Trabajo Dirigido
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TRABAJO DIRIGIDO
La Paz – Bolivia
2016
DEDICATORIA
verazmente humanos.
AGRADECIMIENTO
A Dios, porque es la luz y la fuente de mi vida.
A mi querida familia, por su incondicional apoyo.
A mis docentes de la Facultad, por haberme
enseñado con entusiasmo y dedicación.
CAPÍTULO I
MARCO HISTÓRICO………………………………………………………………….7 7
1.1. Contexto histórico………………………………………………………………….7 7
1.2. Accesibilidad a las bebidas alcohólicas por adolescentes…………………………8 8
CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO…………………………………………………………………….9 9
2.1. Definición de bebida alcohólica……………………………………………………9 9
2.2. Las bebidas alcohólicas en la historia………………………………………………9 9
2.3. Tipología de las bebidas alcohólicas………………………………………………11
11
2.3.1. El vino……………………………………………………………………… 12
12
2.3.2. La cerveza………………………………………………………………….. 12
12
2.3.3. El champán………………………………………………………………….12
12
2.3.4. El whisky……………………………………………………………………1312
13
13
13
2.3.5. El ron……………………………………………………………………….. 13
2.3.6. El vodka………………………………………………………………………
2.4. Acción del alcohol en el organismo humano……………………………………... 13
2.5. La adolescencia…………………………………………………………………… 15
2.6. Etapas del desarrollo del adolescente……………………………………………
2.6.1. Pubertad o pre-adolescencia……………………………………………….....
2.6.2. Adolescencia media………………………………………………………… 18
2.6.3. Adolescencia tardía………………………………………………………… 18
2.7. El alcoholismo en la adolescencia……………………………………………….... 15
2.8. Factores que incrementan la vulnerabilidad hacia el alcoholismo
en la adolescencia…………………………………………………………………. 19
2.8.1. Prevalencia del consumo de alcohol en los menores de edad en Bolivia….. 19
2.8.2. Factores que predisponen al inicio en el consumo de alcohol……………... 20
2.8.2.1 Ámbito familiar…………………………………………………… 22
2.8.2.2 Ámbito comunitario o ambiental………………………….............. 23
2.8.2.3 Ámbito de relaciones iguales……………………………………… 26
2.8.2.4 Ámbito escolar…………………………………………………….. 27
2.8.2.5 Ámbito personal…………………………………………………... 29
2.9. Trastornos mentales y del comportamiento asociado al consumo
excesivo de alcohol en la adolescencia…………………………………………… 31
2.9.1. Trastornos mentales asociados al alcoholismo…………………………….. 31
2.9.1.1 Ansiedad………………………………………………………………
2.9.3.2 Depresión……………………………………………………………
2.9.4.3 Trastorno bipolar…………………………………………………
2.9.5.4 Trastornos de personalidad…………………………………………
2.9.6.5 Trastornos psicóticos………………………………………………
2.9.7.6 Trastorno del sueño…………………………………………………
2.9.8.7 Alteraciones de la conducta sexual…………………………………
2.9.2 Trastornos del comportamiento asociados al alcoholismo……………………
2.9.2.1 Alcoholismo y conducta violenta…………………………………
2.9.2. Alcoholismo y conducta autodestructiva………………………… 41
42
43
44
2.9.3. Maltrato a familiares………………………………………..…….
2.9.4. Abusos físicos o sexuales en la infancia…………………….……
2.9.5. Actividad sexual no protegida……………………………..………
2.10. Venta y expendio de bebidas alcohólicas……………………………………….. 42
2.11. Análisis del consumo de alcohol desde una perspectiva preventiva……………. 43
2.11.1. Problemas generados por el consumo de bebidas alcohólicas………….. 43
2.11.2. Estrategias preventivas del abuso de alcohol…………………………… 43
2.11.3. Políticas institucionales…………………………………………………. 43
2.11.3.1 Políticas a Nivel Nacional……………………………………... 44
2.11.3.2 Políticas a Nivel Local…………………………………………. 46
2.11.4. La prevención en perspectiva…………………………………………… 47
2.11.5. Prevención del uso y abuso de alcohol………………………………….. 49
2.11.5.1 Medidas de regulación legal…………………………………… 49
2.11.5.2 Medidas sociales y comunitarias………………………………. 50
2.11.6. Nuevos enfoques en prevención del consumo de
alcohol: Inteligencia emocional…………………………………………. 51
2.12. Intervenciones breves como recurso al consumo de riesgo de alcohol………
2.12.1. Elementos comunes de las intervenciones breves………………………. 52
2.12.2. Eficacia de las intervenciones breves…………………………………… 53
CAPÍTULO III
MARCO CONCEPTUAL…………………………………………………………….. 54
3.1. Constitución Política del Estado………………………………………………….. 54
3.2. La supremacía de la Constitución escrita………………………………………… 54
3.3. La Ley…………………………………………………………………………….. 54
3.4. El alcohol………………………………………………………………………… 55
3.5. El alcoholismo……………………………………………………………………. 55
3.6. Sociedad………………………………………………………………………….. 56
3.7. Menor de edad……………………………………………………………………. 57
3.8. Expendio de bebidas……………………………………………………………… 57
3.9. Consumo de bebidas………………………………………………………………6057
61
61
62
3.10. Prevención………………………………………………………………………. 58
3.11. Penalización……………………………………………………………………... 58
3.12. Sanción………………………………………………………………………….. 58
CAPÍTULO IV
MARCO JURÍDICO………………………………………………………………….. 59
4.1. Constitución Política del Estado………………………………………………….. 59
4.2. Ley Nº 548 Código del Niña, Niño y Adolescente…………………………….... 60
4.3. Ley Nº 259 de Control al Expendio y Consumo de Bebidas Alcohólicas……….. 61
4.4. Ley Municipal Nº 049……………………………………………………………. 62
CAPÍTULO V
SITUACIÓN ACTUAL DEL PROBLEMA………………………………………….. 64
ENTREVISTAS Y ENCUESTAS……………………………………………………. 64
5.1. Unidad de Formación y Prevención GAMEA……………………………………. 64
5.2. Director de Seguridad Ciudadana………………………………………………… 64
5.3. División de Menores de la Policía Departamental de La Paz……………………. 65
5.4. Global status report on alcohol and health……………………………………….. 65
5.5. Análisis estadístico del consume de bebidas alcohólicas por parte
de los menores de edad en la ciudad de La Paz…………………………………... 65
CAPÍTULO VI
CONCLUSIONES Y PROPUESTA………………………………………………….. 76
6.1. Conclusiones……………………………………………………………………… 76
6.2. Propuesta…………………………………………………………………………. 76
6.2.1. Objeto de la propuesta……………………………………………………... 76
6.2.2. Justificación de la propuesta……………………………………………….. 76
BIBLIOGRAFÍA……………………………………………………………………… 78
RESUMEN
El tema del alcoholismo en la adolescencia, se inicia con una parte histórica en el que se
da a conocer el crecimiento paulatino en relación a esta enfermedad, también se enfatiza
su relación con el origen y tipología del alcohol. Posteriormente avanza al estudio de la
enfermedad, en donde se analiza las consecuencias negativas a nivel personal, familiar y
social. Por otro lado, explica las normas referidas a la regulación sobre la venta de
bebidas alcohólicas a menores de edad. Finalmente, se propone la creación de un nuevo
tipo penal y su respectiva incorporación en el Código Penal vigente, con el propósito de
sancionar a quienes incurran en la comercialización de esta droga legal.
En el capítulo III de este trabajo, se establece el Marco Conceptual, cuyo fin es definir
de manera clara algunos conceptos y categorías que se han manejado a lo largo del
presente trabajo, respecto a la problemática existente.
El Capítulo VI, es la parte final del trabajo, donde se podrán apreciar y evaluar las
Conclusiones y la Propuesta, respecto a buscar una solución que pueda reducir este mal
que aqueja a nuestra adolescencia.
2. JUSTIFICACIÓN
La Constitución Política del Estado en su Artículo 60, contempla como deber del Estado,
la sociedad y la familia garantizar la prioridad del interés superior de la niña, niño y
adolescente, que comprende la preeminencia de sus derechos, la primacía en recibir
protección y socorro en cualquier circunstancia, la prioridad en la atención de los
servicios públicos y privados, y el acceso a una administración de justicia pronta,
oportuna y con asistencia de personal especializado.
