La Primitiva Lírica Española
La Primitiva Lírica Española
La Primitiva Lírica Española
El descubrimiento de las jarchas por Stern en 1948 varió sustancialmente el panorama de los orígenes de
las letras hispanas. A este respecto, el eminente crítico y poeta Dámaso Alonso ha escrito: La literatura
española se ha hecho, de repente, un siglo más vieja. Y ya no empieza épica; ahora comienza
encantadoramente lírica, con unas sencillísimas canciones de mujer enamorada. La literatura española
nace, así, en un ambiente virginal, de blanca y apasionada belleza.
"Una jarcha (en árabe, خرجةjarŷa, "salida" o "final") es una composición lírica popular de la Hispania
musulmana, que constituía la parte final de la moaxaja, de la que existen ejemplos desde el siglo X-XI. Las
jarchas están compuestas en dialecto hispanoárabe coloquial, o en la lengua romance que utilizaban los
andalusíes, impropiamente llamada mozárabe. Fueron escritas por poetas cultos árabes y judíos que
tomaban como modelo la lírica románica tradicional. Pudieron recogerlas del folclore popular, o bien
adaptarlas a sus necesidades métricas (pues debían integrarse en la moaxaja) o bien componerlas de
nueva creación, a partir de moldes tradicionales. Su importancia radica en que son el documento más
antiguo que se conoce de poesía en lengua romance".(Fuente: Wikipedia).
* Lírica tradicional: Trata asuntos amorosos y folclóricos. Canciones generalmente breves en metros
cortos. Procedimientos propios de la poesía popular. Se distinguen: Jarchas, villancicos,canciones de siega,
de romería...
* Lírica cortesana: El tema prefente es el Amor. En cuanto a sus rasgos formales destacan por el
refinamiento y la artificiosidad. Alfonso x: Cantigas.
* Debates: Disputa entre dos personajes que encarnan actitudes contrapuestas. Forma dialogada.
Alegoría. Ejemplos: Elena y María. Razón feita de amor.
*Épica (juglaría): Asuntos heróicos. Respecto a los rasgos formales: Procedimientos juglarescos. Series de
versos de arte mayor con asonancia fija. Poema del mio Cid. Cantar de Roncesvalles.
*Culta (Clerecía): Trata Temas religiosos, didácticos y legendarios. Mezcla de estilo popular y culto.
Fidelidad a las fuentes, utilización de la Cuaderna Vía. Ejemplos: Berceo: Milagros de Nuestra Señora. Libro
de Alexandre. Juan Ruiz: Libro de buen amor.
I
II
III
Teatro medieval
Los orígenes del teatro medieval no están aclarados. Según parece, hay una ruptura de siglos en la
representación teatral, desde el mundo romano y griego, que prefiere la comedia a la tragedia, más
cultivada entre los griegos. Las opiniones de los primeros cristianos acerca del teatro son bastante
negativas y es posible que ello influyera en la práctica desaparición del mismo.
Durante la Edad Media, las autoridades eclesiásticas se sirvieron del teatro para divulgar entre el pueblo
las historias de la Biblia y los valores del cristianismo. Los sacerdotes crearon dramas de tema religioso,
llamados misterios. Las obras se interpretaban primero en las iglesias, más adelante también en las plazas
de las ciudades o en carretas que podían trasladarse de una localidad a otra. El teatro medieval, al igual
que el teatro clásico, surgió a partir del culto religioso, pero enfocado hacia el cristianismo.
En el siglo XV empezaron a aparecer también obras no religiosas, basadas en cuentos tradicionales o
anécdotas divertidas. Se hicieron populares las obras de intención moral, que utilizaban la poesía, la
música y la comedia para instruir al pueblo. En esa época se formaron pequeños grupos de artistas
profesionales llamados juglares, que trabajaban en los patios de las posadas y en las ferias.
Literatura y espectáculo en la Edad Media: las razones del teatro profano medieval hablar
verdaderamente de Literatura Comparada: un tema multinacional con una perspectiva supranacional
(Dyserinck 1981). El teatro medieval es uno de esos campos, pues presenta una problemática similar en
varias literaturas y su tratamiento es similar en las diferentes Filologías. El propósito de esta contribución
no es un intento más de aclarar la cuestión de cómo surge el teatro profano en la Edad Media. La intención
es hacer transparentes algunos de los prejuicios que se manifiestan en su recepción dentro de la Filología.
Como el tema es difícilmente abarcable en su totalidad, se ha optado por un estudio tipológico, sin tener
mucho en cuenta la cronología: como en otras áreas de la Filología, las diferentes opiniones se mantienen
a lo largo del tiempo, sin que se pueda establecer una evolución clara. Por razón de la extensión, el corpus
de obras estudiadas es reducido, aunque representativo de muchas otras opiniones. Se ha dedicado más
interés a obras de tipo general (manuales y similares) que a la bibliografía especializada: ese tipo de obras
suele recoger los “prejuicios” de los estudios especializados y les da una mayor difusión. En ese proceso
necesariamente tienen que simplificarse muchos de los resultados de la investigación, obviar matices,
resumir complejidades.
