Alfabetomicón
Alfabetomicón
Alfabetomicón
F es por ¡Fhtagn!
G es por Gilman House, para los que gustan del turismo extremo.
H es por Hast… (uf, estuvo cerca).
T es por Tekeli-li, ¿por qué esa cosa sin forma se está comiendo mi pierna?
U es por Ulthar, donde a los gatos no les importa tener nueve vidas.
Abdul Alhazred: Enloquecido poeta yemení del siglo VIII, autor del libro
Al-Azif, mejor conocido como el Necronomicón. Existen diversas biografías
suyas, así como crónicas de sus aventuras en busca del conocimiento
prohibido. No mucho después de haber escrito su nefasta obra fue
devorado vivo por una creatura invisible ante de varios agradecidos
testigos, quienes así se veían librados de tan incómodo vecino.
(Se le menciona por primera vez en el relato La ciudad sin nombre, de H. P.
Lovecraft).
Erich Zann: Músico alemán mudo. Un auténtico prodigio del violín, que
como buen artista vivía en la soledad y miseria. Como otros grandes
violinistas antes que él, Zann tuvo cierto acercamiento con seres de las
Esferas Exteriores, con los que solía hacer duetos. Al irse, lo hizo como los
grandes.
(Casi nos cuenta su historia completa en el relato La música de Erich Zann,
de H. P. Lovecraft).
Fhtagn: Expresión en idioma Aklo, cuyo significado no está del todo claro.
No es raro encontrarla en varias de las invocaciones de los seres de las
Esferas Exteriores.
(Se le utiliza por vez primera en el relato La llamada de Cthulhu, de H. P.
Lovecraft).
Necronomicón: También conocido como Al-Azif, obra del poeta loco Abdul
Alhazred. Se trata del libro más terrible jamás concebido por manos
humanas, de las inhumanas mejor ni hablamos. Quienes se han atrevido a
bucear dentro de sus páginas, afirman que se encuentra lleno de prodigios
y terrores, quizá más terrores que ninguna otra cosa. Desde que fuera
redactado han aparecido un sinfín de traducciones y ediciones, algunas
incluso de bolsillo y a buen precio.
(Tan afamado libro tiene apariciones especiales en múltiples relatos de los
Mitos, sobresalen por supuesto aquellos escritos por el señor Lovecraft).
Ulthar: Otra ciudad de las Tierras del Sueño, que tiene la peculiaridad de
adorar a los gatos. Cualquiera que llegue a transitar por sus calles haría
bien en recordar no causar daño a los felinos, o de lo contrario se arriesga
a sufrir terribles consecuencias. Advertidos quedan. ¡Miau!
(Si son alérgicos al pelo de gato, quizá deban saltarse ciertos pasajes de la
obra La búsqueda soñada de la oculta Kadath, de H. P. Lovecraft).