Asimismo, el Código niña, niño y adolescente en los Artículos 5, 12, 18, 164 contempla
la protección y amparo que deben gozar; por parte del Estado y la sociedad, los
menores de edad en cualquier circunstancia.
Tenemos la Ley No. 259 de Expendio y consumo de bebidas alcohólicas, que trata de la
regulación en cuanto a su consumo y venta de bebidas alcohólicas. Además establece la
prohibición de la venta a menores de edad en sus diferentes formas, a fin de precautelar
la salud de los mismos.
La vida y por supuesto la salud, deben estar en un nivel preventivo, la salud tiene un
estrecho vínculo con la vida, por tanto la salud no es un elemento que debe tomarse en
segundo plano, tenemos las normas posibles a cumplirse pero lamentablemente no están
siendo de total responsabilidad en cuanto a su ejecución o sencillamente se los
desconoce.
El Derecho Penal, es: “un conjunto de normas y disposiciones jurídicas que regulan el
ejercicio del poder sancionador y preventivo del Estado, estableciendo el concepto del
delito como presupuesto de la acción estatal, así como la responsabilidad del sujeto
activo, y asociando a la infracción de la norma una pena finalista o una medida
aseguradora” (JIMÉNEZ de ASÚA, 1992:18). Es en este sentido, que la investigación
conlleva la tipificación como delito: la venta de bebidas alcohólicas a menores de edad y
su respectiva sanción. Además de una correcta investigación de los hechos.
Las ciudades de La Paz y El Alto, los cuales están ubicados en el altiplano boliviano,
situados a más de 3000 metros sobre el nivel del mar. En ambos espacios geográficos se
presenta esta realidad con referencia al consumo de bebidas alcohólicas y que involucra
principalmente a menores de edad.
3.2. Temporal
El presente trabajo tiene relevancia social, porque atañe al sector más vulnerable de la
sociedad, que son los menores de edad.
El consumo de bebidas alcohólicas por parte de los adolescentes, es uno de los males
más agudos que viene soportando actualmente nuestra sociedad y el Estado moderno.
Los miembros del orden y de la sociedad, son testigos de muchos fenómenos y actos que
pueden generar el consumo de alcohol, pero lo realmente alarmante es; la situación de
menores, que a raíz de la ingesta del alcohol han consumado diferentes hechos delictivos
que aparece normado en la ley penal y con índices de violencia extrema llegando incluso
al asesinato.
5. OBJETIVOS
CAPÍTULO I
MARCO HISTÓRICO
La problemática del alcoholismo se trató desde el año 1950, año en que la OMS
(Organización Mundial de la Salud), lo consideró como una enfermedad. Ya paso más
de medio siglo y la educación y prevención al respecto continúan siendo ínfimas.
La OMS, declaró en mayo del 2004, al alcohol como objetivo prioritario para la acción
sanitaria de todos los países miembros. Posteriormente, dicha organización en su 58ª
Asamblea de mayo del 2005, trato en uno de sus puntos: “Problemas de salud pública
causados por el uso nocivo del alcohol” y que este representaba el principal riesgo para
la salud en los países en desarrollo con baja mortalidad, y el tercero en los países
desarrollados.
Entre las dos recomendaciones que se establecieron en esta Asamblea para con los
Estados miembros, refieren lo siguiente:
1.- Que elaboren, apliquen y evalúen estrategias y programas eficaces para reducir las
consecuencias sanitarias y sociales negativas del consumo de alcohol;
2.- Que alienten la movilización y la participación activa y apropiada de todos los grupos
sociales y económicos interesados; en particular las asociaciones científicas,
profesionales, industriales, no gubernamentales, benéficas del sector privado y de la
sociedad civil, en la reducción del consumo nocivo de alcohol.
Bolivia, es uno de los países donde el consumo de bebidas alcohólicas y los problemas
relacionados con el mismo adquieren una gran importancia, no solo por el alto nivel de
producción de algunos tipos de bebidas alcohólicas, sino también por el elevado nivel de
consumo. El amplio arraigo social de este hábito y la percepción por parte de algunos
sectores de la sociedad, de que el alcohol; o al menos ciertos tipos de bebidas
alcohólicas, forman parte del patrón alimentario y dietético de nuestra sociedad.
Asimismo, en nuestro país, según los siguientes datos, el 44% de los adolescentes de 13
a 16 y el 61% de 17 a 20 años, consumen alcohol. Así también, se observa que el mayor
consumo se da en los adolescentes de 13 a 17 años, en los diferentes estratos sociales
(alta, media, baja).
En octubre del 2014 según una encuesta realizada por la Asociación de Alcohólicos
Anónimos (AA), se estableció que a los 14 años, el 90% de los adolescentes ha
consumido alcohol, el 48% se ha embriagado alguna vez, y el 15% abusa del alcohol y/o
está en riesgo de alcoholismo.
La accesibilidad de los jóvenes a las bebidas alcohólicas es cada vez mayor, a pesar de
las prohibiciones impuestas de su venta a menores. La edad media de inicio en el
consumo de alcohol en menores de edad, según los datos de la encuesta sobre Drogas en
la población adolescente en el año 2014, es de 13.6 años, y la edad media de inicio de
consumo semanal se sitúa entre los 14.9 años, según esta fuente las adolescentes
mujeres, registran mayor prevalencia de consumo de alcohol, aunque en cantidades
menores.
CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO
El alcohol ha sido sin duda la droga por excelencia de los pueblos mediterráneos. Sus
efectos embriagantes fueron utilizados como vínculo en actos litúrgico por los egipcios,
griegos, romanos y hebreos. Los egipcios son los inventores de la cerveza tres siglos
antes de Cristo. Aun antes, la civilización de Mesopotamia conocía y utilizaba de otras
bebidas fermentadas similares, citadas incluso en el código de Hammurabi, donde se
prescribía la pena de ser arrojado al rio para aquellos propietarios de locales de bebidas
que permitieran la embriagues de sus clientes.
El vino fue en el imperio Egipcio, hasta bien avanzada la dominación romana, una
bebida exclusivamente ritual, utilizada para la embriaguez sagrada en el templo de
Tentyra, al parecer dentro del culto dedicado a Hator, diosa egipcia del amor.
Precisamente, parece ser que los árabes fueron quienes descubrieron el proceso de
destilación, entre los siglos XVIII y IX, con lo que se consiguió aumentar el grado
alcohólico de las bebidas fermentadas.
Dos acontecimientos importantes para la difusión de las bebidas alcohólicas tienen lugar
en el siglo XVII. Por una parte, en Francia, el monje benedictino Dom Pierre Perignon,
modifica y perfecciona la técnica de elaboración y fermentación del vino, dando
resultado lo que hoy conocemos como champán. Por otro lado, los comerciantes y
propietarios agrarios españoles comienzan la exportación y plantación masiva de caña
de azúcar en las Antillas y Brasil, con lo que se desarrolló la producción y difusión del
ron.
Las bebidas con contenido alcohólico se pueden obtener mediante dos procedimientos:
fermentación y destilación.
2.3.1. El vino
2.3.2. La cerveza
2.3.3. El champán
2.3.4. El whisky
2.3.5. El ron
Se obtiene por destilación del sustrato de la fermentación del jugo de la caña de azúcar.
Tiene dos variedades principales: ron blanco y ron negro, este último coloreado con una
solución azúcar quemado al finalizar la fermentación. Su graduación se sitúa alrededor
de los 40º.
2.3.6. El vodka
El alcohol etílico es un depresor del Sistema Nervioso Central que es ingerido por vía
oral, a través de determinadas bebidas que lo contienen en unos porcentajes variables.
Desde su ingreso en el organismo podemos ir describiendo los efectos de su acción
sobre las distintas partes del mismo.
El alcohol no es transformado por los jugos digestivos del estómago o del intestino,
como los alimentos, sino que pasa directa y muy rápidamente, sobre todo en ayunas, a
la sangre, desde donde se difunde a los diferentes tejidos del organismo. De todos los
órganos y tejidos es únicamente en el hígado donde el alcohol es quemado, es decir,
metabolizado.
