Misas

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21 de febrero

SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA,


MADRE DE LA MISERICORDIA

Solemnidad

La devoción a la Madre de Dios, como para todos los santos, caracterizó la


vida y obra del padre Santiago Cusmano. Su piedad mariana lo llevó a
reconocer en María el título de “Gran Madre de Dios”. En 1878, en San
Marcos, fue confortado por María en una visión y, después de las fundaciones
la reconoció siempre como Madre Fundadora y primera Superiora. En sus
exhortaciones siempre invito a tener una regla “la vida de Jesucristo copiada
por la Santísima Virgen”. Hoy, honramos a María con el título de “Madre de
la Misericordia” y celebramos con el grado de solemnidad. Este título ha
ingresado como patrimonio espiritual de la obra, ya que representa muy bien
el carisma cusmaniano.

ANTÍFONA DE ENTRADA
Salve Madre de la Misericordia, Madre de la esperanza
y Madre del perdón, Madre de Dios y Madre de la
Gracia, Madre llena de gozo. ¡O María! (TP. Aleluya).

Se dice Gloria

ORACIÓN COLECTA

O
h Dios misericordioso que colmas de bienes a aquellos que tiene hambre
y sed de justicia, por la intercesión de la Santísima Virgen María, Madre
de la Misericordia acuérdate de tu familia reunida en oración y transforma
nuestra pobreza en riqueza de tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los
siglos de los siglos.
3

PRIMERA LECTURA
La reina Ester ora por el pueblo.

Lectura del libro de Ester


4, 17. n. p-r. aa-bb. gg-hh.

E
n aquellos días, la reina Ester, ante mortal peligro que amenazaba a su
pueblo, buscó refugio en el Señor y se postró en tierra con sus esclavas,
desde la mañana hasta el atardecer. Entonces suplicó al Señor, diciendo:
“Dios de Abraham, Dios de Isaac, Dios de Jacob, ¡bendito seas! Protégeme,
que estoy sola y no tengo más defensor que tú, Señor, y voy a jugarme la vida.
Señor, yo sé, por los libros que nos dejaron nuestros padres, que tú siempre
salvas a los que te son fieles. Ayúdame ahora a mí, porque no tengo, a nadie
más que a ti, Señor y Dios mío.
Ayúdame, Señor, pues estoy desamparada. Pon en mis labios palabras
acertadas, cuando esté en presencia del león y haz que yo le agrade, para que
su corazón se vuelva en contra de nuestro enemigo, para ruina de éste y de sus
cómplices.
Con tu poder, Señor, líbranos de nuestros enemigos. Convierte nuestro llanto
en alegría y haz que nuestros sufrimientos nos obtengan la vida”.
Palabra de Dios.
4

SALMO RESPONSORIAL
Lucas 1

R. La misericordia del Señor se extiende de generación en generación.

Mi alma glorifica al Señor


y, mi espíritu se llena de júbilo en Dios, mi salvador,
porque puso sus ojos en la humildad de su esclava. R.

Desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones,


porque ha hecho en mí grandes cosas el que todo lo puede.
Santo es su nombre. R.

Su misericordia llega de generación en generación


a los que lo temen.
A los hambrientos los colmó de bienes
y a los ricos los despidió sin nada. R.

Acordándose de su misericordia,
vino en ayuda de Israel, su siervo,
como lo había prometido a nuestros padres,
a Abraham y a su descendencia, para siempre. R.
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SEGUNDA LECTURA
Lectura de la carta del apóstol Santiago
2,12-17

H ermanos míos: hablen y actúen como quienes deben ser juzgados por una
Ley que nos hace libres. Porque el que no tiene misericordia será juzgado sin
misericordia, pero la misericordia triunfa sobre el juicio. ¿De qué le sirve a
uno decir que tiene fe, si no la demuestra con obras? ¿Acaso podrá
salvarlo esa fe?
Supongamos que algún hermano o hermana carece de ropa y del alimento
necesario para el día, y que uno de ustedes le dice: “Que te vaya bien; abrígate
y come”, pero no le da lo necesario para el cuerpo; ¿de qué le sirve que le
digan eso? Así pasa en la fe; si no se traduce en obras, está completamente
muerta.
Palabra de Dios

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO


Sal, 65,20

R. Aleluya, aleluya.
Bendito sea Dios, que no rechazó mi súplica, ni apartó de mí su misericordia.
R. Aleluya.

O bien en Cuaresma

Sal 32, 5
R. Honor y gloria a ti, Señor Jesús.
Ama la justicia y el derecho y su amor llena la tierra.
R. Honor y Gloria a ti, Señor Jesús.
6

EVANGELIO
La madre de Jesús asistió a la boda.

Lectura del santo Evangelio según san Juan


2, 1-11

E n aquel tiempo, hubo una boda en Caná de Galilea, a la cual asistió la


madre de Jesús. Éste y sus discípulos también fueron invitados. Como llegara
a faltar el vino, María le dijo a Jesús: “Ya no tiene vino”. Jesús le
contestó: “Mujer, ¿qué podemos hacer tú y yo? Todavía no llega mi hora”.
Pero ella le dijo a los que servían: “Hagan lo que él les diga”.
Había allí seis tinajas de piedra, de unos cien litros cada una, que servían para
las purificaciones de los judíos. Jesús dijo a los que servían: “llenen de agua
las tinajas”. Y las llenaron hasta el borde. Entonces les dijo: “saquen ahora un
poco y llévenselo al mayordomo”.
Así lo hicieron, y en cuanto el mayordomo probó el agua convertida en vino,
sin saber su procedencia, porque sólo los sirvientes la sabían, llamó al novio y
le dijo: “Todo mundo sirve primero el vino mejor, y cuando los invitados ya
habían bebido bastante, se sirve el corriente. Tú, en cambio, has guardado el
vino mejor hasta ahora”.
Esto que Jesús hizo en Caná de Galilea fue la primera de sus señales
milagrosas. Así mostró su gloria, y sus discípulos creyeron en él.
Palabra del Señor.

Se dice Credo.
7

ORACIÓN UNIVERSAL
Queridos hermanos proclamemos las grandezas de Dios, Padre
todopoderoso, que quiso que todas las generaciones felicitaran a María,
la Madre de su Hijo, y supliquémosle diciendo:
Que la llena de gracia interceda por nosotros

1. Tú que hiciste de María la Madre de la Misericordia, haz que los que


viven en peligro o están tentados sientan su protección maternal.
Oremos.

2. Tú que encomendaste a María la misión de ser Madre de la familia en


el hogar de Jesús y de José, haz que por su intercesión todas las
madres fomenten en sus hogares el amor y la santidad. Oremos.

3. Tú que fortaleciste a María cuando estaba al pie de la cruz y la


llenaste de gozo con la resurrección de su Hijo, levanta y robustece la
esperanza de los decaídos. Oremos.

4. Tú que hiciste que María meditara tus palabras en su corazón y fuera


esclava fiel, por su intercesión haz de nosotros siervos fieles y
discípulos dóciles de tu Hijo. Oremos.

5. Tú que coronaste a María como reina del cielo, haz que los difuntos
puedan alcanzar con todos los santos la felicidad de tu reino. Oremos.

