CSJ 00056
CSJ 00056
CSJ 00056
ASUNTO A TRATAR
HECHOS
1. Dio origen a la presente investigación la queja presentada el 12 de enero de 2016
por el señor FABIO LOZANO MARTÍNEZ contra el togado DARÍO ECHEVERRY DÍAZ,
quien manifestó que el doctor DARÍO ECHEVERRY le causó un perjuicio a su hija, la señora
SOLEDAD LOZANO ROMERO por haber dado por terminada una demanda de reparación
directa que cursaba en el Juzgado 8 Administrativo Oral del Circuito de Ibagué – Tolima
contra el INPEC por hechos acaecidos el ocho (8) de abril de 2014, en donde falleció el
señor MARLON LÓPEZ CÁRDENAS.2
1
Sala Dual conformada por el Magistrado Ponente Carlos Fernando Cortés Reyes y el
Conjuez Luis Antonio Barragán Gallardo.
2
Folio 1-8 (Cuaderno Original)
2. El ocho (8) de abril de 2014, en el complejo penitenciario y carcelario de Ibagué
Coiba, se presentó una riña al interior del bloque 1 entre varios internos, lo que desencadenó
en el fallecimiento del señor MARLON LÓPEZ CÁRDENAS, pareja sentimental de la señora
SOLEDAD LOZANO ROMERO.3
3. La señora SOLEDAD LOZANO ROMERO se reunió el mismo día con la familia del
occiso MARLON LÓPEZ CÁRDENAS con el fin de iniciar demanda de reparación directa
contra el INPEC, por lo que procedieron a apoderar al doctor JORGE ORJUELA GARCÍA,
quien impetró la demanda respectiva el 29 de octubre de 2014, la cual fue repartida al
Juzgado Segundo (2) Administrativo Oral de Descongestión del Circuito Ibagué. 4
3
Folio 6 (Cuaderno Original)
4
Folio 215-219, 233 (Cuaderno Original)
5
Folio 220 (Cuaderno Original)
6
Folio 248 (Cuaderno Original)
7
Folio 227 (Cuaderno Original)
8
Folio 33 (Cuaderno Original)
8. El 16 de septiembre de 2014, el Juzgado Octavo (8) Oral Administrativo del Circuito
de Ibagué admitió la demanda de reparación directa presentada por el doctor DARÍO
ECHEVERRY DÍAZ, actuando en calidad de apoderado de la señora SOLEDAD LOZANO
ROMERO contra la NACIÓN – INPEC.9
9. El nueve (9) de febrero de 2015, el togado DARÍO ECHEVERRY DÍAZ presentó ante
el Juzgado 8 Administrativo desistimiento de la demanda y solicitó el desglose y la entrega
de documentos.10
ACTUACIONES PROCESALES
15
Folio 13 (Cuaderno Original)
16
Folio 19-121 (Cuaderno Original)
17
Folio 123-124 (Cuaderno Original)
18
Folio 125 CD (Cuaderno Original)
19
Folio 126 (Cuaderno Original)
20
Folio 128-134 (Cuaderno Original)
10. El tres de junio de 2016, se instaló continuación de audiencia de pruebas y
calificación provisional en la cual se le corrió traslado de la queja al doctor ORLANDO
BULLA y se le otorgó la palabra al togado DARÍO ECHEVERRY DÍAZ a fin de rendir versión
libre, en la que manifestó que apoderó a la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO en una
reclamación administrativa que se inició bajo el radicado 2014.00522.00 ante el Juzgado 8
Administrativo de Ibagué, demanda que fue radicada el 15 de agosto de 2014 y que fue
retirada generando el archivo del proceso el 29 de julio de 2015.
Aseguró que, a pesar de que inició el proceso creyendo lo manifestado por la señora
SOLEDAD LOZANO, estableció con el tiempo que lo que ella aseguró y lo que reposaba en
las declaraciones extrajuicio aportadas no correspondían a la verdad, ya que las
pretensiones buscaban obtener un beneficio induciendo al operador jurídico en error toda
vez que se basaban en pruebas que no correspondían a la verdad. Aseguró que el padre de
la señora SOLEDAD LOZANO lo presionó para que continuara el proceso, pero que no
continuó por cuanto es claro que la señora SOLEDAD LOZANO no tuvo una relación de
unión marital de hecho con el señor MARLON LÓPEZ CÁRDENAS como le manifestó el
padre de MARLON LÓPEZ al asegurarle que no era cierto que su hijo sostuvo una relación
con la señora SOLEDAD LOZANO.
