Escultura Loba
Escultura Loba
Escultura Loba
ANÁLISIS
1.1Elementos plásticos:
1.2.2. Composición:
Se trata de una composición clásica ya que tiene elementos estáticos buscando equilibrio con la simetría.
El ritmo se da de nuevo en el pelaje o las costillas de la loba y lo alcanza por el juego de repeticiones.
Los niños siguen los cánones de belleza y armonía de la época, proporcionándoles unos cuerpos quizá con una estética
excesiva (en cuanto a lo marcado de sus cuerpos) para su edad.
2. CONTENIDO
Actualmente la obra original se halla en el Museo Capitolino Romano (en Roma).
Posee un buen estado de conservación aunque se apreció que había sufrido los efectos del fuego en las patas traseras.
Su género específico es el de estatua.
Podría decirse que la loba (al no ser un humano) es una imagen y los niños al ser humanos, estatua.
Lo que más destaca de esta escultura es su detallismo y naturalismo teniendo en cuenta la época en la que se daba.
Son figuras muy estilizadas. Las fosas nasales de la loba dan la sensación de estar dilatadas, con grandes ojos
abiertos y tres arrugas en la frente lo que da la sensación de realismo.
3. CONTEXTO
El origen de la obra es un tema bastante polémico. Hasta hace bien poco se creía que databa de 470 a.C y que
pertenecía a la época romana, más concretamente al arte etrusco y se le atribuía al artista Vulca. Sin embargo,
recientemente se intenta demostrar que es una datación errónea y que realmente pertenece a la Edad Media.
Lo que sí es cierto es que los dos niños se añadieron durante el Renacimiento (siglo XV y XVI)y probablemente
son obra del escultor Antonio de Pollaiuolo.
La obra mantiene varias copias por todo el mundo entre ellas en Mérida o Emérita Augusta.(Extremadura.)
En cuanto a sus posibles autores conocemos que Vulca era natural de Veii y trabajó en Roma durante el tiempo de
Tarquínio Sobe Nos encontramos ante una imagen de la Loba Capitolina, también conocida como Luperca.
rbo para quién creó una estatua de Júpiter, colocada sobre la Colina Capitolina la cual fue muy del gusto del pueblo
romano. Otras obras que se le atribuyen son Apolo de Veyes y la Loba Capitolina.
Él segundo, autor de quiénes serían los pequeños Rómulo y Remo fue el pintor, escultor, grabador y orfebre Antonio
Benci, más conocido como Antonio de Pollaiolo nació en Florencia en 1.493 .Era un reputado orfebre que había
trabajado con Ghiberti en las puertas del baptisterio de Florencia, realizó cuadros para el palacio de los Médicis y en
Roma llevó a cabo los sepulcros de Sixto IV (1484-1493) y de Inocencio VIII (1493-1497), siendo también autor de
grabados que influyeron en Mantegna y luego, en Durero. Murió en Roma en 1.498.
La transcendencia de la obra es muy importante ya que abarca toda la historia de Roma lugar donde es muy
importante además, la obra mantiene varias copias por todo el mundo entre ellas en Emérita Augusta ó Mérida.
(Extremadura.)
Un análisis con carbono 14 ha revelado que la conocida estatua de la Loba mitológica que amamantó a Rómulo y
Remo y que se exhibe en los Museos Capitalinos de Roma no pertenece a la época etrusca como hasta ahora se
había dicho, sino a la Edad Media, revelan hoy los medios locales.
Hasta ahora la estatua se fechaba en el siglo V antes de Cristo mientras que este nuevo análisis sitúa su realización
más de mil años después, entre los siglos VIII y XIV después de Cristo. Según el periódico italiano La Repubblica,
el Ayuntamiento de Roma conocía los resultados desde hace más de un año pero no los había hecho públicos.
Según la leyenda, los gemelos Rómulo y Remo, cuyo padre era el dios Marte, fueron
abandonados en el río Tíber por orden del rey Amulio, cuya hija había incumplido el mandato de
virginidad que él le impuso cuando la obligó a dedicarse al culto de Vesta. Los hermanos fueron luego
recogidos y amamantados por la loba Luperca y cuando crecieron fundaron Roma, según cuenta el
mito.
La belleza de ésta escultura no sólo radica en el realismo de la misma y el movimiento que transmite, sino en el
mensaje implícito mismo de que los animales son capaces de hacer cosas realmente asombrosas y nobles como
alimentar y criar a miembros que no son de su misma especie; en el caso analizado, una loba que alimenta a
niños humanos.
