AGENDA DE CRECIMIENTO.

TERCERA ETAPA. 1
MAC e ICR de A.
2.010.
APRENDA LA MAYORDOMÍA.

Arthur Demos, fue miembro de la junta directiva de la Cruzada estudiantil y

profesional para Cristo, internacional. Fue un próspero y piadoso hombre de
negocios. El creó uno de los negocios más exitosos dentro de su
especialidad en Estados Unidos y en el proceso llegó a tener una fortuna
estimada más ó menos en mil quinientos millones de dólares.

Repentinamente en una recesión económica, perdió trescientos sesenta

millones de dólares, en solo cuatro meses, es decir un promedio de tres
millones diarios; más de lo que cualquier otro hombre hubiera perdido
previamente en tan corto tiempo.

Cualquiera hubiera pensado, que eso era suficiente para destrozarlo y

obligarlo a dejar de dar sus donativos a causas cristianas. En lugar de eso, él
las incrementó. El decía:

“El Señor me dio todo lo que tengo y todo le pertenece a El. Y si El quiere
quitármelo todo, es asunto de El. Yo no pierdo mi sueño por eso, sigo
teniendo una familia maravillosa. Haré todo lo que Dios quiera que yo, haga.
Si El me quita todo lo que me ha dado y me llama para servirlo en un campo
misionero; estoy listo para ir. Lo único que El necesita es decírmelo”

Arthur Demos, puso su confianza completa en el Señor y no en su fortuna.

Dios honró su fe y obediencia y le restauró todo lo que había perdido y
mucho más. El señor Demos, está ya en la presencia del Señor, pero su
fortuna se sigue utilizando para la gloria de Dios.

La historia de este hombre, ilustra un principio absolutamente liberador: Si

utilizamos fielmente todo lo que Dios nos entrega y si reconocemos que El es
el dueño de cada cosa de nuestra vida; cualquier pérdida material,
simplemente representa Su decisión de dirigir en otra forma la administración
de esas posesiones.

Este concepto nos quita la terrible pena asociada de perder lo que

consideramos nuestro, ya que de hecho, no es nuestro. En tiempo de
necesidad, Dios nunca nos abandona; El suple todas las necesidades.
Nuestro deber es confiar completamente en El.

Cuando Dios nos confía sus bendiciones, nos pone como “administradores”
sobre ellas. Un muchacho lo respondió muy bien, cuando le preguntaron
sobre el significado de la “mayordomía”. “Eso significa, dijo, que la vida es
como un barco de carga, con muchas cosas para repartir en su trayecto a
mucha gente y en muchos lugares”
AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 2
MAC e ICR de A.
2.010.
Concluyó diciendo; Dios es el propietario y yo soy el capitán de esa nave y El
me hace responsable de la distribución”

En el Nuevo Testamento, la palabra que describe la mayordomía, enfatiza el

papel que tiene el administrador en cuidar la propiedad y los intereses de
otras personas. Dios es el dueño de todo lo que tenemos y la fuente de
todo lo que necesitamos. El nos ha puesto como mayordomos sobre esos
tesoros.

Este principio no se aplica solamente a nuestros recursos financieros, sino a

todo lo que tenemos; incluyendo nuestro tiempo, talentos y todo lo que
somos.

No debemos menospreciar la importancia de esa gran verdad. La

mayordomía de todo lo que Dios nos confía en la vida es fundamental para
poder dar. El ha puesto en nuestras manos la administración de una parte de
todo lo que El posee. El como nuestro Señor, nos hace responsables de la
manera correcta en que administremos lo que El ha puesto a nuestro
cuidado, Mateo 25: 14 – 30. Romanos 14: 12.

El hecho de dar por fe, es un emocionante privilegio. Cuando usted honra y

alaba a Dios a través de su compromiso y obediencia para administrar, el lo
colma de alegría.

Veamos siete principios que podemos aplicar a nuestra vida, para recibir
abundantes bendiciones de Dios a través de una fiel mayordomía:

Primero: Todo lo que usted tiene, le pertenece a Dios.

Todo lo que tenemos, lo tenemos por la gracia y el don de Dios. Todo le

pertenece a El. El salmista dice; Salmo 24: 1. La mayordomía delegada por
Dios es eterna y no cambia; El nunca ha cedido este derecho y jamás lo
hará.

Dios nos ha entregado una cantidad determinada de tiempo, un juego de

talentos y suficientes recursos para hacer Su voluntad en nuestra vida.
Nuestra tarea como mayordomos fieles es administrar esas bendiciones, con
el propósito de traer la máxima gloria a Su nombre.