Cuando se bebe más alcohol del que puede oxidar el hígado por las vías metabólicas
normales, deben funcionar vías de suplencia. Estas vías son peligrosas porque no oxidan
el alcohol en exceso más que destruyendo la célula. Se queman ácidos nucleicos y
aminoácidos de la propia célula. Estas oxidaciones engendran malnutriciones, por lo que
es peligroso beber en exceso si se come mal o con pocas proteínas.
Es falso pensar que las calorías del alcohol es equivalente a las calorías que producen las
sustancias nutritivas. El alcohol no es una sustancia nutritiva, plástica o reguladora
indispensable como las proteínas o las vitaminas. No sirve para el trabajo físico, ni para
combatir el frio.
El alcohol no se elimina del organismo más rápidamente con el trabajo muscular
intenso, como generalmente se cree. El músculo no utiliza nunca el alcohol para su
trabajo. Lo que hace creer que da fuerzas es una sensación subjetiva, ya que su acción
sobre el Sistema Nervioso puede impedir al bebedor momentáneamente la fatiga.
2.5. La adolescencia
Se presentan dos rasgos complejos en los adolescentes, pues sienten que ya son grandes
para beber, están convencidos de que saben lo que hacen, se sienten orgullosos de
hacerlo y si a eso le sumamos el deseo previo y la falta de inhibición que produce el
alcohol, tenemos como resultado jóvenes ebrios teniendo conductas sexuales de riesgo,
que fácilmente pasan del uso al consumo abusivo de alcohol, pues ya sabemos que no
piensan en las consecuencias de sus actos ni en el futuro, e incrementan sus
probabilidades de acercarse a otras drogas dadas sus características y el efecto propio del
alcohol que incrementa esta tendencia a la satisfacción inmediata. (FIDEL de GARZA,
32)
Tomamos como concepto la definición de la Dra. Claudia Cuyun que hace referencia a
la adolescencia y vamos a centrar nuestra mirada sobre una etapa de la vida que es muy
importante, un periodo de transición entre la infancia y la vida adulta, el cual es muy
conocido por todos: “La adolescencia”. (ALESSI y GEORGETI, 2009)
Desarrollo intelectual, durante este periodo se produce una maduración de las funciones
cognitivas:
- Inseguridad e incertidumbre
- No saben interpretar lo que les pasa
- Emotividad, irritabilidad (en niñas más presente que en los niños)
- Preocupación por su cuerpo; se preguntan: ¿soy normal? ¿soy guapo? ¿soy
bonita?
Repercusiones psicológicas
En esta etapa más que en ninguna se ven marcadas dos necesidades básicas que son:
- Identidad
- Libertad
Según el libro “La juventud y las drogas” de Fidel de Garza, los adolescentes que
empiezan a beber desde los quince años de edad, tienen cuatro veces más posibilidades
en desarrollar dependencia al alcohol, que aquellos jóvenes que empiezan desde los
veintiuno.
2.8. Factores que incrementan la vulnerabilidad hacia el alcoholismo en la
adolescencia
Uno de los aspectos que preocupa de esta ingesta es la elevada cantidad de alcohol que
suele ingerirse. Si se atiende al Consumo Intensivo de Alcohol (5 o más copas en un
intervalo de tiempo de aproximadamente 1 hora), el 51% de estudiantes informan haber
consumido de este modo alguna vez durante el último mes, siendo un 20% los que
afirman haberlo hecho más de 4 días. Este consumo es más prevalente entre los varones
55% que entre las mujeres 40%. Además es una conducta que los propios jóvenes
perciben con poca peligrosidad en comparación al consumo de otras sustancias (PNSD
2012).
Esta etapa del desarrollo se convierte en un periodo crítico en lo que se refiere a las
conductas de riesgo en general, incluyéndose la del uso de sustancias debido a que el
adolescente debe hacer frente a una serie de retos y nuevas obligaciones que coinciden
temporalmente con cambios fisiológicos y con fluctuaciones en su funcionamiento
emocional, cognitivo y social (CALVETE y ESTÉVEZ, 2009).
Dos son las dimensiones que definen los estilos de crianza: el control y la calidez
parental. En líneas generales, un estilo de crianza democrático, alto control y alta
calidez, permite adquirir en los hijos una mayor confianza en sí mismos, mayor
autocontrol, madurez y competencia social. Por el contrario, un estilo de crianza
autoritario, elevado control y baja calidez impiden que los hijos adquieran la
independencia de modo natural y que puedan funcionar en la vida adecuadamente. Por
este motivo estos tres estilos parentales son los más relacionados con el inicio en el
consumo de alcohol.
Respecto a la actitud mostrada por los padres hacia el consumo de alcohol, algunos
estudios destacan que la permisividad hacia su consumo en fiestas familiares o con
amigos permite explicar de manera notoria el consumo de alcohol en sus hijos, al igual
o incluso más que el propio consumo que realizan estos padres. Los adolescentes
perciben desde niños que el alcohol es algo normal en casa, que está vinculado a
momentos lúdicos y reuniones sociales.
Los valores predominantes, los estilos de vida y las creencias que la comunidad posee
acerca de las drogas influyen en la elección de las sustancias y en los patrones de
consumo. En el presente cuadro, se resumen los principales factores de riesgo y
protección evaluados en la comunidad.
A nivel general, en las últimas décadas ciertos cambios sociales, como los procesos de
industrialización y los constantes avances tecnológicos, han supuesto un mejor nivel de
vida y un enorme movimiento migratorio. Sin embargo también ha generado una fuerte
competitividad; grandes dificultades de adaptación a los nuevos requerimientos
profesionales y tecnológicos; un tiempo de ocio cada vez mayor; un vuelco en los
valores tradicionales, con mayor énfasis en la diversión y en la reducción total de
cualquier tipo de malestar; y un debilitamiento de la unión familiar y grupal. Todo ello
ha ocasionado recurrir al alcohol como forma de afrontar estos cambios y demandas, y
como vía para disminuir las ansiedades y tensiones de la vida cotidiana.
Con respecto al consumo de alcohol, varios estudios han comprobado que la actitud
permisiva hacia esta sustancia es uno de los factores más importantes para predecir su
consumo abusivo entre la población juvenil adolescente. Actualmente existe una clara
percepción de normalidad hacia consumos aceptados socialmente, con la convicción de
que la ingesta de esta sustancia facilita las relaciones sociales y permite la evasión y el
olvido de los propios problemas.
Esto conlleva una gran tolerancia social sobre su uso y repercusiones (ROSON, 2008).
Algunos autores (Pascual, 2002) han señalado que el alcohol esta tan incluido en nuestra
cultura y actividades sociales, que en ocasiones, las políticas pro salud encuentran fuerte
oposición.
Hay que advertir por otro lado, que la permisibilidad no solo opera a nivel de sociedad
general. Aunque estos consumos no sean aceptados por una comunidad, si puede serlo
en el grupo más cercano con el que se relaciona el adolescente. Por este motivo, hay que
tener en cuenta que las normas de estos subgrupos también condicionan la conducta de
sus miembros (HAWKINS y FRASER, 2009).
Junto con la imagen social de sustancias, otro factor que también contribuye a su
consumo es la facilidad con que se puede adquirir: la mayor disponibilidad (bajo precio,
ausencia de restricciones). Este es un hecho incuestionable y demostrado en numerosos
estudios, valido tanto para el alcohol como para otras sustancias.
En el caso más concreto del alcohol, un aspecto ligado tanto a la imagen social como a
su percepción de accesibilidad es la publicidad que se hace de esta sustancia, y su
identificación con el éxito social. La publicidad ofrece a los jóvenes una vida ideal
placentera en la que ellos son el centro de todo. Los protagonistas de estos anuncios son
atractivos, atléticos, divertidos, prototipos que despiertan el deseo de emulación. La
bebida evidentemente, forma parte de todo ese mundo en el que se elimina cualquier
preocupación respecto a la salud, generando además una actitud positiva hacia esta
sustancia que hace olvidar que es una droga y promueve el hecho de que no haya fiesta
sin alcohol.
En este tipo de comunidades suelen ser menores las posibilidades de crear lazos sociales,
con lo cual éstos procesos de socialización se muestran como más inefectivos,
desapareciendo su fuerte poder protector, tanto para el consumo indebido del alcohol
como para otras conductas desadaptadas (MARTIN y MONCADA, 2008).