Concédenos, Señor, la valiosa intercesión de la Virgen María, Madre


de la Misericordia, cuya fiesta hoy celebramos, y danos parte en los
dones de tu amor por la intercesión de aquella a la que hiciste llena de
gracia. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo.
8

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

T e ofrecemos con alegría, Señor, el pan y el vino por el sacrificio de


alabanza, en la Solemnidad de la Madre de tu Hijo, Madre de la Misericordia;
a cambio de nuestra humilde ofrenda, dónanos una conciencia siempre viva
del ministerio de la redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.

PREFACIO I de la Santísima María Virgen.

V. El Señor se con ustedes. R. Y con su espíritu.


V. Levantemos el corazón. R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios. R. Es justo y necesario.

E n verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias


siempre y en todo lugar, Señor, Padre Santo, Dios todopoderoso y eterno. Y
alabar, bendecir y proclamar tu gloria en la solemnidad de María,
Madre de la Misericordia.
Porque ella concibió a tu Hijo único por obra del Espíritu Santo, y sin perder
la gloria de su virginidad, hizo resplandecer sobre el mundo la luz eterna,
Jesucristo, Señor nuestro.
Por él, los ángeles y los arcángeles y todos los coros celestiales, celebran tu
gloria, unidos en común alegría. Permítenos asociarnos a sus voces, cantando
humildemente tu alabanza:

Santo, Santo, Santo…


9

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 5,7

Bienaventurados los misericordiosos porque


encontrarán la misericordia.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

L a comunión de tu Cuerpo y de tu Sangre que hemos recibido con


devoción, celebrando la solemnidad de tu Madre Santísima, Madre de la
Misericordia, obtengamos Señor Jesús todos los favores divinos para la
terrena y la eterna. Tú que vives y reina en los siglos de los siglos.
10

BENDICIÓN SOLEMNE

Que Dios, cuya providencia amorosa quiso redimir benignamente al género


humano por medio de su Hijo santísimo nacido de la Virgen María, los colme
de sus bendiciones.
R. Amén.

Que experimenten siempre y en todo lugar la protección de la Virgen María,


por quien merecieron ustedes recibir al autor de la vida.
R. Amén.

Que a todos ustedes, que se han reunido hoy aquí para celebrar con devoción
esta solemnidad de María, Madre de la Misericordia, el Señor les conceda los
goces espirituales y los premios del cielo.
R. Amén.

Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo , y Espíritu Santo,


descienda sobre ustedes y permanezca para siempre.
R. Amén.
14 de Marzo

BEATO GIACOMO CUSMANO, presbítero

Solemnidad

Giacomo Cusmano nace en Palermo el 15 de marzo de 1834, fue Médico, atendía y curaba
gratuitamente a los pobres. Después acogió la llamada divina, fue ordenado sacerdote el
22 de diciembre de 1860 y se dedicó con mayor ardor a la caridad. Muy a menudo en su
vida procuraba lo necesario a quien lo necesitaba, preocupándose no solo de dar de comer
a los cuerpos, mas sobretodo alimentar también el espíritu con las palabras de la vida
eterna y con la acción sacramental. Instituyó la asociación del “Bocado del Pobre”, la
congregación de las hermanas Siervas de los Pobres, y de los Misioneros siervos de los
Pobres. Después de una vida infatigable en el servicio de los más pobres murió en Palermo
el 14 de marzo de 1888, el Sumo pontífice Juan Pablo II el 30 de octubre de 1983 lo
declaró Beato.

ANTÍFONA DE ENTRADA Lc 4,18


El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha
ungido para llevar a los pobres buena nueva y sanar a
los de corazón contrito.

Se dice Gloria.

ORACIÓN COLECTA

O
h Dios omnipotente y misericordioso, que has hecho resplandecer en el
Beato Giacomo Cusmano, sacerdote, una caridad sin límites a favor de
los pobres y miserables, concédenos por su intercesión, que inflamados por el
mismo ardor de caridad seamos siempre felices de donar la vida para la gloria
de tu nombre y al servicio de los hermanos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu
Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los
siglos de los siglos.
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PRIMERA LECTURA
Lectura del libro del profeta Isaías
58, 6-11

E sto dice el Señor: “El ayuno que yo quiero de ti es éste: que rompas las
cadenas injustas y levantes los yugos opresores; que liberes a los oprimidos y
rompas todos los yugos; que compartas tu pan con el hambriento y abras tu
casa al pobre sin techo; que vistas al desnudo y no des la espalda a
tu propio hermano.
Entonces surgirá tu luz como la aurora y cicatrizarán de prisa tus heridas; te
abrirá camino la justicia y la gloria del Señor cerrará tu marcha. Entonces
clamarás al Señor y te responderá; lo llamarás y te dirá: ‘Aquí estoy’.
Cuando renuncies a oprimir a los demás y destierres de ti el gesto amenazador
y la palabra de ofensiva; cuando compartas tu pan con el hambriento y sacies
la necesidad del humillado, brillará tu luz en las tinieblas y tu oscuridad será
como el medio día.
El Señor te dará reposo permanente; en el desierto saciará tu hambre y dará
vigor a tu cuerpo; serás como huerto bien regado, como un manantial cuyas
aguas no se agotan”.
Palabra de Dios
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O bien.

Lectura de la primera carta del apóstol san Juan


3, 14-18

Q ueridos hermanos: Nosotros estamos seguros de haber pasado de la


muerte a la vida, porque amamos a nuestros hermanos. El que no ama
permanece en la muerte. El que odia a su hermano es un homicida y bien
saben ustedes que ningún homicida tiene la vida eterna.
Conocemos lo que es el amor, en que Cristo dio su vida por nosotros. Así
también debemos nosotros dar la vida por nuestros hermanos. Si alguno,
teniendo con qué vivir, ve a su hermano pasar necesidad, y sin embargo, no lo
ayuda, ¿cómo habitará el amor de Dios en él?
Hijos míos, no amemos solamente de palabra; amemos de verdad y con las
obras.
Palabra de Dios
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SALMO RESPONSORIAL
Del Salmo 111, 1-9.

R: Dichosos los que temen al Señor.

Dichosos los que temen al Señor


y ama de corazón sus mandamientos;
poderosos serán sus descendientes,
Dios bendice a los hijos de los buenos. R.

Fortuna y bienestar habrá en su casa,


siempre actuarán conforme a la justicia.
Quien es justo, clemente y compasivo,
como una luz en las tinieblas brilla. R

Quienes, compadecidos, prestan


y llevan sus negocios rectamente,
jamás se desviarán,
vivirá su recuerdo para siempre. R

No temerán malas noticias,


pues que en el Señor viven confiados.
Firme está y sin temor su corazón,
pues vencidos verán a sus contrarios. R

Al pobre da limosna,
obra siempre conforme a la justicia;
su frente se alzará llena de gloria. R
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ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO


Jn 15,12

R. Aleluya, Aleluya.
Este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he
amado.
R. Aleluya, Aleluya.

O bien en Cuaresma.

