Bioética y Medicina Legal PDF
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de Medicina y Cirugía
~o.a
eaición
,
BIOETICA y MEDICINA LEGAL
GrupoCTO
Editorial
Manual eTO
de Medicina y Cirugía
•
~o.a
•
• edición
•
,
BIOETICA y MEDICI NA LEGAL
Autor
Benjamín Herreros Ruiz Valdepeñas
Director de la obra
Juan José Ríos Blanco
ERRNVPHGLFRVRUJ
GrupoCTO
Ed¡tonil
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•
Ice
01. Introducción. 05. Rechazo a las actuaciones
Bases y principios de la bioética . 1 médicas y triaje . 15
1.1. ¿Qué es la bioética? 1 5.1. Rechazo a las actuaciones médicas __ 15
1.2. Principios de la bioética 1 5.2. Triaje __ 16
Bibliografía 23
IV
ERRNVPHGLFRVRUJ
ERRNVPHGLFRVRUJ
ERRNVPHGLFRVRUJ
Introducción. Bases
, y principios de la bioética
¿Qué es la bioética? Principios de la bioética (MI' 16-17, 222; MI' 12-13, 185)
El comp lejo modelo pluridisciplinar de atención a la salud actual genera Los principios de bioética se formularon a raíz de los escánda los públicos
numerosos conflictos éticos. Al tener en cue nta en la s decisiones los valo- que la investigación con seres humanos suscitó en la década de 1970. A
res de todos los actores impl icados, existen inevitab lemente d isparidad consecuenc ia de estos es cán da los, el Congreso de los Estados Unidos creó
de crite rios. Los conflictos que se generan no son meramente técn icos, una comis ión que publicó el Informe Belmont en 1978. Tras este informe
ta mbién son éticos, porque pueden entrar en conflicto los valores de las T.L Beauchamp y J.F. Ch ildress publ icaron el libro Principies of Biomedical
personas o de las instituciones implicadas. En este escenario es impor- Ethics, donde aparecen expuestos los principios que debían regir la to ma de
ta nte q ue el médico sepa considerar las cuestione s técnicas (los hechos decisiones méd icas. Son los conocidos "principios de bioetica": re speto a la
médicos) y los va lores en juego (las preferencias de los implicados, los autonomía, beneficencia, no maleficencia Vj usticia (Tabla 2).
principios, las normas, etcétera ), para poder tomar buenas decisione s. En
la actualidad, la bioética se entiende como una ética práctica o aplicada Los principios de bioética se trasladaron de la investigación a la práctica cl í-
(a la biomedicina), que intenta resolver los problemas éticos presente s en nica con la fina lidad de f undamentar éticamente las acciones, los deberes
biomedicina. y las reglas. En la práctica clínica los principios se re lacionan entre sí, co li-
sionando en ocasiones en casos concretos. Para resolver los conflictos que
La bioética tien e varios campos. Lo s más relevantes para los médicos son la plantean, es pre ciso atender a las circunstancias del caso y a las posibles
bioética clínica y la ética de la investigación, ámbitos que tienen gran rele- consecuenc ias de los cursos de acción que se propon en para resolver dichos
vancia por la importancia de los problemas que abordan. En la Tabla 1, se conflictos.
exponen algunos problemas de ética clínica.
Tabla 2
Tabla 1
Respeto activo a la libertad de elección de la persona, no sólo
Relaci6n médico-paciente Final de la vida absteniéndose de obstaculizarla, 5ino procurando que se den
• Decir la verdad • Limitación de 105 esfuerzos terapéuticos las condicione5 necesaria5 para practicarla. Para ejercerla
• Consentimiento informado • Paciente en coma/estados vegetativos plenamente, el sujeto debe conservar las facultades mentales
• Capacidad de los pacientes para tomar ~rsistentes o ~rmanentes/estado
ytiene que ejercer con libertad 5U voluntad (sin coerción
decisiones de mínima consciencia ni coac<ión externa). Se pone en práctica a través
• Rechazo a procedimientos (terapéuticos • Enfermos terminales del consentimiento informado
o diagnósticos) (cuidados paliativlM) No maleficenda No producir daños intencionadamente
• Desacuerdo mbre la deci5ión a tomar • Control del dolor
(entre profesionale5 o con los usuarios) • Eutanasia/suiddio asistido Obligación de actuar en beneficio del enfermo, ayudándole
• Rechazo del médico a 105 • Diagnóstico de muerte a promover sus legítimos intereses. Tras ser informado por
procei:limient05 (objeción de conciencia) el médico, el enfermo decide lo que es bueno para él dentro
• Inti mid ad/ co nñde nciaIidad/secreto de las p05ibles alternativas
méi:lico
• Consejo genético Distribución equitativa entre todos los miembros de la sociedad
de los recursos sanitarios, de los beneñci05 que ofrece
Inido de la vida Problemas dejustida el sistema sanitario y de las cargas precisas para mantenerlo
• Sexualidad • Distribución de recursos escasos (p. ej, impuestos)
• Anticoncep<ión • Costes sanitarios Principios de bioética de Beauchamp y Chíldress
• Métodos de reproduc<ión artiñcial • Conflictos de interés entre distinta5
• Aborto partes RECUERDA
• Uso de células madre/terapia génica • Triaje (UCI, diálisis, emergen<ias,
trasplantes...) Los principios de bioetica son: respeto a la au tonom ía, be -
neficencia, no maleficencia Vjusticia.
Problemas frecuentes de ética clinica
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BIOÉTICA y MEDICINA LEGAL
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Capac idad
y competenc ia
Tabla 3
Capacidad Competencia
Sinónimos • Capacidad de obrar • Capacidad de hecho
• Capacidad legal o de derecho • En la práctica clínica muchas veces se le denomina sencillamente 'capacidad~
pero no debe confundirse con "capacidad de obrar"
Estatus Estatus legal: si no se posee, el paciente está incapacitado legalmente Depende de si se poseen las condiciones en ese momento para tomar una decisión
concreta. Depende de su:
• Nivel de comprensión
• Nivel de razonamiento
• Capacidad para tomar una de<isión
Graduación Puei:le graduarse: Puei:le graduarse:
• Posibilidad de incapacitación pardal (según sentencia judicial) • Depende de la situación en la que se encuentra el paciente ydeltipo de decisión
• El juez detenninará eltutor para la parcela en la que el paciente que hay que tomar
está incapacitado • Mayor o menor nivel de competencia
• Existen escalas yherramientas validadas para su graduación
Diferencia entre capacidad y competencia
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Manual CTO de Medicina y Cirugía, 10. 3 edición 02. Capacidad y competencia
RECUERDA
• Si tras la valorac ión el paciente se considera competente ,/ La capacidad (capacidad de obrar) es un térm ino jurídico. No es un i-
para la decisión que hay que tomar, se le dejará decid ir. forme y admite graduaciones. Puede limitarse, parcia l o totalmente,
• Si no se le considera competente, se debe segu ir el si- en caso de incapacitación.
guiente orden:
Lo que el paciente hubiera establecido a través de un ,/ La competencia (capacidad de hecho) hace refe rencia a la aptitud psi-
testamento vital (instrucciones previas o voluntades cológica de un paciente para ejercer su autonomía personal y tomar
anticipadas) ... sus propias decisiones sanitarias. Se refi ere a una situación clínica con-
Lo que decidan sus al legados más cercanos (si es po- creta. En la práctica cl ínica es habitua l que cuando se habla de compe-
sible, tomando como base los deseos expresados por tenc ia se util ice el térm ino capacidad.
el propio enfermo), siempre que la decisión no perju -
dique los intereses del paciente . .. ,/ En med icina es habit ual enfrentarse a situaciones en las que el pa -
Si no hay al legados, el médico responsable debe to- ciente (capacitado o incapacitado legalmente) no es competente para
mar la decisión buscando lo mejor para el paciente. tom ar una decisión
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Relación clínica
El médico debe cuidar con detalle la relación con los enfermos, pues se Para comunicar a los pacientes la información, los méd icos cuentan con una
encuentran habitualment e en situación de vulnerabilidad y en asimetría herramienta: la entrevista clínica. El cometido principal de la entrevista clí-
respecto al profesional sanitario. Por ello, las habilidades de comunicación nica es comunicar al paciente toda la información clínica que requiera, tanto
son uno de los elementos esenciales en la competencia clínica del profe- para conocer su patología como para que pueda tomar las decisiones. El
sional sanit ario. El medio central de comunicación en la práctica clínica es médico no debe o lvidar que cuando habla con un paciente debe atender las
la entrevista cl ínica, a través de la cual se debe crear una buena relación necesidades que tenga de información. Es el paciente quien tiene que tomar
méd ico-pac iente. En la entrevista clínica el profesional debe aplicar tanto las decisiones sobre su salud, tomando como base la información transmi-
sus conocimientos técnicos como su humanidad, para atender lo mejor tida en la entrevista clín ica. Por otro lado, una comunicación adecuada con
posible las necesidades de información del paciente. los pacientes tiene consecuencias positivas: refuerza la confianza hacia el
médico, mejora la propia relación cl ínica y repercute positivamente en la
adherencia a las prescripciones realizadas.
