Nada A Pehuajó y El Menú

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NADA A PEHUAJÓ

Montaje realizado por los estudiantes del VI semestre del programa de


Licenciatura de Artes Escénicas con Énfasis en Teatro de la Universidad de
Caldas 2006

EL AUTOR:

Julio Cortázar (1914-1984), escritor argentino que fue un renovador del género
narrativo, especialmente del cuento breve, tanto en la estructura como en el uso
del lenguaje. Aunque nació en Bruselas, vivió en París la mayor parte de su vida
donde murió y en 1981 se nacionalizó francés, como protesta ante la toma del
poder de las diferentes juntas militares en Argentina, es un autor argentino
plenamente integrado en la literatura hispanoamericana. Gran parte de su obra
constituye un retrato en clave surrealista del mundo exterior al que considera
como un laberinto fantasmal del que el ser humano se ha de intentar escapar.

El ritmo del lenguaje recuerda constantemente la oralidad y por lo tanto el origen


del cuento: leídos en voz alta cobran otro significado. Lo curioso de estos relatos
es que el lector siempre queda atrapado, a pesar de la alteración de la sintaxis, de
la disolución de la realidad, de lo insólito, del humor o del misterio y reconstruye o
interioriza la historia como algo verosímil.

LA DIRECTORA:

Beatriz Cardona López, maestra en arte dramático de la Universidad de Antioquia.


Realizo estudios de profundización en actuación en el Instituto Superior de Arte en
Cuba. Se ha desempeñado como docente en diferentes universidades. Fue
cofundadora y directora del grupo Planta de Teatro en Granada Antioquia.

Como actriz participó en montajes como “El porvenir está en los huevos” dirigida
por Velásquez, “Sesión” dirigida por Jorge Blandón, entre otros.

Ha dirigido los siguientes textos: “Las aventuras de la jirafa” creación colectiva,


“Aventura con el televisor” de Gianni Rodari, “Préstame tu marido” de Luis
Enrique Osorio. Actualmente se desempeña como docente en el programa de
Licenciatura en Artes Escénicas con Énfasis en Teatro de la Universidad de
Caldas.
LA OBRA:

La incursión de Cortázar en el teatro se produjo tardíamente, poco tiempo antes


de su muerte.

El autor argentino escribió tan solo una obra: “Nada a Pehuajó”. Se trata de una
pieza singulares, que podríamos ubicar dentro del género del absurdo y que, sin
embargo, mal encaja bajo este u otro rótulo ya que es, antes que todo, una obra
de Cortázar impregnada de su estilo, de su sensibilidad, de su humor y de su
inclinación de las situaciones paradójicas e inquietantes.

REPARTO:

Empleado Ángela Patricia Pérez Ramos


Maite Natalia Giraldo Gallego
Sr. López Diego Fernando Díaz Orozco
Turista americana Sandra Marcela Gómez Chica
Arquitecta Natalia Gómez Marín
Pollo y cliente Andrés Sierra Serna
Defensor y ujier Sandra Milena Arias Tabares
Juez Wilderman García Buitrago
Mujer de verde Alexander Devia Horta
Gina Luz Adriana Ramírez Osorno
Franco Cristian David Cárdenas Giraldo
Vendedor Luz Ángely Castañeda Arias
Sra. De López Johana Ludieth Gordillo Gómez

FICHA TÉCNICA:

Dirección general Profesora Beatriz Cardona López


Asistente de dirección Saúl Antonio Gonzáles Cruz
Diseño de vestuario y escenografía El grupo
Dirección de vestuario y escenografía Profesor Luis Felipe Millán
Construcción de Vestuario Profesor Luis Felipe Millán
Figurines Profesor Luis Felipe Millán
Construcción de escenografía Jhon Jairo Loaiza
Música El grupo
Edición de sonido Felipe Torres
Masterización Andrés Zuluaga Perna
Asesoría coreográfica Profesora Claudia Patricia Leguizamón
Maquillaje El grupo
Asesoría de maquillaje Profesora Paula Leguizamón
Asesoría en técnica vocal Profesor Sergio Sierra Monsalve
Luces y sonido Carlos Andrés Rivera Triviño
CARACTERIZACIÓN ESTÉTICA:

Muchas personas ubican a la obra “Nada a Pehuajó” en un estilo de lo absurdo


donde las influencias de su autor y recorrido literario, impregnan la pieza teatral
con ráfagas extrañadas y escudriñadas en lo no común.

