Materiales de Laboratorio
Materiales de Laboratorio
Materiales de Laboratorio
3.- Fiola
7.-Probeta milimetrada
8.- Pipeta
9.-Pera de decantación
13.-Rejilla de asbesto
14.-Cucharilla de combustión
15.-Pinza de madera
17.- Matraz
18.-Luna de reloj
19.-Portaobjetos
20.-Crisoles
23.-Gradilla
Metal, madera.
25.-Escobillas de cerdas
1. Nos da información sobre la naturaleza de la sustancia en la muestra. Esto podemos lograrlo midiendo la
absorbancia (Abs) a distintos largos de onda (l) y graficar estos valores en función del largo de onda, formando un
espectrograma. Como cada sustancia tiene unas propiedades espectrales únicas, distintas sustancias producen
distintos espectrogramas. Esto se debe a que cada sustancia tiene un arreglo de átomos tridimensional particular
que hace que cada sustancia tenga características únicas. Al ser expuestos a la luz del especrofotómetro, algunos
electrones de los átomos que forman las moléculas absorben energía entrando a un estado alterado. Al recuperar su
estado original, la energía absorbida es emitida en forma de fotones. Esa emisión de fotones es distinta para cada
sustancia, generando un patron particular, que varía con el largo de onda usado. Dependiendo del largo de onda,
será la cantidad de energía absorbida por una sustancia, lo que logra generar un espectro particular al graficar Abs
vs l
2. Nos dice cuanta cantidad de la sustancia que nos interesa está presente en la muestra. La concentración es
proporcional a la absorbancia, según la Ley Beer-Lambert: a mayor cantidad de moléculas presentes en la muestra,
mayor será la cantidad de energía absorbida por sus electrones.
Abs = K C L
Abs: absorbancia
K: coeficiente de extinción molar
C: concentración
L: distancia que viaja la luz a traves de la muestra. (normalmente es de 1 cm)
La cuveta promedio, que guarda la muestra, tiene dimensiones internas de un centímetro (L). La ecuación describe
una línea recta, donde el origen es cero. Si L es constante (1.0 cm) y se conoce el valor de K, podemos calcular C en
base a Abs:
Abs / K L = C
El espectrofotómetro mide la absorbancia de una muestra en los espectros de luz ultravioleta y visible (200 a 850
nm). El largo de onda es determinado por un prisma que descompone el rayo de luz de acuerdo al largo de onda
escogido. Luego la luz pasa por una hendidura que determina la intensidad del haz. Este haz atraviesa la muestra y
llega a un tubo fotográfico, donde es medido. La cantidad de luz que atraviesa la muestra es el porcentaje (%) de
tramitancia. Podemos usar esta unidad o cambiarla a absorbancia usando la siguiente ecuación.
%T = - Log Abs.
El espectrofotómetro nos puede dar ambos valores a la misma vez, ahorrando la necesidad de hacer los cálculos.
(Tramitancia= cantidad de luz que atravieza la mezcla).
Una característica del instrumento es la necesidad de "blanquear" el aparato antes de cada lectura. Esto se hace
colocando una cuveta con una solución control que tenga todos los componentes de la reacción menos la sustancia
que va a ser medida en el instrumento y ajustando la lectura a cero absorbancia. El propósito de esto es eliminar
el registro de absorbancia (background) que puedan presentar los demás componentes de la reacción a ese largo de
onda particular. Todas las moléculas presentan absorbancia porque todas interfieren con el paso de la luz. Sólo que
la absorbancia será óptima a un largo de onda de luz específico para cada tipo de sustancia.
Cubetas
Las cuvetas son unos viales de plástico transparente o cuarzo que dejan pasar la luz.
Los mejores para trabajos de investigación son las de cuarzo porque su interferencia
al paso de la luz es mínimo. Son más costosas inicialmente pero bien tratadas pueden
ser reusables. Las de plástico vienen con distintas características. Por lo general son
desechables, aunque pueden reusarse. El tipo de cuveta plástica a usar depende del
rango de luz en el que se van a analizar las muestras. Vienen unas para luz visible,
que son las más económicas, y otras para el rango de visible a ultravioleta. Estas son
más versátiles.
