Lecturascriticas 5 Final

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Lecturas

P E R I Ó D I C O D E L I B R O S

C R Í T I C A S

Boris Vian:
El odio a lo inútil

Reseñas sobre libros de:


Alejandro Arciniegas, Salman Rushdie, Iván Cepeda, Jorge Rojas, Maurice Maeterlinck
John Stuart Mill, Fernando Quiroz, George Jackson, William Ospina.

P V P $ 3 . 0 0 0 - Pe r i ó d i c o t r i m e s t r a l d e c r í t i c a b i b l i o g r á f i c a . No . 5 . B o g o t á 2 0 0 9 I S S N 2 0 1 1 - 6 1 2 8

Febrero - Abril de 2009. No. 5. 1


Lecturas C R Í T I C A S
C o n t e n i d o

Director: Carlos Andrés Almeyda Gómez


Subdirector: Celedonio Orjuela Duarte
Editor: Diana Marcela Arias Naranjo
Colaboradores:
Juan Manuel Roca, Sophia Vázquez Ramón
Luisa Fernanda Caicedo,, Omar Ortíz, Ramón Andrés,
Literaturas
Santiago Mutis, Carlos Aguasaco, Rodrigo Pérez Gil
Gabriel Arturo Castro, Nuno Júdice, Adriana Laganis Soledad Brother 3 Por Celedonio Orjuela
Alexander Prieto Osorno, Felipe Hoyos, Daniela Hernández,
Carlos Sánchez Lozano, Alfonso Carvajal, Robinson Marín V. El contador de historias 4 Por Jaime Londoño
Hollman Lozano, Jaime Londoño, Julio Mario Alvear Justos por pecadores 5 Por Julio Mario Alvear
Alberto Bejarano, Nelsón Romero, Carlos Flaminio Rivera,
ISSN 2011-6128
La encantadora de Florencia 6 Por Carlos Enrique Pachón
http://periodicolecturascriticas.blogspot.com La revancha de los siervos 7 Por Juan Manuel Roca
Periódico de libros Lecturas Críticas
Clásicos
Calle 75A No 23-22 Bogotá, Colombia.
Teléfono: 300 2890341 - 318 3372355 La inteligencia de las flores 8 Por Santiago Mutis Durán
No. 5. Febrero de 2009 - Abril de 2009
PVP: $3.000 Crónica
[email protected] - [email protected]
©2009 A las puertas de El Uberrimo 9 Por Robinson Marín V.
Impreso en Editorial Códice Ltda. Boris Vian
Criterios editoriales y de selección competen exclusivamente al periódico.
Colaboración solicitada. Los juicios emitidos en la presente edición Escupiré sobre vuestra tumba 11 Por Celedonio Orjuela
son responsabilidad de sus autores y no comprometen la opinión de
Perfíl 12 Por Sophia Vázquez Ramón
Lecturas Críticas.
Poesía

Las derrotas 14 Por Santiago Espinosa


Libros de la casa 15
Pensamiento colombiano (Tomo 2) Por Paul Von Leopold
Bolaño salvaje Por Alberto Bejarano
Música
Chopin 16 Por Diana Marcela Arias
Autonomía y gracia 16
La biblioteca de Mozart 17 Por Ramón Andrés
Ensayo
La Escuela de la noche 18 Por Gabriel Arturo Castro
Sobre la libertad 19 Por Omar Ortíz
En breve 20
A cada quien su animal de Antonio Cisneros; 49 habitaciones de Darío
Sánchez-Carballo; Primer viernes y otros cuentos de José Bercelio Forero;
Michel Foucault: Perspectivas contemporáneas alrededor de su obra, varios
autores; El sonido es vida de Daniel Baremboin; Gödel, Escher, Bach, un
eterno y gracil bucle de Douglas Hofstadter; Creería en ella si supiera bailar
de Carlos Alberto Celis Victoria.

Sobre la crítica 23

Nuestra Carátula: Boris Vian


Por Pascal Rabaté
Pascal Rabaté (Tours, Francia, 1961). Reconocido ilustrador. Esta
imagen fue tomada del libro Boris Vian en Bande Dessinée, donde 26
dibujantes recrean a su manera canciones del músico y escritor francés.

2 Febrero - Abril de 2009. No. 5.


Literaturas

En la piel de la cárcel
Por Celedonio Orjuela Duarte

1811; por George Boxley en Virgi-


Soledad Brother
nia, en 1815 o Denmark Vesey en
George Jackson Carolina del Sur en 1822, así como
Monte Avila Editores el motín en el barco español Amis-
Caracas, 1971 tad, en 1839, que llevó a un pro-
327 páginas nunciamiento de la Corte Suprema
de Estados Unidos que declaró
Apostillas a la libertad negra ilegal el transporte de amotinados
desde África, a través del Atlántico,
Toda emancipación del alma vie- para su venta como esclavos y que,
ne revestida de pequeñas victorias, por lo mismo, no eran legalmente
caso de las luchas de los negros en esclavos sino libres.
los Estados Unidos. Las primeras
potestades negras fueron motivadas Soledad Brother
por profundos sentimientos religio- La década de los 60 y 70 fueron una
sos, de allí que al negro se le cate- suerte de síntesis de lo que significó
quizara con tal insistencia como si el pensamiento en el siglo XX. En
precisamente careciera de alma. ese lapso de tiempo, se forjan otras
Soledad Brother de George Jack- miradas estéticas, políticas, eco-
son, es un epistolario escrito por un nómicas, filosóficas, sociológicas,
alma emancipada, tal como lo reve- libertarias, etc. que acompañaron
la Jean Genet en su prólogo: “Des- el malestar de un siglo que prueba
de Richard Wright hasta George nuevas formas bélicas. Después de
Jackson, los negros se han quitado la guerra fría, la sed expansionista
de encima todos los harapos bíbli- no se detuvo: mediante invasiones
cos y presbiterianos: sus voces son so pretexto de supuestas causas an-
más crudas, más negras, más acusa- titerroristas, se propician otras gue-
doras, más implacables, para evitar rras con líderes más insensibles que
toda referencia a los cínicos engaños el mismo Hitler.
de la institución religiosa”. El mundo contemporáneo siente
El trasegar de la emancipación ne- noviembre de 1831. En 1967 el A lo largo de la primera mitad del un remezón en todos los órdenes
gra en América puede ser rastreado escritor Wiliam Styron publicó una siglo XIX, creció el movimiento de la inteligencia humana, ocurren
desde la personalidad de Nat Turner novela sobre la revuelta, titulada Las Abolicionista en Estados Unidos y grandes fenómenos que sacuden el
(Jerusalén, Virginia 1800 - 1831), confesiones de Nat Turner que ob- entró en conflicto con el fuerte apo- orden establecido por zares, sulta-
conocido entre los suyos como tuvo el premio Pulitzer en 1968. yo al sistema esclavista por parte de nes y engreídos dictadores, se fra-
el profeta. El 4 de julio, día de la Como ocurre cuando hay levan- los habitantes blancos sureños que gua la Revolución Bolchevique de
independencia, organizó una rebe- tamientos espontáneos de incon- se beneficiaban ampliamente del 1917, la guerra civil española del
lión debido a una visión, acaso por formidad, de inmediato se hecha mismo. 36, el mayo del 68 francés, y otras
su profundo carácter religioso. Di- mano de la Constitución para per- Desde 1830, un movimiento re- fuerzas en el ascenso de masas que
cha iluminación le encomendaba la mear futuras insurgencias, caso de ligioso encabezado por William no fueron otra cosa que la acumula-
liberación de su pueblo. Turner em- la Carta Norteamericana. El primer Lloyd Garrison declaró que la ción del nuevo espíritu del hombre.
prendió su ‘cruzada’ con algunos de Código de Negros, documento que esclavitud era pecado y exigió a los Esa pertinaz rueda de la historia
sus hermanos, logró reunir a más de definía a esos hombres “como escla- amos que se arrepintieran e inicia- reciente, fue jalonada por pensado-
50 hombres, entre esclavos y negros vos de por vida” y les negaba toda ran un proceso emancipatorio. Este res como Darwin, Marx, Engels,
libres. Los rebeldes viajaron de casa posible instrucción, fue editado en movimiento fue muy controvertido Freud, Althusser, Sartre, Durruti.
en casa liberando esclavos y ma- Meryland, en 1664. Un siglo más y uno de los factores que originó la Soledad Brother, de George Jack-
tando a todos los hombres blancos tarde, Thomas Jefferson (1743- Guerra Civil. Aunque fueron pocos son, es el producto de ese remezón
que encontraban. Para no alertar a 1826) tercer presidente de los Es- los abolicionistas que, como John histórico. Nacido en un “ghetto” de
nadie de su presencia, utilizaban ar- tados Unidos, borroneó ese texto al Brown, defendieron el uso de la Chicago en 1941, donde pasó su
mas blancas, cuchillos y hachas en afirmar: “…Todos los hombres han fuerza armada para apoyar levanta- infancia y adolescencia. En 1960
lugar de armas de fuego. La rebe- sido creados iguales; su Creador les mientos de esclavos, se produjeron fue condenado, por complicidad
lión fue vencida en 48 horas, pero ha dotado de ciertos derechos ina- revueltas como la de Nueva York, de en el robo de 70 dólares en una ga-
Turner logró evitar ser capturado lienables y entre estos derechos están 1712; la Rebelión Stono en Caroli- solinera, a una pena de prisión de
durante meses. la vida y la libertad”. Esta retórica na del Sur, de 1739; una nueva in- mínimo un año y de un máximo
Thomas Ruffin Gray, su aboga- convenció a Quork Walker, quien surrección en Nueva York en 1741; de reclusión perpetua. Transcurrido
do de oficio, publicó un folleto reclamó judicialmente su libertad la encabezada por Gabriel Posser el primer año, el condenado debía
titulado “Las confesiones de Nat apoyándose en ello, aboliéndose así en Virginia en 1800; la dirigida por pedir anualmente su libertad a las
Turner”. Fue ahorcado el 11 de la esclavitud en Massachusetts. Charles Deslandes en Louisiana en autoridades penitenciarias, que se

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la denegaron sistemáticamente en Disimulaba ante las monjas y los cionaria negra. En tal sentido nace mientos desde siempre. Tú eres la
tanto que la concedieron, en 1963, curas; ayudé [Sic] misa solo para te- el partido de Las Panteras Negras. que siempre ha conducido las cosas.
al autor material del delito. El 13 de ner mejores oportunidades de robar Este epistolario es un río caudaloso Lo has convertido en un inútil.
enero de 1970, en el curso de una vino en el altar; canté en el coro por- en el que los personajes: se dan cita Ahora, también de Jon estás ha-
reyerta racial claramente provocada que me obligaron. Cuando íbamos para el crecimiento de una concien- ciendo un inútil. Eres una mujer,
por los guardianes y que tuvo lugar de visita a las iglesias católicas para cia que no da respiro a un Estado piensas como una mujer burguesa.
en el patio de la prisión de Soledad, blancos ricos, nos trataban muy que ha puesto todos los tentáculos Pero este es un mundo de hombres.
un vigilante desde una torre dispa- bien, alimentándonos, recompen- en el alma de los desposeídos para El mundo actual exige un pensa-
ró una ráfaga de ametralladora que sándonos con regalos. Aunque me que no puedan permear el estable- miento viril. Tu manera de ver el
dejó tres muertos y varios heridos. odiaba, el viejo Padre Brown nunca cimiento. Jackson, el protagonista mundo es necesariamente burgue-
Un guardián fue asesinado en una dejó de ponerme al frente cuando de este poema épico, lo va deve- sa y femenina. ¿Cómo podríamos,
de las galerías, sin pruebas, Jackson nos exhibía, y eso que yo era el más lando, desde el ejercicio del poder yo Robert, Jon, o cualquiera de los
fue acusado de su muerte. Geor- feo, flaco y ruin del grupo. y sus funciones en las cárceles de La hombres de nuestra clase, cumplir
ge Jackson fue muerto a tiros por Soledad y San Quintín y la creen-
Todo ese ambiente de tortura coti- con lo que debemos como hombres
los guardianes de la cárcel de San cia en líderes como Bunchy Carter,
diana de la prisión, debido al per- si pensamos como mujeres burguesas
Quintín, en el curso de un supues- black panther, asesinado en 1968;
manente asedio por parte de una o dejamos que nuestras mujeres bur-
to intento de fuga. Eldridge Cleaver, ministro de in-
guardia que somete con vejáme- guesas piensen por nosotros.
Soledad Brother está dividido en nes a los cautivos, no es otra cosa formación de las Panteras, a cargo
dos apartados: “Cartas recientes y de las relaciones internacionales, Jackson nunca mostró el más mí-
que “otro eslabón en la cadena de nimo asomo de debilidad en sus
una autobiografía” y “Cartas 1964- humillaciones”. La cárcel, lugar de debió dejar el país el mismo año en
1970”. Ya el género epistolar para que Robert Kennedy fue asesinado. creencias revolucionarias, no des-
estudio de Jackson, es un universo
el hombre del siglo XXI es una ex- Desde Corea del Norte anunció falleció porque justamente lo lleva-
de permanente aprendizaje; le pide
presión en desuso debido al Fax y la formación de una oficina inter- ron allí, al nervio más alterado del
a Robert (su padre) la maquina de
la Internet, pero los libros que aún nacional del partido. En Argelia, racismo norteamericano, la cárcel.
escribir, los rollos de cinta, libros y
encontramos hasta principios de los más libros. Horas y horas buscando después de meses de negociacio- O digámoslo con palabras de Jean
noventa, que emplean este vehículo el futuro del hombre, su premisa nes, consiguió el status de exiliados Genet, otro exconvicto:
literario, atrapa como una buena era: “captura el tiempo”. Y eso ha- políticos para los miembros de su El racismo está esparcido, difundi-
novela o un libro de poemas, por cía Jackson desde todas las formas partido que deberían abandonar el do a través de toda Norteamérica,
eso dice Jean Genet: del conocimiento, en los libros que país. Ha dicho: “No podemos, no repulsivo, clandestino, hipócrita
Muchos podrían sorprenderse al ad- Robert podía comprarle o median- queremos ser racistas negros. En y arrogante. Hay un lugar donde
vertir que la narrativa epistolar es, te cartas que escribía a editoriales los Estados Unidos, el enemigo de podríamos esperar que cesara, pero,
todavía, capaz de proporcionarnos solicitando ejemplares. Se detenía los negros no es el blanco. El ene- al contrario, es justamente en ese
una forma resueltamente moderna en el análisis del aspecto criminal y migo de los blancos no es el negro. lugar donde alcanza su más alto
de expresión; aun si sólo yuxtapone- comprendía el fracaso de la política El enemigo, para unos y otros, es el grado de crueldad, intensificándose
mos (una después de otra) cierto nú- carcelaria, sobre todo en la era de capitalismo”. Seguimos descubrien- a cada segundo, devorando cuerpos
mero de cartas de George Jackson, Reagan. George Jackson también se do la historia negra norteamericana
y almas; es en ese lugar donde el ra-
obtendremos un impactante poema sumergía en lecturas que deparaba desde las mazmorras y las luchas de
cismo se concentra: las prisiones de
de amor y de combate. la época: Marx, Lenin, Trotsky, En- liberación. En este verlo todo desde
los Estados Unidos, la prisión, La
gels y Mao. Conoció a guerrilleros la responsabilidad, Jackson no tiene
Estas primeras cartas revelan una Soledad, su corazón: las celdas de
negros: George “Big Jake”, Lewis reparos en decir a uno de sus per-
infancia rebelde, producto de la Soledad.
y James Carr., W. L. Nolen, Bill sonajes:
marginación a la que fuera someti-
do por cuenta de los blancos, des- Christmas, Torry Gibson y mu- Siento que me has fallado. Mamá
de la misma educación, impartida chos otros. La idea de Jackson era se que me has fallado. También se Celedonio Orjuela Duarte es
por clérigos en los que Jackson no transformar la mentalidad criminal que Robert nunca tuvo opiniones poeta, novelista y comentarista de
creía: negra en una mentalidad revolu- propias. Tú has dirigido sus pensa- libros.

La agenda del destino


Por Jaime Londoño
es un gran error. Estuvo bien lo tiempos narrativos y con el des- relato con una historia apta para
El contador de historias de la escritura automática, pero doblamiento de la fascinación y la palaciega Sherezada: siempre
Rabih Alamedine fueron mecanismos que pasaron del preciosismo, el escritor con- el Emir, las “exquisitas fuentes
Mondadori a ser fragmentos criticados por temporáneo queda mejor vestido burbujeantes” y el antagonista,
gran cantidad de autores. Lo que con los pasajes y las técnicas que su propio deseo que funciona
España, 2008
forzadamente puede funcionar invente en sus libros. como contradictor respecto de
660 páginas
para la poesía, es una palada de El códice de la novela está com- su vida rodeada de lujos y derro-
barro en el lente de la narrativa. prendido por varias historias que ches. Y, claro, como las narracio-
Que Rabih Alamedine, autor de Los grandes escritores nacen más se cruzan nutriendo a tres conti- nes se cruzan con otras, no podía
la novela El Hakawati (Título de los productos de la inventiva nuum principales, que se inician faltar el tema de Abraham, Agar
original de El contador de histo- que de los facilismos del azar. De con un llamado en el que el au- y Zara: Fátima es la esclava del
rias), piense que para narrar sólo otro lado, aunque puede ser váli- tor solicita al lector le permita ser emir quien le sugiere que en vez
se necesita poner palabra tras do tomar recursos de obras de la su dios dentro de la vida narra- de yacer con ella intenten a tra-
palabra, como lo afirma Javier literatura, en este caso de Las mil tiva. Al dejar de lado la invita- vés de la magia traer al mundo a
Marías en Corazón tan blanco y una noches, para jugar con los ción, Rabih Alamedine, abre el un hijo.