A primera vista y llamando la atención en todo, un ajedrez gigante en el piso


donde se vive un constante encierro coexistiendo con emociones y situaciones
despedazadas e inseguras de unos extraños personajes caracterizados
extrañamente pero con una gran preocupación por la vida misma. 14 personajes
diferentes uno del otro, movidos en cada cuadro del ajedrez por fuerzas extrañas e
imaginaciones contrarias a lo real.

La escenografía es consecuente con la propuesta que maneja el autor en su obra,


elementos pintorescos, llamativos, atractivos que invitan a los espectadores a
preguntarse constante por la distribución del espacio, exteriormente un constante
ronquido que se refiere a la consecuencia, a sentir y vivir siempre lo mismo, a una
monotonía interna de cada personaje que provoca en el espectador un desespero
y a la vez un llamado de atención hacia la obra para no perder el hilo de esta

Los actores necesitan un alto rendimiento actoral ya que los personajes siempre
están en escena, dispuestos a solucionar diatribas y ayudar a su vecino más
cercano con su problema donde desde el comienzo de la pieza teatral se sabe que
pasará en su cotidianidad donde los elementos utilizado enfocan el lenguaje en un
aspecto de posibilidades de transponen el sentido común donde en todo lo que
interviene en un restaurante se transpone una excentricidad y un modo diferente
de alimentarse.

Si se quiere participar a una obra donde el lenguaje sea común y fácil de entender
con “Nada a Pehuajó” no se encontrará estos términos, la obra se puede leer de
diferentes formas gracias a las interpretaciones de sus personajes de una forma
caricaturesca que son manejados como fichas de ajedrez en un juego calculador
donde existe un este externo que manipula los límites del escenario y no se puede
ser más de lo que se piensa.

Se entiende la pieza como un popurrí de corrientes estéticas donde a pesar de


que al comienzo de la creación se pensaron diferentes enfoques, se logra que la
obra sea fácil de ver pero algunas veces difícil de leer, siempre se debe pensar
que le cuerpo físico de los actores son prestados para que podamos leer y
decodificar tantas chispas e ideas que nos regala la obra

“Nada a Pehuajó” a pesar de ser un trabajo académico lograr transformar lo


invisible a lo visible, hace que el espectador se sienta dentro de esa ficción que
genera, que se llene de detalles y conceptos que logren lo postulado por el grupo,
al autor y la directora.

LINEAMIENTOS PEDAGÓGICOS:

Al comienzo se partió de la elección de la obra, diferentes contextos y escritos que


se sumergían en diferentes temas, hasta que entre papel y papel salió a luz y se
eligió “Nada a Pehuajó”, obra dramática de Julio Cortázar que reúne el teatro con
posterioridad a Los reyes las primeras piezas. Dos juegos de palabras escritas en
1948 y 1960 son de inspiración poética. De los años setenta es Nada a Pehuajó
que se inscribirá en el teatro del humor y del absurdo

Ya con motivación y expectativas hacia la creación de la pieza teatral se realiza


inicialmente un acercamiento a la narrativa de julio Cortázar, investigar sobre sus
obra, sobre su vida, saber que lo inspiró a crear ”Nada a Pehuajó” y se piensan
diferentes enfoques que nos regala la lectura y la re-lectura de la obra para
realizar diferentes investigaciones en algunas corrientes estéticas como el
nihilismo, comunismo, socialismo, sandinismos, peronismo, patafísica, lenguaje
onírico y Absurdo punto cumbre para enfocar dicha obra.

La caracterización de los personajes fue bastante difícil, concebir un mundo


diferente, distorsionado, fuera de lo común para que fuera acorde con la
concepción estética de la escenografía, para denotar que hay diferentes aspectos
de un personaje, que una obra teatral no se tiene que montar como diga el texto,
sino que entre grupo y directora se lograron grandes cosas y la obra cobró una
caracterización estética bastante cargada, cada escenografía, cada utilería, cada
personaje estaba cargado de simbolismo, este es parte fundamental de la pieza
teatral, ya que todo lo que se utiliza, color, maquillaje, iluminación tiene un sentido
un contexto y un subtexto que analizar.

Para la creación de la escenografía y la utilería se empieza por buscar diferentes


enfoques que ayuden a los personajes a desglosarse, corrientes estéticas acorde
con las propuestas de la directora y del grupo y se utiliza la ayuda de Jhon Jairo
Loaiza, ente fundamental para la creación de los materiales con los que se
trabajarían durante ensayos, estrenos y proyecciones de “Nada a Pehuajó”. Se
enfocó la creación de escenografía hacia ambientes estéticos como el dadaísmo,
surrealismo, cubismo y futurismo, corrientes que tienen algo en común y es la
deformación de las cosas y la ruptura de la cotidianidad que se logra esbozar con
la puesta en escena.

