Atlas Histc3b3rico de La Espac3b1a Medieval
Atlas Histc3b3rico de La Espac3b1a Medieval
Atlas Histc3b3rico de La Espac3b1a Medieval
DE lA EspAñA mEDIEvAl
Consulte nuestra página web: www.sintesis.com
En ella encontrará el catálogo completo y comentado
© EDITORIAL SÍNTESIS, S. A.
Vallehermoso, 34. 28015 Madrid
Teléfono: 91 593 20 98
http://www.sintesis.com
Reservados todos los derechos. Está prohibido, bajo las sanciones penales y el resarcimiento
civil previstos en las leyes, reproducir, registrar o transmitir esta publicación, íntegra o
parcialmente, por cualquier sistema de recuperación y por cualquier medio, sea mecánico,
electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopia o cualquier otro, sin la autorización previa
por escrito de Editorial Síntesis, S. A.
ÍNDICE
1. La Hispania hispanovisigoda
5
5. La Marca Hispánica y los orígenes de los condados catalanes (800-897)
10. Territorio, sociedad y poder en León y Castilla durante la Alta Edad Media
6
12. Los reinos hispánicos hasta la época de la conquista de Toledo (1035-1085)
17. Fronteras interiores y retaguardia cristiana durante la separación de los Reinos de León y Castilla
(1157-1230)
18. La evolución de la sociedad de frontera y las nuevas repoblaciones entre el Duero y Sierra Morena
(1157-1230)
7
19. La corona de Aragón en su proyección peninsular y occitana (1162-1213)
20. El bloqueo de Navarra y las pugnas con los reinos vecinos (1150-1234)
8
27. Poder monárquico y ordenamientos locales (siglos XII-XIII)
29. La Corona de Castilla en la Baja Edad Media: cambio de dinastía, conflictos políticos
y reformas institucionales
30. Territorios e instituciones de los estados de la Corona de Aragón y Navarra en los siglos XIV y XV
9
Nota introductoria
la Hispania hispanovisigoda
La irrupción asdingos. Y otra rama de los vánda- unos 200.000 visigodos o poco más
de Los bárbaros. los, los silingos, se ubicaron en la llegaron, frente a varios millones de
eL reino de TouLouse Bética, si bien en 429 pasaron a Áfri- población autóctona, tres o cuatro
(418-507) ca. la tarraconense no fue contro- según se estima. los terratenientes
lada al principio. en 415, al mando hispanorromanos generalmente pac-
el final de la antigüedad tardía de ataúlfo, entraron en esta provin- taron con los recién llegados y sal-
en la Península ibérica comparte con cia los visigodos. varon sus propiedades. en el repar-
los otros países de la parte occidental el sucesor de ataúlfo, Valia, pac- to que se hizo con las invasiones los
del imperio Romano, en desintegra- tó con la declinante Roma de Hono- visigodos tomaron una parte de los
ción desde los siglos iii y iV, los efec- rio un tratado o foedus en 418. los bienes, pero la mayor parte de las tie-
tos de una crisis estructural irreversi- visigodos recibían, como federados rras permanecieron en manos de los
ble: crisis de la sociedad esclavista, del imperio, la cesión de los territo- antiguos dueños y las comunidades
autonomía de las grandes propieda- rios del sur de las Galias, con capital campesinas. el estado, no obstante,
des terratenientes en el campo, hun- en toulouse. desde ahí ejercieron su y en parte la cultura y la aristocra-
dimiento de los pilares de la sociedad influencia en la Península. cia, se vieron afectados por los apor-
tardorromana, esto es, la ciudad y el durante el reino visigodo de tou- tes de los dominadores germánicos
poder público de base jurídica y legi- louse (418-507) se fueron sucedien- en mayor medida de lo que corres-
timidad imperial. do las pugnas entre pueblos bárba- pondería al peso demográfico.
los pueblos bárbaros, en ese con- ros en la Península: hegemonía de en la segunda mitad del siglo V
texto de crisis, entraron en varias olea- los vándalos en las primeras décadas los visigodos dejaron a los suevos
das desde 409, cuando los primeros del siglo V; dominio de los suevos recluidos en el noroeste, mientras
invasores cruzaron los Pirineos: sue- desde 430 hasta 456; triunfo, final- que ciertas zonas montañosas y algu-
vos, vándalos y alanos. Hacia 411 mente, de los visigodos desde 456. nos pueblos como los vascones per-
los alanos se establecen en lusitania al principio la dominación de los manecían al margen del control de
y oeste de la Cartaginense. los sue- bárbaros fue superficial y militar. los los invasores. Grandes monarcas
vos se asentaron en Galicia, junto invasores eran una minoría ante la visigodos asentaron el poder de los
con una rama de los vándalos, los población hispanorromana. apenas recién llegados en casi toda Hispa-
I N VA S I O N E S G E R M Á N I C A S D E L S I G L O V
(Desde 415)
VISIGODOS
409
(411)
SUEVOS
415
Braga
Barcelona
7
41
6-
41
Toledo
17
6 -4
(411)
ALANOS 41
Lisboa
Mérida
426
(411)
VÁNDALOS
Cartagena
Sevilla
429
7
41
6-
41
Penetración de los suevos, vándalos y alanos, con las áreas de mayor arraigo
429 Penetración de los visigodos (primeras oleadas)
Límite aproximado entre las zonas de influencia sueva y visigoda a mediados
del siglo V
16
nia. teodorico ii (453-466) comple- augústulo. eurico fue también quien godos dejaron la Galia y comenza-
tó el dominio visigodo de casi toda otorgó un importante código cono- ron su identificación con Hispania,
la Península. Y su sucesor eurico cido como Código de Eurico. dando lugar a un gran período histó-
(466-484), aunque desde toulouse, alarico ii (484-507) acentuó la rico conocido como Reino de tole-
se proclamó ya rey de Hispania. el integración en Hispania. Cuando en do (507-711).
imperio Romano occidental caía 507 fue derrotado por los francos en
definitivamente en 476 con Rómulo Vouillé, cerca de Poitiers, los visi-
Hegemonía visigoda ción de éstos sobre el sureste de His- cias autóctonas en los montes aure-
y esTabiLización pania. desde atanagildo la capital genses y Sabaria. también había
deL reino de ToLedo del reino se estableció en toledo. sofocado resistencias hispanorro-
(507-586) el gran monarca del siglo fue, sin manas en el sur, con la importante
duda, leovigildo (569-586). luchó conquista de Córdoba de 572. tan
Hasta mediados del siglo Vi hubo contra francos, vascones, suevos y sólo la costa sur mediterránea per-
una supremacía o tutela ostrogoda bizantinos. estos dos últimos apo- manecerá en manos bizantinas. en
sobre Hispania. luego un período de yaron una rebelión fracasada de su relación con los pueblos del norte,
anarquía política, entre 549 y 569. católico hijo Hermenegildo entre 580 leovigildo perfeccionó los disposi-
la rebelión de atanagildo contra y 585. Hacia 585 leovigildo consi- tivos defensivos frente a ellos. Y rea-
agila precipitó la intervención bizan- gue incorporar el territorio suevo y lizó campañas militares contra los
tina, fruto de la cual fue la domina- parte del sureste. Combate resisten- montañeses, como las que se produ-
Francos
s
e ns i
Astures
Cantabri Vascones
bo n
Iria Lucus
Legione
Nar
Auria Asturica
um
Montes
vor
Tude Auregenses
su e
Senimure
Sabaria Caesaraugusta
(sappos)
m
Portucale Barcinona
ru m
Tarracona
gnu
Lamecum Salamantica
o ho
Re
Viseum ig
vis
Conimbrica Cauria um
e gn
R Toletum
Valentia
Emerita
Olisipo
Ilici
Corduba Orospeda
Principales núcleos
Límites del reino suevo antes de 585
Zonas sin control claro por los visigodos o suevos: resistencias indígenas
Zonas sin control claro por los visigodos: población hispanorromana
Zonas de influencia o dominio bizantino
17
C O N Q U I S TA S Y U N I F I C A C I Ó N T E R R I T O R I A L P O R L E O V I G I L D O ( 5 6 9 - 5 8 6 )
Amaya Victoriacum
(574) (581)
Cantabria
Montes (574)
Auregenses
(575)
Sabaria
(573)
Ebusa
jeron en 574 en la llamada Cantabria, monios mixtos y la convergencia de ya para el siglo Vii– sobre los nue-
que en el siglo Vii se configura intereses patrimoniales. Revisó la vos ducados de asturica, la citada
como circunscripción fronteriza, de legislación de eurico y los ordena- Cantabria y Vasconia. además de las
difícil ubicación, ya que se supone mientos anteriores, al elaborar el grandes provincias y ducados, se
que estaba situada entre Peña ama- Codex Revisus o Antiquae. adoptó establecieron ámbitos más reduci-
ya y las montañas de la Rioja. el los símbolos principales de supre- dos, los territoria, bajo el mando de
nombre derivaría de su función de macía de la monarquía: corona, comites o condes. No es seguro que
marca regia orientada al norte para espada, manto, anillo. Y puso en pie todos los ámbitos de la administra-
integrar las regiones antiguamente un aparato político central basado en ción de la Hispania visigoda fueran
ocupadas por cantabri. el Officium Palatinum y el Aula puestos en pie ya en época de leo-
leovigildo fue importante igual- Regia. desde el punto de vista terri- vigildo, ya que se sabe que la tarea
mente en la definición del estado. en torial, el reino quedaba dividido en continuó tras él, pero es indudable
su reinado las diferencias de origen los grandes espacios regionales, bajo que su reinado sentó las grandes
entre población de procedencia goda la autoridad de duques o duces, ya bases de la organización central y
y población hispanorromana se dilu- fuera con mando sobre las antiguas territorial del estado.
yeron, con la legalización de matri- provinciae o bien –así se constatará
18
REYES VISIGODOS EN HISPANIA
eL apogeo de tipo urbano, aun en su mínima frecuentemente entre los reyes visi-
de La monarquía expresión, en contraste con un abru- godos. Uno de estos momentos fue
caTóLica y Las mador mundo ruralizado, formado por la deposición de Suintila por Sise-
Tensiones cenTrífugas los vici o loci y villae, palabra esta últi- nando en 631. este último, duque de
(586-681) ma que significa tanto grandes explo- Septimania, se hizo con el trono. el
taciones como aldeas. de todos modos, argumento de la tiranía del rey
el proceso de integración entre el peso demográfico y económico de depuesto fue consagrado en el iV
hispanorromanos y visigodos, sepa- las civitates era muy precario, salvo Concilio de toledo de 633, bajo el
rados aún por diferencias religiosas, pocas excepciones: tan sólo toledo, auspicio de una teoría política cuya
se acentuó con la conversión de Zaragoza, mérida, Corduba, elvira e paternidad sin duda recae en el céle-
Recaredo del arrianismo al catoli- Hispalis tenían unas características pro- bre autor de las Etimologías.
cismo. tras hacerlo él mismo, el iii piamente urbanas. en ellas residían Con posterioridad, otros episodios
Concilio de toledo de 589 acabó con importantes sectores aristocráticos. el de cambios imprevistos en la suce-
el pasado arriano de los visigodos, resto de élites terratenientes residieron sión de los reyes encontraron asi-
quedando unificado el reino desde en el campo. mismo el refrendo de la ideología
este punto de vista. es el principal en el siglo Vii la iglesia fue tam- política de la iglesia. Pese a que los
acontecimiento del reinado de Reca- bién quien aportó el principal arma- Concilios V, Vi y Viii (636, 638,
redo (586-601). Unas décadas des- zón doctrinal e institucional del rei- 653) fijaban el carácter formalmen-
pués Sisebuto (612-621) intentó sin no. los Concilios de toledo fueron te electivo, los reyes quisieron aso-
éxito la conversión de los judíos. uno de los pilares del reino. Y la pro- ciar el trono a sus hijos: Chintila a
en el siglo Vii la iglesia adquirió un pia teoría política de la monarquía tulga y Chindasvinto a Recesvinto.
protagonismo extraordinario. Repre- debió mucho al pensamiento ecle- estas y otras prácticas sucesorias pro-
sentaba la continuidad con la cultura siástico. desde ese siglo la unción vocaron hace décadas intermina-
y con la gran propiedad. extendía su regia daba a la iglesia un papel de bles debates académicos sobre si la
influjo a través de obispados, parro- superioridad sobre los reyes y sa- monarquía visigoda fue electiva o
quias y abadías, configuradas éstas cralizaba la figura del monarca. la hereditaria. la discusión tiene mu-
como entidades a menudo autónomas, figura señera de esa época fue San chos matices, pero la práctica políti-
muy atomizadas, envueltas en con- isidoro (556-636). aparte de su pen- ca de la monarquía sugiere que coe-
flictos jurisdiccionales y de rentas con samiento teológico y filosófico –con xistieron ambos sistemas, si bien
los obispos. Sin duda eran éstos, a tra- tratados doctrinales y apologéticos–, cada vez más, a lo largo del siglo Vii
vés de unas provincias eclesiásticas fue quien dio cobertura intelectual al la voluntad de dejar el trono a sus
herederas de la antigüedad, la princi- sistema sucesorio regio a partir de la hijos, si no algo siempre consegui-
pal referencia del poder del clero. la aceptación legitimada de los hechos do, sí fue una frecuente predisposi-
existencia de obispos convertía sus consumados, bajo la autorización de ción de los reyes. Otra práctica fre-
sedes en civitates, los únicos núcleos la iglesia. estos cambios se dieron cuente fue la de golpes de estado
19
S E D E S E P I S C O PA L E S Y P R O V I N C I A S E C L E S I Á S T I C A S
DEL REINO DE TOLEDO (SIGLO VII)
is
Britannia
ens
Astures
Cantabri
bon
Iria Lucus Vascones
Nar
Pampilona
Auria Asturica Oca Empuria
Urgellum
Tude Calagurri Osca Gerunda
Palencia
GallaeciaÊ Tirassona Ausona
Bracara Ilerda Egara
Oxoma Caesaraugusta Barcinona
Portucale Ta
Lamecum Segobia rra Tarracona
Salamantica co
Viseum Complutum ne Dertosa
Abela ns
Eminium Ercavica is
(Conimbrica) Cauria Toletum Segobriga
Egiditania
Valeria
Valentia
Olysipona Lusitania Emerita Carthaginensis Saetabis
Dianium
Elbora Oretum Elo
Castulona Ilici
Pax
Corduba Biatia
Tucci Bigastri
Italica Mentesa Carthago
Elepla Spartaria
Hispalis Iliberris Acci
Urci
Ossonoba Baetica Malaca
Assidona Zona no dominada por los reyes de Toledo
Sede episcopal / metropolitana
Sedes sin continuidad en la época de la Reconquista
Límite de provincias eclesiásticas
apoyados por un sector de la aristo- todo ello coexistió con una fuerte por parte de monasterios y obispa-
cracia. así Chindasvinto depuso a ideología de la monarquía. dos ayudaba a debilitar la posición
tulga y ervigio a Wamba. de todos modos, la privatización del campesinado. incluso los siervos
estas tensiones podrían encua- del poder se había ido instalando en a los que la iglesia manumitió que-
drarse dentro del gran conflicto polí- todas las esferas de la sociedad daron sometidos a ella, como liber-
tico que se fue dando a lo largo del durante la larga duración. Hay que tos ab obsequium ecclesiae.
siglo Vii entre reyes y aristócratas. tener en cuenta que tendencias que Quizá Wamba (672-680) fue el
la cohesión que en teoría se daba procedían de la época hispanorro- último rey visigodo que trató de res-
entre ellos a partir de la fidelitas y la mana, como la entrega de tierras a tar influencia política a la aristocra-
entrega de tierras de los reyes a los cambio de servicios, los vínculos cia rampante. Su reinado fue tam-
optimates y a los gardingos, que era personales y la dependencia bajo los bién notable por las guerras contra
el séquito militar regio, no evitó los poderosos –ejércitos de bucelarios, los vascones, el aplastamiento de la
roces frecuentes. los especialistas patrocinium– convergieron con otras sublevación del duque Paulo en el
tienden a ver el largo reinado de aportaciones de los visigodos, como noreste y las reformas militares, ten-
Recesvinto (653-672) como el la consistencia de algunas estirpes dentes estas últimas a formar un ejér-
momento en que la balanza empezó aristocráticas– por encima de todas, cito leal bajo el mando del rey. la
a favorecer el poder aristocrático. el la de los baltos, a la que pertenecían ley militar del 673 intentaba poner
Liber Iudiciorum, o Lex visigotho- muchos reyes– o los vínculos perso- bajo las órdenes regias a todos, des-
rum, que recopilaba y refundía orde- nales propios del comitatus o séqui- de los ejércitos privados de terrate-
namientos legales anteriores, refleja tos guerreros típicos de los germa- nientes y obispos hasta las fuerzas
una sociedad que algunos autores nos. desde el punto de vista político del ejército público, con cada jefe de
han identificado como de progreso prosperaba la aristocracia a costa del unidad –tiuphados, centenarios,
en la “feudalización”, sobre todo por poder regio. Socialmente, lo hacía a decanos–, además de gardingos,
el reconocimiento de la hegemonía costa del campesino, fuera éste libre, duques y condes. Pero estas refor-
social de la aristocracia y el triunfo encomendado o siervo. la absorción mas militares fracasaron.
de los vínculos privados. No obstante sin retorno de bienes patrimoniales
20
crisis y HundimienTo ma de guerra civil entre los partidarios meseta– en lugar del típico hábitat en
deL reino visigodo de Vitiza, que proponían como rey a villae, la población ocupaba espacios
(680-711) agila ii, y los partidarios de don Rodri- más amplios identificados con comu-
go, el rey no aceptado por todos. Cuan- nidades de valle o poblados fuertes eri-
el fracaso de Wamba, que en 680 do los musulmanes desembarcaron cer- gidos en sitios altos y con un radio de
se vio obligado a dejar el trono a ca de Guadalete en 711 no se influencia comarcal, el pastoreo y el
ervigio, considerado un instrumen- encontraron enfrente con un estado uni- saltus predominaban frente a la agri-
to de la aristocracia, marcó el triunfo tario y fuerte. Hallaron un reino divi- cultura, los asentamientos eran más
de ésta. el Xiii Concilio de tole- dido y desintegrado y una sociedad inestables, las creencias y supersticio-
do de 683 otorgaba a los aristócratas desanimada y empobrecida. nes de origen pagano no habían de-
inmunidad y participación onerosa estas tendencias serían aplicables a saparecido en muchos sitios aún, la
en el fisco y el patrimonio regio. todo el reino con la importante excep- cristianización se abría paso con difi-
ervigio (680-687) hizo una reelabo- ción de las zonas septentrionales, que cultades –los eremitorios desempeña-
ración legal aún más favorable a las escapaban aún mucho más a las redes ban un gran papel–, la escritura no se
capas altas de la sociedad. de la monarquía, no digamos ya en utilizaba y las estructuras gentilicias
desde este reinado el poder monár- situaciones de crisis. No olvidemos todavía no se habían disuelto, si bien
quico estuvo bajo mínimos. la frag- que desde leovigildo hasta el fin del esto último no lo aceptan todos los his-
mentación del poder, la pérdida de los reino de toledo las montañas del nor- toriadores hoy día. Por el contrario, al
bienes fiscales del estado y las dispu- te indicaban una situación diferente, sur de esa franja montañosa septen-
tas continuas marcan la situación de los una especie de limes, aunque no lo fue- trional, es decir, en la mayor parte del
últimos reinados. a finales del siglo ra técnicamente. las diferencias se reino, controlado de forma efectiva por
había crisis económica, pestes y ham- debían no sólo al hecho de ser zonas la monarquía, la iglesia o la aristocra-
brunas. Se agravó asimismo la situa- no controladas por la monarquía, y de cia, la realidad era otra: las aldeas, las
ción de los judíos, acusados de cons- ahí los dispositivos de defensa –guar- grandes propiedades, el aprovecha-
piración, por lo que fueron perseguidos niciones, cecas, demarcaciones de miento más acentuado del ager –cere-
en 694, según señala el XVii Concilio frontera como el ducado de Cantabria, ales, vid, producción hortofrutícola–,
de toledo. los últimos años fueron de etc.–, sino por el hecho, más bien un índice de cristianización alto y efec-
auténtica anarquía. el hijo de Vitiza, estructural, de que en esas regiones tivo, una gran implantación eclesiás-
agila ii, a quien aquél quiso asociar el cantábricas no regían las pautas de la tica, unas estructuras sociales basadas
trono, fue depuesto por los aristócra- formación social que eran caracterís- en grandes diferencias verticales y en
tas, que colocaron en el sitial a Rodri- ticas del resto. familias conyugales, marcaban, entre
go, pero éste no logró contar con los en efecto, al norte –y otras áreas otros rasgos, el estilo de vida caracte-
apoyos de todo el reino. Había un cli- montañosas del centro y oeste de la rístico.
Astures
(613)
Pésicos
Ruccones
(613)
Cantabri Vascones
(673)
Bergium
Mave
Victoriaco
León Río
erga
Eb
Saldaña ro
Amaya
Ducado de Cantabria
Pisu
Río
Astorga
Oca
la
Cea
Es
Río Calahorra
Río
Limes aproximado
Obispados visigodos
uey
Cecas visigodas
d
era
(613)
y año de las principales campañas contra ellos
21
2
P O S I B L E S R U TA S P R I N C I PA L E S D E L A E N T R A D A Y E X PA N S I Ó N I S L Á M I C A
DE L A PENÍNSULA IBÉRICA
Toulouse
Gijón Narbona
co
lai
Lugo
Ga
Cordillera Cantábrica
León
zo
Pamplona
Amaya
ci
Pirineos
Ma
Astorga Huesca
ño mts. de
Mi
León Gerona
Lérida
Zaragoza
Braga Barcelona
Medinaceli Calatayud
Ebro
Tarragona
Sistema Guadalajara Sistema
Coímbra Central Ibérico
Toledo
Tajo
Santarem Valencia
Júcar
Badajoz
Mérida
Sierra
Morena r
uivi
a
di a n
dalq
Córdoba Gua
G ua
Murcia
Beja
Sevilla Écija Ilbira Cartagena
Sierra
Faro Morón Nevada
Cádiz Ronda Málaga
Tarifa
24
invasores. A la solidaridad tribal ron someterse sin resistir a cambio tocracias hispanogodas convertidas
característica, o assabiyya, se unía de tributos. al Islam por conveniencia y que
el estímulo de la yihad, aunque no Por todo ello, la conquista se efec- seguían controlando amplias comar-
es seguro que esta última guiara la tuó con prontitud. Más tarde tendrí- cas, como antes de la conquista.
expansión de los musulmanes por an sus primeros reveses en Covadon- Desde Musa en adelante varios
la península. En muchos casos lle- ga y Poitiers (c. 722 y 732 respecti- gobernadores se sucedieron en Al-
garon a pactos de capitulación con vamente) pero al principio encontra- Andalus, que es como se denominó
los poderes locales. Esto no puede ron facilidades. Entre 711 y 716 se esta provincia desde el 716. Se habla
generalizarse, pero hay ejemplos de produce el control militar de la de emires o “gobernadores” depen-
algunas zonas. El acuerdo hecho Península. Otra cuestión es la insta- dientes de Damasco. En la práctica,
por el jefe godo Teodomiro con las lación, puesto que muchos historia- al menos al principio, el poder
tropas musulmanas –sellado con dores actuales defienden que al árabo-beréber de Ifriqiya –región de
Abd al-Aziz, hijo de Musa– en Tud- norte de la Cordillera Central, en la Túnez–, fue el decisivo para deter-
mir, o zona de Murcia-Orihuela, es inmensa cuenca del Duero, el asen- minar las vicisitudes del islam anda-
un ejemplo de estos tratados. Los tamiento estable de musulmanes no lusí. El estado andalusí dependiente
jefes locales aceptaban someterse a fue efectivo nunca. Quizá sí llegaron se puso pronto en marcha. Desde el
los recién llegados, conservaban a algunas regiones, entre ellas Gali- 717 Córdoba se convirtió en la capi-
buena parte de sus bienes, el con- cia, en las primeras décadas. Pero tal. Se desplegaron delegados milita-
trol efectivo de algunas zonas, tras las revueltas beréberes del 740, res en los principales núcleos urba-
mientras que la población cristiana es posible que el rastro de los musul- nos peninsulares. Comenzó a fun-
quedaba bajo la protección de los manes al norte del Sistema Central cionar una fiscalidad efectiva. Aun-
musulmanes, a cambio de un tribu- se desvaneciese. En el valle del Ebro que no se conocen posibles proble-
to o jaray. El hecho de que el poder la presencia de musulmanes fue más mas derivados de la inmersión lin-
visigodo se hallara dividido entre clara, pero aquí los poderes consta- güística, parece que a lo largo del
los partidarios de don Rodrigo y de tados unas décadas después eran los siglo VIII la arabización se impuso y
Vitiza, y muy atomizado, debió de los muladíes, musulmanes con- debió de correr paralela a la islamiza-
facilitar enormemente las cosas a vertidos, o sus descendientes. Al ción, que también triunfó de manera
los musulmanes. En las civitates frente de estos muladíes había, en rotunda. Se desconoce el grado de
fueron los obispos los que acepta- esta y en otras zonas, antiguas aris- coerción aplicado en estos procesos.
DISPUTAS ÉTNICAS Las disputas se daban también en con el poder oficial de Qairawan y
Y CRISIS DE MEDIADOS Ifriqiya. Por ello los beréberes habí- el gobierno de Ifriqiya. En el 742 el
DEL SIGLO VIII an iniciado desde el 739 revueltas en sirio Baly desembarcó en Al-Ánda-
esa zona del Magreb. Muchos beré- lus con un contingente importante
Mientras en Occidente los reinos beres de Ifriqiya se adhirieron ade- de tropas. La revuelta beréber fue
cristianos evolucionaban hacia más a la causa jarichí, atraídos por sofocada con su ayuda. Pero la esta-
estructuras estatales, de tipo territo- un radicalismo social que denosta- bilidad no se impuso totalmente, ya
rial, los árabes y beréberes basaban ba la opulencia de las castas gober- que los recién llegados sirios aña-
la estructura antropológica de sus nantes árabes. En el caso de Al- dieron más rivalidades étnicas a las
sociedades en clanes, tribus y etnias. Ándalus es posible que la discrimi- luchas tribales ya preexistentes. De
El islam nunca suprimió esta reali- nación que sentían los beréberes hecho se habla de contraposición
dad. Los musulmanes, desde el tuviera su origen en los primeros entre los baladíes, o primeros ára-
comienzo, se habían visto envueltos tiempos de la conquista, cuando bes llegados –fueran esos qaysíes o
en conflictos étnicos. Las luchas fueron instalados en las peores tie- kalbíes–, y los yundíes o sirios.
entre árabes del norte o qaysíes y rras y zonas. Se ha supuesto que los Yund significaba en Siria circuns-
árabes del sur o yemeníes –llamados valles más fértiles y las vegas de los cripción militar, y dio nombre tam-
también kalbíes– habían desgarrado grandes ríos fueron tomados por los bién a los nuevos contingentes ára-
las estrategias de expansión en la árabes y que las sierras y zonas bes reclutados para intervenir y
propia Arabia. Pero en el caso del agrestes y áridas, o bien la periferia asentarse en una zona conflictiva,
Magreb y Al-Ándalus a ello se unió geográfica, fue la de asentamiento que fue lo que ocurrió con los sirios
el problema beréber. La etnia beré- beréber. Hay dudas sobre esta dis- de Baly. Los yundíes recaudaron
ber probablemente fue la de la tribución geográfica y espacial, impuestos para el estado cordobés,
mayor parte de los musulmanes que pero pudo ser uno de los motivos de extendieron la fiscalidad andalusí
vinieron a Hispania, no sólo ya con la discordia. en zonas remotas y recibieron algu-
la primera entrada de Tariq, sino en En el año 740 la revuelta beréber nas concesiones de tierras en áreas
oleadas sucesivas en los primeros arraigó en Al-Ándalus. El gobierno rurales. Gracias a ellos el estado
años de Al-Andalus. de Córdoba pidió ayuda a contin- omeya logró extender su influencia
El gobierno del emirato andalusí gentes árabes sirios, otro sector por todos los rincones de Al-Ánda-
era pro-árabe, incluso pro-qaysí. étnico árabe, que tenían disputas lus.
25
EL EMIRATO poder abbasí de Bagdad –la nueva revueltas políticas pro-abasíes en
INDEPENDIENTE DE LOS capital musulmana–, ni de goberna- Al-Ándalus, así como otras protago-
OMEYA DE CÓRDOBA dores o valíes interpuestos desde nizadas por sectores árabes yemeníes
Ifriqiya. que no se sentían representados por
Pero el destino del emirato de Abd al-Rahmán I (756-788) fue el el poder cordobés.
Córdoba se estaba dilucidando primer gran monarca andalusí. Go- Dos grandes problemas, tanto
lejos de ella. Una sublevación y bernaba sobre una población de para Abd al-Rahmán I como para
conspiración cortesana abbasí varios millones de habitantes, pero sus sucesores, Hisam I (788-796) y
acabó con los Omeya de Damasco sólo unas decenas de miles, quizá Al-Hakam I (796-822), fueron el
asesinados y con el cambio de menos de 100.000, eran árabes y del control de los territorios de Al-
dinastía en el 750. Abd al-Rahmán, beréberes. La población muladí, es Ándalus y el problema étnico.
un superviviente del clan eliminado decir, de autóctonos convertidos al Sobre esto último, hay que tener en
logró llegar a Al-Ándalus en el 756. Islam, era muy superior no sólo a cuenta que una jefatura del emira-
Tras lograr apoyos diversos y apro- estos grupos étnicos venidos de Áfri- to identificada con el ingrediente
vechando el descontento de muchas ca o de Oriente Medio, sino también árabe y sunnita provocaba la asa-
familias con el poder del emir cor- a las poblaciones cristianas, es decir biyya o solidaridad tribal de los
dobés, se hizo ese año con el poder mozárabes, que fueron quedando discriminados beréberes. Éstos no
en Al-Ándalus. Se iniciaba así el como minorías en Al-Ándalus. se identificaban con la doctrina
Emirato Independiente, llamado así En el largo reinado de Abd al- oficial maliki, una escuela de juris-
porque ya no dependía ni del nuevo Rahmán fueron sofocadas algunas prudencia islámica que se instauró
E M I R AT O O M E YA , D E S D E L A R E B E L I Ó N B E R É B E R
D E 7 4 0 H A S TA F I N A L E S D E L S I G L O I X
Reino Franco
Reino de Asturias
R. Pamplona
Aragón
Condados
Catalanes
MARCA SUPERIOR
Zaragoza
Santaver
Toledo
MARCA MEDIA
Valencia
MARCA INFERIOR
E m i r a t o Játiva
Mérida
O m e y a
Beja
CÓRDOBA
Murcia
Niebla Carmona Jaén
Silves
Sevilla Écija Cabra
Morón Elvira Pechina
Archidona
Sidonia Málaga
Algeciras
26
AL - ÁNDALUS (714-1031)
Hisam I (788-796)
Al-Hakam I (796-822)
Muhammad I (852-886)
Muhammad
CALIFATO OMEYA
Sulayman al-Mustain
(1009)
(1013-1016)
27
a finales del siglo VIII y que se con- Territorialmente, el control fue ron una revuelta indígena contra los
sidera jerárquica y convencional. difícil en las zonas fronterizas. Hay dirigentes árabe-beréberes. El líder
Por el contrario, corrientes hetero- que tener en cuenta que además de fue Ubayd Allah. Su revuelta de
doxas o incluso simpatías hacia el las coras o kuras, es decir, las pro- 797 o “Jornada del Foso” toledana
chiísmo canalizaban la insatisfac- vincias o distritos, Al-Ándalus fue sofocada por la fuerza y la
ción de los beréberes y otros había dispuesto para las fronteras muerte de los dirigentes levantis-
musulmanes no árabes. A las dife- un tipo de circunscripción amplia cos, mediante la matanza masiva y
rencias de posición social se unían llamada tugur o tagr, es decir, degüello de los rebeldes. En la zona
las fracturas sociales y de trato “marca”. Al frente de cada una ellas de Tudmir –Murcia– hubo conflic-
entre conquistadores y muladíes. había un jefe militar o qa’id. Pues tos entre árabes qaysíes y yeme-
Al mismo tiempo se estaban intro- bien, estas marcas fueron ingober- níes, que se prolongaron durante
duciendo en la sociedad vínculos nables. En la Marca Superior varias décadas.
personales, de tipo clientelar –cuenca del Ebro, capital Zarago- La revuelta acaecida en la propia
(mawali, maulas) que resultaban za– a finales del VIII se levantó el Córdoba en el 818, conocida como
desestabilizadores entre los pro- indígena muladí Bahlul Ibn Mar- el “Motín del Arrabal” tuvo, en cam-
pios musulmanes. Y por otra parte zuq. En la Marca Inferior –Mérida– bio, un contenido más directamente
la creación de ejércitos y adminis- se sublevó el beréber Asbag ibn social. Artesanos y sectores modes-
tración estatales puede considerar- Wansus. Y en la Marca Media, tos del importante arrabal cordobés
se que minaban los valores tribales sobre todo en la capital, Toledo, se sublevaron en un estallido antifis-
tradicionales. mozárabes y muladíes protagoniza- cal. La revuelta fue sofocada
ATA Q U E S V I K I N G O S E N L A P E N Í N S U L A
Ataque a la costa coruñesa Desembarco en
y otras de Galicia (966) área de Gijón (844)
(Zona de Gijón
la Coruña) Santiago de Compostela Río
Eb ro Pamplona
Iria
Ataques vikingos
ga
Fornelos (968)
iño
Río Cinca
Ampurias
en Galicia.
uer
M
Río
Ocupación de costas
Pis
y ríos.
Río
Batalla de Fornelos
ón
al
(968)
Río Duero
Río oJ
Tor Rí
mes
Tortosa
ón
lag
oA
Rí Río Tajo
Lisboa,
agosto (844)
Ataques a
d
la zona de
Gua
Lisboa (966)
Orihuela
Río
Beja Guadalquivir
Sur de
Portugal (971) Sevilla Río
Silves Niebla Razzia por el Mediterráneo,
Tablada (844) Ebro y Pamplona (859)
Cádiz
Guadalquivir hasta Sevilla y Coria de Río, Medina-Sidonia
fines de septiembre (844).
Octubre saqueo de Sevilla, Algeciras
en octubre saquean la región.
11-XI-844 victoria omeya de Tablada
Zona cristiana (límite del año mil aproximadamente)
Al-Ándalus
Ataques vikingos en 844
Ataques a Niebla, bajo Guadalquivir
y Algeciras (859)
Ataques vikingos en 859
Ataques vikingos en 966-971
Fortificaciones musulmanas defensivas (aproximadamente)
28
mediante una gran represión, que paréntesis de tranquilidad en la his- quías naturales de las tribus. El
incluyó la muerte de varios centena- toria del Emirato. Hubo algunas poder del emir se acercó a lo que se
res de instigadores de la misma. campañas militares contra Asturias considera despotismo oriental. Y la
Las guerras con los cristianos y Pamplona, pero esto no afectó a administración se diversificó. Va-
también fueron importantes a fina- la estabilidad interna. Al contrario, rios visires gobernaban para el emir
les del siglo VIII y principios del IX. parece que estas acciones aportaron y un hachib hacía las veces de pri-
La actuación de los carolingios en tributos a Al-Ándalus. Tampoco mer ministro, al frente de una buro-
la Marca Hispánica entre 775-810 fueron una amenaza grave los ata- cracia creciente. La corte incre-
fue no obstante contenida por el ques vikingos en 844, ya que fue- mentó el boato, el lujo oriental, la
emirato en gran medida. Barcelona ron incursiones de saqueo y efíme- preocupación por la cultura y la lle-
cayó en manos cristianas en el 801, ras. El estado se fortaleció bajo gada de influencias persas e iraquí-
pero los musulmanes conservaron Abd al-Rahmán II. La recaudación es. Se amplió la mezquita de Cór-
Huesca y Tortosa. anual podía llegar al millón de doba y se alentaron muchas otras
El reinado de Abd al-Rahmán II dinares. El estado se hizo más cen- construcciones.
(822-852) puede considerarse un tralizado y más alejado de las jerar-
REVUELTAS Destaca entre estos últimos el con- tigados con la muerte. Sí lo fue
E INESTABILIDAD. flicto con los mozárabes desde el Eulogio en 859, convertido por ello
LA CRISIS DEL EMIRATO 850. El movimiento de los “márti- luego en santo. El movimiento
res voluntarios” fue alentado por el refleja sobre todo el malestar de la
Desde mediados del siglo IX se mozárabe Álvaro y el clérigo Eulo- comunidad cristiana de Al-Ándalus
asiste a un período inestable que se gio. Los mártires se presentaban y coincide con el comienzo del
extiende hasta el Califato. Hubo ante el juez –cadí– y blasfemaban fenómeno realmente importante
conflictos sociales y también prota- contra el Islam. Aun así, no todos para esta minoría, su emigración al
gonizados por la minoría cristiana. los mártires voluntarios fueron cas- reino de Asturias o a los condados
Segura
Santiesteban Ibn Saliya
r
lima
uada
Río G YAYYAN
Úbeda Sª Segura
Andújar Bacza
CÓRDOBA Sª Cazorla
Río Guadalquivir
Jódar Quesada
Martos Jaén Banu Habil
ir
lquiv
u a da Huelma
Río G Baena
Ibn Mastana Ibn Hudail
Écija
Cabra
Río
Ge
n il
Iznájar
Osuna Elvira
Morón Archidona
Rí ILBIRA Sª Nevada
let
e oG REYYO Alhama
a da ua
Gu da
lho
Río rce Bobastro
Ronda Málaga
REYYO Nombres de coras o provincias
Mijas Bobastro Principal foco de resistencia
Área máxima aproximada controlada por Ibn Hafsun
Área de influencia de Ibn Mastana
Mar Área de influencia de Ibn Hudail y los Banu Habil
Mediterráneo Área de influencia de Ibn Saliya
Muladíes de Elvira
29
orientales. Algunos mozárabes apo- díes. En Mérida y Badajoz hubo otro zas musulmanas, fueron escenario
yaron también los levantamientos foco, liderado por el muladí Ibn de luchas y resistencias. Hay que
de los muladíes. Marwan al Yilliqi en 868. La rebe- decir que no fue una rebelión unita-
Las sublevaciones de muladíes o lión se extendió desde el 869 al 930 ria. Hubo dentro de ella, o paralela-
de beréberes descontentos fueron y fue alentada desde León. Hacia el mente, focos diversos liderados por
una constante desde el 870. En el 901 beréberes de la Marca Media familias muladíes de las coras de
Ebro y la Rioja los Banu Qasi fra- intentaban hacer por su cuenta la Yayyan y Reyyo. Fue la revuelta de
guaron un poder extenso y autóno- yihad atacando la cristiana Zamora, mayor calado, no sólo por su dura-
mo. Hasta el 884 en el Valle del sin éxito pero con víctimas. ción y extensión geográfica, sino
Ebro fueron independientes del Pero sin duda el movimiento más porque fue la única que pareció
poder cordobés. Pero el dominio no peligroso para el poder cordobés cuestionar el orden establecido en
era compacto ni llegaba al sur por- fue el del muladí Umar Ibn Hafsún Al-Ándalus. No obstante, fracasó.
que los Banu Tuyib, de origen árabe desde el 879. Sus partidarios con- Todos estos conflictos constituyen
y afectos a Córdoba, controlaron trolaron una amplia región con el lo que se llama “primera fitna” o
Daroca y Calatayud desde que poco bastión destacado de Bobastro. Ibn guerra civil y coincide con los emi-
después del 860 se asentaron en Hafsún, que abandonó el Islam, res más débiles y últimos: Muham-
la zona. En Toledo las rebeliones murió en el 917, pero la rebelión mad (852-886), Al-Mundir (886-
las protagonizaron beréberes y mula- continuó. Muchos husun, o fortale- 888) y Abd Allah (888-912). Este
C R I S I S Y D E S V E R T E B R A C I Ó N D E L E M I R AT O .
INSURRECCIONES REGIONALES (888-912)
3
1
2 4
5
14 Córdoba
12
8
13 10
9 11
30
último apenas controlaba la capital y árabe yemení, los Banu Jaldun y los Pechina incontrolados marineros se
poco más. Durante su mandato, a las Banu Hayyay. Estos clanes efectua- habían hecho con el control de la ciu-
revueltas citadas se unieron las de ron por entonces matanzas de mula- dad y practicaban autónomamente el
Granada, con enfrentamientos entre díes en la ciudad. También la región comercio y la piratería desde esta
qaysíes y muladíes, y la situación de Tudmir vio cómo poderes locales pequeña república marítima. El Emi-
autónoma de Sevilla y su región, que sin control cordobés se hacían con el rato se hallaba totalmente en crisis
desde el 889 no obedecía a Córdoba mando, concretamente bajo el lide- cuando llegó al poder como emir en
sino a dos clanes locales de origen razgo de Daysam ben Ishaq. Y en 912 Abd al-Rahmán III.