4 Febrero - Abril de 2009. No. 5.


En busca de ese destino empren- tamente plana a no ser por la pre- tra recluido el padre del joven mediocres de ahora se contem-
de el camino que la lleva hasta el sencia de un abuelo cuyos “ami- intérprete al que siempre lo van a pla el facilismo como vehículo
inframundo donde se hace aman- gos imaginarios demostraron ser visitar toda su parentela sin dejar de apoyo para atraer al público.
te de un yinni: Efreet – Yehanam más leales que los reales, aunque de lado las tensiones, las anécdo- No ocurre así con la memoria
quien tiene a su servicio siete de- solo fuera porque, a diferencia tas y las delicias culinarias con las del abuelo que merodea por los
monios: Adán, Ismael, Noé, Job, de estos últimos, existían”. El que se entretienen, como diría el parajes evocativos de los mundos
Elías, Ezra, Isaac y Jacob. Estos abuelo habla con su nieto sobre abuelo “la agenda del destino no interiores, sin llegar a repetir el
acompañan a Fátima a rescatar la música y sobre los contadores es siempre algo desnudo y diáfa- monólogo interior.
a su amado del palacio de cris- de historias: los Hakawati, perso- no”. En cuanto a los diálogos. Como
tal en el que un ser luminoso, el najes de gran respeto en los cafés La tercera historia es la memo- narrador seguiría las recomenda-
rey Kade, trata de ocultarlo. Du- en donde los cuentos invitan a ria del abuelo que se fragmenta ciones que Gilles Deleuze propo-
rante el viaje navegan en la con- desarrollar un altarab semejante en miles de recuerdos, lo que ne en Crítica y Clínica. En tér-
versación fragmentos bíblicos en a un grado especial de atención. permite que la narración se tor- minos generales afirma que no
donde se burlan de los pasajes y Esto produce en ne iridiscente en hay necesidad de especificar las
de los colores. La sensación que el niño el pro- caminos y bifur- actitudes que toman los persona-
deja la secuencia narrativa es que fundo deseo de caciones. En esta jes cuando responden, los inte-
la trama se desprende de alguno aprender a tañer trama el encade- rrogan o intervienen: en el frag-
de los velos que ha dejado Shere- el oud, un instru- nado permite que mento debe estar insinuada de
zada al lado de la cama para solaz mento parecido la novela pueda tal forma la mueca que al lector
del Emir. al laúd, pero en el sostenerse, es aquí no le quepa la menor duda sobre
La segunda historia ocurre en que no cabe otra donde ocurre el el estado de ánimo que ronda al
Beirut, Líbano, durante la guerra melodía que las verdadero fenó- personaje. Nombrar el gesto con
civil. En ella una familia acomo- que produce la meno narrativo una sola palabra es un facilismo.
dada desciende de un personaje, música árabe. novedoso que in- Dostoievski desarrolló muy bien
producto de la violación que co- El centro de re- vita a reflexionar este arte.
mete un evangelizador cristiano unión de esta fa- sobre los sistemas
en uno de los barrios de Beirut. milia es un cuar- literarios con-
La epopeya de esta familia co- to de hospital en temporáneos. En Jaime Londoño es profesor uni-
merciante de coches sería absolu- el que se encuen- muchas novelas versitario, editor, y poeta.

Opus Dei o el velo totalitario


Por Julio Mario Alvear
premios que brindan las casas edi- cedida y por el tema que no deja Balaguer, falange católica que en
Justos por pecadores toriales. Se gira, por tanto, en torno de ser cautivante, aunque una vez el Código Da Vinci fue cataloga-
Fernando Quiroz a esa producción que llega al gran se aborda su lectura se va cayendo da como una secta asesina. El po-
Editorial Planeta supermercado (Mario Muchnik les en un desencanto en esa doble vía, der del Opus Dei puede analizarse
Bogotá, 2008 llamó hace poco en Bogotá ‘libró- es decir, el corpus del relato es en- desde su influjo en el Vaticano, su
222 páginas dromos’) con la impronta de mo- deble, casi un dictado del mundo representación en las élites políticas
nopolios como Planeta, Plaza & editorial mediático en el que parece y empresariales más retardatarias
Janes, Noguer, Alfaguara, etc. estar inmerso Quiroz y el tema tan que por demás se oponen al aborto,
En nuestro medio, casi todos estos transgresor sigue ileso para un lec- al uso de condones, al divorcio, la
textos, muchos de ellos dedicados tor medianamente avisado. investigación con células madre y
al mundo biografiado de la mafia La doctrina los derechos de los homosexuales.
criolla, conservan una prosodia pre- Digamos que estos ingredientes po-
Veámoslo más en detalle: una no- drían haber enriquecido más la his-
meditada, con un cultivo esmerado
de la frase redonda, aquello a lo que vela escrita en primera persona del toria al mostrarnos, en un lenguaje
el novelista Juan Marsé denunciaba singular, es decir, un tiempo verbal más literario y menos periodístico,
con la afortunada expresión “prosa ideal para la intención de la saga en esta secta fundada el 2 de octubre
de sonajero”. El escritor medita un la medida que recoge la confesión de 1928 por José María Escrivá Ba-
tema novedoso, una escritura livia- de un joven militante del Opus laguer, sacerdote español canoniza-
na en la que el lenguaje no sea un Dei. Aquí podríamos encontrar una do en 2002.
reto para el lector, agréguese a esto doble intención dado que quien Vicente, narrador y protagonis-
que sea un joven aplicado y que su cuenta la anécdota es un jovencito ta de la novela de Quiroz, esboza
universo novelado seduzca otros reclutado por la Congregación de aquel mundo hermético donde se
A menudo, cada que se encuentra lenguajes comunicativos, especial- Escrivá Balaguer y castrado de su practican los rituales enfermizos
una formula para aquella franja de mente el cine. Eso parece ocurrir libre albedrío, cenáculos frecuentes del Opus Dei. Son pinceladas en
lectores desprevenidos -visitantes con la novela Justos por pecadores en un Estado conservador como las que Quiroz no quiere arriesgarse
de aeropuerto o salas de espera-, de Fernando Quiroz, finalista del el nuestro o, si se quiere, en ciertas en un mundo mucho más comple-
aparece una serie de ‘novelas’ en Premio Iberoamericano de Narra- franjas urbanas que adolecen de esa jo como el que este tema propone.
las que se triangula el marketing: tiva Planeta-Casamérica 2008. En suerte de apartheid socio-cultural, Pretende más bien mantener un
editor, escritor, lector; en razón a principio, inquieta su lectura por en la medida que su regulación cierto equilibrio entre un personaje
la supremacía del mercado y los los pergaminos de que viene pre- no dista mucho de los métodos de medio bobo y el ambiente que lo

Febrero - Abril de 2009. No. 5. 5


Literaturas
envuelve, que no pasa de un pa- países que nos llevaban la delantera de la penitencia y la mortificación del cura Marcial Naciel, fundador
dre moderadamente pagano y una en esta cruzada urgente, que noso- corporal, según aquel dicho “en del Opus Dei en México. Luego de
mujer que lo inicia en las delicias tros no podíamos quedarnos atrás, y tanto avanzarás en cuanto te hagas décadas de prácticas pedofílicas, el
del sexo, para que no se pierda del nos recordó las palabras que alguien violencia a ti mismo”. Para some- actual Papa Benedicto XVI no tuvo
todo en la impotencia de la culpa le oyó decir a Escrivá de Balaguer ter al cuerpo practican fielmente la más remedio que obligarlo a retirar-
debido a las sobredosis de misas cuando visitó en Chile al dictador costumbre de llevar al menos dos se de su oficio sacerdotal, no fue so-
recibidas, en fin, un personaje más Augusto Pinochet: ‘Algunas veces horas cada día un cilicio de piernas metido a proceso canónico alguno,
bien esquemático, inmerso en un Dios permite matar gente por una (traje de tortura); además, una vez a y como sanción fue “condenado” a
mundo en el que se hubieran podi- causa justa’”. la semana, usarán unos látigos que llevar una vida privada de rezos y
do explotar más aristas que las aquí La flagelación se impacta contra los glúteos. A las penitencias.
planteadas. Personaje que seguirá mujeres, en esa suerte de misoginia Desde que Joseph Ratzinger presi-
Más adelante, la pregunta de ‘a
viviendo, un poco autista, en esta de sus directores, las ponen a dor- día la sagrada Congregación para
quién va dirigida la historia’, revela
Colombia que sigue sufriendo los mir en tablas y a realizar los trabajos la Doctrina de la Fe, nombre mo-
las carencias tanto discursivas como
mismos males: domésticos más denigrantes. derno de la Santa Inquisición, tenía
literarias de este libro a medio ca-
A manera de introducción, Navarro mino, el relato intimista que bos- La pedofilia conocimiento de las andanzas de
nos explicó que uno de los derroteros queja la historia apenas como una los curas pedófilos por el mundo y
…Yo estaba mudo, inmóvil, do-
que nuestro padre había señalado fachada: nada ocurre con ellos aparte de las
para el lustro que acababa de co- minado por el pánico, cuando sentí
Busqué el látigo, me encerré en el que el padre comenzaba a limpiarme, tímidas denuncias de algunos pe-
menzar era el de fortalecer la lucha baño, me desnudé y empecé a gol- riodistas o familiares o de las mis-
contra el comunismo, uno de los primero la camisa y luego el pantalón,
pearme la espalda. Era un azote de hasta que sus manos se detuvieron en mas víctimas.
mayores enemigos de la religión, de hilo de cáñamo que terminaba en Esta novela podría haber sido más
la verdad y de los hombres de bien. mi miembro, que andaba tan asustado
cinco nudos gruesos. Estaba reforza- como yo. Cambió de pañuelo y me frotó valerosa si no hubiera contagiado
Que, apoyado en su inteligencia do en las puntas con astillas de hue- de los intereses mediáticos de los
privilegiada, había establecido una con fuerza entre las piernas, de manera
so que herían la piel en cada golpe. repetida, mientras pronunciaba pala- emporios editoriales arriba señala-
serie de pasos que irían siendo re- dos, garantes del premio de conso-
(…) Los superiores promovían con bras incomprensibles. Cada vez se acer-
velados a su debido tiempo y que, lación que este libro lleva, quizá por
frecuencia inusitada el uso de las caba más, hasta que su cuerpo estuvo
por ahora, de manera inmediata, se agredir de manera precoz el gran
disciplinas –como las llamaba Escri- todo encima mío. Supuse que era mi
daría inicio a una serie de acciones
vá–, aduciendo que a nuestro padre castigo y no fui capaz de retirarlo ni de establecimiento que significa la
en varios frentes: Las universidades
le producía una alegría enorme que pedirle que se detuviera. Iglesia Católica y sus más siniestras
públicas, ciertos organismos del Esta-
castigáramos el cuerpo, “porque tu falanges.
do y una serie de empresas en la que La pedofilia ha sido un fenómeno
cuerpo es tu enemigo”. antiguo en la iglesia católica y es
algunos miembros destacados de la
organización ocupan cargos directi- Estas congregaciones masoquistas más frecuente en el ala conserva- Julio Mario Alvear es médico y
vos. Navarro nos explicó que había fortalecen la obediencia a través dora de la misma, como fue el caso comentarista bibliográfico.

Hacia un espejo oculto


Por Carlos Enrique Pachón

La encantadora de Florencia Aquel secreto por contar que con- día hacer tambalearse la propia
Salman Rushdie duce la lectura, hace que el lector dinastía”. En otro aparte, Akbar
Editorial Mondadori se involucre con mayor eficacia, el Grande, hombre lleno de in-
intentando anticiparse al relato, terrogantes acerca de la política,
Bogotá, 2009
tomando las pistas dejadas por las religiones, el tiempo, el arte,
200 páginas
el narrador y configurando su y el lenguaje, no sabe si debería
desenlace. Sin embargo, al anun- hablar desde el “yo” o desde el
Un viajero cruza buena parte ciar desde el inicio de la historia “nosotros”. No es un Empera-
del mundo para llegar a Sikri, la el quid de la narración, Rushdie dor de cera. Conforme a esto y
nueva capital del Indostán. Su propone, como de costumbre, cumpliendo una promesa, erige
cometido es revelar un secreto y otras estéticas propias de la nove- una casa de culto, de pensadores,
el destinatario no es otra persona la, recursos como el expuesto por donde se puede hablar y discutir
que el Emperador Abul-Fath Ja- Orhan Pamuk al hablar de Los sobre cualquier tema, incluido la
laluddin Muhammad, conocido versos satánicos: “…le encantan inexistencia de Dios y la aboli-
como Akbar el Grande. los juegos de palabras, las rimas ción de los reyes, ambas, sus ma-
La Encantadora de Florencia, Mundo aquellos universos posi- internas, las palabras inusuales y yores disertaciones.
novela del escritor británico Sal- bles: la Florencia de Lorenzo de las inventadas”. El secreto empieza a ser conta-
man Rushdie (1947- ) -quien Medici II y su semilla, hasta los Tras esta argucia del lenguaje, do y otros secretos no previstos
recientemente estuvo en Colom- territorios de Persia y del Impe- vista ya en sus novelas anteriores, le dan la cara al sol. En varios
bia invitado al Hay Festival de rio Otomano, perfilando guerre- el relato sigue su esclarecimiento, momentos, queda la sensación
Cartagena de Indias-, recorre en ros como es el caso de Tamerlán entre otras cosas porque “el re- de no saber quiénes son los per-
esta novela de talante histórico, y Gengis Kan, éste último ante- cién llegado de cabello amarillo sonajes del secreto y quiénes los
el mundo de la cartografía anti- pasado de primera línea del Em- tenía un secreto por contar, un de la narración, como cuando se
gua, nombrando desde el Nuevo perador Akbar el Grande. secreto tan asombroso que po- sueña que se está soñando, y se

