Estado de La Soberania Alimentaria de Ho PDF
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ALIMENTARIA DE HONDURAS
Autor:
Adolfo Martín Hurtado Díaz
Colaboradora:
Erika Brenner
Equipo Coordinador
Alba Leticia Ochoa
Ian Gabiel Díaz Raudales
Miguel Ángel Lasfuentes Calvo
Pedro Lázaro Hernández Piedra
Edición
Alexander Galdámez Bolaños
Diseño y diagramación
José David Cisneros Huezo
Agradecimientos
Aunque el producto ahora presentado ha quedado bajo mi res-
ponsabilidad en su elaboración, éste no hubiera sido posible sin
los aportes, observaciones y comentarios de la Red ADHAC de la
región en general y Honduras en particular.
Ambos, oferta y demanda, moldearon según sus caprichos, los siguientes vein-
ticinco años de “desarrollo nacional”. El decaimiento constante en la producción
nacional de hortalizas y granos básicos tuvieron como resultado una creciente
dependencia de la importación de alimentos.
Sin embargo, los mayores retos a superar, no los imponen ni el desarrollo tecno-
lógico en el campo, ni el cambio climático ni otros chivos expiatorios. Al contrario,
el primer muro a derribar es el que muchos de los que ostentan el poder han le-
vantado para ocultar al mismo sistema de siempre, ese que margina a la mayoría.
Página
INTRODUCCIÓN 14
MARCO TEÓRICO Y METODOLÓGICO 16
1. Marco teórico 16
Seguridad Alimentaria y Nutricional, Derecho humano a la Alimentación y Soberanía
1.1. 16
Alimentaria en el marco de la Cultura Alimentaria.
1.2. Territorio 17
1.3. Desarrollo Sostenible 19
1.4. Mercado 22
1.5. Sistema Alimentario Sostenible 22
2. Marco metodológico 23
I. PERFIL TERRITORIAL DE HONDURAS 32
1. Características generales de la conformación territorial de Honduras 32
2. Zonificación territorial de Honduras 33
2.1. El litoral 34
2.2. Las planicies 34
2.3. Los valles 35
2.4. Las laderas 36
CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO ACTUAL DE LA SOBERANÍA ALIMENTARIA DE
II. 38
HONDURAS
1. 1945 – 1976. Del Estado modernizador al apogeo agro exportador de los ´70 38
1.1. Gobernanza Nacional de la Soberanía Alimentaria 38
1.2. Balance de la Soberanía Alimentaria 40
2. 1976 – 1996 41
2.1. Gobernanza Nacional de la Soberanía Alimentaria 41
2.2. Balance de la Soberanía Alimentaria 42
3. 1996 – 2006 43
3.1. Gobernanza Nacional de la Soberanía Alimentaria 44
3.2. Balance de la Soberanía Alimentaria 45
4. 2006 a la actualidad: Gobernanza de las crisis alimentarias 45
4.1. Gobernanza Nacional de la Soberanía Alimentaria 46
4.2. Balance de la Soberanía Alimentaria 47
III. ESTADO ACTUAL DE LA SOBERANÍA ALIMENTARIA EN HONDURAS 49
1. Situación de la Soberanía Alimentaria en Honduras 1961 a la actualidad 49
Estado actual del desarrollo territorial y sistema alimentario, vinculado a la fortaleza y
1.1. 49
debilidades de la SobAl.
1.2. Balance de la Soberanía Alimentaria 50
1.3. Comercio Agroalimentario y TLC 52
2. Estado de la Situación SAN en Honduras 53
2.1. Elementos de la SAN vinculados a la Soberanía Alimentaria 53
2.2. Diferenciales y determinantes 53
9
Tabla 11. Variación de producción y áreas cosechadas de granos básicos. Centroamérica 1961 – 2013 119
Gráfico 1. Distribución porcentual de desnutrición crónica por tercil de nivel socioeconómico en me-
54
nores de 5 años, según país y año de encuesta
Gráfico 2. Distribución porcentual de desnutrición crónica por tercil de nivel socio-económico en me-
55
nores de 5 año, según país y año de encuesta
Gráfico 3. Población de los países de Centroamérica 1961 – 2013 104
Gráfico 4. Peso poblacional relativo de los países de Centroamérica 1961 – 2013 104
Gráfico 5. Evolución de la Población Rural en relación a la Población Total en CA. 1961 – 2013 105
Gráfico 6. Variación de áreas cosechadas entre producción de granos básicos y agroexportación tradi-
105
cional. Honduras 1961 - 2013
Gráfico 7. Variación de áreas cosechadas entre producción de granos básicos y agroexportación tradi-
106
cional. Centroamérica 1961 - 2013
Gráfico 8. Variación de producción y áreas cosechadas de granos básicos. Honduras 1961 – 2013 106
Gráfico 9. Variación de producción y áreas cosechadas de granos básicos. Centroamérica 1961 – 2013 107
Gráfico 10. Variación de rendimiento y población. Honduras 1961 – 2013 107
Gráfico 11. Variación de rendimiento y población. Centroamérica 1961 – 2013 108
Gráfico 12. Variación de producción per cápita y área cosechada de GB. Honduras 1961 – 2013 108
Gráfico 13. Variación de producción per cápita y área cosechada de GB. Centroamérica 1961 – 2013 109
Gráfico 14. Producción vegetal per cápita de Honduras. 1961 - 2013 109
Gráfico 15. Producción vegetal per cápita de Honduras (menos fruta y melones). Honduras 1961 - 2013 110
Gráfico 16. Producción animal per cápita de Honduras, por tipo de origen animal y total. Centroaméri-
110
ca 1961 - 2013
Gráfico 17. Producción animal per cápita de Honduras, por tipo de origen animal y total (Menos Vacu-
111
na). Honduras 1961 - 2013
Gráfico 18. Producción animal per cápita de Honduras, por tipo de origen animal y total (Producciones
111
de menor volumen). Honduras 1961 - 2013
Gráfico 19. Producción animal per cápita de Honduras, por tipo de productos. 1961 - 2013 112
Gráfico 20. Producción por especie animal y participación en la oferta total de proteína animal de
112
producción nacional
Gráfico 21. Rendimiento por hectárea CA y USA. 1961 – 2013 113
Gráfico 22. Variación de productividad CA y USA. 1961 – 2013 113
Gráfico 23. Estructuración de comercio Intra Regional agroalimentario de Honduras. 1961 – 2013 114
Gráfico 24. Estructuración de comercio total agroalimentario de Honduras. 1961 – 2013 114
Gráfico 25. Participación del Comercio Agroalimentario Intra Regional del comercio agroalimentario
115
total de Honduras. 1961 – 2014
Gráfico 26. Gráfico 26. Participación del Comercio Agroalimentario del comercio total agroalimentario
115
de Centroamérica. 1961 – 2013
FOTOGRAFÍAS
Foto 1. Santa Fe. +- 800 msnm. Riego limitado 35
Foto 2. Dolores Merendón. +- 1,600 msnm. Café 6000 und/mz, sin cobertura forestal 36
Foto 3. Sinuapa. +- 2,100 msnm 37
Siglas 13
ADHAC Alianza por el Derecho Humano a la Alimentación en Centroamérica
Desde inicio de la década de los 90, cuando campeaba en las políticas públicas el denominado
Consenso de Washington, los movimientos originarios, campesinos y la sociedad civil de Centro-
américa señalamos los riesgos inminentes de instrumentos públicos de espalda al conjunto de
su sociedad. Comenzamos indicando las debilidades de las políticas de tierra, la falta de estímulo
a la agricultura autóctona, campesina y familiar, así como la ejecución de un comercio agroali-
mentario internacional que no medía las consecuencias nacionales y que suponía los productos
alimentarios como una mercancía, como cualquier otra del mercado. Fuimos acrecentando la falta
de equidad de género y las debilidades que implicaban la falta de visión para un desarrollo rural
equilibrado, que respondiera a la adaptación al cambio climático, así como la carencia de una
economía social que permita revertir la exclusión provocada con respuestas tecnócratas, como la
mal denominada revolución verde.
Las crisis sucesivas vividas entre 2007 a la actualidad materializaron nuestros temores, al punto
que desestructuraron nuestro país, que a la fecha continúa buscando soluciones justas en el mar-
co de la promoción de derechos humanos. Pero aun cuando se han producido, con consecuencias
que eran evitables, diversos gobiernos de Honduras parecen seguir de espalda a una solución de
largo plazo ¿Por qué los gobiernos les han costado tanto reaccionar? ¿Por qué se han sorprendido
de consecuencias previsibles de las crisis? ¿Por qué organismos internacionales que tendrían que
servir de apoyo al desarrollo sostenible se plantean como un obstáculo?
El presente trabajo tiene como objetivos contribuir a la reflexión de cómo hemos llegado a la
situación actual, ayudar a la comprensión de la gobernabilidad conducente a las crisis vividas y
las alternativas para la reconstrucción necesaria para un desarrollo rural incluyente, integrado y
sostenible, que fortalezca la soberanía alimentaria de la región, y que proteja el país de futuros
desequilibrios del mercado agroalimentario y de otras índoles.
El Análisis del INCAP sobre la InSAN, señala tres tipos de causas para la desnutrición: i) Las causas
inmediatas, dado por las dietas inadecuadas e infecciones; ii) Las causas subyacentes resultado de
la inseguridad alimentaria, cuidado inadecuado de la madre y el niño y falta de agua y saneamien-
to y servicios de salud deficientes; iii) Causas básicas como pobreza, baja educación, marginaliza-
ción, así como los contextos sociales económicos y políticos.
En el presente estudio, se usará esta última categorización para aproximarnos a las determinantes
de la soberanía, la seguridad alimentaria y nutricional de las poblaciones centroamericanas, así
como la orientación de las acciones de las instituciones nacionales en la promoción del derecho a
la alimentación adecuada, y la potencial efectividad de sus políticas públicas.
Dicho estudio de Honduras, es continuación del estudio regional del Estado de la SobAl en CA, y
parte de cuatro otros nacionales más (Guatemala, El Salvador, Nicaragua y Costa Rica).
El documento se estructura en concordancia con el estudio regional. Cada uno de los capítulos
busca establecer criterios económicos, sociales, ambientales y culturales que permitan un desa-
rrollo territorial sostenible deseado por todas y todos.
15
El documento se organizó en cinco capítulos:
Primero.
1. Marco teórico
Cinco elementos conceptuales son relevantes para la construcción del análisis de este estudio:
Soberanía Alimentaria (SobAl), Territorio, Desarrollo, Mercado y Sistema Alimentario.
El análisis se realizó desde la comprensión de SobAl tanto como una demanda social basada en
derechos humanos, como desde los cimientos para una propuesta de desarrollo territorial inclu-
yente, integrado y sostenible, basado en una agricultura protegida de los grandes procesos que
no pueden controlarse desde lo comunitario.
El presente estudio se focaliza sobre las materias de interés de la Alianza por el Derecho Humano a
la Alimentación de Honduras (ADHAC - GT). Se pondrá atención a las orientaciones en materia de
políticas públicas relacionadas a la agenda de Soberanía Alimentaria (SobAl) y sus adecuaciones
en género, y las orientadas a las articulaciones inter institucionales tanto sectoriales como terri-
toriales.
Entre el conjunto de temas sectoriales vinculados a la promoción del Derecho Humano a la Ali-
mentación (DHA), en el marco de las responsabilidades de las institucionales nacionales señalados
en los párrafos 25 y 26 de la Observación General 12 (OG12) del Pacto Internacional de los dere-
chos Económicos Sociales y Culturales (PIDESC), nos centraremos sobre tres grandes materias:
sistema alimentario (con énfasis en producción, comercialización y acceso económico), economía
(empleo e ingreso) y ambiente (agua y recursos alimentarios). A partir de este perfil se hará la lec-
tura del estado de la SobAl, la SAN y sus determinantes, y de los instrumentos disponibles a nivel
nacional sobre los que se pueden desarrollar incidencia, para una promoción adecuada del DHA.
1.2. Territorio
Señala la Estrategia Centroamericana de Desarrollo Rural territorial 2010-2030 (ECADERT): Los “te-
rritorios, como espacios socio-geográficos construidos históricamente, están asociados a la iden-
tidad cultural de sus habitantes y comunidades” (p 4). En el marco de la gobernanza y la gober-
nabilidad, el reconocimiento de estos territorios (o espacios de interacción social), tienen como
objetivo la focalización del tratamiento de los asuntos públicos y privados en los niveles territo-
riales correspondientes, buscando mejorar la eficiencia y la eficacia de la intervención pública y
privada”.
Si partimos del hecho que las interacciones sociales presentan distintas espacialidades, dada la
multidimensionalidad de las interacciones sociales, encontramos que un mismo espacio forma
parte simultáneamente de varios territorios, lo que demanda una organización de la acción públi-
ca y privada en varios niveles territoriales.
Así, por ejemplo, una persona que se encuentre en Choluteca, se encontrará en la Ciudad de Cho-
luteca, en el Municipio de Choluteca, Departamento de Choluteca, República de Honduras, el Gol-
fo de Fonseca, en el Trópico Seco de Pacífico Mesoamericano, en Centroamérica, en América, con
todas las implicaciones que cada uno de esos territorios conlleva en lo político, lo económico, lo
social y lo ambiental, por señalar algunos sectores. Esto nos coloca frente a una doble dimensio-
nalidad, una de tipo espacial y otra de tipo sectorial.
Dada la multiplicidad de territorios que constituyen un espacio específico, se hace necesario dis-
tinguir aquel espacio en el cual queremos intervenir de aquellos que son parte y construyen este,
tanto en espacialidades mayores o menores al espacio en intervención.
Para ello, proponemos, en este estudio, el uso de territorio para referirnos al espacio/territorio en
el cual estamos interviniendo, y territorialidad, a todos los otros espacios/territorios que forman
partes constitutivas del territorio.
La materia a tratar nos da una espacialidad a intervenir. Por ejemplo, agua nos lleva a la gestión de
la cuenca y recursos en general. De ahí que para alcanzar los objetivos pretendidos (en este caso
podrían ser agua en cantidad, calidad y estabilidad suficiente), debe de abarcarse la totalidad del
espacio a ser gestionado. Si las acciones se desarrollan más allá de los límites espaciales necesa-
rios para alcanzar los resultados previstos, se tornará menos eficiente2 o ineficiente por los gastos
innecesarios y sin consecuencias realizados, generando una tasa de desperdicio de recursos dado
por la inadecuada definición espacial. Así la eficiencia, en el ámbito de la definición territorial de
las acciones públicas, implica la delimitación de los espacios de decisión a los territorios afectados
por el asunto a abordar.
Si por el contrario, la acción pública de intervención se sitúa por debajo de la espacialidad nece-
saria para el tratamiento del objeto de intervención, será imposible alcanzar los objetivos preten-
didos, sea porque algunas de las condiciones (variables) que conforman y definen esa espaciali-
dad quedan fuera (como podría ser si la cuenca alta -zona de recarga- quedara fuera del ámbito
de afectación), sea porque parte del público objetivo queda fuera del ámbito de afectación (por
Sin embargo, hay que señalar que los actores públicos y privados de un nivel territorial pueden
encontrar problemas en la eficacia de sus acciones públicas. Estos problemas pueden derivarse
por múltiples razones como debilidades de su capital humano o institucional, o ineficacias de sus
servicios por limitaciones en la disponibilidad de recursos para alcanzar la cobertura deseada,
haciendo necesario la intervención de niveles territoriales agregados que pueden contar con los
recursos necesarios. De ahí que estos niveles agregados intervienen por el principio de subsidia-
riedad4, con el objetivo de solventar la carencia, en el corto plazo, y de fortalecer y resolver estas
carencias o debilidades del espacio intervenido, en mediano y largo plazo.
La comprensión de desarrollo con el que se construye el análisis, está basada en dos de los tres
instrumentos básicos para el desarrollo de Centroamérica, a saber: el Protocolo de Tegucigalpa
como instrumento re fundante del sistema de integración, y la Alianza para el Desarrollo Sos-
3 En este estudio se entiende por eficacia como la capacidad de alcanzar resultados previstos o deseados según objetivos estipulados.
4 El principio de subsidiariedad lo podemos entender desde dos ángulos. El primero perfila la acción del Estado en lo que la sociedad
civil no puede alcanzar por sí misma. O en el caso de gobernabilidad, dispone que un asunto deba ser resuelto por la autoridad (normativa,
política o económica) más próxima al objeto abordado. En gobernabilidad territorial se da cuando unidades territoriales no son capaces de
resolver sus limitaciones por sí mismas y demandan apoyo de niveles territoriales agregados.
5 Área de Desarrollo Agrario de la Universidad Centroamericana de Nicaragua
tenible6 (ALIDES) como instrumento estructurante de las acciones tendientes al desarrollo en la
20 región (SICA/CSUCA 1998). Ambos proyectan las bases para un desarrollo incluyente, integrado y
sostenible.
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
En el artículo 3 del Protocolo de Tegucigalpa (1991), se presenta como objetivo del Sistema de
Integración Centroamericano (SICA) la realización de la integración de Centroamérica para consti-
tuirla como Región de Paz, Libertad, Democracia y Desarrollo”, estableciendo una serie de propó-
sitos vinculados al desarrollo, que fortalecerían la SobAl:
Tres años después, el SICA aprobó, en Managua, la Alianza para el Desarrollo Sostenible de Centro-
américa (ALIDES 1994), que define:
6 Para más detales ver capítulo V del estudio el Estado de la SobAl de CA.
Principios del ALIDES, concordantes con la promoción del DHA en el marco del fortalecimiento de
la SobAl: 21
El Libro de Centroamérica (SICA/CSUCA 1998), señala que ALIDES ha priorizado en las áreas políti-
cas, económicas, sociales, culturales y de medio ambiente, dentro de las que se reconocen varias
que podrán tener afectaciones en el desarrollo de la SobAl:
Políticas:
Económicas:
Sociales:
Culturales:
1.4. Mercado
De igual manera, el estudio en sus conclusiones presupone en sus propuestas de mercados que
estas deben de estar construidas en lo que podríamos denominar una bioeconomía, es decir, una
economía basada y orientada a la vida, para la comunidad humana y la naturaleza, basada en la
biodiversidad, y fundadas en principios de economía social y solidaria.
2. Marco metodológico
Para este estudio, y a partir del estudio regional, se realizaron los siguientes pasos:
1. Para el perfil territorial país, se ocupó el perfil general nacional y se adecuó nacionalmente
para mantener la coherencia en la construcción del análisis territorial.