Ambos tipos de cuvetas deben manejarse con cuidado para evitar rallazos sobre la superficie por donde pasa la luz.
Si la cuveta está rallada, los rayos de luz que incidan en la zona se difractan y no pasan por la muestra, por lo
que puede dar lecturas de absorbancia erróneas. Esto es especialmente crítico cuando queremos determinar
concentración en una muestra. Antes de tomar una lectura, debemos observar que la cuveta no tenga rallazos ni esté
sucia. Si se ven marcas de polvo u otro tipo de sucio la cuveta debe limpiarse con papel tisú (Kimwipes). Si la cuveta
se manipula mucho, debemos sostenerla usando papel tisú para evitar pegarle los aceites que normalmente tenemos
en las manos. No debemos usar ningún otro tipo de papel para limpiar las cuvetas, puesto que pueden soltar fibras
que pudieran caer en la muestra o rallar la superficie.
Las cuvetas viene en distintos volúmenes, desde 1 ml hasta 4 ml. El volumen a escoger depende de la cantidad de
muestra disponible. Si la muestra disponible es poca o difícil de conseguir, lo mejor es usar una cuveta de menor
volumen para perder la menor cantidad posible de la muestra. Por lo general, la muestra utilizada para hacer la
lectura se pierde, sobre todo si es una sustancia bien sensitiva, como el ADN.
Pipetas y pipeteadores
Usamos las pipetas para medir volúmenes de líquidos de forma más precisa que con una
probeta. Y son más versátiles, sobre todo al manejar volúmenes pequeños.
Las pipetas de bulbo son útiles para medir volúmenes que no req uieren de mucha
presición. Antes se usaban pipetas "Pasteur" de cristal a las que se les aditaba un bulbo de
goma que se usaba para succionar el líquido. Ahora vienen en plástico desechable de una
sola pieza y se consiguen con o sin calibración.
Las pipetas volumétricas vienen en distintos tamaños, desde 1 ml hasta 200 ml, y con
distintas formas, de acuerdo al uso que se les dé. También vienen en distintos materiales como borosilicato y
plástico, desechables o reusables, estériles o sin esterilizar. Algunas pueden ser esterilizadas en horno o autoclave.
Para llenarlas se pueden usar bulbos de caucho, bombas manuales o eléctricas, o equipos de llenado. Las bombas
eléctricas y los equipos de llenado son muy útiles si se está trabajando con múltiples muestras, pues minimizan la
fatiga del técnico.
Las micropipetas son extremadamente útiles en los laboratorios de biotecnología. Estas permiten medir con
presición volúmenes tan pequeños como 0.1 µl hasta 1 ml. Estas requieren de unos pipeteadores especiales que
deben der tratados con mucho cuidado para evitar que se descalibren. Los pipeteadores vienen de distintos tipos. La
mayoría pueden servir muestras individuales. Pero vienen los que pueden servir muestras múltiples, por medio de
multicanales: pipetas que sirven 8 o 12 muestras a la vez. Estas son muy útiles al hacer pruebas de ELISA, donde se
practican diluciones seriadas multiples, o para preparar reacciones de varias muestras distintas a la vez. Se usan en
conjunto con platos de fosas múltiples.
Las puntas de micropipetas vienen con distintas características de acuerdo al uso que se les dé. Vienen con punta
ancha, estrecha o aplanada, con o sin filtros contra aerosoles, estériles o sin esterilizar y pueden ser esterilizadas en
autoclave.
Aparatos de electroforesis
Estos son unas cámaras que contienen un circuito eléctrico expuesto a un líquido
electrolítico, llamado amortiguador. El aparato se usa para separar mezclas de moléculas
grandes de acuerdo a su carga y/o su tamaño. La técnica consiste en inocular la muestra
en un medio semisólido, la fase estacionaria, que se somete a un campo eléctrico, en una
cámara donde en un extremo se encuentra un filamento que actúa como polo positivo, y
en el extremo opuesto hay otro filamento formando el polo negativo. Las moléculas con
cargas netas positivas se moverán hacia el polo negativo y las de carga negativa
se irán hacia el polo positivo. Luego de la muestra ser tratada apropiadamente
dependiendo del tipo de electroforesis, las moléculas que viajen hacia uno de los polos se separarán por tamaño,
viajando más en la fase estacionaria las moléculas más pequeñas. El tipo y concentración de la fase estacionaria
dependerá del tipo de moléculas que nos interesa correr.