Se le otorgó la palabra al señor FABIO LOZANO MARTÍNEZ a fin de que rindiera ampliación
y ratificación de queja en la que manifestó que su hija inició un proceso de reparación directa
junto con la familia del fallecido MARLON LÓPEZ, quien le aseguró que el abogado JORGE
ORJUELA no le informaba sobre el proceso, por lo que un asesor le recomendó al doctor
DARÍO ECHEVERRY, a quien finalmente le otorgó poder para iniciar la demanda. Afirmó
que: “… el doctor nos informa que él desiste del proceso, que nos entrega el paz y salvo
21
Folio 145-146 (Cuaderno Original)
porque las pruebas no son suficientes y que él no va a cometer un delito contra el Estado
apoyando una falsedad, entonces nos entrega el paz y salvo. (…) Mi hija le hace el reclamo
de por qué no nos avisó, si el tenía el Facebook, el celular, tenía la dirección de la casa de
mi hija, cómo si la pudieron ubicar para que le quitara el poder al doctor ORJUELA y como
no iba a tener la información para informarle que estaba desistiendo de un proceso. Nos
acercamos junto con mi hija al Juzgado para ver si existía la posibilidad de continuar el
proceso con otro abogado y nos encontramos con la sorpresa de que ya se había decidido y
que mi hija había sido demandada en costas y que él había renunciado al proceso. Nosotros
no sabíamos que él había renunciado a la demanda, creímos que había desistido como
abogado, pero cuando nos damos cuenta que con su poder lo que hizo fue causarle un daño
y un perjuicio a mi hija irreparable, porque le proceso ya a estas alturas no se puede revivir
administrativamente hablando por la acción del doctor ECHEVERRY.” 22
Además, aseguró que las declaraciones de los testigos a las que se refirió el disciplinable
fueron coordinadas por el doctor ECHEVERRY, por lo que no entiende por qué el abogado
desistió de la demanda, causándole un perjuicio a su hija. Finalmente, acotó que el abogado
DARÍO ECHEVERRY informó casi tres meses después del desistimiento de la demanda que
realizó en el Juzgado a su hija y a él de su interés de desistir, cercenándole la posibilidad de
acudir a la administración de justicia a ejercer sus derechos.
El Magistrado solicitó al Juzgado 8 Administrativo Oral del Circuito de Ibagué a fin de que
informara si se le entregaron documentos al doctor DARÍO ECHEVERRY DÍAZ, ofició al
Juzgado 11 Administrativo a fin de que remita copia del proceso con radicado No.
2011.00209.00, citar a las señoras LEIDY SAMANTHA TABORDA CASTRO, LUISA
FERNANDA PEÑALOSA FONSECA, LISETH KATHERINE FAJARDO LOZANO y LILIANA
LIZETH VARÓN RUBIO a fin de recibir testimonio. De igual manera, citó al señor JORGE
ELIECER LÓPEZ y a la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO y fijó fecha para llevar a cabo
continuación de audiencia el día 21 de julio de 2016. 23
22
Ibídem
23
Ibídem
LOZANO ROMERO contra el INPEC, se encontró que no se le ha hecho entrega de los
documentos del proceso al doctor DARÍO ECHEVERRY DÍAZ. 24
Afirmó que el doctor DARÍO ECHEVERRY le indicó que asistiera a su oficina a fin de firmar
un documento en el que manifestaba que desistía del señor JORGE ORJUELA como su
apoderado, ya que fue al togado JORGE ORJUELA al primer abogado al que le otorgó
poder. Con posterioridad, el señor JORGE ORJUELA le informó que ella tenía una sanción
por una mala acción que realizó el doctor DARÍO ECHEVERRY.
Manifestó que le otorgó poder al abogado ORJUELA en abril de 2014 y al doctor DARÍO
ECHEVERRY en mayo de ese mismo año, y aseguró que desconocía si el togado ORJUELA
inició el proceso. Respecto del proceso que inició el abogado DARÍO ECHEVERRY
manifestó que desconocía el motivo del por qué había desistido de la demanda, sin
embargo, arguyó que, debido a que al parecer el doctor DARÍO ECHEVERRY iba a recibir
poder de la familia del occiso MARLON LÓPEZ, tuvo una reunión con el togado, momento
en el cual éste le preguntó si quería continuar con el proceso ya adelantado de manera
singular o si prefería adherirse a las pretensiones de la demanda de manera conjunta con la
familia del occiso; manifestó la declarante que le había comentado al investigado que ella
deseaba proseguir con el proceso ya iniciado de manera particular.
Acotó que el doctor DARÍO ECHEVERRY nunca le informó del desistimiento que realizó de
la demanda, y que fue él quien recopiló las pruebas para iniciar la demanda, por lo que no
entiende por qué consideraba que las pruebas eran falsas. Al enterarse de la sanción que le
24
Folio 164 (Cuaderno Original)
impusieron, contrató a un nuevo abogado con el fin de conocer por qué tenía esa sanción
registrada.
Se recibió declaración del señor JORGE ELIECER LÓPEZ en la que manifestó que
distinguía a la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO porque ella fue a la casa a hablar con
ellos porque quería visitar a su hijo MARLON LÓPEZ. Sostuvieron una relación como de dos
años y ella no volvió a visitarlo tres meses antes de su fallecimiento. Aseguró que distinguía
al señor DARÍO ECHEVERRY porque le habían otorgado poder al doctor JORGE ORJUELA,
pero un intermediario los remitió al abogado ECHEVERRY DÍAZ, quien quería iniciar el
proceso representando a la señora SOLEDAD LOZANO y a su familia. Frente a esa
situación, aseguró que decidió continuar con el abogado JORGE ORJUELA, pero que el
doctor ECHEVERRY DÍAZ inició el proceso a nombre de SOLEDAD LOZANO.
Afirmó que la señora SOLEDAD LOZANO conoció a su hijo en la cárcel y que desconoce si
existía formalidad entre la relación que ellos mantenían.
Finalmente, se ofició al Juzgado 11 Administrativo a fin de allegar copia del proceso con
radicado No. 2014.00209.00 y se reiteraron las pruebas ya decretadas. Se fijó nueva fecha
para continuación de audiencia el día cuatro (4) de octubre de 2016. 25
Finalmente reiteró las pruebas ya solicitadas y fijó fecha para audiencia de juzgamiento el
día primero (1) de febrero de 2017, la cual fue reprogramada para el día 16 de junio del
mismo año. Decisión que quedó notificada en estrados.30
16. El primero (1) de diciembre de 2016, la Notaría 2 de Ibagué remitió registro civil de
nacimiento de la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO.31
28
Folios 207 a 209 CD. Cuaderno Original.
