Actividades Humanas
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Relaciones sociales
Por ejemplo, las estructuras sociales de las familias se han modificado, y eso se
debe a que las necesidades sociales y culturales cambian constantemente, y por
ende los roles en el hogar también. Lo mismo ocurre con las organizaciones
culturales o políticas.
FAMILIA CONSANGUÍNEA
En este tipo de familia se dan dos características que la diferencian de las demás
familia.
1.- El grupo se interrelaciona sexualmente: esto significa que dentro del mismo
grupo familiar se podía tener relaciones sexuales; tal es el caso que se permitían
las relaciones colaterales entre hermanos y primos.
2.- Estaba compuesto por individuos de una misma generación: es decir por seres
coetáneos y de aproximadamente la misma edad.
FAMILIA POLIGÁMICA
Es otro tipo de familia que tuvo relieve en la época antigua; en esta forma de
constitución de la familia se da la libertad tanto a la mujer como al hombre de
escoger tantos compañeros como compañeras quieran, de ahí que se da la
poliandria para la mujer y Poligenia para el hombre.
CAUSAS DE LA POLANDRIA
Otra de las causas era la necesidad de la mayor fuerza de trabajo dentro del
núcleo familiar, lo que permitía la admisión de dos o más hombres compartiendo
una sola mujer.
CAUSAS DE LA POLIGENIA
- Predominio del poder masculino.
LA FAMILIA MONOGÁMICA
Al hacer este tipo de estudio, hemos observado que existen dos formas de
integración del núcleo familiar, antiguamente se concebía a la familia extensa a la
que comprendía la familia Patriarcal Romana en la que predominaba como jefe de
la misma el padre, a su esposa, a sus hijos y otros miembros de la familia.
También existe la familia nuclear o conyugal, la cual está formada por el hombre,
la mujer y los hijos conformando la familia contemporánea actual o nuclear.
Concepto de socialización
Es un proceso mediante el cual el individuo se convierte en un miembro del grupo
y llega a asumir las pautas de comportamiento de ese grupo (normas, valores,
actitudes, etc.) El Proceso vital que transforma al individuo biológico en un
individuo social por medio de la transformación y el aprendizaje de la cultura de la
sociedad en la que vive y se desarrolla. Proceso que permite introducir al individuo
en la sociedad y viceversa, haciendo de él un miembro activo del grupo y supone
un proceso de aprendizaje
FORMAS DE SOCIALIZACIÓN
Socialización primaria
Es la socialización que se da en el seno familiar del individuo, hasta que llega a
ciertos institutos educativos como puede ser el colegio, donde suceden las
primeras relaciones con otras personas que no se encuadran en el entorno familiar
(de todas maneras no hay un momento exacto que marque la finalización de esta
etapa, ya que esto varía según el individuo, la sociedad y las pautas culturales en
la que este se desenvuelva).
Socialización secundaria
Es toda socialización ulterior, que introduce a un individuo ya socializado en
nuevos sectores del mundo objetivo de una sociedad. Es la internalización de
submundos institucionales (realidades parciales que contrastan con el mundo de
base adquirido en la socialización primaria) o basados sobre instituciones. El
aprendizaje se refiere a la adquisición de nuevos recursos al repertorio de
respuestas del individuo y en este sentido su alcance es más amplio, ya que no
todo aprendizaje supone un factor socializante. Para que esta resulte efectiva el
punto de partida se inicia en la edad temprana con la asimilación de las
estructuras cognitivas y las habilidades lingüísticas y comunicativas para, a través
de las pautas de valores, normas y significados reconocidos, aprender la realidad
y capacitar al sujeto para alcanzar contenidos significativos más extensos y lograr
un proceso de interacción en el pensamiento.
Socialización terciaria
La socialización terciaria es un proceso de reintegración social solamente
aplicable a aquellos que han sufrido una desviación de la norma. También se
denomina resocialización y se aplica sobre aquellas personas que han mostrado
conductas delictivas e infracciones. Se trata de readaptar la conducta del
desviado, es decir, el que ha transgredido la norma. Normalmente, ante tal
transgresión, el individuo termina en la cárcel, con lo que este proceso de
socialización terciaria suele darse dentro de la prisión. Se entiende entonces que
los agentes inductores de la socialización terciaria sean las autoridades
competentes y los profesionales (educadores sociales, psiquiatras, psicólogos y
médicos).
Usos sociales
Se manifiestan de dos maneras:
Orden moral
Conjunto de los elementos de la conducta humana racional y libre, ordenados de
acuerdo con la ley moral en atención a una finalidad concreta y en consonancia
con las ideas religiosas que se tengan.
Orden jurídico: Conjunto de elementos de la conducta humana ordenados de
acuerdo con una norma positiva para la consecución de la paz social.
El orden moral tiene las siguientes partes:
Derecho natural
Conjunto de principios universales, inmutables, deducibles por la razón humana,
arraigado en todos los hombres y dirigidas a regular la vida social del hombre en
materia de justicia, prescribiendo a dar a cada uno lo suyo.
Derecho positivo
Conjunto de normas promulgadas por la autoridad competente que
imperativamente (obligatorio) regulan la vida social del hombre y la paz social.
Diferencias:
6. Organización económica
La tradición FAMILIA
Se trata de una economía no monetizada que se basa en los recursos naturales
para proveer las necesidades básicas a través de la caza, recolección de frutos y
la agricultura de subsistencia. El excedente económico es mínimo y sólo se utiliza
para el comercio de productos de primera necesidad, no hay industrialización. En
la tradición se asegura que se realicen las actividades necesarias asignando las
tareas de los padres a sus hijos; los empleos se transmiten de generación en
generación, de esta manera se asegura la producción con una cadena hereditaria
de habilidades.
En cuanto a la distribución, se aplican las reglas del parentesco, las cuales
establecen una jerarquía dentro de la familia; el padre, el hombre de la casa,
recibe la mayor porción del producto mientras que los hijos y la esposa reciben
menos. Esto depende del posicionamiento que ocupa una persona dentro de la
pirámide familiar por creencias religiosas o costumbres.
Este sistema se da principalmente en sociedades agrarias primitivas. La tradición
está basada en las costumbres y creencias de las sociedades por lo cual no está
sujeta al cambio social o económico; las sociedades que se rigen bajo un sistema
tradicional permanecen sin cambios en comparación con lo que eran hace mil
años. Es una forma de organizar la producción y distribución a expensas del
crecimiento económico.
A medida que la urbanización, la civilización, y la división del trabajo se
propagaron, diversas sociedades pasaron a otros sistemas económicos en
diversos momentos
Un claro ejemplo es la monarquía, podemos que el cargo reside en un rey o una
reina de forma hereditaria, y ya que fallecen o lo sustituyen del trono le van a dejar
el puesto a sus herederos. Otro claro ejemplo es cuando un hijo estudia la misma
carrera que sus padres para heredar el negocio familiar o algún puesto importante
en alguna empresa.
TIPOS DE MEPRESAS
Hay muchos tipos de empresas. Podemos clasificarlas en función a diversos criterios.
Los más importantes son los siguientes:
A) Según su tamaño.
En España, las empresas del sector terciario ya suponen el 75% del total del a
producción en España y da trabajo al 80% de la población
La propiedad del capital de una empresa permite establecer tres tipos distintos:
PROCESOS DE PRODUCCIÓN
Considerar a la empresa como una organización social tiene infinitas ventajas para
el desarrollo de la misma y de todas las partes y miembros implicados en sus
procesos y actividades.
Sólo a partir de este momento, el momento en el que los miembros del grupo
sienten como suyo el espacio y los nexos establecidos, podemos asegurar la
organización del trabajo en equipos y la eficacia del resultado.
9. Las familias. Modos de obtener ingresos. Tipos de ingresos salarios,
rentas, beneficios. Necesidades, demanda de bienes y gasto familiar. Ingreso
bruto e ingreso disponible.
INGRESOS
GASTOS
INGRESO BRUTO
El ingreso total de una familia incluye todo el dinero que las personas ganan en la
casa durante el año, sumando todo.
Este sector se refiere a las transacciones económicas que se realizan en el ámbito monetario
y financiero, es decir, a todas las operaciones que los distintos agentes económicos realizan
en las instituciones bancarias, en las cooperativas de ahorro y crédito, en las mutualistas, en
las tarjetas de crédito, financieras, Bancos, Corporación Financiera, etc.
El BCR recibe de todas las entidades del sistema financiero los balances diarios, semanales y
mensuales, a partir de los cuales, con las aplicaciones informáticas que para el efecto se han
desarrollado, se obtienen una serie de indicadores que dan cuenta de la marcha del sector.
Así, el BCR publica la "Reserva Internacional (RI)", la base monetaria, la emisión
PDF
Ministerio de Trabajo y Previsión Social de E! Salvador (MINTRAB). ... XXII de la Declaración
Americana de los Derechos y Deberes del Hombre; Art 23 núm.
INTRODUCCIÓN.
Como la célula se concibe como la unidad anatómica, fisiológica y biológica de todo ser
viviente; así, la familia se considera la célula de toda la sociedad humana y se constituye en
la base fundamental de ella. Y la escuela es la célula que fundamenta funcionalmente la
educación de los pueblos; de ahí la imprescindible relación entre la familia y la escuela.
EDUCACIÓN
Proceso que tiene por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el
respeto a los principios democráticos de convivencia y a los derechos y deberes
fundamentales.
Proceso que concierne al despliegue de autorrealización de las potencialidades y la
capacitación para el ejercicio de actividades profesionales.
Platón: La educación es el proceso que permite al hombre tomar conciencia de la
existencia de otra realidad, y más plena, a la que está llamado, de la que procede y
hacia la que dirige. Por tanto “La educación es la desalineación, la ciencia es liberación
y la filosofía es alumbramiento”.
Coppermann: “La educación es una acción producida según las exigencias de la
sociedad, inspiradora y modelo, con el propósito de formar a individuos de acuerdo
con su ideal del hombre en sí.”
SOCIEDAD
La sociedad se concibe como el conjunto de seres humanos que se agrupan en familias con
medios y fines concretos. La familia como base fundamental de toda sociedad humana es
aquel grupo primario, cuyos integrantes vinculados por lazos consanguíneos (o por
adopciones) experimentan relaciones directas cara a cara y como grupo social es
permanente.
La naturaleza de la sociedad la constituyen el conjunto de acciones y relaciones de las
personas que a través de medios específicos buscan el cumplimiento de ciertos fines.
Los medios pueden ser económicos, sociales, culturales, científicos, tecnológicos,
académicos y más.
Los fines serán siempre perpetuar la producción y reproducción integral y plena de las
personas, como decía Sócrates: “Buenos ciudadanos hacen una buena sociedad y una buena
sociedad hace buenos ciudadanos”.