31
3
I T I N E R A R I O D E L E J É R C I T O M U S U L M Á N D E R R O TA D O E N C O VA D O N G A
(según Sánchez-Albornoz)
Carreña
Río Cares
COVADONGA Arenas de Cabrales
o
s añ
mba
Cª Llo
Ca
es
R.
de
Car
Río
Re
in azo
Río
Segareo
El Cantón de Texeu
Lago de
Rí
Chozas de Belbín
Enol
oD
la Ercina de Onis
a
de
Sierra de Maín Río
Chozas de Puertos de
Rondiella Invernales de
Chozas de Ario Pandébano Sotres
Amuesa Bulnes
Canal de Trea
s e
je
Car
u
R. D
Cumbres Río
Posada de Valdeón de Avenas
Pº. Remoña
oS de
Espinama
Rí
ella Arenal
de Remoña
Las Ilces
Va l d e ó n COSGAYA
Vega de Liébana
34
Era el de Alfonso, hijo del duque o Noroeste y la Meseta del Duero. tual auge conquistador se viera
dux de Cantabria, zona situada en Pero con la rebelión beréber y la cri- complementado con una instalación
época goda entre el Alto Ebro y sis del emirato de esos años muchos de repobladores cristianos al sur de
Peña Amaya y con proyección hacia emigraron hacia la mitad sur de la la Cordillera Cantábrica. Las Cró-
el norte. Alfonso, al frente de otros península. Todo ello, unido a cierto nicas Asturianas en lo referente al
rebeldes, quizá también refugiados despoblamiento previo acentuado reinado de Alfonso I apuntan las
en las montañas, se unió a la causa quizá por la invasión musulmana, o conquistas militares en el Duero,
de Pelayo. Casó con la hija de éste, a las propias acciones de Alfonso I, pero reservan la idea de populatio,
Ermesinda, y heredó el trono tras la entre otros factores, dejó un enorme o repoblación, tan sólo para las
muerte del hijo de Pelayo, Favila, vacío de poder en toda la cuenca del regiones norteñas: Galicia Maríti-
de breve reinado (737-739). Duero. Conquistar estas tierras no ma, Primorias, Liébana, Trasmiera,
Convergieron así en la figura de era sencillo, sin embargo, ya que, Carranza, Sopuerta y Bardulias
Alfonso I (739-757) las dos áreas de aunque no hubiese poblamiento –primitiva Castilla–, al tiempo que
la Cornisa Cantábrica que antes se estable y organizado de los musul- citan otros posibles territorios
libraron de la presencia de los manes, el espacio era vulnerable a –Deyo, Vizcaya, Álava, Orduña,
musulmanes. De todos modos, la los ataques procedentes de Badajoz, Ayala, Berrueza, Pamplona– no
situación de estos últimos desde la Toledo o la misma Córdoba. integrados en el Reino de Asturias.
Cordillera hasta el mismo Duero y Las crónicas entienden que Estas últimas zonas, de influencia
desde Galicia hasta el Valle del Ebro Alfonso I tuvo que conquistar ciu- vascona, no formarían condados o
entró en declive hacia 740-742 dades y plazas fuertes en la Meseta. reinos, pero parece que los cronis-
aproximadamente. Probablemente No es seguro que tales conquistas tas ovetenses las consideraron áreas
ya eran muy escasos los asenta- se dieran tal como las describen las ajenas también al poder andalusí.
mientos musulmanes en todo el fuentes. Y menos aún que ese even-
C O N Q U I S TA S Y R E P O B L A C I O N E S D E A L F O N S O I ( 7 3 9 - 7 5 7 )
(según las Crónicas Asturianas)
GALICIA MARÍTIMA
R.
VIZCAYA
N
PRIMORIAS TRASMIERA
aló
SOPUERTA
n
R, C
Oca Alesanco
ó
Carbonarica
n
Saldaña Cenicero
R. Ór
ón
BERRUEZA
nz
Tuy
la
bigo
Ar
R.
R. Arlanza
y
ue
R. Tera
rad
lde
Simancas
R.
la
Braga
Es
Zamora
R.
Osma
Duero
R. Sepúlveda
Anegia Tor R. Jalón
Porto me
R.
s
Er
R.
es
R. Duero H Ledesma
ma
R. Adaja
ueb
ra Segovia
R.
R. Vouga Salamanca
Ág
ued
a
ram
Viseo
a
Ávila
uña
a
es
R. J
ar
Taj
jo
en
Ta
H
R.
R.
R.
35
OVIEDO una arquitectura brillante que se hecho, tuvo relaciones con los caro-
Y LA RESTAURACIÓN sumó al refuerzo de la reciente sede lingios.
GOTICISTA DE ALFONSO II episcopal de San Salvador de Ovie- Pese a que hizo la guerra a los
do, en cuya nueva catedral empezó a musulmanes, en su reinado –así
La dinastía fundada por Pelayo y hacerse acopio de un importante como en los anteriores– las fronteras
Alfonso I se consolidó en los reina- tesoro áulico. El llamado “arte astu- no pudieron avanzar mucho dada la
dos siguientes: Fuela I (757-768), riano” recuerda y presenta grandes robustez que había adquirido el emi-
que derrotó a los musulmanes en afinidades con la tradición visigoda. rato independiente desde su funda-
Pontubio; Aurelio (768-774); Silo Alfonso II adoptó la cultura, el cere- ción por Abd-al-Rahmán I. Venció a
(774-783), que derrotó una suble- monial y la liturgia política de la los musulmanes en alguna ocasión
vación gallega en Monte Cubeiro y Hispania visigoda y su corte, el ordo –Lutos 794, Anceo 821–, pero sobre
trasladó la capital de Cangas a Pra- gothorum. Pautas jurídicas y de todo hubo de resistir constantes
via; Mauregato (783-788) y Vermu- estado propias de la época visigoda aceifas y ataques sistemáticos de los
do I (788-791), cuyo reinado termi- daban sentido a la corte ovetense. musulmanes –se documentan en el
na con la derrota cristiana en Bur- En su reinado destaca el “descubri- reinado cerca de una veintena en
bia en 791. miento” de la tumba de Santiago y fuentes árabes–, desde los primeros
El reinado de Alfonso II (791- el inicio de una Iglesia septentrional ataques en 791-792, los saqueos de
842) cobra un especial significado alejada ya –aunque declarada suce- Oviedo en 794 y 795, las incursio-
en la monarquía asturiana. Alfonso II sora y en parte sustituta de él– del nes en las Conchas de Arganzón en
instaló la corte en Oviedo al princi- mozarabismo toledano cautivo bajo 801 o las prácticamente endémicas
pio del reinado. Y según las cróni- Al-Ándalus. El Reino de Asturias campañas contra “Álava y Al-Qila”,
cas, convirtió la ciudad en regia con Alfonso II comenzó a ser reco- o Castilla primitiva, que fue la zona
sedes. Construyó iglesias y palacios, nocido en el resto de Europa y, de más castigada.
REYES DE ASTURIAS
Pelayo Pedro
(718-737) Duque de Cantabria
Ordoño I
(850-866)
36
R E I N O S D E A S T U R I A S Y L E Ó N ( s s . V I I I - X ) . B ATA L L A S P R I N C I PA L E S
Talamanca 860
Alhándiga 939
Coímbra 878
LA AMPLIACIÓN go, el apóstol supuestamente apare- Con Alfonso III (866-910) las
DEL REINO CON ORDOÑO I cido en la legendaria batalla. conquistas llegan al Duero. En el
Y ALFONSO III Además, Ordoño I destacó como área gallega destacan las conquistas
el repoblador de algunas localida- de Oporto, Chaves y Coímbra, aun-
Ramiro I (842-850) llegó al trono des importantes: Tuy, Astorga, León que ésta se perderá más tarde. En el
tras vencer en Cornellana, en el y Amaya. Podría suponerse que en área leonesa, además de victorias
Narcea, a facciones rivales y al esa línea de ciudades aproximada- en 878 en Valdemora y Polvoraria,
usurpador Nepociano. Con Ramiro I mente podría situarse el alcance destacan la conquista o fortifica-
triunfó una línea directa de transmi- territorial del Reino de Asturias en ción de Zamora, en el 893, o las de
sión al trono de padres a hijos. ese reinado. Se atribuye normal- Toro o Dueñas. Siguió habiendo
Tanto él como Ordoño I (850-866) mente a este reinado un importante campañas contra Álava y Castilla,
tuvieron que resistir muchas aceifas impulso a la repoblación. Las cróni- entre ellas la de Guereñu en 867 y
o campañas musulmanas, que se cas describen también de dónde otras en 869. Hubo ofensivas de
documentan en varios años: 845- procedían los habitantes que llega- Alfonso III más al sur, con impor-
846, 848, 850, 851, 855-856, 863, ban a repoblar: una parte procedía tantes campañas en 878 en Atienza
865 –con la célebre batalla de La del norte, pero también se mencio- y Deza. Las crónicas conceden gran
Morcuera y otra cerca de Peña nan los que venían “ex Spania”, es importancia a la contención por
Amaya, quizá en Rioparaíso–, y en decir, de la antigua Hispania, lo que parte de Alfonso III de grandes
866. Ordoño I obtuvo algunas vic- sugiere que se contaba con la llega- aceifas musulmanas en 882-883, en
torias contra los Banu Qasi en da de cristianos de Al-Ándalus, los las zonas de Castrojeriz, Pancorbo
Albelda –Monte Laturce en 859. llamados mozárabes. La repobla- y de Sollanzo y Sahagún. La defen-
Ésta fue la batalla verdaderamente ción bajo Ordoño I supuso la res- sa cristiana de Zamora en 901, en la
importante para la Rioja y no la tauración o fundación de sedes. Es que la tradición habla de cabezas
supuesta batalla de Clavijo –lugar el caso de las de Tuy, Astorga y cortadas y colgadas en los muros,
cercano a Albelda–, que cronistas León, en este último caso sin que ha dado lugar a la leyenda que Sán-
muy posteriores como el Tudense o hubiese una civitas episcopal de chez-Albornoz popularizó como
Jiménez de Rada adjudicaron a la referencia en época goda. Durante “Jornada del Foso de Zamora”.
época de Ramiro I –la tradición ha el reinado de Ordoño I los castella- Estas razzias impedían los asen-
dado por válida una supuesta fecha nos comenzaban a destacar con tamientos cristianos. A pesar de
de 844–, pero más que nada como personalidad propia en su expan- todo, las fuentes documentales de la
propaganda de la figura de Santia- sión hacia el sur. época, y no ya sólo las crónicas,
37
comienzan a dejar entrever proce- Asturias como continuación del éstos– el área de la primitiva Casti-
sos de repoblación que en la cuenca Reino de Toledo. La monarquía y la lla tuvo ya a finales del siglo VIII y
norte del Duero se estabilizaron, Iglesia asturianas serían instituciones principios del IX una personalidad
aunque hasta el siglo X no puede comprometidas por la historia y la definida. Los musulmanes lanzaban
considerarse en plena actividad esta misma providencia para llevar a cabo campañas contra “Álava y Al-Qila”
política de migraciones y organiza- la misión reconquistadora. de modo regular. Los cristianos al
ción del espacio. El contacto con el En las últimas décadas del reina- área comprendida entre el Ebro –en
enemigo no era fruto de la presen- do de Alfonso III hubo conflictos su tramo hoy burgalés– y las cuen-
cia musulmana en la región, sino internos, que afectaron a la propia cas altas de los ríos Nela y Trueba,
del hecho de que el emirato consi- familia real. Algunos magnates y hasta el valle de Mena, fueron deno-
deraba los territorios al norte del los propios hijos del rey, según minándola Bardulias y luego Caste-
sistema central potencialmente tri- algunas fuentes, despojaron incluso lla. Cuando los cristianos repueblen
butarios. Dada la imposibilidad de al monarca del trono. El peso geo- ya otras comarcas esta pequeña
cobrar tributos, que los cristianos gráfico, en un reinado que se suele región seminal será conocida como
no pagaban, los emires realizaban denominar por los historiadores Castella Vetula.
campañas de castigo. “asturleonés”, se había ido despla- Esta “tierra de castillos” parece
Por otra parte, el reinado de Alfon- zando hacia el sur. No es extraño que haber estado en el siglo IX formada
so III fue el que acabó de dar al el hijo y sucesor del rey, García I, por poderes muy atomizados y po-
Reino de Asturias un sentido históri- trasladara ya la capital regia a León. blaciones dispersas. Las áreas de
co y una identidad cultural. En él se Mena, Espinosa de los Monteros y
escribeieron las citadas Crónicas Sotoscueva estaban ya a principios
Asturianas, en concreto la llamada del siglo IX ocupadas por cristianos.
Crónica de Alfonso III, la Crónica Lo mismo pasó con Losa, Valdegovía
Albeldense y la Crónica Profética. LAS RAÍCES DE CASTILLA o Tobalina. Lo cierto es que el avance
Estos textos ovetenses se hallan entre EN EL REINO DE ASTURIAS cristiano arraigó pronto al sur de la
los más importantes de la cronística Cordillera. No muy diferente sería la
europea altomedieval. Son textos que Tanto para los musulmanes como evolución en el área de Valderredible,
legitimaron la historia del Reino de para los cristianos –sobre todo para Campóo y Alto Pisuerga. Hubo en el
R E C O N Q U I S TA Y R E P O B L A C I Ó N D E L VA L L E D E L D U E R O H A S TA E L S I G L O X
Pravia
Oviedo Cangas CONDADO
DE CONDADO
Santiago (c. 800) Lugo R. Ebro CASTILLA DE
ÁLAVA Reino de
Lantarón Pamplona
uerga
R. Esla
León (856)
Saldaña Amaya (860) Término
Briviesca Pancorbo Cellórigo
R. Pis
Cerezo (891)
R. Cea
R.
ño
R. M
i
Lerma Arnedo
Palenzuela R. Arla
ey
nz a R. Ebro
Dueñas
der
R. Esla
Chaves Zaragoza
Simancas (899) AzaR. S. Esteban (912)
R.
38
siglo IX varios condes repoblando mente del rey de León, pero actuaban de Burgos y Castrojeriz, además de
comarcas diversas al sur de la Cordi- de forma autónoma. Álava y Castella, estos enclaves, cobraban creciente
llera Cantábrica. Se atribuye al conde además de un muy temprano control protagonismo: Lerma, Muñó o
Munio Núñez la repoblación de Bra- del Alto Ebro, se extendían por la Lara. Todos estos condados consti-
ñosera antes del ecuador del siglo IX. Rioja y Bureba. Un conde llamado tuían aún poderes dispersos. Agluti-
En la primera mitad del siglo IX Diego Rodríguez Porcelos repoblaba naban iniciativas de expansión
aparece algún prelado, como el obispo Burgos en el 884. Apenas era un cas- autónomas respecto del reino de
Juan poblando Valpuesta, y varios tillo en un pequeño cerro y un exiguo León. Poco después de morir el últi-
condes. A mediados del siglo el comes asentamiento contiguo. Nuño Muñiz mo rey asturleonés, Alfonso III, los
Rodrigo se menciona. Fue quien con- repoblaba Castrojeriz ese año. Y se castellanos alcanzaban el Due-ro.
quistó y repobló Amaya en 860. Por cita por entonces a un conde llamado El territorio entre este y el Ar-lanza
entonces algunos comites se citan Gonzalo Téllez en Cerezo y Lantarón. había sido tierra de nadie en los
también en la zona de Álava aprove- A principios del siglo X se ha- siglos VIII y IX. Ahora dejaba de
chando el declive de los Banu Qasi del bían desarrollado algunos núcleos serlo. Todavía faltaban unas déca-
Ebro. Entre la Rioja y el Pisuerga más bajo el mando de varios con- das para la unificación política de
varios condados dependían formal- des. Por entonces los núcleos al sur los condados castellanos.
L A C A S T I L L A P R I M I T I VA ( s s . V I I I - X )
Aldeas
Arreba Castros y centros fortificados
[Pto. Lunada]
TOBALINA Territorios [Pto. La Sía]
Montes de Ordunte
Áreas a más de 1.000 m VALLE DE MENA
Rí
Burceña (800)
ru
ESPINOSA (800)
[Pto. Estacas]
Montes de la Peña
Sotoscueva (817)
Río
Tre
SOTOSCUEVA ma Salinas de Rosío (853)
Río LOSA
N ela Río Nabón
SANTA GADEA Losa San Martín de Losa (822)
CASTILLA VETULA
San Pantaleón
Rí
o
Castro Bricia
ec
la
ill
Ne
BRICIA ARREBA
a
VALDEGOVIA
Río Jere
Río
39
4
EL NACIMIENTO intermitente que fuera– hacia los por las tropas cordobesas, quedando
DEL REINO DE PAMPLONA musulmanes. La influencia carolin- sometido a un tributo.
gia, que sucedió a aquélla, duró poco Con el tiempo el núcleo inicial fue
Para Carlomagno la conquista de tiempo. Quizá un vascón se puso al adoptando la condición y denomina-
Zaragoza, en manos musulmanas, era frente de Pamplona por entonces. La ción de Reino de Pamplona, sin iden-
una ambición posible. La campaña de tradición habla de un tal Velasco. El tificarse ya expresamente con el pre-
777 no tuvo éxito y el repliegue poco protagonismo de la emancipación sumible origen lingüístico vasco de la
glorioso de las tropas es posible que frente a los reinos vecinos se atribu- dinastía que le dio impulso. Los Aris-
influyera en la imposibilidad carolin- ye a los vascones. Éstos podrían ta y los Banu Qasi no mantuvieron la
gia de controlar los núcleos vascones caracterizarse, más que por una orga- unidad. La dinastía Arista, desde las
o de otro origen que estaban en el nización social diferenciada de la de montañas navarras, con apoyos quizá
lado sur de los Pirineos, a diferencia sus vecinos, por ser los habitantes al noroeste de Aralar y con sólidas
de los vascones de Aquitania, estos sí de una zona en la que había perdu- posiciones en Pamplona y su comar-
sometidos al Reino Franco. Más rado el vascuence. Esta lengua esta- ca, se enfrentó sobre todo desde enton-
romanizados de lo que se pensaba ría presente en Pamplona, si bien ces a sus enemigos meridionales. Y
hace unas décadas, los vascones his- también aquí, al tratarse de una ciu- esto no quería decir lu-char contra los
pánicos hasta entonces no habían pro- dad, habría coexistido desde antiguo andalusíes propiamente dichos, sino
tagonizado acciones destacadas con- con el latín y luego el latín degrada- contra los citados Banu Qasi, que
tra los musulmanes, que se habían do. Es posible que hubiese además actuaron como poder independiente
hecho con el control temprano de población de otra procedencia en esta y, durante mucho tiempo, casi indes-
Pamplona –la ciudad había capitula- comarca. Lo cierto es que el núcleo tructible en la cuenca media del Ebro
do ante los musulmanes antes de vascón parece el más visible en la y particularmente en la actual comar-
718–, ni tampoco contra los carolin- zona en esta época. Íñigo Arista ca de la Ribera navarra. Quizá por ello
gios. Pero éstos tampoco pudieron († 851 o 852) fue el primer persona- la situación de bloqueo hacia el sur del
tomar Zaragoza. Se ha supuesto que je destacado de una dinastía que reino de Pamplona duró mucho tiem-
en 778 los carolingios sufrieron una extendía su influencia desde la po y contrasta con las expectativas de
derrota en la retirada, al pasar Ron- comarca de la capital hacia el Pirineo los leoneses y castellanos, quienes no
cesvalles. Este revés de los francos en occidental. La familia estaba empa- tenían hacia el sur un glacis de pobla-
los Pirineos, o simplemente su desin- rentada con la otra gran influencia de ciones musulmanas estables. Los pam-
terés por la zona, ha sido magnifica- la actual región de Navarra, la de los ploneses, en cambio, carecían de esta
do históricamente. Según las dife- Banu Qasi. Íñigo Arista y Musa Ibn ventaja espacial.
rentes tradiciones, las tropas francas Musa eran hermanos por parte de Pamplona fue atacada a lo largo
habrían sido derrotadas por los musul- madre. Los Banu Qasi, de origen del siglo IX por diversos enemigos.
manes o por los vascones, depen- muladí, descendían del witizano con- En 859 los piratas normandos llega-
diendo desde qué geografía y pers- de Casius. Éste se convirtió al Islam, ron a la ciudad, llegando a capturar
pectiva se contemple la cuestión. manteniendo sus propiedades, y sus a García Íñiguez, que fue liberado
Convertida en mito y revestida de descendientes tenían grandes influen- tras pago de rescate, como se ve en
aires legendarios, la batalla de Ron- cias en la ribera del Ebro. En esta el mapa anterior de invasiones vikin-
cesvalles, aunque fuera menor, sí se zona los muladíes eran mayoritarios. gas. En 860 Fortún Garcés, el here-
puede relacionar con un contexto nue- Tarazona y Calahorra eran los prin- dero, fue hecho prisionero en una
vo, el del resurgimiento de un núcleo cipales baluartes. La probable alian- expedición del emir de Córdoba, que
en la cuenca de Pamplona o algo más za circunstancial entre el núcleo vas- le llevó al cautiverio allí durante
al norte, que con el tiempo dará lugar cón de los Arista y los Banu Qasi veinte años. Y una hija de Fortún
al nacimiento de un reino. facilitó que los carolingios fueran de Garcés, Oneca o Íñiga, fue entrega-
Hacia los años 800-810 Pamplo- nuevo vencidos en la segunda bata- da temporalmente al emir Abd Allah,
na se habría librado ya de la posible lla de Roncesvalles en 824. Más tar- concibiendo a Muhammad, padre de
sumisión –o dependencia fiscal, por de, en 842 Íñigo Arista fue vencido Abd al-Rahmán III.
42
PIRINEOS CENTRALES: CONDADOS DE ARAGÓN, SOBRARBE Y RIBAGORZA
EN LOS SIGLOS IX Y X
so a
a
ona
e
Río Gar
Bida
um
Ur
Río
Río
REINO DE PAMPLONA
a
r.Veral
ati
r
Arg
Río Salaza
Ir
a
Río
Río Esc
Pamplona ARAGÓN S. Pelayo
gón
Fuenfria Fago Hecho Acumuer Benasque
R. Gállego
S. Urbez
r. Ara
Cercito RIBAGORZA PALLARS
Berdún Ciella
ra
Leire SOBRARBE
S.S. JuliánJaca
Río A
y Basilisa Taberna Obarra
Bailo Atarés Boltaña Lavaix
S. Genaro Fanlo Matidero
Buil Alaón
Sos
R. Esera
Roda de
Isábena
a
Loarre
Río Cinca
R. Noguera-Ribagorzan
(956)
a
llares
Graus
a
Alquézar
uera-P
Huesca Barbastro
g
R. No
Línea fronteriza de los núcleos cristianos hacia finales del siglo IX Líneas de ciudades y centros fortificados musulmanes
Reino de Pamplona Área de fuerte presencia mozárabe
Núcleo originario del Condado de Aragón Roda. Sede episcopal (año)
Áreas de expansión a principios del siglo X (Aragón, Ribagorza) Siresa. Grandes monasterios y centros eclesiásticos
Extensión aproximada del Reino de Pamplona por tierras aragonesas Ansó. Algunas localidades documentadas
(mediados del siglo X)
LOS PRIMEROS de Canfranc y Hecho, fue la zona del su límite sur vendría dado por el cur-
CONDES DE ARAGÓN primitivo condado. El yerno de Aznar so alto del Gállego.
Galindo, llamado García el Malo, El condado de Sobrarbe, muy
Hacia el año 800 los espacios expulsó hacia 818-820 a aquél. Los poco conocido, pudo mantener su
correspondientes a Aragón –bajo el sucesores de García ejercen el independencia en el siglo IX. Riba-
franco Aureolo–, Sobrarbe y Riba- gobierno del condado hasta la segun- gorza, también de reducidas dimen-
gorza estuvieron sometidos a los da mitad del siglo IX. Pero la ante- siones y hábitat montañoso, quedó
carolingios. Desde 810 destaca un rior estirpe fue restaurada hacia 864, unido al condado de Pallars por
personaje, Aznar Galindo, propieta- destacando Aznar Galíndo II (c. 864- Ramón I de Pallars y Ribagorza
rio indígena, al frente de un núcleo 893) y su hijo Galindo Aznar o (872-920), quien rompió la depen-
que, desde 828, aparece identifica- Galindo Aznárez II (893-924). Ara- dencia que había tenido respecto a
do como Aragón. Era un área al nor- gón comprendía los valles de Ansó, Toulouse. Luego ambos condados
te de Jaca. Esta comarca, con el valle Hecho, Canfranc, Acumuer y Tena y siguieron caminos separados.
43
G É N E S I S D E L R E I N O D E PA M P L O N A : I N F L U E N C I A S FA M I L I A R E S
ENTRE EL EBRO Y LOS PIRINEOS (SIGLO IX)
Río Bidasoa
Límite actual de la provincia de Navarra
a
Río Arg
Usun
Leire
DEYO Fuenfría
Aibar Sangüesa Río Aragón Jaca
a
BERRUEZA
Río Eg
Río Olite
Ebr
o
Río Aragón
Nájera Falces
Albelda
Viguera Calahorra Caparroso
a
gu Arnedo
o Ire
Rí
s
co
ida
oC
Rí
Tudela
a
Arb
Río
El apogEo los Banu Qasi quedaban en la segun- Fortún). Estas sublevaciones, que
dE los Banu Qasi da mitad del siglo IX como los autén- contaron a veces con apoyo de los
En las tiErras dEl EBro ticos dominadores de casi todo el reyes de Asturias, desgastaron a la
Valle del Ebro, en su gran eje cen- familia entre los años 871-882, perí-
La influencia de los Banu Qasi se tral. Los hijos de Musa siguieron odo de mayor rebeldía. Los grandes
incrementó desde que Musa Ibn dominando la zona tras su muerte en beneficiarios en el siglo siguiente
Musa en 852 fue designado valí de 862, pero su creciente desconexión serán los pamploneses, que se afian-
la Marca Superior. Tudela fue el cen- con el emirato les llevó a protagoni- zarán a costa de ellos.
tro de esta zona. Esto suponía que zar sublevaciones (Mutarrif, Ismail,
44
5
L A F R O N T E R A S U R D E L I M P E R I O C A R O L I N G I O O M A R C A H I S PA N I C A
RODEZ
NIMES
LODEVE
PROVENZA
ALBIGEOIS Lodeve
MAGUELONE
Nimes
R. Ródano
AQUITANIA
R. Garona BEZIERS
Toulouse
Beziers AGDE Maguelone
NARBONA
CARCASONA Agde
TOULOUSAIN Carcasona Narbona
Roncesvalles
RASES
Rosellón
CONFLENT ROSELLÓN
eg
re Llivia Peralada PERALADA
S
Seo
sa
R.
Huesca Besalú
e
llar
ibagorzana
-Pa
MUSULMANES AMPURIAS
Berga
era
R.
Eb R. Ter
ogu
R. Cinca
ro
R. Noguera-R
Gerona
R. N
egre
Osona
t a
R. S
reg
lob L
R.
Zaragoza Lérida
MUSULMANES Barcelona
R. Ebro
Tarragona
MUSULMANES
Tortosa
46
EVOLUCIÓN como delegado franco, había acu- tante. Aun cuando no pueda hablar-
DE LOS CONDADOS HASTA mulado varios condados a mediados se de una unificación de condados
WIFREDO EL VELLOSO del siglo IX. Y tras una cesura de en sus manos, sino más bien de aglu-
algunas décadas, hacia 870 Wifredo tinamientos dinásticos provisionales,
Durante el siglo IX diversas fami- aparece al frente de Urgel, Cerdaña, lo cierto es que el núcleo de Barce-
lias condales fueron sucediéndose. Besalú, Barcelona, Gerona y Osona. lona-Gerona-Vic constituyó ya des-
Se habla de condados “catalanes”, Al morir en 897 divide sus dominios: de entonces una referencia unitaria
aunque el nombre de Cataluña no se Sunifredo obtiene Urgel, Mirón II que se mantuvo y pudo acabar unien-
documenta hasta el siglo XII. Cerdaña y Besalú, mientras que do a los demás condados.
En el último tercio del siglo IX una Borrell I y luego Suñer fueron con- Por otra parte, desde la muerte de
familia y un personaje destacaron des de Barcelona, Gerona y Osona. Wifredo, y pese a que no hubo una
especialmente. Se trata de Wifredo Aunque el reparto no fue definitivo, formalización como tal, se suele
el Velloso, o “Guifré el Pilós”, como pues hubo otros desfases, la heren- hablar de independencia de los con-
generalmente es conocido en cata- cia de Wifredo el Velloso se ha con- dados catalanes respecto al reino
lán. Su padre, Sunifredo, siempre siderado a posteriori un hito impor- franco.
Más de 1.500 m
1.50
Más de 1.000 m
0
Seg
ir
Llo
Val
Ars Río
Er
Río
Ix
Ger
1.500
Bescaran
0
All
1.50
Lles
Tavernoles 1.500
Alp
Sta. Cecilia Arseguel
d’Elins Seu d’Urgell
Arfa 00
1.5
00
1.5
Sierra de Cadí
Tost
Tresponts 1.000
Cabó
Río Llobregat 1.0
Tuixén 00
0 1.0
1.00 Lavansa 00
gre
Río Se
Nargó 0 5 10 km
47
persas. Y la propiedad alodial resul- co, aquitanos o languedocianos. A la bién objeto de repoblaciones, pero
taba importante. En cuanto a los altura del siglo X estas zonas nuevas en menor medida. Los castillos rees-
repobladores, los de la Plana de Vic del Condado de Osona o Ausona tructuraban el espacio, junto con los
se ha supuesto que procedían sobre pueden considerarse ya colmatadas monasterios, destacando el peso
todo del área pirenaica catalana. demográficamente. urbano de Barcelona, que ya antes
Parece que la presencia mozárabe En cuanto al área de Cardona, el del siglo X era la principal ciudad y
fue escasa, así como también la lle- área del Llobregat, la zona próxima cabeza natural no sólo de su propio
gada de gentes del sur del reino fran- a Montserrat y el litoral fueron tam- condado, sino de la región.
E X PA N S I Ó N D E L O S C O N D A D O S D E L A M A R C A H I S P Á N I C A
EN ÉPOCA DE WIFREDO EL VELLOSO
CONFLENT
ROSELLÓN
CERDAÑA
VALLESPIR
768
egre Valle de
Río S Valle de Ribas Camprodón
URGEL
Valle de Bagá
PERALADA
BESALÚ
Río Flu
Valle de Lord vià
Valle de Ripoll
BERGA
AMPURIAS
Berguedá
Llusanes
AUSONA
Río Ter
Plana de Vic
GERONA
BARCELONA
VALLÉS
EMIRATO
Antiguo límite de la Marca Hispánica (hacia 768)
DE Los condados hacia 801
Zonas repobladas por Wifredo el Velloso (870-897)
CÓRDOBA
Límite de la expansión hacia el 900
Rí
o
Ll
Límite de condado
ga
t
0 25 50 km
900 801
48
6
Pamplona Aragón
Ribagorza
Condados
Castilla Tudela Catalanes
Huesca Barbastro
Reino MARCA SUPERIOR
Tarazona Zaragoza Lérida
de León
Calatayud
Medinaceli Tortosa
Daroca
MARCA
MEDIA Guadalajara
BARUSA
Madrid Santaver
MARCA INFERIOR Valencia
Coímbra SANTABRIYA AL-YAZA’IR AL SARQIYYA
Toledo
Egitania
QAL’AT RABAH Játiva
Santarem SATIBA
Badajoz Mérida SHARQ
AL-ANDALUS
Lisboa AL BALLUT
Évora Murcia
GARB AL-ANDALUS TUDMIR
Beja Córdoba QABRA Jaén
LABLA Écija Cabra YAYYAN Baza
BAYA Sevilla Carmona BAYYANA
UKSUNUBA Niebla ISBILIYAQARMUNA Elvira Pechina
Silves Morón Archidona
ILBIRA
SIDUNA REYYO Almería
Jerez Ronda Málaga
Sidonia
Algeciras
AL-JADRA
Ceuta
Zonas cristianas consolidadas: Reino de León, Castilla, R. Pamplona, Aragón, Ribagorza y Condados Catalanes
Límites del Califato
Desierto estratégico y “tierra de nadie”
Córdoba. Capital del Emirato
Principales centros territoriales andalusíes según capitales de las coras
(los emplazamientos, que incluyen los de las marcas, se corresponden con las ciudades actuales o ubicaciones próximas)
LABLA Algunos nombres de distritos o coras (cuando no coinciden con la capital homónima)
Medinaceli: capital de la Marca (Tugur, Tagr)
Grandes demarcaciones de Al-Ándalus
50
rivalidad clara. Por supuesto rivali- CÓRDOBA MUSULMANA
zaba también con el tercer gran poder
musulmán del mundo, el de Bagdad, ARRABAL
con el que simbólicamente se situa- de AL-RUSAFA
ba al mismo nivel. Córdoba fue la
capital del Islam occidental, como HAYR
AL-ZAYYALI MUNYAT
Qairawan lo fue del africano y Bag- AL-MUGIRA
dad del oriental.
Desde el inicio del califato de Abd Y
BUR BARRIO DE
al-Rahmán III, que muere en el 961, AL- LA AJARQUIA
hasta el final del reinado de Al (AL YANIB
Hakam II (961-976), Al-Ándalus fue MUNYAT AL-SHARQI)
una gran potencia y el orden interno AL-MADINA ABDALLAH
Barrio
básicamente imperó. mozárabe
En este período se produjo un
robustecimiento notable del aparato Camino a
político central. Numerosos visires, Barrio Medina
a modo de ministros, dirigían la judío Al-Zahira
Mezquita
administración, bajo la supervisión Camino Mayor
a Medina MUNYAT
de un hachib o primer ministro. Abd
Al-Zahara ARRABAL de Alcázar NASR
al-Rahmán III mandó construir a 8 AL-RAQQAQIN
Bab-al-Qantara
km de Córdoba Medina Al-Zahara ARRABAL (Puente del Río)
desde el 936 y allí llevó el gobierno, DE Jardines ARRABAL
ISBILIYYA MUNYAT del Alcázar DE
como si fuera una ciudad-corte. Todo Sudda
el conjunto alcanzaba 112 ha, una AL-MUSARA (Molinos) SECUNDA 500 m
décima parte de las cuales eran estan- Muralla de la Medina en época califal
cias palatinas o del alcázar. El ejér-
cito se profesionalizó considerable- Arrabales en torno a mezquitas en las almunias
mente, a costa de las lealtades Gran Zoco creado por Abd-al-Rahmán III
tribales, y se desarrolló enormemen- Barrio judío
te la burocracia. Los esclavos de la Barrio cristiano (mozárabe)
corte adquirieron gran papel en el Barrio de la Ajarquía (delimitado inicialmente por un foso, más tarde amurallado)
gobierno. Se les llamaba saqaliba si Cementerio
eran esclavos europeos, procedentes
del norte, francos, etc. –se les deno-
mina también eslavos–, estaban bien
formados y, un sector influyente de Y en cuanto a las relaciones con los Al-Hakam II reforzaron además otros
ellos o fata’s, tenían autoridad en la reinos cristianos, salvo por contratiem- asentamientos como una ciudad en
burocracia, el ejército y la vida pri- pos concretos –939– los triunfos acom- torno a la actual Vascos, cerca de Tala-
vada califal. Los aparatos fiscales en pañaron a los musulmanes, sobre todo vera, o más al norte Gormaz, gran
esta época funcionaron con fluidez y a Abd al-Rahmán III, que personal- acrópolis levantada por Al Hakam. La
el estado cordobés podía recaudar mente dirigió algunas expediciones de zona del Alto Duero fue precisamen-
inmensas sumas, con un presupues- saqueo y castigo en tierras enemigas, te una región de luchas fronterizas
to de cerca de seis millones de dina- es decir, al norte del Duero y al norte entre cristianos y musulmanes. Unos
res al año. del Ebro, zonas ya entonces ocupadas y otros levantaron fortalezas y atala-
En política exterior cabe hablar y en repoblación por los cristianos: 920, yas, que cambiaron de manos. Sin
también de éxitos. En el Magreb y 924, 934, 939 –llamada de la Omnipo- embargo, la cuenca del Duero, al nor-
Mediterráneo los omeyas compitie- tencia, con victoria cristiana de Siman- te de Gormaz y por supuesto al norte
ron con los fatimíes por el control de cas–, 948, 949, 952, 954. Consciente de Guadarrama o Gredos, fue conce-
las rutas marítimas y costeras. Meli- de cuáles eran los límites septentriona- bida por los musulmanes como zona
lla, Ceuta y otros puertos mediterrá- les de Al-Ándalus, que no superaban el para las razzias saqueadoras y des-
neos impulsaban la expansión cordo- Sistema Central, Abd al-Rahmán III tructivas, no para tener en ellas asen-
besa por el Mediterráneo. Córdoba creó plazas fortificadas en la Marca tamientos estables, por lo que no pue-
alentó revueltas internas antifatimíes Media, como Madrid o Talamanca, y de considerarse que Al-Ándalus
–de jarichíes o radicales sociales– con mantuvo expedito el eje Toledo-Zara- llegara a las tierras situadas al norte
el fin de debilitar al califato rival. goza. Tanto Abd al-Rahmán III como de la Cordillera Central.
51
F O RT I F I C A C I O N E S M U S U L M A N A S E N E L D U E R O C A S T E L L A N O ( S I G L O X )
(del Burgo)
Río Duero
San Esteban Uxama ill
a Torrejalba
Lomera pin
nte
Río Izana
u e
El Pilón oF
Río Ucero
Río Duero Rí
Enebral o
er
o Du Almazán
La Torre Navapalos Rí Bliecos
Peñalba Taina de la Hoz
Monte Cubo Velamazán
Gormaz Río
Es calo
te Río
Mo
Mosarejos Sierra de Hontalbilla ró n
Caracena
Río Tole
Ojaraca Veruela
Nograles Torremocha
Alto Lutero
gones
Río Tiermes
Rello
Cara
Río
c
Bo
ena
rde
cór
Altos de Barahona e x
Sierras de Pela y Bulejo
Mezquetillas
Río Jalón
Atienza
Medinaceli
Gormaz Grandes centros fortificados
Enebral Atalayas y pequeñas fortificaciones
LA ÉPOCA DE ALMANZOR Con este ejército nuevo pudo hacer to una dinastía bastarda nueva, la
la yihad y concertar alianzas y tre- dinastía amirí, que era la estirpe de
Desde el 976 cambió el ciclo. guas militares con los reinos cris- Almanzor. Los esclavos de la corte o
Cuando murió Al Hakam II, un per- tianos –divididos entre sí– que duran- fata –élite dentro de los saqaliba–
sonaje llamado Al-Mansur, o Al- te mucho tiempo le reportaron ven- tenían, a juicio de muchos, excesivo
manzor, había adquirido influencia tajas indudables. poder. Todos estos factores, sumados
gracias a ser el administrador del Almanzor fue un caudillo temido al secular localismo de los poderes
príncipe Hisam. Almanzor, antes lla- por los cristianos. Jugando hábil- regionales y al malestar social de las
mado Muhammad ben Abi Amir, mente con treguas parciales, empren- masas, deterioró el prestigio de Al-
aprovechó la minoridad de Hisam II, dió cerca de 50 razzias o aceifas, un manzor o, al menos, creó las condi-
que reinó entre los años 976 a 1013, par de ellas al año. Atacó monaste- ciones para que, a su muerte, estalla-
para dirigir Al-Ándalus en los pri- rios, ciudades y muchas localidades ran fuertes conflictos.
meros años. fueron varias veces saqueadas, como Almanzor murió en 1002. Su hijo
Desde el 981 Almanzor, suplan- Salamanca, Zamora, Ledesma o la Abd al-Malik intentó continuar las
tando al califa, ejercía el verdadero propia capital del reino de León. acciones de su padre, y logró preca-
poder como hachib, que compagi- Saqueó también Compostela, Pam- riamente realizarlas en 8 ocasiones,
naba con la máxima jefatura militar. plona y Barcelona. hasta su muerte en 1008. Tuvo un
Desde ese año hasta 1002 se ha A pesar de sus éxitos exteriores, breve sucesor en su hermano Abd-al
hablado de una especie de gobierno Almanzor fue atrayendo hacia sí odios Rahmán “Sanchuelo”, hijo de
dictatorial y personal. Se hizo cons- y enemistades considerables. La me- Almanzor y de una hija de Sancho
truir una residencia, Medina Al-Zahi- galomanía del caudillo disparó el gas- Abarca de Pamplona, entregada
ra, en rivalidad con la Medina Al- to público. El africanismo de las tro- hacia 980 a modo de tributo. Ejerció
Zahara existente. Amplió la mezquita pas mercenarias disgustó a las viejas el poder en 1008-1009, pero no todos
de Córdoba en el 988 y, sobre todo, familias dirigentes y a la población. lo reconocieron. Luego comenzó un
reformó el ejército, incorporando a Se alegaba también la falta de legiti- período de crisis y guerras civiles
la base yundí tropas de mercenarios midad de Almanzor, puesto que había que, como corolario, trajo consigo el
norteafricanos, beréberes o esclavos. suplantado al califa y fundado de fac- hundimiento del Califato.
52
L A S C A M PA Ñ A S D E A L M A N Z O R
REINO FRANCO
San Cosme REINO DE LEÓN
Santiago de León, 982, 986, REINO DE PAMPLONA
Iria Flavia Compostela, 997 988, 994, 995 Pamplona,
Astorga, Burgos,
Carrión, 1000 CONDADO DE
994, 999 RIBAGORZA CONDADOS
988, 994, 995 Sahagún, 995
San Millán, 1002 CATALANES
988 Huesca
Clunia, Gerona
Simancas, 989, 994 Manresa
983 Zaragoza Lérida
Zamora, S. Esteban de G. Osma, 989, 1002
Oporto, 997 979, 981, 982, 984, Toro, 982, 989, 994 Barcelona, 985
985, 986, 988 988 y 989 Sepúlveda,
Cuéllar, 977 979, 984 Medinaceli
Ledesma, Salamanca 977, 983, 986
977, 978, 979 Tortosa
Alba de Tormes, 986
Viseu, 997 Guarda, 977 Guadalajara
Coímbra, 987
Montemor, 990
Coria Toledo
EL COMIENZO Hisam II. Los sublevados destruyeron de la corte y duró hasta 1013. Pero
DE LAS GUERRAS CIVILES la amirí Medina Al-Zahira. Muchos los beréberes no lo aceptaron. Los
saqaliba, influyentes en la corte, cristianos aprovecharon estas debi-
Desde 1009 se sucedieron varios marcharon a Levante, a la parte de lidades para acosar a Al-Ándalus.
califas, pero sin que ninguno alcan- Al-Ándalus conocida como Sharq El malestar de la población, espo-
zara un poder efectivo. Se conoce al-Andalus, donde se hicieron leada por una presión fiscal que no
como segunda fitna o guerra civil. fuertes. podía soportar, contribuyó a debi-
En febrero de ese año la aristocracia Pero la paz no llegó. Una parte litar al califa. La población de las
omeya logró que la población de de la población beréber se sublevó. Marcas se sentía cada vez más ale-
Córdoba se sublevase contra San- Partidarios de Almanzor desterra- jada de una reducida aristocracia
chuelo, que acabó ejecutado, y tam- dos conspiraron contra el poder. gobernante de Córdoba, despresti-
bién la abdicación del califa oficial, Hisam II fue repuesto por los fatas giada y sin autoridad.
