Análisis 7 (Hollywood 50's)

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Análisis #7

Juan José González N – 2171480

Los Estados Unidos de América se han caracterizado por tener una de las
industrias cinematográficas más grandes del mundo. Desde hace más de
medio siglo, las películas de Hollywood destacan por ser las más comerciales,
pero eso no garantiza que sean las mayores expresiones artísticas. Mientras en
Europa sucedían algunos movimientos como el Neorrealismo Italiano o la
Nueva Ola Francesa, en Norteamérica estaba sucediendo algo diferente. El
sistema Hollywoodense era la columna vertebral de su cine, y lo podemos ver
en cintas como estas.

Si hay algo que le ha gustado hacer a Hollywood, es ser cazatalentos. Su


sistema se basa en superestrellas, pero ellos tienen que encontrarlas. Los
americanos veían a directores de otras partes del mundo y, si les parecían muy
buenos, los llevaban a dirigir en su país (esto sigue sucediendo). Así como pasó
con el italiano Vittorio de Sica, también lo hizo con el británico Alfred Hitchcock.

El director londinense llevaba un poco más de quince años trabajando en el


mundo del cine (así que ya tenía experiencia y era reconocido en varios
países) cuando recibió la oferta de trabajar en Estados Unidos. Allí realizó
muchas de sus películas más reconocidas. Una de ellas es “La Ventana
Indiscreta”.

Siendo un filme de 1954, cuenta con ciertos avances tecnológicos que no se


habíamos visto en otras películas hasta el momento. Sin embargo, esto pasa a
un segundo plano porque lo más importante en este largometraje, en mi
opinión, es la historia y la forma en que es contada. Además de las
actuaciones, pero vamos por partes.
Un fotógrafo sufre una lesión que lo obliga a estar sentado con un yeso en la
pierna izquierda. Sin tener mucho para hacer, lo que más le gusta es ver por su
ventana e indagar sobre la vida de sus vecinos. Tras la desaparición de una
mujer, el hombre comienza a sospechar que uno de los residentes del edificio
fue quien la asesinó, y se encarga de encontrar pruebas.

¿A quién no le llama la atención esa historia? Tal vez a muchos, aunque creo
que para el año en que fue estrenada, al público le atrajo mucho. En mi caso,
siento que es una buena historia. Tal vez no es muy compleja, pero es una
buena historia. Esa era una de las cualidades del cine de Hitchcock, aunque
fueran simples, las películas del británico siempre eran interesantes. Como en
“Psicosis”, el que podría decirse es su filme más reconocido.

Y más aún que la historia, la forma en la que es contada es la que más llama la
atención. Un hombre que no se puede mover ve a través del lente de su
cámara. Eso es lo que la película quiere que sintamos, como si nosotros como
espectadores fuéramos el personaje. No tenemos que movernos para ver
porque todo está en el filme, y hay muchas tomas que se asemejan a lo que
uno vería por el lente de esa cámara. Tomas subjetivas.

Para simular la forma del lente, esas tomas están acompañadas de un efecto
de viñeta que, si bien hemos visto antes en otras producciones, creo que tiene
un sentido más concreto aquí. Asimismo, el hecho de que Jeff no se pueda
mover le da una ventaja y una desventaja a los realizadores, que a mi parecer
supieron manejar.

Por un lado, fue muy ventajoso que la película se hubiera desarrollado en una
única locación, por todo lo que tiene que ver con costos de producción. Pero
por otro lado, ¿cómo hacer que un filme de dos horas no se torne aburrido si las
dos horas suceden en el mismo lugar? Aquí es donde entra la importancia del
guion.
Los diálogos entre personajes son sustanciales para la película. A medida que
se va desplegando la historia, los personajes tienen conversaciones entre ellos
que mantienen al público entretenido. Esto es debido a la personalidad de
cada uno de ellos. Personalmente, me gustó mucho el papel de Stella. Es un
personaje secundario, pero tiene comentarios muy graciosos que llaman la
atención del espectador, a pesar de ser una película de suspenso.

La actuación también juega un papel considerable en la cinta. El personaje de


Jeff es con el que uno se siente dentro de la película, gracias a las tomas
subjetivas. Pero la más llamativa es Lisa. Uno esperaría que fuera un personaje
muy simple sin entrometerse mucho en lo que estaba sucediendo, por el año
en que se hizo la película. Sin embargo, uno se lleva la sorpresa de que es una
mujer muy valiente y que es primordial para resolver el caso, aparte de ser muy
hermosa. En algunas escenas incluso, uno siente que la van a atrapar y sufre
con los que están viéndola desde la ventana.