6 Febrero - Abril de 2009. No. 5.


Literaturas
pierde la noción del relator. Esta

Escritura de la emancipación
aparente confusión, se soporta en
personajes ‘secundarios’ de carác-
ter sin embargo mágico, caso de
la reina Jodha, mujer inexistente
inventada por el Emperador para
disfrutar de las artes amatorias, Por Juan Manuel Roca
y también para tener un igual
con quien reflexionar y disentir
acerca de los grandes temas que Suecia hicieron una revuela inusual: entre todos los statare, el cuadro de
lo persiguen. Entre muchas rei- La revancha de los siervos aprendieron a leer y a escribir. costumbres involucrado más que a
nas de carne y hueso, prefiere a Varios autores No pocos entraron a las filas anar- una literatura pastoril a una visión
su etérea Jodha. Simón editor quistas, a un anarquismo severa- social: “Al siguiente verano estalló la
Otro personaje singular es Das- Bogotá, 2009 mente organizado, como recordan- huelga entre los jornaleros agrícolas.
hwanth, el pintor que se refugia 84 páginas do que la palabra anarquía no es Era como un nubarrón amenazan-
en una esquina de una pintura sinónimo de anomia. te en pleno furor de siega de heno
Moa Martinson lo hizo desde po- para el otoño”.
de su autoría, sólo para espiar a
siciones feministas. Convivió con A su lirismo preceden los usos des-
la mujer que ama.
Harry Martinson, el impaciente póticos de siervos y territorios, la
El viajero hace honor a su condi- poeta que ha sido el último sue- descripción de un mundo feudal y
ción de nómada portando varios co en obtener el Premio Nobel en tenebroso en que el terrateniente,
nombres, y también para encu- 1974. Se plegó a la lucha en favor el gran señor de fundos y animales,
brir su propio tesoro: su secreto. de los explotados. entre los que contaba a sus esclavos,
Su nombre es Niccolò Vespuc- Entrelazado a la introducción a Ivar gentes tratadas como de un menor
ci, primo de Americo Vespucci, Lo Johansson, hay un episodio lla- rango en la escala biológica. Quizá
aquel que descubrió América y mativo que tiene que ver con el des- fuera mejor el trato que recibían
no la confundió con otro territo- pertar de las conciencias populares las bestias que las personas. Contra
rio. Ha venido desde Florencia, cuando la justicia sueca dio marcha ese pasadizo del oscurantismo y de
ha hecho gala de su manejo de atrás a la pena de muerte para el la expoliación fue contra lo que se
las lenguas y de los cuentos, con- anarquista Antón Nilson. Hubo en levantaron de manera unánime los
dición que le ha abierto muchas el mundo entero repudio a esa sen- statare.
puertas, cerradas para todos, y tencia y entre los que protestaban Para la obra toda estos escritores,
que también le ha salvado la vida. estaba el poeta y cantor Joe Hill, siervos sin servidumbre, libertos
Ha logrado que el Emperador y Dentro de las luchas de un país de ese sueco que anclado en Estados sin libertad pero siempre en pie de
la corte lo escuchen; no ha sido campesinos, leñadores y siervos sin Unidos sería fusilado por sus ideas dignidad, valdría la pena prestar
fácil, ni lo será posteriormente. tierra, de hambruna e ignorancia, libertarias en Salt Lake City. una expresión de Harry Martinson,
El primer paso está dado, eso ha el papel cumplido por escrito- Jan Fridegärd, cito a Rojas, padeció de un ciclo de sus poemas inserto
generado un desencadenamiento res que de un craso analfabetismo lo que los terratenientes llamaban en su libro “Cigarra”, de 1953. Se
de hipótesis, dudas, querellas, fueron asaltando las páginas de los “la peligrosa y abominable enfer- trata, como en ese período poético
envidias. El visitante forja un libros, como lectores e intérpretes medad de la lectura”. Gracias a esa suyo, de una divisa que sin provenir
acercamiento vital con Akbar el de su colectividad, hay tres nom- peste, este hijo de peón se trocó en de un statare podría definirlos: son
Grande, el Emperador empieza bres que destaca este libro: Moa conciencia moral de su país. Bebió los suyos unos “ejercicios de defensa
a interrogarse sobre su linaje, su Martinson, Ivar Lo Johansson y Jan en Chéjov y en Gorki e hizo un civil”.
poder. A partir de lo escuchado Friedegärd. fresco de soldados y peones desde A manera de colofón quisiera re-
se ahondan más las diferencias En esas tres voces el autor instala sus experiencias de condotiero. producir este decálogo de entre casa
con sus detractores, principal- su catalejo para mirar un período He aquí una muestra de su prosa, que define una actitud muy sueca:
mente su hijo, el príncipe Salim, triste de la historia sueca. Traza sus de una escritura que atiende a algo “No creas que eres alguien. No creas
quien está llamado a asesinarlo y perfiles para introducirnos en una que es un común denominador que eres igual de bueno a los demás.
tomar su trono. El viajero, aho- literatura de un mundo No creas que eres más inte-
ra llamado Mogor dell´Amore agrario que podríamos lla- ligente que los demás. No
–enviado del amor–, les habla mar feudal. Se trata de los creas que sabes más que los
de un antepasado, a quien deben llamados “escritores stata- demás. No creas que eres
en parte el poder que detentan. re”, que dieron cuenta con más que los demás. No creas
Las mujeres de palacio saben de valor y hondo humanismo que eres apto para algo. No
la historia, han escondido un de la condición de siervos. te rías de nosotros. No creas
espejo sucio donde se refleja su Los escritores que dieron que los demás se preocupan
propia dinastía. cuenta de ese negro pasa- por ti. No creas que puedes
dizo de la historia sueca lu- enseñarle algo a los demás”.
Otra novela que detenta las ar- El libro es algo más que la
gucias narrativas de aquel Rus- charon para señalar que sin
libertades la idea de patria visión de “la cuna del frío y
hdie -”un indio traducido al el país de la gula”.
inglés”- y por las cuales su prosa no es más que una abstrac-
ción.
es una transformación constante,
De este país de feudata- Juan Manuel Roca es poe-
hecha de ismos y palpitantes me-
rios hambrientos hace 150 ta, y novelista. Premio José
tamorfosis.
años. Diseminados por el Lezama Lima, Premio del
mundo entero, desde Aus- Ministerio de Cultura de
Carlos Enrique Pachón es poeta, tralia hasta Brasil, algunos Colombia por su libro Las
novelista y editor de El Zahir. de los que se quedaron en hipotesis de Nadie.
Moa Martinson por Sussan Faugstadmo
Febrero - Abril de 2009. No. 5. 7
Literaturas

La curva descendente
Por Luisa Fernanda Caicedo

en una moda punk, esta breve his- apenas por un grito a voz en cuello mita fundarse como literatura. Es-
Fondoblanco toria no es más que otro espejo de que poco o nada deja tras su lectu- pacio y tiempo chocan para hacer
Alejandro Arciniegas Alzáte una cultura kamikaze tras la cual ra. Fondoblanco, obra ganadora de de este libro una historia asistida de
Icono editorial subyacen esas licencias del lengua- la primera convocatoria de Estímu- la demencia juvenil, donde, desde
Bogotá, 2008 je por las que cualquier cosa puede lo del Ministerio de Cultura a Edi- luego, hay leyes morales, naturales,
118 páginas estimarse como literatura, amén de toriales Independientes, no es otra hay el bien y el mal, el karma judeo
una sociedad taimada por un rencor cosa que el testimonio de un adicto cristiano de la caida en pecado. Fi-
profundo hacia su realidad, cercana mal hablado, psicótico, que narra nalmente, el sainete literario no es
de alguna forma a esa suerte de “era como personaje y autor, al tiempo otra cosa que un texto autobiográfi-
de la fe”, como lo dijera no tan re- que describe el mismo paisaje su- co por excelencia:
cientemente Doris Lessing en una burbano tantas veces visitado por El bazuco me lo encontré en la cues-
de sus conferencias, esto es, la pro- el lugar común. La vanidad recu- ta abajo de puras vainas. Yo era un
funda necesidad de allanar los terre- rrente de Chaz, personaje que no cocainómano de lo más redomado
nos de la existencia desde supuestos desestima para nada la oportunidad en esa época. Al pie de la universi-
evangelizadores, llámense religión, de disponer de la narración (desde dad había una señora que vendía
drogas, todo desde ese mundillo de una voraz primera persona hasta por gramos.
reincorporados a la sociedad que se llegados algunos cierres capitulares La crónica se queda corta y lo na-
vanaglorian entregando testimo- en los que la tercera persona redefi- rrativo no es sino un telegráma o
nios de vida en ese tan moderno ne o ‘sublima’ el discurso) describe un cuaderno de apuntes ebrios sin
flash back de los púlpitos de barrio, una muerte anunciada, “la huesa”, nada de sintaxis o sentido comun.
así como destilan ahora los consu- mientras hace participe al lector de El relato, puro ‘visaje’. Más adelan-
midores con algo de presupuesto la ebriedad nebulosa de las drogas y te son los asuntos del lenguaje, los
Nada más a tono con un texto juve- para publicarse sus propias memo- el pillaje. Por lo demás, la estructura usos y abusos, la jerga, la foma de
nil y atiborrado de estupefacientes rias de ultratumba. Aquí puede la de este libro se acerca -como otras lo social como deformación paula-
que el título de esta ‘novela’ de Ale- superchería verse reflejada desde ese novelas de su estirpe- a esa reciente tina de los valores y de la literatura,
jandro Arciniegas Álzate (1979), mito del antihéroe en cuanto caída modalidad de dudosa cinemato- maquillada grotescamente cual me-
bien sea por que el autor pretende y redención van de la mano como grafía, haciendo un uso grosero y retriz urbana:
fungir de adolescente (como si su- deliberado del guión y del diálogo
una historia que pretende, más que Ahora ha venido el man que trae la
friese de un síndrome de Peter pan teatral. La literatura ha mutado por
dejar como paradigma el curso de droga. Acude a mi llamada. Le he
a cuenta de quien sabe qué aluci- lo tanto en un fallido proceso in-
un relato que busca en principio dicho que evite por todos sus medios
nógeno) o por tener como bandera terdisciplinar, ya nada es lo que era
“apresurar la curva descendente que hundir el timbre o usar el teléfono;
aquella lacónica e inexacta gene- antes. Ante este hecho, Arciniegas
a todos nos espera”, fijar un discur- cuando se está amurado la escena
ración de autores que vieron en lo apunta desde la impunidad de un
so pedagógico de aquel que ha re- debe urdirse cuidadosa, como una
suburbano y la caída su estratagema texto adherido al relato en forma de
gresado de mil batallas homéricas. sucesión de caricias de esa amante
creativa. A simple vista, Fondoblan- comentarios a pie de página:
co recordaría un poco nombres Prisionero de sí mismo, como diría que adivina nuestros puntos favori-
Kafka, Arciniegas nada tiene que Utilizamos el registro cinematográ- tos y mortales.
como Chaparro Madiero, Andrés
envidiar a aquellos nuevos best- fico, porque es el que mejor conduce
Caicedo –a quien el libro alude Nada se entiende en este párrafo,
con frecuencia-, un poco a Medina sellers que tras sufrir los dolores de este nivel de la historia. Por que no
por lo demás abusivo en el uso de
Reyes, otro mal remedo del insig- la guerra en Colombia, publican estamos suscribiendo un guíon tra- términos foraneos como aquel lun-
ne Bukowski de La senda del per- sus memorias alimentando un ne- dicional; como se ve, en las apunta- fardo amurado. Como el libro de
dedor, así como a otros novísimos fasto mercado editorial hecho de ciones como “cámaras”, “encuadre”, Arciniegas, habría que esperar que
autores como es el caso de uno re- infamias y de marketing. Por otro “plano”, etc., que no se incluyen en el género no sufriera de los males
cientemente publicado por Arango lado, esta cultura del menor esfuer- los guiones, ya que estas convencio- patológicos de esa nueva genera-
editores, Caviativá, la historieta de zo, como protesta o salida práctica nes aparecen en history board repre- ción y por lo tanto no tocara, como
un adicto que vive una sexualidad ante los lineamientos del trabajo sentadas de otra forma. es el caso, fondo.
ambigua y se disfraza de tetra-pack literario ha dado pie a un mundo Más allá de lo subversivo como so-
en los supermercados para sobrevi- del fast-food, aquí vertiginoso, in- porte de este tipo de lecturas, no Luisa Fernanda Caicedo es Co-
vir. Inscribiéndose de alguna forma congruente, sin salidas y delineado hay en Fondoblanco algo que le per- municadora social y Periodista.

8 Febrero - Abril de 2009. No. 5.


Crónica

El síntoma del signo


Por Robinson Marín Valderrama

la sociedad colombiana a los sín- A partir de la descripción docu- asenso militar y simbólico del fenó-
A las puertas de El Ubérrimo tomas manifiestos, de una cruenta mentada del asenso del proyecto meno paramilitar. Especialmente si
Iván Cepeda y Jorge Rojas «pacificación política» ocurrida en político militar de las AUC, el texto se tiene en cuenta que no es una
Editorial Debate Colombia durante los últimos 25 expone patrones de acción política excepción en su entorno las relacio-
Bogotá, 2008 años. y social de los más significativos ac- nes con las redes sociales de dichas
155 páginas Dichos síntomas son planteados tores del sistema político cordobés estructuras.
a través de las 155 páginas y ocho frente a las AUC, y la forma en que Los investigadores Iván Cepeda
capítulos de A las puertas de El Ubé- su modelo de alianzas y cooptación –Presidente de la Asociación de
rrimo. Un relato documentado y sería replicado en todos los niveles Crímenes de Estado–y Jorge Ro-
académicamente soportado, del de la actividad púbica incluido y jas –expresidente de CODHES–
asenso de una elite social agraria, particularmente en el representati- describen las transformaciones
cuyo poder, ligado a la tierra y a vo a nivel nacional. culturales que sufre la comunidad
la expoliación extensiva de ella, ha En virtud de la magnitud del po- cordobesa y suministran elementos
soportado y promovido una estruc- der creciente, este empezará a ser indicativos, de los recursos narrati-
tura social exclusiva a partir del uso implantado también culturalmente vos desplegados por los actores del
selectivo y sistemático de la violen- al interior de la comunidad ima- sistema político –medios, actores
cia. Los hechos han ocurrido en el ginada nacional. Al interior de las políticos, líderes y militares– para
microcosmos del departamento de dinámicas sociales de formación de describir o justificar su relación con
Córdoba, en los valles de los ríos los estados existen tareas simbólicas el proyecto paramilitar. La exposi-
Sinú y San Jorge desde la década desarrolladas desde el espacio de lo ción en esencia sistemática de di-
del 80 del siglo XX y hasta la pri- narrativo con el propósito de dar chas evidencias, es la oferta del texto
mera del siglo XXI. Con un relato sentido a un pasado que proyecte un para su lector. Una crónica sencilla
L´’homme est un animal symbolique. en espiral que inicia con el momen- futuro común y permita así conso- pero suficiente de los hechos.
Formule qui ne vise pas seulement son to social de mayor esplendor de las lidar el diseño de una identidad na- El texto posee al menos dos niveles
Langage, mais toute sa culture : sites, AUC, el matrimonio de Salvatore cional1. Existe una influencia pro- de lectura: desde una dimensión
Institutions, rapports sociaux, costumes. Mancuso en 2005 en las afueras de funda de la estructura de la nación, técnica como documento mono-
Umberto Eco. Le signe Montería y a pocos kilómetros de en el orden del conocimiento, que gráfico descriptivo de las conductas
la hacienda presidencial de El Ubé- procura elaborar un orden aparen- desplegadas por los agentes de un
Antes del siglo XIX con sus nota- rrimo. El texto visibiliza los agentes sistema político con un conflicto
bles avances técnicos y científicos, temente natural en muchas de las
dinámicos del sistema político co- clasificaciones de la vida social. Este militarmente irresuelto en el tiem-
incluso en el campo de la medicina, lombiano. po. Desde una dimensión política,
la fiebre fue una enfermedad, no un orden implica una cierta disposi-
Por sistema entendemos un con- ción estética y ritual que asegura el como un documento necesario
síntoma. Ello no representa un in- para comprender la dinámica del
conveniente menor en la compren- junto de unidades y componentes de valoración de la vida social que
relacionados entre sí por sus carac- hace posible la existencia de una ló- sistema político colombiano y las
sión de un signo. Tomar por males- dimensiones de una contrarrevo-
tar específico lo que delata apenas terísticas o cualidades comunes. gica colectiva2. El estudio pone en
El patrón de interacción entre las contexto la razonabilidad de la sos- lución conservadora que ha tenido
padecimientos más profundos; una lugar a través de dos fenómenos
información final y no una inicial unidades constituye el hilo que los pecha pública sobre la ignorancia
une en una unidad sistémica. De tal de uno de los actores más relevantes evidentes en muchos aspectos de la
sobre aquello por conocer. vida colombiana: El asenso del pa-
manera que un sistema es un con- del sistema político colombiano, el
Y tal ausencia sistémica en la in- ramilitarismo como fenómeno más
junto de unidades ínter-actuantes. presidente Uribe Vélez, en torno al
terpretación del signo inscrito en allá de su dimensión militar, y del
el síntoma suele traer para el pa- Uribismo como fenómeno más allá
ciente, consecuencias indeseables. de lo político.
Un procedimiento clínico que no
toma en cuenta el significado de los 1APPADURAI, Arjun. Sovereignty
síntomas por lo que son sino por without territoriality: Notes for a post-
lo que deberían ser, resulta contra- national geography. EN The Geography
producente. Obviar el significado Of Identity. Patricia Yaeger ed. Ann
de un signo puede ser un acto libre Arbor: Chicago, University of Michi-
pero difícilmente sensato. El sufri- gan Press, 1996.
miento padecido por los millones 2 GUPTA, Akhil and FERGUSON,
de hombres y mujeres desplazados James. Beyond culture: Space, identity,
o sobrevivientes del conflicto inter- and the politics of difference. EN Cul-
no colombiano, la destrucción del tural Anthropology 7: 6­23. 1992.
tejido social al interior de las comu-
nidades o la ruptura irremediable Robinson Marín Valderrama es
de las redes sociales de los indivi- abogado especialista con estudios
duos, son costosas consecuencias de magister. Poeta, docente uni-
de la respuesta social equivocada de Marcos Coelho Benjamin. 3o. Salón de Humor de Piracicaba versitario y gestor cultural.