ORGANIZACIÓN FAMILIAR, los modos o lengua árabes” sin ser- del clan. El encuadramiento de los
SOCIAL Y MATERIAL lo– eran considerados dimmíes, esta- invasores en este tipo de estructuras
DE LA SOCIEDAD ANDALUSÍ ban sometidos a los musulmanes y arcaicas de tipo tribal y patrilineal
pagaban un tributo o jaray. cerrado, que además impusieron en
Todos estos conflictos, que hicie- Los invasores, árabes y beréberes, Al-Ándalus la poligamia sobre muje-
ron sucumbir al Califato, ponen en pese a tener el poder, no rompieron res de cualquier origen y extendie-
evidencia varios de los grandes pro- con un tipo de estructura familiar ron la descendencia en esclavas,
blemas estructurales que la sociedad basada en linajes agnaticios funda- impidió la fusión antropológica con
andalusí no pudo nunca resolver. Son mentados en lealtades clánicas, pres- la mayoría de la población autócto-
varias las contradicciones que se han tigio genealógico a través de los na, que siempre constituyó un mun-
señalado por parte de los historia- componentes masculinos, endoga- do aparte: muladíes, judíos y cris-
dores o estudiosos actuales. mia preferente –tanto es así que el tianos.
Las diferencias confesionales eran ideal matrimonial era el del varón La complejidad de las estructuras
bien visibles, pero no fueron las más casado con la hija de su tío paterno, de parentesco se incrementaba, ya
desgarradoras. La población musul- bint al amm– y vínculos de paren- que se crearon lazos de parentesco
mana o umma, formada por los mus- tesco unilateral. Entre árabes y beré- ficticio. Las familias árabes y beré-
limes, fue mayoritaria en Al-Ánda- beres la mujer tenía un papel pasivo. beres incorporaban a su seno a clien-
lus, bien por su islamización previa Depositaria del honor familiar, ird, tes o mawali –“maulas”– de origen
–árabes y beréberes–, bien tras pro- que ella no podía aumentar sino tan no árabe. No eran consanguíneos,
cesos de conversión de la población sólo perder, su posición contrastaba pero quedaban acogidos en los cla-
indígena, convertidos inicialmente con la del varón, que era el compo- nes árabes o beréberes. Su situación
sus descendientes, llamados mula- nente activo, el único capaz de incre- era inferior, ya que los mawali se dis-
díes o muwalladun. Judíos y cristia- mentar el honor –saraf, honor gana- tinguían de los invasores y no po-
nos –estos últimos llamados mus- do por los hombres en guerras y dían igualarse a ellos. En el caso de
ta’rib o mozárabes, que “adoptaban acciones decorosas– de la familia y las mujeres indígenas con las que
53
CIUDADES DE AL-ÁNDALUS de discriminaciones y rivalidades
ancestrales.
La alteridad de los dominadores
Atienza Medinaceli árabo-beréberes con respecto a la
Sigüenza población indígena de Hispania,
Buitrago
Jadraque sobre todo esas enquistadas solida-
Uceda Molina
Hita ridades tribales de árabes y nortea-
Sierra de Talamanca fricanos, afectó también a las rela-
Guadarrama Guadalajara ciones sociales de Al-Ándalus. Todo
Alcalá de Henares indica que se impuso un tipo de
Ercávica/Santaver sociedad “tributaria”, propia de so-
Alamín Madrid Zorita ciedades antiguas y orientales. En
Recópolis
Escalona Taj
o Huete Cuenca
lugar de formarse vínculos de tipo
Maqueda Río feudal y atomización del poder y de
Huecas Uclés
Talavera Sta. Olalla la renta, el estado fue fuerte en ese
TOLEDO Ocaña tipo de sociedades tributarias. Sin
embargo la estabilidad, pese a esta
Vascos aparente fortaleza, no se consiguió,
Consuegra ya que más que basarse en el princi-
Rí pio del territorio –el país, la identi-
o
Gu dad de los habitantes de una zona–,
ad
ia
na Malagón en Al-Ándalus los equilibrios ver-
Calatrava daderamente importantes eran los
acaecidos entre parentelas clánicas,
Alarcos sometidas a vaivenes y procesos
Caracuel Oreto
estructurales de segmentación incon-
Belalcázar Ciudades clusa. El estado andalusí, en una con-
Ciudades en torno a los 20.000 habitantes o más
tradicción insoluble, se sostenía
0 100 km Ciudades gigantes (más de 40.000 habitantes
en algún momento de su historia andalusí) sobre una base social en buena medi-
da segmentaria, basada en clanes y
linajes, al menos en lo referente a los
componentes árabo-beréberes, como
concibieron hijos, la situación dista- grave si se tiene en cuenta que hubo decimos. Sabemos que el estado sue-
ba aún más de la integración: al no conflictos entre los árabes de la toma le tender a disolver estas estructuras,
reconocerse el parentesco por vía de Al-Ándalus –baladíes, divididos pero en Al-Ándalus no logró sobre-
materna, estas mujeres de sangre his- entre qaysíes y kalbíes–, los árabes ponerse a ellas. De hecho, en Al-
pánica nunca fueron consideradas par- venidos en el 742 –yundíes o sirios– Ándalus el estado pudo incidir en
te de los linajes árabes o beréberes, y por supuesto los beréberes, con grado diverso en las diferentes esca-
exclusivamente masculinos y por ello varios grupos tribales diferenciados. las de las solidaridades y vínculos
la descendencia fue considerada por Entre todos estos invasores persis- sociales: disolvía fuertemente las tri-
los árabes y beréberes como exclusi- tieron continuas tensiones derivadas bus originarias, pero menos los cla-
vamente fruto de su propia sangre. No
importaba quién fuera la madre: los
hijos de un padre árabe o beréber eran
considerados del linaje de éste.
Dado que la población autóctona, CIUDADES DE AL-ÁNDALUS
como era habitual en Europa, se
regía por estructuras familiares de Ciudades
parentesco bilateral –se daba valor Ciudades en torno a los 20.000 habitantes o más
al parentesco por vía paterna pero Ciudades gigantes (más de 40.000 habitantes
en algún momento de su historia)
también materna–, reconocimiento
social de la mujer y ausencia de lazos Río
de tipo clánico, puede en conse- E bro Boltaña
cuencia hablarse de “dos sociedades” Nájera Calahorra Bolea
en el seno de Al-Ándalus, la de los Huesca
Barbastro
árabo-beréberes y la de la población Viguera Alfaro Arnedo Ejea Piracés Balaguer
Tudela Monzón
autóctona, incluso aunque ésta fue- Tarazona Borja Corbins
ra confesionalmente musulmana. Las Agreda Rueda Zaragoza Fraga Lérida
dos sociedades nunca acabaron de Ricla Barcelona
fusionarse. Árabes y beréberes fue- Ariza Bilbilis Mequinenza
Calatayud Río
Jaraba Eb Tarragona
ron ajenos, desde este punto de vis- Daroca Alcañiz ro
ta, a la estructura antropológica his- Calanda Tortosa
pánica, pese a dominar una parte de 0 100 km
la península durante siglos. Por
supuesto, la situación se hace más
54
nes y poco o muy poco los linajes CIUDADES DE AL-ÁNDALUS
agnaticios de los árabes y los beré-
beres.
Coímbra
Por otra parte la capacidad estatal
para absorber eficazmente la rique- Condeixa
za social producida hacía imposible
en estas sociedades la movilidad
individual de los productores, real- Idanha
Coria
zándose en consecuencia un antago-
nismo insalvable entre la clase-esta-
do extractora y las comunidades ajo Alcántara Albalat
rurales o urbanas sometidas a ella. Río T
En consecuencia, los campesinos no Santarém Cáceres Trujillo
pudieron acumular excedentes, las Avis
solidaridades horizontales entre las
Sintra
comunidades explotadas se mantu- Lisboa Elvas Mérida
vieron casi inmutables y no hubo Monte Sião Medellín
Juromenha
ocasión para el surgimiento de pode- Almada Evora Badajoz Alange
res intermedios y sectores aristocrá- Setúbal
ana
ticos al margen del estado. Incluso
Alcácer do Sal
i
uad
aunque en algunas etapas de la his-
Aroche
G
toria de Al-Ándalus hubo concesio-
Río
nes de tierras a jefes militares –iqta, Beja
institución de cesión de tierras de
origen yundí– no pueden equiparar- Mértola
se en modo alguno a las concesiones
feudales, ya que eran revocables y Gibraleón
Silves Niebla
no hubo propiamente privatización. Loulé Cacela Lepe
Todo ello contrasta con lo ocurrido Faro Huelva
Tavira
con las urbes y las aldeas cristianas, Saltés
con sus élites campesinas o las capas
intermedias, que fueron típicamen-
te occidentales, aunque tardaron en
aparecer, y que en cambio no cuaja-
ron en las sociedades tributarias,
Ciudades
entre las que, con matices, se encua- Ciudades en torno a los 20.000 habitantes o más
dra la andalusí. Ahora bien, este Ciudades gigantes (más de 40.000 habitantes
modelo de relaciones sociales y for- en algún momento de su historia) 0 100 km
mas de estado no debe considerarse
universalmente impuesto o extendi-
do en la propia Al-Ándalus. Hubo en
dificultad para ser objeto de tribu- incluyendo las serranías mediterrá-
muchas comarcas o regiones perifé-
tación pública, eran una forma de neas del interior, la actividad pecua-
ricas elementos ligados a la gran pro-
impedir que el estado tributario con- ria de ganado menor, impulsada
piedad, servidumbre, poderosos loca-
fiscara los excedentes productivos, sobre todo por los beréberes, habría
les y cuadros autónomos al margen
más dificiles de acaparar si son pere- tenido más relevancia, al no existir
del estado omeya, y en los que no
cederos. También estos cultivos eran en esas comarcas, salvo en los alre-
regía una sociedad tributaria carac-
el resultado de unos ingeniosos sis- dedores de algunas ciudades, gran-
terística.
temas de riego y canalización –ace- des vegas regadas y orientadas a la
En las condiciones de esa socie-
quias, norias, canales, qanats...–, en producción agrícola.
dad tributaria andalusí, en que nin-
los que los campesinos de Al-Ánda- El comercio urbano, ejercido en
gún contrapoder pudo diluir o ato-
lus fueron maestros, al igual que numerosos zocos, estaba controlado
mizar –como pasaba en el feu-
lo habían sido los pueblos medite- por las autoridades del emirato o cali-
dalismo– la presión por la renta, las
rráneos desde la Antigüedad. Quizá fato, entre los que destacó desde su
comunidades rurales pudieron man-
por ello hubo déficit cerealístico en creación a fines del VIII el sahib al
tener la igualdad material de sus
Al-Ándalus. En cambio se mantuvo suq o “señor del zoco”. En estas
miembros, así como el control de la
el prestigio del olivar, que venía ya sociedades tributarias el comercio
propiedad y hasta la gestión de las
desde la época romana, y se incre- exterior, bajo la tutela de las autori-
fortalezas o husun en muchos casos.
mentaron los cultivos de plantas tex- dades centrales, tenía cabida. Al-
Sin embargo, el estado tenía toda la
tiles, estimuladas por una potente Ándalus no fue una excepción y
capacidad de coerción para extraer
industria de lino, algodón y seda, en mantuvo importantes intercambios
renta al máximo e impedir la evolu-
este caso al ser introducida a media- con otros países, lo que sin duda
ción de esas comunidades. Se ha lle-
dos del siglo VIII. En las marcas incentivó ciertas actividades econó-
gado a decir que para muchos cam-
fronterizas media e inferior, así micas y producción para la exporta-
pesinos andalusíes los cultivos de
como en las zonas montañosas, ción. Ello se suma a cierta propen-
huerta, tan característicos y de gran
55
CIUDADES DE AL-ÁNDALUS
Ciudades
Ciudades en torno a los 20.000 habitantes o más Beas de Segura
Ciudades gigantes (más de 40.000 habitantes Segura
en algún momento de su historia) Baños de la Encina
Cazlona Hornos de Segura
El Vacar
Castillo de la Armada Andújar Úbeda
Aracena Constantina CÓRDOBA Arjona Cazalilla Raeza Jódar Cazorla
M. Al- Porcuna
Hornachuelos Zahara Jaén Caniles Quesada
Setefilla Moratalla Martos
Mentesa Tíscar
Cantillana Lora del Río Baena Alcaudete
Itálica Carmona Cabra Alcalá la Real Baza
Tejada Priego
SEVILLA Écija Lucena Guadix Purchena
Aznalfarache Loja Tíjola
Alcalá de Marchena Elvira Sierra
Guadaira Estepa Senés
Coria del Río Osuna Nevada
Aznacázar Archidona GRANADA
Antequera Alhama de Granada Fiñana Velefique
r i
uiv
Morón de la Frontera
ad ío
Islamayor Andarax
alq
Bobastro
Gu R
Carteya
Véjer
Algeciras Gibraltar
0 100 km
Tarifa
CIUDADES DE AL-ÁNDALUS
sión cultural de los árabes hacia algu-
nos hábitos de consumo.
Albarracín Morella
En ese sentido, la economía de Al-
Ándalus, no ya sólo en la época emi-
Alcalá de Chivert ral o califal, sino en toda su historia,
Sarrión Miravet Oropesa
a
56
presentan peculiaridades. Aparte de masa o amma, la mayoría de la blancos, procedentes de zonas cris-
las minorías confesionales, suelen población. A medio camino, secto- tianas– y los mawali o clientes no
distinguirse entre los musulmanes res intermedios o al-ayan incluían eran propiamente estratos sociales,
dos grandes sectores: una aristocra- juristas, alfaquíes, grandes comer- sino sectores subordinados e inte-
cia o jassa, a la que paradójicamen- ciantes-proveedores oficiales, cadí- grados en las familias musulmanas
te podían pertenecer esclavos de cor- es o jueces, etc. Los esclavos ordi- de las capas medias y aristocráticas.
te o fata’s; y en el polo opuesto, la narios –algunos “eslavos”, es decir,
57
7
60
DINASTÍAS PAMPLONESAS: ARISTA Y JIMENO (SIGLOS IX–XI)
(Dinastía Íñiga–Arista)
Musa Ibn Musa ben Qasi = Ossona García Íñiguez – – – – – – – – – – – – – – – – – (línea dinastía Jimena) – – –
(Musa II, m. 862) (851/852-882?)
Abd Allah = (1) Oneca (2) = Aznar Sánchez Galindo Aznar II = Sancha Íñigo Garcés
de Larraun Conde de Aragón
(Dinastía Jimena)
Fernán González
Conde de Castilla, (c. 930-970)
García Sánchez Mayor = Sancho Garcés III El Mayor Urraca = Alfonso V de León = Elvira Menéndez
Conde de Castilla, (o Munia) (1004-1035) Rey de León,
(1017-1028) (999-1028)
Sancha de Aibar =
61
HUNDIMIENTO DE LOS luchó contra los musulmanes en Val- Las tierras de la Rioja, aunque no
BANU QASI Y EXPANSIÓN dejunquera y Muez en 920 –derrota estaban ni mucho menos despobladas
DE LOS NAVARROS cristiana–, logró tener éxitos en la al ser conquistadas por los pamplo-
POR LA RIOJA zona de Berrueza y Deyo. Y además neses, experimentaron aportes nuevos
de la Ribera navarra, sus victorias le de población. No hay muchas evi-
Sancho Garcés I y sus sucesores permitieron añadir territorios rioja- dencias, pero se supone que gentes de
extendieron su dominio en la cuen- nos, como Calahorra o Arnedo (918) Álava y montañas al norte de Pam-
ca y al sur del Ebro. El primero, que y Nájera (923). plona, de origen vascón, pudieron acu-
C A M PA Ñ A S D E A B D A L - R A H M Á N I I I ( 9 2 0 )
REINO
Oviedo FRANCO
Santiago de
Compostela
Pamplona
Muez REINO D
León Valdejunquera Jaca E PAM La Seo de Urgel
920 PL
Burgos Nájera Uncastillo ON
iño REINO DE LEÓN Calahorra F R O N T E R A A CONDADOS
Río M Viguera
Tudela Huesca S U CATALANES
PE
RI
Clunia Lérida O
Zamora Zaragoza
Toro Osma Rí
R
Gormaz Calatayud o Barcelona
Eb
Río Duero ro
Medinaceli
IA Tortosa
ED
M
A
ER
NT Madrid
FRONTERA INTE
RI OR FRO
Coria
Toledo
ajo
Río T R. Valencia
G ua
dia
na
Mérida Batalla con victoria musulmana 0 50 100 km
C A M PA Ñ A S D E A B D A L - R A H M Á N I I I ( 9 2 4 )
REINO
Oviedo FRANCO
Santiago de
Compostela
Pamplona
Muez
REINO DE
León PAM
Jaca PL La Seo de Urgel
Burgos Nájera
Uncastillo ON
iño REINO DE LEÓN Calahorra A CONDADOS
Río M
Viguera FRONTERA S CATALANES
Tudela Huesca UP
ER
Clunia Lérida IO
Zamora Zaragoza
Toro Osma
R
ajo Valencia
Río T Rí
oG
ua
d ian
Mérida a
0 50 100 km
62
C A M PA Ñ A S D E A B D A L - R A H M Á N I I I ( 9 3 7 )
REINO
Oviedo
Santiago de FRANCO
Compostela
Pamplona
León REINO DE
PAM
Jaca PL La Seo de Urgel
Nájera Calahorra Uncastillo ON
iño R E I N O D E L E Ó N Burgos A CONDADOS
Río M F R O N T E R A
Viguera Tudela Huesca S U CATALANES
PE
RI
Clunia Zaragoza Lérida O
Zamora Osma Río
Toro San Esteban
R
Gormaz Calatayud Eb
ro Barcelona
Río Duero de Gormaz
Medinaceli
Alcañiz
D IA Tortosa
E
M
A
ER
I O R O NT Madrid
R R
FRONTERA INTE F
Coria
Toledo
ajo
Río T Rí
Valencia
oG
ua
d ian
Mérida a
0 50 100 km
E X PA N S I Ó N D E L R E I N O D E PA M P L O N A P O R L A R I O J A
CON SANCHO GARCÉS I (905-925)
ARAGÓN
Río Ega
Nájera Carcastillo
oO
Albelda Sartaguda
Rí
Caparroso
illa
a Viguera
gu Arnedo
N
Ire
Río
Río Autol
s
da
co Enciso
Ci Valtierra
Río
a
Arb
Tudela
MUSULMANES
Río
MUSULMANES
Tarazona Río
Borja Eb
ro Zaragoza
63
dir a la repoblación riojana, en canti- cooperación militar con el Condado lazos con los rivales de los leoneses,
dades que es imposible determinar. de Castilla se acentuó, con impor- es decir, los castellanos, ganando
Tras la muerte de Sancho Garcés tante colaboración en la frontera. Al influencia allí. Más tarde, en el rei-
I y, tras un período de regencia de la enfrentarse a mediados del siglo X nado de Sancho III el Mayor, esta
reina madre Toda, los siguientes leoneses y castellanos, el Reino de influencia cristalizó en un dominio
reyes pamploneses mantienen las Pamplona, desde las posiciones rio- efectivo sólidamente anudado por
alianzas y estrategias territoriales. La janas –San Millán, Nájera– estrechó vínculos dinásticos y vasalláticos.
ARAGÓN Y PAMPLONA BAJO era, lógicamente, Pamplona y los culturales y de identidad: el compo-
SANCHO III EL MAYOR territorios viejos del reino, que lle- nente linguístico vascón fue que-
gaban hasta el Pirineo navarro. Otra dando como relicto en las zonas más
Sancho Garcés III o Sancho El pieza era la zona de Deyo o Estella, norteñas, adaptándose el reino a una
Mayor es el principal representan- te más reciente. También La Rioja y más acusada centralidad del compo-
de la dinastía pamplonesa pero tam- Ribera navarra, nueva zona llana nente mozárabe, monástico, latino y,
bién pieza clave en las genea-logías incorporada y ganada por sus ante- por ende, culturalmente castellano.
regias hispánicas. En sus cuatro abue- pasados a los Banu Qasi y que irá Así pues, el Ebro y La Rioja fue-
los pueden rastrearse cuatro grandes dotando a Nájera de una importan- ron prioridad para Sancho III como
troncos de las casas principales penin- cia creciente. Además, el Condado lo habían sido para sus antepasados
sulares: el linaje del reino de Pam- de Aragón, absorbido por sus ante- de la dinastía Jimena. Pero también
plona y el del Condado de Castilla por pasados, pequeño, montañoso y hay que destacar que el matrimonio
lo que respecta a sus abuelos pater- recóndito. de Sancho III con la hija primogéni-
nos; y dos líneas condales leonesas y En el caso de La Rioja, las posi- ta del conde castellano, efectuado
limítrofes con Castilla –Cea, Salda- ciones se reforzaron. Hay que tener posiblemente hacia 1010 o 1011,
ña– por parte de sus abuelos mater- en cuenta que hacia el Año Mil no abriría poco después enormes posi-
nos. Otros enlaces indirectos convier- sólo el poder regio, sino importan- bilidades en esta última región. Es
ten a este rey en crisol de dinastías tes monasterios, tanto del reino ori- seguro que antes de que la herencia
hispánicas. Y de su descendencia par- ginario –Leire– como riojanos del condado pasase a Muniadona o
ten igualmente conexiones amplísi- –Albelda, San Millán– cumplirían doña Mayor, como también es cono-
mas entre todos los reinos hispánicos. un importante papel en las riberas cida la esposa de Sancho III el
Su reinado coincidió con el decli- del Ebro como motores de la repo- Mayor, la influencia en Castilla era
ve del califato. Este hecho favoreció blación y de la organización agraria ya muy solvente.
que en sus manos fueran cayendo y del espacio rural. Este desplaza- Por lo que respecta a los núcle-
territorios diversos y muy notables. miento del eje del reino hacia el Ebro os pirenaicos, Sancho III intervino
Cuando en 1004 llegó al trono había y Nájera, a costa de la cuenca de en Sobrarbe y Ribagorza, que entre
en el reino que heredaba varias pie- Pamplona y las montañas del norte, 1017 y 1025 fueron anexionados al
zas bien diferenciadas. Una de ellas seguramente tuvo también efectos reino de Pamplona, o en situación
L A S F R O N T E R A S D E A R A G Ó N C O N S A N C H O E L M AY O R ( 1 0 0 5 - 1 0 3 5 )
PA M P L O N A
Pamplona SOBRARBE
Benasque
Jaca
Broto
ARAGÓN RIBAGORZA
Boltaña Aínsa Obarra
Caparroso Peña Sos Biel Allué Latorre (Monclús) PALLARS
Uncastillo Agüero La Torre
Funes Roda
Calahorra Carcastillo Loarre Nocito
Murillo Alquézar Capella
de Gállego
Alfaro Ayerbe Abizanda
Sádaba Graus Laguarres
Ejea Naval
Arnedo Huesca El Grado
Barbastro
Tudela Área conquistada
Fortalezas fronterizas
Plazas musulmanas
Área disputada entre Ribagorza y Pallars
Principales localidades cristianas
64
de subordinación semejante a la Fernando, un niño todavía hacia gón, convertido en reino propio y
que ya tenía el condado de Aragón. 1028, el Condado castellano. concebido probablemente en una
No dominó pero sí ejerció influen- Ya en su tiempo Sancho el Mayor situación de estar bajo la tutela pam-
cia en el condado de Pallars, que fue percibido como el principal rey plonesa, lo que a la postre no fue
hacia 1011 se había dividido en dos, de la península. No en vano el obis- efectivo. Gonzalo, por su parte, reci-
Pallars Jussá y Pallars Sobirá, este po y abad Oliba le denominó rex ibe- bió Sobrarbe y Ribagorza, que tam-
último en la cuenca alta del Nogue- ricus, simbólico título honorífico que poco formaban parte del reino patri-
ra-Pallaresa. se compadece bien con el enorme monial pamplonés.
En cuanto a Castilla, en 1017 que- conjunto territorial que dominó. El En cuanto a Castilla, era el caso
daba vacante el título de Conde. destino de los enormes dominios del más complejo. Se desconoce si fue
Cuestionado por muchos castellanos monarca pamplonés ha sido muy voluntad de Sancho el Mayor. Pero
–y por el leonés Alfonso V–, el rey controvertido, entre otras cosas por lo cierto es que, poco después de
de Pamplona apuntaló con su apoyo las ambigüedades de la cronística y morir él, al Condado de Castilla se le
a su cuñado, el menor García Sán- el laconismo de los documentos. El habían amputado, en favor del reino
chez. Éste ganó el condado y Sancho reparto que llevó a cabo entre sus pamplonés, las tierras de Castilla
el Mayor apoyos dentro de Castilla. hijos al morir el monarca en 1035 Vetula, las tierras de Oca y Bureba y
Es más, hay historiadores que consi- presenta, sin embargo, una con- el “Condado de Álava”, este último
deran que en los años finales del últi- gruencia en el contexto de la época. singularizado dentro del Condado
mo Conde de Castilla quien real- Se consideraba que el territorio patri- unitario de Castilla. Es posible que
mente gobernó fue el rey pamplonés. monial heredado, así como lo acre- en vida Sancho III hubiera partido
Con el asesinato del Conde García centado en un reinado determinado, no por dos el Condado, con la parte occi-
Sánchez en León en 1028, Castilla debía dividirse. Por eso el viejo reino dental para Fernando, con el título de
pasaba directamente a ser goberna- de Pamplona y los añadidos de La Rio- Conde, y la parte oriental para Gar-
da por Sancho el Mayor, a través de ja formaban parte de la herencia que cía de Pamplona. Habría considera-
los derechos de su esposa Muniado- iba a ser recibida por el primogénito do, pues, la parte oriental de Castilla
na, la hermana del conde muerto y legítimo, esto es, García Sánchez III. como una ganancia más de Pamplo-
heredera de Castilla. Formalmente Por su parte, Ramiro, aunque era na, como lo había sido en tiempos La
Sancho el Mayor delegó en su hijo el mayor, era ilegítimo. Recibió Ara- Rioja. Esto habría ocurrido también,
D O M I N I O S D E S A N C H O I I I E L M AY O R
Y D I V I S I Ó N D E L O S T E R R I TO R I O S A S U M U E RT E ( 1 0 3 5 )
Santillana CARRANZA
LIÉBANA TRASMIERA SOPUERTA VIZCAYA
ASTURIAS DE
MENA AYALA GUIPÚZCOA
SANTILLANA ORDUÑA Pirineos
CASTILLA LOSA
BRICIA
VETULA
ARREBA REINO DE
Río Carrión
VALDEGOVIA
CONDADO
Pamplona Pirineos
DE Oña ÁLAVA
Río Pis
PAMPLONA
Leire ARAGÓN A
REINO DE LEÓN
RZ
Saldaña Pancorbo Cellórigo SOBRARBE
GO
CASTILLA Cerezo
u
Carcar Ujué
BA
Nájera
erga
Grañón Boltaña
Carrión Castrojeriz Logroño
RI
Río Duero
ro
o Eb
Calatayud Rí
65
por lo tanto, con Castella Vetula y el III, a Pamplona frente a Castilla, pero que actuaban nobles que eran dele-
Condado de Álava. Es posible que las creará graves problemas en las déca- gados de la autoridad regia. Se deno-
tierras de la Bureba y Oca se aña- das siguientes. minan honores o tenencias y se ase-
dieran a la ganancia navarra ya des- Hacia el Año Mil el reino de Pam- mejan a los castillos castellanos
pués de Sancho III, cuando Fernan- plona y su entonces satélite Aragón epicentro de los alfoces regios. En el
do I, que accedió en 1037 al trono se habían ido convirtiendo en socie- caso navarro y aragonés estos aristó-
leonés, tuvo que contar para ello con dades feudales. Una aristocracia de cratas que detentaban el honor ser-
el apoyo del rey pamplonés, que qui- barones detentaba la hegemonía vían al rey de Pamplona –o a Aragón,
zá no fue gratuito. En cualquier caso, social y disponía de señoríos, sobre cuando éste fue independiente– y
esta frontera nueva, que rompía la todo en las zonas llanas al sur de los recaudaban tributos para el poder
unidad fraguada por Fernán Gonzá- Pirineos. El reino de Pamplona esta- público, pero también pudieron
lez y sus sucesores, destruyendo la ba ensayando en las primeras déca- hacerse con un patrimonio dominial
identidad dada a Castilla por sus con- das del siglo XI un modelo de control que consolidó a sus titulares como
des autóctonos, evidentemente a cor- territorial nacido en el siglo anterior un segmento materialmente muy
to plazo favorecía a García Sánchez y basado en castillos regios en los poderoso y con gran patrimonio.
T E N E N C I A S D E L R E I N O D E PA M P L O N A H A S TA 1 0 3 5
Rí
o Ur Río Bidasoa
um
ea
ia
eba
r
Río O
Río D
rola
Río U
Erro
Rí
Araquil
oU
l
aqui
Río Urrobi
lza
Rí o Ar
Río Erro
ma
ti
ra
oI
Río Salazar
Rí
PAMPLONA
ca
Huarte
s
Echauri
Río E
Riezu Unciti Leguín
Muez R ío Navascués
Elo
rz
Lizarrara
Lumbier
Marañón San Esteban eral
Sangüesa Río V
Río
Río
Aibar Ruesta Ara
gó
O
n
dró
Tafalla Gallipienzo
Río Arg
n
(Ujué)
Río Cidacos
NÁJERA
Falces
gua
ón
Río Arag
Ire
E bro Río
za
Arlás
Río
Le
Peralta
Uncastillo
o
Azagra Caparroso
Rí
Leza
Río Jubera
Viguera Funes
Ocón
uel
acos
Río Riq
Río Cid
Río
A lham
a
Río
E bro
rba
es
A
eil
Río
Tenencias o Qu
Rí
66
8
L O S C O N D A D O S O R I E N TA L E S A F I N A L E S D E L S I G L O X
Casas Condales
AL - ÁNDALUS
BARCELONA Pallars
Urgel
Cerdaña-Conflent
Besalú-Vallespir
Barcelona
Barcelona-Gerona-Osona
Ampurias
Rosellón
Sede episcopal
68
CONDES Y CASAL DE BARCELONA (897-1162)
Sunifredo I
(† 848-849)
Conde de Urgel, Cerdaña, Barcelona, Gerona, Osona
[Interrupción]
Wifredo I El Velloso
(870-897)
Conde de Barcelona, Gerona, Osona, Cerdaña, Urgel, Besalú
69
LA ORGANIZACIÓN AGRARIA septentrionales en la Cataluña medie- primera mitad del siglo X aparece el
Y LA FEUDALIZACIÓN val, podía ser de tipo alodial o estar vicarius, llamado en el futuro veguer.
DE LA SOCIEDAD CATALANA encuadrada en algún gran dominio, Condes, vizcondes y vicarios for-
en cuyo caso hay que hablar de frag- maban la aristocracia laica. A lo lar-
En los condados catalanes se die- mentación de los derechos de pro- go del siglo X van surgiendo linajes
ron pronto unas formas de instala- piedad, correspondiendo a los cam- unidos por lazos de sangre. Entre
ción y repoblación características. pesinos el derecho de uso. Los ellos destacan los linajes baroniales
La aprisio, que implicaba la adqui- monasterios se expandieron consi- de condes y vizcondes. Condes, viz-
sición de alodios, otorgó a los cam- derablemente. El dominio de San condes y vicarios detentaban la titu-
pesinos protagonismo agrario. Pare- Cugat muestra la amplitud y varie- laridad de ciertos territorios bajo cas-
ce que el proceso de adquisición, que dad de bienes y derechos de estos tra, pero dentro de una red pública
llevaba parejo romper el yermo o señoríos. de poder, justicia y fiscalidad. Por
scalio, pudo corresponder a las Desde el punto de vista social se eso se dice que había una castralidad
comunidades de valle en las áreas ha supuesto que hasta finales del pública hasta el siglo XI. Los tribu-
pirenaicas y, en cambio, haber teni- siglo X o principios del XI predomi- tos consistían en unos derechos que
do mayor base familiar en las lla- naron los hombres libres y las comu- se pagaban a las instituciones: cen-
nuras más meridionales, donde se nidades de aldea. Existían campesi- sum, teloneum, pascuaticum... Esta
aceleró la desaparición de esas nos dependientes, que pagaban rentas fiscalidad no era dominial y no que-
estructuras comunitarias. La cons- fructuarias (tasca, quartum), pero braba la solidaridad de las comuni-
trucción de castillos, como distritos predominaban los alodiarios. Toda dades aldeanas, que además se veía
dentro de los condados, contribuyó esta mayoría de hombres libres esta- reforzada por los aprovechamientos
a disolver los vestigios de estructu- ban encuadrados en unos ámbitos comunales de bosques y por la jus-
ras gentilicias que pudieran quedar todavía “públicos” durante los siglos ticia pública, de la que apenas esca-
en los valles. IX y X . La organización territorial paban entonces los cotos dominiales
En cuanto a la forma de asenta- consistía en un sistema de condados de los monasterios. Por debajo de los
mientos rurales coexistieron las al- y delegaciones vicariales. Los con- condados, vizcondados y vicarios
deas o villae y los mas: casa, grane- des y vizcondes tenían tierras fisca- estaban las castellanías. Durante el
ro, huertos, viñas y tierras de labor. les, es decir, que todavía no se habí- siglo X los castillos se extendieron
La masía, más propia de zonas más an privatizado. Por debajo, desde la por toda la región. Los castillos que
M O N A S T E R I O S A LT O M E D I E VA L E S E N L O S C O N D A D O S “ C ATA L A N E S ”
Cuixà
El Burgal Sureda
Barraves Sant Genís
Eixalada Arles
Canigó
Oveix Colera
Bellara Sant Sadurní
Lavaix de Tavernoles
Aguges Albanya Rodes
Elins Camprodon
Senterada Gerri Sant Llorenç Sant Llorenç Les Escaules Roses
prop Bagá del Mont
Maleses Tresponts Sant Joan
Sant Llorenc Ripoll Besalú
de Morunys Vedella
Balestur Banyoles
Graudescales Sant Pere
La Portella Sant Medir de Galligants
Sant Daniel Font Clara
Serrateix
Vic
Casserres
Sant Feliu
de Guíxols
Sant Benet de Bages
Breda
Santa Cecília Sant Llorenc
de Montserrat del Munt
70
D O M I N I O D E S A N C U G AT D E L VA L L È S H A C I A 1 0 2 0
a
Río Torder
Río Besòs
Río
Sant Llorenc
de Munt
Ripo
ll
Palau-solità
Clariana 50
0
Vallès
Río
Claramunt Montgat
Llo
bre
Masquefá
ga
0
50
t
SANT CUGAT 500
0
50 Fortalezas incluidas en el dominio
Montagut ès
ned
Casa madre
Pe Iglesias
0
50 Grandes dominios (tipo villae ): gran propiedad
Moja Gavà-Viladecans concentrada, fortalezas, iglesias… (origen en las
tierras fiscales: grandes concesiones condales,
Viladellops vizcondales, vicariales).
Santa Oliva Castelldefels Explotaciones agrícolas intermedias: conjuntos
Albinyana íntegros de viñas, tierras de labor, regadíos (origen
en adquisiciones de diversa procedencia).
Pequeñas explotaciones (de origen alodial
Calders campesino)
0 10 20 km Zonas en las que se concentra el regadío
los condados catalanes de Barcelo- jurisdicción propia– de los condados tierras entonces meridionales de
na, Osona-Manresa, Berga y Urgel en la frontera fueron muy numero- Cataluña.
tenían en las fronteras con Al-Ánda- sos y tuvieron áreas a veces bastan- En torno al Año Mil y en las déca-
lus se desplegaron en tierras de inci- te amplias asociadas al castillo. Sir- das subsiguientes acaecieron en la
piente control. Los castells terme- vieron como baluarte militar e región cambios importantes que afec-
nats –es decir, con término y instrumento de colonización en las taron a la organización social. Coin-
Llo Flu
URGEL Río Río
uera
MARCA DE Ampurias
Nog
Ripoll
PALLARS AMPURIAS
Río
Berga
MARCA DE
Río
URGEL
Ter
er
Río T Gerona
Río Ca
BERGA
OSONA
na
Solsona
rdener
gorza
Vic
GERONA
a Riba
Río Segre
oguer
MARCA DE
BERGA
Río N
Manresa
Balaguer MARCA DE Tor
dera
OSONA Río
Ódena
BARCELONA
MARCA DE
Se
gre BARCELONA
Río
Río
Río
An
oia
LL
Barcelona
ob
reg
at
Olérdola
9
71
Rialp Puigcerdá Peralada
PALLARS
La Seo Río Mug
de Urgel Río Segre CERDANYA
a Castelló
BESALÚ
a
ares
gat Besalú viá
bre
Pall
LLo Flu
URGEL Río Río
uera
MARCA DE Ampurias
Nog
Ripoll
PALLARS AMPURIAS
Río
Berga
MARCA DE
Río
URGEL
Ter
er
Río T Gerona
Río Car
BERGA
OSONA
orzana
Solsona
dener
Vic
GERONA
Ribag
Río Segre
oguera
MARCA DE
BERGA
Río N
Manresa
Balaguer MARCA DE Tor
dera
OSONA Río
Ódena
BARCELONA
MARCA DE
Se
gre BARCELONA
Río
Río
Río
An
uia
LL
Barcelona
ob
reg
at
Olérdola
ant
nts
Mo
Río 900
900
CONDADO DE 1010
PALLARS
Ardèvol
1010
CONDADO DE
URGEL
Cardona
CONDADO DE
BERGA
Vallferosa
CONDADO DE
MANRESA-OSONA
CONDADO DE
BARCELONA
[Véase mapa
de página siguiente]
Barcelona
900
1010 Castillos
Término del castillo
72
La Guardia
Castelloli Monistrol
Río A
noia
Tous Montbui
Pierola
Roqueta Claramunt Esparraguera
Piera
Conesa Orpi
Les Piles Queralt
Pontils Miralles Cabrera
Benyure Masquefá
Fores Vilademager
Solivella Montclar Sta. Perpetua Mediona
Terrasola Castellví
Fontrubi
Río
Querol Río Lavit Gelida
Barberá
Llo
Pontons Fo
colí Selmella ix
bre
Fran Montagut Foix Guardiola Subirat Cervelló
gat
Río
Espluga Cabra
de Francolí Pinyana Celma St. Martí
de Sarroca Avinyonet
Alba Pacs
Marmellar
Castellví Moja Olerdola Eramprunyá
El Montmell de la Marca Olivella
Río Gaia
Banyeres Canyelles
St. Esteve Ribes
Albunyana Santa Sitges
Oliva Geltrú
Cunit Cubelles
Calders Calafell
Montornés
Montoliu Bara
Tamarit Altafulla M a r
M e d i t e r r á n e o
cidiendo con varias circunstancias sustituida por las convenientiae o pac- A principios del siglo XI tan sólo la
–reajustes tras las campañas de tos privados entre nobles, de espaldas Iglesia mantenía cierto prestigio y
Almanzor, aumento de las concesio- a los condes. En este período se des- resortes para dar cohesión a la socie-
nes de dominios a la Iglesia, crisis plegaron guerreros privados a partir dad. El abad Oliva u Oliba († 1046)
política y vacío de poder, sobre todo de las castellanías, pequeños distri- fue la persona de mayor prestigio.
con la minoría de Berenguer Ramón tos de cuatro o cinco parroquias, que Fue abad de Ripoll desde 1008, obis-
I, desde 1017– todo indica que la aris- quedaron en manos del jefe de la po de Vic desde 1018, y abad tam-
tocracia se fortaleció, el sistema de guarnición del castillo, llamado lue- bién de Cuixá y Canigó. Actuó en su
poder se privatizó, el castrum se con- go castlà. Éste controlaba privada- tiempo de árbitro de disputas inter-
virtió en una institución feudal al mente un pequeño séquito de milites nas. Y difundió en la región catala-
servicio de los señores y el campesi- –cavalers–, empleados a menudo en na las Instituciones de Paz y Tregua
nado sufrió un proceso de pérdida de guerras entre linajes. El distrito del de Dios. Estas instituciones mitiga-
libertad y propiedades muy acusado. vicarius se convirtió en un gran seño- ron la violencia, pero además impu-
El cambio no fue súbito, pero la his- río laico de dimensiones comarcales sieron una especie de tutela de la
toriografía actual suele aceptar la en la primera mitad del siglo XI. Si Iglesia sobre los feudales en el
fecha de 1020 como el momento de el castellano era el agente militar, el momento en que triunfaba la ideolo-
la gran inflexión tras la cual el feu- bayle o bailius era quien gestionaba gía de los “tres órdenes”. Desde el
dalismo catalán, en el sentido clásico la explotación dominial en nombre punto de vista político, dado que la
de la expresión, se impuso. En el caso del señor y percibía las numerosas y acción pacificadora afectaba esen-
de los vicarios condales, comenzaron crecientes rentas feudales impuestas cialmente a la escala de los señores
a entregar a sus hombres tierras de a los campesinos. Desde las castella- banales y sus guerras particulares, el
forma privada, desligadas ya de la nías, ahora convertidas en señoríos, poder condal no sólo no se vio dete-
función, con la subsiguiente frag- fue fácil someter al campesinado, por riorado en ese período, sino que el
mentación de feudos. Las asambleas lo que muchos alodiarios pasaron a conde de Barcelona, con ese conda-
judiciales entraron también en crisis campesinos dependientes. do y con los de Vic-Osona y Gerona
y la justicia privada se fue imponien- Durante el período de transición a asociados a él, reforzó su hegemonía
do. En la primera mitad del siglo XI la feudalidad del siglo XI el clima de en toda la región.
la acción de los iudices públicos fue violencia y guerras fue considerable.