RECUERDA
Información y comunicación. Una adecuada comunicación con el paciente mejora la con -
fianza de éste hacia el médico, lo que repercute positiva -
La entrevista clinica mente en su adherencia a los tratamientos.
(MIR 16-17, 217, MIR 16· 17, 223; MIR 16· 17, 224; MIR 15-16, 179;
MIR 15-16, 182; MIR 15-16, 183; MIR 15-16, 184; MIR 15· 16, 187; Si el objetivo principal de la entrevista clínica es atender la necesidad de
MIR 14-15, 133; MIR 10-11, 126-0N) información del paciente, es f undamenta l que el médico entienda sus dudas
y necesidades. Por tanto, una entrevista clínica es eficaz si: 1) el médico y el
paciente se comprenden mutuamente, y 2) si el paciente cubre las necesi-
En el ámbito de la relac ión clín ica se entiende por información cualquier dato dades que tiene de información. A continuación se exponen algunos pasos y
sobre un tema específico que perm ita a una persona adqu irir o ampliar su herram ientas para que la entrevista clínica sea eficaz:
conocim iento sobre su salud, la forma de preservarla, cu idarla, mejorarla o • En primer lugar, el médico debe conoce r cuál es el objetivo de la entre-
recuperarla. Se ha distingu ido entre información clinica, cuya responsab ilidad vista, que puede ser: obtener datos clínicos (entrevista semiológica),
corresponde a los diferentes profesionales que atiendan al paciente durante informar sobre resu ltados o prescribir (entrevista informativa y/o pres-
el proceso asistencial, o que le apliquen una técnica o procedimiento con - criptiva), intentar cambiar hábitos y actit udes (entrevista motivaciona l)
creto {méd ico, psicología, o enfermería, entre otros} e información médica, o puede suceder que el contenido de ésta ya esté determinado, por
concepto menos amplio y que se integra en la historia clínica méd ica. ejemplo, realizar una cura (entrevista operativa).
• Es conveniente crear, en la med ida de lo posible, un ambiente de con -
los pacientes tienen derecho a conocer toda la información disponible res- fianza y cercanía pa ra que la com u n icación sea fluida. El méd ico, a u nque
pecto a cualquier actuación en el ámbito de su salud y será el médico respon- debe ser quien conduzca la entrevista, tiene que dejar que el paciente
sable de él quien garantice el cumplimiento de dicho derecho. los médicos, se exprese con soltura y libertad. En este sentido, se debe cuidar tanto
por tanto, están obligados a dar al paciente toda la información relevante el lenguaje verba l como el no verbal.
sobre su problema cl ínico. • La información debe ser verídica. Esto facilita la comunicación y una
relación de mutua confianza, sin olvidar que la información clín ica per-
la información clínica forma rá parte de todas las actuaciones asistenciales, tenece al paciente y es un derecho suyo disponer de el la.
será verdadera, se comun icará al paciente de forma comprensible y ade- • la comunicación del médico con el enfermo y con la fam ilia debe
cuada a sus necesidades y le ayudará a tomar decisiones de acuerdo con su basarse en la escucha activa . No debe haber actitudes pasivas o indi-
propia y libre voluntad. ferentes.
• la información se debe adaptar a las características del paciente, evi -
la información, como regla general, se proporcionará verbalmente, dejando tando un lenguaje excesivamente técnico. Una re lación clínica basada
consta ncia en la historia cI ín ica de la fi nal idad y la natura leza de cada interven- en una información verídica y adaptada faci lita el establecimiento de
ción. De este modo, el paciente informado puede ejercer los derechos que una relación de mutua confianza.
tiene reconocidos como usuario de cualquier servicio sanitario. Finalmente, • El médico debe mostrar al enfermo que lo comprende (empatia), sin
señalar que existe el derecho a que se respete la voluntad del paciente de que esto le impida ser firme respecto a lo que quiere comunicar y mos-
no ser informado. trarse a la vez seguro (asertividad).
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Manual CTO de Medicina y Cirugía, 10. 3 edición 0 3. Relación clínica
Tabla 6
Artfculo 9 de la l.ey41n002 de Autonomla del paciente
(limites del consentimiento Infonnado y consentimiento por representaci6n)
1. La renuncia del paciente a recibir información está limitada por el interés de la salud del propio paciente, de terceros, de la colectividad y por las exigencias terapéuticas del caso. Cuando
el paciente manifieste expresamente su deseo de no ser informado, se respeta rá su volun tad haciendo constar su renuncia documentalmente, sin perjuicio de la obtención
de su consentimiento previo para la intervención
2. Los facultativos podrán llevar a cabo las intervenciones dínicas indispensables en favor de la salud del paciente, sin necesidad de contar con su consentimiento:
a) Cuando existe riesgo para la salud pública a causa de razones sanitarias
b) Cuando existe riesgo inmediato grave para la integridad física o psíquica del enfermo y no es posible conseguir su autorización. Si las circunstancias lo penniten, se consultará a sus
familiares o a las personas vinculadas
3. Se otorgará el consentimiento por representación:
a) Cuando el paciente no sea capaz de tomar decisiones, a criterio del médico responsable de la asistencia. Si el paciente carece de representante legal, el consentimiento lo prestarán
las personas vinculadas
b) Cuando el paciente tenga la capacidad mO<lificada judicialmente
c) Cuando el paciente menor de edad no sea capaz, intelectual ni emocionalmente, de comprender el alcance de la intervención. El consentimiento lo dará el representante legal,
después de haber escuchado su opinión
4. Cuando se trate de menores emancipados o mayores de 16 años. No obstante, cuando se trate de una actuación de grave riesgo para la vida osalud del menor, según el criterio
del facultativo, el consentimiento lo prestará el representante legal del menor, una vez oída y tenida en cuenta la opinión del mismo
5. La práctica de ensayos clínicos yla práctica de técnicas de reproducción humana asistida se rigen por lo estable<ido con carácter general sobre la mayoría de edad. Para la interrupción
vol untaria del embarazo de menores de edad, o personas con capacidad modificada judicialmente, será preciso, además de su manifestación de voluntad, el consentimiento expreso
de sus representantes legales. En casos de esterilización se requiere autorización judicial, no estando facultado para dar el consentimiento el representante legal
6. En los casos en los que el consentimiento haya de otorgarlo el representante legal o las personas vinculadas, la decisión deberá adoptarse atendiendo siempre al mayor beneficio
para la vida o salud del paciente. Aquellas de<isiones que sean contrarias a dichos intereses deberán ponerse en conocimiento de la autoridad judicial, directamente o a través
del Ministerio Fiscal, para que adopte la resolución correspondiente, salvo que, por razones de urgencia, no fuera posible recabar la autorización judicial, en cuyo caso los profesionales
sanitarios adoptarán las medidas ne<esarias en salvag uarda de la vida o salud del paciente, amparados por las causas de justificación de cumplimiento de un deber y de estado
de necesidad
Límites del consentimiento informado y consentimiento por representación (Articulo 9 de la Ley 41/2002 de Autonomia del paciente)
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BIOÉTICA y MEDICINA LEGAL
y, en genera l, aplicación de procedim ientos que suponen riesgos o incon- El derecho persona l a la intimidad conforma una de las bases sobre las que
ven ientes de notoria y previsible repercusión negativa sobre la salud de l se asientan los demás de rechos ind ividuales: derecho a la libertad de expre-
paciente. sión, a la autonomía, entre otros.
