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© Jorge Castillo Martínez, 2015

© Imagen de portada
XXXXXXXXXXXXXXX

Corrección
Jorge Daniel Cabrera Martínez

© A cargo de la colección
Mario Islasáinz

© Por esta edición

Marco Antonio Gabriel García
Ediciones el viaje, 2014
Plan de San Luis 1228
Colonia Miraflores, C.P. 44270
Guadalajara, Jal., México
[email protected]

isbn 978-607-XXXXXX

impreso y hecho en méxico

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Poemas para Nallely

Jorge Castillo Martínez

3
4
Canto primero

Canta, oh Musa, la dulzura,

el sol naciente en sus ojos
pequeños de niña, su sonrisa.

Canta, ¡oh Musa!,

nuestro abrazo en La Consciencia.

Ya nos reconciliamos con todo.

Ya recorrimos nuestro tallo,
en comunión deseamos florecer.
Cada herida abierta fue necesaria
para el abrazo puro de nuestras almas.
La unión de nuestra sangre abierta.
La rosa necesita florecer.

Si es tu deseo, Musa, cantar sublimes victorias,

dale tu inspiración a las memorias venideras;
necesitan saber que fue posible
el encuentro de dos náufragos de niebla.
Canta, oh Musa, a las almas
rotas que conservan su pureza.

Con tu canto escribiremos, Musa, una experiencia.

Si das gloria a los versos inmortales,
dale música a los mágicos encuentros
de la eternidad, fugaces responsables.

Regálales tus cantos a sus sueños,

a los sueños de ella y a los sueños
de todos los mortales.

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Náufraga luz

náufraga luz, luz viajera

mi lejana compañera
vienes al mundo y me encuentras
y en soledad me sueñas a tu lado

si abandonás la cárcel invisible

si abandonás los hábitos e ideas
la acerada palabra que os define
la burbujosa elástica, la mente
si evadís el castigo por ser l’otro
si te atrevés a hablar de otra manera
si te dan la alternativa y vos no eliges
si te lo niegan todo y tú lo tomas

estar en ambos lados para un río

estar en dos vacíos para un puente
sin recorrer lo fijo un exiliado
puede ser también cosmopolita
y desterrado dentro del sí mismo

si me abandono al abandono
apostasías profusas de lo desconocido
si confundís la alteridad con lo sagrado
y al mismo tiempo amás a tus sagrados enemigos
pues poseen el misterio de lo hermano,

si no descansas en el trono del agrado

y vais buscando en cambio lo sublime,
si tú me traes la noche luminosa
que persigue a sus huellas para besarlas
si en un silencio con tu ropa de palabras
le dieras al corazón significado,
si de pronto un silencio lo expresara
si descubriese porque tú me lo revelas
náufraga luz, si tú me vieras

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Sinónimo de piedra

Una vez mientras espero lo imposible

haciendo apelativo de lo absurdo

Si fuese un flujo, río de piedra,

si fueres la ciudad y no su sepultura
llevare un templo al cuerpo de mis días
llegase un dios a mi coraje y gobernara
la flor de la anarquía y las experiencias

Háblame piedra tu porosa entonación

estalla en piel verdosa la osadía de mi destiempo
hoy creo ser tú en la esquizofrenia y las edades
anclado en muchas épocas distintas te sollozo
te deposito lluvias y sin ser un alquimista
te ruego por canciones que atraviesen el silencio

No he de pulirte, si no quieres vuelve al río

que el pez de mi ansiedad hoy te socave
nadar tu redondez de bestia pura y noble
llegar a la mujer que entonarás si te desgranas
tengo vergüenza cuando soy civilizado
y quiero desgranarme y que me cures

Dale raíces a mi cómputo del tiempo

a las memorias resucítalas nenúfares
sean los tesoros lo instantáneo
sean mapas las bitácoras de viaje

lo que llevo de ti lo que has tomado

vuelve mi anhelo de futuro a ser presente

presiento la locura en mi resabio

7
Me sé tan criollo como el aire en la montaña
mezcla de todas las miradas y del ojo que no mira
me sé criollo de galgas y valoro en la medida
en que todo es su misterio y yo su oído

Otórgame humildad piedra montaña

deja que salga el sol o guarda en ti su sangre
dale calor al viento y levite la flama
guárdame de lo humano y la mentira
sabes la mística carroña de las vacas
devuélveme el ser yo cuando esté vivo.

