Tesis BARABINO PDF
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Noviembre de 2014.
Barabino, Nélida Margarita
E-Book.
ISBN 978-987-544-585-7
CDD 363.728 2
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A Nevenka, Sofía, Dalmiro, Belén y Julia
para quienes deseo un mundo más sano.
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Diario Clarín 28-10-2008
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AGRADECIMIENTOS
A María, Fabián, Emanuel, Matías, Carlos, Marco Antonio, Miguel y Naiara, Héctor y
Marcela, Miguel, Jorge, Juan Carlos, Santiago y Maia Celeste, Eduardo, Juan Carlos, Roberto y
Clara, Fernando, Alicia, José, Frankestein, Cecilia, Jonatán, Ernesto e Hilda, Gustavo, Ramón y
Mario, nombres reales y pseudónimos de los recolectores informales, “cartoneros”, por
brindar los relatos que me permitieron conocer la realidad de su trabajo y la suya propia, por
permitirme fotografiar sus carros cartoneros y por sus opiniones.
A Griselda A. Prandín por tantos años de carrera y trabajo conjunto y por su particular
manera de incentivar diciendo “muy bien”.
A Nora V. López y María del Carmen Villar por los avisos sobre cartoneros.
A Alberto “Beto” Mena por permitirme utilizar las fotografías que obtiene en su labor
como reportero radial.
A los empleados municipales que en voz baja confesaron que respecto de los
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cartoneros de afuera del predio, en la Municipalidad “no hay nada”, un valioso dato en esta
oportunidad.
ÍNDICE
CONTENIDOS
FOTOGRAFÍAS
PLANOS:
TABLAS:
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GLOSARIO DE TÉRMINOS DE LA JERGA CARTONERA
Vidrio: en general todo elemento de vidrio que se venda por kilo, incluye botellas comunes y
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todas aquellas que tengan los picos rotos, frascos, vasos, platos, etc.
INTRODUCCIÓN
Entre los temas recurrentes que se hallan presentes en las agendas gubernamentales,
básicamente de los países y distritos provinciales y municipales latinoamericanos, se
encuentra sin dudas la gestión ambiental del ámbito urbano y dentro de este vasto tema, los
que tienen que ver con la degradación ambiental: los residuos sólidos urbanos (RSU), el
deficitario saneamiento de las aguas residuales y pluviales, las malas condiciones de
habitabilidad en los barrios pobres, los problemas de salud acarreados por las condiciones
insanas del medio, la contaminación de variados tipos y las plagas urbanas, entre otros.
A los mencionados deben sumarse, además, todos los temas que integran el complejo
de orden social que también acucia a las ciudades latinoamericanas en forma general y a
algunos sectores territoriales y de población en particular: pobreza, déficit habitacional,
desocupación, insuficiencia de los servicios sanitarios y educacionales, etc.
Los cambios que el proceso de globalización ha producido en todos los países del
mundo se manifiestan de diversas maneras en cada uno de ellos de acuerdo al modo en que
se insertan en el mismo y a las particularidades socio-económicas y políticas que cada uno ha
construido a lo largo de su historia.
De la misma manera hacia el interior de cada país se manifiestan particularidades que
se relacionan con las características de cada región en cuanto a su capacidad productiva y de
integración territorial y en cada ciudad en función de las actividades prioritarias que allí se
asientan, con el tamaño y cantidad de población alcanzado y con su localización en relación a
las vías de circulación y conectividad inter e intrarregional.
Lo cierto es que el resultado que arroja ésta realidad se torna conflictivo para las áreas
urbanas desde el punto de vista socio-ambiental, con su directa traducción hacia lo político y
económico. Muchos autores, siguiendo el análisis de sistemas complejos, han
conceptualizado a esta situación como una crisis de sustentabilidad urbana, que se manifiesta
en la cada vez mayor cantidad de población viviendo en situación de pobreza material, en
ambientes degradados y marginados del mercado de trabajo y consumo y con estados
municipales, provinciales y nacionales que no logran implementar las políticas necesarias para
superar esa insustentabilidad.
Aún así hay problemas que permanecen y se manifiestan con características casi
idénticas, dos de ellos son la gran cantidad de residuos sólidos que se producen y la cantidad
de población pobre que encuentra en ellos su vía de sustento produciendo serios impactos en
varias escalas del espacio urbano: la propia vivienda del recolector y su entorno inmediato,
asentamiento o barrio y la ciudad como espacio mayor de su actuación.
las agendas locales que se desprenden de esos postulados, las temáticas asociadas a la
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generación y manejo de residuos sólidos urbanos alcanzan gran significación debido a los
crecientes y complejos problemas ambientales que surgen a causa de ellos y a la incidencia
económica que posee su tratamiento en los presupuestos municipales.
En tal sentido, Chabalgoity (2006)1 sostiene que actualmente esos problemas “se
expresan, tanto en aspectos de índole social y económica asociados al manejo de residuos,
como por la destrucción de valores y recursos naturales que a su vez inducen perjuicios graves
para la salud y calidad de vida de crecientes segmentos de población”.
Entre los estudiosos del tema la perspectiva más arraigada es que esa cifra siga en
aumento siguiendo el ritmo de crecimiento de la población en las ciudades grandes y
medianas, por el desarrollo productivo que se registra en las mismas y por la expansión de
patrones de consumo impuestos por la moda del “úselo y tírelo” que influye en la construcción
de imaginarios de felicidad. Estas pautas, al igual que las crisis cada vez de mayor amplitud y
profundidad están asociadas al estilo de desarrollo neoliberal impuesto por el proceso de
globalización.
Por esto el mayor impacto ambiental relacionado con la gestión de los RSU lo padecen
las ciudades que aún se encuentran en crecimiento. En el caso argentino las ciudades donde se
registra el mayor crecimiento en los últimos años son las de tamaño intermedio.
En el caso de Mar del Plata, además del aumento de población, se registra extensión
de la mancha urbana –fundamentalmente hacia el sector sur y oeste- e incremento del
porcentaje de personas viviendo en malas condiciones materiales y de ingresos.
Según los datos del último Censo -2010- la ciudad alberga alrededor de 600.000
habitantes, y registró un crecimiento intercensal del 9% 3; este porcentaje es el que demuestra
una aceleración en el ritmo de incremento de población ya que en el intercenso anterior el
porcentaje alcanzó 5.9% 4.
1
CHABALGOITY, Manuel y otros (2006): Gestión de Residuos Sólidos Urbanos, un abordaje territorial desde la perspectiva de la
Página
inclusión social, el trabajo y la producción”. Pampa, Revista Interuniversitaria de Estudios Territoriales. Año 2, Nº 2, Santa Fe,
Argentina, UNL (pp. 37-84).
2
CEPAL GT Z (2012): “Gestión ambientalmente adecuada de residuos sólidos. Un enfoque de política integral”. Hernán de la
Fuente. (Compilador). Chile.
33
Cifra obtenida a partir de los datos definitivos del Censo 2010. INDEC (2011) y Municipalidad de General Pueyrredón (2012).
Población total del Partido de General Pueyrredón: 614.350 hab.
4
INDEC (2002): Censo nacional 2001.
5
INDEC (2013): EPH, varias ondas. Datos para el Conglomerado Mar del Plata-Batán, en www.indec.gov.ar
En lo que respecta a inmuebles, ARBA (2010)6 (Agencia de Recaudación de la Provincia
de Buenos Aires) a través del Departamento de Propiedad Inmueble indica que se ha
“constatado un importante crecimiento de viviendas. Hay en la actualidad en Mar del Plata,
330 mil viviendas, mientras que en 2001 eran 290 mil”.
En el mismo informe se sostiene que “hay zonas de Mar del Plata que en materia de
nuevas viviendas, han registrado aumentos importantes. Se trata concretamente de
crecimientos notables en la periferia, especialmente el área sur y en la zona oeste, inclusive por
fuera del ejido urbano *…+ además de estas zonas de fuerte crecimiento, el micro y
macrocentro también creció por la gran cantidad de torres y edificios construidos en los últimos
años. Hay un cambio de modalidad en materia de viviendas, por el que se transforma la carga
de unidades habitacionales sobre cada parcela de terreno”.
Las referencias anteriores son las que permiten sostener que Mar del Plata es una
ciudad que mantiene las características de crecimiento de las ciudades intermedias de
Argentina: acelera el ritmo de crecimiento de la población, manifiesta aumento de población
pobre; registra un fuerte crecimiento en el número de viviendas y se extiende en el territorio.
Se llegó de esa manera a plantear como hipótesis que “La recolección informal de
residuos es una práctica que eslabona los engranajes de un círculo vicioso definido por las
pautas de consumo que se relacionan con el nivel de desarrollo, las características de los
14
impacto que tal conjunto produce en el ambiente”, cuya comprobación se persiguió a partir
de los siguientes objetivos:
6
Página oficial de la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires – ARBA-, (2010): Departamento de Propiedad
Inmueble, análisis estadístico para la organización territorial del Censo 2010.
Caracterizar los circuitos de la economía urbana.
Explicar la forma en que se vincula la actividad “del cartoneo” con los circuitos
económicos de la ciudad y de otras escalas territoriales.
Caracterizar al segmento social del que forman parte los recolectores informales.
Analizar las particularidades de la actividad de “cirujeo”.
Evaluar el impacto socio-económico, político y ambiental que produce la actividad
del "cartoneo”.
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1. METODOLOGÍA
Por la óptica desde la que se planteó el trabajo, se puede sostener que se partió sin
acumulaciones previas sobre el tema, lo que demandó idear una forma que permitiera conocer
con el mayor grado de profundidad posible no sólo las características intrínsecas de la
actividad, sino también lo relacionado con el gran circuito económico que se abre a partir de la
recolección informal de residuos sólidos urbanos recuperables, reusables y reciclables.
La información reunida en esa primera parte del trabajo que versa sobre distintos
aspecto de la recolección, tipo de actividades y características en las distintas ciudades
argentinas y del exterior, fue seleccionada, ordenada, clasificada, y analizada durante el
proceso de la investigación.
La otra etapa consistió en recopilar la información tomando contacto directo con los
actores que intervienen en la tarea estudiada y con otros que tienen relación indirecta: nivel
político, funcionarios del área social, comerciantes y vecinos de la ciudad.
motivación que llevó a la selección del tema de investigación; la definición espacial y temporal
del objeto de estudio y la selección de la técnica a emplear para la obtención de datos de
fuente primaria.
La teoría de los Circuitos Económicos expuesta por el Geógrafo brasileño Milton Santos
sirvió para comprender las externalidades que guían el fundamento económico de toda la
actividad, los distintos sectores que los integran, su funcionamiento y para conocer a los
actores que la llevan a cabo.
Planes sociales, pensiones, jubilaciones, etc.) que posiblemente marcara menores necesidades
Página
Por otra parte, también se tuvo en cuenta que siendo ésta una actividad impactada
por la estacionalidad laboral que registra Mar del Plata, el lapso seleccionado no corresponde
a alta temporada vacacional, cuando algunos de los cartoneros se dedican a otras
actividades como franelitas o peones de balnearios, ni con la temporada de cosecha de
especies pesqueras como anchoíta o merluza que también convoca a algunos de ellos. Por su
parte, si bien la construcción suele interactuar ocupacionalmente con el cartoneo, no es
posible definir tan claramente su estacionalidad por lo que no se la tomó como variable de
selección.
ningún objeto recolectado, pero si se pudieron apreciar sonidos, olores, situaciones que fueron
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7
TAYLOR, S. Y BODGAN, R. (1992): “Introducción a la observación participante”. Paidós, Barcelona.
8
GUBER, Rosana (Reimp. 2005): “El salvaje metropolitano. Reconstrucción del conocimiento social en el trabajo de ca mpo”.
Paidós Estudios de comunicación. Bs. As-Barcelona-México.
Además se logró un todos los casos que los cartoneros fueran respondiendo a una
serie de temas previamente definidos con el fin de obtener el mejor conocimiento posible, de
primera mano, sobre esta actividad.
Para la entrevista se preparó una guía con preguntas referidas a los aspectos que se
consideraron de interés para satisfacer los objetivos planteados, pero es de destacar que ese
conjunto de preguntas solo constituye una guía para mantener la conversación con los actores,
en ningún caso se los interrogó duramente. En algunos casos surgieron temas que no estaban
contemplados y que por su importancia, igualmente, fueron registrados en las notas del
investigador.
Entrevista: (indicar fecha, hora, dirección, situación y otros datos que particularicen al
entrevistado)
Nombre
Edad
Barrio donde vive
¿Cómo se compone su familia?
Vehículo que utiliza
¿Cuánto hace que se dedica al cartoneo?
¿Realiza otro trabajo como changas, pescado, etc., etc.?
¿Con quienes cartonea?
¿En qué zonas de Mar del Plata cartonea?
¿Posee recorridos establecidos o circula aleatoriamente?
¿Algunas personas le juntan elementos y concurre habitualmente a buscarlos? (Por ejemplo
encargados de edificios, comerciantes, población particular, etc.)
¿Cuáles son elementos que más se encuentran? (papeles, cartones, ropa, muebles, metales,
botellas y vidrios, envases plásticos, otros ¿cuáles?)
¿Qué destino tiene lo que recolecta? ¿Vende algunos elementos y utiliza otros para Ud. o su
familia?
¿A quién/es le vende lo recolectado? ¿Vende todo lo que recolecta en el mismo lugar o en
distintos lugares?
¿Cuántos días de la semana sale a recolectar? ¿Cuántas horas dedica cada día que sale a
recolectar?
¿Por día, cuántos kilos recolecta, estimativamente? (Si puede estimar kilos de cada cosa)
¿Dónde clasifica? ¿Acopia?
Por favor describa como es un día habitual, en los que usted sale a cartonear (A qué hora
comienza su jornada, cuánto tiempo le lleva dar la vuelta, cuánto le lleva acomodar lo
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La mejor forma que se encontró para tomar contacto con los cirujas fue dar una breve
explicación de las razón por las que se pretendía entrevistarlos y a partir de allí solicitarles, en
primer lugar, la autorización para fotografiar su carro y aprovechando el tiempo en que se
preparaba el dispositivo (máquina fotográfica o teléfono) ya se los comenzaba a interrogar
sobre los temas más directos para responder como puede ser el barrio en que viven o cuantos
años hace que se dedica a esta actividad. A partir de allí, se logró establecer, en casi todos los
casos una charla que satisfizo las inquietudes del entrevistador.
En algunos casos se obtuvo autorización para grabar y filmar relatos y locaciones, pero
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en general la mayoría de los entrevistados se mostró reacia a esas formas de registro. Por ello
se tomaron anotaciones de términos claves, cantidades y datos originales en cada caso.
En una segunda instancia fueron entrevistados los acopiadores, cuya lista surgió de las
entrevistas descriptas anteriormente y de información alternativa obtenida de la guía
telefónica y en buscadores en internet.
Por una decisión personal se decidió respetar, en todos los casos, aquellas negativas de
algunos entrevistados, cartoneros y acopiadores, a ser fotografiados, grabados o a que
quedara registro de sus galpones o carros.
Por otra parte se consideró importante recabar información sobre algunos aspectos
puntuales de la actividad por lo que se contactó con otros informantes como funcionarios de
distintas dependencias municipales vinculadas a la temática social y ambiental, empleados de
distintas dependencias, como así un concejal y sus colaboradores que accedieron a ser
preguntados sobre el complejo tema de la recolección informal. La información así obtenida
se constituyó en valiosos aportes para la investigación.
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N: Menores de 16 años sin distinción de sexo. El parámetro utilizado para establecer el corte etario es que desde el año 2011 las
personas de 16 años están habilitadas para emitir voto.
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En algunos casos los entrevistados indican la dirección del acopiador porque los mismos no poseen nombres que los identifiquen
o ellos lo desconoce.
2. MARCO TEÓRICO
J. XURIGUÉ
Cuatro son los aspectos teóricos tenidos en cuenta para darle marco al análisis
detallado de la actividad que se ha propuesto para esta tesis.
la ciudad que se estudie. Finalmente, no debe olvidarse, el accionar del Estado, que con su
normativa y sus políticas públicas es otro actor partícipe en la construcción del espacio
urbano.
11
Augé, Marc (1993): “Los no lugares”. Colección Hombre y Sociedad. Serie cla-de-ma. Editorial Gedisa. Traducción Margarita
Mizraji.
Lo anterior coincide con las expresiones de Santos y Silveira (2007)12, quienes
sostienen que “… el fenómeno urbano no es inteligible si no consideramos el territorio como un
todo. La verdadera dinámica es la del territorio nacional, aunque subordinada hoy a las fuerzas
de la globalización. La implantación de bases materiales, las reformas normativas y cualquier
otra opción política termina por afectar el espacio urbano”, y esas bases materiales y esas
opciones políticas son instrumentadas por los estados nacionales, provinciales y locales para
atender el desarrollo de sus territorios en función de las actividades que allí se instalan.
En tanto, Santos13 señala que “…en la ciudad, todas las actividades encuentran su
lugar” y esta realidad viene a satisfacer una demanda que en consonancia con esa cita
podría expresarse diciendo que en la ciudad, todas las demandas encuentran nichos de
satisfacción posibles.
Y como esto es así, la investigación debe ampliarse hacia una profundidad que permita
conocer cuáles son todas esas actividades y todas esas demandas, que encuentran lugar en
una ciudad.
Así, en las ciudades grandes, cada agente social encuentra su lugar, es decir un lugar
25
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12
SILVEIRA, María Laura (2007): “Metrópolis brasileñas: un análisis de los circuitos de la economía urbana”. En: Revista eure (Vol.
XXXIII, Nº 100), pp.149-164. Santiago de Chile, diciembre de 2007.
13
Santos, Milton (a) (2000): “La naturaleza del espacio. Técnica y tiempo. Razón y emoción”. Editorial Ariel. Barcelona.
14
Harvey, D. (1975): “The political economy of urbanization in advanced capitalist societies: the case of the United States”. Citado
por Silveira, M. L. (2007) Ob. Cit.
que permita una vida de relaciones que posibilite su reproducción y la de su grupo de
convivencia y que posibilite también la realización de actividades que les permita el sustento
económico.
Lo que es innegable es que en el contexto social de cada ciudad y por las diversidades
mismas determinadas por la injerencia de las fuerzas modernizadoras que afectan la dinámica
del medio construido central y periférico, se crean diferentes circuitos de producción, de
relaciones de trabajo, de crédito, de propaganda, de consumo y en síntesis de distribución
social y territorial de ingresos.
… las grandes ciudades del país albergan un importante y denso circuito superior; sin
embargo, tal circuito está siempre acompañado de un profuso circuito inferior, recordando que
abundantes clases sociales permanecen fuera del modelo de modernización, aunque sean su
resultado indirecto.
La fuerza del mercado concreto en el circuito inferior contrasta con el poder del
mercado abstracto del circuito superior. Mientras que el fundamento del primero es el trabajo
y sus productos –bienes y servicios producidos que buscan volver a la forma dinero para
26
producir más bienes-, el fundamento del segundo es el dinero en estado puro, esto es, un
Página
dinero cuya rentabilidad se multiplica por el hecho de no abandonar tal forma. Los mercados
concretos son territoriales, la arena de actores con existencias concretas en la ciudad, un dato
constitucional para esta nueva política”. (Silveira, 2004)15.
15
SILVEIRA, María Laura (2004): “Globalización y circuitos de la economía urbana en ciudades brasileñas”. Cuadernos del Cendes.
Volumen 21 Nº 57. Caracas, Septiembre 2004.
2.1.1. Identificación espacial de áreas asociadas a cada circuito de la economía urbana
De la misma manera que la marginalidad social y la pobreza pueden ser localizados con
alto grado de acierto en el territorio de una ciudad –generalmente en las periferias y en los
centros degradados- las áreas de más alto posicionamiento económico y de mayor integración
con el modelo global, también son identificables en el espacio, generalmente en áreas
centrales o dispersas en las grandes urbes, a manera de nodos. Volviendo a Santos (2000)16, se
podrían tomar las denominaciones con las que él las identificó al hablar de espacios oscuros y
espacios luminosos, respectivamente.
Por una parte las actividades enmarcadas en el contexto del circuito superior de la
economía, necesitan indudablemente expandir sus fronteras de acción también hacia las zonas
marginales y pobres, como una manera de captar mercados para la venta de sus productos y
servicios –aun cuando utilicen marcas alternativas o las llamadas segundas marcas-, sabiendo
que la población que integra ese segmento pobre igualmente consume y necesita satisfacerse
a través de la adquisición de bienes seleccionados en función de la ecuación
utilidad/calidad/costo o por incidencia de la moda.
Sin embargo y más allá de esta división territorial de la economía urbana, deben
Página
tenerse en cuenta dos aspectos: uno es que la función residencial y la localización de las
vivienda de la población –mano de obra para todas las actividades de ambos circuitos- no se
vincula exclusivamente con las actividades que realiza, aunque es verdad que existen barrios
16
Ob. Cit.
residenciales de distinta categoría habitados por población que evidentemente se vinculará a
uno u otro; el otro, que aún siendo posible la identificación territorial puntual o areal de cada
uno de los circuitos, ninguno de ellos funciona de manera aislada ni en absoluta
independencia respecto del otro –en menor grado aún el circuito inferior- por lo que más allá
de su localización existen instancias de contacto permanente que se dan por vía de transporte
y movilización de productos, servicios y personas en la ciudad. También es una realidad que,
por su calidad de marginales en términos de vinculación laboral y económica, existe otro
segmento de población cuya relación con la economía se encuentra por lo menos
desdibujada. Pero a pesar de ello, ese segmento también demanda servicios y productos que
provienen de alguno, o de ambos circuitos y desarrollan alguna actividad, aún en los niveles
más profundos de informalidad y precariedad en el circuito inferior, también están
relacionadas a la economía urbana.
Con referencia a la relación que existe entre los circuitos de la economía urbana y la
convocatoria de mano de obra, es necesario sostener que existen diferencias en cuanto a los
requerimientos por parte de cada uno de ellos. Esas diferencias se explican a partir de los
motivos que las provocan y también por los resultados que arrojan.
En principio hay que tener en cuenta que las ciudades latinoamericanas de tamaño
intermedio y grandes, no sólo desarrollan su economía urbana a partir de la existencia de los
dos circuitos ya mencionados sino que la vida urbana en el sentido más amplio se organiza en
torno a ellos. Así la mano de obra, los sistemas de producción, las pautas de consumo, el
accionar político del Estado y las pautas domésticas bajo las cuales la población organiza su
vida se desenvuelven bajo esa organización económica urbana.
otros males que suelen ser expuestos como sinónimo de la vida urbana son, en realidad,
Página
17
Ob. Cit.
parte de la política pública, cuyo fundamento es la economía ortodoxa, acaba por castigar esa
forma de trabajo. Sin embargo, la punición no resuelve el problema de la distancia entre
formas de trabajo y de vida en una sociedad. Castiga la diversidad sin atacar los mecanismos
productores de desigualdad. Es la reducción de la distancia entre el circuito superior y el
circuito inferior lo que debería ser el objetivo de la política en sus diferentes escalas. Y pese a
que el Estado continúa siendo una importante fuente de empleos, su presencia no ha podido
subordinar los nexos financieros al interés colectivo”.
Lo anterior permite sostener la existencia de las diferencias y una buena parte de las
razones que las originan, pero en tal sentido es conveniente profundizar en el análisis, por
ejemplo, del rol que juega la división territorial del trabajo, el crecimiento demográfico que
registran las ciudades del tamaño que se está considerado y la forma en que ellas se vinculan
al esquema macro económico adoptado por el país en el contexto mundial. En general la
adopción de un recorrido de modernización económica por parte del sector dominante de la
economía trae consigo el desarrollo, también encadenado, de acciones modernizantes tanto
en las formas de producción como en los requerimientos de mano de obra. Parafraseando a
Silveira la explicación estaría dada porque esa misma modernización acarrea, casi de manera
directa una desvalorización de las actividades más antiguas, pero esa desvalorización no
implica la extinción –al menos en el corto plazo- de esas formas más antiguas, sino que se van
superponiendo las unas a las otras, y por lo tanto “coexisten, lado a lado, la demanda de
empleo calificado y el desempleo. Como el segundo es más alto que el primero es el circuito
inferior (el) que se expande en términos demográficos” (Silveira, 2011)18, no sólo por la
necesidad de satisfacer la demanda de trabajo de un porcentaje importante de la población
sino porque el mismo sistema económico no puede deshacerse de la existencia del circuito
inferior ya que ninguno existe con independencia del otro. Esto por otra parte permite
comprender, en parte, la presencia y evolución de esas formas de sustento económico y el
desarrollo de condiciones de trabajo, condiciones de vida, formas de organización social y
niveles de pobreza que esas ciudades no conocían con anterioridad.
Por su parte Robert Castel (1991)19 sostiene que “la marginalidad es al mismo tiempo
la antítesis de la modernidad y la forma moderna de lo a-social”; pero en el caso de los
circuitos económicos, si bien la marginalidad puede ser la antítesis de la modernidad, de
ninguna manera debe considerarse que está fuera de sus necesidades ya que el sistema
“moderno” la utiliza en su beneficio y en esa misma utilización nace la dependencia que
desdibuja la posibilidad del marginal de socializarse plenamente. Es, entonces, en esa forma
particular de relación donde se producen los más altos índices de desocupación, informalidad
y vulnerabilidad laboral, en resumen todos las formas de trabajo que llevan a, y sostienen la
pobreza.
29
Página
18
SILVEIRA, María Laura (2011): “Urbanización latinoamericana y circuitos de la economía urbana”. Ponencia presentada al
Encuentro de Geógrafos de América Latina, Costa Rica.
19
CASTEL, Robert (1991): “La dinámica de los procesos de marginalización: de la vulnerabilidad a la exclusión”. Revista Topía.
Buenos Aires.
Hasta aquí se han expuesto algunos fundamentos que permiten mantener la
aseveración respecto de la existencia de diferencias en cuanto a la convocatoria de mano de
obra por parte de cada uno de los circuitos, veamos ahora bajo que características se lleva a
cabo esa diferenciación.
precarias como contratos a término o para la realización de tareas específicas, cuyos costos
Página
20
Ob. Cit.
puestos de trabajo. En el caso de nuestro país, en la década del ’90 se sancionaron leyes
denominadas en conjunto “de flexibilización laboral” que se orientaron justamente a disminuir
los costos laborales para las empresas, transfiriendo esas responsabilidades al propio
trabajador. El ejemplo más claro de esa flexibilización es que los costos laborales por aportes
previsionales, de obra social y demás deducciones de ley están a cargo del propio trabajador a
través de la figura del monotributo. Por esta misma figura el trabajador ya no “pertenece” a un
plantel laboral como empleado sino que es un trabajador que brinda un servicio que es
facturado como tal a la empresa. Si bien esta relación laboral se ajusta a la formalidad legal,
como carece de estabilidad puede considerase como trabajo precario.
Por otra parte, todas las modificaciones que muchos países periféricos, entre los que
enumeramos a los de América Latina, han realizado en cuanto a sus marcos legales laborales,
tuvieron como objetivo justamente, flexibilizar las condiciones para que empresas
transnacionales se asentaran en sus territorios y generaran, de alguna manera directa o
indirecta, puestos de trabajo para sus poblaciones. Pero lo cierto es que esa modernización
sólo acarreó la creación de un número menor de puestos seguro para personal calificado y
multiplicó, de alguna manera, la informalidad y vulnerabilidad entre los no calificados. Esta
situación ha favorecido a los grandes capitales permitiéndoles acumular enormes ganancias en
poco tiempo, en tanto, por otra parte ha colaborado en el mantenimiento de los niveles de
pobreza y brechas sociales como consecuencia de la transferencia de esas ganancias hacia las
casas centrales de esas empresas, localizadas fuera del país.
