Introducción A Los Servicios Sociales
Introducción A Los Servicios Sociales
Introducción A Los Servicios Sociales
Utilizamos según la acepción restringida, esto es, Servicios Sociales en sentido estricto,
para referidnos únicamente al sexto sistema de protección (a lo que en la anterior acepción
llaman servicios sociales personales), empleando para el conjunto de sistemas los términos
Servicios de Bienestar Social o sistemas de protección del bienestar.
Según Max Weber. “La acción social es la única realidad social. Según la acción social de
los individuos, va a estar marcada por ciertas regularidades que son el objeto de estudio de
la sociología” (1). “Es una acción donde el sentido mentado por su sujeto o sujetos está
referido a la conducta de otros, orientándose por ésta en su desarrollo” (2).
Por sentido mentado se refiere a que es la intención que tenemos al momento de llevar a
cabo una acción. En el caso de la acción social, el requisito básico es que el sujeto tenga la
intención de que su acción vaya dirigido a otras/os.
El concepto de acción social, a diferencia del hecho social, se centra en la intención de los
sujetos por lo que la acción social es una conducta construida socialmente por vía de
interacción. Cabe destacar que la acción social no implica necesariamente que haya una
respuesta por parte de los receptores de esta. Cuando hay reciprocidad, se puede hablar de
relación social.
Cohesión social y política social
Durkheim señalaba que, en la medida en que la división del trabajo es menor ––como
ocurre, por ejemplo, en las sociedades rurales–– la vinculación de los habitantes con su
comunidad es mayor, a través lo que él definió solidaridad mecánica (natural), es decir, un
tipo de relación social basada en la similitud de las condiciones de vida, en un mismo
territorio, con tradiciones, costumbres y valores compartidos. Con la división social del
trabajo, característica en la modernización, la disposición casi «natural» de solidaridad
entre los habitantes de las comunidades rurales sufre una degradación entre los
individuos que viven en las ciudades, misma que es adicionalmente profundizada por la
autonomía individualista que se desarrolla en el estilo de vida moderna, causando
que el sistema de vínculos y valores que mantenían unidas a las personas sea gravemente
debilitado.
Finalmente, la CEPAL ha adoptado un concepto interesante pero complicado de
cohesión social: Dialéctica entre mecanismos instituidos de inclusión y exclusión sociales y
las respuestas, percepciones y disposiciones de la ciudadanía frente al modo en que ellos
operan (2007:19).
Lomnitz señala que la red social se define por relaciones de intercambio recíproco, regidas
por cuatro factores que interactúan entre sí: distancia social formal, distancia física,
distancia económica y distancia psicológica (p. 142).
• La distancia social implica prescripciones culturales diferenciadas entre hermanos,
compadres, amigos, etcétera.
• La distancia física determina la continuidad y reciprocidad de los intercambios, e
inclusive ––señala la autora–– la vecindad entre individuos o familias no emparentadas
puede ser suficiente para llegar a sancionarse como un tipo de parentesco (cercanía social).
• La distancia económica, definida por la situación mutua de recursos y carencias puede
determinar el tipo (flujo, intensidad) de intercambio.
• La distancia psicológica ––llamada por Lomnitz–– confianza, es una variable subjetiva
que refleja los factores arriba definidos y que consiste en el deseo y disposición para
entablar y sostener una relación de intercambio recíproco, que implica cercanía social
y económica.
TEJIDO SOCIAL
Los referentes de sentido se expresan en prácticas culturales (símbolos, ritos, fiestas, etc.) y
en la construcción de narrativas colectivas. Sin embargo, la identidad social no es
permanente y estática, por eso la entendemos como la capacidad de construir referentes de
sentido que justifiquen la pertenencia a un colectivo y orienten la práctica de ese colectivo.
La cohesión comunitaria se puede definir como el resultado de un proceso por el cual las
sociedades construyen oportunidades, relaciones, identidades, incentivos y lazos para que
las personas alcancen su máximo potencial.
Este enfoque está integrado por ocho dimensiones interconectadas, que incluyen los
siguientes aspectos: derechos y valores democráticos; confianza y solidaridad; igualdad de
oportunidades; sentido de pertenencia y noción de futuro compartido; reconocimiento de la
diversidad; gestión y solución de conflictos; empoderamiento y
participación, y relaciones positivas entre personas, grupos, comunidades y localidades.
Beneficios de la cohesión comunitaria:
Aumenta: Disminuye:
La satisfacción con la vida • El crimen total y el violento
La confianza, solidaridad y empatía • El robo a casa-habitación y de vehículos
La participación ciudadana y las • La deserción escolar
acciones voluntarias • El riesgo de enfermedades mentales
El número de personas que • La tasa de suicidios y enfermedades
obtienen empleo satisfactorio asociadas al estrés y la depresión
El desempeño educativo • La desigualdad de oportunidades
La inversión
Se multiplica el valor de los bienes
en zonas residenciales y
comerciales
Análisis personal
El tejido social se refiere a los individuos en una sociedad y es el resultado de las relaciones
de estos. Permite crear vínculos fuertes en el interior de las familias, entre ellas y entre
asociaciones.
Se trata de grupos de personas que persiguen ideales, que de manera solidaria se unen. Por
estas relaciones obtienen beneficios más allá de la interacción, también producen y
consiguen objetivos comunes.
El tejido social puede darse en personas por parentescos sanguíneos o núcleo mutuo con
quienes que se convive todos los días. Otro de los tipos de tejido social son los
comunitarios, estos se construyen de diferentes núcleos familiares.
Es importante mantener los lazos y promover su mayor integración por el bien de la
comunidad para satisfacer necesidades desde seguridad, alimento, transporte, entre otros.
Cuando las asociaciones o los grupos de personas se unen con valores y principios bien
encaminados pueden generar grandes cosas. Un tejido social que busque el beneficio de sus
parques fomentará la comunicación y la sana relación de la sociedad.
El tejido social es un concepto operativo con una triple dimensión: descriptiva, explicativa
y prospectiva. Es decir, nos permite describir el estado del tejido social en un momento
dado (dimensión descriptiva); hacer un diagnóstico y entender sus transformaciones
(dimensión explicativa) y ofrecer pistas para trabajar en su reconstrucción o
reconfiguración (dimensión prospectiva).