Evidencias Rapto Pretribulacion
Evidencias Rapto Pretribulacion
Evidencias Rapto Pretribulacion
El Interés en el Rapto [se vio reflejado] en una encuesta del [año] 1994 por el U.S. News and World Report, [en
el que] encontraron que el 61 por ciento de los estadounidenses creen que Jesucristo regresará a la tierra, y un 44
por ciento cree en el rapto de la iglesia (Jeffery L. Sheler, “The Christmas Covenant” U.S. News and World
Report, 19 de Diciembre, 1994, pp. 62, 64).
¿De dónde obtenemos el término “rapto”? El término “rapto” no se encuentra en la Biblia, entonces ¿de
dónde proviene la palabra? El término “rapto” viene de la traducción latina de la palabra griega y traducida
“arrebatados” en 1 Tesalonicenses 4:17. Charles Ryrie explica, “…la palabra griega de la cual tomamos el
término ‘rapto’ aparece en 1 Tesalonicenses 4:17, traducida ‘arrebatados.’ La traducción latina de este versículo
utilizó la palabra rapturo. La palabra griega que traduce es harpazo, lo cual quiere decir arrebatar o tomar. En
otro lugar se utiliza para describir cómo arrebató El Espíritu a Felipe cerca de Gaza y lo trajo a hasta Cesarea
(Hechos 8:39) y para describir la experiencia de Pablo de ser arrebatado hasta el tercer cielo (2 Cor. 12:2-4).
De esta manera no puede haber duda de que la palabra es usada en 1 Tesalonicenses 4:17 para indicar la
remoción real de las personas de la tierra hacia el cielo”. (Charles Ryrie, Teología Básica, p. 462)
Pasajes referentes al rapto. Existen tres textos principales que se refieren al rapto: 1 Tesalonicenses 4:13-
18, de 1 Corintios 15:57-57 y Juan 14:1-3.
Una resurrección de entre los muertos de los santos de la iglesia “los muertos en Cristo resucitarán primero” (1
Tes. 4:16). “…los muertos serán resucitados incorruptibles” (1 Cor. 15:52).
Una traslado de creyentes vivos “Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos
arrebatados” (1 Tes. 4:17).
Una reunión gloriosa “…juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos
siempre con el Señor” (1 Tes. 4:17). “…vendré otra vez y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros
también estéis.” (Juan 14:3).
Obteniendo cuerpos glorificados “…los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos
transformados. Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de
inmortalidad.”(1 Cor. 15:52-53). “también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo; el cual transformará el
cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya” (Filipenses 3:20-21).
La velocidad del rapto “…en un momento, en un abrir y cerrar de ojos” (1 Cor. 15:52).
[Con respecto al] debate, Ryrie señala: “En el siglo diecinueve, enseñar respecto al rapto de la iglesia comenzó
a ser ampliamente diseminado. Esto hizo surgir preguntas tales como que si la segunda venida de Cristo implica
varias etapas, la relación de esas etapas al período de la Tribulación, y la distinción de la iglesia con Israel en
el programa de Dios. En el siglo veinte una de las preguntas más discutidas en la escatología tiene que ver con
el tiempo del rapto”. (Ryrie, p. 478)
Los puntos de vista diversos a los que Amilenialistas y Pos-milenialistas consideran la venida de Cristo
como un acontecimiento solo seguidos por un juicio y resurrección general. Dentro del Premilenialismo, sin
embargo, cinco puntos de vista principales han sido promovidos con respecto al momento del rapto:
Pretribulacionismo
El Pretribulacionismo enseña que el rapto de la iglesia ocurrirá antes que el período de la Tribulación de siete
años comience. Los que apoyan este punto de vista incluyen a Pentecost, John Walvoord, Charles Ryrie, Dwight,
Alva J. McClain, John Feinberg, y Paul Feinberg.