Teatro religioso, heredero de los primitivos dramas litúrgicos. Su principal representante en la segunda
mitad del siglo fue Gómez Manrique (1412-1490) cuyas obras están formadas por sucesivos monólogos
con escasa acción dramática.
Teatro profano, escenificado habitualmente en las cortes nobiliarias. Aquí se sitúa Juan del Encina (1468-
1529), considerado el padre del teatro español. Además de textos de carácter religioso, Encina escribió
una serie de Églogas protagonizadas por pastores rústicos cuyas costumbres provocan la risa del público.
En sus últimas obras aparece una valoración del amor humano que anuncia ya la mentalidad renacentista.
Doble acción
-Mezcla de lo cómico y lo trágico, en nombre de lo que ocurre en la vida misma. -Mezcla de personajes
nobles y plebeyos; estos intervienen en las acciones de
aquellos, cosa que no se había producido nunca en el teatro Español. -División en tres actos, podemos
diferenciar el planteamiento el nudo y el desenlace, se divide
a su vez, en breves escenas, con los mencionados cambios de lugar y tiempo. -Lírica intercalada.
Cancioncillas y bailes interrumpen el curso de la acción, añaden
espectacularidad y actividad a la representación.* Los protagonistas suelen ser: un caballero joven,
apuesto, valeroso pero capaz a la vez de los más tiernos
sentimientos. La dama, bella y osada, que une sus fuerzas a las del galán para superar todos los obstáculos
que se oponen a su amor. Otro personaje es
el del gracioso, un criado del protagonista con mucha gracia que aconseja a su amo y se suele enamorar
de la criada de la dama, y con este hecho se nos produce.
Gil Vicente; Fue un auténtico poeta lírico. También realizaba comedias, las cuales eran de carácter popular
y se representaban en las casas Señoriales.
Lope de Rueda; Autor dramático, poeta y comediante español llamado el terencio sevillano considerado
como el fundador del teatro español. Natural de Sevilla, nace en los primeros años del Siglo XVI, en 1510
y muere a fines de 1565 o principios de 1566. De oficio batihoja, estuvo casado con la cómica Mariana.
Introdujo mejoras en el modo de representar los espectáculos escénicos, y atraído por la bullanga y la
farándula, entró en una Compañía de teatro de comediantes ambulante (Cómicos de la Lengua) recorrió
muchas ciudades españolas. En ésta, siendo autor, actor y director. Su sencillo y eficaz teatro al recorrer
todos los caminos de la península, congregaba en torno a sí, a los rústicos espectadores. Por ello, fue el
primero que representó en España obras teatrales ante un público popular, en calles y plazoletas logrando
que el teatro se pusiera en contacto con el pueblo.
Palestino; Sobrino del Marqués de Santillana, Gómez Manrique no se consideró hombre de letras, sino
más bien político. Sin embargo, como autor dramático, Manrique ha sido el continuador de la tradición
castellana de los Autos. Su Representación del Nacimiento de Nuestro Señor es una deliciosa pieza llena
de emoción, ternura y viveza escrita para su hermana entre 1458 y 1468, antes de ser corregidor de
Toledo.
Debieron dramatizarse también sus Lamentaciones hechas para la Semana Santa, junto a otras obras
dialogadas que corresponden al ciclo de la Pasión.
Se atribuye también a Gómez Manrique un Auto de la huida a Egipto, basado en los evangelios apócrifos.
Deriva del género latino del Officium Pastorum y muestra a pastores y ángeles dispuestos a adorar a Jesus
Compañero, rival y admirador de Juan del Encina sería el salmantino Lucas Fernández (1474-1542), cuya
obra resulta difícil de fechar, aunque se supone realizada hacia 1500. La vida de Lucas Fernández
transcurrió en Salamanca, donde estuvo al servicio de la catedral.
Siglo XV: Teatro->
El teatro es el género que menos se desarrolla en esta época. Continúa el teatro religioso de tradición
medieval y aparece una
nueva generación que inicia el teatro renacentista, pero el género teatral más interesante del Siglo XV lo
constituye el teatro para ser leído, a imitación
de la comedia humanística italiana, modalidad a la que pertenece La Celestina.
