Parentesco en Roma
Parentesco en Roma
Parentesco en Roma
Principales Caracteres.
Patria Potestad: sólo el padre era sujeto ejerciente de esta. Este vínculo se transmite
solo entre varones, su ejercicio solo les corresponde a ellos. Es un derecho-deber. !
Emancipación: se deja de ejercer Patria Potestad sobre una persona pero sin
consideración de edad, en cualquier momento puede ser emancipado. ! Tutela y
Curatela: los Sui Iuris o las mujeres y niños que no tenían capacidad de obrar la
suplían con la tutela. Los púberes, enfermos mentales y pródigos están sometidos a
curatela, es una especie de curador, de asistente).
El p ater familias era el hombre romano que no dependía de nadie (sui iuris) y de
quien dependían los demás (alieni iuris). No importaba que estuviese soltero o
casado, ni su edad. Una mujer nunca podía ser cabeza de familia.
Familia agnaticia
Familia cognaticia
Línea recta: Aquellos que descienden unos de otros. Puede ser ascendente o
descendente. Por ejemplo: padre, hijo, nieto, bisnieto, etc.
Línea colateral: Aquellos que no descienden unos de otros pero tienen un tronco
común. Por ejemplo: hermanos.
Se entendía por familia por afinidad aquella compuesta por uno de los cónyuges y los
agnados o cognados del otro.
Para contar los grados, se cuenta como si un cónyuge ocupara el lugar del otro en su
familia.
El matrimonio
Para empezar, en el derecho romano clásico, para contraer matrimonio era necesario
que ambos contrayentes ostentaran la ciudadanía romana. Esto es, que gozaran no
sólo del status libertatis sino también del status civitatis (que fueran libres y además,
ciudadanos romanos), es decir el IVS CONUBIUM. Cualquier otra unión (p.ej.
ciudadano-extranjera) era considerado un concubinato ("contubernio").
Debían también (para contraer matrimonio) tener la madurez sexual suficiente (por
haber alcanzado una edad o porque biológicamente mostrara n signos de haberla
alcanzado); usualmente, los hombres se consideraban aptos para casarse a los
catorce años y las mujeres a los doce. Los hijos nacidos de este matrimonium iustum
(o iusta nuptia) serían sometidos a la patria potestas.
Ante la ley, solo los ciudadanos romanos tenían derecho a contraer matrimonio. La
tradición conservó el recuerdo de tiempos en los que los patricios no podían casarse
con una plebeya, prohibición caída pronto en desuso (Lex Canuleia).
Como el matrimonio romano estaba pensado para ser una institución que debía
renovarse con el consentimiento continuado de los cónyuges (affectio maritalis), se
permitía el divorcio. Como todo contrato, el matrimonio podía disolverse o terminarse.
Primitivamente, el derecho de revocación pertenecía únicamente al hombre; este solo
tenía que reclamarle a su mujer delante de un testigo las llaves de la casa y decirle:
tuas res habeto ("coge tus cosas").
A. Adquisición.
Teniendo un hijo legítimo → Problema, que “mater sempre certa, pater semper
incertum”. Esto es una presunción “Iuris Tantum”, es decir, desvirtuable, sobre la que
cabe prueba en contrario. (Las presunciones sobre las que no cabe esta prueba en
contrario se llaman “Iuris et de Iure ”). Se presumen, entonces, legítimos, los
procreados en justas nupcias. ¿Quiénes se entienden procreados en justas nupcias? :
2. Adopción
En Roma significa suplir la filiación natural y completar la familia Propio Iure. Tipos de
adopción:
B. Pérdida:
Consideraciones previas: tanto los hijos de familia Alieni Iuris como los esclavos no
tienen capacidad jurídica ( ya que son considerados res “cosa”, por lo que no pueden
tener nada a su nombre. Esto hay que tenerlo en cuenta porque si alguno de estos
hace algún daño, quien va a pagar es el Pater Familias con su patrimonio.
Ej.: el Pater Familias otorga dinero o patrimonio para que el Alieni Iuris pudiera
continuar con su vida cotidiana.
1. Tutela de Impúberes.
Mujeres e Impúberes (los que no han alcanzado la libertad) Las mujeres e impúberes
Sui Iuris (de propio derecho) suplían su capacidad de obrar con esta tutela porque sin
ella la tenían limitada.
Poder que se ejerce sobre una persona Sui Iuris menor de 14 años con capacidad
limitada para obrar ( Alieni Iuris -bajo el derecho de otro- no ya que está sometido a
Patria Potestad y por lo tanto tiene Pater Familias con la finalidad de suplir la falta de
capacidad de obrar por razón de edad. Es la institución que el derecho proporciona
para suplir la falta de capacidad de obrar de aquellos que por razón de edad, en este
caso, no tienen esta capacidad completa. Se otorga a favor del Pupilo. En los
primeros tiempos de Roma, el tutor administraba el patrimonio del menor según su
voluntad y criterio. Poco a poco, sin embargo, sus poderes fueron restringidos y
surgieron nuevas acciones y garantías dirigidas a hacer efectiva su responsabilidad.