2. Para el análisis del Estado de la Soberanía Alimentaria (Cap II y III) se levantaron los da-
tos de tres fuentes internacionales: FAO para el análisis de la autonomía alimentaria, Ban-
co Mundial para los cambios de población y SIECA (Sistema de Integración Económica de
Centroamérica) para el comercio agroalimentario. Estas instituciones internacionales tienen
la responsabilidad de gestión de información y por recopilar los datos oficiales existentes.
En caso de no existir datos oficiales, se presentan datos calculados que al ser presentados
implican reconocimiento oficial por parte de los países.
2.1. Los datos de FAO son construidos con nueve tipos de datos: datos oficiales, “Provisio-
nal Official D|ata”; Agregado (puede incluir datos oficiales, semi-oficiales, estimados o
calculados); Estimación FAO; Datos de FAO basados en una metodología de imputa-
ción; Datos calculados; Cifras no oficiales, y; Datos no disponibles;
7 http://www.fondationcarasso.org/es/definici%C3%B3n
Tabla 1. Sistema de Información de datos país de FAOSTAT. Productos agrícolas (a).
24
Tipo de Producto Producto Tipo de Producto Producto
Arroz PapasI
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Maíz YucaII
Cereales Raíces y Tubérculos
Sorgo BatatasIII
TrigoIV Raíces y tubérculosV nepVI
Leguminosas Frijoles Algodón con semilla
Azúcar de caña
Aceite, palmaVII Agroexportaciones
Bananos
tradicionales
Cultivos Oleaginosos Café verde
Anacardos, con cáscaraVIII
Maní
Melones, otros
Bananos Frutas
(incl. cantaloupe)XVII
Mangos, mangostanes
PlátanosXVIII
y guayabasXIX
Chiles, pimientos picantes,
AguacatesXXI
pimientos (verdes)XX
Hortalizas
Lechuga y achicoriaXXII PapayasXXIII
AjoXXVI NaranjasXXVII
Calabazas, zapayo,
Cítricos Fruta cítrica, nepXXXI
calabaza confiteraXXX
Pepinos, pepinillosXXXII
Toronja y pomeloXXXIII
BerenjenasXXXIV
I.
Estimación de FAO (1983; 1987; 2006; 2013).
II.
Estimación de FAO (1984-1988; 1995-1996; 2006-2013).
III.
Estimación de FAO (1974-1978; 1983-1993; 2004-2009; 2011-2013); Datos de FAO basados en una metodología de imputación (1994
2001; 2010).
IV. Estimación de FAO (1983-1990; 1992; 1994-1995; 1997-1999; 2012-2013); Datos de FAO basados en una metodología de imputación 25
(1991; 1993; 1996; 2000-2002; 2004-2011); Cifras no oficiales (1972-1978; 2003).
V. Estimación de FAO (1965-1992; 1995-1996; 1999-2003; 2006-2007; 2010; 2012-2013); Datos de FAO basados en una metodología de
primer período de reacomodo en los nuevos mercados globales (algodón, caña de azúcar y maní).
El segundo grupo es denominado granos básicos, y se encuentra conformado por los cereales
más las leguminosas, que representan el 53.8% la canasta básica alimentaria (Angel Amy 2008).
Estos macro grupos son utilizados para los análisis de balance de la soberanía alimentaria por
período histórico.
El banano como producto se encuentra en dos listas: en agroexportación tradicional por sus ca-
racterísticas socio económicas y, en frutas por su valor alimentario. Al realizarse análisis separados
donde se involucran las frutas y los denominados agroexportación, se evita la duplicidad de uso
de Información.
La información de arroz, maíz, sorgo frijoles y bananos cuentan con información oficial en toda la
serie.
Los productos de agroexportación, así como los tradicionales de granos básicos, cuentan práctica-
mente con series históricas de datos oficiales completas entre 1961-2013, a excepción de algunos
pocos períodos que se presentan cifras no oficiales; como por ejemplo el sorgo (2013).
Este análisis tiene como objetivo presentar de manera simplificada los estímulos existentes entre
el interés de fortalecimiento de la SobAl y el modelo agroexportador.
Se escogieron estos dos grupos de productos por su importancia en la discusión que nos toca.
En el caso de los granos básicos un criterio para la construcción de este grupo fue que uno de cada
cinco productores, y uno de cada diez pobladores rurales, se encuentra vinculado a la producción
de granos básicos (Baumeister 2009),
Las raíces y tubérculos, hortalizas y melones, frutas y cítricos se han dejado fuera porque agre-
garían una complejidad al análisis al intentar separar producciones de consumo nacional y de
agroexportación propiamente. Grupos de alimentos como raíces y tubérculos son alimentos ba-
ses de grupos importantes de la población del Caribe de la región.
En las gráficas históricas se presenta una con todas las producciones per cápita agroalimentarias
vegetales y se observa el comportamiento general de las producciones agroalimentarias del país.
En una segunda sólo se presentan las producciones de menor peso, para poder visualizar su com-
portamiento específico.
Con la serie histórica de producciones pecuarias se realizaron dos ejercicios semejantes al Análisis
per cápita de la producción agroalimentaria vegetal. Por un lado, se agruparon las producciones
de proteína animal por origen animal (vacuno, porcino, aves, etc.), dado que cada animal cuenta
con nichos agroecológicos específicos; y por otro lado, se agruparon la producción de proteína
por tipo de producto (láctea, cárnica o huevos).
2.3. Para los análisis de producción agroalimentaria primeria per cápita, se cruzaron los
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
3. Para el análisis de la agricultura familiar se ha utilizado las informaciones de los censos dis-
ponibles y el estudio regional realizado por FAO.
4. Para el análisis de la SAN desde una perspectiva de la SobAl hemos retomado los tres tipos
de causas para la desnutrición: i) “causas inmediatas” dado por las dietas inadecuadas e in-
fecciones; ii) “causas subyacentes” resultado de la inseguridad alimentaria, cuidado inade-
cuado de la madre y el niño y falta de agua y saneamiento y servicios de salud deficientes;
iii) “causas básicas” como pobreza, baja educación, marginalización, así como los contextos
sociales económicos y políticos. En el presente estudio, se usará esta última categorización
para aproximarnos desde la soberanía alimentaria a las determinantes de la seguridad ali-
mentaria de las poblaciones centroamericanas.
5. Para el análisis de los instrumentos de políticas públicas fueron revisados los instrumentos
vigentes.
6. Definición del marco institucional adecuado para una incidencia orientada al fortalecimien-
to de la SobAl.
8 http://www.fao.org/giews/spanish/fo/index.htm
9 http://www.fao.org/giews/spanish/cpfs/index.htm
gobernanza que tratan materia relacionada al fortalecimiento de la SobAl del país.
29
7. El estudio se completó con revisión bibliográfica existente (ver Bibliografía).
1.1. Producción
Sistema Alimentario Nutricional
1.6. Comercialización
1.7. Consumo
2.1. Económico
2. Accesibilidad
2.2. Físico
3.1. Registro del derecho de la tierra
3. Regímenes agrarios
3.2. Acceso a tierra
1. Educación Alimentaria y 1.1. Diversidad de la Dieta
Nutricional Cultural 1.2. Pautas Alimentarias
(Mantener, Adaptar y Fortalecer)
Educación
2. Políticas
2.3. Ciclo de Vida
2.4. Educación en DESC
3.1. Sectorial
3. Coordinación Inter institucional
3.2. Territorial
4. Presupuesto
5. Servicios Públicos
6. Sistema de Información
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
30
Ilustración 4. Modelo de adecuación sectorial: Organigrama institucional para la promoción del DHA
Elaboración propia a partir de la OG 12, 15 y derechos vinculados (OG 10, 13, 14, 18 y 19)
Ilustración 5. Modelo de Adecuación Sectorial - Funcional / Territorial institucional para la promoción del DHA. Organigrama de la estructura de rutinas
decisionales: De la decisión política a la transformación territorial.
Elaboración propia a partir de la OG 12, 15 y derechos vinculados (OG 10, 13, 14, 18 y 19)
El país enfrenta un relieve montañoso en torno del 60% de su territorio. Está conformado por una
serie de cordilleras de altura media, que al sur corren de sur a norte, y las formaciones montañosas
hacia el este del territorio presentan una orientación oeste a este. Esta peculiar configuración es
dada por el movimiento de las placas tectónicas, que por sus direcciones, retuercen el territorio
hondureño.
Cuenta con una extensa costa en el Caribe, pero su plataforma marítima menos profunda se en-
cuentra al este, frontera con la plataforma marítima de Nicaragua. Sus principales valles agrícolas
y fértiles, se encuentran en la cuenca baja de los ríos que desaguan en la cuenca del Caribe.
Tiene salida al Pacífico, pero con restricciones de plataforma marítima, contando con unos pocos
kilómetros de mar del Golfo de Fonseca. Cuenta con planicies en este espacio, pero abastecidas
por ríos cortos, que debido a las restricciones de altura de las montañas en esta parte del país, sus
antiguos ríos permanentes se han ido secando. Alimenta la cuenca del río Lempa, recurso de agua
vital para El Salvador.
El lado occidental de las cordilleras de Honduras10, al Pacífico, presenta un clima más seco y más
cálido que el Caribe, con un régimen de lluvia concentrado en 6 meses, provocando un período
pronunciado de déficit hídrico. Al sur de Honduras, en el Golfo de Fonseca se enfrentan las mayo-
res restricciones por altas temperatura y del denominado “trópico seco” o “corredor seco” de Cen-
troamérica11. Su grado de afectación de las restricciones hídricas se expresan por la reducción del
agua y el acceso a agua del manto friático, y con ello se producen brechas en la seguridad alimen-
taria, el mercado laboral rural y el deterioro ambiental. En la actualidad, hay una sobreexplotación
10 Para la descripción sucinta de las zonificaciones se utilizaron las informaciones contenidas en el Atlas Centroamericano de 2011 del
CCAD.
11 Este corredor seco abarca del norte de Costa Rica hasta el norte de Guatemala, en la vertiente del Pacífico.
del manto friático por las exportadoras de melón, caña y okra, lo que pone en mayor riesgo la dis-
ponibilidad futura para consumo, por reducción de volumen y contaminación de agroquímicos. 33
En la costa del Pacífico encontramos el trópico seco, o el corredor biológico seco, que abarca des-
En el lado oriental de la cordillera, hacia el Caribe, el país presenta un régimen de lluvia mayor que
en el Pacífico y clima de temperatura menor, con una regularidad mayor en la humedad y precipi-
tación a lo largo del año. Sin embargo, sus suelos son más vulnerables a la degradación que en el
Pacífico, además de enfrentar con mayor frecuencia eventos extremos provenientes del ciclo de
huracanes del Atlántico, y al contar con cuencas de mayor distancia son más sensible a desastres
ambientales por escorrentías, producto de la degradación del ambiente en la cuenca alta y media.
Aquí encontramos el corredor biológico del trópico húmedo.
El país cuenta con diversidad cultural, autóctona y sincréticas, resultado del proceso histórico de
los últimos 500 años, que se ve incrementada con la regionalidad centroamericana. Cada una ha
ido desarrollando características propias de cultura alimentaria que agregan productos locales y
traídos, con técnicas locales y traídas, que han llevado a diferentes grados de capacidad de gozar
de sus recursos alimentarios locales. Hay una diversidad cultural que ofrece una oportunidad de
aprendizajes de estrategias de sus respectivas culturas alimentarias.
ladas a la SobAl de la región: i) El litoral, ii) Las planicies; iii) Los valles; iv) Las laderas.
Suroeste Noreste
4500°
4000°
3500°
3000°
2500°
Cosecha de Agua
2000°
1500°
1000°
500°
00 msnm°
2.1. El litoral
La economía del litoral es diversa y en la actualidad cuenta con puertos, pesca, servicios y turismo.
Los manglares tienen alta sensibilidad a la calidad del agua, en cuanto a contaminación y sedi-
mentación, y a cambios significativos de los niveles del agua, por ríos que se sequen o nivel del
mar que suba. Su calidad dependerá de la calidad de la economía ambiental de las planicies que
los circundan o las laderas que los abastecen de agua.
El Caribe cuenta con una plataforma marítima mayor, y mayores recursos pesqueros que el Pací-
fico. La cuenca del Pacífico tiene serias restricciones de acceso a plataforma continental de pesca.
Las planicies son de topografía plana y aguas pocas profundas. Honduras cuenta con una planicie
corta y seca en el sur, en el golfo de Fonseca, y otra un poco mayor en su región oriental, con algu-
nas partes arables y otras no, con restricciones de selección de plantas y grados de susceptibilidad
a la degradación.
Los elementos claves de la productividad12 son: i) la factibilidad de mecanización que incide sobre
la generación de empleo por unidad de superficie disponible (a la baja) y; ii) el acceso estable a 35
agua: rendimientos y número de ciclos productivos al año, que generarán empleo dependiendo
de la economía que se le coloque: fruticultura intensificará y mecanización generará desempleo.
Los valles son formaciones intermontañas que varían en tamaño y extensión, sus áreas son mayo-
res a menores alturas. Su forma de ocupación dependerá de disponibilidad, según cuenca, altura
y orientación geográfica. Con acceso a agua, se favorecerá la producción de horticultura y tabaco
en el Pacífico y estimulará la piscicultura en el Caribe. Los valles secos propiciarán a desarrollar pe-
cuaria, que tenderán a diferenciar su capacidad de carga animal según su orientación geográfica,
siendo al este más seco y de menor carga animal, que al oeste.
El afloramiento de agua es mayor a menor altura, por lo que los espejos de agua tienden a encon-
trarse a menor altura. En las alturas medias, el manejo de microcuencas se vuelve de gran impor-
tancia en el abastecimiento de agua.
Foto 1. Santa Fe. +- 800 msnm. Riego limitado. Foto. Adolfo Hurtado.
12 Productividad de Productor(a) agropecuario = Ingreso / Superficie / Año= {[precio * (Rendimiento / superficie / año)] x (# ciclo / año)} x
{(horas / día) x {(Superficie / hora) x días disponibles}
De donde: Precio: será función de abastecimiento de la oferta, costos de transacción, información de mercado y condiciones de negociación;
Producción/Rendimiento: será expresión de la gestión de la fertilidad general y el material genético de la especia = (genes x condiciones
ambientales generales de luz, agua, nutrientes disponibles) - (condiciones ambientales generales adversas + depredadores + competido-
res); Control de unidad de superficie por persona trabajadora será resultado de la organización del sistema productivo y de las tecnologías
implementadas.
Las características de la formación de la productividad son semejantes a las de las planicies.
36
La calidad de estas aguas dependerá de las economías de las laderas y los valles por encima de
su cuenca, así como el patrón de asentamiento y el control de aguas servidas y los desechos. Su
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
uso para la producción agroalimentaria dependerá de los otros usos que se le pueda dar al agua
(como consumo humano, animal o recreativo).
Las laderas presentan diversos grados de pendientes y tienen diversas condiciones de temperatu-
ra y acceso a agua, según la altura.
En la cuenca del Pacífico, entre los 100 y 800 msnm, se presentan las restricciones pluviométricas
de las planicies del Pacífico, y las restricciones al acceso de agua se agravan por la profundidad de
las aguas. En el siglo XIX, la caficultura se instaló en este techo agroecológico.
“Zona de efecto severo: precipitación pluvial baja (800-1,200 mm/año), más de 6 meses secos, eva-
poración potencial alta, promedio mayor de 200 mm/mes, arbustales, sabana de graminoides con
arbustos deciduos, bosques deciduos con muchas especies de hojas compuestas microfoliadas”13
(van der Zee Amparo & Jaap et Al, 2012).
Las cuencas que no superan los 800 msnm de altura sufren serias restricciones de agua en los
períodos pronunciados de El Niño, y serán absolutamente vulnerables a la reducción de preci-
pitaciones de la actual tendencia del cambio climático. Situación solo atenuable a través de una
adecuada economía basada en cobertura forestal.
En la economía territorial del café se producen violaciones crónicas al DHA por causas conocidas
como el deficiente mercado laboral de la economía del café15, falta de acceso a tierra y restriccio-
nes de acceso a agua en cuencas que no sobrepasan las 800 a 1,000 msnm de altura.
El café gourmet se sitúa entre los 1,250 y 1,500 msnm en la actualidad. En el corredor seco, el te-
rritorio es considerado "Zona de efecto bajo: precipitación pluvial alta (1,600-2,000 mm/año), de
4 a 6 meses secos, evapotranspiración baja, promedio menor de 100 mm/mes, bosques deciduos,
bosques siempreverde estacional (submontano, montano y altimontano), algunos pinares, bos-
ques mixtos y bosques riberinos" (van der Zee Amparo & Jaap et Al, 2012).
El fenómeno de captación de agua es más intenso entre los 2,600 y 3,000 msnm.
14 Fenómeno físico, por el cual las corrientes de aires depositan agua recogidas a nivel del mar en las alturas.
15 El mercado laboral del café enfrenta grandes restricciones como la inestabilidad intra anual del mercado laboral, salarios deprimidos,
alta sensibilidad al cambio climático y a eventos extremos con fuerte pérdidas en volúmenes de producción, y alta sensibilidad a la variación
de precios internacionales que redundan en un deterioro de las condiciones laborales aún mayor de los trabajadores rurales.
38 II. CONSTRUCCIÓN DEL
ESTADO ACTUAL DE LA
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
SOBERANÍA ALIMENTARIA
DE HONDURAS
Honduras, al igual que el resto de los países de Centroamérica, a principios de la década de los
50 inicia su transformación agraria en el marco del modelo de la que erróneamente vendría a
denominársele “revolución verde”, caracterizado por una artificialización de la fertilidad ambiental
general, reducción de la biodiversidad y mecanización de los trabajos, basado en los modelos
tecnológicos1 europeos y norteamericanos a lo largo de los cien años anteriores. Esto trajo pro-
fundas consecuencias en deforestación, contaminación de aguas, eliminación de la biodiversidad
y expulsión social. Dicho cambio agrario produjo profundas trasformaciones en la construcción
territorial del país y en la diversificación de actores sociales, en comparación a los períodos histó-
ricos anteriores16.
Los nuevos productos de agroexportación, azúcar y algodón, se expandieron por las planicies de
Choluteca y el Valle, variando según acceso a agua / riego, con producciones de pecuaria vacuna
y ajonjolí en las zonas más secas y arroz y caña de azúcar en las más húmedas.
La producción agroalimentaria fue empujada a las laderas con accesos precarios a la tierra, lo que
llevó a prácticas extractivas que impactaban la fertilidad general del ambiente, y en particular la
fertilidad de la tierra, dada la precariedad del acceso a la tierra que permitía la planificación de uso
de unos pocos meses. El sistema alimentario hondureño se precarizó y la soberanía alimentaria se
fragilizó.