Segundo: El dar produce abundancia.

Hechos 20: 35, menciona las palabras del Señor Jesús. ¿Por qué? Porque
cuando usted se da libremente a usted mismo y comparte sus posesiones
AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 3
MAC e ICR de A.
2.010.
como una expresión material de su obediencia espiritual a Cristo; Dios en
respuesta provee abundantemente para sus necesidades; Lucas 6: 38.

Esto es verdad, ya sea usted rico ó pobre, sea que usted le sirva a Dios en
una tierra próspera, con grandes recursos naturales, ó en alguna parte
abandonada y pobre del mundo. La mayoría de los cristianos no han
aprendido a dar, independientemente de su abundancia ó de su pobreza, por
lo tanto, no experimentan la verdad de la promesa.

Usted nunca podrá superar a Dios en el dar. Es una ley de Dios que las
bendiciones que El nos da, excedan en mucho todo lo que usted le haya
dado a El. El dar empieza un círculo interminable de prosperidad:

Dios da, usted recibe. Usted da, El recibe. Entonces, El multiplica lo que
usted haya entregado y se la devuelve en la forma de una bendición
adicional. Es importante decir que es Dios, quien empieza este proceso de
bendición.

El propósito de la devolución, no es recompensarlo a usted por su

generosidad; sino, para incrementar su potencial de dar para la causa del
Reino de Dios y contribuir al cumplimiento de la gran comisión. Por lo tanto,
el círculo, se completa otra vez; 2ª Corintios 9: 6 – 8; 10 – 11.

Tercero: De por fe.

Para definirlo de manera sencilla, el dar por fe es creerle a Dios al pie de la

letra y dar generosamente anticipando su fiel provisión. Filipenses 4: 19,
veamos en este versículo que la premisa de dar es triple:

1. Dios es la fuente absoluta de nuestros recursos.

2. El dar se basa en Sus recursos, no en los nuestros.
3. Cristo es nuestra conexión con las ilimitadas riquezas de Dios.

Efesios 2: 6; 1: 3. En el momento en que recibimos a Cristo como nuestro

Señor y Salvador, recibimos esta herencia; Efesios 1: 14. Debido a la
posición glorificada de Cristo en el cielo, y puesto que El esta en nosotros a
través de su Santo Espíritu; somos suficientes en El.

Cuarto: Lo que usted siembra eso cosecha.

En el tercer día de la creación, el Señor ordenó; Génesis 1: 11, este pasaje

se refiere a los ciclos de la naturaleza; sin embargo, nosotros podemos ver
estos mismos ciclos, obrando en todos los aspectos de la vida, tanto
AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 4
MAC e ICR de A.
2.010.
espirituales como físicos. Utilizando este principio, para enfatizar la verdad
espiritual, el apóstol Pablo, dijo Gálatas 6: 7 – 8.

Dejando establecido que la ley de la siembra y la cosecha, se aplica también

a nuestras necesidades materiales, Pablo dijo en 2ª Corintios 9: 10.

Esto fue escrito a la iglesia de Corinto en el contexto de dar económicamente

para resolver las necesidades de otros, pero puede aplicarse a todo lo que
damos: Amor, paz, tiempo para cuidar a los enfermos, a los huérfanos, a los
presos, a las personas en necesidad. Compartir nuestros talentos para que
hacer que nuestras ciudades sean mejores lugares para vivir.

La ley de la siembra y la cosecha es sencilla: Para cosechar cualquier cosa,

primero debemos sembrar una semilla. Para tener una buena cosecha,
debemos plantar la mejor semilla. Esto significa que lo mejor de nuestra vida,
de nuestro tiempo, lo mejor de nuestros talentos, lo mejor de nuestras
posesiones; lo mejor de todo lo que somos y tenemos, debe ser puesto
delante de Dios.

Quinto: Dar para glorificar a Dios.

Como administradores de los recursos de Dios, tenemos un solo propósito:

Glorificarlo a El. Resulta fácil permitir que los problemas diarios de dinero,
desvíen nuestra mirada de esta meta, a menos, que tengamos claramente
definidas nuestras prioridades. La palabra de Dios hace esto por nosotros:

 Nuestra prioridad número uno, es Dios.

 Nuestra segunda prioridad es nuestro cónyuge.
 La tercera son nuestros hijos.
 La cuarta el trabajo. La labor en el hogar.
 La iglesia.
 Nosotros mismos.