SOCIALIZACIÓN
“Proceso mediante el cual se transmite al individuo, durante su desarrollo y maduración,
el conocimiento de la cultura, sus reglas, normas y expectativas”; “Proceso por el que
cualquier persona adquiere habilidades, roles, normas y valores sociales, así como
patrones de personalidad” (Goode, 1983)
(Llor et al., 1995) “Proceso por medio del cual uno hace propias las normas del grupo, de
tal modo que surge un yo distinto y único en este individuo”; “Proceso por el que la gente
adopta códigos de conducta de su sociedad, logrando el respeto a sus propias reglas”
"El Proceso por el cual los individuos, en su interacción con otros, desarrollan las maneras
de pensar, sentir y actuar que son esenciales para su participación eficaz en la sociedad"
(Vander Zanden, 1986).
INDIVIDUO
Individuo (del latín in-dividuus, ‘no dividido’), cada ser concreto, indivisible en sí y
separado de los demás. El individuo es el ser único en la particularidad de su existir. Sujeto
concreto, determinado, que forma un todo reconocible; y que es una realidad dada por la
experiencia interna o externa. En sociología, es la persona considerada de forma aislada en
relación con la sociedad.
Heráclito mantuvo que la virtud ética consistía en la subordinación del individuo a las
leyes de una armonía razonable y universal. Según Hegel, el individuo es íntegro sólo en la
medida en que mantiene relaciones sociales y es su sometimiento a la voluntad general,
cuya manifestación es el Estado, su más alta expresión ética.
El conocido psicólogo suizo Jean Piaget resumió los resultados de un estudio meticuloso y
arduo sobre la conducta infantil, con las palabras siguientes: “La vida social es necesaria si
el individuo pretende tomar conciencia de su propiamentalidad”.* Sólo que la influencia
de la cultura y la sociedad sobre la personalidad y el individuo no se limita a los
primeros años de vida y el proceso de socialización; ningún individuo se evade de su
ambiente social
FAMILIA
“La familia es la base fundamental de la sociedad y tendrá la protección del Estado, quien
dictará la legislación necesaria y creará los organismos y servicios apropiados para su
integración, bienestar y desarrollo social, cultural y económico.” “El fundamento legal de la
familia es el matrimonio y descansa en la igualdad jurídica de los cónyuges.” Derechos
Sociales, Constitución de la Republica de El Salvador, Art. 32)
Elizabeth Jelin nos dice: “La familia es la institución social que regula, canaliza y
confiere significado social y cultural a estas dos necesidades” (Jelin: 1988)
“una estructura social básica que se configura por el interjuego de roles diferenciados
(padre, madre, hijo), y enunciado en los niveles o dimensiones comprometidos en su
análisis, podemos afirmar que la familia es el modelo natural de la situación de
interacción grupal” (Pichón Riviere: 1983).
La familia nuclear o elemental: Es la unidad base de toda sociedad, la familia básica, que
se compone de esposo (padre), esposa (madre) e hijos
La familia extensa o consanguínea: unidad nuclear siempre y cuando coexistan bajo un
mismo techo más allá de dos generaciones y está basada en los vínculos de sangre de una
gran cantidad de personas, incluyendo a los padres, niños, abuelos, tíos, tías, sobrinos,
primos y demás.
La familia monoparental: Es aquella familia que se constituye por uno de los padres y sus
hijos
GRUPO SOCIAL
Es un sistema formado por un conjunto de personas que desempeñan roles recíprocos
dentro de la sociedad. Se define a partir de una serie de variables, como el salario
promedio, el nivel educativo, la ocupación, etc. Este conjunto puede ser fácilmente
identificado, tiene forma estructurada y es duradero. Las personas dentro de él actúan de
acuerdo con unas mismas normas, valores y objetivos acordados y necesarios para el bien
común del grupo y la prosecución de sus fines.
La teoría «funcionalista» constituye el foco teórico principal de referencia de las
investigaciones sobre g. s. de la orientación sociológica, encontrándose vinculada dicha
orientación al pensamiento de Talcott Parsons (v.). Los g. se enfocan como unidades
sociales, intentando establecer las condiciones en las que un sistema social sobrevive y se
mantiene o permanece en equilibrio.
ESTADIOS SOCIALES
Comunidad Primitiva
Se trata de una educación de carácter natural. El fin educativo estaba
sustentado en la formación de una colectividad de individuos con la idea de la
colaboración grupal, pensantes en el bienestar de la tribu y no personal, y más
que todo, la idea pedagógica era la de formar entes interesados en cubrir las
necesidades presentes de la tribu sin pensar mucho en el futuro
Esclavismo
La esclavitud era una situación aceptada y a menudo esencial para la economía
y la sociedad de las civilizaciones antiguas. “Estado social definido por la ley y
las costumbres como la forma involuntaria de servidumbre humana más
absoluta. Un esclavo se caracteriza porque su trabajo o sus servicios se
obtienen por la fuerza y su persona física es considerada como propiedad de su
dueño, que dispone de él a su voluntad. (Encarta 2006)
Feudalismo
Entre las ruinas del mundo antiguo, surgieron los primeros indicios del
nuevo régimen que empezó a desarrollarse, fundado ya no sobre el trabajo
del esclavo y del colono, sino del siervo y del villano, aunque en
perspectiva de los explotados no había variado mucho la miseria. La
Educación era un derecho de los hijos de los señores; para que malgastar en
la educación contraproducente de las masas cuando ese mismo benedictino
historiador ya mencionado ha escrito no hace mucho con hiriente franqueza
que los jornaleros de los monasterios “por el hecho de ser analfabetos
presentaban más resistencia a la fatiga y eran capaces de soportar una tarea más larga y más
penosa. En virtud de las cuales circunstancias, los monasterios adquieren la supremacía
económica que explica su hegemonía social, y por lo mismo, pedagógica.”1.
1
Ponce, A. (1993). Educacion y Lucha de Clases, Ed. 8°. Mexicanos Unidos, S.A. Mexico, Pag. 116-120
Capitalismo
La educación en el capitalismo siempre se ha encontrado en manos de la
burguesía, con el objetivo de seguir preservando el sistema y reproduciendo
la ideología dominante. El periodo manufacturero del capital trajo consigo
la destrucción de las formas de estudio que se habían dado en el feudalismo,
paralelamente y, como en la sociedad se estaba dando la división del
trabajo, separación entre el trabajo manual y el trabajo intelectual, con la
industrialización, la Educación también se volvió parcelada y sectorial.
la burguesía fue formando las capas medias y educando a las clases
populares, quienes al adquirir un grado más elevado de educación pudieron observar el
mundo con otros ojos, transformándose en un peligro para la clase dominante, la educación
se transformaba en una contradicción.
SOCIALISMO.
La educación socialista se fundamenta en las teorías marxistas,
entendidas como una interpretación del hombre y el mundo que se
opone a las interpretaciones burguesas tradicionales. Karl Marx y
Frederich Engels expusieron en una amplia obra los principios de esta
educación y pusieron los cimientos de la misma, sin embargo no fueron
los únicos que se ocuparon de ella. Marx y Engels pero estrechamente
ligados a la educación socialista debemos mencionar a Makarenko,
Gramsci, Sujomlinski, los teóricos de la reproducción social de la escuela. Las
concepciones educativas de Marx y Engels utilizan como instrumento práctico el método
marxista, realista y crítico, que parte de lo concreto, estudia los hechos y sus
contradicciones y plantea la transformación de la realidad. Los hechos deben servir de base
a la teoría, pero la teoría debe plantearse cambiar los echos. No basta interpretar el mundo,
lo más importante es cambiarlo.
LA ESCUELA
El Diccionario de la Rae es más que esclarecedor sobre este término: Del lat. Schola.
Establecimiento público donde se da a los niños la instrucción primaria. Establecimiento
público donde se da cualquier género de instrucción. Enseñanza que se da o que se
adquiere. Conjunto de profesores y alumnos de una misma enseñanza. Método, estilo o
gusto peculiar de cada maestro para enseñar. Doctrina, principios y sistema de un autor.
Conjunto de discípulos, seguidores o imitadores de una persona o de su doctrina, arte, etc.
Conjunto de caracteres comunes que en literatura y en arte distinguen de las demás las
obras de una época, región, etc. Escuela clásica, romántica Escuela holandesa, veneciana.
Cosa que en algún modo alecciona o da ejemplo y experiencia.
También se habla de escuela para referirse a unidades universitarias especializadas en una
carrera; así existen Escuelas de Derecho, de Medicina, Odontología, Optometría, etc.
El Dr. Carlos Rainusso precisa sobre la etimología del término escuela: Si nos remontamos
al origen etimológico, su significado proviene de la voz griega scole, pasando por el
vocablo latino schola, antecedente inmediato del español, del que tomó los significados del
lugar donde se realiza la enseñanza, el aprendizaje, y a su vez, la doctrina que se enseña y
se aprende.
SISTEMAS EDUCATIVOS
Es la creación del ser humano que tiene como objetivo principal permitir que una
gran parte de la sociedad, si no toda, reciba el mismo tipo de educación y formación a
lo largo de su vida. El sistema educativo tiene además otras funciones tales como la
socialización de los individuos y diferentes opciones de capacitación para enfrentar
posteriormente el mundo laboral. El sistema educativo se caracteriza por estar presente a
lo largo de toda la infancia y adolescencia de los individuos que forman una sociedad. De
acuerdo a las necesidades e intereses de cada país.
BIBLIOGRAFÍA
Desde Definicion ABC: http://www.definicionabc.com/social/sistema-
educativo.php#ixzz2Jaf5e6sj
Ponce, A. (1993), Educacion y Lucha de Clases, Ed. 8°. Mexicanos Unidos, S.A. Mexico.
P. 244
El saldo de la balanza comercial es la diferencia del total de las exportaciones y el total de las
importaciones que se manejan en el país.
La balanza comercial se puede expresar de dos maneras:
Positiva: Cuando se exporta mayor cantidad de bienes y servicios de los que se importan, lo
cual se denomina superávit comercial.
Negativa: Cuando el Valor de las exportaciones es menor que el de las importaciones, déficit
comercial.
Entre los factores que podrían influir en las exportaciones y en las importaciones netas de un
país se encuentran:
Los gustos de los consumidores por los bienes interiores y por los bienes extranjeros.
Los precios de los bienes en el interior y en el extranjero.
Los tipos de cambio a los que los individuos pueden utilizar la moneda nacional para
comprar monedas extranjeras.
Las rentas de los consumidores interiores y de los extranjeros.
El coste de transportar bienes de un país a otro.
La política del gobierno con respecto al comercio internacional
BLOQUES COMERCIALES
Un bloque económico es creado para agrupar a un conjunto de países con el propósito de
obtener beneficios en el comercio internacional y en general en materia económica, sin
perjuicio de que en la mayor parte de los casos la conformación de bloques de países tiene
motivos políticos. Estas formas de unión entre países se realizan a partir de la firma de tratados
internacionales que pueden ser de distintos tipos.