El cambio agrario provocó fuertes tensiones sociales que llevaron a la conformación del Instituto
Nacional Agrario (INA, octubre de 1961), que entre otras cosas, tenía como objetivo preparar un
proyecto de ley de reforma agraria.
Hacia finales de la década de los 60, la presión demográfica y por tierra de los salvadoreños, ha-
bía llevado a estos a ocupar como frontera agrícola los bolsones territoriales al sur de Honduras,
fronteras con El Salvador, pendiente de definición internacional a ese momento, provocando ten-
siones en la gobernanza territorial que desembocaron en el conflicto conocido en Centroamérica
como la Guerra del Futbol20. Esto resultó en una degradación del proceso de integración afectan-
do al mercado de trabajo rural que había comenzado a conformarse. El conflicto cerró el flujo de
trabajadores rurales salvadoreños hacia Honduras, lo que se señala en la base de la quiebra del
algodón en Honduras (departamentos de Choluteca y El Valle), así como la introducción y expan-
sión del cultivo de melones.
Los procesos de colonización no rindieron los resultados proyectados, Gilberto Ríos (2014) señala:
“El Instituto Nacional Agrario (INA) reportaba, en la década de 1970, que solamente 5% de los
beneficiarios originales se encontraban en las tierras adjudicadas (IHDER, 1980:22). En pocos años,
la circulación mercantil concentró esos lotes en pocos propietarios” 21. Pero las tensiones sociales
hacia el 72 demandaron más tierra. Los grupos originarios, campesinos y agricultura familiar des-
capitalizada quedaron fuera del foco de la ley de reforma agraria de 1974 (Gilberto Ríos 2014).
19 Catacamas, Olancho (1952); El Aguán, Colón (1955); OLA y Monjarás, Choluteca (1958 y 1959 respectivamente); Lean Jila, Atlántida
(1960); Guaymas y Guaymitas, Yoro (1960); San Juan Buena Vista, Cortés (1960).
20 En El Salvador, este conflicto armado y la degradación del proceso de integración, lo llevó a un incremento de la presión social, que se
fue viendo envuelto en una espiral de violencia que terminó desencadenado el conflicto armado de las décadas siguientes.
21 Ríos Gilberto; Cap. 5. Capitalismo, tierra y poder en Honduras (págs. 147 - 179) en Capitalismo: Tierra y Poder en América latina (1982 -
2012), Vol. III, 2014, pág. 149.
Hacia el final de este período las tierras más ricas del país estaban deforestadas y sus suelos y
40 aguas contaminados. Sus sistemas productivos mostraron que el combate químico a las plagas,
al igual que la violencia, se hace una espiral; se desarrollaron varias fumigaciones con bomba mo-
chila, tractor, o avioneta. Esta gestión de la fertilidad ambiental llevó a los inicios de los actuales
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Honduras inició su Programa de Alimentación Escolar en 1961 con apoyo de la Alianza para El
Progreso, con entrega de leche en polvo y mezcla de cereales. A partir de los años 70, tendría el
apoyo de CARE International, que se mantendría hasta los 90 pero sin ningún enfoque en cultura
alimentaria.
En este periodo, Honduras expande proporcionalmente sus áreas cosechadas de granos básicos
(44%) un poco más que las de áreas cosechadas de agroexportación tradicional (43%), contrario
a la tendencia de Centroamérica (26% y 40% respectivamente). La variación relativa de la produc-
ción de granos básicos (33%) es menor que la variación relativa de las áreas cosechadas. En este
momento el país tiene la expansión relativa de áreas cosechadas de granos básicos y de la produc-
ción más alta de todo el ciclo de análisis.
A pesar de la variación relativa de las áreas cosechadas del 44%, con un crecimiento de población
de 55% y una contracción en la variación de los rendimientos (-5%), la oferta per cápita de la pro-
ducción de granos básicos se contrae (-7%).
La mayor producción per cápita de Honduras superando en doble la producción per cápita de ce-
reales, está en las frutas, excepto melones, y representan a inicio del período de estudio, el 65.8%
de la producción agroalimentaria registrada de Honduras; los cereales representaban a este mo-
mento el 24.6% de la producción agroalimentaria. Todos los otros grupos alimentarios (raíces y
tubérculos, hortalizas y melones, cítricos, oleaginosas y legumbres) representaban el otro 9.6% de
la producción agroalimentaria. La oferta per cápita de frutas creció durante este período, para ter-
minar con una oferta per cápita equivalente a la de inicio del mismo. Los granos básicos (tanto de
cereales como leguminosas), así como raíces y tubérculos, se contrajeron levemente en su oferta
per cápita en este período. El incremento de hortalizas, melones y cítrico, orientado a la agroex-
portación, apenas acompañó al crecimiento de población.
En este mismo período, la oferta per cápita de proteína animal de producción nacional se incre-
mentó poco más del 10%. La producción vacuna representaba el 86.1% de la oferta proteica ani-
mal total, pero 75 puntos porcentuales de esa oferta es láctea. En este primer momento, la oferta
de proteína animal se expandió a través de la producción vacuna, tanto cárnica como láctea. Hacia
el final de este período la producción acuícola fue estimulada, y la oferta per cápita porcina co-
menzó a contraerse al final de este período (ambas con una representación menor a 5% de la ofer-
ta proteica animal total de producción nacional). La producción ovina y caprina, así como equina,
aportaban menos del 1% de la oferta proteica animal de producción nacional, experimentándose
además una contracción de la oferta per cápita nacional de carne equina y caprina22.
22 La falta de la promoción de un mercado de consumo ambientalmente adecuado, ha mantenido marginal estos productos de consumo
incentivando la ocupación inadecuada del ganado bovino en las laderas y reduciendo las opciones económicas de este segmento territorial.
2. 1976 - 1996 41
Este período es marcado por el conflicto social, producto del cambio social emergente a partir
La convulsión social y la pérdida de gobernanza de los países en torno de Honduras, llevó a una
ocupación militar de parte de los EUA en este país; con pérdida sustancial de los espacios demo-
cráticos, fragilización de la institucionalidad y pérdida de soberanía. Todo el análisis de realidad
pasó a leerse como un derivado de la guerra fría.
El posicionamiento de una visión neoliberal que comenzó a establecerse a este momento a todo
nivel, presionó a una reducción de los servicios del Estado, iniciando por afectar el sector de ser-
vicios vinculados a la producción primaria agroalimentaria. La presión por un ajuste estructural
del Estado Hondureño llevó a una contracción del aparato público, privatización de los servicios
públicos y la aplicación de reglas de un mercado insolidario y de espalda a la sociedad en su con-
junto, debilitando todo ello la cohesión social y la soberanía alimentaria del país.
23 FAO llevó a cabo este seguimiento territorial de sus proyectos de desarrollo provocando cambios importantes en la economía territorial,
adecuada al cambio climático y los eventos extremos, lo que hace el señalamiento que para estos cambios son necesarios intervenciones
sostenidas y con visión para el cambio. Pero, estas experiencias fueron ejecutadas posteriormente con fondos del Gobierno de Honduras
ejecutados por técnicos de FAO, por lo que, a final de la experiencia, por demás exitosa, el Gobierno fue incapaz de retomarla y replicarla
porque todo el conocimiento técnico e institucional, los recursos humanos y las metodologías estaban en manos de FAO y después de todo
ese período el Gobierno no fue preparado para el desarrollo sostenible de este tipo de servicios. Por ello, se perdió una oportunidad histórica,
por aproximaciones equivocados del rol de los organismos internacionales en la promoción de los DDHH en los países donde actúan. El
problema es que FAO entiende el ScalingUp de sus buenas prácticas de esta manera y no como la apropiación por parte del Estado de estas
buenas prácticas como parte de su instrumental de políticas.
2.2. Balance de la Soberanía Alimentaria
42
Según Diaz Arrivillaga, citado por Gilberto Ríos (2014, pág. 158), para 1988 se estimaba una po-
blación en torno de 2.1 millones de hondureños que vivían en las zonas de laderas del país y
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
aportaban el 66% de la producción del maíz, 80% del frijol, pero vivían con muy bajos ingresos y
con necesidad de complementación de ingresos con otras economías territoriales circundantes o
de la región.
Para 1992, que se daba por cerrado el proceso de reforma agraria, Gilberto Rio (2014, pág. 154)
señala:
En este período, proporcionalmente Honduras expandió relativamente más sus áreas de produc-
ción de agroexportación tradicional (35%) (contrario a Centroamérica que experimentaba una
contracción de las áreas cosechadas de producción de agroexportación tradicional (-2%)), que las
áreas cosechadas de granos básicos (8%) del país. La variación relativa de la producción de granos
básicos (71%) fue mayor que la variación relativa de las áreas cosechadas.
A pesar de una variación del 8% de las áreas cosechadas de granos básicos y una variación positi-
va de los rendimientos (58%), con un crecimiento de población de 79%, la oferta per cápita de la
producción de granos básicos se contrajo (-4%).
Se mantuvo la tendencia de contracción de los granos básicos, pero ahora con la oferta per cápita
de cereales en contracción en cuanto que la producción de frijoles (leguminosas), raíces y tubér-
culos, apenas acompañó el crecimiento per cápita. La oferta per cápita de frutas se contrajo a
lo largo de este período. Las hortalizas y melones se expandieron, llegando a incrementar en más
de tres la producción per cápita.
En este período, la oferta per cápita proteica animal de producción nacional se contrae a la pri-
mera mitad de los 80 para volver a expandirse en la segunda mitad, concluyendo el ciclo con una
expansión de la oferta nacional per cápita entorno de 45%. En un primer momento esta expansión
proveniente de la producción vacuna, se contrajo para retomar su crecimiento en la segunda mi-
tad de los 80, cerrando para 1996 con un incremento per cápita de la oferta poco más del 35%. El
crecimiento de la oferta se produjo fundamentalmente por la expansión de la producción láctea 43
que incrementa su participación en la oferta total en tres puntos porcentuales (74%). La oferta
per cápita de proteína avícola se expandió en la segunda parte de este período, prácticamente
3. 1996 - 2006
En este período, comenzaron a mostrarse las consecuencias del impacto ambiental que lo ha fra-
gilizado profundamente, alcanzados por el modelo de desarrollo rural escogido desde 1951 a la
fecha. Este se expresa en el deterioro ambiental derivado de la dinámica de la economía territorial
de las laderas bajas y medias: i) el café sube de cota sobre el nivel del mar sobre los bosques trans-
montanos con densidades de plantación cada vez mayores y, coberturas forestales y biodiversi-
dad cada vez menores; ii) los granos básicos suben sobre el territorio ambientalmente deteriorado
del café y el remanente boscoso en este, reduciendo la economía territorial (tanto en generación
de empleo como valor generado por unidad de superficie), acentuando el proceso de deterioro
ambiental por complemento de ingresos derivados de la cobertura boscosa; iii) el ganado sube
sobre el territorio de la economía de los granos básicos, una vez perdida la cobertura boscosa y
acentuando la fragilidad territorial a los ciclos del agua, contrayendo aún más el mercado laboral
territorial y la economía por unidad de superficie. Resultado: deforestación, violencia y migración.
Este período se caracteriza por diversos impactos por fenómenos supranacionales que no contro-
lamos. La intensidad y la extensión del impacto fueron dados por el inadecuado desarrollo territo-
rial optado desde inicio de 1951, y serán diferenciados territorial y socialmente:
• 1998-2002: Declinó del precio internacional del café y El Niño 2002, que afectó: los
mercados laborales en volumen y reducción de ingresos para los trabajares rurales
de esta economía, sufriendo consecuencias más acentuadas aquellas personas sin
acceso a tierra o familias monoparentales (en su mayoría, mujeres solas con hijos).
El deterioro del mercado laboral aunado al impacto de El Niño derivó en pérdidas
humanas por falta de acceso a la alimentación.
Cada uno de estos impactos afectó casi la totalidad de la región, dejando inoperativa la capacidad
de ayuda humanitaria regional. Esto planteó soluciones regionales que desde entonces se propo-
nen y hasta la fecha no se logran, como las reservas estratégicas de alimentos, el acceso a tierra,
una nueva economía territorial adaptada al cambio climático que revierta el deterioro alcanzado a
la fecha y una nueva ruralidad que estabilice los mercados laborales, incremente la productividad
y mejore los ingresos de las poblaciones más vulnerables.
Mitch: A este impacto, Honduras sobrevivió a la tragedia, en cuanto la ayuda no llegaba, por las
reservas de granos acumuladas en Lempira Sur, producción de la agricultura campesina que hacía
más de 10 años venía forjando un modelo de desarrollo basado en sistemas agroforestales24, que
habían duplicado sus producciones25.
Hacia el final de este período, Honduras, como parte de los esfuerzos de los países de CA en torno
de la Estrategia Regional SAN (2002), termina desarrollando la Política Agroalimentaria Rural 2004
– 2012 que entre sus objetivos estaban “la transformación del sector agroalimentario, a fin de in-
crementar de manera significativa su contribución al crecimiento económico, elevando su compe-
titividad” y “Contribuir a reducir la pobreza […] y proporcionar seguridad alimentaria al país”. Pero
el modelo propuesto presuponía la continuación del modelo seguido desde la década de los 50.
Para finales del 2005, se presentó la Política de Seguridad Alimentaria y Nutricional. Esta se cons-
truyó alineada a la Estrategia para la Reducción de la Pobreza del 2001 y articulada a la Política de
Nutrición, la del sector agroalimentario y desarrollo rural (construidas el año anterior) y la políti-
ca de competitividad. Pero como los instrumentos anteriores carecen de un adecuado reconoci-
miento de la tipología social de poblaciones vulneradas en su DHA, como por ejemplo trabajado-
res rurales de la economía del café sin acceso a tierra (y si mujer sola de familia, peor) o agricultura
agroalimentaria originaria/campesina/familiar sin acceso a tierra ni servicios (y con complemento
de ingreso dependiente de economía territorial del café, peor), así como también carece de una
El país enfrentó una variación a negativa en las áreas cosechas de granos básicos (-19%) en cuan-
to que Centroamérica la expandía en más de 12%. Sin embargo, sus áreas de agroexportación
tradicional continuaron expandiéndose (26%), relativamente más que la región centroamericana
(12%). La variación relativa de la producción de granos básicos (-22%), se contrajo más que la va-
riación relativa de las áreas cosechadas.
Con una contracción de las áreas cosechadas de granos básicos, un crecimiento de población de
23% y una contracción de los rendimientos (-3%), por tercer período consecutivo la oferta per cá-
pita de la producción de granos básicos se contrajo (-62%), teniendo la contracción más profunda
experimentada en todo el período.
La producción per cápita de cereales y frutas sigue contrayéndose, en cuanto que frijoles y raíces
y tubérculos mantienen la oferta per cápita. Al final de este período los cítricos se expanden de
manera significativa y las hortalizas y melones alcanzan al máximo de producción per cápita (pero
es orientado a la exportación y no el consumo nacional). Al final de este período la producción de
oleaginosas se vio estimulado por el mercado de biocombustible.
La oferta per cápita de proteína animal total continúa expandiéndose (+/-15%), empujado prin-
cipalmente por la producción vacuna, principalmente por la expansión de la oferta láctea y en
menor medida por la oferta de aves. Las tendencias iniciadas en la oferta de proteína animal del
período anterior, se mantienen con el incremento de la producción per cápita de aves, con peque-
ños incrementos en la producción per cápita acuícola.
Si observamos el comercio agroalimentario regional, en el marco del comercio total regional te-
nemos que en las exportaciones la producción agroindustrial tuvo una participación que pasó de
15% en 1994 a 25% hacia 2006. La producción primaria, en las exportaciones e importaciones, y
la agroindustrial en las importaciones, tendieron a mantener estable su participación relativa en
el comercio.
4. 2006 a la actualidad:
Gobernanza de las crisis alimentarias
En este período se repiten impactos de fenómenos que desde la década anterior vienen hacien-
do sentir y vivir, el inadecuado e insostenible modelo de desarrollo rural territorial, excluyente y
desarticulado del país y la región (CA4). Se trata de El Niño (2006/2007; 2009/2010: 2015/2016) y
la caída internacional del precio del café (2012/2013), con consecuencias en la deforestación y la
violencia rural. Se enfrentaron nuevos retos que vulneraron el DHA en Honduras y la región, como
46 la especulación financiera internacional sobre el precio de los alimentos (2007/2008, 2010/2011),
el incremento del precio del petróleo26 (2004/2006; 2007/2008; 2010/2014), la emergencia del
mercado de biocombustibles (2006/2008), y la recesión económica global que implicó una caída
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
en las remesas (2009/2011), dificultando aún más el acceso a los alimentos, por parte de las pobla-
ciones más vulnerables, en un contexto de incremento de precios de estos27. El resultado, según
estudios del IFPRI es que los centroamericanos pasamos a comer menos, y menos diversificado, en
ese proceso (ADHAC 2015). En Honduras la desarticulación y debilidad de su sistema alimentario
nacional y una cultura alimentaria degradada, fueron sus flancos débiles.
En 2007, el gobierno de Honduras invitó al relator especial del derecho a la alimentación, Dr Jean
Ziegler, señalando elementos centrales del deterioro del Sistema Alimentario Nacional de Hon-
duras, como la falta de políticas públicas que fortalezcan el derecho humano a la alimentación,
recomendando tener especial cuidado con los efectos de los tratados de libre comercio, los me-
canismos internacionales de supervisión de las empresas transnacionales, orientar inversiones de
desarrollo de largo plazo con efectos en el deterioro ambiental con énfasis en la gestión de agua,
y proponiendo cautela en el desarrollo del mercado de biocombustibles por sus consecuencias
en los alimentos, el agua y la tierra; y termina señalando el especial cuidado de las personas que
tienen que abandonar su lugar de origen como consecuencia de la falta de oportunidades y las
brechas de vulnerabilidades. En los adendum posteriores (2008, 2010) al informe, se expresaron
las preocupaciones por las situaciones de violencia en torno de la tierra.
A nivel regional, se asumieron una serie de acuerdos de integración vinculados a los tratados de
libre comercio, los sistemas alimentarios de la región y SAN, establecidos en una serie de acuerdos
y declaraciones de los Jefes de Estado y de Gobierno del SICA.