RECUERDA Confidencialidad
Como reg la general, el consentimiento informado es ver-
bal. En ocasiones, para mejorar la calidad de la informa- En la relación clínica, el paci ente expone al profesional voluntariamente su
ción dada a l paciente, además de la información verba l, se intimidad, en una situación de particular vu lnerabil idad y con la necesidad
util iza un formulario escrito de consentimiento informado. de establecer una relación de confianza. La confianza no es sólo una carac-
terística deseable de la práctica clínica, sino que es un requisito para esta -
RECUERDA blecer una apropiada relación clínica. Esta relación de asimetría genera
Se suministrará consentimiento por escrito en int erven - una obligación de confidencialidad en el profesiona l, entendida como la
ción quirúrgica, procedim ientos diagnósticos y terapéu - asunción de la privacidad de la información personal entregada por e l
ticos invasores y, en general, aplicación de proced imien - paciente, y la obligación de su protección frente a pos ible divulgación.
tos que suponen riesgos o inconvenient es de notoria V
previsible repercusión negativa sobre la salud del pa -
cient e.
Secreto profesional
El secreto profesional hace referenci a al comprom iso de no reve lar la informa·
ción obtenida en la relación clínica. El secreto es el medio a través del cual el
médico mantiene la reserva y la confidencialidad de todo aquello que el paciente
le haya revelado y confiado, y que tenga relac ión con la salud y la intimidad. Así,
Confidencialidad y secreto médico el derecho del enfermo a la intimidad genera la obligación de confidencialidad
en el profesiona l sanitario, mantenida baJo la form a de secreto médico.
Intimidad
,/ MIR 16·17, 217, 218, 221, 223, 224
La intimidad se define como aquel espacio reservado de la realidad ,/ MIR 15·16, 179, 181, 182, 183, 184, 187
PREGUNTAS . ,/ MIR 14·15, 133
física, ps íquica, espiritua l y socia l en que se protege lo más valioso que
se tiene; aquello que se quiere guardar para uno mismo y aquello que MIR ,/ MIR 1()"11, 125· 0N, 126· 0N
uno elija.
Ideasclave
,/ Para una adecuada comun icación con los pacientes es conveniente ,/ Si hay que dar una ma la noticia, la información deberá graduarse.
cre ar un ambiente de confianza, cu idando tanto el lenguaje verba l como
el no verbal. ,/ Tras informar al paciente, el profesional debe verificar que éste ha com·
prend ido correctamente la información.
,/ La comunicación del médico con el enfermo V con la familia debe basar-
se en la escucha activa y la información se debe adaptar a las caracterís- ,/ Es importante m antener ciertos lím ites profesiona les con los pacientes,
ticas del paciente. evitando que la relación profesional se convierta en una relación íntima,
afectiva o de mero amiguismo. Se debe procurar alcanzar un equilibrio
,/ El médico debe mostrar al enfermo empatía Vasertividad. Ante situaciones que facilite una adecuada relac ión de confi anza.
graves V complejas se ha de mostrar especialmente la empatía y además
compasión. Tanto el enfermo como la familia quieren sentirse comprend i· ,/ El consentimiento informado es el act o de elección libre y sin coacción
dos y que se van a tener en cuenta sus deseos en la toma de decisiones. realizado por una persona dotada de capacidad V bien informada.
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Problemas étic os
en el final de la vida
Tema muyam jllio de impoltaocia med ia. Se dclle conocer bien los conceptos
de limitaciónde los esfuerzos terapéuticos, obstinatión profesional, qué son
las instrucciones previas o vol untades anticipadas y, sobre todo (posiblemenll'
lo más importa nte), qué so n los cuidad05 paliatil'OS, cuándo se ap lic.l ny
espeaalmente el concepto e indicación de la sedación paliativa. La ~a lúratión
de la jIIuripatología, de la fragilidad yde la terminalidad es un tema complejO
sobre el que ha habido >610dos pregu ntls, pero se puede pregunta ren los
próximos arIos.
dos para el obj etivo perseguido con el enfermo (curar, mejorar o aliviar),
en un pacient e con mal pronóstico vital y/o con mala ca lidad de vida. Por
Conceptos fundamentales t anto, la obstinación profesional llevaría a la prolongación exagerada y
con medios artificiales del sufrimiento, la agonía o del p ro ceso de mue rte
en el final de la vida 1M" 15-16, 186' del paciente. En cierta medida, lo opuesto a la LET.
RECUERDA
Limitación de los esfuerzos terapéuticos La obstinación profesional es el intento de prolongar la vida
con medios (diagnósticos o terapéuticos) desproporciona-
La limitación de los esfuer zos terapéuti cos o LET (llamada en ocasiones dos para el objetivo perseguido con el enfermo (curar, me-
adecuación de medidas terapéuticas, y en cu idados intensivos limitación jorar o aliviar), en un paciente con mal pronóstico v ita l y/o
con mala calidad de vida.
del soporte vital) consiste en no ap licar medidas desproporcionadas para
la fin a lidad terapéutica que se plantea (fundamenta lmente curar, mejo-
rar o aliviar) en un pacient e con mal pronóstico vital vIo con mala cal idad Futilidad
de vida.
El término fútil (futil idad) califica a los tratamientos o medidas incapaces de
Se entiende por medida desproporcionada aquella con un balance inade- producir los efectos fisiológicos o terapéuticos deseados.
cuado entre los costes-cargas y los beneficios para e l enfe rmo. Una med ida
desproporcionada no ofrecería un beneficio re levante al paciente y le pro- En el contexto del fina l de la vida, las medidas fútiles son inapropiadas y
duciría un daño o carga Nproporcionalmente" superior. Con la LET se pre- no deberían ser administra das. No se debe hablar de futilidad para los tra-
tende que la medicina no produzca más daño que ben eficio, lo que estaría tam ientos que son eficaces pero que pueden resultar inapropiados en un
en contra del objetivo principal de la medicina. El término LET, aunque es el enfermo termin al, donde el posible beneficio resulta inverosím il o dema-
más reconocido, no es del todo apropiado, porque la "limitación" también siado pequeño como para justifica r su uso.
abarca proced imientos diagnósticos, no sólo terapéuticos. En ocasiones, se
ha asociado también al concepto de limitación de los esfuerzos terapéuticos Se debe d iferenciar futilid ad de inutilidad, que se produciría cuando una
la no aplicación de "medidas extraordinar ias", pero este término (ordinariol medida está cor re ctamente aplicad a pero no está teniendo efecto.
extraordinario) es poco concreto y ambiguo; se ha propuesto como med ida
extraordinaria aqué lla escasa, poco disponible, de elevado coste, invasiva, Eutanasia
de alto riesgo o que requiera una tecno logía compleja. El hecho de ser
extraordinaria no aclara si la med ida se debe limitar. La LET estará ind icada La eutanasia es la acción dirigida d irectamente a termin ar con la vida del
si dicha medida es desproporcionada (si produce más daño que ben eficio), paciente a petic ión de éste y re alizada por un méd ico. Así, las características
no porque sea una técn ica invasiva o excepcion al. de la eutanasia son:
• Activa.
RECUERDA • Directa.
La LE T cons iste en no aplicar medidas desproporcionadas • Voluntar ia.
para la fina lidad terapéutica que se plantea en un paciente • M édica.
con mal pronóstico vital y/o con ma la calidad de vida. Una
medida desproporcionada no ofrecería un beneficio re le- Deben desterrarse expresiones como "eutanasia pasiva", "eutanasia indi-
vante al paciente y le produciría un daño o carga "propor-
recta" o "eutanasia involuntaria". La eut an asia es lega l en los Países Bajos y
ciona lmente" superior.
