TP Psicopatología

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Profesora de Educación especial: Sordos e Hipoacúsicos

Año: 2019

Curso: 4°

Estudiante: Urbieta Agostina. A

Docente: Andrade Juan José

Materia: Psocipatología

Trabajo práctico n° 1

1. ¿Cuáles son según Aberastury los cuatro duelos en la adolescencia?;


2. ¿Cómo se puede definir la adolescencia?;
3. ¿Por qué Knobel se refiere a un síndrome normal en la adolescencia?;
4. ¿Cuáles son los diez aspectos que comprenden el síndrome en la adolescencia?

1. Aberastury habla de distintos duelos fundamentales que atraviesa el adolescente:


 Duelo por el cuerpo infantil perdido: se trata de la base biológica de la
adolescencia, que se impone al individuo no pocas veces tiene que
sentir sus cambios como algo externo frente a lo cual se encuentra
como espectador impotente de lo que ocurre en su propio organismo;
 Duelo por el rol y la identidad infantiles: este duelo lo obliga a renunciar
a la dependencia y a una aceptación de responsabilidades que muchas
veces desconocen;
 Duelo por los padres de la infancia: en ellos, el adolescente sigue
buscando el refugio y la protección, situación que se ve complicada por
la propia actitud de sus padres, que también deben aceptar su
envejecimiento;
 Duelo por la bisexualidad infantil también perdida: estos duelos,
verdaderas pérdidas de personalidad van acompañados por todo el
complejo psicodinámico del duelo normal y en ocasiones, transitoria y
fugazmente, adquieren las características del duelo patológico.

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2. El adolescente presenta una especial inestabilidad para asimilar los impactos
proyectivos de padres, hermanos, amigos y de toda la sociedad. Así vemos al
adolescente en constante conflicto, en lucha, en posición marginal frente a un
mundo que corta y reprime.

Este autor, define a la adolescencia como “la etapa de la vida durante la cual el
individuo busca establecer su identidad adulta, apoyándose en las primeras
relaciones objetales-parentales internalizadas y verificando la realidad que el
medio social le ofrece, mediante el uso de elementos biofísicos en desarrollo a su
disposición y que a su vez tienden a la estabilidad de la personalidad en un plano
genital, lo que sólo es posible si se hace el duelo por la identidad infantil”. El
proceso de duelo es básico y fundamental, entendiendo que la estabilización de la
personalidad no se logra sin pasar por un cierto grado de conducta “patológica”.

3. Knobel habla de esta situación del adolescente frente a su realización evolutiva


como “síndrome de la adolescencia normal”. Este síndrome producto de la propia
situación evolutiva, surge de la interacción del individuo con el medio.

El mundo de los adultos, como los padres no acepta las fluctuaciones


imprevistas del adolescente sin conmoverse, ya que reedita en los adultos
ansiedades básicas que habían logrado controlarse hasta cierto punto. El
adolescente atraviesa por desequilibrios e inestabilidad extremas de acuerdo con
lo que conocemos de él. En nuestro medio cultural, nos muestra períodos de
elación, de ensimismamiento, alternando con audacia, timidez, incoordinación,
urgencia, desinterés, que se suceden o son concomitantes con conflictos afectivos.
La mayor o menor anormalidad de este síndrome normal, se deberá, en gran parte,
a los procesos de identificación y de duelo que haya podido realizar el adolescente.
En la medida en que haya elaborado los duelos, que son en última instancia los que
llevan a la identificación, el adolescente verá su mundo interno mejor fortificado y
entonces, esta normal anormalidad será menos conflictiva y por lo tanto menos
perturbadora.

