Esquema 1862-1930
Esquema 1862-1930
Esquema 1862-1930
CRISIS DE 1929/1930
Eduardo Galeano, en Las Venas Abiertas de América Latina, “(…) con mejor o peor suerte, cada producto se ha ido convirtiendo en un destino, muchas veces
fugaz, para los países, las regiones y los hombres. El mismo itinerario ha seguido, por cierto, las zonas productoras de riqueza minerales. Cuanto más codiciado
por el mercado mundial, mayor es la desgracia que un producto trae consigo al pueblo latinoamericano que, con su sacrificio, lo crea. La zona menos castigada por
esta ley de acero, el río de la Plata, que arrojaba cueros y luego carne y lana a las corrientes del mercado internacional, no ha podido, sin embargo, escapar de la
jaula del subdesarrollo.” (Eduardo Galeano, Las Venas Abiertas de América Latina, México, Siglo XXI, 2004)
Repúblicas bananeras
Cuba y las islas del Caribe (azúcar), Venezuela (cacao), Brasil (algodón, caucho, café, frutas), México (henequén), Colombia (café, frutas, sal), Centroamérica y
Ecuador (bananas), Chile (cobre y sal), Bolivia (plata)
1) Todo se inició entre 1750 y 1770 con la irrupción de la Revolución Industrial en Inglaterra, con máquinas, vapor y carbón que multiplicaban la fuerza de
trabajo de lxs trabajadorxs en la producción de manufacturas, minas, comunicaciones y transporte, creando hasta el siglo XX un mercado mundial de circulación
de bienes, personas y capitales de inversión financiera y productiva
2) Consecuencia de esa Revolución, durante el siglo XIX se estableció una División Internacional del Trabajo (DIT) fáctica, que dividía a países productores de
bienes manufacturados (Inglaterra, Francia, Bélgica, Neederlandia, Alemania, Estados Unidos, luego Italia, Japón, Suiza y Rusia) y países productores de materias
primas [cereales, carnes, minerales, insumos industriales como el caucho] que involucraba (e involucra todavía) a casi todos los territorios de América Latina y el
Caribe, África, Asia y Oceanía
3) En la Argentina, sanción de la Constitución de 1853/60 mediante, y el reingreso de la provincia de Buenos Aires a la Confederación Argentina después de
Cepeda (1860) comenzó la etapa de organización del Estado Nacional y de las llamadas Presidencias históricas de Bartolomé Mitre (1862-1868), Faustino
Sarmiento (1868-1974) y Nicolás Avellaneda (1874-1880), que estructuró la institucionalización del país, comenzó a definir los límites territoriales, y a articular
una serie de elementos que definen a un Estado. De esos años podemos mencionar el establecimiento de la Corte Suprema de Justicia (1863), la sanción de los
Códigos nacionales, la formación del Ejército y la denominada “conquista del desierto”
En esas décadas (1840-1890) la Argentina ya participaba de esa DIT como país productor de materias primas exportando fundamentalmente cueros y
lanas e importando manufacturas
4) Desde 1880 (como fecha mítica) Argentina inicia un proceso de modernización liberal en la economía y de hegemonía conservadora en el plano político
(1880-1916). 5) Se fortalece en la exportación de materias primas con predominancia hacia Inglaterra (carnes, trigo, maíz, lino, lanas), expandiendo hasta 1930 la
frontera productiva sobre las tierras arrancadas a los pueblos originarios, que trabajarían los brazos de inmigrantes que vinieron de Europa, y con el apoyo de los
capitales extranjeros (Inglaterra y Francia) que construyeron la infraestructuras necesarias para la producción, transporte y exportación de aquellas producciones,
bancos y empresas de seguros, puertos, ferrocarriles y depósitos
6) La hegemonía conservadora en el plano político hasta 1916 significó, desde su lema positivista paz (interna de luchas caudillescas), orden (del Estado y de la
sociedad) y progreso (ilimitado en lo económico) la consolidación del Estado Nación personificado en la figura de Julio A. Roca, que implicó la hegemonía de la
llamada oligarquía (clase social y forma de ejercicio de la dominación política) caracterizado por su concentración y angosta base social, con la exclusión de la
gran mayoría de la sociedad de los mecanismos de elección y decisión política.
7) Esa concentración de poder, centralización de las decisiones y disposición de grandes propiedades de tierras (y empresas) se sustentaba en un sistema político
conservador que involucraba a una clase que se encontraba en la punta de una supuesta pirámide social, que perpetuaba de manera negociada y rotativa la elección,
mantenimiento y disposición del poder y del ejercicio de los cargos públicos a través de asegurar la dominación con el Partido Autonomista Nacional (PAN) y
la Liga de los Gobernadores, cuyo ejemplo más patente era que el gobernador de la provincia de Buenos Aires se convertía en el gran elector del siguiente
Presidente de la Nación
8) Frente al PAN empezaban a oponérsele agrupaciones políticas como la Unión Cívica Radical (UCR) nacida de la Revolución del Parque en 1890, fracción de
la clase media burguesa urbana que pedía participar del juego del sistema político; el Partido Socialista que luchaba por las condiciones de trabajo y los salarios
de los trabajadorxs en coexistencia separada con el Partido Comunista desde 1917 (Revolución Rusa); el Partido Demócrata Progresista (PDP) de la provincia
de Santa Fe, otra agrupación de clase media con programa específicamente para el territorio santafesino; y finalmente grupos anarquistas que venían con la
inmigración y se enfrentaban al Estado
9) Esta presión posibilitó la apertura al juego político mediante la “Ley Sáenz Peña” de voto universal, secreto y obligatorio en 1912 (aunque en realidad solo
para hombres y de determinadas condiciones para votar), y cuatro años después, inesperadamente para la oligarquía política conservadora, ganó las elecciones
Hipólito Yrigoyen con la UCR, cuya presidencia se extendió hasta 1922, continuando luego su correligionario Marcelo T. de Alvear (1922-1928) y de nuevo
Yrigoyen (1928-1930) cuyo gobierno sufrió el primer golpe de Estado de la Argentina el 6 de septiembre de 1930
10) La conciencia promovida sobre todo por los socialistas, los anarquistas y las oleadas de inmigrantes en general de la lucha y los reclamos por las condiciones
de trabajo, el salario, la cobertura que hoy conocemos como social, los accidentes de trabajo, etc., provocaron infinidad de huelgas y enfrentamientos entre los
trabajadorxs contra la policía y el ejército. Dichas disrupciones político-sociales tuvieron, entre otras, tres grandes represiones con muchos muertos en los tres
eventos mencionados. Los gobiernos radicales sufrieron y provocaron huelgas y represiones de trabajadorxs, pero lentamente supieron combinar la negociación
con la represión, logrando los trabajadorxs algunas conquistas laborales y sociales