21. Lo político y las formas de la política
1. República parlamentaria
3. República unipartidista
4, Monarquía parlamentaria
En esta forma de gobierno hay un rey o reina que ejerce como Jefe de Estado,
pero su poder está muy limitado tanto por el poder legislativo como por el poder
ejecutivo. En muchos países, el tipo de monarquía parlamentaria que se utiliza
confiere al monarca un papel puramente simbólico, creado fundamentalmente
para dar imagen de unidad o para actuar en casos de emergencia nacional.
5. Monarquía absoluta
En las monarquías absolutas el rey o reina tiene un poder absoluto o casi absoluto
para imponer su voluntad al resto de los ciudadanos. Todas las herramientas de
imposición de normas creadas para regular la vida social están situadas bajo el
poder del monarca, que las puede modificar y no se somete a su control.
Tradicionalmente, las monarquías absolutas se han mantenido legitimadas bajo la
idea de que el rey o reina son elegidos por fuerzas divinas para guiar al pueblo.
6. Dictadura
En las dictaduras se da la figura de dictador, que tiene un control total sobre lo que
ocurre sobre la región, y que normalmente ostenta este poder mediante el uso de
la violencia y las armas. En cierto sentido, la dictadura es la forma de gobierno en
la que alguien tiene la capacidad de dirigir el país tal y como podría dirigir su casa
una persona soltera.
Además, al contrario de lo que ocurre en la monarquía absoluta, no se intenta
mantener una imagen pública positiva ante los ciudadanos, simplemente se
manda sobre ellos utilizando el terror y las amenazas mediante normas basadas
en el castigo.
Población
Proporcionalidad
La forma en que los ciudadanos escogen a alcaldes y diputados es diferente. Para
simplificar –y con el respeto de los expertos electorales-: existen dos fórmulas para elegir
representantes, las de mayoría (asociadas a candidaturas únicas como el presidente) y las
proporcionales (vinculadas a candidaturas plurinominales, como los diputados
salvadoreños) y que requiere especial atención en virtud de la obligación impuesta en el
segundo inciso del artículo 79 de la Constitución.
El método es sencillo: el total de población del país, de acuerdo al último censo (2007,
ajustado en 2009) se divide entre el número de diputados (actualmente 84). Al resultado
de esa división se le conoce como cociente nacional de población. El siguiente paso es
dividir el total de población de cada circunscripción departamental entre dicho cociente y
así se obtiene el número de diputados que ahí eligen. Si aún faltaran para completar los
84 diputados, se asignarán a las circunscripciones con residuos más altos hasta completar
ese total. La siguiente tabla ilustra ese proceso.
Cantidad de diputados
Como si no fuera poco, además de las circunscripciones, la población y la fórmula
proporcional para cambiar el total de diputados, deben seguirse ciertos criterios
aritméticos que limitan, en mi opinión, las opciones. Por ejemplo, el total de diputados
debe ser un número que sea a la vez múltiplo de 2, de 3 y de 4 para cumplir con las
distintas mayorías que establece la Constitución; por ejemplo, el artículo 123 regula
que para tomar decisiones se requerirá por lo menos el voto favorable de la mitad más uno de
los diputados electos. De acá se deduce que el número de diputados debe ser múltiplo de
2.
Además, el artículo 29 del mismo cuerpo constitucional fija que para suspender las
garantías contenidas en sus artículos 12 inciso segundo y 13 inciso segundo, requiere que las
tres cuartas partes de los diputados electos voten favorablemente. Entonces, la cantidad de
legisladores debe ser igualmente múltiplo de 4.
De lo expuesto el número frío de diputados podría ser 12, 24, 36, 48 (en cuyos casos
habría que cambiar las circunscripciones o se rompería el principio establecido por la
jurisprudencia y la ley de elegir al menos tres diputados por circunscripción), 60, 72, 84 o
96 diputados, o más.
PRINCIPIO DE LEJITIMIDAD
Si la legitimidad jurídica se refiere a la ley, la legitimidad política se refiere al ejercicio
del poder. El poder político que es percibido como legítimo será mayoritariamente obedecido,
mientras que el percibido como ilegítimo será desobedecido, salvo que se obtenga obediencia
por medio de la violencia del Estado.
No debe confundirse legitimidad política con afinidad política. En democracia, los votantes del
partido político perdedor pueden lamentarse por haber perdido las elecciones, pero no por ello
desobedecen al nuevo gobierno. Tampoco debe confundirse legitimidad con democracia,
puesto que durante la Monarquía Absoluta, por ejemplo, el pueblo consideraba masivamente
legítimo al monarca, que no había sido elegido por mayoría.
La legitimidad política se podría entonces definir desde dos perspectivas: la de quien obedece
y la de quien manda.
Desde la perspectiva de quien obedece, será legítimo aquel gobierno que accede al
poder (legitimidad de origen) y lo ejerce (legitimidad de ejercicio), cumpliendo los
requisitos que los que obedecen creen que tiene que cumplir para mandar
Desde la perspectiva de quien manda, será legítimo aquel gobierno que accede al
poder y lo ejerce haciendo ver a los que obedece que cumple los requisitos para mandar.
PRINCIPIO DE LEGALIDAD
El principio de legalidad o primacía de la ley es un principio fundamental, conforme al cual
todo ejercicio de un poder público debe realizarse acorde a la ley vigente y su jurisdicción y no
a la voluntad de las personas. Si un Estado se atiene a dicho principio entonces las
actuaciones de sus poderes estarían sometidas a la constitución y al estado actual o
al imperio de la ley.
LIBERTADES PÚBLICAS
23. Unidades de solidaridad, desde la aldea a la nación. La nación y el Estado.
Todo concepto —el conjunto de significaciones que lo forman— sólo es inteligible a través de su
historia. Un concepto político, además, vive henchido de tradiciones nacionales, ajustado por las
culturas donde opera como referente. En Francia, cuya tradición exploraremos aquí con mayor
cuidado, la idea de solidaridad fue asociada con rapidez a una visión política determinada —de
izquierdas o “progresista”, para decirlo de manera abrupta—, lo que no impedía que fuera —y
sea— definida desde el campo de la ética como un valor o un ideal moral, es decir,
universalizable, habilitando las visiones normativas del concepto.
1 Para la historia del concepto de solidaridad en el siglo XIX, ver Blais (2007).
2Quizás el primer paso para alejarse de cierta práctica especulativa de la filosofía pase por
recordar que dicho concepto fue integrado, a partir de un momento determinado, por los
sistemas jurídicos positivos. Este vínculo con el derecho venía de antiguo: el origen etimológico
de la palabra solidaridad proviene, como se sabe, de una deformación del solidum, por el cual
los jurisconsultos romanos se referían a la obligación que nacía entre los distintos deudores de
un todo. De este uso nace la idea de solidez, y luego, la de solidaridad. Sin embargo, es a través
de un sentido sociológico —que, como veremos enseguida, será central para sus alcances
actuales— que el concepto de solidaridad termina adquiriendo autonomía en el vocabulario
político, un recorrido que comienza con Auguste Comte, que lo usa para describir un sentimiento
social. En esa primera mitad del siglo XIX que verá nacer, en un terreno abonado por las mismas
inquietudes, los conceptos de sociología y socialismo emerge pues la noción de solidaridad.
Pierre Leroux, que también reclamaba para sí de manera igualmente infundada la paternidad de
la palabra socialismo, sostiene que la tomó de los legistas para reemplazar la caridad del
cristianismo.1 La solidaridad aparecerá entonces como un concepto que abre una puerta a la
solución de la cuestión social, y no sólo como fundamento filosófico de un nuevo orden.
5A decir verdad, ya Durkheim veía en el derecho —entendido en sentido general como una regla
de conducta sancionada— el símbolo visible de la solidaridad social, que se replicaba en sus
normas jurídicas (Durkheim 1998). Aunque la tesis de Durkheim era ante todo analítica, su
carga significativa no era sólo epistemológica, y él mismo subrayaba que la tarea de las
sociedades avanzadas residía en la introducción de una mayor equidad en las relaciones
sociales. No por nada, de manera contemporánea, se hará una lectura sustancial de la tesis. Si
todo derecho es de un modo u otro solidario, se podría decir que no hay sociedad sin solidaridad.
6Se adivinan fácilmente desde ahora los efectos de legitimación que tal empleo acarrea. Claro
que no agotamos el interés del tema argumentando que lo que se busca con un concepto
saturado axiológicamente es legitimar un orden jurídico positivo; nos quedará siempre por
determinar el cómo de dicha operación, cuestión que es siempre, además, mucho más compleja,
por sus efectos productivos sobre la realidad social, que una mera ocultación. Por lo pronto, el
uso del concepto de solidaridad será expansivo o defensivo, según los marcos donde se emplee.
El primer modo aparece, por ejemplo, en épocas fundantes de la historia francesa, como a
inicios del siglo XX o en 1945. En contextos de crisis económica, en cambio, el concepto de
solidaridad parece adquirir un valor defensivo, como límite. Pero en todas sus ocurrencias, el
concepto de solidaridad guarda una serie de ambigüedades que condicionan la inmediatez, la
transparencia de su significación, así como el sentido de su utilización, al menos en sede
jurídico-constitucional —es la óptica que priorizo, entre tantas otras, como filósofo del derecho
—.
7Queda claro, en cualquier caso, que el concepto solidaridad tiene una larga historia, no sólo
como tal, sino también en su relación con la democracia republicana, anterior incluso a su
autonomía política. Nos interesa detenernos aquí en la solidaridad como argumento, en una
constelación donde lo político asume su vecindad con lo estatal, y en la cual, al mismo tiempo, lo
social aparece como una cuestión por resolver institucionalmente. Lo que llamo “problemas
político-constitucionales” del concepto de solidaridad encierra, empero, al menos dos
dimensiones. La primera aparece en la construcción de un orden democrático. La segunda se
refiere a las posibilidades de transformación de dicho orden.
La solidaridad y la construcción de un
orden político
8Como acabamos de ver, la sistematización del concepto de solidaridad, al menos en Francia, es
hija de la modernidad de finales del siglo XIX, donde se la presenta como una noción nueva,
apta para responder a los desafíos sociales que presentaba la evolución de las sociedades
industriales y democráticas. Por cierto, el concepto había hecho irrupción antes, e incluso se
establecían conexiones de sentido para hacerlo remontar a la Revolución Francesa, pero un
conjunto de manifestaciones y giros confluyen para promover su novedad en esas
circunstancias.