Bélgica. En el suicidio asistido alguien proporciona al paciente la información,
la prescripción (receta), o directamente el fármaco que éste utilizará para
Obstinación profesional acabar con su vid a. En el suicidio médicamente asistido es un méd ico quien
suministra la información y el fármaco al paciente, y es legal en los Pa íses
La obstinación profesional (sinónimos: distanasia, ensañamiento terapéu- Bajos, Bélgica, Suiza y en diferentes estados de Estados Unidos, como Ore-
tico, encornizamiento terapéutico) es e l intento de prolonga r la vida de un gon, Vermont, Washington o Hawa ii. La eutanasia y el suicidio asistido no son
paciente mediante medios (diagnósticos o terapéuticos) desproporciona- legales en España.
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BIOÉTICA y MEDICINA LEGAL
El estado de mínima conciencia es una situación clínica similar al estado vege- Cuando un paciente cumple los criterios de muerte encefálica, se considera
tativo, pero existe preservación parcial de la conciencia, que queda reduc ida lega lmente muerto, el soporte vital puede ser retirado y puede ser elegido
drásticamente. para donar órganos.
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Manual CTO de Medicina y Cirugía, 10. 3 edición 04. Problemas éticos en el final de la vida
La pluripatología implica una elevada afectación clínica (enfermedades cró- como el BISEP, CIRS, ICED, KAP LAN o LEVINE. El índice de Charlson m od i-
nicas con deterioro progresivo) y alta demanda sanit aria (por la dificultad de fica do continúa siendo el de referencia, a pesar de sus limit aciones
su manejo y por la atención de las agudizaciones de sus procesos). En estos (Tabla 8).
enfermos se produce una pérd ida progresiva de la capacidad funcional, lo
que repercu te en su esfera afectiva y socia l. Fina lmente, se produce en ellos Tabla 8
una elevada f rag ilidad cl ínica. Edad del enfenno
Infarto de miGcardio
En la Tabla 7 se incluyen los criterios diagnósticos, con la limitación de que
d icha cla sificación no aborda procesos como el paciente t rasplantado, en Insuficiencia cardíaca congestiva
d iálisis o con SIDA. Enfennedad vascular periférica
Tabla 7 Enfennedad cerebrovascular
Padentes que sufren enfennedades oonlcas Demencia
CategGrfa
Induldas en dGS GmAs de las siguientes categGrfas dlnlcas
Enfennedad pulmonar crónica
A • Insuficiencia cardíaca que en situación de estabilidad clínica haya
estadG en grado 11 de la NYHA (ligera limitación de la actividad física. Patología del tejidG CGnectivG
La actividad física habitual le produce disnea, angina, cansancio Enfennedad ulcerosa
o palpitaciones)
• Cardiopatía isquémica Patología hepática ligera
G • Anemia crónica por pérdidas digestivas o hemopatía adquirida gica del organismo (un descenso paulatino de la función de los órganos y
no subsidiaria de tratamientG curativo que presente Hb < 10 mg/dl sistemas), con pérdida de la re sistencia, aumento del r iesgo de incapacidad y
en 2 detenninacionesseparadas más de 3 meses mayor vulne rab ilidad. La f ragilidad es un estado previo a la discapacidad, por
• Neoplasia sólida Ghematológica activa no subsidiaria de tratamiento lo que es fun da mental detectarla, para que se pueda abordar con la fina lidad
CGn intención curativa de retrasar y evitar posibles eventos adversos, como caídas u hospital izacio-
nes. La fragi lidad es mucho más habitual entre pacientes ancianos, donde la
H • Enfennedad osteoarticular crónica que provoque por sí misma
ma lnutrición y la sarcopenia con dicionan el estatus de enfermo frágil.
una limitación para las actividades básicas de la vida diaria
(índice de Barthel inferior a 60)
La fragil idad asocia muchos aspectos por lo que, aunque se han desarro llado
Criterios de pluripatología (lnouye SK y cols., 2003) algunas escalas para su valoración (Tabla 91, debe hacerse deten idamente de
acuerdo a las principales esferas asociada s (Tabla lO). En dicha valoración,
Existen diferentes escalas e índices pronósticos para valorar la comor- a su vez, existen índ ices y esca las que evalúan aspectos concretos asociados
bilidad, más centrados, por lo general, en las enfermedades que en e l a la frag ilidad : el estado nutricional, la dependencia, el estado cognitivo, la
paciente. El más conocido es e l índice de Cha rl son, pero existen otros comorbilidad, entre otros.
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BIOÉTICA y MEDICINA LEGAL
Tabla 11
Enfennedad tennlnal oncol6g1ca
Aquélla en la que se ha desestimado tratamiento oncológico activo
Enfennedad tenninal nooncológica
• Cardiopatía: IC a pesar de tratamiento optimizado, dase IV, FE < 20%
• Neumopatía: FEV1 < 30%, CPC o IC derecha, peOI > SO, pOI < SO con Deo, frecuencia cardíaca 100 Ipm en reposo
• Enfennedad renal: creatinina > 8, o aclaramiento < 10 mI/m in, sin indicación de tratamiento sustitutivo
• Enfennedad hepática: Child C
• Enfennedades neurodegenerativas
• Demencia: FAST 7c + DABVD + 1 de: múltiples UPP grado III-IV, ITU, sepsis, broncoaspiraciones, fiebre recurrente, malnutlición, negativa a la ingesta o nutri<ión artificial
· OABVD: dependiente para todas las actividades básicas de la vida dia ria
" UPP: úlcera por presión
Principales causas de enfermedad terminal
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Manual CTO de Medicina y Cirugía, 10. 3 edición 04. Problemas éticos en el final de la vida
instaurarla. Sin embargo, ésta es una discusión abierta, porque el paciente que
se enfrenta a la retirada de una medida no es cl ínicamente equiparable a aquel
en quien se plantea no iniciar la medida. Además de las diferencias clínicas, hay
diferencias en la visión del propio paciente y en la de los allegados. Por todo
ello, lo fundamental es estudiar cada caso ind ividualmente. Instrucciones previas
Para rea lizar una LET es preciso contar con criterios que conside ren los fac- o voluntades anticipadas 1M'. 10-11, 121-0N)
tores más importantes del caso sobre los que hay que d iscutir racionalmente
(Tabla 13).
Las instrucciones previas (llamadas t ambién testamento vital, directivas
Los pasos para tomar una decisión de LET se dividen en tres fases: anticipadas y voluntades anticipadas) son declaraciones escritas realizadas
1. Eva luar el caso con detenimiento, donde la opinión del paciente, su gra- cuando una persona es competente, con el objeto de guiar la toma de deci-
vedad y la calidad de v ida (previa y fut ura) son fundamentales. siones sobre la asistencia sanitaria cuando el declarante pierda la capacidad
2. Los factores del primer paso se deben evaluar en una deli beración partici- de decid ir.
pativa que permita aclarar el objetivo terapéutico con el enfermo. Se trata
de decidir si éste es candidato a LET o si es de máximo esfuerzo terapéu- Estos documentos expresan la vo luntad de l paciente acerca de los tra -
tico. Es posible encontrarse, por tanto, con dos tipos de situaciones: tamientos o medidas que se qu ieren o no recibir, ayudando a los médi-
a) Aquél las en las que se pretende un máximo esf uerzo terapéu- cos y a los allegados de l paciente a tomar decisiones en situaciones de
tico. Debido a las características clínicas, sociales o persona les del incertidumbre. Por medio de las instrucciones previas se pretende situar
paciente se intenta uti lizar todo el potencial diagnóstico o tera- al paciente en e l centro de las decisiones sobre su atención san itaria. Con
péutico, por entenderse que existe una probabil idad razonab le de el las se intenta respetar sus valores y preferencias y evitar med idas des-
alcanzar con ello un beneficio terapéutico. proporcionadas, lo que también disminuye gastos sanitarios innecesarios
b) Aquél las donde se persigue la LET(debido al proceso patológico o a en el fina l de la vida.
la situación clínica se restringen determinados proced imientos que
pueden resultar más dañinos que beneficiosos). En estas segundas Las decisiones inclu idas en los documentos de instrucciones previas son vin-
situaciones es en las que se debe estar vigilante de no ser Nobstina- cu lantes, y pueden incluir tanto med idas positivas (qué hacer o qué medi-
dos profesionalmenteN. das llevar a cabo, por ejemplo, pautar tratam iento paliativo) como negativas
Tras la deliberación, se debe comunicar la decisión y se debe reg is- (qué no se debe hacer, por ejemplo, mantener la vida artificialmente y, por
trar en la historia clínica. tanto, retirar el soporte vita l).