73
9
Ordoño IV El Malo = (2) Urraca Fernández (1) = Ordoño III Sancho I El Gordo = Teresa Ansúrez
(958-959) (951-956) (956-958/959-966)
76
C A M PA Ñ A S D E A B D A L - R A H M Á N I I I ( 9 3 4 )
REINO
Oviedo FRANCO
Santiago de
Compostela
Pamplona
Oña Muez REINO DE
León Cerezo PAM
Jaca PL La Seo de Urgel
Calahorra Uncastillo ON
o R E I N O D E L E Ó N Burgos Nájera A
Río M
iñ
FRONTERA S CONDADOS
Viguera Huesca CATALANES
Palenzuela Tudela UP
ER
Clunia Lérida I O
Zamora Zaragoza
Toro Osma R
R
San Esteban Gormaz Calatayud ío Barcelona
Eb
Oporto Río Duero de Gormaz ro
Medinaceli
IA Tortosa
ED
M
A
Coímbra ER
I O R O NT Madrid
T E RA INTE R R
FRON F
Coria
Toledo
ajo
Río T R. Valencia
G ua
dia
na
Mérida
0 50 100 km
C A M PA Ñ A S D E A B D A L - R A H M Á N I I I ( 9 3 9 )
REINO
Oviedo FRANCO
Santiago de
Compostela
Pamplona
Muez REINO DE
León PAM
Jaca PL La Seo de Urgel
Calahorra Uncastillo ON
iño R E I N O D E L E Ó N Burgos Nájera A CONDADOS
Río M
Viguera F R O N T E R A
Tudela Huesca S U CATALANES
PE
Clunia RI
Simancas Lérida O
Zamora (939) San Esteban Osma Zaragoza
de Gormaz Rí
R
a jo
Río T R. Valencia
G ua
dia
na
Mérida Batalla con victoria cristiana 0 50 100 km
los Menéndez, se llegaron a aliar con magnaticias internas. Las muertes de el auge de Sancho Garcés III o San-
el mismo Almanzor al rebelarse con- Almanzor en 1002 y de su hijo Abd cho el Mayor. Castilla, influida por el
tra Vermudo II en 988. Desde 994 Al Malik en 1008 favorecieron la navarro, saldrá al final del reinado de
renegocia con el califato la paz y fir- recuperación leonesa. Fue un reinado éste fortalecida y su linaje, tras cier-
ma tregua con Almanzor en 997. importante en creaciones jurídicas e tos avatares dinásticos, acabará por
El reinado de Alfonso V (999- institucionales. En el contexto penin- desplazar del trono al linaje que rei-
1028) se inicia con un reino devasta- sular, el rey leonés estuvo en cierto naba en León, que se extinguió con
do por el amirí y por sublevaciones modo supeditado o condicionado por Vermudo III (1028-1037).
77
INDEPENDENCIA ba también por entonces a Aza y poderes existentes, fue conseguido a
CASTELLANA Clunia. El núcleo de San Esteban de partir de entonces. Parece que uno
Y NACIMIENTO DEL REINO Gormaz, que fue tomado en 912, se de los condes castellanos, descen-
convertirá en otra pieza clave de la diente del conde de Lara Gonzalo
En el 912 los castellanos, que línea del Duero. Fernández, consiguió aglutinar varios
actuaban independientemente, lle- La llegada al Duero culminaba centros de poder. Fernán González
gaban al Duero. El conde Nuño una audaz expansión de los castella- hacia el 930 aparece como Conde de
Núñez repoblaba en 912 Roa, Osma nos, ya que el control de esta zona Castilla. Es posible que fuera refe-
era tomada por Gonzalo Téllez, con- había exigido combates y coloniza- rencia condal única de los anteriores
de de Cerezo y Lantarón, y Gonza- ciones arriesgadas. Otro reto de los centros de Burgos, Lara y algunos
lo Fernández, conde de Lara, llega- castellanos, hilvanar los dispersos de los territorios septentrionales, al
VIZCAYA
TRASMIERA CARRANZA
(ASTURIAS DE
SANTILLANA) SOPUERTA
LIÉBANA
Vela
ÁLAVA
Reino de León CASTILLA VETULA Herraméliz
Valpuesta
Lantarón Veleia
Río Ebro
LANTARÓN
Amaya Téllez
Río Pisuerga
Reino de Pamplona
SALDAÑA Ubierna Briviesca CEREZO
(y Nájera)
Saldaña Río E
bro
Muñoz Cerezo
CONDADO
Río Arlanzón Nájera
Oca
Burgos BURGOS
Río Carrón
CASTILLA
Roa Clunia
Río
D uer
o S. Esteban
Aza de Gormaz Osma
Peñafiel Gormaz
Río Duero
Al-Ándalus
Territorio del condado unificado de Castilla
en tiempos de Fernán González (930-970)
LIÉBANA Áreas regionales
BURGOS Condados independientes antes de Fernán González
Ansúrez Familias condales influyentes en la zona
Posibles radios de acción de las familias condales
Nájera Otros territorios y estados ajenos a Castilla
Límite aproximado del condado de Álava
78
menos en parte. En algún momento siderado como la raíz de la historia to, y con el respaldo de un sector de
los Téllez de Cerezo y Lantarón, los castellana, ha convertido su figura la aristocracia, se opuso al rey leo-
Ansúrez de Monzón, los Muñoz de como primer Conde de Castilla en nés. Sancho el Mayor pudo así tute-
Carrión-Saldaña y quizá de Liébana- referencia legendaria, objeto de la lar al cuarto y último conde caste-
Pernía, los Vela y Herraméliz de Ála- épica popular en los siglos pleno- llano, García Sánchez. El asesinato
va, debieron perder, se supone, la medievales, y en mito histórico. de éste en León en 1028, fruto de
hegemonía de sus zonas en favor de Sus sucesores, García Fernández una fácilmente predecible conspira-
Fernán González (c. 930-970). (970-995), Sancho García (995- ción, favorecía objetivamente tanto
Lo cierto es que éste encabeza 1017) y García Sánchez (1017- a navarros como a leoneses. Sancho
hacia el 944 una rebelión de Castilla 1028) fueron condes independien- el Mayor de Pamplona instaló al
contra Ramiro II. A la muerte de éste tes frente a León. La debilidad de frente del Condado de Castilla, para
a principios de 951, el Condado de este reino a principios del siglo XI regirlo en su nombre, a su hijo Fer-
Castilla era ya una realidad política coincidió con el control fáctico de nando, que además cuatro años des-
independiente, en un grado superior Sancho el Mayor de Pamplona sobre pués casó con Sancha de León. Era
a la de los grandes principados o Castilla. Al estar casado con Munia hermana de Vermudo III. Cuando
ducados que existían en Francia, por –hija de Sancho García, el III Con- murió en 1035 Sancho el Mayor su
ejemplo, en aquella misma época. de de Castilla–, fue adoptado o ahi- hijo Fernando, que tendría unos 17
Este papel de Fernán González, con- jado en la familia condal, por lo tan- años, ocupó el Condado de Castilla.
= García Sánchez II
(994-1004)
Urraca Gómez de Lara Rey de Pamplona
Berenguer Ramón I =
(1017-1035) Sancho Garcés III El Mayor
Conde de Barcelona (1004-1035)
Rey de Pamplona
79
La disputa por las tierras entre el fue cuando adoptó también el títu- no. Y además el reino con mayor
Cea y el Pisuerga, que reclama- lo de rey de Castilla. El antiguo potencial de expansión, equipara-
ba el rey leonés, provocó la guerra Condado no sólo no era ya a esas do en influencia, cuando menos, a
entre los cuñados. En 1037 en la alturas una pieza subsidiaria de los reinos de Pamplona y de León.
batalla de Tamarón moría Vermu- León, ni mucho menos un peque- Y, lo más importante, unido a este
do III. Fernando I se hizo así con ño rincón del Alto Ebro, como último bajo una misma corona.
el Reino de León. Probablemente cuando nació, sino que era un rei-
80
10
P O B L A M I E N T O A LT O M E D I E VA L L E O N É S ( D E L P Á R A M O A L A M O N TA Ñ A )
2115 2190
1500 2012
15 0
2198 2156 1500 0
1500
0
1500 150
1500
1500 1500
1500
0
1500 150 0
150
a g
ernes
Río Curueño
Río B
00
15 00
15
San Adrián
de Boñar
Colle
Castillo de Castro
Alba Aguilar
1500
orma
Río P
1000
00
Castro
10
Ferrín
1000
ío
Tor
Abellar
a
ea
Esl
Río
Río C
0
Río
150
Castro de Rege
Castro
Dolcidio
00
10
Castrello
Castromudarra
Castrillo de
Porma
LEÓN 5 km
Rueda
Castrillo Eslonza
Aldeas (villas) Centros religiosos, monasterios
Castrum, castellum Monasterios importantes
82
C E N T R O S R E L I G I O S O S D E L N O R O E S T E P E N I N S U L A R D U R A N T E L A A LTA E D A D M E D I A
( I G L E S I A S Y M O N A S T E R I O S P R I N C I PA L E S )
E R C B
S
Lugo A A N
re L Á
a
mb I L T
sl
TI
a
Ta Sobrado D Boñar Tejada
.E
R.
o
Ferreira de R Cervatos Valpuesta
R
LL
orm
Santiago Espinareda
A
R. P
R. Tori
C de Otero VAL
a Piloño Noceda D
Ull
EGO
ño
R. San Román de Oña VIA
Mi
Samos Burbia Abellar
R.
Entrepeñas
R.
Sto. Tomás
Oc
a
R. Ó rbigo
R.
Castrelo Astorga
Rocas Cardeña Los Ausines
Ca
de Ardón La Cogolla
n
n
R. Ribadelago
R. Esla
Celanova R.
Arlanza
R. Pisuer
Vald
R. Sabor
Montelios
R. San Pedro de la Nave Toro Bamba R
R.
Braga .R
ia
Du
za San Baudelio
ra
Zamora Hornija
tón
Vimaraes
úa
R .T SAYAGO
83
SALAMANCA. REPOBLACIÓN DEL SIGLO X La repoblación “leonesa” fue diri-
gida por reyes y magnates. Fue
importante la llegada de mozárabes
del sur y la fundación de grandes
monasterios. Superó el Duero tras la
victoria de Simancas, alcanzando
tierras del Tormes, quizá con algu-
nos asentamientos pero no se logró
en la zona una colonización defini-
tiva, al quedar expuesta a los ataques
y quizá muy tenues tentativas de con-
trol espacial por parte de los musul-
manes.
La repoblación del área “castella-
na” fue la más espontánea y la
menos aristocrática. No obstante, los
condes tomaron iniciativas, aunque
la falta de unidad política hasta
mediados del siglo X dejó en manos
de colectividades aisladas buena par-
te de la expansión colonizadora. Tras
CIUDAD VIEJA 939 Fernán González llegó a colo-
nizar Sepúlveda, y allí permaneció
la población cristiana, mientras que
la línea castellana del Duero se había
estabilizado el 912.
En todas partes el proceso repo-
blador, espontáneo o dirigido en
diferente grado, contenía ingre-
dientes semejantes. Hay que desta-
car el proceso de instalación cam-
pesina con el recurso a la presura,
o aprisio, que daba derecho al uso
de la tierra, aunque luego fuera
objeto de cargas. A partir de ahí se
Muralla romana realizan las roturaciones y puesta
Calzada de la Plata (itinerario interregional) en pie de viviendas, casas e infra-
estructuras. Entre estas instalacio-
Otras vías de comunicación locales nes, y por iniciativa de los poderes,
Repoblación de Ramiro II (c. 939-940) se levantaron torres, atalayas y cas-
Posibles reductos cristianos en los siglos X-XI (mozárabes) tillos. Las aldeas, o bien asenta-
mientos más dispersos como los
casales de Galicia, se convierten en
los ámbitos básicos de encuadra-
so de organización integral del espa- lugares poblados. También se des- miento colectivo, si bien en las
cio, con la implantación de un poder plegó una tupida malla de centros zonas montañosas, al modo de las
regio o condal, la extensión de las religiosos y eclesiásticos. regiones norteñas, imperaba una
iglesias o monasterios y la coloniza- En la repoblación es preciso dis- forma característica de organiza-
ción humana, basada tanto en la tinguir tres franjas que se fueron des- ción del espacio, que era el de la
incorporación de campesinos norte- plegando de norte a sur. comunidad de valle, típica de Can-
ños como, desde el siglo IX y en El área gallega tuvo siempre mucha tabria, Montaña Leonesa, Asturias,
menor escala, de mozárabes que población. La Galicia costera se había Sanabria y otras zonas montañosas.
huyeron de Al-Ándalus. Se fundaron integrado muy pronto en el reino astur. Las aldeas, llamadas en latín villae,
centenares o miles de aldeas nuevas La cuenca del Miño fue repoblada en coexisten con los señoríos de los
o bien los pobladores se asentaron los siglos IX y X. El norte de Portugal monasterios, rara vez basados en la
en loci o vici ya existentes pero que ha de verse como una proyección región en un esquema de gran
eran opacos hasta entonces para la gallega. La restauración de Braga dominio con reserva, sino más bien
administración. La toponimia de los hacia el 878 no impidió la cesión a la con derechos y posesiones disper-
lugares poblados refleja el asenta- sede de Lugo en 885, aunque a la lar- sos. En las aldeas la propiedad o
miento de familias tanto del norte ga Braga impondrá su mayor rango. posesión familiar aplicada a los cul-
como del sur. Al cabo de varios La repoblación “gallega” fue casi tivos de cereales y viñas se com-
siglos el territorio entre el Duero y siempre dirigida desde arriba, con plementaba para los campesinos
la Cordillera Cantábrica fue una de importancia de los mo-nasterios y la con los aprovechamientos comuna-
las regiones con mayor número de aristocracia. les del bosque.
84
FEUDALIZACIÓN ción entre señores y campesinos, sino vasallaje regio y de los matrimonios
DE LA SOCIEDAD que afectó también a la propia élite basados en la endogamia social, así
de poder. En la época se desplegaron como para ordenar la transmisión de
Durante la Alta Edad Media se lazos personales entre el rey y los unos patrimonios e incluso funcio-
produjo en los reinos de León y Cas- grandes optimates de la corte o comi- nes políticas en el seno del propio
tilla una transformación feudal, en el tes principales, así como entre estos grupo.
sentido social del término. Las vías y los miembros de capas más bajas La jerarquía social, dejando al mar-
fueron variadas, pero el resultado vie- de la aristocracia, como infanzones gen a los sectores eclesiásticos, que-
ne a ser semejante. Se comprueba o milites. Los aristócratas desplega- dó estructurada en varios estratos: 1)
que la servidumbre técnicamente era ron estructuras familiares más magnates; 2) infanzones; 3) milites
residual, ya que desde el punto de amplias que las de las simples fami- villani; 4) campesinos independien-
vista jurídico el estatuto personal era lias conyugales campesinas. No eran tes en alodios o simples villani; 5)
de personas ingenuas. Sin embargo todavía linajes, entendidos como ali- hombres de benefactoria; 6) campe-
sí se extendió la dependencia en vir- neaciones formalizadas y regladas. sinos dependientes, como collazos y
tud de la pérdida de propiedades o la Pero funcionaban ya como parente- iuniores; 7) finalmente, servi o ser-
detracción a través de la renta. Una las o grupos suprafamiliares aptos vidumbre jurídica personal en senti-
gran parte del campesinado, que ini- para beneficiarse de la sinergia del do estricto. Sobre esta jerarquía sin
cialmente accedió a la propiedad alo-
dial, fue cayendo en dependencia de
magnates y dominios eclesiásticos. D O TA C I Ó N D E L M O N A S T E R I O
Estos últimos eran muy extensos, D E S A N S A LVA D O R D E O Ñ A E N 1 0 11
como lo prueba el dominio de Oña.
Los señores exigieron tributos, apli-
caron la justicia –en virtud de la
inmunidad que tuvieron sobre
muchos lugares–, obstaculizaron la
Alfoz de
movilidad geográfica o la transmi- Miengo
sión fundiaria, impusieron monopo-
lios de tipo banal y extendieron hacia
Soba
abajo vínculos de dependencia per-
A
IC
BR
sonal hacia sus campesinos vasallos.
Á
NT
Los procesos no fueron bruscos, ya Mena
que no hubo una mutación súbita, y CORDILLERA CA
tampoco alcanzaron universalmente
al mundo campesino. Todavía hacia
Losa
el Año Mil muchas familias y comar-
cas enteras disfrutaban de libertad Bezana Castilla
Valdegovía
personal y bienes particulares y en Vetula
otros casos apenas soportaban una Rí
dependencia más benigna, como ocu- oE
OÑA br
o
rría con los homines de benefacto- Alfoz de
ria, o únicamente se detecta una leve Paredes Rubias
supeditación a los miembros más Alfoz de
relevantes de las comunidades loca- Amaya
les, llamados infanzones.
Tanto las comunidades de valle
Río P
85
duda podrían trazarse varias líneas y sangre –los dos primeros frente al campesina –sexto y séptimo frente al
clasificaciones: la línea de los que resto–; la línea de la caballería –pri- resto–; y finalmente, la línea de la
poseían señoríos con dominio y juris- mero a tercero frente al resto–; la servidumbre jurídica, que distinguía
dicción –primer grupo frente a los línea de la propiedad –los cinco pri- al último estrato del resto.
demás–; la línea de la aristocracia de meros–; la línea de la dependencia
LA MONARQUÍA cia entre ambas zonas en el régimen ejercen un gobierno a través de ordi-
Y LOS TERRITORIOS jurídico, puesto que en la corte leo- nationes o iusiones, que eran man-
nesa había pervivido la tradición visi- datos políticos. Es posible incluso
La monarquía del siglo VIII es goda del Liber mientras que en Cas- que con ellos se iniciase una inci-
considerada por la actual historio- tilla las pautas de base consuetudinaria piente fiscalidad pública, frágilmen-
grafía casi como una entelequia, sin acabaron formando un derecho arcai- te desplegada. A finales del IX y en
verdadera presencia. Se piensa que co basado en la jurisprudencia de base el X se menciona, sin un contenido
el poder se ejercía localmente. Qui- no normativa a partir de las sentencias preciso, el censum o tributum, con
zá desde Alfonso II despegó una de los comites, es decir, las llamadas este posible sentido de fiscalidad
noción de estado monárquico más fazañas. monárquica. También se desarrolla-
consistente. La corte se fue consti- La base de la organización terri- ría, con un origen en los bona vacan-
tuyendo alrededor de la persona del torial era la pequeña circunscripción: tia, la categoría jurídica de dominio
rey y los pocos magnates –proceres, alfoz, suburbio o territorium. En el y jurisdicción regia de todos aquellos
optimates– de su curia. reino de León se mencionan además espacios y áreas que no pertenecían
La curia o corte regia leonesa fun- los comisos o mandationes. En los a Iglesia y magnates o no habían sido
cionaba como asamblea judicial. El siglos IX y x en áreas gallegas o leo- concedidos aún ad populandum o
Condado de Castilla presentaría una nesas estas circunscripciones fun- como concesión del comisso.
estructura semejante, aunque más laxa cionaban como ámbitos de delega- Al frente de cada uno de estos
y con menor peso de los magnates, ción del poder, pero con bastante comisos o mandationes, que –junto
que no alcanzaban la influencia que autonomía. Ya en estos siglos los con los alfoces– pudieron llegar al
tenían en León. También hay diferen- reyes de León o Condes de Castilla centenar en Galicia, Castilla y León,
sla
BABIA ío
Porm
RESOBA Eb
oE
Rí
ORDEJÓN
BIE Rueda OÑA
RZO Castro
ALBA SEDANO Término
Pancorbo BILIBIO
o
León Ubierna
a
Cea
rg
Ventosa Castrillo
Castrillo Sollanzo Briviesca Grañón
jerilla
Castrojeriz Oca
Río Sil ARDÓN Melgar Burgos
Río Órbigo
Coyanza
rrió
ón
Río N
ea A Lara
Rí RíoMuñó
o
Río Esl
Río
Monzón
uey
SANABRIA oC
Rí Arlanza
Carazo
rad
Sanabria
Ura
lde
Lerma
Tabladillo
Rí o
GÓTICOS sgu
eva
Rí
o Castropepe R ío E Clunia
Al
ist Roa Río Du
ero
e uero Aza
Simancas Río D
r
Zamora Toro Rí
o
Ri de Gormaz Gormaz
Río Duero az
Rí
a
oD
ur
ató
n
86
se situaba un miembro de la aristo- nobleza en ciernes. Los magnates, se pueden relacionar con la génesis
cracia. Algunos de ellos, con el ran- aparte o solapadamente a las fun- del feudalismo en el reino.
go de comites –esto suponía vínculos ciones propias de la delegación mis- Formalmente, desde estos centros
estrechos con la monarquía, particu- ma, percibieron renta privada, servi- administrativos castellanos o leone-
larmente en León–, se hallaban al tium u obsequium, a veces como ses, cuyo núcleo era el castillo de
frente de algunas de estas demarca- resultado de la apropiación fáctica titularidad condal o regia, se ejercía
ciones. Se entiende que los condados del censum regio. En el caso de las la jurisdicción y se recaudaba.
de Traba, de Cea, Saldaña, Liébana, mandationes se ha demostrado que Las comunidades rurales hallaban
Carrión, los condados castellanos de no eran sólo una delegación admi- en los iudices y autoridades del terri-
Lara, Lantarón, Cerezo, entre otros, nistrativa sino que se relacionan con torium y de los condados sus inter-
eran demarcaciones más amplias que el auge de determinadas parentelas locutores habituales. Al frente de las
los territoria, si bien no constituían magnaticias. Estos miembros de la comunidades, cuando estaban com-
unos y otros una malla completa y aristocracia leonesa –Flaínez, Ver- puestas por campesinos libres e inde-
jerarquizada de forma regular. múdez, Ordóñez, los Gómez de Sal- pendientes, aparecen autoridades
En teoría, territorios o alfoces eran daña, entre otros– habían arraigado como potestates o infanzones, en una
centros de poder militar y adminis- en determinadas zonas, percibían posición subalterna, ambigua y vaci-
trativo al servicio del poder monár- rentas privadas, tenían influencia en lante según fueran –era compatible–
quico, o condal en el caso de Casti- la corte, habían absorbido derechos delegados del poder superior, élite
lla, pero esta delegación nominal jurisdiccionales, estaban contribu- social de la aldea o meros represen-
acabó repercutiendo en la acumula- yendo a la dependencia del campe- tantes de la comunidad de villani, en
ción de poder efectivo a favor de la sinado –iuniores en León– y por eso ese caso sin capacidad política.
PRECARIEDAD DE LA VIDA musulmana o franca. León utilizó en mínimas, aunque se citan tiendas y
URBANA Y COMERCIAL el X arienzos de plata. Pero buena algunos almacenes. Pero lo más des-
parte de los intercambios prescin- tacado del espacio urbano eran las
La época altomedieval en los terri- dían de la moneda. numerosas iglesias y centros de cul-
torios de León y Castilla, al igual que Tampoco había apenas vida urba- to que había en el recinto amuralla-
en los núcleos orientales, fue pro- na. Núcleos como Oviedo, Astorga, do –iglesias propias, capillas, peque-
fundamente rural. El comercio era Burgos o Santiago no llegaban al ños monasterios–, así como las
escaso. No hubo acuñaciones mone- millar de habitantes hacia el Año cortes, característicos inmuebles
tarias en el reino astur –se usaban las Mil. Tan sólo León alcanzaría quizá urbanos que solían incluir solares no
monedas visigodas, a veces sólo la cifra, aunque el dato no se cono- edificados, corrales e incluso prados,
como moneda de cuenta– y se recu- ce con exactitud. Se sabe que las fun- aparte de la vivienda o casa propia-
rría en raras ocasiones a la moneda ciones urbanas de esta ciudad eran mente dicha.
87
PLENA EDAD MEDIA
(siglos XI-XIII)
11
92
R E I N O S D E TA I FA S ( H A C I A 1 0 8 5 ) bajo la estirpe de los abbadíes, fue
el más espectacular. El sultán de
Sevilla y segundo rey de la taifa des-
de 1042, Al Mutadid, espoleó el
rechazo de la población andalusí
hacia los reyes beréberes de algunas
taifas vulnerables y engulló otras que
tampoco pudieron resistir su empu-
Zaragoza Lérida je. La ampliación de Sevilla fue
5 (5) imparable: Mértola (1044); Huelva,
Niebla y Algarve (1050-1052); Alge-
Albarracín (5) Tortosa
6 ciras (1055); Morón, Ronda, Car-
Toledo 7
mona y Arcos (1065-1068). Su suce-
Alpuente 9 sor, Al Mutamid (1069), extendió su
1 8 Valencia influjo aún más, a costa de Córdoba,
entre 1070-1074. Y hacia 1078 se
Badajoz
(5) Denia hizo también con Murcia.
2
También la taifa de Zaragoza
Córdoba Murcia incrementó su extensión, con la
Sevilla Frontera aproximada
3 4 con los reinos cristianos absorción de Lérida, Tortosa y Denia.
Granada Taifas beréberes Estas absorciones, en este y otros
Almería Taifas eslavas casos, hicieron cambiante el mapa
Málaga Taifas árabes histórico de las taifas, pero siempre
Algeciras dentro de una tendencia a la con-
Límite de la taifa de
Toledo antes de la centración.
conquista cristiana
AL-ÁNDALUS Y LAS PARIAS todo por el estilo de vida palaciego, con dos circunstancias que cambia-
de mecenazgo artístico e intelectual. ron la situación profundamente. En
Todos estos pequeños estados Por otra parte se relajó la presión la primera de estas fechas el emir
tuvieron, sin embargo, un mismo religiosa y jurídica que hubo en tiem- almorávide conquistaba Ceuta. Era
problema común. Su debilidad, en pos de Almanzor. La ortodoxia mali- la punta de lanza de un potente y
parte por la desunión, favoreció la ki y la influencia social de los alfa- nuevo imperio musulmán del norte
hegemonía cristiana. Fruto de esta quíes declinaron. de África, el de los almorávides.
hegemonía es que los reinos de tai- Pero las parias, garantías de tran- Puros, íntegros, deseosos de hacer la
fas se vieron obligados a firmar pac- quilidad, presentaban el reverso de yihad y volver a hacer del Islam una
tos con los estados cristianos del nor- verse a veces obligados los sobera- fe temida. Así vieron los alfaquíes
te. Los pactos o alianzas eran nos a aumentar la presión fiscal de la península a los almorávides y
bilaterales, firmados entre un rey de sobre sus súbditos. Síntoma de estas la simpatía por ellos podía conver-
taifas –”rey”, “sultán” o “señor” de debilidades financieras fue la quie- tirse fácilmente en colaboración. El
taifas suelen emplearse como sinó- bra de la moneda, aumentando la otro acontecimiento lo provocó
nimos– y uno cristiano. Este último moneda de baja ley. La inflación fue Alfonso VI en 1085. En lugar de
se comprometía a no atacar el terri- tan sólo uno de los efectos. Para mantener el régimen de las parias
torio musulmán, e incluso a prestar muchos musulmanes las parias eran –pese a haberlas heredado y pacta-
ayuda si sufría una agresión de un también una humillación. Despres- do con la taifa toledana–, el monar-
tercero, y a cambio de esta protec- tigiaba a los reyes de taifas. Los alfa- ca leonés optó por la conquista y
ción los cristianos recibían un tribu- quíes, líderes religiosos, apelando a tomó Toledo. El rey cristiano había
to anual. Es lo que se llama parias. las masas, criticaron el estilo de vida traicionado un acuerdo, a juicio de
Esta protección trajo consigo esta- sibarita, egoísta y cortesano de los los musulmanes. La humillación
bilidad en las cortes de los reinos de gobernantes. debería terminar, pensaron. Y por eso
taifas, que pudieron emular a peque- Esta impopularidad de los gober- varios reyes de taifas pidieron ayu-
ña escala las cortes califales, sobre nantes convergió hacia 1084-1085 da a los almorávides.
93
12
REPARTO DE SANCHO be y Ribagorza, que ha-bían sido este episodio pudo ser una especie
EL MAYOR: ARAGÓN, heredados por su hermano Gonzalo, de primer antecedente de las cruza-
DE CONDADO A REINO quien los tuvo entre 1035 y la fecha das, aunque éstas, como es sabido,
en que murió (1044). También añadió no se iniciaron hasta 1096. El inten-
Ramiro, aunque de más edad que Ramiro I posesiones en la zona de Sos to de Barbastro no prosperó, pero en
su hermano el rey de Pamplona Gar- y Uncastillo. Y después de la muerte conjunto en el reinado de Sancho
cía, era hijo ilegítimo de Sancho el del rey pamplonés en 1054 agregó Ramírez no faltaron las conquistas.
Mayor y tuvo por ello que aceptar lo algunas plazas como Sangüesa. Hacia Aragón estaba en condiciones de ini-
que entonces era un rincón pequeño, la parte oriental del reino incorporó ciar una expansión por el valle del
periférico y sometido a la influencia Benabarre y Litera. Ebro, pese a la todopoderosa taifa de
política y aristocrática de los pam- Cuando Ramiro I murió intentan- Zaragoza –aunque en crisis desde
ploneses, Aragón. do tomar Graus y fue sucedido por 1081– y, posteriormente, pese a los
En 1035, eso sí, el anterior con- su hijo Sancho Ramírez (1063-1094), almorávides. Sancho Ramírez logró
dado era elevado a la categoría de rei- Aragón dominaba los Pirineos cen- hacerse con plazas importantes como
no. Entonces Ramiro I (1035-1063) trales y desde 1064 había roto las Ayerbe, Arguedas, Graus, Estrada,
no podía sospechar que ese pequeño hostilidades con los musulmanes Luna o Monzón, esta última en 1089.
y modesto territorio se convertiría en intentando tomar Barbastro. La inter- Murió en 1094 intentando tomar
una monarquía y corona de primer vención en esta campaña de caballe- Huesca. Además, desde 1076 Ara-
orden. Pronto empezaron las incor- ros lombardos, aquitanos y norman- gón se hizo con una parte del desa-
poraciones. Hacia 1044 Ramiro I dos, así como el apoyo papal, han parecido reino de Pamplona.
pudo anexar los condados de Sobrar- hecho pensar a algunos autores que
96
DESCENDENCIA DE SANCHO EL MAYOR DE PAMPLONA. NEXOS DINÁSTICOS DE NAVARRA, ARAGÓN, CASTILLA Y LEÓN (ss. X-XIII)
Fernando Bermúdez = Elvira Díaz de Saldaña Sancho Garcés II = Urraca Fernández García Fernández = Ava de Ribagorza
Conde de Cea (línea leonesa) (línea castellano-leonesa) Rey de Pamplona (970-994) (línea condal castellana) Conde de Castilla (970-995)
Elvira Menéndez = (1) Alfonso V (2) = Urraca Sancho Garcés III El Mayor = Muniadona García Sánchez
Rey de León (999-1028) Rey de Pamplona (1004-1035) (Casa condal castellana) Conde de Castilla (1017-1028)
≠ Sancha de Aibar
=
Sancho II Alfonso VI García X Sancho Garcés IV Sancho Ramírez
Rey de Castilla Rey de León (1065-1109) R. de Galicia (1065-1071) el de Peñalén Rey de Aragón (1063-1094)
(1065-1072) Castilla y León (1072-1109) († 1090) Sancho Rey de Pamplona (1054-1076) Rey de Pamplona (1076-1094)
= =
Constanza = Jimena Muñiz Ramiro Isabel de Urgel (1) = Felicia (2)
Raimundo = Urraca = Alfonso I Teresa = Enrique García Ramírez Pedro I Alfonso I Ramiro II
de Borgoña (1) Reina de Castilla y León de Aragón (2) de Borgoña el Restaurador Rey de Aragón y Rey de Aragón y Rey de Aragón
(† 1107) (1009-1126) Rey de Pamplona (1134-1150) Pamplona (1094-1104) Pamplona (1104-1134) (1134-1137, † 1157)
Alfonso VII = Berenguela Sancho VII el Fuerte Blanca = Teobaldo de Champaña Alfonso II = Sancha
Rey de Castilla y León Rey de Navarra Casa de Champaña Rey de Aragón de Castilla
(1126-1157) (1194-1234) (1162-1196)
97
Rey de Castilla (1217-1252) de Suabia
Rey de Castilla y León (1230-1252)
E X PA N S I Ó N D E A R A G Ó N E N E L S I G L O X I ( 1 0 3 5 - 11 0 4 )
orzana
Leyre Ruesta
R. Gállego
Sangüesa Jaca
era
ra Ribag
R. Cin PALLARS
És
R. Ebro Ujué Sos Luesia
Aragón ca
R.
Caparroso Uncastillo Biel Murillo Nocito Aínsa Perarrúa URGEL
R. Nogue
Funes Loarre Abizanda
Milagro Roda
Ayerbe, 1083 Alquézar Graus
1098
R. Segre
Arguedas Luna, 1092 1067 1083
1084 Sádaba Naval Litera
1091 Montearagón 1062
1089 1095
Castiliscar Salinas Benabarre
1088 R. E Huesca 1062
bro 1096 1095
El Castellar Almuniente Barbastro Calasanz
Monzón
1091 1102 Piracés 1100 1089 1095
Juslibol 1103 Estada
R.
R. Duero 1101 1087
Ci
re
nc
Seg
R.
a
Eb
R.
ro
Reino de Pamplona hasta 1076 Incorporación del reino de Pamplona a Aragón (1076)
Anexionado en 1043 Expansión en el reinado de Sancho Ramírez (1063-1094)
Anexionado en 1054-1055 Expansión en el reinado de Pedro I (1094-1104) y límite del reino
Conquistas de Ramiro I Alquézar Lugar y fecha de conquista
1067
Frontera aproximada de Aragón a la muerte de Ramiro I
REPARTO DE SANCHO que la influencia del pamplonés lle- castellanos. Desde 1067 hasta 1072,
EL MAYOR: NAVARRA gaba casi a las puertas de Burgos. Es en que murió Sancho II de Castilla,
Y CASTILLA EN DISPUTAS evidente que este reparto no satisfa- este monarca se enfrentó al homóni-
ENTRE 1035 Y 1076 cía a los castellanos y pronto este mo rey pamplonés, bajo la atenta
desajuste se hizo notar. mirada de otro tercer Sancho, el rey
García Sánchez III (1035-1054) Pero además García Sánchez logró de Aragón, que esperó beneficiar-
el de Nájera había recibido en teoría incorporar a su reino otras plazas, se de las tensiones entre castellanos
la mejor parte de la herencia del rey como Calahorra, conquistada en y pamploneses. El rey de Pamplona
de Pamplona, como correspondía al 1045. A esas alturas García Sánchez rompió ciertos equilibrios tácitos al
primogénito legítimo que era. Que- rivalizaba en poder con su hermano arrebatar a Castilla las parias zara-
dó para él el reino patrimonial, que Fernando I de Castilla. Este último, gozanas. También Sancho Ramírez
consistía en la actual Navarra, pero sin embargo, combatió al navarro y de Aragón vio peligrar los planes de
que nominalmente se llamaba reino le venció en Atapuerca en 1054. Gar- expansión por el Ebro de su reino,
de Pamplona, junto con el reino de cía Sánchez III perdió allí la vida y que había iniciado en 1064. Fruto de
Nájera, que era también otra de las Castilla recuperó sus territorios per- una compleja conspiración, no ya
piezas de la unidad política conside- didos, quedando para Castilla desde de estos reyes, sino más bien de intri-
rada unitaria. Aunque es algo muy Trasmiera a la Bureba, así como Oca gas internas y familiares, Sancho IV
debatido, se habla de doble capitali- y Álava. de Pamplona fue despeñado en Peña-
dad en ese período, con Pamplona y El siguiente rey pamplonés, San- lén –en Funes– en 1076. El resulta-
Nájera. Además había sido favore- cho Garcés IV (1054-1076), el de do no pudo ser más nocivo para el
cido en la herencia con las zonas cas- Peñalén, no logró dominar a una Reino de Pamplona: el reino fue
tellanas de Castilla Vieja, Álava, aristocracia atrincherada en sus repartido entre Castilla y Aragón. La
Montes de Oca y la Bureba, que su tenencias, no pudo ampliar nada el dinastía pamplonesa reinante se
hermano Fernando I de Castilla reino por el sur y no pudo contener extinguió.
aceptaba cederle en 1038. De modo las ambiciones territoriales de los
98
LOS REINOS CRISTIANOS EN 1035
REINO DE CASTILLA REINO
DE ARAGÓN SOBRARBE
Lugo Oviedo RIBAGORZA
Santiago REINO DE CERDAÑA CONFLENT
PAMPLONA
ROSELLÓN
REINO DE LEÓN Seo de Urgel
León Nájera Pamplona AMPURIAS BESALÚ
Tuy Burgos Gerona
Huesca CONDADO
Braga Lérida BARCELONA
DE
Zamora (Barcelona-Gerona-Osona)
Zaragoza
Oporto Barcelona
Segovia TAIFAS Tarragona
Salamanca
Ávila Teruel
Coímbra
Toledo
Valencia Mallorca
TAIFAS
Lisboa
Évora Badajoz TAIFAS
Colindres
iera
R.
R. A
R.
TRASMIERA SOPUERTA Bi
N
da
REINO DE CASTILLA
erv
GUIPÚZCOA soa
ón
eba
Cadagua VIZCAYA
ión
PIRINEOS
a
D
CARRANZA
rol
BAZTÁN
R. U
R.
umer
ria
O
Castrobarto CASTILLA
a
R.
ARAQUIL R.
Cigüenza
s
VALDEGOVIA
ya
Ba
Omecillo qu il
SALAZAR
LANTARÓN a
R. Z
RONCAL
Tedeja Lantarón
R. Ebro ÁLAVA Echauri Pamplona
R. Ebro
Término Leguín
Poza Piedralada Estella
BUREBA Pancorbo Buradón R. Aragón
Deyo Aibar
R. Arga
R. Ega
Batalla
Ibrillos Tafalla
R. O
R.
de Atapuerca R. Ebro
eza
O
egua
R. L
Oca Pedroso R. A
Cañas
Azagra Caparroso
R. Ir
Arlanzón
lla
Viguera
R. Tirón
Calahorra Funes
Matute
Anguiano Arnedo
Cidacos Autol TAIFAS MUSULMANAS
CAMEROS
R. Ebro
TAIFAS MUSULMANAS
Límites del reino Valle de Cidacos. Reconquistado a los musulmanes hacia 1045
Poza Tenencias (de Castilla y Nájera-Pamplona) Área castellana gobernada por García Sánchez (por la herencia de Sancho el Mayor)
AYALA Territorios (en negrita, los de rango superior) Área añadida al Reino de Pamplona (por la herencia de Sancho el Mayor)
99
SUCESIÓN DE FERNANDO I: Camino de Santiago, que gozaba ya Osorno. En 1071 conseguía con su
CASTILLA, LEÓN de un esplendor importante. hermano Alfonso la desaparición del
Y GALICIA A la muerte de Fernando I en reino de Galicia. Y en 1072 Sancho II
1065, y a imitación de lo que había vencía de nuevo a Alfonso VI en la
En 1035 Fernando, el segundogé- hecho su padre, sus dominios y has- batalla de Golpejera, cerca de Carrión.
nito hijo legítimo de Sancho el ta las parias se repartieron entre sus Sancho II era virtualmente rey de Cas-
Mayor, obtenía el Condado de Cas- hijos: el mayor, Sancho II, heredó tilla y de León –Galicia incluida– obli-
tilla. Dos años después, apelando a Castilla y las parias de Zaragoza, gando a Alfonso VI a refugiarse en la
los derechos a través de su esposa Alfonso VI heredó León y las taifa amiga de Toledo.
Sancha, hermana del rey Vermudo parias de Toledo, mientras Galicia, Pero el control de Sancho era apa-
III, venció a éste en la batalla de convertida en reino, fue para Gar- rente. Ni los gallegos ni los leone-
Tamarón en 1037. El rey leonés cía, así como también con la idea ses, ni la hermana Urraca, que, en su
murió en ella. Fernando I fue rey de de percibir las parias de Badajoz y condición de infanta, ejercía una
León. Asimismo, ya desde entonces Sevilla. especie de macrotenencia en la pla-
con la denominación de reino y no A Sancho II de Castilla le acom- za de Zamora, querían someterse al
de Condado, fue rey también de pañaron los éxitos desde el comien- castellano. En ese contexto se pro-
Castilla. León y Castilla estuvieron zo. Desde 1067 había iniciado lo que dujo el asesinato en Zamora de San-
unidos hasta su muerte. La unidad y podría llamarse “guerra de los tres cho II. La épica, contada en el per-
fortaleza del reino permitieron a Fer- Sanchos”, contra sus homónimos dido Cantar de Sancho II, así como
nando I exigir a las taifas de Bada- reyes de Pamplona y Aragón y tenía las Crónicas y luego el Romancero,
joz, Toledo, Sevilla y Zaragoza las posibilidades de asegurar los territo- han convertido la muerte de Sancho
mayores parias de la historia, cerca rios fronterizos. Pugnaba también por II y sus diferentes argumentos en uno
de 40.000 dinares anuales que sin mantener para Castilla las parias de de los temas literarios y populares
duda convirtieron al reino castella- Zaragoza. Y pugnaba con sus herma- más conocidos de la Edad Media: el
no-leonés en el más rico de la penín- nos por hacerse con la unidad de los traidor Vellido Dolfos, el sitio de
sula en términos de riqueza dine- reinos perdida tras la herencia de Zamora, la participación del Cid en
raria. También era próspero en Fernando I. En 1068 Sancho II ven- apoyo de su rey Sancho, o la famo-
términos agrarios e incluso comer- ció a Alfonso VI en la batalla de Llan- sa Jura de Santa Gadea, son entre
ciales, al menos en rutas como la del tada, junto al Pisuerga, no lejos de otros los temas de este ciclo épico.