Finalmente se llega a la parte de la conjugación, hilar toda la obra para que los
actores no se cansaran y lograr de una u otra forma que el espectador quedara
sumergido en este mundo onírico para que la pieza fuera lo más clara posible,
muchas veces funciona y otras veces no, pero que siempre tuvo la misma
intencionalidad, hacer que el espectador se sintiera incómodo e intrigado por lo
que se muestra en la obra teatral.
EL MENÚ

Montaje realizado por los estudiantes de sexto semestre de la Licenciatura en


Artes Escénicas con Énfasis en Teatro de la Universidad de Caldas 2008.

EL AUTOR

Enrique Buenaventura, autor, director y poeta colombiano, fundadores y director


del TEC (Teatro Experimental de Cali). La calidad y la extensión de su obra le
otorgan un lugar destacado en la dramaturgia latinoamericana. Define el teatro
como un instrumento estético de cuestionamiento y cambio de la sociedad, su
objetivo principal es que el hombre latinoamericano alcance una cultura propia y
construya un entorno social más justo y respetuoso de las diferencias étnicas y
culturales.

LA DIRECTORA

Beatriz Cardona López, maestra en arte dramático de la Universidad de Antioquia,


realizó estudios de profundización en actuación en el exterior. Se ha
desempeñado como docente en diferentes Universidades. Ha dirigido los
siguientes textos: “Aventura con el televisor” de Gianni Rodari, “Préstame tu
marido” de Luis Enrique Osorio, “Nada a Pehuajó” de Julio Cortázar. Actualmente
se desempeña como docente en el departamento de Artes Escénicas de la
Universidad de Caldas.

LA OBRA

Aborda en toda su estructura muchas de las problemáticas que se viven en


nuestro país, denunciando con humor negro y satírico el sistema por el cual somo
regentados, parodiando al función de las instituciones de caridad con fines
políticos.

Recrea la deformación monstruosa a la que ha llegado la sociedad colombiana


con sus extremos de miseria y opulencia. El menú es un reflejo de nuestro
contexto y de los hombres, mujeres, niños y niñas que son víctimas de la
violencia. Para la puesta en escena se tuvieron en cuenta las corrientes del
simbolismo, expresionismo y realismo.

ARGUMENTO DE LA OBRA:

Bajo la justificación de un festín se asiste al lanzamiento de un personaje común y


corriente a las altas esferas del poder. El menú transcurre entre los preparativos
del banquete, la ejecución de este y el virtual encubrimiento de un ser que venido
del populacho, se ha convertido en el candidato de un supuesto círculo regentado
por las señoritas encopetadas, quien deberá ser 2educado” a las maneras de la
alta sociedad para finalmente ser “reventado” por estas con la ayuda del secretario
del círculo, ante la presencia de unos menesterosos invitados formalmente para el
acto. Cien por ciento humor negro en el primer y único acto del menú.

FICHA TÉCNICA

Dirección general Beatriz Cardona López


Vestuario y escenografía El grupo
Asesor vestuario y escenografía Luis Felipe Millán
Construcción de escenografía Andrés Salazar Ochoa, Adrián Durán Castro
Maquillaje El grupo
Asesor de maquillaje Paula Andrea Leguizamón
Asesor vocal Sergio Sierra Monsalve
Diseño de afiche Jhon Edwin Murcia

REPARTO

Jhona Castro Serna La ciega


Sintia Chica Hernández La criada dos
Jessica Cuero Correa La mujer hombre
Pablo Andrés Gonzales El del carrito
Felipe Gutiérrez Gómez El cocinero y fotógrafo dos
Faber Henao García El secretario
Simón Marín Aponte El metre
Alex Murcia Gonzales El candidato, niño y pinche
Lina Narváez Sanín La tuerta
Camilo Orbes Cerón El faquir
Nathalie Pescador Tejada La manca y matón uno
Clarena Quiceno Ángel La gorda y matón dos
Jorge Ramírez Álzate El criado uno
Estephani Suarez Pulgarín La enana
Ángela Yauri Aristizabal La iniciada

CARACTERIZACIÓN ESTÉTICA:

