Tiburon Blanco

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Tiburón blanco

Gaspard Villa 2°C

 Taxonomía
o Nombre científico: Carcharodon carcharias
o Clase: Chondrichthyes
o Orden: Lamniformes
o Familia: Lamnidae
o Nombres comunes : Tauró blanc (catalán), tiburón blanco (gallego), marrazo zuria
(vasco), great white shark (inglés), grand requin blanc (francés).

 Estado de conservación

o Catalogada por la UICN: Vulnerable


o Catalogada por el CITES: Apéndice II

 Distribución y hábitat

El tiburón blanco es una especie pelágica y cosmopolita que habita en los diversos
océanos y mares templados del planeta como el Atlántico, el Índico y el Pacífico; también
se distribuye en el Mar Mediterráneo. Puede realizar migraciones de larga distancia a
través de las regiones oceánicas.

Lo podemos localizar en la zona de la plataforma continental y la zona costera pero


también en zonas de mar abierto.

 Biología

o Descripción:

El tiburón blanco es un tiburón grande, normalmente mide entre 500 y 580 cm, siendo las
hembras mayores que los machos. Tiene forma fusiforme, con ojos negros, hocico cónico
y achatado. Sus dientes son grandes, triangulares y serrados.

Su coloración es gris marronosa por la parte dorsal, más clara en los lados y blanca por la
parte ventral. La primera aleta dorsal es grande y triangular, la segunda y la anal son más
pequeñas. La aleta caudal tiene forma semilunar. Delante de las aletas pectorales tiene
las hendiduras branquiales que son largas.

o Reproducción:

Es una especie ovovivípara, en la que los embriones se alimentan del saco vitelino u otros
óvulos maternos, ya que practican el canibalismo intrauterino en forma de oofagia. Se
estima que el tiempo de gestación puede ser de un año o más.

o Alimentación:
El tiburón blanco está considerado el depredador más grande del mundo y tiene una
amplia variedad de presas. Se alimenta de peces óseos, tanto bentónicos como pelágicos,
de peces cartilaginosos (tiburones y rayas), mamíferos marinos como los pinnípedos
(focas, elefantes marinos, leones marinos) y los cetáceos (delfines y marsopas), aves
marinas, cefalópodos (calamares y pulpos), crustáceos (cangrejos) y esporádicamente
algunas ballenas.

Son depredadores rápidos, la táctica utilizada para la captura de sus presas varía en
función del tamaño de éstas, en presas grandes detiene y mata a la víctima y en presas
más pequeñas puede tragarse entero el animal.

o Comportamiento :

El tiburón blanco es una especie muy activa y rápida. Solitaria aunque también puede
encontrarse formando grupos de 10 o más ejemplares en zonas de alimentación. Se ha
considerado el tiburón más peligroso del mundo.

Bibliografía

https://cram.org/catalogo-de-especies/peces/elasmobranquios/tiburon-blanco/
El misterioso y temido gran tiburón blanco Gaspard Villa 2°C
https://www.nationalgeographic.com.es/naturaleza/grandes-reportajes/misterioso-
temido-gran-tiburon-blanco_10749

Encontrarse con un tiburón blanco en su medio natural no es como cabría


esperar. A primera vista no es la bestia malévola que muestran los documentales.
Es corpulento, casi podría decirse que gordo. Su fofa papada y sus flácidos
carrillos tiemblan cuando abre la boca, y, al hacerlo, luce una suerte de sonrisa.
Visto de lado, este gran depredador es poco más que un bobalicón con la boca
medio abierta.
Pero cuando ese bufón submarino se gira para mirarte, entiendes por qué es uno
de los animales más temidos de la Tierra. De frente, su cabeza ya no es blanda
y laxa, sino que se va estrechando hasta formar una punta de flecha que dibuja
una V siniestra desde sus dos ojos negros. La sonrisa de pasmado desaparece, y
lo único que ves son hileras de dientes de cinco centímetros capaces de morder
con una fuerza de casi dos toneladas. Poco a poco se te acerca con seguridad.
Gira la cabeza, primero a un lado y luego al otro, mientras te evalúa y decide si
mereces la pena. Si tienes suerte, se da media vuelta y se desliza perezosamente
hacia la oscuridad.

Hay más de 500 especies de tiburones, pero en la imaginación popular parece


que solo haya una. Cuando Pixar necesitaba un villano submarino para su
película de animación Buscando a Nemo, no reparó en el afable tiburón nodriza ni
en el agresivo tiburón sarda. Ni siquiera en el tiburón tigre, que hubiera sido más
apropiado teniendo en cuenta que Nemo vive en un arrecife de coral. No, se fue
directo al tiburón blanco, y su colosal sonrisa dentada acabó empapelada en
miles de carteleras de todo el mundo.