29
LEY 1123 DE 2007.
“(…)
(…)”
30
Folio 207-209, 269, 283 CD (Cuaderno Original)
31
Folio 264-265 (Cuaderno Original)
17. El 23 de febrero de 2017, la Notaría 4 de Bucaramanga remitió registro civil de
nacimiento del señor MARLON LÓPEZ CÁRDENAS.32
19. El 13 de julio de 2017, se ordenó el sorteo de un conjuez para integrar Sala a fin de
proferir sentencia en virtud de que el Magistrado José Guarnizo Nieto se declaró impedido y
se designó al doctor LUIS ANTONIO BARRAGÁN GALLARDO. 34
20. Mediante proveído del primero (1) de agosto de 2017, el Consejo Seccional de la
Judicatura del Tolima Sala Jurisdiccional Disciplinaria declaró disciplinariamente responsable
al abogado DARÍO ECHEVERRY DÍAZ por infringir el deber contenido en el numeral 8 del
artículo 28 y con ello incurrir en la falta prevista en el literal C del artículo 34 de la Ley 1123
de 2007 a título de dolo e impuso consecuentemente sanción de SUSPENSIÓN en el
ejercicio de la profesión de OCHO (8) MESES.35
32
Folio 280-281 (Cuaderno Original)
33
Folio 306 CD (Cuaderno Original)
34
Folio 308-310 (Cuaderno Original)
35
Folio 311-347 (Cuaderno Original)
DE LA SENTENCIA APELADA
En sentencia del primero de agosto de 2017, proferida por la Sala Jurisdiccional Disciplinaria
del Consejo Seccional de la Judicatura del Tolima, fue declarado responsable y sancionado
el abogado DARÍO ECHEVERRY DÍAZ, con SUSPENSIÓN DE OCHO (8) MESES en el
ejercicio de la profesión tras hallarlo responsable de la comisión de la falta descrita en el
literal C del artículo 34 de la Ley 1123 de 2007.
El Seccional de Instancia en el fallo procedió a valorar el cargo endilgado al profesional del
derecho investigado a efectos de determinar su responsabilidad disciplinaria y manifestó
que: “… en el caso concreto se trató del uso de una facultad dispositiva del derecho de su
mandante, conociendo el deber no solo de informar a la misma las consecuencias de la
decisión, sino el deber que le asistía de consultarle previamente dicha decisión, pues queda
claro para la Sala que el letrado no contó con el beneplácito de su mandante, señora
SOLEDAD LOZANO ROMERO para desistir de la acción, hecho del que dicho sea de paso,
se enteró por información suministrada por su anterior abogado, doctor JORGE ORJUELA
GARCÍA, conducta con la que cercenó el derecho a su mandante de acceso a la
administración de justicia, para que fuera ésta en cabeza del juez de conocimiento quien
determinara sí le asistía o no derecho a esa indemnización. 36
Afirmó el a quo que el doctor DARÍO ECHEVERRY DÍAZ no actuó amparado en una causal
de exclusión de la responsabilidad debido a que: “(…) se insiste, era al juez natural, esto es,
al Juez Administrativo de Conocimiento a quien le compelía la obligación de procurar el
cuidado de los intereses del Estado, sin vulnerar el derecho fundamental de acudir a la
administración de justicia que le asistía a la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO (…)” 37
Aseguró la Sala Dual que: “no se evidencia del cuerpo del memorial mediante el cual solicitó
el desistimiento de la acción jurisdiccional, que las razones que le llevaron a tomar esa
determinación fueran el fruto del análisis de encontrarse frente a esa colisión de deberes, se
limitó a pedir, se itera, lacónicamente, el desistimiento, sin argumentar razón alguna.” 38
Finalmente, afirmó el Seccional que el disciplinable: “(…) tenía la capacidad para entender
de lo ilícita de su conducta, en virtud de su condición de abogado, su experiencia profesional
y aun así decidió de manera libre dejar de obrar como se lo exigía el estatuto ético que
regula la profesión del abogado, y lo compelía a respetar el deber de lealtad para con su
36
Folio 332 (Cuaderno Original)
37
Folio 336-337 (Cuaderno Original)
38
Folio 338 (Cuaderno Original)
cliente, confluyendo en sí los elementos de culpabilidad a saber: imputabilidad, conciencia
de antijuridicidad y exigibilidad de otra conducta, por lo que claramente se configura el
dolo.”39
39
Folio 340-341 (Cuaderno Original)
40
Folio 370 (Cuaderno Original)
ceñirse a lo demostrado desde la queja que demuestra que LA MANDANTE SI CONOCIÓ
PREVIAMENTE LAS RAZONES DEL DESISTIMIENTO DE LA DEMANDA.”41
3.- El juez incurre en error inducido al dar por sentado que existen pruebas que no
existen, sin corroborar su existencia y falla con base en esa suposición, ya que del
análisis del testimonio de la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO se desprende que; 1.
Son entregadas por la mandante al mandatario las declaraciones extrajuicio de las cuatro (4)
amigas de Soledad, 2. Falta a la verdad respecto del conocimiento de las razones para
desistir del apoderamiento y la demanda y lamenta su incomunicación, 3. Continúa
asesorada por el abogado Jorge Orjuela después de aparentemente desistir de su
acompañamiento, 4. Falta a la verdad acerca de la autoría de las declaraciones extrajuicio,
5. Falta a la verdad acerca de la antigüedad de la relación, declarando lo mismo que dicen
las declaraciones extrajuicio, 6. Soledad Lozano es encarcelada a título de coautora de los
delitos de extorsión en concurso homogéneo y sucesivo con concierto para delinquir
agravado, 7. Soledad Lozano manipula las circunstancias queriendo aparecer en una
condición que la Fiscalía asume como delictuosa y no afectiva.