“El menú” está enmarcado por la revelación de las insuficiencias y precariedades


que vivimos, reflejando de esta forma la realidad. El propósito de esta obra, más
que el entretenimiento o el mimetizar la realidad, es presentar ideas y criticas e
invitar al público a ser juicios acerca de ellas, logrando que el público vea en los
personajes opuestos de arquetipos y sumergiéndolo en un mundo de intervención
y perspectiva socioeducativa.
Enrique Buenaventura desborda en esta obra la sátira irónica y el humor negro
haciendo una críticas puntuales y desde la realidad globalizada; allí se retrata el
racismo, la pobreza, los sistemas de exploración capitalista, las comparaciones
despectivas frente a las políticas nacionalistas y el extranjerismo, el machismo, la
diferentes clases sociales, el enriquecimiento de la iglesia a costillas de sus fieles,
retrata a un mundo de apariencias que ah perdido su parte humana, esa parte
sensible e intima de cada ser, esa parte que los animales logran exteriorizar desde
su estirpe animal y manifiestan desde su propio lenguaje ante una situación
entrañable algo que nosotros como humanos hemos perdido por egoísmo, por
filosofías singulares, porque muchas veces nos falta estar en posición animal para
llegar a esa humanización; nos falta colocarnos desde nuestra propia óptica en la
posición del otro para dejar de ocupar un lugar por ocuparlo, porque somos parte
del mundo y por tanto no puede ser un proyecto aislado de lo que es ser humano y
es lo que esta obra logra hacer que el espectador sea un ente reflexivo y analítico
con su entorno cultural para convertir al espectador en protagonista de la acción y
ayudarlo a resolver conflictos reales, es una obra que hace el papel de una
retroexcavadora y perfora la realidad en busca de la vida ampliada, de la vida
diferente, de la vida multiplicada, la vida mostrada desde el arte de la vida misma
digna de verse en un escenario, hablamos de una vida teatralizada que provoque
al espectador una vida que incite y excite

Canción de la muñeca.
Cuando surge en escena la canción de la muñeca, una forma de representar el
descuartizamiento de la misma, connota una demostración clara de sentimientos
encontrados, sentimientos que el espectador puede vivir en carne propia, pues no
son ajenos a él, la indiferencia o identificación con los hechos planteados en el
ritual y a su vez en el canto, han generado una diatriba personal contundente,
tanto en los personajes como en quién los representa, pues los personajes sienten
una profunda tristeza por el descuartizamiento de la muñeca y a su vez una
indiferencia casi animal por la señora que pierde a su hija y por causa de ello, su
cordura.

Racismo.
Como la época de la violencia deja vicios tan marcados en la sociedad que los
genera por diferentes causas, casi siempre infundidos por un miedo, los valores
sociopolíticos se ven alterados drásticamente, el secretario, quien cumple un papel
de consolidación en la obra, demuestra con discusiones cargadas de humor negro
e ironía que la gente del pueblo todavía se preocupa por el color de la piel del
candidato.

Estupor.
A pesar que quienes asisten al banquete están sumidos en una profunda miseria
tanto social como personal, económica y alimenticia, como pueblo mandado,
reclaman a los organizadores que no escatimaron gastos en hacer de su convite
un derroche de lujos innecesarios, mientras ellos solo pueden imaginar los
componentes que hay en “el menú”.
Reglamento.
Como sistema social de derecho que somos, el autor se aprovecha y se mofa sin
pudor del sistema de leyes que rigen al estado, el trabajo de las señoritas no es
otro que vanagloriar al candidato en una especie de ritual de sacrificio.
Desnudez.
Los mendigos al apropiarse de la ropa del candidato lo hacen con el fin de
aparentar ser de mayor alcurnia, jugar al cambio de roles a la fuerza.

Círculo.
En el contexto de la obra, el círculo de las señoritas es una sátira de las
asociaciones femeninas de caridad que buscan aparentar socialmente que son
entes generadores de bondad, cuando ignoran totalmente la miseria.

Etapas.
Mediante acciones paralelas, el autor busca en una narrativa circular que lo
caracteriza generar una representatividad simbólica, los hechos al ser iguales al
principio y al final, dejan de una manera irrefutable que la obra hace parte de un
ritual superfluo y sin ningún tipo de relevancia en la vida de los personajes, por
eso al terminar, cada uno vuelve a su rutina sin ningún tipo de alteración, es por
eso que las señoritas representan un círculo, una figura narrativa que comienza y
termina en el mismo punto, sin ser un ciclo tal y como se vive en la sociedad
colombiana, de la que se mofa Buenaventura sin estupor alguno, incisivo en lo que
le genera un comportamiento generalizado en un país donde la democracia es un
título de muy mal gusto para la situación en la que se ve sumida la sociedad, los
mendigos, como personajes que funcionan de espejo para el pueblo colombiano
que sufre y se enfrasca en sus propias miserias y el candidato es la
representación del típico altruista manejado por los matones y las señoritas,
cánceres de la sociedad en extremo.