La actividad teatral se halla vinculada en este momento a los lugares
en los que se desarrollan las diversiones populares o las celebraciones religiosas (como el Corpus o la
Navidad). A final de siglo, el teatro se introduce
también en los palacios, donde se realizan los festejos cortesanos.Durante esta época destacan
fundamentalmente en el teatro religioso Gómez
Manrique
y Lucas Fernández, y en el teatro renacentista, Juan del Encina, quien refleja la influencia humanista en
obras como Égloga de Plácida y Victoriano,
donde combina el tono sentimental y los personajes mitológicos. Y además de motivos religiosos,
desarrolla una temática profana. Su obra, como la de
Lucas Fernández, se sitúa entre la tradición medieval y la del Renacimiento. Pero, sin duda, la obra
dramática más importante de esta época es La Celestina,
De Fernando de Rojas
Poesía->
La literatura del XV se caracteriza, ante todo, por el elevado número de poetas del que se tiene
conocimiento porque sus obras han sido recogidas
en las numerosas colecciones de poemas, colectivas o de autores individuales, llamadas cancioneros. En
los cancioneros se recogen los poemas de algunos
personajes de la Corte, que lucían su ingenio a través de estas composiciones. Importantes recopilaciones
son el Cancionero de Stúñiga, el Cancionero de
Baena, el Cancionero musical de Palacio y el Cancionero general (1511) de Hernando del
Castillo.**La poesía amorosa mantiene todavía la influencia de la tradición
trovadoresca de origen provenzal. El amor refleja las convenciones del amor cortés y es concebido como
un servicio en el que el caballero está sujeto al dominio
de la dama.
Es una poesía abstracta, de difícil comprensión por el grado de conceptismo verbal. **
La poesía didáctico-moral se caracteriza por su tono elevado
y solemne, en el que las alusiones eruditas y el lenguaje latinizante reflejan el interés por el mundo clásico,
derivado de la influencia de los tres grandes autores
italianos:
Dante, Petrarca y Boccaccio
*
Juan de Mena (1411-1456
Fue considerado por sus contemporáneos y sucesores como el mejor poeta de su época. Letrado al
servicio de Juan II de Castilla, cultivó
la poesía amatoria y la alegoría moral. Su estilo se caracteriza por la abundante erudición y por el
recargado lenguaje latinizante.
El Laberinto de Fortuna, también llamado Las trescientas, es su obra más ambiciosa. La obra está escrita
en coplas de arte mayor, compuestas por estrofas de
cuatro versos de doce sílabas, que tienen una fuerte cesura, rima consonante y siguen un rígido esquema
acentual.
*Jorge Manrique (1440-1479
Es autor de varias composiciones de asunto amoroso que siguen con fidelidad los patrones del género
cancioneril. Su poema
más conocido, sin embargo, son las Coplas escritas a la muerte de su padre.
En las Coplas se combinan elementos tradicionales de manera original.
Jorge Manrique expresa con lucidez analítica el poder irremisible de la muerte, pero lo
hace sugiriendo el final, sin convocar ante la vista del lector el horror de la destrucción.7
Siglo XVI: Teatro -> En España, se caracterizó por la presencia de dos tradiciones, una de raíz medieval y
otra más culta (primera etapa de Cervantes). La obra de
Lope de Rueda halló sus seguidores más destacados en géneros menores, como el entremés. Con Lope
de Vega, se inició la comedia española, caracterizada, entre
otros rasgos, por la polimetría del verso, la fijación en tres del número de actos y el recurso a tipos mixtos,
como la tragicomedia, la alta comedia y la comedia
heroica, Lope toma elementos de otros autores anteriores a él, o de contemporáneos suyos, en especial
del grupo dramático valenciano.
Rechazo de las tres unidades, más rica en peripecias, sin límites de tiempo y continuos cambios de
escenario, a veces se pueden producir acciones paralelas o de
Doble acción
-Mezcla de lo cómico y lo trágico, en nombre de lo que ocurre en la vida misma. -Mezcla de personajes
nobles y plebeyos; estos intervienen en las acciones de
aquellos, cosa que no se había producido nunca en el teatro Español. -División en tres actos, podemos
diferenciar el planteamiento el nudo y el desenlace, se divide
a su vez, en breves escenas, con los mencionados cambios de lugar y tiempo. -Lírica intercalada.
Cancioncillas y bailes interrumpen el curso de la acción, añaden
espectacularidad y actividad a la representación.* Los protagonistas suelen ser: un caballero joven,
apuesto, valeroso pero capaz a la vez de los más tiernos
sentimientos. La dama, bella y osada, que une sus fuerzas a las del galán para superar todos los obstáculos
que se oponen a su amor. Otro personaje es
el del gracioso, un criado del protagonista con mucha gracia que aconseja a su amo y se suele enamorar
de la criada de la dama, y con este hecho se nos produce
La acción paralela q hemos nombrado antes
Poesía->
Durante el reinado del emperador Carlos V que comenzó en 1517, llega a España la influencia italiana a
través de escritores españoles que habían vivido
en la corte napolitana, atraídos por su fama y esplendor. Aportaron a la lírica española nuevos versos y
estrofas: Versos: el endecasílabo y el heptasílabo que se
combinaban entre sí. Estrofas: soneto, lira, silva, terceto. El poeta renacentista se preocupa por encontrar
nuevas formas para expresar la belleza, y por renovar los
temas de sus obras. El poeta desea crear un mundo de belleza mediante un estilo sencillo. Los temas más
frecuente son: El amor. Se idealiza a la mujer de tal modo
que llega a considerarse como un reflejo de la belleza divina. Este amor idealizado se conoce con el
nombre de amor platónico. La naturaleza. Se concibe como un
símbolo de la perfección divina. Se describe como un remanso de paz, sosiego y armónía donde se
desarrolla la acción amorosa. La mitología. Se utilizan los mitos
y leyendas de los dioses grecolatinos como fuente de inspiración poética; sirviendo a la vez para dar
belleza a la obra.