El grupo de iguales proporciona al adolescente una serie de ventajas que van a facilitar
la transición hacia el mundo adulto. Da apoyo y seguridad, facilita la separación de los
padres y modelos anteriores, y proporciona unos ideales, intereses y valores.
El uso percibido de alcohol por parte de los amigos, así como la propia conducta de
consumo que estos manifiestan, e incluso la de los hermanos mayores del mismo sexo,
desempeña un rol significativo con respecto al consumo de alcohol, el incremento de las
tasas de consumo intensivo y los problemas asociados durante la transición de la
adolescencia a la edad adulta.
En el siguiente cuadro se presentan algunos de los factores de riesgo y protección
relacionados con las interacciones que aparecen dentro del grupo de iguales.
Los centros escolares que promueven una educación integral de calidad, que llevan a
cabo un adecuado seguimiento personal de los estudiantes y sus necesidades
(académicas, personales y familiares) y que presentan un trato ajustado a su desarrollo
evolutivo, se ha demostrado que fomentan la autonomía y el sentido de la
responsabilidad, llevando a una menor probabilidad de desarrollo de conductas
problema, entre las que se encuentra el consumo de alcohol.
Por otro lado, uno de los factores clásicos asociados al consumo de alcohol, es el fracaso
escolar en un sentido amplio, que incluye el bajo rendimiento académico o la dificultad
de pasar de curso.
Tampoco debemos olvidar que el fracaso escolar; junto con la poca valoración que
hacen de ellos sus maestros, suele asociarse a la conducta antisocial que manifiestan los
adolescentes. Es en ese sentido, que los educadores, pueden terminar prestándole más
atención al control de sus conductas problema y menor al proceso de aprendizaje
(PETTERSON, 1999).
Por otra parte, de entre los factores biológicos que se han relacionado con el inicio del
consumo de esta sustancia, se ha señalado la mayor o menor tolerancia gastrointestinal
al alcohol. Es decir, la capacidad de consumir más cantidad sin que aumenten los efectos
negativos y mayor sensibilidad al disfrute de la bebida o al efecto de alivio al estrés. Las
personas con baja tolerancia gastrointestinal suelen experimentar: distrofias, nauseas,
cefalea y sensación de malestar general asociada al consumo, por lo que suelen tener
escaza probabilidad de avanzar en el proceso adictivo al no adaptarse bien a la presencia
de alcohol en su cuerpo.
Ser varón
Control personal reducido y pocas habilidades de afrontamiento
Baja autoestima
Mayor estrés
Menor edad de inicio en el consumo regular de alcohol y de otras sustancias
Elevado consumo con la intención de embriagarse
Fácil acceso a las bebidas alcohólicas
Más problemas relacionados con el consumo de alcohol en su inicio
Bajo rendimiento académico en las Unidades Educativas
Menor apoyo parental
Consumo parental y de amigos con mayor permisividad de todos ellos hacia el
consumo de alcohol
En relación a las adolescentes, más salidas con amigos y mayor exposición al
riesgo
Asimismo, en el caso de las adolescentes, vivir con uno de los progenitores.
2.9. Trastornos mentales y del comportamiento asociados al consumo excesivo de
alcohol en la adolescencia
Según los estudios del Ministerio de Salud, los trastornos psiquiátricos más
frecuentemente asociados al alcoholismo, son el trastorno de personalidad antisocial, la
esquizofrenia, y el abuso de drogas. Sin embargo, los que más sobresales dentro de este
aspecto, son los siguientes:
2.9.1.1 Ansiedad
Existe una relación causal recíproca entre los trastornos de ansiedad y alcoholismo. Los
trastornos de ansiedad tienen una mayor probabilidad de desarrollar alcoholismo y
viceversa. El alcoholismo puede inducir trastornos de ansiedad, tal vez en personas
vulnerables y en relación con las pérdidas de relaciones, fracaso formativo o vocacional,
acontecimientos vitales o episodios repetidos de abstinencia.
Los síntomas de ansiedad e insomnio, podrían convertirse en poderosos estímulos
condicionados, que llevarían a un nuevo consumo de alcohol. Además los síntomas de
ansiedad generalizada o crisis de angustia pueden ser inducidos por la propia abstinencia
del alcohol.
2.9.1.2 Depresión
La mayoría de las personas con depresión atípica podrían sumar criterios para el
espectro bipolar, presentando mayor consumo de alcohol, bulimia. Estos depresivos
presentan sensibilidad interpersonal, evitación de relaciones y reactividad emocional.
Además estos adolescentes, presentan descontrol o desmesura en diversas áreas:
impulsiva, alimentaria, apetitiva, adictiva, conductas de riesgo, promiscuidad ya que el
abuso en el consumo de alcohol es frecuente.
Los adolescentes presentan rasgos de impulsividad y violencia, les gusta asumir riesgos,
no aprenden de sus errores, ni aprenden del castigo. Tienen dificultades para controlar el
consumo de alcohol, acarreando graves consecuencias para la vida adulta y familiar.
Los adolescentes que tienen estos trastornos pueden presentar alteraciones estructurales
de la corteza cerebral, alteraciones respecto al procesamiento de las emociones e incluso
una reducción del flujo sanguíneo cerebral en la región frontal.
El trastorno paranoide, suele tener una temática delirante sobre todo de celos, que se
manifiestan con pensamientos irracionales y alteraciones emocionales y conductuales,
en conexión con una supuesta infidelidad sexual de la pareja. Su detección requiere la
información de los familiares, ya que suele ser negado.
El alcoholismo tiene un papel causal en los celos patológicos, siendo una causa
frecuente de violencia hacia la pareja. Por lo tanto, las mujeres que presentan
alcoholismo también pueden responder con violencia.
Los trastornos independientes, como la: esquizofrenia, los bipolares y la depresión,
presentan también una elevada tasa de comorbilidad con el alcoholismo.
Entre las personas que han tenido dependencia y abstinencia del alcohol a lo largo de su
vida, un 50% han presentado además insomnio. La intoxicación alcohólica puede
facilitar la conciliación del sueño, aunque al mismo tiempo empeore su calidad y
disminuya su duración total. La depresión, puede contribuir a empeorar el trastorno del
sueño.
La ingesta del alcohol, puede disminuir los temores interpersonales y de otra índole que
podrían interferir en la actividad sexual. Pero la desinhibición, que puede favorecer el
paso a la acción, aumenta al mismo tiempo el riesgo de practicar sexo no protegido, con
las posibles consecuencias de embarazos no deseados y contagio de enfermedades de
transmisión sexual, que incluyen el SIDA y las hepatitis víricas. Asimismo, tras un
aumento en el consumo de bebidas alcohólicas, aumenta el riesgo de abuso sexual o de
ser victimizada, por quedar atrapada en situaciones de sexo no deseado y no consentido.
En los varones el consumo elevado de alcohol, suele estar asociado a un mayor riesgo de
eyaculación prematura, disminución de deseo sexual y disfunción eréctil. El alcoholismo
puede producir un deterioro del funcionamiento hipotálamo-hipofisario y de la función
testicular, que se puede manifestar con una disminución de los andrógenos, elevación de
estrógenos y atrofia testicular. Todas ellas pueden repercutir negativamente sobre el
deseo y el rendimiento sexual del hombre.
En las mujeres, el alcoholismo puede estar asociado con disminución del interés sexual,
de la excitación sexual y dificultades para llegar al orgasmo. Las mujeres que sufren
alcoholismo, reportan tasas más elevadas de disfunción sexual que las que no tienen
alcoholismo. La disfunción sexual puede ser previa al inicio del alcoholismo y puede
haber sido incluso un factor inductor del consumo excesivo del alcohol, en relación con
la expectativa de que el alcohol mejore su función sexual; pero su consumo elevado y
prolongado suele empeorar el problema. La ingesta de alcohol puede facilitar que una
violación llegue a ser completa, debido a que la mujer tiene una menor capacidad para
resistir el asalto y puede manifestarse de manera menos clara su no consentimiento,
cuando se encuentra intoxicada por el alcohol. Por ello, el alcohol afecta negativamente
la sexualidad femenina y puede llevar a la disfunción sexual y a la victimización sexual
de la mujer.
Tomar cinco o más veces por ocasión, no solo aumenta el riesgo de accidentes, caídas y
lesiones, puede producir también alteraciones del comportamiento en cualquier persona.