Midtribulacionismo
El Mid[2]-tribulacionismo enseña que el rapto de la iglesia ocurrirá a la mitad de los siete años de la Tribulación;
Es decir, después de que los tres los años hayan transcurrido. Los que apoyan este punto de vista incluyen a Oliver
Buswell y Gleason Archer.
El rapto de pre-Ira
La perspectiva del rapto de Pre-ira enseña que todos los cristianos serán llevados en el rapto aproximadamente
después de tres cuartos del período de la Tribulación. Los que poyan esta perspectiva incluyen a Marvin Rosenthal
y Robert Van Kampen.
El Post-tribulacionismo
Enseña que el rapto y la Segunda Venida son facetas de un solo acontecimiento que ocurrirá al final del período
de la Tribulación. De esta manera, la iglesia estará en la tierra durante el período de la Tribulación de siete años.
Los que apoyan esta perspectiva incluyen a George Ladd, Robert Gundry y Douglas Moo.
El rapto parcial
La perspectiva del rapto Parcial enseña que sólo los cristianos “espirituales” que observan y esperan el regreso
del Señor serán llevados en el rapto. Luego durante los siete años de la Tribulación otros santos de Era de la
Iglesia que no estaban preparados para el rapto inicial serán arrebatados en diversos intervalos. Esta perspectiva
se originó con Robert Govett en 1835 y fue también enseñada por J. A. Seiss y G.H. Lang.
Todo el Consejo de Dios El estudio del rapto es importante porque queremos conocer todo el consejo de Dios.
La expectación del cristiano El asunto del rapto es importante porque se ocupa de la naturaleza de la esperanza y
expectación del cristiano. ¿Deben los cristianos esperar el regreso de Cristo de un momento a otro? O, ¿estamos
esperando experimentar un tiempo de tribulación mundial?
De estos cinco puntos de vista ¿por qué debe ser preferido el Pretribulacionismo? Lo siguiente son evidencias
bíblicas de un Rapto Pretribulacional:
El método literal de interpretación trata de explicar el sentido original del escritor según los usos normales de
palabras y lenguaje. El método literal interpreta toda la Biblia en una forma normal y simple, comprendiendo todo
el tiempo que la Biblia, a veces, usa símbolos, figuras de dicción y tipos.
Entre más reconozca la distinción bíblica entre Israel y la iglesia, más claro podrá ver el plan bien definido de
Dios para cada grupo. Según Thomas Ice: “Si Israel y la iglesia no son distinguidos, entonces no hay base para
ver un futuro para Israel o para la iglesia como un pueblo nuevo y único de Dios. Si Israel y la iglesia son asociados
en un solo programa, entonces las promesas del Antiguo Testamento para Israel nunca se cumplirán y serán vistas
usualmente por teólogos del reemplazo como espiritualmente cumplidas por la iglesia. La unión del destino de
Israel en la iglesia no sólo hace uno lo que las Escrituras entienden como dos, sino que también elimina una
necesidad de una restauración futura del pueblo elegido original de Dios con el fin de cumplir literalmente con Su
promesa de que un día serían cabeza y no cola (Deuteronomio 28:13).
Entre más los creyentes vean un plan bien definido para Israel y un plan bien definido para la iglesia, más
se da cuenta de que cuando el Nuevo Testamento habla a la iglesia describe una esperanza y destino separado
para ella. La iglesia se pone más bien definida en el plan de Dios. El futuro de Israel incluye la tribulación de siete
años, y luego poco antes del regreso de Cristo a Jerusalén ella será convertida a Jesús como su Mesías. Por otra
parte, la esperanza distinta para la iglesia es el regreso inminente de Cristo.