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ERRNVPHGLFRVRUJ
BIOÉTICA y MEDICINA LEGAL
Las med idas incluidas deben est ar dentro de la buena práctica clínica (no de últimos días), que se aplica cuando hay sufrimiento y la muerte se prevé
pueden inclu ir, por ejemplo, la solicit ud de un tratamiento no indicado), por muy próxima y en la que el fallecimiento debe atribuirse a la consecuencia
lo que dichos documentos deber ser supervisados por profesionales sanita- inexorable de la evolución de la enfermedad y de sus complicaciones, no de
rios para garantizar la ausencia de malas prácticas. la sedación. Síntoma refractario es aquel que no puede ser adecuadamente
controlado con los tratamientos dispon ibles, aplicados por médicos exper-
La forma de gestión y la puesta en práctica de las instrucciones previas es tos, en un plazo de tiempo razonab le. En estos casos el al ivio de l sufrimiento
generalmente comp leja, y varía entre los diferentes países V regiones. En del enfermo requiere la sedación paliativa.
a lgunos lugares hay registros para poder realizarlas, en otros se llevan a cabo
ante notario o ante testigos independientes. Antes de iniciar la sedación se recom ienda, si las circunstancias lo perm iten,
la revis ión del caso por un equ ipo multidisciplinar experto (incluyendo uni-
RECUERDA dad del dolor, psiquiatría ... ) para asegurar que no hay otra alternativa eficaz.
Las medidas incluidas en las vo luntades anticipadas deben En este contexto, e l trat amiento "intensivo" del do lor y de otros síntomas
estar dentro de la buena práctica cl ínica. Dichos documen- insoportables al final de la vida es aceptable ética y legalmente, incluso si
tos deben estar supervisados por profesiona les sanitarios, la muerte se acelera, siempre que la intención de la acción (administración
garantizando la ausencia de malas prácticas.
de fármacos sedantes) sea el aliv io del dolor y no causar d irectamente la
muerte. En esto consiste el principio del doble efecto, que marca la diferenc ia
entre la sedación paliativa, donde la muerte aparece como un efecto cola-
teral, y la eutanasia, donde la muerte es el objetivo d irectamente buscado.
Cuidados paliativos. Sedación paliativa Ante una petición de eutanasia o su icidio asistido es fundamental escuchar
(MIR 15-16, 185i MIR 13-14, 163-0N) a l paciente, evitando adoptar un posicionamiento moral Q priori, y tratando
de entender la magnitud de su sufrimiento. A continuación, hay que rev isar
los cuidados paliativos recibidos y el grado de control de los síntomas físicos
Los cuidados paliativos son aquel los cuidados y atenciones destinados a y psíquicos. Además, se tiene que valorar la situación familiar y los posibles
cubrir las necesidades de los pacientes que se encuentran en la fase terminal problemas sociales o económicos. Finalmente, puede ser conveniente con-
de su enfermedad. En este contexto, el objetivo terapéutico debe orientarse sultar el caso con un experto en cu idados pa liativos, psicólogo, trabajador
a mejorar la calidad de vida del enfermo, proporcionando un "cu idado total" social, as istente espiritua l o con un comité de ética asistenc ial.
que, además del control de los síntomas, incluya las esferas psicológica, social
y espirit ual de l paciente. Para e llo, es ind ispensable el trabajo en equipo de RECUERDA
diferentes profesiona les (médico, enfermería, psicólogo, trabajador social, La sedación paliativa es un último recurso en pacientes te rmi-
as istente espiritual) bien coordinados y capaces de prestar asistencia, tanto nales para al iviar síntomas intensos y refractarios al tratamien-
en el hospital como en el domicil io del paciente. to específico. Consiste en la admin istración de med icamentos
sedantes con la finalidad de disminuir e l nivel de consciencia
Por otro lado, la medicina paliativa debería "cuidar al cuidador" y servir de hasta donde sea necesario para evitar e l sufrimiento del pa-
soporte a la fam ilia del paciente. ciente. En este contexto, e l tratam iento "intensivo" del dolor y
de otros síntomas insoportab les al fina l de la vida es aceptable
ética y lega lmente, incluso si la muerte se acelera, siempre que
Finalmente, los cu idados paliativos han de extenderse más al lá de la muerte
la intención de la acción (adm inistración de fármacos sedan-
de l enfermo y supervisar e l "duelo", un proceso que en ciertos casos puede
tes) sea e l alivio del dolor y no causar directamente la muerte.
resultar muy do loroso y hasta patológico.
Ideasclave
,/ Los enfermos pluripatológicos, con e levada fragilidad y complejidad, así ,/ Una fase que hay que valorar con especia l cuidado en los enfermos ter-
como los terminales, son cada vez más hab ituales. La especial dificultad minales es la agonía. Ante ésta, es fundamenta l causar las menores mo-
y gravedad que revierten este tipo de pacientes hacen que su valora- lestias posibles y asegurar el control de síntomas.
ción, la comunicación con el los y la toma de decisiones, tenga que ser
especia lmente cu idada. ,/ Las instrucciones previas (l lamadas también testamento vital, directivas
antic ipadas y voluntades antic ipadas) son declaraciones escritas real iza-
,/ El principal objetivo con los enfermos terminales es mejorar su confort, das cuando una persona es competente, con el objeto de guiar la toma
lo que se consigue con los cuidados paliativos. de dec isiones sobre la asistencia san itaria cuando el declarante pierda
la capacidad de decidir.
,/ Las enfermedades terminales tienen etiologías muy numerosas, pudién-
dose clasificar entre las oncológicas y las no oncológicas, que son las
más frecuentes.
14
ERRNVPHGLFRVRUJ
Rechazo a las actuaciones
médicas y tri aje
5<' deben co nocer bien los criteri05 yp.lsos de aeluación ante 1'1 rechazo, porque es
sencillo de estudiar yse hil Jlltguntado en (u.¡tro oca>iones, siendo ¡x¡sible que se
siga preg untl ndo los próximos años.
Tabla 14
1. Suministrar información completa. Informar al paciente detenidamente sobre la naturaleza del proceso que presenta y las consecuencias previsibles (los pros y contras) del rechazo
a) Informar sobre posibles alternativas. Se deben bUKar las alternativas de la mayor calidad disponibles, siempre dentro de los criterios de indicación
2. Determinar si el paciente puede decidir
a) Capaddad del padente:
i) Menores emancipados omayores de 16 añol. No cabe el consentimiento por representadón. No obstante, cuando se trate de una actuación de grave riesgo para la vida o salud
del menor, según el criterio del facultativo, el consentimiento lo prestará el representante legal del menor, una vez oída y tenida en cuenta la opinión del mismo
ii) Menores no emanripadasa menares de 16 años. El enfermo no está capadtado para decidir
b) Grado de competencia del paciente. El médico responsable tiene la facu ltad de detenninar la competenda
3. Comprobar si la dedsión es libre. l adecisión del paciente debe estar libre de coacciones. Si se descubre una coacción de terceros, debe impedirse. En casos extremos se comunicará
a la autoridad judidal
4. Analizar la decisión con el paciente. Si la decisión de rechazo es libre, el médico debe indagar en las motivaciones del padente. El rechazo puede deberse a muchas razones: desconfianza
de/hada los profesionales sanitarios, en general, o del/hacia el médico concreto que le atiende, miedos a la técnica oal procedimiento, información insufidente, falta
de reflexión, cr~ncias personales, cuestiones de conciencia, grave deterioro físico y/o psíquico que genera hastío vital y lleva a rechazar medidas que prolonguen la situación . .. El médico
tiene que analizar los motivos del rechazo con el padente y valorar lacoherencia de la decisión del p.lciente con su proyecto de vida (valores, mendas, cómo ydesde cuándo las defiende)
para que reconsidere si realmente son razones de suficiente peso como para rechazar un tratamiento indicado
S. Comunicación persuasiva. Se debe argumentar y aconsejar con sinceridad, evitando actitudes profesionales pasivas y acríticas. Con la persuasión se intenta que el padente reconsidere la
negativa al tratamiento
6. Considerar la objeción de condenda. Si la negativa del paciente se mantiene ysu decisión va en contra de las creencias o convicdones íntimas del profesional, éste tiene la posibilidad de
objetar, cumpliendo las siguientes condiciones: a) la objeción tiene que ser individual, anticipada y escrita; b) se tiene que efectuar sin detrimento de la atención de calidad al padente, por
lo que se ha de garantizar que otros profesionales atiendan al p.lciente conforme a sus deseos; y c) la objeción no eximirá al profesional objetor de la atendón predsada antes y después de
la actuadón de la que objeta
7. Tomar la decisión
a) Si el paciente es capaz (16 años cumplidos o 18 años en casos de riesgo p.lra la vida o la salud), competente y libre, se debe respetar su dedsión, aun cuando esté en riesgo su vida.