Características
Utilización de un lenguaje sencillo, sin demasiados adornos literarios; pero de forma muy cuidada. Los
temas son religiosos, morales y filosóficos.
La mitología sirve de base para poner ejemplos sobre algún tema religioso, moral o teológico
Garcilaso de la Vega
Su obra es muy reducida, pero muy importante en el paso de nuestra poesía medieval a la renacentista,
adoptando temas y formas procedentes
del Renacimiento italiano. Cambia el verso octosílabo tradicional por el endecasílabo de gusto
renacentista. Escribíó 38 sonetos cuya temática es el amor que
produce dolor; 5 canciones, 2 elegías y 3 églogas, en las que unos pastores dialogan sobre el amor a orillas
del río Tajo.
Fernando de Rojas nació en La Puebla de Montalbán (Toledo), hacia 1470, en el seno de una familia de
judíos conversos que reaparece en posteriores procesos inquisitoriales por mantener el judaísmo a
escondidas de la Inquisición. De Rojas ayudó a miembros de su familia, los llamados marranos o
criptojudíos, Anusim en la literatura rabínica, afectados por las persecuciones de la Inquisición. Su familia
habría sido perseguida y él mismo ha aparecido en documentos como acusado por la Inquisición,
documentos que demuestran que fue el autor de La Celestina.
Estudió leyes en la Universidad de Salamanca, según él mismo afirma en La carta del autor a un su
amigo, que precede el texto de su obra. Parece documentado que hacia 1496-97 habría obtenido su grado
de Bachiller en Leyes.
Hoy día no se duda de que sea el autor de La Celestina, que habría escrito con pocos más años que su
protagonista, Calisto, que cuenta con veintitrés. Fernando de Rojas rondaría los veinticinco. El autor reveló
su nombre y lugar de nacimiento en un famoso acróstico al principio de la segunda edición del año 1500.
No se le conoce ninguna otra obra ni es mencionado por ninguno de sus contemporáneos.
Se le sabe establecido en la localidad de Talavera de la Reina, población de la que fue alcalde y casado
allí. Su condición de converso influencia en el argumento de su obra, que a decir de la mayoría de los
críticos es obra de alguien de esta condición: se ha dicho que la ausencia de fe firme justificaría el
pesimismo de La Celestina y la falta de esperanza patente en su dramático final.
Murió en 1541 en Talavera de la Reina, entre el 3 y el 8 de abril. Se conserva su testamento, fechado
ese día 3, muy detallado, que ha sido el deleite de los críticos al poder estudiar su abundante biblioteca.
Dejó los libros de derecho a su hijo, que también fue abogado, y los de literatura profana a su esposa. En
el inventario de su biblioteca, y eso es lo extraño, no figura ninguna edición o manuscrito de La Celestina,
a pesar de que cuando murió había al menos 32 ediciones de la obra.
3) el humanismo:
Significado común de “humanismo” Es común asociar la idea de humanismo al saber propio de las
disciplinas humanísticas, de los studio humanitatis, que se consolidan como campo del saber, desde
finales de la Edad Media y dan origen al Renacimiento. Los estudios humanísticos se distinguen del
pensamiento religioso, de las letras sagradas e igualmente del conocimiento demostrativo propio de las
ciencias. Los Studio humanitatis están basados en el famoso trivium de la formación académica medieval,
formada por la gramática, la dialéctica y la retórica y abarcan la filosofía, la filología, la historia, la
literatura, el teatro, entro otras disciplinas y saberes. Pero como bien señala Ernesto Grassi, no todo saber
humanístico puede considerarse como propiamente humanista, como perteneciente a las tradiciones
humanista. Al analizar diversos pensadores italianos de fines de la Edad Media y del Renacimiento, como
Dante, Petrarca, Bruni, Salutati, Veronese, Valla, Alberti, Da Vinci y figuras como Juan Luis Vives y Erasmo,
sostiene que el humanismo se caracteriza además de por un giro radical 3 hacia el estudio del lenguaje,
más que de las cosas mismas, por el aprecio de la experiencia, de la literatura y de la retórica, más que de
una racionalidad pura, el reconocimiento de la historicidad del saber frente a las pretensiones de
conceptos y modelos universales y la valoración de la prudencia como racionalidad práctica sobre
problemas específicos, ante una mera racionalidad teórica o metodológica, así como la preocupación por
el descubrimiento, la creación y la innovación (inventione), más que por la mero análisis o por la
comprobación de lo que ya se conoce. Pero todo este giro innovador tiene el propósito de transformar al
hombre y su entorno social, para devolverle la capacidad creadora, la libertad y la dignidad que el ser
humano tenía en la Antigüedad griega y latina.
