Familias Disfuncionales
Familias Disfuncionales
Familias Disfuncionales
1. Familias disfuncionales
"He aquí, yo os envío el profeta Elías, antes que venga el día del Señor,
grande y terrible. El hará volver el corazón de los padres hacia los hijos,
y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la
tierra con maldición." (Malaquías 4:5-6)
Una familia que funciona mal, ejerce una presión constante que deforma
emocionalmente de por vida a aquellos que se crían en ella.
Principios bíblicos
"Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor. ... y la
mujer respete a su marido." (Ef. 5:22 y 33) - Cuando el esposo demuestra
a su esposa amor y entrega "como Cristo", la sujeción y el respeto de la
esposa es una respuesta lógica.
"Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las
repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando
por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes." (Deut. 6:4-7) Los
padres son responsables de instruir a sus hijos constantemente en la
Palabra de Dios.
El machismo
Los miembros más vulnerables de cada sociedad son los niños. Ellos son
los que con más frecuencia son víctimas de abuso. Esto empieza desde el
hogar. ¡Cuántos padres (y madres) no conocen otro método educativo
que los golpes! Aun en las escuelas, todavía son demasiado frecuentes
los casos de niños maltratados por sus profesores.
Mucho más peso tiene los caprichos y las emociones momentáneas del
padre o de la madre: "¡Te he dicho que dejes de jugar con esa muñeca!"
"¡Me estás haciendo renegar!"
Este trato refleja muchos rasgos del gobierno colonial, donde los
caprichos de los gobernantes tenían mayor peso que todo derecho o ley.
Parece que muchos padres educan a sus hijos, no para el bien de los hijos,
pero para que ellos cumplan las aspiraciones de los padres. Eso explica
por qué los hijos pueden pasar de un momento a otro, de príncipes y
princesas adorados, a prisioneros y esclavos, y vice versa: En un
momento, el padre ve en su imaginación a sus hijos como futuros
profesionales, cuyo éxito levantará el orgullo del padre.
Así que los levanta sobre un pedestal y quiere brindarles las "mejores
oportunidades" (desde el punto de vista del padre; pero no le importa
cómo se ve la cosa desde el punto de vista del niño.) Este motivo es tanto
más fuerte, cuanto más frustrado se siente el padre respecto a sus propios
sueños.
Quizás dice: "Quiero que mis hijos tengan una vida mejor que yo." Pero
en el fondo, la idea es: "Me siento insatisfecho porque no logré mis metas.
Quiero que mis hijos me devuelvan esta satisfacción, cumpliendo en mi
lugar lo que yo no alcancé."
Y en otro momento, el padre o la madre siente algún deseo que sus hijos
deben cumplirle ahora; entonces los degrada repentinamente a esclavos:
"Estoy saliendo; ¡tú cuida a tus hermanitos y cocina para ellos!" - O los
padres se sienten avergonzados por algo que sus hijos hacen, o por algo
que no saben hacer, entonces cargan toda su frustración sobre ellos:
"¡Cómo no supiste responder a la pregunta de la tía! ¡Me has hecho
quedar mal ante todo el mundo! ¡Ahora vete a tu cuarto y no salgas hasta
que yo te lo ordene!"
Ya que existen tales libros que pretenden ser cristianos, tenemos que
examinar este concepto a la luz de la Biblia. ¿Es éste el concepto bíblico
de "obediencia"?
Jesús usa este ejemplo para enseñar a los sacerdotes y ancianos que "los
cobradores de impuestos y las prostitutas entrarán antes que ustedes en
el reino de Dios" (v.31).
El apóstol Pablo escribe acerca de ciertos líderes, "a los que ni por una
hora cedimos en sumisión" (Gálatas 2:5). Hay "autoridades" a quienes no
hay que obedecer, porque exigen cosas contrarias a la voluntad de Dios.
Pero aun en ese punto, Dios le hace una concesión: le libra de la carga de
tener que hablar al pueblo y al Faraón directamente. En su lugar, le
permite ir acompañado por Aarón quien iba a ser su portavoz.