Debe dejarse por escrito en la historia dínica (HC) y el padente debe finnar, si es posible, el documento de denegadón del consentimiento informado p.lra adjuntarlo a la HC
b) Si el paciente no es capaz o no es competente, la dedsión la tomará el representante legal o las personas vinculadas. No obstante, ladecisión (del representante legal o de las
personas vinculadas) deberá adoptarse atendiendo siempre al mayor beneficio p.lra la vida o salud del paciente. Aquellas decisiones que sean contrarias a dichos intereses deberán
ponerse en conocimiento de la autoridad judicial, directamente o através del Ministerio Fiscal, para que adopte la resoludón correspondiente, salvo que, por razones de urgencia, no
fuera posible recabar la autorización judidal, en cuyo caso los profesionales sanitarios adoptarán las medidas necesarias en salvaguarda de la vida o salud del paciente
8. Si se acepta el rechazo, ofrecer las alternativas disponibles. Cuando se acepta el rechazo, se deben ofrecer las alternativas de mayor calidad disponibles para que el paciente pueda
elegir, aunque éstas puedan ser de menor eficacia
Criterios y pasos de actuación ante el rechazo a tas actuaciones médicas (MIR 16-17, 219; MIR 16-17, 220; MIR 14-15, 132; MIR 11·12, 125)
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ERRNVPHGLFRVRUJ
BIOÉTICA y MEDICINA LEGAL
RECUERDA Desde una perspectiva ética, los procesos de tr iaje derivan del ámbito utilita·
El rechazo a las actuaciones méd icas es la no aceptación, r ista: el mayor bien para el m ayor número posible. Es decir, la sociedad debe
voluntaria y libre, de una intervención médica, diagnóstica o perseguir un uso racional de los recursos para poder beneficiar al m ayor
terapéutica, ind icada. número de personas. Un problema médico frecuentemente re lacionado con
los procesos de tr iaje es la djstancja social. Este término hace referencia a la
posibilidad de que las de decisiones de distribución de recursos no se amol -
den a la realidad concreta de cada caso.
Triaje RECUERDA
Los procesos de triaje se encargan de valorar y clas ificar
a los pacientes para determinar la prioridad de su atención
Los procesos de triaje (priorización) se encargan de va lorar y clasificar a los y la localización más apropiada para su tratam iento.
Ideasclave
./ El rechazo traduce la fidel idad del paciente con sus va lores, creencias o ./ Si el paciente no es capaz o no es competente, la decisión la tomará
deseos íntimos. e l rep resentant e legal o las personas vinculadas. No obstante, la de-
cisión deberá adoptarse atendiendo siempre al mayor beneficio para
./ Si el paciente es cap az (16 años cumplidos o 18 años en casos de riesgo la vida o salud del paciente. Aquellas decisiones que sean cont ra rias
para la vida o la sa lud), competente y li bre, tras informarle y persuad irle, a dichos intereses deberán ponerse en conocimiento de la autor idad
se debe respetar la decisión de rechazo, aun cuando esté en r iesgo su vida. judicial.
Debe dejarse por escrito en la historia cl ínica y el paciente debe firmar, si
es posible, el documento de denegación del consentimiento in formado.
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ERRNVPHGLFRVRUJ
,
Etica de la
Sólo se ha ¡lftguntado (hace muchos años) sobre los comités de ética pora la
inl'!'Stigación dínica. Hastl el momento nose ha ¡lftguntldo sobre el contenido
de las tablas expuestas.
con seres humanos Tanto control externo y tanta regulación en la investigación (principios
generales, normas detalladas, comités de ética), no resta importancia a
cómo debe ser el investigador, que tiene que ser también ético. La investi-
La historia de la investigación con seres humanos ha estado repleta de acti- gación la hacen finalmente profesionales que, además de conocer las nor-
vidades experimentales que no respetaban a los sujetos de investigación. mas, tienen la responsabil idad de cumplir adecuadamente con la ética de
Esto ha llevado a que se acuerden unos mín imos imprescindibles en todo la investigación.
estudio con seres humanos vaque existan una serie de controles para
intentar garantizar que dichos mínimos éticos se cumplen (Tabla 15). Este
control ético es similar en todos los campos de la investigación humana,
sea en pediatría, en psiquiatría, en medicina interna o en investigación con
enfermos críticos. Comités de ética para la investigación
El primer nivel de control ético de la investigación es el de los principios gene- el íniea (MIR 11·12, 187¡ MIR 09·10, 191)
rales. Éstos se establecen por primera vez con el Código de Núremberg, en
1947. Sin embargo, a pesar de la formu lación de declaraciones y cód igos
generales, los investigadores continuaban real izando investigaciones inacep- Existen dos tipos de comit és de ética. Los comités de ética para la asistencia
tab les, por lo que fueron apareciendo normas más detalladas en el ámbito san itaria (CEAS), que asesoran, median, apoyan y hacen recomendaciones
naciona l o territorial. sobre los aspectos y conflictos éticos de la asistencia san itaria, y los com ités
de ética para la investigación clínica (CEIC), que rev isan y autorizan los proto-
Estas normas se basan en los principios generales de la investigación, colos de investigación con seres humanos.
pero intentan ap licarlos a la real idad específica del país o de la región
mediante normas y leyes. Finalmente, para asegurar que los investiga- Los CEIC regulan la investigación con seres humanos, especialmente los
dores llevan a cabo la investigación de forma adecuada y para proteger ensayos clínicos, en las instituciones sanitarias. Se sit úan usua lmente den-
a los sujetos de investigación, se crea un último nivel de control de la tro del ámbit o hospitalario. Para realizar esta función es importante que sea
investigación, el instituciona l, representado por los comités de éHca para un grupo multidiscipl inar, en el que estén médicos, si es posible al menos
la invesHgación clínica. Sin desaparecer los otros dos nive les (principios un farmacólogo clín ico, personal de enfermería, de atención primaria, un
generales y normas detallados), y tomando como base las normas que farmacéutico, un especialista en legislación (p. ej., un abogado), un sujeto
Tabla 15
Nivel Ámbito/definidón Ejemplos
PrincipilM • Intemacionall'5 Código de Núremberg (1947), Dl'claración de Hl'lsinki (1964), Convenio de
generall's • Dedaraciones dI' organismos autorizados con car.lctl'r univl'r5a1 OViedo, Dl'claración Universal sobrl' BiGética y Derechos Humanos de la UNESCO
(intl'nto de validez para toda investigación con 5I'rl's humanos) (IIlOS)
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ERRNVPHGLFRVRUJ
BIOÉTICA y MEDICINA LEGAL
no sanitario (puede ser el abogado) y un miembro de CEAS. La acredita- Productos Sanitarios autorice la realización del ensayo cl ínico. En caso de
ción de los CEle está a cargo de la a utoridad sanitaria com petente en cada ensayos cl ínicos en los que partici pan dos o más centros ubicados en España,
comunidad autónoma, que det erminará el ámbito geográfico e institucio- se hará un ún ico dictamen con independencia de l número de CEIC implica-
nal del CEle. El CE le deberá renovar la acreditación periódicamente, con dos. Para ello, el promotor realizará una sol icitud de eva luación al CE IC que
notificación a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios act uará como comité de re fe rencia y que se re sponsabilizará de la em isión
y al centro coordinador de comités éticos de investigación clínica co rres- del dictamen único. Los informes de los demás CE IC implicados deberán ser
pondiente. tenidos en cuenta.