Lo anterior también da por tierra con otra creencia que plantea una especie de
correspondencia entre circuito superior-trabajo seguro y circuito inferior-trabajo informal. Es
muy importante recordar que tanto en un circuito como en el otro las relaciones laborales
entre empleadores y empleados pueden presentar las más variadas características.
serie y luego vuelven a juntar las distintas partes para su ensamblaje y armado final,
acondicionamiento, empaque, etiquetado, distribución y venta bajo marca propia. Las
automotrices constituyen otro ejemplo por cuanto convocan a muchas autopartistas que las
abastecen.
Los productos elaborados por estas firmas internacionalmente conocidas cuentan con
certificaciones de calidad que también son reconocidas internacionalmente y por lo mismo
alcanzan precios que absorban todos los costos de desarrollo, diseño, producción, propaganda
y marca y por las mismas razones se vuelven inaccesibles a grandes grupos de población. No
obstante las mismas empresas han sido las encargadas de generar, vía la propaganda y la
creación de moda y necesidad de consumo, una demanda que se mantiene latente y crece
hasta tanto se instrumente alguna forma de satisfacción.
Aquí es necesario introducir otro elemento de análisis, puesto que esas mismas
empresas del circuito inferior, -muchas veces de carácter familiar, pymes o emprendimientos
personales- que producen por imitación, en muchas oportunidades son “los mismos actores
que elaboran piezas, bajo rígidos controles, para tiendas de alto diseño, localizadas en los
shoppings centers de las grandes ciudades”, remarca la misma autora. De alguna manera las
grandes empresas son conocedoras de esta situación puesto que son ellas mismas las que les
entregan a las del circuito inferior los diseños para que produzcan para sus marcas y
posteriormente quienes desarrollan la tarea asignada multiplican la producción, imitándola,
manteniendo el diseño pero con materiales de calidad inferior, con destino a un mercado de
menores recursos.
producción a través de tareas más simples y rutinarias, llevadas a cabo por personal de menor
Página
nivel de calificación. Luego en este circuito se produce por imitación con destino a otro nicho
de mercado, de menor poder adquisitivo pero igualmente influenciado por la propaganda e
igualmente inclinado al consumo masivo.
21
Ob. Cit.
22
Ob. Cit.
Por su parte las empresas de un circuito y otro también se diferencian sustancialmente
pues como ha mencionado la autora de referencia “… una de las características que definen al
circuito inferior es su bajo grado de organización. Son empresas, a veces unipersonales, a veces
con alto fraccionamiento del trabajo, que desarrollan actividades espontáneas, surgidas de
necesidades existenciales, sin obediencia a parámetros generales de los cuales difícilmente
toman conocimiento. Completa el retrato una escasa o nula división profesional del trabajo al
interior de las firmas, lo que atestigua un bajo contenido de organización *…+, en rigor no existe
una repartición de tareas, sino una rotación de funciones entre los trabajadores o familiares”.
(Silveira, 2007).23
Para finalizar, Richard Sennett (2006)24 nos remite sintéticamente a las consecuencias
de todos estos procesos en cuanto sostiene –citando a Alain Touraine- que así “… surge una
diferencia de clase entre los trabajadores –muchos de ellos inmigrantes envueltos en sectores
informales …de la economía- que encuentran su lugar es una economía fluida o fragmentada y
los individuos de clase operaria tradicional, otrora protegidos por sindicatos o empleadores
piramidales, que disponen de menor margen de maniobra. En el medio, los individuos temen
ser desalojados, marginalizados o subutilizados. El modelo institucional del futuro no les
favorece una historia de vida en funcionamiento. En una sociedad de redes, las redes
informales son tenues (débiles)”.
Otra de las características de esta realidad es que en la medida que las ciudades
atraviesan la fase de extensión territorial, la demanda adopta ese mismo comportamiento por
33
23
Ob. Cit.
24
SENNETT, Richard (2006): “A cultura do novo capitalismo”. Río de Janeiro, Record.
25
Ob. Cit.
estas características manifiesta que “el consumo, como fuerza de dispersión territorial, crea en
las metrópolis de diversas regiones demandas semejantes a las de la región concentrada”. La
misma descripción aportada para algunas ciudades de Brasil se ve reflejada en varias ciudades
de otros países, Argentina incluida y la ciudad de Mar del Plata no queda ajena a ese
comportamiento.
La misma autora considera que “… como no todas las demandas encuentran respuesta
en la economía superior, el circuito inferior se multiplica”. En tal sentido, aquí se plantea una
diferencia con las expresiones de Silveira puesto que existe una demanda que no alcanza a
satisfacerse directamente en el circuito superior tradicional y/o marginal por sus mismas
restricciones económicas, pero esas empresas grandes –pertenecientes como se indicó al
Circuito Superior- son las que, a su vez, tienen la capacidad de colonizar el mercado a través de
una producción diversificada bajo la denominación común de “segundas marcas”. Esta es la
manera que las grandes concentraciones económicas relacionadas con la economía global
encuentran para competir y captar el mercado en aquellas capas que se encuentran fuera del
modelo moderno sin aparecer abiertamente como fabricantes de productos de otra marca que
generalmente difieren en calidad con los tradicionales. Por otra parte no debe olvidarse que el
circuito superior siempre se encuentra acompañado de un gran circuito inferior, que en
algunas oportunidades depende de manera directa y en otras es su consecuencia. Así el
proceso de urbanización tiene una importancia destacada en el mercado urbano que cada vez
se extiende, se agranda, se diversifica y se segmenta más. En síntesis un esquema altamente
semejante al que se planteó respecto de la mano de obra.
Pero, las características y calidad de cada uno de ellos contribuye a que en la ciudad se
acentúe la especialización y diversificación espacial de la producción y del mercado porque
cada uno opera de manera distinta de acuerdo a su accionar sobre un circuito u otro y ello
está en consonancia con el destino socio-económico de la producción. Aquí juega un rol
34
fundamental el Estado y principalmente los gobiernos locales que son los encargados de fijar la
Página
Vale recordar que Mar del Plata es una de las ciudades argentinas en las que se
reconocen distintas etapas de crecimiento, por aporte de corrientes poblacionales de distinto
origen, siendo las que prevalecen en la actualidad las originarias de otras localidades de la
provincia de Buenos Aires, básicamente de partidos con grandes volúmenes de población
pobre, a las que Mar del Plata se les presenta –por lo menos en la construcción imaginaria
previa al desplazamiento- como un lugar apetecible para el desarrollo de una vida mejor. Lo
cierto es que, al igual que todas las ciudades medianas y grandes, las oportunidades de
inserción laboral son limitadas justamente para población con perfiles precarios de instrucción
y capacitación como el que suele acompañar a los segmentos pobres.
Sin contradicción con lo anterior, se debe señalar que también el circuito superior, en
muchas oportunidades, se diversifica para no perder ese mercado que asoma con
características diferentes pero no desechables en cuanto a volumen.
luego otro –o personas en particular- completan detalles o algún paso necesario para alistarlo
Página
para la venta.
Este es el caso típico de fraccionamiento de las actividades y de la mano de obra a la
que ya se hizo referencia al citar a Silveira. Y es la razón por la cual el circuito inferior
concentra mayor cantidad y diversidad de mano de obra, porque también desarrolla mayor
26
Ob. Cit.
cantidad y diversidad de actividades. En muchas oportunidades algunas de esas actividades
son las que tienen por destino completar etapas productivas del circuito superior, pero
siempre en una posición marginal respecto del reparto de los réditos económicos.
Para cerrar el análisis de este círculo conviene recordar conceptos de Santos, quien
considera que la existencia de una masa de personas con salarios muy bajos o viviendo de
actividades ocasionales al lado de una minoría con rentas muy elevadas, crea en la sociedad
urbana una división entre aquellos que pueden tener acceso de manera permanente a los
bienes y servicios ofrecidos y aquellos que, teniendo las mismas necesidades, no tienen
condiciones para satisfacerlas. Eso crea al mismo tiempo diferencias cuantitativas y cualitativas
de consumo. Esas diferencias son causa y efecto de la existencia de los dos circuitos
económicos que producen y distribuyen bienes y servicios para satisfacer esas demandas.
Así difieren estas actividades, con otras del mismo Circuito Inferior, por ejemplo por
estar desarrolladas en emprendimientos unipersonales o con personal diario o quincenal, por
su grado de informalidad y vulnerabilidad con referencia a la contratación de personal y como
se vio antes por el tipo y destino de su producción o servicios ofrecidos. También se incluyen
dentro del segmento más precario del Circuito Inferior a aquellas actividades esporádicas,
residuales en términos de Offe, totalmente informales, de refugio de situaciones de
desocupación, etc. entre las que bien puede incluirse la recolección informal.
ese segmento marginal dentro del circuito inferior posiblemente el mismo sí se encuentre por
entero vinculado a esa otra problemática de la informalidad y la precariedad.
También es evidente que el segmento de población que se vincula como mano de obra
y como principales consumidores de esa porción del circuito inferior, se corresponde con la
porción pobre en general.
Cuando Miguel Lacabana (1995)27 dice que “… en las últimas décadas, como
consecuencia de las políticas de reestructuración económica y de los planes de ajuste, la
economía informal, la pobreza urbana y el reacomodo de la estrategias de sobrevivencia de los
sectores más afectados por estos cambios se han transformado en el principal problema social
y ambiental…” introduce a la problemática nuevos ingredientes que permiten analizar el
círculo del que se viene hablando, como son las modificaciones en la política económica y las
formas que encuentra la población para adecuarse a las mismas. Entre esas adecuaciones
aparecen las actividades que se desarrollan en el contexto del circuito inferior y que además, si
se desarrollan en un segmento marginal dentro de éste, es probable que estén teñidas de
informalidad y precariedad, y que puedan servir como actividad de supervivencia, como se
señaló.
En otra cita el mismo autor nos dice que “… la informalidad no es sólo una forma de
ganarse la vida sino que forma parte de la vida misma de los individuos o que los vendedores
ambulantes se transforman en terminales de distribución de la producción de los tigres
asiáticos” y ambos extremos son muestras de la amplitud de la economía informal como
también son pautas de aquellas acciones de sobrevivencia que realizan los más pobres. En
este caso hay plena coincidencia entre circuito inferior y precariedad e informalidad laboral.
las condiciones en las cuales se desarrolla el trabajo a fin de complementar el ingreso familiar”
Página
(Lacabana, 1995)28. Todas estas características son propias de la situación a que se encuentra
27
LACABANA, Miguel (1995): “Elementos de la economía urbana: economía informal, pobreza y estrategias de sobrevivencia”.
Módulo IV para la materia Economía ambiental regional y urbana de la Maestría GADU. Ciam. FAUD. Mar del Plata.
28
Ob. Cit.
relegada la población marginal desde el punto de vista económico, pero también desde el
punto de vista de la integración social e incluso desde lo psicológico.
Por otra parte, otras actividades que utilizan como insumo los materiales obtenidos
en la recolección informal, como son el acopio en sus distintos niveles, la recuperación y el
reciclaje sí poseen una localización puntual, están anclados en el territorio, disponen de las
instalaciones físicas necesarias y a partir de allí ejercen su influencia que se incrementa en la
medida que sus características las definen como pertenecientes a alguno de los dos segmentos
que presenta el circuito superior.
Las relaciones territoriales del circuito superior exceden a los barrios de las ciudades,
se manifiestan entre provincias y regiones y entre distintos países del mundo.
antes de dejarlas junto a los demás desechos que recolecta el servicio habitual de recolección
de residuos urbanos.
29
SILVA, Cátia Antonia, BERNARDES, Julio Adâo; CARVALHO ARUZO, Roberto; TORRES RIBEIRO, Ana Clara (2005): “Formas em
crise: utopías necessárias”. Arquimedes Ediçoes, Río de Janeiro.
En muchas oportunidades se trata de elementos de uso doméstico como muebles,
enseres electrodomésticos o ropa que han dejado de utilizarse por antigüedad o desperfectos,
y que potencialmente pueden tener aún un período de uso; en otras, de materiales sobrantes
o descartados de reparaciones domiciliarias como caños, maderas, vidrios, metales en general,
ladrillos, restos de revestimientos, etc. que pueden ser destinados a usos no especificados; o
simplemente de residuos que poseen un potencial precio de reventa como son envases de
vidrio y plástico, cajas y embalajes en general ya que vuelven a ingresar, por alguna vía a la
industria del circuito superior.
De esta manera algunos de esos elementos son utilizados por los mismos recolectores
para sí, en tanto otros son destinados a la venta para sumar un aporte monetario a sus magras
economías domésticas.
Si se remite a una definición sintética del concepto trabajo como “aquella actividad
humana que hace uso de nuestras facultades tanto físicas como morales e intelectuales,
conducentes a obtener un bien o un servicio necesario para la satisfacción propia y a veces
ajena de algún tipo de necesidad” (Guerra, 2001)30, podría considerarse que esta actividad de
recolección informal se encuadraría, bajo ese concepto amplio, como un trabajo.
A la luz de toda la experiencia mundial producida durante gran parte del siglo XX con
referencia al trabajo asalariado y por las características que adoptó el trabajo en ese período,
cuya definición contempla otras dimensiones, el trabajo es el quehacer laboral de tiempo
completo, preestablecido y conocido desde el inicio de la contratación, con derechos y
obligaciones por parte del trabajador y del empleador y resguardo social sujeto a la ley.
Durante las dos últimas décadas del siglo pasado y en los años transcurridos del
presente, se ha visto la necesidad de realizar ajustes y consideraciones sobre aquel concepto
de trabajo tradicional puesto que bajo la profundización del proceso de globalización se han
modificado no sólo las características laborales requeridas, sino fundamentalmente las formas
de vinculación entre los propietarios de los medios de producción y los trabajadores, dueños
de la fuerza de trabajo. Así esa relación ha introducido una importante gama de
modificaciones que dieron por resultado nuevas formas a ese vínculo. Básicamente se han
roto, perdido o modificado, muchos de los resguardos que poseía el trabajador con la
aparición del denominado trabajo informal; se ha perdido, en muchas oportunidades aquella
característica de empleo a tiempo completo y por tiempo indeterminado al surgir cada vez con
más fuerza la modalidad de contrataciones puntuales para realizar tareas específicas, en lo que
se conoce como trabajo precario. Y se instala cada vez con mayor intensidad el trabajo por
cuenta propia que bien puede convertirse en una forma de independencia para brindar un
39
son estrictamente productivas, como pueden ser todas las incluidas en los rubros
instalaciones, reparaciones y servicios personales que conjugan por partes iguales
formaciones técnicas con desempeño personal; o que suelen ser el refugio laboral que
30
GUERRA, P. (2001): “Sociología del Trabajo”. FCU. Montevideo.
encuentra la población que por diferentes motivos ha sido marginada de un trabajo
tradicional anterior o aún no ha podido acceder a él.
31
LANARI, Estela (a) (Comp.) (2005): “Trabajo Decente: diagnóstico y aportes para la medición del mercado laboral local. Mar del
Página
Plata 1996-2002”. Grupo de Estudios del Trabajo. FCEyS- UNMdP. Ediciones Suárez.
32
BARABINO, N., PRANDÍN, G. y ARTIEDA, J. (2012) “Trayectorias socio-laborales de Jefes y hogares en General Pueyrredon”, En:
ROSENTHAL, C. (Comp.): “Trayectorias socio-laborales según tipo de hogares marplatenses”. UNMdP.
33
Varios trabajos del Grupo de Investigación, citados en la bibliografía, abordan esta temática.
34
ARPE (2001): “Panamá. Trabajo decente y políticas de empleo. Desafíos y propuestas para la nueva década”. Borrador para la
discusión elaborado en el equipo técnico multidisciplinario de OIT. San José, Costa Rica. En: LANARI, Estela (a) (2005). Ob. Cit.
culturalmente- en contextos de ciudades modernas y ricas, integradas en redes nacionales y
mundiales.
Luego también se tomaron ideas de Santos en el sentido de que las ciudades son
actualmente el mejor lugar para el desarrollo de la vida de todos por ser el espacio que
garantiza la posibilidad de realizar el más variado tipo de actividades y donde están dadas las
condiciones para las más variadas formas de vida.
Y Argentina acentúa su recorrido por el modelo neoliberal aún a partir de la década del
’80, cuando se retomó el sistema constitucional de gobierno. Durante la década de 1990 se
detectan los momentos de mayor incidencia de la política adoptada con el achicamiento del
rol del Estado como prestador de servicios sociales básicos provocando que porcentajes muy
importantes de trabajadores perdieran sus puestos de trabajo –en algunos casos se
implementaron mecanismos como jubilaciones anticipadas, retiros voluntarios con percepción
de indemnizaciones que desaparecieron rápidamente debido a distintas etapas de crisis
locales e internacionales y a la inexperiencia de los antiguos trabajadores dependientes para
llevar adelante emprendimientos propios y, despidos masivos- para posteriormente entregar
esas empresas de servicios a grupos económicos nacionales e internacionales a través de
privatizaciones de dudoso trámite. En simultáneo se modificaron las leyes laborales bajo la
figura de la “flexibilización laboral” que redundó en un cambio del modelo anterior con
primacía del empleo asalariado hacia uno flexibilizado, de empleo por cuenta propia que es
ofrecido a las mismas empresas prestadoras de servicios ahora privatizadas sin que estas
tuvieran la necesidad de asumir prácticamente ningún costo ni responsabilidad laboral. A ese
efecto se ideó y legisló la figura del monotributo, que con la anuencia de la mayor parte de la
dirigencia sindical llevó al trabajador a hacerse cargo él mismo del costo previsional, de salud,
de seguros de vida y a la pérdida de los demás beneficios de salario indirecto logrados durante
décadas de luchas reivindicatorias: vacaciones pagas, licencias por enfermedad y maternidad,
carga horaria estipuladas por convenios colectivos de trabajo, afiliación sindical, salario
familiar, entre otros.
Estado. Esto llevó a que los hogares debieran afrontar, muchas veces, otros gastos para recibir
servicios de calidad aceptable, que antes eran cubiertos por esa vía o formaban parte de los
35
SVAMPA, Maristella (Editora) (2000): “Desde Abajo. La transformación de las identidades sociales”. Universidad Nacional de
General Sarmiento- Editorial Biblos. Buenos Aires.
beneficios del empleo regular. Ante ese retiro aparecen las obras sociales pre-pagas y se
popularizan las escuelas de gestión privada, por ejemplo.
Estos cambios han sido profundamente tematizados en las academias de los países
avanzados del centro, pese a que las consecuencias han impactado con mayor intensidad y
profundidad en los países menos avanzados de la periferia que en sus mismas sociedades,
donde los mecanismos de regulación social y de contención dispuestos por el poder público
son más sólidos en marcos de acción política más amplios.
En primer término, aquellos grupos sociales más precarios son los que han
desarrollado actitudes más pragmáticas, ya sea de manera individual o grupal, para intentar
desarrollar recursos que les permita una mejor gestión de la cotidianeidad. En este grupo se
43
puede ubicar aquel segmento estructuralmente pobre de la sociedad que son los que poseen
Página
Es amplia la bibliografía al respecto, entre la que puede destacarse la obra “La Nueva
Pobreza de la Argentina” de Minujín y Kessler36, y aquella gráficamente denominada “No son
extraterrestres, aunque lo parecen” de Olivetto37.
Es por eso que la frase de Castel no hace más que enunciar la realidad en la que viven
vastos sectores de la sociedad: marginados, apareciendo como la antítesis de la modernidad
que acarrea todos los adelantos mundiales que por obra de la globalización se multiplican casi
instantáneamente y considerados a-sociales en el sentido de desafiliación y débil o casi nula
integración al mismo modelo.
44
36
MINUJIN, A. Y KESSLER, G. (1995): “La nueva pobreza en la Argentina”. Planeta. Bs. As.
37
OLIVETTO, Guillermo (2002): “No son extraterrestres. Aunque a veces lo parezcan”. Atlántida. Bs. As.-México.
Para finalizar se cita a Lvovich (2000)38 cuando señala que “los mercados libres no son
necesariamente justos, pues como reza un antiguo dicho no hay nada más desigual que el trato
igual entre desiguales. Esto es lo que hace el mercado. En virtud del igualitarismo de
intercambio, el rico se torna más rico y el pobre más pobre. Se entiende por qué los ricos y
poderosos defienden estos derechos. Gracias a ellos, las divisiones de clase crecen. Las ciudades
se guetifican: los ricos se blindan buscando protección mientras los pobres, por defecto, se
aíslan en guetos. …el resultado son ciudades atravesadas por divisiones todavía más amargas y
bien conocidas *…+ Treinta años39de neoliberalismo nos enseñan que mientras más libre es el
mercado más grandes son las desigualdades y mayor el poder de los monopolios. Peor aún, los
mercados necesitan escasez para funcionar. Y si la escasez no existe se crea socialmente. Esto
es lo que la propiedad privada y la búsqueda de beneficio se encargan de hacer. El resultado es
una carestía en gran medida innecesaria, desempleo, falta de vivienda, etc., en medio de la
abundancia”.
Como se indicó con anterioridad nuestro país y por consecuencia Mar del Plata, no
están ajenos a todos los elementos que se describieron, por lo que a continuación se
introduce el tratamiento de la base sobre la que se analizará la segmentación social en nuestra
ciudad.
Para tal fin se utilizará la base teórica desarrollada por el Grupo de Investigación
Calidad de Vida40, que consistió en diseñar una tipología asentada no sólo en aspectos
económicos y laborales tradicionales sino incorporando a la misma otros, relacionados con
características demográficas, lugar de residencia, etc., porque “si bien la tipología de hogares
debe expresar la capacidad de los miembros de cumplir con su función de reproducción social,
condicionados por la inserción de sus miembros activos en el proceso productivo, la dicotomía
de poseedores y no poseedores de medios de producción, no es obviamente suficiente para
ello. Esto es así porque esta dicotomía, válida para entender las sociedades y la historia,
expresa un nivel general, que sólo permite establecer groseras diferencias respecto a diversas
formas de adaptación de las unidades domésticas, según su ubicación con relación a los medios
de producción”. (Grupo Calidad de Vida, 1998) 41
38
LVOVICH, Daniel (2000): “Colgados de la soga. La experiencia del tránsito desde la clase media a la nueva pobreza en la ciudad
Página
Para denominarlos, cada uno de ellos ha sido identificado por su nivel de integración
social de la siguiente manera: HT1 – Hogares de Alta Integración social- y dentro de éste se
identifican dos sectores: HT1.1 y HT1.2, atendiendo algunas diferencias en los valores que
alcanzan los indicadores considerados; de la misma manera el segmento que sigue en la escala
decreciente de la integración, HT2 de Media Integración Social, también se divide
internamente, por idénticas razones en HT2.1 y HT2.2; el segmento HT3, de Baja Integración,
no presenta subdivisiones y se puede sostener que engloba a aquella población que ha
atravesado en las últimas décadas un proceso de empobrecimiento, pero manteniendo la
satisfacción de sus necesidades básicas (claro ejemplo de los nuevos pobres estudiados por
Minujin y Olivetto)44, y finalmente el segmento más vulnerable, HT4, de Precaria Integración,
que también cuenta con una división interna.
44
Ver destalles en bibliografía general leída.
45
GRUPO DE INVESTIGACIÓN CALIDAD DE VIDA (1998)(a): “Elementos para el análisis de la reproducción social”. Documento de
Trabajo Nº 1. Facultad de Humanidades, UNMdP.
46
La existencia de la tipología mencionada fue probada en la ciudad de Mar del Plata y expuestos sus resultados en el Documento
de Trabajo Nº 2. Para ampliar la caracterización completa ver los documentos cuyos datos figuran en la bibliografía general leída.
la producción y reproducción económica. Raramente son propietarios de los terrenos donde
han asentado sus viviendas y están localizados en su totalidad en áreas de villas, terrenos
ocupados y las áreas más lejanas en la periferia urbana. Esto remarca las malas condiciones de
vida que registra el tipo. El tamaño de los hogares alcanza sus máximos valores con
aproximadamente un punto y medio por encima del promedio marplatense y formado por
grupos extendidos compuestos por núcleos familiares directos numerosos a los que se
incorporan otros familiares y miembros no emparentados. Se encuentra aún más acentuada la
natalidad adoptando la pirámide una forma progresiva con predominio masculino. Registra los
valores máximos de desocupación en correspondencia con la falta de capacitación de la
población que lo compone. No poseen cobertura para la salud dependiendo para ello de la que
se brinda en establecimientos públicos gratuitos, en forma exclusiva. La concurrencia de los
menores de 5 años a los establecimientos educacionales (Jardines de Infantes y Guarderías) es
prácticamente nula y el bajo porcentaje que concurre está motivado por la existencia de otros
servicios asociados, como comedores. La repitencia en el nivel obligatorio es la más alta entre
los hogares pobres y duplica ampliamente a la del promedio general de la ciudad. Este mismo
esquema se presenta en cuanto a la deserción escolar, aunque hay que considerar la
permanencia de los menores en el sistema educacional motivada por la obligatoriedad y por los
servicios asociados que se brindan.47
de cada uno de los tipos de hogares que se identificaron en Mar del Plata, radica no solamente
47
Respecto de este ítem es necesario señalar que en los últimos años, a partir de la implementación, por parte del gobierno
nacional, de la Asignación Universal por Hijo (AUH), para aquellas familiar cuyo jefe esté desocupado o se desempeñe en
condiciones de informalidad y/o precariedad laboral, el porcentaje de niños en edad de escolarización obligatoria concurriendo a
establecimientos educacionales alcanza prácticamente el 100%, puesto que el pago de tal asignación está condicionado a la
matriculación inicial, intermedia y final de cada ciclo escolar.
en lo que el Grupo Calidad de Vida ha considerado un aporte teórico para posteriores análisis
del mercado del trabajo, de la aplicación de políticas públicas –básicamente las de índole
social- o la construcción diferencial del espacio, sino que operan como la base para indagar
sobre “las condiciones y modalidad con que se desarrollan las distintas formas de adaptación
de las unidades domésticas pobres y no pobres respecto de la ocupación, la educación, la salud,
la recreación, el consumo, la acumulación particular, las relaciones interpersonales y la
participación” (Calidad de Vida, 1998, (a))48, en síntesis son el aporte que se considera para
poder extenderse sobre el estudio de las estrategias, lógicas de sobrevivencia o arreglos que
hacen los hogares para llevar adelante sus vidas.
En el planteo que se sigue en esta tesis, entre los circuitos de la economía urbana y la
división social y territorial del trabajo, puede visualizarse claramente la forma en que está
relacionado el segmento pobre, por todas sus características, con la actividad que realizan:
integran el sector inferior –en cuanto a posicionamiento socio-económico de la población- y la
actividad que desarrollan se identifica totalmente con las del circuito inferior de la economía
mencionado por Santos, y aún dentro de éste con la porción más profunda dentro de esa
inferioridad.
48
Página
48
GRUPO DE INVESTIGACIÓN CALIDAD DE VIDA (1998)(a): “Elementos para el análisis de la reproducción social”. Documento de
Trabajo Nº 1. Facultad de Humanidades, UNMdP.
49
TORRADO, Susana (1985): “El enfoque de las estrategias familiares de vida en América Latina. Orientaciones Teórico
Metodológicas”. 2º Edición. Cuadernos del CEUR 2. Bs. As.
