Modulo I Educación Emocional

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CENTRO DE EDUCACIÓN Y DESARROLLO

“CED”

DIPLOMADO LA DIVERSIDAD A TRAVÉS DE LA EDUCACIÓN EMOCIONAL

DOCENTE: PATRICIA EUGENIA ESTUPIÑAN RECALDE


CORREO: [email protected]
TELÉFONO: +57 3006675322

MODULO I:

1. EMOCIONES Y SENTIMIENTOS
2. INTELIGENCIA EMOCIONAL
3. COMPETENCIA EMOCIONAL
4. LA EDUCACIÓN EMOCIONAL CON LOS DOCENTES Y EL COLEGIO

DESARROLLO
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La emoción es definida por la neurociencia como la respuesta de nivel básico que crea
reacciones bioquímicas en el cuerpo alterando el estado físico actual.

Los sentimientos, por otro lado, son asociaciones mentales y reacciones hacia las
emociones según nuestras experiencias personales.

Según el profesor de neurociencias Antonio D’Amasio los sentimientos son experiencias


mentales del estado en que encuentra nuestro cuerpo. Estos sentimientos van apareciendo a
medida que el cerebro va interpretando las emociones.

Las emociones, a su vez, aparecen como respuestas del cuerpo hacia estímulos externos. La
cadena emoción - sentimiento - sentimiento sería, por ejemplo: estoy asustado, siento
miedo y luego me siento horrorizado.

La emoción es una alteración del estado físico que se puede medir por medio de la presión
arterial o latidos del corazón. La emoción nace de estímulos externos, son instintivos y de
corta duración. Las emociones son también provocadas por los sentimientos como por
ejemplo cuando recuerdas un momento especial y sonríes.
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El sentimiento es una alteración en el estado mental que se mide según la experiencia de


vida de cada uno. Son generadas en el subconsciente por lo tanto queda en la memoria
emocional siendo duradero y recurrente.

Sentimiento y emoción pueden parecer el mismo concepto, pero en realidad son palabras
diferentes. En ambos casos sentimos, pero el detalle es diferente si me estoy refiriendo a
una emoción o a un sentimiento.

¿QUÉ ES UNA EMOCIÓN?

Una emoción es una reacción compleja del cerebro ante un estímulo externo (algo que veo,
u oigo) o interno. (pensamiento, recuerdo, imagen interna).

Emoción viene del latín emovere que quiere decir mover hacia o desde. En contra de lo que
se piensa, las emociones son algo transitorio no permanente que nos saca de nuestro estado
habitual.

Las emociones son energía que se mueve a través de nuestro cuerpo y que sólo se estanca si
las reprimimos.  Las emociones por tanto nos impulsan hacia la acción, son más intensas y
duran menos tiempo que los sentimientos.
Te acabas de comprar un coche es el segundo día que lo utilizas y al ponerlo en marcha no
arranca. Es posible que sientas enfado. Acabas de enterarte que te han concedido una
beca para estudiar, puede ser que sientas alegría. Te cuentan que han robado en tu
edificio, quizás sientes miedo.

¿CUÁLES SON LAS 6 EMOCIONES BÁSICAS Y PARA QUÉ SIRVEN?

Emociones hay muchas, pero hay unas primarias o básicas que son la base de nuestro
universo emocional. Las emociones básicas de dividen en cuatro grandes grupos. La
tristeza, el enfado, el miedo y la alegría, asco, sorpresa.

Veamos para que sirven cada una de ellas.

Tristeza: 
Sirve para aceptar la pérdida de una persona, situación o experiencia.
Nos sirve para darnos un tiempo un espacio hacia dentro. Para reflexionar.  Si esta tristeza
dura mucho tiempo pasa a ser un sentimiento. Y entonces es cuando tenemos que
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preocuparnos y ocuparnos. Darnos permiso para estar tristes va a ser importante para poder
elaborar los grandes o pequeños duelos que nos pone la vida delante (pérdida de un ser
querido, cambio de casa, cambio de situación laboral, ruptura de una relación, abandono de
los hijos de casa… ) En una intensidad menor la tristeza es adaptativa. 