REINO REINO
DE CASTILLA DE PAMPLONA REINO
Y NÁJERA DE ARAGÓN
Lugo Oviedo
Santiago CERDAÑA CONFLENT
Pamplona
REINO DE LEÓN PALLARS ROSELLÓN
REINO DE Nájera URGEL
GALICIA León BESALÚ AMPURIAS
Tuy Seo de Urgel
Burgos Gerona
Huesca CONDADO DE BARCELONA
Braga Lérida (Barcelona-Gerona-Osona)
Zamora
Zaragoza
Oporto Barcelona
Segovia Tarragona
Salamanca
Ávila Teruel
Coímbra
Toledo
TAIFAS
TAIFAS Valencia Mallorca
TAIFAS
Lisboa
Badajoz TAIFAS
Évora
Córdoba
Murcia
Fronteras entre estados cristianos
Jaén
TAIFAS Granada Cartagena Frontera con los musulmanes
Sevilla
Territorios musulmanes
Vacío administrativo
Almería y “tierra de nadie”
Málaga
Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
100
Lo cierto es que el asesinato ale- una unidad entre Castilla y León de hacer efectivo el papel de emperador
voso de Sancho II en 1072 dio a gran potencialidad histórica –aun- que enarboló sobre los demás reinos
Alfonso VI el poder total de los rei- que no fue todavía irreversible– y hispánicos y así pudo emprender el
nos de Castilla y León. Desapa- condensar una fuerza mayor que nin- más ambicioso de los cambios estra-
recidos Sancho II y preso García de guna otra en la península desde el tégicos peninsulares, la conquista de
Galicia en 1073, Alfonso VI pudo punto de vista espacial, militar, eco- Toledo.
engrandecer sus dominios, apuntalar nómico y demográfico. Así pudo
EL REINADO DE ALFONSO VI do más claramente hacia Pamplona. la época. La taifa de Toledo, enfren-
HASTA LA CONQUISTA Es decir, en 1076 Alfonso VI lleva- tada a las demás, pasaba por apuros
DE TOLEDO ba las fronteras de Castilla más lejos financieros y descontento antifiscal.
que nunca. Galicia, que había recu- Una parte de la población prefirió
A los cuatro años de la muerte de perado efímeramente su condición facilitar un cambio de estrategia y
su hermano Sancho, Alfonso VI se de reino en 1072, la perdió con la alentó el deseo de Alfonso VI de
beneficiaba de la de Sancho el de prisión en 1073 de García, que duró conquistar la ciudad. El rey caste-
Peñalén. Recuperaba Castilla, no hasta su muerte en 1090. llanoleonés sitió la ciudad y ésta se
sólo Vizcaya, Bureba, parte de Ála- En relación con los musulmanes rindió en mayo de 1085.
va y Montes de Oca, que habían per- Alfonso VI sustituyó el sistema de Esto provocó la reacción almorá-
tenecido al antiguo Condado de Cas- parias y paz por el de guerra y repo- vide, con guerras a partir de enton-
tilla, sino también áreas que nunca blación al sur de la Cordillera Cen- ces. Pero ello no impidió que la po-
habían sido hasta entonces castella- tral. Y ello a pesar de que las parias sición del rey fuese muy sólida.
nas, como toda la Rioja de Nájera a –salvo las más orientales de la penín- Ciertamente tuvo sus enemigos y va-
Calahorra, otras comarcas alavesas sula, las percibía todas Alfonso VI– sallos díscolos, dentro y fuera, pero
o incluso Guipúzcoa, que dentro de eran más rentables que nunca, lle- mantuvo la unidad de los reinos.
su escaso desarrollo y aislamiento gando a cobrar más de 120.000 dina- Algunos de estos rivales hicieron la
político de entonces, había bascula- res anuales, cantidad gigantesca para guerra por su cuenta. El más célebre
REINO
DE ARAGÓN
Lugo Oviedo
Santiago CERDAÑA CONFLENT
Pamplona
REINO DE LEÓN Y CASTILLA PALLARS ROSELLÓN
Nájera URGEL
León Jaca BESALÚ AMPURIAS
Tuy Burgos Seo de Urgel Gerona
Huesca CONDADO DE BARCELONA
Braga (Barcelona-Gerona-Osona)
Zamora
Zaragoza Lérida
Oporto Barcelona
Segovia Tarragona
Salamanca
Coímbra
Ávila Teruel
Toledo
TAIFAS
TAIFAS Valencia Mallorca
TAIFAS
Lisboa
Évora Badajoz TAIFAS
Córdoba
Murcia
Fronteras entre estados cristianos
Jaén
TAIFAS Granada Cartagena Frontera con los musulmanes
Sevilla
Territorios musulmanes
Vacío administrativo
Almería y “tierra de nadie”
Málaga
Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
101
LOS REINOS CRISTIANOS EN 1086
( d e s p u é s d e l a t o m a d e To l e d o )
REINO
DE ARAGÓN
Lugo Oviedo
Santiago CERDAÑA CONFLENT
Pamplona
REINO DE LEÓN Y CASTILLA PALLARS ROSELLÓN
Nájera URGEL
León Jaca BESALÚ AMPURIAS
Tuy Burgos Logroño Seo de Urgel Gerona
Huesca CONDADO DE BARCELONA
Braga (Barcelona-Gerona-Osona)
Zamora
Zaragoza Lérida
Oporto Barcelona
Salamanca Tarragona
Segovia
Coímbra
Ávila Teruel
Toledo
TAIFAS
TAIFAS Valencia Mallorca
MUSULMANES
Lisboa
Évora Badajoz MUSULMANES
Córdoba
Murcia
Jaén
TAIFAS Granada Cartagena
Sevilla Fronteras entre estados cristianos
Frontera con los musulmanes
Almería Territorios musulmanes
Málaga
Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
fue Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid. reconciliación final con Alfonso VI Cid histórico, personaje impresio-
Poco después de la muerte de San- de la que habla la leyenda. El Cid se nante por su biografía y acciones, fue
cho II de Castilla, este caballero o aventuró por su cuenta en los últimos después objeto del más importante
infanzón burgalés fue desterrado en años de su vida en la zona levantina, tratamiento épico y cronístico, desa-
1081 por Alfonso VI. Desde ese año desde 1088-1089, llegando a con- rrollándose casi un siglo después de
con su mesnada castellana actuó quistar Valencia en 1094, que man- su muerte un Cantar del Cid y otros
como conquistador independiente o tuvo hasta el final de sus días. Poco relatos que engrandecieron aún más
mercenario eventual de algunos reyes después de su muerte, en 1099, la la figura, es decir, ese Cid literario
de taifas, sobre todo de Zaragoza. recuperación de la ciudad por los que constituye uno de los arquetipos
Estas batallas sin duda tienen más musulmanes se hizo inevitable, como hispánicos más conocidos.
peso histórico que esa supuesta así ocurrió unos años después. Este
102
13
Reunificación de Al-Ándalus
por los almorávides (1086-1145)
EL ESPACI O A F R IC A N O Y P E N IN S U L A R D E L O S
ALMORÁVIDES
Y NORTE DE ÁFRICA
ALMO R Á V ID E S ( c. 1 0 4 0 - c. 111 5 )
Después de la conquista de Tole-
SANHAYA Grandes etnias rivales
do por los cristianos, los débiles
Gudala Otros grupos tribales
reyes de taifas decidieron pedir auxi-
lio a los almorávides. En 1086 Al- Zona de origen del Zaragoza (1110)
Mutamid de Sevilla, Al-Mutawakkil movimiento almorávide
de Badajoz y Abd Allah de Grana- Expansión de los almorávides Lisboa Uclés (1108)
(año de conquista)
da, al menos, llamaron en su ayuda (1094) Valencia Mallorca
Límite máximo de la (1102)
al caudillo almorávide: Yusuf Ibn
expansión almorávide Sevilla (1115)
Tasufin. (1091) Granada (1090)
El nuevo poder había surgido al Ceuta Algeciras (1086)
Argel
unirse los beréberes del Sáhara en Tánger (1078) (1082)
torno a determinados líderes reli- Fez Tremecén MAGREB
giosos. Parece que el foco originario Montes (1080)
Bargawata Atlas
se dio entre las tribus Sanhaya. Un
Marrakech (1062) Gudala
tal Ibn Yasin había ejercitado una Siyilmasa
vida retirada en una fortaleza o ribat. Taroudant (1056) (1055)
Sus partidarios, llamados por ello al- Magrawa
BED U INO S
R. Dra
Z ANATA S
morabitum, o almorávides, fueron
los “hombres del ribat”, guerreros
austeros. En su estilo de vida se B E R É B ER E S
aunaba el comportamiento sobrio y
Á RA BES
la voluntad de practicar la yihad.
Desde el punto de vista doctrinal, Teghasa (1054)
seguían la corriente maliki, ortodo-
xa dentro del Islam. El movimiento
nació hacia 1040. En 1062 fundaron SÁHARA
Marrakech y unos años después con- Lamtuna
quistaban Fez. Con el tiempo un cau-
dillo, Yusuf Ibn Tesufin, con el títu- Audaghost (1054) Tombuctú
(1076)
lo de emir, logró extender este ideal Senegal
y atraer la solidaridad tribal de los S ANHAYA Gao
habitantes de parte del Magreb y
Sáhara septentrional. Pero su gran R.
Gambia Ní
ge
conquista fue la de Al-Ándalus. r
LOS ALMORÁVIDES mente a África, los reyes de taifas y Murcia. Se resistieron la taifa de
UNIFICAN AL-ÁNDALUS quisieron restablecer, tras esa expe- Zaragoza, hasta 1110, y Valencia,
dición de castigo, el régimen de que había conquistado el Cid y que
En 1086 Yusuf Ibn Tesufin con un parias. Pero los alfaquíes y el pueblo conservó doña Jimena hasta 1102.
ejército acudió en ayuda de las tai- bajo no lo consintieron y pidieron de Comenzaba así una etapa de uni-
fas. Consiguió una gran victoria nuevo ayuda a Yusuf. En 1089, con ficación de Al-Ándalus bajo los
sobre los cristianos en Zalaca o un ejército más amplio que la pri- almorávides. Se extendió entre 1090
Sagrajas, cerca de Badajoz. No recu- mera vez, entraron los almorávides, y 1145, aunque esta última fecha es
peró Toledo ni tampoco sus suceso- pero en esta ocasión para quedarse. aproximada. Durante los primeros
res, por lo que la ciudad, gran urbe Una fatwa o dictamen declaraba ile- años no sólo combatieron a los cris-
musulmana hasta entonces, comen- gítimos a los soberanos andalusíes. tianos sino que también tuvieron que
zó su andadura como gran urbe cris- Ocuparon rápidamente la taifa de hacerse con el control de los reinos
tiana. Tras retirarse momentánea- Badajoz, Carmona, Sevilla, Almería de taifas. Esto les ocupó un tiempo,
104
TOLED O MED I EVA L: TOLED O I S LÁ MI C O hecho de que se dejaron de pagar
[el trazado de las calles se basa en un plano urbano posterior y es aproximado] parias. Los impuestos se redujeron.
Este hecho, la conciencia de haber
Torre Albarrana resarcido el orgullo musulmán heri-
Pta. de la Pta. de la Almofala
do y el celo religioso impuesto hizo
Bisagra (Bāb al-Taffalim) populares a los almorávides entre
(Bab al-Saqra) ARRABAL
amplias capas de la población.
Pta. del Mayordomo
No obstante, la situación em-
(Bāb al-Yail) peoró con el paso de los años. La
Puente de
Alcántara
presión militar de los cristianos fue
Pta. del Cristo
Mezquita de Bib (Bab al-Yayl) Pta. de Alcántara decisiva. Éstos tomaban en 1118
Torre de los Abades ALCAZABA (Bāb al-Qântara)
al-Mardum Zocodover Zaragoza, con lo que una región tan
Pta. de los Judíos
Sta Eulalia Sta. María
estratégica para Al-Ándalus como el
Valle del Ebro empezaba a sucum-
Postigo de los
JUDERÍA Doce Cantos
bir. Por otra parte castellanos y leo-
neses fueron capaces no sólo de con-
Mezquita Mayor tener los ataques almorávides y
Zoco
salvar sus concejos fronterizos, sino
que llevaban a cabo expediciones en
pleno corazón de Al-Ándalus, obte-
niendo botín y desmoralizando a los
musulmanes. El prestigio de los
almorávides decayó en la tercera y
S. Sebastián cuarta décadas del siglo XII. Se vie-
Pta. del Hierro
(Bāb al-Hadid)
ron obligados a subir los impuestos
para sufragar la guerra, bajaron el
0 100 200 m
Río Tajo peso de las monedas de oro –de 4,20
gramos de oro el dinar a 3,90– y no
Sinagogas Muralla del Arrabal contuvieron la carestía. Pero por otra
Mezquitas Judería (aproximada) parte emergieron factores de des-
Iglesias Mezquita mayor contento latentes. Por lo pronto,
Muralla de la Medina Barrio mozárabe muchos mozárabes y judíos, que se
Muros de la ciudadela: Alcazaba (Ciudadela o al-Hizán) Cementerio
sentían presionados por el nuevo
circulaba moneda de buena ley y esto Sinagogas Iglesias Judería Morería (Barrio mudéjar)
hizo mejorar la situación monetaria Mezquitas Recinto amurallado Alcázar Cementerio
y financiera, unido lógicamente al
105
O C U PA C I Ó N A L M O R Á V I D E D E L A P E N Í N S U L A
R. Eb
o ro
R. Miñ
R. Due
ro
Zaragoza Cervera
(1110) Lérida
(1114) Martorell
(1114)
Sagrajas, 1086. Primera gran Victoria almorávide de Uclés (1108)
victoria sobre Alfonso VI
Coímbra (1117)
Ocaña Cuenca Alpuente
Coria Mallorca
Toledo (1095)
R. Tajo Cáceres Uclés (1115)
ICO
(1094)
Santarém Consuegra Valencia (1102)
r
R. Júca
NT
Almodóvar alquivir O
del Río (1091) R. Guad Jaén Aledo NE
(1092) RRÁ
ÉA
Algarve (1092) T E
Sevilla Carmona ED I
(1091) (1091) Granada Almería MAR M
OC
(1090) (1091)
Málaga Conquistas de Yusuf ibn Tasufin entre 1090 y 1097
(1090) Límite de conquistas almorávides en 1099
Algeciras
Conquistas de Ali ibn Yusuf entre 1108-1115
Ceuta (1084)
Conquistas almorávides hasta 1115
Principales batallas
orden religioso, abandonaron Al- El peligro para los almorávides Taifas”. Pero no tiene equivalencia
Ándalus y se fueron a vivir a tierras provenía también de África. En el con el acaecido un siglo antes. Esta
cristianas. Y muchos musulmanes se corazón del Sáhara se estaba exten- nueva disgregación, al disolverse en
sintieron discriminados también por diendo un nuevo movimiento, el esos años el poder almorávide, fue
los beréberes norteafricanos y su almohade. En Al-Ándalus desde de menor calado. Pronto llegará des-
política religiosa y de costumbres: 1143 se empiezan a producir suble- de el norte de África, con la excusa
mayor rigor y mayor respeto a la sha- vaciones internas. Entre ese año y de ayudar a algunos de los pequeños
ría. Chocaba con el Al-Ándalus ante- 1145 muchas guarniciones almorá- poderes de las nuevas taifas, una nue-
rior la nueva ortodoxia que impu- vides fueron desalojadas y tomadas va hornada de guerreros dispuestos
sieron con la interpretación literal por los andalusíes autóctonos. a controlar y unificar a los musul-
del Corán y la Sunna, o el reconoci- Aparece entonces un fenómeno de manes peninsulares. Se trataba de los
miento al califa de Bagdad. atomización del poder o “Segundas almohades.
106
14
GUERRA Y REPOBLACIÓN. decir, tierras de Soria, Segovia, sur zonas al sur de la Cordillera Central
NACIMIENTO de Valladolid y Ávila, como la suelen llamarse “Transierras”. Fue
DE LA SOCIEDAD “Extremadura leonesa”, o tierras sal- mucho más complejo y difícil ocu-
DE FRONTERA mantinas. Se hace derivar el nombre parlas, puesto que en ellas –actuales
de los Extrema Durii, los extremos provincias de Cáceres, Toledo,
El espacio comprendido entre el o fronteras del Duero. Al sur de la Madrid, Guadalajara– había pobla-
Duero y la Cordillera Cantábrica es línea de sierras –Gata, Francia, Béjar, ciones y defensas musulmanas.
conocido en la historiografía como Barco, Gredos, Guadarrama, Ayllón, Pero en unas y otras zonas, entre
“Extremadura histórica”. Incluye tan- Riaza– se hallan las cuencas de ríos el Duero y el Tajo, a lo largo de
to la “Extremadura castellana”, es que desembocan en el Tajo. Estas 100.000 km2, se extendió un tipo de
uero
Toro Río D
Zamora Tordesillas
ALFOZ
ALFOZ DE ZAMORA DE TORO
Río A
PORTUGAL
daja
Medina
e ro (c. 1085-1090) Olmedo
Du (c. 1085-1091)
o
Rí
Río
Uc
ardiel
Río
es
Tor
m Arévalo
es
p
Rí o H (c. 1082-1090)
ltoya
Río Za
ue
br
Salamanca
a (c. 1086)
Río Vo
Río
Río Ág
Alm
ar
Alba
eda u
(antes 1140)
Rí
Ávila
o
Co
(c. 1086)
a
daja
Río A
PORTUGAL
o rneja
Río C
a
ued
Río Alberche
Ág
o
Rí
Río Tormes
lagón
e
rch
lbe
Río A
o A
Rí
tar
Tié
Río
Realengo. ( ) Fecha de repoblación o de segregación de la Tierra concejil
Señoríos eclesiástico y de Orden Militar
jo
Líneas de proyección territorial de los salmantinos o Ta
Rí
Líneas de proyección territorial de los abulenses
Ciudades
Villas-capitales de villa y tierra
108
C O N Q U I S TA C R I S T I A N A D E L A TA I FA D E T O L E D O más al norte. En consecuencia, no
pudo reproducirse entre el Duero y
la Cordillera una ocupación espacial
y social basadas en la agricultura
estable, los dominios señoriales lai-
Atienza Medinaceli
R. Henares
Guadarrama cos o eclesiásticos, ni pudo instalar-
Buitrago Sigüenza Molina se la nobleza con sus cuadros vasa-
ña
Hita Taju Canales lláticos. Por el contrario, en estas
Uceda R.
Brihuega zonas se produjo la repoblación con-
Talamanca Guadalajara cejil, sustanciada en grandes conce-
R. Guadarrama
Alcalá
o
jos de villa y tierra.
Taj
Madrid Dependiendo de la resistencia de
R.
Gredos Zorita Serrranía
Alamín de Cuenca los musulmanes, los colonizadores
tar Colmenar de Oreja
R. Tié erc
he
Escalona Cuenca pioneros fueron iniciando la repo-
Alb
Talavera Maqueda Huete blación: a finales del siglo XI ya esta-
Sta. Olalla Uclés
Ocaña ban recibiendo población cristiana
a jo Toledo
R. T ela
ciudades como Salamanca –la sede
igü
R. Záncara
Mora R.
C episcopal se restauraba en 1102–,
Montes de Toledo Alarcón Segovia o Ávila. Y Arévalo, Olme-
Consuegra
do, Medina, Coca, Cuéllar, etc. Poco
na diana R. Júcar después Soria, Medinaceli –1104– y
. Gu a
d ia Calatrava R
Gua otras localidades. Tanto Alfonso VI
R . o su yerno Raimundo de Borgoña,
Alarcos
como desde 1104 Alfonso el Bata-
R. Zújar
llador de Aragón –en este caso en tie-
Almodóvar R. Javalón
rras sorianas y Alto Tajo– favorecie-
ron el nacimiento de concejos en
toda la región. Al principio fueron
concejos enormes con unas fronte-
Límite aproximado de la taifa de Toledo ras abiertas y flexibles, en especial
Ciudades ocupadas por los cristianos antes de 1085
en Ávila y Salamanca.
Al sur de la Cordillera Central la
Ciudades ocupadas por los cristianos tras la conquista de Toledo (1085-1088)
(recuperadas luego por los almorávides hasta el primer tercio del siglo XII)
ocupación cristiana fue complicada,
como lo demuestra la ardua incor-
Ciudades y localidades que siguieron en manos musulmanas
poración de la taifa de Toledo y otras
Área que conservó el anterior rey musulmán de Toledo, Al-Qadir difíciles conquistas: Madrid, que pasó
Área que quedó bajo control del rey musulmán de Zaragoza antes del dominio almorávide a manos cristianas con la conquista
Área que quedó bajo control del rey musumán de Sevilla antes del dominio almorávide de Toledo, tras sufrir razzias almo-
rávides –hacia 1109–, no consolidó
su dominio cristiano hasta 1123 y
Atienza, asimismo tomada por
Alfonso VI, no tuvo una incorpora-
ción segura hasta 1124. Mientras que
sociedad y de organización del espa- es la idea de “desierto estratégico del Molina, Escalona, Guadalajara, Ore-
cio que se suele llamar “sociedad de Duero”, que funcionó en la frontera ja o Coria tuvieron que esperar al rei-
frontera”. Probablemente desde que, entre Al-Ándalus y los reinos del nor- nado de Alfonso VII. Ahora bien,
en 1072, Alfonso VI unificó los rei- te entre el IX y el XI. La conquista de todas estas tierras, aunque no pasa-
nos y planeó una presión basada en Toledo modificaría esta situación de ron a Castilla y León hasta ese rei-
la guerra y no en el cobro de parias, rincón olvidado de la región. Por lo nado, fueron zona de guerra ligera
comenzó a nacer esta sociedad de pronto, al desplazarse la guerra al sur, desde 1086.
frontera. En esa década Alfonso VI la región estaba destinada a ser el En esta sociedad de frontera, aho-
reforzaba los asentamientos fronte- destino de migraciones y llegada de ra ya desde el Duero al Tajo, el con-
rizos extremaduranos, como lo colonos. De modo que, aunque cejo de villa y tierra agrupaba nume-
demuestra Sepúlveda, una de las hubiera habitantes ya instalados al rosas aldeas, a veces centenares. Los
localidades más pronto repobladas, sur del Duero, puede decirse que fue- vecinos, recién llegados de áreas sep-
incluso con un fuero de 1076. Segu- ron las condiciones de guerra entre tentrionales, gozaron desde el prin-
ramente había ya por doquier grupos 1086 y mediados del siglo XII, cuan- cipio de un estatuto enormemente
de población al sur del Duero que do menos, las que hicieron surgir una ventajoso: exenciones fiscales, liber-
vivían espontáneamente allí desde, sociedad de frontera. tades, garantías judiciales, acceso a
al menos, el siglo X. Pero, a pesar de Pero además la llegada de los la propiedad particular sin restric-
estos precedentes, la región de la almorávides en 1086 convirtió todo ciones y ausencia de cargas de tipo
Extremadura histórica –no así la este enorme territorio en inseguro, señorial. Sobre todo en un principio,
Transierra– no tendría mucha pobla- ya que los ataques musulmanes, con quizá hasta la segunda mitad del XII,
ción y, sobre todo, estaba desorgani- razzias y saqueos, dificultaban la este estatuto fue estimulado por los
zada en términos administrativos. Ésa colonización tal como se había hecho reyes, ya que la única forma de poder
109
R E P O B L A C I Ó N E N T R E E L D U E R O Y E L TA J O ( 1 0 7 2 - 11 5 7 )
R. Tera
E sla
R. Soria
(1100) Ágreda
Roa Calatañazor (1109)
Maderuelo Andaluz (1089)
Portillo Peñafiel Aza Osma Almazán (c. 1098)
R. Duero (1085-90) Ayllón S. Esteban
Íscar Cuéllar (1085-1090) Berlanga
R. Medina (1085-1090) Caracena
To Olmedo Sepúlveda Medinaceli
r me (c. 1082-1090) (1104)
s Coca (1076)
Salamanca Arévalo Pedraza
R . Hu (c. 1086) (c. 1082-1090) Segovia Atienza Sigüenza
ebra (1124)
R.
(c. 1088)
Ág
Buitrago uñ
a
Molina
Alba Taj
ue
R. (1124)
da
R. S
alor
Consuegra
(1151) R. Záncara
Calatrava la Vieja
(1147)
a
ian
uad R.
R. G Zújar
Coria
(1142) Comienzo de la repoblación dirigida por la monarquía (fecha casi siempre aproximada)
Límite de la expansión castellanoleonesa en época de Alfonso VII
Área repoblada o controlada por Alfonso el Batallador (1104-1134)
Área repoblada por Alfonso VI
Área repoblada por Alfonso VII
defender y colonizar estos territorios lizaban incursiones en territorio ene- da extracción de renta, sino tan sólo
era atraer la instalación de gentes del migo –incluso en tierras muy meri- posiblemente una mayor cantidad alí-
norte mediante el otorgamiento de dionales, obteniendo botín– fueron cuota que sus convecinos en el repar-
libertades y privilegios jurídicos. Ini- constituyendo un grupo más selecto to del botín, del que una parte iba a
cialmente, y en ausencia de campe- y destacado, los caballeros villanos. parar a manos del rey.
sinado dependiente y de señores feu- Pero durante muchas décadas no lle- Los concejos fueron instituciones
dales, los recién llegados apenas gaban a ser todavía una aristocracia muy participativas. Cada concejo de
tenían diferencias sociales entre sí. privilegiada y excluyente, ya que era aldea tenía su concilium, pero lo más
Poco a poco la diferencia funcional relativamente accesible para muchos sobresaliente era que el concilium de
entre los que combatían a pie, o peo- propietarios medios alcanzar a la la villa o ciudad recibió muy pronto
nes, y los que combatían a caballo, condición de caballeros. Esta última un trasvase de soberanía muy desta-
o milites, dio paso a diferencias de se estimulaba desde el poder. Y por cado. Los vecinos pudieron tomar
estatus. Estos últimos, que no sólo otra parte la condición de comba- decisiones en muchas materias, elegir
defendían sus comarcas sino que rea- tientes a caballo no llevaba apareja- anualmente a sus alcaldes y juez del
110
concejo y organizar su propia defensa ques y pastos comunales, que ocu- No se conservan muchos textos de
–apellido–, vigilancia de términos y, paban al principio la mayor parte este período, pero alguno como el
en el caso de los caballeros, colaborar del espacio, todo era gestionado Fuero de Sepúlveda de 1076, dado por
en el fonsado del rey en la guerra, en por los vecinos y el concejo de Alfonso VI y confirmado algo más tar-
determinadas lides campales y otras. villa y tierra. Coexistiendo con de, revela que estas zonas, entre 1072
Había, eso sí, en cada concejo de villa estos espacios había propiedades y 1150, eran probablemente las tierras
y tierra un tenente regio al frente del particulares de los aldeanos, veci- más libres de la península. El sistema
castillo, pero su poder estuvo muy con- nos y caballeros, consistentes en concejil nacía más o menos en esos
dicionado por el auge de los concejos tierras cerealistas, viñas, prados y años. Esta horquilla temporal sería la
de vecinos y las alcaldías en manos de huertos, que sirvieron de comple- etapa que reflejan las primeras cartas
la población local. Había asambleas y mento a la gran actividad del pas- forales. Fueros como los de Salaman-
elecciones anuales, garantías políticas, toreo extensivo en los vastos espa- ca, Ávila, Medinaceli, Soria, etc., que
milicias locales e incipientes hacien- cios libres. Además durante mucho eran fueros breves latinos, debieron de
das municipales. tiempo no hubo en las Extremadu- tener un perfil jurídico semejante al
El espacio urbano y rural era ras nobleza señorial ni dominios sepulvedano, como fueros de fronte-
todo realengo, pero administrado eclesiásticos, a salvo de muy mo- ra, si bien los textos están rehechos o
por el concejo. Es decir que desde destos –al principio– dominios de se conocen por extensiones posterio-
las calles de la villa hasta los bos- obispos y catedrales. res a otras localidades.
EL FINAL DEL REINADO Mientras Raimundo de Borgoña, sus manos y su imperio hispánico
DE ALFONSO VI yerno de Alfonso VI, se encargaba hecho realidad, se centraron en otras
Y LOS PROBLEMAS de organizar la repoblación de las cuestiones. Además de cultivar unas
SUCESORIOS EN EL REINADO Extremaduras, las prioridades de relaciones complicadas con el cle-
DE URRACA Alfonso VI, ya con todo el poder en ro y los magnates de los distintos
REINO DE
NAVARRA Y ARAGÓN
Lugo Oviedo
Santiago
CONDADOS CATALANES
Pamplona
León
iño Nájera Jaca
R. M
Astorga Burgos
Tudela Gerona
REINO DE LEÓN Y CASTILLA Huesca
Braga R. Duero
Zamora Toro Soria
Zaragoza
Lérida
Medinaceli Barcelona
Sepúlveda
Segovia Sigüenza
Salamanca Ávila Guadalajara Tortosa
Coímbra Uclés Albarracín
1108 TAIFA DE VALENCIA
Coria Talavera (TIERRAS DEL CID)
Toledo Cuenca
R. Tajo Mallorca
Cáceres Consuegra
Sagrajas 1097 Valencia
R. Júcar
Lisboa Badajoz 1086 Alzira
Mérida Albacete
a
Calatrava Denia
ian
Évora R. Aledo
uad
1088
G
111
territorios, gallegos, castellanos o tuvo lugar en 1109, el año en que promesas de libertades del aragonés.
leoneses, la guerra contra los musul- murió Alfonso VI. La unión prome- Las revueltas urbanas que entre 1111
manes fue un enorme problema. Los tía grandes éxitos contra los enton- y 1116 tuvieron lugar en Sahagún,
almorávides mostraron su vigor en ces todopoderosos almorávides, que Santiago y otras localidades del
varias batallas y amenazaban con en 1110 se hacían con el control de Camino contra sus señores eclesiás-
recuperar amplios territorios, ha- Zaragoza, y, de haber salido ade- ticos no se pueden explicar sin esta
ciendo inseguros otros muchos. lante, hubiera facilitado una unión pugna dinástica y también guerra
Sobre todo destaca la victoria sobre entre los reinos hispánicos de efec- civil. En ella Alfonso el Batallador
las tropas de Alfonso VI en Uclés tos históricos. Pero el matrimonio ganó algunas batallas al principio,
en 1108. fracasó, no se entrelazaron las aris- pero desde 1112 y 1113 perdió las
Esta batalla trajo consigo además tocracias castellanoleonesas y las de Carrión y Burgos, lo que favore-
un grave problema sucesorio. Allí aragonesas, no hubo descendencia ció la idea del aragonés de abando-
moría el joven infante Sancho. No y en 1114 el matrimonio fue anula- nar su pretensión al trono castellano.
había otros herederos varones. El rey do por el Papado. En 1116 en Santiago era proclama-
se había casado primero con Inés de Desde el principio del reinado de do sucesor de su madre en el trono
Aquitania y luego con Constanza Urraca (1109-1126) el caos se apo- Alfonso Raimúndez, que sería Alfon-
de Borgoña, madre de Urraca. Tenía deró del reino. Alfonso I de Aragón so VII.
dos hijas ilegítimas con Jimena intervenía en la parte oriental de Cas- La situación de debilidad del
Muñiz, Teresa y Elvira, a las que tilla y apoyaba todos los intentos de poder regio, que no cesó entonces,
había casado con dos grandes nobles rebelión que en este territorio, sobre afectó también a los territorios al sur
franceses, el borgoñón Enrique de todo en el mundo urbano y en los del Miño. El conde Enrique de Lore-
Lorena y Raimundo de Toulouse, burgos del Camino, se organizaban na y Teresa habían recibido Portugal
respectivamente. Y había casado a contra la facción de Alfonso Rai- con el rango de Condado, pero
su hija legítima Urraca, la que fue múndez. En efecto, este niño agluti- como parte del reino. La crisis polí-
luego reina, con el conde Raimundo nó apoyos de un importante sector tica acentuó la autonomía de esta
de Borgoña. De esta última unión de la aristocracia, sobre todo leone- zona, que se fue progresivamente
nació en 1105 Alfonso Raimúndez. sa y gallega. El arzobispo Gelmírez desvinculando del reino leonés.
Cuando moría el infante Sancho y el conde de Traba, entre otros, apo- Aunque en 1112 el conde Enrique
el trono correspondía al pequeño yaron al bando de Alfonso Raimún- moría quedaba Teresa al frente del
Alfonso Raimúndez. Pero su mayo- dez, al que se allegaba la voluntad condado portucalense. Correspon-
ría estaba muy lejana. Urraca, que de su madre Urraca también. En derá al hijo de ambos dar el paso
había enviudado de Raimundo de Castilla este sector contaba con el decisivo años después en la segre-
Borgoña en 1107, fue presionada apoyo de algunos grandes linajes, gación de este territorio.
para casarse con Alfonso I el Bata- como los Lara, mientras que los bur-
llador de Aragón. El matrimonio genses se dejaban seducir por las
EL IMPERIO HISPÁNICO García Ramírez de Pamplona, Rami- cían al nacimiento de un reino que fue
DE ALFONSO VII DE LEÓN ro II de Aragón y luego lo haría el yer- ya independiente en los siglos veni-
Y CASTILLA (1126-1157) no de éste, Ramón Berenguer IV. La deros.
coronación de Alfonso VII como Alfonso VII destacó además por
Alfonso VII heredaba el reino en Imperator Totius Hispaniae, en un haber realizado avances extraordina-
1126. Se habían desvanecido poco a acto solemne celebrado en León en rios frente a los musulmanes. Los
poco las tensiones internas. Las rela- 1135, representaba la cúspide del almorávides se habían debilitado y
ciones con Cataluña eran buenas, poder de este monarca. Una sombra, aparecían insumisiones regionales. Las
gracias al matrimonio en 1128 con tan sólo, se percibía en este concier- llamadas segundas taifas, que socava-
Berenguela de Barcelona. Tenía, eso to de reinos cristianos bajo su hege- ban la unidad almorávide, coinciden
sí, un fuerte rival en Alfonso el Bata- monía: el hijo de Teresa y Enrique de con los éxitos de Alfonso VII: Molina
llador, que aún controlaba áreas cas- Lorena, Alfonso Henriques, aun reco- en 1128, Escalona en 1130, Guadala-
tellanas de Soria, La Rioja, Álava y nociéndose vasallo del emperador leo- jara en 1133 o Coria en 1142. La con-
Burgos. A la muerte en 1134 del ara- nés, como hacía en 1127, proclama- quista de Calatrava la Vieja en 1147
gonés estas zonas pasaron ya a Cas- ba su condición de rey de Portugal extendía la frontera castellano-leone-
tilla. Incluso Alfonso VII llegó a ocu- unos años después. Entre 1139 y sa no ya al Tajo, que se veía consoli-
par temporalmente Zaragoza. No era 1143, año del reconocimiento oficial, dado, sino incluso más al sur. Y aún
de extrañar, puesto que por entonces se consumó un proceso de segrega- quedaban energías para emprender en
este rey, que en la década de los ción, que fue jalonado por la adop- ese año de 1147 una expedición en
treinta se permitía hacer campañas ción del título de rey, la renuncia táci- plena retaguardia enemiga. La cam-
en pleno Guadalquivir, era la perso- ta a disputarlo por las armas por parte paña militar a Almería fue un éxito.
na más poderosa de la península. Los de Alfonso VII y el reconocimiento Logró mantener durante unos años el
demás reyes cristianos aceptaban su por el Papado. El imperium hispáni- dominio cristiano en esa ciudad, a
condición de emperador hispánico y co de Alfonso VII no se tambaleaba, modo de isla castellana dentro de Al-
se declararon vasallos suyos. Lo hizo pero los efectos a largo plazo condu- Ándalus.
112
L O S R E I N O S C R I S T I A N O S E N 11 3 4
(con los territorios ocupados por Alfonso I el Batallador)
Lugo Oviedo
Santiago
CASTILLA PAMPLONA ARÁN
REINO DE LEÓN Y CASTILLA ROSELLÓN
PALLARS
Nájera Jaca
León Logroño
Tuy Ourense Seo de Urgel
Burgos REINO Gerona
DE ARAGÓN Huesca CONDADOS DEL
Braga CONDADO Zamora Soria CASAL DE BARCELONA
DE PORTUGAL Lérida
CASTILLA Zaragoza
Oporto Barcelona
Segovia Tarragona
Salamanca
Coímbra
Ávila Teruel
Toledo
Valencia Mallorca
ALMORÁVIDES
Lisboa
Évora Badajoz ALMORÁVIDES
Córdoba
Jaén Murcia
ALMORÁVIDES
Granada Cartagena Fronteras entre estados cristianos
Sevilla
Frontera con los musulmanes
Territorios musulmanes
Málaga Almería Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
Valencia Mallorca
MUSULMANES
Lisboa
Évora Badajoz MUSULMANES
Córdoba
Murcia Fronteras entre estados cristianos
Jaén
Cartagena Frontera con los musulmanes
Sevilla Granada
Territorios musulmanes
Áreas en litigio
Málaga Almería Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
113
Almería volvería a manos quienes la recuperaron para el so de unificación andalusí. Alfon-
musulmanas en 1157. Pocos años Islam, habían entrado en la Penín- so VII moría poco después de la
antes los almohades, que fueron sula y estaban iniciando un proce- toma de Almería.
O F E N S I VA C R I S T I A N A E N É P O C A D E A L F O N S O V I I
114
15
R E I N O D E S A N C H O G A R C É S I V D E PA M P L O N A E N T R E 1 0 5 4 Y 1 0 7 6
(de la batalla de Atapuerca a Peñalén)
MAR CANTÁBRICO
R. Miera
Colindres
TRASMIERA Sámano R.
n
Ne
REINO DE CASTILLA
só
SOPUERTA
R.
rv id
GUIPÚZCOA asoa
R. A
ión
B
eba
g ua VIZCAYA
rola
CARRANZA Cada
D
BAZTÁN
R.
R. U
Ur
ria
ume
O
Castroharto CASTILLA
R.
VALDECOVIA
R. B
A ARAGÓN
R. rra
ati
ado quil
R.
O
ARREBA LANTARÓN mecil R. Ar
a
R. Z PAMPLONA Huarte
r
Ne
R. I
Tedeja lo SALAZAR RONCAL
la
Aibar
R. Ar
Cellórigo Punicastro
Briviesca
Cerezo BilibioHaro Muez Unx Sangüesa ARAGÓN
Logroño Tafalla
Oja
Ibrillos Ujué
Oca Grañón Nájera
gua
R. Arlanzón NÁJERA R. A
R. Ire
jerilla
Arlanzón
a
R. Na
R.
REINO DE CASTILLA Eb
TAIFA DE ZARAGOZA ro
116
R E A PA R I C I Ó N D E L R E I N O D E PA M P L O N A C O N G A R C Í A R A M Í R E Z ( 11 3 4 - 11 5 0 )
Río Bidas
VIZCAYA
GUIPÚZCOA
a
o
rra
do
r
Za
za
i
la
at
ío
Sa
al
ÁLAVA
Ir
nc
de
R
Ro
o
V.
Pamplona
Rí
de
V.
