Aves Poblanas
Aves Poblanas
Aves Poblanas
de Puebla
Instituciones Participantes:
Marco Antonio Pineda Maldonado/Banco Secretaria del Medio Ambiente y Servicios Publicos
de imágenes CONABIO
que las aguas habían disminuido en la Tierra. Esperó aún siete días más y
(Génesis, 8, 10-12)
Índice
Prólogo ................................................................... 8
Introducción .......................................................... 11
Historia de las observaciones realizadas
en el estado de Puebla .......................................... 16
Las aves y la vegetación de Puebla ...................... 20
Generalidades sobre las aves de Puebla ............. 24
Las aves migratorias:
un grupo sin fronteras .......................................... 26
Endemismos de aves en Puebla
una joya para el mundo ........................................ 29
Aves exóticas y urbanas:
del estado de Puebla ............................................. 32
Especies extirpadas y extintas
del estado de Puebla ............................................. 36
Órdenes de las aves de Puebla ............................. 41
Aves Terrestres 43
Tinamiformes ...................................................... 46
Galliformes ......................................................... 48
Columbiformes .................................................... 51
Cuculiformes ....................................................... 54
Apodiformes ....................................................... 57
Coraciiformes ...................................................... 61
Passeriformes ...................................................... 64
Trogoniformes ..................................................... 70
Piciformes .......................................................... 73
Aves Rapaces 75
Accipitriformes .................................................... 78
Strigiformes ........................................................ 81
Falconiformes ...................................................... 84
Aves Acuáticas 87
Anseriformes ...................................................... 90
Podicipediformes ................................................. 94
Ciconiiformes ...................................................... 97
Anexos 119
Listado de las aves del estado de Puebla .......................... 122
E
l estado de Puebla es una de las regiones más
fascinantes del planeta, pero poca gente de fue-
ra, y a veces incluso los poblanos, lo saben. Es el
hogar de una de las pirámides más impresionantes del
mundo, la Gran Pirámide de Cholula, y una de las ciu-
dades antiguas más grande de Mesoamérica, Cantona.
Cuenta con un elevado número de culturas indígenas,
y muchas comunidades en las que las lenguas autóc-
tonas son más comunes que español, pero poco se ha
escrito sobre ellos en los libros. Está a la sombra de
algunas de las montañas más altas y majestuosas de
América, incluyendo Pico de Orizaba, La Malinche,
Iztaccíhuatl, y Popocatépetl, así mismo, es el hogar de
varios grandes lagos prístinos volcánicos, como Al-
chichica y Atexcac, sin embargo, pocas personas han
oído de ellos.
Posee además la cuarta zona urbana más grande
en México, la ciudad de Puebla. La ciudad tiene un
clima casi perfecto -no demasiado caliente en el vera-
no ni demasiado frío en el invierno- con una estación
lluviosa predecible y cielos azules permanentes du-
rante la estación seca. Para muchas personas de fuera
de México, el país entero parece peligrosamente vio-
lento. Sin embargo, la ciudad de Puebla es una de las
ciudades grandes más seguras en todo el mundo.
10
Prólogo
11
Prólogo
12
Introducción
D
e acuerdo a la distribución de las regiones
fisiográficas (Paleártica, Neártica, Neotropi-
cal, Etiópica, Índica, Australasia, Oceanía y
Antártica) propuesta por Sclater y Wallace en el siglo
XIX, la biodiversidad del mundo se concentra en 12
países principalmente; México, Estados Unidos, Co-
lombia, Ecuador, Perú, Brasil, República Democráti-
ca del Congo, Madagascar, India, China, Indonesia, y
Australia. Estos países albergan del 60 al 70% de la
biodiversidad del planeta, por tanto se les llama paí-
ses mega-diversos.
De las regiones biogeográficas, la que contiene la
mayor cantidad de especies de aves es la Neotropical
que alberga 3,715 de las 9,845 calculadas por Christo-
pher Perrins en 2006. En esta región se considera que
el porcentaje de endemismo es alto, cercano al 42%
(Navarro 2003).
En México confluyen dos regiones biogeográficas,
la Neártica hacia el norte y la Neotropical hacia el sur.
Esto, aunado a su intricada topografía y diversidad
climática (Navarro y Benítez 2000), da por resulta-
do que en el país podamos encontrar al menos 1,097
especies de aves, ocupando el octavo lugar a nivel
mundial en cuanto al número de este grupo animal
se refiere, sólo superado en América por países como;
13
Introducción
14
Introducción
15
Introducción
Grafica 2 . Nº estimado 0 100 200 300 400 500 600 700 800
de especies por estado
16
Introducción
Arriba:
Cyanocitta stelleri
Centro:
Diglossa baritula
Abajo:
Euphonia elegantissima
17
Historia de las observaciones
realizadas en el estado de Puebla
L
os primeros estudios ornitológicos del estado
de Puebla datan del siglo antepasado, habiendo
sido realizadas casi su totalidad por científicos
extranjeros. No fue hasta 1987, con la fundación de la
escuela de Biología de la Benemérita Universidad Au-
tónoma de Puebla (BUAP), que una nueva generación
de científicos nacionales impulsan la observación de
aves, iniciando así con una nueva etapa para el estu-
dio de las aves de la entidad.
A manera de recapitulación se puede decir que en
1878 la Comisión Geográfico Exploradora produjo el
primer trabajo de aves del estado, donde se obtuvo un
listado de 175 especies (Ferrari-Pérez 1886). Poste-
riormente Salvin y Goldman (1879-1904) realizaron
un sobresaliente esfuerzo al respecto mismo que se
encuentra resumido en la publicación “Biologia Cen-
trali-Americana” donde registraron 92 especies para
Puebla, todas ellas provenientes de tan sólo 43 locali-
dades en el estado. Sutton y Burleigh (1942) publica-
ron una lista referida a la expedición que realizaron
en 1939 en el Distrito Federal, Estado de México y
Puebla. En esta expedición se registraron 25 especies
para la entidad poblana. Miller y colaboradores en
1957 condujeron una revisión de la riqueza ornitoló-
gica para todo el país, en el mismo año Warner y Beer
18
generaron un listado de especies para la parte norte
de la entidad, incluyéndose en éste 23 nuevos hallaz-
gos. Para este momento, el registro de aves del estado
de Puebla contaba ya con poco más de 250 especies.
En 1993 Camacho y sus colaboradores enlistaron
255 especies para Puebla, incrementando así el regis-
tro de aves de la entidad. Sin embargo, entre 1993 y
1994 Octavio Rojas, al realizar el primer enlistado
formal técnico-científico con datos y mapas de distri-
bución, así como, con datos de colecciones científicas,
registró la presencia de 481 especies (Rojas 1999),
siendo éste el número aceptado más ampliamente a
partir de esa fecha. Estos dos últimos trabajos pueden
Arriba: considerarse icónicos pues inspiraron la realización
Pachyramphus major
de una oleada de estudios por parte de diversos cien-
Abajo:
Aimophila ruficauda tíficos mexicanos.
Ya a principios del siglo XXI, Camacho y colabo-
radores (2001) reportaron 108 especies para la región
de Zapotitlán Salinas en Tehuacán. Dos años después
Arizmendi realizó otro estudio en el Valle de Tehua-
cán donde registró 82 especies. Entre 2003 y 2004 De
la Fuente, Barillas Gómez, Buzo Franco y Hernández
Santín, liderados por González Oreja, realizaron un
importante esfuerzo por caracterizar la avifauna de
los parques urbanos de la capital poblana, el cual cul-
minó en la publicación del trabajo titulado “Caracteri-
zación ecológica de la avifauna de los parques urbanos de
la ciudad de Puebla” (González 2007), donde reportan
19
39 especies. Posteriormente Navarro y colaboradores
(2004) registran 133 especies de aves para la Sierra
Norte y en el mismo año se realizó por parte de la
Universidad Nacional Autónoma de México un nuevo
listado de aves de Puebla, esfuerzo encabezado una
vez más por el maestro Octavio Rojas. En él se dieron
a conocer 490 aves para la entidad. En 2005 Mendoza
y Jiménez realizan el listado de Aves de la Reserva Es-
tatal General Lázaro Cárdenas del Rio, “Flor del Bos-
que”, obteniendo 105 especies para dicho lugar.
En 2006 Arizmendi y colaboradores publican la
guía de campo sobre las aves de la Reserva de la Bios-
fera de Tehuacán-Cuicatlán. En ella se enuncia la pre-
sencia de 145 especies para la zona. Pineda-Maldona-
do y colaboradores en 2008 reportaron 184 especies
Arriba: para la ciudad de Puebla y áreas conurbadas. Durante
Basileuterus rufifrons
Abajo: 2009 Pineda-Maldonado y colaboradores publicaron
Carduelis notata el libro “Aves del bosque de encino de la ciudad de Pue-
bla,” en donde destacan 74 especies. Al final de esa
década, en 2010, Hernández y colaboradores Publica-
ron un listado de aves recabado en la ciudad de San
Andrés Cholula. Ya en 2011, Jiménez y colaboradores,
dieron a conocer la actualización del listado de aves
presentes en el estado, donde obtuvieron 595 regis-
tros, colocando a la entidad en cuarto lugar de riqueza
ornitofaunística en México, sólo superada por Oaxaca
con 736, Veracruz con 687 y Chiapas con 647 espe-
cies.
20
A finales de 2011, Hernández y colaboradores pu-
blican la guía de campo “Aves de Cholula”, reportando
más de 65 especies para el municipio. Para inicios de
2012 Rose-Burney reportó 169 especies para la Presa
Manuel Avila Camacho “Valsequillo” y su zona de in-
fluencia. En el mismo año, Hernández y colaborado-
res realizaron el primer reporte oficial de Guacamaya
Verde (Ara militaris) para la entidad. Para mediados
de ese año Mendoza y colaboradores publicaron “Las
Aves del Municipio de Puebla” donde denotaron la pre-
sencia de 241 especies.
Al momento en que los autores terminaron de tra-
bajar en la presente publicación, el registro de aves
del estado de Puebla, incluye 599 especies.
Arriba:
Catharus occidentalis
Centro:
Chlorophonia occipitalis
Abajo:
Coereba flaveola
21
Las aves y la vegetación
de Puebla
L
a gran variedad de aves que se presentan en el
estado de Puebla se debe sin duda alguna a la
ubicación geográfica de éste, lo que resulta en
su intrincada topografía, su multiplicidad de climas y
por tanto su elevada diversidad vegetal y de ecosiste-
mas.
