Que Somos ¿Cristianos Maduros o Ninos en Cristo
Que Somos ¿Cristianos Maduros o Ninos en Cristo
Que Somos ¿Cristianos Maduros o Ninos en Cristo
TEXTO: 1 CORINTIOS 3:1-2 De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a
espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo. 2 Os di a beber leche, y no vianda;
porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía,/ HEBREOS 5:12-14 Porque debiendo
ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar
cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que
tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido. 13 Y todo aquel que participa de la leche
es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño; 14 pero el alimento sólido es para los
que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el
discernimiento del bien y del mal.
En los textos que hemos leído podemos reconocer dos tipos de cristianos que son
mencionados en ellos: LOS NIÑOS EN CRISTO.Y LOS QUE HAN ALCANZADO
MADUREZ. Esto nos debe hacer comprender que todos nosotros como cristianos tenemos
que procurar crecer espiritualmente, dejar de ser niños espirituales y avanzar en el
conocimiento del Señor para llegar a ser cristianos maduros que podamos ser de bendición
para otras personas.
Este día vamos a reconocer algunas de las características de aquellos cristianos que son
niños en Cristo, es decir, inmaduros espiritualmente hablando, para que podamos
reflexionar en nuestra propia vida cristiana y evaluarnos a nosotros mismos si seguimos
siendo niños en Cristo o vamos ya alcanzando la madurez espiritual que nuestro Dios
espera de cada uno de nosotros. (1 Corintios 13:11) Cuando yo era niño, hablaba como
niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; mas cuando ya fui hombre, dejé lo que
era de niño.
Los niños siempre están quejándose de algo, es lo normal en esa etapa, se quejan porque
están aburridos, porque no quieren comer, porque no quieren ir a donde van sus padres,
porque tienen sueño, y mientras lloran murmuran con enojo porque no se hace lo que ellos
quieren, pero se les comprende ¡Porque son niños!
Un cristiano inmaduro que es como un niño en Cristo igualmente en su boca solamente hay
quejas y murmuraciones, se queja de los hermanos, se queja de los pastores, se queja de
la iglesia, y por eso como lo dice (2 Corintios 12:20) Pues me temo que cuando llegue,
no os halle tales como quiero, y yo sea hallado de vosotros cual no queréis; que haya
entre vosotros contiendas, envidias, iras, divisiones, maledicencias, murmuraciones,
soberbias, desórdenes; su vida cristiana está llena de contiendas con otros hermanos,
llena de ira porque las cosas no son como ellos quisieran, llena de divisiones porque no
puede llevarse bien con todos, o con nadie, y muchos aún usan las palabras vulgares y
ofensivas para tratar a sus prójimos pues su corazón está lleno de soberbia.
II) UN NIÑO EN CRISTO SE RECONOCE POR SU FORMA DE PENSAR (Filipenses 4:8)
Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo,
todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si
algo digno de alabanza, en esto pensad.
Así como los niños también los cristianos inmaduros que son como niños en Cristo su vida
está enfocada en la diversión, en las cosas que la mundanalidad ofrece, y no en desarrollar
una relación personal y cercana con el Señor (Santiago 4:4) !!Oh almas adúlteras! ¿No
sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que
quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.
Al igual que los niños también los cristianos inmaduros usan mucho su imaginación:
● Se imaginan que si cometen errores todos en la iglesia se van a burlar y los van a
juzgar y por eso mejor se apartan.
● Se imaginan que todos hablan de ellos, que todas las miradas de crítica están sobre
ellos y por eso se desaniman y viven frustrados.
● Se imaginan que pueden vivir siendo indiferentes con el Señor y aun así vivir en
bendición, pero la realidad es algo totalmente diferente (Juan 15:5) Yo soy la vid,
vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho
fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
Los niños pequeños necesitan el apoyo de sus padres para poder tomar decisiones porque
sus decisiones son tomadas motivadas más por la emoción y por las apariencias, que por la
razón, sin pensar en las consecuencias.
De la misma manera los cristianos inmaduros que son como niños espirituales toman
decisiones en su vida basadas en la emoción, en disfrutar el momento, sin pensar en las
consecuencias que sus acciones pueden traer a su vida, a su vida, a su familia, a su
matrimonio y a su vida espiritual.
Muchos viven bajo la filosofía de vida que nos menciona el profeta Isaias (Isaías 22:13) y
he aquí gozo y alegría, matando vacas y degollando ovejas, comiendo carne y
bebiendo vino, diciendo: Comamos y bebamos, porque mañana moriremos.
● La oración constante (Efesios 6:18) orando en todo tiempo con toda oración y
súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos
los santos;
● La lectura Bíblica diaria (Juan 5:39) Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros
os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de
mí;
● El amor fraternal con los hermanos (Romanos 12:10) Amaos los unos a los otros
con amor fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndoos los unos a los otros.