Alegría: 
Sirve para facilitar el contacto con otra persona. Compartir y expresar hacia fuera.  Dentro
de la alegría también entraría la curiosidad y la ternura.
¿Qué pasa si nos aferramos a esta alegría? Que a veces se acaba convirtiendo en una falsa
alegría, en una alegría fingida.
Preguntas del estilo. ¿Cómo estás? Bien. Cuando en realidad estoy fatal.  Permitirnos vivir
otras emociones a parte de la alegría, nos va a ayudar a tener un mayor abanico emocional y
que cuando sea una emoción sea real.

Enfado: 
Sirve para poner límites, separarnos del otro. Decir hasta aquí. La rabia puede
ser positiva si modulamos su respuesta. Nos sirve para identificar una molestia. Para
entrenarnos en la capacidad de decir NO. Fundamentalmente nos permite expresar nuestras
necesidades.

Miedo: 
Sirve para protección, prudencia cuando hay un peligro real. ¿Qué pasa cuando no hay un
peligro real? El miedo nos puede paralizar e invadir de tal manera que no podamos hacer
nuestras cosas con normalidad.

Asco

Es la emoción más desagradable de las seis. Tiene un gran poder para condicionar nuestro
comportamiento, especialmente si hablamos de alimentos. La función del asco
es protectora, no solamente para el momento en el que la experimentamos, sino también
para el futuro, pues escribe con cincel en nuestra memoria.

Sorpresa

Es la emoción neutra y breve. No neutra en el sentido de que no irrita el corazón o la mente,


sino en el sentido de no podemos decir que produzca un buen o mal estado emocional. De
hecho, también suele actuar como precursora de otras emociones que sí tienen valencia:
miedo, alegría, tristeza, etc.

https://www.youtube.com/watch?v=VSTVpgW5DF8
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¿QUÉ ES UN SENTIMIENTO? 

El sentimiento es la suma de emoción + pensamiento. Es la experiencia subjetiva de nuestra


experiencia emocional. Según el biólogo Huberto Maturana, una emoción se transforma en
sentimiento en la medida que uno toma consciencia de ella. Es decir, en el sentimiento
interviene además de la reacción fisiológica un componente cognitivo y subjetivo. Un
sentimiento, por tanto, se da cuando etiquetamos la emoción y emitimos un juicio acerca de
ella.

Cuando interpretamos la sensación que estamos teniendo de manera consciente y explícita.


Los sentimientos suelen durar más tiempo que las emociones. Estos últimos durarán el
tiempo que pensemos en ellos. Los sentimientos se dan después de las emociones no hay
sentimiento sin emoción.

Algunos ejemplos de sentimientos son el amor, los celos, el sufrimiento o el dolor, el


rencor, la felicidad, la compasión.

El desarrollo de la empatía también nos va a permitir poder entender los sentimientos de las


demás personas. Como ya hemos mencionado, los sentimientos son de una duración por lo
general bastante larga.

Para seguir con el ejemplo anterior, tu pareja te acaba de dejar, y, por ejemplo, te das
cuenta que sientes tristeza. La tristeza se convierte en sentimiento cuando pones
consciencia y pensamiento.

Otro ejemplo, te acaban de despedir del trabajo, puedes sentir la emoción de enfado. Y
luego que te vengan otras emociones al pensar en ello que acaben convirtiéndose en
sentimientos, por ejemplo, tristeza, miedo a no encontrar otro trabajo, alegría por sentirte
liberado de no escuchar a tu jefe nunca más, etc. 

«Los sentimientos no pueden ser ignorados, no importa cuán injustos o ingratos nos
parezcan.» -Anna Frank-

6 PUNTOS CLAVE PARA SABER LA DIFERENCIA ENTRE EMOCIÓN Y


SENTIMIENTO

Aquí mostramos los 6 puntos clave para diferenciar entre las emociones y los sentimientos.
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1. Las Emociones Son Estados Transitorios Que Vienen Y Se Van

Los sentimientos en cambio, tienen una duración más larga tanto en nuestro cuerpo y
mente. Este último durará tanto como nuestro consciente dedique tiempo a pensar en él
nuestra mente. Por ejemplo. El amor es un sentimiento, el miedo puede ser una emoción o
también lo podemos convertir en un sentimiento.