Según el libro “La Biodiversidad en Puebla” edita-
do por CONABIO en 2011, el estado tiene seis tipos
de vegetación natural dominante1, mientras que da-
tos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía
(INEGI), confirman la presencia de más de 16 tipos
de ecosistemas para la entidad, todos ellos con su múl-
tiples variantes donde la vegetación es fundamental.
Conocer las principales características y ubicación
de éstos ecosistemas, pero sobre todo de la flora que
les conforma, es de suma importancia para el estudio
y conocimiento de las aves, pues su relación con el es-
trato vegetal es de gran importancia en sus ciclos bio-
lógicos, es por ello que a continuación se describirán
los 6 tipos de vegetación dominantes en Puebla.
22
Mapa 1. Vegetación dominante en Puebla por zona
23
Selva caducifolia: localizada en la parte sur del
estado en una zona conocida como la Mixteca, ocu-
pa 15.7% de la superficie de Puebla. Los árboles que
le conforman alcanzan hasta 10 metros de altura y la
mayoría pierden sus hojas durante los inviernos que
suelen ser secos.
Bosque de coníferas: localizado en la Sierra Nor-
te y las montañas altas del estado. Ocupa 9.7% de la
superficie de Puebla, sus árboles son principalmente
Mapa 2. Selva caduci- variedades de pinos que alcanzan una gran altura.
folia (verde) Bosque de
coníferas (amarillo) Matorral xerófilo: localizado en la parte central y
sureste del estado, mayoritariamente en zonas áridas
y semiáridas. Ocupa 8.3% de la superficie de Puebla,
está caracterizado por vegetación arbustiva e incluye
los bosques de cactáceas columnares de la Reserva de
la Biosfera Tehuacán-Cuicatlán.
Bosque de encino: localizado a mediana altura en
las sierra en el estado incluyendo las laderas occiden-
tales de la Sierra Madre Oriental y el Eje Neovolcáni-
co, así como en la Sierra Madre del Sur. Ocupa 4.9%
de la superficie de Puebla, se constituye por especies
de Quercus, arboles por lo general bajos.
Bosque mesófilo de montaña: localizado en los
costados orientales de las serranías en el borde de la
Mapa 3. Matorral xerófilo llanura costera del Golfo de México. Ocupa 2.9% de la
(verde) Bosque de encino
superficie de Puebla, sus árboles alcanzan hasta 25m
(amarillo)
y sustentan muchas epifitas como orquídeas y brome-
lias. También es conocido como bosque de niebla y
24
bosque nuboso.
Selva perennifolia: localizada en la llanura costera
del Golfo de México en las partes noreste y sureste
del estado. Ocupa 1.48% de la superficie de Puebla,
siendo su mayoría selva mediana, aunque también es
posible encontrar relictos de selva alta.
Además de lo ya mencionado, hay otros tipos de
vegetación en el estado, aunque con menor superficie,
por ejemplo en zonas áridas, los ríos permanentes e
intermitentes sustentan vegetación riparia y bosques
Mapa 4. Bosque mesófilo
(verde) Selva perennifolio de galería; los cuerpos de agua sustentan vegetación
(amarillo)
acuática como tule y junco, en las partes más altas de
las montañas es posible encontrar pastizales natura-
les e inducidos, es de gran importancia mencionar
que Puebla posee cuatro de las más altas montañas
del país.
Aunado a lo anterior, es elemental hacer notar que
casi la mitad del estado tiene usos agrícolas, pecuarios
o forestales; y que en la mayoría de los espacios urba-
nos, como por ejemplo los parques de las ciudades o la
Presa de Valsequillo, se presentan especies no-nativas
como el caso del lirio acuático (Eichornia crassipes)
para ésta última.
Estos tipos de vegetación sustentan poblaciones de
aves, muchas de las cuales están especializadas para
la explotación de las condiciones particulares que esta
flora les ofrece.
25
Generalidades sobre
las aves de Puebla
L
as aves son uno de los grupos vertebrados mejor
conocidos del planeta; su increíble belleza ha
llamado la atención del hombre por generacio-
nes, lo que aunado a sus hábitos, mismos que permi-
ten observarles casi en cualquier hábitat, ha llevado
a la formalización de su estudio a través de la ornito-
logía, rama de la biología que se encarga de su obser-
vación, etología, fisiología y ecología. En México éste
es un campo creciente y poco a poco van apareciendo
en la escena más publicaciones de autores mexicanos.
Las aves son un grupo dominante en cuanto a nú-
mero de especies se refiere, se calcula la existencia
de aproximadamente 9,845 tipos distintos de éstas
a nivel mundial (Christopher Perrins 2006). México
por su parte, ocupa un lugar privilegiado en cuanto
a riqueza ornitológica, ya que dentro de su territorio
se han catalogado 1,097 especies. Ésto coloca al país
en el décimo primer lugar de la ornitofauna mundial.
México tiene 125 especies del tipo endémico y cua-
siendémico, lo que significa que aproximadamente el
10% de la ornitofuana nacional no está presente en
ninguna otra parte del mundo. Ello denota su impor-
tancia como centro de dispersión y origen de diversos
grupos de aves.
Para el estado de Puebla se reporta la presencia
26
de 599 especies, pertenecientes a 69 familias y 21 ór-
denes, es decir el 54% de la riqueza ornitofaunística
mexicana. De ellas 292 (48%) son especies residen-
tes, 124 (20%) migratorias invernales, 39 (7%) tran-
sitorias, y 46 (8%) son bimodales. Así mismo, en el
territorio poblano se ha reportado 52 (9%) especies
endémicas y 17 (2%) especies semindemicas o cua-
Gráfica 3. Número de órdenes siendémicas al país.
de aves en Puebla
27
Las aves migratorias:
un grupo sin fronteras
L
a migración de los animales es uno de los fenó-
menos que más han intrigado al hombre des-
de la antigüedad. Las causas que llevan a este
proceso son varias, algunas ampliamente estudiadas,
otras más aun en vías de comprenderse.
Dentro de la multitud de especies que realizan este
proceso, las aves son las que recorren mayores distan-
cias, aunque algunos invertebrados como la mariposa
monarca emprenden viajes muy impresionantes a pe-
sar de su reducido tamaño.
En las aves, la migración es un hecho que se ve es-
timulado por patrones internos y factores externos
correlacionados entre sí. En el primer caso, el siste-
ma glandular juega un papel muy importante, induce
la muda, el cambio de coloración y les prepara me-
tabólicamente para viajar largas distancias, llegando
algunas de ellas a aumentar hasta un 50% de su peso
habitual. En el segundo caso, la duración del fotope-
riodo (horas de luz y horas de obscuridad), la dispo-
nibilidad de alimento, y la temperatura ambiental ge-
neran condiciones medio ambientales que inducen a
la movilidad de las especies. (Ducks Unlimited 2008)
Aunado a lo anterior, para las aves las migracio-
nes se rigen por patrones característicos, mismos han
dado lugar a la generación de lo que hoy se conoce
28
como rutas migratorias.
En términos generales, las especies de aves con
necesidades especiales han desarrollado patrones
migratorios específicos, con rutas y sitios de abaste-
cimiento particulares. Esta información se trasmi-
te genéticamente de generación en generación. Por
ejemplo, otras aves presentan migraciones altitudina-
les (de una zona baja a una más alta o
viceversa).
En el país existen tres rutas migra-
torias. A continuación se mencionan
ubicándolas del Pacífico al Golfo de Mé-
xico: Ruta del Pacifico, Ruta del Centro,
Ruta del Atlántico, todas ellas orienta-
das de norte a sur.
Puebla se encuentra justo al medio
de la ruta migratoria conocida del Cen-
29
46 bimodales (especies en las que la mitad de su po-
blación es residente y la otra mitad migratoria), y 39
transitorias, constituyendo el 35.5% del total de las
reportadas para Puebla.
Los órdenes con mayor cantidad de especies mi-
gratorias son Paseriformes con 114 especies, Cha-
radriformes con 26 especies, Anseriformes con 13
especies, Accipitriformes con 11, Apodiformes con 9
especies, y Caprimulgiformes con 4, entre otros.
Las aves migratorias son de gran importancia para
el estado, pues su arribo es coincidente con las tempo-
Arriba:
Hirundo rustica radas de floración de una gran diversidad de especies
Abajo: vegetales y mediante su consumo ayudan a la disper-
Cardellina pusilla
sión de éstas. Además algunas otras, en especial las
que llegan en el verano, ayudan a controlar las pobla-
ciones de insectos justo en la época de más alta repro-
ducción.
Aunque aun no existen estudios contundentes que
demuestren el por qué, recientemente en Puebla, cier-
tas especies migratorias como el chipe coroninegro
(Setophaga coronata) o la golondrina común (Hirundo
rustica) han sido registradas en épocas poco usuales.
La situación debe ser estudiada con detalle ya que las
especies pueden competir por alimento y recursos ni-
dícolas, lo que en el futuro podría afectar en alguna
medida a las poblaciones residentes del estado.
30
Endemismos de aves en Puebla:
una joya para el mundo
E
ndémica significa que una especie sólo existe en
una zona. Esta zona podría ser pequeña, como
una isla, o grande como un continente. Para
este trabajo, entendiéndose como especies endémicas
a aquellas que tienen una distribución restringida al
territorio nacional, y consideradas cuasiendémicas
aquellas cuya distribución general se haya dentro del
territorio nacional pero que sobrepasa sus límites por
35,000 Km en promedio (González-García y Gómez
de Silva 2003).
México es uno de los países con mayor grado de
endemismo a nivel mundial. Se calcula que aproxi-
madamente 10% de las aves de la nación incurren en
esta categoría; de hecho, al menos 111 especies de las
registradas (Cantú et al.2011). Según Birdlife Interna-
tional, México alberga 22 áreas de endemismo de aves
(zonas con altas concentraciones de especies endémi-
cas). A manera comparativa, se puede mencionar por
ejemplo, que en los 49 estados continentales de los
Estados Unidos de América, sólo existen 15 especies
endémicas y seis áreas de endemismos de aves.