Leguín
Río Ega
Río Arga
Miranda de Ebro
Leire
Marañón Estella Lumbier
Artajona
Sangüesa
Haro Jaca
Tafalla
Sos
Olite S. Juan de la Peña
Logroño Petilla
Nájera Rí
1134-1143 o E
b ro
Falces
S. Millán Uncastillo
Calahorra Carcastillo
a
Sádaba
ill
Quel Milagro
er
Arnedo A
aj
R A G Ó N
Autol Valtierra
ua
N
ío
R CAMEROS Alfaro
os
Arguedas
reg
Rí
ac
o
o I
id
Ejea
o
C
Eb
álleg
Rí
ba
ro
o
Fitero Tudela
Rí
Ar
Río G
Cascante
Río
LA EXPANSIÓN DE ARAGÓN hijo Pedro hacía poco– heredó el rei- fue su matrimonio con Urraca, viu-
POR EL EBRO. PEDRO I no su hermano Alfonso. da y reina de León y Castilla desde
Y ALFONSO EL BATALLADOR Correspondió a Alfonso I el Bata- 1109. Las condiciones de la unión
llador (1104-1134) la mayor amplia- matrimonial fueron muy ventajosas
En Aragón, Pedro I (1094-1104) ción de fronteras jamás conocida por para el rey de Aragón, pues le per-
continuó la expansión por el valle del los aragoneses. En su reinado logró mitía ejercer con su mujer el papel
Ebro. El mayor logro fue la toma de llegar a la cabecera del Tajo, a las sie- de rey en León y Castilla. Pero el
Huesca en 1096, que era hasta enton- rras del Maestrazgo, en las puertas matrimonio fracasó muy pronto y
ces la principal ciudad musulmana de Levante, y a las comarcas ribere- quedó anulado en 1114. Pero para
al norte de Zaragoza. Esta última ñas del bajo Segre. A ello añadió una entontes Alfonso el Batallador había
estaba ya prácticamente asediada, intervención en tierras castellanas de logrado allegar apoyos en zonas del
aunque todavía no conquistada, gra- Soria y el Alto Duero. Duero y Burgos, entre los burgueses
cias a la toma por los cristianos de Precisamente esta intervención en de Castilla y en algunos concejos, a
la plaza de Juslibol en 1101. En 1100 territorios castellanos fue una de las los que el aragonés ofreció franqui-
había conquistado Barbastro. En primeras bazas de su dilatado reina- cias. Durante un tiempo el rey ara-
1104 moría Pedro I. Al no dejar here- do. Como se ha dicho a propósito de gonés quiso incorporar esta parte
dero varón vivo –había muerto su Castilla, la razón de esa influencia oriental de Castilla. No lo consiguió,
117
REYES DE ARAGÓN (1035-1276)
(corona de Aragón)
Ramón Berenguer IV = Petronila
Conde de Barcelona (1131-1162) Heredera de Aragón
Príncipe de Aragón (1137-1162)
pero dejó una huella en zonas de las tas de Alfonso el Batallador fueron ta agrario el campo con los únicos
actuales provincias de Soria y Gua- enormes, como puede verse en el recursos de los colonos norteños y
dalajara. mapa correspondiente. Entre ellas, los mozárabes. Por ello, en muchas
Alfonso el Batallador se concen- núcleos importantes como Tudela, partes se mantuvo tras la conquista
tró en las grandes conquistas del Borja o Tarazona en 1119 o Calata- cristiana la población musulmana
valle medio del Ebro. Realizó cam- yud y Daroca en 1120, además de la existente, que siguió trabajando la
pañas importantes en tierras en las zona soriana –entre 1220-1228– y tierra como labradores exaricos. Las
fronteras del condado de Urgel, y Molina de Aragón, hacia 1128-1229, abundantes poblaciones mudéjares
conquistó Tamarite en 1107. La con- que complicó las relaciones con el del valle del Ebro se mantuvieron
quista de Zaragoza en 1118 fue el castellano Alfonso VII. En 1133 con- durante toda la Edad Media. La
hecho más sobresaliente, dada la quistó Mequinenza, pero al año población aragonesa de las villas fue
importancia de la ciudad. Zaragoza siguiente fracasó en Fraga, donde muy diferente, puesto que tenía un
era una de las mayores urbes de Al- encontró su muerte. carácter urbano, se dedicaba a fun-
Ándalus hasta entonces y desde En los años de su reinado, y en los ciones artesano-mercantiles y esta-
1110, cuando sucumbió la taifa a los siguientes, los aragoneses se hicie- ba compuesta por sectores, como los
almorávides, hasta el año de la con- ron con el control de la cuenca media francos, inexistentes en el medio
quista cristiana, estuvo bien defen- del Ebro. Pero no tenían capacidad rural.
dida por ellos. Las demás conquis- para colmatar desde el punto de vis-
118
E X PA N S I Ó N A R A G O N E S A P O R E L VA L L E D E L E B R O
C O N A L F O N S O I E L B ATA L L A D O R ( 11 0 4 - 11 3 4 )
MAR CANTÁBRICO
VIZCAYA
GUIPÚZCOA
PIRINEOS
PIRINEOS
ÁLAVA PAMPLONA Pamplona ARÁN
R. Gállego
BUREBA
zana
Sangüesa R.
PALLARS
Cin
ca
agor
R. Ebro Jaca
a
a g ón
Ujué
r
se
Nájera Logroño Ainsa URGEL
r a Ri b
Funes
R.
R. Ar
Loarre
Calahorra
e
R. Nogu
Valtierra Huesca
R. Barbastro
Tudela (1119) Eb
Ejea (1105)
ro Almudévar (1118) R. Segre
Tarazona (1119) Tauste (1105) Monzón
Borja Zuera (1118) Tamarite (1107)
Ágreda (1119) Castellar
Soria (1120) Alagón Sariñena
S. Esteban
de Gormaz Almazán (1128) Zaragoza (1118) Lérida
Ebro
Ricla (1120) Fraga
Berlanga Escarpe (1133)
Calatayud (1120)
Belchite (1117) Mequinenza (1133)
R. Cariñena Caspe
Jil Fayón
Medinaceli (1121) oc
a
Daroca (1120) Nonaspe
Sigüenza (1121) Alcañiz (1124)
Batea (1133)
Cutanda (1120)
Calamocha Horta de S. Juan (1131)
Barrachina (1128)
Molina (1128)
Monreal (1120) Jarque (1117)
R.
Eb
Aliaga
ro
Traid (1128) Singra (1120) Morella (1117)
Pitarque (1117)
Frontera en 1104
Área tomada a Castilla
MAR MEDITERRÁNEO
Conquistas y repoblaciones en la zona castellana del Duero oriental
Área repoblada por Alfonso I el Batallador, añadida al Reino de Aragón
Soria (1120) Lugar y fecha de conquista o comienzos de repoblación
119
L O S C O N D A D O S C ATA L A N E S A N T E S D E L A F O R M A C I Ó N
D E L A C O R O N A D E A R A G Ó N ( c . 1 0 5 0 - 11 3 7 )
CARCASONA
COMMINGES
Perpiñán
Elna ROSELLÓN
PIRINEOS
PIRINEOS VALLE DE ARÁN
FOIX PIRINEOS
R.
ALTO PALLARS
Nog
CAPCIR Villafranca de Conflent
uera P
Benasque
CONFLENT
allaresa
Andorra Llivia 1117 VALLESPIR Peralada
1111
RIBAGORZA
Sort Puigcerdá
BAJO Castelló
R. Ésera
La Seo CERDAÑA
REINO DE ARAGÓN
PALLARS BESALÚ
Roda de Urgel 1117 1111 AMPURIAS
URGEL Ripoll
R. Noguera Ribagorzana
Besalú
Tremp Berga Ampurias
Graus Solsona
BERGA R. Ter
e
egr
1117 Vic
Gerona
R. S
Ager
R. Cinc
OSONA GERONA
Camarasa
a
URGEL
Balaguer (1105) Manresa
MANRESA
[Lérida] Cervera
Tárrega Ódena
MUSULMANES
MANRESA
R.
re
Seg
Llo
R. BARCELONA ga
O
br
t
NE
R. Ebro
e
Barcelona
RÁ
TER
Olérdola
ED I
BARCELONA
Alcover MAR M
[Siurana]
ambiciones occitanas de la Casa; la comarca de Tarragona. Se ponían La situación clave se dio al morir
consiguió también fraguar una alian- las bases de lo que luego sería la Cata- en 1134 Alfonso el Batallador. Por lo
za estable con el extenso y potente luña Nueva. Balaguer, conquistada pronto sus enormes dominios per-
condado de Urgel; y, alentado por por el conde de Urgel hacia 1105, dieron unidad y los musulmanes recu-
esa fuerza y alianza renovada, pudo Cervera, Tárrega y la propia Tarra- peraron posiciones. Pero además el
sustituir el viejo modelo de marcas gona, esta última en 1117, fueron las testamento de Alfonso I facilitó en
fronterizas casi inamovibles en grandes incorporaciones. pocos años la unión de Aragón y
la periferia de los condados por una Ramón Berenguer IV (1131-1162) Cataluña. Firme creyente en los idea-
verdadera expansión basada en la heredó los dominios hispánicos del les cruzados y sin descendencia, el
conquista y la repoblación, como Casal de Barcelona. Bajo su manda- Batallador legó sus dominios de for-
pasaba en Castilla y Aragón. En esto to se produjeron avances importantí- ma insólita a las órdenes militares
último tanto Urgel como Barcelona simos frente a los musulmanes. Pero nacidas poco antes en Tierra Santa.
lograron extender las fronteras más hay que destacar previamente el pro- El testamento no se cumplió, ya que
allá del Penedés incorporando el tagonismo que le correspondió como la aristocracia aragonesa no estaba
Segre medio, la cuenca de Barberá y fundador de la Corona de Aragón. dispuesta a asumirlo. Los navarros
120
R E A J U S T E D E F R O N T E R A S T R A S L A M U E RT E D E A L F O N S O I E L B ATA L L A D O R
MAR CANTÁBRICO
VIZCAYA
GUIPÚZCOA
ÁLAVA
Pamplona
Estella ARÁN
Sangüesa
Jaca
Ujué Aínsa
Nájera Funes
Logroño Roda PALLARS
Loarre
Calahorra
Huesca Graus
URGEL
Tudela Ejea Barbastro
Monzón
Ágreda
ARAGÓN Tamarite
Soria Sariñena
Almazán Zaragoza Lérida
Fraga
Berlanga
Calatayud Mequinenza
Belchite
Medinaceli
Daroca
Sigüenza Alcañiz Horta
Monreal
Molina
Jarque
R.
Eb
ro
Morella
Gúdar MAR
Cella MEDITERRÁNEO
Alcalá
Zona bajo control de Alfonso I el Batallador a su muerte (1134) Zonas en disputa con los musulmanes
Reaparición del Reino de Navarra (antes Reino de Pamplona) Área disputada entre Castilla, Aragón y los musulmanes
Área disputada entre Castilla y Navarra Límites del reino al formarse la corona de Aragón
Reino de Castilla y León (Alfonso VII)
tampoco y por eso aprovecharon la de príncipe de Aragón, toda vez que yerno. Por eso, y aunque en rigor no
muerte del rey para recuperar su rei- Ramiro II traspasó en las capitula- fue efectiva hasta el sucesor de Petro-
no desaparecido. En Aragón la muer- ciones matrimoniales de 1137 los nila, Alfonso II, lo cierto es que ya
te de Alfonso I les inclinó, para evi- derechos regios a su hija Petroni- en 1137 nacía la unión dinástica
tar cumplir el testamento, a poner la. Ramiro II delegaba de facto el conocida como Corona de Aragón,
como rey a su hermano Ramiro, gobierno de Aragón en su yerno. con Ramón Berenguer IV gober-
conocido como “El Monje” (1134- Una leyenda posterior adjudicó a nando tanto en el reino de Aragón
1137) por su condición clerical. Unos Ramiro II un carácter firme frente a como en los condados catalanes.
acuerdos muy complejos obligaron a los nobles en su breve reinado al atri- En 1140 Ramón Berenguer IV lle-
éste a casarse a finales de 1135 con buirle una matanza de nobles levan- gaba a pactos con Alfonso VII, que
una hija del duque de Aquitania, Inés tiscos, a los que habría mandado eje- facilitaron la convivencia entre las
de Poitiers. Petronila fue el fruto de cutar –la leyenda de la “campana de coronas. Ambas se confabularon para
esa unión. Se acordó que Ramón Huesca”–, pero la realidad histórica repartirse Navarra, algo que no se
Berenguer IV se comprometiese con es que, tras resolver el problema consumó al final. En ese año las
ella. Desde 1137 –la boda se llevó a sucesorio, Ramiro II, a quien aún órdenes del Santo Sepulcro y del
cabo en 1150, a los 14 años de la quedaban dos décadas de vida, dejó Hospital, y la del Temple en 1143,
niña– Ramón Berenguer IV ejerció el poder en manos de su hija y su renunciaban a los derechos otorga-
121
FORMACIÓN DE LA CORONA DE ARAGÓN
Y AMPLIACIONES BAJO RAMÓN BERENGUER IV
Perpiñán
Pamplona ARÁN
Siresa Viella Elna ROSELLÓN
Estella Ansó
Leyre Andorra Puigcerdá
Sangüesa Peralada
Jaca Sort
Sos Besalú Castelló
Logroño Aínsa PALLARS La Seo Ripoll
Loarre Ampurias
de Urgel AMPURIAS
Tremp
CASTILLA Ejea URGEL Berga
Tudela Huesca Barbastro Gerona
Solsona Vic
Camarasa
Ódena
Tarazona R. Ebro Balaguer
Sariñena Cervera
Soria Alcolea Tárrega
Fraga Lérida
ón Zaragoza (1141)
Jal Barcelona
Olérdola
Calatayud Belchite Siurana
Mequinenza
Híjar
CASTILLA Daroca Albalate O
E
n
pe Alcañiz
rtí
lo
Huesa da N
Ma
(1157) Tortosa
RÁ
Molina ua
.G
Monreal (1154) R
R. E
R.
bro
R
TE
DI
R. Jil
MUSULMANES
M E
oca
MAR
MUSULMANES Cella
Albarracín Teruel
Eb
ro
Corona de Aragón en el momento de la formación Enclaves ocupados por Ramón Berenguer IV en el Bajo Aragón (1154-1157)
dos por el testamento incumplido del Berenguer –Alcañiz y Huesa– goza- El empuje de Ramón Berenguer IV
Batallador. A partir de entonces des- ron de una situación semejante, asi- y el éxito en la lucha contra los
tacó la actuación de Ramón Beren- mismo en contraste con el Aragón musulmanes, favorecido por el recien-
guer IV como conquistador. Aparte septentrional o central, muy seño- te hundimiento de los almorávides,
de algunas incorporaciones en el rializado. El exponente más claro de llevó a la Corona de Aragón a pactar
Bajo Cinca y el Jiloca, destacan las la repoblación del Bajo Aragón des- con Castilla una frontera virtual para
conquistas de Tortosa (1148), Fraga de presupuestos de libertades y fran- repartirse las futuras conquistas meri-
y Lérida (1149). Las comarcas de quicias urbanas es el de las “Comu- dionales, en la confianza de que lle-
Bajo Segre y Bajo Ebro, o “Catalu- nidades de villa y tierra” de garían pronto. El tratado de Tudillén
ña Nueva”, tuvieron una repoblación Calatayud y Daroca, con fueros en –Tudelén o Tudején–, firmado en
desconocida hasta entonces en la 1131 y 1142, un sistema de repobla- 1151, fijaba la frontera futura de tal
región: escasos señoríos, ventajas ción semejante al de los concejos de modo que Valencia, Denia y Murcia
jurídicas y buenos fueros con fran- villa y tierra de Castilla y León, y serían para Aragón y hacia el oeste
quicias y libertades municipales muy que tendrá su continuidad en las serían para Castilla. Las expectativas
amplias. También otros núcleos del comunidades de Albarracín y Teruel, no se cumplieron y el tratado acabó
Bajo Aragón que incorporó Ramón ya en el reinado siguiente. convirtiéndose en papel mojado.
122
C O N Q U I S TA D E F R A G A , L É R I D A Y T O RT O S A
CONFLENT ROSELLÓN
bagorzana
VALLESPIR
i
Puigcerdá
era R
Sort Peralada
La Seo de Urgel CERDAÑA
sa
RIBAGORZA
ogu
PALLARS
re
BESALÚ AMPURIAS
R. N
alla
Roda
aP
Besalú Ampurias
uer
URGEL Berga
g
No
Tremp
R.
Solsona
Vic Gerona
R. Segre OSONA
Monzón
Camarasa
Tamarite Corbins Manresa
Balaguer
(1147) (1126)
R. C
Alcolea Ódena
Cervera
inc
(1141) Tárrega
a
R.
L
Fraga
lo
Mequinenza
br
Siurana Barcelona
eg
(1133) (1134)
at
(1154)
Mequinenza Olérdola
R. Ebro (1149) R. Ebro
Tarragona
Miravet O
(1153) E
N
Tortosa Á
Tortosa R
(1148) R
(1148)
E
D I T
R. Ebro
M E
R
M A
123
COMUNIDADES DE CALATAYUD, DAROCA, TERUEL Y ALBARRACÍN
REINO
DE
NAVARRA
de
Calatayud
Comunidad
REINO de Daroca
DE Molina
CASTILLA
124
TR ATA D OS D E TU D I LL ÉN Y C A ZOLA : EL R EPA RTO
PR EV I S TO D E LA S C ON QU I S TA S
Zaragoza Lérida
R. Ebro
R. Tajo Tortosa
Morella
Albarracín
Peñíscola
Teruel
Cuenca
Alpuente Burriana
R. Turia
REINO DE
Valencia
R. C VALENCIA
a brie
l
R. Júcar
Ayora
Játiva
Chinchilla
Denia
Jijona
Jumilla Calpe
Biar
Alicante
Orihuela
R.
REINO DE
Se
gu
MURCIA MAR
r a
Murcia
MEDITERRÁNEO
Lorca
Cartagena
125
16
I M P E R I O A L M O H A D E ( 11 4 5 - 1 2 1 2 )
Incorporación de la Taifa
de Mallorca (1203)
Incorporación de los dominios
del “Rey Lobo” (1172)
Badajoz
(1150)
Valencia
Córdoba (1172) Mallorca
(1148) (1203)
Sevilla
(1147) Granada
(1156) Murcia
Tánger (1172)
Ceuta
(1146)
Orán
Fez
Meknes (1145) Bujía
(1146) Tremecén (1151)
Setif Bona Túnez
Marrakech (1147) (1145)
BERÉBERES Tebessa Kairuán
Taroudant Tinmel
Conquista de Ifriqiya
Siyilmasa (hacia 1160)
Trípoli
Área de origen de los almohades Conquista del territorio de los (1160)
(1146) Fechas de caída bajo los almohades Hammadíes (hacia 1152)
Territorio conquistado hacia 1145-1146
Territorio conquistado entre 1147 y 1150
Conquistas entre 1150 y 1156
Expansión desde 1160
Área máxima de expansión del imperio almohade
LOS ALMOHADES EN LA Said Ibn Mardanis, llamado “Rey bió en 1203. Los almohades domi-
PENÍNSULA Lobo” por los cristianos, que resis- naron entonces todo Al-Ándalus.
tió los ataques almohades. Entre Los almohades aportaron cambios
Los almohades, que entraron en defecciones, derrotas y cambios de importantes. A los pocos años de su
la península en 1146, ocuparon en bando, lo cierto es que hacia 1165- entrada en la Península habían
1147 Sevilla, en 1148 Córdoba y 1171 fueron desapareciendo los últi- impulsado la yihad contra los reinos
Jaén. Hacia 1150 Badajoz y todo el mos enemigos de los almohades den- cristianos, sobre todo contra el sur
sur portugués estaba en sus manos. tro de la península. La taifa murciana del reino de León –actual Extrema-
En 1153 caía Málaga, en 1156 caía del Rey Lobo caía en 1172. Las dura y Ciudad Rodrigo–. Pero la gue-
Granada y en 1157 Almería, ésta en segundas taifas pueden darse por ter- rra se estaba librando sobre todo en
manos cristianas. Solamente desde minadas por entonces en la penínsu- la Meseta Sur. Bajo el califa Abu
1147 en Levante –con capital en la. La última fue la de Mallorca, con Yusuf Al Mansur derrotaron a los
Murcia–, resistió Muhammad Ibn Abd Allah ibn Ganiya, que sucum- castellanos en Alarcos en 1195, pero
128
LOS ALMOHADES EN LA PENÍNSULA
NAVARRA
LEÓN
CASTILLA ARAGÓN
CATALUÑA
ICO
PORTUGAL
NT
Mallorca
LÁ
Valencia (1203)
AT
(1172)
NO
(1146) Badajoz
(1150) Murcia
OC
Córdoba
Mértola (1172)
(1148)
(1146) Capitales de las segundas taifas
Silves Lorca (fecha de caída bajo los almohades)
Sevilla Jaén
(1146) Granada Dominio almohade hasta 1172
(1147) Dominio bajo Ibn Mardanish
(1156)
Jerez o “Rey Lobo” (1147-1172)
(1146) Málaga Almería bajo Dominio de los Banu Ganiya
Cádiz de Mallorca (1146-1203)
(1153) domino cristiano
Algeciras (1147-1157) Batalla de Alarcos (1195). Victoria
almohade
Extensión del imperio almohade antes
de Las Navas de Tolosa
los cristianos mantuvieron una fuer- Contrasta con este exclusivismo je cristiano. Pero también influyó
te presión militar sobre ellos entre el religioso y confesional la actitud el hecho de que los almohades
Tajo y Sierra Morena. abierta que los almohades mostraron habían sido desplazados en el nor-
Internamente los almohades favo- en el plano intelectual y artístico. El te de África por los meri-níes, una
recieron la integración de Al-Ándalus aristotelismo a través de la obra de dinastía beréber que se hizo con el
en los circuitos comerciales musulma- Averroes fue filosofía aceptada e control del Magreb marroquí des-
nes, muy extensos en África y Medi- impulsada desde el poder y además de 1195 hasta 1468.
terráneo. Una nueva y po-tente mone- se reconocían otras formas del racio- En Al-Ándalus desde 1224 se
da de oro, la llamada “dobla” almohade nalismo, incluso de origen judío, sublevaron varios gobernadores con-
de oro –4,6 g– evidencia el esplendor como el propio pensamiento de Mai- tra los almohades. Desde entonces
financiero y comercial de este imperio mónides. Desde el punto de vista se habla de las “Terceras Taifas”,
almohade, del que Al-Ándalus era una artístico, el arte almohade se carac- nuevo proceso de desagregación
pieza esencial. En general se piensa teriza sobre todo por su simplicidad territorial de Al-Ándalus. Se for-
que fue una época de auge económi- de formas y austeridad. Los dos maron taifas independientes en Bae-
co. La capital de los almohades no fue archiconocidos minaretes o torres de za, Valencia, Niebla o Murcia. Uno
Córdoba sino Sevilla. Sevilla, en su grandiosidad, son de los reyes de taifas, el de Murcia,
Desde su llegada al poder los ejemplo de ello. Ibn Hud, proclamado rival del cali-
almohades destacaron en Al-Ánda- Los almohades, desde el califa fa de Sevilla, logró unificar varios
lus por su intolerancia hacia los no Abu Abd Allah Muammad al-Nasir territorios y expulsar a los almoha-
musulmanes, más acusada que en el –o Miramamolín (1199-1213)–, des de la península en 1231, cuan-
caso de los almorávides. Los mozá- fueron enemigos temibles para los do ya de hecho habían perdido su
rabes ya no existían apenas desde el cristianos hasta que éstos les derro- poder. Ibn Hud, que logró controlar
período almorávide y ahora desapa- taron en la célebre batalla de las todo Al-Ándalus entre el Guadalqui-
recen. Y los muchos judíos que se Navas de Tolosa en 1212. Desde vir y Murcia entre 1228 y 1237, no
habían resistido a huir a la España entonces hasta 1266 el poder pudo impedir que Córdoba cayese en
cristiana lo hacían entonces, cuando musulmán se fue desmoronando en manos cristianas en 1236 ni que se
se les obligó a convertirse. Al-Ándalus. La clave fue el empu- hiciese fuerte Muhammad I en Arjo-
129
na, Guadix y Baza, embrión del siguientes al hundimiento hacia la taifa de Valencia. Sólo tenía por-
futuro reino nazarí. 1231 del último vestigio almohade, venir a mediados del siglo XIII el rei-
Las Terceras Taifas sucumbieron toda Andalucía del Guadalquivir no nazarí de Granada.
rápidamente ante la ofensiva cris- y toda Murcia pasó a manos cris-
tiana. De hecho en las dos décadas tianos. Lo mismo había pasado con
130
17
L O S R E I N O S C R I S T I A N O S E N 11 5 7
(en el momento de la sucesión de Alfonso VII)
REINO DE
NAVARRA
CORONA DE ARAGÓN
Lugo Oviedo Reino de Aragón
Santiago ROSELLÓN
Pamplona
REINO DE LEÓN PALLARS
León Nájera Jaca Seo de Urgel BESALÚ AMPURIAS
Tuy Burgos Logroño Huesca URGEL
Gerona
Tudela
Braga Toro Soria Lérida
Zamora REINO Barcelona
Zaragoza
Oporto DE CASTILLA
Tarragona
REINO DE Salamanca Segovia Molina CORONA DE ARAGÓN
PORTUGAL Cataluña
Ávila Teruel
Coímbra Coria
Toledo
Cuenca
Valencia Mallorca
Cáceres
Lisboa
Évora Badajoz
MUSULMANES
Córdoba
Murcia
Jaén
Fronteras entre estados cristianos
Granada Cartagena
Sevilla Frontera con los musulmanes
Territorios musulmanes
Almería Áreas en litigio
Málaga
Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
132
REYES DE CASTILLA Y LEÓN (1035-1252)
Alfonso V de León = Elvira Sancho III Garcés de Pamplona (Sancho el Mayor)= Munia de Castilla
(999-1028) (1004-1035)
Vermudo III de León Sancha de León = Fernando I de Castilla y de León García de Navarra
(1028-1037) (Castilla: desde 1035/Castilla y León: 1037-1065)
Raimundo de Toulouse = Elvira Teresa Alfonso el Batallador (2) = Urraca = (1) Raimundo de Borgoña Sancho
= (1109-1126) († 1107) († 1108)
Enrique de Lorena (o Borgoña)
Alfonso Henriques
(Primer rey de Portugal) (Casa de Borgoña)
Enrique I de Castilla Berenguela de Castilla = (2) Alfonso IX de León (1) = Teresa de Portugal
Rey de Castilla (1214-1217) Rey de León (1188-1230)
Sancha Dulce
Beatriz de Suabia = (1) Fernando III el Santo Alonso de Molina
(Rey de Castilla: desde 1217)
(Rey de Castilla y León: 1230-1252)
=
Juana de Ponthieu (2)
CONFLICTOS INTERIORES: y ese mismo año contrajo matrimo- sar la frontera castellana. Su enfren-
FERNANDO II Y ALFONSO IX nio con Leonor, hija de Enrique II de tamiento con Portugal le llevó a fun-
DE LEÓN FRENTE A Inglaterra y de Leonor de Aquitania. dar Ledesma y Ciudad Rodrigo en
ALFONSO VIII La dote de Leonor era Gascuña, en 1161. Pero al privar al alfoz de Sala-
DE CASTILLA manos de los Plantagenet, como todo manca de estos territorios, tuvo que
el oeste de Francia entonces. En los someter la rebelión de este último
Durante la minoría de Alfonso 12 años transcurridos entre el comien- concejo, que se enfrentó militar-
VIII dos grandes linajes castellanos, zo del reinado y su proclamación mente al rey en La Valmuza, cerca
o más bien dos constelaciones lina- como joven rey la posición de Cas- de la ciudad, en 1162.
jísticas lideradas por los Castro y los tilla en la península había decaído. Mientras tanto, con la mayoría de
Lara, pugnaron por el control efec- Sancho VI de Navarra había ocupa- edad de Alfonso VIII los equilibrios
tivo del reino. Los Castro acabaron do en 1159 Logroño y entre este año parecieron restablecerse entre los rei-
colaborando con el rey leonés y el y 1162 otras plazas riojanas. Fer- nos de Castilla y León. Desde 1170
niño Alfonso pasó su infancia tras- nando II de León (1158-1188) ocu- el rey castellano aumentaba el pro-
ladándose en varias ocasiones de paba una parte de la frontera entre tagonismo peninsular. Además de
lugar de residencia: Aza, Soria, San León y Castilla en Tierra de Cam- llevar a cabo algunas conquistas,
Esteban de Gormaz, Atienza o Ávi- pos, entraba con sus tropas en Cas- como la de Cuenca en 1177, se ocu-
la. En esta última ciudad pasó unos tilla en 1162 y alentaba rebeliones pó en recuperar militarmente, entre
tres años, poco antes de alcanzar la internas contra Alfonso VIII. 1171 y 1176, La Rioja frente a Nava-
mayoría de edad. Por entonces Pero además el rey leonés, Fer- rra. Acababa aquí una larga historia
comenzó a actuar personalmente, fue nando II, había conseguido vasalla- de vaivenes para esta región. La Rio-
proclamado rey en 1170 en Burgos je de nobles castellanos y pudo aco- ja había pasado en su historia por su
133
FRONTERA AL NO RTE DEL DUERO ENTRE L E Ó N
cía sobre todo en el tramo fronteri-
zo de Tierra de Campos, entre los
Y CASTI LLA ( Tr a t a do de Fre s no - La v a nde r a , 11 8 3 )
ríos Cea y Carrión. Hubo algunos
Saelices del Río enfrentamientos, que se saldaron con
Lugares adjudicados a León
Cea un tratado fronterizo de Medina de
Lugares adjudicados a Castilla Rioseco de 1181, que volvía a la
Mahudes Trianos
Lugares de doble titularidad frontera de Alfonso VII, y, poco des-
Bercianos del Sahagún pués, el de 1183, el tratado de Fres-
Principales castillos leoneses de la frontera
Real Camino no-Lavandera. No resolvía la dispu-
Principales castillos castellanos de la frontera
Galleguillos Grajal
ta fronteriza, pero la aliviaba al
Área fronteriza en litigio entre 1 157 y 1217 menos durante un tiempo.
Frontera en 1183
Melgar de Suso Alfonso VIII mejoraba sus posi-
Melgar ciones también en relación con
Santervás Navarra. En 1200, tras una campaña
Castrofuerte Saelices de Mayorga militar, incorporaba para Castilla
Vega de Ruiponce
Mayorga Álava y Guipúzcoa. Mientras en
Castrobol
la
Gordaliza
Río E
134
LOS REINOS CRISTIANOS EN 1200
REINO DE NAVARRA
CORONA DE ARAGÓN
Lugo Oviedo
Santiago REINO DE ARAGÓN
Pamplona ROSELLÓN
Vitoria La Seo
REINO DE LEÓN de Urgel
León Nájera Jaca AMPURIAS
Ourense
Tuy Burgos Logroño Gerona
Tudela Huesca
Palencia
Braga Toro Lérida
Zamora Valladolid Soria
Zaragoza Barcelona
Oporto REINO DE CASTILLA
Tarragona CORONA
Salamanca Segovia
REINO DE PORTUGAL DE ARAGÓN
Molina
Ávila Teruel CATALUÑA
Coímbra Coria
Toledo Cuenca
ALMOHADES
Córdoba
ALMOHADES Murcia
Jaén Fronteras entre estados cristianos
Granada Cartagena
Sevilla Fronteras musulmanas
Territorios musulmanes
Málaga Almería Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
PA P E L D E L O S C A S T I L L O S E N L A S F R O N T E R A S
( C A S TI LLOS ES TR AT ÉGI C OS D EL R EI N O D E LEÓN EN 11 99 )
a doña Berenguela)
Río
Sahagún Burgos
a
Mayorga
ey
du
Sequillo
a
erg
R ío
Castronuevo
Valladolid
la
Rí
Toro Río D
frente a quien había sido su marido.
ro
D ue A la muerte del pequeño Enrique I
Río Río
Tor fue Berenguela quien dispuso del tro-
m es no. Renunció al mismo en favor de
Ledesma su hijo Fernando III de Castilla
Salamanca
Segovia (1217-1252). Cuando quedó vacan-
Alba de Tormes te el trono leonés en 1230 Fernando
III, que ya llevaba trece años como
rey castellano, heredó asimismo el
Ciudad Rodrigo Ávila trono leonés y pudo conseguir así la
unión dinástica definitiva entre los
Monleón dos reinos.
gón
Ala
Granadilla
Río
Coria
Toledo
Río Tajo
0 20 40 60 80 100 km
135
FRONTERAS DE LE Ó N, PORTUG AL Y CAST ILLA
ENTRE EL T O RM ES Y E L TAJ O
R. Duero Ledesma
R. T
IA or m
R. H AC es Salamanca
R. u ebra AL
M
NA
D RIA
Á gu IMB
ed C OL
a
R. Y
s
Alba de
rme
Tormes
e
REINO
o
ltes
R. T
ADA
C ALZ
Ciudad Rodrigo N
Guarda Ó
oa
E
C
L
R.
EA
E GU
IN
D LA
DE O Béjar
D ALMACIA
N
I
E
R
LA
ón
TIL
ag
Coria Plasencia
AS
Al
PORTUGAL C
DE
R.
I NO
El
ja s
RE
DE
R.
jo
R. Ta
CASTI LLO S D E L A F R O N T E R A C O N P O RT U G AL
EN E L R E IN A D O D E A L F O N S O IX
Freixo de
Espada-a-Cinta
Río Duero
Foz
Águeda
Hinojosa
o a
Castelo
Rodrigo
C
a
u e d
Pinhel
Almeida
Á g
CIUDAD
RODRIGO
GUARDA Castelo
Castelo Bom
Mendo
Vilar Maior
í o
R
í o
Alfayates
R
136
REINO DE CASTILLA HACIA 1217
Santander
S. Vicente
OVIEDO
Laredo Castro-Urdiales
Santillana S. Sebastián Fuenterrabía
TRASMIERA VIZCAYA
ASTURIAS DE Motrico Guetaria
LIÉBANA SANTILLANA Balmaseda
PERNIA GUIPÚZCOA
Medina de Pomar
CAMPOO CASTILLA LA VIEJA Orduña ÁLAVA
Vitoria
Frías
SALDAÑA PAMPLONA
LEÓN Pancorbo Treviño
Herrera Miranda
Saldaña BUREBA
Briviesca Haro
R. Pisuerga
Cea Cerezo Navarrete
Carrión Burgos Belorado Logroño
CARRIÓN
Arlanzó
n Santo Nájera
Sahagún Domingo
C A S T I L L A RIOJA Entrena Calahorra
CAMPOS Belbimbre
Monzón
Arlan Lara
Palencia Palenzuela za
Aguilar
Lerma Yanguas San Pedro
Dueñas TUDELA
Medina de Rioseco a Manrique
Ampudia R. Esguev
INFANTAZGO TARAZONA
Urueña Montejo Ágreda
Valladolid Ucero Soria
Torrelobatón R. Duero Roa Maderuelo
Calatañazor
Aza
ZAMORA Peñafiel
TORO Tiedra Fresno Osma Burgo de Osma ZARAGOZA
Tordesillas Fuentidueña S. Esteban
Portillo Gormaz Berlanga Almazán
Cuéllar Ayllón Caracena
Olmedo
Medina del Campo Íscar E X T R E M A D U R A
Coca Sepúlveda
Atienza Medinaceli
SALAMANCA Arévalo Pedraza
R.
e s Sigüenza
r
Er
Buitrago na
He
esm
R.
a
Alarcón
Iniesta
Alcaraz
137
REINO DE LEÓN HACIA 1230
TRASANCOS
Mondoñedo Ribadeo
Coruña Pravia Avilés
Tineo
Eo
Betanzos MONTENEGRO ASTURIAS Oviedo
ea Llanes
Río
rc Río
PARGA Parga AGUIAR TINEO o Na Na
lón
R í
TRASTÁMARA BABIA
BURON VALDEÓN
Lugo
ABEANCOS Mellid LACIANA
Compostela TRIACASTELLA RIAÑO
SARRIA
Río Be
orma
nesga
G A L I C I A VALCÁRCEL Bembibre
LEMOS Rueda Almanza
bigo
DEZA Villafranca BIERZO León
r
Pontevedra Monforte Ponferrada Molinaseca
Río Ó
Río
VALDEORRAS LEÓN
Ribadavia
Ca
Astorga Mansilla
Orense CABRERA
rr i
Cea
TRIVES Ardón
ón
ño Carrión
Río
Bayona Río Mi Milmanda
Allariz
Coyanza
Mayorga
SANABRIA Laguna de Negrillos CAMPOS
Tuy Puebla Valderas
Roales Bolaños
ia LIMIA Río Tera Palencia
im
Río L Benavente Castroverde a
Braganza Villafrechós rg
la
e
su
ALISTE
Es
y
ue
Pi
Villalpando
Río
Braga LAMPRENA
ra
l de
o
Rí
Valladolid
Va
R í o D u e ro
o
Rí
ga
Zamora Toro
me
Fermoselle
Tá
e ro
Río Du
Medina
o
Rí
Rí
oT
orm
es
Castelo Mellor Ledesma
Salamanca
Castelo Rodrigo
EXTREMADURA LEONESA Alba
es
m
Tor
Almeida
Ciudad
Río
Monleón
oa
Rodrigo
oC
Alfayates Montemayor
Granadilla
Sabugal
T R A N S I E R R A
Coria tar
Talavera Tié
ón Río
Ta
jo
ag
Río
Al
Río
Trujillo
BADAJOZ
Mérida
a
an
di Badajoz
a
Gu
SANABRIA Río
Territorios
a regios
S
Sistemas concejiles
do
138
LA RETAGUARDIA. resultado de esta política en los En las nuevas villas, además de
DEL DUERO siglos XII y XIII, pero debieron fun- las viejas ciudades y los grandes
AL CANTÁBRICO, darse con cautela para no alarmar las concejos meridionales, encontraron
SIGLOS XI-XIII ansias de los grandes señores por los monarcas de León y Castilla nue-
ampliar sus dominios. vos contrapesos y apoyos importan-
Tanto Alfonso VIII de Castilla El proceso de fundación de villas tes frente a los poderes tradiciona-
como Fernando II y Alfonso IX de nuevas consistía en dotar de unas les. Surge por primera vez una
León llevaron en las tierras más ale- autoridades autónomas –alcaldes y organización ligada al mundo ciu-
jadas de la frontera con los moros, jueces– a determinados concejos, dadano pero de manera colectiva.
es decir, del Duero al Cantábrico, una convertidos en capitales de un alfoz. Hay historiadores que han conside-
política semejante desde el punto de Este último, mayor o menor, ya no rado que el reino de Castilla tuvo
vista estratégico. El principal pro- era regio, sino que formaba una uni- reuniones de cortes unos años antes
blema era contener el poder de los dad espacial bajo la capitalidad del que el de León. En concreto se ha
grandes nobles o magnates. Éstos se concejo de la villa. Exenciones, pri- dicho que hubo ciudadanos en la
hallaban vinculados a la corte pero vilegios, dotación de mercados y curia extraordinaria del reino de Cas-
también tenían honores o tenencias, atracción de la población de otros tilla en 1169 y 1187. Pero han sido
es decir el poder delegado para admi- lugares hicieron de las villas nuevas las reuniones de León las que han
nistrar en nombre del rey el territo- prósperos nudos de articulación pasado a la historia como primeras
rio del regalengum adscrito a un cas- comarcal y económica. Como pue- asambleas con ese posible cariz
tillo regio. Estos territorios se lla- de apreciarse tanto en casos del rei- “constituyente”, aunque todavía se
maban alfoces y dependían del rey. no de León como de Castilla, en discute si es correcto o no hablar de
Una buena parte de este realengo ya todas las regiones la territorialidad cortes para el período. En efecto, el
no era continuo, puesto que durante regia de las tenencias y los castillos advenimiento del reinado de Alfon-
siglos los monarcas habían enajenado cedió paso a los nuevos alfoces con- so IX fue acompañado en 1188 con
buena parte de lugares y heredades, y cejiles. Estas fundaciones siguieron una reunión de la curia extraordi-
a menudo concedido la inmunidad, en adelante en reinados posteriores, naria. Magnates y altos dignatarios
favor de los señores eclesiásticos. La sobre todo en Asturias con Alfonso eclesiásticos respaldaban al nuevo
Iglesia disponía en todas estas zonas X, o en el País Vasco incluso des- monarca, algo tradicional. Pero
de una gran influencia política y pués. Los alfoces de las villas se des- como también acudieron a esa reu-
patrimonial. plegaron en los siglos XII-XIV allí nión algunos representantes de las
Tanto los reyes leoneses como los donde el realengo era aún consisten- ciudades del reino, es decir, ciuda-
castellanos, a partir del siglo XII, te, es decir, donde no estaba prácti- danos elegidos por algunas ciudades
comprendieron que la mejor mane- camente todo el espacio señorializa- –“electis civibus ex singulis civita-
ra de contrarrestar estas influencias do. La dotación de alfoces por los tis”–, a modo de un cierto estamen-
de los señores era agrupar el realen- reyes supuso en ocasiones tensiones to ciudadano, se ha pensado que esta
go que aún les quedaba en muchas con los señores de la zona –un ejem- asamblea fue el comienzo de la ins-
comarcas en villas nuevas. Se pasó plo fue el pleito entre el monasterio titución de las Cortes. En ese caso
así del “realengo directo” al “rea- de Oña y la villa de Frías– y la absor- sería la primera reunión de esta natu-
lengo transferido” de los concejos. ción de los antiguos castillos tenen- raleza de toda Europa. Otros auto-
Las llamadas villas reales fueron ciales por los sistemas concejiles. res consideran que hasta Alfonso X
Puebla de
Roboredo Luarca Gozón
M A R C A N T Á B R I C O
(1282) (Puebla de (fines XIII) Carreño
Valdés, 1270) Villaviciosa
Pravia (fines XIII) (Puebla de Maliayo, 1270)
Navia (1230-1252)
o
Siero (1270)
R. Nalón Santander
(1299) Salas (1270) Ribadesella
Allande (1270) S. Vicente de (1187)
(1270) Nava la (1270) la Barquera Santillana
(c. 1262) (1270) Piloña R. S
e l
(1209) Laredo
Tineo Grado OVIEDO R. Llanes (1210) (1200)
(1256) Langreo
ra
R. Mie
R. Se
Na
De
(1338)
igüe
(fines XIII)
són
Castro
bia
(1255)
R.
R.
R.
R.
are
lla
R. A
N
u
R. Tr
an
aja
C
sa
R. S
a
s .A
R. Ibia (1266)
ya
(1269) lle R. D
ena
r eva (XIII o
esa
R. L
CORDILLERA CANTÁBRICA
Reinosa
CORDILLERA CANTÁBRICA (XIII o después)
Villa
bro
139
TERRITORIALIDAD REGIA ENTRE LA CORDILLERA CANTÁBRICA Y EL DUERO:
C E N T R O S T E R R I T O R I A L E S Y F O RTA L E Z A S D E L R E I N O D E L E Ó N E N E L S I G L O X I I
VALDEÓN
40
28 9 14 RIAÑO
BABIA BURÓN
LACIANA ARGÜELLOS 46
R. Lu 5 41
n a
ANCARES 26 6 ALIÓN
31 23
R. Curueña
25 GORDÓN
res
R. Omañ LUNA
ilS
a 2 37
ca
56
rma
R. Torío
R.
An
o
R.
13 TERRITORIO 11
R. P
OMAÑAS V AGUILAR
R. B
IÑAYO
8 BOEZA
50 BERGIDENSE 44 TERRITORIO
er
VALCARCE 22 RUEDA
nesg
ez a LEGIONENSE
R. Bo CEPEDA 57
AGUIAR 39 30
a
1 36 TERRITORIO 43
VALDEORRAS 48 ASTURICENSE
ULVER SOMOZA CEA 21
7 32
42 35
RIBA DE ESLA
CABRERA
ea
38
R. C
R. Cabrera 27
R. E
15 VALDUERNA 24
LOSADA
sla
R. Eria
34
R. Ó
VALDARIA 16 29
rbigo
SANABRIA CARBALLEDA 33
VIDRIALES
45 RIBA DE ESLA
TERA MALGRAD 10 49 53 CAMPOS
17 12
R. Tera 20
R.