2. Las Emociones Se Dan De Forma Inconsciente, Y Son Muy Rápidas

Los sentimientos se dan cuando interviene la consciencia y el darse cuenta, además necesita
un tiempo para que un sentimiento se forme. 

3. La Emoción Siempre Va Primero Al Sentimiento

Sin emoción no va a haber sentimiento. Una misma emoción puede despertar


diversos sentimientos a una persona. Por ejemplo, la emoción de alegría, puede despertar
un sentimiento de amor, o felicidad.

4. Las Emociones Son Reacciones Psicofisiológicas Que Ocurren De Manera


Automática Y Espontánea. 

Los sentimientos, en cambio, son la interpretación que hacemos de esas emociones y se


pueden regular mediante nuestros pensamientos.

5. Cuando Somos Conscientes De Nuestros Sentimientos Vamos A Poder Gestionarlos

Con las emociones en cambio, este fenómeno no se da porque lo queramos o no van a estar
ahí, ya que se dan de forma automática ante una situación o pensamiento. 

6. Las Emociones Tienen Una Intensidad Mayor Que Los Sentimientos

Estos últimos son más descafeinados en intensidad porque ya interviene la consciencia y


los pensamientos. Cuando se generan los sentimientos intervienen procesos más complejos.

Por tanto, la principal diferencia entre emoción y sentimiento es su


duración, su intensidad, mucho más corta y más intensa en el caso de la
emoción, y que esta última, es una reacción automática de nuestro cuerpo.
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2. INTELIGENCIA EMOCIONAL
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La inteligencia emocional se refiere a las capacidadesy habilidades psicológicas


que implican el sentimiento, entendimiento, control y modificación de las
emociones propias y ajenas.

Una persona emocionalmente inteligente es aquella capaz de gestionar satisfactoriamente


las emociones para lograr resultados positivos en sus relaciones con los demás.

A pesar de que varios psicólogos ya habían señalado la insuficiencia de los elementos


cognitivos y racionales como únicos indicadores de inteligencia, el concepto surge en 1983
con el psicólogo Howard Gardner, quien considera a los test de coeficiente intelectual como
insuficientes para lograr una apreciación de la inteligencia.

Existen dos formas elementales de inteligencia emocional:

 La Inteligencia Interpersonal que implica entender y comprender las emociones


de los otros y tener la habilidad de reaccionar según el estado anímico del otro.
 La Inteligencia Intrapersonal que se refiere a la comprensión de las propias
emociones, de tenerlas en cuenta al momento de tomar decisiones y ser capaz de
regular las emociones según la situación.

Se dice que las personas que han trabajado en sí mismos para adquirir conciencia de su
inteligencia emocional saben:

 Manejar mejor las experiencias negativas;


 Tener mayor capacidad para identificar las emociones y saber con precisión qué es
están sintiendo exactamente
 Identificar las emociones de los demás
 Establecer relaciones con base en la compresión de las emociones de los demás
(comprender cómo se siente alguien ayuda a establecer un canal de comunicación
más abierto)
 Mantener buenas relaciones; basados en la compresión integral de los otros

 Influir en los demás; gracias al entendimiento y respeto por las emociones y puntos
de vista del otro
 Comunicar sus puntos de vista con claridad; dado que hay entendimiento y respeto
por el otro y sus emociones es más fácil comunicar los propios puntos de vista de
manera efectiva 
 Manejar conflictos; porque la empatía que han desarrollado les permite ser árbitros
imparciales y justos 
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 Trabajar en equipo; conociendo quién es cada elemento del grupo y sus fortalezas y
debilidades

Al entender mejor las emociones, quienes han trabajado en su inteligencia emocional son
capaces de relacionarse mejor con los demás, tener más éxito en su trabajo y llevar vidas
más satisfactorias. Así pues, es frecuente que tengan también una alta inteligencia social.

De acuerdo a los estudios realizados por los psicólogos Peter Savoley y John D. Mayer hay
cuatro momentos fundamentales para desarrollar la inteligencia emocional. En su modelo
se elaboran cuatro factores: 

 Percibir las emociones con precisión; quiere decir esto que hay que aprender a leer
las emociones no verbales como el lenguaje corporal y/o las expresiones faciales,
así como las emociones propias (saber qué se siente en cada momento, el origen del
sentimiento y la conclusión de cómo ese sentimiento afecta el comportamiento y el
pensamiento).
 Utilizar la lectura de las emociones para reaccionar ante las situaciones; así se le da
prioridad a lo que percibimos requiere atención inmediata, y se relega a segundo
plano lo que se percibe como menor urgente. Aquí es de suma importancia saber
controlar los impulsos, evitar explosiones emocionales, abogar por la calma cuando
hay dificultad, y adaptarse a los cambios y fluctuaciones del día a día. 