Pero cuando se produjo el incremento de los alimentos y la energía, Honduras presentaba una
degradación del poder de compra del salario mínimo con una pérdida de 50% entre 2001 y 2008,
al mismo tiempo que experimentaba desde 2005 el mayor índice de costo nominal de la canasta
básica alimentaria. Desde finales del 2006 a finales del 2008, los precios de los alimentos como el
frijol rojo se habían duplicado al igual que el índice del costo nominal de la canasta básica alimen-
taria (Angel 2008). Esto llevó a fuertes movilizaciones sociales reivindicativas por salarios mínimo
que al 2008 se incrementó 60%, que junto a otras demandas políticas, desestabilizó política e ins-
titucionalmente el país, desembocando en la ruptura institucional de junio del 2009, que provocó
serias dificultades de gobernabilidad y gobernanza nacional y regional que se viven hasta ahora.
Para 2010, en el proceso de reconstitución institucional, se lanza la Política Visión de País 2010-
2038 donde el abordaje de la seguridad alimentaria está orientado a la producción de alimentos, y
ese mismo año se lanza la estrategia de seguridad alimentaria y nutricional 2010-2022, buscando
reforzar el sistema agroalimentario del país.
26 No se encontraron estudios sobre los impactos de los precios del petróleo en las crisis de 1974 y 1980 equivalente a los encontrados
en la crisis de 2007-2010.
27 El incremento internacional de los precios de los alimentos se vio influenciado por múltiples factores como el incremento del precio
petróleo, variaciones incrementales en la demanda (incremento por consumo humano, consumo animal y biocombustibles), variaciones
con reducciones en la oferta (variaciones e inestabilidades climáticas), especulación financiera y comportamiento oportunistas de grandes
productores alimentarios.
Aunque en este momento se avanzó en una reorganización del modelo de intervención organi-
zado a lo largo de las cuencas, los instrumentos aún no presentan una adecuada comprensión de 47
las construcciones territoriales a lo largo de la cuenca, ni de tipologías de actores vulnerados en su
DHA ni sus determinantes resultados del modelo de desarrollo adoptado.
Ese mismo año, el Congreso de Honduras creó el Frente Parlamentario Contra el Hambre (FPcH),
asumiendo una serie de compromisos con el potencial de fortalecer la SobAl y la SAN País. Así mis-
mo, en este período, el país presentó dos Exámenes Periódicos Universales, nuevos instrumentos
orientadores en los compromisos internacionales. En ellos se establecen una serie de compromi-
sos vinculados al fortalecimiento de la SobAl. El primero en noviembre de 2010 y el segundo en
mayo de 2015.
Para 2007 los productores de granos básicos (arroz en cáscara, frijol, maíz y sorgo) representaban
más del 90% de la población rural en Honduras (Baumeister 2009). En este período, las áreas de
producción de granos básicos (17%) se expandieron relativamente más que las de agroexporta-
ción tradicional (7%). La variación relativa de la producción de granos básicos (21%), se expandió
48 más que la variación relativa de las áreas cosechadas.
Con una expansión de las áreas cosechadas de granos básicos (17%), con una variación de rendi-
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
mientos del 3% y de población de 15%, la más baja de todo el período, Honduras por única vez
tuvo un incremento positivo de la oferta de granos básicos per cápita (5%),
La producción per cápita de cereales alcanza su punto más bajo de todo el período. Las legumino-
sas apenas incrementan su oferta per cápita al igual que raíces y tubérculos.
La oferta per cápita de proteína animal siguió expandiéndose hasta 2008, para comenzar a con-
traerse a partir de 2009 hasta el 2013, que está en los registros de este estudio. Esta contracción
de la oferta se produce fundamentalmente sobre la producción vacuna, afectando tanto la pro-
ducción láctea como la cárnica. La oferta per cápita de producción avícola y porcina se estabilizó,
y la acuícola tuvo un leve incremento. Las ofertas per cápita equina y caprina continuaron contra-
yéndose. La producción ovina continuó sin estímulo y teniendo una participación por debajo del
0.005% de la oferta de proteína animal de producción nacional.
En ese período, la participación del comercio agroalimentario en el comercio total intra regional
es menos irregular que el periodo anterior. Las producciones primarias tienden a perder partici-
pación tanto en las importaciones como en las exportaciones, en cuanto que el comercio agroin-
dustrial crece en ambos ejes.
Si vemos la participación del comercio agroalimentario intra regional sobre el comercio agroali-
mentario total, encontramos que a inicio de este período la participación del comercio agroali-
mentario mantiene los niveles del final del período anterior, pero la participación del comercio
agroalimentario regional decae después del 2009, como consecuencia de la complejidad que su-
puso el colapso institucional de Honduras por la convergencia de sucesivas crisis a este momento,
provocando un efecto a contramano de las orientaciones y acuerdos de los Jefes de Estado y de
Gobierno del SICA en materia de SAN, y provocando un incremento en la vulnerabilidad país a los
eventos globales que justamente lo llevaron al colapso.
III. ESTADO ACTUAL DE LA 49
SOBERANÍA ALIMENTARIA
Frente al cambio climático, las crisis del café y el deterioro social/ambiental del modelo de desa-
rrollo rural de la mal denominada revolución verde, el actual modelo de desarrollo rural se mues-
tra agotado. Para esto, se hace necesario el desarrollo de una nueva economía territorial inclu-
yente, integrada y sostenible, que implique el desarrollo de cadenas de valor de una economía
ambiental orientada a la gestión de la fertilidad general y la diversidad, además en una cultura de
economía social y solidaria.
Honduras cuenta con 38 de los 59 productos agropecuarios con sistema de información en la re-
28 Productos que se encuentran con atención pública de alguna manera y no necesariamente los existentes en el mercado nacional.
gión, entorno del 64 % de los los de productos agroalimentarios; 4 productos son cereales, 4 raíces
50 y tubérculos, 1 leguminosas, 2 cultivos oleaginosos, 14 hortalizas, 4 cítricos y 9 frutas. No posee
ningún producto único de producción en la región. Cuenta con 7 productos que solo se producen
en otro país de la región como: el trigo, ajo y uva con Guatemala; anacardos y calabazas con El
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
A lo largo de todo el período, Honduras expandió relativamente sus áreas de cosecha de produc-
ción de agroexportación tradicional (162%), con lo que también amplió sus áreas de cosecha de
granos básicos (47%) en cuanto que Centroamérica tuvo expansión relativa y más equilibrada de
estas áreas de cosechas (granos básicos 61%, agroexportación tradicional 66%). El país consiguió
una variación relativa de la producción de granos básicos: (120%) mayor a la variación relativa de
las áreas cosechadas (47%), pero en menor medida que la región centroamericana (producción de
granos básicos 236%, área cosechada 61%).
En todo el período, el país incrementó sus áreas cosechadas de granos básicos en 47% y sus rendi-
mientos en 49%, pero su población varió en 291%, teniendo una contracción de 41% de la oferta
per cápita de granos básicos. En ningún momento de este período la variación de los rendimien-
tos superó la variación de población del país. Todo esto llevó a una gran vulnerabilidad de la go-
bernanza en Honduras, como se vio en la historia.
La oferta per cápita de proteína animal se expandió 60% a lo largo de todo el período en estudio.
Hasta mediados de los 80, la oferta fue sustentada sobre la producción vacuna que representaba
en torno del 87% de la oferta de proteína total en 1961 y poco más del 69% para 2012. Es la leche
y no la carne la mayor oferta vacuna, la oferta per cápita láctea se incrementó en torno del 50%
en todo el período y la oferta per cápita cárnica se duplicó. El incremento per cápita de la oferta
cárnica se produjo por el incremento de la producción de aves que comenzó a expandirse a finales
de los 80, y en menor medida de la oferta acuícola que incrementó a inicios del milenio, pero que
aún tiene una expresión baja en la oferta proteica (<5%). La oferta per cápita de carne, con baja
participación en la oferta de proteína animal de producción nacional, porcina (<2.5%), equina
(<0.1%) y caprina (<0.05%) contrajeron su oferta per cápita en más de la mitad.
Siendo la oferta de proteína animal poco diversificada, con más de ¾ de la producción nacional
de proteína animal recargada sobre una única especie (vacuna) y junto a la producción de aves
representan poco más del 98% de la oferta proteica animal de producción nacional. Esta cultu-
ra alimentaria reduce las oportunidades de adecuaciones ambientales de la producción animal 51
e incrementando los riesgos de vulnerabilidad ambiental por descansar en dos especies y que
privilegia una economía ambiental poco diversificada y cubierta forestalmente, así también de
La caprinocultura, de carne y leche de calidad, como lo han mostrado los diversos programas de
seguridad alimentaria y nutricional, pertinente para una economía ambiental adecuada en las
laderas, ha venido en declive a lo largo de todo el período. Otras pecuarias adecuadas para para
estas economías como el garrobo, cusuco o boa, no llegaron a establecerse de manera sostenible
en las cadenas de abastecimiento de las cadenas agroalimentarias, contando con un pobre apoyo
en la gestión de conocimiento, la promoción institucional y cultural del sistema alimentario.
Tabla5. (2013) Área de Producción de Granos: Maíz, Frijol, Arroz, Sorgo. Datos FAOSTAT & BM
fue el país que más contrajo su oferta alimentaria per cápita (-44%) al igual que Costa Rica, en este
mismo período.
Si observamos el comercio agroalimentario regional, en el marco del comercio total regional te-
nemos que la participación de la agroindustria a lo largo de todo el período, incrementó su parti-
cipación relativa, pasando de 27% de las importaciones y el 24% de las exportaciones en 1961, a
33% y 40% respectivamente en 2014.
Frente a los TLC, y el fin de las salvaguardas al 2018, los GB como el maíz enfrentarán acentuadas
diferencias de productividad tanto de rendimiento por unidad de superficie, donde Honduras
en la actualidad presenta unos rendimientos poco más del 15% del de los EUA, y una acentuada
diferencia en las relaciones de superficie por unidad de trabajadores.
2. Estado de la Situación SAN en Honduras 53
HN Fuente
Bajo Peso al Nacer 8.9 SIRSAN
Tasa de Mortalidad Infantil
Al año 21.2 SIRSAN
De 2 a los 5 años 24 SIRSAN
Desnutrición
Crónica (< 5 años) 22.6 SIRSAN
Crónica (Escolares 42.5 SIRSAN
"El retardo en talla para la edad, indicador de desnutrición crónica, es el problema más prevalente
en los países de la región" (pág. 6).
"Considerando la variabilidad inter e intra países en el patrón de crecimiento físico de niños prees-
colares, se exploraron factores que asociados al peso y la talla de los niños pueden explicar estas
diferencias" (pág. 6).
tuales mayor en el área rural que urbana. Este indicador podría considerarse como expresión de
las ineficiencias del modelo de desarrollo traído a la fecha, lo que demanda a una revisión de los
modelos de desarrollo territoriales hacia modelos más incluyentes e integrales.
"El retardo en talla en niños preescolares en relación al nivel socioeconómico de sus familias ...
incrementa conforme empeora el nivel socioeconómico, siendo las diferencias entre los grupos
extremos más marcadas en Nicaragua, Honduras, El Salvador y Panamá, en los cuales el grupo
socioeconómico menos favorecido tiene más de cuatro veces la prevalencia de retardo encontra-
da en el socio-económico más favorecido" (pág. 16). En Honduras, el grupo económico de ingre-
sos bajos presentan una incidencia del hambre al 2005, en más del 45% de su población. El grupo
de ingresos medios presentan una incidencia del hambre en su población al 2005, próxima al 30%.
Considerando el peso poblacional del grupo de ingresos medios y bajos, hace pensar que estra-
tegias de fortalecimiento de la calidad de la cultura alimentaria en general podría tener impacto,
principalmente en el área rural. Para ello, ya se cuentan con los instrumentos básicos vinculados al
Ministerio de Educación (currículo, merienda y huerto escolar). El modelo de desarrollo territorial
tendrá que enfrentar elementos de equidad, productividad y salario mínimo, así como la estabili-
dad de la oferta de empleo.
3. Procesos Globales que afectan la Soberanía 55
Alimentaria en Centroamérica
3.1.1. Petróleo
El petróleo afecta la oferta alimentaria tanto a nivel local como global, provocando un doble efec-
to de incremento de precios de los alimentos. El incremento de los precios del petróleo encarece
la producción y el transporte agroalimentario, y según el peso de la energía fósil de una sociedad,
puede tener impacto en su almacenamiento.
El cambio climático y la emergencia de nuevas tecnologías han provocado reacomodos en el mer-
56 cado energético vinculado al petróleo, provocando una caída de precio. Actualmente, este enfren-
ta baja de precios, pero en la última década su comportamiento se ha mostrado incierto.
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Entre los mecanismos para reducir o aislarnos de la vulnerabilidad a las fluctuaciones de precios
de petróleo, contamos con instrumentos como ferias campesinas y alimentarias que reducción la
distancia entre el productor y el consumidor agroalimentario, desarrollo de la producción agroali-
mentaria de los cinturones verdes de las ciudades (volumen, diversificación e inocuidad), produc-
ción agroecológica u orgánica y fortalecimiento de la cultura alimentaria.
3.1.2. Biocombustibles
En los niveles locales, la producción de biocombustibles ocupa las áreas más fértiles de la región
y de Honduras, como las planicies y grandes valles con acceso a agua, en forma de caña de azúcar
y de palma africana. De continuar con el modelo de uso intensivo de agroquímicos, que en dé-
cadas anteriores ya hemos visto cómo ha afectado la salud de los trabajadores y población, con-
taminado importantes fuentes acuíferos de consumo humano y animal hasta la historia reciente,
provocando deterioro en la calidad de la inocuidad de los alimentos y afectando el consumo y la
utilización biológica.
Para contrarrestar o protegernos de estas variaciones, las estrategias a seguir estarán íntimamente
vinculadas a las estrategias de desarrollo rural en general, y agroalimentario en particular, adecua-
do al cambio climático, más los esfuerzos nacionales y regionales orientados a fortalecer la auto-
nomía del abastecimiento de alimentos. Para protegernos a la presión por las tierras más fértiles,
deberán desarrollarse sistemas productivos vinculados a la producción agroalimentaria y otros
rubros, que incrementen la productividad por superficie y unidad de trabajador.
La especulación financiera, globalmente, dificulta el acceso a los alimentos de las poblaciones más
vulnerables por problemas de incremento de precio de la oferta. La pasada especulación financie-
ra no ha sido sanada, y mantiene al mundo en bajos niveles de crecimiento económico. Tampoco
se han resuelto los mecanismos que hicieron posible que se especulara sobre los alimentos, po-
niendo en riesgo millones de vidas de seres humanos.
Las medidas anteriormente señaladas son adecuadas para reducir los riesgos, o protegernos de
esta vulnerabilidad.
Los mecanismos necesarios para contrarrestar o protegernos de los efectos locales del mercado
de biocombustible, son igualmente útiles para enfrentar este fenómeno.
Hemos visto a lo largo del texto que el cambio climático se desarrolla sobre cuatro procesos macro
ambientales que afectarán de manera diferenciada a los perfiles territoriales de la región, por lo
que demanda aproximaciones específicas para el fortalecimiento de la SobAl.
El incremento de la temperatura se sentirá con particular rigor en las planicies del Pacífico, los
valles bajos del Pacífico y en las laderas de la misma región entre los 600 y 800 msnm. Sus efectos
dependerán de la cobertura forestal general que se alcance.
Una economía basada en cobertura forestal podría ayudar en la gestión micro localizada de la
temperatura entre 1 y 2 grados, permitiendo una ventana de 20 a 40 años de adaptación tecnoló-
gica en el proceso de incremento paulatino de temperatura del cambio climático.
pluviométricas anuales
Sus efectos dependerán de la cobertura forestal que se alcance en las laderas y los territorios de
altura, así como la gestión ambiental que se haga sobre las cuencas compartidas29 (Río Lempa, Río
Motagua/Río Moho/ Río Temash/ Río Sarstun/Bahía de Honduras) a nivel regional. Una economía
basada en cobertura forestal de 40%, puede duplicar la capacidad de almacenamiento de agua,
permitiendo contrarrestar la reducción de agua disponible en una ventana de oportunidad de
unos 50 años, buscando revertir la actual tendencia resultado de un modelo de desarrollo territo-
rial inadecuado, excluyente, desarticulado e insostenible.
La expresión de eventos extremos como El Niño generará impactos severos en los mismos territo-
rios que el incremento de temperatura y la reducción de precipitaciones, solo que con un impacto
de corto plazo más acentuado.
En cambio, La Niña, como eventos extremos huracanados, afectarán con especial rigor las plani-
cies por escorrentías, enfrentando peor la situación de las planicies del Caribe que las del Pacífico
por contar con cuencas más extensas y un mayor régimen de precipitaciones. Los eventos extre-
mos huracanados tienden a afectar el Caribe de manera directa y el Pacífico en condiciones parti-
culares, dependiendo de la dirección, velocidad de desplazamiento y tamaño de los huracanes. La
condición de los manglares será un factor de importancia del grado de impacto de los huracanes,
tanto por el impacto de las marejadas como por la salinización de fuentes de aguas próximas al
litoral.
Sus efectos se sentirán por pérdidas de producción y reservas alimentarias, terrestres y marinas,
con infraestructura deficiente. La intensidad de sus consecuencias dependerá de la cobertura fo-
restal general, principalmente de las laderas y los manglares.
La subida del mar afectará el litoral y la parte baja de la cuenca de los ríos. La intensidad de la
29 La falta de monitoreo en diferentes territorios limita la posibilidad y calidad de proyecciones más precisas, y a nivel local la información
es carente.
afectación dependerá del estado de los manglares, de las condiciones ambientales y la economía
ambiental de las laderas. Actualmente, la zona de Golfo de Fonseca presenta la mayor afectación, 59
expresándose en cambios de medios de vida de los pescadores y una tensión fronteriza perma-
nente por la necesidad de área de pesca.
Hemos visto que el proceso de liberación de los mercados en los TLC le podrá dar fuerza a de-
terminados elementos del actual modelo de desarrollo rural que no garantizan la sostenibilidad
ambiental de la región, ni el desarrollo adecuado de los objetivos contenidos en los instrumentos
regionales políticas públicas, ni en los ODS. Los TLC para convertirse en una oportunidad para
todos, como ofrecido, debe de promover las oportunidades de una nueva economía rural agroali-
mentaria de la región, como propuesto en los acápites anteriores.
En el marco de los tratados de libre comercio e integración, todas las estrategias anteriores de in-
cremento de competitividad a través de incremento de productividad (modelos SAF) y reducción
de costos de producción (modelos agroecológicos), podrán ser de vital importancia.
El fortalecimiento de la cultura alimentaria es de importancia, así como en los esfuerzos anterio-
res, como veremos en el acápite a seguir. Así también, en el marco del fortalecimiento de la cultura
alimentaria se abren oportunidades para el desarrollo de cadenas de valor corta productores /
consumidores con los “hermanos lejanos” al mismo tiempo que se les atiende culturalmente. Este
segmento social económico, relativo a la economía nacional, es un público importante a conside-
rar.
