Sensacion y Percepción

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 5

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACION SUPERIOR

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL “ROMULO GALLEGOS”

AREA CIENCIAS DE LA SALUD

PSICOLOGIA Y SOCIOLOGIA

SAN JUAN DE LOS MORROS

EDO- GUARICO.

Ensayo

Facilitadora: Bachiller:

Erika Bolivar Darlette Ramírez

3er año, scc “1” C.I: 26.973.792

Noviembre, 2018
La psicología es una rama que estudia el psiquis o procesos mentales, y al evaluarlo de esta
forma se podría decir que, estudia tanto los procesos cognitivos, afectivos y conductuales, y
por ende, si hablamos de la conducta humana hay que analizar en un principio las bases
psicológicas de la conducta, como también el aprendizaje, el conciencia, la memoria y la
inteligencia, de igual forma la sensación y percepción de un individuo. Todos estos factores
determinantes para evaluar el comportamiento o los procesos mentales como tal de una
persona y estudiar de esta forma de manera profunda al ser humano y su relación consigo
mismo y para con el mundo que lo rodea, ya que esto es un factor primordial para
determinar la conducta y reacciones psicológicas.

Las conductas humanas representan el conjunto de reacciones psíquicas de los seres


superiores, que permiten mantener relaciones con el medio, sostienen el fenómeno de la
vida y aseguran su continuidad. Las bases psicológicas de la conducta se integran por el
preconsciente, el consciente e inconsciente. Si nos referimos al preconsciente hablamos de
un área no consciente del psiquismo humano que debe diferenciarse en sentido estricto del
inconsciente, este a su vez se designa como un conjunto de procesos mentales que no
dependen de una prioridad ya que no son relevantes para la tarea, por último si hablamos de
consciente estamos refiriéndonos al conjunto de vivencias de las que se puede dar cuenta
mediante un acto de percepción interna. Ello, yo y superyó son también tres elementos de la
mente humana definidos por Sigmund Freud. Según la teoría de Freud, nuestra
personalidad se compone de tres elementos: ello, yo y superyó. Es un proceso de influjo
entre una persona y sus semejantes, un proceso que resulta de aceptar las pautas de
comportamiento social y de adaptarse a ellas. El “YO” se compone de elementos
conscientes, preconscientes e inconscientes. El “SUPER YO” equivale a una moral arcaica
que resulta de la interiorización de las prohibiciones familiares. El “ELLO” compone todas
las funciones innatas, reprimidas y todo lo que ha sido reprimido tiene el carácter dinámico.
“ELLO”, a placer. “YO”, a realidad. “SUPERYO”, a percepción.

La sensación y percepción de los problemas de comunicación son un evento común cuando


las ideas no son expresadas asertivamente y cuando la escucha no conlleva un ejercicio
atento y consciente de respeto y consideración por la postura del otro.
Muchas personas, las más relacionadas con el tema, procuran siempre distinguir entre el
acto de oír y el acto de escuchar, en tanto el primero es visto como la mera acción del
sentido de la audición por inercia, mientras que la segunda supone estar realmente
dispuesto a depositar nuestra atención en una conversación y, especialmente, a escuchar
para comprender y no para responder desde el prejuicio. Los procesos de sensación y
percepción en el individuo son claramente distintos e involucran tanto elementos a nivel
fisiológico como a nivel cognitivo.
La sensación implica el funcionamiento óptimo de órganos sensoriales y del sistema
nervioso, y en condiciones normales, resulta en que seamos capaces de ver el rojo cuando
es rojo y el verde cuando es verde. Sin embargo, la percepción es un fenómeno mucho más
complejo en el que intervienen factores como la cultura, las experiencias, los valores y las
expectativas personales, una suma totalitaria que bien podría respaldar la conocida frase de
El Talmud de Babilonia: “No vemos las cosas como son. Vemos las cosas como somos”.

La conciencia es la capacidad propia de los seres humanos de reconocerse a sí mismos, de


tener conocimiento y percepción de su propia existencia y de su entorno. En este sentido, la
conciencia está asociada a la actividad mental que implica un dominio por parte del propio
individuo sobre sus sentidos. Así, una persona consciente es aquella que tiene conocimiento
de lo que ocurre consigo y en su entorno, mientras que la inconsciencia supone que la
persona no sea capaz de percibir lo que le sucede ni lo que pasa a su alrededor. Por otro
lado, conciencia también tiene una connotación en cuanto sentido del deber, como reflexión
sobre la conducta y sobre los propios actos. De allí que también tenga un carácter ético,
pues permite distinguir al individuo entre aquello que está bien y lo que está mal, de modo
que a la hora de obrar pueda conducirse de acuerdo a sus valores morales.