 Comprender las emociones y darles el significado que se merecen; quiere decir que
una persona molesta en el trabajo no está molesta, necesariamente, con su trabajo,
sino puede tener problemas personales y no sabe cómo separar su vida privada de su
vida laboral. 
 Administrar las emociones; quiere decir que hay que saber cómo responder y
cuándo responder a nuestras propias emociones y a las de los demás. 

LA IMPORTANCIA DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL

Se dice que las personas con más éxito en sus vidas son aquellas con una inteligencia
emocional más alta, no necesariamente las que tienen un altísimo coeficiente intelectual.
Cuando las emociones no se manejan correctamente, pueden acabar con el esfuerzo laboral
de una persona, así como con su vida privada. Quienes han trabajado para desarrollar esta
parte de su comprensión del mundo y de sí mismos encuentran que, en general, la
inteligencia emocional:

 Ayuda a triunfar en todas aquellas áreas de la vida en las que hay que relacionarse
con otros
 Ayuda a elegir el estado anímico que más se acomoda a cada situación y a
desenvolverse armónicamente con lo que cada momento requiere 
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 Ayuda a relacionarse con los demás y favorece el mantenimiento de relaciones más


satisfactorias
 Ayuda a mantener una mejor salud (manejo de estrés, ansiedad y depresión)
 Ayuda a mantener un estado anímico más estable, sin tantos altibajos.

VENTAJAS DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL

Existen ciertas habilidades prácticas que se manifiestan con mayor intensidad en las


personas emocionalmente inteligentes, tales como la empatía, la capacidad de motivación
(tanto hacia uno mismo como hacia los demás), la autoconciencia, la capacidad de controlar
la exteriorización de las emociones, el liderazgo, entre otras. Generalmente, estas
habilidades son utilizadas como indicadores de la inteligencia emocional, cuando se quiere
medir esta habilidad psicológica.

La inteligencia emocional desempeña un papel central en el éxito o el fracaso de todo tipo


de relaciones humanas, desde las sentimentales y familiares hasta los vínculos laborales.

También es un factor determinante en el funcionamiento de las organizaciones, ya que la


empatía, autocontrol emocional y motivación de las personas puede condicionar el trabajo
en equipo, haciéndolo más o menos eficiente y satisfactorio.

Estas habilidades también son importantes en la capacidad de las personas de convencer,


manipular e incluso dominar a los demás (los líderes tienden a ser personas
emocionalmente inteligentes).
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Este concepto también ha tenido un enorme impacto en el ámbito educativo, introduciendo


la cuestión de los elementos emocionales en la relación entre docente y alumno, y la
importancia que esto tiene al momento del aprendizaje cognitivo. Tanto la inteligencia
emocional del docente como la del alumno tienen un peso significativo en el resultado
exitoso o no del proceso de enseñanza.

3.COMPETENCIA EMOCIONAL

La competencia emocional se describe como la capacidad que tiene una persona para
expresar sus propias emociones con total libertad. Se deriva de la inteligencia emocional,
que es la capacidad para identificar y regular las emociones. La competencia se aprende y
determina la habilidad que tiene una persona para interactuar de forma constructiva con
otras.
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Esta competencia emocional personal se basa en la conciencia de uno mismo. Se basa en el


reconocimiento de las emociones individuales y cómo estas afectan a otras personas.
También se basa en  la capacidad de mantener un control emocional y cómo manejar la
adaptación. Hay que tener en cuenta que, para ello, hay que ser capaz de entender nuestras
emociones personales antes de valorar las emociones de otras personas.