50
ARGÜELLO, Omar (1981): “Estrategias de Supervivencia: Un concepto en busca de su contenido”, en “Demografía y Economía”.
El Colegio de México. Vol. XV (46). México.
Página
49
3. RECOLECCIÓN DE RESIDUOS: ANTECEDENTES, MARCO
REGULATORIO Y PRIMEROS RESULTADOS DE LA SEPARACIÓN EN
ORIGEN Y RECOLECCIÓN DIFERENCIADA EN GENERAL
PUEYRREDON.
Esta problemática que se ubica entre los primeros lugares de las preocupaciones
mundiales, en cuanto a aspectos ambientales se refiere, y que los gobiernos buscan mitigar
proponiendo diversos instrumentos, aún tiene manifestaciones de profunda importancia
tanto desde la óptica social, como ambiental, comercial, productiva, urbana y política.
Los países que poseen menor nivel de desarrollo económico y social son los que
padecen los problemas más complejos asociados a la proliferación de residuos y su
tratamiento, como así a la presencia de actividades asociadas a los mismos y resultantes
ambientales negativas con la aparición de basurales en los bordes de las mismas ciudades,
sistemas formales de recolección de residuos que presentan deficiencias y problemáticas
sociales que integran la compleja trama de generación y recupero de materiales. En este
complejo de difícil gestión, aparece también el aprovechamiento y utilización de los residuos
recolectados, por parte de grandes empresas industriales que los reciclan y utilizan como
insumos para volver a fabricar, por ejemplo cartón, invisibilizando prácticamente la totalidad
del trabajo del recupero callejero, con la apropiación del rédito económico resultante.
Los gobiernos locales son los que deben hacer frente de manera directa a la
problemática de los RSU y para ello proponen instrumentos muy diversos que abarcan desde
cargos por contaminación, puesta en marcha de sistemas de recolección y disposición final de
residuos de variado tipo y nivel de eficiencia, políticas de educación ciudadana tendientes a un
manejo sustentable para disminuir el volumen de residuos destinados a la disposición final (en
50
residuos útiles para otros usos- y Reciclar –o reutilizarlos como práctica de conservación de
recursos naturales) y toda una serie de instrumentos de diverso tipo que en muchas
oportunidades carecen de la profundidad necesaria para operar positivamente en el
mejoramiento de la situación en el largo plazo. La inmediatez que plantea el ritmo de la
generación y el volumen que alcanzan los residuos significa un freno a las acciones políticas al
respecto, que demandan un tiempo de acuerdo y negociación política entre los actores
involucrados que es desacorde con el aspecto ambiental.
Es posible sostener que la mayoría de los países de América Latina, al igual que otros
del resto del mundo que coinciden en sus características de desarrollo, presentan
problemáticas sociales relacionadas a la pobreza, fuertes niveles de segmentación social,
fragmentación territorial y crecimiento dispar de los distintos grupos socio-económicos que
interactúan en sus ciudades; presentan también falencias en lo que respecta al tratamiento
general que se les da a los residuos y profundos inconvenientes para la implementación de
sistemas sustentables debido, en muchas oportunidades, a las presiones que imponen las
grandes empresas de reciclaje que obtienen importantísimos réditos de esa compleja
situación.
En general son dos los grupos de recolectores informales de residuos que se identifican
en estos territorios, quienes se dedican a la recolección en los predios de disposición final
(formal) de residuos y quienes recorren las calles de las ciudades recolectando todos aquellos
elementos potencialmente reutilizables y reciclables que ingresarán posteriormente a la
industria a través de la comercialización.
51
Página
De manera general la tarea de los recolectores en los predios (que escapan al interés
de este trabajo) consiste en ingresar a los predios de disposición final de residuos operados
por las empresas privadas, sociedades de Estado o municipios, para obtener todos aquellos
elementos que puedan ser vendidos por múltiples y diversos canales de comercialización y
obtener así unos ingresos que les permitan subsistir.
La tarea concreta consiste en subir a los montículos de basura poco tiempo después
que los camiones de recolección urbana ingresan a descargar y con anterioridad al trabajo de
las máquinas que aplanan y construyen los caminos por donde volverán a ingresar camiones
para seguir descargando. Utilizando palos para “tantear” las bolsas y haciendo una tarea de
selección casi instantánea, que han adquirido con la práctica, detectan distintas “durezas” y
“sonidos” que representan metal, vidrio, cartón, tejidos, alimentos y un sinnúmero de
etcéteras que son clasificados, aceptados o desechados en un rápido proceso mental, para
abrir las bolsas y confirmar la utilidad de lo hallado o para desechar y seguir adelante.
para el ingreso.
Página
51
BOY, Martín y PAIVA, Verónica (2009): “El sector informal en la recolección y recuperación de residuos de la ciudad de Buenos
Aire, 2001-2008”. Quivera, Vol. 11, Número 1, Enero-Junio 2009, pp. 1-11. Universidad Autónoma del Estado de México, México.
En otras oportunidades donde se intentan avances en cuanto a la selección y
separación doméstica de los residuos, como es el caso reciente en la ciudad de Mar del Plata,
se lleva adelante una metodología que consiste en la instalación de una planta de recupero,
con tolvas en las que descargan los camiones de recolección selectiva de desechos clasificados
en domicilio y que a partir de esa descarga son transportados por cintas a las mesas de
selección donde trabaja personal integrante de una cooperativa de recicladores, que
posteriormente comercializa lo recuperado.
La otra forma que adopta la actividad y que se emparenta más directamente con dos
de las R pregonadas por los ambientalistas (Recupero y Reciclaje), es la que comienza con la
recolección informal que realizan los “cartoneros” en una instancia previa a la recolección
formal que llevan a cabo los camiones de la empresa contratada por el Municipio. En la ciudad
la prestataria del servicio es la Empresa 9 de Julio, cuyo contrato de locación de servicio
público data del 5 de Agosto de 2005, habiendo sido prorrogado en sucesivas oportunidades
en el marco de la Cláusula 2º del Contrato y del artículo 1.7 del Pliego de Condiciones
Generales para los Servicios de Higiene Urbana en el Partido de General Pueyrredon, aprobado
por Ordenanza 16.000/04. En el mes de Octubre de 2014, finalmente, el Honorable Concejo
Deliberante aprobó una nueva prórroga, cuya vigencia es de un año.
insumos que se obtienen del recupero callejero. A estas razones que no se comportan
aisladamente sino que forman un sistema complejo de interrelaciones que se mantienen más
o menos estables en el tiempo, deben sumarse otras que obedecen a situaciones de crisis que
hacen variar la cantidad de personas que recurren al cartoneo como forma de sustentarse en
la emergencia.
Aquí es necesario señalar que para este trabajo se consideran los términos cartonero o
ciruja casi indistintamente por cuanto los relatos obtenidos en las entrevistas a los mismos
actores, así lo ameritan: los recolectores informales se denominan a sí mismos como cirujas o
cartoneros en partes iguales.
Sin embargo, hecha esta aclaración conceptual, es necesario señalar que algunos
autores establecen una diferencia de tipo histórica respecto de ambos términos por cuanto el
de ciruja se inclina mayoritariamente hacia un sujeto caracterizado como indigente, muchas
veces alcohólicos o enfermos, en su mayoría hombres desvinculados familiar y socialmente,
con diversas historias de abandono y/o pérdidas laborales y de vínculos afectivos que los
posiciona en casi nulas posibilidades de alcanzar mínimos niveles de integración social que
les permita llevar adelante alguna tarea de manera sistemática, en tanto los cartoneros se
asumen como actores sociales integrados a la tarea de recuperación y con un rol de
importancia social, económica y ambiental, como se ilustrará con los relatos obtenidos.
También es disímil la aceptación social que tienen unos y otros.
Otra de las características que distinguen unos cartoneros/cirujas de otros es que los
más actuales, recolectan sistemática y selectivamente los elementos que tiene posibilidades
de ingresar al mercado del recupero y reciclaje lo que los pone en relación con otros agentes
intermediarios que abastecen la cadena de demanda del sistema productivo que incorpora
esos elementos como insumos industriales.
Por eso entre las razones que se mencionan como impulsoras del incremento de los
54
residuos sólidos urbanos, sobresalen las que tiene que ver con el libre mercado y el
Página
consumismo como prácticas asociadas a una cultura moderna que asemeja, muchas veces “el
tener” con “el ser” o “el pertenecer”. Así poseer determinados bienes, implica, ilusoriamente a
mi entender, ser o pertenecer ya sea a un segmento social, a un grupo de tal o cual actividad, a
un sector determinado, etc., y esa pertenencia consumista implica por una parte un ritmo de
adquisición de elementos y productos muy ágil que determina un ritmo igualmente ágil de
desechar lo que ya no resulta útil a esos fines, pero, como se está indicando, casi todo lo que
deja de ser útil para unos se traducirá en ingresos de subsistencia para algunos otros y grandes
negocios para otros más.
En tal sentido Cáceres Cortez (2011)52 sostiene que “en los últimos años los problemas
con el descarte de residuos sólidos se ha agravado considerablemente con el advenimiento de
la “cultura de lo descartable”, donde nuestros países [latinoamericanos] pasaron a actuar con
patrones de consumo de países capitalistas avanzados que dan preferencia de los embalajes
descartables por constituir una comodidad para los usuarios y una gran fuente de lucro para
las empresas. Tales trastornos pueden ser resumidos en altos costos sociales de
gerenciamiento de residuos, cuestiones de saneamiento público y contaminación ambiental,
escasez de áreas de disposición de residuos causada por la ocupación y valorización de áreas
urbanas”.
En la cita a Cáceres Cortez se hace mención a varios aspectos del complejo que se
analiza y de las relaciones que se establecen entre ellos, de alguna manera a ese trayecto que
enlaza las necesidades sociales, las problemáticas ambientales y los intereses económicos,
como resultado de una “modernidad líquida”, rápida y pasajera, en los términos utilizados por
Zygmunt Bauman53.
Todos los cambios por los que ha atravesado históricamente el comportamiento del
consumo está asociado, también, a los avances tecnológicos y científicos que han descubierto
y puesto en uso nuevos materiales con los que se fabrican los envases contenedores de
productos, que mejoran las condiciones de conservación, manipuleo, resguardo de
propiedades ante los efectos de la luz y el calor, como también una continua y veloz
modificación de los envases por cuestiones asociadas a la propaganda y la moda. Un ejemplo
de esto es la amplia difusión que alcanzó el plástico, a partir de la década del ‘60 del siglo
pasado, como elemento para la fabricación de envases y embalajes de una variedad
incalculable de productos alimentarios y bebidas, de perfumería, farmacológicos, químicos,
etc., para la fabricación de innumerables elementos de menaje doméstico y también para la
fabricación de piezas de artefactos eléctricos, juguetes, cañerías, telas, etc., etc.
52
CÁCERES CORTEZ, Ana Tereza (2011): “Embalagens: O que fazer com elas?”. Ponencia presentada en el XIII EGAL, Costa Rica.
53
BAUMAN, Zygmunt (2003): “Modernidad líquida”. Fondo de Cultura Económica. México.
En coincidencia con Cáceres Cortez se puede sostener que “la generación de residuos
de envases crece al mismo ritmo en que aumenta el consumo y estas nuevas modalidades de
envases [plásticos, aluminio y combinados de cartón, aluminio y plástico]. Cuantas más
mercaderías son adquiridas, más recursos naturales son consumidos y más residuos son
generados”.
Es probable que el mayor cambio que en común caracteriza a todos estos países sea el
que se ha operado en el ámbito del trabajo, en parte por efecto de un cambio en las
modalidades de producción y en mayor medida por las modificaciones que implicó el proceso
de urbanización.
Martucelli y Svampa, (1997)54 analizan este panorama al señalar que “… algunos países
latinoamericanos han alcanzado entre los años 40 y 70 - del siglo XX - un modelo de sociedad
que se aproximaba bastante a lo que en los países europeos dio en llamarse “sociedad
salarial”. En el caso de Argentina en particular, esa relación salarial fue el soporte material y
simbólico de la identidad colectiva de los sectores populares durante casi cuatro décadas. A
partir de las transformaciones mencionadas, consecuencia de las medidas de corte neoliberal
aplicadas en los años ’70 y con mayor agudeza en los ’90, la clase trabajadora se complejiza, se
fragmenta y se vuelve más heterogénea, al tiempo que la pobreza, la desocupación y la
desigualdad alcanzan niveles inéditos”.
Por su parte, nuestro país era junto con Uruguay y en parte Chile, los que más
asemejaban su nivel y características de desarrollo al modelo europeo, con anterioridad a los
restantes países latinoamericanos, por lo que los efectos de estas modificaciones hacen que
muchos autores sostengan que Argentina ingresó en un camino de “latinoamericanización” en
la medida que el impacto de las últimas modificaciones en los modelos político-económicos
adoptados hace que la brecha social se amplíe, se precarice el trabajo, se vuelve más informal
la economía, los niveles de desocupación, subempleo e informalidad laboral se hayan elevado
y no desciendan y como consecuencia los niveles de pobreza estructural y funcional también
sean elevados y resistentes a las erráticas políticas de reducción.
ellas Mar del Plata, el trabajo que más ha crecido, en algunos períodos, es el cirujeo.
Página
54
Citado por DIMARCO, Sabina (2007): en: “¿Podremos mirar más allá de la basura? Raneros, cirujas y cartoneros: historias detrás
de la basura”. Papeles del CEIC, Septiembre, año /vol. 1, número 033. Universidad del País Vasco, Vizcaya, España.
55
PAIVA, Verónica (2005): “Modos formales e informales de recolección y tratamiento de residuos, Buenos Aires, siglos XVI al XX”.
Seminario de Crítica. Instituto de Arte Americano e Investigaciones Estéticas. Nº 150. Relator Horacio Caride.
Independientemente del grado de objetividad de tal aseveración, sí se puede sostener que
cada vez que se profundiza la crisis en el mercado laboral y que el impacto sobre la población
de menor nivel de calificación e integración social se acentúa, el cartoneo aparece como el
refugio en el que esos trabajadores logran obtener unos ingresos diarios para subsistir. Esos
ingresos pueden dividirse en dos grupos, por un lado los monetarios que obtienen de la venta
de los elementos que recolectan y por otra parte el integrado por los elementos que
recolectan y utilizan para sí, como ropa, enseres, materiales para la construcción etc. y
también alimentos que obtienen en las mismas recorridas de recolección utilizando el sistema
que denominan “mangueo”, que, como es conocido por todos, consiste en ingresar a distintos
negocios de venta de productos alimenticios y solicitar si hay algo “para dar”. En muchas
oportunidades esta tarea de “ir a pedir”, “entrar a pedir” o “bajar a pedir” está en manos de
los niños que producen una situación de mayor sensibilidad entre las personas a cargo de
comercios.
Las razones que sostienen esta hipótesis son las que ya se han mencionado con
anterioridad, pero que no daña recordar: necesidades sociales en algunos segmentos
poblacionales que no logran insertarse en el mercado de trabajo formal ni siquiera sostener
actividades informales ya que casi en su totalidad carecen de calificación para ello, por su
precario nivel de integración social y en general por la profunda marginalidad en que
desarrollan sus vidas, tal cual se hizo referencia en la caracterización del perfil del segmento.
Por otra parte está la influencia de las pautas de consumo impuestas por un sistema
económico neoliberal que lo incentiva y exacerba como pilar de su existencia y sostenimiento.
acceso a esa posesión y descarte de los elementos obtenidos por el surgimiento de un nuevo
Página
Influyen también las deficiencias en cuanto a educación ambiental que poseen muchas
sociedades modernas, en particular las de las ciudades más grandes de los países menos
desarrollados, donde en general las pautas consumistas las llevan a desconocer –por
ignorancia o por desprecio- el volumen y destino final de sus propios residuos y que sólo
quieren alejarlos de su entorno inmediato, que “alguien” se los lleve, lejos, fuera de su vista y
lo más rápido posible, sin considerar que esos residuos generan impactos negativos en el
ambiente.
Hasta aquí todas las razones mencionadas aparecen como negativas, perjudiciales o
contrarias a los discursos sobre buenas prácticas ciudadanas, derechos y equidades sociales y
promesas políticas de inserción laboral y demás, pero lo cierto es que en pocas oportunidades
se resalta la real importancia que alcanza esta actividad como recupero y reciclaje de
materiales que no es otra cosa que ahorro en la explotación de recursos naturales. Tampoco
se interroga cabalmente sobre cuál sería la situación de vida de todos esos cartoneros y sus
familias, sencillamente ¿cómo subsistirían?. Y más aún, en muy pocas oportunidades o en
ninguna, se considera cual sería la situación que atravesarían cualquiera de las ciudades
medianas o grandes, si durante un lapso, de por ejemplo una semana, no se llevara a cabo la
recolección informal de residuos, teniendo en cuenta las actuales modalidades de recolección
formal, tratamiento y disposición de los residuos que se generan. Sin dudas la situación
podría suponerse semejante a la que se planteó en aquella película de Sergio Arau (2004)
denominada “A day without mexicans”, que en tono de comedia relata la situación que
atravesaría California si durante 24 horas no trabajaran los latino-hispanos que la habitan.
59
Página
La cita anterior, de Gerardo Codina (2013) 56 ilustra de manera sencilla el ciclo que
recorren los elementos que se desechan como residuos o basuras y el pensamiento que al
respecto posee una parte importante de la sociedad urbana y plantea con claridad hacia
quienes se vuelven las responsabilidades sobre su recolección y posterior tratamiento. En
realidad se podría poner en tela de juicio si la población en general deposita directamente en
el gobierno local la responsabilidad respecto del retiro de sus residuos para preguntarnos si
realmente lo que más le interesa no es que “alguien” la retire, sin importarle a quién o
quiénes involucra el impersonal “alguien”.
Entre las preguntas contenidas en la guía utilizada para las entrevistas a los cartoneros,
algunas estuvieron dirigidas específicamente a conocer qué elementos recolectan y la
respuesta más espontánea y reiterada fue “todo”. Más adelante se pudo conocer que se
recolectan aún algunos elementos que de antemano se sabe que no serán útiles en su
totalidad, pero que ante la imposibilidad de desarmar o separar en el momento las partes de
interés, se lo carga y luego se desarma para rescatar lo realmente valioso. El ejemplo más claro
es el de televisores y monitores, cuyas carcasas no son reciclables pero en su interior
contienen algunos vendibles. En otro apartado de este trabajo se hará referencia al destino de
los sobrantes.
Esta simple consideración nos posiciona ante la importancia que adquiere la tarea
informal de los cartoneros que recolectan indiferenciadamente la mayoría de los elementos
que son depositados en las veredas para que alguien las retire y que luego ingresen a los
circuitos de reciclaje.
56
CODINA, Gerardo (2013): “Ciudad basura. Se viene la revolución de la basura”. S.O.S. Bs. As. Construyendo desde la pluralidad.
Ediciones Nuevos tiempos.
En el año 1992, la Conferencia sobre Medio Ambiente y Desarrollo que se celebró en
Río de Janeiro durante el mes de Junio, se constituyó en un hito para el Derecho Ambiental
Internacional y un punto de partida significativo para la toma de conciencia global respecto de
la necesidad e importancia del cuidado del ambiente. Entre las actividades desarrolladas en
esa Conferencia, quizás uno de los más importantes haya sido la definición de instrumentos
específicos, como la Agenda 21, que consiste en el enunciado de una serie de principios que
deberían ser considerados por los países que suscribieran la agenda. La agenda fija una serie
de pasos a llevar adelante tanto por los países en general como por los niveles intermedios y
locales con la participación de la ciudadanía, las organizaciones no gubernamentales, grupos
sociales y autoridades municipales, que como sostuviera Carrión (1998)57, “son los más
próximos a la cotidianeidad de la gente”.
Muchos de los principios que surgen de la Agenda 21, justamente los que figuran en el
Capítulo 21, denominado “Gestión ecológicamente racional de los desechos sólidos y
cuestiones relacionadas con las aguas cloacales”, han sido considerados por los países que
suscribieron la Agenda, entre ellos Argentina, e incorporados con fuerza del Ley al momento
de ocuparse de sus cuestiones medioambientales.
En lo que refiere a los residuos, el punto 5 del Capítulo 21 establece que “… el marco
de acción necesaria debería apoyarse en una jerarquía de objetivos y centrarse en las cuatro
principales áreas de programas relacionadas con los desechos, a saber:
De ellos se infiere la política conocida como “las 3R”: REDUCIR, RECICLAR, REUTILIZAR.
Según el informe del Grupo Arrayanes (2010)58, existían a esa fecha siete Leyes de
Página
57
CARRIÓN, Fernando (1998): “Nuevas tendencias de la urbanización en América Latina”, Módulo Nº 1. Curso de posgrado en
Gestión y planificación urbana. Mar del Plata, Argentina.
58
GRUPO ARRAYANES. INNOVACIÓN Y SOLUCIONES SUSTENTABLES (2010): “Proyecto Nacional para la gestión integral de
residuos sólidos urbanos. BIRF 7362-ar”. Observatorio Nacional de gestión de residuos sólidos urbanos. Informe Final. Diciembre
2010. Aspectos Legales y Ambientales de la gestión de residuos sólidos urbanos. Bs. As.
Presupuestos Mínimos de la Política Ambiental Nacional o Ley General del Ambiente, que es el
marco normativo en materia ambiental que establece los objetivos y principios de la misma.
Establece también el Sistema Federal Ambiental cuyo objetivo es desarrollar la coordinación
de la política ambiental entre organismos de nivel nacional, los gobiernos provinciales y el de
la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a través del Concejo Federal de Medio Ambiente
(COFEMA) y el Pacto Federal Ambiental.
Otro punto a resaltar entre los contenidos en la Ley 25.916 es que específicamente
establece que son residuos domiciliarios aquellos que resulten como “consecuencia de los
procesos de consumo y desarrollo de actividades humanas, que son desechados y/o
abandonados”, y distingue también a los generadores entre: “generadores especiales
(producen residuos domiciliarios en calidad, cantidad y condiciones tales que, requieren de la
implementación de programas particulares de gestión) y los generadores individuales (aquellos
que no precisan de programas especiales de gestión)”, siendo cada una de las jurisdicciones las
que deben establecer los parámetros de determinación.
Es importante aclarar que la mayoría de las jurisdicciones incluyen entre los Residuos
Sólidos Urbanos a los provenientes de los domicilios, a los de los comercios y a los industriales
que no sean peligrosos (de gestión especial), los de poda y los inertes de demoliciones. Esto
en coincidencia con la Ley Nacional y los mencionados en otras fuentes internacionales.
En concordancia con esto, la Ley 13.592 y su modificatoria 13.657, son las que
Página
59
Esta Ley introduce modificaciones solamente en lo referido a la gestión del RSU en Partidos del Gran Buenos Aires y en el
CEAMSE.
zona el destino y tratamiento adecuado, de una manera ambientalmente sustentable, técnica
y económicamente factible y socialmente aceptable.
En los fundamentos para la sanción de la misma Ley se sostiene que la gestión integral
de RSU comprende las etapas de generación, disposición inicial, recolección, transporte,
almacenamiento, planta de transferencia, tratamiento y/o procesamiento y disposición final,
todo ellos con la intención de disminuir los impactos negativos.
Al igual que en la Ley Nacional, ésta establece que los Municipios deberán referirse a
una Autoridad Provincial, en este caso el Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable –
OPDS-, para adecuar los principios y objetivos fijados para la elaboración de Programas de
Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos (PGIRSU).
rechazado o descartado con un contenido líquido insuficiente como para fluir libremente,
procedente de las viviendas de los ciudadanos, edificios de oficinas privados o públicos, de
comercios, hospitales, asimilables a urbanos, incluyendo todo desecho y polvo que se origine
por actividades de barrido o limpieza de las calles, con exclusión de los residuos resultantes de
los procesos industriales y los residuos peligrosos o patogénicos”.
En la misma norma se establece también el concepto PCyR, siglas del Programa de
Clasificación y Reciclado de Residuos por el que se preveía realizar recolección selectiva en un
área específica de la ciudad que abarcaría aproximadamente al 10% de la población.
Se incluyen dentro de los residuos sólidos a recolectar mediante este servicio, residuos
domiciliarios, institucionales, de comercios que no superen el peso establecido, de estaciones
de transporte público, de parques y paseos, de escuelas, de mercados y ferias, de estadios
deportivos y de centros de reunión y de villas de emergencia. También los residuos sólidos
industriales no comprendidos en leyes especiales.
servicios, cumpliendo con las normativas vigentes que correspondieren a cada servicio. Por lo
Página
que se exime a la Empresa de recolectar los residuos a estos generadores; en tal caso deberá
denunciar antes las autoridades del EMVISUR y GA la novedad a fin de que éstos intervengan
según corresponda.
El servicio de recolección de residuos sólidos, no incluye la recolección de residuos
voluminosos que por sus características no puedan ser dispuestos, tales como:
En el presente conteo no están consideradas las cuadras a servir en las zonas periféricas
o rurales del Partido correspondiente a frecuencia 3 (F3) lo cual el Oferente deberá tener en
cuenta a los fines del servicio.
Del contenido de ese Programa resaltan, por su importancia para este estudio, una
serie de ítems que marcan los beneficios que resultan del proceso de clasificación y reciclado.
Por una parte el Programa expuesto permite incorporar “la jerarquía de la Gestión
Integral de Residuos Sólidos (GIRS): minimización, reuso, reciclado, tratamiento y por último la
disposición final”.
Por otra, considera que a partir de la separación en origen se desprenden una serie de
importantes beneficios que están en concordancia con los perseguidos tanto en la Ley General
del Ambiente como en la normativa provincial y los marcos de los que se desprenden:
aporta la tarea de separar los RSD. Brindando capacitación ciudadana para realizar la tarea, se
obtiene el mejor rendimiento en la separación porque el ciudadano sabe qué está haciendo y
Página
Se evita que la materia orgánica afecte el estado de otros materiales de interés por
su valor de mercado como es el caso del papel, vidrio, plástico y metales. Se obtiene papel y
cartón de mejor calidad para el reciclado y se reducen los costos de limpieza de los materiales
plásticos previo al reciclado.
Asimismo menciona cuáles son las pautas que deben regir la separación en origen, en
la búsqueda de optimizar los resultados:
Recolección selectiva de las fracciones separadas por los habitantes: recolección de dos
bolsas claramente identificadas: bolsa color verde conteniendo residuo orgánico y bolsa “color
habitual” (color distinto del verde) conteniendo residuos inorgánicos60.
Las últimas consideraciones del Programa hacen referencia al tema específico que se
trata en esta tesis por cuanto dice que “En comparación con la situación que existía a fines de
la década pasada *década del ’90, última del siglo pasado+, se destaca el aumento del valor
comercial de los materiales reciclables como papel-cartón, vidrio, plástico y metales en un
contexto laboral con muy alto porcentaje de desocupación en la ciudad (21,9%) 61, con el
consecuente aumento de la población recuperadora de estos materiales (actividad de cirujeo)”.
2012 la separación en origen y la recolección selectiva en la ciudad de Mar del Plata y otras
localidades del Partido.
Página
60
Al momento de implementarse el sistema de separación en origen y recolección diferenciada, se impuso la utilización de bolsas
verdes para los materiales potencialmente reciclables y negras para los restantes desechos.
61
INDEC, Informe julio de 2003. (Dato consignado en el original. Anexo X de la Ordenanza 16.000).