La aparición de actores famosos como Grace Kelly y James Stewart es una


característica del cine estadounidense y de Hitchcock. Hollywood usaba su
sistema de superestrellas, y lo podemos ver aquí. Al director le gustaba mucho
usar actrices rubias para sus películas. Grace Kelly fue una de ellas, quien
participó en tres de sus filmes.

La cámara es también un elemento importante, pues hay variedad de tomas y


movimientos para mostrar las reacciones de Jeff y las personas en el otro lado
del edificio. Cabe resaltar la forma en que hacen transiciones de una escena a
otra, con cortes a negro. Esto se puede volver un poco molesto al verlo, pero es
una de las formas más claras de decir que se terminó la escena y viene una
nueva.
Devolviéndonos más de diez años atrás, otro gran director lanzaba su ópera
prima, Orson Welles. La historia de un magnate de la prensa norteamericana
fue su primera cinta, y hoy en día es considerada una de las obras maestras de
la historia del cine, “Ciudadano Kane”. Pero ¿por qué es así?

Esta película es completamente innovadora en muchos sentidos, teniendo en


cuenta el año en que se estrenó. Hay varios aspectos que la hacen única, pero
empecemos en orden. La historia es interesante, aunque si no la hubieran
contado de la forma en que lo hicieron, no lo sería tanto.

Lo que más me gustó del filme fue esta manera tan peculiar de desarrollarlo.
Rompiendo el esquema clásico de Inicio – Nudo – Desenlace, el director fue
muy arriesgado y decidió que la historia se fuera contando con Flashbacks a
medida que se iba averiguando sobre la vida de Kane. Es como si hubiera
tomado la historia y la hubiera puesto al revés, porque comienza con la muerte
del personaje y cada que avanza se sabe un poco más sobre él.

Al principio, el filme parece ser un documental. Esto es porque realmente la


idea era documentar, pues los primeros quince minutos de película son una de
una noticia de la muerte de Kane, en la que contaban un poco de quién era y
lo que hizo en su vida. De alguna manera, esa primera escena engaña al
espectador, ya que le da a pensar que la película tendrá un ritmo distinto al
que es, y eso está muy bien.

En cuanto a la fotografía, hay una amplia diversidad de tipos de plano.


Algunas tomas llaman mucho la atención y se quedan en la mente del que ve
la película, crean la identidad del filme. Por ejemplo, recuerdo mucho el plano
detalle de los labios y el bigote de Kane mientras decía sus últimas palabras o la
toma en la que está dando un discurso electoral. La puesta en escena también
tiene gran valor.
Además de la fotografía, otro de los grandes atributos de esta obra es la
música. Hay una innovación en este aspecto, ya que la banda sonora no se
usa de la misma manera que se venía haciendo en la mayoría de películas.
Casi siempre se trataba de sonorizar todo el filme con una música de fondo
imparable que llegaba a cansar al espectador.

El encargado de componer la banda sonora del “Ciudadano Kane”, Bernard


Hermann, optó por poner la música justo donde era necesaria. Es decir, si viene
una escena de suspenso, la música de suspenso debe estar unos diez segundos
antes de que comience la acción, y no debe durar por mucho tiempo. Así que
en esta película encontramos escenas con diferentes géneros de música,
según lo que estaba por suceder. Y no solo esto, sino que la película es tan
completa musicalmente, que incluso hay escenas que se asemejan a un
musical.

A diferencia de “La Ventana Indiscreta”, en “Ciudadano Kane” las transiciones


entre escenas no son cortes a negro. Los encargados del montaje hicieron un
trabajo más libre, así que las transiciones, no solo entre escenas sino también
entre planos, en muchos casos son tomas con movimientos rápidos que no
duran más de un segundo y que no podría decir con exactitud qué son.
Por último, si Welles no es lo suficientemente llamativo aún, aparte de dirigir la
película, la actuó. No tuvo un simple cameo o un papel secundario, sino el del
mismísimo Charles Foster Kane.

La tercera cinta que analizaremos es “El Apartamento”, una película de 1960


que fue dirigida por Billy Wilder y protagonizada por Jack Lemmon y Shirley
MacLaine. Podría considerarse como una simple comedia sin mucha
trascendencia, pero yo creo que es más que solo eso. Finalmente, todos sus
premios y reconocimientos no son en vano.

Un joven trabajador vive en un apartamento de soltero y se lo presta a sus


superiores de trabajo para que hagan de las suyas, con la intención de obtener
un ascenso. Luego se enamora de una mujer que está involucrada con su jefe
y hay un triángulo amoroso un poco tedioso.

Al leer esto, suena como una historia poco relevante. Pero, en realidad es un
relato complejo con muchos giros y con varios trasfondos, aunque es contado
de una manera lineal y muy tradicional. El personaje principal, Baxter, es muy
gracioso y llama mucho la atención del público. Empezando porque la primera
escena es narrada por sí mismo y es una especie de introducción al contexto
del filme, contando en qué ciudad se desarrolla y cuál es la cifra de la
población allí.