El renacimiento en España:
El Renacimiento es la época áurea de España, o lo que llamamos el «Siglo de Oro». El siglo XVI corresponde
a la plenitud del Renacimiento mientras que el siglo XVII corresponde a la época barroca, que suele
denominarse nacional. Durante el primero, España sigue las corrientes universalistas del Renacimiento y
marcha a la par, en cuanto a las direcciones generales, con el resto de las naciones europeas; en el
segundo, se dan los caracteres mas típicos y personales del arte y letras españolas. El Renacimiento se
suele subdivir también en dos períodos que corresponden, el primero al período imperial de Carlos V; y
el segundo al de su heredero, Felipe II. Durante el Primer Renacimiento, sigue la direccción paganizante
que predomina en toda Europa (es el momento de RECEPCIÓN de los influjos extranjeros,
predominantemente italianos, comenzado en el siglo XV). Bajo Felipe II, el período de ASIMILACIÓN, las
tendencias renacentistas se cristianizan, y aunque en el aspecto puramente artístico y formal siguen las
normas precedentes, España se encierra dentro de sí misma, preparando la época nacional que ha de
venir en seguida: es el momento de la CONTRAREFORMA (o REFORMA CATÓLICA), de la ascética y de la
mística, de los grandes poetas religiosos, de afirmación proselitista y apologética, sin picaresca ni sátira
religiosa ni apenas literatura frívola.
El Renacimiento es la época siguiente a la Edad Media e inició lo que se conoce como Edad Moderna.
Desde luego, el Renacimiento con respecto al mundo medieval supuso una auténtica revolución en todos
los sentidos de la vida: político, religioso, cultural, artístico, etc. En este artículo vamos a proximarnos al
contexto histórico y sociocultural del Renacimiento en España. Durante la Baja Edad Media ya se había
ido produciendo un cambio de mentalidad, que triunfa en el renacimiento italiano, en los siglos XIV y XV,
y llega a España en el XVI. Sus rasgos destacados son:
– El renacer de la antigüedad clásica (de ahí le viene el nombre): La estética imita los valores del mundo
clásico. Caracterizado por la presencia de motivos, temas y personajes de la mitología clásica, que
conviven con la fe cristiana.
– Antropocentrismo: A la religiosidad medieval, que hace que la vida gire en torno al amor y al temor de
Dios, sucede una actitud antropocéntrica, según la cual el hombre es el centro y la medida de todas las
cosas, el punto de referencia de todo lo creado (al hablar de esto se nos viene a la cabeza el famoso dibujo
de Leonardo Da Vinci, en el que las medidas del hombre son la perfecta dimensión dentro de un círculo y
un cuadrado). Se confía en el ser humano y sus posibilidades. Además se piensa que el ser humano es
bueno por naturaleza, ya que está hecho a imagen y semejanza de Dios
– El progreso y la ciencia: En la misma línea del punto anterior, la fe y la creencia en los dogmas dejan
paso a la razón, la curiosidad y el espíritu crítico, que serán la base de la ciencia moderna y de los grandes
descubrimientos geográficos, que cambiaron el mundo. Recordemos que en esta época se descubre
América, Galileo expone sus teorías astronómicas, etc.
– El valor del artista como creador: El colectivismo y el anonimato de la Edad Media se sustituye por
el individualismo que destaca al hombre y sus obras: se valora la fama, el dinero, el éxito en la actividad
social o política y se protege la propiedad intelectual y artística.
– Vitalismo: el mundo deja de ser visto como algo triste (valle de lágrimas) y solo el camino para alcanzar
la vida eterna en el cielo, para convertirse en algo que merece vivirse. De manera que el pueblo disfruta
de las celebraciones, mientras que las cortes reales, papales o de los grandes señores se convierten en
centros del arte y la diversión. Hay que aprovechar el momento presente y vivir la vida: ideas extendidas
por medio de tópico del Carpe Diem
En el Renacimiento, se empieza a producir una separación entre la religión y la vida humana. Además la
muerte no se ve como el fin, porque queda otra vida, la de la fama en el recuerdo que dejamos por
nuestras obras. Esta idea del valor de la fama (que llega hasta hoy día) nace en el Renacimiento.
En cuanto a la historia, España en el siglo XVI alcanza la cima política y militar. Domina un extenso imperio
en Europa, América y Filipinas (incluso une a este vasto dominio los territorios portugueses en ultramar,
cuando Felipe II es nombrado rey de Portugal).
Dos reyes son los protagonistas del siglo: Carlos V y su hijo Felipe II.
La sociedad española está llena de contradicciones, por un lado el oro y la plata de América traen una
riqueza que es mal distribuida.
Poco a poco se impone la sociedad capitalista, y en este sentido el dinero, y no los privilegios de
nacimiento, va a marcar la pertenencia a las clases sociales.