De esta manera, una distinción entre Israel y la iglesia, como lo enseña la Biblia, provee una base de apoyo
para el rapto pretribulacional. Aquellos que unen los dos programas lógicamente no pueden apoyar los argumentos
bíblicos para el Pretribulacionismo”. (Thomas Ice y Timothy Demy, La Verdad Acerca del Rapto, pp. 25-26)
El futurismo
El Pretribulacionismo toma una interpretación futurista de Daniel 9:24-27 y el libro de Apocalipsis. Daniel 9:24-
27 da el armazón cronológico de siete años de la Tribulación mientras que Apocalipsis 6-18 detalla los juicios
que caracterizan este período. El futurismo ve la profecía como cumplimiento en el futuro, a saber con el período
de la Tribulación, la Segunda Venida de Cristo a la tierra, y el Reino Milenario. El futurismo es opuesto al
preterismo, lo cual ve la profecía como ya cumplida en el pasado, predominantemente en el año 70 A.D. El
futurismo es también opuesto al historicismo que ve las profecías cumpliéndose en la Edad actual de la Iglesia.
El Premilenialismo
Al Final del período de la Tribulación de siete años, Jesucristo regresará a la tierra en poder y gloria para establecer
un Reino terrenal de Jerusalén que durará por mil años literales (Vea Apocalipsis. 20:1-6).
La metodología correcta para tratar con el asunto del rapto ¿Cuál es el método correcto para tratar este asunto del
tiempo del rapto?
Vaya primero a las porciones de la Escritura que hablan directamente acerca del rapto y el regreso del Señor a la
tierra. Estudie Juan 14:1-3; 1 Corintios 15:51-58; Y 1 Tesalonicenses 4:13-18 para el rapto. Examine Zacarías
14:1-21; Mateo 24:29-31; Marcos 13:24-27; Lucas 21:25-27; y Apocalipsis 19 para la Segunda Venida.
La metodología Correcta no se detiene con un examen de los textos principales ocupándose de un asunto. Como
John Feinberg dice: “Mientras que uno debería comenzar con pasajes que hablan directamente de la doctrina en
estudio, uno también debe poner atención a las implicaciones de la doctrina. Esto es especialmente importante
si, como en el caso del rapto, los pasajes acerca del rapto y el regreso del Señor no determinan la pregunta del
tiempo del rapto en relación al tiempo de la Tribulación… Las implicaciones y las relaciones de las doctrinas el
uno para con el otro son cruciales. Si la posición de uno en un asunto teológico dado está en lo correcto, encajará
con otras verdades teológicas y bíblicas conocidas en vez de contradecirlas.” (John S. Feinberg, “S. Feinberg,
"Arguing for the Rapture: Who Must Prove What and How" en, When the Trumpet Sounds, Thomas Ice and
Timothy eds. p. 191).
Reuniendo todo
Como señala Feinberg: “El punto crucial a recordar es que la metodología teológica correcta no se atreve a
dejarnos ignorar ya sea el rapto y pasajes de la parousia o las doctrinas que tienen implicaciones a los puntos
de vista de uno sobre el rapto y el segundo advenimiento. Aunque el estudio debería comenzar con pasajes que
hablan directamente del tema en cuestión, ambos son igualmente importantes. No habrá éxito al sostener los
puntos de vista de uno sobre el tiempo del rapto a expensas de negar lo que la Palabra de Dios dice, por ejemplo,
acerca de la relación de la iglesia con la ira del juicio de Dios”. (John Feinberg, p. 192)
La Biblia no nos dice explícitamente el tiempo del rapto. De tal manera, ningún versículo nos dice que el rapto
será pretribulacional (o mid-tribulacional o pos-tribulacional respecto a eso). ¿Esto quiere decir que la doctrina
del Pretribulacionismo no es bíblica? No necesariamente. Muchas doctrinas bíblicas importantes no se nos son
dadas directamente en un versículo. Algunas doctrinas se basan en una armonización de pasajes múltiples. Por
ejemplo, ningún versículo explica la doctrina de la Trinidad o que Jesucristo es el Dios-hombre. Pero una
armonización de pasajes muestra que estas doctrinas son bíblicas. Asimismo una armonización de textos bíblicos
muestran que la perspectiva del rapto pretribulacional es bíblica. Lo siguiente son las evidencias bíblicas:
Dios ha prometido la liberación de la Iglesia de la ira divina (1 Tes. 1:10; 5:9; Apoc. 3:10)
Dios hizo una promesa especial a la iglesia de que será salvada de la futura, ira tribulacional de Dios. Es
mejor tomar esta liberación como una remoción física (el rapto) de este tiempo de la ira divina.
