La Regla de 24 Pulgadas Colombia PDF
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bolos de muerte son muy comunes en la masone- abandonar los principios filosóficos que nos guían
ría, las edades nos advierten el paso inexorable del a cambio de preservar la vida.
tiempo, recurso natural no renovable que avanza
en los cronogramas de las actividades trascen- La primera herramienta del Aprendiz Masón es la
dentales que nos hemos trazado para los escasos Regla de 24”, símbolo de la finitud de la vida y de
años de vida que nos quedan. la inevitable muerte. Nos recuerda la necesidad de
planear nuestro aporte a la mejora de las condi-
Jonathan Swift en los Viajes de Gulliver nos habla ciones de vida de la humanidad, a convertirnos en
de la trágica vida de esos extraños seres inmorta- hombres libres y de buenas costumbres y lucha-
les, los Struldbrugs, melancólicos y desalentados, dores permanentes por la libertad, la igualdad y
tercos, avaros, morosos, vanidosos, charlatanes la fraternidad universales. Nos llama a que utilice-
e incapaces de amistad. La envidia y los deseos mos con mayor eficiencia el tiempo, aprovechando
impotentes son las pasiones que más prevalecen cada segundo de nuestra finita vida en avanzar en
en ellos. Reflexionando sobre los jóvenes se ven el logro de nuestros propósitos. La Regla de 24”
apartados por siempre ya de toda posibilidad de es la única herramienta del Aprendiz que no tiene
placer; y si se encuentran con un entierro, lamen- movimiento, es estática y se mantiene como un
tan y lloran que otros lleguen a un puerto de des- guía que debemos seguir al aplicar toda la energía
canso a que ellos nunca podrán arribar [2]. En del Mazo sobre el Cincel en el proceso de cons-
forma magistral Swift describe las características trucción.
de los inmortales en un mundo de mortales. Son
eternos pero viven todos los males propios de una La Regla de 24” simboliza todo el conocimiento
vejez que no terminará nunca. acumulado por el hombre en el proceso histórico
de desentrañar los misterios de la naturaleza. Po-
Si fuésemos inmortales no tendrían sentido los dría parecer paradójico que una herramienta es-
planes pues estos podrían ejecutarse en cualquier pacial de carácter geométrico, que normalmente
momento y con cualquier duración. Podríamos es- se utiliza para medir distancia pudiera relacionarse
perar un millón de años para estudiar esa profe- con todas las cantidades físicas que han dado ori-
sión que tanto nos interesa, u otro millón de años gen a la tecnología moderna de la segunda mitad
para conocer las cataratas del Niágara. O mejor, del siglo XX y la primera década del siglo XXI. Ha-
no tendría ningún sentido el trazarnos metas ni es- cia las relaciones espaciales se transforman las
tablecer propósitos mediatos o de largo plazo por- cantidades físicas más disímiles en el proceso de
que estos conceptos carecerían de sentido prácti- medición. El Tiempo, por ejemplo, se mide por la
co y teórico para los inmortales. Preguntas como posición relativa de una aguja que se mueve rítmi-
la edad podrían tener respuestas tales como: “un camente en un círculo. La hora la conocemos al
siglo o más, o mejor, ya no cuento los años”. La observar la posición espacial del Sol, si es de día,
masonería tiene claridad absoluta de la finitud de o la posición relativa de las estrellas con respecto
la vida humana, tanto que no la considera como el a la estrella polar, si es de noche. Igualmente, se
hecho fundamental. Es más, tenemos claro que a determina por el ángulo espacial que forman las
veces nos veremos en la necesidad de adelantarla dos agujas del horario y minutero. Es evidente que
cuando se trata de defender el honor, lograr la otras cantidades físicas son medidas espacialmen-
libertad, practicar las virtudes y aplicar la justicia. te. La altura de la columna de mercurio nos indica
Para el masón la muerte es un hecho singular im- la temperatura de un sistema particular. Los colo-
portante, pero no el más importante como para res se diferencian objetivamente por la longitud de