Otro aspecto individual de la competencia emotiva, es la competencia social, que hace


referencia a la empatía con los demás. En ella destacan las habilidades sociales, las cuales
resultan muy importantes en un ambiente de trabajo. Del mismo modo, para lograr éxito en
las relaciones, ya que es importante manejar una comunicación eficaz y saber gestionar los
conflictos.
A través de la competencia emocional, los seres humanos tienen la capacidad de reaccionar
a sus emociones personales y a aquellas experimentadas por otras personas. Un individuo
puede responder correctamente cuando alguien experimenta emociones consideradas
negativas como la ira, el miedo y el dolor.
Muchos expertos creen que la falta de competencia emocional provoca diferentes
cuestiones que pueden conducir a una supresión de las emociones. Está demostrado
que interiorizar las emociones, puede llevar a un deterioro de la salud física y
mental. También aumentan los niveles de estrés, lo que puede causar hipertensión, aumento
o pérdida rápidos de peso o fatiga.
Suprimir las emociones puede llevar a padecer depresión.  Las relaciones con otras
personas pueden causar sufrimiento debido a la incompetencia emocional que provoca una
falta de intercambio emotivo. Aunque existen muchos tipos de problemas emocionales que
pueden causar dificultad en la competencia emocional, la inteligencia emocional juega un
papel importante en la capacidad que tiene una persona para aprender competencias.

LAS 5 COMPETENCIAS EMOCIONALES BÁSICAS

La educación emocional y el fomento de la inteligencia emocional a cualquier edad y en


cualquier entorno, familiar, escolar o laboral, se focalizan en el desarrollo de una serie de
competencias.

1. La autoconciencia emocional, ser capaces de conocer nuestras


emociones e identificar en qué estado emocional nos encontramos: Sin
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autoconciencia emocional, caminaremos por nuestra vida sin una brújula,


perdidos y desorientados. Por ejemplo, ante una sensación interna de rabia,
no es lo mismo identificarla como un enfado que como una frustración. La
sensación corporal es muy parecida, pero se necesita autoconciencia
emocional para identificar la diferencia. El enfado tiene que ver con
sentirnos perjudicados y la frustración tiene que ver con no conseguir lo que
deseamos. Confundir uno con otro puede hacer que ante una frustración
normal nos comportemos de forma agresiva al confundirla con un enfado. Y
viceversa, cuando algo nos esté dañando realmente nos comportemos de
forma demasiado pasiva porque la consideremos una frustración que hay que
aguantar.

2. El autodominio emocional, referida a ser capaces de controlar nuestros


impulsos y responder a situaciones complejas más allá de las reacciones
a corto plazo: Las emociones son de naturaleza apasionada e impulsiva,
buscan una solución rápida y potente que viene bien en problemas que
requieren de dicha “fogosidad”. Pero ya no vivimos en la selva, las
dificultades cotidianas y los problemas complejos son laberintos, dilemas y
acertijos. Requieren de reflexión y planificación. Sin autodominio,
simplificamos tanto nuestra respuesta a los conflictos y dudas que
parecemos neandertales aporreando un ordenador.

3. La automotivación, que se refiere a la capacidad de cada persona para


establecerse objetivos, ilusionarse con ellos y adjudicar los recursos y
energía necesarios para lograrlos:  La automotivación es la diferencia
entre vivir la vida de otros, o la vida desde otros, a vivir nuestra propia vida.
Es ponernos retos, objetivos y salir del espacio de comodidad. Es asumir
situaciones externas y hacerlas propias sin caer en la rebeldía o en la
resignación. Sobre nuestras motivaciones decidimos nosotros, a veces sobre
el qué hacer y otras sobre el cómo hacerlo.

4. La empatía, entendida como la capacidad de ser consciente de los


sentimientos, necesidades y preocupaciones de los demás: Es el paso de
la independencia emocional, que se ha logrado con las tres primeras
competencias, a la interdependencia emocional. Del “Yo soy importante” al
“Nosotros somos importantes”. Es reconocer la importancia de los demás
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para el propio bienestar y la consecución de los propios logros. Es pasar de


conseguir estar bien a través de los demás, lo que sería la dependencia, a
conseguir estar bien con los demás, que sería la interdependencia.