Problemas de comunicación
Una fuente particular de vergüenza para los niños es cuando se les dice:
"Dios te castigará". Dios mismo ha encargado a los padres con la
educación y disciplina de sus hijos; entonces ¿por qué tienen que echar
la responsabilidad otra vez sobre Dios? Esto es lo que la Biblia llama "usar
el nombre de Dios en vano", y por tanto es una forma de abuso espiritual.
Los mecanismos de vergüenza están tan arraigados, que la gente hace
un sinnúmero de cosas ridículas para "no pasar vergüenza".
- Los niños. aprenden que se puede usar la mentira para conseguir lo que
uno quiere (entonces usarán el mismo método frente a sus padres).
El les dijo: "Ustedes son mis amigos, si hacen lo que yo les mando. Ya no
les llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero
les he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, se las
he dado a conocer." (Juan 15:14-15).
Jesús nunca disimulaba ante sus discípulos, ni les mentía, ni los
manipulaba. Los discípulos sabían que eran amados, que estaban seguros
en la gracia de Dios, y que eran capaces de cumplir algo.
Negligencia y sobreprotección
Escolarización temprana
Quiero entrar en este tema con más detalle, porque existe demasiada
información falsa y conceptos equivocados sobre este asunto. La
tendencia actual consiste en entregar a los niños cada vez más temprano
al cuidado del Estado. Cuando nuestro primer hijo tenía dos años, ya nos
preguntaban algunos amigos: "¿A qué jardín lo están mandando?"
En realidad, la mejor estimulación temprana consiste en la interacción
entre el niño y sus padres.
Todos estos estudios confirmaron unánimemente que los niños que entran
en la escuela más tarde (a partir de los ocho años), se desarrollan mejor.
Los niños que habían sido educados en el hogar por un tiempo
prolongado, por lo general mostraban mejores habilidades intelectuales,
un mayor equilibrio emocional, y más cualidades de liderazgo.
Estos datos están disponibles por lo menos desde el año 1975, cuando
apareció la versión original (inglesa) del libro del doctor Moore. Pero los
ministerios de educación en los diversos países ignoran estos datos, y
siguen moviéndose en la dirección opuesta. ¿Es esto solo ignorancia, o es
tal vez un plan concebido para dar al gobierno el control total sobre las
mentes de la próxima generación?
Por otro lado, los niños pueden aprender un montón de cosas de sus
padres, de una manera informal y natural. Aprenden a vestirse, a barrer,
a lavar su ropa, a cocinar, a arreglar cosas en la casa, etc, mientras hacen
estas cosas juntos con sus padres.
Los padres tienen que darse cuenta que ellos son los responsables de
educar a sus hijos, no solo de delegar la educación a otras personas y
después exigir "resultados" de ellos.
No es lógico, como padre, exigir de manera posesiva que mis hijos sigan
el camino que yo les estoy trazando, y a la vez de manera negligente
dejar toda su educación en manos de otras personas.
Conociendo a Dios Padre
Mientras el niño crece en una familia sana, no hay nada de malo en esto.
El niño experimenta al padre como una persona grande y fuerte; entonces
puede imaginarse que Dios es todavía mucho más grande y fuerte, que
es todopoderoso.
El niño experimenta que el padre gobierna los asuntos del hogar, y que a
veces tiene que hacer justicia en las peleas entre hermanos; entonces
puede imaginarse que Dios gobierna sobre todo el mundo en justicia. El
niño experimenta cariño, amor y ánimo de parte de su padre; entonces
puede imaginarse que el amor de Dios es todavía mucho más grande que
el amor de su papá.
Pero ¿qué sucede con un niño que es maltratado por su padre? ¿No se
imaginará este niño a Dios como una persona cruel, iracunda, y en quien
no se puede confiar? - ¿Y qué del niño que fue abandonado por su padre?
¿No llegará a pensar que Dios no se interesa por él, que Dios se ha alejado
de él y que no es posible relacionarse personalmente con él?
Estos padres han representado a Dios de una manera muy mala y
distorsionada. Entonces al niño no le ayuda en nada decirle que "Dios es
como un padre". Al contrario, este niño tiene que aprender que Dios
es muy diferente de su padre - y aprender esto es mucho más difícil.
¿De dónde puede saber este niño qué es un buen padre, si nunca ha visto
un ejemplo de uno? Estas experiencias levantan barreras entre el niño y
Dios; y estas barreras persisten hasta la edad adulta.
