La Fenomenología Del Espíritu
La Fenomenología Del Espíritu
La Fenomenología Del Espíritu
En este contexto, Hegel propone entender la verdad y lo absoluto como un resultado a través
de un devenir que es un proceso de mediación (ver segunda nota de esta serie), propio de la
Razón, que transforma la oposición entre sustancia y sujeto en el proceso de vuelta a su
unidad, a través de la reflexión filosófica.
Acorde a sus simpatías por la Revolución Francesa, Hegel considera que el espíritu de los
tiempos modernos impone a la filosofía la tarea de superar cualquier saber de tipo “esotérico”
(sólo apto para iniciados o genios) y proveer a la consciencia común la escalerilla que le
permita elevarse hasta la ciencia.
Por este motivo, considera que el conocimiento histórico y el matemático no se adaptan a las
necesidades conceptuales de la filosofía, uno por ser poco conceptual y el otro por ser formal.
Hegel reivindica el Entendimiento (noción tomada de Kant) como facultad de conocer el objeto
en sus determinaciones parciales pero cuestiona el uso arbitrario de la estructura de tres
términos planteada por Kant en su tabla de categorías de la Analítica Trascendental. Kant
señalaba que en relación con los criterios de cantidad, cualidad, relación y modo,
correspondían tres tipos de juicios y tres tipos de categorías. Esta estructura de tres términos
fue retomada por Fichte en su Doctrina de la Ciencia, como tesis, antítesis y síntesis, para dar
una explicación de la relación entre el sujeto activo y el mundo objetivo y su unidad. Para
Hegel, esta triplicidad era utilizada por los schellingianos como un esquema externo al objeto y
en el cual había que encajar los contenidos a la fuerza.
A través de esta dialéctica de certeza y verdad, Hegel traza un recorrido que abarca de los
capítulos I al V la fenomenología de la conciencia propiamente dicha y en los capítulos VI, VII y
VIII una fenomenología del espíritu en el sentido hegeliano del vocablo, es decir como sujeto
colectivo mistificado, protagonista de la historia, la cultura, la religión y el saber absoluto.