9La más importante de estas empresas, en el plano político, es, como ya lo recordamos, la de
Léon Bourgeois, por el lugar que ocupará el radicalismo en la dinámica republicana (y por el
lugar que ocupó su autor dentro del radicalismo), y que dará origen a la llamada teoría
“solidarista”, cuyos orígenes se remontan de manera habitual a la publicación del primer
opúsculo del autor, en 1896, bajo el título simple y eficaz de Solidarité. Bourgeois acababa de
abandonar la más alta responsabilidad gubernamental: había sido presidente del Consejo entre
noviembre y abril de 1894. Tal vez por eso también, la teoría de Bourgeois tendrá una rápida
repercusión en los variados campos de la filosofía, la economía, el derecho y, sobre todo, la
política. Esta visión no se transforma únicamente en la trama del programa del Partido Radical
en la primera década del nuevo siglo; servirá, además, de fundamento a la legislación social y
laboral que se implementa en esos mismos momentos bajo el impulso de los gobiernos
“republicanos de progreso” y radicales (el propio Bourgeois volverá a ocupar funciones como
ministro de Trabajo, en particular). La solidaridad social era teorizada aquí como un derecho
—“natural”, en la medida en que Bourgeois considera que los procesos de solidaridad
caracterizan la vida, en el sentido biológico de la palabra—, que se opone a la idea (católica) de
caridad, en una lógica que no era en verdad original. Sobre el dato de una solidaridad natural, se
construirá el deber social de la solidaridad, que surge como tal del hecho que el hombre, al
nacer, adquiere una deuda social como beneficiario de la obra humana que lo precede y le
permite existir.
2 Bourgeois (1902) considera que restringe el lugar del Estado, reduciéndolo a una instancia judicial (...)
10En ese sentido, Bourgeois escribirá que “la ley positiva puede asegurar, a través de sanciones
imperativas, el pago de la deuda social, la ejecución de la obligación que resulta, para cada
hombre, de su estado de deudor hacia todos los otros”. El carácter obligatorio de la deuda se
fundamenta en una forma de casi-contrato, que traduce retroactivamente ese consentimiento a
las reglas de la solidaridad social que existe en los hechos (Bourgeois 1906). Para los ciudadanos
desfavorecidos, esta situación se traduce jurídicamente en un “crédito” que puede hacerse valer
ante la colectividad. La noción de Estado, pensado como instancia superior y exterior a los
hombres —y que se asociaba por entonces a la ominosa concepción “germánica”—, es
reemplazada por una idea más vaga de “sociedad” —para Bourgeois, su empresa trata de
circunscribir una relación entre hombres, entre asociados—, lo que empalma con una vieja
tradición que ya estaba presente, una vez más, en la Revolución Francesa. 2
12Si bien el futuro premio Nobel de la Paz prefiere insistir en la idea de “deberes del hombre”
(más tarde “deberes de solidaridad”), nacidos del hecho de la solidaridad, en una suerte de
paralelo con los derechos del hombre proclamados en 1789, surgirá con rapidez del solidarismo
una tradición que utiliza la categoría de derechos-crédito para pensar los derechos sociales,
aunque, a decir verdad, por entonces más en el terreno de la filosofía y de la sociología que del
derecho (Herrera 2009).
3 Para Durkheim, en verdad, había formas particulares de solidaridad (nacional, doméstica, familiar e (...)
14Durkheim no deja nunca de subrayar que si la división del trabajo hace solidarios los
intereses, estos últimos conservan su carácter antagónico. En efecto, la solidaridad orgánica no
suprime la oposición de intereses, pero la “división del trabajo engendra reglas que aseguran el
concurso pacífico y regular de las funciones divididas”. Nace entonces un consenso espontáneo
entre las partes, una solidaridad interna, que constituye el cemento que une las
sociedades.3 Más aún, existe una relación estrecha, como lo explica en las páginas de De la
division du travail social, entre el derecho contractual y la división del trabajo: si el derecho
refleja la solidaridad, se observa que las formas contractuales se desarrollan con mayor facilidad
en el marco de la solidaridad orgánica, al punto que una de sus modalidades es la llamada
“solidaridad contractual” (Durkheim 1998).
15Quizás sea una obra jurídica, la de Léon Duguit, la que mejor metaboliza el afluente político y
el afluente sociológico del concepto de solidaridad —no caben dudas, en cambio, de que ella
ilustra toda la complejidad de la recepción del pensamiento social dentro de la doctrina del
Derecho público (y no sólo francés)—. Por cierto, la referencia directa a la doctrina política del
solidarismo es marginal en Duguit, ya que prefiere ubicarse en el terreno sociológico, al que
tiene por científico. Y tras detenerse en un primer momento en la visión organicista de Spencer
de la sociedad como ser vivo, se apropia muy pronto de la obra de Durkheim para fundar su
tesis de que la interdependencia social establece las reglas del derecho. La solidaridad social,
como hecho permanente, siempre igual a sí mismo, aparece como el fundamento de todo
derecho (Duguit 1927).
16Partiendo de las tesis durkheiminianas, el jurista bordelés afirma que “toda sociedad implica
una solidaridad; toda regla de conducta que toca a los hombres que viven en sociedad ordena
(commande) cooperar con dicha solidaridad; todas las relaciones humanas han sido y serán
siempre relaciones de similitud o de división del trabajo; de allí la permanencia de la regla de
derecho y su contenido general”. En el fondo, la solidaridad bien entendida, “no es más que la
coincidencia permanente entre los fines individuales y los fines sociales”, el hombre sólo puede
querer la solidaridad. Si el ser humano está sometido a la regla que consiste en “no hacer nada
que atente contra la solidaridad social en algunas de sus formas, y hacer todo lo que sea de
naturaleza por realizar y por desarrollar la solidaridad mecánica y orgánica”, el trabajo del
jurista consiste en determinar cuál es la regla de derecho que se adapta exactamente a la
estructura de una sociedad dada (Duguit 1901 y 1923).
17No nos interesa tanto aquí explayarnos sobre su visión de la solidaridad, poco original en sí,
sino en las consecuencias que saca en materia de derecho público. El Estado, en particular, es
concebido como una cooperación que asegura los servicios públicos y sanciona la regla social.
Esta visión se empalma incluso con la idea de limitación del poder, ya que, para Duguit, “los
gobernantes son individuos como cualquiera, sometidos como todos los individuos a reglas
sociales fundadas en la solidaridad social e intersocial”. Y dichas reglas sociales, justamente, “les
imponen deberes, y sus actos son legítimos y deben ser obedecidos, no porque emanen de una
persona pretendidamente soberana, sino sólo y en cuanto son conformes a las reglas de derecho
que se imponen a sus autores” (Duguit 1921). O, para decirlo de otro modo, el Estado no es
más que una potencia de hecho, cuyo objeto y extensión son determinados por el derecho
objetivo que nace de la necesidad social.
4 Paralelamente, Duguit defiende la idea de la “función social” de la propiedad privada, que en su co (...)
18Como tal, pues, el Estado está sujeto a “deberes objetivos”, lo que facilita, en el marco de la
ciencia del derecho de la época, las posibilidades para pensar jurídicamente políticas activas,
positivas, de intervención. Los gobernantes, como todos los hombres, “no están sólo llamados a
abstenerse, sino a actuar”, y en especial, “a organizar y asegurar por las leyes la educación, la
asistencia y el trabajo”. Aunque se muestra en un principio pesimista sobre la fuerza de la
interdependencia social para asegurar dichas normas, el decano de Burdeos hablará de una
regla de derecho que impone al Estado la obligación de “hacer todas las leyes que sean
necesarias para asegurar la realización de la solidaridad social”, en materia de trabajo,
asistencia y educación.4
19Por cierto, descarta, como inexacta, la idea de “derechos subjetivos a prestaciones activas” —
lo que hoy llamaríamos derechos sociales—, pero el Estado, bajo cualquier forma política en que
sea organizado, tiene deberes sociales que cumplir, para permitir que el individuo que necesita
trabajar para vivir obtenga un empleo, que sea protegido de la explotación, que tenga
asegurados los cuidados mínimos y medios de subsistencia e, incluso, cierto nivel de bienestar
cultural. Es decir, hay reglas de derecho que está obligado a formular y realizar, ya que está en
juego “la posibilidad de dar a cada uno la posibilidad material y moral de colaborar en la
solidaridad social” (Duguit 1921). En efecto, como ya ocurría con Bourgeois, pero de manera
más manifiesta aún, Duguit no asocia la idea de solidaridad a “derechos”, sino a “deberes”. Al
igual que el Estado, tampoco el individuo tiene sólo deberes sociales. Como vemos, Duguit
rechaza toda idea de derecho (subjetivo) de los individuos, en particular fundada en la “dignidad
de la persona humana”, noción que juzga “metafísica” y que, en consecuencia, no puede servir
de fundamento a un sistema político positivo.
20Una misma preocupación práctica, aunque de signo más político, lo lleva a rechazar el
reconocimiento del “derecho de huelga” y de todo “derecho obrero”. La referencia es importante,
porque nos muestra ya la emergencia de otro concepto de solidaridad que se está desarrollando
en ese contexto: el de “solidaridad de clase”; nacida al calor de las condiciones de trabajo y de
vida de la clase obrera, generaba formas específicas de intervención política; al menos era ésa la
forma en que la desarrollaban las corrientes sindicalistas revolucionarias, en torno a la CGT y al
pensamiento de Georges Sorel (Herrera 2005). Duguit rechaza que exista un derecho propio del
mundo obrero: sólo existe un derecho común que se aplica a todos los ciudadanos. Por su parte,
promoverá una organización de tipo “sindical”, descentralizada, donde las clases sociales
estarían organizadas en un todo armonioso, que terminase justamente con el conflicto de clases
(Duguit 1901 y 1908). No se debe olvidar tampoco el atractivo que ejerce para Durkheim el
incipiente principio corporativo, como manera de integrar las formas de solidaridad debilitadas
por la división del trabajo.
5 Si Posada estaba dispuesto a acordar con Duguit que el hecho de la solidaridad determina un mundo
d (...)
21Esta visión dejaba atrás la idea de Estado decimonónica, no sólo en lo que se refería a su
viejo estatuto de gendarme, sino también a su carácter opresivo. Como lo expresaba el más
importante teórico español del Estado de la época, Adolfo Posada, “el proceso íntimo de la vida
social se orienta hacia una compenetración intensa de los sentimientos de solidaridad”, que lleva
al individuo a reconocer su carácter social, y a los Estados, a convertirse en órganos supremos
de lo que llama “solidaridad expansiva”, que trabajan para “convertir en realidad política la
solidaridad que la evolución acentúa e intensifica”, y para lo cual el derecho actuaba como medio
pero también como punto de partida (Posada 1929). 5
22Sin embargo, esta disociación con la idea de derechos parece abonar todavía una distancia
entre principio de solidaridad y democracia, en sentido político. Esto no parecía generar
demasiados escollos para pensar la acción estatal, en la medida que la intervención social del
Estado, tal como venía desarrollándose desde finales del siglo XIX, podía ser autónoma de la
forma política del mismo —de hecho, el primer modelo integral, el bismarckiano, era de tipo
autoritario—. La dificultad aparecerá, empero, tras la fallida experiencia del Estado social de
entreguerras que había tratado de llevar adelante la República de Weimar, para citar sólo la
experiencia más sistemática del período. Cuando, al finalizar la Segunda Guerra Mundial,
comienza a desarrollarse en Europa un nuevo modelo estatal, que hará del pleno empleo su
mayor aspiración, la intervención social no podrá ya desligarse del principio de ciudadanía
democrática.