Lo anterior le ha valido a México el reconocimien-
to como uno de los centros más importantes de evo-
lución y dispersión de especies. Entre las causas más
importantes que originan que ciertos géneros y fami-
31
lias muestren un determinado grado de endemismo,
se encuentran la historia evolutiva y el aislamiento
geográfico. Así por ejemplo, existen endemismos por
relictos, es decir aquellas especies que tuvieron una
amplia distribución en el pasado pero que por con-
diciones particulares quedaron restringidas a deter-
minadas áreas. De igual manera existen endemismos
conocidos como de origen incipiente, lo que significa
que las que han surgido en zonas o regiones muy aco-
tadas pero actualmente se encuentran ampliando su
Arriba: distribución.
Campylorhynchus jocosus
Abajo:
El estado de Puebla ofrece una de las más ricas
Passerina leclancherii variedades de aves endémicas y cuasiendémicas de
la República Mexicana, registrándose la cantidad de
52 especies endémicas y 17 semiendémicas o cua-
siendémicas, entre las que cabe destacar especies de
rango muy restringido como la matraca del Balsas
(Campylorhynchos jocosus) o el mosquero del Balsas
(Xenotricus mexicanus) pertenecientes a la región de
la Cuenca del Balsas. A pesar de esta enorme riqueza
no existe ninguna especie exclusiva del estado.
Las especies endémicas son de gran importancia,
pues al estar adaptadas a condiciones medio ambien-
tales muy particulares pueden ser un buen indicador
de la calidad de un ecosistema, significando su pre-
sencia, por lo general, buen estado de conservación.
Además, son generadoras de detonación económica,
pues su especificidad ínsita a grupos de observadores
32
de aves a moverse largas distancias para encontrarlas,
lo que ocasiona derrama económica para múltiples
sectores. Por último es importante mencionar que las
especies endémicas pueden ser utilizadas como espe-
cies bandera o especies sombrilla, pues su permanen-
Arriba: cia es de sumo interés desde el punto de vista cultural
Melanerpes hypopolius
y biológico.
33
Aves exóticas y urbanas:
del estado de Puebla
L
as aves han acompañado e impactado al hombre
desde los orígenes de la civilización. Se han en-
contrado manifestaciones religiosas-artísticas
como leyendas, grabados, pinturas y penachos reali-
zados a base de plumas y otros elementos, tanto en el
viejo como en el nuevo mundo. En éstos se muestra la
fascinación por la belleza de las aves e incluso hoy en
día ellas siguen siendo motivo de múltiples formas de
expresión humana.
Sin embargo el crecimiento desmedido y no pla-
neado de las áreas urbanas, mismas que invaden bos-
ques, selvas, y cuerpos de agua, que con el tiempo son
talados y drenados para el bienestar de la comunidad
no importando los beneficios ecológicos que proveen
para otras especies ha puesto en riesgo a un gran nú-
mero de especies.
Pero entonces ¿por qué es posible observar gran-
des números de ciertas aves al interior de las ciuda-
des?
Pues bien, sucede que ciertos organismos han lo-
grado adaptarse a las urbes. Ellos constituyen a las
especies “explotadoras” de las ciudades, mientras que
otras (las especies que rehúyen de las ciudades) se ven
cada vez más reducidas en tamaños poblacionales.
En la ciudad de Puebla y sus alrededores Mendoza
34
y colaboradores en el 2012 registraron la presencia
241 especies de aves tanto residentes como migrato-
rias. Las cuales constituyen el 40% de la ornitofauna
reportada por Jiménez y colaboradores para el estado
de Puebla (599 especies), y el 22% con respecto al país
(1,096 especies). Este hecho pasa desapercibido debi-
do al acelerado ritmo de vida de las ciudades, ya que
pocas veces reparamos en darnos tiempo en observar
a nuestro alrededor.
Como es de esperarse las aves más generalistas,
como los gorriones, primaveras, tiranos, verdugos,
dominicos, y pico gruesos, son también las más abun-
dantes en las urbes. Entre las especies urbanas mejor
conocidas por los ciudadanos se encuentran la paloma
común (Columba livia), la coquita (Columbina inca), la
Abajo: urraca común (Quiscalus mexicanus), el gorrión mexi-
Pyrocephalus rubinus
Arriba:
cano (Haemorhous mexicanus,), y el gorrión inglés
Sporophila torqueola (Passer domesticus),
Pero existen otras especies comunes que pasan
desapercibidas, cabe mencionar a las rapaces diurnas
como halcones, aguilillas y gavilanes, el aguililla de
cola roja (Buteo jamaicensis), el gavilán pechirufo (Ac-
cipiter striatus), y halcón cernícalo (Falco sparverius).
De los cuales se sabe que en áreas conurbadas pueden
alimentarse de roedores, reptiles, e invertebrados,
beneficiando con su presencia pues evitan que se con-
viertan en plagas.
Los cuerpos de agua naturales y artificiales pre-
35
sentes en la ciudad dan cobijo a una gran cantidad de
especies acuáticas como garzas, zambullidores, galla-
retas, pollas de agua, patos, y chorlitos, entre otras.
Entre las más espectaculares se observan la garza mo-
rena (Ardea herodias) y la gran garza blanca (Ardea
alba), cuya envergadura es de casi dos metros y un
metro y medio respectivamente. Estas se alimentan
de una gran cantidad de vertebrados e invertebrados
acuáticos.
Muchas especies de las ciudades son introducidas
o exóticas, las cuales han pasado a formar un com-
ponente importante de la ornitofauna poblana. Entre
Arriba:
Myiopsitta monachus ellas llama la atención el gorrión inglés (Passer domes-
Abajo:
ticus) y el estornino europeo (Sturnus vulgaris), espe-
Passer domesticus
cies que fueron introducidas en América del Norte en
los años de 1850 y 1890 respectivamente. La paloma
domestica (Columba livia) fue introducida en el año de
1606. Las especies antes mencionadas son originarias
de Eurasia. Estas especies poco a poco han ampliado
sus rangos de distribución y se encuentran en franca
competencia con las especies nativas por los alimen-
tos y áreas de anidación, provocando en algunos casos
la erradicación de las mismas dentro de las ciudades.
La garza ganadera (Bubulcus ibis), originaria de África
y llego a América a finales de la década de los 50’s, es
fácilmente observable en grandes números en terre-
nos de cultivos y potreros. Ocasionalmente se obser-
van individuos de psitácidos como periquitos Monjes
36
(Myiopsitta monachus), los cuales se escapan de casas
habitación y actualmente están reproduciéndose en
los parques y jardines del estado de Puebla, sin em-
bargo el impacto de su presencia en las poblaciones
silvestres aun se desconoce.
Entre las especies domesticadas y que se hallan
principalmente en parques públicos están el ganso
chino (Anser cygnoides), el ganso egipcio (Alopochen
aegyptiacus), el faisán de collar (Phaisanus colchicus),
la perdiz del mediterráneo (Alectoris chukar), la ga-
Arriba:
llina de Guinea (Numida meleagris), y el pavorreal
Psyanocompsa parellina
(Pavo cristatus). Todas ellas son utilizadas básicamen-
te como ornato y no son incluidos dentro de nuestra
lista de aves en el estado de Puebla.
37
Especies extirpadas y extintas
del estado de Puebla
L
as actividades antropogénicas de los últimos
200 años han causado fuertes impactos en el
medio ambiente. Uno de los problemas ambien-
tales más severos se refiere a la pérdida y erradicación
de organismos. Desafortunadamente para el estado
de Puebla existen registros de especies que han sido
extirpadas, ya que no existen en su territorio e inclu-
sive se reporta una extinta.
Entre las principales causas de dicha afección se
encuentran los resultados directos e indirectos de
la perdida y fragmentación del hábitat, el comercio
ilegal, y la cacería. En particular, la destrucción y la
fragmentación del hábitat es una problemática digna
de ser analizada. Da lugar al aislamiento de zonas de
distribución de especies, creando pequeñas poblacio-
nes a partir de otras más grandes, suscitando así pro-
blemas específicos entre los que se incluyen la deriva
genética, la depresión endogámica y más. Por lo an-
terior, la fragmentación es quizás la degradación del
ambiente más evidente (Iñigo 2003).
En particular, las aves se ven afectadas de múlti-
ples formas en función de la fragmentación y pérdida
de hábitat. Se puede mencionar alteraciones en la fi-
siología de los organismos, perdida de sitios de anida-
ción (los cuales están disponibles por el número de
38
troncos y tocones), y disminución de zonas de repro-
ducción, entre otros.
En México se ha registrado hasta este momento
la pérdida de 10 especies de aves y la extirpación de
otras dos aunque el número podría ser mayor. Para
Puebla hay cuatro especies extirpadas y una extinta.
39
Nombre científico Extirpado Extinta
Orden Accipitriformes
Familia Cathartidae
Sarcoramphus papa •
Orden Columbiformes
Familia Columbidae
Ectopistes migratorius •
Orden Psitaciformes
Familia Psitacidae
Ara macao •
Orden Gruiformes
Grus canadensis •
Orden Galliformes
Familia Phasianidae
Melaeagris gallopavo •
Tabla 2. Especies extirpadas y extintas en el estado de Puebla
40
Existe además un caso particular, la grulla cana-
diense (Grus canadensis). Esta gran ave de 85 cm a 1.2
metros de longitud, alcanza una envergadura cercana
a los dos metros, anida en la tundra en Canadá y Es-
tados Unidos, es migratoria invernal y ha sido regis-
trada desde los estados del norte del país hasta Jalis-
co. Peterson y Chalif (2000), la reportan en el estado
de Puebla. Ya que nunca fue común, su avistamiento
puede considerarse casual o accidental, dada esta in-
formación y aunado a la perdida de hábitat, esta espe-
cie puede entrar bien en la categoría de erradicada del
estado de Puebla, aunque los trabajos a ese respecto
aun están en desarrollo.
41
Grafica 4 . Nº especies
por orden en Puebla
42
Órdenes de las
aves de Puebla
P
ara fines prácticos y de manera que puedan
ser identificadas más fácilmente, en la presen-
te obra hemos dividido a las aves de Puebla en
cinco grandes grupos:
44
• Aves arbóreas: Son aves que presentan una fuer-
te asociación con el estrato arbóreo, típicamente
tienen patas cortas y fuertes que les permiten
desplazarse fácilmente entre las ramas. Aquí po-
demos encontrar a grupos como los Psittacifor-
mes (Raúl Alvarez del Cid, S/F).