Sigue habiendo los tres estamentos tradicionales: nobleza, clero y campesinado, a las que habría que unir,
los cada vez más importantes gremios de trabajadores artesanos y comerciantes en las ciudades; y los
hidalgos, que vendría a ser laclase media actual, un grupo mayoritario perteneciente a la más baja
nobleza, que vive de las pequeñas rentas y de las armas (y que fue protagonista de buena parte de las
narraciones del siglo XVI, de manera destacada, claro está, en el famoso hidalgo de la mancha).
Características:
El renacimiento se caracteriza por:
La emulación del arte clásico grecorromano
La búsqueda de un nuevo lenguaje que refleje las nuevas inquietudes. Se busca la Belleza en la naturaleza,
en el hombre y en sus creaciones
El retorno a la medida humana: el hombre renacentista, que conoce a los clásicos y protagoniza los
avances científicos y grandes descubrimientos, se siente el centro del Universo.
La aportación de una visión unitaria en la obra de arte. En la obra gótica el espectador debe moverse en
el espacio para apreciarlo desde diferentes puntos de vista. En la obra renacentista se trata de encontrar
la unidad. En la arquitectura, se intenta crear un espacio interior que el espectador puede abarcar de un
solo vistazo. Esto se logra bajando la atura de los techos, subrayando las líneas de perspectiva que dirigen
la mirada hacia el fondo.
La individualidad. Desaparece el anónimato artístico y aparece la figura del genio..
A pesar de su carácter secular, el Renacimiento no supone una ruptura con la religión cristiana ni con la
Iglesia sino que las incluye en su visión del mundo.
El movimiento renacentista se extenderá, desde Italia, a otros países europeos.
Representantes:
PINTORES Y ESCULTORES DEL QUATTROCENTRO
1. MASACCIO (1401 -1428)
Tommaso di ser Giovanni di Mone Cassai llamado Masaccio (San Giovanni in Altura, hoy
San Giovanni Valdarno, Arezzo, 21 de diciembre de 1401 – Roma, otoño de 1428) fue un pintor
cuatrocentista italiano. A pesar de la brevedad de su vida, su obra tuvo una importancia decisiva en
la historia de la pintura: generalmente se considera que fue el primero en aplicar a la pintura las leyes de
la perspectiva científica, desarrolladas por Brunelleschi
Su primera obra documentada, el tríptico de San Juvenal (1422), es una creación que supera plenamente
el gótico. En el posterior políptico para el Carmine de Pisa (1426), la composición a base de
pocas figuras esenciales y la plasmación natural de la luz definen su estilo característico, que se despliega
plenamente en su obra maestra: el ciclo de frescos sobre la Vida de san Pedro y la Expulsión del Paraíso,
que pintó para la capilla Brancacci de Santa Maria del Carmine, en Florencia, en colaboración con
Masolino.
Las figuras de Adán y Eva expulsados del Paraíso son prototípicas de la concepción que Masaccio tenía de
la pintura, basada en la masa y el volumen de las figuras, en una única fuente de luz y en la representación
científica de la perspectiva. La importancia de estos frescos fue tal que todos los grandes pintores
posteriores, incluidos Leonardo, Rafael y Miguel Ángel, los estudiaron.
Probablemente, en 1428, Masaccio realizó su última obra: un fresco de la Trinidad en Santa Maria Novella,
que ha pasado a la posteridad como un ejemplo emblemático de perspectiva y composición. Poco
después de acabar esta pintura, Masaccio se trasladó a Roma, donde murió de repente, se ha llegado a
decir que por envenenamiento. Era una figura prácticamente desconocida, pero su obra no tardó en
proyectarlo al primer plano de la actualidad y ejerció una gran influencia durante el Renacimiento.
2. PIERO DELLA FRANCESCA
(Piero di Benedetto; Borgo San Sepolcro, actual Italia, h. 1416-id., 1491) Pintor italiano. Por su profundo
conocimiento de la pintura florentina, se cree que pasó una larga temporada en Florencia, pero su
presencia en dicha ciudad sólo está documentada en 1439, cuando colaboraba con Domenico Veneziano
en los frescos (perdidos) de San Egidio. Su aprendizaje florentino parece indudable en obras como el
Bautismo de Cristo, deudoras del vigoroso planteamiento plástico de Masaccio, del riguroso orden
compositivo de Fra Angélico o de la luminosidad de las gamas cromáticas de Domenico Veneziano.
Después de realizar otros frescos, hoy perdidos, hacia 1452 Piero della Francesca empezó a trabajar en el
coro de San Francesco de Arezzo, donde dejó un magnífico ciclo sobre la Leyenda de la Vera Cruz. Esta
obra, que es considerada la más sobresaliente de toda su producción, está basada en una leyenda
medieval muy compleja, y plasmada con grandiosidad y solemnidad, mediante un perfecto estudio de las
proporciones, de tal forma que naturaleza, arquitectura y personajes se entrelazan y relacionan con una
armonía y un equilibrio perfectos.
