Memoria Musical

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Educación de la memoria musical

Galia Thalía Delgadillo Blancas

Galia Thalía Delgadillo Blancas, es licenciada en Estudios de Jazz por la


Universidad Veracruzana. Ha formado parte del Ensamble Vocal “Vox Populi
Project”, Ensamble vocal femenino “Voces de la tierra”, entre otros. Ha
participado en festivales como “Tlaxcala Canta”, “Salva-Blues Jazz Festival”
“Jalisco Canta”, etc.. Actualmente se desempeña como docente de canto en la
escuela de música Orff y está por concluir la licenciatura de Educación Musical,
en la Universidad Veracruzana.

Barbacci, Rodolfo. (1965). Educación de la memoria musical. Argentina:


Editorial Ricordi.

El libro que aquí se reseña, presenta las siguientes particularidades: Edición 01


por la editorial Ricordi, publicado en el año 1965. Clasificación: Música y
contiene 133 páginas. El libro contiene 4 temas centrales donde se abordan
los orígenes de la memoria, cómo funciona, cómo mantenerla saludable y los
tipos de memoria que existen.

A modo de introducción el autor menciona que la educación de la memoria


musical debe comenzar desde las primeras clases de música debido a que
contribuye a que el alumno desde un principio vaya adecuándose a este
entrenamiento y pueda desarrollarse musicalmente, además que mejora su
atención en lo que está estudiando, evitando que a futuro se enfrente con
mayores dificultades como no comprender lo que aprende, no tener la
capacidad de tocar un recital de memoria, etcétera.

Necesidad musical de la memoria

Para el autor, desarrollar la memoria musical, puede significar tener ventaja en


el ámbito profesional ya que por ejemplo un director de orquesta al tener
memorizada la obra que está dirigiendo puede tener una mayor conexión con
los músicos o un cantante puede expresar mejor el texto de una pieza musical
y así transmitir la emoción a su público a diferencia de si dependiera de la
partitura, que de cierta forma crea una barrera .

El oyente que escucha a un solista que actúa con música a la vista, experimenta
reducida admiración y placer en comparación de lo que goza cuando aquel ejecuta

libremente de memoria (Barbacci, 1965: p.19).

En la época del renacimiento, tocar de memoria era visto como un “alarde”


pues no sé veía la necesidad de memorizar una obra pudiendo leer la partitura;
actualmente pasa lo contrario ya que el músico no necesariamente tiene que
tocar leyendo la música. Barbacci, dice que:

La memoria musical se presenta imprescindible para toda clase de ejecución, desde la


simple lectura a primera vista… hasta el perfeccionamiento que el estudio prepara en
cuanto incorpora, precisamente por el mecanismo de la memoria, lo que la inteligencia,
el discernimiento, los ensayos y repeticiones, han preparado para quedar grabados en
la mente. (Barbacci, 1965: p.24)

Mecanismo de la memoria

El autor menciona que la memoria musical se fortalece cuando enfocamos


nuestra atención en un objetivo fijo y a su vez la atención ayuda a mejorar la
concentración. En este apartado Barbacci comienza proponiendo algunas
estrategias para comenzar a ejercitar la memoria musical, y establece cuatro
etapas para la memorización de un fragmento musical que son: Impresión,
recepción, comprensión y retención, las cuales compara con el proceso de la
fotografía donde la impresión equivale a la imagen (lo que se va a fotografiar),
la percepción, que es la acción de tomar la fotografía, la comprensión es el
revelado y la retención es el archivo de la foto.

La memoria musical se clasifica en cuatro grados que son: memoria retentiva,


es decir, recordar sin necesidad de razonar; memoria reproductiva, que es
cuando comienzan a fluir las ideas; la memoria constructiva, es cuando
empiezan a proponerse nuevas ideas y la memoria creadora que es cuando lo
percibido y retenido se reelabora y transforma en la mente. Existen también,
métodos para la memoria musical que son: el racional, por medio del cual se
analiza, clasifica y relaciona la información; el mecánico, que es el que tras la
repetición constante permite memorizar la información, y el artificial que es en
el cual se usa la asociación para relacionar la información.

El autor también habla sobre la importancia de crear buenos hábitos de estudio


para así evitar fracasar en el proceso de memorización, pues no basta con solo
repetir muchas veces lo que estamos practicando, sino que hay que ser más
analíticos, y hacer un buen uso de las memorias musicales dejando que cada
una de ellas trabaje el aspecto musical que le corresponde. Como parte de los
buenos hábitos de estudio, también es importante ir tomando pequeños
descansos para no sobre cargar a la memoria, dormir bien, alimentarse bien y
procurar estudiar de día y si se estudia por la noche, no consumir estimulantes.
Barbacci también menciona en esta parte, una serie de ejercicios de
respiración y atención que ayudan a mejorar el proceso de estudio.

Individualización y desarrollo de las memorias musculares

Todo órgano sensorial tiene su memoria que depende de las células y del entrenamiento
nervioso… cada sentido tiene y desarrolla su memoria conforma a la necesidad-interés del
individuo. La práctica musical, incluye siete tipos de memoria: muscular y táctil, auditiva
interna y externa, visual, nominal, rítmica, analítica y emocional y para poder desarrollarlas
eficientemente hay que individualizarlas (Barbacci, 1965: p.57).

Para ello, el autor las divide en: memoria muscular y táctil; auditiva interna y
externa; visual; nominal; rítmica; analítica o intelectual y emocional.