• Las tensiones del Golfo de Fonseca derivada de condiciones de InSAN por inadecua-
da gestión ambiental.
Pero además los procesos de integración demandan el fortalecimiento de las cadenas de valor
en cadenas de mercado justo y de economía social solidaria. En esta estrategia la tecnología de
comunicación será fundamental para agilizar y estabilizar las cadenas de productores / consu-
midores, así como para reducir los costos y transparentar el mercado a los pequeños y medios
productores, transformadores y consumidores.
Al momento que se concluye este informe dos megaproyectos, de impacto en la región, están en
marcha: El canal seco de Honduras, con su infraestructura de carretera en estado bastante avanza-
do, e inicio de la construcción de un canal húmedo en Nicaragua.
De producirse la construcción del canal de Nicaragua, y con el avance el canal seco de Honduras,
es casi una certeza que el desarrollo rural regional actual no lo sustenta. Y es sobre este modelo
rural, que ya es inviable desde hace décadas, que se abren oportunidades de cambios importan-
tes, pero que demandarán una acción concertada en visión y acción del conjunto de los actores
vinculados al desarrollo rural. Para Honduras, podrá implicar tres potenciales impactos.
El impacto del Gran Canal de Nicaragua en el precio de la mano de obra rural, al ser esta absorbida
por la industria de la construcción (en el primer ciclo de expansión del mercado de mano de obra)
y posteriormente por mano de obra del canal y su economía adyacente, así como el desarrollo
de nuevas industrias de maquilas (en el segundo ciclo de expansión de mano de obra). Un ciclo
que parece empezar con las primeras obras de ingeniería a iniciarse pronto a los próximos 15 a 20
años.
El incremento del costo de mano de obra puede volverse una amenaza o una oportunidad. De-
penderá si siguen primando los criterios de la revolución verde que han primado hasta ahora de
mecanización, simplificación de la biodiversidad y eliminación forestal, o si se establecerán nue-
vos criterios para el desarrollo rural como intensificación por unidad de superficie, basado en la
biodiversidad y en la cobertura forestal. En el modelo actual, un incremento de la mano de obra 61
producto de los megaproyectos generará quiebra en las economías de baja productividad como
la del café, la naciente economía del cacao o granos básicos, así como impactará las intensivas en
Entre las consecuencias de la construcción del canal, estará el adensamiento poblacional en torno
de la cuenca. Esto podrá venirse a producir tanto por movimiento intra regional de población y
de nuevas poblaciones traídas por el canal, lo que podrá llevar con muchas probabilidades a la
emergencia de nuevos patrones de consumo al mismo tiempo que se incrementará el volumen y
la calidad de la demanda.
Estos nuevos mercados agroalimentarios podrían volverse en una oportunidad económica, cultu-
ral y ambiental.
4.3.3. Potencial tercer impacto: sobre los actuales esfuerzos de continuación del mo-
delo de desarrollo rural actual
GOBERNABILIDAD Y
GOBERNANZA PARA LA
SOBERANÍA ALIMENTARIA
1. Característica de la Gobernabilidad de la
Soberanía Alimentaria en Honduras
Honduras no cuenta con un sistema nacional institucional orientado a tratar la soberanía alimen-
taria; pero cuenta con una institucionalidad para la SAN y un conjunto de instrumentos de polí-
ticas públicas vinculadas al fortalecimiento de la materia de soberanía alimentaria, como se verá
en este capítulo. Para ello el país posee una Ley SAN e instrumentos de políticas públicas como Vi-
sión de País 2010-2038 y su Plan de Nación 2010-2022, que orientan el conjunto de instrumentos
públicos y presupuesto y Estrategia Nacional de SAN. Veremos las adecuaciones institucionales
existentes vinculadas a la materia de soberanía alimentaria de este estudio.
Además, cuenta con una serie de compromisos internacionales en materia de derechos humanos
en general y de derecho a la alimentación adecuada en particular, que también permiten el forta-
lecimiento de la SobAl.
El país tiene un Informe especial del DHA presentado en marzo de 2008, que cuenta con un aden-
dum de junio del mismo año y un segundo adendum de 2010. En ellos se hacen diversas recomen-
daciones vinculadas al fortalecimiento de la Soberanía alimentaria en diversas materias.
Vinculadas al sistema Alimentario:
• R.77.b) […] los acuerdos comerciales internacionales, no tendrá efectos negati-
vos en el derecho a la alimentación en otros países [...]; 63
• (R.77.c) Los Estados deberían perfeccionar los mecanismos internacionales de
supervisión de las empresas transnacionales, sobre todo de aquellas que controlan
En el adendum del 2010 (párrs. 17-20) se expresa la preocupación por el estado de violencia por la
tierra en el Bajo Aguán, conflicto que se mantiene hasta la fecha.
2.2.1. Resumen preparado por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones
Unidas para los Derechos Humanos
En el informe país, resumen preparado por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas
para los Derechos Humanos de Honduras (2015), se hacen diversos señalamientos vinculados al
fortalecimiento de la SobAl. En el informe de compromisos en materia de DDHH asumido por
Honduras y recopilado por la Oficina del Alto Comisionado de los DDHH (2015) encontramos:
(prf 56) La Relatora Especial sobre la violencia contra la mujer indicó que la flagrante mayo-
ría de quienes llevaban a cabo un trabajo mal pagado, a tiempo parcial o inseguro
eran mujeres30;
(prf 57) El CERD observó que las condiciones de pobreza y exclusión social afectaban inten-
samente a los pueblos indígenas y comunidades afrohondureñas. Exhortó a Hon-
duras a implementar políticas de inclusión social y de desarrollo que redujeran los
niveles de desigualdad y pobreza. Asimismo, recomendó romper el vínculo entre
pobreza y racismo31;
(prf 124.4) "Aprobar nuevas medidas concretas para aplicar el Plan Nacional de Acción en
Derechos Humanos de 2013 [...]" acordado por el gobierno de Honduras (párr.
125.9).
(prf 124.9) “Implementar de manera efectiva el Plan de Igualdad y Equidad de Género 2010 -
2022, mediante la asignación de recursos técnicos y financieros para alcanzar los
objetivos previstos”.
(prf 124.10) “Implicar más activamente a la sociedad civil en la elaboración de políticas, estra-
tegias y planes de acción nacionales de derechos humanos”.
(A.3) Promover la inclusión del enfoque del Derecho a la Alimentación en los procesos
legislativos;
Lo que se vuelve materia de gestión para los distintos esfuerzos de desarrollar estrategias y políti-
cas regionales SAN, haciéndose énfasis en la necesidad de un enfoque de igualdad y equidad de
género como orientado en el acuerdo 17 de la RO XXXVI.
Como consecuencias de este acuerdo, las metas de los distintos objetivos quedan vinculadas a las
diversas materias vinculadas al fortalecimiento de la SobAl que veremos a seguir (ver Anexo II en
este documento).
El acuerdo 2.a contiene elementos a considerar en una aproximación de SAN y sistema alimen-
tario, así como San y desarrollo territorial. Esta orientación tiene implicaciones regionales con el
conjunto de mandatos que se han orientado. El acuerdo 12 de la Reunión Ordinaria XXXVII orienta
a “Preparar y ejecutar un sistema regional de producción y abastecimiento de granos e insumos
agropecuarios que considere los programas que cada país ejecuta, con el objetivo de apuntalar
la economía regional, contribuir a la seguridad alimentaria y lograr la sustentabilidad del sector
agropecuario”, lo que viene a reforzar la orientación del acuerdo 34 de la RO XXXII donde los Jefes
de Estado y de Gobierno resaltan “la importancia del mercado regional y de la profundización del
proceso de integración económica centroamericana, ... consideramos la importancia de fortalecer
la complementariedad económica regional y la coordinación interinstitucional a nivel nacional y
regional e instruimos a las autoridades competentes de los países centroamericanos a promover
la adopción de - políticas de fomento productivo, que estén acordes con los compromisos regio- 67
nales e internacionales.”
Pero estos cambios deben de producirse considerando los riesgos, como establece el acuerdo 2.6
de la REO de agosto del 2012:
En el acuerdo 6 de la XLII Reunión Ordinaria del SICA, celebrada en Panamá en diciembre de 2013,
se instruye “al Consejo de Ministros de Integración Económica, que continúe su avance en la pro-
fundización de la integración económica centroamericana, la facilitación del comercio intrarregio-
nal, la unión aduanera y la preparación de la región para aprovechar los acuerdos económicos y
comerciales con terceros países y bloques regionales”. Esto es particularmente importante consi-
derando el levantamiento de las últimas salvaguardas del TLC en 2018.
El segundo rol orientado para la educación es “promover el desarrollo de los recursos humanos,
y mejora de los servicios nacionales básicos y de protección social, que permita una mayor gene-
ración de empleo y fortalezca la oferta de recursos humanos” (RO XXXIX A 20), así como prestar
atención a las enfermedades crónicas no transmisibles (XXXVII A 15) que son una expresión tardía
de la vulnerabilidad de la SAN en la primera infancia.
3.3. Orientaciones en el marco de la economía
68
La seguridad alimentaria en el marco de la economía, considerando los determinantes económi-
cos de la SAN como la baja productividad y mercados laborales imperfectos (estacionales y no
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Asimismo, esta línea se ve fortalecida a través de los esfuerzos regionales de desarrollo de un tu-
rismo regional sostenible (XXII A 1; RO XXXVII A 21 y 22), así como el apoyo del desarrollo de las
MIPYMES (XXXVII A 18), que en este contexto y en el marco de la orientación general de la reunión
extraordinaria de agosto de 2012, debe de interpretarse como el desarrollo de una agroindustria
asentada en la cultura alimentaria y los recursos alimentarios de la región, colocándose el turismo
como una oportunidad en estos esfuerzos.
Siendo Centroamérica una de las regiones más afectada a nivel mundial por los impactos del cam-
bio climático, los jefes de estado y de gobierno han orientado a una gestión integral del riesgo en
el marco del cambio climático. Esto es particularmente importante, porque los sistemas alimenta-
rios nacionales se han reconfigurado territorialmente en las últimas décadas habiéndose produci-
do un movimiento productivo del pacífico al caribe, pero manteniendo una alta dependencia del
régimen de lluvia para su abastecimiento de agua y su producción.
Y todo lo anterior debe de permitir una gestión integral de las crisis que asegure la SAN, como
señala el acuerdo 2.b. de la Reunión Extraordinaria de Managua de agosto del 2012:
El FOPREL cuenta con diversas resoluciones y leyes marco temáticas que son de interés para la
incidencia de la SobAl:
a. Ley Marco Regional sobre el derecho humano a una alimentación y nutrición adecua-
da escolar;
b. Ley Marco Regional sobre el derecho humano al agua potable y saneamiento; RO
XXXII34
c. Resolución V Reunión de la Comisión Interparlamentaria de Medio Ambiente y Cam-
bio Climático35 del FOPREL.
34 http://www.foprel.com/images/stories/resoluciones2015/Untitled003.pdf
35 http://www.foprel.com/images/stories/resoluciones/16-6-2014/Resolucion V Reunión de la Comisión Interparlamentaria de Medio
Ambiente y Cambio Climático del FOPREL.pdf
La ley marco SSAN Educación permite la incidencia sobre un tema crucial en el fortalecimiento de
70 la SobAl: la cultura alimentaria, y establece la adecuación del ejecutivo a seguirse. La comprensión
de esta ley y sus implicaciones, así como su incidencia a través de los FPcH nacionales, podrían dar
el soporte de largo plazo para la SobAl al permitir el enfoque generacional. En su capítulo V de
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
La ley marco Regional SAN de Educación (Ver Anexo III), se establecen una serie de criterios con-
cordantes para el fortalecimiento de la SobAl a través de los instrumentos educativos existentes
como el currículo, los huertos escolares, la merienda escolar y compra locales de alimentos.
El artículo 15, en el marco de los tratados de libre comercio y del modelo de desarrollo agroali-
mentario de los últimos 65 años, se cierne como un riesgo para la SobAl del país. Por lo que la
incidencia sobre los instrumentos públicos deberá prestar atención a la focalización territorial de
estos y a los determinantes del desarrollo (SobAl) que vulneran la SAN.
Para los fines del acceso social a los alimentos, como es propuesto por el artículo 16 de la Ley SAN,
sería imprescindible el concurso de la Secretaría de Educación en estas líneas de política, pero a 71
la fecha no está.
La Ley SAN carece de elementos de economía, siendo que una de las mayores vulnerabilidades
la seguridad alimentaria y la soberanía alimentaria de Honduras es la baja productividad general
con salarios mínimos por debajo de las necesidades.
5.2. Visión de País 2010-2038, Plan de Nación y la Estrategia Nacional SAN 2010-
2022
Visión de país: Imagen objetivo de las características sociales, políticas y económicas que el país
deberá alcanzar, mediante la ejecución de los sucesivos planes de nación y planes de gobierno
consistentes entre sí, que describa las aspiraciones sociales en cada área y que establezca para
cada ciclo de 28 años.
Plan de Nación: Documento que recoge los ejes estratégicos que atienden los desafíos que en-
frenta la nación, y alrededor de los cuales debe ejecutarse la acción pública y privada que se en-
camina al cumplimiento de los objetivos intermedios de la visión de país. El plan de nación se
formula para un periodo de 12 años.
Medida 1.4 Incorporar la sostenibilidad económica, social y ambiental como requisito fun-
damental de toda acción SAN.
Medida 3.2 Mejora al acceso a los medios de producción comunitaria, como ser: sistemas
comunitarios de cosecha de agua, riego, producción de alimentos, post cose-
cha, almacenaje, distribución, mercados, generación alternativa de energía lim-
pia; capacitación integral y transferencia de tecnologías que sean sostenibles,
eficientes, replicables, sencillos, innovadores y de bajo costo con especial énfa-
sis en los pequeños agricultores.
Medida 4.3 Mejora al acceso a los medios de producción como fundamento para la re-
activación económica de las familias y sus comunidades, basados en los Pla-
nes de Desarrollo Regional y Local.
Medida 4.6 Creación de una red nacional de centros de capacitación y formación téc-
nica y empresarial para jóvenes emprendedores, madres solteras, discapa-
citados y personas de la tercera edad como un espacio formal de capacita-
ción integral que fortalezca sus capacidades personales, desarrolle en ellos
habilidades técnicas más competitivas, y asegure trabajos productivos que
permitan ingresos sostenibles, y favorezcan la igualdad de oportunidades
en los espacios de participación social y económica.
Medida 4.9 Mejora de la infraestructura vial primaria y secundaria como requisito fun-
damental para asegurar el acceso oportuno a los alimentos y el acceso a los
mercados.
Medida 4.11 Mantener una reserva permanente de granos básicos que permita reducir
los niveles de especulación, reaccionar en caso de desabastecimiento y coo-
perar con asistencia en caso de emergencia nacional. Esta reserva debe ser
administrada por el Instituto Hondureño de Mercadeo Agrícola (IHMA).
Medida 4.12 Mantener el Programa de Merienda Escolar como una red de protección social
nacional, bajo los principios de participación comunitaria, auditoria social, pro-
ductividad local, eficiencia en el gasto, cobertura universal, valor nutricional/
proteico y respeto a la cultura local.
Medida 5.1 Incorporar al sistema de educación formal y las escuelas de padres, las cam-
pañas de educación nutricional, distribución de los alimentos en el hogar, la
inocuidad de los alimentos y la revalorización de los patrones de consumo local
con alto valor nutricional.
Medida 5.3 Fortalecimiento de los sistemas locales de Control de Alimentos con el fin de
enseñar a la población la importancia del cumplimiento de la normativa sobre
la inocuidad de alimentos.
Medida 6.3 Crear programas de sustitución de estufas de leña convencionales por ecológi-
cas y siembra masiva bosques de leña, que den prioridad a la protección de las
áreas de cultivo en mayor riesgo climático (sequias o inundaciones), las laderas
y las cuencas hidrográficas.
Medida 6.5 Crear un programa de Restauración ecológica y Productiva del recurso forestal,
que promueva la generación de empleos rurales en el rubro de servicios am-
bientales.
Medida 6.6 Fomentar la inserción de todo proyecto productivo en los mecanismos de de-
sarrollo limpio (MDL), bonos de carbono, eficiencia energética, utilización de
fuentes alternas de energía limpia y conservación ambiental.
El desarrollo del mercado forestal está visualizado en la disponibilidad, pero su mayor impacto se
podría situar en incremento general de la productividad del trabajo y la superficie limitada, abrien-
do posibilidades de mejoras en los salarios mínimos. Contribuyendo a la seguridad alimentaria de
esta manera. Como instrumento vinculado a la soberanía, fortalece la gestión del agua y las poten-
ciales ganancias de capacidad de riego si este incremento de la disponibilidad de agua es transfe-
rido, aunque sea en parte, al incremento de la producción de alimentos, aumentando la produc-
tividad por unidad de superficie y trabajador y reduciendo los riesgos de vulnerabilidad climática
por escasez como por exceso de agua. El mercado forestal nuevamente es retomado en la estabili-
74 dad de los alimentos, y siempre con referencias en su impacto en el acceso a través del incremento
del ingreso y de la productividad.
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Al estar Visión País y la ENSAN organizados en torno de la gestión territorial de cuencas, podrá
facilitar la emergencia y desarrollo de BP de nuevas economías ambientales.
Medida 1.1 Incorporar órganos de vigilancia social a toda actividad SAN como mecanismo
de generación de transparencia y corresponsabilidad ciudadana.
Medida 1.3
e) Para la Gobernanza y la gobernabilidad:
El Código Municipal 134-90 de Honduras permite a los gobiernos locales acciones en diversas ma-
terias vinculadas a la promoción del DHA y SobAl, como se observa en la matriz que se presenta
en el anexo III.2.
El código permite una base de diálogo / articulación entre las acciones municipales y las accio-
nes nacionales. Así también, permite las adecuaciones territoriales de la gobernanza municipal a
través de diversas asociaciones de municipios funcionales a sus objetivos de desarrollo. Esto hace
que los espacios de asociaciones/mancomunidades municipales se presenten como una platafor-
ma de diálogo adecuado para la territorialización de las políticas públicas derivadas de Visión de
País y vinculadas a la ENSAN.
El gráfico resultante, considerando el modelo institucional del PIDESC y sus observaciones gene-
rales propuesto en la metodología, es posible percibir que los instrumentos y la institucionalidad
necesaria para un SINASSAN ya existe.
