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EL CLUB LIMONADA

RESUMEN

María y Alejandra han sido amigas desde pequeñas, se conocen de toda la vida. El
primer día en el jardín de infantes, entre lágrima y lágrima, se fueron conociendo.
Con el pasar de los años su amistad fue creciendo, viviendo juntas cosas buenas y
no tan buenas. Ahora tienen 14 años y una amistad muy fuerte al punto de
compartir todo: secretos, aventuras y... ¡Mala suerte en el amor!
Esta historia empieza con la fundación del club de limonada. María decía, hay
personas que pueden encontrar a su media naranja, su amor verdadero y así poder
ser felices. Pero también hay personas como ella y Alejandra que solo pueden
encontrar a su medio limón: ácido y amargo. Con el fin de contar sus desventuras
de enamorados, junto con su amigo Juancho, deciden fundar el Club Limonada, un
lugar para enamoradizos sin remedio, donde se pueden desahogar, reír y escribir
los nombres de los chicos que les rompieron el corazón en una lista negra. Se
reúnen todos los días en el sótano de Juancho para compartir historias que sobre
todo, les harán pasar un buen rato. Alejandra era la presidenta, María la secretaria,
quien escribía todos los detalles de las historias de sus desamores; y Juancho el
vicepresidente.
Asimismo se ve como el papá de María, un hombre optimista que nunca se rendía
sin lograr sus metas.
Con el transcurso del tiempo Alejandra y María se contaban todos sus secretos
hasta lo más feos, esto hacía más fuerte su amistad. Ellas eran muy diferentes pero
también tenían un rasgo muy particular en su personalidad, que eran muy
enamoradizas.
Todo iba de maravilla entre los tres, hasta que Alejandra y María empezaron a
sentir cosas nuevas por Juancho. María pensó que a Juancho le gustaba Alejandra,
lo que causa mucho sufrimiento en María y pone en peligro a su amistad. A esto
también se añade la enfermedad que acecha al padre de la protagonista, haciendo
que ella madure y entienda que no necesita el amor de otra persona que no sea de
alguien de su familia para ser feliz, y sobre todo entiende el valor de las cosas que
tiene por más pequeñas que sean. La situación hace que se distancie de sus amigos,
perdiendo casi todo tipo de comunicación, dejándonos una incógnita. Pero Juancho
por amistad prefiere no decir nada y callar, aunque ya no se volvieron a reunir, la
amistad de ellos quedó como una gran taza de limonada con miel.

Rosario Zúñiga Alanya – Shaiel Rut Góngora Zuñiga

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