Durante el mes de Abril de 2012 la Municipalidad comenzó con la tarea de información
e instrucción a la población respecto de las modificaciones que se introducirían a partir del
mes de Mayo en cuanto a la recolección selectiva de los RSU.
Por su parte, los demás residuos debían ser depositados en bolsas de color negro los
Página
Al respecto conviene hacer algunas consideraciones que devuelvan a primer plano esta
actividad informal. Debe considerarse que prácticamente desde los albores de la ciudad, al
igual que en casi la mayoría de las ciudades argentinas y latinoamericanas como se detalló
anteriormente, existe un grupo de población que encuentra en la recolección informal de
residuos su medio de vida o mejor dicho de subsistencia.
En el Programa que se tomó como base para implementar las modificaciones en Mar
del Plata está explicitado claramente que entre los beneficios que acarrean las prácticas de
reciclaje se encuentra el beneficio económico directo que la misma representa para quien
opere tal sistema, y en el caso particular de Mar del Plata, en la Ordenanza que sienta las bases
para la concesión del servicio se establece que los RSU en general y los RSD en particular con
propiedad de la municipalidad y que el rédito que se obtenga de su explotación también le
pertenece.
manifiestan en contra del uso de carros tirados por caballos. Lo cierto es que en general el
Página
control y accionar de las autoridades al respecto ha sido débil, tal vez por considerar los
enlaces que existen entre las necesidades sociales y el cartoneo o cirujeo.
Al respecto se toman algunos tramos de la nota aparecida en Código Mar del Plata el
19 de Mayo de 2012 bajo el título “Insólito: en Mar del Plata controlarán que no se roben la
basura: Aunque parezca una noticia insólita, policías e inspectores de tránsito sumarán una
nueva tarea a la que ya tienen asignada por ley: evitar que se roben las bolsitas verdes de
basura. Fueron instruidos para que se proceda al secuestro de los vehículos no autorizados
sorprendidos cargando o transportando las bolsas verdes de residuos dejadas por los vecinos
en la vía pública. Con el comienzo de la separación domiciliaria de residuos, se incrementó el
trabajo de cartoneros, pero también de otras personas que aprovechan la ocasión para hacerse
de recursos fácilmente vendibles como papel, cartón, plásticos, metales, al quedar separados
en bolsas verdes por los vecinos hacen que sea muy lucrativo recoger estos residuos y luego
venderlos. El propio Intendente marplatense se ocupó de reunirse con el más alto jefe de la
policía regional para acordar la manera de reprimir un delito que no está tipificado, pues en
todo caso hubiera sido empleado contra los “cartoneros” que por años recorrieron las calles en
busca de elementos vendibles que les permitieran subsistir.
En este sentido, quien se desempeñaba entonces como titular del ENOSUR, [Manuel
Regidor] indicó que “han aparecido personas que recolectan las bolsas verdes con móviles
importantes, esto ha generado una nueva industria con una capacidad operativa mucho
mayor, que está robando basura reciclable que, en definitiva, tiene otro destino con un sentido
social para ser trabajados tanto en la cooperativa CURA como en el grupo de recicladores que
está en el predio”.
70
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Foto 2: Camión de recolección informal transportando bolsas enteras.
Fuente: codigomardelplata.com
“En el marco de ese reclamo, un grupo de cartoneros y de recicladores que cuentan con
depósitos y que compran el material recuperable fueron recibidos por el subsecretario de
Gobierno, Martín Aiello, quien, luego de aclararles que no hay ningún impedimento para que
aquellos levanten las bolsas verdes de la vía pública, acordó una nueva reunión para el próximo
miércoles a las 9 con la finalidad de seguir analizando aspectos de la tarea que desarrollan”.
“Al dialogar con LA CAPITAL, el funcionario agregó: "Lo que pretendemos es que exista
una buena convivencia entre los cartoneros y los recuperadores de la Cooperativa CURA; para
ello se generó una mesa de trabajo; lo que no vamos a admitir es que haya a gran escala una
recolección paralela de la basura que se genera en Mar del Plata y Batán ya que eso implicaría
aceptar la manipulación de residuos por parte de gente inexperta".
72
Página
Posteriormente sostuvo: "No nos anima otra intención que no sea la de mantener la
separación de residuos en origen y que la gente que se venía ocupando de la recuperación del
material reciclable pueda seguir haciendo esa tarea; para ello la vamos a ayudar a organizarse
y a que se identifique ya que no queremos que el negocio de la basura lo hagan dos o tres vivos
que aparezcan de la noche a la mañana; por otro lado tenemos que evitar que los cartoneros
se peleen entre ellos", acotó.
Por último, tras señalar que "hay cartoneros que trabajan con vehículos a tracción a
sangre", Aiello expresó que "también están los que lo hacen a pie o en camionetas; a estos
últimos les vamos a pedir que tengan los papeles en orden y que respeten las normas de
tránsito”.
Esto puede confirmarse al observar la cantidad de cartoneros que circulan cada día por
la ciudad y la cantidad de galpones y acopiadores de distinto tamaño dispersos por los barrios
periféricos de la ciudad y las dimensiones del movimiento que alcanza la mayor empresa
acopiadora de Mar del Plata.
A estos problemas, debe sumársele que a lo largo de años una cantidad muy
importante de personas –que llegó a estimarse en 400- se dedicaron a hurgar entre la basura
en procura de aquellos materiales que podían obtener para vender y sostener sus penosas
existencias. En las proximidades a la montaña de basura existía un asentamiento ocupado por
muchos de los mismos hurgadores, entre los que se encontraba una gran cantidad de mujeres
y niños.
El personal ocupado en tal tarea proviene de los antiguos trabajadores del predio que,
con apoyo municipal, conformaron una cooperativa –CURA62- que se encarga de la obtención
de los elementos recuperables que vuelcan los camiones recolectores en las bocas de
selección. En la actualidad trabajan en la planta alrededor de 40 personas, en tanto en el
predio antiguo aún permaneces muchas personas que rebuscan algo que vender. Es
importante señalar que si bien a la fecha el predio no se encuentra operativo, tampoco se han
llevado adelante las tareas necesarias para su cierre seguro y definitivo.
Con muy poco tiempo de diferencia desde la apertura del predio se implementó un
sistema de separación de residuos sólidos domiciliarios en origen y la recolección selectiva,
diferenciada para distintos sectores de la ciudad y de otras localidades del Partido de General
Pueyrredon, como se mostró en páginas anteriores.
Como se señaló, se dividió a la ciudad en tres sectores, al norte de la Av. Colón, entre
ésta y Av. Juan B. Justo y al sur de la misma, más las localidades de Sierra de los Padres y Batán
y en cada uno de ellos se instrumentó un calendario de recolección con una frecuencia de dos
días a la semana para el retiro de las bolsas con elementos secos. La sugerencia consistió en
74
que la población utilizara bolsas de color verde para los materiales recuperables,
Página
62
Común Unión de Recuperadores Argentinos.
Se llevó adelante una campaña de difusión a través de los medios masivos y se contó
con la colaboración de algunos actores sindicales, de servicios y comerciantes, pero lo cierto es
que tal campaña no se sostuvo en el tiempo y prontamente desapareció. Como resultado se
obtuvo que sólo una parte de la población internalizó la importancia de la separación de los
residuos y la práctica sólo es cumplida por un porcentaje de la población que podría ubicarse
en alrededor del 30%, de acuerdo a información extraoficial obtenida y de las apreciaciones de
los cartoneros entrevistados y del personal de la empresa contratada oficialmente para la
recolección, que fueron preguntados al respecto.
En función del planteo de este trabajo, no debe dejar de tenerse en cuenta que la
práctica de la separación de los residuos, ya sea como parte de un sistema formal de
recolección y tratamiento, o como resultado de la actividad informal del cirujeo, genera toda
una serie de actividades asociadas que enlazan las tareas primarias de recorrida callejera para
juntar los residuos con la producción de productos industriales a gran escala y ocasionalmente
el acondicionamiento y reuso de algunos elementos. Este trayecto entre el recupero y
reciclaje no es otra cosa que el sistema de vasos comunicantes que Santos describe en su
teoría de los circuitos económicos.
En segundo lugar, a dos años de la puesta en marcha de este sistema, tal importancia
aún no se ha arraigado suficientemente en la población que mantiene las antiguas costumbres
75
de eliminar sus residuos sin separación previa. Es altamente probable que esto obedezca a
Página
En tercer lugar debe tenerse en cuenta que a pesar de algunos anuncios realizados por
las autoridades al presentar este nuevo sistema, en el año 2012, las expectativas en torno a los
resultados del mismo se han alcanzado sólo parcialmente porque los volúmenes y tonelajes de
residuos que ingresan al circuito del reciclaje por la vía informal supera muy ampliamente al
que se obtiene a partir de la recolección formal. Más adelante se realizará la comparación
correspondiente.
Es probable que esto obedezca también a varios factores, como por ejemplo la falta de
una campaña de educación sostenida en el tiempo, como ya se indicó, pero también deben
observarse otros factores que se desprenden de algunas deficiencias en el funcionamiento
concreto del sistema de recolección formal. Como ejemplo vale mencionar que en el pliego de
licitación por el que se otorgó la concesión vigente se establecen condiciones para el retiro de
pesos mayores a los 20 kilos, objetos muebles, elementos que no pueden ser embolsados, etc.,
y para ello también se establecen tarifas a pagar, en algunos casos, por la población y
comerciantes, independientemente de la tasa que habitualmente contempla el servicio de
recolección. Específicamente la Ordenanza Nº 20.002, destinada a productores de residuos de
más de 20 kilogramos asimilables a los domiciliarios, por día, deberán contratar un servicio
privado que los recolecte. Esta norma está dirigida a comercios, industrias e instituciones,
independientemente que los mismos además deberán contratar también los servicios
específicos si generan residuos especiales.
Además del costo que se debe afrontar, también influye el tiempo que media entre el
requerimiento de tal servicio especial y la efectivización del mismo, por lo que es amplio el
rechazo que se obtienen de la población sobre esta mecánica y más intenso el acercamiento
de la ciudadanía a los cartoneros que recogen diariamente todos lo que se deja en las veredas
o se les entrega personalmente.
En síntesis las principales debilidades del sistema tienen sus causas en las deficiencias
de la campaña de concientización desarrollada que no ha sido suficiente para que los vecinos
realmente comprendan el significado positivo que tiene la separación de residuos en origen
para que todo el sistema funcione plenamente; por otra parte el esquema de recolección
diferenciada no fue plenamente aceptado por la población que en general considera que los
TODOS los residuos deben ser retirados diariamente o en la frecuencia que corresponda al
barrio donde viven y finalmente los inconvenientes que encontró la autoridad municipal para
evitar que los recolectores informales cesaran su actividad que consiste justamente en la
76
Otra de las debilidades significativas del nuevo sistema es que a la vez que se le
solicitaba a la población la mayor colaboración y respeto del calendario para sacar residuos
recuperables, los recolectores que trabajan en la empresa 9 de Julio, tenían (y siguen teniendo
a Junio de 2014) la indicación de levantar la totalidad de las bolsas depositadas en las veredas,
según lo manifestó un recolector que fue preguntado en el macro centro de la ciudad:
“… en algunas partes, por acá y en algunos barrios se nota que la gente sabe
más porque saca las bolsas livianas, verdes o de cualquier color pero livianas,
pero la mayoría saca como siempre…. a nosotros nos dijeron que levantemos
todo para que la gente no se queje que dejamos cosas en las veredas y el
sindicato nos dijo que nosotros no tenemos nada que ver que no nos
corresponde andar pensando qué tienen las bolsas… igual te das cuenta por el
peso… y cuando el camión compacta porque chorrea…pero que controlen los de
la municipalidad, no nosotros… a nosotros la gente nos putea si nos ven que
dejamos bolsas.” (17-06-14)
Respecto del tonelaje total de residuos sólidos urbanos que se generan en las localidades
del Partido, el responsable del Ente de Obras y Servicios Urbanos, en declaraciones radiales del
Página
63
Cantidades referidas a 9 meses (17 Agosto 2012- 14 Mayo 2013)
64
El informe brindado en 2014 está referido a todo el período de funcionamiento de la planta de separación, desde 2012.
65
Con referencia a esta cantidad posiblemente se haya deslizado un error al cargar los datos a la página web oficial de la
Municipalidad.
66
Esta cantidad es inconsistente.
10 de Junio de 2014, Artime sostuvo que durante los meses de invierno tal cantidad alcanza las
900 tn., en tanto en verano la cantidad sería de aproximadamente entre 1100 y 1150 tn. /día y
que alrededor del 95% es generado en la ciudad de Mar del Plata, seguida por Batán y Sierra de
los Padres.
También señaló el funcionario que tales tonelajes tienen explicación en los hábitos de
consumo que posee nuestra sociedad y a la moda y tipo de embalajes y envoltorios con que
habitualmente se comercializan los productos.
Sintetizó que del volumen total de RSU generados, alrededor de 200 tn. corresponden a
residuos recuperables para ser reciclados, de los cuales entre 60 y 70 tn. llegan a la planta de
separación y que a través del trabajo llevado adelante por los separadores el total efectivo de
recuperación se ubica alrededor del 8-10%.
Para finalizar sostuvo que como resultado del monitoreo que el Ente realiza sobre la
generación de residuos en general y sobre los resultados de la separación en origen y posterior
separación en la planta operada por CURA en particular, a partir del día 10 de Junio
(posteriormente se pospuso para el día 17) se introducirá una modificación respecto de los días
para el retiro selectivo de las bolsas conteniendo residuos secos reciclables y que se está
trabajando para diseñar un proyecto integral de manejo de residuos sólidos urbanos asociado a
la instalación de una industria recicladora en la ciudad.
Históricamente puede rastrearse la existencia de cirujas que recorrían Mar del Plata
recolectando aquellos elementos que les servirían posteriormente para vender y obtener unos
magros ingresos con qué sobrevivir y actualmente, algo perfeccionada, la práctica se mantiene
intacta, sólo que creció a la par que lo hizo la ciudad.
Tal vez la imagen que más se recuerda es la del botellero que utilizando un carro o más
tarde una bicicleta recorría la ciudad anunciándose a los gritos en cada esquina a la espera que
desde las distintas casas asomaran los vecinos a entregarle las botellas acumuladas a lo largo
de la semana. Claro, el material más difundido como envase era el vidrio, luego entró en
competencia el plástico, más liviano, más higiénico porque el envase se desecha aunque más
perjudicial para el ambiente. También juntaban trapos y fierros.
Las sucesivas crisis económicas por las que atravesó nuestro país y que tuvieron
fortísimo impacto en Mar del Plata, que alcanzó en ocasiones el índice de desocupación más
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alto del país, sumadas a corrientes migratorias que alimentan la población de la ciudad con
Página
distinta intensidad pero de manera permanente, hacen que el número de cartoneros haya ido
en aumento y si bien no existen datos oficiales al respecto, puede estimarse actualmente en
alrededor de 1000/1500. Este número resulta de intentar cálculos a partir de datos indirectos
obtenidos en distintas entrevistas a los propios cartoneros, a acopiadores, a concejales, a
funcionarios del área de Calidad de Vida y Acción Social de la Municipalidad y las referencias
sobre totales recuperados en el circuito informal.
Pocos días antes, cuando habían pasado los primeros días del inicio de la separación,
un grupo de recuperadores de la planta de clasificación también habían presentado sus quejas
cortando el ingreso al mismo, debido al escaso volumen de residuos reciclables que ingresaba
al mismo, agudizándose la tensión entre los cirujas de “adentro” y de “afuera” del predio.
67
Entrevista telefónica con la Licenciada Graciela Miyawaky.
necesitamos que se identifiquen y vamos a poner a disposición de estos vecinos la Secretaría de
Producción y de Desarrollo Social para abordar todas las dificultades que aparezcan en el
camino *…+ vamos a ayudar a que los vecinos que lo vienen haciendo desde hace varios años
continúen con esta actividad, ya sea desde el sostén de una familia o con la posibilidad de
llevar un jornal a casa”, expresó.
Otras fuentes indican que el número de cartoneros duplica y más esos valores, así lo
señala María Cristina Buenahora quien se transformó en vocero a los cartoneros durante esos
días de mayor tensión en Mayo de 2012. En una entrevista aparecida en el sitio loquepasa.net
aseguró que “hoy somos unas 1900 personas que dependemos del cartoneo. Acá estamos
hablando de los que utilizan carrito a mano, carrito en bicicleta, en moto, camioneta y
caballos”, detalló.
Y agregó que “lamentablemente hay muchas mujeres y muchachos jóvenes con hijos
que hacen el trabajo de cartoneo en carritos. Caminan todo el día para conseguir un sustento”.
80
Página
4. CARACTERÍSTICAS DE LA RECOLECCIÓN INFORMAL DE RESIDUOS.
RESULTADOS DEL ANÁLISIS EFECTUADO EN LA CIUDAD DE MAR
DEL PLATA.
Lo primero que hay que señalar es que en esta tarea informal existe una multiplicidad
de factores intervinientes por lo que todos ellos deben ser considerados para poder realizar
un análisis en profundidad y alcanzar resultados acabados.
importante cantidad de esos factores que se enumeran a continuación y que han permitido
dar respuesta a la pregunta de la investigación y confirmar la hipótesis planteada.
Página
Se pudo apreciar que existe una fuerte relación entre el tipo de vehículo que utilizan y
la cantidad y extensión de las recorridas que realizan. Las principales diferencias que se
detectaron están asociadas con el tipo de vehículo que utilizan y en parte con la prohibición
de circular por algunas áreas de la ciudad con carros tirados por caballos. En igual sentido los
vehículos automotores, evitan circular por la zona céntrica debido a que los mismos suelen no
cumplir con los requisitos legales mínimos, lo que implica el riesgo de ser multados y/o
detenidos y secuestrados. A partir de las respuestas obtenidas en tal sentido, se elaboraron
los planos que muestran las recorridas que efectúan tanto en los trayectos de recogida como
para la venta de los productos. Estos planos que también permiten apreciar las grandes
distancias que estos recolectores recorren cada día se confeccionaron según la siguiente
categorización: vehículos con motor (motos y automóviles), carros tirados por caballos, carros
artesanales arrastrados con bicicletas y carros arrastrados manualmente, bicicletas sin carros y
recolectores con bolsas.
cuestiones resaltan en los diálogos mantenidos con los actores, como por ejemplo la
Página
“Yo ando con esta camionetita porque vengo del fondo de La Herradura,
imaginate que no me puedo venir caminando o en bicicleta y lo que cargo
acá no lo podría cargar en nada, acá le cargo como 400 kilos ¿en qué llevo
eso si no tengo la rastrojita *se ríe+… eso sí yo no me meto por las avenidas
porque ahí te re putean si venís despacio y andan más milicos y todo… yo
vengo todo por adentro, subo a Colón unas cuadras no más y después ya
agarro Falucho o alguna de adentro…. Y si me falta de todo [se ríe], tengo un
08 firmado y carnet, [se ríe] carnet verdadero tengo no de estos truchos que
ahora entregan los chorros de la Municipalidad cobrando coimas68 *se ríe+…
pero de lo demás no tengo nada, no tengo plata para hacer todos los
trámites que te piden y ésta no pasa todas las inspecciones que te hacen. Yo
tengo seis pibes así que me vengo con lo que tengo porque les tengo que dar
de comer…”
Yo siempre paro acá porque trabajo acá en la cochera que está arriba y lo de
los cartones lo hago más por costumbre y para darle una manito a la gente
68
A mediados de Mayo, cuando se realizó esta entrevista, se investigaba en la ciudad una causa por irregularidades en el
otorgamiento de licencias de conducir y el tema tenía amplia difusión en los medios de comunicación.
del barrio, de la zona que cuando tienen cosas que hay que tirar me las dan a
mí y yo las voy cargando, cuando se llena me voy hasta lo de Miguelito que
está allá en Mario Bravo y lo vendo…. es el único movimiento que hago
porque la verdad que no está como para andar mucho … si me llega a pasar
algo con ésta voy preso porque no tengo ni la VTV ni seguro ni nada, pero me
voy a la mañana temprano, despacito y cruzo Juan B. Justo en el semáforo y
voy por adentro, despacio… después vengo y la paro acá otro vez. A veces la
muevo una sola vez por semana a lo sumo dos…. ahora para colmo se me
rompió la bomba y ando con el bidón ese…. la tengo en venta pero no me
dan nada….
84
Página
caño que sostiene el asiento de la moto y un eje en que insertar las ruedas que generalmente
son de moto.
Página
Fotos 9 y 10: Carros artesanales acarreados por motos.
El uso de motocicletas para esta actividad presenta algunas ventajas, según los
informantes, que básicamente están referidas a que el peso que pueden acarrear es mayor
que si utilizaran una bicicleta o un carro manual, que pueden ir dos personas (una suele ser un
menor o una mujer delgada) y les permite hacer dos rondas diarias, de ser necesario, sobre
todo en verano, vacaciones de invierno y fines de semana largo cuando se incrementa la
cantidad de residuos.
La importancia de poder salir dos personas radica en que hacen la tarea más rápido y
en el caso de llevar menores, los mismos son los encargados de entrar a los negocios a
solicitar alimentos, sean productos de panadería, de verdulería u otros comestibles, en tanto
las mujeres suelen ser las encargadas de tocar timbres de casas o departamentos
preguntando “tiene ropa para dar” o “tiene algo para dar”.
La división de las tareas según sexo y edad obedecen a una lógica que los cartoneros
emplean para obtener mejores resultados. Los niños producen una mayor sensibilidad en las
personas y amplían las posibilidades de recibir donaciones, generalmente de alimentos, y por
su parte, las mujeres que piden o “manguean” causan menos rechazo, en líneas generales,
que los hombres, por lo que también la respuesta es más favorable. Reciben
mayoritariamente ropa, calzado y en menor medida alimentos envasados.
Esta estrategia la utilizan también los cartoneros que circulan a pié por la ciudad,
cuando salen varios integrantes del hogar, opción que suele darse algunos días de la semana,
como se consignará más adelante.
Los relatos obtenidos respecto de la inclusión de menores en esta tarea son los más
impactantes como así también las expresiones de los padres cuando cuentan que llevan a sus
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hijos para que sean ellos lo que bajen a pedir porque de esa manera logran mejor el cometido.
Página
Miguel, quien fue entrevistado el día 12 de Mayo, alrededor de las 17:30 horas en
Buenos Aires entre Falucho y Gascón, cuando estaba parado en la vereda y tenía su moto y
carro estacionados en el asfalto, contó:
“estoy esperando a la nena que fue a recorrer la cuadra visitando todos los
negocios de comestibles para ver que le dan”.
Cuando volvió la pequeña, Naiara de 9 años traía varias bolsas conteniendo frutas, pan
y una bolsa más grande con carcasas de pollo. Además traía una bolsita pequeña con
fluflitos69 de colores, le entregó al padre todos esos elementos y le preguntó “puedo comer”,
señalando los cereales a lo que su padre le respondió:
“sólo uno o dos, porque sino vos después le contás a tus hermanos y los otros
lloran si te los comiste todos”.
“tengo cuatro hijos más y una nietita que también vive con nosotros y si el
que sale conmigo se come todo lo que le dan y después cuenta en la casa lo
que comió, los otros lloran, entonces la condición para que vengan al centro
es que lo que reciben lo lleven para compartir con los otros hermanos”.
En cuanto a la mecánica que emplea para que sus hijos recorran los negocios contaba
así:
“yo me paro así casi a mitad de cuadra y ellos van de esquina a esquina, no
dan la vuelta porque sino los pierdo de vista, pero es la única forma de juntar
algo más de comida de la que se puede comprar con lo que yo saco con el
carro, somos muchos y hay que poner todos los días el plato arriba de la
mesa…..”
Otro entrevistado que circulaba en moto es Juan Carlos, un señor de 66 años que vive
en el Barrio Alto Camet, justo detrás de la caballería y viene todos los días al centro (fue
entrevistado en Santa Fe entre Bolívar y Moreno), a juntar cartones, papel, metales, maderas,
algún mueble o artefacto y si encuentra algo especial como puede ser ropa (que hay muy
poca en la calle), además cuando regresa para su casa pasa por una carnicería, una verdulería
y una panadería donde sistemáticamente lo ayudan con productos frescos.
Llamativamente Juan Carlos estaba muy prolijo y con sus ropas limpias y hablaba muy
fluidamente. Contó que está jubilado pero como es separado y ahora está juntado con otra
chica y tienen hijos pequeños no le queda más que salir a cartonear. Respecto de la utilización
87
“yo vivo justito atrás del Parque Camet y vengo todos los días para esta zona
cerca del centro porque es donde hay más para juntar, venís acá y ya sabes
69
Golosinas en base a cereales inflados
que te vas lleno, por otros lados andas y andas hasta que llenas el carro y en
definitiva lo único que haces es cansarte o gastar plata en nafta si andas en
moto. Y a mí no me queda otra más que salir en moto porque ya no aguanto
andar cinchando con un carro a mano y en bicicleta tampoco porque me
queda muy lejos y hay que arrastrar para llevar 100 0 150 kilos, por eso hace
como cuatro años ahorré y me compré esta moto que gracias a Dios anda
bien”.
Fuente: Elaboración propia a partir de datos primarios, sobre la base de un plano obtenido en www.Googlemaps.com, Abril-Julio
2014.
88
comprendido por las calles Alberti, Jujuy, Av. Libertad y la costa, inclusive las arterias
mencionadas; en tanto en el siguiente establece que la prohibición afecta también la
circulación por las Avenidas Libertad, desde la costa hasta Av. Jara; Av. Luro desde la costa
hasta Av. Arturo Alió; Av. Colón, desde la costa hasta Av. Jara; Av. Independencia, desde la
costa hasta la Av. Juan B. Justo.
Plano 4: Área y arterias con prohibición de circulación con tracción a sangre según Decreto
Nº 40/68.
Incluso en 2009, hubo un intento por parte del entonces Concejal Fernando Rizzi,
actual Defensor del Pueblo, de realizar un cambio de los carros a caballo por motos, para lo
cual podrían utilizarse las motos secuestradas por infracciones de tránsito y que no hubiesen
sido retiradas una vez vencidos los plazos legales correspondientes. Ese proyecto no tuvo
buena recepción por parte de los “carreros” debido al costo que significaría el mantenimiento
de la moto, el gasto de combustible diario y seguros y acondicionamiento para poder circular
que les requería la propia municipalidad y finalmente no prosperó en las comisiones internas
del Concejo Deliberante y perdió estado legislativo.
entrevistas se desprende que la circulación de estos carros (a los que los cartoneros que
utilizan otro tipo de vehículos suelen denominar “carretas”) se tornan un serio inconveniente
Página
para el tránsito tanto por el ritmo que poseen como porque son detenidos repentinamente,
sin señales y en doble fila.
Por otra parte es poco grato ver las condiciones en que se encuentran algunos
caballos que caminan importantes distancias sobre asfalto y muchas veces no están
correctamente herrados, arrastran pesos importantes y recorren distancias considerables
soportando condiciones climáticas extremas, sobre todo en verano.
En otros sectores de la ciudad como por ejemplo el área comercial de las calles
Güemes, Alem y las Avenidas Jara-Carlos Tejedor y Juan B. Justo la circulación de carros es
menor, debido a la misma razón. En el resto de la ciudad circulan libremente incluso de
manera intensa por arterias como Alberti, Gascón, Bolivar, 14 de Julio, Dorrego, Balcarce o 9
de Julio, entre otras. Estas calles son corredores bastante directos y alternativos para ingresar
y egresar del micro y macro centro y de otras áreas de concentración comercial. Lo mismo
sucede en la zona próxima el centro comercial de la Calle 12 de Octubre, en el barrio del
puerto local.