Al 51
la
ist 52
s
e
R. E
LAMPREANA lo
55 uil
18 Seq
4 ALISTE 19 R.
3 58
ey
du
era
ld
Va
54 47
R.
R. D
uero
TERRITORIO TERRITORIO
ZAMORA TORO
140
TERRITORIALIDAD DE LAS CIUDADES Y VILLAS ENTRE LA CORDILLERA CANTÁBRICA
Y EL DUERO: SISTEMAS CONCEJILES EN EL REINADO DE ALFONSO IX (1188-1230)
Picos de Europa
Cacabelos Torío
Castroventosa Almanza
Bembibre Bernesga
Villafranca Carracedo
S. Miguel D. Carrizo León Sobarriba Gradefea
Friera Ponferrada Molinaseca Eslonza
Valdoncina Rueda
S. Pedro
Carucedo Mo de Montes Sandoval
nte V. de Mazarife
s Mansilla
Aq
uil Astorga Cea
an
os
Ardón
Teleno
S.ª de Cabrera Valencia Sahagún
a
er
Nogales Laguna
nd
Castañeda
gu
Valderas Mayorga
Se
Puebla de Sanabria
ª
S.
S.ª de la Culebra
Villafrechós
Villafáfila Villalpando
Moreruela
Castrotorafe
Belver
Zamora Toro
Fermoselle Valparaíso
no puede hablarse de auténticas cor- mer antecedente –hubo otras reu- pectivamente–, presenta un valor de
tes en Castilla, pero la reunión leo- niones semejantes en Benavente y hito histórico indiscutible.
nesa de 1188, aunque sea como pri- de nuevo León en 1202 y 1208 res-
141
CENTROS TERRITORIALES Y ALFOCES CONCEJILES ENTRE LOS SIGLOS
XII Y XIV EN LA CASTILLA SEPTENTRIONAL
MEDINA DE POMAR
(1181)
BRIVIESCA Cellórigo
G (1123)
Villadiego UR CEREZO
(1134) V.B Ubierna
Treviño O HARO
PR Mansilla Rodilla
IBRILLOS
Grañón
(1187)
Pedroso
BURGOS VILLAFRANCA-OCA
Castrojeriz ARLANZÓN
zón STO. DOMINGO
lan BELORADO DE LA CALZADA
Ar ón
Río (1116)
Tir
(1207)
MUÑÓ
ja
Río
O
(1209) Sta. Cruz de Juarros
PROV. RIOJA
Río
Bembibre
Astudillo
PALENZUELA (1074)
Ausín LARA (1135)
Sierra de la Demanda
Escuderos Barbadillo Canales
Covarrubias
Sierra de Neila
ga Ar
Rí
er lan
o
Ura
su Covarrubias za
Picos de Urbión
LERMA
Pi
Baltanás Tabladillo
Río
PROV. SORIA
Clunia
PROV. VALLADOLID MIRANDA
Río D
uero FUENTEARMENJIL
ESPEJA
142
DOS EJEMPLOS DE ALFOZ CONCEJIL EN CASTILLA: 1. FRÍAS
rea
e
Río G
25
8
7 23 70
69 51
67
Rí
58
o
12 57 50
Ne
24
la
22 53
61 32
Val
66 21 68
M
52
le d
6 65 30
on
29 35
eT
20
tes
14 5 31
27 36
oba
de
59 9 19 33
Ar
42 37
lina
26 28
ce
4 40
na
11 49 41 34
1 43 44 60
Sie 10 3 Río Ebro
rra 45 38
de 2 46 39
la L FRÍAS
47
la n 18 48
a
64 17 54
OÑA 16
13 s
71 ene
62 15 bar
63
n tes O
Monte Mo
s de P
iedra
lada 55
56
0 5 10 km
Alfoz concejil
Villa cabecera del sistema concejil
Aldeas procedentes de Oña que en 1202 pasaron a la Puebla de Frías a cambio de Mijangos,
incluidas también en el Libro Becerro de las Behetrías
Aldeas en disputa entre Oña y Frías a lo largo del siglo XIII que quedaron para Frías
Aldeas en disputa entre Oña y Frías a lo largo del siglo XIII que quedaron para Oña
Aldeas de Frías incluidas en el Libro Becerro de las Behetrías
Accidentes geográficos y posibles límites a partir del Fuero
Otros lugares
Posible límite del territorio concejil a mediados del siglo XIV
143
DOS EJEMPLOS DE ALFOZ CONCEJIL EN CASTILLA:
2. MIRANDA DE EBRO
a
Río Bayas
orr
Río Ebro Barrera de Caicedo
ad
Barr. Molinillo
Z
Río
Fon rr. de
Ba
ha
B. Billavizana 12 Me rr. d
tec
lid e
Ba
es
13
iñón
z as 2 11 10 9
rm
38 e 31
ab rejo 8
B. de A
C
. o
32 V G 1 4 5
14
3
Fuente Gorejo 15 6 7
39 21 28 MIRANDA 33
18 Ví
22 16 aB
40 19 ilib
30 27 io-
lo 17 Rí
il oZ
ro nc 29 20 ad
o O or
Rí 23 ra
Foncea
25
26 24
42 36 34
37 35 Bc
Rip
Co
a.
Peñuguillos Vía Hormaza vil
arc
Covillas las
Río Ebr
e
o
Fuenceleche
0 5 10 km
Alfoz concejil
Villa cabecera del sistema concejil
Aldeas de la villa citadas en la época foral
Aldeas de la villa conocidas desde la época foral y además documentadas en el Libro
Becerro de las Behetrías
Aldeas de la villa documentadas en el Libro Becerro de las Behetrías
Centro cabecero de antiguo alfoz regio (siglos XI-XII)
Otros lugares
Territorio de los alfoces regios de Cellórigo y Bilibio, según el Fuero, incorporados
a Miranda (parte de Bilibio quedó para Haro)
Posible límite del territorio concejil a mediados del siglo XIV
144
F U N D A C I Ó N D E V I L L A S N U E VA S E N V I Z C AYA Y G U I P Ú Z C O A
[se trata de fundaciones castellanas, salvo San Sebastián, fundada por Sancho VI de Navarra hacia 1180]
Bermeo
Plencia
(1299) (1236) MAR CANTÁBRICO
Fuenterrabía
Lequeitio (1203)
Munguía (1325)
Rigoitia Ondárroa
(1376) (1376) S. Sebastián
(1327) Deba Guetaria
Guernica (1209) Orio (1180)
Portugalete (1343) (1379) Rentería
(1322) Larrabezua (1366) Marquina Motrico (1320)
Bilbao (1355) (1209) Zumaya Zarauz
(1376) Guerricaiz (1347) (1237) Usúrbil
(1300) Hernani
(1366) Elgoibar Cestona (1371) (1256/1380)
Lanestrosa Balmaseda Ermua (1346)
(1287) Miravalles (1383)
(1199)
Durango (1290-1372) Éibar (1346)
(1375) Placencia (1343)
(1290-1372)
Elgueta (1335) Azpeitia
Villaro Acoitia (1310)
(1338) Elorrio (1324) Tolosa
(1356) Bergara
(1268) (1256)
Villarreal
Mondragón (1383) V. Ordizia
(1260) (1256)
Ochandiano
Orduña (1239-1254) Léniz
(1331) Segura
(1229) (1256)
145
18
R E C O N Q U I S TA D E L O S R E I N O S D E L E Ó N Y C A S T I L L A E N 11 5 7 - 1 2 1 2
REINO res ARAGÓN
a
DE LEÓN na
Ág
ug He
Vo R. juña
ue
R. eña Molina
da
aP . Ta ajo
de l cia R R. T
S.ª e Fran REINO
d
la
DE CASTILLA
de Albarracín
R. Monde
go S.ª trella a ta os Teruel
Es eG red Madrid
gón
S.ª de d Zorita
REINO DE S.ª de G tar Huete
Gardunha S.ª Tié he
A la
PORTUGAL Coria R. R. erc (1170) Cuenca
(1142) Alb (1177)
Plasencia R.
Talavera Uclés Moya
sa
jo (1174)
eir
Ta Toledo R.
R. Tur
di
Acántara
ire
an
ia
eA
la
ªC
üe Alarcón
ªd
ig
S.
de
S.
CAMBIOS HISTÓRICOS por privilegio de Alfonso VIII sus dad más poblada del reino de León
EN LOS CONCEJOS fronteras al sur de Guadarrama, a en época de Alfonso IX. En gene-
DEL DUERO AL TAJO costa de Madrid y de otros concejos ral en los concejos de la zona la lle-
de la cuenca del Tajo. En las prime- gada de colonos fue conteniéndose
Después de 1157 los potentes con- ras décadas del siglo XIII acabó cris- tras las grandes oleadas repoblado-
cejos creados al sur del Duero evo- talizando una geografía de grandes ras de época de Alfonso VI. Pero no
lucionaron tanto en su geografía concejos entre Portugal y Soria y faltaron, incluso en el siglo XIII, cam-
administrativa como en la organiza- entre el Duero y el Tajo. Cerca de pañas de repoblación dirigida por los
ción social y del poder. medio centenar de concejos y varios reyes. Una de las más importantes
Se fijaron por escrito los límites miles de lugares poblados conver- tuvo lugar en 1224 en la Tierra de
entre los concejos de villa y tierra, tían esta región entre el Duero y el Alba de Tormes a cargo de Alfonso
algunos todavía muy extensos. En Tajo en una zona singular, de fron- IX, que además permite conocer cuá-
ciertos casos se produjo la segrega- tera, vecinal y sin señoríos. les eran las aldeas de ese alfoz.
ción de algunas partes del alfoz, cre- La repoblación no se frenó de gol- Desde la segunda mitad del siglo
ándose nuevos concejos. Así, del pe. En una ciudad como Salamanca XII detectamos transformaciones
enorme alfoz de Salamanca se des- a los pobladores pioneros que se sociales importantes en estos conce-
gajaron en 1161 los concejos de asentaron en la primera oleada repo- jos de villa y tierra. Los Fueros
Ledesma y Ciudad Rodrigo. En la bladora de Alfonso VI o poco des- Extensos de los siglos XII-XIII mues-
sierra salmantina y en la Transierra pués –conocidos por su procedencia: tran sociedades de frontera ya evo-
los reyes leoneses fundaron Miran- castellanos, toreses, portugaleses...–, lucionadas. Las diferencias funcio-
da del Castañar, Galisteo o Granadi- se unieron un siglo más tarde los nales de la primera sociedad
lla. En la frontera castellana se pro- vecinos nuevos que se instalaron acabaron generando diferencias de
dujeron remodelaciones semejantes. intramuros fruto de “pueblas urba- poder y fortuna importantes. Los
Del concejo de Ávila se segregó Pla- nas” que se hicieron en pleno siglo caballeros de las villas y ciudades
sencia en 1186 o Béjar, hacia 1205- XIII para aumentar la población de la –hijos o nietos de campesinos– aca-
1209. Segovia ampliaba hacia 1208 urbe. Salamanca llegó a ser la ciu- baron ocupando los cargos princi-
148
E V O L U C I Ó N D E L O S T E R R I T O R I O S E N T R E E L D U E R O Y E L TA J O
( S E C T O R O C C I D E N TA L ) . S I T U A C I Ó N H A C I A 1 2 5 0
TORO
ZAMORA TORDESILLAS
OLMEDO
Fermoselle MEDINA
GRANADILLA Escalona
PLASENCIA
Realengo (fecha de repoblación o de segregación (1186)
de la Tierra concejil)
Tierra de Plasencia
Señoríos eclesiásticos y de Orden Militar Talavera
Ciudades
Oropesa
Villas
Otras localidades
Áreas en litigio entre Ávila y Plasencia o Talavera
pales de los concejos –alcaldes, jue- la capital, la villa o ciudad, y sus diente, que con todo siguió siendo
ces– y las propias instituciones veci- poblaciones discriminadas con res- absolutamente minoritario en estas
nales, sobre todo el concilium o pecto a los caballeros de las villas tierras.
asamblea general de vecinos, comen- pero también con respecto a los veci- En general los concejos de villa y
zaron su declive, aún lejos de con- nos de pleno derecho de éstas. Entre tierra entre el Duero y el Tajo fueron
sumarse. Las aldeas que formaban los vecinos de las villas o ciudades, entre 1157 y 1230 más ricos que
los alfoces o “Tierras” y que eran una creciente población de comer- antes, pero también más desiguales,
muy numerosas –más de 300 en ciantes, ruanos, artesanos y menes- jerarquizados y complejos. Especia-
Salamanca o 400 en Ávila, por ejem- trales había hecho variar la fisono- lizaron más sus economías, encua-
plo– quedaron encuadradas en sex- mía de la primera sociedad de dradas en funcionales esquemas
mos o distritos de la Tierra –llama- frontera. También los crecientes agrosilvopastoriles, y alentaron las
dos también cuartos, ochavos, rodas, señoríos de cabildos y obispos cam- actividades netamente urbanas liga-
entre otros–, pero sobre todo fueron biaron la composición social, al das al comercio y los oficios.
subordinadas administrativamente a incrementar el campesinado depen-
149
ALDEAS DE UN CONCEJO DE FRONTERA:
TIERRA DE ALBA DE TORMES HACIA 1224
R. Tormes
SALAMANCA
CA VENTOSA
AN
AM
R.
AL SAN VICENTE ARCONADA
Al
S
ma
DE
r
RA PEÑARANDA LA NAVA
ER GUENDUL
TI
(Peñarandilla)
XIMENGÓMEZ
VECINDADES RABALVOS (Jemingómez) COCA
SOTROBAL
CARPIO MATAMALA
DE ALBA GARCIFERNÁNDEZ RIALMAR
PALOMARES
PERALEDA DOMINGO PEIDREZ TORDILLOS
GONZALOMUÑOZ AMATOS
LAGARTERA
TERRADILLOS MARTINVALERO NUEDRA
YENEGO YENÉGUEZ ALBA MACOTERA
VALDEMIERQUE PEDROSILLO FRESNILLO
VELA VIEYO ALDEASECA
MARTINAMOR TORREJÓN
CASIELAS MATARRALA GALLEGUILLOS
RIBILEYA
VEGUILLAS
VALEROS SANTIAGO DE LA PUEBLA
ALLENDE EL RÍO NABARES
GAJATES
MATAMALA MARTINVICENTE MATAMALA
ENCINAS PORTILLO REVILLA TEYARES
VALDECARROS
BOZIGAS O POCILGAS MUÑO VELID
FEXEME VADILLO
MATAMALIELA (Buenavista) (Ejeme) VALDECARRILLOS STA. MARÍA
CAMPO DEL CAMPO
FERREZUELO MOYASYRGO PEDRAZA (Alfaraz)
BELEÑA GALINSANCHO CASASOLA RIBIELA
SIETEIGLESIAS NAHARRILLOS FELARRODRIGO MELARDOS
(Larrodrigo) GOMEZBLASCO
VERCIMUELLE ANAYA LAS NAVAS CARABIAS
ALDEANOVA A
CARTALA SAN MAMÉS SANCHO ALVORNO IL
ÁV
STA. INÉS GALLEGOS
SAN VELLID XIMENSANCHO E
GALINDABEJA (Sambellin) GARCI PEIDRO D
DERRENGADA (Galindobéjar) CRESPES A
GARCIGRANDE RR
TIE
VALCOVO E
CANTALBERQUE XUHARROS TI
RR
VELAYO CRISTOBALMUÑOZ
GALINDUSTE
ES
mesr
0 5 10 km Límite de sexmos
150
S ALAMANCA. REPOBL A C ION ES D E LOS SIGLOS X I-X II Y X III
Puerta
de Zamora
†40 8 Puerta
de Toro
†39
†28
7
Puerta de 6 †37 †16
Villamayor
5
†7 †22
CASTELLANOS
Puerta
†47 de
†35
Puerta de TORESES Sancti
Spiritus
S. Clemente CIUDAD NUEVA †17
4
†42
†48
†1
9 †33
†26
†27 †3
†34
Puerta de
S. Vicente
BREGANCIANOS
†32 3 †13
†49
10 †12
†41
†25 †4 †5
†23
†38 SERRANOS
FRANCOS Puerta
CIUDAD VIEJA
Puerta de †10 1 †21
†43 de
Santo
S. Lorenzo
2 †29
†2
†11 Tomás
†20 †8
Arroyo de los
Milagros
11 †18
†31
PORTOGALESES
†14 Puerta Puerta de
†30 S. Pablo †9
del Río
†6 †24
MOZÁRABES
†15
Arroyo de
Sto. Domingo
Río †36
Tor
me †19
s
†46 †45
0 100 m
†44
Arrabal de
La Puente
Muralla antigua
Muralla nueva (ss. XII-XIII)
TORESES Grupos de origen correspondientes a la repoblación concejil (finales del s. XI-s. XII).
Ubicación hipotética
Nuevas pueblas urbanas intramuros de la época de Alfonso IX (1188-1230)
Vértices de los tesos de San Vicente, San Cristóbal y San Isidro (teso de las catedrales)
1: Plaza de la catedral y del Azogue Viejo. 2: Antigua fortaleza. 3: Puerta del Sol-Plaza de San
Isidro. 4: Plaza de San Martín-Mercado Nuevo. 5: Puebla de Sancti Spiritus (O. de Santiago. 6:
Puebla de la Orden de San Juan. 7: Puebla de Santa María Magdalena (Orden de Alcántara). 8:
Puebla de la Clerecía, en San Marcos. 9: Puebla de San Cristóbal (O. de San Juan). 10: Puebla
del monasterio de San Vicente. 11: Judería.
†6 Parroquias (relación según Fuero). 1: S. Simón. 2: Sta. María la Mayor (= Catedral). 3: S. Justo. 4:
S. Bartolomé. 5: S. Adrián. 6: S. Gervás. 7: Sto. Tomé. 8: S. Juan del Alcázar. 9: S. Andrés. 10: S.
Pedro. 11: S. Cebrián. 12: S. Facundo. 13: S. Román. 14: Sta. Cruz. 15: S. Nicolás. 16: S. Boal. 17:
S. Julián. 18: S. Millán. 19: S. Miguel. 20: S. Lorenzo. 21: S. Esteban (desde 1256 convento
dominico). 22: Sta. Eulalia (o Sta. Olalla). 23: S. Sebastián. 24: Santiago. 25: S. Isidro. 26: S.
Martín. 27: S. Benito. 28: S. Mateo. 29: S. Salvador. 30: S. Gil. 31: S. Polo. 32: S. Pelayo. 33: S.
Cristóbal. 34: Sto. Domingo. 35: Sta. María de los Caballeros.
Otras iglesias. 36: S. Juan el Blanco (primer convento dominico). 37: S. Juan de Barbalos (S.
Juan Bautista). 38: Monasterio de S. Vicente. 39: Sta. María Magdalena. 40: S. Marcos. 41: S.
Bartolomé de los Apóstoles. 42: S. Blas. 43: Sto. Tomás Cantuariense. 44: Santísima Trinidad.
45: Monasterio de Sta. María de la Vega. 46: S. Esteban de Allende la Puente. 47: Sancti
Spiritus. 48: S. Francisco (probable). 49: Sta. Clara (probable).
151
C O N C E J O S D E V I L L A Y T I E R R A E N T R E E L D U E R O Y E L TA J O
EN EL PRIMER TERCIO DE L SIGLO XIII
Yanguas
S. Pedro Manrique
Magaña
Ágreda
Ucero Soria
Roa
Haza Calatañazor
S. Esteban Osma
Peñafiel Andaluz
Zamora Toro Montejo
Portillo Gormaz Almazán
Maderuelo
Cuéllar Berlanga
Medina Fuentidueña Ayllón Caracena
Íscar Fresno
Olmedo Sepúlveda
o
er
Atienza
Du
Coca Medinaceli
Arévalo Pedraza
Ledesma Sigüenza
Buitrago
Salamanca
Segovia Hita Molina
Alba Uceda
Brihuega
Talamanca
Salvatierra
Ciudad Rodrigo Monleón Ávila Guadalajara
Alcalá
Miranda
Béjar S. Martín V. Madrid
Granadilla Zorita
Alamín (Segovia) Cuenca
Plasencia Escalona Huete
Coria Galisteo
Ocaña
Tajo Uclés
Talavera
Toledo
(O. Santiago)
Alcántara
Trujillo
Cáceres Concejos de villa y tierra de realengo
Señoríos de Orden Militar o Eclesiásticos
Otros
LA CONQUISTA CRISTIANA terciense. Alfonso VIII la apoyó des- tamente efectuadas por los reyes.
DE LA MESETA SUR: de el comienzo. Unos años después Entre 1170-1172 se iniciaba la repo-
DIFICULTADES ANTES nacían las otras grandes órdenes blación de Huete. En 1177 Alfonso
DE 1212 Y PROTAGONISMO militares hispánicas, la Orden de VIII conquistaba Cuenca. El Fuero
DE LAS ÓRDENES MILITARES Santiago, que se institucionaliza de Cuenca, otorgado poco después,
entre 1170 y 1175; y la Orden de fue un modelo en la organización de
Los éxitos militares fueron esca- Alcántara, aprobada por el Papa en grandes alfoces concejiles de rea-
sos entre 1157 y 1212. En el mismo 1177 y que al principio se denomi- lengo y de instituciones municipales
año en que los portugueses tomaban nó de San Julián de Pereiro. Unos muy desarrolladas, en la línea de los
Évora, Fernando II conquistó Alcán- años después pasaba a llamarse concejos del sur del Duero. Los cris-
tara en 1166, pero no pudo extender Alcántara por ser este lugar el cen- tianos ocuparon otras plazas impor-
sus fronteras más al sur del Tajo ni tro de sus dominios. Estas tres fue- tantes como Alarcón en 1184 o Inies-
logró mantener esta plaza. También ron las grandes órdenes militares cas- ta en 1185 o 1186.
durante varias décadas el Tajo fue tellano-leonesas, mientras que en Desde entonces hasta después de
frontera para Alfonso IX. Castilla Aragón actuaron más las de Tierra Las Navas las fronteras, sin embar-
tuvo mayores éxitos. Entre el Tajo y Santa –Santo Sepulcro, San Juan del go, no pudieron avanzar apenas. Y
el Guadiana fue decisiva la inter- Hospital y Temple–, luego se exten- los cristianos sufrieron algunas
vención de la Orden de Calatrava. En dió la de Alfama y, en el futuro, la derrotas severas. La de mayor impac-
1158 se hicieron cargo de la defen- de Montesa –reforzada al desapare- to fue la batalla de Alarcos, en 1195,
sa del castillo de Calatrava, con- cer la del Temple– y en Portugal la en la que las tropas de Al-Mansur
quistada por los cristianos poco de Avís. vencieron a las de Alfonso VIII. El
antes. Sancho III favoreció la insta- Las órdenes militares fueron pro- valle del Tajo incluso fue objeto de
lación de monjes soldados proce- tagonistas de las conquistas de la ataques almohades, pese a estar repo-
dentes de Fitero y de disciplina cis- Meseta sur. Pero otras fueron direc- blado por cristianos.
152
R E C O N Q U I S TA D E L O S R E I N O S D E L E Ó N Y C A S T I L L A E N 1 2 1 2 - 1 2 3 0
ma
rr
Adaja
Sie uña
Área repoblada por Castilla Taj
e Ávila R.
o
Sierra d
R. Jara
Taj
R.
Gredos e
Sierra de
rch
be
tar . Al
R. Alagón Tié R
R.
o a
Taj üel
R. Cig
R.
R. R.
Al m Jú
Cáceres ont ca
(1229) e r
R. Záncara
Valencia de R.
REINO DE PORTUGAL Ca
Alcántara Montánchez ela br
igü iel
(1229) R .C
na R. Júca
a r
Mérida a di a
R . Gu ian
(1230) uad
R. G
Elvas
(1229) Badajoz Almagro n
Capilla aló
(1230) (1226) Salvatierra Jab
Évora R. Alcaraz
Calatrava Montiel (1213)
la Nueva
(1217)
Las Navas
(1212)
Vilches (1212)
Andújar Baños de la Encina
(1225) Baeza
(1227)
ivir Martos
alqu Jódar
uad (1226)
R. G (1229)
153
FRONTERA ENTRE EL REINO DE LEÓN
Y LOS ALMOHADES
a
d
u
e
g
Á
í o
C
o
R
a
Granadilla
Palomero
Almenara
San Juan (Torre
Trevejo de Don Miguel)
n
Salvaleón
g ó
o
g Santa Cruz
a
l a
r A
r o
A í
R
o
í
R
Atalaya de
Pelayo Velidiz
E r j a s
R
R í
a
e
i n
u
G
d e
d a
í o Portezuelo
R z
a
o
Ta j
l
a
Alcántara
C
I M P E R I O
Frontera frente a los almohades
(reinado de Alfonso IX) A L M O H A D E
Frontera entre León y Castilla
Frontera entre León y Portugal
Castillos y fortalezas
LA ACELERACIÓN nobles leoneses. Y varias milicias peraba Alcántara, que había sido
DE LAS CONQUISTAS concejiles. Hubo también participa- escenario de luchas fronterizas. Pero
TRAS LAS NAVAS ción de portugueses. El 16 de julio no hubo progreso consolidado en los
DE TOLOSA (1212-1230) de 1212 los dos ejércitos se enfren- siguientes años por parte del reino
taron en las campas de Las Navas. La de León. La expansión se aceleró,
La batalla de Las Navas de Tolo- derrota almohade aceleró su crisis, sin embargo, al final del reinado de
sa fue decisiva en el devenir de la aunque durante algunas décadas toda- Alfonso IX. Lograba incorporar
guerra secular entre cristianos y vía lograron resistir el empuje de los Cáceres en 1229, así como Montán-
musulmanes. El Papado otorgó a cristianos. Internamente se deshizo chez, Mérida y Badajoz en 1230.
estas campañas una consideración de la unidad andalusí y se formaron las En Castilla Fernando III logró
cruzada. Desde el punto de vista mili- llamada “Terceras Taifas”, de las que extender la frontera hasta Capilla,
tar fue una gran victoria cristiana en unas décadas después tan sólo Gra- Martos, Andújar y Baeza, conquis-
la que participaron tropas de la penín- nada pudo sobrevivir. Pronto los cas- tadas entre 1225 y 1227. Jódar caía
sula. El ejército castellano de Alfon- tellanos tomaron Alcaraz, en 1213, y hacia 1229. El Valle del Guadal-
so VIII era, sin duda, el principal. se centraron el la repoblación del quivir, la gran pieza todavía en pie
Pero también participaron ejércitos extenso Campo de Calatrava desde de Al-Ándalus, quedaba a merced de
de los reyes de Navarra y de Aragón. Calatrava la Nueva, en 1217. los castellanos.
No intervino personalmente el rey La frontera leonesa había avanza-
Alfonso IX de León, pero sí algunos do poco por el sur. En 1214 se recu-
154
19
E X PA N S I Ó N D E L A F R O N T E R A M E R I D I O N A L C O N A L F O N S O I I ( 11 6 2 - 11 9 6 )
Ja lón
Río
Calatayud R. Eb
ro
R. Aguasvivas La Zaida
Belchite R. Ebro
Fayón Ribarroja
Caspe
Samper (1172) Nonaspe Flix
Daroca
Híjar Fabara
tín
ar Maella Mora de Ebro
M
R.
Río
Mazaleón
oca
Bot
Calanda
Horta
ro
Fresneda
R. E b
R.
Molina Arnes
Valderrobres
M
de Aragón
at
Tortosa
añ
Monroyo
a
e
CASTILLA a lop
uad Peñarroya Mas de Barberans
R. G
a
br
Aliaga Amposta
fam
Alfambra Ulldecona
S.ª de Albarracín Cantavieja El Maestrazgo
Cella
Señorío de Albarracín Alcalá de S.ª de Gúdar
(1169) Teruel la Selva
(1171) Mosqueruela
Villel
R. Mij
(1203)
ares
R.
Camarena (1203)
RÁ
ER
(1202)
ED
M
156
FA S ES D E EX PA N S I ÓN Y R EPOBLA C I ÓN A R A GON ES A S
[ el p erím et ro s e co rres p o n d e co n la a ct u a l reg ió n ]
Siresa
ego
a
nc
R. Gáll
era
rzana
Ci
Jaca R.
És
Ara
R.
R.
Ribago
agón Ainsa
R. Ar
ra
Ejea
R. Nogue
Huesca
R. Barbastro
Eb
ro
Monzón
R. Cinca
Tarazona
Zaragoza R.
n
Eb Fraga
ló
ro
Ja
R.
Calatayud
Belchite
Caspe
tín
e
op
ar
M
Daroca
al
R.
ad
Alcañiz
u
R. G
oca
R. Jil
R.
Eb
ro
Teruel
Albarracín Mora de Rubielos
uria
R.
R. T
M
ija
re
s
Manzanera
Núcleo originario
Expansión en época de Ramiro I (1035-1063)
Expansión en época de Sancho Ramírez (1063-1094)
Expansión en época de Pedro I (1094-1104)
Expansión en época de Alfonso el Batallador (1104-1134)
Expansión en época de Ramón Berenguer IV (1137-1162)
Áreas fluctuantes: reconquistadas/perdidas/recuperadas (Alfonso el Batallador/Ramón
Berenguer/Alfonso II)
Expansión en época de Alfonso II (1162-1196)
Expansión en época de Pedro II (1196-1213)
Señorío de Albarracín (1169-1284)
157
LA C OR ON A D E A R A GÓN Y S U S V EC I N OS EN ÉPOC A D E A L FON S O I I ( 1162- 1196)
Toulouse
Beziers
REINO DE FRANCIA
BEARN
CARCASONA Agde
Carcasona Narbona
Pau Saint Bertrans Foix
Tarbes de Comminges
Saint Lizier RASÉS
COMMINGES ROSELLÓN (1172)
BIGORRE VALLE COSERANS
DE ARÁN Perpiñán
PALLARS
SOBIRA
AMPURIAS
Sort
NAVARRA PALLARS La Seo de Ugel
JUSSA Castellón de Ampurias
Huesca URGEL
Tremp Gerona
Tudela Vic
Balaguer Manresa
Tarazona
Zaragoza CATALUÑA
Lérida
ARAGÓN Barcelona
Calatayud
Híjar
Tarragona
Daroca
O
Molina Montalbán
Tortosa
Á NE
de Aragón Morella
IT ERR
ED
MAR M
Olocau
Alabarracín
REINO (indep.) Teruel
DE
CASTILLA REINO DE LOS BANU GANIYA
Moya Ciudad de Mallorca
Alpuente
Morviedro
Alarcón Valencia
VALENCIA
Alzira
Játiva Denia Ibiza
Albacete
el de Urgel, aliado casi siempre, pero dad política coincidente con lo que realidad común prolongada desde el
no integrado, en los dominios del hoy podría entenderse como tal, sino pasado altomedieval, por lo que qui-
Conde de Barcelona ni en la corona a una realidad naciente o reconoci- zá no sea propio otorgar a la región,
de Aragón por el momento. De modo da expresamente en esa época. Tenía como suele hacerse, un sentido uni-
que esa realidad de Catalonia que bases lingüísticas y culturales con- tario, invariable en el tiempo, estáti-
mencionan las fuentes a mediados gruentes y seculares, pero carecía de co y previamente consolidado antes
del XII no hace referencia a una enti- trayectoria histórica como estado y del siglo XII.
158
G R A N D E S FA S E S D E L A R E P O B L A C I Ó N E N T I E R R A S C ATA L A N A S
C. DE ROSELLÓN R. Agli
VALLE
DE ARÁN Millars
Villafranca . Tet
C. DEL R
ALTO PALLARS Formiguera de Conflent Elna
St. Miguel
ANDORRA CAPCIR de Cuixá c Argelers
Ñ A C ONFLENT R . Te
DA
C ER Llívia Arles del Tec
Puigcerdá
S
IA
UR
La Seo RIPOLLÉS
MP
C. DEL de Urgel BESALÚ Peralada
EA
BAJO C. DE Ripoll
C. D
PALLARS URGEL
St. Joan Besalú
BERGUEDÁ de les
Abadeses R. Ter
Berga AUSONA
Gerona
R. Llobregat
Tamarite Solsona Sta. Maria Vic Castellar
de Litera de l’Estany de la Selva
Monzón Sta. Creu de Horta
Camarasa
Balaguer CONDADO DE GERONA
Almenar Manresa
e
gr
Cervera
Se
R.
Caldes de Montbui
ARAGÓN Vilagrassa
R.
Cin
Tárrega
Lérida Pierola Tarrasa
ca
RÁ
BE
B AR Vallbona BARC
ELON
A
DE C. DE
A
NC Sarral Cabrera
CU
E
Font-Rubí
Vimbodi PENEDÉS S. Feliu de Llobregat
Montblanc Barcelona
Mequinenza Vilanova Poblet
R. Ebro Stes. Creus Villafranca
La Morera Siurana del Penedés Viladecans
Alforja
Monasterio
Tarragona
Arzobispado
Obispado
Zonas repobladas en los siglos VIII y IX
Zonas repobladas desde 870-897
Tortosa Zonas repobladas en los siglos X y XI
Zonas repobladas entre 1097 y 1131
Zonas repobladas desde 1147-1153
Límite de la llamada “Cataluña Nueva”
Aparte de ello, hay que destacar den considerar o no plenamente cuajó la servidumbre campesina y la
por entonces el agudo contraste Cataluña Nueva–, que se incorpora- organización del espacio fue menos
sociopolítico que se daba entre los ron a principios del siglo XII, y sobre espontánea, ya que se planeó desde
viejos condados y áreas de la “Cata- todo de las comarcas del Bajo Segre el poder regio-condal. Los principa-
luña Vieja” o septentrional y la y Bajo Ebro, que se añadieron a les beneficiarios de esta situación de
“Cataluña Nueva” o más reciente, mediados del siglo. En todas estas la Cataluña Nueva fueron los nuevos
que no estaba sometida a los domi- áreas el poder regio de los reyes-con- monasterios cistercienses –Poblet,
nadores tradicionales y el feudalis- des de Barcelona tuvo el control del Santes Creus–, las ciudades de Tor-
mo rural típico del norte. Sería el territorio siempre, no se extendió la tosa, Tarragona y Lérida y, en algu-
caso de las comarcas del Bajo Urgel implantación de los señoríos feuda- nas comarcas, las órdenes del Tem-
y de la Cuenca de Barberá –se pue- les típicos del norte de la región, no ple y San Juan del Hospital.
159
AMP L I AC I ONE S DE LA CO RO NA DE A RA GÓ N (11 62-1213)
VELAI
Carlat
GASCUÑA (inglesa) CARLADES GAVALDÀ
VIVARAIS Die
Cahors Rodez Mende
AGÉN Viviers
ROUERGUE Aurenja FORCALQUIER
Agén Millau
Moissac Forcalquier
ALBÍ MILLAU Aviñón MARQUESADO Niza
MELGUEIL NIMES DE PROVENZA
TOULOUSE Albí Tarascón
Nimes CONDADO DE PROVENZA
Batalla de Muret MONTPELLIER Arles
Toulouse BEZIERS Montpellier
BEARN AGDE
CARCASONABeziers Marsella
Carcasona Agde
Pau Tarbes
COMINGES Narbona
BIGORRE COUSERANS RASES NARBONA
NAVARRA Saint Bertrand Foix
FOIX
PALLARS Perpiñán
Jaca
PALLARS SOBIRA
JUSSA Sort Llívia AMPURIAS
La Seo de Urgel Castellón de Ampurias
Huesca Tremp
URGEL Gerona Herencia recibida por Alfonso II: Reino de Aragón
Vic y condados adscritos al Casal de Barcelona
Tarazona Balaguer
Lérida Conquistas meridionales de Alfonso II (1162-1196)
Zaragoza Manresa Incorporado por herencia en 1172: Rosellón
Calatayud Barcelona Incorporado en 1175: Arán (no definitivamente)
Daroca Caspe Incorporado por herencia en 1192: Pallars
Tarragona Heredados por Alfonso II desde 1166: condado
de Provenza, vizcondados de Millau, Carlat, Gavalda
Tortosa
CASTILLA Condados vasallos o aliados de la Corona de Aragón:
Bearn, Bigorre, vizcondado de Carcasona…
Señorío de Montpellier, por la esposa de Pedro
Albarracín Teruel el Católico (1204)
Dominios del Conde de Toulouse
Vasallos del Conde de Toulouse
ALMOHADES
su reinado algunos pasaron a otras en París entre 1180 y 1223, si bien fort llevó contra los albigenses o
manos por herencia, en particular en sus primeros años no alcanzaba a cátaros. Los seguidores de esta here-
Provenza. Pedro II no sólo aseguró tener control efectivo al sur del Maci- jía contaban con el apoyo de muchos
lealtades de algunos condes o viz- zo Central. Los estados del Midi y señores banales del Midi, a su vez
condes franceses sino que contó con la Corona de Aragón pudieron con- vasallos del Conde de Toulouse o de
aliados prácticamente en todos ellos, verger en su enemistad con la Fran- Pedro II de Aragón. Este último aca-
entre miembros de la nobleza feudal. cia regia, no sólo por el peso de ésta, bó convertido en la cabeza de los
En 1204, gracias a su matrimonio sino por compartir lenguas afines, enemigos del rey de Francia. Se enta-
con María de Montpellier, señora de algunas similitudes culturales, mode- bló una guerra del rey francés con-
esa ciudad, pudo además disponer de los de feudalidad y unos mismos tra las fuerzas de Toulouse y de Ara-
la que era la urbe más grande del intereses comerciales frente a fran- gón. La victoria se decantó del lado
Midi junto con Toulouse. ceses del norte y a las repúblicas ita- francés en 1213 en Muret. Allí moría
Tanto el Condado de Toulouse lianas. el propio Pedro II, se esfumaba la
como la Corona de Aragón llevaban De haber salido adelante una posibilidad de un estado mediterrá-
a cabo competitivas estrategias pa- unión de algún tipo entre el Conda- neo dirigido desde Barcelona y se
ralelas –herencia, política matrimo- do de Toulouse y la Corona de Ara- extinguía también el vasallaje hacia
nial, vasallaje– sobre los estados veci- gón, con sus respectivos aliados, se la Corona aragonesa de los conda-
nos más débiles. Pero, ante el acecho hubiese establecido un poderoso dos al norte de los Pirineos. Empe-
del reino de Francia, evolucionaron estado catalano-occitano en el Medi- zando por Toulouse, todo el Midi
hasta la alianza, sellada entre ambos terráneo occidental que hubiese cam- empezaría a girar en torno a una
por la unión matrimonial de Rai- biado la historia de Europa. No fue potente monarquía regida desde
mundo VI con una hermana de Pedro así, sino que al final Francia logró París, que además desde 1214 logró
II. Poco a poco los intereses de salir airosa de su conflicto con las recuperar para Francia los principa-
ambos convergieron frente al rey de potencias meridionales. La ocasión dos franceses occidentales, desde
Francia, Felipe II Augusto. Este perfecta fue la cruzada que, desde Normandía a Aquitania, a costa del
monarca, del que nominalmente el 1209 y con apoyo papal, el rey de rey de Inglaterra.
conde de Toulouse era vasallo, reinó Francia a través de Simón de Mon-
160
20
V I ZCAYA
n
R, Bidasoa
vió
GUI P ÚZ COA
er
Durango
N
orra
Za d
R.
ar
az
Vitoria
al
l
ca
rati
eS
ÁL AVA
on
d
R. I
Pamplona
eR
R. Eb Salinas
V.
ro
d
V.
Leguín
a
Miranda de Ebro R. E g a
R. Arg
Leire
Estella Artajona Lumbier
Marañón
Briviesca Tafalla Sangüesa Jaca
Haro
Sos
Grañón Logroño Petilla S. Juan de la Peña
Nájera Olite
Falces
ragón
a
R. A Uncastillo
gu
Ocón Calahorra
R.
Quel Milagro
illa
Arnedo Sádaba A R A G Ó N
Na Autol
jer
Valtierra
R. CAMEROS Alfaro Arguedas
s
co
R.
R. Gállego
da
Ejea
Ci
Eb
C A S T I L L A Fitero
R.
r ba
ro
Tudela
R. A
162
F R O N T E R A D E N AVA R R A C O N C A S T I L L A H A C I A 1 2 0 0
Fuenterrabía
Guetaria S. Sebastián
VIZCAYA Icíar
R.
Bid
CARRANZA GUIPÚZCOA Arano
asoa
Durango
ión
R.
Zuburruti Irurita
rv
Ar
Ne
ro b
R. De
a
iti
R.
a
Escoriaza Roncesvalles
Ataun
Orduña Cibarrutia Ausa
R. Z
CASTILLA LA VIEJA ador
ra
s
ti
ya
Erro
Ira
a
Badaya
R. B
Mendoza Vitoria
R.
VALDEGOVIA Morillas Salvatierra rg a
Armentia ÁLAVA R. A Pamplona
Salinas de Añana Legín
Lantarón Puebla de Arganzón Iranzo Noaín Urroz
Frías TREVIÑO R . Arlucea Atauri
PIEDRALADA Treviño Ay u Antoñana Puente la Reina
Sta. Gadea Ayuelas Portilla da Sta. Cruz de Estella
Corres
Ameyugo Campezo
Miranda
R. E
Marañón Irache Artajona
Pancorbo Cellórigo Salinillas de Buradón Aibar
Buradón Aguilar
ga
Bilibio Los arcos Sangüesa
BUREBA Laguardia Lárraga Tafalla
ón Haro
Briviesca Ti r S. Vicente Viana
R. de Sonsierra Miranda
Cerezo Olite
Ibrillos Grañón Cenicero Mendavia Lerín
Nájera LogroñoAgoncillo
Sto. Domingo Lodosa Carcastillo
Belorado Navarrete RIOJA Falces n
Alcanadre ragó
illa
Caparroso
za
Murillo Funes
Le
Ojacastro Calahorra
R. N
San Millán
Quel Ribarrojas Milagro
Torrecilla
o s Arnedo Autol Valtierra
CAMEROS Herce
c
Alfaro
da
Arguedas
Ci
Enciso
R.