El gran tiburón blanco es el pez icónico del océano, aunque sabemos muy
poco de él, y gran parte de lo que creemos saber sencillamente no es verdad.
Los tiburones blancos no son cazadores despiadados (sus ataques son más
bien cautelosos), ni siempre son solitarios, y tal vez sean más inteligentes de lo
que creían los expertos.

No sabemos con certeza cuánto tiempo viven, durante cuántos meses gestan ni cuándo
alcanzan la madurez

No sabemos con certeza cuánto tiempo viven, durante cuántos meses gestan
ni cuándo alcanzan la madurez. Nadie los ha visto aparearse ni parir. Ignoramos
cuántos ejemplares hay y dónde pasan la mayor parte de su vida. Si hubiera un
animal terrestre del tamaño de un camión cazando por las costas de California,
Sudáfrica y Australia, los científicos averiguarían hasta el último detalle de sus
hábitos de apareamiento, sus migraciones y su comportamiento, pues po-
drían observarlo en zoos, centros de investigación o incluso en circos. Pero
en el agua las reglas son muy distintas. El tiburón blanco aparece y
desaparece cuando quiere, haciendo que sea prácticamente imposible seguirlo
en las profundidades marinas. Se niega a vivir tras un cristal; algunos ejemplares
en cautividad han muerto de hambre deliberadamente o se golpeaban la cabeza
contra las paredes. (Varios acuarios han acabado soltándolos, por su propia
seguridad o porque atacaban a sus compañeros de tanque.)
Y sin embargo es posible que los científicos estén a punto de resolver dos de los
misterios más frustrantes sobre esta especie: cuántos hay y adónde
van. Resolver estas incógnitas podría ser vital para decidir cómo protegernos de
ellos y cómo protegerlos a ellos de nosotros. Cuando podamos ver al tiburón
blanco desde todos los ángulos, ¿se merecerá el asesino más temido del mundo
nuestro miedo o nuestra compasión?
Frente a la punta meridional de Cabo Cod, en Massachusetts, se encuentra un
barco pesquero de siete metros de eslora. Los pasajeros –tres científicos, dos
clientes, dos periodistas y el capitán– se apoltronan en los asientos y miran a lo
lejos, hacia Nantucket. Hace una espléndida tarde de verano. La voz de un piloto
avistador que sobrevuela a 300 metros de altura irrumpe por la radio: «¡Hay un
tiburón absolutamente bestial ahí, hacia el sur!».
Greg Skomal, biólogo marino especializado en pesquerías, se anima. Está de pie
a metro y medio de la proa sobre una pasarela que recuerda al tablón de un barco
pirata. Si fuera una película de Hollywood, tendría un arpón y una pata de palo.
En lugar de eso, lleva una cámara GoPro sujeta a una vara de tres metros.
Con anterioridad a 2004 no se conocen apenas avistamientos de tiburón
blanco frente a la Costa Este de Estados Unidos. De vez en cuando aparecía
uno cerca de una playa o en una red de pesca, pero se consideraba una
anomalía. En el resto del mundo esta especie se congrega estacionalmente en
cinco «centros de actividad», entre ellos la costa de California hasta Baja
California, en México, y los litorales meridionales de Sudáfrica y de
Australia, donde se alimenta de pinnípedos. Pero la Costa Este no es uno de
esos territorios, ni tampoco alberga demasiadas focas. Los tiburones que se
habían visto allí se consideraban ejemplares errantes sin hogar. Entonces, en
2004, una hembra solitaria se internó en las ensenadas someras y los bajíos
cerca de Woods Hole, Massachusetts.

Para Skomal, que llevaba 20 años marcando a otros tiburones, era una
oportunidad única. «Pensé que era un golpe de suerte, y que no volvería a ocurrir
jamás», explica con una sonrisa. Durante las dos semanas siguientes el biólogo
pesquero y sus colegas siguieron al animal, al que apodaron Gretel por el
personaje del cuento, y le colocaron una marca electrónica de seguimiento.
Rastrear un tiburón blanco por el Atlántico ofrecía la posibilidad de resolver
muchas incógnitas. Desgraciadamente, a los 45 minutos la marca de Gretel falló y
se desprendió. «Pasé de un estado de suprema excitación a deprimirme
profundamente, porque estaba convencido de que era la única ocasión que
tendría de estudiar a un gran blanco», recuerda Skomal.