45
2
3
1
6
4 5
8 10
7
9
12
11
14
13 15
17
Aves
16
19
20
18
21 22
23 25
24
27
26
28
29
Tinamiformes
Cr ypto
rellu
s c in a
mo
me
us
Tinamiformes
S
on aves paleognathas (mandíbulas antiguas), lo
que las diferencia de la gran mayoría de las aves.
Se les considera aves primitivas, relacionadas
con los Strutioniformes (avestruces y formas afines).
A pesar de ser aves terrestres, conservan la capaci-
dad de volar, sin embargo no lo hacen comúnmente.
Se alimentan de granos, semillas, insectos, lombrices
y orugas. La mayoría habitan en climas tropicales en
ecosistemas como selvas y bosques húmedos.
Propias de América, se distribuyen desde México
hasta Argentina, y existen 47 especies. En el país se
han registrado cuatro especies, y para el estado de
Puebla tan solo la especie Cryptorellus cinamomeus,
misma que ha sido observada en la Sierra Negra en
Tlacotepec de Porfirio Díaz.
Todas las especies anidan en el suelo. Una vez
que las hembras han puesto los huevos, abandonan el
nido, y los machos empollan y cuidan a los pollue-
los. La poligamia es común; ocasionalmente una sola
hembra pone huevos en varios nidos, por lo que su
área de territorio requiere de una a 30 hectáreas.
49
Galliformes
um ae
x montez
tony
Cyr
Galliformes
S
on un grupo de amplia distribución mundial, e
incluyen las gallinas, guajolotes, faisanes, cha-
chalacas, y codornices, entre otros. Sus tama-
ños oscilan entre los 12 cm y 1 metro. Las especies de
chachalacas de Puebla son de tamaño grande, y tienen
colores oscuros como cafe y negro. Los codornices en
Puebla también tienen plumaje café y negro, con iri-
discencias o puntos blancos. Típicamente, los machos
son un poco más grandes que las hembras. Su dieta
es variada principalmente de semillas y brotes, fru-
tos y raíces, insectos, reptiles, e incluso huevos. Son
de hábitos gregarios. Anidan en cavidades de árboles,
rocas o el suelo. Habitan todos los hábitats terrestres,
incluyendo zonas muy frías. Muchas especies de Ga-
lliformes han sido domesticados. La cacería deportiva
de codornices es muy popular en México. El faisán co-
mún (Phasianus colchicus) fue introducida en América
para la cazaría y hoy en día es muy común.
51
Galliformes
2
1 Cyrtonyx montezumae
2 Dendrortyx macroura
52
Columbiformes
C ol
um
ba
li v i
a
Columbiformes
E
n este grupo podemos encontrar a las palomas.
Son aves robustas de pequeño a mediano tama-
ño. Sus colores varían, pero la mayoría son gris,
café, o rojizo. Se alimentan de semillas, frutas e insec-
tos. Son las únicas aves capaces de tomar agua succio-
nándole directamente del medio y no retrayendo el
pescuezo para que ésta resbale por la garganta como
todas las demás. Se encuentran en muchas diferentes
tipos de hábitats terrestres.
Se distribuyen a nivel mundial en zonas templadas
y tropicales, se conocen 309 especies. En México se
registran 22 y en el estado de Puebla se encuentran
15 de estas.
A lo largo de la historia de la humanidad ha exis-
tido un estrecho vínculo entre estas especies y el ser
humano. En la antigüedad se cazaban para alimenta-
ción. Durante la segunda guerra mundial jugaron un
papel primordial, al ser utilizadas para el envío de
mensajes. Actualmente a muchas especies se les ocu-
pa para la caza cinegética.
54
Columbiformes
2 3
1 Columbina inca
2-3 Zenaida asiatica
55
Cuculiformes
a
y an
a ca
P ia y
Cuculiformes
E
n México este orden se conforma por los cu-
cos, correcaminos, y garrapateros. Son aves de
mediano a pequeño tamaño. Su plumaje posee
hiporraquis, presentan de 8 a 10 plumas rectrices,
son aves parasitas (ponen huevos en nidos de otras
especies). Las patas son de tipo zygodactylas. A las
aves de este orden se les puede encontrar en diver-
sos hábitats. Los correcaminos prefieren matorrales,
los garrapateros prefieren selvas tropicales y cultivos,
y los cucos son ampliamente distribuidos habitando
bosques templados y selvas tropicales.
Existen cuculiformes en cada
continente excepto en la An-
tártica. En el mundo son 165
especies. En México están
representadas por 12 espe-
cies y en Puebla se registran 9.
Las aves más conocidas del
grupo son los correcaminos, de
los cuales en el estado se han en-
contrado dos especies, Geococyx
Crot
oph
ag a
velox (correcaminos sureño) y sulc
iros
tris
Geococyx californianus (corre-
caminos norteño). Se calcula al-
canzan velocidades cercanas a los
30 Km/h, sin embargo existen registros
que marcan más de 45 Km/h.
57
Cuculiformes
1
1 Piaya cayana
58
A
rc
hi
lo
ch
u sc
ol
ub
ri
s
Apodiformes
Apodiformes
E
l nombre de este orden significa sin patas y es
debido a la reducción de los miembros poste-
riores en estas aves. El orden lo forman dos fa-
milias; Apodidae y Trochilidae. Esta primera incluye
a los vencejos y la última incluye a los colibríes. Los
vencejos son de tamaños pequeños mientras que los
colibríes se caracterizan por ser las aves más peque-
ñas de la actualidad. Los dos existen en casi todos los
tipos de hábitats terrestres, aunque la diversidad de
especies es mayor en zonas más tropicales. Los co-
libríes se alimentan de néctar principalmente, pero
también de áfidos y arañas pequeñas. Por sus hábitos
son importantes polinizadores. Los vencejos se ali-
mentan de insectos principalmente.
Los vencejos exis-
ten en todos los
Am
a z il
ia b continentes excepto
er yl
li a
Antártida, sin embargo, los coli-
bríes son exclusivamente de Améri-
ca. En el mundo, existen 330 especies
de Apodiformes. En Puebla hay 40.
Estos sorprendentes animales son muy
versátiles en el vuelo. Los colibries pueden
aletear a una velocidad promedio de 40 a 80 ve-
ces por segundo, habiendo algunos que lo hacen a
un ritmo de 200 veces por segundo. Se cree que un
colibrí puede visitar entre 300 y 1,000 flores en un
solo día. Los vencejos son voladores muy rápidos tam-
60
Apodiformes
2 3
4
61
Apodiformes
6 7
8 9
1 Archilochus colubris 4 Cynanthus sordidus 7 Cynanthus latirostris
2 Colibri thalassinus 5 Selasporus rufus 8 Amazilia cyanocephala
3 Eugenes fulgens 6 Hylocharis leucotis 9 Campylopterus curvipennis
62
Coraciiformes
Me
g ac
er y
le a
lc yo
n
Coraciiformes
E
ntre ellos se incluyen a los martines pescado-
res y a los momotos, siendo ambos grupos muy
interesantes. Habitan en casi todos los tipos de
vegetación, incluso los humedales.
Los martines pescadores presentan un fuerte co-
lorido y su voz es semejante a un cascabeleo, el cual
emiten durante el vuelo. Suelen anidar en huecos u
hoyos escavados en la tierra en barrancas cercanas al
agua primordialmente en lugares elevados para evitar
inundaciones. Se comen vertebrados acuáticos como
peces. Por su parte, los momotos se llaman pájaros re-
loj debido a la forma de su cola, parecida a un péndulo.
Su nido consta de un hoyo escavado generalmente por
las propias aves, en barrancas cercanas a arroyos. Se
alimentan de insectos y de pequeños reptiles. El tipo
de patas que presentan son syndactylas. Su canto es
semejante a la voz de una paloma.
Los coraciformes se distribuyen ampliamente a
través del mundo. Contemplan 218 especies. En el es-
tado de Puebla se registran 7.
El momoto corona café (Momoto mexicanus) es una
de las aves más espectaculares que se encuentra cerca
de la zona urbana de Puebla. Se ven comúnmente en la
Calera, un bosque de encino al sureste de la ciudad, en
la Sierra del Tentzo, una reserva estatal en el otro lado
de la Presa Valsequillo. Sus colores incluyen verde, ro-
jizo, y azul, entre otros.
64
Coraciiformes
2 3
4
1 Momotus momota
2 Megaceryle alcyon
3-4 Momotus mexicanus
65
Passeriformes
a
in
ar
am
u lt r
a
o m
l oc
he
p
A
Passeriformes
T
ambién conocidos como aves de percha, o sim-
plemente como pájaros, son el grupo de aves
más abundante en todo el mundo, así como el
grupo de vertebrados que cuenta con mayor número
de especies. Se ubican aquí a las golondrinas, calan-
drias, perlitas, zorzales, mirlos, ruiseñores y muchos
otros. Los paseriformes son muy variados en todas sus
características. Su alimentación va desde semillas has-
ta sangre de otras aves, y su tamaño puede ser peque-
ño como en el caso de los chipes o tan grande como un
cuervo. Existe una relación evolutiva entre ellos y la
presencia de gramíneas del mioceno hace 35 millones
de años. Existen en todos los tipos
de hábitats. Las patas son aniso-
dactylas. Los pollos son nidícolas.
Existen en cada continente excep-
to Antártica. En el mundo el número
de especies de Passeriformes superan
5,400. Se han reportado en México
s
o r iu
rat
especies.
s
Turdu
2 3
1 Calocitta formosa
2 Chondestes grammacus
3 Lanius ludovicianus
68
Passeriformes
5 6
7 8
4 Campylorhynchus gularis
5 Tachycineta albilinea
6 Chlorospingus ophthalmicus
7 Contopus pertinax
8 Corvus corax
9 Euphonia elegantissima
9
69
Passeriformes
10
11 12
13
10 Melozone kieneri
11 Thraupis abbas
12 Tachycineta bicolor
13 Cardellina pusilla
14
14 Ptilogonys cinereus
70
Passeriformes
15
16 17
15 Seiurus noveboracensis
16 Tityra semifasciata
17 Thraupis episcopus
18 Dumetella carolinensis
18
71
Trogoniformes
Trogon elegans
Trogoniformes
L
os trogones son aves muy llamativos. Sus colo-
res son brillantes combinaciones de verde, rojo,
azul, y amarillo. Por ejemplo, el trogon elegante
(Trogon elegans) es conocido como el pájaro bandera
por sus colores verde, rojo, y blanco. Los trogones son
insectívoras y frugívoras. Tienen una longitud de 20
a 35 cm, cuentan con dimorfismo sexual, y anidan
en cavidades de los arboles regularmente. Su tipo de
patas es heterodactyla.