R. Honor y gloria a ti Cristo, Señor Jesús.


Este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he
amado.
R. Honor y gloria a ti Cristo, Señor Jesús.

EVANGELIO
Se sentará en su trono de gloria y apartará a los unos de los otros.

Lectura del santo Evangelio según san Mateo


25, 31-46.

E n aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Cuando venga el Hijo del
hombre rodeado de su gloria, acompañado de todos sus ángeles, se sentará en
su trono de gloria. Entonces serán congregadas ante él todas las naciones y él
apartará a los unos de los otros, como aparta el pastor a las ovejas de los
cabritos, y pondrá a las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.
26

Entonces dirá el Rey a los de su derecha: ‘Vengan, benditos de mi Padre;


tomen posesión del reino preparado para ustedes desde la creación del mundo;
porque estuve hambriento, y me dieron de comer; sediento, y me dieron de
beber; era forastero, y me hospedaron; estuve desnudo, y me vistieron;
enfermo, y me visitaron; encarcelado, y fueron a verme’.
Los justos le contestarán entonces: ‘Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te
dimos de comer; sediento, y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos de
forastero, y te hospedamos; o desnudo, y te vestimos? ¿Cuándo te vimos
enfermo o encarcelado, y te fuimos a ver?’ Y el Rey les dirá: ‘Yo les aseguro
que, cuando lo hicieron con el más insignificante de mis hermanos, conmigo
lo hicieron’.
Entonces dirá también a los de la izquierda: ‘Apártense de mí, malditos; vayan
al fuego eterno, preparado para el diablo y sus ángeles; porque estuve
hambriento, y no me dieron de comer; sediento, y no me dieron de beber; era
forastero, y no me hospedaron; estuve desnudo, y no me vistieron; enfermo y
encarcelado, y no me visitaron’.
Entonces ellos le responderán: ‘Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o
sediento, de forastero o desnudo, o enfermo o encarcelado, y no te asistimos?’
Y él les responderá: ‘Yo les aseguro que, cuando no lo hicieron con uno de
aquellos más insignificantes, tampoco lo hicieron conmigo’. Entonces irán
éstos al castigo eterno y los justos a la vida eterna.
Palabra del Señor

Se dice Credo.
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ORACIÓN UNIVERSAL
Hermanos y hermanas reunidos en esta celebración eucarística de la
solemnidad del Beato Giacomo Cusmano, padre de los pobres, que Dios nos
ha dado como ejemplo a seguir y que ahora nos precede en su gloria,
elevemos a Dios nuestra oración y agradezcamos y alabemos porque también
nosotros podamos caminar sobre sus huellas con el fin de beneficiarse de su
intercesión digamos juntos.

Escúchanos Señor.

1. Por el papa (N)… pastor universal de la Iglesia y partidario incasable de los


derechos humanos, a fin que el Señor haga siempre fecunda su obra por la
verdad, la justicia y la paz. Oremos.

2. Por todos los cristianos, para que felicidad del cielo sea un día la
recompensa en el servicio de los pobres, en los cuales han reconocido a
Cristo. Oremos.

3. Por los dirigentes de las naciones, para que con su esfuerzo a favor de la
justicia, de la cultura, de la paz porten frutos numerosos por el bien de todos
los hombres. Oremos.

4. Por los afligidos, a fin que sean consolados; por los ignorantes, porque sean
instruidos; por aquellos que tienen hambre de pan y de justicia, para que
sean saciados; por los pobres, los huérfanos, los mendigos, los
despreciados, para que encuentren siempre hermanos que los amen y los
ayuden. Oremos.
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5. Por los padres y educadores, a fin que fortifiquen en los jóvenes el amor a
Dios y a los hermanos, para que sean responsables y luchen por sus
semejantes. Oremos.

6. Por nosotros mismos aquí reunidos, para que florezca la vida divina
recibida en nuestro bautismo en autentica santidad al servicio de la Iglesia y
del mundo. Oremos.

Señor, observa tu Iglesia en oración, concédele la protección del Beato


Giacomo Cusmano que hoy festejamos. Que su intercesión asegure siempre
los beneficios y las gracias que esperamos de ti. Por Jesucristo, nuestro
Señor.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

A
coge nuestros dones, oh Padre, en este memorial del infinito amor de tu
Hijo, y por intercesión del Beato Giacomo Cusmano, danos tu generosa
bendición. Por Cristo nuestro Señor.
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PREFACIO

V. El Señor esté con ustedes. R. Y con tu espíritu.


V. Levantemos el corazón. R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
V. Demos gracias al Señor nuestro Dios. R. Es justo y necesario.

E
n verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación
darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios
todopoderoso y eterno, por Cristo nuestro Señor.
Porque de tal modo concedes a tu Iglesia la alegría de celebrar hoy la
solemnidad del Beato Giacomo Cusmano, pues lo llamaste a seguir los pasos
de tu Hijo, en la caridad sin límites, consagrando su vida a la evangelización
de los Pobres.
Y por él, abrazado de celo por la difusión de tu Reino, nos diste un ejemplo y
una norma de fervor apostólico, a fin de que también nosotros, en virtud de tu
Espíritu e impulsados por tu caridad, empleemos nuestras fuerzas y toda
nuestra vida en trabajar por la salvación de los Pobres.
Por eso, unidos a la multitud de los ángeles y de los santos, te aclamamos,
llenos de alegría:

Santo, Santo, Santo…


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ANTÍFONA DE COMUNIÓN 1Cor 10, 17


El pan es uno, y aunque somos muchos, formamos un
solo cuerpo, porque participamos de un mismo pan y
de un mismo cáliz.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓ

O h Dios que nos has hecho gustar de la dulzura del pan de la vida,
concede a tus fieles, sobre el ejemplo del Beato Giacomo Cusmano, de
progresar en la vida de la caridad para poseer la herencia eterna. Por Cristo
nuestro Señor.
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BENDICIÓN SOLEMNE

Dios gloria y alegría de los santos que nos concedes celebrar la solemnidad en
honor del Beato Giacomo Cusmano sacerdote, danos su perenne bendición.
R. Amén.

Con la intercesión del Beato Giacomo Cusmano los libre de los males presente
y con sus ejemplos estimule una vida santa en el servicio de Dios y de los
hermanos.
R. Amén.

Para que puedan disfrutar con el Beato Giacomo Cusmano y todos los santos,
la paz y la gloria de esta patria, en la cual la iglesia aclama en eterno por la
comunión gloriosa de todos sus hijos.
R. Amén.

Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo , y Espíritu Santo,


descienda sobre ustedes y permanezca para siempre.
R. Amén.
9 de Marzo

SAN JOSÉ,
ESPOSO DE LA SANTISIMA VIRGEN MARÍA

Solemnidad

Su misión en esta vida consistió en velar por Jesús “haciendo las veces de padre”. Pero el
Señor ha querido que la cabeza de la Sagrada Familia siga cumpliendo la misma función
con la Iglesia, que es cuerpo de Cristo. María es la Madre de la Iglesia; san José, el
protector.

ANTÍFONA DE ENTRADA Lc 12, 42


Éste es el siervo fiel y prudente, a quien el Señor puso
al frente de su familia.

Se dice Gloria.