La memoria muscular y táctil es la que nos permite realizar los movimientos


necesarios para ejecutar un instrumento, en este tipo de memoria no se piensa
en esos movimientos, es aquí donde se trabaja la técnica que es el elemento
principal del estudio del instrumento. Esta memoria debe trabajarse con
cuidado para no repetir errores al tocar y entorpecer el avance del estudiante.

La memoria auditiva es la más importante ya que es la que nos permite


recordar los sonidos y sus características como son la altura, el timbreo la
intensidad, esta memoria debe trabajarse desde las primeras clases de música,
poniendo atención a todo lo que escucha para ir discriminando poco a poco las
diferencias entre los sonidos y ser autocrítico de su propio sonido. Aquí el autor
nos habla de tres etapas para educar el oído que son: oír, que es cuando
recibimos de manera física las ondas sonoras (altura, timbre e intensidad);
escuchar, que es cuando disfrutamos de una melodía, la instrumentación, la
armonía, etc.; y relacionar, que es cuando aplicamos la inteligencia y la cultura
al proceso de audición.

La memoria visual nos da la capacidad de recordar lo que vemos como por


ejemplo la notación musical, la lectura a primera vista, poder recordar alguna
lección vista en un libro, las anotaciones que hacemos en nuestras partituras
para recordar alguna indicación o corrección, etcétera.

La memoria nominal es la que nos ayuda a verbalizar la música, por ejemplo,


los nombres de las notas. Este tipo de memoria ayuda a reforzar la memoria
auditiva, por ejemplo, los pianistas la desarrollan de mejor manera que otros
instrumentos, ya que todo el tiempo está anticipando las notas antes de
ejecutar los sonidos.

La memoria rítmica es la que se desarrolla a temprana edad, y que proviene


desde los pueblos primitivos. Esta memoria la desarrollan con mayor facilidad
los percusionistas, directores de orquesta, bailarines y es la más básica de las
memorias ya que está implícito en nuestro propio movimiento natural. Esta
memoria trabaja en conjunto con la memoria muscular y la auditiva, pero
también la analítica y nominal.

La memoria analítica es:

La más intelectual de las memorias musicales. Consiste en el análisis y retención de lo


que se ha leído. Este análisis será tanto más efectivo cuanta más cultura técnica posea
el ejecutante; pero aún un principiante, ayudado, puede analizar en función de
memorización y obtener de ellos una buena ayuda para la memorización de la obra.
(Barbacci, 1965: p. 103)

La memoria emotiva es la que nos permite desarrollar nuestra interpretación


del repertorio que estemos ejecutando, qué tanta emoción le imprimimos a la
pieza que estamos tocando.

Al final del libro, el autor recomienda algunas formas de trabajar todas estas
memorias musicales haciendo énfasis en adecuar las formas de trabajo para
cada edad.
El estudiar cada una de las memorias de forma separada, puede impactar de
manera positiva en el aprendizaje de los alumnos de música ya que pueden
desarrollar mejores habilidades para ejecutar, interpretar, leer música, mejorar
el oído y una buena memoria. La propuesta que nos presenta el autor en este
libro puede ser de gran ayuda para los docentes de música, pues muchas
veces el enfoque de las clases se centra en la técnica o en la ejecución, sin
analizar de manera consciente y profunda qué es lo que está sucediendo
durante el aprendizaje, por qué fallan los alumnos, por qué no logran
memorizar su repertorio o mejorar su solfeo, entre otras. A partir de los
ejercicios y consejos que da Barbacci el profesor de música puede crear sus
propias estrategias que contribuyan al mejoramiento en el desarrollo musical de
sus estudiantes.

Barbacci, Rodolfo 1911- 1972 Argentina, Buenos Aires

Arpista, pianista, musicólogo, estudió violonchelo, armonía y composición con


Ettore Pozzoli en Milán Italia, estudió arpa con Augusto Sebastiani y Cayetano
Troiani en Buenos Aires, 1937 fundó la Revista Musical Argentina en Buenos
Aires, 1939 arpista de la Orquesta Sinfónica Nacional en Lima Perú, enseñó
piano, solfeo, historia de la música peruana y arpa tanto en forma privada como
en la Academia Nacional Alcedo en Lima, 1939 fundador de la Revista Musical
Peruana.

Otras publicaciones del autor:

Libros:

Barbacci, R., & Barbacci, R. (1937). El metrónomo; Índices acústicos. Buenos


Aires: [s.n.].

Barbacci, R. (1939). La "Nerviosidad" de los músicos. Lima: Ed. G. Brandes y


Co.

Barbacci, R. (1940). El cruce de manos en la ejecución pianística. G. Brandes y


cía..

Barbacci, R. (1943. Gimnasia para instrumentistas. Lima: Casa Mozart


Barbacci, R. (1948). La enseñanza del piano. Lima: Casa Mozart.

Barbacci, R. (1963). 1.550 anécdotas musicales. Lima: Casa Mozart.

Barbacci, R. (1969). El tiempo musical. Lima: Casa Mozart.

Barbacci, R. (1972). El transporte musical. Lima: Casa Mozart.

Artículos:

Barbacci, Rodolfo (1949) "Documentación para la historia de la música


Argentina: (1801-1885)". En: Revista de Estudios Musicales, Año 1, No.
2, p. 11-64

Barbacci, R. (1949). Apuntes para un diccionario biográfico musical peruano.


Lima: FENIX.

Barbacci, R. (1950). En nombre de Bach. Revista Musical Chilena, 6(38), p. 95-


99

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