Composición: Se trata de una composición clásica ya que tiene elementos estáticos buscando equilibrio con
la simetría. El ritmo se da de nuevo en el pelaje o las costillas de la loba y lo alcanza por el juego de
repeticiones. Los niños siguen los cánones de belleza y armonía de la época, proporcionándoles unos
cuerpos quizá con una estética excesiva (en cuanto a lo marcado de sus cuerpos) para su edad.
Luperca,
símbolo de Roma.WIKIPEDIA
La 'loba capitolina', la escultura que representa a Rómulo y Remo amamantados por este
animal y símbolo de Roma, no es etrusca como se creía sino que su realización se
sitúa entre el siglo XI y XII, en plena Edad Media.
El Ayuntamiento de Roma anunció, como señalan este sábado los medios de comunicación
italianos, que después de años de estudios se ha demostrado que la 'luperca', como también
se la conoce, es 1.700 años mas joven de lo que se creía.
La escultura, que se encuentra custodiada en los Museos Capitolinos de Roma, y cuya copia
situada en el exterior (junto al Ayuntamiento de la ciudad) es una de las más fotografiadas
por los turistas, se pensaba que era de época etrusca, pero en 1996 cuando fue restaurada
comenzaron las dudas sobre su procedencia.
Se trata de una figura en bronce, de 75 centímetros de altura, y a la que posteriormente, en
1941, se le añadieron las esculturas de los niños Rómulo y Remo amamantando, para
representar la leyenda mitológica de la fundación de Roma.
"La tesis es que se trata de la copia medieval de un original etrusco", explicó el
superintendente de Bienes Culturales de Roma, Uberto Broccoli, quien añadió que aunque la
fecha nunca será exacta, "sí se puede decir que se ha dado una respuesta a tantos años de
debates científicos" sobre la "loba".
Las investigaciones para esclarecer su edad comenzaron en 2009 y se han realizado
gracias a avanzadas técnicas como la espectometría de masa, que ha permitido extraer y
analizar pequeñas muestras orgánicas, restos de tierra o vegetales, para ser analizados y
después comparados, explicaron en la rueda de prensa.
Los expertos de la Universidad de Salento, quienes han realizado estos exámenes,
consideran que la atribución del Siglo XI o XII es correcta al 95,4%.
Según la mitología romana, cuando el rey Amulio mando matar a todos los que pudieran ser
sus herederos, la madre de Rómulo y Remo les arrojó al río Tíber en una cesta para intentar
salvarles y una loba les recogió y les crió.
IDENTIFICACIÓN:
Nos encontramos ante una imagen de la Loba Capitolina, también conocida como Luperca.
En cuanto a su datación existe discusión, originalmente se fechaba hacia el 470 a. C. y se atribuía al escultor Vulca,
enmarcándose dentro del Arte Etrusco, sin embargo, investigaciones recientes sitúan su origen cerca del siglo XII
d. C., por lo que correspondería al Románico, otras teorías indican que se trataría de una copia medieval de un
original etrusco.
ANÁLISIS FORMAL:
La composición de la escultura, es equilibrada y armónica, el animal se dispone en pie sobre sus cuatro patas
con la cabeza girada hacia un lado. Se establece una diagonal entre una de las patas traseras y la cabeza, que
contribuyen a dar cierto movimiento a la escultura, junto con el movimiento de la cabeza, no obstante su
carácter es más bien estático.
Su disposición, donde predominan los volúmenes finos y estrechos, como observamos en el cuerpo y en las
patas transmite cierta sensación de ligereza y esbeltez.
Existe un estudio anatómico del animal como se aprecia en la disposición de las patas y el lomo, donde se
aprecian rasgos de la musculatura y los tendones, aunque aún muy planos y con tendencia a la geometría.
El rostro y el pelaje del animal quizá sea la faceta menos lograda de la escultura, con una tendencia a la repetición
de formas geométricas puras en el pelaje (una característica típica de la escultura etrusca, como también
observamos en la Quimera de Arezzo), el rostro queda lejos de asemejarse a un lobo, pareciéndose mucho más a
un perro, debido seguramente a la falta de modelos previos en la escultura de animales.
Por último, decir que la escultura tiene un carácter naturalista, de una factura bella, ligera y elegante.