Esa institucionalidad necesaria para la promoción de la SobAl y SAN es posible articularla. Ahora,
el reto está en poder promover una visión de desarrollo territorial incluyente, integrada y soste-
nible que revierta los fallos y debilidades del actual modelo de desarrollo rural y agroalimentario.
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
76
PROPUESTAS
Considerando los grandes procesos globales y regionales que nos impactan, las estrategias para
fortalecer el sistema alimentario nacional y regional deben considerar: la adecuación de nuestra
economía agroalimentaria al cambio climático; la necesidad de aislar la producción agroalimen-
taria de la matriz del petróleo; las vulnerabilidades de estos sistemas alimentarios frente al TLC,
buscando aprovechar las oportunidades que se abren en la reorganización institucional regional
como resultado del mismo y el mercado cultural de centroamericanos en EUA, para desarrollar un
sistema alimentario incluyente, integrado y sostenible. De esta manera se respondería adecuada-
mente al acuerdo 2.b de los Jefes de Estado & de Gobierno del SICA de la Reunión Extraordinaria
del 8 de agosto del 2012.
La sostenibilidad del sistema alimentario propuesto para Honduras y Centroamérica pasa por la
construcción de un desarrollo rural incluyente, integrado y sostenible, basado en una agricultura
protegida de los grandes procesos globales que no controlamos y que han vulnerado, en historia
reciente, el derecho humano la alimentación de los centroamericanos y centroamericanas.
La sostenibilidad social se busca construir a través de los criterios de inclusión donde se presta
atención a adecuadas construcciones étnicas y de género en las opciones a desarrollar, con opor-
tunidades a las generaciones jóvenes. Así también, se presta atención a los elementos estructura-
les de la pobreza del sistema alimentario.
Se propone:
• Incluyente:
- Atención a las necesidades de las mujeres y jóvenes, y atención a mayores;
- Enfoque estructural de desarrollo, que fortalezca los derechos de las poblaciones actualmente
vulneradas, eliminando o atenuando las actuales determinantes.
• Integral:
- Articulación de decisiones de Producción / transformación / mercado;
- Articulación de decisiones economía / ambiente / cultura, como una sola de múltiples efectos;
- Articulaciones sociales, económicas y ambientales rural / urbano.
• Sostenible:
- Adaptado territorialmente y al cambio climático;
- Adecuadas culturalmente;
- Protegidos de los procesos globales que vulneran el DAA y que no dominamos
- Agricultura protegida de los grandes procesos globales que no controlamos36:
• Agroecológica y orgánica;
36 y que han vulnerado, en historia reciente, el derecho humano la alimentación de los centroamericanos y centroamericanas.
• Inteligencia de mercado e instrumentos públicos incluyentes;
79
• Productividad y tecnologías adecuadas;
Y entre sus características generales tendría que presentar: De bajo impacto ambiental, o revier-
tan las áreas ambientalmente deterioradas (biodiversidad, agua, tierra y aire -fertilidad general de
los ecosistemas); Uso justo y sostenible de los recursos naturales, sociales y humanos; Productos
disponibles y accesibles de forma estable, nutritivos e inocuos; Estructurados en cadenas de valor
de mercados justos y solidarios; Parte de un estilo de vida saludable.
Los diversos criterios para el desarrollo de BP para un DTIIS, conformarán las agendas de inciden-
cia en los diversos niveles territoriales del conjunto de actores del país interesados en la promo-
ción del DHA con el fortalecimiento de la SobAl y SAN.
El cambio climático demanda una adecuada gestión de la cobertura forestal, agua y suelos, lo que
demanda una economía ambiental distinta a la desarrollada los últimos 65 años.
Son elementos técnicos claves para enfrentar los eventos extremos: su frecuencia e inten-
sidad.
• Variación de frecuencia de Niñas > escorrentía, desastres: Biodiversidad, cobertura
vegetal, mercados de servicios ambientales economía ambiental, sistemas de alma-
cenamiento;
• Variación de frecuencia de Niños > sequías: Biodiversidad, manejo de cuenca, cober-
80 tura vegetal / servicios ambientales / economía ambiental, manejo micro localizado
de humedad;
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Elementos técnicos claves para enfrentar la subida del nivel del mar:
• Salinización de Suelos: Biodiversidad y cosecha de agua, como fincas de la Alianza de
Mujeres Rurales que ya enfrentan este problema;
• Pérdida de biomasa marina: Acuicultura rural, biodiversidad y agricultura costera;
• Salinización de las fuentes de agua: cobertura forestal en las laderas y territorios altos
y biodiversidad;
• Cobertura forestal en las laderas.
En las acciones de desarrollo territorial tendría que haber un manejo de cuencas para definir eco-
nomías ambientales pertinentes en cada nivel de la cuenca.
Así mismo, el incremento de la producción total general de alimentos debe ser concordante con
los otros procesos globales, donde la gestión de la fertilidad local es central.
Los modelos productivos, que se enfoquen en la mejoría sostenible de la fertilidad local (como los
modelos agroecológicos u orgánicos, entre otros), traerán consecuencias en una mayor calidad
37 En el trópico seco se recomienda el enterramiento de agua, que reduzca o elimine la evapotranspiración, ya que en el trópico seco la
evapo-transpiración potencial es mayor que las precipitaciones anuales, porque almacenamiento con espejos de agua (pequeñas represas)
generan pérdidas significativas de agua en los períodos de mayores restricciones.
38 Ancho, largo y alto
39 Presentación “Sistemas de producción agroforestal y la ERAS en CA”, IX Reunión del Comité Consultivo Interagencial, CCAD, marzo 2009
en la producción de alimentos, en el aislamiento del petróleo, protección de fuentes de agua e
incremento de la resistencia y resilencia a eventos extremos ambientales y económicos. 81
a) La Disponibilidad
En este marco de esfuerzos, los sistemas agroforestales han demostrado, incrementos en la fertili-
dad como se observa en la tabla SAF impactando de manera positiva en la estructura de costo de
los productores (según datos presentados por FAO40 en Centroamérica).
40 idem
41 Carrazón 2008 en el resumen ejecutivo de su estudio señala que “se estiman necesarias ocho manzanas (5,6 ha) para que una familia
pueda mantener una mínima producción de granos básicos bajo manejo tradicional, considerando dos años de trabajo en cada parcela y
14 años de descanso. Bajo manejo agroforestal, la misma parcela se puede mantener produciendo un promedio de 10 años y el período de
descanso se reduce a menos de cinco años, lo que reduce la superficie necesaria por familia a dos manzanas (1,4 ha)”.
b) El Acceso
82
Habría que estabilizar el acceso (empleo e ingreso), sobre todo en comunidades afectadas por los
fenómenos del cambio climático y las situadas en el trópico seco con cuencas que no sobrepasan
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
c) La Estabilidad
Para esta estrategia, la Alianza para el Desarrollo Sostenible (ALIDES)42, es el instrumento más ade-
cuado para la orientación de la incidencia regional. El tema de los ingresos es de prioridad y pre-
senta un alto interés en todos los países.
Tabla 7. Criterios para una agenda SAN & Desarrollo en el contexto de cambio climático en CA
42 Según la Corte Centroamericana de justicia, el ALIDES, es un instrumento vinculante para los países del SICA.
Cobertura vegetal; Laderas;
Reducción de disponibilidad
Reducción de precipi-
de agua gestión micro localizada de humedad/
agua, estructuración de suelos
Planicie y, valles bajos y medio
del pacífico
83
taciones
Biodiversidad, gestión micro localizada
Reducción de Biomasa de humedad/agua, estructuración de Laderas
Para la gestión ambiental en el marco del cambio climático y la SAN, se hace necesario establecer
los criterios necesarios para enfrentar cada uno de los procesos que forman parte del cambio cli-
mático y cómo afecta potencialmente cada una de las zonas agrarias del país. La tabla 5 presenta
el resumen de las opciones derivadas del análisis anterior, y como se aprecia, las laderas son áreas
particularmente sensibles al proceso de cambio climático, demandando una nueva economía am-
biental.
El modelo de desarrollo agropecuario y rural seguido hasta ahora, ha tenido como resultado que
el productor de alimentos sea el que más padece de riesgo de inseguridad alimentaria. Al ser la
región mesoamericana la base de 2/5 del germoplasma alimentario global (maíz, frijol, tomate,
calabazas, chiles y pimiento verde, entre otros), lo que parece una tragedia individual para los
pequeños productores, en el marco del cambio climático toma dimensiones globales. Este germo-
plasma es genéticamente conservado y dinamizado43 por los pequeños productores, en las últi-
mas décadas descapitalizados y mal alimentados. Así, cualquier propuesta de desarrollo nacional
y regional, tiene que pasar por el desarrollo de mecanismos de integración y capitalización de este
segmento socioeconómico a través del desarrollo de mercados incluyentes y justos en el marco
de una economía social solidaria. Esto podría darse con mecanismos como: i) Producción agroali-
mentaria limpia y protegida; ii) Capacitación de productores investigadores para la limpieza de las
semillas criollas; iiI) Modernización de las leyes de producción y comercio de semillas para el desa-
rrollo de semillas criollas certificadas de alta productividad; iv) Desarrollo de nichos de mercados
(servicios alimentarios de las nuevas cadenas agroindustriales, mercados “nostálgicos” accesibles
por el TLC, denominación de origen, entre otros); v) Alineación de la gestión de conocimiento de
las universidades e institutos técnicos especializados a las necesidades nacionales y regionales.
43 Estos pequeños productores dan continuidad a más de 4,500 años de antropización de la biota alimentaria que ha dado como resultado
las denominadas semillas criollas, sobre las que las grandes empresas productoras de semillas trabajan sus denominadas semillas mejoradas.
84 En el capítulo IV hemos presentado los criterios para las buenas prácticas para el diálogo regional
y con los gobiernos nacionales, en el marco de los mandatos de los jefes de estado y de gobierno
del SICA, para la SAN y el fortalecimiento de la SobAl, así como los instrumentos nacionales. No
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
se debe de perder de vista la atención del cambio rural, y como señala el Prof. Baumeister (2009),
uno de cada cinco productores, y uno de cada diez pobladores rurales, se encuentra vinculado a
la producción de granos básicos. Y como hemos visto, la población rural es una parte importante
de la sociedad de CA, por lo que los productores de granos básicos al 2009 representaban arriba
del 40% de la población de Honduras. Considerando estas características sociales y su alta con-
centración en la economía de las laderas, la promoción masiva de sistemas agroforestales y sus
respectivos encadenamientos de valor, podría convertirse en la ruta corta de incremento de pro-
ductividad de la producción de granos básicos de la región y a mediano plazo del desarrollo de la
seguridad social para el sector rural.
Posibles rutas:
• La agroecología como producción y manejo de la fertilidad general de los recursos
naturales a través de formas de organización y acción social colectiva, mediante pro-
puestas de desarrollo participativo desde los ámbitos de la producción y la circula-
ción de sus productos, buscando establecer formas de producción y consumo que
contribuyan a encarar la crisis ecológica y social, y con ello a restaurar el curso altera-
do de la co-evolución social y ecológica
• Dar herramientas (educación, análisis y desarrollo de mercados, y gestión ambiental)
que permita aprovechar de manera sostenible el potencial económico de mercado
de los productos del bosque, desarrollado en sus fincas (frutas, medicinales, orquí-
deas, helechos, flores, agroturismo, venta de agua, mercado forestal, entre otros).
Esta propuesta parte del presupuesto que es posible reproducir el modelo de gestión
ambiental marino, terminando con el actual modelo excluyente de las comunidades
locales que no han encontrado a la fecha un espacio de desarrollo social a través de la
gestión sostenible de su ambiente.
Para responder a las posibles rutas señaladas, pueden perfilarse tres modelos posibles de sistemas
agroforestales (SAF) y silvopastoriles. Que como señalan Lara-Estara y Zamora (2013) “El cambio
global y la competencia por el uso del suelo amenazan la prevalencia de los ecosistemas existen-
tes. Modelos de desarrollo sostenible que promueven la implementación de sistemas de produc-
ción que favorezcan la conservación de ecosistemas y fortalezcan la resiliencia de los agricultores
han sido identificados y promovidos.”
Para responder a las posibles rutas señaladas, pueden perfilarse tres modelos posibles de sistemas
agroforestales (SAF) y silvopastoriles. Los tres modelos que se presentan a seguir, no son excluyen-
tes. Un mismo sistema agroforestal o agrosilvopastoril puede responder a más de uno de los tres
tipos presentados. También debe de considerarse que el desarrollo de los SAF en Centroamérica,
por parte de la sociedad civil y FAO, han demostrado incrementos significativos en las productivi-
dades y producciones de granos básicos, así como en cosecha de agua. El reto para el desarrollo
de cada modelo, según la altura en las laderas, dependerá de la optimización del uso de la luz, el
agua y el suelo.
2.3.1. Modelo de Sistema Agro forestal o Silvopastoril I. Expandir hacia 85
afuera la biota de las áreas protegidas
Aquí las oportunidades podrían ser basadas en la demanda creciente de los mercados de:
• Turismo;
• Sistema alimentario en cambio climático;
• Mercado forestal a futuro;
• Recuperación de fuentes proteicas de calidad coherentes con las condiciones agro-
ecológicas como garrobos, cusucos o armadillos y boas.
Para ello es necesario saber tres cosas para la focalización de las buenas prácticas y la inci-
dencia:
a) ¿Qué productos del bosque pueden ser desarrollados en un ambiente antropizado
basado en modelos de biodiversidad?;
b) ¿Cuáles productos tienen importancia de mercado? Análisis y desarrollo de merca-
dos.
c) Coherencia en el marco normativo y de la agenda regional conjunta.
Para esto una zonificación territorial en el marco de la ECADERT, podría ser de apoyo para la orien-
tación de las acciones conjuntas.
Los mercados bioenergéticos hasta la fecha se han presentado para la sociedad centroamerica-
na en general y para la población rural en particular, como una amenaza a su calidad de vida
y oportunidades de desarrollo. Actualmente, estos mercados presentan las inadecuaciones del
desarrollo territorial que la economía mecanizada de la planicie y grandes valles bajos del Pacífico
de los últimos casi 70 años, siendo un nuevo instrumento de simplificación de la biodiversidad y
de extensificación del trabajo rural.
Esta economía es particularmente de interés para las laderas, con prioridad entre los 100 y 600
msnm, con fuertes restricciones estacionales de agua y de acceso a agua para riego.
Aquí las oportunidades están basadas en la demanda creciente de los mercados de:
• Bioenergía: producción de materiales de construcción de barro; biomasa para ter-
moeléctrica; transformación de alimentos;
• Materiales de construcción para el sector turístico y con una arquitectura basada en
barro, fibras, horcones, madera;
• Desarrollo de tecnologías de biocombustible basadas en productos forestales.
Además de las preguntas planteadas anteriormente sobre la definición de la composición de los
86 SAF para la definición de las buenas prácticas agroforestales para este mercado, es necesario foca-
lizar los territorios (ordenamiento territorial) por mercados energéticos ya existentes y potenciales
de la región.
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Este sistema productivo, además de los mercados anteriormente señalados, accede al de fruticul-
tura, con potencialidades de diversificación en la transformación.
La fruticultura, SAF y la horticultura tienen el potencial de intensificar las economías de las plani-
cies y los valles, tanto las del Pacífico como las del Caribe. Estos sistemas agroforestales y silvopas-
toriles pueden beneficiarse de riego, incrementando la producción, la productividad y estabilizan-
do los mercados laborales a lo largo del año. Este modelo de economía ambiental potencialmente
podría revertir los efectos de expulsión social y extensificación del empleo del modelo de desa-
rrollo rural seguido hasta ahora en las planicies y los valles grandes44. Esta economía debe de ser
multifuncional (diversos mercados), como las anteriormente propuestas.
Así por ejemplo bovino y ovinos son demandantes de pastos en áreas deforestadas, en cuanto
los caprinos ramonean en áreas forestadas. Los primeros demandarán áreas específicas para la
producción de sus alimentos en competencia con el área para la producción alimentaria humana,
en cuanto que los caprinos pueden adaptarse en sistemas silvopastoriles multipropósito. De ahí
que en una economía de ladera podamos señalar la caprinocultura como más adecuada que la
bovinocultura y ovinocultura.
Otro ejemplo que podría señalarse podría ser entre la producción de ovino y porcinos (de meta-
bolismo rápido demandante de agua y sensible a la temperatura, y baja tasa de transformación de
alimento) y la producción de garrobos y boas (de metabolismo lento poco demandante de agua
44 Dadas las condiciones topográficas planas y la racionalidad económica predominante en este territorio, es posible que este modelo siga
la mecanización de las cosechas como en las fincas productoras de frutas del mediterráneo europeo.
45 La PACA está programada con fecha límite para el 2017.
46 Opinión no compartida por los grupos vegetarianos.
y adaptados a altas temperaturas, y alta tasa de transformación de alimento). De ahí que en un
ambiente caluroso y seco podamos señalar la producción de iguanas/garrobos y boas como más 87
adecuada que la bovinocultura y porcinocultura.
Donde:
• biomasa bruta se entiende aquí como la producción total de biomasa del ecosistema;
• biomasa neta se entiende aquí como la biomasa resultante luego del consumo hu-
mano de biomasa.
Espacios disponibles para biomasa intocable o fija (maderas preciosas + árboles de interés am-
biental): áreas de protección, áreas con riesgo de desastre y microcuencas.
Espacios disponibles para biomasa productiva: Cercas (maderas preciosas) + Parcelas (Frutales,
bioenergía y/o forestal).
Los frutales podrían tener estrategias múltiples y atender mercados diversos a lo largo de su ciclo
de desarrollo.
88
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Si tomamos el ejemplo del Trifinio del Rio Lempa, podríamos decir que:
• El café ofrece un empleo cada dos manzanas en dos meses;
• El cacao agrega un empleo cada dos manzanas cuatro meses más al año (en condi-
ciones del trópico seco del Pacífico en sus laderas entre 400 y 1250 msnm); y todo el
año (en condiciones de riego), como en los valles y las planicies, con acceso a agua
El potencial del desarrollo de riego en las planicies con fruticultura perenne, podría a lo largo del
año estabilizar el empleo entre dos trabajadores por manzana en los modelos más intensivos, a
un trabajador cada dos manzanas en los menos intensivos, en la producción primaria, más los
empleos generados por la transformación. 89
En las laderas bajas podrán estabilizar sus mercados laborales en torno de un trabajador cada
La cultura alimentaria es fundamental para promover los cambios necesarios para la nueva rura-
lidad y la producción agroalimentaria para protegernos del cambio climático, de los cambios de
precio del petróleo y de la especulación financiera internacional sobre los precios de los alimentos.