Al acabar esta obra (1465), Piero fue llamado a la corte humanista de Federico de Montefeltro, en Urbino,
donde permaneció casi hasta el final de sus días. Allí pintó el famoso Díptico de Urbino, con los retratos y
los «triunfos» de Federico y su esposa, una de las obras más notables del Quattrocento italiano, y la
enigmática Flagelación, de la que se han hecho numerosas interpretaciones.
3. SANDRO BOTTICELLI (1445-1510)
(Alessandro di Mariano Filipepi; Florencia, 1445 - id., 1510) Pintor italiano. Muy valorado en la actualidad,
Sandro Botticelli no se cuenta entre los grandes innovadores del Renacimiento, sino que se inscribe más
bien en un grupo de pintores que rehuyó el realismo a ultranza y se inclinó por un estilo basado en la
delicadeza, la gracia y un cierto sentimentalismo.
En 1470, Botticelli, que contaba ya con un taller propio, se introdujo en el círculo de los Médicis, para los
que realizó sus obras más famosas. Un primo de Lorenzo el Magnífico, Pier Francesco de Médicis, le
encargó la alegoría de La primavera y también, al parecer, El nacimiento de Venus y Palas y el centauro.
Fue toda una novedad en aquella época realizar obras de gran formato que no fueran de temática
religiosa, y ello se debió seguramente a la vinculación del mecenas con la filosofía neoplatónica,
cuyo carácter simbólico debían reproducir las obras encargadas. De ellas se han realizado
interpretaciones de enorme complejidad, que van mucho más allá de su gracia evocadora.
A la misma época corresponden también La adoración de los Reyes Magos y el Díptico de Judit, obras
igualmente emblemáticas. El hecho de que en 1481 fuera llamado a Roma para decorar al fresco la Capilla
Sixtina junto con otros tres grandes maestros, hace suponer que ya gozaba de un gran prestigio. A su
regreso a Florencia realizó obras, como la Natividad mística, más solemnes y redundantes,
probablemente influido por la predicación tremendista de Savonarola. Se le deben también
bellísimos dibujos para un manuscrito de la Divina Comedia de Dante.
Eclipsado por las grandes figuras del siglo XVI italiano, Botticelli ha permanecido ignorado durante siglos,
hasta la recuperación de su figura y su obra a mediados del siglo XIX. Su estilo se perpetuó en cierto modo
a través de los artistas formados en su taller, entre ellos el hijo de Filippo Lippi, Filippino Lippi.
4. PERUGINO (1450-1523)
Città della Pieve, actual Italia, h. 1445-Fontignano, id., 1523) Pintor italiano. Vivió y trabajó esencialmente
en Perugia, de donde le viene el sobrenombre. Se cree que se formó en Florencia con A. Verrocchio y está
documentada su presencia en Roma, donde pintó en la Capilla Sixtina el famoso fresco de la Entrega de
las llaves a san Pedro. Tuvo un próspero taller en Perugia, en el que en 1496 ingresó Rafael, que heredó
los principales rasgos estilísticos de su maestro: composición clara y armoniosa, figuras idealizadas y
tratamiento suave y sentimental de los temas religiosos. Decoró al fresco la sala de audiencias del Colegio
del Cambio de Perugia, pero se le recuerda sobre todo por sus obras de caballete, en particular la
Asunción y los Desposorios de la Virgen. Fue autor también de algunos retratos de mérito.
5. DONATELLO
Donatello fue el hijo de Nicolo di Betto Bardi, un cardador de lana, y nació en Florencia, probablemente
en 1386. Su padre era de vida tumultuosa que participó en la revuelta de los Ciompi, un levantamiento
popular del año 1378, organizado por los cardadores de lana. Nicolás Maquiavelo describió esta revuelta
años más tarde (1520-1525), dentro de su Historia de Florencia. Más tarde, su padre, también participó
en otras acciones en contra de Florencia, que le condujeron a ser condenado a muerte y después
indultado, fue un personaje muy diferente a su hijo, que era noble, elegante y delicado, por sus amigos y
demás artistas era conocido bajo el nombre de Donatello.
Según unos informes de Vasari, el artista pasó sus últimos días abandonado por la fortuna, sus últimos
años a consecuencia de una enfermedad paralizante los pasó en la cama y sin poder trabajar.
Murió en Florencia en el año 1466 y se dispuso su enterramiento en la Basílica de San Lorenzo en la cripta
debajo del altar y al lado de la tumba de Cosme el Viejo. Entre los hombres que portaron el ataúd se
encontraba Andrea della Robbia. El cenotafio de Donatello fue realizado en 1896 por el escultor Raffaello
Romanelli.