6 En ese contexto, el concepto de “seguridad” recubre dos significaciones emparentadas. Una,
general, (...)
23Más allá de las diferentes modalidades que tomará ese Welfare State, emerge una institución
jurídica que parece consagrar la unión entre democracia y solidaridad: la seguridad social. 6 Un
conjunto de nuevos desarrollos buscará ilustrar esta evolución, que llevará también a reformular
el principio de solidaridad, aunque sólo sea por el hecho de su constitucionalización positiva.
La solidaridad y la transformación de
un orden social
24Como hemos visto, el impulso del concepto de solidaridad de finales del siglo XIX en la
tradición francesa estuvo marcado por una preocupación social, que operó como principio de
explicación y, además, como fundamento de la República. Es por este segundo camino que se
desarrollará la evolución constitucional en la segunda mitad del siglo XX. Ya no se trataba
de fonder la République, ni siquiera de dar curso a una política social de signo asistencial. Como
ya hemos señalado en otro lugar, la originalidad política de los nuevos Estados sociales pasaba
por la universalización de la idea de “necesidades sociales”, que se desligaba de los sectores más
desfavorecidos de la sociedad (los pobres, más tarde los trabajadores), para extenderse ahora,
al menos como posibilidad, a todas las capas de la población, que podrían beneficiarse de un
conjunto de prestaciones en cuanto “ciudadanos”. Y, en efecto, la universalización de la política
social favorecía su traducción en cuanto pretensiones legales de los individuos. En su conocida
teoría sobre la ciudadanía social, que buscaba ilustrar estas transformaciones, el sociólogo
Thomas Marshall situaba allí la ruptura con las antiguas Poor Laws, que establecían un divorcio
entre los derechos sociales y la ciudadanía. Al implantar un derecho universal a un ingreso real
que no era proporcional al valor del demandante en el mercado, el concepto de “ciudadanía
social” daba un fundamento filosófico-político al proceso (Marshall 1950).
7 Al mismo tiempo, Laroque rechazaba, al menos para Francia, que dicha solidaridad nacional se
alcanz (...)
8 En verdad, la traducción de la idea de “ciudadanía social”, al menos en los sistemas positivos como (...)
25Un conjunto de expertos y actores políticos nacionales desarrollarán la idea de una Seguridad
social, como William H. Beveridge en Inglaterra, autor de los informes que sientan las bases de
la nueva política social inglesa, o el menos conocido (y, por cierto, menos original) Pierre
Laroque, quien redactó en Francia el llamado “Plan de la Seguridad Social”, siendo luego
encargado de la organización de la nueva institución en sus primeros años, como su director
general. Para justificar la generalización de la Seguridad Social, Laroque sostenía que ésta se
fundaba en dos aspectos. Por un lado, “nadie puede pretender estar exento del riesgo de la
inseguridad”, como ya lo indicaba el informe Beveridge. Por el otro, la Seguridad Social “supone
una solidaridad nacional: todo el mundo es solidario ante los factores de la inseguridad, y esta
solidaridad debe inscribirse en los hechos y en la ley” (Laroque 2005). 7 Pero el carácter nacional
del recurso al concepto como fundamento aparece cuando se comparan estas referencias con los
informes Beveridge de 1942 y 1944, que prefieren hablar de “conciencia social”, más que de
solidaridad, en un contexto donde los “sentimientos del pueblo británico” o las “libertades
británicas” son movilizados como claves.8
26No era sólo en el ámbito legal donde se producían cambios, también las nuevas constituciones
se hacían eco de las transformaciones. La constitucionalización de un conjunto de demandas
sociales supondría dos mutaciones importantes. La primera, que ya no había derechos “contra”
el Estado, aunque no se concibieran por entonces los “derechos sociales” como justiciables ante
el juez —aun bajo el enunciado de “derechos”, se trataba más bien de principios políticos, que
tenían como principal destinatario al legislador—. Por otro lado, y más importante para nuestro
análisis, el Estado social se termina convirtiendo en una forma estable, en un fin en sí mismo, y
no en un puente o vehículo hacia otro tipo de orden económico, como podía ser, en el
constitucionalismo social de entreguerras, en particular el alemán o el español.
9 Al constitucionalizarse el contenido del Preámbulo de 1946 a partir de la jurisprudencia del Consei (...)
27En ese marco, el “principio de solidaridad” alcanzará estatuto constitucional, aunque no sea
siempre en referencia directa a la cuestión social. Incluso en la Constitución francesa de 1946,
en cuya cultura el concepto se había aclimatado de antaño, sólo se enuncia ante las cargas que
podían surgir de las calamidades nacionales. Sin embargo, aunque la recepción era limitada, el
concepto se terminará convirtiendo en el fundamento de los sistemas de Seguridad social que
por entonces se desarrollan, aunque por fuera del sistema constitucional propiamente dicho. 9 La
“solidaridad” iba a ser el principio sobre el que se establece la organización de la Seguridad
social (actualmente reconocido en el art. L-111-1, del Código de la Seguridad Social), pero
quedando siempre en manos de “la Nación” o “la colectividad”, y no del Estado, lo que se
expresaba por el papel de los “actores sociales” en su administración, e incluso en un modo de
financiamiento, como el francés, que no recurría al impuesto, sino a las cotizaciones
profesionales.
10 Ver, por ejemplo, David (1982). Se debe recordar también, a título de contexto, el nombre que se
da (...)
28Cabe subrayar que la ampliación de su eco no obedece a simples razones jurídicas. Porque la
solidaridad no sólo se había transformado en el fundamento de los sistemas europeos de
Seguridad social; se estaba convirtiendo también en el horizonte del programa socialdemócrata
tal como se presenta en los años de posguerra, una vez abandonadas las viejas banderas de
emancipación social. El giro se torna más nítido en los años 1970, cuando se produce la crisis del
sistema del Welfare State, con el fin del ciclo de crecimiento económico. El canciller alemán Willy
Brandt promoverá la solidaridad como “el lazo de unión entre la libertad y la justicia”, y era en
su nombre que se justificaba la salvaguarda de lo que llamará, con un eufemismo, “la sociedad
industrial” (Brandt, Kreisky y Palme 1976). El socialismo francés, en vísperas de ocupar el poder
por primera vez en la Quinta República en ese contexto de crisis, hablará de “sociedad solidaria”
como la quintaesencia de su programa de cambio. Se crea un “Ministerio de la Solidaridad”, y
una de sus grandes medidas serán entonces los llamados “contratos de solidaridad”, como
remedio a la desocupación de masas. Ya se ve aquí un cambio importante que no hará más que
consolidarse, en la medida en que el concepto de solidaridad es empleado para aligerar cargas
fiscales a la empresa privada, como forma de fomentar el empleo. 10 La solidaridad podía
entonces ocupar el lugar central en el discurso socialdemócrata, con la ventaja de poder
representar, en su ambigüedad, un valor positivo, pero también defensivo. En cualquier caso, el
problema pasaba a ser, no ya la transformación del orden social (a través de instituciones
estatales), sino el tratamiento de la exclusión social.
29En el renovado esfuerzo de teorización del concepto desde el derecho público, los pensadores
de la primera mitad del siglo XX eran invocados de nuevo, lo que llevaba a reivindicar no sólo el
principio de solidaridad, sino también la teoría solidarista. Sus nuevos valedores no parecían ser
del todo conscientes de que aquélla no era más que una de las variantes teóricas para
fundamentar el intervencionismo social y el reconocimiento de los derechos sociales, en una
dirección política precisa, de integración social. Y que en su momento, otras voces, como la de
Jean Jaurès, habían señalado sus límites, ya que “el derecho a la vida implica no sólo toda una
evolución en materia de asistencia y seguro, sino toda una evolución de la propiedad” (Herrera
2000).
30Tampoco esta modalidad de Estado social de posguerra era única, como lo mostraba la
experiencia, corta y acaso desgraciada, del constitucionalismo social de entreguerras. Por
entonces, el concepto de solidaridad no se encontraba en las constituciones sociales de
entreguerras, como la mexicana de 1917 o la alemana de 1919, o aun la española de 1931.
Todas preferían hacer referencia a la igualdad, en un sentido que la doctrina más avanzada (y de
la otra…) entendía como igualamiento. Hay una razón para ello: las normas y los principios de
ese nuevo constitucionalismo presuponían una división y un conflicto de clases, que podía tal vez
ser dominado, pero por un mecanismo social a futuro que justamente se constitucionaliza bajo la
forma de derechos o instituciones sociales, y, sobre todo, en una dirección precisa, superadora
del orden capitalista existente.
31La idea de solidaridad, al contrario, parecía vehiculizar por entonces cierta visión armonizable
de lo social, favorable a la conciliación de la oposición capital/trabajo bajo la égida del Estado
intervencionista. Existe, por cierto, un conjunto de textos constitucionales que proclamaban por
entonces el principio de solidaridad, pero son las constituciones corporatistas. Por ejemplo, la
Constitución portuguesa de 1933, que coloca la “solidaridad de intereses” entre los objetivos de
las corporaciones (art. 15). No por casualidad, Getúlio Vargas, presidente provisorio del Brasil,
afirma en el discurso inaugural de la Asamblea constituyente de 1934, que consagraría la
primera constitución social de ese país, que “el fundamento sociológico de la vida económica es
hoy la solidaridad. El principio de libre concurrencia cedió su lugar al de cooperación. Las
tendencias solidarias propiciarán la formación de agrupamientos colectivos, cada vez más
fortalecidos, para le defensa de los intereses de grupo”.
33Como era de esperar, la doctrina jurídica, al menos aquella que pretendía sostener la
universalidad de los derechos sociales, buscará en la categoría de “solidaridad” y sus
proyecciones su principal fundamento. De hecho, y de manera general, el concepto de
“solidaridad” se ubicaba en un prisma jurídico menos rígido que la igualdad, o al menos permitía
interpretaciones más libres. Así, siempre en el marco nacional francés que nos retiene aquí, la
solidaridad será presentada como la expresión jurídica del valor de “fraternidad”, proclamado en
la divisa republicana, aunque su reconocimiento constitucional se fundamenta en la calificación
de la República como “social” (art. 1º de la Constitución de 1958), completando la operación de
reducción de lo social a la solidaridad (y de ésta, a la visión solidarista).