Febrero - Abril de 2009. No. 5. 9


Clásicos

Oficio de jardinero
Por Santiago Mutis Durán

podrían caber en la más ardiente gre que une a una familia... Todo lo a los huracanes, el cambio climático,
La Inteligencia de las flores imaginación, que componen este que le ocurra a la tierra les ocurrirá el calentamiento global. Leyendo el
Maurice Maeterlinck acorde de insondable armonía que a los hijos de la tierra. El hombre no extraordinario estudio de Maurice
Asociación Lengua Franca para nosotros suena con una sola tejió la trama de la vida; él es sólo Maeterlinck –bello, sabio e inocen-
Bogotá, 2007 voz : la vida. un hilo. Lo que hace con la trama te– comprendemos la dimensión
104 páginas se lo hace a sí mismo. de este desmesurado disparate, de
Todas las culturas “primitivas” ya lo
Pero nosotros los hombres, que sur- esta vanidad y prepotencia suicida
sabían, por eso saludaron la araña
gimos de todo esto, que nacimos de la ciencia, que pretende inclinar
o al viento como a un hermano o,
del limo, hemos logrado ignorarlo, la balanza de la existencia a favor de
mejor, como se saluda a un dios,
sobre todo los científicos, y sobre una economía que no nos favorece
a un dios real, nada humano, que
todo sus hijos más aprovechados, y que tampoco favorece a las mi-
gobierna con todas sus fuerzas para
los técnicos, que sostienen y empu- les de especies vegetales y animales
imponer su existencia, entre millo-
jan este desastre “natural” del pro- que hicieron el mundo que ahora
nes de otros dioses –la luz, la balle- reclaman para sí un puñado de
na, el agua, la orquidea, el aire, la greso que no es más que una trocha
de cemento estéril que comunica al magnates. Es un golpe de Estado a
serpiente, el fuego, la palma– que la Razón, a la imaginación, a la in-
se han levantado no como criaturas infierno con el paraíso.
teligencia, y una perversión del co-
solitarias, libres y autónomas –ese Aunque fuimos la última especie nocimiento, un descarrilamiento de
es un sueño nuestro–, sino como invitada a la Creación, ya hemos la cultura. Maeterlinck se hubiera
hermosas y terribles formas que no dado al traste con ella; no sólo la colgado de una viga si hubiese visto
pueden vivir unas sin otras. Si una hemos dado por terminada, sino semejante fracaso, o hubiera puesto
sola pieza viva de este rompecabe- que ahora pretendemos iniciar una su pequeño libro de La inteligencia
zas de siete dimensiones se altera nueva, otra, supuestamente bajo de las flores en las manos de todos
Las orquídeas, esa “llama que alumbra o desaparece, la realidad entera se nuestro control. ¡Y hay que ver y de cada uno de los habitantes
en la noche que separa los reinos. conmueve. cómo van las cosas! del arrogante occidente (made in
M. Maeterlinck Cuando los afiebrados cazadores de En esta nueva edad de la Creación, USA) para que comprendieran que
... Las constelaciones oro y los no menos afiebrados mag- llamada “reconfiguración de la so- las consecuencias de manipular un
vuelan por edntro de las flores. nates del progreso exterminaron las ciedad contemporánea”, la punta mundo cuya riqueza y complejidad
El cielo del abeto, tribus indígenas de norteamérica, de lanza más hiriente es la inven- desconocemos, o que fingimos ig-
Giovanni Quessep imponiendo un progreso que hoy ción de los transgénicos, la mani- norar para ocultar nuestra codicia,
ha puesto en riesgo la vida misma, pulación del ADN de plantas y ani- podría ser, además de una docta es-
Durante milenios se le achacó la medio mundo –y quien quiso ha- males, afectando ecosistemas y cul- tupidez, una hecatombe.
creación del universo a Dios, y de cerlo– se enteró de lo que pensaban turas –además, claro, de economías Maeterlinck no nos propone re-
este mundo también, por supuesto, esos “indios ignorantes” que los regionales y nacionales, a las que se gresar a la humildad del “salvaje”
que con sólo ver sus árboles –bas- Blancos encerraron en pobres reser- ajusta a una nueva dependencia–. panteísmo pielroja, quien fuera
taría un solitario Samán– muchos vaciones y alimentaron con carne El profesor Tomás León afirma que aniquilado por ignorante y por
aceptamos que se trata sin duda podrida. En la carta-testamento de “la liberación de plantas transgéni- habitar unas tierras codiciadas por
de un Prodigio, o de un milagro, si los pieles rojas dirigida al presidente cas constituye una ruptura cultural otros –lo cual, para mí, no estaría
siguiéramos creyendo que la Tierra de los Estados Unidos y publicada sin precedentes en la historia de la nada mal, pues recuperaríamos sus
es una turbulenta oración. Después en sus periódicos, el jefe Seatle decía : humanidad... Todo puede ser gené- viejos “conceptos sobre la necesidad
ticamente modificado”. El dios de de la convivencia sosegada y la op-
el joven Darwin, recorriendo los He visto miles de búfalos pudrién- la Creación ahora se esconde tras ción por el equilibrio”–, pero no,
mares y sus islas, con los ojos muy dose en las praderas muertos a tiros los laboratorios de biotecnología. Maeterlinck nos propone aguzar
abiertos, observó transformaciones por el Hombre Blanco desde un tren “La selección natural dejará defini- la razón, hacerla crecer y hacerla
en el mundo animal que le sugi- en marcha. Soy un salvaje y no en- tivamente la vía libre a la selección sentir, para poder volver a gozar el
rieron un secreto, que poco a poco tiendo cómo una máquina... puede artificial por ADN recombinante asombro que nos rodea y al que sin
fue cobrando las evidencias de una importar más que el búfalo, al que y el mismo concepto de especie se duda pertenecemos.
nueva revelación: el mundo se ha nosotros matamos sólo para sobre- evaporará en el aire”. Lo cual creo
ido haciendo a sí mismo; la Crea- vivir. ¿Qué será del hombre sin los que es no sólo irresponsable, mons- Ante el servilismo o el posible en-
ción continúa, como una especie animales? Si... fueran extermina- truoso, insensato, sino francamente vilecimiento de una parte poderosa
de rompecabezas vivo, impulsado dos, el hombre también moriría de aterrador. Vamos a sustituir la Na- del “saber”, he aprendido a respetar
por una indescifrable e indetenible una gran soledad espiritual; porque turaleza por un menú elaborado al sencillo jardinero, con su ética
voluntad de vida. Árboles y tigres, lo que suceda a los animales tam- por transnacionales. No sólo la humilde o salvaje, simple, y sin fór-
huracanes y colibris, calamares bién le sucederá al hombre. Todas Creación toda quedará en paten- mulas para triunfar sobre la natu-
gigantes y silenciosos baobabs... las cosas están conectadas... Si los tes ajenas expropiadas a la vida, raleza ni para conquistar el futuro:
siguen al pie de la letra una miste- hombres escupen en el suelo se escu- sino que la tecnología –quienes la apenas una forma honesta de con-
riosa partitura escrita por ellos mis- pen a sí mismos... la tierra no perte- financian– tomará en sus manos vivir y de conocer.
mos y para todos, de oscuro origen nece al hombre; el hombre pertenece las riendas y el destino del mundo,
y materializada en miles de millares a la tierra. Esto sabemos. Todas las que hasta hace poco era natural. Las Santiago Mutis Durán es poeta,
de formas, muchas más de las que cosas están conectadas, como la san- mismas manos que han despertado editor y crítico de arte.

10 Febrero - Abril de 2009. No. 5.


Boris Vian

Rapsodia en blanco y negro


Por Celedonio Orjuela Duarte

dejara la guerra, el aturdimiento lo nuevo estaba en la literatura, descubrimientos de los negros.


Escupiré sobre vuestra tumba del estallido de las bombas, la la pintura, pero especialmente -No creo que tengas razón. Todos
Boris Vian Norteamérica de un europeo en los ritmos negros: el blues, los grandes compositores son
Ed. Bruguera consiente de la aridez del viejo las Big band, el jazz, se oyen con blancos.
España, 1978 mundo. Importaba entonces frenesí, según lo testimonia Vian.
-Duke Ellington, por ejemplo.
130 páginas abrirse a lo nuevo a través del auge Sus personajes escuchan a Dina
de la literatura norteamericana, Shore (1917-1994), cantante de -No, Gershwin, Kern y todos
rápidamente traducida en Jazz y música popular, fraguada esos.
la Europa de Posguerra, por en los años 30. Otro inmenso -Todos Europeos emigrados
autores como Ernest Heminway, cronopio, Cab Calloway (1907- -le aseguré-. Son los peores
Faulkner, Melville, traducidos por 1994), músico de Scat –forma explotadores. No creo que en todo
escritores como Cesare Pavese, vertiginosa de cantar desde la Gershwin se pueda encontrar un
ante la profunda necesidad de onomatopeya en una sucesión solo pasaje original, que haya sido
sacar a Europa de la mudez silábica sin sentido– fue, junto a copiado, plagiado o reproducido.
insular en que la habían dejado su banda, uno de los interpretes de Te desafío a que encuentres
los conflictos bélicos. jazz afroamericano más populares uno solo en toda Rhapsody in
Lee, hombre negro con apariencia en los años 30 y 40. Su orquesta Blue…”
de blanco, escribe como un tenía músicos tan famosos como El curso marcado por la historia
prosista norteamericano. Todos el trompetista Dizzy Gillespie o es el sentimiento de venganza y
los trucos de los que se valió el saxofonista León “Chu” Berry xenofobia. El hermano menor
Vian para publicar esta novela, junto a William Christhoper es asesinado por la familia de su
inventando un editor, siendo él Handy (1873-1958), compositor novia blanca; su otro hermano
mismo su prologuista, y dando y músico de blues, conocido de piel oscura, que es perseguido
Lee Anderson -protagonista como “The father of the blues”.
vida de alguna forma al mismo precisamente por su raza, y Lee
de J’irai cracrer sur vos tombes, Vian critica ciertos músicos
novela pseudónima de Boris Vian Sullivan, no tenían otro fin Anderson, que en su apariencia
que trasladar la novela negra blancos que se valieron de ritmos
firmada por Vernon Sullivan- se de hombre blanco, considera que
norteamericana a la deprimida negros para su reconocimiento:
emplea en una próspera librería es la persona más idónea para
Europa de los cuarenta. Así, todas No lo creo. Todas las grandes vengar a su hermano.
en la ciudad de Buckton. Su
trabajo consiste en “poder las manifestaciones artísticas orquestas son de blancos
Libro del ingeniero, trompetista
dar una respuesta satisfactoria fueron verdaderas expresiones de -Claro, los blancos están en de Jazz, cantante, dramaturgo,
al desgraciado que se dejara una juventud ávida de novedad; mejor posición para explotar los miembro de la cofradía de
convencer por los reclamos al patafísicos –amigo de aquel
uso: la cubierta ilustrada, el monje surreal y perverso llamado
folleto y la foto del autor y una Alfred Jarry-, se convirtió en un
breve noticia biográfica”. Luego Boris Vian toca la trompeta
Best-seller, como no lo fue en
añade: su tiempo la obra narrativa que
Los libros son muy caros, y Por Juan Manuel Roca escribiera bajo su nombre real,
todos esos artificios tienen dado que la novela negra de
una finalidad muy concreta; Sullivan pudo ganar más adeptos
Si retira los labios de la trompeta, una densa niebla hace
demuestran, además, que la que los que póstumamente logró
gente no siente ningún interés que hombres y mujeres caminen a tientas, enceguecidos
tener el propio autor.
por comprar buena literatura; el y desnudos.
Novela escrita en primera persona,
libro que quieren leer es el que Cuando junta sus labios, la música se desliza por los te- rica en diálogos, contrario a lo
recomienda su club, el libro del
jados y recorre las garitas de la gendarmería y trepa por que ocurre con la novela de hoy
que se habla, y su contenido les
importa un bledo. la estatua de Balzac y sacude las cornisas y las gárgolas. en la que las historias se enfrascan
en prolongados monólogos que
Boris Vian (1920-1959) va Si retira los labios de la trompeta, regresa la niebla y los no conducen a ninguna parte, la
creando en Escupiré sobre vuestra habitantes deciden recorrerse por el tacto. novela de Sullivan-Vian hizo que
tumba, un ambiente juvenil (los
¡Atención! El señor Vian ha vuelto a levatar su trom- el texto mismo la hiciera posible
cafés alrededores de la ciudad,
peta. Se teme por los vetustos hoteles parisinos, por las para un guión teatral, así como
el campo cercano o algunos
otros espacios de la memoria fisuras que pudieran alterar las fases de la luna, el ritmo una película que escandalizó a la
tan parecidos al recuerdo, como “buena sociedad” francesa de los
natural de trenes y conserjes.
puede verse en la novela La cuarenta.
hierba roja), todo ello cargado Boris Vian nos deja la impresión
de un hermoso aunque a veces Para Pablo Montoya de que a pesar de su muerte
descarnado erotismo, como temprana, todos los géneros que
respuesta y fastidio de lo que emprendió le fueron posibles.

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Boris Vian

El odio a lo inútil
Por Sophia Vázquez Ramón

atisbos inverosímiles de humor o


La hierba roja
representación fuera del discur-
Boris Vian so, son el soporte de esa noción
Tusquets de tristeza sabida que recorre las
España, 2007 páginas del libro, a sabiendas
La espuma de los días que nada puede haber aquí sino
Boris Vian decepción y pérdida irreparable.
Editorial Bruguera Una novela-jazz cuya música de
España, 1978 Ellington discurre entre la ironía
253 páginas de los días que corren hasta des-
vanece, un espejo del blues negro
norteamericano también visto en
las obras de Sullivan, su contra-
L’Écume des jours parte asesina y realista.

“En realidad, sólo existen dos La maquina del tiempo


cosas importantes: el amor, en Boris Vian nació en Ville D’Avray,
todas sus formas, con mujeres suburbio de París, en 1920. Desde
hermosas, y la música de Nueva temprana edad comenzó a sufrir
Orleans o de Duke Ellington. problemas de salud: tuvo ataques
Todo lo demás debería desapa- de reumatismo cardíaco y luego
recer porque lo demás es feo.” fiebre tifoidea. A los 20 años se
Así declara, a modo de exordio, inaugura como interprete de jazz
un Boris Vian suspendido en la norteamericano en una pequeña
memoria de dos ciudades para orquesta conformada junto a sus
él desconocidas, Memphis y Da- hermanos. Ingeniero de profe-
venport, y desde las que ha escrito sión, Vian cultivó géneros como
La espuma de los días, un esplen- la novela, el cuento, crónicas y
dido paisaje de afectos, gastro- críticas de aspectos sociales, algu-
nomía y música en el que ya los nas piezas teatrales, óperas y toda
excesos simbólicos son materia y según la cual las autopistas su- Partre, entre otras cosas, igual de clase de composiciones de talan-
patafísica1, puesto que lo invero- frían una algo infantil transfor- ‘inflamable’ que aquel existencia- te a veces ateo y revolucionario,
símil, lo irreal o lo sobrenatural, mación sin que los coches expe- lista a quien de seguro refiere. La como aquel famoso Le deserteur,
campean en los mismos terrenos rimentaran los percances propios espuma de los días entró a con- canción que increpa al presiden-
de la ficción en que lo posible se que la gravedad y el sentido co- curso en su momento al celebre te al resistirse Vian a correr a la
puede o no dar de forma narra- mún demandaban. Primera no- premio de la Pléiade y su fracaso Guerra.
tiva y consecuente. Desde su tra- vela ‘autentica’ de Vian, según él editorial fue tal que Gallimard se
bajo como escritor, Vian tiene a mismo refiere, L’écume des jours abstuvo de publicarle en adelan-
bien desdoblarse como autor, de (1945-1947) trata la historia de te, sacándolo por el momento de
la mano de un escritor de novela un bailarín joven y rico, enfren- la escena literaria francesa.
negra –Vernon Sullivan– que le tado a un amor lastimosamente
da censura pero bastante permi- sesgado por la enfermedad. En- “Uno de esos raros libros de la
sividad editorial y literaria, junto tre tanto, el lenguaje hace que lo juventud de estos tiempos”, se-
a un ortónimo algo vanguardista sublime se esconda lúdicamente gún asegura Noël Arnaud en su
a quien la crítica no vio en sus tras el simbolismo que emana introducción a las obras com-
verdaderas dimensiones sino de de ese vademécum de extrañas pletas de Vian, La espuma de los
manera algo tardía; distintos el situaciones y platos servidos de días no fue en su momento un
uno del otro por una especie de la manera automática y poco libro que mereciera considera-
sobrefiguración de lo grotesco alimenticia que tendría una co- ción aparte de algo de atención
y la caricatura, Vian hizo en su cina surrealista. Se trata, de esta prestada por el clan de la patafí-
obra personal una apuesta un manera, de dos historias de amor sica que le secundaba en sus em-
tanto más psicológica en la medi- llevadas casi paralelamente: la presas ‘inútiles’. Novela de malos
da que se hizo del lenguaje para fatídica relación entre Colin y presagios, eleva el patetismo al
jugar a afincar mecánicas absur- Chloé –esta última estrechamen- nivel de las tragedias humanas:
das en las que el camino de su te emparentada con un tema de padecimiento, belleza resque-
postura patafísica hiciera posible jazz de Ellington– junto a la abu- brajada, crimen, suicidio, locura.
que empresas suyas como alguna rrida relación de Chick y Alise, Resuma por su mismo carácter,
que, siendo ingeniero, plasmara enmarcada por la manía litera- en contrastes y poesía, un juego
desde la ciencia de Alfred Jarry ria alrededor de un tal Jean-Sol verbal y simbólico tras el cual los