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4. El síndrome de adolescencia es comprendido por distintos aspectos:
 Búsqueda de sí mismo y de la identidad: el niño entra en la adolescencia
con dificultades, conflictos e incertidumbres que se magnifican en este
momento vital, para salir luego a la madurez estabilizada con determinado
carácter y personalidad adultos. Se logra lo que Erikson ha denominado
como una entidad yoica. El cuerpo y el esquema corporal son dos variables
íntimamente interrelacionadas que no deben desconocerse en la ecuación
del proceso de definición del sí mismo y de la identidad, tal es así que el
esquema corporal es una resultante intrapsíquica de la realidad del sujeto,
es decir, es la representación mental que el sujeto tiene de su propio
cuerpo como consecuencia de sus experiencias en continua evolución;
 Tendencia grupal: hay un proceso de sobreidentificación masiva, en donde
todos se identifican con cada uno. Este fenómeno grupal adquiere una
importancia trascendental ya que se transfiere al grupo gran parte de la
dependencia que anteriormente se mantenían con la estructura familiar y
con los padres en especial. Este fenómeno grupal facilita la conducta
psicopática normal en el adolescente.
 Necesidad de intelectualizar y fantasear: esta es una de las formas típicas
del pensamiento como adolescente. El fantasear y el intelectualizar, sirven
como mecanismos defensivos frente a estas situaciones de pérdidas tan
dolorosas. Surgen entonces, las grandes teorías filosóficas los movimientos
políticos, las ideas de salvar a la humanidad. También es entonces cuando
el adolescente comienza a escribir versos, novelas, cuentos y se dedica a
actividades literarias, artísticas;
 Crisis religiosas que pueden ir del ateísmo al misticismo: en este aspecto, se
observa que el adolescente puede manifestarse como un ateo exacerbado
o como un místico muy fervoroso, como situaciones extremas;
 Desubicación temporal donde el pensamiento adquiere las características
del pensamiento primario: observamos aquí esas conductas que
desconciertan al adulto. El padre que recrimina a su hijo que estudie
porque tiene un examen inmediato, se encuentra desconcertado frente a la
respuesta del adolescente: “pero si tengo tiempo, el examen es recién

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mañana”. Este aspecto es muy importante estudiarlo periódicamente ya
que los adolescentes pasan de ser dependientes de un medio (madre) y
luego se desarrollan y diferencian de manera progresiva;
 Evolución sexual: en esta evolución del autoerotismo a la hetersexualidad
que se observa en el adolescente, se puede describir entre la actividad de
tipo masturbatorio y los comienzos de del ejercicio genital. Al ir aceptando
su genitalidad, el adolescente inicia la búsqueda de la pareja en forma
tímida pero intensa;
 Actitud social reivindicadora con distintas tendencias: no todo el proceso de
la adolescencia depende del adolescente mismo y no hay duda de que la
constelación familiar es la primera expresión de la sociedad que influye y
determina gran parte de la conducta de los adolescentes. Las primeras
identificaciones son las que se hacen con las figuras parentales, pero no hay
duda de que el medio en que se vive determina nuevas posibilidades de
identificación, futuras aceptaciones de identificaciones parciales e
incorporación de pautas socioculturales y económicas.
 Contradicciones sucesivas en todas las manifestaciones de la conducta: la
conducta del adolescente está denominada por la acción. El sujeto no
puede mantener una línea de conducta rígida, permanente y absoluta,
aunque muchas veces la intenta y la busca. Es una personalidad permeable,
que recibe todo y también proyecta, es sin dudas, una personalidad en la
que los procesos de proyección e introyección son intensos, variables y
frecuentes;
 Separación progresiva de los padres: este es uno de los duelos
fundamentales que tiene que elaborar el adolescente. Es por ello que una
de las tarea básicas a la identidad del adolescente es la de ir separándose
de los padres. La aparición de la capacidad efectora de la genitalidad
impone la separación de los padres y reactiva los aspectos genitales que se
habían iniciado con la fase genital previa;
 Constantes fluctuaciones del humor y del estado de ánimo: la cantidad y la
calidad de la elaboración de los duelos de la adolescencia determinarán la
mayor o menor intensidad de esta expresión y de estos sentimientos. La

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intensidad y frecuencia de los procesos de introyección y proyección
pueden obligar al adolescente a realizar rápidas modificaciones de sus
estados de ánimo.

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