ORACIÓN COLECTA

D ios todopoderoso, que pusiste bajo la fiel custodia de san José los
comienzos de la salvación humana, te pedimos que, por su intercesión,
pueda tu Iglesia llevarla siempre a su plenitud. Por nuestro Señor Jesucristo, tu
Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los
siglos de los siglos.
33

PRIMERA LECTURA
Lectura del segundo libro de Samuel
7, 4-5. 12-14. 16

E n aquellos días, el Señor le habló al profeta Natán y le dijo: “ve y dile a


mi siervo David que el Señor le manda a decir esto: ʽCuando tus días se
hayan cumplido y descanses para siempre con tus padre, engrandeceré a tu
hijo, sangre de tu sangre, y consolidaré su reino.
El me construirá una casa y yo consolidaré su trono para siempre. Yo seré
para él un padre y él será para mí un hijo. Tu casa y tu reino permanecerán
para siempre ante mí. Y su trono será estable eternamente.
Palabra de Dios

SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 88

R: Su descendencia perdurará eternamente.

Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor


y daré a conocer que su fidelidad es eterna,
pues el Señor ha dicho: “Mi amor es para siempre
y mi lealtad, más firme que los cielos. R.

Un juramento hice a David, mi servidor,


una alianza pacté con mi elegido:
ʽconsolidaré tu dinastía para siempre
y afianzaré tu trono eternamenteʼ. R.
34

R: Su descendencia perdurará eternamente.

Él me podrá decir:ʽTu eres mi padre,


el Dios que me protege y que me salvaʼ.
Yo jamás le retiraré mi amor
ni violaré el juramento que le hice” R.

SEGUNDA LECTURA
De la carta del apóstol san Pablo a los romanos
4, 13. 16-18. 22

H ermanos: La promesa que Dios hizo a Abraham y a sus descendientes


de que ellos heredarían el mundo, no dependía de la observancia de la ley, sino
de la justificación obtenida mediante de la fe.

En esta forma, por medio de la fe, que es gratuita, queda asegurada la promesa
para todos sus descendientes, no sólo para aquellos que cumplen la ley, sino
también, para todos los que tienen la fe de Abraham. Entonces, él es padre de
todos nosotros, como dice la Escritura: “Te he constituido padre de todos los
pueblo”.
Así pues, Abraham es nuestro padre delante de aquel Dios en quien creyó y
que da la vida a los muertos y llama a la existencia a las cosas que todavía no
existen. Él, esperando contra toda esperanza, creyó que había de ser padre de
muchos pueblos, conforme a los que Dios le había prometido: Así de
numerosa será tu descendencia. Por eso, Dios le acredito esta fe como
justicia.
Palabra de Dios
35

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO


Sal 83,5

R. Honor y gloria a ti Cristo, Señor Jesús.


Dichosos los que viven en tu casa; siempre, Señor, te alabarán.
R. Honor y gloria a ti Cristo, Señor Jesús.

EVANGELIO
Tu padre y yo te hemos estado buscando llenos de angustia.

Lectura del santo Evangelio según san Lucas


2, 41-51

L os padres de Jesús solían ir cada año a Jerusalén por las festividades de


Pascua. Cuando el niño cumplió doce años, fueron a la fiesta, según la
costumbre. Pasados aquellos días, se volvieron, pero el niño Jesús se quedó en
Jerusalén, sin que sus padres lo supieran. Creyeron que iba en la caravana,
hicieron un día de camino; entonces lo buscaron, y al no encontrarlo,
regresaron a Jerusalén en su busca.
Al tercer día lo encontraron en el templo, sentado en medio de los doctores,
escuchándolos y haciéndoles preguntas. Todos los que le oían se admiraban de
su inteligencia y de sus respuestas. Al verlo, sus padres quedaron atónitos, y
su madre le dijo: «Hijo mío, ¿por qué te has portado así con nosotros? Tu
padre y yo te hemos estado buscando llenos de angustia». Él les respondió: «
¿Por qué me andan buscando? ¿No sabían que debo ocuparme en la cosas de
mi Padre?».Ellos no entendieron la respuesta que les dio. Entonces volvió con
ellos a Nazaret y siguió sujeto a su autoridad.
Palabra del Señor
36

Se dice Credo.

ORACIÓN UNIVERSAL
Acudamos suplicantes a Dios Padre todopoderoso, de quien procede toda la
familia del cielo y de la tierra, y digámosle suplicantes:
Escúchanos Padre

1. Padre santo, tú que en la aurora del nueva Testamento revelaste a José


el misterio mantenido en silencio desde el origen de los siglos,
ayúdanos a conocer cada vez mejor a tu Hijo, verdadero Dios y
verdadero hombre. Oremos.

2. Padre celestial, tú que alimentas a las aves del cielo y vistes la hierba
del campo, concede a todos los hombres el pan de cada día para su
cuerpo y el alimento de la eucarística para su espíritu. Oremos.

3. Para que San José, que fue un trabajador fiel y un padre ejemplar,
interceda ante Dios para que los gobernantes del mundo procuren que a
nadie falte trabajo y ayuden a los que deben mantener y educar una
familia. Oremos.

4. Creador del universo, tú que entregaste al hombre la obra de tus manos,


haz que los trabajadores puedan disfrutar de manera digna del fruto de
su trabajo. Oremos.

5. Haz Señor, que los moribundos y los que ya han muerto, obtengan tu
misericordia eterna, por medio de tu Hijo, de María y de san José.
Oremos.
37

Dios todopoderoso, que, en los albores del nuevo Testamento, encomendaste a


san José los misterios de nuestra salvación, haz que ahora tu Iglesia, sostenida
por la intercesión del esposo de María, lleve a su pleno cumplimiento la obra
de la salvación de los hombres. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

T e rogamos, Señor, que así como san José sirvió con amorosa entrega a tu
Unigénito, nacido de la virgen María, así también nosotros, con un corazón
limpio, merezcamos servirte en el altar. Por Jesucristo, nuestro Señor.

PREFACIO: Misión de san José

V. El Señor esté con ustedes. R. Y con tu espíritu.


V. Levantemos el corazón. R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
V. Demos gracias al Señor nuestro Dios. R. Es justo y necesario.

E n verdad es justo y necesario, es nuestro deber y fuente de salvación


darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios
todopoderoso y eterno.

Y alabar, bendecir y proclamar tu gloria en la solemnidad de san José, porque


él es el hombre justo que diste por esposo a la Virgen Madre de Dios, el fiel y
prudente servidor a quien constituiste jefe de tu familia para que, haciendo las
veces de padre, cuidara a tu Unigénito, concebido por obra del Espíritu Santo,
Jesucristo, nuestro Señor.
Por él, los ángeles y los arcángeles, y todos los coros celestiales, celebran tu
gloria, unidos en común alegría. Permítenos asociarnos a sus voces cantando
humildemente tu alabanza:
Santo, Santo, Santo…
38

ANTÍFONA DE COMUNIÓN Mt 25, 21


Alégrate, siervo fiel. Entra a compartir el gozo con tu
Señor.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

S eñor, protege siempre a esta familia tuya que alimentada con el


sacramento del altar, se alegra hoy de celebrar la solemnidad de san José, y
conserva en ella los dones que con tanta bondad le concedes.
39

BENDICIÓN SOLEMNE

Que Dios, nuestro Padre, que nos ha congregado para celebrar hoy la
solemnidad de San José, los bendiga, los proteja y los confirme en la paz.
R. Amén.