A su muerte aún le quedó la deuda de 34 florines de pago por el alquiler de su casa y esto ha dado lugar
a debatir sobre su estado real de pobreza, pero la cuestión parece más bien relacionada con su total
indiferencia en los asuntos financieros, que en toda su vida demostró tener el artista, por las cuestiones
económicas. Muchas anécdotas dan testimonio de esta actitud, como cuando en el momento de su mayor
apogeo de trabajo en su taller, solía colgar una cesta llena de dinero, del que sus ayudantes podían
aprovechar libremente, según fuera necesario. Los honorarios que recibió por su trabajo le habían
asegurado grandes ganancias y también por otra parte Cosme de Médicis le había concedido una paga
vitalicia semanal hasta el fin de su vida.
6. GIOGIONE
Pintor italiano que revitalizó la escuela veneciana de pintura y fue un maestro sin igual en el retrato. Los
pocos datos que existen sobre su vida y su carrera artística son confusos, pero parece que nació en
Castelfranco y que fue discípulo del pintor veneciano Giovanni Bellini. Probablemente su nombre
verdadero fuera Giorgio Barbarelli. No existen obras firmadas ni fechadas por él; se le atribuye un
pequeño número de ellas, entre las que se incluyen el Retablo de Castelfranco (1504, Castelfranco,
Veneto), Los tres filósofos (Kunsthistorisches Museum, Viena, Austria), La tempestad (Academia, Venecia,
Italia) y Concierto campestre (1510, Museo del Louvre, París, Francia). Hay otras obras que se le atribuyen
basándose en datos indirectos, aunque muchas son todavía objeto de debate. La mayoría de las obras de
Giorgione están compuestas por una figura o un grupo defiguras integradas en paisajes amplios.
7. TIZIANO
(Pieve di Cadore, actual Italia, h. 1490-Venecia, 1576) Pintor italiano. Aunque Tiziano alimentó durante
los últimos años de su vida la idea de que había nacido en 1475, para hacer creer que era un anciano
venerable e inspirar respeto y compasión, la crítica moderna ha establecido casi con total seguridad que
nació en 1490 y que murió a una edad más que respetable, con ochenta y seis años. Recibió su primera
formación en el taller de Giovanni Bellini, del que salió a los dieciocho años para integrarse en la escuela
de Giorgione.
En 1545-1546, Tiziano, que sólo había abandonado Venecia en 1511 para trabajar en Padua, realizó un
viaje a Roma, que supuso el punto de partida hacia un nuevo tratamiento del color a base de pinceladas
largas y atrevidas, y de manchas y toques que deshacen las formas y dan una apariencia ligera y agradable
a las pinturas, lo cual esconde el gran trabajo subyacente. Entre 1548 y 1562 fue reclamado por Carlos I y
luego por su hijo Felipe II, para quien, además de retratos, realizó una serie de cuadros de tema mitológico
denominados por el propio pintor «poesías» por su carácter idílico y distante.
Su última obra documentada es la Piedad de Venecia, que presenta ciertas afinidades con el manierismo.
La grandeza de Tiziano como pintor, su fama de artista inimitable y la gran influencia que ejerció sobre
sus coetáneos y sucesores contrastan con su carácter de hombre avaricioso, que siempre se quejaba de
ser pobre pese a las grandes riquezas que había acumulado, y que se servía en ocasiones del engaño para
obtener ventajas.
Arquitectos:
1. FILIPO BRUNELESCHIL
Filippo di Ser Brunellesco Lapi, Filippo Brunelleschi (1377 - 15 de abril de 1446) fue un arquitecto, escultor
y orfebre renacentista italiano.
Es conocido, sobre todo, por su trabajo en la cúpula de la catedral de Florencia Il Duomo. Sus profundos
conocimientos matemáticos y su entusiasmo por esta ciencia le facilitaron el camino en la arquitectura,
además de llevarle al descubrimiento de la perspectiva cónica.
Fue contemporáneo de Leon Battista Alberti, Ghiberti, Donatello y Masaccio.
Su biografía viene descrita en el cuento de Giorgio Vasari: Vida de los mejores arquitectos, pintores y
escultores italianos (Vite de' più eccellenti architetti, pittori, et scultori italiani, da Cimabue insino a' tempi
nostri — 1542–1550).
2. LEON BATISTA ALBERTI
(Génova, 1404-Roma, 1472) Arquitecto, teórico del arte y escritor italiano. Alberti fue, con Leonardo da
Vinci, una de las figuras más representativas del ideal del hombre del Renacimiento, ya que reunió en
su persona todos los conocimientos y habilidades de la época: erudito, humanista, escritor, arquitecto,
escultor, pintor, cortesano y hombre de mundo.
En Roma, adonde se trasladó por deseo expreso del papa Nicolás V, redactó De re aedificatoria, un
completo tratado de arquitectura en todos los aspectos teóricos y prácticos. Posteriormente se desplazó
a Rímini, donde construyó el Templo Malatestiano, y a Mantua, donde se le deben las iglesias de San
Sebastián y San Andrés. Estas obras, que constituyen la síntesis de sus criterios arquitectónicos, se
convirtieron, junto con las de Brunelleschi, en los grandes modelos del arte constructivo renacentista.
También escribió un tratado sobre la escultura (De statua) y algunas obras de perspectiva y matemáticas.