1 Tes.1:9-10 Los Tesalonicenses esperaban… de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de los muertos, a
Jesús, quien nos libra de la ira venidera. ¿Por qué se refiere esta ira a la Tribulación? Primero, el contexto de 1 y
2 Tesalonicenses trata con el día del señor y el juicio de Dios que precede a la venida de Cristo. En segundo lugar,
el texto manifiesta que es una ira futura (“ira vendiera”). En tercer lugar, es una ira de la cual uno puede ser
rescatado por el regreso de Cristo. De esta forma, la ira a la que se refiere entonces es la ira del período de la
Tribulación y no de la ira eterna de Dios en general.
1 Tes. 5:9 Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor
Jesucristo. ¿Por qué se refiere esta ira a la Tribulación? El contexto inmediato es la ira del día del señor (5:1-8).
Inclusive, ésta debe ser la misma ira de 1 Tes. 1:10.
Todo el período de la Tribulación de siete años es un tiempo de la ira divina de Dios así es que la protección
prometida debe ser por todos los siete años. Algunos han tratado de decir que la furia ira no caracteriza a todo el
período de Tribulación de siete años. Dicen que los juicios anticipados (los sellos) de la tribulación son la ira del
hombre y de Satanás. Los siguientes puntos, sin embargo, muestran que todo el período de la Tribulación es un
tiempo de ira divina.
Jesús es el Único quien directamente abre todos los juicios de Tribulación incluyendo los
juicios de los sellos que inician el período de la Tribulación.
En Apocalipsis 4 y 5 Jesús es el mismo que se encuentra digno para abrir los sellos que El comienza a abrir en
6:1. La abertura de los sellos por Cristo señala que los juicios del sello son una ira divina.
Los juicios de los sellos que inician la Tribulación son consistentes con la ira divina
“Los juicios de estos cuatro sellos incluyen la espada, hambre, pestilencia, y bestias salvajes, frecuentemente
utilizados en la Escritura como expresiones de ira divina. Ciertamente, todos ellos son incluidos y nombrados
cuando Dios llama Sus ´enviare contra Jerusalén mis cuatro juicios terribles, espada, hambre, fieras y
pestilencia´ (Ezeq. 14:21)”. (Gerald B. Stanton, “A Review of the Pre-Wrath Rapture of the Church,” Bibliotecha
Sacra, vol. 148 #589, Enero 1991). Además, las plagas como la pestilencia y las bestias salvajes apenas pueden
deberse al hombre.
Ya en el sexto sello, los incrédulos declaran que la ira de Dios “ha llegado” (Apoc. 6:16-17).
Los incrédulos reconocen que todos los seis sellos que han ocurrido hasta ahora son la ira misma de Dios. Robert
L. Thomas dice “El verbo elthen (‘ha llegado’) es indicativo del aoristo, en lo referente a una venida previa de
la ira, no a algo que está a punto de tener lugar. Los hombres ven la llegada de este día al menos tan pronto
como los trastornos cósmicos que caracterizan el sexto sello (6:12-14), sino en la reflexión que probablemente
reconocen como ya teniendo efecto con la muerte de una cuarta parte de la población (6:7-8), la carestía mundial
(6:5-6), y la guerra global (6:3-4). La secuencia rápida de todos estos acontecimientos no podría librarse los
avisos públicos, sino a la luz de su explicación verdadera no despierta en la conciencia humana hasta que los
fenómenos severos del sexto sello lleguen”. (Robert L. Thomas, Apocalipsis 1-7, pp. 457-58)
Apocalipsis 3:10 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de
la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra. Aquí hay una promesa
para la Iglesia de la preservación fuera del tiempo de la Tribulación. Así, los creyentes no son sólo se les promete
liberación de la ira divina sino del lapso del tiempo (“la hora”) de la ira divina. Esto descarta la posibilidad de que
la Iglesia esté en la tierra durante la Tribulación. Como Ryrie dice: “es imposible imaginar estar en posición donde
algo ocurre y estar exento del tiempo del suceso”.