Ahora bien si vamos a hablar de aprendizaje tengo que decir que es el proceso mediante el
cual se origina o se modifica una actividad respondiendo a una situación siempre que los
cambios no puedan ser atribuidos al crecimiento o al estado temporal del organismo.
También se puede definir el aprendizaje como un proceso de cambio relativamente
permanente en el comportamiento de una persona generado de la experiencia. El
aprendizaje es el proceso a través del cual se adquieren o modifican habilidades, destrezas,
conocimientos, conductas o valores como resultado del estudio, la experiencia, la
instrucción, el razonamiento y la observación. Este proceso puede ser analizado desde
distintas perspectivas, por lo que existen distintas teorías del aprendizaje. El aprendizaje es
una de las funciones mentales más importantes en humanos, animales y sistemas
artificiales. El aprendizaje humano está relacionado con la educación y el desarrollo
personal. Debe estar orientado adecuadamente y es favorecido cuando el individuo está
motivado. El estudio acerca de cómo aprender interesa a la neuropsicología, la psicología
educacional y la pedagogía. El aprendizaje es concebido como el cambio de la conducta
debido a la experiencia, es decir, no debido a factores madurativos, ritmos biológicos,
enfermedad u otros que no correspondan a la interacción del organismo con su medio.

La memoria apreciándose desde un punto de vista psicológico es una función cerebral que
interviene en todos los procesos de aprendizaje del ser humano. Es vital para la
supervivencia del individuo como lo ha sido para la supervivencia de la especie. Esto es un
punto común con muchas de las especies animales, por no decir todas y cuando
consideramos novedosos aspectos en estudio como la memoria de las células, también es un
punto común con las plantas y los demás seres vivos.

En el ser humano la memoria interviene en funciones primitivas como el mirar, caminar,


escuchar, etc. Hasta en funciones muy complejas y elaboradas como el lenguaje, los
procesos de pensamiento y las capacidades de comportamiento social. Si no se contara con
la memoria, otras facultades básicas como la percepción a través de los órganos de los
sentidos, sería inútil, porque cada vez que percibiéramos algo sería como algo nuevo y
jamás sabríamos como actuar en consecuencia con lo percibido. La base de la experiencia
de lo que ya aprendimos es necesaria. Ese énfasis en que se debe ser capaz de encontrar
aquello que fue almacenado para ser utilizado es muy importante y hace que no se trate de
un simple almacén de recuerdos, como si fuera un álbum de fotografías. En la medida en
que esa información se organiza, utiliza, complementa, evoluciona o cambia, y es útil,
estamos hablando de una función cognoscitiva de gran importancia. La memoria influye en
nuestra vida (especialmente en la psíquica) y viceversa. La memoria es una función
cognitiva que nos permite almacenar información y recuerdos, y recuperarlos cuando sea
necesario. Es decir, nos permite conservar la información que procesamos para poder
recuperarla cuando sea necesario. Esta función cognitiva, es la que nos permite aprender,
pues si no creásemos recuerdos de la información a la que accedemos, no podríamos
adquirir conocimiento. Sin embargo, la memoria no es tan simple como la capacidad de
almacenar y recuperar recuerdos. La memoria tiene distintos subprocesos que se encargan
de almacenar y recuperar distintos tipos de información, y con distintos propósitos. Para
conocerlos en profundidad, os mostramos la clasificación más aceptada por los
profesionales e investigadores en psicología.

La inteligencia es un concepto muy amplio, entre otras cosas, implica habilidad para
razonar, planificar, resolver problemas, pensar abstractamente, comprender ideas
complejas, aprender con rapidez y aprender de la experiencia. No supone el mero
aprendizaje de un texto, una habilidad académica específica, o resolver test de forma
habilidosa, sino una capacidad amplia para comprender el entorno siendo capaz de capturar
el significado de las cosas y darles un sentido, o para diseñar estrategias para resolver
problemas de la vida cotidiana. Los test de inteligencia suelen medir algunos aspectos, pero
no todos, del amplio abanico que supone la inteligencia. Frecuentemente miden el llamado
Cociente Intelectual (CI) relacionando la puntuación de cada individuo con la distribución
de la población en función de la edad del mismo. Poseer un CI alto o por encima de la
media es claramente ventajoso pues muchas de las actividades de nuestra vida cotidiana
requieren capacidades de razonamiento y toma de decisiones, especialmente en puestos de
organización y responsabilidad empresarial. Sin embargo, su ventaja no es tan evidente en
entornos que sólo requieren la toma de decisiones rutinarias o resolución de problemas
simples, esto es porque el CI no mide todos los aspectos de la inteligencia.

También podría gustarte