La Navidad Según El Evangelio de Mateo
La Navidad Según El Evangelio de Mateo
La Navidad Según El Evangelio de Mateo
"Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y
abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra." Mateo 2:11
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imperio de Emanuel, "Dios con nosotros" (Mat.1:23) o la hegemonía de Jesús, quien
"salvará al pueblo de su pecado" (Mat.1:21).
El capítulo 2 presenta la narración del viaje de los sabios de Oriente, un relato
pintoresco e impactante, que ha quedado para siempre fijado como la quintaesencia de la
Navidad, en todo el mundo cristiano. ¿Cuál es su significado? ¿Qué enseña? ¿Cuáles
son las relaciones con el relato del capítulo uno?
Es una descripción breve, que permite leer entre líneas los detalles implícitos. Los
"magos" eran sabios, estudiosos de los astros y de los escritos. La tradición dice que eran
reyes. "Eran de alta alcurnia, educados, ricos e influyentes. Eran los filósofos, los
consejeros del reino, instruidos en toda la sabiduría del antiguo Cercano Oriente. Los
"magos" que vinieron a buscar al niño Jesús no eran idólatras, y se caracterizaban por ser
personas rectas e íntegras" (5CBA, ). Al descubrir una nueva estrella en el firmamento,
investigaron en los rollos descubriendo las profecías sobre el Mesías. Elena de White
menciona que "en sueños recibieron la indicación de ir en busca del Príncipe recién
nacido" (DTG 42). No se sabe con exactitud de que parte del Oriente provenían, el CBA
sugiere que podrían haber viajado unos 650 kilómetros. Considerando que llevaban
tesoros y que eran personas encumbradas, deberían haber venido con una importante
custodia, lo que habría denotado una expedición numerosa. Ese dato explicaría porque
causó tanta conmoción en Jerusalén la aparición de estos exóticos personajes.
Los sabios de Jerusalén conocían las profecías bíblicas a la perfección y dijeron con
exactitud donde nacería el Mesías. Pero esos sabios eran burócratas al servicio del
poder. No manifestaron ningún interés en Jesús, a diferencia de los sabios de oriente, que
no pertenecían al pueblo de Dios, pero reconocieron la importancia del nacimiento del
Mesías. Como dijo Juan: "A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron" (Jn.1:11). El relato
de los magos parece encerrar una fuerte ironía, quienes deberían haber alertado y
enseñado las profecías al pueblo, no lo hicieron y fueron otros, de lejanas latitudes los
encargados de anunciar el nacimiento de Jesús.
Hay varios paralelismos interesantes entre los dos relatos de la navidad de Mateo. Uno
es el tema de la incertidumbre y la acción de movimientos opositores. En el primer
capítulo la narración de las genealogías presenta momentos donde se interrumpe la
monótona sucesión de "fulano engendró a sultano" como si se dudara la continuidad del
proceso (ej., "Judá engendró de Tamar a Fares y a Zara, Fares a Esrom"), hasta recuperar la línea legítima
de la herencia. Pero la incertidumbre mayor es la decisión de José de no casarse con María, pensando que
había adulterado. La intervención providencial de un ángel explica la concepción espiritual de María para
finalmente llegar al cumplimiento del feliz nacimiento. En el relato de los magos, también ocurre, que
próximo al desenlace final, al llegar a Jerusalén, aparecen las fuerzas opositoras procurando impedir alcanzar
al pesebre. Los magos llegaron a Jerusalén con la expectativa de que todos estarían conociendo y celebrando
el nacimiento del niño rey, sufriendo una cruel decepción al observar que la gente desconocía el magno
acontecimiento e incluso Herodes, astutamente quiso engañarlos. Ese momento de desconcierto fue superado
con la aparición providencial de la estrella luminosa de los ángeles que los guiaron hasta Belén, alcanzando
el deseado destino con toda felicidad, adorando al niño rey.
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Es evidente el paralelismo entre los dos relatos de Mateo, ya que ambos constituyen recorridos, el
primero una larga travesía en el tiempo, en tanto, el segundo una extensa marcha por la geografía del oriente,
ambos con el común objetivo de alcanzar el nacimiento de Jesús. Las trayectorias de ambos periplos tuvieron
dificultades, pero finalmente consumar el fin deseado, alcanzar al redentor del mundo en el inicio del
proyecto más importante de Dios, el plan de la redención del mundo.
Para Mateo la Navidad es el hito más significativo de la historia, el pleno cumplimiento de las profecías
milenarios que fueron encadenándose prodigiosamente para alcanzar ese momento puntual y pletórico
cuando se quebró la historia, finalizando el pasado e iniciándose el futuro glorioso de la redención.