Lectura No 2 Capitulo Xxii La Flexibilizacion Del Est
Lectura No 2 Capitulo Xxii La Flexibilizacion Del Est
Lectura No 2 Capitulo Xxii La Flexibilizacion Del Est
1. INTRODUCCIÓN
Es así entonces, como los estudiosos del tema han identificado estos criterios como
estándares probatorios, teniendo diferentes bases en las distintas ramas del derecho.
Al pasar el tiempo, y en los distintos países, existía una problemática por la falta de
identificación conceptual del estándar probatorio y esto se debe a que, era una expresión sin
un contenido específico y que no está diseñada para cumplir con la función para la que
había sido diseñada.
En la actualidad, los estándares probatorios representan las reglas probatorias bajo las
cuales el juez tendrá que adoptar la decisión de la Litis.
2. ESTANDAR PROBATORIO
El estándar de prueba puede ser definido como una “… herramienta legal que contiene
los criterios que indican cuando se ha conseguido la prueba de un hecho”1, vale decir,
establece el nivel de suficiencia probatoria requerida para que el juez se encuentre
legitimado a expresar que un hecho litigioso está probado2.
1. Reyes, El juicio como herramienta epistemológica: el rol de la verdad en el proceso. Anuario de Filosofía
Jurídica y Social, 2012.
2. Reyes, Estándares De Prueba y “Moral Hazard”. http://www.catedradeculturajuridica.com/biblioteca/
items/1613_A/Sebastian_Reyes_Molina.pdf.
3. Taruffo, Tres observaciones sobre por qué un estándar de prueba subjetivo y ambiguo no es un estándar.
http:// www.biblioteca.org.ar/libros/140957.pdf.
4. López Ojeda, Proceso, Verdad, Valoración Y Estándar Probatorio. https://www.academia.edu/34677647/_
PROCESO_VERDAD_VALORACI%C3%93N_Y_EST%C3%81NDAR_PROBATORIO.
5. Cumiz y Dei Vecchi, Estándares de prueba y ponderación de derechos en la Corte Penal Internacional.
Revista InDret, Revista para análisis del derecho. http://www.indret.com/pdf/1460-.pdf.
la culpabilidad del imputado es “razonable” o “no razonable” se resuelven en tautologías o
círculos viciosos, que en ocasiones rayan en lo ridículo o en la insensatez”6.
La Equidad deviene del latín Equitas, el cual traduce “igualdad de ánimo”. El principio
de
la equidad busca hallar una solución justa para el conflicto puesto en conocimiento.
6. Ibídem.
7. Stein, El conocimiento privado del juez: investigaciones sobre el derecho probatorio en ambos procesos.
8. Sánchez, G y otros, Flexibilización probatoria y equidad: propuestas para la justicia del posconflicto, Revista
Virtual VIeI Via Inveniendi et Iudicandi, https://www.Dialnet-FlexibilizacionProbatoriaYEquidad-6860276.pdf.
Mas adelante en sentencia C-1547 de 2000, refirió
Así las cosas, al haber aceptado la competencia de la Corte Interamericana, significa que
el Estado Colombiano quedó sujeto a que su ordenamiento jurídico debe ceñirse y ajustarse
a lo establecido por ella salvaguardando los derechos humanos.
A raíz de los conflictos y de las circunstancias fácticas, los casos que han sido sometidos a
la Corte han sido analizados a la luz de estándares probatorios flexibles en donde las
víctimas no quedan sometidas a un régimen probatorio donde implique que son ellos los
que tienen el control de los medios prueba, sino que corresponde a los jueces y al Estado
esclarecer lo ocurrido.
La Corte IDH en el Caso Cantos vs. Argentina, la Corte precisó que para un tribunal
internacional, los criterios de valoración de la prueba son menos formales que en los
sistemas legales internos, y que dicho criterio es especialmente válido en relación con los
tribunales internacionales de derechos humanos los cuales disponen, para efectos de la
determinación
En el Caso Mapiripán vs. Colombia10, La Corte IDH determinó que los tribunales
internacionales gozan de una amplia potestad para apreciar y valorar las pruebas de acuerdo
con las reglas de la sana crítica, la lógica y la experiencia, con el fin de evitar adoptar una
determinación demasiado rígida del quantum probatorio necesario para justificar un fallo
(Corte IDH, 2005)11.