Puesto que la familia fue la primera institución creada por Dios; Génesis 1:
27 – 28, no existe conflicto alguno entre la preeminencia de Dios y la
prioridad de la familia. Es más, satisfacer las necesidades de la familia, es un
mandamiento bíblico y una evidencia de fe; 1ª Timoteo 5: 8.

También Dios se glorifica cuando ayudamos a los no creyentes, a ver el

poder transformador de Cristo, al ocuparnos de los pobres, los huérfanos y
las viudas a través de nuestras dádivas de tiempo, talentos y recursos
económicos.
AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 5
MAC e ICR de A.
2.010.
Sin embargo, nuestra prioridad fundamental, es amar, obedecer y glorificar a
Dios. Poner a Dios y el cumplimiento de la Gran Comisión primero, en cuanto
a nuestro tiempo, talentos y recursos. Esta debe ser la más alta meta de
nuestra mayordomía.

Sexto: Ofrende de corazón.

La motivación es una parte esencial de la buena mayordomía, porque

determina nuestra razón de dar. La motivación piadosa, proviene de un
corazón alegre que ama a Dios.

 Damos ofrenda para agradar a nuestro Señor y expresar nuestro amor por
El.
 Damos ofrenda porque obedecemos el mandamiento de nuestro Dios, de
hacernos tesoros en el cielo.
 Damos ofrenda para ser un canal de los abundantes recursos de Dios,
para un mundo desesperadamente necesitado.
 Damos para ayudar a cumplir la Gran Comisión y así, ayudar a alcanzar el
mundo para Cristo, Lucas 12: 43. 1ª Timoteo 6: 5 – 6. 2ª Corintios 5: 9.
Mateo 28: 19.

El mantener la motivación correcta por medio del Espíritu Santo es esencial,

si es que vamos a cumplir este objetivo para la gloria de Dios.

Séptimo: Dios quiere que usted sea financieramente libre.

Esto significa, tener lo suficiente para satisfacer todas sus obligaciones

financieras, dando lo necesario para los gastos de la casa y para dar
generosa y alegremente para la obra de Dios.

Dios quiere que seamos financieramente libres, de modo que lo pongamos a

El, de primero en nuestra vida y seamos sensibles a su voz, listos para
seguirlo a la hora que sea y a dónde quiera que El nos dirija.

Pregunto; Si este es el plan de Dios, ¿Por qué hay tanto cristiano

esclavizado financieramente? Porque no entienden ni obedecen los
principios de la mayordomía, pero en cambio, se rinden a la filosofía
mundana del dinero. Ellos se cargan a sí mismos con los intereses
materialistas de la vida y tienen poco ó ningún compromiso con la obra de
Dios.

Muchos cristianos sinceros se encuentran en la esclavitud financiera, por su

mala mayordomía y planificación y aún cuando Dios los llama a servirle, no
AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 6
MAC e ICR de A.
2.010.
pueden obedecer. Esa desobediencia, les roba la alegría, la paz y la victoria
y la posibilidad de un testimonio fructífero.

El materialismo es un problema de todas las culturas y naciones.

Un día un misionero fue a visitar a un pastor en una remota villa africana. Su

casa era más que sencilla: Estaba construida de ramas y lodo, tenía piso de
tierra y su escaso mobiliario era rústico. El misionero le preguntó al pastor:

¿Cuál es uno de los problemas más difíciles que usted enfrenta en su

ministerio? Sin dudar el pastor contestó: El materialismo. Si mi gente tiene un
cerdo, enseguida quiere dos. Si tienen dos cerdos, quieren una vaca ó varias
vacas.

Encontramos el verdadero significado de la vida, en una fiel mayordomía de

lo que Dios nos confía; no en el materialismo.

Una verdadera salud financiera, necesita salud espiritual. Recordemos el ya

aprendido principio de la “respiración espiritual”. En esta respiración,
exhalamos la impureza del pecado a través de la confesión; e inhalamos la
pureza de la justicia de Dios, apropiándonos de la plenitud de su Espíritu por
fe; Efesios 5: 18.

Al relacionar este principio con el “dar” de nuestros recursos, podríamos

aplicar el término “respiración financiera”. Usted “exhala financieramente”
al confesar su pecado de insistir y reclamar que usted es el dueño de todos
los recursos que Dios le ha confiado a su cuidado y no compartirlos con la
obra de Dios., como si en realidad le pertenecieran, ya que al fin y al cabo
cree, que usted se los ganó.