Los CE le deben tener procedim ientos de trabajo para la eva luación inicial de RECUERDA
los proyectos y un sistema de seguimiento de las investigacion es. Estos comi- Los CEIC regulan los ensayos clínicos en cualquiera de sus
tés evalúan la idoneidad del investigador/es, e l protocolo (revisan y auto- fases y es imprescind ible que previamente la Agencia Espa-
rizan, u obligan a modifica r, los protocolos de investigación), la protección ñola de Medicamentos y Productos Sanitarios autorice la
real ización del ensayo clínico.
de la privacidad de los sujetos implicados (si es preciso crea r una base de
datos), que el consentim iento inform ado sea inteligible (la información para
los sujetos) y la previsión de compensaciones. Los CEIC deben evaluar, además de los ensayos cl ínicos, toda investigación
con seres humanos que tenga aspectos éticos: estudios post autorización,
El investigador principal (o los colaboradores) no podrá partici par en la eva- farmacoe pidemiológicos y farmacoeconómicos, con muestras biológicas, de
luación ni en el dictamen de su propio proyecto de investigación. Ni el CEIC revisión de historias cl ínicas, observaciona les ...
ni sus miembros podrán percibir directa ni indirectamente remun eración del
promotor del estud io. En la Tabla 16 y en la Tabla 17 se exponen criterios RECUERDA
que evalúan los CEIC para em itir un dictamen.
Los CE IC deben evaluar, además de los ensayos clínicos,
toda investigación con seres humanos que tenga aspectos
Estos com ités regu lan los ensayos clínicos en cua lquiera de sus fases y es éticos.
imprescindible que, previamente, la Agencia Española de Medicamentos y
Tabla 16
Requisitos Explicadón Justificadón de valores éticos Conodmientos necesarios para evaluar
Valor social o dentífico Evaluar un tratamiento, una intervención o una teOlí a Escasez de recursos yevitar la explotación • Conocimiento científico
que mejorará la salud y el biene5tar o el conocimiento • Comprensión a nivel ciudadano
de los valores sociales
Validez científica Postular una hipótesis clara, utilizar principios ymétodos Escasez de recursos yevitar la explotación Conocimientos científicos y estadísticos
científicos aceptados, que induyen las técnicas estadísticas,
para producir datos confiable5 y válidos
Selección equitativa Que la selección de sujetos/participantes se haga cuidando Justicia distributiva • Conocimiento científico
de los sujetos de que no se seleccione a personas/poblacione5 estigmatizadas • Conocimientos éticos y legales
o vulnerable5 para las investigaciones riesgosas, mientras • Conocimiento de lacultura ylos valores
que a las más favorecidas se les ofrezca participar de la comunidad afectada
en investigadones de potencial más beneficioso
Razón riesgo/beneficio Minimizar los riesgos y daños potenciales, maximizando • No maleficencia • Conocimiento científico
favorable los ~neficios potendales con el fin de que los riesgos • Beneficencia • Comprensión a nivel ciudadano
a los sujetos/participantes sean proporcionale5 a los ~neficios de los valore5 sociales
al sujeto/participante y a la sociedad
Evaluación Evaluación del diseño del ensayo, la población sujeto propuesta • Minimizar potenciales conflictos de interés Independencia intelectual, e{Gnómica
independiente yla razón riesgolbeneficio por individuosajenos • Cumplir con el compromiso a rendir cuenta yde todo tipo de los inve5tigadores
a la investigación pública
Consentimiento Informar a los sujetos potenciales acerca del propósito Respeto a la autonomía de los sujetos • Conocimiento científico
infonnado de la investigación, sus riesgosy ~neficios potenciale5 • Conocimientos éticos y legales
ylas alternativas, de fonna que las personas comprendan esta • Comprensión a nivel ciudadano
información y puedan tomar decisiones de forma voluntaria de los valores sociales
acerca de su participación en la investigación
Respeto por los sujetos Re5peto a los sujetos, demostrado mediante: • Respeto a la autonomía de los sujetos • Conocimiento científico
inscritos 1. la posibilidad de pennitirles salirse de la inve5tigación • Beneficencia • Conocimientos éticos y legales
2. la protección de su privacidad mediante la confidencialidad • Comprensión a nivel ciudadano
3. la provisión de infonnación acerca de riesgos o beneficios de los valores sociales
descubiertos en el curso de la investigación
4. la provisión de infonnación acerca de los resultados
de la investigación clínica
S. la vigilancia continua de su bienestar
Siete requisitos para que un ensayo de investigación sea ético (Ezekiel Emanuel)
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ERRNVPHGLFRVRUJ
Manual CTO de Medicina y Cirugía, 10. 3 edición 06. Ética de la Investigación
Tabla 17
Criterios a evaluar Parámetros para evaluar los criterios
Pertinencia del ensayo clínico Tener en cuenta el conocimiento disponible
Pertinencia del diseño para obtener conclusiones fundamentadas Número adecuado de sujetos en relación con el objetivo del estudio
Criterios de selección y retirada de los sujetos del ensayo • Criterios de inclusión y de exclusión
• Selección equitativa de la muestra
Justificación de los riesgos e inconvenientes previsibles en relación con los beneficios Principio de protección de los sujetos
esperables (para los sujetos del ensayo, para otros pacientes ypara la comunidad)
Justificación del grujKI control (sea placebo o tratamiento activo) Número adecuado de sujetos en relación con el objetivo del estudio. Principio de protección
de los sujetos
Previsiones para el seguimiento del ensayo Revisión del protocolo (detalles sobre el seguimiento)
Idoneidad del investigador y de sus colaboradores Revisión de los cumculum
Idoneidad de las instalaciones Revisión del protocolo (ver su adaptabilidad al centro)
Idoneidad de la información escrita para los sujetos del ensayo • Procf'{jimiento de obtención del consentimiento informado; revisión del consentimiento
• Justificación de la investigación en personas incapaces de dar su consentimiento
infonnado
Seguro o la garantía financiera previstos para el ensayo Revisión del contrato, del protocolo y del consentimiento informado
Cantidades y. en su caso, previsiones de remuneración o compensación Revisión del contrato
para los investigadores ysujetos del ensayo
Plan previsto para el reclutamiento de los sujetos Revisión del protocolo (detalles sobre los criterios de inclusión y de exclusión)
Criterios de evaluación del CEIC para la emisión de un dictamen sobre un ensayo clinico
,/ Los comités de ética para la investigación clín ica (CEle) revisan y auto-
r izan la i con seres humanos.
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ERRNVPHGLFRVRUJ
Medicina legal
Todo paciente o usuario tiene derecho a que quede constancia, por escrito
o en el soporte técn ico más adecuado, de la información obtenida en todos
sus procesos asistencia les real izados por el servicio de salud, tanto en e l
ámbito de atención primaria como de atención especial izada. Las adm i- Violencia y maltrato (M'. 15-'6, '891
nistraciones san itarias establecerán los mecan ismos que garanticen la
autenticidad de l conten ido de la He, y cada centro archivará las historias
clínicas de sus pacientes, cualquiera que sea el soporte: papel, audiovi- La violenc ia y el maltrato son delitos tipificados en el Código Penal. Sus tres
sual, informático o de otro tipo en el que consten, de manera que queden principales vertientes en el ámbito san itario son la v iolencia de género, el
garantizadas su seguridad, su correcta conservac ión y la recuperación de ma ltrato al niño y al anciano. Hay que diferenciar entre:
la información. a) Violencia intrafamiliar o doméstica. Es una infracción penal consis-
tente en la violenc ia fís ica o psíquica ejercida bien por el hombre sobre
La He tendrá como fin principal facil itar la asistencia sanitaria, dejando cons- el hombre o bien por la mujer sobre el hombre o sobre la mujer, siem-
tanc ia de todos aquellos datos que, bajo criterio méd ico, permitan el cono- pre que, en cua lqu iera de los tres casos, hayan sido cónyuges o que
cimiento veraz y actualizado del estado de salud. Incorporará la información hayan estado ligados sentimentalmente de forma estab le aun sin convi-
que se considere trascendental para el conocim iento veraz y actua lizado del vencia. La violencia intrafamiliar o doméstica incluye también los casos
est ado de salud del paciente. de violencia contra descendientes, ascend ientes, hermanos (naturales,
del cónyuge ... ), menores o incapaces (patria potestad, tutela ... ), persona
El paciente tiene el derecho de acceso a la documentación de la He y con otra relación que esté incluida en el núcleo familiar o personas vul-
a obtener cop ia de los datos que figu ran en el la. Los centros sanitarios nerables en custod ia en centros púb licos o privados.
regularán el procedimiento que garantice la observancia de estos dere- b) Delito por violencia de género (sinón imos : v io lencia sobre la mujer,
chos. El derecho de acceso del paciente a la He puede ejercerse tamb ién mach ista o sexista). Es todo acto de v io lencia fis ica o psico lógica ejer-
por representación debidamente acreditada. Por otro lado, todo paciente, cida por el hombre sobre la mujer que haya sido su cónyuge o con la
familiar o persona vinculada a él, tendrá el derecho a recib ir un informe que haya estado ligada de forma est able, inclu idas las agresiones a la
médico del centro o servicio san itario, una vez finalizado el proceso asis- libertad sexual, las amenazas, las coacciones o la privación arbitraria de
tencial. la libertad.