4.- Hay defecto material por violación directa de tratados, normas constitucionales,
legales y de remisión jurisprudencial en que incurre la sentencia al condenar sin
prueba, ya que: “El debido proceso y el imperio de la Ley entre otros han sido vulnerados
con la sentencia apelada, debió ser basada en la certeza de la existencia de pruebas
irrefutables, en el convencimiento de la responsabilidad de la conducta imputada, pero no, el
ilustre Togado de la Sala Disciplinaria del Tolima por un convencimiento ajeno al amparado
por la ley, dio por sentado sin estarlo la existencia de prueba condenatoria de un poder que
nunca existió y de desplegar una conducta que falazmente se me endilgó también sin
prueba que lo corrobore.”42
5.- El juzgador actuó completamente al margen de lo establecido en materia
procedimental probatoria, debido a que: “Hay vía de hecho por transgresión directa de
normas sustanciales y procedimentales que vulneran mis derechos como quiera que unos y
otros confluyen en recalcar la interpretación sistemática del caudal probatorio y solamente
sobre dicho análisis proyectar y concluir el proveído; la providencia apelada desconoce el
bloque de constitucionalidad que incluye todo el desarrollo que incluye el debido proceso y
tratados afines que obligan a la evaluación de las probanzas legal, regular y oportunamente
allegadas, dando por sentado la existencia de otras.”43
41
Ibídem
42
Folio 371 (Cuaderno Original)
43
Ibídem
6.- El juez desconoce el principio de veracidad de la prueba, citando al doctor Jairo Parra
Quijano ya que: “Si en el proceso debe reconstruirse o hacerse una vivencia de cómo
ocurrieron los hechos, para sobre ellos edificar la sentencia, las pruebas deben estar
exentas de malicia, de habilidad o de falsedad. Cuando los testigos comparecen, por
ejemplo, al proceso, están obligados a decir la verdad, a no deformarla. El documento debe
plasmar los acontecimientos como éstos realmente ocurrieron.”44
7.- El juez desconoce el principio de libre apreciación de la prueba, ya que: “lo propio
también acontece al apreciar una prueba que no existe y sobre ella edificar una condena
injusta. (…) La convicción del juez debe haberse formado libremente, teniendo en cuenta los
hechos aportados al proceso por los medios probatorios y de acuerdo con las reglas de la
sana crítica.”45
8.- El juez desconoce el derecho a que la prueba regularmente aportada al proceso sea
valorada, citando a Jairo Parra Quijano ya que: “Acerca de la exigencia de valorar
motivadamente la prueba desarrollada en el proceso, no podemos desconocer que en la
práctica se soslaya continuadamente, mediante el uso torticero del denominado expediente
de la apreciación conjunta de las pruebas, consistente en la declaración del órgano
jurisdiccional por lo que se limita a manifestar que el material probatorio ha sido valorado ‘en
conjunto’ o ‘conjuntamente’ con omisión de la necesaria justificación racional de las causas
por las que se ha concedido validez a los datos fácticos probados en el proceso, esto es, sin
especificación de las fuentes y medios valorados positiva o negativamente por el juzgador.” 46
9.- El juez desconoce el principio de la comunidad de la prueba o adquisición
procesal, toda vez que: “Debió y no se hiso (sic) apreciar en forma integral el caudal
probatorio, confrontando, descartando, auscultando, admitiendo y rechazando
justificadamente las probanzas testimoniales y materiales, no simplemente dando por
sentado las acusaciones sin soporte, aplicando de manera bidireccional el beneficio de la
duda, pero evidentemente el proveído fue desconocido y no fue aplicada la unidad
probatoria, estando en la obligación de hacerlo.” 47
10.- El juez desconoce el principio de necesidad de la prueba, debido a que: “Tal como
lo prescriben LEYES, CONSTITUCIÓN Y TRATADOS, nadie puede ser juzgado sino en la
aplicación de norma positiva o negativa vigente, pero de la misma manera no puede ser
juzgado y menos condenado quien sea juzgado en desconocimiento del ordenamiento legal
44
Folio 373 (Cuaderno Original)
45
Ibídem
46
Ibídem
47
Folio 374 (Cuaderno Original)
positivado. Para el sub judice, el debido proceso en materia constitucional y la Certeza de la
existencia de la falta y la responsabilidad del disciplinado en materia disciplinaria togada,
exigen la certeza de la prueba y de la conducta a disciplinar que acá se echan de menos.” 48
11.- El juez desconoce el principio de contradicción de la prueba, ya que: “En flagrante
desconocimiento del debido proceso, fue desconocido el principio de contradicción de la
prueba, cuando fue desconocidos los alegatos y pruebas que descalificaban o al menos
colocaban bajo la sombra de duda razonable las acusaciones que el censor da por ciertas y
condena sin más.”49
12.- El juez desconoce el principio del derecho a la prueba, ya que: “El censor ha debido
y no lo hiso (sic), valorar por igual las pruebas aportadas por ambos extremos en Litis; su
desconocimiento es groseramente violatorio del derecho de defensa, unos y otros en igual
derecho participamos del debate, pero un análisis imparcial exige el análisis imparcial que
acá se hecha (sic) de menos.”50
Además, el recurrente asegura que no le quedaba otro camino que desistir de la demanda,
ya que la Fiscalía General de la Nación inició investigación en contra de la señora SOLEDAD
LOZANO ROMERO por los delitos de extorsión y concierto para delinquir, los cuales se
encontraban relacionados con unos dineros que ella recibió de MARLON LÓPEZ desde la
cárcel, evidenciando que tenían una relación comercial y no afectiva, lo cual lo hubiese
podido involucrar en una defraudación, en perjuicio del Estado colombiano.