Usted “inhala financieramente” al reconocer el señorío de Dios, sobre

todos sus talentos, recursos, tiempo y al compartir con otros la abundancia
que Dios provee. Este sencillo acto de fe, requiere como respuesta una
entrega total e irrevocable al señorío de Dios sobre todas las áreas de su
vida.

La buena mayordomía necesita que vivamos dentro de un presupuesto y

administremos debidamente el crédito. El propósito de satanás es que el
cristiano viva esclavo del dinero y la deuda, para cargarlo con desaliento y
preocupación y así mantenerlos impotentes espiritualmente, sin dar fruto.

Por eso razón, un mayordomo fiel nunca llegará al punto de no poder pagar
sus deudas, por no haber controlado sus ingresos.
AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 7
MAC e ICR de A.
2.010.
Permítanos sugerirle, que antes de pagar los impuestos ó antes de cualquier
reducción; diezme el 10% de sus ingresos a la obra del Señor. El diezmo es
un método sistemático entre los cristianos de hoy para ofrendarle al Señor.

Cuando obedecemos al Dios con el diezmo, nos ponemos bajo su protección

y recibimos bendición. Sin embargo, fuera de la cobertura financiera de Dios,
somos vulnerables al ataque del diablo. El enemigo se deleita en agotar
nuestros recursos, quitándonos la bendición de ayudar para el Reino.
Nuestro Señor, prometió; Malaquías 3: 11.

La falta de fidelidad ó desobediencia en dar, no solamente permite el ataque

de Satanás, sino que desagrada a Dios y provoca su disciplina. La primera
pregunta que le hace el pastor en consejería a un cristiano que esta con
problemas financieros es ¿Está diezmando? Si la respuesta es no; no podrá
ayudarlo mucho; hasta que obedezca a Dios y sea un diezmador fiel.

Es bueno preguntarle al esposo, a los hijos, mayores; si están al día en el

diezmo; porque Dios sabe que preferiríamos no comer, a robarle lo que es de
El; Malaquías 3: 7 – 10.

 ¿Está usted experimentando la presencia de Cristo en su vida?

 ¿Experimenta su amor, su paz, su gozo, el sentido de dirección que El le

da?

Si no es así, ¿Será que usted no está obedeciendo los mandatos de Dios?

Cuando usted retiene los recursos que Dios le ha confiado para su obra,
tiene poco con qué bendecirle y su vida deja de llevar fruto y por lo tanto es
infeliz.

Los animamos para que desarrollen una estrategia personal para ofrendar,
que los capacite para dar con sabiduría y en forma significativa para el Reino
de Dios. Reconozca y confiese, que Dios es el dueño de todas sus
posesiones y esté listo, para dar cuenta de su mayordomía a El. Ofrezca sus
dones al Señor como un acto de adoración.

De esa forma, usted va a experimentar la maravillosa aventura de vivir y dar

por fe, alegrándose en su abundancia y compartiendo sus recursos con otros
que Dios ponga a su alcance.
 AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 8
MAC e ICR de A.
2.010.
DIOS ES EL DUEÑO DE TODO.

PRIMER TEMA.

Propósito: Aprender a ser administradores de uno mismo; es decir, ser

buenos administradores de nuestra vida, capacidades, recursos personales y
de las relaciones interpersonales.

Objetivo: Rendir todo lo que tenemos a Dios, porque podemos descansar en

el hecho de que El es el dueño de todo. Génesis 1 – 3. Génesis 2: 3.
1ª Crónicas 29: 11.

Como mayordomos cristianos, debemos saber que en Cristo vivimos nos

movemos y somos; Hechos 17: 28. En este tema, usted vera la base del
derecho de propiedad de Dios sobre su vida.

Jesucristo nos creó; Colosenses 1: 16. Nos compró con su preciosa Sangre;
1ª Pedro 1: 18 – 19. Y Dios lo ungió como nuestro Señor; Efesios 1: 2 – 23.
Hechos 10: 36. Romanos 10: 12. Por lo tanto, toda nuestra vida, nuestra
personalidad, influencia, las cosas materiales, todo es Suyo y aún hasta
nuestros triunfos y éxitos.

La Biblia nos dice; 2ª Corintios 5: 15. No reconocer y actuar en base al

hecho de que Dios es el propietario de todo lo que somos, y seremos, es
robarnos a nosotros mismos su bendición y no dar la medida para su
servicio; 2ª Timoteo 2: 15, 16, 19 – 21.

Estudio bíblico.