FUNCIÓN Y SIGNIFICADO:
En su estado actual representa a Luperca, la loba romana que amamanto a los gemelos Rómulo y Remo, que
según el mito, hijos de Marte fueron abandonados en el Tíber.
Luperca los amamantó y los crío y años después fundaron la ciudad de Roma.
En este sentido, su función y significado sería conmemorativo. Pero las dudas sobre su atribución dan lugar a
múltiples significados.
COMENTARIO: La cultura etrusca predominó en el centro de Italia, en las actuales regiones de Laccio y
Umbría, a través de sus restos culturales sabemos que sus contactos con la cultura griega asentada en la Magna
Grecia eran frecuentes, lo que permitió asimilar muchos de sus rasgos artísticos y culturales.
No obstante, la cultura etrusca mantuvo sus propios rasgos estilísticos.
Influida por modelos orientalizantes, canalizó estas influencias hacia un arte profundamente religioso, vinculado a
los ritos funerarios y a un estilo mucho más naturalista que incluiría el cultivo del retrato. Sobre todo será el
retrato una de las mayores influencias del arte Etrusco en el arte Romano donde alcanzará una calidad técnica
nunca vista antes en la Historia del Arte, dejando ejemplos como el Togado Barberini o el Augusto Prima Porta.
ArteClásicoRoma
Los etruscos sentían predilección por las fieras lactantes, por considerar quizá que en tal estado extreman ellas su
agresividad. La Tumba de las Leonas de Tarquinia y otros sepulcros de la época dan muestras de esa predilección, como
también lo hacen los símiles homéricos que para realzar el coraje de un guerrero lo comparan a la leona, la loba o la jabalina
que han dejado a sus crías en el cubil. Igual cometido pudo tener la estatua de una loba -quizá esta misma- que se hallaba en
el Comitium de Roma al pie de la ficus Ruminalis, la higuera consagrada a Júpiter, a cuyo pie habían sido expuestos Rómulo
y Remo.
La loba bastaba por sí sola para señalarla sacralidad del lugar y dispensarle protección. Pero en el año 295, cuando
empieza a soplar sobre Roma la corriente renovadora del primer helenismo; los hermanos Ogulnios, los mismos que
sustituyeron la vieja cuadriga del fastigium del Templo de Júpiter en el Capitolio por otra de aire más moderno, pusieron bajo
las ubres de la Loba Ruminal las estatuas de los gemelos fundadores (Livio X, 23: lovemque in culmini cura quadrigis et ad
ficum Ruminalem simulacra infantium conditorum urbis sub uberibus lupae posuerunt). Así pues, cuando ya no se entendía el
sentido de las fieras arcaicas, la Loba quedó convertida por los Ogulnios en mater Romanorum. No se sabe cómo, los
gemelos perecieron en el naufragio de la Antigüedad. Y durante todo el Medioevo, cuando la vio magister Gregorius a la
puerta del Laterano, estuvo la Loba a la vista de otro público de gusto arcaico, que se estremecía de emoción ante las fieras,
sin echar en falta el complemento idílico de Rómulo y Remo. Hubo de sobrevenir en el Renacimiento una nueva época de
humanismo para que un escultor de entonces, quizá Antonio Pollaiuolo, volviese a ponerle unos gemelos lactantes, creando
Con ello uno de los pastiches más famosos y mejor logrados de la historia del arte. Un lugar consagrado a Marte, a Apolo, o
al Hades etrusco, las tres divinidades itálicas asociadas con el lobo, era el destino idóneo de esta Loba ancestral de los
romanos, vigilante, amenazadora y firme en su actitud, obra de un gran artista de comienzos del siglo V. No parece haber
estado nunca bajo la tierra, aunque sí haber sufrido efectos del fuego en sus patas traseras, pero no consecuencia
necesariamente de haber sido alcanzada por un rayo. Dante la conoció y alude a ella en la "Divina Comedia". Como él, otros
muchos escritores y artistas la han convertido en una de las estatuas de animales más célebres del mundo. Suele atribuirse
al escultor del Apolo de Veyes, Vulca, o a su entorno.
Loba Capitolina
Loba Capitolina
Algunas fuentes antiguas sitúan en el año 295 a.C. a la estatua al pie de la Colina del Palatino.