Tuvo lugar así una progresiva intervención del Estado. Como consecuencia de ello, el
tutor no podía efectuar donaciones de bienes del pupilo (época Clásica); los actos de
disposición se limitaron (prohibida la enajenación de inmuebles provenientes del
patrimonio paterno época Clásica, de cualquier inmueble o mueble precioso Bajo
Imperio). Finalmente, quedó prohibida la realización de cualquier acto grave con
respecto al patrimonio del pupilo, sin autorización judicial. Además, en caso de lesión
al tutelado se le otorgó una in integrum restitutio –restauración completa- (posibilidad
de rescindir o deshacer los negocios).
b) Legítima → Ley de las XII Tablas 1o código de Derecho Civil Romano. Se daba
cuando no había testamento y se tenía que acudir a la ley. Correspondía entonces, a
los familiares de grado próximo y además, a los que tuvieran que heredar lo que tenía
el pupilo, porque se entendía que si lo iban a heredar ellos, cuidarían muy bien de
este patrimonio.
Ej. La mujer emancipada con 30 años tendrá tutor, por el contrario si es varón no.
Antes → (de la tutela): prestar caución, para salvaguardar el patrimonio del pupilo y
realizar inventario de bienes.
La gestión del patrimonio del pupilo: originalmente, convivirían tutor y pupilo; aquél
cuidaría la persona y sus bienes. Desde muy temprano, sin embargo, ambas
funciones se distinguen y el tutor se responsabiliza ante todo de la custodia del
patrimonio que sigue un régimen distinto en función de la edad del pupilo (infans b ́ o
maior b ́ ́). b ́. Pupilo = infans (menor de 7 años): opera el régimen de la negotiorum
gestio (gestión de negocios ajenos). El tutor actúa en el lugar del pupilo pero en
nombre propio, como si actuase por sí mismo, y los efectos recaen directamente
sobre el tutor (no hay representación directa al menos). Estaban excluidos los actos
personalísimos (aceptar testamento, la adquisición de la herencia quedaba entonces
en suspenso). Al término de la tutela, se llevaba a cabo la liquidación de la situación, y
el tutor transmitía al pupilo o tutelado los efectos de los actos celebrados por él. Poco
a poco, se introducen remedios a esta situación (intervención del pupilo a través de
uno de sus esclavos; aceptación de la herencia por el tutor primero con efectos
pretorios exclusivamente y después, con plenos efectos civiles; adquisición directa del
menor a través de ciertos modos. b ́ Pupilo = impúber infatia maior (menor de edad,
mayor de 7 años): opera el régimen de la interpositio auctoritatis (simple adhesión). El
tutor se adhiere, “autoriza” los actos del menor que ya no es un infans y tiene,
consecuentemente, cierta capacidad volitiva. Posibilita los actos personalísimos y los
efectos de los actos del menor recaen directamente sobre éste. A partir de la época
posclásica este sistema decae, convirtiéndose el tutor en un verdadero representante
del menor.
El tutor estaba obligado a realizar un inventario de los bienes del pupilo al comienzo
de la relación, así como a declarar sus deudas y créditos en relación con el pupilo. En
algunos casos se exigía también una garantía (mediante promesa verbal) “de
salvaguardar el patrimonio del pupilo” (satisdatio rem pupilli salvam fore). Estaban
excluidos los tutores testamentarios porque la elección del paterfamilias era
considerada suficiente garantía y pretorios puesto que eran nombrados por el
magistrado tras comprobar que reunían las condiciones necesarias . Estaba obligado
también a administrar los bienes del pupilo conforme a la diligencia de un buen padre
de familia (responsable, por ello, de los daños resultado de una falta o error que no
cometería una persona medianamente cuidadosa criterio de responsabilidad=culpa in
abstracto). Para vigilar tal responsabilidad se creó la figura del praetor tutelaris.
Justiniano exige que preste la misma diligencia que a sus propios asuntos (criterio de
responsabilidad=culpa in concreto). Finalmente, el tutor estaba obligado, al final de la
relación, a rendir cuentas de su actividad.
3. Actio Tutelae→ Esta acción sirve para todo, es polivalente, se crea para
economizar medios.
Originalmente sólo era responsable de sus delitos (accusatio suspecti tutoris contra el
tutor de mala fe que abusa de sus poderes - y actio rationibus distrahendis en caso de
desviación de los bienes del pupilo por el tutor). En la época clásica, se crea la acción
de tutela (de buena fe; personal; podía conllevar la nota de infamia para el tutor),
directa del pupilo contra el tutor o contraria del tutor contra el pupilo para perseguir los
gastos realizados en su gestión (por ejemplo). Trajano introdujo la acción subsidiaria
del pupilo contra el magistrado que nombraba al tutor (cuando tal nombramiento no se
había llevado a cabo con las garantías suficientes). Constantino, por su parte,
instituyó el privilegium inter personales actiones: el tutor era preferente frente a otros
acreedores personales (pero no frente a los hipotecarios).
Es prácticamente igual que la de los impúberes. Gayo dice que la historia de la tutela
de las mujeres fue la historia de su desaparición:
4. La Curatela.