Existen Trogoniformes en las zonas tropicales en
América, África, y Asia., Las especies registradas en
México son nueve y en el estado de Puebla cuatro.
El quetzal mesoamericano o quetzal guatemalteco
(Pharomachrus mocinno) es un trogon y es una de las
aves más bellas del mundo. Sus plumas, especialmen-
te su cola larga, se utilizaban en ropa prehispánica
ceremonial. Desafortunadamente, varias especies en
este orden están amenazadas, incluso el quetzal. Es
debida principalmente por perdida de hábitat por me-
dio de la deforestación y cambio climático.
73
Trogoniformes
2
1 Trogon elegans
2 Trogon caligatus
74
Piciformes
si nu s
pra
hu s
h y nc
la co r
Au
Piciformes
E
ste orden es por demás llamativo, en él se in-
cluyen a los tucanes pero también a aves como
los pájaros carpinteros, entre otros. Consta de
7 familias y cerca de 250 especies a nivel mundial, 32
en México y 16 en Puebla. Aunque varían ampliamen-
te entre sí poseen una característica común, que es
presentar zygodactilia, es decir, presentar dos dedos
hacia enfrente y dos hacia atrás, lo que les ayuda a
asirse a los árboles con facilidad
y firmeza. Actualmente la
pérdida de hábitat presen-
s
a r iu ta una gran amenaza para el
sv
p ic u
h yra
Sp grupo.
76
Piciformes
1 2
3
1 Melanerpes pucherani
2 Aulacorhynchus prasinus
3 Melanerpes hypopolius
4 Campephilus guatemalensis
5 Pteroglossus torquatus
4
5
77
1
2
3
5
6
10
11
Aves
Rapaces
Correspondencia numérica ver anexos pág. 154
12
14
13
15
17
16 18
Accipitriformes
tus
nc
ic i
un
teo
ra bu
Pa
Accipitriformes
L
os Accipitriformes incluyen las águilas, agui-
lillas, y zopilotes, entre otros. Anteriormente
estaba junto con los Falconiformes. Actual-
mente este orden contiene cuatro familias, todas ellas
caracterizadas por ser de gran tamaño, carnívoras,
con pico curvo o ganchudo y con sentidos amplia-
mente desarrollados (con excepción del olfato). Son
los máximos depredadores de muchas cadenas trófi-
cas lo que les dota de un papel fundamental a nivel
ecosistema. Son de tamaños medianos hasta tamaños
grandes; los cóndores, uno de los grupos de aves más
grandes en el mundo, son Accipitriformes. Habitan
todos los tipos de vegetación y climas. Dentro de este
orden se encuentra el águila real (Aquila chrysaetos),
símbolo de nuestra identidad nacional y presente en
la bandera de la República Mexicana. Entre las más
abundantes está el aguililla cola roja (Buteo jamaicen-
cis), misma que puede ser observada en casi todo el
estado de Puebla.
81
Accipitriformes
1 2
1 Buteo jamaicensis
2 Buteo plagiatus
3 Coragyps atratus
4 Accipiter cooperi
4
82
Ae
go li u
sa
cad
ic u
s
Strigiformes
Strigiformes
T
odas las rapaces nocturnas -conocidos como
búhos, tecolotes, y lechuzas -pertenecen al
orden Strigiformes. Comen animales peque-
ños, especialmente mamíferos y reptiles. Hay Strigi-
formes de todos los tamaños, desde el tamaño de go-
rriones hasta el tamaño de aguilillas. Son fácilmente
reconocibles por su pose vertical y su enorme cabeza
redondeada con su característico disco facial corona-
do regularmente con penachos y enormes ojos dirigi-
B ub
o vi
rgin dos hacia el frente lo que les permite tener una visión
i a nu
s
binocular propia de los depredadores. La cabeza gira
270 grados. Carecen de buche, los conductos auditi-
vos se disponen de forma asimétrica. Dependen
de las cavidades para criar, los pollos son nidí-
colas. Las diferentes especies se encuentran
en casi todos los hábitats terrestres, los de-
siertos, los bosques y selvas.
Existen Strigiformes en todos los con-
tinentes. Hoy en día hay 165 especies
a nivel mundial. México es un país
privilegiado pues en su territorio se
han registrado 27 especies de estos
organismos. El estado de Puebla
tiene 19 especies.
Los Strigiformes se especializan
en capturar a sus presas principal-
mente durante la noche. La presencia de
estas aves especializadas en la cacería noctur-
84
Strigiformes
2 3
1, 3 Glaucidium brasilianum
2 Bubo virginianus
85
86
Fa
l co
co
lu
m
ba
r iu
s
Falconiformes
Falconiformes
E
ste orden a las aves que son conocidas como
halcones. Es uno de los más fascinantes y lla-
mativos; su porte, gallardía, y su fuerza los ha-
cen objeto de respeto y admiración. Se caracterizan
por estructuras básicas similares como el pico gan-
chudo, fuertes patas asidoras con las cuales pueden
aprisionar a sus presas. Presentan cuatro dedos, tres
dirigidos hacia adelante y uno hacia atrás. Habitan
casi en todos los ecosistemas, y se alimentan de ani-
males – de todos tipos – principalmente de tamaño
inferior al de ellos mismos.
Existen reportadas a nivel mundial 303 especies,
en el estado de Puebla se registran 9 especies.
Juegan un papel primordial en mantener la salud
de los ecosistemas pues se alimentan de animales
enfermos o de jóvenes inexpertos. Capturan a sus
presas mediante cacería directa, consistiendo ésta en
lanzarse tras su objetivo golpeándole y aturdiéndole,
posteriormente le matan con las garras. Organismos
como el halcón peregrino (Falco peregrinus) pueden
alcanzar una velocidad de picada de 300 Km/h.
87
Falconiformes
2
1-2 Caracara cheriway
3 Falco columbarius
88
Falconiformes
3
89
3
2
4 5
7 8
9 11
10
Aves
13
12
Acuáticas
Correspondencia numérica ver anexos pág. 155
14 15
16
18
17
20
19
Anseriformes
Dendrocy
g na bico
lor
Anseriformes
S
e caracterizan por presentar un pico aplanado
y ancho con las patas palmípedas, mismas que
poseen cuatros dedos con una membrana in-
terdigital. El dedo posterior se encuentra elevado y
queda libre de la membrana. Los patos, gansos y cer-
cetas son organismos que pertenecen a este orden y
se asocian principalmente a cuerpos de agua.
Constituidos en México por una familia de aves
muy importante, la Anatidae (patos, gansos y cer-
cetas) que cuenta con 156 especies con distribución
mundial, reportándose para México aproximadamen-
te 33 especies. El estado de Puebla se reportan 21 es-
pecies.
Estos animales presentan un plumaje denso y re-
sistente al agua que les permite soportar bajas tem-
peraturas y mantener el calor corporal. También se
presentan dimorfismo sexual de grados variables
entre las especies, lo que quiere decir que las hem-
bras son diferentes a los machos en mayor o menor
magnitud. Los machos poseen los tonos más intensos,
pues las hembras necesitan pasar
desapercibidas al depender
de ellas la continuidad de la
especie y la supervivencia
de los pichones.
an a
meric
Aythya a
93
Anseriformes
2 3
4
1 Aythya affinis 4 Anas clypeata
2 Anas crecca 5 Anas diazi 7 Oxyura jamaicensis
3 Anas discors 6 Oxyura jamaicensis 8 Anas cyanoptera
94
Anseriformes
6 7
8
95
Podicipediformes
eps
dic
s po
bu
lym
di
Po
Podicipediformes
E
ste grupo está representado por una sola fami-
lia denominada Podicipodidae, y son conocidos
como somormujos o zambullidores. Todos sus
integrantes son aves de pequeño a mediano tamaño.
Presentan forma redondeada, plumajes densos y no
tienen cola. Se les asocia a ríos, lagos, y estanques.
A nivel mundial cuenta con 22 especies distribui-
das a lo largo y ancho del globo terráqueo. En México
existen seis de ellas y en el estado de Puebla se hallan
cinco.
Las patas adaptadas a la natación salen muy por
atrás del cuerpo, por lo que no pueden caminar grácil-
mente. Los dedos presentan membranas, el esqueleto
no esta pneumatizado. La danza de cortejo de estas
aves es muy elaborada y compleja, y está llena de in-
trincadas evoluciones y ritmos. Su voz es un conjunto
de sonidos roncos y ásperos. Sus nidos se construyen
en forma de plataformas flotantes realizadas con ma-
teriales vegetales, entrelazados con juncos y carrizo.
Al nacer los pequeños son nidífugos. Se zambullen
para obtener su alimento (peces e invertebrados
acuáticos) suelen sumergirse de 10 a 60 segundos.
97
Podicipediformes
1 Podylimbus podiceps
2 Podiceps nigricollis
3 Podylimbus podiceps
3
98
Ciconiiformes
a na
ric
me
riaa
cte
My
Ciconiiformes
L
os ciconiformes son conocidos como aves va-
deadoras pues se les puede ver desplazarse en
aguas poco profundas. Quizás los organismos
más emblemáticos del grupo en el estado son las ci-
güeñas. Son aves de cuello estilizado. Comúnmente
tienen un pico largo y a pesar de la longitud de sus
patas no son buenas corredoras. Por lo general son si-
lenciosas pero ocasionalmente pueden producir ron-
quidos o sonidos similares, muchas de ellas se asocian
a cuerpos de agua pero también a potrero y zonas de
cultivo.
Se distribuyen mayoritariamente en América y
Europa, aunque también en Asia y África. Están re-
presentados por varias familias. Este orden cuenta
con 60 especies a nivel mundial, en el estado de Pue-
bla se encuentra una.
Los sexos son parecidos siendo en algunos casos
los machos ligeramente más grandes que las hembras.
Se alimentan de invertebrados, insectos acuáticos y
larvas.