8
Nuestro encuentro

Están, como mirándose, dos lagos negros.

Mi soledad acechando las visiones desde una sombra en el balcón.

Entonces amaneces y compruebo las viejas canciones.

Cuando la estrella oscurece, brilla la Tierra
y cuando vienes tú desaparece el infinito.
Los misterios se prenden a tu cabello
y tus ojos y tu boca son como campanas.
Todo llama al centro de mí mismo.
Algo que estaba dormido comienza a despertar.
Una lengua emocional comienza a hablarse sola
y ya no es posible ocultarse, porque la Tierra que brilla
canta en mí. Surgen de mí cantos placenteros.
Frutos como kioskos perfumando nieblas de sol.
Muchachos en espiral guiando a sus flores en la plaza.
Estoy en el convento respirando lo que vive.
Imagen de un amor va recorriendo poco a poco
un viejo camino habitado por sollozos:
se olvidaron de sí mismos ofreciéndose al cielo.
Y a la imagen que me brota por los ojos
sales al encuentro.

9
Con pasión de lo divino

Es el atardecer y está lloviendo.

Hay un sol de miel y rojo
y son los sentimientos de todos los colores.

Hay un espejo de miel donde aparezco fugazmente,

hay un espejo de miel que en un instante me recorre
como si fuese el sol de un siglo transparente
tejido con la seda de unas horas.

Hay lo que nunca ha de volver a ver

lo que no habrá de hermoso como ahora,
hay unas rosas rosas mañaneras y nocturnas.
Para mí son estrellas terrenales.

Hay un jardín y soy un niño que conoce

rosa rosa perfumando todo el viento.
Alma transparente conocida.
Hay la magia que transforma.
Y veo todo crecer y todo transformarse.
La vida está en el cielo y mi raíz
en la corola tiene alas.

Hay nuestra libertad obedeciendo temporales.

No habría estallado en pétalos el brote
sin correr las estaciones.
En ti nació mi fe
de un pensamiento puro
bautizado en el Estigia.

Hay nuestra libertad y estoy agradecido

por depender del tiempo
pues si no hubiese tiempo
esto nunca habría pasado.

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Y sé que cuando pase y se transforme
quedará en mi corazón lo que he aprendido,
lo que ha prendido en el jardín de tierra oscura
y ahora está vestido de colores.

Todo es semilla. Adoro la pureza.

El sol nutre a la lluvia
y son miradas puras
que transforman
todo lo que tocan.

Somos comunes y de carne

y sin embargo
la miel roja nos transforma.

Será bueno que pase porque ahora

nada será lo mismo
y a la vez, todo presente,
todo instante presente del futuro,
será lo más hermoso hasta ese entonces.

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Devoto

Mi amistad con árboles y nubes,

el efecto consanguíneo con ángeles y granadas,
la intimidad con lo oscuro y mi abrazo
con la tierra. Mi pacto con la madre
y el espíritu, de crearlos y de hacerlos
nuestros hijos,
lo más viejos,
los más sabios.

Los hombres, las mujeres, los parajes,

que marcaron nuestros ojos
como aguja y lentejuela,
laberintos de estrellas que desgarran con sus luces.

El amor que, finalmente, no lastima:

te lava con la noche, te sucede,
te guarda los secretos que gritaste pero nadie comprendió.

Lo que no tiene cuerpo.

Lo que vive sin su cuerpo.
Las canciones más allá del cuerpo,
tu cuerpo, después de la noche, recién llegado,
tus besos bienvenidos, que así hablan,
con las flores de un enigma,
tus manos que me dicen
“deja aquí tu amor”
conjuro cósmico, templo de aire
de incienso y campanarios de respuestas

escucho tu voz en los linderos del fuego,

en libertad me entrego a los furores de mi alma,
con esperanza escucho las promesas de la lluvia,
con gratitud te entrego lo que sólo es para ti.