Afirmó que: “La decisión de desistir de la demanda en contravía de simplemente retirarla,
aseguraba la protección de la justicia restaurativa de esas insanas pretensiones
(comerciales y no sentimentales) tal y como también lo estimara la Fiscalía cuando
impusiera a SOLEDAD LOZANO la medida de aseguramiento intramuros.” 51
Aunado a lo anterior, el apelante aseguró que: “(…) me opongo a la decisión que no
ausculta y desconoce las razones de peso que obligaron al apoderado a anteponer a la
lealtad para con el cliente, los deberes para con la Constitución y la ley, el respeto por las
normas, la dignidad y el decoro profesionales y la recta y cumplida realización de la justicia y
los fines del Estado dentro de los cuales se echa de menos la conducta que exalta el
Magistrado CORTES REYES COMO PREVALENTE.”52
48
Ibídem
49
Folio 375 (Cuaderno Original)
50
Folio 376 (Cuaderno Original)
51
Folio 354 (Cuaderno Original)
52
Folio 357 (Cuaderno Original)
Acotó el recurrente que: “NADA MÁS ABSURDO que castigar a título de dolo una
conducta altruista que salvaguarda los intereses superiores del respeto por la
Constitución y la ley (…) la conducta que este tribunal tilda de FALTA A TÍTULO DE DOLO,
desconoce y no contempla las motivaciones multicitadas ante esta magistratura, viola de tajo
el sacrificio y entereza con que este profesional del derecho obró de manera derecha e
inmaculada en pos de proteger el interés supremo que el maestro supremo glorificara con su
ejemplo.”53
Aseguró el doctor DARÍO ECHEVERRY que: “EL ENORME TEMOR DE VERSE
INVOLUCRADO EN UN ESCARNIO (…) obligó al togado Echeverry de desistir de la
demanda y a dejar DENTRO DEL DESPACHO y a disposición de quien quisiera
investigar los originales de las declaraciones extrajuicio que tanto insistiera
SOLEDAD LOZANO en que se le devolvieran.”54
Adicionalmente, manifestó el disciplinable que: “LA EXTERIORIZACIÓN se dio ante el
primer juez natural: LA MANDANTE: SOLEDAD LOZANO, precisamente es la
inconformidad de esta con las razones por las que se desistiera del apoderamiento y la
demanda (…) lo que si se encuentra, practica y resalta es lo expuesto por el mismo autor
cuando desarrolla la teoría de la materialización de la colisión de deberes respecto de quien
se debe explicaciones que es para con la mandante con quien tiene un vínculo de
dependencia producto del mandato, no para con el Juez Administrativo con quien solo debe
de radicar el desistimiento.”55
Aseguró el recurrente que: “El huso (sic) indebido del proceso administrativo empleando
medios de convicción fraudulentos, no puede ser patrocinado por ningún abogado, NUNCA
EXISTIÓ PERJUICIO NINGUNO, la señora Soledad conservó todo el tiempo la posibilidad
de demandar aún después de iniciada la queja, pues siempre conservó la posibilidad de
recaudar las mismas pruebas que aportó para que acompañaran la demanda.”56
Finalmente, deprecó el doctor DARÍO ECHEVERRY DÍAZ que: “Se revoque en todo la
providencia emanada del Consejo Seccional de la Judicatura motivo de recurso y en su
lugar se me absuelva de toda responsabilidad, amparado en el valor de la justicia
consistente en que la misma se define como dar a cada quien lo que le corresponde y como
ninguna falta he cometido, ninguna sanción se me puede imponer (…) Londoño Torres
53
Folio 358 (Cuaderno Original)
54
Folio 364 (Cuaderno Original)
55
Ibídem
56
Folio 369 (Cuaderno Original)
jamás me otorgo ningún poder para representarlo, y tampoco intervine como su
representante en actuación legal alguna, el magistrado ponente no podía valorar unas
pruebas inexistentes para condenarme injustamente.”57
CONSIDERACIONES DE LA SALA
57
Folio 376 (Cuaderno Original)
Artículo 59. De la Sala Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la
Judicatura. La Sala Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura
conoce:
1. En segunda instancia, de la apelación y la consulta de las providencias proferidas
por las Salas Disciplinarias de los Consejos Seccionales de la Judicatura, en los términos
previstos en la Ley Estatutaria de la Administración de Justicia y en este código. (…)
Teniendo en cuenta los engorrosos y babélicos argumentos expuestos por el doctor DARÍO
ECHEVERRY DÍAZ y, ante su constante imprecisión y fragmentos repetidos, acota esta Sala
que procederá a manifestarse de conformidad con el orden expuesto ut supra.
Aun cuando erradamente el apelante trae a colación causales genéricas y especiales de
procedibilidad de la acción en acciones de tutela contra providencias judiciales sin que en
principio procedan en este caso por tratarse de un recurso, la Sala responderá a sus
alegaciones.