Que Cristo, el Señor, que ha manifestado en san José la fuerza renovadora de


su misterio pascual, los haga auténticos testigos de su Evangelio.
R. Amén.

Que el Espíritu Santo, que en san José nos ha ofrecido un ejemplo de caridad
evangélica, les conceda la gracia de acrecentar en la Iglesia la verdadera
comunión de fe y de amor.
R. Amén.

Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo , y Espíritu Santo,


descienda sobre ustedes y permanezca para siempre.
R. Amén.
24 de septiembre

BEATO FRANCISCO SPOTO, Presbítero y Mártir

Solemnidad

Nació el 8 de Julio de 1924 en Raffadale Agrigento, en el 1936 entró en el seminario de los


Misioneros Siervos de los Pobres (Boconistas) en Palermo y el 22 de Julio de 1951, en el
santuario Nuestra Señora de los Remedios, fue ordenado sacerdote por el cardenal Ernesto
Ruffini. En el Capítulo general del 1959, con apenas 35 años, fue electo Superior general,
tal era la estima del cual se rodeaba.
Llevó a término la aprobación de las constituciones por parte de la Santa Sede e introduce
la causa de canonización del Fundador Padre Giacomo Cusmano, el 4 de agosto de 1964,
viajó a Biringi (Congo ex Belga) en la misión, apenas tres años antes para confortar a los
hermanos. Aquí lo sorprendió la revolución de los Simba.
El 3 de diciembre los cuatro misioneros fueron capturados. Padre Spoto alcanzó a
evadirlos. A pies desnudos y exhausto de fuerzas por haber caminado todo un día y medio
en el espeso bosque, se arrodilló y oró “Señor, te ofrezco mi vida, pero salva mis
hermanos”, el 27 de diciembre con solo 40 años, con muchas dificultades, a los golpes y
los hostigamientos de los simba, moría y los tres hermano de allá, misteriosamente se
salvaron. En seguida, sus venerables restos fueron llevados en Italia y del 1987, se
encontraban en la iglesia parroquial “Corazón Eucarístico de Jesús” en Palermo.
El 26 de junio del 2006 Papa Benedicto XVI reconoció oficialmente su martirio y el 21 de
abril fue Beatificado.

ANTIFONA DE ENTRADA Cfr. Flp 2, 30

Este santo, por seguir a Cristo, estuvo a las puertas de


la muerte, y entregó su vida en sacrificio.

Se dice Gloria.
41

ORACIÓN COLECTA

O h Dios, esperanza de los Pobres, que has asociado al sacrificio de Cristo


a la ofrenda del bienaventurado padre Francisco Spoto, fiel a tu voluntad hasta
el martirio, danos por su ejemplo y por su intercesión, la docilidad a tus
impenetrables misterios y el coraje de testimoniar el evangelio en el glorioso
servicio a los hermanos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina
contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.

PRIMERA LECTURA
Lectura del libro de la Sabiduría
3,1-9

L as almas de los justos están en las manos de Dios y no los alcanzará


ningún tormento. Los insensatos pensaban que los justos habían muerto, que
su salida de este mundo era una desgracia y su salida de entre nosotros, una
completa destrucción. Pero los justos están en paz.
La gente pensaba que sus sufrimientos eran un castigo, pero ellos esperaban
confiadamente la inmortalidad. Después de breves sufrimientos recibirán una
abundante recompensa, pues Dios los puso a prueba y los halló dignos de sí.
Los probó como oro en el crisol y los aceptó como un holocausto agradable.
En el día del juicio brillarán los justos como chispas que se propagan en un
cañaveral. Juzgarán a las naciones y dominarán a los pueblos, y el Señor
reinará eternamente sobre ellos.
Los que confían en el Señor comprenderán la verdad y los que son fieles a su
amor permanecerán a su lado, porque Dios ama a sus elegidos y cuida de
ellos.
Palabra de Dios.
42

SALMO RESPONSORIAL
Salmo 30

R. Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu.

Se tú mi fortaleza y mi refugio,
mi muro de resguardo.
Pues eres mi refugio y fortaleza,
por tu nombre, Señor, guía mis pasos. R.

En tus manos encomiendo mi espíritu


y tu lealtad me librará, Dios mío.
Tu amor, Señor, me llenará de gozo
cuando te hayas de mí compadecido. R.

Líbrame del poder de mi enemigo


que viene tras mis pasos.
Vuelve, Señor, tus ojos a tu siervo
y por tu amor tan grande, ponme a salvo. R.
43

SEGUNDA LECTURA
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los romanos
5, 1-5

H ermanos: Ya que hemos sido justificados por la fe, mantengámonos en


paz con Dios, por mediación de nuestro Señor Jesucristo. Por él hemos
obtenido, con la fe, la entrada al mundo de la gracia, en la cual nos
encontramos; por él, podemos gloriarnos de tener la esperanza de participar en
la gloria de Dios.
Más aún, nos gloriamos hasta de los sufrimientos, pues sabemos que el
sufrimiento engendra la paciencia, la paciencia engendra la virtud sólida, la
virtud sólida engendra la esperanza, y la esperanza no defrauda, porque Dios
ha infundido su amor en nuestros corazones por medio del Espíritu Santo, que
él mismo nos ha dado.
Palabra de Dios.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO


Mt 5, 10

R. Aleluya, aleluya.
Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino
de los cielos, dice el Señor.

R. Aleluya.
44

EVANGELIO
El que me sirve será honrado por mi Padre.

Lectura del santo Evangelio según san Juan


12, 24-26

E n aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Yo les aseguro que si el
grano de trigo sembrado en la tierra, no muere, queda infecundo; pero si
muere, producirá mucho fruto. El que se ama a sí mismo, se pierde; el que se
aborrece a sí mismo en este mundo, se asegura para la vida eterna.
El que quiera servirme, que me siga, para que donde yo esté, también esté mi
servidor. El que me sirve será honrado por mi Padre”.
Palabra del Señor

Se dice Credo.

ORACIÓN UNIVERSAL
Hermanos y hermanas, invoquemos al Padre la gracia del Espíritu Santo para
que, a la luz de la palabra, podamos discernir las elecciones que nos ayuden a
caminar nuestra vida sobre las normas en Cristo. Digamos juntos
Escúchanos Señor
1. Para que en la comunidad Eclesial, cualquiera que sea la tarea a la que
somos llamados, todos nos sintamos hermanos del único Maestro,
Jesucristo. Oremos.

2. Para que el ejemplo del Beato Francisco Spoto sea un reclamo para todos
los bautizados a vivir en la santidad de la vida y a manifestar cada día, el
amor de aquél que nos ha amado primero. Oremos.
45

3. Para que con el ejemplo del Beato Francisco Spoto y de todos los
misioneros nos ayude a vivir las misiones de la Iglesia y sea un estímulo a
caminar con fidelidad y coherencia sobre las normas en Jesucristo.
Oremos.