Entre las ventajas que marcan los propios cartoneros que se desplazan en carros
figuran que pueden salir varios integrantes de la familia de manera que rápidamente pueden
recorrer toda una cuadra levantando los elementos que se encuentran en las veredas,
ingresando a los comercios para solicitar donaciones y sobre todo que en los carros pueden
llevar mayor cantidad de kilos que en cualquier otro medio. El relato de Clara hace referencia
a esto:
“… yo cartoneo con mis hijos, siempre con alguno de los varones porque para
manejar este carro grande ellos andan mejor, a mí ya me cuesta porque me
duelen mucho las rodillas y las manos por la artrosis, yo bajo poco, me quedo
acá y voy acomodando mientras ellos van y vienen de una corrida por toda la
cuadra, si somos dos o tres hacemos más rápido, porque hay que juntar
enseguida para que no nos jodan por el carro, si vamos andando no nos
persiguen tanto, el tema es si estamos parados, las de la camioneta verde70
quieren que estacionemos… pero no se puede, ellas no tienen ni idea …
90
nosotros salimos con este carro grande porque nos rinde más, acá cargamos
Página
70
Por camionetas verdes se refiere a las utilizadas por las patrullas del Departamento Municipal de Inspección de Tránsito que
están pintadas con rayas verdes y blancas y el personal posee indumentaria de idéntico color.
cualquier cosa, hasta una bañadera podemos llevar y esas sí que
pesan!!!...”71.
Como dijo Clara “Es muy mansita [la yegua], está acostumbrada a andar
entre los autos”
Justamente la capacidad que tiene un carro, muy superior a la que poseen los demás
vehículos utilizados, a excepción de algunos automotores, es lo que establece una diferencia
que suele acarrear conflictos ya que muchas veces otros cartoneros los acusan por levantar
todo lo que encuentran a su paso y no ser solidarios.
“son como pirañas que se comen todo rápido y no dejan nada para los
demás…, ellos juntan todo, todo, se llevan una cocina vieja, cartón, botellas
de vidrio, de plástico, fierro, de todo, en cambio nosotros llevamos pocas
botellas de vidrio porque pesan mucho y no rinden porque está bajo el vidrio,
en cambio llevamos más cartón que dá más, pero si pasan ellos se llevan
todo, no son solidarios y eso que en la calle hay mucha solidaridad en general
entre todos nosotros, pero con ellos no, se las dan de capos de la calle, son
los capos… y bueno… pero por suerte por acá ahora andan pocos porque los
corren bastante del centro, a la noche igual se meten pero yo no vengo de
noche” (Marco Antonio, cartonero en bicicleta, entrevistado en Rivadavia
entre Santiago del Estero y Córdoba).
Otros carreros entrevistados fuera del centro, manifestaron que dejaron de ingresar a
91
esa zona para evitarse problemas y porque de esa manera la municipalidad no los “molesta”,
Página
71
En este caso, Clara se prestó a realizar la entrevista, respondiendo todos los temas, pero cuando le solicité autorización para
tomar fotografías, su hijo, Roberto, se negó rotundamente. Fue la única oportunidad en la que no se pudo obtener registro
gráfico.
mediodía cuando regresaba hacia el Barrio Jorge Newbery con dos de sus hijos porque los
chicos debían ir a la escuela poco más tarde. Juan Carlos relató
bolsón para ir juntándolas y los carros manuales o tirados por motos o bicicletas no poseen la
Página
altura necesaria para llegar ese bolsón colgando. Varias veces los cartoneros dejan de lado
estas botellas y comentan que después los que vienen en carros las llevarán porque pueden
acarrear una cantidad suficiente para alcanzar unos kilos, porque llevar muy pocas no
conviene.72
93
Página
72
Hay que tener en cuenta que una botella de 1.5 litros de agua mineral o de aguas saborizadas pesa aproximadamente 30
gramos, siendo las de 2.25 litros de la más reconocida bebida cola la de mayor peso, con casi 50 gramos.
Plano 5: Recorridos de recolectores que utilizan carros tirados por caballos
Fuente: Elaboración propia a partir de datos primarios, sobre la base de un plano obtenido en www.Googlemaps.com, Abril-Julio
2014.
En general realizan una recolección más específica, dando prioridad a los elementos
que se venden en el día como es el cartón, papel de todos los tipos, algunas botellas, metales y
artefactos pequeños de los que pueden obtener partes como repuestos, incluido el cobre si se
94
En algunos casos, estos cartoneros hacen una parada intermedia porque una vez que
llenan el carro en el área céntrica se dirigen a un acopiador relativamente cercano 73 como por
ejemplo el ubicado en Avenida Luro casi Tierra del Fuego o el que está en Av. Jara y la vía en
73
Es importante reiterar que la totalidad de los entrevistados provienen de barrios alejados del microcentro de la ciudad, ubicados
mayormente en la periferia sudoeste y noroeste, de allí que Luro y Tierra del Fuego aparezca como “cercano”.
antiguos galpones del Ferrocarril y de una antigua empresa de transportes y mudanzas,
venden allí esa primera carga y luego continúan el recorrido hacia sus domicilios pero siguen
cargando todo aquello que encuentran en ese regreso para finalmente vendérselo a algún otro
acopiador localizado en el camino o a alguno del barrio, aunque en este caso el precio de venta
suele ser menor. Esta práctica también es común entre los que circulan caminado, por lo que
en ambos casos sus recorridos están formados por dos áreas diferenciadas: el centro74 y los
distintos barrios que atraviesan hasta llegar al que habitan.
Se diferencian de los anteriores, que tiran sus carros con motos, en que ven limitada su
capacidad para recolectar en función del peso que pueden arrastrar con sus propias fuerzas,
aunque algunos han manifestado que igualmente pueden cargar hasta 100/120 kilos,
dependiendo también el tamaño del carro y sobre todo del tamaño de las ruedas del mismo.
95
Página
74
En su mayoría denominan centro a una zona de la ciudad más amplia que la que se considera así en distintas fuentes y
organismos. En el apartado correspondiente a la zona de actividad se ampliará al respecto.
Se agrega una fotografía más, de un cartonero que utilizaba sólo la bicicleta, sin carro
de tiro y que llevaba apoyados sobre el asiento una gran cantidad de cartones de buena
calidad. Interrogado respecto del recorrido que realizaba respondió que vive en el Barrio
Libertad, altura Luro 9000 y cartonea en el centro, lo que indica que camina alrededor de 14
km. sólo para movilizarse desde su domicilio hasta la zona donde junta elementos y que la
mitad del camino de regreso lo desanda caminando con su bicicleta cargada.
Fuente: Elaboración propia a partir de datos primarios, sobre la base de un plano obtenido en www.Googlemaps.com, Abril-Julio
2014.
4.1.5. Carros artesanales tirados manualmente: al igual que en los dos tipos
anteriores, presentan una amplia variedad de diseño, tamaño y materiales empleados en su
construcción, algunos más reforzados y con distintos tipos de ruedas hasta otros
aparentemente más endebles y simples carritos de supermercado.
A los efectos de la recolección, la única diferencia que presentan está relacionada con
la capacidad de carga que poseen, por lo que suelen restringir la variedad de elementos que
juntan que se compone básicamente de cartón, papeles, metales y poco más y al igual que los
portadores de los carros tirados por bicicletas, realizan una parada intermedia en algún
acopiador cercano para poder descargar y luego continuar el recorrido.
97
Entre los cartoneros con carritos manuales, resaltan dos: Carlos porque se desplaza
Página
desde su vivienda casi en el límite noroeste del Barrio Libertad, en una camioneta que
presenta aparentemente buenas condiciones para circular, la que deja estacionada todos los
días en pleno centro y luego recorre toda la zona que ha delimitado para su trabajo llevando el
carro manual que él mismo construyó a partir de un carrito de supermercado grande. De su
relato se desprenden varios indicadores del nivel de organización con que trabaja, como son
extensión de la jornada, diagrama del recorrido y razones por las que utiliza dos medios para
llevar adelante la tarea:
“yo vengo a trabajar todos los días, de lunes a sábado, a las 9 de la mañana
ya estoy parando acá y me voy a las tres de la tarde. Como vivo lejos y recorro
todo el centro necesito venir con la camioneta porque si no, no podría llevar
la cantidad de cosas que llevo todos los días, yo para poder vivir necesito
sacar trescientos pesos por día, para juntar un sueldo mediano como el de un
empleado por mes, de ahí para arriba es ganancia, pero hay que ser
organizado, no perder tiempo y ganarse la confianza de la gente. Yo hace
varios años que hago esto y que paro acá entonces todos me conocen, yo
dejo la camioneta y las chicas de los negocios vienen y meten las cajas
directamente, yo después acomodo. Mientras yo voy y vengo con el carrito,
mi sector es Independencia, Colón, Luro y Buenos Aires, sin cruzarlas. A la
mañana cuando empiezo, voy de acá hasta Colón y de ahí hasta
Independencia y vuelvo por la vereda par de Bolivar y por Santiago hasta acá
y después voy haciendo ese mismo recorrido por cada calle y ahora ya voy a
arrancar para aquel lado [señala hacia la costa] y hago lo mismo, pero
empiezo por Luro, San Martín y voy subiendo para este lado ¿me entiende?.
Fotos 17 y 18: Interior de la caja de la camioneta de Carlos y carro manual que utiliza
98
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“Y hago esto porque no hay laburo, si uno va a pedir trabajo lo primero que te
dicen es si tenés experiencia y si decís que no ni te hablan más ¿qué quieren
que les diga que sí, si nunca trabajé? [se ríe]. Yo arranco temprano como a las
8 y me vengo para esta zona, por acá hay mucha gente buena que me ha
visto varias veces y cuando le pido algo tratan de darme y otra gente que ya
me ve y me hace seña para darme algo… una señora de acá cerca me da los
diarios todas las semanas, algunos negocios me dan los cartones, me los
guardan para que no se mojen o para que no me los afane otro *se ríe+… pero
bueno, esto es así. Yo hago lo que puedo y cuando calculo que el carro ya está
lleno, lo voy tanteando para ver como andamos con el peso, voy pegando la
vuelta para el lado de Jara, a vender y después agarro para el lado de Juan B.
Justo … saco unos 70/80 pesos por día, a veces menos, a veces más…
99
Página
“Yo salgo solo todos los días de la semana, menos los domingos, pero los
sábados salgo con mi señora y los chicos más grandes, estos dos y uno que
anda con mi señora, los dos más chiquitos se quedan con mi cuñada porque
es muy lejos y después no quieren caminar.
Cuenta que sus hijos más chiquitos tienen 4 y casi 6 años y como viven en el Barrio
Nuevo Golf, se cansan de caminar.
Yo cartoneo siempre por esta zona, de la terminal vieja y un poco más arriba
anda mi señora los sábados. Nosotros venimos derecho por Córdoba y en San
Lorenzo, Alvarado o Avellaneda ella ya agarra para el lado de Sarmiento,
cada vez va por una calle de esas y toca timbre en todos lados y va
preguntando si tienen algo para regalar, va caminando despacio, se trae unas
bolsas grandes y el nene le ayuda …. A ella lo que más le dan es ropa, hay
señoras que ya la conocen y le tienen preparado algo, otras le dan algo de
mercadería y a veces algo de golosinas para los chicos. Hay gente muy buena
y como ya la conocen siempre le dan. Ellos van cargando y después nos
reunimos en Sarmiento y Colón, ahí nos esperamos, el que llega primero
espera, acomodamos todo y después ya volvemos”.
También se entrevistó a Fernando, que iba caminando por una vereda y recolectando
cajas de cartón, al preguntarle si efectivamente estaba cartoneando a pie respondió que sí,
pero que él venía hasta la zona del macro centro en un auto que estaba estacionado a pocas
cuadras del lugar del encuentro, donde estaba su señora y los tres niños pequeños y que el
salía a hacer la recorrida con el nene más grande para visitar algunos negocios que ya lo
conocían y levantar lo que encontrase en las veredas. Las apreciaciones de Fernando serán
incorporadas en otro ítem porque él no vive exclusivamente de cirujeo sino que posee trabajo
100
Entre los cirujas sin vehículo también se entrevistó a Frankestein, apodo con que se
autodenomina un señor mayor que camina arrastrando un bolsón debido a que su físico ya no
le permite tirar un carro o andar en bicicleta. Se lo entrevistó en un galpón acopiador cuando
había ido a vender los cartones recolectados. Parte de su relato y la foto se incluyó en el ítem
correspondiente a recorridos, por cuanto, justamente por las condiciones de salud
mencionadas, sólo recorre la zona inmediata al galpón donde vende.
Independientemente del tipo de vehículo que utilizan, todos los cartoneros realizan
idéntica labor, caminan mirando a un lado y otro de las calles, seleccionan, inspeccionan
bolsas, cajas y otros residuos depositados en las veredas, algunos acondicionan en el lugar,
otros cargan desordenado y luego en alguna parada acomodan y suelen descansar algún
tiempo, algunos fuman en ese descanso o ingieren alimentos o bebidas, saludan a los ya
conocidos a su paso y caminan, caminan, caminan… la ciudad aliviándola de los desperdicios
que nadie retira sino ellos.
Plano 7: Recorridos de recolectores con carros tirados manualmente y/o con bolsas
101
Página
Fuente: Elaboración propia a partir de datos primarios, sobre la base de un plano obtenido en www.Googlemaps.com, Abril-Julio
2014.
4.2. Materiales que recolectan: Cómo se consignó con anterioridad los cartoneros
recolectan “de todo” cómo ellos mismos declaran, cartón, papeles de todo tipo, metales
varios, artefactos, colchones, ropa, alimentos, vidrio, materiales de construcción y de
demoliciones, plásticos, maderas, trapos, como también otros elementos que piden
especialmente: alimentos frescos, mercadería, etc., etc., etc., … de todo literalmente.
Siguiendo estas consideraciones a las que se sumaron datos obtenidos por informantes
en galpones acopiadores, en la empresa acopiadora mayorista de la ciudad y por datos
oficiales vertidos por organismos municipales de incumbencia en el área de los residuos se
puede establecer el siguiente listado jerarquizado de elementos que recuperan los cartoneros:
Además recolectan otros elementos que usan ellos mismos y sus familias o venden a
102
particulares:
Página
Sólo Alicia y Cecilia son las mujeres entrevistadas que cartonean solas, Alicia con su
carrito bajo tirado por una bicicleta y Cecilia con un carrito manual. Cecilia manifiesta que:
“…vivo sola hace años, soy separada y mis dos hijos son grandes, yo tengo 54
años, antes iba al pescado pero ya no puedo porque tengo artritis en las
manos, ¿ve cómo las tengo? y no aguanto el dolor [efectivamente muestra
las manos y se notan sus dedos bastante deformados], entonces no me queda
otra cosas que salir a cartonear. Tampoco tengo jubilación porque no me da
la edad ni tengo aportes porque en el puerto se trabaja en negro, lo único que
puedo hacer es esto y para colmo estoy sola, lo tengo que hacer para poder
vivir”.
75
Técnicamente las entrevistas siempre estuvieron dirigidas a los mayores, las respuestas dadas por menores surgieron
espontáneamente de su parte.
Tabla 2: Estructura por sexo y edad del conjunto estudiado
No obstante hay algunos casos en que personas muy jóvenes salen solos a hacer la
recorrida, siendo esta una práctica habitual, así lo relatan Santiago y Maia Celeste que fueron
entrevistados en Gascón y Guido, casi junto a la vía:
“.. yo tengo 16 años76 y mi hermana 11, salimos casi todos los días a la
mañana temprano porque mi papá a la mañana no puede venir a juntar
porque va a ordenar y vender lo que él junta a la tarde y a la noche.
Nosotros somos muchos y vivimos de esto, entonces salimos tres veces, a la
mañana yo y alguno de mis hermanos y después mi papá cuando va a vender
también recorre y a la noche después sale a juntar otra vez, a la noche hay
que salir antes que pase el camión, a la tardecita.
Maia agrega que ella sale a veces, “… pero siempre con alguno de mis
hermanos varones porque no sé llevar el carro y mi mamá no me deja salir
sola ni loca, ni caminando me deja venir al centro, entonces vengo y
aprovecha para pasear [se ríe], a veces viene mi otra hermana también, la
que me sigue … igual además de pasear también nos bajamos y juntamos o
104
entramos a los negocios a pedir porque nos dan más y si mi hermano fue a
buscar algo vamos acomodando … total él se queda quietito [se refiere al
Página
caballo+….”
76
Ante la necesidad de establecer una edad mínima a partir de la cual se consideraría que la persona podía ser entrevistada, se
optó por considerar los 16 años, en consonancia con la edad mínima requerida para emitir el voto
También hay casos donde se han relatado historias que remarcan que el único que
sale a cartonear es el hombre (entrevistado), e incluso en ese relato se ha podido apreciar
cierto grado de orgullo por hacer podido mantener a una familia a partir del cirujeo, sin que la
esposa e hijos hayan tenido que trabajar nunca en esto, es el caso de José, un señor de 60
años, que permitió que grabara parte de su relato, por lo que la transcripción es textual:
Entre los actores de esta actividad en su conjunto existen distintos tipos, clasificados
básicamente por su capacidad económica y de almacenamiento, por el destino que le dan al
material recuperado y por el nivel de formalidad en que enmarcan la actividad. En base a esto
se ha establecido, para Mar del Plata, una clasificación que contiene distintas categorías,
algunas de las cuales coinciden con las establecidas por la AFIP en la Resolución General
Conjunta para el Régimen de Retenciones a las Actividades de Reciclaje, RGC Nº 2849/10 y sus
modificatorias y que han sido utilizadas, mayormente, en estudios realizados sobre ésta
temática, aplicados al Gran Buenos Aires77.
Atendiendo las particularidades que distinguen a Mar del Plata, como ciudad de
tamaño intermedio, de una aglomeración de tamaño grande como es el Gran Buenos Aires,
se realizó el paralelo entre la clasificación establecida por la AFIP y la adoptada para Mar del
105
77
Posiblemente la RGC Nº 2849/10, haya tomado como base los parámetros –volúmenes, tonelajes, distancias. mecánicas de
recolección, sitios de disposición, gestión, etc.- por los que se lleva adelante esta actividad en la CABA y Gran Buenos Aires, donde
se genera la mayor cantidad de residuos sólidos urbanos –domiciliarios e industriales asimilables- del país, pero en Mar del Plata
se han detectado diferencias sensibles a ser consideradas, de allí la adecuación propuesta.
Tabla 3: Homologación de categorías
Clasificación RGC 2849/10 - AFIP Clasificación adoptada para Mar del Plata
Recolector Recolector informal /Cartonero / Ciruja
Cartoneros - negociantes
Intermediarios Pequeños compradores o Acopiadores barriales
Compradores Móviles o “los que esperan”
Generadores de Scrap Grandes comercios/industrias e Instituciones
Galponeros ------
Acopiadores Acopiadores
Acopiadores mixtos
Grandes Empresas Acopiadoras
Recicladores Industrias recicladoras
Fuente: elaboración propia
Los recolectores están exceptuados de emitir factura o documento equivalente por las
operaciones de ventas de los bienes indicados anteriormente”.
regula. ¿Complicado de entender? SI, pues el eslabón inicial de una serie que comprende a los
actores cuya actividad económica se regula, queda reconocida, pero… para invisibilizarla
Página
También es llamativo que una norma del Estado, que regula una actividad, establezca
en la misma que los actores fundamentales de la misma operen informalmente, en tanto los
eslabones siguientes constituyen una actividad económica sujeta a normativa específica.
Por otra parte, si bien la legislación argentina adhiere a los Derechos de Niños y
Adolescentes en cuanto a aspectos laborales, la realidad demuestra que miles de ellos llevan
adelante la penosa tarea de ser recolectores. Evidentemente, será en respeto de esos
derechos que se ha indicado la edad de dieciocho años, pero la letra de una ley no modifica la
realidad.
Ahora bien, el conjunto integrado por los recolectores no es homogéneo, por lo cual se
ha establecido dentro de él una distinción entre aquellos que se dedican exclusivamente a
juntar –como les gusta decir a ellos mismos- de entre la basura, todos aquellos elementos y
materiales reciclables para luego venderlos al peso y los que a esa tarea le suman pequeñas
transacciones comerciales, intermedias, para obtenerlos. Se los ha denominado Recolectores
informales/cartoneros o cirujas y Catoneros/negociantes, respectivamente.
“Nosotros no somos ni todos buenos ni todos malos, somos igual que toda la
demás gente, algunos buenos y algunos chorros, somos más negros,
andamos más sucios, somos todos pobres, vivimos mal y en lugares feos y
andamos haciendo esto porque lo necesitamos para vivir, la gente tira cosas
porque es basura y nosotros le calculamos el peso y los pesos que vale,
entonces: LO JUNTAMOS”. (Extractado textualmente de la respuesta de
Ramón sobre su actividad y sobre sí mismo).
No puedo dejar de mencionar que la charla mantenida con Ramón, fue una de las más
movilizantes, porque su porte de hombre fuerte, alto, robusto, duro, manos fuertes y curtidas,
no pudieron ocultar el brillo de sus ojos al hacer el relato.
que le interesa, por el valor en que puede ser vendido, mucho más que lo que habían cargado
anteriormente y ante la imposibilidad de llevarlo y al no poder deshacerse de la carga
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anterior, le venden a otro cartonero los elementos de menor precio por uno menor al que lo
pagan los acopiadores. Estos casos no son muy numerosos pero este tipo de compraventa
callejera fue comentada por algunos entrevistados como por ejemplo Emanuel:
“Yo como tengo este carrito chico [el más pequeño de todos los que forman
parte del conjunto entrevistado] a veces no puedo cargar todo lo que
encuentro y me da lástima que quede ahí sin poder sacarle algún manguito,
entonces lo acomodo como puedo y voy andando despacito algunas cuadras
hasta que me cruzo con otro amigo con un carro más grande… por esta zona
para el mediodía andamos unos cuantos porque España y 14 de Julio tienen
menos autos y vas más tranquilo. [¿Y lo que te sobra, se le das a otro
amigo?+,… Noooo, [se ríe] no le regalo nada, le vendo lo que me sobra [se ríe]
si quiere, yo se lo vendo a un poco menos de lo que le va a pagar el del
galpón, si todos sabemos cuánto pagan las cosas…. Muchas veces se hace
eso, no soy el único porque ganamos los dos, yo cargo lo que me interesa más
y el otro gana menos pero no camina…”
También se pueden incluir en esta categoría a aquellos cartoneros que les compran
algunos elementos a encargados de edificios de departamentos o a personal encargado de
retirar residuos de algunas instituciones. El respecto Marco Antonio contó lo siguiente:
“… cada vez todos se avivan más sobre lo que se puede ganar con el tema de
vender cartón, papel o botellas, sin hacer nada, entonces antes los porteros te
juntaban pilas de diarios y cajas de botellas o las guías de teléfono y las
revistitas del televisor, pero ahora algunos se avivaron y cuando les preguntas
te salen diciendo que si queres te lo llevas pero les das algo, porque ellos
saben que mucho peso no pueden sacar en las bolsas porque el camión no se
las lleva y si les quedan ahí la gente del edificio se les quejan a ellos, y saben
que a vos te interesa el papel limpio, las botellas sanas y esas cosas….
entonces a veces, algunos que vienen cansados o si está para llover o si está
flojo porque anduvieron los carros antes, negocian con los ellos …. Les tanteas
la bolsa y les decís 10 pesos y se prenden, siempre te aceptan lo que les
das…claro si ellos no ponen nada… se alzan con 10 hoy, con 10 mañana….
Pero ellos tienen buen sueldo, son así…”
“No, yo no tengo trato con nadie porque te dicen que sí, que sí y cuando vas
te salen con que te lo venden y eso porque hay algunos compañeros que les
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compran, [¿y vos sabés por qué les compran?], no, no sé bien porqué les
compran pero capaz que es porque no tienen y el acopiador les viene
Página
marcando que llevan poco, si vas siempre es como que te haces cliente y te
dan mejor, porque ellos necesitan juntar los kilos que les pide el mayorista
para mandar a Buenos Aires, es una cadena.., por eso les deben comprar, o
porque de a poco se van haciendo acopiadores, porque la gente se cansa de
andar y andar, … pero con ese tema los tipos se van endulzando y cada vez se
van a avivar más y vamos a tener que pagar todo”.
En tal sentido debe resaltarse que se localizan todos en los barrios más pobres y
periféricos de la ciudad, muchas veces en contextos de villas, lugares de donde provienen
también la mayoría de los cartoneros.
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Entre los actores que accedieron a ser entrevistados, estos pequeños acopiadores
tienen buena aceptación por dos motivos principales: “saben bien lo que es andar en la calle y
Página
a veces juntar poco”, atienden a sus clientes78 en horarios y días de la semana en que los
78
En la jerga propia de los cartoneros el concepto cliente se utiliza en sentido inverso al de la definición del mismo: se denomina
cliente a quien vende los elementos recolectados, en tanto a quien los compra se lo llama lisa y llanamente comprador.
galpones han cerrado aunque pagan algo menos79. La combinación de estas razones hacen que
algunos cartoneros opten por venderle a sus vecinos las pequeñas cantidades de algunos
elementos en la oportunidad que sus necesidades lo demanden, sin estar pendientes del
horario y días de atención de los galpones acopiadores.
Cecilia, la señora que también se tomó como ejemplo de una mujer cartonera que
lleva adelante la tarea de manera individual, contaba que:
“..yo le vendo a un vecino mío que también es cartonero, pero como anda
medio jodido de la cintura, ahora salen los hijos y él se está dedicando a
comprarnos a algunos vecinos… y es mejor porque él está siempre, no nos
jode si tenemos poquito y al final nos paga casi lo mismo que el de Vértiz,
adonde yo vendía cuando empecé… por ahí te rebaja 10 o 20 centavos en el
cartón y más o menos lo mismo en las demás cosas, pero tampoco tenés que
andar por todos lados para vender y a las corridas porque a las 5 cierran
todos, y te da tiempo para descargar todo tranquila y ver que querés vender y
qué no…”
En los sectores de villas realmente suelen mimetizarse estos pequeños acopios con los
basurales que en oportunidades suelen formarse en sus alrededores, por lo que tratar de
identificarlos utilizando como herramientas las imágenes satelitales suele volverse una tarea
incierta, aún cuando los entrevistados hayan dado bastante certeza del lugar donde se
localizan. Por ejemplo en el caso que se citó, Cecilia comentó que:
“yo le vendo a un hombre que está ahí en la villita de Bouchard y Che
Guevara, por ahí, casi en la punta del Barrio Belgrano…”
La imagen del sector ilustra lo que se señaló en cuanto a la dificultad de identificar con
precisión el lugar mencionado, como sí es posible hacerlo en otros casos que se incorporarán
oportunamente.
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Página
79
Los entrevistados que venden a estos acopiadores barriales indican que pagan alrededor del 20% menos que los acopiadores
tradicionales.
Imagen 1: Sector donde se localiza un acopiador barrial.