Lavatorio.
Como una representación excéntrica y grotesca del lavatorio de pies cristiano, el
autor pretende representar que con guantes y atomizadores se están acicalando
los mendigos, que para poder asistir al festín, deben desinfectarse por dentro y por
fuera, con el cambio de ropas y la comunión, aunque no están al mismo nivel,
pueden ver al candidato comer plácidamente y estar cerca, sin ningún tipo de
contacto con las señoritas, curas y demás personajes que representan la rama
realmente gobernante.

LINEAMIENTOS PEDAGÓGICOS:

Se empieza el proceso teatral de VI semestre con muchas ilusiones pero sin


ninguna obra en mente aún. Se leyeron varias obras pertenecientes al género
cómico, algunas cuantas de genero trágico, otras que pertenecías al género
absurdo, se tomó como elección “Los diez días que estremecieron el mundo” para
llegar al final y tomar por elección “El menú” de enrique buenaventura, elección
acertada de la directora Beatriz Cardona.
El menú fue una obra que atrapo totalmente al grupo junto con su directora y se
empieza el trabajo de mesa, allí se analizaron de forma minuciosa y reflexiva
todas las motivaciones, interrelaciones, subtexto, acción transversal, la súper tarea
o súper objetivo que se hilan en esta pieza generando conciencia del mundo
interno de cada uno de los personajes transportados por la fábula de la obra y
enfocada en una óptica de cada actor buscando comprender lo partículas desde lo
principal conociendo la vida y obra del poeta, autor, dibujante, narrador, director
teatral, maestro y actor permanente Enrique Buenaventura.
En este amplio trabajo de mesa se utilizaron herramientas que sirvieron
significativamente al proceso creativo y estético como lo es el uso de el libro “El
último Stanislavsky” donde se encontraron un sin número de elementos para el
desarrollo del proceso adecuado que debe desarrollar el actor y director.
Se encamina la creación del “El menú” apoyada en exposiciones sobre diferentes
corrientes artísticas como el expresionismo, realismo y simbolismo donde se
encontraron buenas fuentes de información útil para el proceso, también se
exploró la corriente del teatro de la crueldad con Antonie Marie Joseph Artaud, se
enfoca principalmente la obra a un ámbito de lo grotesco donde Enrique
Buenaventura convierte la palabra para definir un tipo de personajes a la realidad
que el escritor pretende mostrar como en este caso la lengua que es usada en
este montaje.

Con todo el fundamento teórico propio de este montaje se da paso al trabajo de


estructura de la obra, iniciando con un arduo trabajo corporal, seguido por la
asignación de cada uno de los personajes (casting), para pasar a la creación a
partir de improvisaciones del texto para emprender un bosquejo de cada uno de
los personajes.

Ya con la caracterización de algunos personajes y otros esbozados se empieza a


“tejer” esta ´pieza teatral, hilando escenas con otras, eliminando parlamentos que
no funcional al ser algo monótonos y realizando una creación mirada desde el
distanciamiento de los personajes.
Se realiza una prueba de puesta en escena completa con una escenografía
minimalista que tiene como referente creativo el mundo exterior y el predominio
del contraste del color desde su misma psicología. Todos y cada uno de los
elementos escenográficos nacieron principalmente de la propuesta del dramaturgo
y de la curiosidad creativa de los estudiantes junto con su directora teniendo en
cuenta el simbolismo y el respeto por el espectador, los actores y personajes
enfocado hacia un espacio convencional y estrictamente simbólico que busca un
cuestionamiento de la condición humana y la existencia misma.

Escrito enfocado y desglosado del trabajo final de la estudiante y egresada Yenny


Clarena Quiceno Ángel
“EL MENÚ” Y “NADA A PEHUAJÓ”

Juanita Anzola Cuartas. 1720911312

SÉPTIMO SEMESTRE

CRÍTICA TEATRAL

RUBÉN DARÍO ZULUAGA

UNIVERSIDAD DE CALDAS
FACULTAD DE ARTES Y HUMANIDADES
LICENCIATURA EN ARTES ESCÉNICAS CON ÉNFASIS EN TEATRO
MANIZALES, JUEVES 28 DE JUNIO DE 2012

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