4. Por todos los hermanos para que perseveren en el amor y el servicio de


Cristo que se presenta en los Pobres, a ejemplo del Beato Francisco Spoto.
Oremos.

5. Para que los cónyuges vivan siempre en la unión y en la fidelidad


recíproca. Oremos.

6. Para que todos nuestros hermanos difuntos gocen de la misericordia y del


amor de Dios en su luz y en su paz. Oremos.

Padre que has dado al Beato Francisco Spoto la fuerza y la gloria de dar la
vida por el Evangelio, ayúdanos en la pruebas de esta vida y renueva nuestra
adhesión en las promesas bautismales para estar inmersos en la única y
perenne novedad del amor de Cristo, tu Hijo…
46

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

A l recordar el martirio del Beato Francisco Spoto, traemos, Señor, a tu


altar nuestros dones, y te pedimos que quienes celebramos los misterios de la
pasión del Señor, imitemos lo que realizamos. Por Jesucristo, nuestro Señor.

PREFACIO

V. El Señor esté con ustedes. R. Y con tu espíritu.


V. Levantemos el corazón. R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
V. Demos gracias al Señor nuestro Dios. R. Es justo y necesario.

E n verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias


siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno.
Porque la sangre del Beato Francisco Spoto, mártir, derramada con la Cristo
para proclamar su fidelidad a ti, manifiesta tu admirable poder, que convierte
la fragilidad en la fortaleza y al hombre débil robustece para que sea testigo
tuyo, por Cristo nuestro Señor.

Por eso, como los ángeles te cantan en el cielo, así nosotros en la tierra te
aclamamos, diciendo sin cesar:

Santo, santo, santo…


47

ANTIFONA DE LA COMUNIÓN Mc 8, 35
El que pierda su vida por mí y por el Evangelio, dice el
Señor, la salvará.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Y a que hemos celebrado el banquete celestial, te pedimos, Señor, que el


recuerdo del martirio del Beato Francisco Spoto, y nuestra oración fervorosa,
nos alienten a seguir el ejemplo generoso de su fe. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
48

BENDICIÓN SOLEMNE

Que Dios, nuestro Padre, que nos ha congregado para celebrar hoy la
solemnidad del Beato Francisco Spoto, los bendiga, los proteja, y los confirme
en su paz.
R. Amén.

Que Cristo, el Señor, que ha manifestado en el Beato Francisco Spoto la


fuerza renovadora del misterio pascual, los haga auténticos testigos de su
Evangelio.
R. Amén.

Que el Espíritu Santo, que en el Beato Francisco Spoto nos ha ofrecido un


ejemplo de caridad evangélica, les conceda la gracia de acrecentar en la
Iglesia la verdadera comunión de fe y de amor.
R. Amén.

Que la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo , y Espíritu Santo,


descienda sobre ustedes y permanezca para siempre.
R. Amén.
27 de Septiembre

SAN VICENTE DE PAÚL, Presbítero

Fiesta

Vicente vivió en Francia entre los años 1581 y 1660. Fue un santo verdaderamente
innovador para su época. De entre sus muchas obras, podemos destacar la formación de
las “Hijas de la Caridad”. Estas religiosas, a diferencia de las órdenes de mujeres
existentes hasta ese momento, que vivían en clausura, fueron preparadas para la atención
a los más pobres y la presencia en los hospitales. Es el patrono de todas las organizaciones
cristianas de caridad.

ANTIFONA DE ENTRADA Cfr. Lc 4,18


El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha
ungido para llevar a los pobres la buena nueva y sanar
a los de corazón contrito.

Se dice Gloria.

ORACIÓN COLECTA

D ios nuestro, que, para el servicio a los pobres y la formación de los


sacerdotes, colmaste de virtudes apostólicas a san Vicente de Paúl
presbítero, concédenos que, animados por el mismo espíritu, amemos lo que
él amó, y pongamos por obra lo que él enseñó. Por nuestro Señor
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y
es Dios por los siglos de los siglos.
50

PRIMERA LECTURA
Lectura del libro del profeta Isaías
52, 7-10

¡Q ué hermoso es ver correr sobre los montes, al mensajero que anuncia


la paz, al mensajero que trae la buena nueva, que pregona la salvación, que
dice a Sión: “Tu Dios es rey”! Escucha:
Tus centinelas alzan la voz y todos a una gritan alborozados, porque ven con
sus propios ojos al Señor, que retorna a Sión. Prorrumpan en gritos de alegría,
ruinas de Jerusalén, porque el Señor rescata a su pueblo, consuela a Jerusalén.
Descubre el Señor su santo brazo a la vista de todas las naciones. Verá la tierra
entera la salvación que viene de nuestro Dios.
Palabra de Dios
51

O bien

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios.


1, 26-31: 2 1-2

H ermanos: Consideren que entre ustedes, los que han sido llamados por
Dios, no hay muchos sabios, ni muchos poderosos, ni muchos nobles, según
los criterios humanos. Pues Dios ha elegido a los ignorantes de este mundo,
para humillar a los sabios; a los débiles del mundo, avergonzar a los fuertes; a
los insignificantes y despreciados del mundo, es decir, a los que no valen nada,
para reducir a la nada a los que valen; de manera que nadie pueda presumir
delante de Dios.
En efecto, por obra de Dios, ustedes están injertados en Cristo Jesús, a quienes
Dios hizo nuestra sabiduría, nuestra justicia, nuestra santificación y nuestra
redención. Por lo tanto, como dice la Escritura: el que se gloría, que se gloríe
en el Señor.
Cuando llegue a la cuidad de ustedes para anunciarles el Evangelio, no busqué
hacerlo mediante la elocuencia del lenguaje o la sabiduría humana, sino que
resolví no hablarles sino de Jesucristo, más aun, de Jesucristo crucificado.
Palabra de Dios
52

SALMO RESPONSORIAL
Sal 39, 10,11 a 11 b-12, 17-18 ab

R. He proclamado tu fidelidad y tu salvación.

He anunciado tu justicia
en la gran asamblea;
no he cerrados mis labios,
tú lo sabes, Señor. R.

No me he guardado en el pecho tu defensa.


He proclamado tu fidelidad y tu salvación.
No he negado tu misericordia y tu lealtad
ante a la gran asamblea. R.

Tú, Señor, no me niegues tu clemencia,


que tu misericordia y tu lealtad me guarden siempre. R.

Alégrense y gocen contigo


todos los que te buscan;
digan siempre, «grande es el Señor»,
los que desean tu salvación. R.

Yo soy pobre y desdichado,


pero el Señor cuida de mi. R.
53

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mt 10,7

R. Aleluya

Vayan y proclamen por el camino que ya se acerca el Reino de los cielos.

R. Aleluya

EVANGELIO
Dichosos los pobres de espíritu.

Del santo Evangelio según san Mateo


5, 1-12 a

E n aquel tiempo, cuando Jesús vio a la muchedumbre, subió al monte y se


sentó. Entonces se le acercaron los discípulos. Enseguida comenzó a
enseñarles, hablándoles así:

«Dichosos los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.