35Sin entrar en lo que puede haber de circular en este tipo de razonamiento (el principio de
solidaridad forma parte de la democracia porque sin solidaridad no hay democracia), pareciera
que el concepto de “solidaridad” muestra incluso sus limitaciones como fundamento de los
sistemas de seguridad social. En todo caso, tras la crisis del Welfare State —aunque quizás a
estas alturas haya que hablar de un Welfare State de crisis— se torna recurrente, cada vez más,
la visión de una “crisis de la solidaridad”. Según el sociólogo francés Pierre Rosanvallon, el
proyecto de posguerra sería responsable de haber erigido un Estado social sobre una
organización de la solidaridad demasiado alejada de las relaciones sociales, convirtiéndola en
una idea puramente abstracta, formal, mecánica. En efecto, la solidaridad había sido concebida
en una lógica donde la enfermedad, la desocupación, eran entendidas como accidentes, cuando
en la actualidad esos riesgos se han transformado en situaciones estables. El remedio pasaría
por recrearla a partir de redes más directas que los mecanismos que venía desarrollando el
Estado hasta entonces. La solidaridad es definida entonces como una forma de compensación de
diferencias, es decir, se funda no ya de manera general y a priori, sino en el tratamiento
diferenciado de los individuos (Rosanvallon 1992 y 1995). 11
36Esta idea de una mutación de la idea de solidaridad, que se torna corriente en los años 1990,
implicaría un aumento de la particularización, que se presenta a veces como una nueva
preeminencia del imperativo individualista de la igualdad sobre el colectivo. Pero pronto
aparecerá como un nuevo síntoma de sus límites, en particular en las transformaciones en los
derechos de prestación que conllevará, al menos en Francia y en otros países con un sistema
desarrollado de protección social. Esta individualización de la solidaridad, cimentada en la
incorporación de elementos “contractuales”, o de contrapartidas, sirve en efecto para rediseñar
las políticas sociales y los derechos, limando el componente incondicional de las garantías de los
derechos.
12 Para Donzelot, la solidaridad es un principio de gobierno que permite alejar las inquietudes que pr (...)
13 Los seguros aparecen como una tecnología del riesgo, tecnología política que solidariza intereses. (...)
38Si el análisis que antecede no es demasiado inexacto, pareciera que la idea de solidaridad en
el derecho ha permitido, ante todo, una operación política de tipo definido, al menos en esta
visión solidarista que tanto éxito ha tenido en el pensamiento jurídico francés: al tratar las
injusticias como una deuda social, se puede concebir una reparación (un pago de la deuda), sin
que sea necesario percibirlas como producto de las relaciones sociales, y, por ende, llamar a una
transformación radical de la sociedad (Donzelot 1985). 12 Bourgeois, de hecho, no ocultaba esa
perspectiva, y sostenía que la afirmación de un deber social de todos para todos alejará a los
trabajadores de la “hipótesis colectivista”, de la revuelta, de la quimera. Y en un plano más
general, Alfred Fouillée consideraba que la solidaridad era un aspecto de las relaciones sociales
más importante que la lucha de clases, incluso en la esfera de la producción económica, ya que
todos los antagonismos son precedidos por los lazos de solidaridad (Fouillée 1930). De allí la
idea, que se desarrollaba por entonces, de la pobreza como “accidente”, y la necesidad
consiguiente de socializar el riesgo, distribuyéndolo entre todos, operación que según algunos
autores daría nacimiento al Estado social francés. Según este análisis, la nueva política social
que resultará tiene una lógica de interdependencia, de solidaridad, que dejaba atrás la vieja idea
de fraternidad (Ewald 1986).13
14 Autores como Pierre Rosanvallon hacían el elogio de ese tipo de derechos, que reemplazaban una
univ (...)
39La perspectiva histórico-conceptual permite revelar ciertos límites del concepto de solidaridad
en el marco político-constitucional, pero éstos van más allá de su uso. De hecho, la solidaridad
no ha perdido hoy su lugar central como argumento en materia social, aunque sólo fuera como
fundamento de los derechos de asistencia y ayuda social, que, como dijimos, se transforman en
ciertos enfoques en el modelo dominante de los derechos sociales. 14 Las dificultades parecieran
ser más bien de orden interno, en la medida que tocan a la estructura del argumento en clave
político-constitucional, al menos de cara a una perspectiva de cambio social.
16 Posiblemente, o al menos así fue concebida en ciertas corrientes socialistas radicales, la cuestión (...)
40Por un lado, la idea de solidaridad, aun cuando se utilice para legitimar una construcción
política, pareciera demandar siempre un cierto nivel de naturalización, como si fuera necesario,
para cumplir con dicha función, ponerla por fuera de lo político, de sus dimensiones de artificio,
de decisión. Esta “naturalización” de la solidaridad no impide que se la conciba bajo la forma de
un deber,15 pero termina tarde o temprano limitando las perspectivas de transformación. En
efecto, así concebida, la idea de solidaridad supone partir de un estado de similitud, de identidad
que no se da en la configuración del aparato estatal moderno, ni siquiera en sus ocurrencias
republicanas. Aplicada a las políticas sociales, y aun cuando se la reformule en una gramática de
reconocimiento de “derechos”, supone siempre la decisión o la voluntad de una esfera, que
desciende hacia otra, ubicada por debajo, hacia esa parte de la población con la cual el Estado (o
la “nación” o la “sociedad”) debe mostrarse solidario.16
41En ese sentido, y contrariamente a lo que ha sostenido la doctrina francesa hoy dominante en
derecho público, es probable que subsista una cesura entre las nociones de “fraternidad” y
“solidaridad”, en la medida que la primera conserva en su núcleo la idea de igualdad, lo que
facilita su carácter universalizable, mientras que la segunda, al menos en el marco del derecho
público (donde la equivalencia se ha afirmado), conserva ese particularismo de dos grupos
sociales, en donde uno se vuelve hacia el otro, excluido, al que se busca insertar en un conjunto
dado. No por nada, Léon Bourgeois promovía la sustitución de la idea de fraternidad por la de
solidaridad. Por eso también la idea de solidaridad ha podido ser funcional, en materia político-
constitucional, a una lógica de integración social (Herrera 2003).
Instituciones supranacionales
OTAN (Organización del Tratado del Atlántico del Norte).- Organización militar creada
el 4 de abril de 1949 para garantizar la
defensa mutua y colectiva de los estados miembros. Unía E.U.A. y Canadá con los
Estados europeos occidentales. Su objetivo inicial fue el de crear una sólida alianza frente
a la U.R.S.S. Tras la disolución del pacto de Varsovia (1991), se creó el Consejo de
Cooperación del Atlántico Norte para establecer lazos de confianza con los estados de la
Europa del Este y los surgidos tras la desaparición de la U.R.S.S.
A partir de 1994 la OTAN firmó acuerdos con estos países, que se han ido incorporando
progresivamente a la organización. Actualmente cuenta con 26 estados y tiene su sede en
Bruselas. En 2003 emprendió, en Afganistán, su primera misión fuera de Europa. En los
años posteriores a la II Guerra Mundial (1939 -1945), muchos líderes occidentales
vieron la política de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) como una
amenaza a la estabilidad y la paz en Europa. En su primera década la OTAN fue más que
nada una organización military dominada por el poder bélico estadounidense, que
proporcionaba una cobertura de seguridad para la recuperación de la política y de la
economía europeas.
LIGA ÁRABE.- La Liga Árabe es el bloque político más antiguo de la región y hasta hoy
el más destacado en la ribera sur del Mediterráneo, aunque su peso estratégico es mucho
menor que el de la Unión Europea en el norte. La Liga Árabe fue establecida en 1945 por
seis estados de Oriente Próximo, la mayoría de los cuales acababan de acceder a la
independencia: Egipto, Siria, Líbano, Jordania, Iraq y Arabia Saudí. Yemen se sumó el
mismo año y otros estados de la zona se fueron adhiriendo conformo recuperaban la
independencia.
Hoy cuenta con 22 miembros, de los que algunos solo tienen una remota conexión con el
conjunto histórico árabe, como Yibuti, Somalia o las Islas Comoras. Desde su fundación
prevé, además, la adhesión de un futuro estado palestino y desde 1976 lo reconoce como
miembro de pleno derecho. La sede de la Liga Árabe está en El Cairo. La organización
celebra irregularmente cumbres a las que acuden los jefes de estado u otros
representantes de los miembros.
La historia del Grupo Andino, que hoy conocemos con el nombre de Comunidad Andina,
se ha caracterizado por avances y retrocesos como ocurre con cualquier otro
grupo de integración.
En los diez primeros años del proceso de integración (década del setenta) se formaron
casi todas los órganos e instituciones andinas, con excepción del Consejo Presidencial
Andino que nació en 1990.
NAFTA (Tratado De Libre Comercio de Amércia del Norte).- o North American Free
Trade Agreement ( NAFTA), es un conjunto de reglas que acuerdan los países de
Estados Unidos, Canadá y México, para vender y comprar productos y servicios de
América del Norte. Se denomina "zona de libre comercio", ya que debido a las reglas que
disponen definen cómo y cuándo se eliminarán las barreras arancelarias para conseguir el
libre acceso de los productos y servicios entre las tres naciones participantes; esto es,
cómo y cuándo se eliminarán los permisos, las cuotas y las licencias, y particularmente
las tarifas y aranceles, siendo también velar por el cumplimiento de los derechos de
propiedad intelectual. Se basa en principios fundamentales de transparencia, tratamiento
nacional y de tratamiento como nación más favorecida, todo ello representa un
compromiso firme para la facilidad del movimiento de los bienes y servicios a través de las
fronteras, ofrecer la protección y vigilancia adecuadas que garanticen el cumplimiento
efectivo de los derechos de propiedad intelectual; adoptar los procedimientos internos
efectivos que permitan la aplicación e implementación del Tratado, establecer una regla
de interpretación que exija la aplicación del TLC entre sus miembros y según los principio
del Derecho Internacional.
Hoy en día, la O.E.A. reúne a los 35 Estados Independientes tales cómo: Argentina,
Estados Unidos de América, Colombia, México, etc. y constituye el principal foro
gubernamental político, jurídico y social del Hemisferio.
Después de su ratificación por los gobiernos signatarios la OPEP se registró ante las
Naciones Unidas el 6 de noviembre de 1962. Fue oficialmente reconocida como una
organización internacional por el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas el
30 de junio de 1965. Resolución de las Naciones Unidas No.6363
ASEAN (Asociación de naciones del sudeste asiático).-
Fue fundada el 8 de Agosto de 1967 por cinco países: Thailandia, Indonesia, Malasia,
Singapur y Filipinas. En enero de 1992, los miembros de la ASEAN acordaron
establecer una zona de libre comercio y reducir las tarifas a productos no agrícolas
durante un periodo de 15 años, que comenzó en 1993. La reunión de la ASEAN en julio
de 1994 estableció el reconocimiento de la necesidad de relaciones internas más
próximas, el aumento de sus miembros y un papel mayor en la seguridad regional
después del fin de la guerra fría.Papúa Nueva Guineatiene estatuto de país observador, y
Corea del Sur tiene un estatuto especial.