100
Ciconiiformes
2 3
4
101
Pelecaniformes
x
ra
ico
nyct
ax
cor
cti
Ny
Pelecaniformes
E
l orden es hoy en día controversial, tradicional-
mente incluye los pelicanos y afines, pero des-
de el 2010 se han empezado a incluir aquí tam-
bién a las garzas, ibis entre otros. Son principalmente
acuáticos y marinos; se adaptan bien a las aguas dul-
ces y saladas. Los pelecaniformes se alimentan de
peces aunque algunos consumen anfibios y pequeños
reptiles. Son aves
de mediano y
gran tamaño
que se caracterizan por presentar
cuellos pronunciados. Existen reporta-
das a nivel mundial 63 especies, en
México se reportan 18. No existe
hoy en día un consenso adecuado
para el orden, sin embargo se es-
tán siguiendo las actualizaciones
más recientes de “The American
Ornithologists’ Union”.
Ardea h
erod
ia s
103
Pelecaniformes
1 2
5
1 Ardea herodias
2 Nycticorax nycticorax
3 Nyctanassa violacea
4
4 Egretta thula
5 Egretta caerulea
104
Charadriiformes
ru m
an tilla
ula
Stern
Charadriiformes
E
ste orden incluye a los chorlitos y las gaviotas.
Se caracterizan por permanecer en los cuerpos
de agua dulce y salada. Los chorlitos habitan en
las orillas, comiendo insectos y crustáceos en los lo-
dos y las playas. Las gaviotas se ven más en vuelo y
comen peces. Representan un reto para la identifi-
cación debido a la similitud de tamaños y patrones
de coloración. Entre sus particulares está el hecho
de que al volar suelen observarse sus alas termi-
nadas en puntas muy angostas. La mayoría son de
hábitos gregarios.
Se distribuyen a nivel mundial en todas las
zonas desde las más frías hasta las más cálidas
y tropicales. Hay 350 especies de distribución
mundial descritas hoy, en el estado 33.
Se les considera buenos indicadores de
la calidad del ecosistema; muchas especies,
según estudios recientes, podrían descen-
der sus poblaciones debido a la elevación del
nivel del mar y a las inundaciones que afec-
tan sus lugares de alimentación.
1 Himantopus mexicanus
2 Actitis macularius
rus
oc ife
rad
r i us v 3 Tringa semipalmata
Ch a
4 Jacana spinosa
106
Charadriiformes
2 3
4
107
Suliformes
Anh
inga anhinga
Suliformes
E
s un orden establecido en el 2010, está com-
puesto por cuatro familias y 61 especies alrede-
dor del mundo, en el estado de Puebla se regis-
tran dos. Dentro de éste grupo se encuentran las aves
conocidas como pájaros bobos, sulas, cormoranes,
anhingas y fragatas.
Su tamaño es típicamente de entre 50 cm hasta
101 cm de altura, con alas y cola larga, algunas con
patas palmeadas, así como bolsa gular dilatable, su
pico termina en gancho o punta. Los sexos son simila-
res. En algunas familias como Phalacrocoracidae, son
excelentes buceadoras, con glándula uropigial poco
desarrollada, son monógamas. A los integrantes de la
familia Anhingidae, se les suele llamar aves serpiente
por su cuello extremadamente largo, Son aves acuáti-
cas que se alimentan de peces y anfibios.
109
Suliformes
2
1 Anhinga anhinga
2 Phalacrocorax brasilianus
110
Gruiformes
a
an
ric
a me
ica
Ful
Gruiformes
E
n este orden se incluyen las grullas y otras aves
de morfologías muy variadas aunque típica-
mente de patas largas. Existen cerca de 200 es-
pecies a nivel mundial habiéndose extinto al ya 4 fa-
milias. Para México se reportan 21 y para el estado de
Puebla 9 especies. Su tamaño es muy variado y puede
ir desde alrededor de poco más de diez centímetros
hasta casi dos metros. El orden se formó principal-
mente por exclusión pero hoy en día se desarrollan
pruebas moleculares para afinar el paren-
tesco de sus integrantes.
Fu
lic
a am
er
i
ca
n a
112
Gruiformes
1
1 Gallinula galeata
113
1
3 4
5
Aves
Arbóreas
6
7
8
9
10
A
ra
t in
ga
h olo
ch
lo ra
Psittaciformes
Psittaciformes
L
as aves de este orden son conocidas como los
pericos, loros, cotorras y guacamayas, entre
otros nombres. Habitan bosques y selvas tro-
picales. Muchos de los organismos que conforman al
orden son de brillantes colores. Todas ellas se carac-
terizan por tener un fuerte pico curvo, capaz de abrir
semillas y frutos muy duros, e incluso invertebrados.
Algunos son capaces de reproducir sonidos. Aves mo-
nógamas. Con glandula uropigial poco desarrollada.
Las patas son de tipo zigodáctilo lo que facilita el sos-
tén en la corteza de los arboles.
Este orden de aves se encuentra ampliamente ex-
tendido en las zonas tropicales de todo del mundo.
Existen aproximadamente 356 especies de las cuales
11 especies están en Puebla. Recientemente Hernán-
dez y colaboradores (2012) han descubierto una po-
blación de guacamaya verde (Ará militaris) en la Mix-
teca Poblana colindante con el Estado de Guerrero.
Han sufrido una fuerte presión y caza en función
de su uso como mascotas. La mayoría de los psitacidos
son monógamos y forman parejas de por vida, dificul-
tándose así su reproducción una vez que la pareja ha
sido desacoplada ya sea por captura o porque algún
integrante ha muerto. Desafortunadamente, muchas
veces las hembras son asesinadas para poder extraer
a los pichones.
117
Psittaciformes
3
1 Amazona albifrons
2 Myiopsitta monachus
3 Ara militaris
118
Aves
Nocturnas
Correspondencia numérica ver anexos pág. 156
Correspondencia numérica
ver anexos pág. 156
Caprimulgiformes
is
i co l l
mu s a lb
tidro
N yc
Caprimulgiformes
S
on aves conocidas como tapacaminos o cho-
tocabras. Se ven comúnmente en campos
abiertos. Son aves nocturnas y crepusculares.
Poseen vibrisas erizadas, adaptadas para la cacería
nocturna. Cazan insectos al vuelo. Son de tamaños
medianos. El plumaje de los caprimulgiformes los
hace camuflajearse entre la corteza de ciertos árboles
como los encinos, aparentando ser verdaderas pro-
yecciones de la madera. Habitan matorrales, bosques
y selvas.
Con excepción de la Antártida existen en todos
los continentes. Se sabe que hay 121 especies a nivel
mundial, para el estado de Puebla se registran 8.
La mayoría de las especies de caprimulgiformes
no construyen nidos; ponen sus huevos en el suelo o
en ramas de árboles. Los pollos son nidícolas, Algu-
nas especies sincronizan el nacimiento de sus pollos
con las fases de la luna.
121
Caprimulgiformes
2
1 Nyctibius jamaicensis
2 Nyctidromus albicollis
122
Anexos
Listado de las aves
del estado de Puebla
Nom-059
Nombre Estacio-
Orden Familia SEMARNAT
Cientifico nalidad
2010
Crypturellus
Tinamiformes Tinamidae R Pr
cinnamomeus
Dendrocygna
Anseriformes Anatidae R SC
autumnalis
Dendrocygna bicolor R SC
Anser albifrons MI SC
Chen caerulencens MI SC
Cairina moschata R P
Anas strepera MI SC
Anas americana MI SC
Anas platyrhynchos MI SC
Anas platyrhynchos
En A
diazi
Anas discors MI SC
Anas cyanoptera MI SC
Anas clypeata MI SC
Anas acuta MI SC
Anas crecca MI SC
Aythya valisineria MI SC
Aythya americana R SC
Aythya collaris MI SC
Aythya affinis MI SC
Bucephala albeola MI SC
124
Anexos
Nomonyx dominicus R A
Ortalis poliocephala En SC
Penelope
R A
purpurascens
Crax rubra R A
Dendrortyx macroura En A
Philortyx fasciatus En SC
Colinus virginianus R SC
Dactylortyx
R Pr
thoracicus
Cyrtonyx
R Pr
montezumae
Thachybaptus
Podicipediformes Podicipedidae R Pr
dominicus
Podilymbus podiceps R SC
Aechmophorus
R SC
occidentalis
Aechmophorus clarkii R SC
Pelecanus occidentalis In ( R ) SC
125
Anexos
Tigrisoma
R Pr
mexicanum
Ardea herodias MI SC
Egretta caerulea MI SC
Egretta tricolor MI SC
Bubulcus ibis In ( R ) SC
Butorides virescens R SC
Nyctanassa violacea R SC
Cochlearius
R SC
cochlearius
Cathartes aura R SC
Chondrohierax
Accipitridae R Pr
uncinatus
Elanoides forficatus T Pr
Elanus leucurus R SC
Ictinia mississipiensis T Pr
Ictinia plumbea MV Pr
Circus cyaneus MI SC
Accipiter cooperii MI Pr
Accipiter bicolor R A
Geranospiza
R A
caerulescens
126
Anexos
Buteogallus
R Pr
anthracinus
Buteogallus
R Pr
urubitinga
Parabuteo unicinctus R Pr
Pseudastur albicollis R Pr
Buteo magnirostris R SC
Buteo lineatus MI Pr
Buteo platypterus T Pr
Buteo plagiatus R SC
Buteo brachyurus R SC
Buteo swainsoni T Pr
Buteo albicaudatus R Pr
Buteo albonotatus MI y T Pr