1.- Hay vía de hecho por violación indirecta de apreciación e interpretación probatoria.
En relación con este cargo, considera esta Colegiatura que, la situación jurídica que
ostentaban los declarantes en relación con posibles investigaciones penales que cursaran en
su contra dentro del proceso son indiferentes, toda vez que lo que se analizó por el
Seccional correspondió a la conducta que desplegó el profesional del derecho investigado, la
cual consistió en desistir de la demanda sin informar a su poderdante y sin consentimiento
de la misma, la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO como se advirtió en las declaraciones
que la misma realizó.
Es claro que el disciplinable debió consultar a su poderdante a fin de que la misma aprobara
el desistimiento, ya que se trataba de derechos e intereses que reposaban en cabeza de la
señora SOLEDAD LOZANO, de los cuales no podía disponer el togado DARÍO
ECHEVERRY DÍAZ, como en efecto hizo.
Aseguró el apelante que el Magistrado dio por probado que el togado no desplegó
actuaciones para salvaguardar los derechos supremos sin poder concluirlo, razonamiento
errado por cuanto el Seccional no realizó dicha afirmación, puesto que lo que aseguró fue
que el disciplinable no actuó amparado en alguna causal de exclusión de la responsabilidad
por lo que no existió colisión de deberes como lo pretendía hacer ver el defensor de
confianza en sus alegatos de conclusión.
Aunado con lo anterior, es menester resaltar que al momento de proponer un ataque frente a
las valoraciones probatorias realizadas por un Juez de la República, en este caso un Juez
colegiado como lo es el Seccional de Instancia, es necesario que el impugnante establezca
de manera clara e inequívoca, las pruebas que fueron valoradas, indicar la valoración
realizada, especificar el motivo de disenso frente a la misma y a su vez se exige que se
exponga la valoración que considera debió haberse realizado por parte del juzgador, cargas
argumentativas ausentes en el recurso en cuestión.
2.- Hay defecto fáctico al dar por sentada la inexistencia de pruebas que si existen. En
relación con este cargo, el disciplinable aseguró que se encontraba imposibilitado de
mantener comunicación permanente con su apoderada, ya que la señora SOLEDAD
LOZANO se encontraba privada de la libertad, por lo que le puso en conocimiento al padre
de SOLEDAD LOZANO, quejoso en el proceso, de las razones para desistir de la demanda,
lo cual fue desmentido por el señor FABIO LOZANO MARTÍNEZ en su ampliación y
ratificación de queja, en donde manifestó que se enteró del desistimiento cuando su hija le
comentó de la sanción que tenía dentro del proceso.
Advierte esta Sala, que no es de recibo el argumento esgrimido por el disciplinable, ya que
pudo haber renunciado al poder sin necesidad de desistir de la demanda, sin causarle
perjuicios a la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO y sin disponer de derechos que no le
correspondían.
Además, es necesario precisar que las obligaciones profesionales surgidas de la relación
cliente abogado, se hacen exigibles frente a este, en este caso la señora SOLEDAD
LOZANO y no frente a su padre. Sin embargo, de haber existido la imposibilidad de
comunicación con la mandante, debió haberse probado la diligencia del togado en el sentido
de intentar comunicar a la cliente su intención de desistir de la demanda, hechos que no se
encuentran acreditados en el expediente.
3.- El juez incurre en error inducido al dar por sentado que existen pruebas que no
existen, sin corroborar su existencia y falla con base en esa falsa suposición.
Considera la Sala frente a este cargo presentado que, el recurrente se limitó a exponer el
análisis que realizó en relación con las declaraciones rendidas por la señora SOLEDAD
LOZANO, sin poner en conocimiento de esta corporación cuáles son las pruebas en las que
se basó el a quo respecto de las cuáles no corroboró su existencia, ya que no evidencia esta
colegiatura que la Sala Dual incurriese en error por una falsa suposición realizada.
Es menester mencionar que, las manifestaciones realizadas por el doctor DARÍO
ECHEVERRY relacionadas con las declaraciones extrajuicio que soportaron la demanda, la
relación que la señora SOLEDAD LOZANO pudiese sostener con el abogado JORGE
ORJUELA, la relación que sostuvo con el señor MARLON LÓPEZ y su situación jurídica ante
la Fiscalía General de la Nación carecen de importancia para esta Sala por cuanto lo que
debe observar la misma corresponde a la conducta desplegada por el profesional del
derecho disciplinable, lo cual no tiene relación con lo mencionado por el mismo.
4.- Hay defecto material por violación directa de tratados, normas constitucionales,
legales y de remisión jurisprudencial en que incurre la sentencia al condenar sin
prueba. Manifestó el recurrente que la Sala Dual dio por sentado la existencia de un poder
que nunca existió, lo que la llevó a un convencimiento ajeno al amparado por la ley
vulnerando tratados y normas constitucionales. Al respecto, observa esta Sala que a folio 33
del cuaderno original reposa poder otorgado por la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO al
doctor DARÍO ECHEVERRY DÍAZ, en donde se le encomendó iniciar y llevar a cabo hasta
su culminación proceso administrativo de Reparación Directa contra la Nación- INPEC.
Resulta ambiguo el argumento esbozado por el disciplinable, toda vez que es claro que se
acreditó la existencia de poder que le fue otorgado, por lo que no acepta esta Colegiatura lo
expresado por el togado DARÍO ECHEVERRY DÍAZ, siendo evidente la ausencia de
violación de normas constitucionales o de tratados internacionales.