En este estado de intoxicación alcohólica se produce una desinhibición de los impulsos
sexuales y agresivos, una disminución de la capacidad de razonamiento y de anticipar
las consecuencias de la propia conducta, que conducen a alteraciones del
comportamiento asociadas a consecuencias negativas, tanto para el adolescente que ha
bebido como para las de su entorno.
Cuando la persona que ha bebido tiene además un trastorno mental, que de por sí ya
cursa con una disminución del control inhibitorio, de su capacidad de razonamiento o
bien de la capacidad de anticipación de las consecuencias de su conducta, las
alteraciones de su comportamiento asociados a la bebida, pueden ser de mayor gravedad
y sus consecuencias devastadoras.
El abuso de alcohol está asociado a un mayor riesgo de violencia entre los adolescentes.
Una tercera parte de las personas que cometen homicidio presentan un diagnostico
psiquiátrico y el más frecuente entre ellos es el trastorno por dependencia del alcohol,
asociado a un trastorno de personalidad. El consumo de alcohol, juega por tanto un
importante papel en la violencia intrafamiliar, incluidos los malos tratos, el abuso sexual,
la violación y el homicidio.
Otras alteraciones del comportamiento relacionados con el consumo de alcohol son las
conductas adictivas comportamentales (juego patológico, el sexo compulsivo), los
accidentes (tráfico, laborales y domésticos), los abusos sexuales (violación, abuso de
menores, y homicidios que se producen tras un abuso sexual), graves lesiones o muertes
en personas quemadas o ahogadas, conductas autodestructivas o suicidio, contagio de
enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados, debido a prácticas
sexuales de riesgo.
Con frecuencia las victimas de estas alteraciones del comportamiento, que se producen
en estado de intoxicación por el alcohol, son terceras personas del entorno. Lo más
probable es que son las personas que conviven con la que esta intoxicada.
Mediante un estudio se llega a establecer que el alcohol estaría entre las drogas que
causan un mayor daño a la persona que lo consume. Pero además, el alcohol es la droga
que causa un mayor daño a terceras personas del entorno y, por extensión, a la sociedad
en general.
2.9.2.1 Alcoholismo y conducta violenta
Las expectativas que tiene la población, respecto al consumo de bebidas alcohólicas por
parte de los menores de edad suelen ser positivas y relacionadas con efectos psicológicos
de euforia, diversión, relajación, desinhibición y facilitación de la relación con los
demás.
Los estudios de laboratorio han comprobado que las personas intoxicadas por el alcohol,
tienen un comportamiento más agresivo que las personas que no han tomado alcohol.
(BUSCHMAN, 2010).
Algunos autores han encontrado que un 55% de los varones adolescentes y un 35% de
las mujeres adolescentes, entre 16 y 25 años han sufrido alguna agresión física. La
mayoría de las agresiones sufridas por los varones, se produjo cerca de las plazas o en el
interior de los bares, mientras que en las mujeres se suelen producir en casa.
(LEONARD y COLS, 2012).
El estado de desinhibición de los impulsos agresivos juega algún papel y facilita que el
conflicto con la otra persona acabe en agresión. Además, el consumo de alcohol guarda
relación con la magnitud de las lesiones. Cuantas más veces se ingiere, más grave
resultan las lesiones propias y las de otras personas implicadas.
Los delitos con violencia y el consumo de alcohol han aumentado en las ciudades de La
Paz y El Alto, desde los últimos años, con graves consecuencias para las personas, su
salud, familia, amigos y la sociedad en general. La complejidad multifactorial de la
violencia relacionada con el alcohol hace necesaria la colaboración de los servicios de
salud, sociales, educativos y de justicia penal. El alcohol juega un papel directo en la
agresión y la cantidad de alcohol ingerida guarda una relación directa con la
probabilidad de agresión. También influyen las características de la persona que ha
bebido y el contexto en el cual se produce la agresión.
Los poli abusadores de inicio precoz del alcohol (15-18 años), son los que presentan un
mayor riesgo de cometer un intento de suicidio (Bernal y Cols, 2010).
Estudios del Ministerio de Salud, han confirmado que los programas de prevención del
suicidio deberían estar focalizados en el diagnostico precoz y el tratamiento, tanto de la
depresión mayor como del alcoholismo que se da en los adolescentes.
Los dos trastornos mentales que con mayor frecuencia se asocian al suicidio, son las
enfermedades depresivas y la enfermedad alcohólica y con frecuencia están ambas
asociadas. Las perdidas sociales recientes, los efectos depresógenos, tóxicos y
desinhibidores del alcohol, los síntomas de depresión, pueden contribuir a los gestos
suicidas.
Esta relación entre el alcohol y la conducta suicida, se presenta con mayor fuerza en los
jóvenes, de manera que los que tengan una idea suicida, es más probable que hagan
episodios extremos por causa del alcohol. La ingesta de alcohol como patrón de
afrontamiento a estados emocionales negativos o como procedimientos de evasión,
pueden estar relacionadas también con la idea suicida.
Un estudio realizado con 6.000 menores de 18 años, entre los años 2010-2015, detecto u
incremento de la tasa de suicidios en adolescentes. Dado que el abuso de alcohol tuvo
una asociación fuerte, e independiente con la conducta suicida y además la precedió en
la mayoría de los menores. (FOMBONE, 2011).
La persona que bebe tiene una percepción deteriorada, mientras se encuentra bajo la
influencia del alcohol y solo atiende a una parte de todas las variables que intervienen en
la toma de decisiones. El efecto del consumo de alcohol genera un déficit cognitivo, que
incluyen la capacidad de abstracción, conceptualización, planificación y resolución de
problemas, lo cual dificulta la interpretación de estímulos complejos, por parte de la
persona que ha bebido. Dado que además, presentan un deterioro en el control
inhibitorio de sus respuestas conductuales, todo ello puede determinar conductas
inapropiadas con respecto a diversos hechos.
El consumo excesivo de alcohol puede predecir la violencia del hombre contra la mujer
en la pareja. Por tanto, los programas que previenen y tratan el consumo problemático de
alcohol podrían tener un impacto beneficioso para reducir la violencia en la pareja.
La mitad de todos los delitos con violencia se producen bajo los efectos del alcohol, que
puede haber ingerido tanto el agresor como la víctima. La mitad de las agresiones
sexuales las cometen hombres que han estado bebiendo alcohol. Pero también la mitad
de las víctimas de una agresión sexual refieren que habían estado bebiendo alcohol
cuando sufrieron la agresión.
Entre los niños maltratados, ingresados a un hospital, más de la mitad han sido víctimas
de algún familiar abusador de alcohol.
Entre los factores de riesgo de haber sufrido abuso sexual en la infancia, la presencia de
un padre alcohólico aumenta el riesgo de abuso perpetrado por un miembro de la familia
y la de una madre alcohólica, también el de abuso por parte de alguien de fuera de la
familia. El alcoholismo es uno de los factores que aumenta la probabilidad de incesto
con victimas adolescentes los cuales tienen más probabilidad de tener algún familiar con
problemas de alcohol.
Diversos estudios han comprobado que la relación entre el abuso físico y sobretodo
sexual durante la infancia está fuertemente asociada con síntomas físicos, disociativos,
otros trastornos psiquiátricos y adictivos e intentos de suicidio en la vida adulta.
Además, se ha comprobado también la relación entre el abuso físico y sobre todo sexual,
por parte de los padres, durante la infancia, y el desarrollo posterior de alcoholismo en
estos hijos maltratados. Es decir que los padres alcohólicos tienen una mayor
probabilidad de maltratar a los hijos, los cuales tienen más probabilidades de desarrollar
también alcoholismo y de maltratar a sus respectivos hijos, cerrando así el ciclo
generacional del alcoholismo y la violencia.
De acuerdo a la definición del Dr. Norris, el abuso de alcohol está asociado con un
mayor riesgo de enfermedades de transmisión sexual y del VIH.
Todos los niños, niñas y adolescentes, tienen derecho a crecer en un medio ambiente
protegido de las consecuencias negativas asociadas al consumo de alcohol, y en la
medida de lo posible, de la promoción de bebidas alcohólicas.
En la última década, se han puesto en marcha una gran cantidad de estrategias que
persiguen racionalizar el problema, partiendo de lo más básico a lo más complejo,
construyendo la prevención desde la infancia e intentando aminorar la repercusión del
consumo; sobre todo de su abuso, desde las distintas instituciones responsables.