Es importante entender que la Participación Ciudadana no es una concesión o permiso que los
gobiernos hacen a la comunidad: hay un marco legal nacional e internacional en el que se
fundamenta el derecho de los pueblos y los ciudadanos a participar en los gobiernos, de los cuales
mencionamos la Constitución de El Salvador (Arts. 83, 85 y 86); la Ley de Acceso a la Información
Pública de El Salvador (Art. 3, literal k); la Declaración Universal de los Derechos Humanos
(Artículo 21, número 1); el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de las Naciones
Unidas, Punto 1; la Convención Americana sobre Derechos Humanos (Artículo 23).
“1. Consulta Pública. Consiste en el acto mediante el cual la entidad estatal pone a disposición
del público en general información base sobre un tema específico y solicita opiniones, propuestas o
sugerencias de los ciudadanos y/o de organizaciones estatales.
“2. Audiencia pública. Similar a la consulta pública, excepto que el acto de recibir sugerencias,
opiniones o propuestas se realiza en forma personal ante la autoridad que corresponda, de
acuerdo con el tema de que se trate.
“3. Foros o talleres. Reunión selectiva o pública de actores relevantes o afectados junto con la
autoridad competente, que permita el conocimiento profundo sobre un tema o sirva de mecanismo
de obtención de consenso o resolución de conflictos.
“4. Participación directa en instancias institucionales. Actuación de ciudadanos o
representantes de organizaciones sociales en las instituciones públicas de consulta o toma de
decisiones específicas.”
28. Cultura
29. La cultura y las culturas.
El término cultura posee varios significados todo depende del contexto en donde
se emplea la palabra:
La cultura física es el conjunto de rutinas de cuidados personales como el
deporte, ejercitación física, tratamientos, entre otros, que buscan el bienestar en
cuerpo y el alma;
La cultura política es el conjunto de actos de poder y autoridad de los
cuales se forma la estructura de la vida política;
La cultura organizacional son el grupo de normas, políticas, costumbres y
valores que comparten en una institución y logra una mejor interacción entre el
grupo que la compone;
La cultura clásica tiene como finalidad facilitar o proveer los conceptos de la
cultura Greco- Romana, desde el punto de vista político, social, artístico, religioso,
literatura, entre otros tópicos.
En biología, la cultura es una creación especial de organismos para fines
determinados.
En referencia a lo anterior, cada país tiene su propia cultura, que está influenciada
por varios factores, entre ellos, los pueblos que ya pasaron por el país, la música,
la danza, la forma de vestir, la tradición, el arte, la religión, etc. La cultura puede ir
más allá de las fronteras, pudiendo haber una misma cultura en diferentes países
y diferentes culturas en un mismo país.
Vea también:
Cultura en filosofía
Podemos decir que hay cultura cuando esta interpretación personal y global se
une a un esfuerzo de información para profundizar en la posición adoptada con el
fin de intervenir en los debates. Esta dimensión personal de la cultura, tales como
la síntesis o la actitud interna, es esencial.
Cultura en la antropología
La cultura en la antropología se entiende como el conjunto de patrones aprendidos
y desarrollados por los seres humanos.
La cultura como antropología busca alcanzar o representar el conocimiento con
experiencia de una comunidad aprendido por la organización de su espacio, la
ocupación de su tiempo, en el mantenimiento y la defensa de sus formas de
relación y conceptos humanos, llegando a lo que podríamos llamar su alma
cultural en el sentido de los estándares ideales estéticos de comportamiento y
formas de presentación, todos ellos diseñados para sus necesidades. Obtiene
estos resultados todos los días fortuitamente y regularmente, pero también en sus
expresiones de celebración, fiesta, honor, homenaje y sacrificio.
Cultura popular
La cultura popular es algo creado por un determinado pueblo, y este pueblo tiene
un papel activo en su creación. Puede ser la literatura, la música, el arte, etc. La
cultura popular es influenciada por las creencias de las personas en cuestión y se
forma a través del contacto entre los individuos de ciertas regiones.
de acuerdo a sus definiciones, los tipos de cultura pueden ser:
Tópica.
Es la que permite dividir a la cultura en categorías específicas como la
organización social, religiosa o económica. Haciéndose necesario involucrar
las costumbres cotidianas de una sociedad, es decir, para entender la
estructura social alemana, es necesario entender su espíritu de orden y trabajo.
Un ejemplo de cultura tópica puede ser la cultura judía que engloba una serie de
tradiciones.
Histórica.
Percibe a la cultura como una herencia social, indicando la relación afectiva de
una sociedad con su pasado. En ella se exploran los procesos de la
conciencia histórica social, valorando los elementos que la crean o la
difunden.Por ejemplo, Cristóbal Colón y el descubrimiento de América.
Mental.
Entiende a la cultura como un conjunto de ideas o hábitos aprendidos que
diferencia a una persona o a un grupo del resto. Estando vinculada a los
conocimientos y capacidades de cada persona. Una clara descripción de ello
sería la teología de Ptolomeo, en que la tierra tenía bordes y había un precipicio.
Estructural.
Enfatiza los aspectos de carácter simbólico, ideas o comportamientos que
están reglamentados y estrechamente relacionados entre sí. Estos siempre
están insertados en contextos sociales estructurados y con una política en
particular, como por ejemplo, el escudo de una nación.
Simbólica.
Basada en los significados asignados por una sociedad a una persona,
objeto o ciudad, crean un ideal de reconocimiento, como el jugador de fútbol
Lionel Messi.
Tipos de cultura de acuerdo a su extensión.
Según sea la extensión y la complejidad de la cultura, nos encontramos con
tribus, pueblos, civilizaciones y estados.
En base a ello, los tipos de cultura son:
Universal.
Se refiere a los entendimientos compartidos por las sociedades del mundo,
las cuales permiten predecir ycoordinar una actividad social, como por
ejemplo los colores, símbolos de tránsito o de seguridad, clasificaciones
demográficas, líderes, música, tecnología e incluso los emoticones.
Total.
Está conformada por todos los rasgos particulares de una misma sociedad,
como puede ser la cultura de un determinado país.
Particular.
Integrada por un grupo de personas que comparten un mismo sistema de
creencias y comportamientos que los diferencia del resto, dentro de una
cultura total, es decir,las diversas culturas que posee una nación. Dentro de
esta clasificación, entra la subcultura, que con una connotación de moda, suelen
formarse grupos de acuerdo a gustos particulares. Algunas subculturas que se
desarrollan en los cascos urbanos son los punks, hippies, góticos, hemos,
metaleros, entre otros.
Tipos de cultura conforme a su desarrollo.
La cultura está relacionada a los recursos que las sociedades emplean para
impulsar el desarrollo, resultando un bienestar social. Un reconocimiento que
viene dado por la creación y producción de nuevas tecnologías o ideas creativas.
Dentro de estos tipos de cultura, tenemos:
Primitiva.
Caracterizada por ser conservadora, mantiene rasgos que no impulsan la
innovación tecnológica o el desarrollo de algún tipo de economía. Entre estas
se pueden nombrar algunas tribus africanas, que aunque conservan costumbres
milenarias, su desarrollo técnico es precario.
Civilizado.
Al contrario de la anterior, esta cultura produce y crea elementos que permiten
el desarrollo de una sociedad. De acuerdo a esta visión, el progreso industrial
debe contribuir a la prosperidad social y el medio ambiente. Cabe destacar que en
las sociedades modernas existe una cultura industrial, con un mercado donde
se ofrecen bienes y servicios sujetos a la ley de la oferta y la
demanda económica.
Aunque una nación civilizada, no necesariamente debe ser culta, sino decente y
protectora de la libertad, respeto, bondad, justicia y medio ambiente.
Analfabeta.
Padece de la falta de algún sistema de escritura, manejando solo el lenguaje
oral, aquí entran muchas tribus primitivas. Actualmente, se puede hablar
del analfabetismo digital como un nuevo proceso, que consiste en no tener
las capacidades necesarias para actuar dentro de la nueva tecnología, como
lo es el internet.
Alfabeta.
Definida por la incorporación del lenguaje tanto escrito como oral por parte
de la sociedad que la integra. A lo largo de la historia sobran los ejemplos, como
fueron los casos de las civilizaciones egipcia, griega, romana, china, así como la
mayoría de las culturas actuales.
Tipos de cultura acorde al carácter dominante.
Una cultura de carácter dominante, expresa los valores centrales que
comparten la gran mayoría de una población. Pero también personifica todas
las experiencias y conocimientos que de los seres humanos han acumulado
a través del tiempo.
Racional.
Impera el uso de la razón y las cosas que son tangibles, es decir, tiene que ver
con la realidad objetiva de hechos históricos y sociales heredados, demostrados
por algo palpable, como por ejemplo una obra de arte o monumento.
Ideal.
Postfigurativa.
Asentada en las costumbres del pasado para repetirlas en el presente sin
variaciones, actúan siempre tres generaciones: abuelos, padres, hijos. Esta
conducta generacional ocurre habitualmente en pueblos primitivos.
Cofigurativa.
Su modelo no es el pasado sino la conducta de los grupos contemporáneos.
En ella toda la sociedad asume naturalmente que la actuación de la nueva
generación difiere de las anteriores. Visualizándose en los grupos humanos que
llegan a nuevos territorios, donde los hijos aprenderán las costumbres de la
nueva sociedad.
Prefigurativa.
Proyectándose con pautas y comportamientos innovadores, las nuevas
generaciones no aprenden las costumbres de sus padres. Asimismo, los adultos
se muestran incapaces de comprender el nuevo mundo que no fue el de su
juventud. En muchas ocasiones se hacen las reformas necesarias de lo anterior
para alcanzar actitudes entendibles a los nuevos tiempos. Fue la usada por
Mao Tse Tung para promover la Revolución Proletaria en China comunista,
inculcando el odio al pasado.
Entendida como la postura ante la vida que nos permite cuidar y preservar el
medio ambiente. En ella todos los sectores que conforman una sociedad,
generalmente buscan las estrategias o acciones que permitan su difusión desde la
niñez.
ARTESANIAS DE EL SALVADOR
Ilobasco, el pueblo de los muñecos de barro. ...
Comasagua y sus cuadros de pétalos. ...
San Sebastián y sus telas de colores. ...
Nahuizalco y sus muebles hechos de fibras. ...
El barro de Guatajiagua. ...