En el Caso Espinoza Gonzáles vs. Perú 12 explicó la Corte IDH que ha conocido de
diversos contextos históricos, sociales y políticos que permitieron situar los hechos
alegados como violatorios de la Convención Americana en el marco de las circunstancias
específicas en que ocurrieron. En algunos casos el contexto posibilitó la caracterización de
los hechos como parte de un patrón sistemático de violaciones a los derechos humanos,
como una práctica aplicada o tolerada por el Estado, o como parte de ataques masivos y
sistemáticos o generalizados hacia algún sector de la población.
En segunda medida, el contexto sirvió para acreditar que la zona era de alta influencia
paramilitar, que los campesinos desaparecidos se dedicaban a prácticas agrícolas y que
mediante esta actividad económica contribuían al sostenimiento de sus familias. Con base
en esto, la Corte IDH tasa el perjuicio patrimonial haciendo uso de la equidad para liquidar
la indemnización correspondiente a cada víctima y allegado del desaparecido (Corte IDH,
2006).
13. Jorge Iván Peña Ayazo; Escuela Judicial “Rodrigo Lara Bonilla”; Prueba judicial, análisis y valoración; 2008.
14. Sentencia del Consejo de Estado; Radicación número: 63001-23-31-000-2002-01058-01(38804);
Magistrada ponente: Marta Nubia Velásquez Rico.
El Consejo de Estado en materia de derechos humanos o violaciones al derecho
internacional humanitario, desde el año de 1993 ha introducido en su jurisprudencia
el concepto de flexibilización del estándar probatorio con el ánimo de poder reparar
integralmente a víctimas de violación de derechos humanos bajo la óptica del principio de
verdad, justicia y reparación desde la aplicación del principio de equidad. Con sentencia de
la Magistrada Stella Conto Díaz Del Castillo, se mencionó:
Una vez comprobada fehacientemente la existencia del daño antijurídico –se destaca,
para fijar el quantum de la indemnización debe analizarse el caso concreto a la luz del
principio de equidad. Y, siempre que esto suceda de manera razonable, proporcionada, así
como suficientemente sustentada, ha de tomarse en cuenta la prueba circunstancial y a ella
deben sumarse, si es el caso, los indicios y las presunciones en la medida “que de [su
aplicación] pueda inferirse conclusiones consistentes sobre los hechos”. Todo lo anterior
bajo estricta consideración de los principios de buena fe, favor debilis y efectividad de la
indemnización integral. Con todo, una muestra ilustrativa de que la aplicación del
principio de equidad no puede hacerse equiparable a un fallo sin pruebas es lo
consignado en la sentencia en la que se sienta un precedente en relación con la condena de
perjuicios materiales en equidad y, en consecuencia, se flexibiliza el estándar
probatorio. (…) Puestas las cosas en los términos anteriormente señalados y tratándose,
como en el presente caso, del deber de reparar integralmente a víctimas de graves
vulneraciones de derechos humanos y/o del derecho internacional humanitario, sean
directas o indirectas, resulta indispensable aplicar el principio de equidad y, en
consecuencia, flexibilizar el estándar probatorio. Es que las víctimas de graves violaciones
de derechos humanos, en un caso como el presente –en el que, además, como lo revelan los
hechos y lo reconoce la sentencia de primera instancia, las autoridades en lugar de facilitar
la búsqueda del desaparecido entorpecieron las labores de su madre y hermanos–, ocupan el
lado más débil de la balanza así que, de conformidad con lo ordenado por el artículo 13
superior, requieren mayor soporte y protección. Se reitera en este lugar lo ya afirmado
arriba y es que en estos casos los principios de verdad, de justicia y de reparación integral
han sido catalogados como derechos fundamentales que rigen en virtud del ius cogens, por
lo que no cabe alegar obstáculos de orden normativo interno para efectos de dificultar su
realización.
7.4.1. Por tal razón, el juez administrativo, consciente de esa inexorable realidad,
deberá acudir a criterios flexibles, privilegiar la valoración de medios de prueba
indirectos e inferencias lógicas guiadas por las máximas de la experiencia, a efectos de
reconstruir la verdad histórica de los hechos y lograr garantizar los derechos
fundamentales a la verdad, justicia y reparación de las personas afectadas.
15. En Colombia la violencia desencadenada por el conflicto armado interno se ha concentrado históricamente
en las zonas rurales. Ver: Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Colombia Rural, razones para la
esperanza, Informe Nacional de Desarrollo Humano, Bogotá, INDH-PNUD, 2011, p. 231; Centro Nacional de
Memoria Histórica, ¡Basta ya! Colombia: memorias de guerra y dignidad, Bogotá, 2013, p. 323 y s; BERRY,
Albert, “Aspectos jurídicos, políticos y económicos de la tragedia de la Colombia rural de las últimas décadas:
hipótesis para el análisis”, en Tierra, Guerra y Estado, Revista Estudios Socio-Jurídicos, n.° 1, volumen 16, junio
del 2014, Universidad del Rosario, Bogotá, pp. 7-23.