12 Febrero - Abril de 2009. No. 5.


Boris Vian
defensa ante los estropi- -Sólo animales –contestó Carla -Bueno -dijo el gato-, siendo así,
cios de una razón siempre -Es la razón por la que quise estoy dispuesto a hacerte ese favor,
convulsionante, aquí una hacer feliz al senador –explicó aunque no sé por qué digo «siendo
novela cercana a la ciencia Wolf-. Por el pájaro, el ratón y así» cuando no comprendo nada
ficción y a autores como el gato. en absoluto.
G. H. Wells que de segu- En otro sentido, la aparición de -Eres muy bueno -dijo el ratón.
ro le dieron la idea de la estos personajes que de alguna -Mete la cabeza en mi boca -dijo
enorme maquina que el manera permiten distintos nive- el gato- y espera.
ingeniero Wolf (El lobo) les en la lectura, definen algunos
inventa para poder re- -¿Habré de esperar mucho? -pre-
aspectos narrativos que crean guntó el ratón.
construir su vida desde la homogeneidad en tanto no du-
ausencia de memoria. La hierba roja, como adelanto
dan en tomar la palabra, cruzan de su Journal à rebrousse-poil,
La hierba roja es, en más de una novela a otra –el senador muestra a un Vian que dialoga
de un sentido, la novela Dupont de La hierba roja es, y expone parte de la confusión
autobiográfica por exce- por ejemplo, el perro Dupont y crisis existencial de una época,
lencia de Boros Vian. Su que aparece en La Espuma de como una suerte de terapia en la
protagonista, Leonard, los días– o sufren una suerte de que el psicoanálisis se presenta
mantiene a lo largo del metamorfosis en tanto le sirven como posibilidad de esa varie-
libro constantes conversa- a Vian para deformar o satirizar dad de metafísica patafísica por
ciones sobre educación, religión, algún rol o personaje humano, la cual el mismo sistema que
Cercano a la intelectualidad exis-
trabajo, sexo, muerte. Además aquí el papel de la mujer o al- mueve en él el palimpsesto y la
tencialista de entonces, como
revela un autor más psicoana- gunas convenciones sociales y intertextualidad, en esta novela
puede verse en ese personaje
lítico como el que puede verse éticas. Por lo demás, siempre esa y dada su inseguridad y su exal-
libresco llamado Partre o en el
en El Arranca-corazones, novela transformación antropológica des- tada humanidad confieren a la
pequeño padrinazgo de Sartre
posterior de carácter bastante cubre posibilidades infinitas en la narración el poder de salir de lo
al apoyar sus empresas fallidas,
ambivalente. Por allí, aparece medida que estos personajes son artificioso para convertirle en la
Vian logra también cercanía, en
un campo rojizo parecido a la morfológicamente más suscepti- más memorable de sus novelas.
el club Saint-Germain-des-Prés,
infancia y aparecen personajes bles de valor sígnico: En La hierba roja hay un recurso
con grandes músicos del Jazz
como Duke Ellington, Miles emblemáticos que, como La es- de la memoria que espera ser bo-
-En realidad -dijo el gato-, el rrado, eliminado, el acantilado y
Davis y Charlie Parker. De allí puma de los días, parecen querer
asunto no me interesa demasiado. la figura sublime de las monta-
que La espuma de los días sea, tomar elementos en apariencia
divergentes para subrayar el peso -Te equivocas -dijo el ratón-. To- ñas gobernadas por una infausta
de alguna forma, la comunión
surrealista de algo que parece davía soy joven y, hasta el último maquinaria de lobotomía. En
atropellada y surrealista de esos
ser parte de un sueño, como un momento, he estado bien alimen- ella Wolf espera huir, escapar
afectos musicales y el experimen-
to no solo afectivo-gastronómico juego mental en el que se busca tado. de sí mismo, romper con su es-
precisamente huir de toda idea -Pero yo también estoy bien ali- tado humano a través del metal
que pone en escena una suerte
del pasado en pos de un estado mentado -dijo el gato-, y no tengo siniestro de la maquina en la cual
de panoramas oníricos plagados
virgen y perfecto. Así como en el ningunas ganas de suicidarme; esa el recuerdo toma el peso de un
de sustancias inverosímiles y
curso de La espuma de los días, es la razón por la que todo esto me pesado agotamiento. Los colores
de una fuerza semiótica apenas
aparecen los diálogos entre per- parece anormal. del cielo y el mar se abren jun-
aplacada por la ambigüedad de
sonajes que también remitirían a to al azuloso artefacto, mientras
los diferentes niveles de la narra- -Es que tú no le has visto -dijo el
gustos de Vian por autores como la hierba roja en la que Wolf se
ción. Por allí, puede llegarse a la ratón.
Lewis Carroll y que de una u hecha para descansar lo da dilu-
quizá más ‘íntima’ obra novelís- -¿Qué hace? -preguntó el gato. yendo hasta disfrazarlo dentro
tica de Boris Vian, aquella que le otra forma guardan un secreto
-No tenía demasiadas ganas de sa- de su ‘suelo ensangrentado’, esa
sintetiza y que pone en entredi- mecanismo dialectico dentro del
berlo. Hacía calor y todos sus pelos búsqueda de ese Wolf-Vian que
cho la cuestión patafísica como corpus narrativo de Boris Vian.
estaban bien esponjosos. trata de volver a esas premisas de
una suerte de mecanismo de Como es el caso del papel de la
(…) Jarry, –“Sólo la letra es literatu-
animalidad y la inocencia dentro
ra”– para dar un sentido menos
del proceso catártico de Wolf en -Cuando ha pasado la hora -con-
llano a la más personal de sus
medio de sus conversaciones re- tinuó el ratón- vuelve a la orilla y
novelas, quizá la que lo despoja
trospectivas: mira la foto. de alguna forma de la chistera
-¿No come nunca? -preguntó el patafísica: “Va a ver usted cómo
-¿Quién es entonces merecedor de
gato. se desata una de las pasiones que
su afecto? –Preguntó Carla
-No -respondió el ratón-. Se está han dominado mi existencia: el
-Ya no lo sé –dijo Wolf-. Había odio a lo inútil”.
quedando muy débil y yo no pue-
un pájaro, en el rosal enredadera
do soportarlo. Un día cualquiera
de mi ventana, que me desper-
va a dar un traspié en esa plancha
taba todas las mañanas dando 1. La patafísica o ciencia de las so-
grande...
golpecitos en el cristal con el pico. luciones imaginarias –ciencia “del
Había un ratón gris que por las -¿Y a ti qué te importa? -preguntó más allá del más allá”– fue instituida
noches se paseaba a mi alrededor el gato-o ¿Qué pasa?, ¿es desgra- en 1898 por el poeta y dramaturgo
y se comía el azúcar que le deja- ciado? francés Alfred Jarry (1873-1907) en
ba en la mesita de noche. Había -No es desgraciado -dijo el ratón-, su libro Hechos y dichos del Doctor
una gata negra y blanca que no se sino que tiene una pena muy Faustroll, patafísico. Conocida como
separaba de mí y que iba a avisar grande. Y eso es lo que no puedo la ciencia de “lo particular”, dio pie
a mis padres si yo me subía a un soportar. Además, se va a caer al a la creación del Colegio de la pata-
árbol demasiado alto… agua, se asoma demasiado. física en 1948.

Febrero - Abril de 2009. No. 5. 13


Poesía

Maldición de marinero
Por Santiago Espinosa

Aquí el poeta canta y escenifica a dedores”, “exitosos”, “ganadores”, versos la sospecha de que lo que
Las derrotas
la vez. Se confiesa y luego finge, “arribistas”, “realistas”, y que en se muestra sólo es un indicio:
Alberto Rodríguez Tosca
borrándonos las fronteras entre Colombia o en Cuba ya han de- No quiero leer un libro más.
Ediciones Unión lo vivido y lo creado, lo leído y lo jado demasiada sangre, demasia- Tampoco un libro menos. Los
La Habana, 2008 sufrido. Quizás Rodríguez Tos- dos olvidos bajo las fosas. De ahí que he leído bastan. La mayoría
100 páginas ca sea ese “mentiroso que dice que este libro, memoria de unas de los libros son como la mayo-
la verdad” del que hablara Ma- derrotas personales, autobiográ- ría de los hombres: enseguida se
llarme, o el “fingidor” de Pessoa, ficas si se quiere, sea también un agotan. Se dejan encandilar por
mostrándonos al yo como una testimonio del siglo ido, de una las palabras y cuando no tienen
entidad roturada y diversa, y a la generación que “he visto izar las nada que decir, siguen diciendo.
vida en lo que la hace humana: la banderas y quemarlas después”; Si se me permite la expresión, las
ambivalencia, ese juego de con- donde, como también lo dice, palabras de estos poemas son las
trarios y de ambigüedades que “las mejores mentes de mi gene- violentas esquirlas de una explo-
es cada persona. Tiene razón el ración dilapidaron en un grito sión que se detonó en el pasado,
poeta Rafael Alcides en el prólo- todo el silencio que necesitaron llámese historia, derrotas o siglo
go que hace del libro, pues más después para salvar la patria de XX.
que un diario, que un enorme los padres”. Esquirlas que ahora nos encuen-
testamento del exilio, se trata de Poesía vertiginosa que muestra tran gracias a la publicación de
un “cataclismo humano”. el lenguaje en una plasticidad Ediciones Unión de Cuba, y de
Hay en estos poemas algo del rit- y en una abundancia que creo, la que ya se consiguen ejemplares
mo frenético de Lezama Lima, de francamente, no se veía en estas en las librerías bogotanas.
la claridad y la sencillez de Eliseo tierras desde la muerte de Héctor
Diego, atributos que supo traer- Rojas Herazo. ¿Retórica, excesos
Las Derrotas es, de comienzo a nos bajo el sombrero. Hay una verbales? De ninguna manera. Santiago Espinosa es poeta y co-
fin, un ajuste de cuentas con la Bogotá violenta, azarosa, que po- Como en Rojas, existe en estos mentarista de libros.
memoria, un esfuerzo del poeta cas veces se ha visto en los poe-
cubano Alberto Rodríguez Tos- mas, y que el poeta, quizá gracias
ca por entenderse en el mundo a su destierro, puede comprender
como el resultado no de los lo- como esa ciudad de huidas que
gros, sino de las pequeñas derro- también es. Nos dice en alguna
tas que lo precedieron. Derrotas parte “Sí, esta ciudad no es mía,
vividas y propinadas, derrotas
pero tampoco de quienes la here-
por lo hecho y hasta por lo no
daron. Es del alba, es del sueño,
hecho, pues pareciera que aquí,
es de la noche. Por eso hoy todos
como en la filosofía de Wittgens-
nos pusimos las galas de extran-
tein, las posibilidades irrealiza-
jero para salir a caminar”.
das, acaso imaginarias, acechan
Pero también hay el hallazgo de
tanto como las realizadas.
un tiempo dentro del tiempo,
Cada poema un día, el libro,
distinto al de los relojes del ban-
cuatro semanas. Cada poema un
quero y del publicista de espe-
tanteo del poeta en las regiones
ranzas. Rodríguez Tosca, como
del miedo y del dolor, una erran-
cia por los rostros, los puertos, los grandes maestros de la músi- Ingenierías Diplomados
las mujeres y los afanes, pero que ca, nos devuelve la duración de  Manejo de flotas
 Inyección Diesel
siempre -maldición del marine- la vida en su horror y en su belle-  Diseño de motos
ro- conducen de nuevo al espejo za. Nos recupera una visión del  Automotriz  Actualización electrónica
Sistemas de refrigeración
del poeta. Ya lo decía Joyce: “Si tiempo que en la complejidad de 

Judas sale esta noche sus pasos le su secuencia, entre los ires y veni-  Térmica 

Maquinaria agrícola
Seguridad industrial
llevarán hacia Judas. Cada vida res, los contrapuntos y los cortes,
rompe la idea de una historia li-
 Comercial En Humanidades
es muchos días, día tras día. Ca-
minamos a través de nosotros neal, de ese hacer fila, rasgo ca-  Diseño de talleres literarios
 Literatura escrita por mujeres
mismos, encontrando ladrones, racterístico de esta modernidad  Escrituras creativas
fantasmas, gigantes, ancianos, ramplona que borra los rostros
jóvenes, esposas, viudas, herma- hasta el unanimismo. Calle 74 # 11 - 74
Bogotá Colombia [email protected]
nos enamorados. Pero siempre Un tiempo de los derrotados por PBX: 2104712 - 2102470 www.fit.edu.co
encontrándonos a nosotros mis- oposición al tiempo de los victo-
mos.” riosos que hoy reinan: “empren-

14 Febrero - Abril de 2009. No. 5.


Libros de la casa

Bolaño Salvaje
Ed Candaya
Edmundo Paz Soldan (Editor)
Barcelona, 2008
502 páginas

Pensamiento colombiano Pensar es su carácter interdisci- Por Alberto Bejarano


(II Tomo) plinario que refleja las búsquedas
La creciente fama del escritor
Guillermo Hoyos, Carmen y obsesiones del Instituto desde
chileno Roberto Bolaño en el
Millán de Benavides, Santiago su fundación, hace ya 15 años.
mundo editorial norteamericano
Castro (eds.) Quiero destacar igualmente que
se ha construido sobre una cierta
Editorial Javeriana en el libro se incluye también
leyenda negra del autor, presen-
Bogotá, 2008 a extranjeros (Vinyes, Currie,
472 páginas Reichel-Domattof, Rother) que tado como un “poeta maldito”
han contribuido con el desarro- suramericano. Se venden miles
de libros de Bolaño en inglés y Quizá, si usted lo lee, le ocurra lo
Por Paul Von Leopold llo de la cultura en Colombia, mismo que a Alan Pauls:
en campos tan diversos, que van no sabemos (aún) muy bien cual
La colección del Instituto Pensar, es la recepción de su obra (en ¿Cuánto hacía que una novela
desde la economía hasta la críti-
“Pensamiento colombiano del si- especial de su novela 2666), ex- no reivindicaba para sí la fuer-
ca literaria. Sobresale también el
glo XX” es un esfuerzo académi- puesta al mercado como un pro- za de la voracidad, la energía
“rescate” de mujeres-pensadoras
co colectivo que merece ser des- ducto que puede decepcionar al bulímica, la capacidad imperial
como Débora Arango, Ma-
tacado, en especial por acercar a lector distraído. de ocupar, colonizar, anexárselo
ría Cano, Monserrat Ordóñez,
las nuevas generaciones, a perso- Creo que Bolaño se hubiera reí- todo?...Los detectives salvajes me
Nina de Friedemann y Soledad
najes y obras que han contribui- do al verse convertido ahora en inoculó su virus masivo y me
Acosta. Valdría la pena incluir
do con nuestra “colombianidad”. un “best-seller”, y no porque no convirtió.
en los próximos tomos a perso-
En este Segundo Tomo leemos le gustara que lo leyeran, sino No es este un estudio conven-
najes, en apariencia “menores”,
ensayos sobre profesores univer- porque se lee como un escritor cional (no se dedica al “elogio
hoy olvidados como Miguel For-
sitarios, escritores, filósofos, an- diferente a lo que él fue. Bolaño gratuito”) sobre un escritor. No
naguera, uno de los “sabios cata-
tropólogos, arquitectos, músicos, asumió una escritura en los már- tendría sentido hacer algo así
lanes” que no tuvo la fortuna de
artistas, y políticos. Los ensayos genes, por fuera de lo “política- con Bolaño. Es más bien un viaje
son escritos por probados cono- ser “inmortalizado” por García
Márquez (ver el caso de Vinyes). mente correcto”, incluyendo los por las pistas de hielo que hizo
cedores de los autores y los temas “ismos” de la literatura latinoa- suyas Bolaño, que transformó
tratados. El lector descubrirá en Un republicano, un pedagogo,
un explorador de las montañas mericana. Para situar adecuada- y nos legó como escritor de la
estos textos facetas no tan cono- mente a Bolaño y su obra, vale “multiplicidad” (en palabras de
cidas de autores como José Eus- colombianas, un “abrecartas”
que participó por ejemplo en la la pena leer este libro colectivo, Vila-Matas). Si usted ya ha leí-
tacio Rivera, Fernando González un valioso material de consulta y
Fundación del Gimnasio Mo- do a Bolaño, este libro le brin-
y Rafael Gutiérrez Girardot. de análisis crítico y en varios ca-
derno y la Carrera de Sociolo- dará nuevas formas de acceso a
El libro podría sintetizarse con sos, deconstructivo, de la obra de su escritura. Si no lo ha leído, y
gía de la Universidad Nacional.
las siguientes palabras de sus edi- Bolaño. empieza por el lucido documen-
Fue Miguel Fornaguera, además,
tores: “sabemos, aunque todavía tal de Erik Haasnoot (incluido
fundador de todo un semillero
tenemos nuestras limitaciones, en esta edición), donde se puede
de destacadas personas dedica-
que el “pensamiento” no sólo cir- conocer, por ejemplo, la biblio-
das a la cultura, -como su hija
cula en forma de libro o escrito, teca de Bolaño, lo más seguro es
María Fornaguera (escritora y
sino que la palabra, la imagen y que querrá leerlo. El libro cuenta
el sonido también transitan de la traductora) y su nieta Ana Roda,
actual Directora de la Biblioteca con magníficos textos de grandes
memoria viva a la memoria críti-
Nacional- y buena parte de sus escritores iberoamericanos, en
ca, como diría Jan Assman”. No
descendientes que se dedican a su mayoría amigos de Bolaño,
conocemos a Assman, pero sabe-
la pedagogía en diversas áreas y como Vila-Matas, Villoro, Fre-
mos de sobra que este comenta-
rio expresa un sentir auténtico. escenarios. Quizá un ensayo así sán y Pauls y estudios analíticos
Prueba de ello es el valiosísimo podría ser escrito por uno de sus sobre novelas de Bolaño como
programa de Javeriana Stereo, descendientes de tercera genera- “Estrella distante” y “El gaucho
“Música y literatura”, dirigido ción. Otros personajes a contem- insufrible”. La colección de Can-
por la Profesora Carmen Millán. plar son los “pioneros del cine en daya incluye otros títulos, en el
Una de las características más Colombia”, Los Acevedo y Los mismo formato, dedicados a Pi-
“endémicas” de la Colección de Di Domenico, por ejemplo. glia y Vila-Matas.