I. Creación y caída del hombre.

1. ¿Según qué modelo creó Dios al hombre? Génesis 1: 26 a. Los teólogos

han debatido por mucho tiempo, qué es lo que en el hombre constituye la
imagen de Dios. Esa imagen parece incluir las características básicas de
la personalidad: Intelecto, emociones y voluntad.

Adán y Eva tenían intelecto; Génesis 2: 19. Emociones, y voluntad Génesis

3: 10, así como Dios las tiene.

2. ¿Qué hizo el hombre que provocó la separación entre él y Dios? Génesis

3: 1 – 7. Este pasaje nos deja ver algo importante sobre el pecado. Adán no
se emborrachó ni cometió actos inmorales. El y Eva sencillamente hicieron
valer su independencia de Dios, rebelándose contra su mandato y tomando
el control de sus propias vidas.
 AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 9
MAC e ICR de A.
2.010.
Pecado es ser independiente de Dios y vivir su vida a su manera.

3. ¿Cómo fue el hombre afectado por el pecado en su:

Intelecto; 2ª Corintios 4: 2 – 4?
Emociones; Jeremías 17: 9?
Voluntad, Romanos 6: 20?

4. ¿Cómo afecto al mundo este acto de rebelión? Romanos 5: 12.

II. Reconciliación.

1. ¿Cómo es que Dios nos hizo volver para reconciliarnos con El? Romanos
5: 8 – 10.

2. ¿Qué nos ha dado Dios para capacitarnos a vivir por El? Juan 14: 26.

III. Nuestra responsabilidad.

1. Dios nos ha restaurado a la posición de comunión que Adán tenía. ¿Qué

dice esto acerca de nuestra presente relación con Dios? 1ª Corintios 6: 19 –
20.

2. ¿Cuál entonces debe ser nuestra respuesta a Dios? Romanos 12: 1 – 2.

3. Muchas personas hacen el intento de comprometer y dar a Dios una

lealtad incompleta. ¿Cómo consideró Jesús esta práctica, Mateo 12: 30?

4. En Apocalipsis 3: 15 – 16 ¿Cómo describió Jesús a aquellos que no

están con El, ni contra de El?

5. ¿Cuál fue la elección lógica que presento Elías al pueblo? 1ª Reyes 18:
21. Si la lógica de Elías es correcta, debemos tomar una de dos posturas.
Si establecemos que Cristo es Señor y Dios, debemos servirle con
lealtad. Si no él es un impostor y el cristianismo una burla. Si esto fuera
verdad, deberíamos disuadir a la gente para que nos sean cristianos;
pero, se es una cosa ó se es otra.

Debemos estar con Cristo, ó contra El. Pero nunca tratar de estar en el
medio.
 AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 10
MAC e ICR de A.
2.010.
IV. Aplicación práctica.

1. Lea Isaías 48: 17 – 19. ¿Qué bendiciones se perdería usted, si se va por

su propio camino, dejando de reconocer el derecho de propiedad de Dios?

2. ¿Qué porcentaje de su vida ha dispuesto para que Dios controle? ¿Cuánto

tienen Dios en control?

3. ¿Hay algo en su vida que aún no lo ha rendido al control de su Padre

celestial? ¿Podría decir qué es y cómo va a tratar con eso?

4. ¿ Qué piensa usted que Dios hará con su vida si le rinde todo al El?
AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 11
MAC e ICR de A.
2.010.
EJEMPLOS DE PERFECTA MAYORDOMÍA.

TEMA DOS.

Objetivo: Seguir los ejemplos bíblicos de mayordomía. Lucas 23 y 24.

Colosenses 1: 2. Juan 8: 28.

El dar empieza con Dios. Su expresión sobrenatural de dar, fue en el

sacrificio de su Hijo Unigénito, para que recibiéramos perdón por nuestros
pecados, para que llegáramos a hacer sus hijos y así gozar de la vida eterna.

Dios continúa dando de sí mismo hoy. El nos da amor, paz, alegría poder y
propósito. A través, de esto, El nos capacita para vivir vidas llenas y plenas
de significado. El dar fue el estilo de vida de nuestro Señor Jesucristo. Una
descripción concisa, aparece en el libro de Hechos 10: 38.

 Jesús dio al alimentar a las multitudes.

 Dio al sanar a los enfermos.
 El dio al enseñar a sus discípulos.
 Dio al llenarlos de poder para predicar el Evangelio.
 Dio al tener compasión por los pobres.
 Dio al ofrecer descanso para el cansado.
 Dio cuando se ofreció a Sí mismo en la Cruz por nuestros pecados.
 Dio al enviar al Espíritu Santo.