5.- El juzgador actuó completamente al margen de lo establecido en materia
procedimental probatoria. En relación con este cargo, considera esta Sala que no se
evidencia por parte del Seccional de Instancia transgresión alguna de normas sustanciales ni
procedimentales, ni desconocimiento del bloque de constitucionalidad, ya que como consta
en el plenario, el a quo observó constantemente los preceptos legales y se ciñó a lo
establecido en materia procedimental probatoria.
Además, manifestó el togado DARÍO ECHEVERRY que se le vulneraron sus derechos por
cuanto el análisis del Seccional de Instancia se proyectó sobre una interpretación sistemática
del caudal probatorio, argumento que no permite determinar que la Sala Dual actuó al
margen de lo establecido en materia procedimental probatoria, máxime cuando el recurrente
no trae a colación los derechos que le fueron vulnerados con la presunta errónea actuación
del a quo.
6.- El juez desconoce el principio de veracidad de la prueba. Advierte la Sala que en este
cargo el doctor DARÍO ECHEVERRY DÍAZ no realizó ninguna manifestación concreta que
permita colegir el desconocimiento del principio invocado, ya que se limitó a citar al tratadista
Jairo Parra Quijano sin advertir situaciones fácticas que pudieran relacionarse con el cargo
alegado, razón por la cual esta Corporación no se pronunciará al respecto.
8.- El juez desconoce el derecho a que la prueba regularmente aportada al proceso sea
valorada. Manifiesta esta Sala que el recurrente no expresó manifestación alguna en este
cargo, considerando que la cita aportada en el mismo le permitiría a esta corporación
conocer su inconformidad, lo que resulta ilógico toda vez que no plantea nada relacionado
con el caso sub examine.
En este punto se debe señalar al impugnante que no basta con exponer consideraciones
académicas sin señalar nada respecto del caso concreto.
58
Corte Constitucional. Sentencia C-830 de 2002.
producidas o incorporadas en el juicio oral y en el incidente de reparación integral, como las
que se practiquen en forma anticipada”59
Advierte esta corporación, que es evidente que se le garantizó al disciplinable el principio de
contradicción, ya que contó con los momentos y circunstancias procesales para controvertir
las pruebas allegadas al expediente, de igual manera, observa esta Sala que no se le
cercenó la posibilidad de incorporar material probatorio como consta a lo largo del proceso,
por lo que no son de recibo los argumentos expuestos por el doctor DARÍO ECHEVERRY
DÍAZ.
12.- El juez desconoce el principio del derecho a la prueba. El disciplinable aseguró que
el Seccional de Instancia no valoró las pruebas por igual en relación con ambos extremos de
la Litis, siendo dicho desconocimiento violatorio del derecho de defensa, asegurando que
incurrió en un análisis parcial.
Percibe esta colegiatura que no se evidencia parcialidad alguna en la decisión proferida por
el Consejo Seccional de la Judicatura del Tolima, ya que procuró en cada instante procesal
actuar conforme a derecho y garantizó los derechos del disciplinable y de los intervinientes
en el proceso de forma homogénea.
Así, resulta claro que no vulneró el derecho de defensa como consta en la actuación
procesal, determinando esta Sala que los argumentos esbozados por el encartado se
constituyen como meras apreciaciones personales sin sustento fáctico que permita concluir
lo contrario.
No puede dejar pasar por alto esta Corporación que la labor hermenéutica de los jueces, se
encuentra amparada por el principio de autonomía funcional, así las cosas, para estructurar
un ataque contra la labor interpretativa y valorativa del juez al momento de analizar las
pruebas, se exige que se demuestre que tal labor interpretativa trasciende los límites de la
autonomía funcional y el cargo no puede simplemente limitarse a expresar que se vulnero
determinado derecho, regla o principio sin un sustento del caso concreto.
Observa esta Sala que, aunque el recurrente aseguró que no le quedaba otro camino que
desistir de la demanda con el fin de no verse involucrado en una defraudación en perjuicio
del Estado, es claro que pudo haber renunciado al poder otorgado con el fin de
desvincularse del proceso sin involucrar los intereses que representaba, mismos que
reposaban en cabeza de la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO.
Advierte esta corporación que, era la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO la que poseía la
decisión de desistir o no del proceso que había iniciado, por cuanto era ella la que podía
59
Corte Constitucional. Sentencia C-371 de 2011
disponer de sus intereses, y no el togado DARÍO ECHEVERRY DÍAZ, quien fungía como
apoderado. Por eso, no es de recibo el argumento que expresa el disciplinable, ya que como
se mencionó anteriormente, pudo haber renunciado al poder conferido y con ello desligarse
de la posibilidad de verse involucrado en un posible fraude.
Tampoco acepta esta colegiatura lo manifestado por el apelante al asegurar que decidió
desistir de la demanda y no simplemente se limitó a retirar la misma por cuando con ello
buscaba asegurar la protección de la justicia de las insanas pretensiones que tenía la señora
SOLEDAD LOZANO al encontrarse incursa en investigación penal, lo cual se fundamenta en
una suposición y en las sospechas que el disciplinable tenía de las presuntas intenciones
fraudulentas que poseía la señora SOLEDAD LOZANO, ya que no se logró probar que así
fuera.
Además, el hecho de que la señora SOLEDAD LOZANO fuese investigada por la Fiscalía
General de la Nación y se encontrara privada de libertad no lo legitimaba para disponer de
sus derechos e intereses con el fin de evitar un perjuicio al Estado, máxime cuando le
correspondía al Juez Administrativo determinar si se le amparaban o no las pretensiones a la
señora SOLEDAD LOZANO.