16. La Subsección B de la Sección Tercera en sentencia del 27 de septiembre del 2013, rad. 19939, M.P.
Stella Conto Díaz del Castillo, al resolver un caso de graves violaciones a los derechos humanos e infracciones al
Derecho Internacional Humanitario acudió a la flexibilización de los estándares probatorios en materia de prueba
documental: “Puestas las cosas en los términos anteriormente señalados y tratándose, como en el presente caso, del
deber de reparar integralmente a víctimas de graves vulneraciones de derechos humanos y/o del derecho
internacional humanitario, sean directas o indirectas, resulta indispensable aplicar el principio de equidad y, en
consecuencia, flexibilizar el
Así las cosas, se observa con claridad que la jurisprudencia administrativa construye un
estándar probatorio desde la óptica de la probabilidad de verdad abandonando la teoría de la
certeza probatoria, permitiéndole al juez que a través de una inferencia lógica razonable se
reconstruya la verdad de los hechos y con ello se llegue a dar por probados.
Puede ser definida desde una perspectiva negativa - lo que no es-; esa probabilidad que
prevalece no podrá ser un ponderado probabilístico, que es el principal yerro en el que se
incurre cuando se trata de asimilar el concepto. Debe, en su lugar, afirmarse que se trata de
un proceso intelectivo del juez que se identifica con una construcción de inferencias
lógicas, que obligan a que el funcionario justifique la razón por la cual privilegia ciertas
descripciones de los hechos, lo que permite controlar ese proceso argumentativo, además,
por la elemental razón de que no podrá partirse de conjeturas, sino de hechos claramente
probados para arribar a la probabilidad lógica prevaleciente
De lo anterior surge el deber del juez administrativo acudir a criterios flexibles y privilegiar
la valoración de los medios de prueba indirectos, a fin de alcanzar la verdad histórica de los
hechos y lograr la satisfacción de los derechos fundamentales de las víctimas. En el
entender del alto tribunal, y acogiendo la postura de la Corte IDH, es el Estado el que tiene
el control de los medios de prueba para esclarecer lo ocurrido.
estándar probatorio. Es que las víctimas de graves violaciones de derechos humanos, en un caso como el presente
–en el que, además, como lo revelan los hechos y lo reconoce la sentencia de primera instancia, las autoridades en
lugar de facilitar la búsqueda del desaparecido entorpecieron las labores de su madre y hermanos–, ocupan el lado
más débil de la balanza así que, de conformidad con lo ordenado por el artículo 13 superior, requieren mayor
soporte y protección. Se reitera en este lugar lo ya afirmado arriba y es que en estos casos los principios de verdad,
de justicia y de reparación integral han sido catalogados como derechos fundamentales que rigen en virtud del ius
cogens, por lo que no cabe alegar obstáculos de orden normativo interno para efectos de dificultar su realización”.
17. Por todas, Cfr.: Consejo de Estado, Sección Tercera, sentencia del 16 de agosto de 2006, radicado 14.957,
C.P. Mauricio Fajardo Gómez.
18 Colombia, Consejo De Estado Sala De Lo Contencioso Administrativo Sección Tercera, Subsección A,
Consejera Ponente: Marta Nubia Velásquez Rico Bogotá, D.C., catorce (14) de septiembre de dos mil dieciséis
(2016), Radicación número: 63001-23-31-000-2002-01058-01(38804).
4. CONCLUSIONES
Así mismo, atiende las realidades de un país en donde el conflicto armado ha incidido
en las poblaciones más vulnerables, como mujeres, niños y niñas, ancianos y campesinos,
entendiendo así que existen carencias de pruebas por el entorno histórico – social el cual
ha vivido Colombia, y que tal vez en donde de una u otra forma la totalidad de medios que
hoy en día se contemplan no son suficientes o tal vez los existentes no conllevan a la
justicia material del caso.
5. BIBLIOGRAFÍA
● CASTRO, Juan José, Alcance del principio iura novit curia en la responsabilidad del
Estado colombiano. Via Inveniendi et Iudicandi, 13(1), 169-187. Doi: http://dx.doi.
org/10.15332/ s1909-0528.2018.0001.06 (2018).
● PEÑA, Jairo Ivan, La Prueba Judicial, Escuela Judicial Rodrigo Lara Bonilla, 2008.
● Sentencia, Caso Espinoza Gonzáles vs. Perú, Corte Interamericana de Derechos Hu-
manos, 2014.