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Humano Prometeo
(La batalla individual)

La ceniza de volcán fue la materia prima

para osamenta y piel del primo humano,
ceniza bañada con las entrañas
eternamente devoradas de un dios ingenuo.

Bien que este hermoso ser maduro y pleno

llega a sentir a veces rapiñeras mordeduras
comiéndole la fuente de la vida
y aquello que alimenta sus batallas inmortales.

Nadie puede ayudarlo, porque es el dolor de un dios

lo que desgarra a esta mortal criatura.
Aunque todos sufren ese mismo dolor,
no se lo puede comunicar,
porque es la soledad de un dios
el abismo en que sus huesos se colapsan.

Pero ha llegado a ver en la cumbre de sus visiones,

cómo le viene un fuego inmerecido,
porque es regalo de un dios lo que le hiere.

13
La visión de ti

En el aire me clavaste una linda mirada.

Ven a mí, conocimiento sagrado.

Ven a mí, amor.
Estoy lejos de ti, pero me empujo hacia ti.
Siento el amor perfecto del aire.
Siento la caricia clara y abundante del sol.
Siento el amor sencillo y reverente de la lluvia.
Siento cómo todo se une a ti
y me conduce a tu camino.
El conocimiento sagrado,
todo lo que un ser humano necesita saber.
Necesita decir: esta es mi casa.
Y tú eres mi país entero y mi país lo posible.
Es donde cada grano de arena puede estallar de amor.
Y así, cada llaga de tierra que soy
nutre cada raíz del árbol que puedo ser.
El árbol que puede volar.
El árbol cantante.

14
Celebración

Como si hubiera nacido

para el momento de conocerte,
y así como las piñatas se divierten con los niños
mi corazón es feliz de estar contigo,
mirándote con ojos de alebrije.

Tus manos habitando entre mis manos

mi silencio con acordes acompañan.
Es un canto infinito que susurra
el baile a mi camino de tus piernas.

Y así, cada día es especial,

cada día nuevo gozo de seguir
el arte de seguirte con tus pasos.

15
Amar donde nací

Me dijo un profesor de polvo y tiempo:

“Aquí está enterrado mi ombligo”.

Es lo que siento cuando tus ojos se encuentran

con algo de mí entrañable. Flujos de energía
que me ligan a la tierra.
Tú eres el lugar donde nací
y lo sé porque hace un rato no existía.
Era el hueco en las campanas,
el espacio infinito entre los átomos.
Entonces vienes tú y tu luz
muestra un diamante transparente.
Hace varias muertes nos habíamos olvidado de nosotros.

Vienes tú y de tus pupilas

me viene un sueño líquido
como un ramo de flores.
La tierra debía mirarte para saber que es un cristal.
Los hornos en la tierra son abrazos
de la vida y de la muerte.
En tu piel se incendian las semillas.
Enterrada en tu piel la carne se alimenta
con tu ser espiritual.

Del aroma de tu cuerpo se inventaron los inciensos

y por eso yo te quiero como un templo
donde vive algo sagrado.

Yo nací en tu abrazo, y con el beso del sol

y tus canciones mi alma despertó.

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Copa de luz

Cuando te bebes mi ser

me haces sentir algo infinito.

El momento en que el orden arriba,

imagen en que un río se congela
como una voluntad fuerte en silencio.

Trazar la oscuridad con tus pestañas,

poner biombos de nubes en los dedos
porque es desnudo y frío lo que desgarras,
lo que borras con tu amor y con tu calma.
Fría sombra de piedra se evapora en primavera
si el camino fue bañado por las vides.

Un oscuro infinito que antes no podía sentir

me lleva hasta tus labios
y conforme te bebes mi ser
mi copa se va llenando de luz.

17
Ríete

Ríete, para que el cielo me llene de tu luz,

disuélvete en la fuente para que sea brillante
y para nacer en un país que nos conozca limpios y comple-
tos.