El togado DARÍO ECHEVERRY DÍAZ aseguró que con su conducta buscó atender los
deberes para con la Constitución y las leyes, por lo que tuvo que anteponer dicho deber al
de lealtad para con el cliente, manifestación que tampoco es aceptada por esta Corporación
por cuanto evidencia esta Sala que en ningún momento el disciplinable tuvo que ponderar
los deberes mencionados, los cuales pudo haber observado concomitantemente sin generar
un perjuicio al deber de lealtad con el cliente como se evidenció en este caso.
Frente a la atribución de la falta que se le endilgó al disciplinable a título de dolo, consideró
el recurrente que resultaba “absurdo” castigar con dolo una conducta altruista, argumento
que considera esta Sala, busca desdibujar su accionar, ya que es claro que el doctor DARÍO
ECHEVERRY DÍAZ no le informó a la señora SOLEDAD LOZANO ROMERO acerca de su
intención de desistir del proceso, tal como ella lo manifestó en las declaraciones que rindió.
Además, no se probó que así fuese, ya que trae a colación el hecho de que, en la queja el
querellante manifestó que conocía las razones del desistimiento, lo cual no logra probar que
efectivamente el encartado le informara a la señora SOLEDAD LOZANO del desistimiento
que iba a realizar, ya que, una cosa es que el querellante manifestara que conocía que el
abogado dudaba de la veracidad de las pruebas recolectadas, y otra, es asegurar que la
señora SOLEDAD LOZANO conocía del desistimiento de la demanda que realizó el
encartado.
Por ende, es claro que el togado DARÍO ECHEVERRY DÍAZ desistió de la demanda como
consta a folio 115 del expediente a sabiendas de que disponía de los intereses de la señora
SOLEDAD LOZANO sin su aquiescencia, misma que no fue probada en el proceso.
Aseguró además el disciplinable que, no retiró los documentos con el fin de dejarlos en el
despacho a disposición de quien quisiera investigar, resultando incongruente con lo
manifestado por el mismo encartado, ya que, si le preocupaba tanto la posible comisión de
una conducta fraudulenta por parte de la señora SOLEDAD LOZANO en perjuicio del
Estado, debió haber puesto dicha situación fáctica en conocimiento de las autoridades
competentes, sin atribuirse el papel de Juez dando por cierto que el proceso tenía
pretensiones fraudulentas.
Manifestó el disciplinable que ante el Juez Administrativo únicamente procedía el
desistimiento de la demanda sin tener que ponerle en conocimiento nada, ya que era a la
señora SOLEDAD LOZANO a la que le debía explicaciones por cuanto existía un vínculo de
dependencia producto del mandato, declaraciones que nunca le manifestó a la señora
SOLEDAD LOZANO pese al vínculo existente en virtud de la calidad de apoderado que
ostentaba.
En relación con la trascendencia social de la conducta, afirmó el recurrente que no existió
perjuicio que recayera en la señora SOLEDAD LOZANO, ya que ella conservó la posibilidad
de demandar aún después de iniciar la queja, situación que, si bien es cierta, no permite
colegir que no se generó un perjuicio, ya que debe recordar esta Corporación que, el acceso
a la administración de justicia debe ser eficaz, pronta y efectiva, por lo que la señora
SOLEDAD LOZANO no debería verse obligada a contratar un nuevo profesional del
derecho, a presentar de nuevo una demanda y a cancelar el pago de la condena en costas
que le realizó el Juzgado 8 Administrativo Oral del Circuito de Ibagué como consta a folio
117 del cuaderno original.
Por lo tanto, esta Sala desestima el argumento que trae a colación el togado DARÍO
ECHEVERRY DÍAZ al asegurar que no existió perjuicio alguno que recayera en cabeza de la
señora SOLEDAD LOZANO, toda vez que lo que se desprende del material probatorio
desvirtúa lo manifestado por el recurrente, tal como se advirtió ut supra.
En este punto resulta importante indicar que la existencia o no de un perjuicio determinado
frente al cliente o un tercero, no se erige como presupuesto necesario para edificar la
responsabilidad disciplinaria del investigado. Al respecto el literal A del artículo 45 de la Ley
1123 de 200760, precisa que tanto la trascendencia social de la conducta como el posible
perjuicio causado se establecen como criterios a tener en cuenta al momento de dosificar la
pena a imponer.
En relación con la petición realizada por el recurrente, manifiesta esta Sala que desconoce
el motivo que invoca el mismo al asegurar que no recibió poder por parte del señor
LONDOÑO TORRES, ya que es evidente que peticiona con base en algo inexistente en el
proceso, ya que esta Colegiatura ignora quién es LONDOÑO TORRES. Además, aseguró
que no intervino como apoderado de este en ninguna actuación y que el Magistrado ponente
valoró una prueba inexistente para condenarlo injustamente, obligando a esta Sala a
manifestar que el doctor DARÍO ECHEVERRY DÍAZ erró categóricamente en su alegación,
ya que, al parecer confunde las situaciones fácticas del caso sub examine con algo
totalmente ajeno a este proceso.
Así las cosas, procederá esta Sala a confirmar la decisión proferida por el Seccional de
Instancia de conformidad con las razones expuestas en las consideraciones de esta
providencia.
En mérito de lo expuesto, la Sala Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la
Judicatura, en uso de sus atribuciones Constitucionales y Legales,
RESUELVE
A. Criterios generales
2. La modalidad de la conducta.
3. El perjuicio causado.
NOTIFÍQUESE Y CÚMPLASE