En la actualidad, gran parte de las HC son electrón icas. Éstas facilitan la RECUERDA
durabilidad de la información, su claridad y transparenc ia, y además evi- Violencia intrafamil iar o doméstica: v io lencia física o psíqui-
tan muchos errores en el manejo y en el tratam iento de los pacientes (M IR ca ejercida bien por el hombre sobre el hombre, o bien por
15-16, 184). la mujer sobre el hombre o sobre la mujer, siempre que,
en cualquiera de los tres casos, hayan sido cónyuges o que
El deber de protección de datos de carácter personal de los pacientes hayan estado ligados sentimentalmente de forma estable.
deberá ser garantizado por el centro sanitario, trabaj e con HC en papel o Incluye también: casos de vio lencia contra descendientes,
ascendientes, hermanos, menores o incapaces, persona con
electrónica. Los profesiona les son también responsab les de garantizar la
otra relación que esté inclu ida en el núcleo fami liar o perso-
protección de los datos clínicos que manejan, acced iendo sólo a la infor-
nas vulnerables en custodia en centros públicos o privados.
mación de la He que sea necesaria para su tarea asistencial y cuidando
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ERRNVPHGLFRVRUJ
Manual CTO de Medicina y Cirugía, 10. 3 edición 07. Medicino legal
Violencia de género
Es un tipo de violencia especialmente regu lado por la Ley orgánica 1/2004 de Autopsia judicial y autopsia clínica
medidas de protección integral contra la violencia de género. Ante la sospe-
cha de un caso de v io lencia de género se debe avisar a la autoridad jud icial.
El forense deberá realizar las siguientes valoraciones: Haydos tipos de autopsia, la clínica y la med icolegal (o judicial). En la Tabla 18
1. Exploración y valoración de las lesiones físicas de la víctima. se pueden observar las d iferencias entre una y otra.
2. Exploración y valoración psicológico-psiquiátrica de la víctima, sol ici-
tando, si es preciso, una consult a al psiqu iatra para ayudar a determinar Autopsia clínica
si rea lmente la paciente ha sido víctima de v io lencia doméstica. Se debe
explorar si la víctima de agresión padece algún trastorno mental de tipo El certificado de defunción se tiene que realizar cuando la muerte es cierta
ansioso, si present a patología mental más severa (y si está en re lación y se conoce la causa (o se puede deducir por los antecedentes médicos),
con la agresión), el perfi l de personal idad de la víctima, su nivel de auto- siempre que no haya signos de muerte violenta. Cuando se solicita autopsia
estima, así como sus apoyos afectivos para valorarlos también de cara a clínica el certificado será em itido por el médico que la sol icit a, y para la rea li-
una adaptación futura, y cómo est á la víctima viviendo la judicial ización zación de la autopsia se necesita rá la autorización de las personas v incu ladas
de su situación. al fal lecido.
3. Exploración psicológico-psiquiátrica y valoración del agresor, evaluando
si padece patología menta l. El resu ltado de la autopsia se entrega al médico que la solicit a y al fami liar o
4. Valoración de la d inám ica en que surge la agresión. representante legal del fal lecido. Las indicaciones de la autopsia clínica son:
a) Cuando el est udio cl ínico no ha sido definitivo para caracterizar la enfer-
RECUERDA medad causante de la muerte.
Delito por v io lencia de género: es todo acto de v io lencia fí- b) Si se conoce la causa de la muerte pero existe interés científico en estu-
sica o psicológica ejercida por el hombre sobre la mujer que diar el caso.
haya sido su cónyuge o con la que haya estado ligado de c) Si se supone, por estud io cl ínico incompleto, que existen lesiones no
forma est able.
demostrables con interés social, famil iar o científico.
Síndrome del niño maltratado Al solicitar la autopsia clínica es muy importante informar adecuadamente.
Los médicos deben dirigirse al fam iliar/es o personas vinculadas con quien
Es toda acción, omisión o trato negligente, no accident al, que prive al niño han mantenido la información del proceso durante el ingreso. Se les debe
de sus derechos, su bienestar o que amenacen y/o interfieran su ordenado explicar el motivo de la realizac ión de la autopsia, la trascendencia de obte-
desarrollo fís ico, psíquico o social, cuyos autores pueden ser personas (fami- ner la información que puede aportar la autopsia (para la familia y para los
liares o no), instituciones o la propia sociedad. médicos) y se debe especificar que se real izará la mínima desfiguración posi-
ble del cadáver.
Incluye ma ltrato físico, abuso sexua l, abandono, maltrato emocional -psico-
lógico, explotación labora l, falta de cuidados básicos, incumplimiento de los Autopsia judicial o medicolegal
deberes paternales o d iscriminación.
Las bases de dicha autopsia se establecen en la Ley de enjuiciamiento cr imi-
Maltrato en el anciano na l. Las indicaciones de la autopsia medicolegal son:
a) Muertes v io lentas (homicidio, su icidio o accidente) aun cuando por la
Es todo acto u omisión sufrido por personas de 65 años o más, que vulnera la inspección exterior pueda presumirse la causa de la muerte.
integridad física, psíquica, sexual, y económica, el principio de autonomía, o b) Muertes sospechosas de crim ina lidad; se incluyen los casos de muer-
un derecho fundamenta l del individuo; que es percibido por éste o constatado tes natura les sin certificado méd ico, denuncia de ma la práctica médica,
objetivamente, con independencia de la intencionalidad y del medio donde muerte súbita, síndrome de muerte súbita del lact ante, cadáveres podri-
ocurra (familiar, comunidad, instituciones). El ma ltrato puede producirse por dos, cadáveres no identificados.
omisión, cuando no se le proporcionan los cuidados que necesita o el afecto,
la compañía, etc, que son necesarios para su bienestar integral, o por acciones La autopsia judicial la realizan los méd icos forenses o, en su caso, los que
concretas vio lentas y agresivas verba les o fís icas de variada gravedad. el juez designe. Después de la autopsia informarán del origen del falleci-
Tabla 18
CIInlca Medlcolegal
Quién ordena • Nadie • Juez
• Se nece5ita autorizacián de la fami lia • Es inde~ndiente de la autolizacián de los fam iliares
Cuándo Estudio clínico incompleto desde el punto de vista cientificodínico Muerte violenta osospechosa de criminalidad
Fin • Determinar/corroborar enfermedad ysu extensián Determinar el origen del falledmiento ysus drcunstancias y posibles consecuencias
• Investigacián clínica juridicas (tiempo, causa, etiología mei:licolegal ...)
Dánde Hospitales ycentros nacionales de patología Institutos de medicina legal
(salvo excepciones)
Quién la realiza Anatomopatálogo Dos médicos forenses (salvo urgencia/necesidad, que puede ser uno)
Tipos d e auto psia (lomado de Pi lar Pi nto)
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BIOÉTICA y MEDICINA LEGAL
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Manual CTO de Medicina y Cirugía, 10. 3 edición Bibliografía
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ISBN: 97B-84-16932-65 -B
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