5. La competencia emocional básica son las habilidades sociales, que se


refieren a la capacidad de influir, comunicar, colaborar, resolver
conflictos y trabajar en equipo: El ser humano es un animal social, con
herramientas propias para desenvolverse en la selva de lo social. Desde
liderar una familia, hasta influir en una junta de vecinos o comunicarse con
la pareja, las habilidades sociales son la herramienta que utilizamos para
tener éxito en nuestras relaciones. Poner en práctica dichas habilidades
sociales es saber comunicar, escuchando y expresando, es ser asertivos,
manteniendo un equilibrio entre la agresividad y la pasividad, es saber
prevenir y resolver conflictos, aprendiendo a negociar y a mediar cuando sea
necesario. Es buscar el bienestar dentro de la sociedad.
https://www.youtube.com/watch?v=YTa40SrGoyw

4. LA EDUCACIÓN EMOCIONAL CON LOS DOCENTES Y EL


COLEGIO
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1. La Educación Emocional:
Antes del siglo XX apenas tenemos constancia de estudios científicos o filosóficos
sobre las emociones del ser humano, sin embargo, en este siglo asistimos a un
desarrollo importante de este tipo de estudios, así podemos destacar a: − Charles
Darwin, quien, desde un enfoque biológico, estudió las emociones-tanto en los seres
humanos como en los animales, como señales que comunicarían intenciones, además de
ser reacciones determinadas por ciertos acontecimientos. También, Charles Darwin,
dedicó mucho tiempo al estudio de las expresiones faciales ante determinadas
emociones. − William James, desde la tradición psicofisiológica, señalaría que la
experiencia emocional es la consecuencia de cambios corporales, o respuestas
fisiológicas, que se dan como reacciones ante hechos excitantes. Su pensamiento
quedaría reflejado en la famosa frase “No lloramos porque estamos tristes, sino que
estamos tristes porque lloramos”. − Cannon y Bard, en el ámbito de la neurología,
pondrán énfasis en lo contrario, plantean que el estímulo emocional origina unos
impulsos que, a través del tálamo, llegan a la corteza cerebral. Al mismo tiempo, el
tálamo envía impulsos a las vísceras y músculos para que produzcan cambios
comportamentales. − Para Freud su estudio de las emociones se lleva a cabo desde el
psicoanálisis. El psicoanálisis, más que una teoría de la emoción, es una teoría de los
trastornos emocionales, según la cual, por un lado, la vida afectiva del adulto depende
de cómo hayan sido sus experiencias afectivas pasadas y, por otro lado, la mente relega
al inconsciente las emociones traumáticas. − La corriente conductista, por su parte, se
ha preocupado por estudiar el proceso de aprendizaje de las emociones, el
comportamiento manifiesto que permite inferir estados emocionales y los
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condicionamientos que provocan emociones. Aunque, a nivel teórico, las aportaciones


del conductismo han sido pobres, lo cierto es que en lo que se refiere a intervención
clínica en alteraciones emocionales, el paradigma conductista se ha revelado
especialmente fructífero. − También Lang, en 1968, propuso la teoría de los tres
sistemas de respuesta emocional (cognitivo, fisiológico y motor), que plantea que la
respuesta emocional no es un fenómeno unitario, sino multidimensional. Todos estos
estudios sobre emociones crearían el caldo de cultivo necesario para que una obra como
la de Daniel Goleman, Inteligencia emocional, viese la luz en 1995.Sin embargo, el
término de inteligencia emocional no lo crea Goleman, sino que procede de Salovey y
Mayer (1990). Según estos autores la inteligencia emocional consiste en la habilidad de
manejar los sentimientos y emociones, discriminar entre ellos y utilizar estos
conocimientos para dirigir los propios pensamientos y acciones. Uzcategui en 1998,
define la inteligencia emocional como el conocimiento, luego se transforma en
capacidad socioafectiva que facilita al individuo. Ryback (1998),por su parte, afirmará
que la mejor manera de definir la inteligencia emocional es considerar que se trata de la
capacidad de aplicar la conciencia y la sensibilidad para discernir los sentimientos y
subyacentes de la comunicación interpersonal, para resistir la tentación que mueve a
reaccionar de una manera impulsiva irreflexiva, obrando en vez de ello con
receptividad, autenticidad y sinceridad. A pesar de existir todas estas definiciones, con
cierta relevancia, de inteligencia emocional, ninguna se aproxima a la repercusión de la
de Goleman y su estudio al respecto. Goleman define la inteligencia emocional como la
capacidad de reconocer los sentimientos propios y ajenos, de poder automotivarse para
mejorar positivamente las emociones internas y las relaciones con los demás. También
señala que la inteligencia emocional permite la conciencia de los propios sentimientos
en el momento en el que se experimentan, dándole una atención progresiva a los
propios estados internos. Goleman también señala, en Inteligencia emocional, que ésta
es un concepto de amplia significación que incluye la habilidad para motivarse y
persistir frente a las frustraciones, controlar impulsos y demorar gratificaciones, regular
los estados de humor, evitar que las desgracias obstaculicen la habilidad de pensar,
desarrollar empatía y esperanza. Para Goleman, el CE (coeficiente emocional) puede
sustituir en un futuro al CI (coeficiente de inteligencia) que ya lleva cien años de
existencia. Este planteamiento se basaría en que la inteligencia es una meta−habilidad,
que determina en qué medida podremos utilizar correctamente otra habilidad que
poseemos, incluida la inteligencia.
Desde esta perspectiva, la inteligencia emocional es una de las habilidades de vida que
deberían enseñarse en el sistema educativo. La inteligencia personal debería ocupar un
lugar eminente dentro de la inteligencia emocional.
 La inteligencia personal está compuesta por:
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A. La inteligencia interpersonal, en función de la cual observamos a los