Dichosos los que lloran, porque serán consolados.
Dichosos los sufridos, porque heredarán la tierra.
Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados.
Dichosos los misericordiosos, porque obtendrán misericordia.
Dichosos los de limpio corazón, porque verán a Dios.
Dichosos los que trabajan por la paz, porque se les llamará hijos de Dios.
Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino
de los cielos.
Dichosos serán ustedes cuando los injurien, los persigan y les digan cosas
falsas de ustedes por causa mía. Alégrense y salten de contento, porque su
premio será grande en los cielos».
Palabra del Señor
54

ORACIÓN UNIVERSAL
Hermanos, alegres de celebrar la fiesta de san Vicente de Paúl, que Dios nos
ha dado como ejemplo de seguir, y que ahora nos precede en su gloria,
dirijamos a Dios confiadamente nuestra oración, para qué podamos caminar
sobre sus pasos, y seamos beneficiados de su intercesión, oremos juntos
diciendo:
Escúchanos Señor
1. Por todos los cristianos a fin que la felicidad del cielo sea su
recompensa un día por su celo al servicio de los pobres, en los cuales han
reconocido a Cristo. Oremos.

2. Por los dirigentes de las naciones, para que sus esfuerzos en favor de la
justicia, de la cultura y de la paz, porten numerosos frutos para el bien de
todos los hombres. Oremos.

3. Por los afligidos, para que sean consolados; por los ignorantes, para que
sean instruidos, para aquellos que tienen hambre de pan y de justicia, para
que sean saciados, por los pobres, los huérfanos, los olvidados, los dispersos
por el mundo, para que encuentren en los hermanos el ánimo que los
impulse a seguir a Cristo. Oremos.

4. Por los padres y los educadores, a fin que enseñen a los jóvenes el amor
de Dios y de los hermanos, el sentido de la responsabilidad y el camino
recto. Oremos.

5. Por nosotros aquí reunidos, para que la vida divina recibida en nuestro
bautizo florezca en autentica santidad, al servicio de la iglesia en el mundo. .
Oremos.
55

Señor, mira tú Iglesia en oración, otorga la protección de San Vicente de Paúl


que hoy celebramos, cólmanos de gracia, por su intercesión y asegura siempre
los beneficios, que ella espera de ti. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

D ios nuestro, que diste a san Vicente la gracia de realizar en su vida lo


que celebraba en estos santos misterios, concédenos, por este sacrificio, ser
transformado en una ofrenda agradable a tus ojos. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
PREFACIO

V. El Señor esté con ustedes. R. Y con tu espíritu


V. Levantemos el corazón. R. Lo tenemos levantado hacia el Señor
V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios. R. Es justo y necesario

E n verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias


siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por
Jesucristo, Señor nuestro.

Porque de tal modo concedes a tu Iglesia la alegría de celebrar hoy la


festividad de san Vicente de Paúl, tú lo has llamado a despojarse de todo a
imitación de tu Hijo, consagrando su vida a la evangelización de los pobres. Y
por él, lleno de celo para la difusión de tu Reino, nos diste un ejemplo y un
modelo del fervor apostólico, a fin de que también nosotros, con la fuerza de
tu Espíritu y animados por la caridad, gastemos nuestras energías y la vida
entera a trabajar para la salvación de los pobres.
Por eso, unidos a la multitud de los ángeles y los santos, te aclamamos, llenos
de alegría: Santo, Santo, Santo.
56

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 106, 8-9


Demos gracias al Señor por su misericordia, por las
maravillas que hace en favor de su pueblo, porque da
de beber al que tienen sed y les da de comer a los
hambrientos.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

R enovados con este sacramento celestial, te suplicamos humildemente,


Señor, que, para imitar a tu Hijo en su celo por la evangelización de los
pobres, sigamos el ejemplo de san Vicente, ayudados por su protección. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
57

BENDICIÓN SOLEMNE

Al celebrar con alegría la fiesta de san Vicente de Paúl, el Señor les muestre
su bondad, haciéndolos imitadores de él en la caridad y sus compañeros en el
premio.
R. Amén.

El Señor Jesús, que nos ha dado el mandamiento del amor fraterno, les
conceda renovar en el espíritu su vocación, para que transformándose su amor
en un solo corazón y en una sola alma, consagren su vida servicio de los
hermanos.
R. Amén.

Presentándose al mundo como sus discípulos, sean ministros de verdad y de


justicia y extiendan por toda parte su Reino de amor y de paz.
R. Amén.

Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo,


desciendo sobre ustedes y los acompañe siempre.
R. Amén.
4 de octubre

SAN FRANCISCO DE ASÍS

Fiesta

Desde el día que se encontró al Señor en san Damián, hasta el día en que murió en la
Porciúncula, a lo largo de su vida de peregrino con sus hermanos, los frailes menores,
aquél “poverello” de Asís, redujo literalmente su vida a seguir a Jesús con alegría,
sencillez, fidelidad a la iglesia y ternura para todos, (1182-1226).

ANTIFONA DE ENTRADA
Francisco, hombre de Dios, dejó su casa, abandonó su
herencia y se hizo pobre y desvalido; pero el Señor se
hizo cargo de él.

Se dice Gloria.

ORACIÓN COLECTA

D ios nuestro, que otorgaste a san Francisco de Asís la gracia de


asemejarse a Cristo por la humildad y la pobreza, concédenos caminar tras
sus huellas para que podamos seguir a tu Hijo y entregarnos a ti con alegre
caridad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la
unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
59

PRIMERA LECTURA
Lectura del libro del Eclesiástico (Sirácide)
50, 1. 3-7ª

E l más grande de los hermanos y honor de su pueblo es el sacerdote


Simeón, hijo de Juan. En su tiempo se reparó el templo, en sus días se restauró
el santuario. En sus días se reconstruyeron las murallas con torreones para el
palacio real; protegió a su pueblo del saqueo y fortificó a la ciudad para el
asedio. Qué majestuoso cuando salía de la tienda asomando detrás de las
cortinas: como estrella luciente entre nubes, como luna llena en día de
fiesta, como sol refulgente sobre el palacio real.
Palabra de Dios

O bien:

Lectura de la carta del apóstol San Pablo a los Gálatas


6, 14-18

H ermanos: No permita Dios que yo me gloríe en algo que no sea la cruz


de nuestro Señor Jesucristo, por el cual el mundo está crucificado para mí y yo
para el mundo. Porque en Cristo Jesús de nada vale el estar circuncidado o no,
sino el ser una nueva creatura.
Para todos los que vivían conforme a esta norma y también para el verdadero
Israel, la paz y la misericordia de Dios. De ahora en adelante, que nadie me
ponga más obstáculos, porque llevo en mi cuerpo la marca de los sufrimientos
que he pasado por Cristo.
Hermanos, que la gracia de nuestro Señor Jesucristo esté con ustedes. Amén.
Palabra de Dios
60

SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 15,1-2a. 5. 7-8. 11.

R. Tú, Señor, eres mi herencia.

Protégeme, Dios mío, pues eres mi refugio.