La ventaja que sostiene a este sistema, para los pequeños acopiadores, es que
pueden clasificar previamente la mercadería que disponen, seleccionar qué venderle a cada
acopiador, de acuerdo al precio que maneja cada uno y en el caso de tener una capacidad
económica algo mayor esperar una mejor oportunidad, que puede darse por aumento en el
precio o por disponer de más kilos, instancia que completan con el aporte de la actividad que
realizan ellos mismo o sus familias. Debe tenerse en cuanta que en al caso del cartón 10 o 20
centavos en el precio por kilo representa alrededor del 15% según los precios vigentes cuando
se realizaron las entrevistas y que ese porcentaje se vuelve ganancia para el pequeño
acopiador, además de la diferencia que puedan obtener al vender mayores cantidades.
para realizar las recorridas, pero los cartoneros que utilizan bicicletas o que arrastran sus
carritos a mano, tuvieron inicialmente serias dificultades porque no tenían tiempo material de
hacer las recorridas y corrían el riesgo de perder el contacto con las personas que les entregan
personalmente algunos elementos de manera sistemática, o de ver disminuir sensiblemente
los volúmenes recolectados hasta entonces y por lo tanto hacer tambalear sus ya precarias
economías domésticas.
Así lo han manifestado por ejemplo María80, que vive en la villa del Barrio Los Pinares
en las proximidades de las Calles Montes Carballo y Strobel
“con esto que inventó el intendente de no dejar que la gente saque la basura
todos los días, nos tenemos que arreglar de otra manera porque imagínese
que nos tenemos que ir más allá de Juan B. Justo algunos días y nos queda
recontra lejos y no nos da el tiempo para hacer dos vueltas, … mi marido
antes hacía una vuelta por el centro a la mañana y volvía a vender el cartón y
traía el resto de las cosas para acá, para casa, lo que no vendemos en el día
vio, y después a la tarde se daba otra vueltita por constitución, por el lado de
Carrefour que hay tantos edificios y ya teníamos para vender al otro día un
poco más, pero ahora vamos a ver qué pasa, la gente tiene miedo de sacar
las cosas si no le toca el día porque es capaz que les cobran multas dicen…”
Algunos cartoneros que ya circulaban por la ciudad en vehículos automotor, vieron una
nueva oportunidad económica y comenzaron a estacionarse en puntos clave de los recorridos
en cada sector identificado para cada día de la recolección selectiva, de manera que los
cartoneros que no podían regresar a sus lugares habituales de venta porque las distancias
ahora eran mayores, pudieran venderles la carga recolectada y seguir la recorrida y en su caso
repetir esta operatoria más de una vez.
Con el paso del tiempo y en virtud del cumplimiento parcial de las expectativas
iniciales referidas a la separación en origen de los residuos, por razones que se considerarán
más adelante, esta nueva modalidad dejó de serles tan necesaria, aunque todavía algunos de
ellos mantienen esa actividad. Un entrevistado que en 2012 le vendía a una camioneta que
esperaba en la Calle Moreno casi Independencia, dice al respecto que:
80
María fue la primera entrevistada, en el año 2012 cuando estaba realizando un trabajo para la maestría y recién perfilaba el
tema para la tesis.
Jorge, que forma parte de una extensa familia de migrantes santafecinos, relató
detalladamente que algunos miembros de su familia se encargan de esta actividad:
¿Vos le venís a traer las cosas que recolectas a estos muchachos del camión?,
Si les vendo a ellos el cartón, es lo único que compran, pero viene bien porque
siempre se paran acá y yo puedo seguir juntando y llevarme otro carro. Yo
vengo del Barrio Libertad y no puedo andar yendo y viniendo los días que se
saca la basura por acá, no me da el tiempo, antes era distinto porque podías
andar cualquier día por cualquier lado sin que te jodieran, pero ahora no”.
cantidad de kilos como por la diferencia entre el precio que ellos han pagado y el que les
pagan.
Página
81
La Jefatura Departamental de Policía se encuentra en Gascón y Entre Ríos.
generan residuos reciclables. La Agencia los incluye en su RGC en tanto ingresan, mediante la
venta, en la cadena de comercialización de materiales a reciclar, cantidades variables de
vidrio, cartón, metales, plásticos, etc.
82
Recuérdese el ensayo con el Tren Blanco, para trasladar recolectores y carros, desde la zona Oeste del conurbano hacia la
Ciudad de Buenos Aires.
zona céntrica y que se dedican a la compra de los elementos que recogen los cartoneros, de
los que ofrecen directamente algunos comercios o instituciones –generadores de scrap- y
también vendedores particulares ocasionales. En la mayoría de estos galpones acopiadores
compran todo tipo de elementos, aunque muchos de ellos no compran plásticos en general y
PET en particular, debido al volumen que implica y al poco rendimiento relativo que presenta,
según han manifestado los entrevistados. Por su parte algunos otros, a los que podría
denominarse como acopiadores especializados, se dedican preponderantemente a ese
producto, lo que no indica que no comercialicen también con los otros y hay algunos casos de
acopiadores que exclusivamente trabajan con PET y PEAD.
En este punto se hace necesario resaltar que las referencias sobre los acopiadores se
obtuvieron a partir del relato de los mismos cartoneros entrevistados, a los que entre los
temas previstos se les preguntó a quién o quiénes le vendían lo recolectado.
En principio contó que el dueño de ese local, que es su cuñado, posee otros dos
acopios, siendo uno de ellos un galpón grande, nuevo, que cuenta con una máquina
compactadora y enfardadora de botellas de plástico (PET) recientemente adquirida y otro más
pequeño, que fue el primero que tuvo.
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de quien informa y todos ellos hace varios años que están allí, uno de los cuales era un ciruja
que iba a venderles, luego empezó a ayudar esporádicamente –cuando había que cargar
camiones o limpiar cuando se vacía el lugar y desde hace alrededor de 5 años ya quedó como
efectivo. En este lugar sólo un empleado está registrado, en el otro galpón hay más.
Interrogado sobre cuáles son los elementos que ellos compran, responde que:
116
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Bueno, es preferible terminar primero con el detalle de lo que compran y luego con los
precios, ¿querés?
“..si, si te cuento, compramos cartón, que hay cualquier cantidad, papel
blanco bueno, papel de segunda (de revistas, impresos, las guías de teléfono),
papel de diario, plástico que se llama PED o PEAD que son los baldes,
cubeteras, envases de lavandina, de champú, de detergente, todos esos,
botellas de plástico recién empezamos a comprar hace poco pero en el otro
lugar, allá donde pusieron la máquina que hace los fardos y todo tipo de
aparatos que después se desarman parte por parte para sacar cada cosa,
plástico por un lado, metal por otro, si tienen motores se saca el cobre y se va
separando en los distintos montones hasta que hay cantidad suficiente para
llamar al comprador para que venga a cargar”. Nosotros no movemos nada
porque no tenemos vehículos, sólo una camioneta medio vieja y el dueño
anda en un Audi, así que imaginate que no se lo vamos a cargar de
porquerías [se ríe], yo tengo ese y tampoco lo pienso cargar”, y señala un VW
de modelo reciente estacionado encima de la vereda.
“A Marcelo Alé, que es pariente del Turco que está en San Lorenzo, cerca de
Makro, no sé si es hijo o sobrino, pero es el recuperador más grande que hay
acá en Mar del Plata, está allá atrás de Textilana83. Nosotros le vendemos
todo a él que es el que después le vende a las fábricas de Buenos Aires. Casi
todos los acopiadores le vendemos a él, es el más grande. También hay otro
que vende para Buenos Aires directamente que está por Mario Bravo pero
nunca trabajamos con él”.
“No, es imposible saber con certeza cuántos hay, pero calculá que
acopiadores debemos ser alrededor de 40 o 50, entre más grandes y más
chicos. De los más chicos hay varios porque hay gente que antes era
cartonera y que si se organizan un poquito y logran acomodarse después
empiezan a comprar también, hacen las dos cosas y a la larga dejan el carro.
Toda la familia de mi señora hicieron eso, mi cuñado, el dueño de esto viene
de familia de cirujas….”.
te digo porque hablando con otra gente de los clientes que tienen, de los kilos
que compran más o menos deben ser mil y pico. Más o menos cada acopiador
83
Textilana es la antigua denominación de una fábrica de tejidos ubicada en la Ruta 88, camino a Batán. Actualmente pertenece a
la textil Mauro Sergio.
tiene entre 18 o 20 cartoneros, algunos más todavía, hasta 30, así que si debe
haber mil y algo casi seguro”
“.. y más o menos te puedo decir al boleo porque no hay cosas fijas, por ahí
uno te trae 50 kilos y al otro día te trae 200, es difícil decirte, pero ponele de
promedio 120/150 kilos entre todo. Hay algunos que traen más, los carros,
otros que traen menos, también hay gente que no es cartonera que te viene a
vender, …vos pensá que nosotros no somos de los más chicos ni de los más
grandes, somos del medio… los más grandes compran más por día porque
tienen más clientes, no porque los cirujas carguen más, eso no… y si tenemos
entre 18/20 clientes movés más o menos 2200/2500 kilos por día, pero te
vuelvo a decir no es matemático, varía constantemente….si llueve nos
miramos las caras….”
“… Uhh hay cantidad de gente, que junta las botellas de la semana y un día
te las trae, capaz que se lleva 5 pesos, o te traen el Koinor que se les quemó y
se llevan como 50 porque tiene cobre en el motor y cobre limpito, también
hay negocios, negocios grandes de electrodomésticos que te traen mucho
cartón, de a 300/400 kilos, una camioneta llena, se llevan 450/500 mangos
por viaje, … más de medio tanque de combustible, ¿Qué tal con el cartón?”.
“No, nada, para nosotros nada, al principio hubo un poco de ruido y de gente
que tenía miedo de quedarse sin trabajo, pero como hicieron todo mal
terminó viniendo bien porque a nosotros las cosas nos llegan mejor que
antes. Te diría que para los cirujas es mejor esto de la separación porque
tienen que revolver menos [se ríe], por lo menos en la zona del centro que es
donde realmente está la cantidad para ir a juntar y es donde más se separa,
les vino bárbaro. Por lo barrios casi ni se separa, tal vez en los barrios más
ricos sí, pero en los barrios comunes no, acá faltan años, siglos para que la
gente se acostumbre a separar, tienen que machacar mucho. Acá hicieron
118
todo así nomás… prometieron mucho pero no les dá lo que les dijeron a los de
CURA… ¿Vos te crees que alguien nos vino a preguntar algo de cómo se
Página
“Que gracias a Dios existen!!!! [se ríe mucho], hablando en serio es una gran
ventaja que existan, no te lo digo por mi trabajo, sino por todo lo que juntan
que eso es bueno, vos sabés lo que se ahorra de energía, de árboles, de
metales, de petróleo, de todo con la recuperación. Lo que pasa que acá
todavía estamos lejos de aprovechar las cosas como tendría que ser, hay
países que hasta compran basura para aprovecharla y ahorrar y nosotros
¿Qué hacemos?.. la enterramos y encima pagamos para que la entierren,
enterramos plata, pero mucha plata ¿Vos sabés la plata que mueve la
basura?
No, la verdad que no, algo me estoy enterando, pero seguí contando así me entero
más.
grueso a partir del relato, más de 100 millones de pesos. Luego se volverá sobre el precio de
la basura…
¿Entonces la planta de separación de residuos es una buena inversión para Mar del
Plata?
“Si, la idea es buena pero no anda porque hicieron todo mal y a las apuradas
y prometieron mucho de golpe y no es así, con la basura uno se hace de a
poco, no de un día para otro, fijate que el Intendente andaba contento
porque en casi dos años habían recuperado 3000 toneladas84 y 3000
toneladas para una ciudad que debe mover alrededor de 850/900 toneladas
de basura por día no es nada. 3000 toneladas o 3 millones de kilos como dijo
Pulti, dividido en 600 días ¿cuánto te da? [saca una calculadora pequeña del
bolsillo y comienza a hacer cuentas], son 5000 kilos por día, 5 toneladas, de
las 900 ponele que se producen el recupera 5 en una planta con 30 tipos
trabajando y yo acá con tres muevo como dos toneladas o 3 por día…
¡¡¡¡¡Que la cierre!!!!!! Y se deje de gastar luz. Ahí está lo que yo te decía que
hicieron todo mal aunque la idea no es mala. Mejor para mí y para los cirujas
que si no se quedan sin laburo, por eso los querían correr al principio”.
Bueno pero las 900 toneladas que vos me decís no son todas de elementos
recuperables, ahí está el resto de los residuos, los de la otra bolsa, y además de esas 900
toneladas que se generan los camiones sólo lleva una parte, porque los cartoneros ya juntaron
antes, eso hay que tenerlo en cuenta….
“Si seguro, pero si hay 900 toneladas, tenés que calcular que el 40% es
reciclable, *vuelve a usar la calculadora+… ahí tenés 350 toneladas, de eso la
mitad no sirve porque se arruinó porque no se separa en el momento, vos
tiras un papel bueno y arriba le echas las cáscaras y ya lo arruinaste…., te
quedan 180 y de esas 180 los cartoneros recuperan 100, ciento y algo…. a
ellos les queda el resto, 70/80 toneladas, entre todo, por día y no se si no les
estoy dando mucho…., habrá que ver cómo se manejan, cuanto logran sacar
de ahí, porque lo que va en el camión es distinto…”
“Porque el camión no lleva sólo reciclables, los camiones juntan todo lo que
hay en la vereda, tienen esa orden y si lo de la separación no la hacemos
todos, la basura se mezcla y hay muchas cosas que se arruinan como te decía
antes, que por más que sean recuperables cuando llegan todas mezcladas no
se pueden recuperar. Imaginate la masa que sale de adentro de ese camión
que compactó 30 veces. Allá las cosas no llegan como acá…., por eso te digo
que hay que ver cuánto de lo que les llega se puede rescatar… No fui nunca a
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Cabe señalar que pocos días después de haberse realizado la entrevista anterior, el Sr.
Director de ENOSUR, Marcelo Artime dio cifras altamente semejantes al referirse a la cantidad
de RSU que se producen en la ciudad: aproximadamente 900 toneladas diarias durante los
84
En oportunidad de cumplirse dos años de la puesta en práctica la separación, el Sr. Intendente Municipal declaro que se había
recuperado ese tonelaje, sólo que lo expresó en kilos: 3 millones.
meses de invierno y alrededor de 1100/1150 en verano, de las cuales alrededor de 200 está
conformadas por materiales recuperables. (Declaración del Sr. Artime a FM Brisas 98.5, 10 de
Junio de 2014, 08:20 hs.)
“Que laburan como burros, sabés lo que es arrastrar un carro a mano o con
una bicicleta cargado con 70/100/120 kilos, 10, 15 o 20 kilómetros todos los
días, es un trabajo de [miércoles] pero si no hay otra cosa es lo que les da de
comer y en el momento, es plata fresca. Hay muchos que tienen varios pibes y
eso da lástima que los lleven porque se van haciendo cirujas, es una cultura a
la larga”.
121
Página
Durante el tiempo que duró la visita el encargado también iba atendiendo a los
clientes que incesantemente llegaba al lugar: una camioneta de una reconocida firma local de
venta de electrodomésticos manejada por sus empleados con uniformes de la firma, para
vender cartón “bueno”, - puede considerarse un caso de generadores de scrap- luego un ciruja
que acarrea su bolsón a mano para vender el cartón que había recolectado y que también
accedió a ser entrevistado e incluso posó para una fotografía y varios cartoneros más, uno con
un auto muy viejo, otros con carros arrastrados a mano o con bicicletas.
Al ser consultado el responsable sobre si ese era el ritmo habitual de llegada de gente
a vender, responde que a la mañana temprano es más tranquilo y que ahora –alrededor de las
13 horas- ya empezaban a llegar y que para las 15 horas habría fila esperando para usar las
balanzas.
Los temas sobre los que versó la entrevista fueron básicamente los mismos que
figuran en la entrevista desgrabada que se incorporó anteriormente e incluso el contenido de
las respuestas es aproximado en cuanto a cantidad estimativa de cartoneros y acopiadores que
existen en Mar del Plata y a la cantidad de kilos de material que se recupera en la ciudad.
se van al diablo porque en esto se gana con la cantidad, entonces eso hace
variar el número, pero sí, debe haber 50, de todos los tamaños, nosotros no
Página
85
Efectivamente el día anterior yo había ido a visitar el lugar con intención de hacer la entrevista pero estaba el camión de
Recuperadora Marcelo, puesto de culata y el encargado me dijo que no era buen momento para atenderme porque estaban
cargando fierro y el ruido era ensordecedor y porque no podía dejarme entrar al galpón por seguridad. Amablemente me invitó a
concurrir al día siguiente, oportunidad en que me recibió y respondió a mis peguntas.
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Camión semirremolque con una caja particular, entera y de forma abierta en la parte superior, más práctica para operar la carga
y descarga con maquinarias auxiliares.
somos de los más grandes pero estamos lejos de los chicos, te diría que
somos grandes entre los medianos [se ríe]. Los más grandes son
Recuperadora Marcelo, el que estaba ayer y El Turco Alé, pero ellos no les
compran a los cirujas y hay otros bastante grandes que venden a empresas
recicladoras de Buenos Aires, pero acá se manejan tanto con los cirujas como
con otros acopiadores más chicos o medianos”.
¿Cuánto es esa cantidad que decís que se mueve en general en Mar del
Plata? Aunque sea aproximado cuál es el número que vos tenés?
“No te puedo decir tanto o cuanto seguro, pero Mar del Plata debe andar en
un total de recupero en la calle de 100 o 120.000 kilos por día, tal vez algo
más, y eso ahora en invierno, en verano un 30/40% más. Otro poco sacan en
la planta del basural, pero no tengo datos…”
Se nota que hay mucho movimiento porque hay varias personas trabajando,
¿Cuántos empleados hay en total?
“Acá somos 8, todos en blanco porque esto está todo habilitado legalmente,
la gente está asegurada, tienen equipos aunque a veces no los usan y además
se contratan dos chicos por media jornada para la limpieza. Después para
trabajos ocasionales se toma gente por día.
“Al principio hubo más miedo que otra cosa porque nadie sabía muy bien que
iba a pasar, pero enseguida se fue pasando porque cambió muy poco, ni
siquiera la hora que entran los camiones de la 9 de Julio al centro, siguen
viniendo a la noche y los comercios sacan la mayor cantidad de cartón a la
mañana. Menos mal porque si levantan todo, los cartoneros le prenden
fuego la municipalidad, hay mucha gente que vive de esto, ¿de qué va a vivir
esa gente si no los dejan cirujear?. ¿Quién va a mantener 1000 familias, si
hay mil cartoneros? Sacarlos es una locura. Ese fue un arreglo que hicieron
históricamente todos los intendentes, dejarlos que anden, todo el mundo lo
sabe pero ningún político te lo va a contar. Sería muy bueno si se hiciera un
proyecto que permita recuperar más todavía, que la gente pueda trabajar
más organizada, sin los pibitos, con identificaciones, sin caballos, pero no es
nada fácil…”.
embargo están hechos con lo peor del papel!!! El PET de las botellas también
se recicla, primero se hace pelet88 y después se trata con químicos y se hacen
Página
telas tipo polar y de otro… bueno no me acuerdo, es otra tela parecida89, acá
87
Esta expresión “se queda sin moléculas” es la utilizada por el entrevistado para referirse a la cantidad de modificaciones que ha
sufrido el material y por lo cual ya no admite nuevas transformaciones físicas ni químicas, lo que implica que una vez desechado
de su último uso, será basura.
88
PET molido
89
Podría referirse a tela Sherpa
hay una máquina (Rodríguez) pero no hacen telas, mandan los bolsones de
pelet a Buenos Aires y de ahí creo que a China”.
Lo que se pudo observar en el lugar es que cuentan con una báscula y una balanza
electrónica, ambas con capacidad para 500 kilos y una balanza pequeña, también electrónica
que es la que habitualmente se usa para pesar cobre o bronce. El local está claramente
identificado y poseen a la vista varios matafuegos, una toma de agua con el rollo de manguera
correspondiente, baldes y palas, también las planillas de personal, copia de habilitación
municipal y la planilla con el código de AFIP.
Fotos 25 y 26: Frente del galpón acopiador de Avda. Luro y personal realizando limpieza.
trama urbana, de los que solamente ocupan una parte y en el espacio restante se acumulan los
distintos materiales, bolsones, fardos, algún contenedor, una pequeña construcción que
funciona como oficina (generalmente con fuertes enrejados) y poco más.
A Continuación se incluye una imagen, sobre la que han sido señalados predios de
acopiadores.
126
aquellos acopiadores que tanto mantienen relaciones comerciales con las grandes empresas
acopiadoras o recuperadoras radicadas en la ciudad como con empresas industriales
recicladoras de manera directa. El ejemplo que se obtuvo para este tipo es el de Miguelito,
ubicado en Mario Bravo y Juramento.
Este acopiador, de carácter empresarial mediano, a diferencia del mencionado de la
Avenida Luro, funciona en una construcción más precaria, semi cubierta, semejante a la de
algunos acopiadores chicos, y en el mismo predio está la vivienda que habita el entrevistado
con su familia.
Allí también compran de todo, cartón, papel blanco, segunda, botellas de plástico,
plásticos, metales de todo tipo, fierro, cobre, bronce, chapa, lata, maderas (aunque llegan muy
pocas porque los cartoneros las usan para quemar), nylon, etc.
Dos características hacen particular a este acopiador: por una parte poseen una
máquina enfardadora que construyeron allí mismo, a partir de haber “mirado” en otros
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lugares cómo era una enfardadora. Es totalmente artesanal excepto el motor (trifásico). Para
su construcción utilizaron metales reciclados. Se carga manualmente por arriba, luego se baja
la prensa hidráulica y una vez que prensó, se abre la puerta del costado, se ponen los sunchos,
Página
a mano, se pasan por unas guías, se tensan con unas pinzas de ajuste y se cierran con una
pinza que comprime las chavetas que sostienen los dos extremos de los mismos.
Foto 29: Máquina enfardadora artesanal y fardos de cartón, acopiadora Miguelito
Cada fardo de cartón que sale de la máquina pesa 380 kilos, los de botellas de PET la
mitad o un poquito más, alrededor de 180, los de PEAD alrededor de 220/230 y los de papel
128
blanco o segunda más o menos 450 kilos porque el tamaño es el mismo pero cada material
posee un peso diferente.
Página
Foto 30: Fardos de botellas de PET, acopiadora Miguelito
Todo lo que es metal lo venden a El Turco, que está en San Lorenzo 6040, que es uno
de los dos grandes acopiadores de metales que hay en Mar del Plata, el otro es Marcelo que
está cerca de Batán. Ambos tienen compactadoras grandes y le venden directamente a
Acindar, según cuenta Miguelito.
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“Todo lo que se recicla tiene una retención impositiva para los acopiadores,
que depende la categoría varía entre el 5.25% y el 21%, nosotros por los
volúmenes que manejamos entramos en la segunda categoría y nos retienen
el 10,5% sobre el importe total de cada venta, que nuestro comprador nos
retiene directamente en cada boleta. El total de impuestos asciende al 32%, si
le sumás Ingresos Brutos, Monotributo e Impuesto a las Ganancias, cuando
en realidad si el gobierno quisiera hacer como en los países serios lo que
tendría que hacer es subsidiar la actividad para que no se explote a la gente
que anda en la calle que apenas gana para comer. Pero acá está todo al
revés, en otros países compran basura para reciclar, para generar energía y
acá enterramos, explotamos a los cirujas y se quedan con el 32% de los que
trabajamos con esto. ¿Quiénes ganan? Las grandes empresas que reciben la
materia prima casi gratis porque sacan limpio más o menos el 60-70%, son
monopolios, así que ellos ponen el precio que quieren, producen lo que se les
canta, manejan todo el mercado y no tiene un solo empleado para obtener la
materia prima. ¿Qué cartonero es empleado de una papelera?. Es toda gente
que no existe para la industria y el gobierno los reconoce como mano de obra
en negro y eso, si no estás en esto, ningún político lo cuenta”.
Finalmente, utilizando el ejemplo que da este entrevistado respecto del circuito que
sigue el cartón, se puede comprobar la teoría de los circuitos económicos bajo la que se analiza
la recolección de residuos recuperables:
“Desde acá vendemos 15.000 kilos de cartón y 15.000 kilos de papel por mes
a San Pedro. El cartón nosotros lo compramos a 1.20, lo vendemos al
mayorista a 1.60 libre (indica que la papelera se hace cargo del flete), de lo
que debemos descontar la retención del 10.5% y los demás impuestos.
Papelera San Pedro se lo vende a la fábrica a 5/5.5, y sale en rollo nuevo a 11
o 12, después de ahí va a las fábricas de cajas que cortan, marcan e
imprimen y de ahí a las fábricas para que embalen sus productos, la gente lo
recibe conteniendo las cosas que compra, lo saca a la basura, los cirujas lo
juntan, me lo traen a mí y vuelve a empezar la rueda, que no tiene fin”.
El guardia permitió el ingreso e indicó que me dirigiera a la oficina, una vez expuestas
las razones de la visita y el interés por conocer el lugar, una secretaria nos acompañó para
realizar la recorrida y brindar explicaciones90.
90
La visita la realicé acompañada por otra persona.
91
Pudo apreciarse el reloj-control de ingreso y egreso del personal con 29 fichas ubicado al lado de una de las oficinas.
En la parte exterior lo primero que se pudo apreciar fueron montones de chatarra de
hierro y un guinche “almejero” cargando la máquina compactadora, tal cual se puede apreciar
en la fotografía que sigue.
Unos 20 o 30 metros más adelante, siempre al aire libre, se encontraban tres operarios
cortando con maquinaria autógena grandes rollo de lingas de acero de manera tal de obtener
trozos de aproximadamente 1 o 1.50 mts. para introducirlos en la cortadora (moledora). Tanto
la actividad de corte como la de molienda deben realizarse al aire libre debido a la emanación
de gases que produce la autógena y a la gran cantidad de chispas que produce la cortadora,
además de los volúmenes y pesos que poseen tanto los metales tratados como la maquinaria
misma.
Separados de esta zona de trabajo por una calle, por donde en el momento de la visita
circulaba una gran máquina cargadora, se encuentran tres tinglados de muy grandes
dimensiones, uno abierto, uno semi-cerrado y otro cerrado. En el primer tinglado que sólo
tiene una pared, se encuentra el depósito de cartón a granel y la fosa de descarga de camiones
y alimentación de la cinta transportadora hacia la enfardadora; en el galpón del medio, semi-
133
134
Página
Es interesante incluir las apreciaciones personales respecto de esta visita, por una
parte que un Sr. nos haya parado y le haya preguntado a nuestra guía sobre el motivo de la
visita, oportunidad en que me presenté y expliqué el motivo. Luego la guía comentó que era el
Jefe de Planta y que había preguntado porque es el responsable de la seguridad del lugar, de
allí su recomendación de tener precaución por las máquinas que estaban trabajando y los
vehículos que circulaban constantemente.
desde la gran montaña de cartón que está almacenada bajo el tinglado se utiliza un sampi y en
ambos casos hay peones que completan la tarea, manualmente.
Si bien al momento de la visita la tarea que se estaba realizando era enfardar cartón, la
misma máquina se utiliza para papel, plástico y botellas de PET, obteniendo fardos de mayor
tamaño (y peso) que en la otra empresa que cuenta con la enfardadora artesanal: 500 kilos los
de cartón, alrededor de 300 los de PEAD y 220 los de botellas de PET.
136
Página
92
El canal por el que corre el fardo se encuentra a pocos centímetros del piso. Se dispone de videos que registran a varias
máquinas trabajando, que, de ser posible, serán presentados durante la defensa de esta tesis.
Foto 37. Bolsón conteniendo bronce, Recuperadora Marcelo.