demás, intentamos comprenderlos y tratamos de buscar la mejor
forma de relacionarnos productivamente con ellos.
B. La inteligencia intrapersonal, que se refiere a la capacidad de
formarse un modelo preciso de sí mismo y de utilizarlo de forma
adecuada para interactuar de forma efectiva a lo largo de la vida.
https://www.youtube.com/watch?v=bXByxTbcd_A

2. La Importancia De La Educación Emocional En El Aula


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La educación en emociones o emocional es, quizá, una de las más importantes tareas
pendientes en nuestra sociedad, prácticamente hasta la década de los noventa no se produce
un avance significativo en su estudio. Goleman (1995) se referirá a los elevados costes del
analfabetismo emocional (crímenes, violencia, arrestos, uso de armas de fuego, suicidios,
inseguridad ciudadana, depresión, ansiedad, estrés, desordenes de la alimentación, abuso de
drogas y alcohol). Todo ello implica estrategias de prevención y alfabetización emocional
necesarias a través del sistema educativo.
Aquí vamos a referirnos a la educación emocional como respuesta a un déficit en la
formación básica del alumno.
Los objetivos de la educación emocional Los objetivos generales de la educación
emocional se pueden resumir en los siguientes términos:

 Adquirir un mejor conocimiento de las emociones propias.


 Identificar las emociones de los demás.
 Desarrollar la habilidad de controlar las propias emociones.
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 Prevenir los efectos perjudiciales de las emociones negativas.


 Desarrollar la habilidad para generar emociones positivas
 Desarrollar una mayor competencia emocional.
 Desarrollar la habilidad de automotivarse
 Adoptar una actitud positiva ante la vida. De estos objetivos generales se derivan
otros objetivos más específicos, en función del contexto de intervención. Algunos
ejemplos pueden ser: Desarrollar la capacidad para poder controlar el estrés, la
ansiedad y los estados depresivos, Tomar conciencia de los factores que inducen al
bienestar subjetivo, Potenciar la capacidad del ser humano de ser feliz, Desarrollar
el sentido del humor, Desarrollar la capacidad para demorar recompensas
inmediatas en favor de otras de mayor nivel, pero a largo plazo, Desarrollar la
resistencia a la frustración.

Por extensión, los efectos de la educación emocional conllevarían resultados tales como
los siguientes:
 Aumento de habilidades sociales y de relaciones interpersonales satisfactorias
 Disminución de pensamientos autodestructivos
 Mejora de la autoestima.
 Disminución del índice de violencia y agresión.
 Menor conducta antisocial o socialmente desordenada.
 Menor número de expulsiones de clase.
 Mejora del rendimiento académico
 Disminución en la iniciación en el consumo de drogas
 Mejor adaptación escolar, social y familiar
 Disminución de la tristeza y sintomatología depresiva.
 Disminución de la ansiedad y el estrés
 Disminución de desórdenes relacionados con la comida.