El escritor, naturalista y militar romano Gayo Plinio Segundo (también conocido como Plinio el Viejo) sitúa la escultura en el Foro
Romano, mientras que el jurista, político, filósofo, escritor y orador romano Marco Tulio Cicerón (también conocido como Cicerón)
menciona que la escultura situada en el Capitolio fue alcanzada por un rayo en el año 65 a.C.
Fue en diciembre del año 1.471 cuando el Papa Sixto IV (también conocido como Francesco Della Rovere) ordenó transferir numerosas
esculturas clásicas (entre ellas la Loba Capitalina) a las colecciones de los Museos Capitolinos, lo que conllevó el inicio de la colección
papal de arte.
Loba Capitolina
Descripción
Tiene una altura de 75 cm y una anchura de 114 cm. Está fabricada en bronce, mediante la técnica de la cera perdida.
Se trata de una escultura de bulto redondo o exenta que representa la figura de una loba amamantando a dos niños pequeños.
Cabe señalar que las esculturas de los dos niños fueron fabricadas y agregadas a posteriores. Se piensa que fueron fabricadas durante el
período renacentista (en el año 1.471) y que su autor es el pintor, escultor, orfebre y grabador cuatrocentista italiano Antonio di Jacopo
Benci (también conocido como Antonio Pollaiuolo).
La loba se encuentra de pie sobre sus cuatro patas, con una pose tensa y vigilante, se puede apreciar como la cabeza se encuentra girada
hacia el lado izquierdo del cuerpo.
Las orejas puntiagudas y los ojos están representados de forma penetrante. Además tiene la boca entreabierta, dejando a la vista los
colmillos.
Loba Capitolina
Cabe destacar que el rostro se asemeja más a un perro que a un lobo, esto puede ser debido a la falta de modelos dentro de la escultura
animal.
El pelaje se encuentra representado por formas geométricas puras (característica de la escultura etrusca).
Los detalles anatómicos se aprecian en la musculatura y los tendones, aunque son muy planos y tienden a la geometría.
Respecto a la composición se puede observar como predominan los volúmenes finos y estrechos (en el cuerpo), mientras que algunas
partes presentan una sensación de ligereza y esbeltez (las patas).
La escultura es una representación de la leyenda romana de los gemelos Rómulo y Remo, fundadores de Roma.
Según la leyenda, en la ciudad de Alba Longa fundada por Ascanio (hijo de Eneas), el rey Numitor fue traicionado por su hermano Amulio.
Éste mató a sus hijos varones y obligó a su sobrina Rea Silvia a servir como vestal (a la diosa Vesta, con lo que debía de mantener la
castidad por un período de 30 años).
Pero el dios Marte (dios de la Guerra), se enamoró de Rea Silvia teniendo dos hijos con ella, los gemelos Rómulo y Remo.
Cuando Amulió se enteró ordeno apresar a Rea Silvia y que sus hijos fuesen ahogados en el río Tiber.
El cesto de mimbre dónde se encontraban los gemelos llegó hasta las riberas del río, cerca del monte Palatino, dónde fueron hallados por
la loba Luperca que los crió y amamantó.
Tiempo después fue el pastor Fástulo quien halló a los niños en la entrada de una cueva, los recogió y crió junto a su mujer Aca Larentia.
Loba Capitolina (copia)
Cuando fueron mayores se les rebeló la verdad y fueron a Alba Longa, derrocaron a su tío Amulio y restablecieron en el trono a su abuelo
Numitor.
Los gemelos decidieron entonces fundar una nueva ciudad, Rómulo quería edificarla en el Monte Palatino y llamarla Roma, mientras que
Remo la quería edificar en el monte Aventino y llamarla Remora.
Este conflicto llevó a una batalla entre los hermanos, con la consecuencia de que Rómulo mató a Remo y fundó su nueva ciudad Roma.
Para finalizar enfatizar que la imagen de la loba amamantando a los gemelos Rómulo y Remo es un símbolo de Roma desde la antigüedad
y uno de los iconos más representativos y reconocibles de la mitología romana.
Además se pueden contemplar numerosas replicas, entre las que destaca: la Loba Capitolina situada en la ciudad de Siena, en el Palazzo
Pubblico (Italia) y la situada en el norte de Italia, en la ciudad de Aquileia.
Aparte también se encuentran copias en la ciudad de Sighisoara (Rumanía), frente al Museo Nacional de Chisinau (Moldavia) y en el
Museo Nacional de Moyen-Age de París (Francia).