Los actuales esfuerzos de educación sobre SobAl y SAN en la región enfocados en lo nutricional,
y las consecuencias que hemos visto durante las pasadas crisis de los alimentos, con impactos
negativos en la cantidad y diversidad de las dietas de las poblaciones más vulnerables, plantean
la necesidad del desarrollo de la cultura alimentaria en torno de tres líneas: i) mejorar el aprove-
chamiento de los alimentos existentes a los cuales las familias y comunidades tienen acceso, ii)
mejorar el aprovechamiento de la biota alimentaria local y iii) regular el consumo de productos
“chatarra” y bienes no necesarios. Los medios de comunicación masiva y las empresas farmacéuti-
cas han sido aliadas en la promoción del consumo inadecuados de alimentos, que han reforzado
47 http://www.consumoresponsable.org/criterios/index
las actuales debilidades de la cultura alimentaria48 y la salud.
90
3.1. Mejor aprovechamiento de los alimentos existentes
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Las pasadas crisis pusieron en evidencia deficiencias en nuestra cultura alimentaria actual. Hubo
dificultades para optimizar los recursos alimentarios disponibles y obstáculos, simbólicas o reales,
de poderse pasar de un tipo de alimento a otro.
Podría construirse el indicador de Calidad de la Cultura Alimentaria Local (Nutrición) de los Patro-
nes Alimentarios (PA):
Este indicador, junto al de la vinculación de los patrones alimentarios a la biota local, permitiría
aproximarnos a la adecuación de la cultura alimentaria en el marco de la SobAl.
48 No es raro que el consumo de productos carbonatados, “moderno, urbano” y baratos, incida en el crecimiento de la niñez diabética u
obesa para lo cual los medicamentos alópatas ya están definidos. Una salud preventiva basada en una buena alimentación sería más huma-
na, democrática y barata.
3.2. Mejor aprovechamiento de la biota alimentaria local
91
Frente a las variaciones de precios, una amplia gama de personas quedó vulnerable a padecer
hambre dada la rigidez de sus opciones alimentarias, que en las últimas décadas han sufrido una
Frente al cambio climático, la biota alimentaria local existente será fundamental como parte de las
estrategias adaptativas de las poblaciones. Primero, porque esa biota alimentaria reúne más de
3,000 años de presión antrópica y reúne esa memoria en sus genes. Segundo, porque al estar dis-
ponible a corta distancia, elimina los efectos del precio del transporte (petróleo) en el precio de los
alimentos. Tercero, porque diversifica las opciones alimenticias, lo que resulta en un mayor rango
de adaptabilidad a eventuales oscilaciones de disponibilidad y acceso a los alimentos. Por eso la
cultura alimentaria debe de reconocer la biota alimentaria local en cuanto a su gestión sostenible,
estacionalidad, transformación y potencial almacenamiento.
Patrón Alimentario
Honduras
El actual proceso de integración económica de Centroamérica, junto a los procesos de tratados
y acuerdos de libre comercio (regionales y nacionales), así como los actuales procesos de ade-
cuación y optimización de la cooperación, hace necesario la adecuación de las representaciones
sociales en el nivel regional (SICA). Por lo que es recomendable que las estrategias nacionales
de incidencia vayan simultánea al acompañamiento de los procesos homólogos regionales. Para
ellos, las redes nacionales que consigan la representación regional, podrán acompañar estos ins-
trumentos a través de su registro en el Comité Consultivo del SICA.
Con el marco político institucional con el que cuenta actualmente el país para la promoción de
la SAN, se presentan elementos que hacen posible el fortalecimiento de la SobAl y con ello de la
SAN, con un enfoque integral de desarrollo. La desapropiación de 100 mil ha de tierras al narco-
tráfico, dan una oportunidad histórica en el país para una reforma agraria orientada al desarrollo
y fortalecimiento de un sistema alimentario sostenible, pero que demanda una serie de acuerdos
políticos entre el gobierno y la sociedad civil.
El diálogo con el FPcH debería estar a fortalecer el conjunto de la adecuación institucional para
el fortalecimiento de la SobAl de Honduras, a través de la concordancia de los compromisos ad-
quiridos por el FPcH, los compromisos de nación en materia de DHA y los instrumentos públicos
nacionales.
49 Este modelo podría servir como respuesta a las necesidades de reservas físicas de alimentos.
• Normar Ley SAN;
• Reforma agraria sobre tierras desapropiadas al narcotráfico: público objetivo: productores 93
agroalimentarios (originarias(os), campesinas(os) y familiares),
• Fortalecer las orientaciones hacia las determinantes del desarrollo sobre la SAN, la cultura
alimentaria y las adecuaciones territoriales;
• Fortalecer la aproximación por ciclo de vida, SSAN y desarrollo;
• Adecuación y articulación territorial;
• Sistema estratégico de almacenamiento de alimentos orientado a un sistema de almacena-
miento escalonado: familias productoras, municipios, regiones, país, Centroamérica.
Sistema de Información:
En las últimas décadas la región y el país, se han enfrentado a diversas crisis que amenazan el
DHA de segmentos importantes de la población. El gobierno del país y los respectivos gobiernos
de la región han desarrollado diversos instrumentos nacionales y regionales para reducir estas
vulnerabilidades, pero en última instancia, sus esfuerzos han sido demasiado lentos y en diversos
casos superficiales, incluyendo la adaptación al cambio climático y su mitigación. Es crucial que se
produzca conocimiento científico más solidario y socialmente negociado sobre la cuestión con el
fin de crear los cambios en el desarrollo rural necesarios para hacer frente a las vulnerabilidades
que enfrenta el DHA.
La extensión y la calidad de la gestión de conocimiento necesario para la promoción del DHA con
el fortalecimiento de la SobAl, demanda la formación de alianzas entre los actores de la sociedad
civil y la academia.
Estos esfuerzos pueden realizarse en el marco de los diferentes consejos y redes de universidades
existentes en el país, interesados, y con acciones en la materia50.
El objetivo general podría ser el reforzar la capacidad de la ADHAC y los investigadores univer-
sitarios, para producir nuevos enfoques conceptuales de la SobAl y SAN para la promoción de
la SobAl a partir de los nuevos marcos institucionales (nacionales y regionales) con impacto en
la reducción de la desnutrición crónica y la vulnerabilidad nacional al DHA por debilidades de la
soberanía alimentaria, resultado de deficiencias del modelo de desarrollo seguido y de procesos
políticos, económicos y ambientales que no controlamos.
50 Se agradece a la Universidad Rafael Landívar por el apoyo brindado a través del Dr. Marchetti en las reflexiones brindadas en general y
por este acápite en particular.
política para las recomendaciones de política de precisión;
iv. Desarrollar propuestas para fortalecer el comercio nacional e intrarregional de ali- 95
mentos nutritivos mediante el fortalecimiento de cadenas agroalimentarias sociales
y de solidaridad, entre las organizaciones de productores y consumidores locales, na-
Será necesaria una aproximación desde por lo menos cuatro enfoques teóricos-metodoló-
gicos:
i. Sistemas alimentarios sostenibles. Enfoque orientado al actor dentro de múltiples
análisis de la cadena alimentaria y de valor, que debe evaluar la dimensión territorial
y las dinámicas de las relaciones de poder económico y político;
ii. SAN, centrado en temas de disponibilidad, estabilidad, acceso, consumo y utilización
biológica de los alimentos;
iii. Derechos humanos relacionadas a la alimentación y el agua. Focalización: poblacio-
nes vulneradas (derecho humano a la alimentación) como resultado de diversas defi-
ciencias en los derechos al trabajo, educación, seguridad social y salud, además de las
directamente vinculadas al sistema alimentario y agua;
iv. Sub-alterar los sistemas alimentarios de los pueblos originarios y campesinos con sus
potenciales económicos, sociales y culturales. Argumento: el acceso a recursos por
parte de los grupos más vulnerados tendrá resultados inmediatos en la SAN.
El reto será un enfoque más interdisciplinario de la teoría de los sistemas alimentarios, a fin de
incorporar los puntos de SAN y teorías alternativas para sistemas alimentarios sostenibles, a partir
de un desarrollo territorial incluyente, integrado y sostenible.
Producción
• Estudiar el conjunto de las cadenas de valor en su relación con la tipología de siste-
mas de producción y de actores agroalimentarios;
• Análisis comparativo de la eficiencia y la eficacia de los diferentes modelos socioeco-
nómicos y agrotecnológicos por tipo de productores/transformadores y los sistemas
propuestos de producción.
Transformación
• Modelización de Tipología de sistemas de producción y actores económicos, y sus
sinergias con las cadenas de valor relacionadas.
Mercados
• Análisis de las normativas del mercado agroalimentario regional y nacionales para el
comercio;
• Análisis de oportunidades en la atención a la cultura alimentaria de poblaciones mi-
grantes centroamericanos en los EUA, en el marco de sus sistemas alimentarios y ca-
denas de valor.
Consumo
• Fortalecimiento de los espacios que promueven el consumo alimentario cultural;
• Análisis del potencial de mercado y nutricional de los productos tradicionales.
Política
• En concordancia con el segundo acuerdo de la reunión extraordinaria de los jefes
de Estado del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) 8/2012, ratificado
en el primer acuerdo de la reunión ordinaria XL del SICA, que estableció las líneas
generales de las nuevas políticas de seguridad alimentaria y nutricional, se analizarán
los instrumentos públicos disponibles en los diferentes niveles territoriales para el
desarrollo y fortalecimiento de un sistema alimentario sostenible, con énfasis en el
fortalecimiento de una cultura alimentaria adecuada y de una gestión sostenible del
medio ambiente. 97
i. la salud económica,
ii. uso alimentario / utilización,
iii. la educación / subjetividad,
iv. sociales,
v. étnica,
vi. disponibilidad comida regional,
vii. diversificación productiva,
viii. estrategia de vida diversidad
ix. diversidad, cadena de valor y la gobernabilidad,
x. diversidad cestas de consumo,
xi. mapas de zonas de vida,
xii. diversidad de activos vida
xiii. calidad y la cultura del consumo nutricional,
xvi. agua,
xv. el suelo,
xvi. la intensidad del uso de energía,
xvii. el balance de energía de carbono,
xviii. la creación de redes territoriales,
xix. BP) nivel de la ciencia y la tecnología y las mejores prácticas. La investigación va a
generar estos indicadores con la participación territorial y aplicarlos en los
diversos niveles.
ADHAC, un actor con intereses para la realización de una incidencia para la promoción de un siste-
ma alimentario sostenible, podrá tener como rol la orientación y solicitud de investigaciones que
refuercen estos procesos de incidencia. Así como también dará soporte a las universidades en el
diálogo con las bases de los actores que conforman las ADHAC nacionales.
Así también ADHAC será responsable de facilitar, donde sea necesario y posible, los mecanismos
de diálogo entre los espacios públicos y privados en los que actúa la alianza.
La o las universidades podrán dar soporte a los trabajos interdisciplinarios en los territorios que
registran los niveles más altos de desigualdad, pobreza extrema y desnutrición crónica en el país.
Serán responsables de los estudios académicos en el país y la región, así como de las coordinacio-
nes inter institucionales de la misma academia.
98 BIBLIOGRAFÍA
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
• FOPREL; Declaración de los Presidentes de los Poderes Legislativos; Compromiso por Ley mar-
co SSAN; junio de 2009;
• FOPREL; Ley Marco Regional SSAN: Educación, 2013
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4. Estudios
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Anexo I. Población
Los gráficos son elaboración propia a partir de Banco Mundial.
Gráfico 8. Variación de producción y áreas cosechadas de granos básicos, Honduras. 1961 – 2013
107
Gráfico 10. Variación de rendimientos de granos básicos y población. Honduras 1961 – 2013
108
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Gráfico 11. Variación de rendimiento de granos básicos y de población. Centroamérica. 1961 – 2013
Gráfico 12. Variación de producción per cápita y área cosechada de GB. Honduras 1961 – 2013
109
Gráfico 16. Producción animal per cápita de Honduras, por tipo de origen animal y total. 1961 - 2013
111
18. Producción animal per cápita de Honduras, por tipo de origen animal y total
(Producciones de menor volumen). 1961 - 2013
112
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Gráfico 19. Producción animal per cápita de Honduras, por tipo de productos. 1961 – 2013
Gráfico 20. Producción por especie animal y participación en la oferta total de proteína animal
de producción nacional. 1961 - 2013
113
Gráfico 23. Estructuración de comercio Intra Regional agroalimentario de Honduras. 1961 – 2013
Gráfico 26. Participación del Comercio Agroalimentrio del comercio total agroalimentario de
Centroamérica. 1961 – 2013
116 2. Tablas
Las tablas son elaboración propia a partir de FAOSTAT.
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
Papas X X X X X 5
Yuca X X X X X 5
Batatas X X 4
Raíces y Tubérculos
Raíces y tubérculos nep X 3
Yautia 2
Ñames 1
Frijoles X X X X X 5
Leguminosas
Haba X 1
Aceite, palma X X X X 4
Manzanas X X X 3
Frutas Aguacates X X X X 4
Papayas X X X X 4
Uvas X X 2
Fresas X X 2
Bayas nep X 1
Tomates, frescos X X X X X 5
Cebollas, secas X X X X X 5
Bananos X X X X 4
Plátanos X X X X X 5
Chiles, pimientos picantes, pimientos
X X X X 4
(verdes)
Lechuga y achicoria X X X 3
Coliflor y brécol X X X 3
Ajo X X 2
Zanahorias y nabos X X X 3
Hortalizas
Judías, verdes X X 2
Guisantes, verdes X 1
Hortalizas leguminosas nep X 1
Gombo X 1
Calabazas, zapayo, calabaza confitera X 2
Pepinos, pepinillos X X X 3
Berenjenas X X X 2
Maíz verde X 1
Alcachofas X X 1
Espárragos X 1
Espinacas X 1
Cebollas, chalotes, verdes X 1
Puerros y otras aliáceas X 1
Sub Total de variedades de productos 15 14 9 6 18 24
Total de variedades de productos 42 38 29 18 43 59
% de # de Producto en relación al total regional de variedades de
71 64 49 31 73
productos
Productos únicos 7 2 8
2 países con ese producto 6 7 3 6
Tabla 9. Tabla de producciones agroalimentarias pecuaria de los países de CA. Registro FAOSTAT.
118
Vacuna X X X X X 5
Ovina X X X X X 5
Caprina X X X X X 5
Carnes Porcina X X X X X 5
Aviar X X X X X 5
Equina X X X 3
Pescado X X X X X 5
Sub Total de variedades de productos 7 7 6 7 6 7
Granos
PC GB (ton) Población (ha) Rto Población Pc GB/ AC GB/ VARIACIÓN VARIACIÓN
Básicos
Honduras Inicio Final Inicio Final Inicio Final Inicio Final PC-pc AC PB PC PC AC Rto Pob PC AC
1961-1976 359.685 490.806 370,818 534.516 0,97 0,92 2.069.085 3.204.880 0,17 0,15 0,18 0,17 36% 44% -5% 55% -12% -7%
1976-1996 490.806 837.744 534.516 578.468 0,92 1,45 3.204.880 5.723.639 0,15 0,15 0,17 0,10 71% 8% 58% 79% -4% -39%
1996-2006 837.744 654.757 578.468 466.180 1,45 1,40 5.723.639 7.037.428 0,15 0,09 0,10 0,07 -22% -19% -3% 23% -36% -34%
2006-2013 654.757 789.570 466.180 544.700 1,40 1,45 7.037.428 8.097.688 0,09 0,10 0,07 0,07 21% 17% 3% 15% 5% 2%
1961-2013 359.685 789.570 370.018 544.700 0,97 1,45 2.069.085 8.097.688 0,17 0,10 0,18 0,07 120% 47% 49% 291% -44% -62%
Tabla 11. Variación de producción y áreas cosechadas de granos básicos, Centroamérica. 1961 – 2013
Centroamérica Inicio Final Inicio Final Inicio Final Inicio Final PC-pc AC PB PC PC AC Rto Pob PC AC
1961-1976 1.639.685 2.718.173 1.855.417 2.343.492 0,88 0,16 12.393.078 18.872.564 0,13 0,14 0,15 0,12 66% 26% 31% 52% 9% -17%
1976-1996 2.718.173 3.944.128 2.343.492 2.432.513 0,16 1,64 18.872.564 30.068.248 0,14 0,13 0,12 0,08 47% 4% 42% 59% -8% -35%
1996-2006 3.944.128 4.384.504 2.432.513 2.750.609 1,64 1,59 0.068.248 36.046.914 0,13 0,12 0,08 0,08 10% 13% -3% 20% -8% -6%
2006-2013 4.384.504 5.510.900 2.750.609 2.996.190 1,59 1,84 36.046.914 40.858.989 0,12 0,13 0,08 0,07 26% 9% 15% 13% 11% -4%
1961-2013 1.639.685 5.510.900 1.855.417 2.996.190 0,88 1,59 12.393.078 40.858.989 0,13 0,13 0,15 0,07 236% 61% 108% 230% 2% -51%
• Crear marcos normativos sólidos en los planos nacional, regional e internacional, sobre la base
de estrategias de desarrollo en favor de los pobres que tengan en cuenta las cuestiones de
género, a fin de apoyar la inversión acelerada en medidas para erradicar la pobreza.
Objetivo 2: Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y 121
promover la agricultura sostenible.
• Para 2030, lograr el acceso universal y equitativo al agua potable, a un precio asequible para
todos
• Para 2030, lograr el acceso equitativo a servicios de saneamiento e higiene adecuados para
todos y poner fin a la defecación al aire libre, prestando especial atención a las necesidades de
las mujeres y las niñas y las personas en situaciones vulnerables;
• Para 2030, poner en práctica la gestión integrada de los recursos hídricos a todos los niveles,
incluso mediante la cooperación transfronteriza, según proceda;
• Para 2020, proteger y restablecer los ecosistemas relacionados con el agua, incluidos los
bosques, las montañas, los humedales, los ríos, los acuíferos y los lagos.
• Para 2030, reducir a la mitad el desperdicio mundial de alimentos per cápita en la venta al por
menor y a nivel de los consumidores y reducir las pérdidas de alimentos en las cadenas de
producción y distribución, incluidas las pérdidas posteriores a las cosechas.
• Para 2020, lograr la gestión ecológicamente racional de los productos químicos y de todos
los desechos a lo largo de su ciclo de vida, de conformidad con los marcos internacionales
convenidos, y reducir de manera significativa su liberación a la atmósfera, el agua y el suelo a
fin de reducir al mínimo sus efectos adversos en la salud humana y el medio ambiente.