Dar es también un atributo del Espíritu Santo.

 El nos fortalece y nos anima. Hechos 9: 31.

 Nos renueva. Tito 3: 5.
 Nos revela cosas. Lucas 2. 26.
 Nos ayuda. Juan 14: 6.
 Nos guía y dirige. Lucas 4. 1. Hechos 13: 2 – 4. Juan 16: 13.
 Trae el amor de Dios hacia nosotros. Romanos 5: 5.
 Nos enseña. Lucas 12: 12-
 Nos da poder. Hechos 1: 8; 4: 31.

En ningún sitio podremos encontrar un modelo más perfecto de mayordomía

que en Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo. Al estudiar este
tema, considere en actitud de oración, cómo puede aplicar el ejemplo de
ellos en su vida.
 AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 12
MAC e ICR de A.
2.010.
Estudio bíblico.

I. La mayordomía de Dios el Padre.

1. Lea Juan 3: 16, ¿Cuál fue el mayor regalo de Dios al hombre?

2. ¿Qué otra cosa nos da Dios? Romanos 2: 4 – 7. 1ª Juan 5: 11.

3. Lea Juan 3: 34; 10: 10; y 14: 16, ¿Qué nos ha dado el Padre que nos
capacita para vivir abundantemente?

4. Haga una lista de algunas de las características de la naturaleza de Dios,

que hacen que el dar sea una prioridad para El.

II. La mayordomía de Dios el Hijo.

1. Haga una lista de los hechos de Cristo que indiquen perfección en su

mayordomía. Filipenses 2: 5 – 8.

2. ¿Cuál fue el supremo propósito de Cristo en la vida? Juan 6: 38. Hebreos

10: 7.

3. Lea Juan 12: 23 – 33. ¿Qué incluía la voluntad de Dios para Jesús?
Versículos 23, 27,32, 33. En el versículo 24 Jesús usa el ejemplo de un
grano de trigo que es sembrado en la tierra. ¿En que sentido debe “morir” un
grano de trigo para llevar fruto?

¿Cómo se aplica a nosotros esta ilustración? Compare con el versículo 25.

Si como cristiano, usted no está dispuesto hacer ningún sacrificio para ganar
a otros para Cristo, ni está dispuesto a sufrir privaciones, ni a negarse a
usted mismo, ni a padecer persecución, sino por el contrario, quiere que todo
sea cómodo, fácil, sin esfuerzo, ¿Qué efectos tendrá todo esto en su misión
de llevar fruto?

4. Haga una lista de las características de la naturaleza de Cristo que hacen

que el dar, sea una prioridad para El.
 AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 13
MAC e ICR de A.
2.010.
III. La mayordomía de Dios el Espíritu Santo.

1. ¿Cuáles son algunas de las obras que el Espíritu Santo realiza como
mayordomo de Dios, según los siguientes pasajes? Juan 16: 7 – 11.

2. ¿De qué manera nos ayuda este ministerio de persuasión del Espíritu
Santo en la evangelización? Juan 16: 13.

En términos generales, el Espíritu Santo guía al creyente en la verdad

espiritual. De manera específica, El guió a los apóstoles y a los primeros
cristianos en la proclamación de la verdad del Evangelio y en la escritura del
Nuevo Testamento.

Romanos 8: 14; 8: 16; 8: 26.

3. Cuando el Espíritu controla a una persona, ¿Quién es glorificado? Juan

16: 14.

4. Haga una lista de las características de la naturaleza del Espíritu Santo,

que hacen que el dar sea una prioridad para El.

Aplicación práctica.

1. ¿De qué forma la naturaleza dadivosa de Dios el Padre, lo motiva a usted

a dar?

2.¿Cuál es la mejor manera de aplicar a su vida el ejemplo que Jesús

estableció? Sea específico.

3. ¿Qué desea hacer el Espíritu Santo en su vida actualmente?

4. Haga una lista de la forma en que usted puede cooperar, tal y como se
sugiere en Hechos 4: 31; Efesios 5: 18 – 20, Romanos 12: 1 – 2.
AGENDA DE CRECIMIENTO.
TERCERA ETAPA. 14
MAC e ICR de A.
2.010.
LA MAYORDOMÍA DE NUESTRO TIEMPO.

TERCER TEMA.

Objetivo: Llegar a ser mayordomos sabios de todo aquello para lo cual Dios
nos ha creado. Romanos 12. Gálatas 2: 20.