Ensayo Gracia Barrios (La Pobladora)
Ensayo Gracia Barrios (La Pobladora)
Ensayo Gracia Barrios (La Pobladora)
Facultad de Artes
Magdalena Zúñiga
Barrios en sus inicios como artista muestra cierta experimentación con la materialidad en sí
de las pinturas, el discurso que se generaba en sus obras era en torno a los límites de los
materiales que podía plasmar en los soportes, que convencionalmente son lienzos. Cuando
Barrios comenzó en el mundo artístico, el movimiento presente en el país era el arte de
rectángulo o abstraccionista, Gracia al ver este movimiento y junto a jóvenes artistas
nacionales, en el año 1962, fundan el grupo Signo, encargado de romper estos esquemas de
rectángulo y proponer un informalismo desgarrador, utilizando grotescas cantidades de
material en los lienzos, experimentando con los mismos, este grupo introduce nuevas
maneras de apreciar el arte, las reflexiones eran en torno al espacio que utiliza la materialidad
pura, dejando un poco de lado las nociones contextuales.
Un poco más tarde el grupo conformado por Gracia Barrios, José Balmes, Alberto
Pérez y Eduardo Martínez Bonati, se cuestionaría dentro de sí que el discurso que evocan, no
integra lo que sucede en el exterior, el mundo está cambiando, y por lo tanto, también Chile.
Transformaciones universitarias, tocan completamente a estos artistas, debido a su
compromiso con el alma mater; cambios sociales, quiebre de tradiciones, aparición de nuevos
actores sociales, son algunos temas que están ocurriendo entre 1960 y 1970.
El cambio de visión hacia el contexto político y social en Chile es de gran importancia para
los artistas, debido a que en 1970 las campañas de la Unidad Popular se plasman en murales,
con símbolos y colores referentes a ella, por lo que la escena artística nacional no puede
quedarse de brazos cruzados observando estos sucesos.
Una obra de Gracia Barrios creada en 1972, refleja la sociedad que aspira cambios con la
presidencia de Salvador Allende, hablamos de La Pobladora, esta pintura creada con acrílico
sobre tela está evidentemente dotada de un simbolismo político, lo que refleja una
importancia en el cambio de su fabricación artística: su preocupación ya no es el discurso de
la obra material dentro de la esfera del arte, ahora lo es el significado social, o lo que evoca
la obra para la comunidad.
Poniendo énfasis en la década anterior a la UP, Gracia Barrios muestra una obra de
características puramente materiales, esto quiere decir que las creaciones las articulaba de
manera tal que fueran apreciadas desde un punto de vista armónico entre las técnicas, los
medios y sus soportes, que lo plasmado fuera una síntesis de trazos entre distintos materiales,
moldeando por ejemplo pastas densas de pintura, y otros elementos no convencionales, tales
objetos se evidencian en Mujer y Hombre del año 1968 (ver anexo A). Se observa en esta
obra mencionada, que el trazo de la pincelada a veces es violento, generando distintas
texturas que sobresalen en la pintura. Podemos dar cuenta entonces que, durante 1960,
Barrios busca generar una tridimensionalidad en sus obras.
En La Pobladora (1972), se halla un giro drástico en la obra de la artista, esta vez no se centra
únicamente en la apreciación visual, sino que su cambio es a partir del contexto político y
social que está transformando Chile, los entes que conforman la sociedad, aquellos que se
ven representados con el nuevo gobierno, están sacando la voz, se hacen notar. Gracia Barrios
decide plasmar todo este nuevo sentimiento como un símbolo, no como un material, es por
esto que se evidencia en La Pobladora una pintura con trazados descuidados, se aprecia una
veladura de distintos matices rojos que deja ver -pero no en su totalidad- el soporte oscuro
(ver Anexo B). Nos demuestra que su técnica ahora no se especializa en lo material, pero no
por esto deja de ser importante, ahora esta misma genera un simulacro, una imagen figurativa
bidimensional en la que podemos distinguir una mujer.
Algo cotidiano debe ser algo rutinario, de todos los días, para el artista esta rutina es crear
obras, pero saber el lugar exacto de dónde se generan las obras es algo que pocos se
1
Ivelic, M., & Galaz, G. (1988). Chile Arte Actual. Valparaíso: Editoriales Universitarias de Valparaíso, pág.
270
cuestionan. Para dar una mirada a la sociedad, primero se debe hacer una mirada dentro de
su taller. El libro Taller por Taller, el lugar de la historia: Gracia Barrios y José Balmes,
nos explica que en el Centro Cultural Matucana 100, expusieron en el año 2002, los
elementos que configuraban su taller original, esta vez, abierto al público. En las imágenes
se puede apreciar que su taller no es un lugar ostentoso (Ver Anexo C y D), pero puede
resultar cómodo a la hora de producir, vemos que hay pruebas de colores en la mesa, y los
materiales están a mano para crear obras, por lo que no es complejo decir que los materiales
generan el espacio, y no viceversa. Un punto que se debe tener en consideración es la
importancia de la producción que se genera en el taller, y no tanto el espacio mismo, porque
finalmente lo que apreciamos es el resultado del trabajo del artista, fuera de su taller.
4 Premios Nacionales: José Balmes, Gracia Barrios, Roser Bru y Guillermo Núñez. (s.f.).
Obtenido de Museo Nacional Bellas Artes: http://www.mnba.cl/617/w3-article-
75252.html
Centro Cultural Matucana 100. (2002). Taller por taller, el lugar de la historia, Gracia
Barrios y José Balmes. Santiago de Chile.
Machuca, G. (2006). Arte: De la crisis del arte moderno a las vanguardias del nuevo siglo.
En 100 años de Cultura Chilena 1905-2005. Santiago de Chile: Editorial Zig-Zag.
Anexo
La pobladora, 1972
164 x 199,5 cm
Colección Privada