Las diferencias entre los pasajes del rapto y los pasajes de la Segunda Venida indican que los
dos son sucesos diferentes de acontecimientos en momentos diferentes.
Los pasajes centrales que se ocupan del rapto son Juan 14:1-3; 1 Corintios 15:51-58 y 1 Tesalonicenses 4:13-18.
Los pasajes centrales que tratan con la Segunda Venida a la tierra son Zacarías 14:1 21; Mateo 24:29-31; Marcos
13:24-27; Lucas 21:25-27 y Apocalipsis 19. Un examen cuidadoso de estos textos demostrará que hay suficiente
razón para concluir que el rapto y la Segunda Venida a la tierra no son el mismo acontecimiento:
La Segunda Llegada es precedida por señales pero el rapto se presenta como inminente sin señales
precediéndolo. “En pasajes que se ocupan del segundo advenimiento allí vemos señales o acontecimientos que
conducen y señalan el regreso de Jesucristo (e.g., Mat. 24:4-28; Apocalipsis 19:11-21). En cada uno de estos
pasajes de la Escritura hay un cuidadoso y extensivo pormenor de detalles que deberían alertar a los creyentes
en ese día de que el segundo advenimiento está a punto de ocurrir… Por otra parte, no hay mención de ninguna
señal o acontecimientos que preceden al rapto de la iglesia en cualquiera de los pasajes del rapto. El punto
parece ser que el creyente antes de este acontecimiento debe buscar, no alguna señal, sino al Señor en el cielo.
Si el rapto fuese una parte del complejo de acontecimientos que conforman el segundo advenimiento, y no distinto
de ello, entonces pretenderíamos que habría una mención de señales o acontecimientos dentro en al menos un
pasaje”. (Vea a Paul D. Feinberg, "The Case For The Pretribulation Rapture Position,” en Gleason Archer, Paul
Feinberg, Douglas Moo, The Rapture: Pre-, Mid-, or Post Tribulational? p. 80)
El rapto es presentado como una venida en bendición mientras que la Segunda Venida es una venida para
juicio. “En los pasajes claros del rapto, la venida del Señor se presenta como una venida en bendición para los
santos. Nada se dice acerca de Su venida para juicio. Por otra parte, los pasajes acerca del segundo advenimiento
hablan de la venida del Señor en juicio sobre Sus enemigos (Apoc. 19:11ff; Joel 3:12-16; Zac. 14:3-5)”. (John
Feinberg, p. 198). “En cada uno que de los pasajes del rapto que no hay mención de prueba antes del
acontecimiento. Más bien, existe allí la promesa descubierta del regreso de Cristo por los Suyos”. (Paul Feinberg,
p. 81)
Los pasajes de la Segunda Venida están en el contexto del establecimiento del Reino mientras que los
pasajes del rapto no hacen mención del Reino. “Los pasajes del segundo advenimiento son invariablemente
seguidos por la declaración de establecer el reino después del regreso del Señor (e.g., Mat. 24:31; 25:31ff; Zac.
14; Joel 3; Apoc. 19-20). Entonces, el segundo advenimiento es antes del establecimiento del reino milenario.
Por otra parte, los pasajes claros del rapto no dan indicio que después del rapto el Señor establece el reino”.
(John Feinberg, p. 198).