Yo siempre he dicho que tú eres mi Señor.
El Señor es la parte que me ha tocado en herencia:
mi vida está en sus manos. R.

Bendeciré al Señor, que me aconseja,


hasta de noche me instruye internamente.
Tengo siempre presente al Señor
y con él a mi lado jamás tropezaré. R.

Enséñame el camino de la vida,


sáciame de gozo en tu presencia
y de alegría perpetua junto a ti. R.
61

SECUENCIA

Prodigios nuevos de santidad Allá protegido de los acantilados


dignos de honor aparecieron inmerso en éxtasis,
para nosotros hermosos y propicios el Seráfico en la tierra
confiamos en Francisco. prefiere el cielo.

A los inscritos en la nueva grey Y tratado con rigor,


les fue dada una nueva ley el cuerpo se trasfigura;
se renuevan los decretos del Rey nutrido de la palabra de Dios,
trasmitidos por Francisco niega todo lo que es terreno.

Un nuevo orden, una nueva vida Del alto un Seráfico alado,


desconocidos en el mundo surgen le aparece, es el grande Rey;
la regla propuesta emitida aterrizó el Padre,
el regreso al evangelio. aterrorizado de la visión.

Conforme a los consejos de Cristo En los miembros de Francisco


fue dictada la regla, todo absorto en oración
la norma dada recalca imprime el Serafín
la vida de los Apóstoles los signos del Crucificado

Cuerda ruda, vestidos duros Por las llagas que ha llevado,


ciñe y cubre sin cuidado con los cuales ha triunfado;
el alimento se da en ahorro. sobre la carne y sobre el enemigo
se tiran sus calzados. con ilustre victoria.

Busca solo la pobreza, Oh Francisco, tu defiéndenos,


nada terreno desea entre las cosas que se nos oponen;
acá Francisco pisa todo; para poder gozar el premio
niega la riqueza, en la eterna gloria.

Busca lugares solitarios Padre santo y piadoso


donde desahogarse en llantos, tu pueblo devoto
gime por los tiempos preciosos con la legión de hijos,
usado en los siglos. obtengamos la recompensa eterna,

En una caverna de Verna, Todos aquellos que te siguen


llora, reza postrado en la tierra estén unidos un día en el cielo
hasta que el alma irradiada a los bienaventurados suscriptos
de celeste arcana luz. en la luz de la gloria.
Amén.
62

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

R. Aleluya, aleluya.
Francisco, pobre y humilde en la tierra, entra colmado de riqueza en el cielo y
en su honor se elevan himnos celestes.
R. Aleluya, Aleluya.

EVANGELIO
Has escogido estas cosas a los sabios y entendidos, y se las has revelado a la gente
sencilla.

Lectura del santo Evangelio según san Mateo


11, 25-30

E n aquel tiempo, Jesús exclamó: “¡Te doy gracias, Padre, Señor de cielo y
tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y se las has
revelado a la gente sencilla! ¡Gracias, Padre, porque así te ha parecido bien!
El Padre ha puesto todas las cosas en mis manos. Nadie conoce al Hijo sino el
Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera
revelar.
Vengan a mí, todos los que están fatigados y agobiados por la carga, y yo los
aliviaré. Tomen mi yugo sobre ustedes y aprendan de mí, que soy manso y
humilde de corazón, y encontrarán descanso, porque mi yugo es suave, y mi
carga ligera”.
Palabra del Señor

62
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ORACIÓN UNIVERSAL
Queridos hermanos celebrando en la alegría del espíritu la fiesta de san
Francisco de Asís, elevemos a Dios Misericordioso nuestras invocaciones para
que nos conceda imitar en nuestras vidas sus luminosos ejemplos;
aclamémosle diciendo:
Escúchanos oh, Señor

1. Por la Iglesia madre de los Santos y luz de Dios entre los hombres, para que
bajo la guía del Sumo Pontífice, la acción pastoral de los obispos y el
servicio de los fieles y de los sacerdotes, haga seguro el camino del pueblo
de Dios. Oremos.

2. Por la familia Franciscana, para que viendo en él la viva imagen de Cristo


Crucificado, realicen en sí mismos el ideal de vida evangélica que él
predicó. Oremos.

3. Por el mundo entero, para que el mensaje de paz y de fraternidad universal


que llevó san Francisco encuentre en los hermano disposición para que lo
acojan y practiquen. Oremos.

4. Por nosotros aquí reunidos en esta celebración eucarística, para que


esperemos la paz y la serenidad del espíritu, para ser en el mundo los
mensajeros de la alegría franciscana. Oremos.

Señor Dios, que en el pobre y humilde Francisco de Asís has dado a tu Iglesia
una imagen viva de Jesucristo, has que nosotros, siguiendo su ejemplo,
imitemos a tu Hijo y vivamos, como este santo, unidos a ti en el gozo del
amor. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo…

63
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ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

A coge nuestros dones, Señor, y prepara a tu pueblo para celebrar el


misterio de la cruz, que marcó el alma y el cuerpo de nuestro padre
Francisco. Por Jesucristo, nuestro Señor.

PREFACIO

V. El Señor esté con ustedes. R. Y con tu espíritu.


V. Levantemos el corazón. R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
V. Demos gracias al Señor nuestro Dios. R. Es justo y necesario.

E n verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias


siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno. Por
Cristo nuestro Señor. Tú has levantado a San Francisco por la vía de la más
sublime pobreza y humildad, a las cumbres de la perfección evangélica lo
has enfervorecido de ardor seráfico para glorificarte con inefable júbilo de su
espíritu en todas las obras de tus manos; y premiado de tus santas yagas, lo
has señalado al mundo cuál fiel imagen de Cristo crucificado nuestro Señor.
Por medio de él se alegran los ángeles y en la eternidad adoran la gloria
de tu rostro en su canto concede oh Señor, que se unan nuestras humildes
voces en el himno de tu alabanza. Santo, Santo, Santo.

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ANTIFONA A LA COMUNIÓN 1Pe 4,13


Alégrense, más, bien, de compartir los sufrimientos
de Cristo, y así, cuando se revele su gloria, ustedes
también desbordarán de gozo y alegría.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

O Dios, que nos has acogido en tu mesa, has que sintamos en nosotros la
flama viva de tu amor e, imitando la caridad y el fervor apostólico de nuestro
padre Francisco, nos consagremos al servicio de los hermanos. Por Jesucristo,
nuestro Señor.

65
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BENDICIÓN SOLEMNE

Que Dios, nuestro Padre, que nos ha congregado para celebrar hoy la fiesta de
san Francisco de Asís, los bendiga, los proteja, y los confirme en su paz.
R. Amén.

Que Cristo, el Señor, que ha manifestado en san Francisco de Asís la fuerza


renovadora del misterio pascual, los haga auténticos testigos de su Evangelio.
R. Amén.

Que el Espíritu Santo, que en san Francisco de Asís nos ha ofrecido un


ejemplo de caridad evangélica, les conceda la gracia de acrecentar en la
Iglesia la verdadera comunión de fe y de amor.
R. Amén.

Que la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo,


descienda sobre ustedes y permanezca para siempre.
R. Amén.

66

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