Autoridad
Confianza
Tal vez de niño fuiste abandonado por tus padres. Ahora te resulta difícil
no dudar de la fidelidad de Dios, siendo su hijo. No puedes borrar las
memorias de tantas promesas rotas.
Valores
No obstante, son muy pocas las veces que oyen las palabras "Te amo
mucho".
Dios no es tacaño, ni posesivo, ni materialista. Nosotros a veces
usamos a las personas como si fueran cosas; por el
contrario, Dios usa las cosas para bendecir a las personas.
Afecto
Muchos niños, particularmente los varones, reciben muy poco afecto físico
de su padre, y ninguna compasión genuina cuando sufren. ... No obstante,
el amor de Dios cura las heridas tanto de los hombres como de las
mujeres. Al ser nuestro Padre, El siente nuestro dolor más profundamente
que nosotros, porque su sensibilidad al sufrimiento es mucho mayor.
Presencia
Aceptación
Comunicación
En cierta ocasión una chica me dijo que no podía hablar con Dios, que
sentía como si sus palabras chocaran contra la pared. ... Cuando oramos
juntos, se dio cuenta de que se imaginaba a Dios como si fuera su propio
padre, bueno y sincero, pero callado y tímido.
Este era un hombre que apenas había hablado con sus hijos y nunca les
había dicho que los amaba. Cuando ella admitió que su padre había sido
débil, y que incluso le había fallado, pudo perdonarlo y aceptarlo tal y
como era. Este reconocimiento abrió ante ella toda una nueva dimensión
en su relación con Dios. ... Pronto comenzó a sentir la guía y la presencia
de Dios en su vida.
(Floyd McClung, "El corazón paternal de Dios")
Pero no es suficiente con solamente saber esta información. Para que esta
información transforme nuestras vidas y nuestra relación con Dios,
necesitamos una revelación sobrenatural de Dios donde El mismo nos
muestre como es El en realidad. Podemos usar los textos bíblicos
mencionados como punto de partida para buscar esta revelación.
El padre pródigo
Jesús nos contó la historia del hijo pródigo. Pero en la sociedad peruana
parece que es más común el fenómeno del "padre pródigo": Padres que
abandonan a su esposa, sus hijos y su casa, para llevar una vida
irresponsable. Y aun entre los padres que se quedan con su familia, hay
muchos que abandonan a sus hijos emocionalmente. Es una característica
común de casi todos los jóvenes con problemas emocionales, que
dicen: "Yo nunca sabía lo que significa tener un padre".
En 1993, en un 23% de hogares peruanos el jefe del hogar era una mujer
(entonces el padre era obviamente ausente). Casi un millón de niños
peruanos viven con sus abuelos, más de 430'000 con otros parientes,
120'000 con personas que no son sus parientes, cerca de 15'000 trabajan
como empleados/as de casa, y casi 10'000 figuran como "jefe del hogar",
lo que significa que obviamente ninguna persona adulta se preocupa por
ellos. (Fuente: Página web del INEI).
Por esta razón, debe ser muy difícil entender la verdadera naturaleza de
Dios. ¡Es que Dios reúne perfectamente en Su persona tanto la autoridad
como el amor! Él es la autoridad suprema, el Rey todopoderoso, el que
da sus órdenes al sol y los planetas. Pero él es a la vez el amor supremo,
el que dio su propia vida por nosotros.
"¿Qué hijo hay a quien el padre no disciplina? Si a ustedes se les deja sin
la disciplina que todos reciben, entonces son bastardos y no hijos
legítimos. Después de todo, aunque nuestros padres humanos nos
disciplinaban, los respetábamos. ¿No hemos de someternos, con mayor
razón, al Padre de los espíritus, para que vivamos?
En efecto, nuestros padres nos disciplinaban por un breve tiempo, como
mejor les parecía; pero Dios lo hace para nuestro bien, a fin de que
participemos de su santidad. Ciertamente, ninguna disciplina, en el
momento de recibirla, parece agradable, sino más bien penosa; sin
embargo, después produce una cosecha de justicia y paz para quienes
han sido entrenados por ella."
Observamos lo siguiente:
Después vemos que Dios entrena a su pueblo. El dice: "Yo soy el Señor
Dios tuyo, que te enseña provechosamente, que te encamina por el
camino que debes seguir." (Isaías 48:17) El no sólo señala el camino,
sino camina con nosotros.
El entrenamiento implica dar el ejemplo, explicar, animar, y sobre todo,
darse el tiempo necesario para estar al lado del niño. Este es el amor que
se expresa en la disciplina.
Cuando el pueblo, a pesar del entrenamiento, vuelve a desobedecer, Dios
tiene que advertir las consecuencias de la desobediencia. Encontramos
tales advertencias en el capítulo 28 de Deuteronomio, y en grandes partes
de los libros proféticos.
De la misma forma, los padres tienen que advertir a sus hijos acerca de
las consecuencias de un mal comportamiento. Tienen que darles la
oportunidad de reconocer su error y arrepentirse.
Cuando el pueblo por mucho tiempo pasaba por alto las advertencias de
Dios, él tuvo que llevar a cabo el castigo anunciado. Eso no fue nada
agradable. Pero en algunas situaciones fue necesario para que el pueblo
no se extraviase más. "Cuando no se ejecuta rápidamente la sentencia de
un delito, el corazón del pueblo se llena de razones para hacer lo malo."
(Eclesiastés 8:11)
De la misma manera, los padres tienen que cumplir con sus advertencias
si el niño sigue desobedeciendo. Nunca deben usar advertencias o
amenazas que no tienen la intención de cumplir, solamente para asustar.
Por eso no necesita medidas disciplinarias tan fuertes como las que puede
necesitar un adulto delincuente. Podemos contar con que el niño
normalmente está de nuestro lado, no es nuestro enemigo, aun en
asuntos disciplinarios. Por lo menos cuando la relación entre padres e
hijos es sana. Por tanto, debemos rechazar aquellos consejos que
sugieren tratar a los niños como si fueran nuestros enemigos. Eso no trae
"corrección"; más bien daña la relación entre padres e hijos, y puede
producir rebeldía en el corazón de un niño.
2. Iglesias disfuncionales
Por tanto, así ha dicho el Señor: He aquí yo estoy contra vuestras vendas
mágicas, con que cazáis las almas al vuelo; yo las libraré de vuestras
manos, y soltaré para que vuelen como aves las almas que vosotras
cazáis volando. Romperé asimismo vuestros velos mágicos, y libraré mi
pueblo de vuestra mano, y no estarán más como presa en vuestra mano;
y sabréis que yo soy el Señor.
Abuso espiritual
Pero en muchas familias uno no se preocupa por lo que piensan los niños,
lo que sienten, lo que desean o necesitan. Las necesidades de los niños
no son satisfechas. En estos sistemas familiares trastornados, los niños
están para satisfacer las necesidades de los adultos. Cuando esto sucede
en el área sexual, se llama incesto. ... El lugar que debería brindar
la mayor seguridad para un niño, le ofrece la menor seguridad.
- El primer mandamiento, que dice: "No tengas otros dioses fuera de mí"
(Exodo 20:3, "La Biblia Latinoamérica"), se les enseña en esta forma:
"Amarás a Dios sobre todas las cosas". Al formularlo de esta manera, el
niño católico no verá ningún pecado en el "tener otros dioses", mientras
tan solamente los ama un poco menos que a Dios.
Cada cristiano puede y debe analizar las enseñanzas que escucha, a base
de la Biblia; y debe llamar la atención a quienes enseñan o actúan en
contradicción contra la Biblia.
"El pastor tiene que saber todo de tu vida personal." - "¿Quién eres tú
para cuestionar a tu pastor?"
También se enseñaba que "la voz del líder es la voz de Dios para ti". O
sea, que un cristiano debía obedecer a su líder aun en los detalles de su
vida privada, tales como la elección de sus amigos, el uso de su tiempo
libre, aun con quién casarse, dónde vivir, y en qué trabajar. Los cristianos
que cayeron bajo esa influencia, se convirtieron prácticamente en
esclavos de sus líderes. Y si alguien protestaba contra esas prácticas, fue
etiquetado de "rebelde", fue "puesto en disciplina", y a menudo aun
calumniado y puesto bajo maldiciones.
18. El líder intenta asumir el papel del Espíritu Santo en cuanto al corregir
a los miembros y convencerlos del pecado.
Algunos grupos enseñan que los líderes son encargados de dar a los
cristianos la dirección de Dios para sus decisiones personales (dónde vivir,
en qué trabajar, qué amigos elegir, con quién casarse, etc.) Lo
fundamentan con algunas historias bíblicas donde efectivamente Dios dio
órdenes por medio de ciertas personas especiales.
Mas bien, en el orden del Nuevo Testamento, Dios quiere hablar y guiar
a cada creyente personalmente, sin la interferencia de un líder: "Mis
ovejas oyen mi voz..." (Juan 10:27). Los hijos de Dios son "enseñados
por Dios" (Juan 6:45), "guiados por el Espíritu Santo" (Rom.8:14). Un
cristiano maduro y sabio puede aconsejar a otro; pero no puede dar
órdenes "en el nombre de Dios", más allá de lo que las Sagradas
Escrituras mandan explícitamente.
Con eso a menudo se cita Salmo 105:15: "No toquen, dijo, a mis ungidos,
ni hagan mal a mis profetas." Vale la pena leer este versículo en su
contexto. El salmo habla del pacto de Dios con Jacob (Israel) y sus
descendientes. De ellos dice, antes de su liberación de Egipto: "...siendo
ellos pocos hombres en número, y extranjeros en ella. Y anduvieron de
gente en gente, de un reino a otro pueblo.
No consintió que alguien los agraviase, y por causa de ellos castigó los
reyes." (v.12-14) Entonces los "ungidos de Dios", en este contexto, ¡son
el pueblo entero de Dios! No un líder autoritario es el "ungido", sino el
pueblo humilde que anda como extranjeros "de un reino a otro pueblo".
¿Y a quiénes dice Dios "No toquen a mis ungidos"? ¡A los reyes de las
otras naciones! No tenemos aquí ninguna fundamentación del
autoritarismo.
Eso se suele fundamentar con las advertencias bíblicas contra los chismes
y las calumnias (Salmo 15:3, Proverbios 16:28, 26:20). Líderes
autoritarios enseñan que todo el que dice algo malo acerca de ellos,
comete el pecado del "chisme" o de la "calumnia".
Con eso evitan que las víctimas de sus abusos busquen ayuda, y que los
problemas se discutan abiertamente. Quienes sufren abuso, y están bajo
esta clase de enseñanza, a menudo no se atreven a hablar con nadie
acerca de lo sucedido. El pecado de los líderes se mantiene en lo oculto,
y así pueden seguir pecando.
La verdad es, que el decir la verdad nunca es calumnia. Las malas
acciones deben reprenderse y traerse a la luz (Efesios 5:11). No hay
diferencia si el que comete la acción mala es un "miembro común" o un
líder. - Pablo escribe a Timoteo: "Alejandro el herrero me ha hecho mucho
mal; que el Señor le dé [lo merecido] según sus actos.
Si esos líderes tuvieran que cumplir todas estas condiciones ellos mismos,
nunca podrían ejercer su liderazgo; porque ellos mismos confrontan,
exigen, critican y acusan constantemente a sus "súbditos", y eso con una
motivación muy cuestionable. Pero en la cosmovisión del autoritarismo,
las reglas valen solamente para los "súbditos"; los líderes pueden
quebrantarlas tantas veces como quieren. Eso en contradicción contra
todas las instrucciones bíblicas de no hacer acepción de personas.
David dijo: "El Señor me guarde de hacer tal cosa contra mi señor, el
ungido del Señor, que yo extienda mi mano contra él; porque es el ungido
del Señor." (1 Sam.24:6). Y: "¿Quién extenderá su mano contra el ungido
del Señor, y será inocente?" (1 Sam.26:9).
De allí dicen los líderes autoritarios que "David se sometió a Saúl, aunque
Saúl estaba actuando mal; así también los cristianos tienen que
someterse a sus líderes, aun en el caso de que los líderes estén
equivocados." Y también: "Nunca hay que criticar a un líder, porque eso
sería extender la mano contra el ungido del Señor."
Recordemos que David era un siervo de Saúl. Pero cuando entendió que
Saúl le quería matar, huyó donde Samuel. (1 Sam.19:11-19) Estando al
servicio de Saúl, ¡David no tenía el derecho de escaparse!
Recordemos también que David era claramente un rebelde en los ojos de
Saúl.
De otro modo, no lo hubiera perseguido. Aun después de la primera vez
que David perdonó la vida de Saúl, Saúl no tomó esto como una señal de
sumisión, porque volvió a perseguir a David.
La segunda vez, Saúl dijo a David que vuelva con él, y le prometió no
hacerle ningún mal (1 Sam.26:21). Pero David no volvió con Saúl. ¡No le
obedeció!
Sin embargo, toda la historia deja claro que Dios estaba del lado del
"rebelde" David, y en contra de "su ungido" Saúl.
Otros han usado el ejemplo de Sara, quien fue obligada por Abraham a
mentir (Génesis 12:11-13, 20:13), y lo presentaron como un "buen
ejemplo de la sujeción bajo su esposo". Dicen que "en este caso, Dios no
juzga a Sara, porque ella fue obediente; solamente juzga a Abraham,
porque él es la autoridad y el responsable."
Pero ¡la palabra de Dios no dice en ninguna parte que Sara obró bien al
mentir! Los mandamientos de Dios son claros: "No darás falso testimonio"
- sin importar quién te lo ordene. Y: "Hay que obedecer a Dios antes que
a los hombres" (Hechos 5:29). La palabra de Dios es también clara en
que cada uno será juzgado por lo que hizo, personalmente. "Porque todos
nosotros debemos mostrarnos ante el tribunal de Cristo, para que cada
uno reciba [lo que merece] según lo que practicó por medio del cuerpo,
sea bueno o sea malo." (2 Corintios 5:10). Ante el trono de Dios, nadie
podrá disculparse diciendo: "Mi esposo me ordenó hacerlo", o "mi líder de
iglesia me lo ordenó".
Pero la gramática del versículo es clara: "aquellos que han de dar cuenta"
son los líderes, no "vuestras almas". Son los líderes quienes tendrán que
dar cuentas a Dios, acerca de la manera cómo ejercieron su liderazgo.
Por supuesto que los líderes autoritarios quieren hacernos creer que sus
órdenes son idénticas a las órdenes de Dios. Pero esa identidad se da
solamente cuando la palabra de Dios escrita dice lo mismo. Por eso, las
Escrituras nos exhortan a examinar todo lo que dice un líder, y a rechazar
lo que no es conforme a las Escrituras.
- "No juzgues."
Pero primeramente, los mismos líderes que se defienden con esta cita,
¡están juzgando todo el tiempo! ¿O acaso no es juzgar, el clasificar a sus
hermanos por "obedientes" o "rebeldes", según si hacen caso a todas las
exigencias del líder o no? ¿No es juzgar, el censurar y excluir a un
hermano, solamente porque dijo algo que no le gustó al líder? ¿o incluso
porque descubrió un pecado del líder?
El resultado suele ser que en tales grupos, el pecado se extiende aún más.
Esta práctica tampoco tiene base bíblica. Las Escrituras nos instruyen a
entrar en un pacto con Dios, pero con nadie más. Incluso nos aconsejan
en contra del hacer promesas: "Mejor es que no prometas, a que
prometas y no cumplas" (Eclesiastés 5:5). Ninguna iglesia mencionada en
el Nuevo Testamento requería de los hermanos algún "compromiso de
membresía" o similar.
Manipulación y engaño
"Debemos siempre tener para en todo acertar, que lo blanco que yo veo,
creer que es negro, si la Iglesia jerárquica así lo determina."
El principio de que "el fin santifica los medios", tiene sus seguidores
también en el campo evangélico. ¡Pero este no es ningún principio
divino! "Porque nuestra exhortación no procedió de error ni de
impureza, ni fue por engaño", dice el apóstol Pablo.
Desconfianza y denunciantes
Muchos pastores entran en este juego, algunos por ignorancia, pero otros
porque les da cierta satisfacción poder "controlar" de esta manera las
relaciones interpersonales entre los miembros de su iglesia. Como
consecuencia, los hermanos "aprenden" a depender del pastor en vez del
Señor, y a evadir la confrontación directa según Mateo 18. Y esto es lo
que les da la oportunidad a los líderes abusivos a levantar un sistema de
denunciantes al estilo comunista.
Los padres les hacen entender que la familia hace ciertas cosas (como ir
al culto, orar, leer la Biblia) "porque somos evangélicos". De esta manera,
se practica la "incorporación automática" de los niños en la misma manera
como lo hace la iglesia católica.
"Un sacerdote español muy notable que ha trabajado por muchos años
en Chile en diferentes parroquias, hacía al autor de este libro (Mackay),
en 1929, la siguiente declaración: ' ... De unos seiscientos sacerdotes que
he conocido en diferentes países sudamericanos, calculo que apenas un
cinco por ciento observan pureza sexual.' "
Sacerdotalismo
Esta era una señal visible de Dios, de que desde ahora el acceso directo
a su presencia quedaba abierto. (Hebreos 4:14-16, 10:19-22)
Cada cristiano verdadero tiene el mismo acceso directo a Dios, y por tanto
la autoridad de "ministrar" a otras personas.
(Es verdad que la Biblia pone una responsabilidad particular sobre los
ancianos de la iglesia, en cuanto a la oración por los enfermos (Santiago
5:14). Pero el mismo párrafo dice también: "Confesaos vuestras
ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados."
(5:16). Esto significa que cada creyente puede y debe participar en esta
forma de ministración.)
(David Johnson y Jeff Van Vonderen, "El poder sutil del abuso espiritual")
Aquí vemos que falta un solo paso, para que un sistema sacerdotalista se
convierta en un sistema abusivo. Solo falta sacar la última consecuencia:
Si el pastor o líder es el "sacerdote" que representa a Dios ante nosotros,
entonces cuestionar al líder equivale a cuestionar a Dios.
Por otro lado, el pueblo que no conoce otro tipo de liderazgo, está siempre
buscando a un líder "fuerte". De esta manera se desarrolla una dinámica
peligrosa entre los seguidores y su líder.
Al inicio, parece que ambos, el líder y sus seguidores, están "de acuerdo"
con que al líder le corresponde dominar al pueblo, y que al pueblo le
corresponde depender del líder.
Pero de esta manera se pone una presión tremenda sobre los hombros
del líder: Se espera que él sea perfecto, el ejemplo en todo, y que nunca
se equivoque. Si el líder mostrase alguna debilidad o cometiese un error,
inmediatamente caería de su pedestal; perdería su autoridad y el respeto
de sus seguidores. Así se piensa por lo menos.
Entonces muchos líderes empiezan a disimular la verdad ante sus
seguidores. Aunque estén cansados o frustrados, siempre tienen que
mostrar una sonrisa y buen ánimo hacia afuera. Cuando se equivocan,
tienen que tapar el error, justificarse de alguna manera, o echar la culpa
sobre otra persona. Tienen que seguir manteniendo la apariencia del
"super-líder". Y además es probable que empiecen a aumentar la presión
sobre sus seguidores, en un intento de sacarlos de su irresponsabilidad.
¿Y qué puede hacer un líder, para no caer en la trampa del complejo del
"super-líder"?
Asuntos de conciencia
Dios nos ha dado una brújula para ayudarnos a navegar por en medio de
las tentaciones y los engaños de la vida. Esta brújula es la conciencia
(Rom.2:15). Pero no debemos pensar que esta brújula sea un
instrumento infalible. El apóstol Pablo dice en cierta oportunidad:
"Porque, aunque de nada tengo mala conciencia, no por eso soy
justificado; pero el que me juzga es el Señor." (1 Cor. 4:4) Con esto, el
apóstol reconoce que su conciencia le puede fallar.
Mentalidad de jaula
Este es el punto donde Jesús quiere que lleguemos: Admitir que nuestro
corazón es malo, que no somos capaces de cumplir Sus mandamientos,
y que dependemos completamente de la ayuda de Dios.
Nadie puede salvarse del pantano del pecado, jalándose de sus propios
cabellos.
Dependemos de Jesús para ser salvos, y también para vivir una vida que
agrade a El. Y el pastor depende completamente de El para la protección
de su rebaño.
(Prov.29:25-26)
La Biblia nos enseña que Dios mira el corazón. El tuvo que exhortar al
profeta Samuel que no se deje desviar por la apariencia externa de los
hijos de Isaí (1 Samuel 16:8). Jesús reprendió a los fariseos: "Sois
semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad,
se muestran hermosos, pero por dentro están llenos de huesos de
muertos y de toda inmundicia." (Mateo 23:27)
La verdad es que nadie puede conocer el corazón del hombre sino Dios
mismo (Jeremías 17:9-10). Solo Dios puede revelar las intenciones
secretas del corazón (1 Cor.4:5). Y él dice que debemos examinarnos a
nosotros mismos, no que el consejero debe examinarnos (1 Cor.11:28, 2
Cor.13:5). Esto significa que Dios quiere tratar con cada uno
personalmente en cuanto a los asuntos secretos del corazón. (Vea
también 1 Tes.2:4).
Pero resultó que en realidad ella tenía un concepto bastante claro de sus
dones y talentos, y del propósito de Dios: "Dios me ha dado una facilidad
de relacionarme con todo tipo de personas. ... Sobre todo, quiero ayudar
a personas que tienen problemas, personas en crisis; tanto creyentes
como no creyentes."
Aquí estaba ella, con una preparación maravillosa para una tarea
magnífica en la cual podía glorificar a Dios; pero obviamente la iglesia no
le había brindado la oportunidad de desarrollar sus talentos específicos.
También creo que Dios puede de vez en cuando dar a un líder una palabra
de confirmación acerca del llamado de uno de sus seguidores. Pero es
muy peligroso emitir esta palabra antes de haber animado al miembro a
que él mismo busque la dirección de Dios. El líder puede opinar y
confirmar la dirección de Dios en la vida de un miembro; pero no es el
líder quien da la dirección.
"Los dones son repartidos [de maneras variadas], pero vienen del mismo
Espíritu; y los servicios son repartidos [de maneras variadas], pero vienen
del mismo Señor; y los efectos son repartidos [de maneras variadas],
pero vienen del mismo Dios quien efectúa todo en todos. Y Dios dio a
cada uno la evidencia del Espíritu para beneficio.
...Si todo fuera un solo miembro, ¿dónde estaría el cuerpo? Pero ahora
son muchos miembros, pero un solo cuerpo. Y el ojo no puede decir a la
mano: 'No te necesito'; ni la cabeza a los pies: 'No les necesito'. Al
contrario, los miembros del cuerpo que nos parecen más débiles, son
mucho más necesarios ..."
(1 Corintios cap.12)
"En las iglesias establecidas por misiones extranjeras ... el dar (o diezmar)
procede desde una obligación, no desde el gozo del Señor.
¿Lo están haciendo? Según lo que se conoce en público, parece que muy
poco. El pueblo evangélico dice: "Por fin hay alguien en el Congreso que
levanta la voz en nuestro favor" - y se contenta con esto. Sí, es bueno y
necesario que alguien represente los intereses de los evangélicos.
La única criatura con la cual Dios no llenó la tierra fue la que Él formaría
según Su propia imagen, en Su propia semejanza (Génesis 1:26-27; 2:7).
Él dio al hombre y la mujer la soberanía sobre la tierra y la responsabilidad
de llenarla. El hombre es el representante de Dios en la tierra, así que
llenar la tierra implicaba esparcir la gloria de Dios en ella.
¿Puede ver la diferencia? Eva dijo que ella no podía “tocar” el árbol. Para
no quebrantar el mandamiento, ella añadió un segundo mandamiento.
¿Fue esta su interpretación o la interpretación de Adán? No lo sabemos.
De cualquier manera, ella cambió la palabra de Dios. Dios no dijo: “No
toquéis”. Él dijo a Adán que labrara y guardara el huerto (Génesis 2:15).
Al final, Eva fue engañada (1 Timoteo 2:14), pero Adán pecó sabiendo.
Muy probablemente él estaba con su esposa (vs. 6), y falló en protegerla
de la serpiente. A la comunidad feminista puede no gustarle, pero el
Sociólogo real quiere que los esposos sean los líderes espirituales y que
protejan a sus esposas de Satanás (Efesios 5:25-26).