2.11.3. Políticas institucionales
Tenemos que reconocer que las instituciones han jugado un papel primordial; positiva y
negativamente, en el desarrollo de las estrategias preventivas dentro de nuestro país.
Hemos estado conviviendo, y lo seguimos haciendo, con la gran paradoja del consumo
de las sustancias legales, que por una parte se comercializan y regulan desde las propias
instituciones y al mismo tiempo se ha de legislar y poner freno a su consumo por ser
consideradas como de alto riesgo de salud para la población, con todo lo que este hecho
implique.
Las contradicciones evidentes son difíciles de manejar y entender por la población más
vulnerable; los adolescentes, que están expuestos a los modelos parentales y sociales
consumidores. Al mismo tiempo, tienen que integrar en su proceso comportamental que
esas sustancias que consumen sus máximos referentes, son dañinas para todos.
Desde el ámbito nacional, se debe implementar líneas rectoras sobre puntos estratégicos:
a) Toda la población:
b) La institución familiar:
c) Población mediana:
d) La institución escolar:
Los cuales deben ajustarse a una serie de medidas que fomenten la prevención de
sustancias, huyendo de noticias sensacionalistas y morbosas, así como la banalización de
los contenidos sobre el alcohol.
La prevención debe contar con el apoyo activo de los profesionales de las Unidades
Educativas, de Salud y sociales, desde los maestros de educación Primaria, Secundaria y
Superior, pasando por los profesionales médicos; sobre todo, desde la atención primaria.
Trabajar desde la industria del ocio, tiempo libre y entretenimiento, contando con la
colaboración activa de los empresarios y profesionales con el fin de intentar cubrir
objetivos preventivos del abuso de alcohol.
d) Seguridad
En el marco legal existente en nuestro país, se debe incentivar mucho más la protección,
regulación y control del consumo de alcohol en menores de edad. En concreto,
prácticamente todas las autonomías cuentan en la actualidad con medidas legales, en
cuanto al expendio y consumo de bebidas alcohólicas, los cuales carecen de un estricto
cumplimiento, el cual debiera ser mejorada a la brevedad.
Desde el ámbito local, son varios los estamentos que se encargan de promocionar
medidas de prevención del consumo de alcohol en los menores de edad.
Las políticas emprendidas a nivel local en materia de alcohol, comprenden los siguientes
apartados:
a) Políticas educativas
La prevención dentro del marco de la educación, es calificada como baja. Hay que estar
conscientes de que puede abarcar a toda la población en edad escolar, dado que la
escolarización es completa, pero hay que contar con las limitaciones propias de los
programas preventivos aplicados. Se asume que los medios de comunicación juegan un
papel primordial en la formación de la sociedad en su conjunto, teniendo que hacer un
esfuerzo para que los medios puedan llegar a reforzar una conciencia social que ayude a
los adolescentes a prevenir sobre el consumo del alcohol.
b) Políticas de mercado
Las medidas aplicadas tienden hacia dos argumentos claramente definidos, por una parte
el aumento de los impuestos directos al alcohol, que inciden en la reducción de muertes
por alcohol y aumento de beneficios por impuestos; y por otra parte la reducción del
horario de venta de bebidas alcohólicas. Se evidencia que a mayor número de horas de
venta mayor es el número de acciones violentas, relacionadas con el consumo de
alcohol.
c) Políticas publicitarias
d) Políticas sancionadoras
Son varias las medidas legales que se han puesto en marcha para intentar regular el
expendio y consumo de las bebidas alcohólicas a los menores de edad en nuestro país,
pero el cumplimiento de estas ha ocasionado que se propague mucho más.
e) Políticas terapéuticas
Los distintos programas que se han puesto en marcha en el marco de la prevención del
consumo de alcohol, en función del contexto, el momento histórico o la necesidad
puntual, tuvieron resultados poco efectivos.
a) Prevención Primaria
b) Prevención Secundaria
c) Prevención Terciaria
Se trata de una medida paliativa y rehabilitadora, dado que se aplica una vez que se ha
llegado al proceso adictivo, para intentar reducir los daños del mismo y/o cuando se ha
superado el problema e intentar que no se llegue a un proceso de recaída.
A pesar de que el consumo de alcohol está considerado como uno de los principales
problemas de la salud pública, con una alta mortalidad atribuida a su uso y abuso, no son
muchos los programas que específicamente trabajan en la prevención universal de forma
unitaria.
En nuestro país contamos con una serie de Leyes que intentan regular el consumo de
alcohol en los menores de edad. No obstante una de las características más acusadas de
las mismas, es la falta de cumplimiento y la escaza persecución de las trasgresiones que
constantemente se vienen haciendo. Es un hecho latente que las Leyes que impiden la
venta y el consumo de alcohol de menores de edad, actualmente no se cumplen o se
cumplen con poca eficacia legal. Si a esto le sumamos aquellas que impiden el acceso al
alcohol, tanto en locales de ocio, como en tiendas de barrio y supermercados,
posiblemente se cuente con unas herramientas legales, pero con el inconveniente de que
no se hacen cumplir de una forma mínimamente eficiente.
Por otra parte, se debe promover una campaña agresiva en el etiquetado de las botellas
de alcohol, donde se exprese claramente los perjuicios sobre la salud de cada bebida, con
las alusiones que se consideren pertinentes en cada caso, pero nunca de una manera
suave.
Los cambios sociales empujados por las medidas legales, son difíciles de alcanzar si no
se llega a una verdadera conciencia social y a un cambio de las actitudes colectivas. En
nuestro país, donde las tradiciones están más arraigadas, el consumo de alcohol se hace
más frecuente, el cual parece imposible que se alcance una medida razonable de uso y
no de abuso, si no se cuenta con el apoyo de todos y cada uno de los agentes sociales y
de las instituciones implicadas en la educación; como la familia y la escuela. Hay que
romper tradiciones que asocian fiesta con consumo de alcohol, cerrar un trato o un
negocio, celebrar un acontecimiento social o comunitario todo esto, asociándolo a la
ingesta de bebidas alcohólicas.
Las emociones nos proporcionan una gran cantidad de información sobre nuestros
estados de ánimo, las personas que nos rodean y las consecuencias de nuestras
conductas. Cuando una persona es “emocionalmente inteligente” y tiene la habilidad
suficiente para utilizar toda esta información a su favor, las probabilidades de afrontar
una situación de manera adaptativa se ven multiplicados. En el caso concreto del
consumo de bebidas alcohólicas por los menores de edad, se debe tener en cuenta que si
se enseña a manejar adecuadamente sus emociones y a utilizar información para mejorar
sus conductas, se le da una herramienta estratégica fundamental.
Este tipo de intervenciones son más aceptadas porque son administradas por una amplia
gama de agentes y su aplicación conlleva un menor costo. Sin embargo, se define como
cualquier consulta terapéutica, de asesoramiento o preventiva, cuya duración es menor y
dirigida por un profesional de la salud generalista. Además, se caracterizan por ser
oportunistas y proactivas y se establecen dos subtipos de intervenciones breves:
En los últimos años se ha visto con mucho agrado la eficacia de este tipo de actuaciones
para reducir el consumo perjudicial y de riesgo, en adolescentes que no están en una
situación crítica hacia el consumo de alcohol. Principalmente en los centros educativos,
donde la participación de los maestros y maestras, en trabajo conjunto con los padres de
familia y los pares de los mismos estudiantes, han llevado a encontrar mejoras respecto a
esta problemática, lo cual hay que seguir trabajando en busca de mejores resultados.
CAPÍTULO III
MARCO CONCEPTUAL
La palabra Constitución deriva de la voz latina: “constituido” que puede traducirse por:
“lo que es” o “como está”. Significa también: la naturaleza, organización o contextura de
algo, la manera de ser de una cosa, entidad o persona.
Por otro lado, la enciclopedia en carta define a la Constitución como: “El código, norma
o ley fundamental de un país que determina la estructura jurídico político del Estado, la
forma o sistema de gobierno, los derechos y deberes de la población”.
3.3. La Ley
Del latín lex, una ley es una regla o norma. Se trata de un factor constante y variable de
las cosas, que nace de una causa primera.
En el ámbito del derecho, la ley es un precepto dictado por una autoridad competente.