Buteo regalis MI Pr
Spizaetus tyrannus R P
Spizaetus ornatus R P
Spizaetus
R P
melanoleucus
Gruiformes Rallidae Laterallus ruber R SC
Rallus elegans R A
Porzana carolina MI SC
Porzana flaviventer R Pr
Pardirallus maculatus R SC
Porphyrio martinicus R SC
Gallinula galeata R SC
Fulica americana R SC
Pluvialis dominica T SC
127
Anexos
Charadrius nivosus R A
Charadrius vociferus R SC
Charadrius
Aa SC
semipalmatus
Himantopus
Recurvirostridae R SC
mexicanus
Recurvirostra
RyM SC
americana
Tringa solitaria MI SC
Tringa melanoleuca MI SC
Tringa semipalmata MI SC
Tringa flavipes MI SC
Bartramia longicauda T SC
Numenius
T SC
americanus
Calidris mauri MI SC
Calidris minutilla MI SC
Calidris bairdii T SC
Calidris melanotus T SC
Calidris himantopus MI y T SC
Limnodromus
MI SC
scolopaceus
Gallinago delicata MI SC
Phalaropus tricolor T SC
Larus argentatus MI SC
Leucophaeus atricilla MI SC
Leucophaeus pipixcan T SC
128
Anexos
Sternula antillarum Aa Pr
Hydroprogne caspia MI SC
Chlidonias niger T SC
Sterna forsteri MI SC
Rynchops niger MI SC
Streptopelia decaocto In ( R ) SC
Columbina inca R SC
Columbina passerina R SC
Columbina talpacoti R SC
Claravis pretiosa R SC
Claravis mondetoura R P
Leptotila verreauxi R SC
Leptotila plumbeiceps R SC
Geotrygon albifacies R A
Geotrygon montana R SC
Coccyzus americanus T SC
Coccyzus minor R SC
Coccyzus
T SC
erythropthalmus
Dromococcyx
Aa SC
phasianellus
Morococcyx
R SC
erythropygus
129
Anexos
Geococcy velox R SC
Geococcyx
R SC
californianus
Crotophaga
R SC
sulcirostris
Megascops kennicottii R SC
Megascops seductus En A
Megascops trichopsis R SC
Megascops
R SC
guatemalae
Bubo virginianus R SC
Glaucidium gnoma R SC
Glaucidium
En A
palmarum
Glaucidium
R SC
brasilianum
Micrathene whitneyi R SC
Athene cunicularia MI SC
Ciccaba virgata R SC
Ciccaba nigrolineata R A
Strix varia R Pr
Asio otus MI SC
Asio stygius R A
Asio flammeus MI Pr
Aegolius acadicus R SC
Chordeiles
Caprimulgiformes Caprimulgidae RyM SC
acutipennis
Chordeiles minor T Y MV SC
130
Anexos
Nyctidromus
R SC
albicollis
Antrostomus
MI SC
carolinensis
Antrostomus salvini C SC
Antrostomus ridgwayi R SC
Antrostomus
MI SC
vociferus
Streptoprocne rutila R SC
Streptoprocne zonaris R SC
Streptoprocne
En SC
semicollaris
Chaetura pelagica R SC
Chaetura vauxi R SC
Aeronautes saxatalis R SC
Phaethornis
Trochilidae Aa SC
longirostris
Colibri thalassinus R SC
Anthracothorax
MV SC
prevostii
Eugenes fulgens R SC
Heliomaster
R SC
constantii
Lampornis
R SC
amethystinus
Lampornis
R SC
clemenciae
Lamprolaima rhami R A
131
Anexos
Tilmatura dupontii R A
Calothorax pulcher En SC
Archilochus colubris T SC
Archilochus alexandri T SC
Atthis heloisa En SC
Selasphorus
RyM SC
platycercus
Selasphorus rufus MI y T Pr
Selasphorus sasin MI SC
Selasphorus calliope Aa SC
Chlorostibon auriceps En SC
Chlorostibon canivetti R SC
Cynanthus sordidus En SC
Cynanthus latirostris R SC
Abeillia abeillei R Pr
Campylopterus
R SC
curvipennis
Campylopterus
R SC
hemileucurus
Eupherusa eximina Aa SC
Amazilia candida R SC
Amazilia
R SC
cyanocephala
Amazilia beryllina R SC
Amazilia tzacatl R SC
Amazilia
R SC
yucatanensis
Amazilia violiceps R SC
132
Anexos
Hylocharis leucotis R SC
Trogon elegans R SC
Trogon mexicanus R SC
Trogon collaris R Pr
Momotus momota R SC
Megacerylr alcyon MI SC
Chloroceryle
R SC
amazona
Chloroceryle
R SC
americana
Chloroceryle aenea Aa SC
Aulacorhynchus
Piciformes Ramphastidae R Pr
prasinus
Ramphastos
R A
sulfuratus
Melanerpes
Picidae R SC
formicivorus
Melanerpes pucherani Aa SC
Melanerpes
En SC
chrysogenys
Melanerpes
En SC
hypopolius
Melanerpes aurifrons R SC
Sphyrapicus varius MI SC
Picoides scalaris R SC
Veniliornis fumigatus R SC
Picoides villosus R SC
Picoides stricklandi En A
133
Anexos
Colaptes rubiginosus R SC
Colaptes auratus R SC
Dryocopus lineatus R SC
Campephilus
R Pr
guatemalensis
Falconiformes Falconidae Micrastur ruficollis R Pr
Micrastur
R Pr
semitorquatus
Caracara cheriway R SC
Herpetotheres
R SC
cachinnans
Falco sparverius MI SC
Falco columbarius MI SC
Falco femoralis R A
Falco rufigularis R SC
Aratinga holochlora En A
Aratinga nana R Pr
Ara militaris R P
Bolborhynchus lineola R A
Pionus senilis R A
Amazona albifrons In ( R ) Pr
Amazona
C P
viridigenalis
Amazona finschi En P
Amazona autumnalis R SC
Amazona oratrix C P
Thamnophilus
Passeriformes Thamnophilidae R SC
doliatus
134
Anexos
Grallaria
Grallariidae R A
guatimalensis
Sittasomus
R SC
griseicapillus
Xiphocolaptes
R SC
promeropirhynchus
Xiphorhynclus
R SC
flavigaster
Xiphorhynchus
R A
erythropygius
Lepidocolaptes
En SC
leucogaster
Lepidocolaptes
R SC
souleyetii
Lepidocolaptes affinis R SC
Anabacerthia
R SC
variegaticeps
Automolus
R A
rubiginosus
Camptostoma
Tyrannidae R SC
imberbe
Myiopagis viridicata R SC
Mionocetes olegineus R SC
Rhynchocyclus
R SC
brevirostris
Xenotricus mexicanus En Pr
Mitrephanes
RyM SC
phaeocercus
Contupus cooperi T SC
Contopus pertinax R SC
Contopus sordidulus MV SC
Contopus virens T SC
135
Anexos
Contopus cinereus Aa SC
Empidonax
MI SC
flaviventris
Empidonax virencens T SC
Empidonax alnorum T SC
Empidonax
MV SC
albigularis
Empidonax minimus MI y T SC
Empidonax
MI y T SC
hammondii
Empidonax wrightii MI SC
Empidonax
MI
oberholseri
Empidonax affinis C SC
Empidonax difficilis Aa SC
Empidonax
R SC
occidentalis
Empidonax fulvifrons R SC
Sayornis nigricans R SC
Sayornis phoebe MI SC
Sayornis saya MI SC
Pyrocephalus rubinus R SC
Attila spadiceus R SC
Myiarchus
R SC
tuberculifer
Myiarchus
MI y T SC
cinerascens
Myiarchus nuttingi R SC
136
Anexos
Myiarchus crinitus MI y T SC
Myiarchus tyrannulus R SC
Pitangus sulphuratus R SC
Megarynchus
R SC
pitangua
Myiozetetes similis R SC
Myiodynastes
MV SC
maculatus
Myiodynastes
MV SC
luteiventris
Legatus leucophaius MV SC
Tyrannus
R SC
melancholicus
Tyrannus couchii R SC
Tyrannus vociferans R SC
Tyrannus
R SC
crassirostris
Tyrannus verticalis T SC
Tyrannus tyrannus T SC
Tyrannus forficatus T SC
Tityra inquisitor R SC
Pachyramphus major R SC
Pachyranphus aglaiae R SC
Vireo griseus MI SC
Vireo bellii T P
137
Anexos
Vireo nelsoni En Pr
Vireo vicinior Aa SC
Vireo flavifrons MI SC
Vireo cassinii MI SC
Vireo solitarius MI SC
Vireo huttoni R SC
Vireo hypochryseus En SC
Vireo gilvus MI SC
Vireo leucophrys R SC
Vireo philadelphicus T SC
Vireo olivaceus T SC
Vireo flavoviridis MV SC
Hylophilus decurtatus R Pr
Vireolanius
C SC
melitophrys
Vireolanius pulchellus R A
Cyclarhis gujanensis R SC
Cyanolyca cucullata R A
Calocitta formosa R SC
Psilorhinus morio R SC
Cyanocorax yncas R SC
Cyanocitta stelleri R SC
Aphelocoma
R SC
coerulescens
Aphelocoma
R SC
ultramarina
Aphelocoma unicolor R A
138
Anexos
Corvus imparatus En SC
Corvus cryptoleucus MI SC
Corvus corax R SC
Progne chalybea MV SC
Tachycineta bicolor MI SC
Tachycineta albilinea R SC
Tachycineta
RYM SC
thalassina
Stelgidopteryx
R SC
serripennis
Riparia riparia T SC
Petrochelidon
T Y MV SC
pyrrhonota
Baeolophus
R SC
wollweberi
Baeolophus
R SC
atricristatus
Sitta pygmaea R SC
Catherpes mexicanus R SC
Hylorchilus
En A
sumichrasti
Troglodytes aedon MI SC
139
Anexos
Campylorhynchus
R SC
zonatus
Campylorhynchus
En SC
megalopterus
Campylorhynchus
En SC
gularis
Campylorhynchus
En SC
jocosus
Campylorhynchus
Aa SC
brunneicapillus
Cistothorus platensis R SC
Thryomanes bewickii R SC
Pheugopedius
R SC
maculipectus
Pheugopedius felix En SC
Thryophilus sinaloa En SC
Thryophilus
R SC
pleurostictus
Uropsila leucogastra C SC
Henicorhina
R SC
leucosticta
Henicorhina
R SC
leucophrys
Polioptila melanura R SC
Polioptila nigriceps En SC
Polioptila albiloris R SC
Regulus calendula MI SC
140
Anexos
Sialia mexicana R SC
Myadestes
R Pr
occidentalis
Myadestes unicolor R A
Catharus
RYM SC
aurantiirostris
Catharus occidentalis En SC
Catharus frantzii R A
Catharus mexicanus R Pr
Catharus ustulatus MI Y T SC
Catharus guttatus MI SC
Hylocichla mustelina MI SC
Turdus infuscatus R A
Turdus grayi R SC
Turdus assimilis R SC
Turdus rufopalliatus C SC
Turdus migratorius R SC
Ridwayia pinicola En Pr
Dumetella