Ríete, porque tu risa es importante:

alimento de palomas,
haces que sean sagradas las catedrales.
El sol te necesita para no dejar de brillar.
Vibra desde la sandía hasta las raíces.

Ponte seria cuando un momento sea demasiado hermoso,

porque estarás escuchando tu risa desde fuera.
Llénate del agua, del viento y de la luz,
porque un día manzanas y uvas
no probarán sino bocas de luz
y la niña que brota de tu boca
la buscarán lobos y magos para aprender a ver la luna.

18
Nada es como tú...

Nada es como tú,

mi rosa transformada.

Tú que fuiste mi país,

mis alimentos.
La luna, el sol,
y toda luminaria.

Así como hace un ciclo,

todo giro y todo
pensamiento, lucidez
y sueño mío,
todo era tuyo
mi país.

Son tuyos mis secretos,

mi corazón impuro,
mi amor que mucho tiempo
estuvo triste y solo.

Soñé mi voluntad volar

y nunca desperté.

Salto al vacío sin cuerpo,

dejo mi nombre olvidado. Infusión
de hojas de mi memoria. Se la beben
las distancias prolongadas del vacío.

Salto al vacío sin alma

y tú me recoges.

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Estoy muerto, me desangro
de amor infinito. En los ríos
de instantes rojos te sumerges.

Ya estoy muerto y vuelvo a ti

que me recuerdas. Vas conmigo,
sois como un susurro de la brisa
mientras voy por la caverna.

Me sostienes, acompañas
mi cadáver. Lo quieres
convencer de que está vivo.

20
Niña dormida

Dulce niña cigüeña,

asombro y regocijo
traes de lo porvenir:
souvenirs, espejos,
tinta China,
relojes de arena.

Dulce barca del más allá,

me devolviste como la brisa
devuelve un beso de amor al ancho mar
y tú eres el mar
sin
embargo.

Dulce remanso de ribera,

flechazo de lago sobre tela,
tejedor enano
habitante de cristales,
colores y labios
que los recitan,
dibujan, iluminan
y los vuelven como almohadas.

Dulce niña
que vuelves sagrado
todo lo que ves,
pues he bendito
déjame entrar

en el Su Enio tuyo.

21
Y tú de pronto vienes...
(Soneto imperfecto)

no soy un número tenso en el arco

no debes predecir mi resultado
vuelto suceso nuevo consumado
¡oh! mi corazón embarco

todo a lo mar que con la vista abarco

está soplando viento desolado
un viento cardinal emancipado
dentro de la penumbra me demarco

y tú de pronto vienes a predecir la lluvia

y tú eres la sorpresa tras el duelo
mi música eres tú y de mi palabra

y tú de pronto vienes a predecir la lluvia

un instante cuando vuelo
si tú eres la ilusión de mi palabra

22
Llegando el viento
(Soneto)

La causa y el efecto, simultáneo.

El mundo hecho de ideas, no de un hecho,
se mueve por esfínteres, estrecho.
Difícil abrazar lo sucedáneo.

Me viene una verdad, algo espontáneo,

algo agita sus polos en mi pecho.
Terminé avante, terminé deshecho,
ya llevo mis tesoros en el cráneo.

Todo valor es un significado

fijo en la marea del sentimiento.
Quiero mi barco y quiero el cargamento.

Si está seguro el puerto estoy varado.

Y mi significado es lo que siento
y el mar quien te lo tiene declarado.

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Carezza y música
(Cada la-la es un peldaño)

El empedrado baila
ante los pies adormecidos.
Desde la sima hasta la cima
de la noche de la miel de las estrellas.

Lo que hay arriba

está en el fondo de un pozo.

Eva se volvió un ángel

cuando cayó,
se volvió más ligera que el aire,
no como quien lleva un mensaje
sino quien da a la luz significado,
un silencio a la música,
un arco iris a las yemas
de mis nítidas acuáticas falanges,
de los mares emergentes siempre anfibios.

Musa de música lloviente,

de música evaporada:
transpiro porque voy directo al sol
en cuerpo y alma.