Objetivo 13: Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
Objetivo 14: Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos
para el desarrollo sostenible.
• Para 2025, prevenir y reducir de manera significativa la contaminación marina de todo tipo, en
particular la contaminación producida por actividades realizadas en tierra firme, incluidos los
detritos marinos y la contaminación por nutrientes;
• Para 2020, gestionar y proteger de manera sostenible los ecosistemas marinos y costeros con
miras a evitar efectos nocivos importantes, incluso mediante el fortalecimiento de su resiliencia,
y adoptar medidas para restaurarlos con objeto de restablecer la salud y la productividad de
los océanos;
• Para 2020, reglamentar eficazmente la explotación pesquera y poner fin a la pesca excesiva,
la pesca ilegal, la pesca no declarada y no reglamentada y las prácticas de pesca destructivas,
y aplicar planes de gestión con fundamento científico a fin de restablecer las poblaciones de
peces en el plazo más breve posible, por lo menos a niveles que puedan producir el máximo
rendimiento sostenible de acuerdo con sus características biológicas;
• Facilitar el acceso de los pescadores artesanales en pequeña escala a los recursos marinos y
los mercados;
• Mejorar la conservación y el uso sostenible de los océanos y sus recursos aplicando el derecho
internacional reflejado en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, que
proporciona el marco jurídico para la conservación y la utilización sostenible de los océanos
y sus recursos, como se recuerda en el párrafo 158 del documento «El futuro que queremos».
Objetivo 15: Promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, luchar contra la
desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y frenar la pérdida de la diversidad
biológica.
• Para 2020, promover la gestión sostenible de todos los tipos de bosques, poner fin a la 123
deforestación, recuperar los bosques degradados e incrementar la forestación y la reforestación
a nivel mundial;
• Para 2030, poner fin a todas las formas de malnutrición, incluso logrando, a más tardar en 2025,
las metas convenidas internacionalmente sobre el retraso del crecimiento y la emaciación de
los niños menores de 5 años, y abordar las necesidades de nutrición de las adolescentes, las
mujeres embarazadas y lactantes y las personas de edad.
• Para 2030, asegurar el acceso en condiciones de igualdad para todos los hombres y las mujeres
a una formación técnica, profesional y superior de calidad, incluida la enseñanza universitaria;
• Para 2030, aumentar sustancialmente el número de jóvenes y adultos que tienen las
competencias necesarias, en particular técnicas y profesionales, para acceder al empleo, el
trabajo decente y el emprendimiento;
• Para 2030, garantizar que todos los jóvenes y al menos una proporción sustancial de los
adultos, tanto hombres como mujeres, tengan competencias de lectura, escritura y aritmética;
• Para 2030, garantizar que todos los alumnos adquieran los conocimientos teóricos y prácticos
necesarios para promover el desarrollo sostenible, entre otras cosas mediante la educación
para el desarrollo sostenible y la adopción de estilos de vida sostenibles, los derechos
humanos, la igualdad entre los géneros, la promoción de una cultura de paz y no violencia, la
ciudadanía mundial y la valoración de la diversidad cultural y de la contribución de la cultura
124 al desarrollo sostenible, entre otros medios.
• Para 2030, velar por que las personas de todo el mundo tengan información y conocimientos
pertinentes para el desarrollo sostenible y los estilos de vida en armonía con la naturaleza.
Objetivo 13: Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
• Para 2030, erradicar la pobreza extrema para todas las personas en el mundo, actualmente
medida por un ingreso por persona inferior a 1,25 dólares de los Estados Unidos al día;
• Para 2030, reducir al menos a la mitad la proporción de hombres, mujeres y niños de todas
las edades que viven en la pobreza en todas sus dimensiones con arreglo a las definiciones
nacionales;
• Crear marcos normativos sólidos en los planos nacional, regional e internacional, sobre la base
de estrategias de desarrollo en favor de los pobres que tengan en cuenta las cuestiones de
género, a fin de apoyar la inversión acelerada en medidas para erradicar la pobreza.
• Para 2030, poner fin al hambre y asegurar el acceso de todas las personas, en particular los
pobres y las personas en situaciones vulnerables, incluidos los lactantes, a una alimentación
sana, nutritiva y suficiente durante todo el año;
• Para 2030, duplicar la productividad agrícola y los ingresos de los productores de alimentos
en pequeña escala, en particular las mujeres, los pueblos indígenas, los agricultores familiares,
los pastores y los pescadores, entre otras cosas mediante un acceso seguro y equitativo a
las tierras, a otros recursos de producción e insumos, conocimientos, servicios financieros,
mercados y oportunidades para la generación de valor añadido y empleos no agrícolas.
Objetivo 15: Promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, luchar contra la
desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y frenar la pérdida de la diversidad
biológica.
• Para 2020, mantener la diversidad genética de las semillas, las plantas cultivadas y los animales
de granja y domesticados y sus especies silvestres conexas, entre otras cosas mediante una
buena gestión y diversificación de los bancos de semillas y plantas a nivel nacional, regional
e internacional, y promover el acceso a los beneficios que se deriven de la utilización de los
recursos genéticos y los conocimientos tradicionales y su distribución justa y equitativa, como
se ha convenido internacionalmente.
• Para 2030, lograr el acceso equitativo a servicios de saneamiento e higiene adecuados para
todos y poner fin a la defecación al aire libre, prestando especial atención a las necesidades de
las mujeres y las niñas y las personas en situaciones vulnerables;
• Para 2030, mejorar la calidad del agua mediante la reducción de la contaminación, la
126 eliminación del vertimiento y la reducción al mínimo de la descarga de materiales y productos
químicos peligrosos, la reducción a la mitad del porcentaje de aguas residuales sin tratar y
un aumento sustancial del reciclado y la reutilización en condiciones de seguridad a nivel
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
mundial:
• Para 2030, aumentar sustancialmente la utilización eficiente de los recursos hídricos en todos
los sectores y asegurar la sostenibilidad de la extracción y el abastecimiento de agua dulce
para hacer frente a la escasez de agua y reducir sustancialmente el número de personas que
sufren de escasez de agua:
• Para 2030, poner en práctica la gestión integrada de los recursos hídricos a todos los niveles,
incluso mediante la cooperación transfronteriza, según proceda:
• Para 2020, proteger y restablecer los ecosistemas relacionados con el agua, incluidos los
bosques, las montañas, los humedales, los ríos, los acuíferos y los lagos.
• Para 2030, lograr la gestión sostenible y el uso eficiente de los recursos naturales;
• Para 2020, lograr la gestión ecológicamente racional de los productos químicos y de todos
los desechos a lo largo de su ciclo de vida, de conformidad con los marcos internacionales
convenidos, y reducir de manera significativa su liberación a la atmósfera, el agua y el suelo a
fin de reducir al mínimo sus efectos adversos en la salud humana y el medio ambiente;
• Alentar a las empresas, en especial las grandes empresas y las empresas transnacionales, a que
adopten prácticas sostenibles e incorporen información sobre la sostenibilidad en su ciclo de
presentación de informes.
Objetivo 13: Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos
Fortalecer la resiliencia y la capacidad de adaptación a los riesgos relacionados con el clima y los
desastres naturales en todos los países.
Objetivo 14: Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos
marinos para el desarrollo sostenible.
• Para 2025, prevenir y reducir de manera significativa la contaminación marina de todo tipo, en
particular la contaminación producida por actividades realizadas en tierra firme, incluidos los
detritos marinos y la contaminación por nutrientes;
• Para 2020, gestionar y proteger de manera sostenible los ecosistemas marinos y costeros con
miras a evitar efectos nocivos importantes, incluso mediante el fortalecimiento de su resiliencia,
y adoptar medidas para restaurarlos con objeto de restablecer la salud y la productividad de
los océanos;
• Para 2020, reglamentar eficazmente la explotación pesquera y poner fin a la pesca excesiva,
la pesca ilegal, la pesca no declarada y no reglamentada y las prácticas de pesca destructivas,
y aplicar planes de gestión con fundamento científico a fin de restablecer las poblaciones de
peces en el plazo más breve posible, por lo menos a niveles que puedan producir el máximo 127
rendimiento sostenible de acuerdo con sus características biológicas.
• Para 2020, conservar por lo menos el 10% de las zonas costeras y marinas, de conformidad
Objetivo 15: Promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, luchar contra la
desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y frenar la pérdida de la diversidad
biológica.
• Para 2020, velar por la conservación, el restablecimiento y el uso sostenible de los ecosistemas
terrestres y los ecosistemas interiores de agua dulce y los servicios que proporcionan, en
particular los bosques, los humedales, las montañas y las zonas áridas, en consonancia con las
obligaciones contraídas en virtud de acuerdos internacionales;
• Para 2020, promover la gestión sostenible de todos los tipos de bosques, poner fin a la
deforestación, recuperar los bosques degradados e incrementar la forestación y la reforestación
a nivel mundial;
• Para 2030, luchar contra la desertificación, rehabilitar las tierras y los suelos degradados,
incluidas las tierras afectadas por la desertificación, la sequía y las inundaciones, y procurar
lograr un mundo con una degradación neutra del suelo;
• Para 2030, velar por la conservación de los ecosistemas montañosos, incluida su diversidad
biológica, a fin de mejorar su capacidad de proporcionar beneficios esenciales para el
desarrollo sostenible;
• Promover la participación justa y equitativa en los beneficios que se deriven de la utilización de
los recursos genéticos y promover el acceso adecuado a esos recursos, como se ha convenido
internacionalmente;
• Adoptar medidas urgentes para poner fin a la caza furtiva y el tráfico de especies protegidas
de flora y fauna y abordar la demanda y la oferta ilegales de productos silvestres;
• Para 2020, adoptar medidas para prevenir la introducción de especies exóticas invasoras y
reducir de forma significativa sus efectos en los ecosistemas terrestres y acuáticos y controlar
o erradicar las especies prioritarias.
Objetivo 14: Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos
marinos para el desarrollo sostenible.
• Aumentar los conocimientos científicos, desarrollar la capacidad de investigación y transferir
128 la tecnología marina, teniendo en cuenta los criterios y directrices para la transferencia de
tecnología marina de la Comisión Oceanográfica Intergubernamental, a fin de mejorar la
salud de los océanos y potenciar la contribución de la biodiversidad marina al desarrollo de
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
los países en desarrollo, en particular los pequeños Estados insulares en desarrollo y los países
menos adelantados.
• Para 2030, garantizar que todos los hombres y mujeres, en particular los pobres y los
vulnerables, tengan los mismos derechos a los recursos económicos, así como acceso a
los servicios básicos, la propiedad y el control de las tierras y otros bienes, la herencia, los
recursos naturales, las nuevas tecnologías apropiadas y los servicios financieros, incluida la
microfinanciación;
• Para 2030, fomentar la resiliencia de los pobres y las personas que se encuentran en situaciones
vulnerables y reducir su exposición y vulnerabilidad a los fenómenos extremos relacionados
con el clima y otras crisis y desastres económicos, sociales y ambientales;
• Garantizar una movilización importante de recursos procedentes de diversas fuentes, incluso
mediante la mejora de la cooperación para el desarrollo, a fin de proporcionar medios
suficientes y previsibles a los países en desarrollo, en particular los países menos adelantados,
para poner en práctica programas y políticas encaminados a poner fin a la pobreza en todas
sus dimensiones.
Objetivo 5: Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas
Poner fin a todas las formas de discriminación contra todas las mujeres y las niñas en todo el
mundo.
• Para 2030, ampliar la cooperación internacional y el apoyo prestado a los países en desarrollo
para la creación de capacidad en actividades y programas relativos al agua y el saneamiento,
incluidos el acopio y almacenamiento de agua, la desalinización, el aprovechamiento eficiente
de los recursos hídricos, el tratamiento de aguas residuales y las tecnologías de reciclaje y
reutilización.
• Elaborar y aplicar instrumentos que permitan seguir de cerca los efectos en el desarrollo
sostenible con miras a lograr un turismo sostenible que cree puestos de trabajo y promueva
la cultura y los productos locales.
Objetivo 15: Promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, luchar contra la
desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y frenar la pérdida de la diversidad
biológica.
• Movilizar y aumentar de manera significativa los recursos financieros procedentes de todas las
fuentes para conservar y utilizar de forma sostenible la diversidad biológica y los ecosistemas;
• Movilizar un volumen apreciable de recursos procedentes de todas las fuentes y a todos los
niveles para financiar la gestión forestal sostenible y proporcionar incentivos adecuados
a los países en desarrollo para que promuevan dicha gestión, en particular con miras a la
conservación y la reforestación.
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
130
Anexo IV. Institucionalidad para Gobernanza para la Promoción del Derecho Humano
a la Alimentación en el marco del fortalecimiento de la soberanía alimentaria
Ilustración 14. Adecuación institucional Funcional / Territorial existente del SINASAN de Honduras.
Ley SAN, decreto 25-2011. Elaboración propia a partir de Decreto 25-2011v
Ilustración 15. Adecuación Funcional / Territorial del SINASAN de Honduras. Ley decreto 25-211.
Elaboración propia a partir del Decreto 25-2011
132
Ilustración 16. Adecuación Sectorial - Funcional / Territorial de la Código Municipal de (134-90) Honduras.
Elaboración por Daniel Cknigth a partir del Código Municipal (134-90) de Honduras.
Tabla 14. Adecuación Sectorial DHA del Código de Municipios y Código SAN.
Elaboración propia a partir de Código de Municipio. 133
Art 14.8 Racionalizar el uso y explotación de los recursos municipales, de acuerdo con las prioridades establecidas y los programas de desarrollo nacional.
1.1.3. Elaboración
Art. 13.9. Fomento y regulación de la
alimentos
actividad comercial, industrial.
1. Sistema Alimentario
1.1. Disponibilidad
económico y social, de
Art 16. Acceso: físico,
1.1.4. Conservación
forma estable
1.1.5. Distribución
por la Constitución de la República y demás leyes; serán sus objetivos los siguientes:
1.1.6. Comercialización
Art 17 Utilización Biológica: condiciones adecuadas de salud e higiene ambiental, y asegure el estandar de
1.3 Regímenes derecho de la tierra
agrarios
1.3.2. Acceso a tierra
2.1. Atención primaria y preventiva
2.2. Reducción de la mortinatalidad y la
Art.13.16. Coordinación e Implantación de las medidas y acciones higiénicas que tiendan a
mortalidad infantil; sano desarrollo de la
niñez y salud materna
2.3. Mejoramiento del medio ambiente Art.13.3. higiene municipal
asegurar y preservar la salud y bienestar general de la población
2.6.1. Lactancia
Materna
2.6.2. Divulgación
nutricional
2.6. Alimentación
y Nutrición 2.6.3. Alimentación
nutritiva, adecuada y
segura
2.6.4. Inocuidad de
alimentos
2.7.1. Disponible
2.7.2. Calidad (Salubre)
3.1.2. Pautas
Alimentaria Alimentarias
y Nutricional
3. Educación
los siguientes:
3.2.3. Reducción de
3.2. Agua
desperdicios
3.3. Educación DESC
4.1.1. Género
4.1.2. Generación
discriminación/
equidad
Art. 13.12. Promoción del turismo
4.2.1. Supervivencia
4.2.2. Digno
(remuneración)
4.2 Ingreso
4.2.3. Cobertura de
necesidades
ARTÍCULO 14.- ... existe para lograr el bienestar de los habitantes, promover su desarrollo integral y la preservación del medio
ambiente, con las facultades otorgadas por la Constitución de la República y demás leyes; serán sus objetivos los siguientes:
7.3.4. Educación en
DESC
7.4.1. Sectorial
Ilustración 17. Perfil de agenda general de incidencia para la Soberanía Alimentaria en el sistema
alimentario regional, nacionales y locales.
Elaboración propia.
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
136
El Desarrollo Institucional debe de expresar como consecuencias para Acción Pública la adquisi-
ción de capacidades, habilidades y conocimientos, que permitan una realización progresiva de los
derechos humanos, siendo estos cambios permanentes en el tiempo. Para ello se hace necesario
estructurar unas rutinas decisionales que tengan como consecuencia, en este caso, la realización
progresiva del DHA. Percibimos el proceso en tres grandes pasos:
• La Decisión Política de abordar el tema, que implica la posibilidad de emprender una acción
con impacto o no. Esta decisión política debe de reconocer las debilidades y necesidades de
acción, y tiene generalmente una naturaleza sectorial en su comprensión;
1 En este modelo, la buena práctica no es resultado que se “encuentra” durante los procesos de intervención, si no, el resultado de una ac-
ción consciente que desde sus inicios intenta paliar una deficiencia de eficiencia y eficacia de la acción pública para la realización progresiva
del DHA.
inicia con la formación de los recursos humanos en cantidad y calidad para alcanzar un punto
crítico que permite el desarrollo de políticas y estrategias institucionales o nacionales, que en 139
el largo plazo permita volverse acción del Estado al volverse ley.
• Comienza con dotar de capacidades (prácticas, conocimientos y habilidades) los recursos hu-
manos de las instituciones (Indicadores de resultados), antes de intentar masificar esta nueva
capacidad en proyectos, programas y políticas.
• Contando con los recursos humanos necesarios, además de los técnicos y financieros, estas
capacidades son transferidos a la formulación de las acciones públicas (Indicadores de Impac-
to; ODM y cambios cualitativos y cuantitativos en la tendencia de los indicadores).
• Hecho esto, el marco legal debe de reforzar y estabilizar esta institucionalidad desarrollada.
“ALIANZA POR EL DERECHO HUMANO A LA ALIMENTACIÓN EN CENTROAMÉRICA - ADHAC”
140
La Alianza por el Derecho Humano a la Alimentación de Centroamérica (ADHAC) es una plataforma política integrada por más de
60 organizaciones que trabajan en la promoción y defensa del Derecho Humano a la Alimentación (DHA), la Soberanía Alimentaria
y la Seguridad Alimentaria y Nutricional (SSAN) en Centroamérica.
La ADHAC impulsa la participación de la sociedad civil en la formulación e implementación de políticas públicas y marcos
normativos locales, nacionales y centroamericanos relacionados al DHA y la SSAN; y promueve el Diálogo Social, entre todas las
organizaciones, redes y movimientos sociales preocupados por el DHA.
El Observatorio del Derecho Humano a la Alimentación en Centroamérica (ODHAC) es un espacio virtual, promovido por la ADHAC,
que genera y difunde información nacional y regional para evidenciar las condiciones alimentarias de los diferentes grupos
poblacionales; con la intención de apoyar los procesos de sensibilización, el diálogo social y la incidencia política para la promoción
del DHA y la SSAN en la región.