Este texto exige o prohíbe algo en consonancia con la justicia y para el bien de la
sociedad en su conjunto.
Puede decirse que las leyes limitan el libre albedrio de los seres humanos que conviven
en sociedad; funcionan como un control externo al cual se somete la conducta de las
personas, para asegurar que se cumplan una serie de normas que respondan a la
necesidad de la comunidad.
La ley; como norma jurídica, debe cumplir con diversos principios, como la generalidad,
la obligatoriedad y la permanencia.
3.4. El alcohol
Bajo condiciones normales, las bebidas producidas por fermentación tienen una
concentración de alcohol de no más de 14%. Las bebidas creadas por destilación
presentan concentraciones mucho más elevadas de alcohol, más allá del 35%.
3.5. El alcoholismo
El alcoholismo es una enfermedad; definida como tal, por la OMS desde 1950 y en
términos generales, genera una fuerte necesidad de ingerir alcohol, afecta a aquellas
personas que no pueden controlar su forma de tomar.
Por otro lado, se define también como cualquier forma de ingestión de alcohol directa o
indirectamente, que provoca consecuencias negativas para el individuo o terceros; en las
áreas de salud, armonía familiar, rendimiento laboral o principalmente escolar, seguridad
personal y funcionamiento social.
3.6. Sociedad
Sociedad es un grupo de seres que viven de una manera organizada. La palabra proviene
del latín societas, que significa asociación amistosa con los demás.
Por otro lado, una sociedad humana es un colectivo de ciudadanos de un país, sujetos a
la misma autoridad política, las mismas leyes y normas de conducta, organizados
socialmente y gobernados por las entidades que velan por el bienestar de este grupo. “El
hombre es un ser social por excelencia”
Los miembros de una sociedad pueden ser de diferentes grupos étnicos. También pueden
pertenecer a diferentes niveles o clases sociales. Lo que caracteriza a la sociedad es la
puesta en común de intereses entre los miembros y las preocupaciones mutuas dirigidos
hacia un objetivo común.
Jurídicamente los menores de edad son aquellos seres humanos que aún no han
alcanzado la mayoría de edad que varía entre los 18 y los 21 años. Están sometidos al
régimen de la patria potestad; están bajo la autoridad de sus padres, que deben
mantenerlos, protegerlos y educarlos y si carecieran de padres por haber estos fallecidos
o hubieran perdido ese derecho, los tutores son los que guían y orientan en el desarrollo
de su vida.
El término proviene del idioma latín “cosumere” que significa gastar. Es la acción por la
cual se utilizan determinados productos, bienes y servicios. Ahora entendemos por
“consumir” al hecho de utilizarlos a estos productos para satisfacer alguna necesidad del
ser humano.
Por otro lado, cuando hablamos de consumo estamos haciendo referencia a la acción de
consumir, de comprar diverso tipo de productos que pueden presentar diferente grado de
importancia o relevancia en lo que respecta a nuestra calidad de vida.
El consumo tiene que ver con la economía, ya que es el factor que alienta el movimiento
económico y que le otorga el dinamismo. Al mismo tiempo, el consumo es un fenómeno
social ya que puede transformarse en un estilo de vida y cambiar significativamente el
modo en que los individuos desarrollan su vida cotidiana en cuanto al consumismo.
3.10. Prevención
3.11. Penalización
En el ámbito del Derecho penal, significa la tipificación como delitos o faltas, una
determinada conducta realizada por el ser humano. Es sinónimo de sanción o castigo.
Una penalización es una sanción o un castigo impuesto por una autoridad determinada
ante una infracción. Desde el punto de vista legal, también es posible penalizar una
conducta que rompe con una norma establecida legalmente.
Una penalización muestra que las acciones tienen consecuencias más allá de sí mismas,
y así como hay hechos que son dignos de premio, elogio y reconocimiento, por el
contrario, también hay acciones que producen efecto contrario.
3.12. Sanción
La sanción se impone mediante una sentencia, una vez concluido el proceso penal y
cuando el acusado resulto culpable de haber cometido determinado delito. La sanción
como consecuencia debe ser acorde a la causa que le ha producido. Las sanciones están
fijadas por ley y aparecen como el resultado de una serie de categorías y jerarquías.
CAPÍTULO IV
MARCO JURÍDICO
La vida es un bien jurídicamente protegido por todas las legislaciones del mundo, la
nuestra no es la excepción.
A pesar de contar con legislación, respecto a las normas que regulan el expendio y
consumo de bebidas alcohólicas, tanto de manera global como también hacia los
menores de edad, todavía en nuestro país, no se le da la importancia debida, los cuales
no son eficientemente, funcionales.
Art. 35.I. El Estado, en todos sus niveles, protegerá el derecho a la salud, promoviendo
políticas publicas orientadas a mejorar la calidad de vida, el bienestar colectivo y el
acceso gratuito de la población a los servicios de salud.
Por otro lado, en la Sección V, que hace referencia a los Derechos de la niñez,
adolescencia y juventud, se toma en cuenta lo siguiente en el:
Art. 58. Se considera niña, niño o adolescente a toda persona menor de edad. Son
titulares de los derechos reconocidos en la Constitución, con los límites establecidos en
esta, y de los derechos específicos inherentes a su proceso de desarrollo…
Art. 59. I. Toda niña, niño y adolescente tiene derecho a su desarrollo integral.
Art. 60. Es deber del Estado, la sociedad y la familia garantizar la prioridad del interés
superior de la niña, niño y adolescente, que comprende la preeminencia de sus derechos,
la primacía de recibir protección y socorro en cualquier circunstancia, la prioridad en la
atención de los servicios públicos y privados, y el acceso a una administración de
justicia pronta, oportuna y con asistencia de personal especializado.
Art. 5. (Sujetos de Derechos). Son sujetos de derechos del presente Código los seres
humanos hasta los dieciocho años cumplidos, de acuerdo a las siguientes etapas de
desarrollo:
b) Adolescencia, desde los doce años hasta los dieciocho años cumplidos.
Art. 12. (Principios). Dentro de los principios de este Código se establece en el inciso:
b) Prioridad Absoluta. Por el cual las niñas, niños y adolescentes son objeto de
preferente atención y protección, en la formulación y ejecución de las políticas públicas,
en la asignación de recursos, en el acceso a servicios públicos, en la prestación de
auxilio y atención en situaciones de vulnerabilidad, y en la protección y socorro en
cualquier circunstancia…
Art. 18. (Derecho a la salud). Las niñas, niños y adolescentes tienen el derecho a un
bienestar completo, físico, mental y social. Asimismo tienen derecho a servicios de salud
gratuitos y de calidad para la prevención, tratamiento y rehabilitación de las afecciones a
su salud.
b) De Asistencia, que comprende políticas necesarias para proteger a las niñas, niños y
adolescentes que se encuentren en situaciones de vulnerabilidad…
La presente Ley fue promulgada el 11 de julio de 2012, el cual tiene por objeto regular
el expendio y consumo de bebidas alcohólicas, las acciones e instancias de prevención,
protección, rehabilitación, control, restricción y prohibición, estableciendo las sanciones
ante el incumplimiento de las mismas.
Art. 9. (Advertencias). I. Las bebidas alcohólicas que se fabriquen, importen y se
comercialicen en el Estado Plurinacional de Bolivia y la publicidad que se realicen sobre
la misma, deberán anunciar las siguientes advertencias:
I. Los menores de 18 años de edad, que consuman bebidas alcohólicas, serán conducidos
a las Defensorías de la Niñez y Adolescencia dependientes de los Gobiernos Autónomos
Municipales, a efectos de que se establezcan las medidas correctivas y socioeducativas
correspondientes.
Esta Ley municipal fue aprobada el 13 de enero de 2014, por el Concejo Municipal de la
ciudad de La Paz, a objeto de regular las autorizaciones a establecimientos que se
dediquen a la venta y expendio de bebidas alcohólicas. Se establece lo siguiente:
II. Se establece que los titulares de las autorizaciones, están prohibido de expender
bebidas alcohólicas a menores de edad.
Art. 85. (Consumo de bebidas alcohólicas por menores de edad)
I. Los y las menores de edad que consuman bebidas alcohólicas en vías o espacios
públicos serán conducidos por los inspectores y/o la Policía Boliviana a la DDM a
efectos que se establezcan las medidas correctivas y socioeducativas correspondientes.