El Alumno Emocionalmente Competente: En el trato continuado con los alumnos y para


poder ayudarlos, es necesario tener presente su vida emocional para detectar las conductas
antisociales o emocionalmente deficitarias que se ponen de manifiesto en las relaciones
interpersonales que se dan en el aula.
La comunicación es imprescindible para el tratamiento de la vida emocional. Para generar
una buena comunicación con el alumnado, se ha de crear un vínculo con cada uno de los
alumnos, y para ello es necesario que exista un ambiente cordial y sin ansiedad.
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La educación socioemocional forma parte de la educación integral de la persona, finalidad


base de cualquier enseñanza obligatoria.
Veamos por qué:
1. Las habilidades socio-emocionales (fuerza de voluntad, perseverancia,
responsabilidad, autocontro) son el lecho sobre el que se asientan los éxitos
académicos.
2. La mayoría de conflictos en el aula son de índole interpersonal o emocional.
3. Por razones de supervivencia, el profesor necesita mejorar los índices de
respeto y comportamiento prosocial en el aula.
4. La educación consta de una vertiente inhibidora (aprender a dejar de hacer),
imprescindible y complementaria de la otra cara impulsora (aprender a
hacer).

Vemos por todo ello que no es posible no educar socio-emocionalmente. Así, es importante
desarrollar en las aulas PROGRAMAS DE ALFABETIZACIÓN EMOCIONAL, ya que
se ha demostrado que éstos mejoran las calificaciones académicas y también el desempeño
escolar. En un momento en que muchos niños carecen de la capacidad de manejar sus
problemas, de prestar atención o de concentrarse, de controlar sus impulsos, de sentirse
responsables por su trabajo o de interesarse en su aprendizaje, cualquier cosa que sostenga
estas habilidades ayudará a su educación. En este sentido, la alfabetización emocional
mejora la capacidad de la escuela para enseñar.
La mayoría de los investigadores y estudiosos de la inteligencia emocional coinciden en las
características de los alumnos emocionalmente inteligentes, así:
 Poseer un buen nivel de autoestima
 Aprender más y mejor
 Presentar menos problemas de conducta
 Sentirse bien consigo mismos
 Ser personas positivas y optimistas
 Tener la capacidad de entender los sentimientos de los demás
 Resistir mejor la presión de sus compañeros
 Superar sin dificultad las frustraciones
 Resolver bien los conflictos
 Ser felices, saludables y tener más éxito

Podemos darnos cuenta por estas características del alumno emocionalmente competente,
de la incuestionable importancia de educar en emociones desde las aulas.
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El profesor emocionalmente competente y convencido de la importancia de la educación


emocional puede abrir un horizonte de soluciones y ser resistente a posibles adversidades.
La mentalización o actitud debería acercar al profesor hacia un perfil de clase con unas
características cercanas a las siguientes, según nos dice Vaello Orts en La gestión de aula
basada en la educación Socio-Emocional: Segura, donde nadie pueda incumplir.
Todos se tienen que sentir seguros, y el primero el profesor, por su propio interés y porque
es la garantía de la seguridad de los demás. Atrayente, donde nadie quiera incumplir. El
interés y atractivo que la clase aporte a los alumnos debería superar o al menos parecerse al
que los alumnos traen de fuera. Respetuosa con los derechos de todos, alumnos y
profesores, sin resquicio para los abusos y sin dictadores ni encima ni debajo de la tarima
virtual. Empática, donde imperen las relaciones armoniosas y positivas. Es el complemento
al respeto: un plus en la relación. Es la vía para pasar de dar clase a disgusto a alumnos que
la reciben a disgusto a un planteamiento que permita a todos estar a gusto, más allá de las
diferencias. Asequible, donde todos tengan posibilidades de éxito con un esfuerzo rentable
y proporcionado.

ACTIVIDAD

1. AVERIGUAR ACERCA DE LOS PROGRAMAS DE


ALFABETIZACIÓN EMOCIONAL QUE SE PUEDEN
IMPLEMENTAR EN EL AULA DE CLASES
2. REALIZAR UN ENSAYO CRITICO ACERCA DEL PAPEL DEL
DOCENTE FRENTE A LA EDUCACIÓN EMOCIONAL
3. REALIZAR UN PARALELO DE LAS INTELIGENCIAS
MÚLTIPLES

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