Fuera de los galpones, camino a las oficinas se pudieron apreciar gran cantidad de
fardos de botellas PET, de PEAD amarillo (botellas de lavandina), y de PEAD de varios colores
mezclado, ya listos para transportar.
Frente al edificio de oficinas, en el playón de acceso, está ubicada una balanza para
camiones.
La guía no pudo informar sobre los precios de compra o venta debido a que no se
desempeña en el área de comercialización, como tampoco el destino de varios de los
materiales como metales especiales, plásticos y baterías. La chatarra de hierro se
Página
138
Página
Fuente: Elaboración propia sobre la base cartográfica de Googlemaps. Datos Abril-Julio 2014.
Son reconocidas por la Agencia Federal dentro de la primera categoría por lo que el
porcentaje de retención que se aplica a los productos que comercializan es el máximo de la
escala, 21%.
Entre las asentadas en nuestro país, algunas son filiales de empresas de capitales
internacionales en tanto otras son nacionales, pero todas, igualmente, son expresión del
Circuito Superior de la Economía, generadoras y fijadoras de precios y de amplio dominio
sobre los niveles inferiores de la cadena comercial de sus producciones.
ácido (verificada por el Bureau Veritas para la norma ISO 14001), localizada en Piñero, Santa
Fe.
Fábrica de vidrios CARTORINI Hnos.
Este sistema es el que explica porqué en los lugares de acopio, generalmente todos
muy precarios en cuanto a su construcción existe algún sector altamente reforzado con rejas y
vigilado por cámaras de seguridad o algún otro elemento de prevención contra delitos como
por ejemplo los cuatro grandes perros dogos, que se encontraban atados en el galpón La
Turquita y que uno de los trabajadores que se encontraban allí confirmó que los tenían como
140
medida de seguridad.
Página
En buen romance, tanto por una costumbre histórica relacionada con la actividad
como por la exclusión que consta en el RGC 2849/10 de AFIP, una parte de la cadena de
comercialización que se inicia con el trabajo informal de recolección, se realiza “en negro” y
transita en esa condición todas las etapas de comercialización.
Por último hay que decir que en el marco de este sistema de venta, algunos precios se
negocian en función de los kilajes ofrecidos. Varios entrevistados sostienen que no es lo mismo
ir a vender una cantidad que otra sensiblemente superior, por lo menos de algunos productos
como pueden ser los metales especiales: bronce, cobre o cromados aunque también hay
referencias al cartón que es el más común y abundante entre los materiales recuperados en la
calle.
María cuenta que “…. Nosotros al cartón lo llevamos todos los días para que
no se nos moje, pero otras cosas de fierro, o plástico si no andamos muy
apurados de plata mejor juntamos para poder vender 300 o 500 kilos y viene
el camioncito de acá cerca y nos compra, el precio cuando vendés más kilos es
más, 10 o 20 centavos, pero en la cantidad hacés….”
Fabián también manifiestó que “… vendo todos los días el cartón, papel,
plástico y lo de metal grande [una cocina, una heladera, una bañadera si
alguna vez encuentra o le dan] para no andar cargando y descargando, pero
lo más chico lo voy juntando, porque ¿sabe qué pasa? este trabajo nunca
sabes si al otro día empieza a llover y no podes salir por dos o tres días y hay
141
que comer igual, entonces siempre tenemos algo guardado, con esto se vive
al día, no hay ahorro, se ahorra en materiales”
Página
Y finalmente, Juan Carlos que utiliza un carro tirado por caballo, relata que
“…si uno va a vender de a poco, lo que junta cada día ni hablas, lo pesas [te
fijas que no te jodan en el kilo porque son rapidísimos] y listo, te pagan lo
que está que todos sabemos, en cambio si vos podes aguantar algunos días y
alcanzas a juntar 50 o 100 kilos podes decir bueno traigo 100 kilos a cuánto
me lo das amigo… y bueno ahí arreglas algo más, capaz que son 20 centavos
o 50 y hasta un peso en el cobre o el bronce….. lo que pasa que bronce casi
no hay lo vende la misma gente si tiene o los chorros que hasta del
cementerio sacan, cobre hay porque la gente tira los cables entonces lo vas
amontonando, después lo tenés que quemar en algún baldío, te quedas
esperando que se enfríe y después lo llevas y ahí sí haces negocio…. A ellos le
interesa si les llevas mucho porque ellos después hacen lo mismo…”
Algunos recolectores, generalmente los que llevan más cantidad de años realizando
este trabajo, han logrado un nivel de organización mayor y algunos cuentan con un techo o
galpón para el primer acopio particular. Carlos, un cartonero con 11 años de “oficio” cómo el
mismo se define, relató al respecto que:
142
basurales terribles por todos lados. Pero hay gente más nueva que levanta todo con la
esperanza que por ahí lo puede vender y no es así, los acopiadores compran lo que
sirve, basura, basura no ¿para qué la quieren?. …. De esa manera todo lo que llevo sé
que lo voy a vender, por ahí no en el día pero en algún momento se vende seguro….
Todos los días descargo todo el cartón, papel y fierro directamente en el acopio de
Libertad, de eso no llega nada a mi casa… después si levanté otras cosas como cable,
madera, materiales de construcción, algún artefacto medio bueno, bidones sanos, un
mueble o ropa, eso sí lo llevo a casa y ahí tengo un galponcito que me hice de a poco
con todo lo que fui juntando en la calle y ahí tengo bolsones, todo ordenado y voy
poniendo todo en su lugar, el cable acá, los bidones allá, los trapos en el otro …. Mi
señora se fija si hay algo de ropa que se pueda usar para trabajar o llevar a la iglesia la
saca y lo que queda va al bolsón para trapo…. Y los aparatos los revisa un vecino y a
veces se arreglan y sirven para vender y lo que queda van como aparatos, salvo el
cobre si tienen motor…”.
En otro extremo podríamos reiterar parte del relato de Frankestein, aquel cartonero
que arrastra manualmente un bolsón y que recorre las inmediaciones del acopiador porque su
físico ya no soporta caminar mucho ni cargar pesos importantes, entonces
“… yo ando por acá cerca nomás porque ya no puedo cargar tanto y voy y
vengo, hago varios viajecitos al día, traigo lo que puedo, lo dejo [vende] y
salgo otra vez…. Clasifico antes de alzar, sirve… no sirve… y no guardo nada,
me voy con el bolsón vació… yo vivo en una pieza…”.
“… mi señora sale los sábados, va casa por casa y en los edificios tocando
timbre y preguntando si tienen ropa para dar, anda con mi nene ahora… a
veces también le dan mercadería y algunas golosinas para los chicos. Después
ella ve si la ropa sirve para nosotros o para los nenes de mi cuñada o si se la da
a alguien o la vende en la feria que hace la iglesia un domingo al mes…
muchas señoras dan ropa muy buena, todo lo que yo uso es lo que mi señora
pide y ella también, para los chicos a veces tenemos que comprar las
zapatillas…”
Jorge dice con referencia a esto que “… mi viejo las arregla y después las
vendemos por el barrio o a otra gente, a veces de dos cocinas puede armar
una porque una tiene la puerta rota, otra las hornallas o el horno, pero entre
dos o tres se arregla una y lo que sobra lo guardas como repuesto o si no sirve
lo vendes como metal mezclado, a pala que se dice, no te dan mucho pero
siempre es algo … mi viejo tiene un taller de arreglos por Vértiz, si vos vas por
la Diagonal Canosa para este lado ahí está la casa y adelante un local de
arreglos, también arregla carros, puede poner herraduras, arregla bicicletas,
de todo lo que sea metal, tiene soldadora… sabe de eso, le gusta….”
Foto 39: Galpón de acopio particular, carro y bolsas “enteras”. Detrás humo producido
por la quema de cables. Barrio Las Dalias.
conocedores de la mecánica de esta tarea atienden sin horario. Poseen además la ventaja de
la proximidad aunque como contrapartida suelen pagar algunos centavos menos o suspender
Página
La mayoría de los entrevistados que acarrean tirando los carros con bicicletas o
manualmente, coinciden en que la tarea comienza alrededor de las 8 de la mañana para estar
en el centro una hora después, en coincidencia con el horario de apertura de los comercios
que comienzan a sacar cajas y elementos a las veredas y se extiende hasta alrededor de las
dos o tres de la tarde. Puede finalizar antes si han logrado colmar la capacidad de acarreo, “si
se me llenó el carro vuelvo”, es la explicación más común.
En tanto los que poseen un vehículo con motor, sea moto o automóvil tienen
capacidad para realizar dos recorridas una a la mañana y regresar a la tarde-noche a alguna de
las zonas de recolección selectiva, para juntar en el horario de retiro de residuos y con
anterioridad a que circulen los camiones de la recolección formal. Existe la coincidencia en que
los que poseen vehículos motores son también quienes pueden esperar al día siguiente para ir
a vender. Se podría decir que se sitúan en una categoría superior desde el punto de vista de su
capacidad económica.
Los carreros en general también realizan dos recorridas diarias, en oportunidades una
general por una zona ya acostumbrada y una segunda más específica como puede ser ir a
alguna zona de concentración de establecimientos gastronómicos, a la noche, para recolectar
botellas y desperdicios alimentarios que luego venden a algunos criaderos informales de
cerdos o utilizan para los propios ya que suelen asociar el cirujeo con esa actividad.
Existe otra rutina que consiste, como ya se mencionó, en salir algún día específico de la
semana, generalmente los sábados, a pedir elementos específicos con la modalidad de
“timbrear” puerta a puerta y solicitar donaciones de ropa o alimentos.
“…una o dos veces por semana salgo a cirujear, lo hice siempre desde chico
pero después de más grande fui dejando porque gracias a Dios aprendí en la
construcción y tengo trabajo en eso, pero para estar un poquito mejor dos
veces a la semana me vengo, ando por esta zona, no recorro mucho pero
siempre por el mismo lugar y la gente ya me conoce. Los sábados vengo a
lugares puntuales porque unos porteros me juntan cajas, botellas y diarios y
dos o tres que me juntan ropa y ese día aprovechamos para “manguear” en
los negocios. Tampoco puedo cargar mucho porque ando en un auto chiquito
y vengo con mi señora y los chicos, estaciono en dos o tres lugares, ella a
veces baja y anda por ahí cerquita del auto y sino ella se queda con los más
chiquitos y yo arranco con éste que es el más grande….”
145
4.8. Sector de la ciudad que recorren: para la realización de esta tesis se decidió
Página
entrevistar a recolectores en el área delimitada por las Calles San Juan, Alvarado, Sarmiento y
por la costa –Boulevar Peralta Ramos- hasta la Avenida Libertad. Esta decisión se tomó a partir
de una observación previa, reconociendo que allí se podía contabilizar mayor cantidad de
cartoneros que en otros sectores de la ciudad. Esta presencia está asociada a que en ese
polígono la ciudad está plenamente consolidada y cuenta con una densidad poblacional
elevada que resulta en la generación de volúmenes de residuos muy apetecibles para la
actividad que se analiza.
Sin perjuicio de lo anterior, se reconoce que existen otras áreas de la ciudad donde
circula un gran número de cartoneros como son los barrios próximos al puerto, la zona
comercial de la Avenida Constitución y los barrios residenciales aledaños y, en general en toda
la ciudad se pudo apreciar que circulan estos recolectores informales desarrollando su tarea.
Los recolectores informales circulan prácticamente por toda la ciudad, pero suelen
hacerlo con distintos propósitos: recolectar materiales vendibles, concretamente trabajar o
cirujear, dirigirse a los acopiadores o encaminarse a sus viviendas y el interés de este trabajo
se centró fundamentalmente en el primero de ellos, luego en el siguiente y sólo se analizó
tangencialmente el tercero.
Como ejemplos se toman dos relatos extremos. Como caso de muy buena
sistematización y organización se vuelve a Carlos, aquel señor con 11 años en el “oficio” que
estaciona su camioneta en el corazón del micro centro y luego recorre “su” área con el carrito
manual y el de Jonatán que acarrea manualmente el mejor carro de todos los registrados pero
carece de sistematización en la tarea que realiza. Como ejemplo de los casos más habituales
-que no tiene recorrido fijo pero sí regularidad en llevar adelante la tarea- se ilustra con el
relato de Cecilia, quien también acarrea manualmente su carro.
146
Carlos: “Yo salgo de mi casa, [en lo más alejado del Barrio Libertad], agarro
Libertad hasta Salta, Salta hasta Belgrano y ya me vengo para acá [a una
Página
esquina del corazón del micro centro]. Ahora agarro por Libertad hasta
Champagnat y de ahí hasta Luro y doblo en Salta porque como están
arreglando Libertad está difícil de andar, vengo tranquilo por Luro, además
vengo temprano, no hay tanto movimiento a esa hora, antes de las 9…. Mi
zona es Independencia-Buenos Aires-Colón y Luro, no salgo de ahí ni cruzo
esas calles porque es mucho despelote… en este cuadro hay muchísimo, es
donde más hay de todo Mar del Plata, mire la cantidad de cartoneros que
andamos por este lado y se va a dar cuenta…. Una vez que paro la camioneta
acá, hago vueltas, voy por ésta [Belgrano] hasta Independencia, voy por una
vereda y vuelvo por otra y vengo y descargo, después voy por Rivadavia y así
por cada una y ahora después empiezo a ir para el otro lado, para Buenos
Aires haciendo lo mismo, voy por un lado vengo por el otro”.
Cuando Carlos iba a recorrer ese tramo aceptó que lo acompañara para que pudiera
observar en detalle su tarea y para aprovechar el tiempo para completar la entrevista.
“… después vuelvo para acá y empiezo a ir por las que cruzan, empiezo por las
que me quedan más cerca de la camioneta primero porque ya ando medio
cansado [se ríe] y después depende cómo este de lleno [se refiere a cuan llena
este la camioneta] voy para el lado del shopping, pero por allá no se puede ni
andar, ahí van los más chicos que ya tienen trato con algunos y tampoco
queda tanto, pero si yo no lleno voy igual, también conozco gente de ese lado.
De los shopping no sacan nada, lo venden ellos mismos”.
“.. no tengo día’ ni horario’ fijos, salgo alguno’ días no más, a veces a la
mañana o a la tarde o a la noche… Ah, salís de vez en cuando ¿por qué, tenés
otro trabajo? No, pero a vece’ no tengo gana’, a la tarde me quedo con mis
amigo’ tomado unas cervezas y si nos chupamo’ o nos ponemo’ un poco a
vece’ salimo’ a hace’ macana’ [se ríe mucho y fuerte], a veces pasa vió que
uno tiene juntas… si uno no tiene sale a buscar las cosas [vuelve a reírse muy
147
fuerte+…”
Página
Foto 40: Carro cartonero, específicamente construido para la actividad 93
Por último se incorpora el relato de Cecilia, una de las pocas mujeres entrevistadas,
que no realiza un recorrido fijo pero que visita casi siempre los mismos barrios, ella contó así
su actividad:
“.. si, vengo todos los días con el carrito, vengo despacio y al principio no
levanto nada porque por esos barrios más pobres no hay nada [vive en el
Barrio Autódromo] y llego hasta por acá [se refiere a la zona de Bolívar y
España donde nos encontramos] y voy andando todo por acá, hay cartón,
botellas, alguna gente que ya me conoce me va dando ropa, en Colón y
Dorrego las chicas de la panadería me dan alguna facturita y pan y voy dando
vueltas… pero cambio un día por una calle otro día por otra, para el centro no
voy nunca porque es mucho problema con los autos y con los colectivos ni te
cuento, por acá es más tranquilo… otras veces ando por el lado de la
148
93
Carro artesanal arrastrado por una bicicleta. El mejor “modelo” de carro entre todos los entrevistados, consistente en un
receptáculo de metal de aproximadamente 2 metros de largo por 0.80 de profundidad y uno de ancho, con lanza de enganche y
protección para las ruedas soldadas, ruedas de moto y barandas para sostener la red y aumentar la capacidad para cargas livianas.
Foto 41: Cecilia, atando la bolsa una vez que retiró los materiales de su interés
Como resumen puede decirse que cada uno de los recolectores informales emplea sus
propias lógicas para realizar la tarea, recorriendo exhaustivamente pequeñas áreas de la
ciudad, otros alternan zonas distintas recolectando materiales específicos en cada una; otros
recolectan aquellos materiales que mejor precio alcanzan en el mercado y prácticamente los
únicos que juntan botellas de plástico son los carreros, el cartón es apreciado por todos
porque es el material que se encuentra con mayor frecuencia y se vende con facilidad.
Para cerrar la caracterización sobre los recolectores sólo resta hacer referencia a la
relación que se establece entre ellos.
“… no, uno nunca se mete en el lugar del otro, ese contenedor era de él que
había llegado antes, se saluda y listo, si el que está invita o dice si querés
Página
(revisados)
5 1 X X Libertad Depósito De todo:
Libertad muebles,
(Libertad aparatos,
Página
94
Las zonas de recolección y los recorridos que describieron los entrevistados han sido volcados directamente a la cartografía que
acompaña los resultados de la investigación.
95
En algunos casos los entrevistados indican la dirección del acopiador porque los mismos no poseen nombres que los
identifiquen o ellos lo desconoce.
96
N: Menores de 16 años sin distinción de sexo. El parámetro utilizado para establecer el corte etario es que desde el año 2011 las
personas de 16 años están habilitadas para emitir voto.
7844) ropa, madera,
cartón, fierro,
escombro
(grande,
bueno),
vidrio,
cerámicos,
ladrillos,
botellas,
papel, cable,
cocinas,
heladeras,
etc.
6 1 X Los Andes Jara y la vía Cartón, papel
(Calle de todo tipo,
Malvinas ropa (si le
casi Brown) dan), cable,
metales.
7 1 X Libertad Luro y 190, a Cartón, metal,
cualquiera de ropa (si está
los dos de la buena)
cuadra.
8 1 1 X X La Javier (Vértiz Cartón, metal,
Herradura y botellas vidrio
Tettamantti) y plásticas,
plástico
(PREAD),
latitas de
aluminio,
comestibles
(que le dan)
9 1 1 (9 X X Pehuajó Vértiz y Cartón, papel,
años) entre Reforma metal,
Vértiz y San Universitaria alimentos
Salvador, Javier (Vértiz (que
en la villa y manguean),
que está Tettamantti)) ropa (que le
frente al dan)
desvío del
FFCC.
10 1 X Vértiz casi Vértiz casi Cartón, papel,
la vía, Gaudini, (al metal, ropa
detrás del lado de la 8que le dan),
mundialista comisaría) madera (para
quemar)
cocinas,
calefones,
botellas, de
todo menos
botellas de
plástico.
11 1 X Santa Rita Detrás del Cartón, papel
Sanatorio blanco y
EMHSA (PET) segunda,
Polonia casi metal,
Vértiz lo plástico,
demás. botellas de
plástico,
151
latitas de
aluminio.
12 1 1 (5 X Newbery Plásticos Cartón,
Página
manguean)
19 1 1 Libertad Libertad al Cartón,
7800 botellas,
Página
97
Este entrevistado lleva una bicicleta, pero no tiene carro. Su foto se encuentra en la página 103.
5. ¿QUÉ OPINAN CARTONEROS, COMERCIANTES, ENCARGADOS DE
EDIFICIOS Y POBLACIÓN EN GENERAL SOBRE LA ACTIVIDAD DE LOS
CARTONEROS?
De la misma manera que desde el punto de vista teórico se presentan dificultades para
definir con precisión si la actividad analizada puede encuadrarse como un trabajo o si debe
emplearse otra denominación, entre los propios actores persiste la misma dualidad, algunos la
definen como un trabajo sin dudas en tanto para otros es una “changa”, un “rebusque” o
simplemente “lo que puedo hacer para darle de comer a mis hijos”.
Entre las respuestas que dieron respecto a la actividad que realizan y si la consideran
como un trabajo o no y a las razones que los llevan a ser cartoneros, existe una interesante
Página
Evidentemente Fernando identifica al término trabajo con una tarea más estructurada,
por encargo de terceros y con un ingreso conocido de antemano. Para él cirujear no es un
trabajo.
distinto, pero yo acá también cumplo horario y estoy organizado para juntar
la plata que necesitamos para vivir y nos alcanza para irnos a algún lugar
Página
En síntesis se puede concluir que Carlos tiene presente la diferencia entre formalidad e
informalidad en el trabajo, pero sostiene que el cartoneo es un trabajo, por lo menos en la
forma en que él lo lleva delante.
Por último, se incorporan algunos tramos del relato de Marco Antonio, el cartonero
más locuaz y defensor de la actividad entre los entrevistados, quien sostiene lo siguiente
“… el único que piensa que esto no es un trabajo es Pulti 98, que venga él a ver
si esto es trabajo o no, te rompes el [alma] andando y cinchando con la
bicicleta cargada, que no va a ser trabajo. Claro no es un trabajo en una
oficina, pero más vale que es un trabajo, es un trabajo de mierda, todos
hablan y hablan de los cartoneros pero nadie sale a juntar porquerías para
llevarle de comer a sus hijos, soportar que unas viejas rodetudas protesten
porque andan con caballos o porque salen los chicos…. Y que quieren que
hagamos si a nosotros nadie nos da trabajo porque somos pobres y
negros…. no sabés lo que nos discrimina la gente, pero ellos no salen a cargar
cartones o a pelar cables llenos de brea… todos desprecian y desprecian ¿qué
quieren que salgamos a robar? … Yo le dije eso a Pulti cuando empezó a
joder con que no quería los cartoneros en la calle cuando inventó lo de las
bolsas verdes y le dije y bueno entonces un día de estos me voy a tu casa con
mi mujer y mis pibes y vos nos das de comer ¿sabes cómo me miraba?... a mi
si me da de comer es un trabajo”.
Muchos comercios, de cualquiera de los dos circuitos, suelen pautar con los cirujas el
retiro de embalajes y cartones que en caso contrario deberían eliminar por otra vía, muchas
Página
veces con un costo adicional al de la tasa municipal. Por ejemplo la normativa municipal
establece que en el caso de volúmenes mayores a los que puedan ser embolsados o pesos
superiores a los 20 kilogramos, el generador de residuos debe contratar un servicio de retiro
98
Gustavo Pulti, intendente de General Pueyrredon al momento de realizar esta investigación.
de forma particular. En este marco, los cartoneros se convierten en los prestadores de ese
servicio de manera gratuita.
“… sí todos los días para este muchacho y si tenemos cajas se las damos
porque es muy respetuoso, él se asoma a la puerta, nos saluda y pregunta si
tenemos algo. Viene bien porque no tenemos mucho lugar, el depósito es
chiquito y no se las podemos dejar al camión porque no las lleva, y si las
ponemos ahí en la vereda queda desprolijo, entonces se las damos a él que le
vienen bien porque es cartón seco…”
“No te quiero mentir pero acá deben entrar a pedir seis o siete pibes por día,
hay que tener cuidado porque algunos son rapidísimos, uno te pide y el otro si
te descuidás te afana algo… cualquier cosa… les da lo mismo.
…los de los carros mandan a los pibes porque a uno le da lástima que anden
todos mugrientos pidiendo, pero tampoco se le puede dar a todos, terminás
bancando a diez personas.
…. yo tengo dos que vienen todos los días, hace un tiempo que vienen a la
tardecita y yo les doy un kilo de carne picada a cada uno y un poco de verdura
que ya para el otro día no la puedo vender, pero a cambio les hago cargar el
cajón de desecho de la verdulería y los recortes de grasa de la carnicería….
que hagan algo porque sino yo tengo que pagar para que se lo lleven porque
es mucho peso y los del camión de la 9 de Julio no lo llevan y no se puede
juntar acá, acá adentro hay que sacar todo y baldear todas las noches sino te
invaden las moscas. Uno de estos …. que se llevan las cosas las vende a un
vecino que cría unos chanchos y el otro me dijo que se la da a la suegra que
siempre rescata algo, con lo que le queda no se qué hará, pero ese es tema de
él, de acá se lo tiene que llevar porque sino no le doy más cosas buenas… hoy
por mí, mañana por ti…es así”
Un tercer relato lo brindó la empleada de una panadería que cada día al finalizar la
jornada prepara unas bolsitas con pan y facturas para entregarlas a la mañana siguiente a las
157
“…. todos los días viene mucha gente a pedir, vienen chicos pero también
gente grande, lo que pasa que a los grandes les da más vergüenza, debe ser
difícil pobre gente tener que salir a pedir hasta el pan, pero se los ve tan mal
que tampoco pueden trabajar ya están afuera de todo, la gente también los
desprecia y no les queda otra que salir a manguear para poder vivir…. El
dueño de acá sabe que nosotras preparamos las bolsitas con el pan y las
facturas que quedan cuando ya cerramos a la noche, mientras limpiamos
todas las bandejas vamos sacando y lo embolsamos para que no se pongan
duras para el otro día y a la mañana cuando vienen se las damos, todo
limpito… al final son facturas y pan del día anterior como el que nosotros
comemos en nuestras casa…uno no tira las facturas de la tarde anterior ni el
pan que te quedó de la noche, te lo comés con el desayuno ¿no?.
Después hay otro muchacho que cada 15 días se lleva todas las bolsas de
harina, son de papel grueso, el viene, entra allá atrás y saca todas las que hay
y las acomoda en su carrito ahí en la vereda, es buen pibe pero pareciera que
tiene algún problema, parece que no entiende bien, siempre se ríe…. y bueno
hay que ayudar si acá no cuesta nada, pero uno tiene que dar las cosas bien,
no como si fuera basura que se les da porque son pobres y cartoneros…Dios
mira estas cosas….”
Por lo que vi Ud. tiene trato con un carrito de cartoneros, les junta las cosas que ellos
recolectan?
“Si, a este muchacho siempre le doy todo lo que sirve, hace años que le
guardo. Una vez me preguntó y le dije que si el pasaba yo le podía juntar todo
pero que no me deje colgado con todo acá, porque no lo iba a aguantar más
que de un día para el otro porque acá no hay lugar y a los propietarios les
gusta tener todo limpio, que no haya nada en el sótano ni arriba, él me dijo
que si que iba a pasar todos los días y hace como cuatro años que viene, no sé
si ha fallado algún día, a veces han venido los pibes.
Se llama Ramón, tiene no sé cuantos pibes y vive de esto, pero de a poquito
ha ido mejorando, anda prolijo y va arreglando la casita con todo lo que
158
junta, nunca ha venido tomado y los días de semana anda solo porque los
chiquitos van a la escuela.
Página
Vivía acá en la villa de paso y lo llevaron allá cerca del Barrio Las Heras, pero
la casa que le dieron es una porquería, sin pisos, el techo sin maderas, los
tirantes y las chapas no más, cuando se llenaron de gente se les reventaron
las cloacas, las puertas y ventanas se les torcieron todas, pero bueno se las
regalaron y este muchacho la valora y la va arreglando como puede, de acá
se ha llevado hasta escombro….”
“… nosotros entendemos que son pobres, que no hay trabajo, que Mar del
plata está difícil pero eso no justifica que se utilicen los animales para llevar
esos carros con miles de kilos encima, los animales tienen sus derechos y
somos nosotros los que debemos bregar por ellos porque no tienen voz… esos
animales sufren, están mal alimentados, andan sobre el asfalto y se lastiman
las vasos de caminar y caminar, hay yeguas que han parido en plena calle, se
lastiman porque los cinchan muy fuerte y cuando el carro va muy pesado los
tira para atrás y los lastima, hay accidentes y los caballos quedan tan
lastimados que hay que sacrificarlos, no los vacunan, no les dan agua durante
horas…es muy triste…. ¿A usted no le parece que esos animales tienen los
mismos derechos que todos?