Actualmente la escultura original se encuentra en el Museo del Capitolio Romano (dentro de los Museos Capitolinos), Roma (Italia)
Alrededor del siglo VIII a. C. los asentamientos se unificaron bajo el nombre de Roma Quadrata. La leyenda cuenta que
Roma fue fundada por Rómulo el 21 de abril de 753 a. C. Rómulo, cuyo nombre se dice habría inspirado el nombre de la
ciudad, fue el primero de los siete Reyes de Roma en haber sido elegido. Los historiadores romanos dataron la fundación en
el 753 a. C., y desde esa fecha contaron su edad o calendario particular. Asimismo, también existe una teoría crítica de la
fundación de Roma, aparte de la teoría legendaria. La teoría crítica, sostenida por muchos autores viene a decir que Roma
surge a partir del forum romanum.
-Análisis Simbólico: Luperca es el nombre de la loba que segú n la mitología amamantó a Ró mulo y Remo cuando estos fueron
mandados a matar por el rey Amulio. Actualmente la estatua dedicada a ella, llamada "la loba capitolina" (lupa capitolina en
italiano), se conserva en el museo del Capitolio romano (Museos Capitolinos).
Segú n Tito Livio (Ab Vrbe Condita, 1, 4, 6-7), la leyenda de la loba podría en realidad encubrir la actuació n de una prostituta, ya que
la palabra lupa también hacía referencia a mujeres dedicadas al comercio de su cuerpo (de esta acepció n proviene la palabra
moderna lupanar).
-Análisis Iconográfico: Lo que no se encuentra muy bien inscrito en la obra es el cuidado que la loba les da a los hermanos me
refiero a que esta los crio del todo lo cual no se ve asi mas bien se ve una forma de cuidado no tan fuerte.
-Significado Ideológico: la loba que segú n la mitología amamantó a Ró mulo y Remo cuando estos fueron mandados a matar por el
rey Amulio.
-Análisis Formal o Estilístico: Se trata de una figura en bronce, de 75 centímetros de altura y 114 de anchura. Segú n la tradició n,
se trataría de una escultura etrusca, aunque recientemente se ha puesto en duda esta datació n, demostrá ndose finalmente que ésta
data de la Edad Media.
Los dos niñ os se añ adieron durante el Renacimiento y probablemente son obra del escultor Antonio del Pollaiuolo.
-Análisis Biográfico: Bronce etrusco conocido como la Loba Capitolina (siglo VI a. C.). Las figuras de Ró mulo y Remo se añ adieron
en el siglo XV. Ubicada en el Museo del Capitolio
La Loba Capitolina es una escultura de bronce de una loba que amamanta a bebés gemelos, inspirado en la leyenda
de la fundación de Roma. Según la leyenda, cuando Numitor, abuelo de los gemelos Rómulo y Remo, fue derrocado
por su hermano Amulio, el ordenó que los gemelos fuera echados al río Tíber. Ellos fueron rescatados por una
loba que cuidó de ellos hasta que un pastor, Faustulus, encontró y los crió. La Loba Capitolina se
ha ubicado desde 1471 en el Palazzo dei Conservatori en el Capitolio (la antigua colina Capitolina), Roma, Italia. V
La Loba es una réplica en bronce de la Loba Romana, monumento del Museo Capitolina perteneciente al arte etrusco,
estuvo escondida en las tinieblas del Templo de Júpiter y se cree que ya existía en el año 65 a.C. y suele atribuirse al
escultor del Apolo de Veyes, Vulca. Salió a luz de entre escombros en el oscuro Medioevo durante el periodo que corre del
siglo VIII al X. Es una estatua de arte etrusco, rígida pero expresiva, de estilo convencional pero llena de verismo: es una loba
amenazada y amenazante a un mismo tiempo, que ruge siniestramente con las orejas tensas, con una llama en la mirada y
fauces semiabiertas. Sólo la cabeza levemente doblada y las costillas resaltantes pueden indicar su origen etrusco…” “…la
cerviz y cuello recubiertos de espeso pelamen en forma de pequeños rulos, la trompa alerta y los arcos supraciliares
rigurosamente marcados…”. Por otro lado, hay que señalar que los gemelos sentados en acto de succionar su leche son obra
posterior, del siglo XV, ejecutados, se cree, por el artista italiano Antonio Del Pollaiuolo.