Luego vemos a Baxter en su oficina, donde hay una gran cantidad de gente
trabajando. A lo largo de la película, muchas escenas se desarrollan en esa
locación, por lo que hubo un mayor trabajo con los extras, que siempre están
presentes.
Me llamó la atención una escena en la que Baxter está en el apartamento y
está sonando una música de fondo, pero sucede algo que nunca había visto.
Fran pone un LP en un tocadiscos y comienza a sonar la música, luego Baxter lo
quita y la música deja de sonar de inmediato. Esto suena como algo obvio,
porque hoy en día es muy común en el cine. Sin embargo, hasta el momento
no había visto una película en la que la banda sonora fuera controlada dentro
de ella.

Cuando dije que no era una simple comedia, me refería a que hay papeles
que tienen un trasfondo de crítica social, sobre todo el de los jefes. Hombres
que buscan un lugar para tener sexo con mujeres que no son sus esposas en el
que nadie se dé cuenta, y que sobornan a la persona que se los puede proveer
con un ascenso.

El personaje de Fran también es influyente, porque es una de esas mujeres que


son engañadas por ese tipo de hombres que solo se las quieren llevar a la
cama. De igual manera el de Baxter, una persona tan bondadosa con los
demás que termina convirtiéndose en un perdedor del que se aprovechan. De
una forma muy coloquial, es una representación del dicho “El vivo vive del
bobo”. Solo que con todas las vueltas que da, al final “el bobo” sale ganando.

En general, “El Apartamento” es una comedia muy agradable que entretiene


mucho al espectador, gracias a lo fresca que se siente, sus diálogos y algunas
escenas icónicas, pero que también puede llegar a criticar ciertas cosas que
eran comunes entre la sociedad de los años 60.
Cinco años después de este filme, llegó “Doctor Zhivago”, adaptación de la
novela homónima del escritor ruso Boris Pasternak. En esta película se cuenta la
historia de Yuri Zhivago, un poeta que sufre una triste vida como consecuencia
de la guerra. Siendo la más larga de las cintas que analizamos, es también la
más compleja, y no son solo los complicados nombres de los personajes, sino las
diversas cosas que les suceden, las que hacen que sea así.

Para comenzar, el director David Lean decidió que la historia fuera contada
con Flashbacks, como se hizo en el “Ciudadano Kane”. Esto es un recurso muy
inteligente, porque es una muy buena manera de conectar lo que un
personaje está buscando con la historia de otro que influye mucho en lo que
busca.

El contexto histórico del filme es primordial para entender todo lo que sucede.
Yuri Zhivago se encuentra inmiscuido en las repercusiones de la Primera Guerra
Mundial y la Revolución Rusa. Aunque no se intentaba hacer una película
histórica, todos estos acontecimientos tienen una gran importancia en la
historia y son los que hacen que las vidas de los personajes den vueltas.

A pesar de todo lo vivido por Zhivago, su trágica muerte sin poder ver a su
amada esposa se salía por completo del esquema Hollywoodense, donde el
personaje no debía morir y debía tener un final feliz. De cierta manera, esta
“evolución” fue lo que logró el cine bélico del Neorrealismo Italiano, solo que
contada desde la realidad de otro país.

Y es que, aunque toda la película sea una constante racha de emociones, ya


sean tristes o felices, el final es lo más impactante de todo. Durante todo el filme
hay una incógnita, y al final se resuelve de una forma sutil pero muy
representativa. ¿Qué más simbólico para los soviéticos que una balalaika?

La cantidad de extras en las escenas de guerra es impresionante. Se ven


cientos de soldados a caballo, todos vestidos con su respectivo uniforme y un
emblemático gorro ruso, mientras también se ve gente del común tratando de
escapar o rebelándose contra la autoridad opresora. Esto sin duda dice que
hubo un excelente trabajo desde la dirección de arte en vestuario.

En conclusión, estas son algunas de las películas que se hacían en


Norteamérica hace alrededor de 50 años. Con lo que hemos visto en clase,
podría decirse que el país con menos contribución artística en el campo
cinematográfico había sido Estados Unidos hasta la época. Sin embargo,
después de ver estos filmes podemos darnos cuenta de que comenzaba a
haber una evolución en el cine de Hollywood y que no siempre se hacían
películas de una forma industrializada. Los directores que analizamos lograron
demostrar que el cine no solo se trata de hacer dinero, que no es solo seguir un
esquema, que “hay algo más importante que la lógica: es la imaginación”
(Alfred Hitchcock).

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