Febrero - Abril de 2009. No. 5. 15


Música

Más allá del enmascaramiento


Por Diana Marcela Arias Naranjo

sus viajes fuera de Varsovia y las critura musical se mantendrá cla-


Chopin mujeres que le rodearon. Ade- ra y su estilo literario será, en el
Bernanrd Gavoty más, para quienes motiva el acer- fondo, el del siglo XVIII. Duran-
Ediciones B camiento a este personaje desde te toda su vida dará un magnífico
Barcelona, 2006 su trabajo como compositor, se ejemplo de pasión dominada por
520 páginas encuentra hacia el final del libro el cuidado del estilo. Y en ello se
un análisis de cada una de las diferenciará de los otros román-
piezas que dieron un carácter tan ticos.
contundente a su estilo. Su pa- Pero así como fue motivo para Autonomía y gracia
dre, de origen francés, demostró otros autores de la época y poste- Ivan Nagel
un interés especial por la forma- riores, en su universo musical su Katz editores
ción del compositor de la misma gran afecto por compositores clá- Buenos Aires, 2006
forma que de la de sus tres her- sicos como Mozart y J.S Bach, a 214 páginas
manas. Sería entonces con Lu- quienes había interpretado desde
dwika, su hermana mayor, con edad temprana, habrán de mar-
quien este tendría mayor empa- car los escenarios de sus com- Un eterno diálogo mantenido
tía, ya que fue ella quien a los tres posiciones, siempre gobernados entre la palabra y la música y
años pone las manos de este mú- por un extraño halito de nostal- por el cual la ópera tuvo en su
sico sobre un teclado: un par de gia. Sin embargo, lo que menos momento una resposabilidad
años más tarde, este pequeño con quiere Gavoty en esta biografía crítica y política desde su cruce
actitudes de genio se aventura a es configurar a Chopin como un de caminos, llevan al investiga-
la interpretación de algunas pie- personaje de carácter débil. Den- dor Ivan Nagel (Budapest, 1931)
zas, razón por la cual ya en 1817 tro de su singular carácter, vale la a urgar en el corazón del géne-
La labor del crítico y músico el pequeño Chopin acomete sus pena visitar sus incesantes luchas ro a través de la figura redentora
francés Bernard Gavoty en esta primeras composiciones, carga- pérdidas en el amor, y su intensa e indemne de W. A Mozart, en
nueva biografía del compositor das de inocencia pero provistas relación con la escritora francesa tanto su pregunta por el sentido
polaco Fryderyk Chopin (1810 de aquel virtuosismo con el pia- George Sand, con quien, a juzgar de la gran ópera, le lleva a revisar
- 1849), no fue la de esa suerte no y el desarrollo de la técnica por sus particulares personalida- los presuntos estéticos y éticos
de enmascaramiento que bien que el joven músico demostraría des, sostuvo como bien se sabe de aquella humanidad que ya no
hubiese acabado con la posibili- luego tan abiertamente. una furtiva relación en la que se cree que “la autoridad del sobera-
dad de revisitar al músico desde Por lo demás, su producción, sirvieron de alimento mutuo en no emane de la voluntad divina”.
ámbitos no tan comunes como siempre vinculada a los proble- el pleno desarrollo del romanti- Ese ocaso de los idolos es aquí
los que otrora lo mediaban de mas técnicos que experimenta la cismo, uno a través de la literatu- explicado desde vertientes tanto
forma apenas circunstancial, su interpretación del piano, atañen ra y el otro a través de la música. sociales como culturales a través
propósito estuvo más bien cer- de igual forma a su concepción Rehuyendo a un tono intimista de las piezas operisticas de Mo-
cano a develar a un Chopin lle- de mundo y de patria, temas y apoyándose en las notas de los zart. Por lo demás, sus óperas se-
no de contrastes, observar a un fundamentales de sus Noctur- diarios de algunos personajes im- rias, bufas o el llamado Singspiel,
joven que desde temprana edad nos, Mazurcas y Polonesas. Su portantes en la vida de este com- permiten a Nagel preguntarse
adoleció de toda clase de males manera de interpretar y de com- positor, Gavoty consigue que por los rangos o posturas sociales
del ‘corazón’ y afecciones fisicas, poner siempre fue tomando un esta biografía tenga el encanto de un Mozart obligado de algu-
como bien queda cimentado en sentido más complejo por lo que de atraer tanto al lector ocasional na forma a tratar aquellos temas
una época de la que él fue más su estilo marcó profundamente con el mismo influjo que atrae al de la clemencia o la condición
que un blasón y una figura. a compositores de su época. Ro- lector conocedor del genio musi- político-social del subdito frente
Esta biografía se divide en dieci- mántico nato pero de cultura y cal de Chopin. a lo9s poderes que le rigen. Un
séis capítulos que visitan el arbol formación clásicas, en ninguna libro, como lo asegura Charles
familiar a partir de su experien- circunstancia se apartará de un Rosen, que ubica las óperas de
cia en familia, las influencias que sentido crítico escrupuloso. En Diana Marcela Arias es estudian- Mozart “dentro del pensamiento
permearon sus composiciones, los peores contratiempos, su es- te de Comunicación Social. moral y político de su tiempo”.

Héctor Suárez Castro - Carlos Andrés Almeyda 311 518 77 38 - 318 3372355 - 472 08 21
16 Febrero - Abril de 2009. No. 5.
Columnista invitado

Por Ramón Andrés

La biblioteca de Mozart
En una de las habitaciones de reunidos con el título de Idilios, ahora citados. Pero este «sentido de 1770 y que adquirió duran-
la vivienda vienesa que Mozart estaban también en los estantes. práctico» sólo le condujo a to- te su viaje a Italia de ese mismo
ocupó durante su último año de Los ejemplares eran los que el mar de Beaumerchais argumen- año. Junto a los escritos citados
vida, había una mesa, un sofá, propio poeta regaló a los Mozart tos para las óperas; de ahí surgió –el patrimonio de libros ascen-
seis sillas adamascadas y un es- a su paso por Zúrich en 1766. una de sus creaciones universa- día sólo a 23 florines- guardaba
critorio. También contenía un Sabemos que Gessner mantuvo les, Le nozze di Figaro. Por otra Las aventuras de Telémaco, del
pequeño armario para alber- relación con los poetas alemanes parte, la presencia de Molière moralista Fénelon, una novela
gar partituras, dos estanterías y más notables, aunque fue estre- en sus estanterías -regalo de su de gran éxito aunque mal vista
un fortepiano. Es posible que cha la establecida con Christoph futuro suegro Fridolin Weber en por considerarla satírica contra
en dicha estancia guardara sus Martin Wieland, trascendente 1777- es fortuito, aunque bien la corte. En medio de este pano-
libros. Pero cabe preguntarse para devenir literario alemán. De pudo servirle para alimentar su rama, es llamativo que Mozart,
en qué medida era aficionado Wieland había dos ejemplares en soberbia imaginación dramática. cuyo bagaje como lector era muy
a la lectura ¿Cuál fue, en ver- la exigua biblioteca mozartiana, No sabemos qué comedias con- inferior al de Bach y Beethoven,
dad, su relación con los libros? que a buen seguro pertenecieron tenía el libro de Molière, pero poseyera una obra tan relevan-
a Leopold. Cuando Mozart tocó es de notar que en tiempos de te como las Tristes de Ovidio
Leopold, padre del músico, se
en Mannheim en 1777 pudo Mozart corrían por Alemania en una versión latino-alemana.
jactaba de haberle ofrecido una
sólida educación, superior a la tratarlo personalmente, y aun- frecuentes adaptaciones de obras Sí resulta lógico que contara con
que pudieron recibir Haydn y que en una de las cartas se des- burlescas del escritor francés que numerosos libretos –entre ellos
Schubert. Esta orgullosa actitud prende cierta familiaridad con hacían las delicias del público. una edición veneciana de Metas-
tiene su justificación: el marcado su obra, no es prudente afirmar Que guardara en la biblioteca tasio-, poemarios –los Pequeños
cambio social de mediados del hasta qué punto la conoció y si un texto de Moses Mendelssohn poemas líricos de Christian Felix
XVIII estimó la figura del niño sólo fue a través de los comen- –abuelo de Félix Mendelssohn- Weisse, y la Pequeña biblioteca
como un valor de futuro, y pue- tarios de Leopold. Los títulos ha llevado a ciertos estudiosos infantil, edición de canciones
de decirse que Mozart fue uno en cuestión son los Papeles pós- a ponderar al Mozart lector. Se populares reunidas por Johann
de esos niños ideados para el tumos de Diógenes de Sinope trata del Fedón (1767), adap- Abraham Peter Schulz- y, caso
devenir. Leopold, receptivo a la (1770) y el aplaudido Oberón tación del libro platónico de nada curioso entonces, panfletos
Ilustración, se sintió progenitor en su impresión de 1781. Pese a ese mismo título, puesta al día contra el espíritu reaccionario,
y maestro a un mismo tiempo. la influencia que ejercía Wieland y en correspondencia con las uno de ellos contra la castración.
Los documentos y anécdotas sobre la ópera alemana, no pare- ideas del XVIII. El hecho de Su afinidad con la masonería ex-
nos muestran, sin embargo, a un ció impresionar a Mozart, quien que tomara una frase de sus pá- plica también la presencia, por el
Leopold disgustado ante la acti- en una carta lo tilda de soberbio ginas relativa a la muerte, a la carácter ocultista, de La metafí-
tud, digámoslo así, poco aplica- y afectado, hombre de feo ros- que trata de «amiga», y la refi- sica en relación con la alquimia,
da de Mozart, no muy aficiona- tro, «lleno de picaduras de vi- riera en la última carta dirigida en recopilación de Friedrich
do a la lectura. Una crónica de ruela», con voz infantil y mirada a Leopold en 1787, ha llevado Oetinger, del mismo modo que,
la poetisa Caroline Pichler, que impertinente... El que para mu- pensar en un interés del músico siendo como fue un obligado
conoció bien al compositor, re- chos fuera un alma excelsa, para por la filosofía, pero este episo- viajero, es normal el pequeño
fiere que éste carecía de una par- el músico resultó ser alguien «de dio debemos ceñirlo, una vez fondo de libros de viajes. Al lado
ticular sensibilidad intelectual, y estúpida condescendencia». más, a algo anecdótico. Leopold de este cuerpo libresco había al-
que su talante revelaba una for- compró esta obra bastantes años gunos volúmenes del historiador
Sentido de la lectura atrás, y no fue significativa en la Sonnenfels y un título en inglés
mación escasa. Cuenta Pichler
que un día, tras una improvi- Mozart no se detenía en contem- formación intelectual de Mo- de Hannah Moore, Percy. Un
sación al piano, el músico saltó placiones. Su sentido de la lectu- zart. La biblioteca inventaria- estudioso como Robbins Lan-
por encima de la mesa y empezó, ra era eminentemente práctico, da en 1961 por Otto Deutsch don (1990) se ha preguntado si
burlón, a maullar [sic]. ¡Cuánto laboral, por así decir. Al ente- sugiere, como se ha dicho, una la lectura de una novela escrita
exasperaba este comportamien- rarse de la muerte de Voltaire en marcada orientación paterna. por un amigo masón, titula-
to al estirado Leopold! ¿En 1778 espetó que «había estirado da Faustin, o el siglo filosófico
Las mil y una noches ilustrado, alimentó la «última
qué había quedado su legado? la pata como un perro», y cuan-
No es casual que al acercarnos do Leopold le recomendó visitar Sabemos que en 1800 el edi- fantasía» de Mozart respecto de
a los anaqueles de su estudio a Diderot y D´Alembert –cosa tor vienés Johann Anton André Salieri, pues el héroe de la na-
hallemos unos pocos libros –se que incumplió- no demostró compró a la ya viuda Constanze rración huye de Nápoles ante
desconoce la cifra-, que en su más interés que el lograr de éstos Mozart un importante grueso el temor de ser envenenado...
mayor parte eran herencia pa- ciertas credenciales. Y eso que de los manuscritos de su espo- También estaba en la biblioteca
terna, o bien obsequio de algún Mozart guardaba en la bibliote- so. Entre el raudal de legajos y del último domicilio de Mozart.
amigo, caso de las obras teatrales ca varias obras del controvertido carpetas que André ordenó se
de Johann Gottfried Dyk, en seis Beaumarchais –posiblemente El menciona una edición de Las Ramón Andrés es músico, colum-
volúmenes. Unos tomos de pro- barbero de Sevilla y Las bodas mil y una noches, que el maestro nista de diversos diarios europeos,
sa y poesía de Salomon Gessner, de Fígaro-, afín a las ideas de los leía en una impresión boloñesa escritor y poeta.
Ensayo

Entre la erudición y el artificio


Por Gabriel Arturo Castro

informaciones, en fin, el artifi- que prescinde de un yo univer- repetidor de otros, salvo sus ensa-
La escuela de la noche cio, el ingenio, lo fingido- tiene sal y lo limita al yo egocéntrico y yos titulados El sentido del libro y
William Ospina como horizonte la conclusión hedonista. Es un tipo de ensayo La escuela de la noche, donde des-
Editorial Norma, formal que caracteriza la “belleza que recrea un narcisismo, lleno pliega por fin un espíritu crítico,
Bogotá, 2008, clásica”. de entusiasmo por el estilo, la polémico, reflexivo, libre, muy
200 páginas Ya Montaigne había expresado lengua, el soliloquio y el autorre- singular, a través de la persuasión,
la necesidad imperiosa de ale- trato, y su correspondiente ética la sugestión y la confrontación.
jarse de la pedantería, actitud de alguien que pretende decir Los dos textos mencionados son
excluyente, grandilocuente y al- grandes cosas, trascendentales, punzantes, intensos, problemá-
tisonante, porque según Jaime pero repitiendo por extensión las ticos, plenos y vivaces, frutos de
Alberto Vélez: “La petulancia, palabras prestigiosas de otros con la lucidez, la fuerza creadora y
la ostentación, y en general todas el fin, a su vez, de ganar prestigio la decisión del riesgo, y no sólo
las formas conocidas de exhibi- o renombre, lugar donde las citas de una elocuencia consagrada o
cionismo intelectual son impro- acumuladas con abrumadora in- del hábito estilístico que confina
pias del ensayo”. sistencia son siempre expresiones al lenguaje a una cárcel de con-
de autoridad y no testimonios venciones. Porque en los demás
La escuela de la noche no escapa
humanos, las ideas por encima ensayos, muy bien escritos, ex-
al afán de la Ilustración, donde la
del hombre, aspiración ya ajena celsos, elocuentes, armoniosos,
lógica y la razón son imperantes,
al sentido original del ensayo. perspicaces, elegantes, los textos
y nociones como la experiencia,
A propósito de citas, para usar el no se liberan del autor para re-
el silencio y la alteridad se des-
procedimiento habitual de Os- velar significaciones no previstas
conocen, ya que por efectos de
pina, alguna vez Michael Ende por él.
la perfección buscada, el autor
llega a postular una superiori- escribió un texto que tituló Arti- ¿Acaso el ensayo no es también
El presente libro se enmarca dad del escritor sobre el acto ficios estilísticos. En él se lee: el arte de la palabra y de la per-
dentro de una inclinación de la comunicativo, quien preestable- suasión?, pero persuasión, que
Con algunos autores tengo siem- valiéndose de la lengua produce
literatura que pretende reempla- ce los significados y las interpre-
pre la impresión, inevitable, de creencia, sugestión y emoción.
zar elementos como la tensión, la taciones mediante su orden fijo
que, cuando escriben, estiran el Aquí el adorno y lo formal de-
pulsión y el drama por la exclu- e impositivo. El yo locutor está
dedo meñique y redondean los berían ayudar a esa fuerza del
siva erudición, esclavizando de por encima del yo receptor y el
labios. A mí la cosa me irrita. convencimiento, la seducción y
nuevo al arte a las ataduras del papel del lector se torna pasivo,
Cuando estoy leyendo y me in- la inspiración al lector, junto al
intelecto, a la estética tecnicista contemplativo, limitado al papel
vade la sensación de que el au- poder de la invención del autor,
clásica de origen renacentista, de admirador incondicional de
tor levanta las cejas y me mira función relegada por el poder
cuya dinámica se encauza hacia quien posee un afán de explayar
a través de sus líneas como si de la expresión de un repertorio
la nostalgia de la mitología gre- conocimientos, datos o dar en-
me preguntase: “¿Has notado tú canónico de argumentos y méto-
corromana, el rechazo por otras tender la aprehensión intelectual
también con qué rara exquisitez dos ya señalados.
expresiones que no sean los clási- de objetos, como si los géneros
he vuelto a expresarme?”, pierdo
cos, es decir, a lo no amoldado a literarios fueran únicamente un Pasión por otros escritores tiene
las ganas de seguir leyendo y cie-
la simetría, al orden, a la claridad- medio de divulgación de inquie- Ospina: Borges, Shakespeare,
rro el libro.
transparencia intelectual, teoréti- tudes intelectuales. El arte pasa Dante, Whitman. El mejor ho-
ca y especulativa de la represen- de ser expresión, ejercicio, huella Dicha pasión por la lengua y el menaje que le podría rendir a los
tación artística. Sus abanderados espiritual o afectiva, a convertir- estilo llevan al autor del libro en autores mencionados, sobre todo
son considerados por la crítica se en un elemental soporte de mención a minimizar el lenguaje a Borges, sería el diferenciarse y
conservadora y snob como gran- un discurso racional, positivista personal, ya que confiere el ma- emanciparse de ellos, de sus in-
des estilistas, “de exquisita y rara y enciclopédico. De esta mane- yor protagonismo en su escritura flujos tan férreos y soberanos y
expresión”, forjadores otra vez así darle a su obra particular una
del intelectualismo, el regreso al concreta realización histórica y
culto de la razón, la imitación, la Es un tipo de ensayo narcisista, lleno de estética.
inflexibilidad de las reglas, el de- Pero es tanto el fervor que se
coro y el deleite como elementos
entusiasmo por el soliloquio y el autorre-
acomoda, glosa, parafrasea, mi-
preponderantes de una antigua trato, que pretende decir grandes cosas tifica y se deja deslumbrar todo
estética. repitiendo las palabras de otros el tiempo sin rebelarse, interro-
La erudición malsana –la pedan- garse o postular una visión críti-
tería de conocimientos inusuales ca, elementos que sacrifica por el
pero superficiales e inútiles, da- ra el autor, inteligente y riguro- a la compilación o reunión de estilo: lo importante es escribir
tos inconexos, pura nemotecnia, so, de La escuela de la noche, fragmentos provenientes de otras bien, de manera encantadora, sin
destreza, artilugio, habilidad de le importa más dar a conocer el voces, las cuales ensombrecen la tensión, y allí Ospina triunfa sin
compilación, ejercicio termi- engranaje y el bagaje intelectual voz propia, sumado ello a su ten- transgredir, transformar, apartar-
nológico, sumatoria estéril de que detenta, la individualidad dencia a ser epigonal, seguidor y se, extrañarse, ni arrojar una luz