ENTREVISTAS
El “taco”, el que resiste más que los “pollos” – que no saben tomar -, y los infaltables a
los “viernes de soltero” semanales, hombres o mujeres, tienen un sitial preferencial en la
sociedad pero ocultan problemas de dependencia y los adolescentes son los que siguen
en esta línea, fueron las expresiones de esta autoridad.
5.4. “Global status report on alcohol and healt” (Estatus global de reporte del
alcohol y la salud)
Cerveza, whisky, vino, pisco, tequila y otros de los que importa Bolivia, llego a 62
millones de dólares el año pasado. Además de estas bebidas, las normas nacionales
permiten producir bebidas preparadas, alcohol con colorantes. Hay un registro de 36 en
el Senasag. Sus precios están entre los 10 y 20 bolivianos, lo que hace que sea más
accesible para los menores de edad en su adquisición, manifestó el miembro de esta
institución.
5.5. Análisis estadístico del consumo de bebidas alcohólicas por parte de los
menores de edad en la ciudad de La paz.
Ítem Nº 1
Tabla Nº 1
2500
2000
1500
1000
500
0
Indicad La Paz Sta El Alto% Tarija% Oruro% Cochab
ores % Cruz% amba%
Series1 2012 37 35 40 35 34 30
Series2 2013 45 39 43 38 37 35
Series3 2014 50 41 48 40 40 42
Series4 2015 55 46 55 44 42 46
De acuerdo al análisis, casi el 50% de la población adolescente tiene problemas con las
bebidas alcohólicas y que su incremento ha ido en ascenso en los últimos cuatro años. Es
una realidad que las ciudades de La Paz y El Alto, presenten un elevado porcentaje en
cuanto al consumo de alcohol, presentando un 55% con una pequeña diferencia entre
ambas ciudades.
Ítem Nº 2
Tabla Nº 2
Gráfico Nº 2
105
100
45 43
37 35
18 17
5 5
Fuente: Tabla Nº 2
Como datos destacados se puede observar que el 43% de los adolescentes, consumen
bebidas alcohólicas una vez por semana, mientras que, el 35% han consumido alguna
vez, lo cual resulta alarmante en relación a quienes bebieron en el último mes que
significa un 17% y quienes lo hacen diariamente.
Ítem Nº 3
Porcentaje de la influencia social en cuanto al inicio de consumo de bebidas alcohólicas
en los adolescentes
Tabla Nº 3
Gráfico Nº 3
105 100
80 76
13 12 7 7 5 5
Fuente: Tabla Nº 3
Los datos expresados, muestran que en su gran mayoría son los amigos quienes en un
76% son los que ofrecen bebidas alcohólicas, mientras que en segundo lugar, están los
parientes con un 12%, luego los desconocidos en un 7% y finalmente los enamorados en
un 5%. Nos muestra una realidad preocupante de esta realidad que atraviesa nuestra
sociedad.
Ítem Nº 4
Prevalencia de año del consumo de alcohol en población adolescente escolar de
Secundaria
Tabla Nº 4
105 100
47 45 45 43
13 12
Fuente: Tabla Nº 4
Gráfico Nº 5
100
84
50
42
16
8
Si No Total
Fuente: Tabla Nº 5
Gráfico Nº 6
100
60
50 50
40
30
Fuente: Tabla Nº 6
Consumo de alcohol por los adolescentes en relación a otras drogas en los últimos 12
meses
Tabla Nº 7
Indicadores Frecuencia (f) Porcentaje (%)
Alcohol 70 70
Tabaco 20 20
Otros 10 10
Total 100 100
Fuente: Elaboración propia
Gráfico Nº 7
100 100
70 70
20 20
10 10
Fuente: Tabla Nº 7
Ron 35 33
Cerveza 5 5
Combinados 65 62
Total 105 100
Fuente: Elaboración propia
Gráfico Nº 8
105
100
65 62
35 33
5 5
Fuente: Tabla Nº 8
Gráfico Nº 9
105
100
74 70
25 24
6 6
Fuente: Tabla Nº 9
La nueva tendencia acerca del consumo de alcohol por los adolescentes, es que se lleve a
cabo, cada vez más, en la calle, en lugares de encuentro con los iguales, y no con
personas adultas, como lo muestran los resultados, en los cuales el 70% beben en los
espacios abiertos.
Ítem Nº 10
Lugar en los cuales se adquiere bebidas alcohólicas por parte de los adolescentes.
Tabla Nº 10
Indicadores Frecuencia (f) Porcentaje (%)
Licorerías 15 14
Tiendas de barrio 84 80
Otros 6 6
Total 105 100
Fuente: Elaboración propia
Gráfico Nº 10
105
100
84 80
15 14
6 6
Fuente: Tabla Nº 10
CONCLUSIONES Y PROPUESTA
6.1. CONCLUSIONES
6.2. PROPUESTA
La presente propuesta tiene por objeto establecer políticas públicas integrales para
prevenir el consumo y dependencia de bebidas alcohólicas, en los menores de edad.
6.2.1. Justificación de la propuesta
TÍTULO XII
DELITOS CONTRA LA SALUD DE LOS MENORES DE EDAD
CAPÍTULO ÚNICO
Expendio y comercialización de bebidas alcohólicas a menores de edad
REFERENCIAS ELECTRÓNICAS
- http://www.ordago.net/familias.asp
- http://www.cepal.org/prensa/noticias/22/09/2016
- http://leyesdecretosbolivia.blogspot.com/2014/03
ANEXO N° 1
Las áreas urbano dispersas son las más afectadas por este flagelo, debido a la
falta de control de todos los entes sociales.
ANEXO N° 3
Las plazas son entre otros los lugares en donde consumen alcohol los
menores de edad. Además la mezcla del alcohol con otras bebidas hace que
sus efectos sean muy negativos. Autoridades policiales haciendo el control
respectivo de la misma.
ANEXO N° 5
Se agradece su cooperación.
EDAD:……………………. SEXO: V M
SI NO
2. ¿Cuál es la droga legal, que más consumiste en los últimos doce meses?
4. ¿A qué lugares frecuentas para consumir bebidas alcohólicas, o en donde crees que se
consume más las bebidas?
5. ¿En dónde compras las bebidas alcohólicas o en qué lugares se puede comprar estas
bebidas?
ENTREVISTA
1.- ¿Dónde cree usted, que se origina el consumo de alcohol en los menores de edad?
2.- ¿Cree usted, que debería existir mayor control en cuanto a la venta de bebidas
alcohólicas a los menores de edad?
3.- ¿Cree usted, que los programas educativos desarrollados, han disminuido el consumo
de alcohol por parte de los menores de edad, estos últimos años?
ANEXO N° 7
ENTREVISTA
1.- ¿Cómo cree usted, poder acabar con el elevado consumo de bebidas alcohólicas por
parte de los menores de edad?
2.- ¿Cómo describe usted el consumo de bebidas alcohólicas en los menores de edad?
3.- ¿Cree usted, que el alcoholismo es considerado una enfermedad que puede ocasionar,
hasta la muerte?
4.- ¿Según su análisis, cuales son las influencias más cercanas que ocasionan el consumo
de alcohol por parte de los menores de edad?
5.- ¿Cuáles son los riesgos más peligrosos que se presentan en los adolescentes, al
consumir bebidas alcohólicas?
ANEXO N° 8
ENTREVISTA
2.- ¿Cree usted, que se van dando políticas a nivel nacional, departamental y local, para
reducir el consumo de bebidas alcohólicas en los menores de edad?
3.- ¿Qué bebidas; según su análisis son los que dan más ganancias a las empresas
dedicadas a este rubro?
4.- ¿Cree usted que las normas que rigen en nuestro país, son las adecuadas en cuanto a
la producción o fabricación de bebidas alcohólicas?
2.- ¿Cómo describe usted el consumo de bebidas alcohólicas en los menores de edad?
3.- ¿Cree usted, que el alcoholismo es considerado una enfermedad que puede ocasionar,
hasta la muerte?
4.- ¿Según su análisis, cuales son las influencias más cercanas que ocasionan el consumo
de alcohol por parte de los menores de edad?
5.- ¿Cuáles son los riesgos más peligrosos que se presentan en los adolescentes, al
consumir bebidas alcohólicas?