Centrífugas
Son muy útiles para precipitar células y moléculas. Vienen en distintos tamaños y con distintas
capacidades en el manejo de muestras. Este aparato somete la muestra a fuerzas de aceleración
que obligan a las moléculas a concentrarse en el fondo del envase utilizado, separándolas del
medio en que se encuentran. Incluso, bajo ciertos métodos se puede generar un gradiente de
concentraciones dentr o del mismo tubo, separando distintas moléculas a distintos niveles o
fases dentro del tubo. Con ayuda de jeringas, se puede perforar la pared del tubo y extraer del
mismo sólo aquella fase donde se encuentren las moléculas de interés.
Entre las centrífugas que usaremos durante el semestre están la centrífuga refrigerada, que nos
va a permitir separar células de los medios de cultivo. El rotor de esta centrifuga puede
sostener tubos de 50 ml, pero puede ser intercambiado por rotores que sostienen botellas de cultivo.
La microcentrífuga es una versión más pequeña de la descrita anteriormente. Es compacta, se coloca sobre la mesa y
procesa muestras de hasta 2 ml. Es muy útil para precipitar ADN y otras sustancias que se trabajan en volúmenes
pequeños.
Equipo de cromatografía
Haremos varias cromatografias al final del semestre. En
una cromatografía buscamos separar uno o varios tipos de moléculas,
relativamentre pequeñas, de una mezcla de sustancias o para purificar muestras.
Existen varios tipos de cromatografías. La que se utilice dependerá del tipo de
moléculas que buscamos aislar.
La cromatografía de capa fina es ideal para separar muestras pequeñas. Presenta
dos componentes: una fase estacionaria y una fase móvil. La fase estacionaria
consiste de una placa de vidrio o celulosa impregnada con polvo de silicato
(vidrio molido extremadamente fino). Las muestras se colocan a un centímetro
del borde inferior y se coloca en un tanque de revelado que contiene algun tipo de solvente en el fondo. La placa se
coloca de forma que el solvente no toque directamente las muestras. La fase mó vil consiste del solvente. El solvente
a usarse dependerá de las propiedades químicas de los componentes de la mezcla.
El solvente sube por capilaridad por la superficie impregnada con las muestras. Los componentes de la mezcla
comenzarán a migrar, según el grado de afinidad que tengan por el solvente y/o la fase estacionaria. Mientras más
afín sea algún componente a la fase móvil, más rápido se moverá y más lejos llegará en su migración sobre la fase
estacionaria.
En la cromatografía de columna se pueden separar volúmenes más grandes de muestras. Tambien tiene una fase
estacionaria que consiste de un tubo conteniendo un material que separa la mezcla analizada. Los amortiguadores
que se usan para lavar la columna constituyen la fase móvil.
El empaque de las columnas puede separar moléculas por su tamaño, por sus interacciones iónicas o por
interacciones hidrofóbicas. El tipo de empaque a usar dependerá de las propiedades de la muestra.
Existen otros tipos de cromatografía más sofisticados, que se usan en laboratorios de investigación y
en procesos de manufactura en varios tipos de industrias. Nosotros nos limitaremos a los descritos anteriormente.
Microscopio
El microscopio
Es un instrumento que permite observar objetos que son demasiado pequeños para ser vistos a simple vista. El tipo
más común y el primero que se inventó es el microscopio óptico. Se trata de un instrumento óptico que contiene dos
o más lentes que permiten obtener una imagen aumentada del objeto y que funciona por refracción. La ciencia que
investiga los objetos pequeños utilizando este instrumento se llama microscopía.
Etiquetas para colocar a los reactivos
La pureza de los reactivos es fundamental para la exactitud que se obtiene en cualquier análisis. En el laboratorio se
dispone de distintos tipos de reactivos (sólidos, líquidos o disoluciones preparadas) tal y como se comercializan.