Los cuerpos glorificados en el rapto: “Es muy claro desde 1 Tesalonicenses 4:13-18 y 1 Corintios 15:51ss
que en el rapto aquellos que fueron reunidos para el Señor serán glorificado. Por otra parte, los pasajes del
segundo advenimiento no dicen nada acerca de alguien (vivo o muerto) recibiendo un cuerpo glorificado”. (John
Feinberg, p. 198) “En ninguna parte de los textos que se ocupan del segundo advenimiento existe la enseñanza
acerca del traslado de santos vivos”. (Paul Feinberg, p. 82)
Ninguna mención de reunirse en el aire en los pasajes de la Segunda Venida En Ninguna Parte de los
pasajes de la Segunda Venida hay mencionada una reunión en el aire.
Las diferencias en el tiempo de las resurrecciones: “Parece haber una incongruencia entre el tiempo de la
resurrección en el rapto y en la Segunda Venida. En el pasaje central del rapto que se ocupa de este asunto, 1
Tesalonicenses 4:13-18, el tiempo de la resurrección de los santos muertos claramente se indica que es durante
el descenso de Cristo a la tierra. Aquellos raptados, santos vivos y muertos, serán llevados desprevenidos para
reunirse con el Señor en el aire. Contraste esa información con la que es encontrada en Apocalipsis 19-20. Allí,
el orden parece ser: El descenso de Cristo, quitarle la vida a Sus enemigos, echar a la Bestia y al Falso Profeta
en el lago de fuego, atar a Satanás, y luego la resurrección de los santos. Parece que como si la resurrección de
los muertos será durante el descenso en el rapto, pero después del descenso de la Segunda Venida”. (Paul
Feinberg, p. 84)
Las diferencias en el destino en el tiempo de las venidas: “Parece haber una incongruencia entre el destino
de aquellos que son llevados en el rapto y el destino de aquellos que participan de la Segunda Venida. En el
entendimiento post-tribulación de los acontecimientos que rodean la Segunda Venida, la iglesia será llevada para
reunirse con el Señor en el aire e inmediatamente le acompañarán en Su descenso seguido a la tierra. Compárese
eso con Juan 14:3. En el rapto el Señor va a venir y llevarse a aquellos del rapto para estar con El. La implicación
evidente es que los santos raptados serán llevados al cielo, y no a la tierra. Si esto es así entonces, el destino de
aquellos llevados el rapto será el cielo. Según los pasajes de la Segunda Venida, sin embargo, los santos
involucrados van encaminados hacia la tierra”. (Paul Feinberg, p. 84)
El papel de los ángeles en las venidas En la Segunda Venida, los ángeles son los que congregarán a los
elegidos (Mat. 24:31). En el Rapto Jesús es el agente directo de la reunión (1 Tes. 4:16).
Pablo habla del rapto como un ‘misterio’ (1 Cor. 15:51-54), es decir, una verdad no revelada hasta que fue revelada
por los apóstoles (Col. 1:26). Así que el rapto -se dice- es un misterio recién revelado, haciéndole un
acontecimiento separado. La Segunda Venida por otra parte, fue predicha en el Antiguo Testamento (Dan. 12:1-
3; Zac. 12:10; 14:4). (Thomas Ice en “The Biblical Basis for the Pretribulational Rapture," en Basic Theology
Applied, p. 269)
Apocalipsis 4-18 da el más detallado relato del período de Tribulación de siete años. Si la Iglesia estuviera en el
período de la Tribulación, seguramente uno esperaría al menos una referencia a la Iglesia en este lapso de tiempo.
La Iglesia, sin embargo, a la cual se refiere diecinueve veces en los primeros tres capítulos de Apocalipsis, es
repentinamente silenciosa y nunca referida en los capítulos 4-18. “Es notable y completamente inesperado que
Juan cambiar de instrucciones detalladas para la Iglesia a un silencio absoluto acerca de la Iglesia para los
siguientes 15 capítulos si, de hecho, la Iglesia continuase en la tribulación”. (Richard L. Mayhue, Snatched
Before the Storm, p. 8)
La Biblia señala que los incrédulos vivos serán removidos de la tierra y juzgados al final de la Tribulación. Pero
la Biblia también enseña que niños nacerán durante el Milenio y que las personas serán capaces de pecar (Isa.
