A5 Enfoque Analogico
A5 Enfoque Analogico
A5 Enfoque Analogico
ENFOQUE
Un objetivo provisto de mecanismo de enfoque ofrece dos ventajas importantes: la posibilidad de enfocar a distancias más cortas
que los de foco fijo y la de enfocar sólo ciertos planos de una escena para destacarlos del resto y evitar la confusión.
Las cámaras más rudimentarias no poseen sistema de enfoque y su objetivo suele venir ya pre-enfocado a la distancia hiperfocal.
En los modelos ligeramente más "sofisticados", el anillo de enfoque puede estar sólo dividido en símbolos que denotan paisajes,
fotografías de grupos y primeros planos.
En las cámaras de mayor calidad, el objetivo lleva una doble escala de distancias graduada en metros y pies; de esta manera,
muchas veces puede enfocarse el sujeto sin utilizar el visor.
Como ayuda al enfoque muchas cámaras incorporan a parte, o en del visor, alguno de los siguientes
sistemas de enfoque:
1. Enfoque por telémetro:
El ojo percibe dos imágenes: procedentes una de un semiespejo móvil conectado al anillo de enfoque del objetivo y la otra de un
visor óptico con lo que, por el ocular, se observa una imagen doble.
Este mecanismo, acoplado a un visor óptico, lo montan las buenas cámaras no réflex de 35 mm., como, las legendarias Leicas.
Su precisión, y claridad es excelente.
Es el mayoritariamente empleado en todas las cámaras réflex, se encuentra en la parte central de la pantalla. Consiste en dos
prismas en forma de cuña cilíndrica situados en el centro de la pantalla de enfoque. Cuando un objeto se halla ligeramente
desenfocado, las rectas que atraviesan la línea de unión de las dos cuñas aparecen quebradas y desplazadas (ver imagen
izquierda).
Al enfocar, las líneas del objeto se aproximan hasta recomponer la figura.
3. Anillo de microprismas:
Aparece independiente o rodeando el círculo de los prismas de imagen partida. Consiste en un área de pequeñísimos prismas en
forma de pirámide achatada vistos desde su vértice superior. Cuando un objeto está enfocado, los puntos que componen su imagen
aparecen nítidamente; al desenfocarlos, cada punto se decompone en otros cuatro resultando una imagen descompuesta y
borrosa.
Aunque es el sistema más usado por ser bastante preciso y económico, tiene el problema de que el anillo de microprismas y sobre
todo el círculo de imagen partida llegan a oscurecerse cuando los rayos de luz divergen desde el objetivo fuera de cierto rango de
distancia, como es el caso del uso de grandes teleobjetivos o en macrofotografía. En estos casos, siempre que la cámara permita el
cambio de pantallas, suele cambiarse por una simple pantalla de campo mate.
Consiste simplemente en una lámina de vidrio deslustrada sobre la que se observa la imagen formada por el objetivo; a veces
llevan una pequeña lupa incorporada para amplificar el enfoque. Este es el sistema más usado en medio y gran formato.
En las cámaras SLR suele aparecer como sistema estándar incorporando en su centro los dos sistemas anteriores.
En los SLR profesionales de calidad, suele existir media docena de pantallas intercambiables con cuadrículas, lentes de Fresnel,
micrómetros, etc.
En la figura izquierda puede verse el funcionamiento de una pantalla de enfoque basada en un lente de Fresnel.
Sistemas autofoco:
Actualmente la mayor parte de las cámaras compactas y réflex, simplifican la tarea de enfoque con alguno de los siguientes
sistemas autofoco:
1. COMPARACIÓN DE CONTRASTES:
Es el sistema más utilizado; su funcionamiento es parecido al de telémetro. Un panel fotosensible recoge dos imágenes, una
procedente del visor y otra de un espejo móvil acoplado al motor del enfoque.
El objetivo comienza a enfocar desde el infinito y detiene el motor cuando el contraste de luces y sobras coincide en las dos
imágenes.
Hoy en día el panel fotosensible permite enfocar con un nivel de luz inferior al que necesita el ojo humano.
Este sistema suele fallar al enfocar temas de bajo contraste (paredes y objetos lisos), con motivos rítmicos y repetitivos (rejillas,
objetos tramados) , o con poca iluminación.
2. INFRARROJO
Este sistema emite un haz de rayos infrarrojos que rebotan el objeto y son recogidos por un espejo similar al anterior que, detiene
el enfoque, cuando detecta una señal de intensidad máxima.
El sistema funciona bien con o sin luz y no se confunde con motivos poco contrastado o rítmicos, aunque si fotografiamos a través
de un cristal puede confundir éste con el tema principal. Se utiliza frecuentemente acoplado a un flash, como elemento de apoyo al
sistema anterior.
3. ULTRASONIDOS: