Amar A La Niña Mágica Interior

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Amar a la Niña Mágica Interior

«Cuidar a tu niña interior tiene unos resultados sorprendentes y poderosos.


Hazlo y tu niña se cura «~ Martha Beck

Hay algo tan prístino en nuestra esencia…


La niña que fuimos no es sólo una parte de nuestra historia, es una energía
vital que vive dentro de nosotras en este momento. Nuestra niña interior es
parte de nuestro auténtico yo, el yo que era antes de tener que usar máscaras
y asumir un falso yo, hasta cierto punto, con el fin de sobrevivir en nuestras
familias y en nuestras culturas. Cuando nos preocupamos por nuestra niña
interior, empezamos a recuperar nuestra verdadera esencia. Empezamos a
restaurar el sentido de la bondad y la dignidad de esas cosas que tuvimos que
poner en la sombra.

Dar la bienvenida de nuevo a esas partes de nosotras mismas que tuvimos


que rechazar es increíblemente liberador!
Podemos dar la bienvenida a las partes rechazadas y abrazarnos de nuevo y
actuar de nuevas maneras que demuestren a nuestra niña interior que el pasado
ya pasó y que ahora es seguro ser completamente tú misma.

Ejemplos de acciones que sanan y liberan:


 Establecer límites que previamente fueron prohibidos.
 Usar tu voz para decir tu verdad cuando esto causó rechazado en el pasado.
 Darte tiempo para jugar o no hacer nada cuando te enseñaron que tu valor
sólo viene de trabajar

Tenemos que ser rebeldes para sanar.


La curación requiere que tengamos el coraje de deshacer los patrones
disfuncionales que se instalaron a temprana edad. Es un viaje largo y puede ser
muy difícil, pero vale mucho la pena. En última instancia, se amplía nuestra
capacidad de alcanzar niveles más altos de alegría, placer, creatividad
y conexión.
Transformar las primeras creencias que nos han mantenido atascadas
Una niña limita las capacidades cognitivas y se vive a sí misma como la fuente
de las deficiencias de los padres. Las creencias inconscientes que se formaron
cuando éramos niñas todavía pueden estar operando en nosotras como adultas
causando problemas en nuestras vidas.

Ejemplos de conclusiones inconscientes que podemos haber adoptado cuando


éramos niñas frente a la disfunción familiar o abuso:
 «Me siento mal.»
 «Hay algo malo en mí.»
 «Si yo fuera realmente buena y digna de ser amada, entonces mamá o papá no
me
rechazarían / golpearían / abandonarían».
Estas creencias inconscientes pueden causar disonancia cognitiva cuando, como
adultos, buscamos hacer cambios importantes, como seguir nuestra pasión,
encontrar una pareja o comenzar una nueva carrera. Por ejemplo, si tenemos
una creencia inconsciente de que somos malas, podemos tener dificultades para
comprometernos con nuestra alma gemela o embarcarnos en nuestro sueño de
autoempleo. La disonancia cognitiva surge por el conflicto de creencias.

Ejemplos de pensamientos inconscientes que causan auto-sabotaje:


 Cosas maravillosas no suceden a la gente mala.
 Yo no merezco ser tan feliz.
 Es poco familiar y extraño para mí estar tan contenta, tal vez no estoy segura.

Tenemos que reconocer y lamentar la pérdida de haber tenido que crear una
división interna con el fin de ser aceptado por nuestras familias. Desmontar la
creencia en nuestra «maldad» nos obliga a llorar la separación con nuestro
verdadero ser. Este es un poderoso paso en la dirección de crear seguridad
para nuestra niña interior donde antes era imposible crecer.

Cuando somos capaces de ver y honrar nuestra inocencia, también podemos


hacerlo por los demás y todas las formas de vida. Todo está conectado. La
inocencia que vive en nosotras vive en toda la vida.

Podemos encontrar un amor interno que no tiene límites.


En nuestra cultura, parece que las niñas son recompensadas por Dejar de ser
niñas lo antes posible, y no son aceptadas con facilidad las diferentes etapas
por las que pasan en su infancia. Debido a esto, muchas de nosotras crecimos
con el miedo de ser castigadas o abandonadas por el simple hecho de tener
necesidades. Muchas de nosotras aprendimos a odiar nuestras necesidades
y a odiarnos a nosotras mismas por tener necesidades. La necesidad de
comer, la necesidad de ser llevadas aupa, la necesidad de ser vistas, la
necesidad de ser escuchadas, la necesidad de ser comprendidas, etc Podemos
estar acarreando este auto-desprecio en nuestro interior que nos mantiene
atascadas.

Sentía agudamente cuando era una niña que mi madre experimentaba mis
necesidades como un asalto. Debido a su propia herida mis necesidades la
abrumaban y reaccionaba alejándose y con ira. Recuerdo una experiencia muy
fuerte durante mi proceso de curación en el que sentí la desesperación
existencial de la primera infancia. Me di cuenta de que no importaba lo mucho
que lo intentara, no podía hacer que mis necesidades fuesen cubiertas. En
consecuencia, no podía hacer que mi madre me quisiera en la forma que yo
necesitaba.
Como adulta, fue una revelación ver que en mi interior yo he estado cargando
un remoto y primario deseo de sofocar mi ser con el fin de ser amada. Ver esto
me permitió afligirme y me dejó una profunda compasión, auto-empatía
y alivio físico que impregnó mi ser.
Esto explica el patrón persistente de tener que ser pequeña, obediente y
apocada. Era la única forma de recibir amor.
Tuve la oportunidad de decirle a mi niña interior: «Por supuesto,¡ te puedes
sentir así!, ¡Tiene mucho sentido! «Tuve la oportunidad de sentir la compasión
y tener la comprensión de por qué fue tan aterrador para mí coger mi espacio,
pedir que mis necesidades se cubrieran y ser totalmente yo misma sin
miedo. Fue como una pieza de un gran rompecabezas que se deslizó en su
lugar. Esta mirada amplia y compasiva permitió que el patrón finalmente
empezara a disolverse porque la creencia inconsciente que lo mantenía en su
lugar fue claramente reconocida como no válida.

Podemos llenar los vacíos de amor que nos perdimos cuando éramos niñas.

A medida que trabajamos con la niña interior, se restaura la vitalidad y la


seguridad interior.
Todas necesitamos sentirnos adoradas, acariciadas, confortadas, nutridas y
honradas por la persona única que somos. Cuando ayudamos a nuestra niña
interior a sentir estos sentimientos, nueva energía y vitalidad entra en cada
área de nuestras vidas porque estamos liberando la vergüenza y ungiéndonos a
nosotras mismas de bondad y bendición. Esto nos da una nueva confianza,
despreocupación y alegría.
Nuestra niña interior comienza a sentirse lo suficientemente segura para
ser ella misma:
 Se divierte (incluso en situaciones mundanas)
 Está presente en el momento.
 Expresa sentimientos abiertamente.
 Abre su corazón y es generosa con las demás.
 Tiene una actitud juguetona.
 Es entusiasta y llena de energía.
 Tiene un sentimiento de vitalidad y de conexión con su cuerpo.
 Siente los sentimientos difíciles y permite que se disuelvan naturalmente.

Crear un ambiente interior seguro para que su niña interior prospere.


Crear un vínculo interno con el propósito de dialogar con nuestra niña interior
regularmente. Dependiendo del nivel de trauma que tuvimos cuando éramos
niñas, su niña interior puede ser reacia a confiar en ti al principio, y puede
tomar un tiempo para que se abra a ti. Pero sé persistente y te sorprenderás
de los resultados. Aunque sólo sea un poco de diálogo cada día tendrás
resultados en forma de energía física, emociones positivas y bienestar
general.

Ejemplos de afirmaciones que puedes decir a tu niña interior:


 ¡Eres completamente buena y maravillosa!
 Eres adorable y especial.
 Estás a salvo.
 Te respeto.
 ¡Estoy tan orgullosa de ti!
 ¡Estoy tan feliz de que estés aquí!
 ¡Puedes hacerlo!
 Estoy aquí para ti siempre que me necesites.
 Está bien tener necesidades.¡ Me encanta llenar tus necesidades!
 ¡Me encanta cuidar de ti!
 Está bien cometer errores.
 Todos tus sentimientos están bien.
 Puedes apoyarte en mí.
 No hay nada que puedas decir o hacer que haría que no te quisiera.
Ejemplos de preguntas para hacerle a tu niña interior:
 ¿Cómo te sientes hoy?
 ¿Qué necesitas de mí en este momento?
 ¿Qué puedo hacer por ti en este momento?
 Tengo la sensación de que estás sintiendo ______, ¿Quieres hablar de ello?
 ¿Qué te gustaría hacer ahora?

Escucha lo que tiene que decirte y siente el cambio de energía en tu cuerpo y


en tus emociones. Pinta, dibuja, escribe un diario, escribe cartas, dialoga con
una silla, recupera tus viejos juguetes favoritos. Diviértete con el
proceso. Estás creando un santuario dentro de ti donde todo está bien, no
importa lo que pase. Un santuario donde es seguro ser una niña, donde es
seguro tener sentimientos, donde es seguro estar confundida y desaliñada,
donde es seguro jugar y divertirse!

Descubrir y encarnar tu bondad indestructible


Tuve una foto de un zorro en mi escritorio y recuerdo un día, que me puse a
mirarla y sentí el impulso de llorar. Presintiendo algo potente bajo la
superficie, me senté con la foto y me permití sentir lo que surgía. Mientras
miraba a los ojos de la zorra, sentía que era inocencia y pura
presencia. Empecé a llorar y me di cuenta que estaba llorando por la inocencia y
pura presencia de mi propia niña interior. Al llorar aumenté mi conciencia. Me
di cuenta de que la inocencia y la pureza no habían sido destruidas por el
trauma temprano, estaban en realidad presentes en mí en ese momento. De
hecho, esa inocencia y presencia no pueden ser totalmente destruidas ni estar
totalmente separadas de mí, porque esa inocencia y pureza son la verdadera
esencia de mi ser y parte de mi conexión con la vida misma.

Amar a nuestra niña interior nos da acceso a nuestra esencia, nuestra


verdad y nuestra vitalidad de una manera que ninguna otra cosa puede
hacerlo.
El vínculo indestructible que creamos entre nuestra parte adulta y nuestra niña
interior sustituye a los déficits de nuestra primera infancia con los nutrientes
emocionales que crean la fuerza necesaria para vivir como el ser auténtico,
pleno y feliz que somos. Se trata de un proceso de construcción de unos nuevos
fundamentos para apoyar a la inmensidad de lo que realmente eres.

© Bethany Webster 2014


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Traducción: Arantza Manciles Marin

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