemisferios
La comisura cerebral más grande es el cuerpo calloso, que conecta las áreas neocorticales. Se sitúa inicialmente en la
lámina terminal, pero a medida que aumenta de tamaño la corteza muestra un incremento progresivo de sus fibras
nerviosas; el resultado es que al final se extiende gradualmente hasta más allá de la lámina terminal. El resto de la lámina
terminal se sitúa entre el cuerpo calloso y el fórnix. Más adelante se distiende para formar el fino septo pelúcido, una
banda de tejido cerebral.
NACIMIENTO = cuerpo calloso se extiende sobre el techo del diencéfalo. El quiasma óptico, que se desarrolla en la parte
ventral de la lámina terminal, está constituido por fibras que proceden de las mitades mediales de las retinas, que pasan
al otro lado para unirse al tracto óptico contralateral.
Las paredes de los hemisferios cerebrales en desarrollo
muestran inicialmente las tres zonas típicas del tubo neural
[ventricular, intermedia y marginal), más adelante aparece
una cuarta zona, la ZONA SUHVENTRICULAR. Las células de
la zona intermedia migran hacia la zona marginal y dan lugar
a las capas corticales. Por tanto, la sustancia gris se localiza
periféricamente y los axones que se originan en los cuerpos
de sus neuronas discurren centralmente para formar la zona
más voluminosa y grande de sustancia blanca: el centro
medular (semioval).
DEFECTOS HIPOFISIARIAS:
En ocasiones una porción pequeña de la bolsa de Rathke persiste en el techo de la faringe, a manera de hipófisis faríngea.
Los craneofaringiomas derivan de los remanentes de la bolsa de Rathke. Pueden formarse dentro de la silla turca o a lo
largo del tallo de la hipófisis, pero suelen ubicarse por arriba de la silla. Pueden inducir hidrocefalia y disfunción hipofisiaria
(p. ej., diabetes insípida, detención del crecimiento). (LAGMAN)