65:20 y Apoc. 20:7-10). ¿Cómo puede ser esto? La perspectiva pretribulacional permite a personas salvarse
después del rapto y durante la Tribulación que luego entrarán en el Reino Milenario en cuerpos no glorificados.
Como John Feinberg dice: “Según el Pretibulacionismo, después del rapto la Tribulación se inicia. El evangelio
es predicado a todo lo largo de la Tribulación y hay algunos que creen. Aunque muchos de los que creen son
muertos (e.g., Apoc. 13:7, 15), no todos los creyentes son muertos durante la Tribulación. Aquellos que
experimentan la Tribulación entran en el reino en cuerpos naturales. Además, algunas personas aceptan al Señor
cuando El regresa al final de la Tribulación (e.g., Zac. 12:10). Muchas de estas personas no mueren en ese
momento, y no hay prueba de que a ellos les es dado un cuerpo glorificado cuando reciben a Cristo. Estas
personas están también disponibles para entrar en el reino en cuerpos naturales. Para la posición
pretribulacional, hay siete años para salvar a las personas antes del reino, y una cierta cantidad de aquellos
pueden entrar en el reino en cuerpos naturales… La posición que realmente está en un problema con relación a
este asunto es la perspectiva del rapto post-tribulación. Si todos los que van en el rapto están glorificados, y si el
rapto ocurre al final de la Tribulación, ¿A quiénes se les permite entrar en el reino en cuerpos naturales? Todos
los creyentes habrán sido raptados y glorificados para entonces”. (Itálicas mías) (John Feinberg, p. 201)
La naturaleza de la Tribulación gira alrededor de Israel según Daniel 9:24-27, la profecía de las “setenta semanas”
incluyendo la final semana (siete años) es para Israel (“tu pueblo”). Jeremías 30:7 se refiere al período de la
Tribulación como el tiempo de la “angustia de Jacob.” Mientras que la iglesia experimentará tribulación en general
durante la edad presente (Juan 16:33), nunca es mencionada como participante en el tiempo de Israel de problema,
lo cual incluye la gran tribulación, el día del señor, y la ira de Dios”. (Ice y Demy, The Truth About The Rapture,
p. 36).
Propósito #1: La preparación de Israel: “La Biblia enseña que la Tribulación es un tiempo de preparación
para la restauración y conversión de Israel (Deuteronomio 4:29, 30; Jeremías 30:3-11; Zacarías 12:10)”. (Ice y
Demy, p. 36).
Propósito #2: El juicio a un mundo incrédulo Apocalipsis 3:10 se refiere al período de Tribulación como
“la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra”. El
segundo propósito principal de la Tribulación, entonces, es probar al mundo incrédulo. “Los que moran sobre la
tierra” se refiere a aquellos que son incrédulos en la tierra durante el período descrito en Apocalipsis 4-19.
(Thomas Edgar: “An Exegesis of Rapture Passages,” en los Issues on Dispensationalism, p. 216).
“Los pasajes como 1 Corintios 1:7; Tito 2:13 y Filipenses 3:20 son aplicables en este punto. El creyente es
descrito esperando ansiosamente y ardientemente al Salvador. Observar señales es totalmente extraño en estos
pasajes. Nunca sucede. Ni una sola vez. Además, no sólo el creyente no busca de un regreso inminente del Señor,
sino que él debe dirigir su vida a la luz de eso (cf. Rom. 13:11-14; Santiago 5:7-8; 1 Juan 3:1-3). Si, por otra
parte, hay señales profetizados específicas, en realidad no andaríamos buscando al Salvador de un momento a
otro sino que en lugar de eso deberíamos esperar la revelación del hombre de pecado, la Gran Tribulación, etc.