Ojalá que las palabras

perdiesen el significado
y se volviesen
música semántica,
orador cosmopolita,
expresión de templo,
tálamo y altar
en todos los pliegues del aire.

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El sol despierta
porque tú amaneces.

Musa de música ebria

de noche en ocaso,
déjame ver los miles de soles
que se dejan desflorar
en la noche,
déjame ser la tierra
que te otorgue el rocío
cuando quieras beber.

25
ελλε

Tengo al destinatario
de todos los elogios,
cada lágrima de ámbar,
cada mirada al cielo.

Amanece en pleno amanecer

y en el reflujo de la visión
voy de regreso al centro.

Estoy con “ello”.

Me le abrazo
como el éter
en las alas del ave.

Impreso como en la mirada

tu color.
Devengo en el curso de la luz.
“Divino” es devenir.

“Iluminar”
es el aparecer de pronto
lo que estaba oculto por el siglo,
por el silencio en luna nueva.

Mi astro.
Mi silencio sol.

Para verte
solo me queda escucharte
en silencio
con el barcorazón,
levante vela
con un velo transparente
sobre la faz del sol.

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Sembrar un amuleto en el lenguaje

Eclipse del ojo que todo lo ve

por un lapso no estoy siendo estrella
no estoy viviendo realmente
por un lapso no soy círculo, no tengo significado
quizá recuerdos mas no memoria de ellos
estoy en sueños, soy arquero sin carcaj
traigo un signo de siglos arcanos
a un orbe que ya no lo reconoce
y así de pronto inexplicable
soy palabra silvestre contracultural
y de pronto alguien me cuida
dependo del agua y del sol
voy al sol en cuerpo y alma
soy emanación que vuelve de una larga travesía
para encontrar su Ítaca tlalocan
ya no tengo el mundo de antaño
las ruinas se extinguen
el conocimiento está perdido
mas tengo nombres divinos y los invoco
bebo de la montaña el aire nutritivo
vamos drenando símbolos e imágenes y runas
para que nos devuelvan la sangre embargada
una palabra restituye vida entera
y eternidad bajo períodos regulares
tierra y fuego surcan geométricos caminos
ceniza y resplandor engendran aves
cuando son iluminadas por el sol, sí por el sol
que sale como miel de la montaña, como fuente
la luna es mi alimento y nítido mi alivio
para acercarme a ti como un ósculo discreto
las aguas me sumergen desde Egipto y Babilonia
hasta el ombligo del argentino quinqué
impresa la llevo sobre la ropa
colgada al cuello en el externo oído

27
(si sumergir me cierra los ojos
me acato a la música y mi oído)
ella me representa todo cuando la tengo a mi lado
ella es mi voz cuando su ausencia me enmudece
es música violín de líneas y de ángulos
son los danzantes boreales cuentas de cielo
son los sueños de cosmos engranaje
es su mirada la suma de todo el universo
piel espejo de galaxia presente y venidera
cierro los ojos y emerge mi canto sibilino
mi subrepticio amor deseclipsado
por un lapso me transformo en círculo y estrella
por un lapso estoy viviendo realmente
de su cabello amortajado vivo cortando flores
bálsamo semántico destilo para el amor a ciegas
y se reúnen en mí, como en un libro poemas
la química, la física y la cábala.

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Nuevo don

El don, vuelto a ofrecer

donde no crecen páramos
ni orquídeas solares.
Fallido campesino sin ocaso.
Corta botones de incienso
alimento del vacío.

El don, vuelto a ofrecer

más allá del dolor.
He aquí quien eres,
el tiempo que regalas a las cosas,
cómo purificas el aire
que en su paladar de árboles
da crédito a los nidos.

El don que permanece,

que subyace, el sabor de las estrellas,
polvo luminoso de los mundos,
cuerpo luminoso de los muertos
en un instante allende conocidos de la paz.

El don de ofrecerme a tus sueños.

La esperanza de que un día
me quieras cantar.

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El eco de tu boca

Tu boca es una luz

y has de incendiar la niebla
cuando digas mi nombre.