159
Acá la municipalidad tendría que prohibir que anden con carros con caballos,
pero todos piensan en los cirujas y a nadie le importan los animales y es
Página
peligroso para los ellos mismos porque si hay un accidente ellos también
están en riesgo…”
Por su parte Ángela, una señora de aproximadamente 70 años que fue entrevistada en
una vereda de la calle Castelli casi Jujuy, opinaba así:
“…pobrecitos no tienen trabajo y es mejor que salgan a juntar cartones o a
pedir y no que roben, uno los ve todos los días aunque haga frío o mucho
calor empujando esos carros o llevando las bicicletas y da pena. Habrá
buenos y malos como en todos lados, pero hacen un trabajo sacrificado y
valioso para todos, porque ellos se llevan todo lo que los del camión de
recolección no se llevan…. En otros países le dan importancia a la ecología y
todo se recicla… en Alemania si usted lleva las botellas le hacen el descuento
y si lleva su bolsa también, hay fábricas para reciclar todos los materiales
que se pueden volver a usar… acá todavía nos falta para llegar a eso, pero
esta gente es útil en ese sentido porque todo lo que ellos juntan lo venden y
las empresas lo usan, el cartón, el diario, hasta el papel higiénico se hace con
papeles reciclados, lo que pasa que no valoramos los argentinos…. A mí me
parece bien que existan los cartoneros, los veo útiles para la sociedad y para
la ecología sobre todo, el gobierno tendría que ayudarlos a darles unas
camperas para cuando llueve, ellos andan igual pobrecitos….”
Sin pretensiones de agotar las posiciones, estás opiniones permiten sostener que aquel
círculo que relaciona las necesidades sociales con las problemáticas ambientales bajo la
influencia de intereses económicos y decisiones políticas, que se mencionó al iniciar el trabajo,
tiene su manifestación en esta ciudad.
160
Página
6. CONSIDERACIONES FINALES
Casi todos los países de la América Latina han atravesado procesos de urbanización que
determinaron la existencia de muy altos porcentajes de población residiendo en las principales
ciudades, con relaciones de supremacía muy amplias entre sus capitales y las ciudades de
segundo orden. Estas últimas están representadas por algunas capitales de provincia y otras
ciudades que sin serlo alcanzan un volumen poblacional entre 500 mil y un millón de
habitantes, superando en algunos casos el total de algunas jurisdicciones provinciales. Mar del
Plata es una de esas ciudades.
En todas ellas se han formado áreas periféricas, cinturones o cordones, que crecen de
manera espontánea por radicación de segmentos pobres que se asientan en las ciudades de
manera informal y atraídos muchas veces por imaginarios y expectativas que no logran
satisfacer en el corto y mediano plazo.
Es evidente que para los integrantes del segmento más pobre de la población, que
además de las carencias materiales presentan otras de tipo social como por ejemplo en sus
niveles de instrucción y capacitación para el trabajo urbano, deben enfrentar un mercado de
trabajo selectivo, con demanda restringida y oferta abundante, las posibilidades de insertarse
laboralmente son pocas. En el caso de existir esas posibilidades poseen, en la mayoría de los
casos, todas las características de la informalidad y precariedad: son trabajos ocasionales,
inestables, no registrados y por fuera de los marcos regulatorios del trabajo decente.
¿De qué vive, entonces, esa población?. Una parte de sus necesidades son satisfechas a
través de los planes asistenciales que se mencionaron a lo largo del trabajo (Planes Trabajar,
Jefes y Jefas de Hogar, Primera Infancia, Viandas y Bolsones de comida, Comedores Escolares,
Tarjetas de Compra, Asignaciones Universales por Hijo, Plan Jóvenes, Primer Empleo, Becas
para estudiantes, etc., etc.), pero ante la insuficiencia de éstos los miembros de esos hogares
recurren a la realización de trabajos estacionales (temporada de la pesca, cuida coches en áreas
de esparcimiento y balnearios durante el verano o cosechas en el área rural próxima); otros
dedican sus días a la realización de tareas en lugares fijos –paradas- de manera más o menos
162
constante (lava vidrios en esquinas de alto tránsito, cuida coches en zonas de oficinas o
establecimientos de gran afluencia de personas – los alrededores de la Universidad son un
Página
“… no que va a ser mío [el galpón], esto es mi cuñado que es el que le vio la
onda de la plata grande a la basura,… yo soy hijo y nieto de cirujas, toda mi
familia es ciruja, algunos todavía salen a juntar, tenés la costumbre, vas a
cualquier parte y andás mirando la vereda, pero ahora mi vieja hace años que
no sale y mi viejo ya murió. Yo y mis dos hermanos trabajamos con mi cuñado
en este galpón y en los otros que él tiene, pero mis tíos y primos andan en el
carro todavía. La familia de mi cuñado también eran cirujas, pero él se dio
cuenta que se podía hacer plata si empezaba a acopiar y fijate ya tiene tres
galpones, máquinas para enfardar y vende a Buenos Aires y lo ha hecho en 12
o 15 años. Él tiene alma de ciruja y cabeza de empresario… anda en un Audi y
acá no viene nunca….” (Santiago 26 años, encargado de un galpón acopiador
de la Avenida Libertad)
Esta actividad adquiere profunda importancia en la ciudad de Mar del Plata, según se ha
podido observar y analizar a lo largo del desarrollo de esta tesis. Los puntos en los que se
asienta esa importancia hacen referencia básicamente a tres aspectos: social, ambiental y
económico.
163
Desde el punto de vista social porque permite que esa población, mayoritariamente
Página
masculina, encuentre en el cirujeo o cartoneo una actividad regular a la que casi todos los
entrevistados consideran un trabajo digno “antes que salir a robar”, como varios de ellos han
declarado. Los que han logrado un grado de organización mayor decididamente lo consideran
su trabajo y hasta han declarado sus horarios. Tal es el caso de Carlos, cuya declaración al
respecto se incluyó en las páginas 102 y 141. En otros casos es una actividad de refugio cuando
las temporadas relacionadas a las distintas especies de la pesca o la construcción se encuentran
en baja, como lo expresó Fernando (página 104) y para otras personas, la mayoría entre los
entrevistados, es la única forma, no delictiva, que pueden llevar adelante para obtener
ingresos, en razón de sus condiciones intrínsecas (edad, instrucción, etc.). El relato más
ilustrativo es el de Frankestein, un señor mayor que cirujea en un radio cercano al acopiador al
que le vende porque su físico ya no le permite realizar grandes desplazamientos cargando el
bolsón, su relato se incorporó en la página 138.
En cambio entre los acopiadores pareciera que existe mayor conciencia respecto de la
importancia de la reutilización y reciclado de materiales recuperados entre los residuos que
produce la ciudad e incluso han dado detalles de las etapas de tratamiento que reciben los
distintos elementos. Por ejemplo se citó el relato del encargado de una empresa acopiadora
sobre el destino que tiene el teraftalato (PET), otros plásticos y papel hasta que ya no admiten
más tratamiento físico ni químico (relato incluido en la página 123 y siguientes).
numeroso de población en la ciudad de Mar del Plata que tristemente ha alcanzado, en varias
oportunidades, los porcentajes más altos de desocupación del país. Independientemente de
Página
este reconocimiento, no debe dejarse de lado que detrás de las opiniones de los acopiadores
99
De acuerdo a las condiciones fijadas en la Ordenanza Municipal Nº 16.000/05 y sus sucesivas prórrogas, el peso máximo
establecido para el retiro habitual es de 10 Kg. de elementos secos o desechos húmedos, embolsados. Todo residuo que supere
ese peso o no pueda ser embolsado no será retirado por el camión de recolección diaria o (o frecuencia establecida para los
distintos sectores de la ciudad) y el vecino o comerciante debe llamar al camión especial que circula aproximadamente una vez
por semana por cada barrio y abonar una tasa de retiro especial.
subyace su interés comercial y que los cartoneros son el punto inicio y sustento de su propia
actividad.
De acuerdo a la forma en que las autoridades municipales han actuado desde la puesta
en marcha del nuevo sistema de recolección diferencial de residuos, que en un comienzo
suscitó algunas fricciones con los cartoneros, producidas por las declaraciones de algunos
funcionarios y un tibio intento de prohibir la actividad de los cirujas, pareciera que también
desde el ejecutivo comunal se ha sopesado el beneficio que arroja la tarea para un grupo
numeroso de personas prácticamente imposibilitado de vincularse al exigente mercado de
trabajo y que de no poder seguir cartoneando incrementaría la cantidad de desocupados y por
consiguiente se agudizarían los reclamos de asistencia. Hay que considerar también que en
Mayo de 2012 los cartoneros plantearon enérgicos reclamos para que se les permitiera
continuar trabajando, reclamos que contaron con el apoyo de los acopiadores que de lo
contrario verían perjudicada gran parte de su negocio.
También debe reconocerse que para que esta práctica de separación en origen, para su
Página
posterior reciclaje, logre arraigo entre la población es necesario sostener en el tiempo las
campañas educativas de tipo formal e informal tendientes a la concientización y aprendizaje en
el manejo de los residuos sólidos domiciliarios por parte de la población.
100
Este relato ya consta en una página del cuerpo del trabajo, pero se considera oportuno reiterarlo.
Algunos entrevistados han hecho mención a los cambios introducidos al respecto en
Mar del Plata, pero en la mayoría de los casos son críticos y los consideran poco eficaces y
responsabilizan a las autoridades municipales de los resultados –para ellos escasos- obtenidos
en los dos años de vida del sistema de separación en origen y puesta en funcionamiento de la
planta de separación instalada por la Municipalidad de General Pueyrredon en proximidades del
nuevo predio de disposición final inaugurado casi en simultáneo, en 2012. Algunos pasajes de
esas menciones han sido incorporados en el desarrollo del trabajo, por ejemplo en las páginas
119 y 120.
Por ejemplo, los propios cartoneros señalaron que el material que más abunda es el
101
cartón y que el que se junta en las veredas es el que reúne las mejores condiciones para ser
reciclado por cuanto se encuentra seco y limpio, en contraposición con el que llega a la planta
en los camiones de recolección formal que está sucio, aplastado y ocasionalmente mojado.
Esta misma información la brindó la secretaria que guió la visita en la planta recuperadora más
grande que existe en la ciudad y allí se pudo apreciar las condiciones en las que llega ese
material en camiones provenientes de la planta de separación. Las condiciones de la mercadería
influyen directamente en su precio y destino.
El PET, tampoco es de los elementos que más interesan a los cartoneros, excepto a los
166
carreros, debido a que es muy liviano y para que el ingreso a obtener sea significativo se debe
acarrear una gran cantidad, en detrimento de otros materiales que rindan mejor. Ello también
Página
determinaría que una gran cantidad de botellas de polietileno tereftalato lleguen a la planta de
separación.
101
Es necesario señalar que el área que se seleccionó para llevar adelante las entrevistas se corresponde con la de mayor
concentración de comercios que son los que desechan mayor cantidad de cartón de embalajes.
En las proximidades de la planta de separación está localizada la empresa Fenix, dedicada
exclusivamente al acopio de botellas de plástico (PET y PEAD), relacionada con una empresa de
origen chino ubicada en el Gran Buenos Aires y cuyo principal proveedor es la planta municipal.
Este establecimiento cuanta con la enfardadora de plástico más grande que existe en Mar del
Plata, cuyas fotos se incluyen en la página siguiente.
Por último se hace referencia al papel y en tal sentido es probable que una cantidad
importante del papel que llega a la planta sea papel húmedo o sucio que tampoco es el
seleccionado en primer lugar por los recolectores informales ya que el precio que obtienen de
los acopiadores es menor.
Las cantidades que mencionó el Presidente del Ente, están en concordancia con los
valores de referencia obtenidos en las entrevistas a cartoneros y acopiadores que sostuvieron
que la recuperación informal “levanta” entre 120 y 150 tn. diarias y hay coincidencia también
en sus apreciaciones sobre la calidad de los materiales que se obtiene por ambas vías, como ya
se describió.
De acuerdo a los datos brindados por la Municipalidad se desprende que durante los
meses correspondientes a 2013, la cantidad de materiales reciclables recuperados en la planta
de separación fue en promedio de 174.931 kg. /mes, en tanto durante el año siguiente
(Mayo2013- mayo 2014) se aprecia una disminución de alrededor del 23.77% ya que el
promedio alcanzó a 133.352,5 Kg. /mes.
Tal vez el dato de mayor relevancia no esté dado por la composición del guarismo final,
sino por la disminución de la cantidad de kilos que en forma mensual se han logrado capturar.
167
Esto podría estar en sintonía directa con expresiones informales respecto de que el sistema no
estaría arrojando los resultados esperados. Al respecto el responsable de un establecimiento
Página
Independientemente de las opiniones vertidas por los críticos del sistema implementado
y del cariz triunfalista que desde el Municipio se le imprimió a los resultados, es indudable que
las cantidades recuperadas, sea a través del sistema de recolección formal o desde la
informalidad con que realizan la tarea los cartoneros significan un avance en cuanto a la
posibilidad de reinsertar vía el reuso o el reciclado una cantidad significativa de materiales que
de otra manera serían obtenidos directamente a través de la explotación de recursos naturales,
produciendo contaminación de aguas, degradación de suelos y colmatando predios de
disposición final rápidamente.
El otro aspecto que interesa resaltar en la exposición de los resultados es el referido a los
circuitos económicos, cuya teoría se utilizó como base para el análisis realizado. En tal sentido
es posible sostener que el estudio en profundidad de la actividad de la recolección informal, sus
derivaciones y destino de los materiales recuperados ha permitido comprobar todos y cada
uno de los postulados teóricos de Santos y coincidir con las comprobaciones anteriores
realizadas por Silveira en el sentido de su manifestación territorial, su relación con las
condiciones de trabajo, los capitales que interviene en un circuito y otro y, los resultados que
obtienen: escasamente la supervivencia para quienes participan del primer eslabón del circuito
inferior y resultados económicos de gran escala para las empresas recuperadoras y recicladoras.
Por su parte, en lo que es la actividad del cirujero o cartoneo en sí, los resultados
obtenidos también corroboran las ideas iniciales en cuanto a que es el área del macrocentro de
la ciudad la que convoca a alrededor del 60% de estos recolectores, básicamente a quienes
circulan arrastrando sus carros manualmente, con bicicletas o en motos, siendo los carros
tirados por caballos los que se desplazan por zonas más amplias, aún cuando no dejan de
hacerlo por la anteriormente nombrada.
En todos los casos las distancias de los recorridos desde los barrios en que residen hasta
el área de recolección, la circulación dentro de ésta última, el viaje de regreso hasta el
acopiador y la vuelta a sus hogares representa entre 15 y 22 kilómetros diarios. En general no
existen diferencias significativas entre quienes utilizan los distintos tipos de vehículos, aunque
lógicamente son los carros con tracción a sangre los que cubren las mayores distancias.
Como se indicó con anterioridad los barrios de residencia de todos los entrevistados, son
los caracterizados como precarios y como tales se encuentran localizados en la periferia de la
ciudad lo que se relaciona directamente con las grandes distancias que deben recorrer. Estos
recorridos pueden apreciarse en los planos temáticos incorporados el final de este apartado de
resultados de la investigación.
Los horarios de recorrida son sumamente amplios aunque sectorizados, pero en general
es posible sostener que los cartoneros circulan desde las primeras horas de la mañana hasta las
primeras de la madrugada, en algunos casos para recolectar y en otros para poder realizar los
acarreos hacia los galpones acopiadores. El área del micro centro concentra la mayor cantidad
de recolectores alrededor del mediodía y primeras horas de la tarde, horario que coincide con
la apertura de los comercios minoristas allí localizados que desechan gran cantidad de cartones
de embalajes. Mayoritariamente la circulación por esa zona es de cartoneros con carros
manuales arrastrados con bicicletas o manualmente. Por la zona de concentración
169
102
En el apartado correspondiente a los anexos figura la resolución AFIP RGC 2849/10 de Régimen de retenciones para
comercialización de materiales a reciclar
recolectores con carros tirados por caballos circulan a altas horas de la noche y primeras de la
madrugada, recolectando desechos alimentarios103 y botellas de vidrio y plástico.
En los casos entrevistados que se encontraba un mayor con uno o más menores, todos
declararon que salen con los niños porque son los que ingresan a los comercios a pedir
alimentos, dado que provocan mayor sensibilidad, efecto que utilizan como estrategia para
obtener mejores resultados.
También merece consideración la opinión negativa que todos los entrevistados poseen
sobre las medidas implementadas por la municipalidad para la clasificación en origen de los RSU
y el retiro dos días por semana, a pesar que casi todos coinciden en que en aquellos barrios
donde el porcentaje de personas que sacan las bolsas diferenciadas su tarea se ve facilitada y
obtienen materiales en mejores condiciones (limpio y seco), en tanto los cartoneros de menor
porte critican que las autoridades no impidan el ingreso de los carros con caballos al área
céntrica, ya que los consideran como “pirañas” que no les dejan nada y aducen que por culpa
de ellos que usan caballos la gente desprecia a todos los cartoneros por igual.
De las observaciones realizas en las recorridas compartidas con los cartoneros, mientras
se los entrevistaba, puede concluirse que en aquellos casos en que circulan por la misma zona
los comerciantes, encargados de comercios y población en general les manifiesta cierto aprecio
y agradecimiento porque les retiran una cantidad importante de residuos que de otra manera
les implicaría un costo extra, como es el caso de grandes cantidades de cartón,
electrodomésticos en desuso, botellas, muebles, diarios y revistas, colchones, restos de
materiales de construcción y refacciones, etc. en algunas oportunidades como recompensa les
entregan alimentos, golosinas o ropa.
Por último es interesante resaltar que todos los entrevistados han manifestado que ellos
y otros miembros de sus familias utilizan ropa, calzado, enseres, muebles, colchones y otros
elementos que recolectan y que lo que no les resulta útil lo venden o regalan entre los vecinos
del barrio, en algunas oportunidades en ferias organizadas en los comedores barriales o en
170
El dato más preocupante y que se considera que requiere intervención en el corto plazo
es la formación de basurales barriales que son alimentados con todos aquellos elementos que
103
Algunos de esos sobrantes suelen ser entregados por los comercios en buenas condiciones y son consumidos por los
recolectores y sus familias y en otras oportunidades sirven de alimento para cerdos, actividad que se encuentra asociada en l os
barrios pobres. Existen casos de recolectores que venden esos desperdicios a algunos criaderos del área periurbana sur de la
ciudad –altura Barrio Rumencó y Cementerio Parque o en los del Barrio Las Dalias.
recolectan para extraerles una parte y los restos no comercializables son desechados en algún
terreno baldío en las proximidades de sus viviendas. Esta práctica colabora en la profundización
de las malas condiciones medioambientales que registran sus barrios. La misma situación se
repite en los patios de las viviendas porque allí se llevan a cabo las tareas de separación y
clasificación de los materiales para su venta posterior, la quema de cables para obtener cobre y
el acopio particular de otros elementos que son vendidos con una periodicidad distinta a la
diaria.
171
Página
7. DISCUSIÓN Y RECOMENDACIONES
Esta consideración no pretende ser una excusa, sino una postura honesta que
reconoce la complejidad de una problemática presente en la mayoría de los países periféricos
para la que no es posible idear soluciones simples, ni en el corto plazo, ni propuestas desde una
sola óptica. Así, para poder avanzar hacia la solución de este complejo que reconoce entre sus
bases aspectos históricos, políticos, económicos, sociales, educacionales y que tiene resultados
sociales, territoriales y ambientales, se hace indispensable la convocatoria a grupos
interdisciplinarios.
⇒ Con referencia a la utilidad que posee esta forma de recolección para la ciudad, en
Página
un pasaje del trabajo se graficó una posible consecuencia de su suspensión citando la película
“A day withuot a mexican”; literalmente, en las condiciones que actualmente presenta el
sistema de recolección formal de los RSU, prontamente y parodiando aquel film bajo el título
“algunos días sin cartoneros” la ciudad se convertiría en un caos de basura acumulada y
protestas de la población y de todos los involucrados en el circuito económico de los materiales
recuperados frente a las puertas de la municipalidad. Esto debido a que el pliego de licitación
vigente contempla especificaciones para el retiro de aquellos residuos: justamente para la
mayoría de los que son levantados por los cartoneros, por su volumen, por la imposibilidad de
embolsarlos, etc., etc.
⇒ Hay que considerar también a toda la población que se vincula de manera indirecta
al cirujeo como son los acopiadores y recuperadores y junto a la supresión de fuentes de
trabajo que significaría el cese de la actividad, debe evaluarse también el prejuicio económico
que sufrirían esas empresas y cómo se resentiría la relación comercial que establecen con
terceros fuera de la ciudad.
La discusión debe tener en cuenta cómo se resentiría la posición alcanzada por Mar
del Plata, como proveedora de materias primas para varias industrias, localizadas en otras
ciudades o provincias.
varios puntos de vista, por ejemplo los inconvenientes que producen en el tránsito y la
peligrosidad que representa para los propios carreros y para terceros la posibilidad de
Página
ocurrencia de accidentes por caballos que se espantan por bocinazos, o ruidos de los vehículos
que circulan casi rozándolos. También deben considerarse los reclamos que realizan algunas
asociaciones defensoras de los derechos del animal, sobre todo en lo que respecta a las
deficiencias en las condiciones sanitarias, de alimentación y descanso de los animales.
La discusión debe tener en cuenta alguna opción para que dejen de circular. Podría
instrumentarse alguna modalidad de puestos móviles de compra de los materiales y proveerlos
de carros más pequeños, manuales, para que recolecten caminando y luego vendan
directamente en las cercanías de los lugares de recolección.
La discusión debe tener en cuenta alguna opción para que las autoridades del área de
minoridad instrumenten acciones tendientes a garantizar el cumplimiento de la legislación
vigente en cuanto a la prohibición del trabajo infantil. Posiblemente a través de alguna
campaña educativa y de incentivación se logren resultados positivos al respecto.
174
Página
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177
178
Página
9.1. Régimen de retenciones para comercialización de materiales a reciclar
A continuación se detallan las características principales de cada uno y las fechas de entrada en
vigencia:
a) Recicladores
b) Acopiadores
c) Galponeros
d) Generadores de “scrap”
e) Intermediarios
actuar como Agentes de Retención cuando adquieran alguno de los siguientes bienes: PET,
Papel y cartón, Vidrio, Plástico, Metales ferrosos o no ferrosos, a Acopiadores, Galponeros o
Intermediarios. Los sujetos que actúen como Recicladores también estarán alcanzados por esta
obligación aún sin estar incorporados en el registro.
Las citadas operaciones quedan excluidas de la retención establecida en el Artículo 1º de la
Resolución General Nº 18, sus modificatorias y complementarias y de la percepción dispuesta
por el Artículo 1° de la Resolución General N° 2.408, así como de las que las sustituyan o
complementen.
El régimen de retención del impuesto a las ganancias es aplicable a cada uno de los importes
correspondientes al pago de las operaciones de venta de los bienes indicados en el párrafo
anterior. Asimismo estas operaciones quedan excluidas del régimen de
retención establecido mediante la Resolución General Nº 830, sus modificatorias y
complementarias.
* Para el presente régimen se entiende por recolector a la persona física mayor de DIECIOCHO
(18) años, que no tenga la condición de responsable inscripto en el impuesto al valor agregado,
ni de empleado registrado y se dedique —como actividad autónoma— a recoger y vender
materiales reciclables, obtenidos de los residuos urbanos dispuestos en la vía pública pasibles de
ser revalorizados, excluyendo los residuos peligrosos y/o patogénicos.
Los recolectores están exceptuados de emitir factura o documento equivalente por las
operaciones de ventas de los bienes indicados anteriormente.
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Página
9.2. Material para difusión en la campaña pro separación de residuos obrante en la
página oficial de la Municipalidad.
Separación de residuos
Desechos
Orgánicos x Restos de comida
No deben incluirse en ninguna de las dos bolsas las pilas tipo botón ni las baterías recargables. Estas se
desechan en los "comepilas" ubicados en dependencias públicas municipales, locales de venta de pilas y
baterías.
Las baterías de teléfonos celulares se desechan en contenedores exclusivos para este fin ubicados
dentro de los locales de las compañías proveedoras de servicios de telefonía celular.
El peso máximo de las bolsas (tanto verdes como comunes) para su recolección es de 10 kg.
Por qué no se deben mezclar los residuos húmedos u orgánicos con los recuperados?
Serán los martes y viernes para la basura reciclada y el resto de los demás días para los residuos orgánicos
La Municipalidad de General Pueyrredon, a través de Obras y Servicios Urbanos Mar del Plata
(ENOSUR), a cargo de Marcelo Artime, recuerda que desde el martes 17 de junio se comenzará
con el nuevo cronograma de recolección de residuos. Por tal motivo, los martes y viernes se
producirá la recolección de la basura reciclable y el resto de los días será el turno para los
residuos orgánicos.
Al respecto, el titular del ENOSUR Marcelo Artime explicó: “La importancia de acatar este
nuevo cronograma y de sacar las bolsas por separado radica en que esto va a facilitar
muchísimo el trabajo de los recicladores. Que los materiales que son recuperables, como el
cartón, plástico, el papel, el vidrio y la lata pierden mucho valor cuando son ensuciados o
mojados, a veces por materiales orgánicos, como son los que van en la bolsa negra. Por eso es
muy importante sacar la bolsa verde un día y la bolsa negra el otro”, agregó.
En la misma línea, el funcionario manifestó que "la separación de residuos tiene 2 objetivos:
por un lado es por una cuestión ambiental, como todos lo conocemos, pero también, por otro
lado es construir en Mar del Plata una nueva industria, que es la industria de la separación, la
industria del recupero y la industria del reciclaje, y que estamos convencidos de que puede
producir muchas fuentes laborales como sucede en otras ciudades del mundo. Por eso es muy
importante que los vecinos dediquen unos minutos en sus casas para poder separar los
residuos y así comenzar el desafío de construir esta nueva industria", afirmó.
De esa manera, Artime remarcó que “cuando se dice que pierde valor, esto quiere decir que
no estamos contribuyendo a generar esta nueva industria, que es la industria del reciclaje en
Mar del Plata, que hoy le da mano de obra a 40 familias de la Cooperativa CURA. Pero también
hay otros trabajadores que separan residuos: actualmente en Mar del Plata se generan 200
toneladas de PET por mes. De ese total, se separa cerca de la mitad, con lo cual tenemos 100
toneladas que todavía falta separar y que podrían comercializarse, generando más puestos de
185
trabajo”, aseguró.
Por último, el titular de ENOSUR declaró: “Vamos a hacer un análisis desde el punto de vista
Página
económico-productivo, para ver qué potencialidad tiene la industria del reciclaje en Mar del
Plata. No tenemos duda que mueve una cantidad de dinero importante y que tiene una
potencialidad muy pero muy grande en lo que tiene que ver con generación de esta industria y
con fuentes de trabajo.”
9.4. Precios promedio de venta de los materiales recuperables obtenidos por los
recolectores informales. Abril-Julio 2014.104
104
Los precios indicados resultan del promedio que pagan los distintos acopiadores. Estos importes se obtuvieron a partir de las
declaraciones de los entrevistados, cartoneros y acopiadores. La dispersión entre precios máximos y mínimos pagados es
pequeña, las variaciones obedecen a la calidad y cantidad de los elementos a vender. Fecha de relevamiento Abril-Julio 2014.