No fue así. Durante los siguientes años Skomal se preguntó a menudo si Gretel
estaba ahí sola. Un día de septiembre de 2009 todo cambió. Un piloto avistó cinco
tiburones blancos frente al cabo. Ese fin de semana Skomal los marcó a todos.
«Me volví loco. Tenía la adrenalina a tope.»
El tiburón blanco Gaspard Villa 2°C

El gran tiburón blanco (Carcharodon carcharias) es una especie de elasmobranquio


lamniforme de la familia Lamnidae que se encuentra en las aguas cálidas y templadas de
casi todos los océanos. Esta especie es la única que sobrevive en la actualidad del
género Carcharodon.
Los tiburones blancos se caracterizan por su cuerpo fusiforme y gran robustez, en
contraste con las formas aplastadas que suelen lucir otros tiburones. El morro es cónico,
corto y grueso. La boca, muy grande y redondeada, tiene forma de arco o parábola.
Permanece siempre entreabierta, dejando ver al menos una hilera de dientes de la quijada
superior y una o dos de la inferior, mientras el agua penetra en ella y sale continuamente
por las branquias. Si este flujo se detuviese, el tiburón se ahogaría por carecer de opérculos
para regular el paso correcto del agua, y se hundiría en la misma, ya que al no poseer
tampoco vejiga natatoria se ve condenada a estar en continuo movimiento para evitarlo.

Distribución del tiburón blanco


El tiburón blanco vive sobre las zonas de plataforma continental, cerca de las costas,
donde el agua es menos profunda. Es en estas zonas donde la abundancia de luz y
corrientes marinas genera una mayor concentración de vida animal, lo que para esta
especie equivale a una mayor cantidad de alimento. Sin embargo, están ausentes de los
fríos océanos ártico y antártico, a pesar de su gran abundancia en plancton, peces y
mamíferos marinos.

Información del tamaño del tiburón blanco


La longitud más frecuente entre los tiburones blancos adultos es de 4 a 7 metros (siendo
los machos menores que las hembras), aunque se han citado casos de individuos
excepcionales que rebasaban ampliamente esas medidas. En la actualidad no se puede
asegurar cuál es realmente el tamaño “tope” o máximo en esta especie, hecho que se ve
reforzado por la existencia de notas antiguas y poco fiables sobre animales
realmente gigantescos. Varios de estos casos se analizan en el libro The Great White
Shark (1991) de Richard Ellis y John E. McCosker, ambos expertos en tiburones.

Información de la alimentación del tiburón blanco


Los tiburones blancos difieren bastante de ser simples “máquinas de matar”, como sostiene
la imagen popular (leyenda urbana) que se tiene de ellos. Para poder capturar los grandes
mamíferos que constituye la base de la dieta de los adultos, los tiburones blancos practican
una característica emboscada: se sitúan a varios metros bajo la presa, que nada en la
superficie o cerca de ella, usando el color oscuro de su dorso como camuflaje con el fondo
y volviéndose así invisibles a sus víctimas.

Información de los enemigos naturales del tiburón blanco


La ballena orca puede constituir una amenaza para los tiburones blancos. El 4 de octubre
de 1997 en las aguas que bañan las islas Farallon (triángulo rojo) ocurrió un ataque de una
orca hembra de 6′ 50 metros conocida por los científicos como ca2 contra un tiburón
blanco, durante el cual el tiburón murió. No se sabe realmente el verdadero tamaño de
aquel ejemplar debido a que quedó completamente destrozado, pero algunos expertos
suponen que se trataba de un tiburón joven. Aún asi, un tiburón blanco adulto tampoco
tendría muchas ventajas sobre la orca debido a obvias diferencias.
para mas información vea Orca vs tiburon.
Información de ataques contra seres humanos del tiburón blanco
Aunque cueste creerlo por la leyenda urbana tan intensa en contra, los ataques de
tiburones contra seres humanos son bastante raros. Dentro de éstos, los del tiburón blanco
se pueden considerar anecdóticos si se comparan con los del tiburón tigre (Galeocerdo
cuvier) o el tiburón toro (Carcharhinus leucas), el último de los cuales puede incluso
remontar grandes ríos (Misisipi, Amazonas, Zambeze etc.) y atacar a las personas a varios
kilómetros del mar. No obstante, las muertes causadas por estas tres especies en su
conjunto son inferiores a las provocadas por serpientes marinas y cocodrilos cada año, e
incluso menores que los fallecimientos ocasionados por animales tan aparentemente
inofensivos como abejas, avispas e hipopótamos. Se considera que es más probable morir
de un ataque al corazón en alta mar que por el ataque de un tiburón.

https://www.tiburonpedia.com/informacion-tiburon-blanco/

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