18 Febrero - Abril de 2009. No. 5.


Ensayo

acusadora desde su propio punto Ospina cae en lo que él mismo exitosos principios de publicidad ejemplo muy contrario a la labor
de vista, siempre oculto tras la censura en su libro: la tendencia comercial. El “verbalismo” de que rindieron otros intelectuales
lección enciclopédica, el límite a individualizar demasiado y di- William Ospina, el preciosismo muy fecundos en la literatura ar-
gramatical, el placer intelectual vinizar al autor. Tal fascinación y el manejo perfecto del idioma tística, el ensayo y la crítica como
de construir los mismos me- por la erudición y el andamiaje castellano o este modo de “retó- Germán Espinosa, Rafael Gutié-
canismos verbales que el autor verbal se pueden volver en con- rica” se ha agudizado en nuestro rrez Girardot, Pedro Gómez Val-
denuncia en Góngora, sus pala- tra, pues afecta la fuerza creado- medio y época. A propósito de derrama y R.H. Moreno Durán,
cios verbales, “una acumulación ra, la limita en contra de la diver- seguidores de tal propensión en entre otros.
razonada y clasificada de todas sidad o complejidad del mundo, Colombia, recordamos la escri-
las cosas, un catálogo y no una y a favor de un modo de escritu- tura de Philip Potdevin Segura Gabriel Arturo Castro es escritor
condensación de la sabiduría”. ra regida en su divulgación por y Winston Morales Chavarro, y comentarista bibliográfico.

¿Libertad o tiranía?
Por Omar Ortíz
del Estado por un partido único
Sobre la libertad promovido por Lenin para afian-
John Stuart Mill zar el poder de los soviets que
Alianza Editorial degeneró en la tragedia estalinis-
España, 1999. ta, es un buen ejemplo de ello;
162 páginas ya sea por pretender agrupar las
decisiones de los asociados bajo
El filósofo inglés John Stuart una fe religiosa que los libere de
Mill, publicó en 1859 un peque- sus responsabilidades de elección
ño libro que llamó Sobre la liber- pero que los someta a la más do-
tad. En él estableció los princi- lorosa animalización, o ya sea por
pios fundamentales de las tesis y la moderna manipulación de los
prácticas de la acción política ci- medios de comunicación que tra-
vilizada, con base en los derechos ta a los hombres como criaturas
del individuo frente al ejercicio irracionales que pueden ser ma-
del poder, promovido este por el nejados, engañados, por medio
Estado o por cualquier organi- de la publicidad, terminan todos
zación religiosa, gremial o parti- sica al que su padre consideraba hubiera disidentes, tendríamos por instaurar sociedades ajenas al
dista que busque sentar normas, no daba una visión distorsionada la obligación de inventarlos para pensamiento racional que niegan
imposiciones o creencias con el del mundo real. El experimento mantenernos en condiciones in- la verdadera naturaleza humana
fin de organizar socialmente las tuvo como consecuencia crear telectuales perfectas. Se cumplen que debe ser libre para escoger y
actividades humanas. una especie de monstruo que a entonces, ciento cincuenta años experimentar sobre sus fracasos y
Como es sabido, Mill fue hijo los doce años tenía la sapiencia de la publicación de dicho opús- sus logros. Es decir, que de lo que
del mejor discípulo de Bentham propia de un hombre mayor de culo, el cual está hoy más vigente trata el libro comentado, como
(James Mill) y como este, consi- cuarenta años excepcionalmente que nunca dada la gran cantidad lo manifiesta expresamente su
deraba al hombre como un ob- erudito. de teorías y actuaciones que pre- autor al inicio del mismo, no es
jeto natural que podía estudiarse Luego de una crisis existencial, gonando el advenimiento de un sobre la vieja discusión del libre
desde los ámbitos de la zoología, que lo llevó incluso a intentar futuro celestial, o un mejor estar albedrío, sino sobre los derechos
la botánica y la fisiología, y con poner fin a su vida, Mill, leyen- en el mundo cimentado en crite- del individuo frente al poder, y
do la poesía de Wordsworth, rios de igualdad y justicia social, de manera especial sobre el dere-
base a ellos formular los princi-
descubrió que era capaz de sen- o una mayor ganancia económica cho inalienable de todo hombre
pios de una nueva ciencia que
tir emociones y a partir de ahí para los agremiados permitiendo a elegir su forma de vida.
venciera la ignorancia humana y
educara bajo la luz de la raciona- empezó su restablecimiento y su la disolución del Estado, preten- Sería interesante que quienes se
lidad a la humanidad sin vicios distanciamiento de los principios den modificar, dirigir y someter dicen liberales repasaran o le-
ni miserias. Firmemente conven- promulgados por el utilitarismo la conducta de los individuos en yeran las páginas de este libro y
cido de estos principios educó a clásico. Se convirtió entonces, aras de una finalidad universal o adoptaran de nuevo como su-
su hijo aislado de los demás ni- en un defensor a ultranza de los que los mismos acepten, sin nin- yos los principios de libertad de
ños, de tal manera que el peque- derechos de los más desprotegi- gún reparo, una verdad colectiva conciencia, de expresión, de de-
ño John Stuart a los cinco años dos, como la mujer, los trabaja- y absoluta. terminación de sus propios fines
sabía griego, a los nueve, álgebra dores, los pueblos coloniales y Es bien sabido que de los inten- y de reunión o asociación que
y latín. De otra parte, le impidió en general de toda clase de he- tos de armonizar en una sola di- Mill considera inviolables, a no
el acceso a la religión, a la meta- rejes, apóstatas y blasfemos, ya rección los quereres y deseos de ser que nos abrume la peor de las
física y a la poesía, por conside- que creía firmemente en que el los hombres, ya sea por la ins- tiranías.
rar con su maestro Bentham que equilibrio social en un régimen tauración de un régimen político
estas disciplinas eran obras de la político sano, tiene su princi- de carácter partenalista que fácil-
idiotez y el error humano. Sólo pal fortaleza en el disenso, a tal mente degenera en una aberrante Omar Ortíz es poeta, director de
pudo entregarse al arte de la mú- punto que argumentó que si no dictadura, el caso de la dirección la revista literaria Luna Nueva.

Febrero - Abril de 2009. No. 5. 19


En Breve

do las posibilidades del discurso carece de una carga simbólica. cirnos el poeta, se está a prueba
A cada quien su animal poético”, afirma Julio Ortega en Es algo que creo ver como una de peligros.
Antonio Cisneros el prólogo a su Poesía reunida. constante de su poesía: la desmi- Quizá el peligro seamos noso-
La cabra edición-Conarte En todas esas áreas reales, hay tificación de temas y de heráldi- tros mismos, nuestros más se-
México, 2008 amplios dispositivos de la imagi- cas, la caída de muchos íconos, cretos y escondidos enemigos.
121 páginas nación y del lenguaje que se in- el desbande de espejismos en un Porque, además, muchos de los
teresan por los animales, por esos ámbito desacralizado y cotidiano. animales del bestiario de Cis-
seres que temiéndoles, amándo- Otra cosa son sus animales do- neros son lo que, en puridad,
los o amaestrándolos, resultan a mésticos pero además peligrosos, podrían ser llamados seres vi-
veces tan irreales como nosotros como la ballena. No es la suya la vientes y, por consiguiente y en
mismos. misma de blancura de nieve que el más elemental de los silogis-
Como pocos poetas latinoameri- persiguieron al mismo tiempo mos, seres murientes.
canos, talvez como Rubén Darío, Melville y el capitán Ahab, para Pero el poeta también sabe que
Jorge Luis Borges, Jorge Carre- arponearla. Es una ballena quizá “sobre cada muerto los anima-
más riesgosa, la que navega hu- les cantan”. Cantan, luego ha-
ra Andrade, José Juan Tablada,
yendo de nosotros pero alber- blan, como los paquidermos
Leopoldo Lugones, Francisco
gándonos en su vientre. de su poema “Denuncia de los
Madariaga, Cisneros pregunta
elefantes, demasiado bien con-
por esos desconocidos parientes, La ballena de Cisneros es su
siderados en los últimos tiem-
los animales. propia casa, su propia morada
pos”, donde nos cuenta que
De ese aspecto de la poesía de filosofal o su equipaje. Partien- “aprendieron inglés” gracias a
Antonio Cisneros, de su inmer- do de la idea de que Jonás “y los un noble británico que cayó en
sión en una zoología real y a la desalineados” viven en el interior la selva y que, con gran aplica-
(Fragmento) vez imaginada, trata A cada quien de un cetáceo, y que por tanto ción, se hizo a su vez alumno
La poesía de Antonio Cisneros su animal, antología de uno de deben pasar noches de hielo y aventajado en el aprendizaje
tiene muchas vertientes y canales los más notables poetas vivos del de penumbra, su huésped debe de la lengua de los simios. De
que se adentran en la historia de continente, un continente al que inventar un periscopio para avis- todo esto está siempre hecha la
Perú, tanto en el exilio como en sin duda le iba mejor cuando el tar otras ballenas, aquellas que poesía de Antonio Cisneros.
el inxilio del hombre americano, mundo era plano. Es una muestra los poetas escaldos llamaban en Es un poco como el ave negra
en su humor disolvente y perti- temática en la que ronronean sus su afán metafórico cerdos de los que se posa en cúpulas y an-
naz que pone un toque de luci- gatos sibilinos, ronda un puerco- oleajes. tenas del invierno moscovita.
dez a nuestra tragedia colectiva, espín en las colinas de Budapest El poeta se pregunta qué pasaría Sólo queda celebrar a los ani-
en la forma como adopta másca- y de la soledad, hay una suerte de si por descuido, en ese tráfico de males domésticos y a los ani-
ras y contra-máscaras, discursos naturaleza muerta con lenguados objetos y en la manipulación de males cimarrones del poeta pe-
y contra-discursos. y falsos pescadores dinamiteros ellos en el vientre de la ballena, ruano, ya que ninguno de ellos
Cisneros posee la salud del len- y un ave negra, un córvido sin llegara a arrancarle una costilla. Y debe estar dispuesto a celebrar
guaje y la salud del que duda. gracia, pone el contrapunto de concluye que el gran animal, vol- que cada día, y cada noche, les
“Como pocos, ha sabido abrir la su tizne en el blanco invierno de cando su ira dentro de sí, podría ampliemos y nos ampliemos
poesía a distintas áreas de la reali- Moscú. Su manera de hablar de matar a tan molesto inquilino. los territorios del desierto.
dad, pero lo ha hecho reafirman- los animales podría decirse que No por vivir en casa, parece de- Juan Manuel Roca

mio María Mercedes Carranza, entre el Eros y el Thanatos. Luego Siempre son, sin embargo, espa-
dádiva editorial destinada a no- de regresar de la oscuridad, como cios prestados, siempre se es un
veles autores colombianos de la refiere o sugiere, Sánchez-Carba- nowhere man en tanto siempre es
que, sin embargo, mucho puede llo aguarda ante aquellas puertas, cuestión de ‘mudanzas’:
dudarse en cuanto a su veredicto, “los amantes siempre estan de Lo extraño es cruzar la noche,
recoge las habitaciones del tedio, turno, dicen los que esperan”, encontrarse de pronto envuelto
del hielo, de la desesperanza, aca- cada tanto cae, como en Sisifo, en un espacio ajeno a nuestras
so de un descarnado y sarcastico desvirtuando el terreno ganado sabanas.
erotismo metafísico. pero sorteando la incomodidad Esto es, paredes de paso, habita-
Visitar estas habitaciones de paso, de saber todo fatalmente inútil. ciones presindibles y pieles que
ventanas indiscretas de la memo- Esas arquitecturas maltrechas,
ria, es casi como convertirse en sólo quedan en la memoria de las
imposibles, patafísicas, dejan que horas, vagones maltrechos que
un voyerista que va espiando, en cada tanto esa ‘noche boca arriba’,
un largo pasillo, el letargo pres- guardan cada uno el número de
cortazariana devele los pliegues una derrota. Por allí mismo, el
tado de un onanismo silencioso, de una hipocondria que a su vez
o acaso inmerso en la sordidez pasado como ejercicio de esa me-
49 habitaciones es ferrea materia de una realidad moria que convierte la existencia
nocturna de la enfermedad de los
Darío Sánchez-Carballo ‘padecida’. El ritual de la poesía en un padecimiento, revela un
días, ese “irse llenando las alas de
El Zahir editorial plomo hasta caer lentamente”, es aquí una confesión agónica, ayer en el jardín de las infancia
Bogotá, 2009 al decir de Dulce María Loynaz. escrita desde la respiración, que desmerecida, como ocurre en
72 páginas La luenga y tórrida clinica, los fluye sin acentos ni puntuación y Fernando Pessoa al revisitar la
espacios, la locura de esa puesta que convierte a cada quien en ese única habitación memorable,
Inicio de la prometedora colec- en escena que conviene en des- enfermero lacónico e indiferente desde el únigenito lugar en que
ción de poesía emprendida por El dibujar la rútina hasta darle el que visita su intimidad como nada transcurre de forma trágica.
Zahir Editorial, esta ópera prima aspecto más conveniente y real, quien revisa algo ajeno mientras Luego todo es pérdida irreparable,
del escritor bogotano Darío Sán- el de la sala de urgencias de la se le pide ayuda, en la vertiginosa cosa de transeuntes y puertas que
chez-Carballo, finalista del Pre- condición humana, suspendida subsistencia de un hospital. se cierran tras nosotros. L.C.

20 Febrero - Abril de 2009. No. 5.


En Breve
En algunos pasajes, el asunto entre la virilidad y la soledad:
Primer viernes y otros cuentos metaficcional deviene en con- “Quince días antes de su muerte
José Bercelio Forero Ángel versaciones con el día a día de comenzó a sentirse mal, Enton-
Biblioteca libanense de Cultura el realismo mágico nuestro de cers echó dentro de un maletín
Bogotá, 2008 todos los días. Por ello, entiende de lona algunas prendas de ves-
94 páginas el lector ese diálogo ininterrum- tir, aseguró la puerta de su alcoba
pido entre lo que se dice y lo que con llave, colocó sobre sus grue-
De lo local a lo universal, como yace allí, abajo, junto a los otros sas argollas un candado de hie-
bien se sabe del realismo má- que ‘remedan el paso del tiem- rro, y sin decirle nada a nadie se
gico, el autor de estos cuentos po’, visitantes “obstinados” que marchó para el hospital”
permanece entre el sosiego de enarbolan el dejo de la realidad, Finalmente, se sabe que estos
los dejos cercanos y el vasto es- nada más cercano a la ficción. cuentos no pueden más que
pacio referencial que advierte en Forero Ángel recurre a lo hu- abrirse a las intenciones secretas
su literatura un bien ponderado manamente permisible para ser, y eternas de la “única carne”, ese
recorrido por las letras ajenas al mundo de estos breves relatos no como conviene a la literatura, in- pecado original que cuece y ali-
corpus de lo oficial. Son literatu- otra cosa podría ser sino el refle- famemente universal. Thanatos, menta el discurso que al usurpar
ras que toman para bien las in- jo transatlántico de la tragedia de eros y todo lo demás. Así revela lo foráneo no otra cosa podría
fluencias y que se ennoblecen en todos. Así se ve tras textos como un novel autor dejado en las ma- sino alimentar la marginal condi-
los discursos que ellas plantean. “Salomé”, anuncio de un Wilde reas de lo foráneo pero cercado ción latinoamericana, la música,
De alguna forma se trata de es- bien desdibujado que se sostiene por la historia y siempre bien go- el acaso y el vacio, hombres del
critos narrativos de gran alcance, desde el corpus de lo “humano bernado por el documento fami- comun interpretando su papel,
ellos anuncian el guiño siempre siempre humano”, casa de los liar y la ficción, nada más acorde señores de un mundo de cosoto-
latente de la ficción literaria, al bullicios de los hombres más hu- a la líteratura, aquí los inquilina- sas dadivas como bien conviene a
decir de Dostoievsky, en tanto el manos de que se tenga noticia. tos, los viejos, el luengo espacio la literatura. L.C.