Habría al menos un período de preparación de siete años”. (Earl D. Radmacher: “The Inminent Return of the
Lord,” en Issues on Dispensationalism, pp. 264-65). “Es incompatible entonces que las Escrituras guarden
silencio sobre un cambio tan traumático para la Iglesia. Si el post-tribulacionismo fuera verdadero, uno esperaría
que las epístolas enseñen el hecho de la Iglesia en la tribulación, el propósito de la Iglesia en la tribulación, y la
conducta de la Iglesia en la tribulación”. (Mayhue, p. 9)
La Expectación Tesalonicense.
El hecho de que Pablo había enseñado un Rapto Pretribulacional puede ser deducido de 2 Tesalonicenses 2:2-3.
En este pasaje, Pablo nota que los Tesalonicenses se habían estremecido y “conturbados” porque habían sido
inducidos a pensar que estaban actualmente en el Día del Señor (o sea el período de la Tribulación). El hecho de
que estuviesen consternados es significativo. Si Pablo había enseñado un rapto post-tribulacional, los
Tesalonicenses no habrían tenido razón para estar consternados puesto que esperarían señales y persecución antes
de la venida del Señor. De esta manera, gozosamente podrían mirar a la pronta venida del Señor después de la
Tribulación. Sin embargo, el hecho de que los Tesalonicenses estaban impactados señala que no esperaban estar
en el día del Señor. Una deducción justa de acuerdo con la enseñanza previa de Pablo, los Tesalonicenses
esperaban ser raptados antes del día del Señor.
Concluyendo
El propósito de esta obra ha sido presentar un caso positivo y bíblico para la posición del rapto pretribulacional.
La naturaleza judía y de juicio de la Tribulación parece excluir a la Iglesia a quien se le promete liberación de ese
tiempo de ira. Las diferencias entre los pasajes del rapto y de la Segunda venida, aunque no son convincentes a
todos, parecen lo suficientemente de peso para hacer muy posible que los dos diferentes eventos suceden en
momentos diferentes. Si éste es el caso, esta perspectiva armoniza bien con el hecho de que la Iglesia no se
encuentra en ninguna parte en la muy detallada sección de la Tribulación de Apocalipsis 4-19. Esta perspectiva
también armoniza bien con el hecho de que debe haber un lapso de tiempo permitido para salvar personas y luego
entrar en el Reino Milenario en cuerpos no glorificados.
[1] Michael J. Vlach, (Ph.D.) es Profesor de Teología en el Seminario de Maestros en Sun Valley, California, donde ha estado enseñando a tiempo
completo desde 2006. Michael tiene una Licenciatura en Administración de Empresas de la Universidad de Nebraska y una Maestría en Divinidad del
Seminario de Maestría en Sun Valley, California. También obtuvo su Ph.D. en Teología Sistemática del Southeastern Baptist Theological Seminary en
Wake Forest, Carolina del Norte. Michael se especializa en las áreas de Teología Sistemática, Teología Histórica, Apologética y Religiones
Mundiales. Su área específica de especialización se refiere a la nación de Israel y los temas relacionados con la refutación de la doctrina de la Teología
del Reemplazo. El Dr. Vlach fue galardonado con el "Premio Franz-Delitzsch 2008" por su disertación, "La Iglesia como un reemplazo de Israel: un
análisis del Supersesionismo". Él es también el autor de cinco libros: “¿Ha reemplazado la Iglesia a Israel?: Una evaluación teológica” (B & H
Academic, 2010). “La Iglesia como un reemplazo de Israel: un análisis del Supersesionismo (Peter Lang, 2009). “Dispensacionalismo: creencias
esenciales y mitos comunes (Theological Studies Press, 2008), entre otros. El Dr. Vlach es también el fundador y presidente de TheologicalStudies.org,
un sitio web de vanguardia dedicado a proporcionar artículos de calidad, noticias e información relacionada con la teología cristiana. Michael habla
regularmente en iglesias y conferencias y ha aparecido en varias transmisiones nacionales de radio y televisión, incluido The History Channel. Michael
también es miembro de la Sociedad Evangélica de Teología y ha enseñado varios cursos de Teología para Liberty University en Lynchburg, Virginia.
[2] A la mitad de.