La Palma y sus artesanías de madera. ...
La Libertad y sus artesanías de conchas.
La política cultural son las acciones, leyes y programas gubernamentales que regulan,
protegen, alientan y apoyan financieramente actividades relacionadas con las artes y los
sectores creativos
POLÍTICAS SOCIALES EN EL
SALVADOR: ACTUALIDAD,
COBERTURA, PRESUPUESTO,
PROBLEMAS Y RETOS
MARGARITA POSADA, 05 DE MARZO DE 2014 1 COMENTARIO
El Salvador, con sus 21.000 kilómetros cuadrados y 5,7 millones de habitantes, es uno de
los países más pequeños de América Latina. Su historia se ha caracterizado por profundas
inequidades entre personas ricas y pobres que han generado siempre conflictos sociales.
Inequidades que, en la historia reciente desembocaron en una guerra civil que duró 12
años y que finalizó con los Acuerdos de Paz de Chapultepec, firmados en enero de 1992.
Hoy se trabaja, desde instituciones y organizaciones, para superar esta situación y lograr
una sociedad más justa e igualitaria.
De 1989 a 2009 El Salvador estuvo gobernado por el partido neoliberal de derecha radical,
la Alianza Republicana Nacionalista ARENA, cuya gestión se vio caracterizada por
procesos de privatización que trasladaron a miembros activos de su dirigencia los activos
del Estado, haciendo que servicios básicos como telefonía, pensiones, distribución de
energía eléctrica, bancos, hoteles, trámites de permisos y registros de vehículos pasaran a
sus manos en muchas ocasiones de manera fraudulenta. A la vez, en este mismo periodo
cerraron una serie de instituciones como el Instituto Regulador de Abastecimientos (IRA) y
el Instituto de Vivienda Urbana (IVU). Son por hoy los dueños del partido ARENA quienes
se benefician de la importación de granos básicos y de la construcción de vivienda mínima.
En materia de salud, durante el año 2002 el presidente Francisco Flores trató de privatizar
los servicios del Instituto Salvadoreño del Seguro Social. Esto fue frenado por la lucha de la
población, aunque se impuso el cobro de las mal llamadas cuotas voluntarias en los tres
niveles de atención del Ministerio de Salud, lo cual constituye una barrera de acceso a los
servicios.
El cambio de 2009
En marzo de 2009 se da un cambio sustancial que afecta de manera muy importante a los
programas sociales: triunfa en las elecciones presidenciales el Partido Frente Farabundo
Martí para la Liberación Nacional. Se inicia una serie de cambios en las políticas sociales,
cambios que han tenido un impacto muy importante sobre todo a nivel rural, en
comunidades por años olvidadas y sumergidas en condiciones de extrema pobreza.
De la totalidad de la inversión pública programada por el Gobierno para 2013, el 61,3 por
ciento de la ejecución se destinó a proyectos de desarrollo social. Las políticas sociales más
importantes implementadas en este período se centraron en salud, educación, agricultura,
vivienda y mejoras en la atención especializada hacia las mujeres.
Por primera vez se abre un espacio a la participación ciudadana como parte integral de la
Reforma de Salud, mediante la instalación del Foro Nacional de Salud como un eje de la
Reforma. Se cuenta por ahora con 450 comités comunitarios en un total de 64 municipios.
Los líderes y lideresas participan activamente en las micro redes del Ministerio de Salud de
El Salvador (MINSAL) haciendo propuestas y contraloría de la efectiva implementación de
la Reforma.
La inversión en salud en esta gestión ha sido la más alta de la historia, creciendo de 391.3
millones de dólares en 2008 a 628 millones en 2013, con lo que se ha alcanzado una
inversión 2,45 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB). La promesa de campaña era
llegar al 5 por ciento del PIB, algo que no ha sido posible por la crisis financiera
internacional y por los altos niveles evasión fiscal que tienen las grandes empresas,
especialmente.
Las estadísticas del Fondo Nacional de Vivienda Popular (FONAVIPO) detallan que se han
invertido 440 millones de dólares desde 2009 a la fecha, beneficiando a 100.000 familias
cuyos ingresos oscilan entre uno y tres salarios mínimos. Esto es un elemento fundamental
en la dignificación de las familias salvadoreñas, aunque falta promover el acceso a la
propiedad de las viviendas por parte de las mujeres, que únicamente participan en un 40 por
ciento como dueñas de las mismas, situación que las ubica en una condición de
vulnerabilidad con respecto a los hombres.
Somos numerosas las personas que, desde las organizaciones sociales, respaldaremos
férreamente y demandaremos ante la Asamblea Legislativa que se apruebe esta propuesta
de Ley. Como siempre jugaremos un papel en su defensa y en las acciones de contraloría
para que los programas sociales se desarrollen en beneficio de nuestras mujeres y de
nuestra niñez.
El protestantismo en El Salvador fue una misión que se llevó a cabo entre las décadas de
1840 y 1850, y se logró insertar en el país en la década de 1880, la llegada de misioneros
protestantes en El Salvador no era una cantidad grande ya que la mayoría se establecían
en Guatemala y Nicaragua, la mayoría de los misioneros que llegaban a El Salvador eran
estadounidenses de la denominación presbiteriana, hoy en día la
población evangélica protestante representa casi dos quintos de la población de El
Salvador, y las dos denominaciones más grandes y crecientes en el país son
la pentecostal, Asamblea de Dios. Cabe destacar la presencia y notoriedad de la Iglesia
Apóstoles y Profetas Efesios 2:20 conocida como una congregación conservadora.
Son aquellos medios tecnológicos, que sirven para enviar mensajes, que van
dirigidos a una gran cantidad de público, y que, pueden atravesar grandes
distancias en un mínimo de tiempo. Con este tipo de medios, el receptor pierde su
carácter de receptor “individual” pasando a llamarse “receptor colectivo”.
2- Características
B- Son abiertos, esto significa que cualquier persona puede acceder a ellos.
3.1- Libros
Corresponden a un medio escrito. Gracias a adelantos tecnológicos se ha
posibilitado su reproducción en serie y en consecuencia, pueden llegar a varios
receptores a la vez.
3.3- La televisión
Es un sistema de transmisión de imágenes en movimiento. Al mezclar el sonido
con la imagen, los mensajes entregados por la TV impactan y persuaden a los
receptores de manera más rápida y certera.
3.4- La radio
Sistema de transmisión de mensajes orales. Sus mensajes son transmitidos por
medio de ondas hertzianas y puede recorrer varias distancias en un lapso de
tiempo breve. Su modo de transmisión de mensajes es simultáneo.
3.5- Internet
Es una red de redes, en la cual la información está estructurada y organizada de
acuerdo a temas y áreas. Así los "buscadores" facilitan el trabajo en la entrega e
interpretación de la información.
3.6- Cine
Surge en 1895 con la primera película de los hermanos Lumiere:" La salida de los
obreros de la fábrica". El cine al ser limitado en su tiempo real, comprime la
narración por medio del empleo de medios técnicos y estructurales, como por
ejemplo, el guión cinematográfico, escenas, plano, secuencia, etc.
4.2- Educar
Transmiten la cultura de las distintas comunidades; su pasado, presente y
proyecciones futuras. Los avances tecnológicos han posibilitado la transmisión de
programas educativos de manera más atractiva para la comunidad.
4.3- Entretener
La sociedad demanda de los medios la entretención y el esparcimiento. Así estos
contribuyen a llenar espacios de tiempo para descansar y divertirse. Esta es una
de las funciones más desarrolla por los programas televisivos, aunque también
está presente en otros medios de comunicación.
Cuando hablamos de conflicto, no nos referimos solo a los conflictos armados, ya que
existen otras clases de conflictos que, aunque no utilizan armas, pueden llevar
aparejada violencia y pueden tener efectos negativos sobre la población.
Las causas de un conflicto social dependen de las circunstancias de cada país o región;
en general, podemos destacar las siguientes:
Algunos conflictos sociales comienzan de manera pacífica como una protesta, pero
cuando se extienden en el tiempo pueden tener consecuencias muy graves como el
desplazamiento de miles de personas que temen por su vida.
Sin embargo, es importante tanto ayudar a los refugiados como prevenir los conflictos
sociales que pueden derivar en la huida de la población de un país. Algunas de las
medidas que se pueden tomar son las siguientes:
Tal y como has visto, un conflicto social puede acarrear consecuencias muy graves. Está
en nuestra mano evitar que lleguen a producirse y afecten a la vida de tantas personas.
34. La discriminación según rasgos físicos. El racismo, concepto, casos
y crítica.
A diario millones de personas sufren el rechazo de quienes consideran que la
“belleza” (según sus cánones) es una cualidad imprescindible.
La discriminación por motivos estéticos o, como se ha venido a llamar en la
sociedad del siglo XXI, el aspectismo (en inglés se denomina looksim) hace que se
rechace a los que no casan con los “cánones belleza imperantes”: gordos/as,
calvos/as, bajitos/as… es decir cualquiera.
¿Qué es el aspectismo?
En todo caso, parece evidente que parte de la batalla contra la discriminación no debe ser
legal, sino cultural, y es necesario educar y educarnos a nosotros mismos en el valor de la
igualdad.
Esto, sin embargo, no es fácil cuando hay una gran maquinaria publicitaria y
propagandística que reafirma la validez de cánones de belleza absurdos, un vestuario
elegante y que no resulte estridente y, en general, una imagen cercana a la media en
prácticamente todo (de hecho, los rostros considerados más atractivos son aquellos que
tienen muchas características físicas situadas en la media estadística en cuanto a tamaño
y proporciones).
Por todo esto, es necesario trabajar coordinadamente para crear culturas más inclusivas
en las que los cánones de belleza no constriñan ni nuestra autoestima ni nuestra libertad
personal, laboral y económica.
4 tipos de racismo
Existen varios tipos de racismo por los que las personas se pueden sentir
discriminadas o ser víctimas de desigualdades:
Como ella, miles de personas se han visto obligadas a huir de sus hogares debido
a las persecuciones por motivos de raza. Muchos siguen sin poder regresar a sus
países. ACNUR (Agencia de la ONU para los refugiados)protege a estas víctimas
ofreciéndoles, entre otros, un refugio, materiales de emergencia y acceso a
educación y formación.
Las indirectas son discriminaciones que se producen cuando un criterio o una práctica
de carácter aparentemente neutro ( imparcial) excluye implícitamente a un trabajador o
una trabajadora en razón de su sexo. Por ejemplo, la dificultad de promoción
profesional de las mujeres a causa de la organización de los horarios de la jornada de
trabajo, que a menudo son incompatibles con las responsabilidades familiares
asignadas socialmente a las mujeres.
4- Qué es el estado
5- Qué es la familia
1- Qué es el estado
2- Que es la política económica
3- Qué son las finanzas públicas
TALLER