Un sol tenía raíces, tenía ramas,

un destello en su destino y verdes esplendores.

Si tú dices mi nombre,
soy el eco de los bosques,
soy un mediodía manando de la fuente.

Si tú me das un beso
me destilan los agaves.
Lunar, botón de incienso,
aceite de las flores y perfumes,
niñas te renacen de los ojos,
historias que te quieren en sus sueños.

Quédate conmigo, que yo te quiero.

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Lo que pasa por el Meztli

Aún hay que perder todo

a lo largo del camino,
porque no es la moneda
ese algo que nos cuesta
si no sólo ser capaz
de ver una perspectiva
de los múltiples colores
de las infinitas cosas,
uno sólo de los polos
de las grandes paradojas,
porque es un sólo ojo
el que por nosotros sueña,
mientras ya viajamos muertos
en la barca de Caronte
y lo que en vida creemos,
en el fondo de las cosas
es el momento en que muere
una persona de otrora,
una consciencia de allende.

¿Pero a dónde es que vamos?

Quien recibiere ese pago
nos quitaría la moneda.
¿Qué soñará con dos ojos
el que por nosotros sueña?
¿Qué hay más allá de ese río
de lo que siempre transcurre?
¿Qué habrá de ver n’esa tierra
quien como un muerto sucumbe?
¿Qué es lo que estoy soñando
cuando creo que me acompañas?

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No me dejes de pensar
para que muerto no caiga.
Que si me alcanza el olvido
nunca habría paso siguiente.

Esto escribió un estudiante

que se metió entre mis sueños.
Dijo que los compañeros
hoy necesitan unirse
porque solamente juntos
podrán ver detrás del velo
qué hay más allá de ese río,
si una vida renovada
o ese tan temido olvido.

Es todo un pueblo de sueños

lo que habita al Soñador,
quien, como en una chinampa,
se aproxima a su destino.
Quieran sus sueños abrir
los ojos del que está herido
por el trance de la muerte
o los estragos que arrastra
el Soñador Inmortal,
que en esta tierra de olvidos
arriesga de su Consciencia.

32
Árbol de nuestro huerto
Que sean todos los pueblos
y todos los huertos nuestros.
León Felipe

Verso abierto
río de mañana
hay que decir las cosas que son dardos para el alma

agua clara
limón verde
porque el brillo sin estrella nos encanta

para que sea nuestra piel de noche

lo mismo que sol naciente
y la sonrisa tenga sabores de naranja

ay palabras, caricias descarnadas

ay poesía, viejo dolor, amor de las cigarras

vierte el amor en nosotros

sólo si el agua es clara
la lluvia fresca
la noche iluminada

y sólo si la voz es algo

que pueda atravesar ventanas

y si están abiertas las ventanas

y si se está dispuesto a luchar por lo que se ama
para que sean acto de amor las serenatas

el amor es balsa
para llegar a la otra orilla
la cercana
la otra que es la misma, donde se halla

33
agua clara
flor del iris
fruto que primero es una lágrima

canto abierto
verso libre
fruto de agua
gozo de lluvia, arco iris

hay que decir las cosas que nos matan.

34
Invitación

Volvernos a encontrar,
cruzar el puente al sol.
Purificar el calcio para encender el trigo,
llorar para la tierra
de tal manera que al morir
nos podamos entregar a las estrellas.

No ser aquel que se separa

de la imagen de su espejo.
Si tú habitas el mundo has de saber
que no estás solo.

Hoy me siento llamado a ser convocatoria.

En cada encrucijada, cada uno
requiere señales distintas.
Hoy es estar a prueba para luego
ser una de las voces traductoras
del lenguaje, del silencio.

Si te ves en este lago

no rechaces el reflejo ni la sombra.
Puede una imagen no ser la realidad
pero este día y esta noche
nos es dado a nosotros
elegir lo que ya somos desde siempre.

35
 POEMAS PAR A NALLELY
de Jorge Castillo Martínez
se terminó de imprimir en el mes de enero de 2015

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