Mimidae MI SC
carolinensis
Mimus polyglottos R SC
Toxostoma
C SC
longirostre
Toxostoma ocellatum En SC
Toxostoma
R SC
curvirostre
Melanotis
En SC
caerulenscens
141
Anexos
Anthus spragueii MI SC
Phainopepla nitens MI SC
Peucedramus
Peucedramidae R SC
taeniatus
Rhynchophanes
MI SC
mccownii
Helmitheros
MI SC
vermivorus
Parkesia motacilla MI SC
Parkesia
MI SC
noveboracensis
Vermivora
T SC
chrysoptera
Vermivora cyanoptera T Y MI SC
Mniotilta varia MI SC
Protonotaria citrea T SC
Limnothlypis
T Pr
swainsonii
Oreothlypis
R SC
superciliosa
Oreothlypis peregrina MI SC
Oreothlypis celata MI SC
Oreothlypis
MI SC
ruficapilla
Oreothlypis virginiae MI Y T SC
Geothlypis
R SC
poliocephala
142
Anexos
Geothlypis tolmiei MI A
Geothlypis
T SC
philadelphia
Geothlypis formosa MI SC
Geothlypis nelsoni En SC
Setophaga citrina MI SC
Setophaga ruticilla T Y MI SC
Setophaga cerulea T SC
Setophaga americana MI SC
Setophaga pitiayumi R SC
Setophaga magnolia MI SC
Setophaga castanea T SC
Setophaga fusca T SC
Setophaga
T SC
pensylvanica
Setophaga palmarum MI SC
Setophaga coronata MI SC
Setophaga dominica MI SC
Setophaga graciae R SC
Setophaga nigrescens MI SC
Setophaga townsendi MI SC
Setophaga
MI SC
occidentalis
Setophaga
T P
chrysoparia
Setophaga virens MI SC
Basileuterus
R SC
lachrymosa
143
Anexos
Basileuterus rufifrons C SC
Basileuterus belli R SC
Basileuterus
R SC
culicivorus
Cardellina canadensis T SC
Cardellina pusilla MI SC
Cardellina rubrifrons MI SC
Cardellina rubra En SC
Myoborus pictus R SC
Myioborus miniatus R SC
Icteria virens MI Y T SC
Ramphocelus
Thraupidae R SC
sanguinalentus
Thraupis episcopus R SC
Thraupis abbas R SC
Cyanerpes cyaneus MV SC
Saltator maximus R SC
Saltator atriceps R SC
Sporophila torqueola R SC
Sporophila minuta R SC
Tiaris olivaceus R SC
Haplospiza rustica R A
Diglossa baritula R SC
Sicalis luteola R SC
Arremon
R SC
brunneinucha
Arremon virenticeps En SC
144
Anexos
Arremonops
C SC
rufivirgatus
Atlapetes albinucha En SC
Atlapetes pileatus En SC
Pipilo ocai En SC
Pipilo chlorurus MI SC
Pipilo maculatus R SC
Aimophila rufescens R SC
Aimophila ruficeps R SC
Aimophila notosticta En Pr
Melozone kieneri En SC
Melozone fusca R SC
Melozone albicollis En SC
Peucaea ruficauda R SC
Peucaea humeralis En SC
Peucaea mystacalis En SC
Peucaea botterii R SC
Oriturus superciliosus En SC
Spizella passerina R SC
Spizella pallida MI SC
Spizella pusilla MI SC
Spizella worhteni En P
Spizella atrogularis R SC
Pooecetes gramineus MI SC
Chondestes
MI SC
grammacus
Amphispiza bilineata R SC
Passerculus
RYM SC
sandwichensis
Ammodramus
MI SC
savannarum
145
Anexos
Xenospiza baileyi En P
Melospiza melodia R SC
Melospiza lincolnii MI SC
Melospiza georgiana MI SC
Zonotrichia
Aa SC
leucophrys
Junco phaeonotus C SC
Chlorospingus
R SC
ophthalmicus
Piranga rubra MI SC
Piranga ludoviciana MI SC
Piranga bidentata R SC
Piranga leucoptera R SC
Habia rubica R SC
Habia fuscicauda R SC
Rhodothraupis
En SC
celaeno
Cardinalis cardinalis R SC
Pheucticus
C SC
chrysopeplus
Pheucticus
MI SC
ludovicianus
Pheucticus
R SC
melanocephalus
Cyanocompsa
R SC
parellina
Passerina amoena MI SC
Passerina cyanea MI SC
Passerina leclancherii En SC
146
Anexos
Spiza americana T SC
Sturnella magna R SC
Sturnella neglecta Aa SC
Xanthocephalus
MI SC
xanthocephalus
Dives dives R SC
Euphagus
MI SC
cyanocephalus
Quiscalus mexicanus R SC
Molothrus aeneus R SC
Molothrus ater R SC
Icterus dominicensis R SC
Icterus wagleri R SC
Icterus prosthemelas R SC
Icterus spurius T Y MI SC
Icterus cucullatus T, MI Y R SC
Icterus mesomelas R SC
Icterus pustulatus R SC
Icterus bullockii R Y MI SC
Icterus auratus Aa SC
Icterus pectorialis Aa SC
Icterus gularis R SC
Icterus graduacauda C SC
Icterus galbula MI SC
Icterus abelliei En SC
Icterus parisorum R SC
147
Anexos
Amblycerus
R SC
holosericeus
Psarocolius wagleri R P
Psarocolius
R Pr
montezuma
Euphonia
R SC
hirundinacea
Euphonia
R SC
elegantissima
Chlorophonia
R SC
occipitalis
Haemorhous
R SC
mexicanus
Loxia curvirostra R SC
Spinus pinus R SC
Spinus notatus R SC
Spinus psaltria R SC
Spinus tristis MI A
Coccothraustes
C SC
abeillei
Coccothraustes
R SC
vespertinus
LISTA DE ABREVIATURAS
R Residente
Pr Sujeta a protección especial
MI Migratroria de invierno
A Amenazada
C Cuasiendémica
P En peligro de extinsión En Endémica
Mv Migratoria de verano
Probablemente extinta en el
E In Introducida
medio silvestre
T Transitoria
Sc Sin categoría
Aa Avistamiento accidental
148
Toponimias
del estado de Puebla
L
a riqueza ornitológica del estado de Puebla se
ve reflejada en la idiosincrasia de los pueblos
que le habitan. Su influencia es tal que el esta-
do ocupa el octavo lugar a nivel nacional con mayor
numero toponimias (nombres de lugares) indígenas
referentes a la presencia de aves con 70 nombres de
pueblos, lugares y ciudades (ver recuadro) (Navarijo,
1995).
149
Anexos
151
Anexos
152
Anexos
Categoría Tendencia
Anseriformes, Charadriformes,
Galliformes, Tinamiformes,
Precoces
Podicipodiformes, Gruiformes,
Caprimulgiformes
Piciformes, Psitaciformes,
Pelecaniformes, Columbiformes,
Apodiformes, Coraciformes,
Altriciales
Strigiformes, Accipitriformes,
Falconiformes, Ciconoformes y
Passeriformes
153
Anexos
Syndactylas Coraciformes
Nº NOMBRE CIENTÍFICO
AVES
Pág. 44-45
TERRESTRES
1 Calocitta formosa
2 Tyrannus verticalis
3 Myiozetes similis
4 Pheuticus chrysopeplus
5 Myiarchus crinitus
6 Tyrannus crassirostris
Melanerpes chrysopenys
7
flavinuchus
8 Setophaga ruticilla
9 Icterus galbula
10 Piranga ludoviciana
11 Icterus auratus
12 Picoides villosus
13 Melanerpes pucherani
14 Picoides stricklandi
15 Melanerpes aurifrons
16 Cardinalis cardinalis
17 Passerina ciris
18 Ramphastos sulfuratus
19 Vireo brevipennis
20 Campylorhynchus brunneicapillus
155
Anexos
21 Corvus imparatus
22 Cyanocompsa parellina
23 Pyrocephalus rubinus
24 Archilochus colubris
25 Sturnus vulgaris
26 Phaethornis longirostris
27 Calothorax pulcher
28 Cardelina rubrifrons
29 Sitta carolinensis
1 Cathartes aura
2 Caracara cheriway
3 Herpetotheres cachinnans
4 Coragyps atratus
5 Parabuteo unicinctus
6 Buteo magnirostris
7 Buteogallus urubitinga
8 Buteo brachyurus
9 Circus cyaneus
10 Buteo albonotatus
11 Spizaetus tyrannus
12 Glaucidium brasilianum
14 Strix varia
156
Anexos
15 Asio otus
16 Falco columbarius
17 Falco femoralis
18 Micrastur semitorquatus
1 Himantopus mexicanus
2 Charadrius vociferus
3 Actitis macularius
4 Ardea herodias
5 Pelecanus occidentalis
6 Pelecanus erythrorhynchos
7 Egretta tricolor
8 Anas clypeata
9 Dendrocygna autumnalis
10 Anas discors
11 Anas cyanoptera
12 Ixobychus exilis
13 Podiceps nigricollis
14 Bubulcus ibis
15 Butorides virescens
17 Calidris minutilla
18 Anas platyrhynchos
19 Cairina moschata
157
Anexos
20 Anas acutta
1 Amazona finschi
2 Amazona oratrix
3 Ara militaris
4 Amazona viridigenalis
5 Bolborhynchus lineola
6 Myiopsitta monachus
7 Arantiga holochlora
8 Pionus senilis
9 Amazona autumnalis
10 Amazona albifrons
Aves
Pág. 117
Nocturnas
1 Chordeiles acutipennis
158
Bibliografía
ALMAZÁN-NÚÑEZ, R. C. y HINTERHOLZER-RODRÍGUEZ, A. (2010). Dinámica
SIN PUBLICAR.
México.
159
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Puebla.
de Puebla. Revista Ciencia y Cultura Elementos. No. 76, Vol.: 16. p. 51-55.
DEL OLMO L., G. y ROLDAN V., E. (2007). Aves comunes de la Cuidad de México.
México, D.F.
México, D.F.
GARZA DE L., A. (2003). Aves de Coahuila: Guía de campo. Gobierno del Estado de
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HUITZILCOATL, A.C.; CAMACHO M., M., y MENA R., E. (2010). Aves de parques
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JIMÉNEZ M., FCO. J. (2009). Aves del asfalto. Revista Conversus ipn 61 p. 78-82.
JIMÉNEZ M., FCO. J. (2009). Aves en el Jardín Botánico. Revista ¿Cómo Ves?
JIMÉNEZ M., FCO. J. (2010). Las aves de México y el estado de Puebla. Revista
161
Elementos No. 77. p 51-54.
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Aves del Estado de Puebla, con la coordinación de Jesús Hernández