denominador o problemas que sor Elías Castro. Allí, reflexiona vuelve a preguntarse por su sentido.
Michel Foucault surcan, no es otro que la cons- sobre el control social ejercido El autor, Carlos Barragán, esta-
Perspectivas contemporáneas titución de la subjetividad. Ante sobre una masa poblacional que blece como punto de partida la
alrededor de su obra la ausencia de una sustancia on- padeció el rigor social ejercido aufklärung, acontecimiento que
Universidad Libre tológica del sujeto, queda la po- por el Estado. se enmarca con la respuesta a la
Varios autores sibilidad de su constitución, al pregunta ¿Qué es la ilustración?,
La historia de los sujetos se re-
224 páginas entrar en relación con la trilogía pregunta de la cual el mundo mo-
construye indagando por su es-
que Foucault ha acuñado como pacialidad. derno no ha podido desembara-
saber/poder/verdad. zarse.
El primer ensayo, lleva al lector
Foucault advierte cómo estos sa- a reflexionar acerca del cómo la El tercer ensayo, de José H. Pal-
beres sintetizan su expresión en obra de Foucault, ha potenciado ma, El cuidado de sí: entre el eli-
la idea de Ilustración, lo que nos los estudios de historia y geogra- tismo y la exclusión, trata sobre
induce a pensar que el mayor es- fía. En esta medida, Foucault el sentido de la ética, centrando
fuerzo que debemos hacer como ha logrado renovar y actualizar la discusión en el contexto grie-
sujetos autónomos es pensar por estos contenidos, lo que ha posi- go, frente a una nueva concep-
sí mismos. bilitado un nuevo acercamiento ción elitista que representa la
De manera metafórica, la utili- y apropiación de una temática modernidad en la construcción
zación de la caja de herramientas, poco usual dentro de las indaga- de un nuevo ethos. El cuidado
no es otro que el uso particular ciones filosóficas. Buena parte de de sí, designó durante mucho
dado al método de investigación las problemáticas foucaultianas, tiempo un conjunto de prácti-
que Foucault ha denominado ar- ameritan ser expuestas en térmi- cas, cuyo propósito estaba orien-
queológico, para dar cuenta de nos de espacialidad, del que no tado a establecer el gobierno de
Michel Foucault es uno de los sí mismo.
ciertas realidades, es decir, la for- están exentos escenarios de poder,
pensadores más vigentes en las
ma en que se han gestado ciertos reflejados en ámbitos educativos, Finalmente, “La constitución del
últimas décadas, y tal vez uno
discursos, que la mayoría de las fabriles, panópticos, museos y sujeto político”, texto de Heder-
de los más citados en el ámbito
veces han tenido la pretensión de bibliotecas, donde el poder sobre son Gualteros, hace una presen-
académico. Su pensamiento ha
ser verdaderos. Este mé- la vida y los espacios, regulan tación acerca de dicho sujeto en
permeado disciplinas como la
todo, permite rein- estas tensiones. un contexto contemporáneo, te-
filosofía, la geografía, la historia,
terpretar aquellos niendo como punto de referen-
la ética y la política. La propues- El segundo ensayo, de-
acontecimientos cia la pregunta acerca de cómo
ta contenida en Michel Foucault: nominado “El concepto
que generarían este se constituye no sólo en la
Perspectivas contemporáneas alre- de Aufklärung en el
rupturas y trans- historia, sino en los discursos y
dedor de su obra no pudo ser más último Foucault”,
formaciones prácticas sociales. Este ensayo se
generosa, en cuanto se propuso indaga por la idea
sociales en la circunscribe en lo que Foucault
señalar distintas miradas a su de ilustración, cen-
sociedad colom- denominara hermenéutica del
obra desde cuatro diferentes exá- trando estas inquie- sujeto, que converge en un pro-
biana, asunto del
menes críticos. que se ocupa en tudes en Kant, y lue- ceso de subjetivación ética, así el
En estos ensayos pueden adver- la primera go en Foucault, grueso de este libro de la Univer-
tirse posturas, así como ideas parte del quien, pa- sidad Libre, instrumento necesa-
concluyentes o encontradas. En libro, el sados dos rio para el desenvolvimiento éti-
términos generales, el común profe- siglos, co del hombre en la historia. L.C.

Febrero - Abril de 2009. No. 5. 21


En Breve
es vida busca de alguna forma que
El sonido es vida aquella presencia ‘cacofónica’ de Gödel, Escher, Bach,
Daniel Barenboim la música en todos los ámbitos de un eterno y gracil bucle
Editorial Norma la cotidianeidad, le convierta en Douglas Hofstadter
Bogotá. 2008 Tusquets
una asignatura y un elemento pri-
96 páginas Barcelona, 2000
mordial, acaso desarrollar esa “in-
801 páginas
teligencia del oido” y entender la
música como el centro y la causa
de todo, de sentido ambivalente, Gödel, Escher, Bach, un eterno y gra-
incluyente y responsable de mu- cil bucle, de Douglas Hofstadter,
chos de los cambios sociales nece- es un estudio de largo aliento de-
sarios en en siglo que corre, como dicado al estudio del teorema de
bien lo ha demostrado el com- la incompletitud de Kurt Gödel
positor, interprete y director Da- –en el que toda formulación axio-
niel Barenboim desde su labor al mática de teoría de los números
frente de orquestas que legitiman incluye proposiciones que, aún
versidad de Oregón), emprende
la condición humana a cuenta de siendo verdaderas, no pueden ser
demostradas-, junto a esa autorre- su camino a través de la figura de
romper con la diaspora y la gue-
ferencia sintáctica, segunda parte Kurt Gödel para referir la noción
rra, como fue el caso de aquella
de dicho teorema, en la cual las de autorreferencia, aplicada aquí
que junto al intelectual palestino
proposiciones matemáticas han a los múltiples niveles presentes
Edward Said, fundara en 1999, la
Orquesta del Diván de Oriente de referirse a sus propiedades for- en un sistema y sustentada desde
Más que tratarse de un libro para y Occidente, para músicos jóve- males, en la medida que han de la indagación en tanto este estu-
músicos, este volumen de ensayos nes de Israel y de distintos países decir de sí mismas que son inde- dio pretende establecer algunos
y artículos varios, entre entrevistas árabes. Barenboim, Judio nacido mostrables, sirve a este compendio isomorfismos existentes entre el
y discursos, consiste precisamen- en Buenos Aires, Argentina, en matemático-interdisciplinar para teorema de Gödel, los dibujos del
te en una suerte de conciliación 1942, adquirió hace ya tiempo estructurar una serie de hipótesis Maurits Cornelis Escher (1898
fenomenológica entre las palabras la nacionalidad palestina, la cual a través de los diversos lenguajes y – 1972) y la obra del músico Jo-
y el sonido y de la relación de esta comparte con su nacionalidad Is- canales autorreferenciales. Sin su- hann Sebastian Bach.
simbiosis con el equilibrio y la paz taelí mientras adelanta varias ini- mergirse en lo críptico y hacien- Este procedimiento establece me-
en la humanidad. La música, por ciativas para conseguir la paz en do uso de disimiles argumentos táforas y analogías, subrayando la
ser ambivalente, está “dentro y Medio Oriente. En 2002, y poco esbozados desde la literatura, la autorreferencia –“¿puede un siste-
fuera del mundo al mismo tiem- antes de la muerte de Said, fueron música o la pintura, Hofstadter ma comprenderse a sí mismo?”- y
po”, según declara Barenboim en merecedores del premio Principe (matemático de la Universidad la incompletitud, como posibili-
el preludio de su libro. El sonido de Asturias. L.C. de Stanford y Físico de la Uni- dades axiomáticas. L.C

primer logro de la novela, y en viola de Violeta Barreiro? ¿en ese en la ciudad de Neiva, digamos
Creería en ella si supiera bailar esencia el motor que le da vida, lo mismo orden qué ocurriría con el a finales de los 90. Sus personajes
Carlos Alberto Celis Victoria hacen sus protagonistas transfor- Padre Martínez si las confidencias acaban de llegar a la ciudad lue-
Edición de autor mados en una sola conciencia que de Donato no lo hicieran renun- go de realizar estudios en Europa.
Neiva 2006 actúa, se dobla y se desdobla en ciar a su misión sacerdotal? ¿en La coincidencia los ubica de nue-
200 páginas la armazón narrativa; culminando otro sentido qué sería de Salomé vo en otro ámbito urbano. Para
con la caída inevitable de Donato Niño, ese cruce de Circe y ángel, Salomé “Neiva era una colmena
Dugarte al infierno, maquinado que vino a perturbar con sus pó- que se movía de un lugar a otro,
como una trampa por Violeta cimas eróticas la vida de Donato? sin detenerse, sin mermarse”. Las
Barreiro, Salomé Niño, el Padre De esta forma, los personajes no calles, los parques conocidos, sus
Martínez y León Mario. andan vacantes en la novela, suel- centros comerciales, el río, son el
tos a la mera ficción cumpliendo escenario donde se mueven los
El límite de una novela con ca-
un papel funcional aislado, sino personajes, con espíritu cosmo-
rencias consiste en contar una
que el uno es la tensión del otro, polita. Cabe mencionar el mane-
historia sin narrarla. Cualquiera
en ósmosis orgánica, en juego de jo del tiempo en la novela, no el
está en capacidad de contar –de tiempo planteado como medida y
antítesis y síntesis, bien definidos
escribir y publicar- las novelas en su individualidad, con caracte- duración, sino como recurso na-
que se le antojen; pocos alcanzan res propios, pero con hilos sutiles rrativo; no es un tiempo exterior
la capacidad de narrarlas, es decir, que subyacen en su conjunto ar- a la manera de una sumatoria de
hacer de lo que cuentan, literatu- mónico para formar una red en eventos, sino encarnado en los
ra. Creería en ella si supiera bailar los laberintos de una sola concien- personajes mismos.
es, muy al contrario, una novela cia que actúa dentro de la obra. Si De otra parte, la novela establece
‘artística’, pues más allá del jue- para ellos el fracaso es la muralla relaciones con la historia, con el
go mental de sus personajes, los en sus vidas, les queda la sensua- pasado más remoto del hombre,
Creería en ella si supiera bailar, matices de su trasfondo resultan lidad como salvación. Definidos pero siempre desde el conflicto
libro de Carlos Alberto Celis Vic- del mayor interés literario. ¿Qué por una filosofía epicúrea, aun- del personaje central. Esta novela
toria, resulta un encuentro afor- sería, entonces, del destino de que bien apegados a la realidad, de Carlos Alberto Celis Victoria
tunado con el lector que se sabe Violeta Barreiro sin los poderes se echan a probar en el mundo los es el punto de partida de escritor
arrastrado no sólo por el flujo de la música?, ¿qué de Donato placeres y renuncian a la inmedia- que avizora encuentros afortuna-
de una narración afortunada, sin Dugarte con su sensibilidad en- tez, tras la conquista de la libertad dos en su viaje por la literatura.
somníferos, sino por la tensión y fermiza por los colores y los per- que les niega una cotidianidad
el contraste de sus personajes. El fumes si no se agregara a su vida la enfermiza. La novela transcurre Nelson Romero Guzmán
22 Febrero - Abril de 2009. No. 5.
Sobre la Crítica

“A l Coleccionista de Elo-
gios le molesta el silencio
de las calles. Las recorre incan-
aunque sean cosas viejas. Sin
embargo prefiere lo nuevo. “E l buen crítico no estorba,
sino ayuda, y su mis-
ión, entre otras cosas, es de ín-
la emoción suscitada en él por un
hecho de la naturaleza, de la hu-
manidad, de su vivencia person-
Espera nuevos giros, frases que
sablemente para obligarlas a elo- todavía no haya oído nunca, toda dole pedagógica, pues guía a los al, de su fantasía. El crítico parte,
giarle y le pone de mal humor su una lengua del elogio inventada demás lectores. creadoramente, de su impresión
resistencia. Para él los periódicos sólo para él. Los muertos, de vez El crítico es un lector, pero un de la obra literaria. Si todo lector
son demasiados cotidianos. Los en cuando, pueden ser también lector más alerta y más “total”, de refleja, como un espejo, la expe-
hombres, después de cogerlos, objeto de estas alabanzas; se sensibilidad más aguda: las cuali- riencia artística transmitida por
los vuelven a tirar juntamente granjea su bendición. dades de recepción del lector cor- el poema, el crítico, lector privi-
con su fotografía. ¿Tendría bas- riente están como extremadas y legiado, dotado no sólo de mayor
El Coleccionista de Elogios es- receptividad y de mayor sagaci-
tante con que cada día viniera exacerbadas en el lector especial
taría dispuesto a castigar con la dad literaria, sino también de la
algo nuevo sobre él en el perió- que es el crítico. Y éste, además,
pena de muerte toda difamación capacidad de comunicación, es
dico? ¡No! Sin duda necesita los tiene una íntima necesidad de
o, simplemente, toda crítica. No un espejo mucho más fiel y sen-
periódicos - los estuvo leyendo comunicación: debe participar a
es una persona inhumana, no sible, de más pronta respuesta.
hasta que se encontró allí...-, otros la impresión recibida. Rec-
lamenta la abolición de la pena Y, además, un espejo mucho
pero quiere mucho más. rea, en cierta forma, la obra del
capital; sólo en casos especiales, más amplio, mucho más capaz
Quiere arrinconar los sucesos del es decir, cuando se trata de él poeta; es una especie de creador.
mundo. Quiere que se ocupen de de reflejar en toda su compleji-
habría que volverla a instaurar. En el poeta, la creación tiene un
él, no de terremotos y guerras. dad la esencia de la obra. Si todo
carácter absoluto: él no juzga. El lector refleja la experiencia artís-
Encuentra totalmente absurdo El Coleccionista de elogios no
crítico sí juzga, pero en esta tarea tica transmitida por el poema, el
todo lo que la Luna ha dado que deja escapar ningún elogio; hasta
no se apoya fundamentalmente crítico, dotado no sólo de mayor
hacer a los hombres. Le tiene para lo que se ha dicho dos, tres
en bases científicas, sino en una receptividad y de mayor sagaci-
rabia a la Luna porque se habló y cuatro veces tiene sitio. Va en-
intuición personal iluminada por dad literaria, sino también de la
tanto de ella. gordando, engordando, pero le
la inteligencia. capacidad de comunicación, es
gusta. Encuentra siempre mu-
El Coleccionista de Elogios llena un espejo mucho más fiel y sen-
jeres que le amen por estar tan Si el poeta nos comunica una ex-
una casa con su nombre. Guarda sible, de más pronta respuesta.
gordo. Lamen sus elogios y es- periencia, una intuición intensa
el más pequeño trozo de papel en —y sólo las verdaderas obras
peran sacar algo de ello.
el que éste esté escrito y también
literarias son capaces de comu- Alatorre, Antonio. “La crítica
el más grande. Elias Canetti. La provincia del nicárnoslas—, el crítico nos co- literaria”. Revista Mexicana de
De vez en cuando se lee toda la hombre. Editorial Taurus, España, munica su experiencia del po- Literatura,vol. 1, 1955, núm. 2,
casa, una y otra vez lo mismo, 1982. 260 páginas ema. El creador original parte de pp. 156-163.

Cuando los pueblos, en algún pasaje de su historia no lograban entenderse tras la explosión de las lenguas de una abigarrada Babel,
surgió la llamada Lengua Franca (o lingua franca), un habla de emergencia que prescinde un tanto de su lengua materna, para
tender un puente lingüístico y poder entenderse. Tal mutuo acuerdo, como ocurrió con el griego y el latín, sirvió para convenios
recíprocos en política y en economía, fundamentalmente, pero también en otros ámbitos del entendimiento humano.
Es algo así como una suerte de mestizaje de las lenguas, una especie de poderosa bastardía idiomática. Hoy el idioma inglés es una
“lingua franca” que se ha convertido en lengua internacional, sobre todo en el terreno de los negocios.
Para Carlos Fuentes el castellano es la lengua franca de la indianidad americana.Así fue como, para bien y para mal, se entendieron
jesuitas y guaraníes.
Adoptamos esta expresión, Lengua Franca, para nuestro proyecto, en un sentido más lato y no pensando privativamente en esa
lengua que a partir del Renacimiento y en extensión hasta el siglo XIX fue utilizada por marineros que mezclaron en su marmita
fragmentos de lenguas como la italiana, la árabe y la griega, con procedencias tan diversas y atomizadas.
De nuevo, se trata de un cruce de caminos, de un mestizaje de voces.
En un sentido más claro creemos que el carácter multilingüe de las artes es Lengua Franca.
Que ellas se entrecruzan para fundar fecundos mestizajes. Nadie, a estas alturas, puede
crearle compartimentos estancos a las artes: la pintura se nutre del lenguaje de la poesía, la
poesía de la lengua pétrea de la arquitectura, esta última de la música, etcétera.
De otra parte, en algo no menos metafórico a pesar de su evidente expresión, hablar en una
Lengua Franca también significa, en nuestro caso, una franquicia para decir
o para divulgar lo que se oculta.
El carácter franco de esta Lengua Franca quiere ayudar a propiciar
reflexiones y debates en un país que necesita algo más que pensamientos
uniformes. No hablamos portuñol ni espanglés ni , pero ante el fracaso de una
lengua única como el esperanto, asumimos desde las artes y desde otras
formas de pensamiento insumiso una Lengua Franca.

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