Corella
Frontera anterior (en 1179) Tudején Tudela
Frontera entre Castilla y Navarra en 1200
Fitero Fontellas
Territorios que pasaron a Castilla en 1200 tras las campañas de Alfonso VIII
Lugares que Alfonso VIII prometió devolver a Navarra en el testamento de 1204 (sin efecto)
COLABORACIÓN MILITAR te. Sancho el Fuerte, como un ban- Ródenas, Jorcas, Olocau o Linares
NAVARRA EN LAS LUCHAS quero sui generis, prestó enormes en 1214, Abengalbón en 1215,
CONTRA LOS MUSULMANES cantidades a los señores de Alba- Sádaba, Grisén o Los Fayos entre
rracín y, sobre todo, a Pedro II el 1219 y 1221. Estos castillos forma-
Sancho VII el Fuerte no pudo Católico o luego Jaime I de Aragón. ron una especie de ruta discontinua,
ampliar Navarra a costa de Al-Ánda- Las cantidades no le fueron devuel- a través de Aragón, desde la que
lus, pues el bloqueo territorial era tas, en líneas generales, pero fue poder acometer campañas más
ya irreversible hacia el sur, pero sí compensado con castillos. En algu- importantes en Levante, donde
participó en la guerra contra el infiel na ocasión completó esta política esperaba Navarra obtener impor-
de otras maneras. con la compra directa. Entre 1209 tantes compensaciones territoriales
En primer lugar mediante la y 1212 estos castillos estaban en la o de otro tipo. El límite fue la Sie-
adquisición por compras o prendas retaguardia cristiana, cerca de la rra del Maestrazgo, más que Alba-
por deudas de diversas plazas o propia Navarra. Pero luego se le die- rracín, ya que éste era independiente
tenencias de castillos situados estra- ron también más al sur: Chodes y en manos de la familia navarra de
tégicamente entre el reino y Levan- Zalatamor en 1213, Burbáguena, los Azagra. De 1231 datan los cas-
163
A J U S T E S T E R R I T O R I A L E S Y A C T I V I D A D E X T E R N A D E N AVA R R A E N É P O C A
D E S A N C H O E L F U E R T E ( 11 9 4 - 1 2 3 4 )
LABOURD Bayona
S. Sebastián Fuenterrabía Lescar
BEARN Pau
VIZCAYA Tarbes
S. Juan Pie Olorón
Durango de Puerto COMMINGES FOIX
GUIPÚZCOA BIGORRE
NAVARRA Foix
Vitoria
ÁLAVA Pamplona Javier Escó
Estella (1217) (1209)
Sangüesa Jaca PALLARS
Laguardia ANDORRA
Olite Petilla
Logroño (1209) La Seo
RIBAGORZA de Urgel
Calahorra
URGEL
Huesca
Tudela Barbastro
Tarazona Gallur
Los Fayos (1209) Monzón
(1221) Trasmoz
Soria (1212)
REINO Ferrera Grisén Lérida
(1219) Zaragoza CORONA
(1231)
DE
DE Chodes y
Calatayud Zalatamor ARAGÓN
(1213)
CASTILLA
Medinaceli Daroca Alcañiz
Burbáguena
(1214) Tortosa
Molina Castellote
Ródenas Aliaga
(1214) Jorcas Morella
(1214) Olocau
(1214)
SEÑORÍO Albarracín Gúdar
DE
Frontera navarra ALBARRACÍN Linares
Dominio navarro en Ultrapuertos
Teruel
Abengalbón
Territorios perdidos en 1200 en favor (1215)
de Castilla Castelfabid
(1231) Ademuz
Señorío de Albarracín (independiente)
(1231) Peña de Arañón
Castillos cedidos al rey navarro en prenda
por Pedro II de Aragón en 1209 y 1212
(1215)
Enclaves bajo control de Sancho VII
de Navarra en el sur de Aragón tras su
participación en Las Navas (1212) MUSULMANES
Dominios musulmanes
Valencia
tillos de Castelfabib y Ademuz. Y reyes, gracias a una hacienda muy que redundó en la riqueza general del
ese mismo año adquiría varios cas- saneada y una fiscalidad avanzada, reino y, particularmente, de su monar-
tillos fronterizos –entre ellos, Ferre- que le permitieron disfrutar de bue- quía.
ra y Peña Redonda– en la comarca nos ingresos. No es ajeno a este En tercer lugar, Sancho VII parti-
del Moncayo. esplendor financiero de la corona cipó de forma directa en la empresa
En segundo lugar intervino finan- navarra el hecho de haber fomentado de Las Navas de 1212, interviniendo
cieramente en la guerra contra los los intercambios comerciales, la red en la guerra al igual que los demás
musulmanes, prestando dinero a otros de villas nuevas y las franquicias, algo reyes hispánicos.
164
INCORPORACIÓN de Champaña. Con estas alianzas se haciendo bascular a Navarra hacia la
DE ULTRAPUERTOS inmiscuyó en la zona de Ultrapuer- órbita francesa. Aunque Sancho VII,
Y ORIENTACIÓN FRANCESA tos, obteniendo la plaza de Saint Jean que no tenía descendencia legítima,
DEL REINO Pied de Port. Esto ocurría hacia hubiese preferido otras soluciones,
1193. Su sucesor Sancho VII amplió este hecho hizo que a su muerte en
Bloqueada territorialmente por el la influencia. Obtuvo el vasallaje de 1234 heredara el trono su sobrino, el
sur, Navarra se expandió por el nor- los señores de la zona, hasta conver- hijo de su hermana Blanca y del
te, más allá de los Pirineos. Sancho tir esta región de Ultrapuertos, lla- marido de ésta, Teobaldo de Cham-
VI había casado a sus hijas Beren- mada así desde el punto de vista paña. Este hijo llevaría el nombre de
guela y Blanca con dos importantes navarro, en un territorio más del rei- Teobaldo también, y sería el primer
personajes, Ricardo Corazón de León no, aunque con su propio mosaico rey navarro de esa dinastía de origen
–no olvidemos que el Imperio Ange- territorial interno. Además de ello, champañés.
vino llegaba a Guyena– y Teobaldo el propio problema sucesorio acabó
165
21
C A M I N O D E S A N T I A G O . C A M I N O F R A N C É S Y R U TA S S E C U N D A R I A S
Dunkerke
Boulogne Colonia
Camino principal Tournai Lieja Aquisgrán
Rutas secundarias Arras Namur
a
León Principales núcleos S. Quintín el
os
is e . M
Amiens R. O R
R.
Ruan Laon Tréveris
M
os
Caen
a
R. Sena
Soissons Reims Verdún
Metz
Mont-Saint-Michel Chalon-sur-Marne
París R.
Chartres Ma Toul
Étampes rn a
Le Mans Troyes
Orleans Saint Bonoit
Angers Cléry Auxerre Langres
O C É A N O Tours Blois
Nantes R. Loira Sainte MaureLa Charité
Vezelay
Digione Besançon
Bourges
Saint Amand Nevers
na Valence
Santiago de Cahors
d
R. Ró
lza mi
Olorón Marsella
oje
Ca mist
Fr ión
Ca . Do
R. Miño
ó
Sto
jer
Ca
Órbigo
teg Bur
Jaca Puigcerdá
ina
Sahagún Perpiñán
Re
e la
Braga
Or
ent
Ripoll
Lo
Braganza
de
Oporto Gerona
Zamora Zaragoza Montserrat
an
R. Duero
Ju
R. Ebro
neo
Barcelona
rrá
edite
Salamanca Tarragona
Tortosa Mar M
168
C A M I N O D E S A N T I A G O . L O C A L I D A D E S D E L I T I N E R A R I O P R I N C I PA L
Grandas Oviedo
Castañeda
Boente
Ferreiro Lugo Mieres del Camino S. Jean Pied de Port
SANTIAGO DE Viscarret RONCESVALLES
Palas de Rey Cacabelos Arbas Puente la Reina
COMPOSTELA Leboreiro
Triacastela Itero del Santo Domingo Vitoria Larrasoaña
Portomarín Molinaseca de la Calzada Sta. Cristina
Samos Burgo Ranero Castillo
Estella Pamplona
Barbadelo Cebreiro Miranda Leire Canfranc
Villafranca León Briviesca Tiermas
Pontevedra Mansilla de las Mulas Los Arcos
Ponferrada Belorado Irache Sangüesa
Carrión de Jaca
los Condes Tardajos Atapuerca Logroño
Rabanal del Camino Sahagún Nájera Monreal
Burgos S. Millán de la Cogolla
Tuy Frómista
Astorga Puente Redecilla del Camino
de Órbigo Castrojeriz
Villafranca-Montes de Oca
Hornillos del Camino
Braga
Sedes episcopales
Iglesias y monasterios más importantes
Burgos Caminos y localidades de la “Guía del peregrino”
Oporto
Otras localidades y centros religiosos favorecidos
0 50 100 km por el Camino de Santiago
169
DESARROLLO URBANO DE COMPOSTELA: 1. SIGLO IX
Vía de Bergantiños
Pinario
Vía de Lugo
Pomar de Santiago
Campo
Iglesia y Monasterio de la Corticela A
Monasterio de Antealtares
Basílica de Santiago
Canónica
B
Vilar
Lovio
Souto de Santiago
abad sobre la ciudad. En Compos- Historia Compostelana narra episo- la calle. Otro conato en 1136 en la
tela la revuelta tuvo lugar en 1116 y dios de extrema violencia de los ciudad puede considerarse menor.
1117 contra el arzobispo Gelmírez, revoltosos contra el prelado y contra
señor de la ciudad. La casi coetánea la propia reina Urraca, golpeada en
170
DESARROLLO URBANO DE COMPOSTELA: 2. SIGLO X
Vía de Bergantiños
Monasterio de S. Martín Pinario Iglesia de S. Miguel da Cisterna
Vía de Lugo
Pomar de Santiago
Iglesia de S. Benito
Iglesia y Monasterio de la Corticela
Monasterio de Antealtares
Vía de Finisterre y Mahía
Souto de Santiago
171
DESARROLLO URBANO DE COMPOSTELA: 3. SIGLO XI
Vía de Bergantiños
S. Martín Pinario Iglesia de S. Miguel da Cisterna
Vía de Lugo
Pomar de Santiago
Iglesia de S. Benito
Canónica
Basílica de Santiago
Souto de Santiago
172
DESARROLLO URBANO DE COMPOSTELA: 4. SIGLO XII
Rúa de Algara Tapiceiros e texedores
Vía de Bergantiños
Plaza del Paraíso S. Martín Pinario Rúa de S. Pedro (concheiros)
(mercadillo de peregrinos)
Taboas das Cambeas
Vía de Lugo
Rúa Maior
Caldereiros
San Fiz
Rúa de Villar
Ferreiros
Caldeireiros
Rúa Nueva
Zapateiros
ALDEAS Y SOCIEDADES 85% de la población podría consi- dad campesina rara vez estaba agru-
CAMPESINAS EN LOS derarse rural en la Plena Edad pada, sino que solía consistir en
REINOS CRISTIANOS Media. minúsculas parcelas, muy a menudo
Las familias campesinas, base de de una obrada o menos en el caso de
A pesar de la existencia de ejes la economía, se estructuraban en tor- tierras cerealistas. La relación del
como el del Camino de Santiago y, no a la unión conyugal y la descen- campesinado con los medios de pro-
en general, el crecimiento urbano dencia. Las explotaciones familiares ducción se estructuraba a partir de
que tuvo lugar en el período, la vida variaban según zonas y situaciones, tres recursos básicos: la posesión
rural siguió siendo la preponderan- oscilando entre 5 y 25 hectáreas campesina en los casos de campesi-
te en términos cuantitativos. El 80- como superficie media. Pero la here- nado dependiente; la propiedad par-
173
T I E R R A D E Á V I L A . C O M A R C A S D E L N O RT E , Z O N A S L L A N A S
a
oltoy
o
Rí
Menos de 1.000 metros
DE ARÉVALO
Río Ad
Río V
De 1.000 a 1.500 metros
PARADINAS
lillo
Más de 1.500 metros
aja
a
r
oA
ev
Rí
PEÑARANDA a
orañ EL BOHODÓN
La M
NARROS DE VILLANUEVA
CASTILLO
es
Rí jar
o Pa
TIERRA Al
ma
DE ALBA TIERRA
SALMORAL r
s
lbo
sA
Río Adaja
e Ojo
rr ad
Sie
1657 ro
lva
Río Mag
o Az á
1727 mp
Ávila Ca
añá
v ila
eÁ
n
el a d
u VADILLO rra
rez Sie
S er
La VILLANUEVA
GÁLLEGOS lés 10 km
Río Adaja Amb
VILLATORO Valle
EL MIRÓN BONILLA
A P R O V E C H A M I E N T O E N L A S A L D E A S M E D I E VA L E S D E L N O R T E
DE TIERRA DE ÁVILA: ALDEA DE LA MORAÑA
Caserío del lugar Ribera: comunales y comunales de ribera, otros prados comunales
Exidos y cercados: prados cercados, eras, huertos Cultivos
(alrededores de la aldea) Viñas
Huertos Cereales
Eras, solares Erías y áreas laborables no cultivadas
Prados cercados, herrenes Áreas forestales y pastos comunes
Prados y sotos particulares Encinares
Dehesa boyal Robledales
Pinares
T I E R R A D E Á V I L A . C O M A R C A S M O N TA Ñ O S A S D E L S U R
(mapa general de los lugares del sexmo de Santiago)
Urraca-Miguel
a
Bernuy arram
ÁVILA Guad
1727 S. Pedro de Linares
n
a Sto. Tomé de Linares S.ª Malagó
ja
Ad
vila Río Tornadizos
VADILLO a de Á Salobral 1642
rr Fresno LAS NAVAS
Sie Aldea del Moro
Niharra Gemuño Valbellido
Aldea Rey Niño Navalperal
S. Gregorio s
VILLATORO Río Adaja Belchos Mironcillo Cabañas viso El Herradón
Solosancho Pol
Bandadas Gemiguel S. Bartolomé de Pinares
Narros P. Robledillo Sotalvo Riofrío
Escalonilla Santa Cruz Helipar
La Hija Villaviciosa Palacio
(Atizadero) Quintanar VALDEMAQUEDA
MENGAMUÑOZ Hoyo de P.
rota Quemada
Navacarros
Río Gaznata
Ser 2294
2146 Paramera Villalba
1913 Villarejo Navalpuerco El Barraco
Navandrinal Navalmoral
Molinillo Navalmulo Quejigal
Navalacruz Cebreros
Navarredondilla
Lastra Burguillo
Navaquesera Burgohondo Navaluenga Seroles
Navalosa El Tiemblo
Navatalgordo
Hoyo Casero che
Alber
Río Navalvado
Rí
Navarrevisca 1959 oA
2003 SAN MARTÍN DE lb
er
VALDEIGLESIAS ch
e
tal
rien
2024 sO LA ADRADA
2188 edo
Gr
Caserío del lugar Ribera: comunales y comunales de ribera, otros prados comunales
Exidos y cercados: prados cercados, eras, huertos Cultivos
Huertos Viñas
Eras, solares Cereales
Prados cercados, herrenes Erías y áreas laborables no cultivadas
Prados y sotos particulares Áreas forestales y pastos comunes
Dehesa boyal Encinares
Robledales
Pinares
ticular, de tipo alodial, en la que el teñas y en las alquerías toledanas. A función de la capacidad tributaria de
campesino disponía de tierras, viñas, menudo las explotaciones campesi- los labradores, percibidos como fore-
prados y ganado propios; y los apro- nas eran a la vez unidades de tribu- ros o pecheros, es decir, contribu-
vechamientos comunales, pastos y tación, que hacían referencia al hogar yentes. Las situaciones de mayor pre-
bosques adonde llevar el ganado. En –fogaje– o a la cantidad media que cariedad se daban en el tercio norte.
familias de propietarios, lo habitual solía trabajar una familia, como los El campesino pagaba una renta en
era el reparto de bienes por heren- casales en el noroeste o los solares reconocimiento al señor, llamada
cia, salvo en ciertos sitios, como la o yuguerías en Castilla. infurción en Castilla; pagaba yanta-
Cataluña Vieja, donde se impuso la Aparte de los montes intercomu- res o conduchos; nuncio, mañería y
prelación del hijo mayor, el llamado nales, cada aldea solía tener su tér- huesas, por derechos a heredar o a
hereu. mino propio, en que tenían lugar casarse; caloñas o multas judiciales,
Durante los siglos plenomedieva- diversos aprovechamientos. Depen- entre otras cargas.
les los campesinos se enfrentaron a diendo de la topografía los cultivos El caso más extremo de depen-
retos semejantes en todas partes: eran más o menos abundantes en dencia era el de los remensas de la
ellos protagonizaron el ciclo de comparación con las áreas incultas Cataluña Vieja, que vivían en man-
expansión agraria de los siglos XI al y forestales. Baste como ejemplo sos ajenos y estaban sometidos a los
XIII, que les llevó a completar la red comparar dos aldeas de la Tierra de “malos usos”: intestia, que hacía
histórica de poblamiento rural, uti- Ávila típicas: cualquiera de las aldeas revertir al señor bienes del payés que
lizar mejores técnicas de cultivo y situadas en llanuras cerealistas del moría sin testamento, un tercio o
mejor utillaje, así como a ampliar norte por un lado; y, por otro, una más; cugucia, carga por mujer adúl-
el espacio laborable. En todas par- aldea cualquiera de las comarcas tera, que otorgaba bienes del matri-
tes se llevaron a cabo roturaciones montañosas de la mitad sur de la Tie- monio al señor; arsina, o compensa-
frecuentes que cambiaron la faz de rra. Puede comprobarse que la dis- ción por incendio; exorquia, o
muchas comarcas, que en estos tribución del terrazgo se basaba en derechos sobre bienes del campesi-
siglos y en muchos casos pasaron de los mismos ingredientes, pero las no que no dejaba descendencia; fir-
ser áreas forestales a campiñas proporciones y usos del espacio ma de spoli, tributo derivado de la
humanizadas, con prados cuidados agrario variaban sensiblemente. autorización para la dote; y remensa,
y campos de cultivo muy diversifi- Característica general del mundo que obligaba al campesino a comprar
cados. rural fue el gran potencial de las su libertad si quería abandonar el
El poblamiento campesino podía comunidades campesinas, que tuvie- manso. A ello se unía el ius male-
ser disperso o concentrado, en este ron consistencia jurídica, política y tractandi, por el que el señor podía
caso en aldeas, que eran las unida- de negociación con los poderes exis- castigar físicamente a sus siervos.
des de encuadramiento preponde- tentes. Pero la situación sociojurídi- Por el contrario, al sur del Duero
rante en casi todas partes. No obs- ca de los campesinos era tan varia- y al sur del Ebro el campesinado
tante, a veces se encuentran casas da como en la Alta Edad Media. Las gozó de mejor condición social y
aisladas y tierras concentradas, como categorías sociales seguían siendo jurídica, a menudo fue libre y pro-
ocurre en el mas catalán y en otras las mismas, si bien cada vez fueron pietario, o por lo menos agrícola-
partes, como en las quintanas nor- abriéndose nuevas clasificaciones en mente independiente.
DOMINIOS DE LA IGLESIA Y ciarse, a título de ejemplo, a propó- campesinos de este tipo se llamaban
DE LA NOBLEZA SEÑORIAL sito de los grandes monasterios de la solariegos. Una modalidad diferen-
(CORONA DE CASTILLA) actual Cantabria. Los dominios más te, y sobre todo típica de la vieja
antiguos fueron los de los benedic- Castilla, fue la de behetría¸ fruto de
Las formas señoriales eran de tinos y las catedrales, que existían en la extrema fragmentación de los
varios tipos. Fijémonos tan sólo en la Alta Edad Media. En los siglos XII derechos de propiedad en esta
la Corona de Castilla, que puede ser- y XIII se sumaron los dominios de los región. La clave de esta forma era la
vir de muestra. Los señoríos más cistercienses y premonstratenses y, compartimentación de derechos entre
antiguos eran generalmente los de la ya con otro carácter menos dominial muchos nobles, que participaban
Iglesia, es decir, grandes monaste- y más tardío, las posesiones con- como naturales y diviseros en varios
rios y dominios episcopales y cate- ventuales o de otras instituciones lugares, aunque uno de ellos podía
dralicios. Eran denominados aba- religiosas. ser el principal del lugar. En esta for-
dengo. Eran asimismo los que se Algo semejante ocurría con los ma de señorío la situación del cam-
apoyaban más en la propiedad de la señoríos de los magnates. Consis- pesinado era mejor que en el sola-
tierra, aunque en la Plena Edad tían en cortes o solares habitados por riego, ya que el labrador de behetría
Media aumentaron las cargas de tipo campesinos que pagaban la renta no dependía de un señor de forma
jurisdiccional. La zona de mayor des- feudal, pero eran dispersos, de modo aislada, y además estaba regulado
pliegue de los señoríos de este tipo que una misma familia de la aristo- por la jurisdicción regia, no señorial.
fue el tercio norte. Generalmente cracia laica a menudo acumulaba La behetría no tuvo sólo como
concentraban sus bienes en determi- muchos de estos bienes pero en beneficiarios a los miembros de la
nadas comarcas, como puede apre- diversos sitios. Los señoríos y los alta nobleza magnaticia, sino tam-
176
bién a los infanzones, o baja noble- res. Son los llamados linajes de la infantado–, cuando no se había con-
za de sangre. Normalmente los infan- “vieja nobleza” de los siglos XII y vertido en villazgos concejiles, era
zones no tenían muchos derechos XIII: Castro y Lara eran los grandes otra forma de señorío, ya que los que
fuera de una pequeña localidad o entramados nobiliarios castellanos. habitaban sus aldeas pagaban cargas
pocas parroquias. Por ello, al anali- Pero la constelación altonobiliaria semejantes aunque bajo las autori-
zar por ejemplo el patrimonio de un consistía en un ramillete de apellidos dades del rey. Se libraban de esta
personaje como el de Rodrigo Díaz de linaje tanto en las regiones del rei- condición si quedaban encuadrados
de Vivar, el Cid, se comprueba que no de León –Asturias, Galicia y el en las nuevas villas y sus estatutos
más que el de un infanzón, como a propio León– como en Castilla, del vecinales.
veces se ha dicho, su señorío se ase- Cantábrico al Duero: los López de También fue específico el señorío
mejaba más bien al de un magnate. Haro, Vela, Ansúrez, Alfonso, Núñez, de Orden Militar. En estos maes-
De hecho se documenta en las arras Ponce de Cabrera, Guzmán, Muñiz, trazgos o encomiendas el señor era
de 1074 que tenía posesiones –o divi- Fróilaz, Flaínez, Muñoz, Vermúdez, el maestre, pero el régimen jurídico
sas– en más de 40 lugares, que de- Menéndez, Osorio. En el siglo XIII dependía de la zona y de la situación.
bían de ser aproximadamente la se solía llamar ricoshombres a los Donde más extensos fueron los
mitad de sus propiedades. miembros de esta vieja nobleza. dominios de las órdenes militares fue
El Cid sería de un escalón medio Aunque parezca paradójico, el entre el Tajo, el Guadiana y el Alto
o medio alto de la nobleza. Claro está realengo –si estaba cedido a miem- Guadalquivir.
que en ésta había escalones superio- bros de la familia real se llamaba
San Emeterio
MORTERA
Santander
San Vicente de la Barquera CUDEYO Escalante Puerto
Cobreces OREÑA
Queveda CAMARGO Laredo
Santillana
VAL DE SAN VICENTE CAVIEDES LLOREDO ARAS LIENDO Castro
PIÉLAGOS Colindres Urdiales
VALDÁLIGA CABEZÓN
R. Asón
ASTURIAS CASTAÑEDA
Castañeda TRASMIERA GURIEZO
DE SANTILLANA
Rí
Ampuero
Río Miera
ja
oN
Pas
SÁMANO
Sa
PEÑARRUBIA
R.
an
CAYÓN
Rí
Río
D
sa
Río Besaya
ev
RUESGA
a
177
PATRIMONIO DE RODRIGO DÍAZ DE VIVAR (EL CID)
CONTENIDO EN LA CARTA DE ARRAS A JIMENA EN 1074
alfoz de Sedano
Moradillo de Sedano
Quintanaloma
AMAYA
alfoz de La Piedra
Villanueva de Puerta Fuencivil La Nuez de Arriba
Hormicedo Icedo Pesquerinos
Cernillos Boada
Quintanalaín Villahernando
Melgosa
alfoz de Vallecillo
Villadiego
alfoz de Espinosilla
Treviño VILLADIEGO
alfoz de Hormaza Ubierna
Villahizán de Treviño La Nuez alfoz de Ubierna
Villamayor de Treviño de Abajo Rioseras
Manciles alfoz de
és
Somanciles Quintanaortuño
ull
Valdegato Mansilla
Br
Vivar
Río Hormazuelas
Río
alfoz de na
rbel
i er
Castrojeriz Ub
Río U
Grajera o
Rí BURGOS
Quintanilla de Morales
uerga
Yudego
Río Arlan
Río Pis
zón
CASTROJERIZ Cabia
Monasterio de Cayuela
S. Cebrián
a
dr
Mazuelo
O
o
Rí
ón
nz
rla
oA
Rí Villahizán de Muñó
a
erg
alfoz de
Pisu
Muñó
Río
PALENZUELA
Madrigal
TORQUEMADA Escobar
alfoz de Escuderos
alfoz de Palenzuela
Villambistia Villahoz Santa Cecilia
Río Arlanza
Valdecañas de Abajo
LERMA
CIUDADES, MERCADOS Los caballeros villanos fueron sec- grandes. En estos siglos se comen-
Y OFICIOS tores típicos de los concejos de villa zó a formar el patriciado urbano,
y tierra del centro peninsular. Tanto cuya composición varió según los
La población de las ciudades y en estas villas como en otras ciuda- lugares: los caballeros villanos y de
villas gozaba de mejor condición des determinadas élites de omes bue- frontera fueron el componente esen-
jurídica, ligada al estatuto de liber- nos, burgenses y propietarios de cial en las ciudades del Duero hacia
tad y derechos como vecinos. Social- inmuebles eran el contrapunto de las el sur; la burguesía comercial en ciu-
mente, en las villas y ciudades pro- noblezas rurales. Sectores ricos, tales dades como Barcelona o Burgos;
liferaron en estos siglos grupos como mercaderes o negociatores, dueños de tiendas y propietarios
nuevos que acabaron dirigiéndolas. sólo existieron en las ciudades más medios en León, Valladolid o Tole-
178
DESARROLLO URBANO DE BURGOS (SIGLOS IX-XIII
16
13 Cerro del Castillo
Pta. de 15
1 San Esteban
Puerta de S. Martín
6 14 B. de San Pta. de 10
1
2 B. de San Llorente San
6 Esteban Gil
9
Rí
8
oV
B. de San
3 7
3
en
Nicolás
Nicolas
a
4 5 Cantarranas
B. de Santa
B. de Santa María
Mar
Maríía y Santiago 11
Gadea 6 7 Pta. de
12
2 8 5 4
San Juan
Puebla de San Juan
18
Puerta de Pta.
Santa Gadea Pta. de
de Sta.
Sta. María
María Pta. de San Pablo
Río Arlanzón
19 17
Arrabal de
la Vega
do. Unos y otros fueron acompasan- primeros consejos municipales –el gencia entre ferias y rutas basadas
do su hegemonía urbana a los cam- Consell de Cent en Barcelona, por en el comercio regional e interre-
bios en las instituciones urbanas: ejemplo, creado en 1265– mientras gional: camino de Santiago, por
declive progresivo de las asambleas los inferiores, que eran menestrales, supuesto, pero también Tierra de
de vecinos, control por las élites de quedaron fuera del poder. Campos, ruta del Duero, ciudades y
los cargos municipales ejecutivos y En general a la altura de 1300 las villas del Tajo, mercados del Bajo
judiciales, jueces, alcaldes y jura- asambleas abiertas de vecinos urba- Aragón, ciudades del Ebro, rutas
dos. En general en Castilla los diri- nos, allí donde habían tenido fuerza, comerciales del Penedés y de la
gentes urbanos fueron amoldados a cedían paso a cámaras reducidas de Cataluña nueva, entre otras. En el
vivir como caballeros privilegiados, gobernantes –jurados, cónsules, caso catalán, además de los circui-
los más beneficiados en el siglo XIII paers, consellers, alcaldes–, aunque tos locales y regionales, el comercio
por las reformas municipales que les todavía seguía habiendo elecciones marítimo se convirtió en prioridad y
reservaron los cargos. Sólo en el nor- anuales. condicionante muy potente de la
te de Castilla el privilegio jurídico Paradójicamente, la generaliza- geoestrategia misma de la Corona de
no fue determinante para acceder a ción de los mercados diarios en las Aragón en el Mediterráneo.
los cargos municipales. ciudades y de los mercados semana- Pero el comercio no eclipsa la
En la Corona de Aragón el estatu- les en las villas medias no impidió importancia de la vida urbana. Se
to jurídico diferenciado de la socie- que se siguiesen fundando y fomen- asiste en estos siglos a un creci-
dad urbana en “manos”, mayor, media tando ferias y mercados anuales, que miento espectacular de la población
o baja, clarificó el orden social urba- también crecieron en estos siglos. y del tejido urbanos. Aunque hay
no. Sólo los primeros entraron en los Parece que se asiste a una conver- muchas situaciones locales diferen-
179
PAMPLONA Y LOS BURGOS URBANOS
tes, el éxodo rural fue el paradigma La población urbana, y es válido Jaén o Palma de Mallorca. Aparte de
demográfico que explica el fuerte para las tres coronas, podría suponer estas recientes adquisiciones por los
crecimiento de la población urbana. a finales del siglo XIII el 15% de la cristianos, destacarían en Castilla por
Entre el año 1000 y 1300 la pobla- población total, incluyendo la pobla- encima de ese umbral Toledo y, algo
ción urbana se multiplicó por tres o ción de las villas cabeceras con mer- ligeramente por debajo, Salamanca
por cuatro, duplicando casi su tasa cado. Es una cifra algo distante, cier- o Segovia. Lérida y Gerona roza-
de crecimiento a la de la población tamente, de la de los países más rían la cifra. Y Zaragoza, Valencia y
total, que también creció en estos urbanizados, como Italia o Flandes, Barcelona superaban ampliamente
siglos. Sobre esto último los datos que la doblarían, pero es acorde con esos 10.000 habitantes. La última es
son poco fiables. Se supone que la situación de Alemania o Francia. la única de la España cristiana que,
hacia 1300 la población total de la En cualquier caso, muy superior a la entre 1300 y 1350, época de mayor
Corona de Castilla ascendería a 3 de Inglaterra. En los reinos hispáni- auge, podría aproximarse a los
millones, en cálculos muy conser- cos las ciudades que superarían hacia 40.000 que, según parámetros al uso,
vadores. La población de la Corona 1300 los 10.000 habitantes, llama- permite hablar de ciudad “gigante”.
de Aragón se estima en cerca de das por ello “grandes” según los No obstante, la importancia polí-
900.000, más de la mitad de ellos estándares aceptados para la Edad tica, económica, territorial, cultural
en Cataluña. Y la de Navarra se Media, serían muy pocas: Sevilla, y eclesiástica del mundo urbano
calcula entre 100.000 y 150.000, que hereda la condición de capital siempre fue mucho más grande de la
como mucho. almohade muy poblada, Córdoba, que correspondería a la proporción
180
ESPACIO URBANO DEL CABILDO CATEDRALICIO Y ESPACIO COMERCIAL
(SALAMANCA EN LOS ss. XIII-XV)
Puerta de
Zamora
Puerta de
Toro
Puerta de
Villamayor 1
18
6
7
3 17
2 9 Puerta de
Sancti Spiritus
Puerta de
8
4
San Clemente 5
21
16 11
15 4
Puerta de 10
San Vicente
12
3
20
14 19
5
4
14
Puerta de
13
1 Puerta de
S. Lorenzo Santo Tomás
Arroyo de
2
los Milagros
Puerta Puerta de
Puerta del del Río Santo Pablo
Alcázar
Alcazar
Río Tormes
Arroyo de
Santo Domingo
Río Tormes
Áreas mercantiles, vías de importancia económica y 1 Plaza de la Catedral y del Azogue Viejo (auge en los siglos XII-XIII)
2
calles de artesanos y comerciantes
Antigua fortaleza, pequeño mercado junto a la judería
Principales espacios de mercado
a Concentración alta (a) y muy alta (b) de áreas 3 Plaza de San Isidro o Azogue Nuevo (auge en el siglo XIV)
b eclesiásticas y de propiedades del cabildo
(al margen de las parroquias) 4 Plaza del Mercado de San Martín (auge en el siglo XV)
181
demográfica. Esta influencia de lo XIII se aprecia cómo el mercado, ini- dían activamente en buena medida
urbano fue sobre todo muy destaca- cialmente próximo a la ciudad vieja, en los oficios ya en el siglo XIII. Por
da ya en los siglos XII y XIII. fue desplazándose a las partes más el contrario, en León y Castilla los
El desarrollo urbanístico dio tam- recientes y ocupando nuevas plazas y grandes monarcas del siglo XIII
bién un auténtico vuelco. Se ve, por calles. Con todo, este espacio urbano –Alfonso IX, Fernando III y sobre
ejemplo, de ciudades como Burgos de mercado coexistió con el potente todo Alfonso X– impidieron la for-
o Pamplona. Se aprecia en estas ciu- control eclesiástico del suelo y de los mación de monopolios gremiales,
dades que, a las partes más antiguas edificios, más rotundo en la parte vie- sustrajeron a las cofradías de oficio
formadas en la Alta Edad Media, en ja y despojado ya de su protagonismo las competencias de justicia y de
el primer caso un modesto burgo cas- en las áreas de población reciente. En control profesional, permitieron el
tral y en el segundo una civitas, se estas últimas la vida comercial, arte- trabajo libre y aseguraron con medi-
sumaron durante los siglos XI y XII sanal y de servicios se convirtió en la das sobre precios y salarios que el
nuevos barrios o burgos. Durante el principal referencia. abastecimiento de la población, el
siglo XIII tuvieron lugar las últimas Al tiempo que las ciudades crecían acceso a las materias primas o la
ampliaciones, generalmente barrios en los siglos XI al XIII lo hacían los venta de productos se sometiesen a
externos a las murallas –luego aco- oficios artesanales. Al final del perí- la normativa y jurisdicción de los
gidos por ellas si se ampliaban–, nue- odo los oficios existían como estruc- concejos y la propia monarquía. Las
vos arrabales y áreas para acoger a turas productivas. Sin embargo, los cortes del reinado de Alfonso X fue-
la población recién llegada. gremios –bajo la forma de cofradí- ron las más celosas a la hora de
Quizá los espacios más caracterís- as de oficio– no gozaron en todas ceñir el mundo de los oficios a los
ticos de las ciudades tras el período de partes de un reconocimiento equi- condicionamientos de los poderes
crecimiento fue el auge de las áreas parable al de otras partes de Europa. públicos, a costa del corporativismo
comerciales y de mercado. En una ciu- En las ciudades de la Corona de Ara- empresarial y gremial.
dad como Salamanca desde el siglo gón las cofradías gremiales sí inci-
182
22
Conquista y repoblación
de Baleares y Valencia
LAS CONQUISTAS su autonomía, que duró algunas de 1238, tras asedio de unos meses,
DE JAIME I décadas. En 1235 eran conquistadas Jaime I entraba en Valencia. En los
Ibiza y Formentera. años siguientes fueron cayendo loca-
Jaime I preparó desde 1228 una La conquista de la región valen- lidades importantes, entre ellas Denia
flota que desembarcó en septiembre ciana fue mucho más complicada. Se y Játiva en 1244, si bien hubo esta
del año siguiente en Mallorca. El había iniciado antes de la expedición última resistencia hasta 1248. El tra-
último día de 1229 los cristianos a Baleares. Desde la frontera arago- tado de Almizra o Campo de Mirra
entraban en la ciudad de Mallorca, nesa se fueron incorporando a partir de 1244 fijaba en Biar y área de Jijo-
tras un duro asedio, que fue seguido de 1225 algunos enclaves. Destaca na el límite meridional del reino. La
de un saqueo de varios meses. Lue- la conquista de Morella a finales toma de Biar en 1245 parecía refren-
go, los repartimientos favorecieron de 1231 o principios de 1232. Ese dar el acuerdo. Ahí acababa la expan-
claramente a los recién llegados, impulso parece haber partido de los sión de Jaime I, ya que más al sur las
muchos musulmanes huyeron y otros afanes expansionistas de la nobleza tierras pertenecían a Castilla, bien
quedaron bajo una dependencia per- aragonesa. Pero desde la conquista por la capitulación del reino de Mur-
sonal muy notable. La isla, salvo de Burriana y de Peñíscola, en 1233, cia en 1243, bien por las conquistas
resistencias en la sierra, era tomada el interés por la región se hizo exten- efectuadas por los cristianos, como
en 1231. sivo a los mercaderes y ciudadanos la toma de Alicante en 1248. No obs-
Desde la toma de Mallorca no catalanes, deseosos de ampliar el tante Jaime I aprovechará más tarde
había dificultad para la incorpora- control de la costa y el comercio las sublevaciones de mudéjares de
ción de las restantes islas del archi- levantino. esa zona del Bajo Segura para inter-
piélago. Menorca capituló en 1231 El escollo principal en la región venir militarmente en 1265-1266,
sin resistencia significativa y consi- valenciana fue, sin duda, el de la pro- expulsar a muchos musulmanes y
guiendo con su actitud un respeto a pia capital del Turia. El 9 de octubre llevar colonos de su reino.
Castillo
de Pollença
Pollença
Sierra de Tramuntana
Castillo de Alaró
Buñola Inca Capdepera
Sineu
Mallorca
(1229)
Manacor
Mediterráneo
Castillo de Ibiza
(1235)
Territorio conquistado en la primera estancia de Jaime I (sep. de 1229-oct. de 1230)
Territorio conquistado en la segunda estancia (julio de 1231)
Área de gran resistencia musulmana, conquistada en mayo-junio de 1232
Conquista de Ibiza en agosto de 1235
184
CONQUISTA DE VALENCIA POR JAIME I
CORONA CATALUÑA
DE ARAGÓN Tortosa
R. Ebro
Olocau Benifasar
REINO DE ARAGÓN Morella (1208)
(1232)
Ares
(1232)
Teruel Peñíscola
R.
(1233)
Mi
jar
es
Ademuz
(1210) Bejís
(1229)
Jérica Burriana
CORONA Alpuente (1233)
Segorbe
DE
CASTILLA Almenara
Murviedro
Elda
Alicante
ó
lop
ina
R. V
EL REPARTO km2, además con bastante población, to de la región hubo que recurrir a
DE LAS TIERRAS sobre todo en las vegas de los ríos. otras fórmulas. La empleada en casi
En la parte norte o castellonense se toda la región de Valencia, adaptada
La incorporación de Baleares y empezó otorgando señoríos a las a las exigencias de ocupar un terri-
Valencia a la Corona de Aragón órdenes militares, sobre todo el Tem- torio habitado por mudéjares y ya
suponía una ampliación considera- ple y San Juan. Eran tierras poco organizado, fue la de los reparti-
ble. En el caso del reino de Valencia pobladas y que habían funcionado mientos. El libro del repartimiento
concretamente se trataba de 23.000 como frontera militar. Pero en el res- de Valencia muestra la realidad de la
185
REPARTIMIENTO DE MALLORCA TRAS LA CONQUISTA CRISTIANA
Pollença
Pollença
POLLENÇA
Escorca Beniatro
Bini MUNTANYES
Almalux
SOLLER
Selva Buger
INCA
VALLDEMOSA Alaró Inca Biniagmira
MURO
Bunyola
BUNYOLA ARTÁ Beniavir
CANARROSA Salma
Sineu Arlany Beniguinena
repoblación. En el conjunto del rei- lengo y los modelos forales, los Furs, En Mallorca, repoblada por cata-
no, no hubo grandes concesiones, siguieron aquí el modelo de la ciu- lanes mayoritariamente –cerca del
sino señoríos muy pequeños y dis- dad de Valencia, que protegía los 50% de los repobladores–, la mitad
persos, sobre todo de la capital hacia intereses de los propietarios, los ciu- de las tierras para repartir fueron para
el norte y en el interior del reino. dadanos y el rey. Hecho peculiar del el rey, la llamada parte real, aunque
También se entregaron alodios. La paisaje social y agrario valenciano luego en esta parte se señorializaron
propiedad quedó bastante repartida fue la gran pervivencia de población zonas en favor de vasallos regios y
y fragmentada entre caballeros y mudéjar, que en muchas comarcas órdenes militares. De la otra mitad
peones. Entre los beneficiarios cabe era la población mayoritaria. Los se hicieron cuatro partes, que se otor-
hablar de dos grandes zonas. En el mudéjares protagonizaron revueltas garon a los tres principales magna-
norte y el interior predominó la en 1247 y 1249. Otras intentonas se tes que protagonizaron la conquista
influencia nobiliar y aragonesa y produjeron en 1258 y en 1275. A y al obispo de Barcelona. Estos cua-
muchos lugares tuvieron costumbres pesar de que fueron objeto de repre- tro organizaron la llegada de colo-
y colonos de esta procedencia. En sión, la mayor parte permaneció des- nos y el mantenimiento de los mudé-
cambio, en el litoral, poblado por pués en la región, ocupados prefe- jares, de manera que coexistieron
catalanes, y en las grandes villas rea- rentemente en los trabajos del campo grandes y pequeñas explotaciones en
les la principal referencia fue el rea- y la huerta. la isla.
186
23
Conquista y repoblación
de la baja Extremadura,
Andalucía bética y Murcia.
Nacimiento del reino nazarí de Granada
LAS CAMPAÑAS REINO DE MURCIA (1243-1264)
DE FERNANDO III
Y ALFONSO X (1230-1264)
r
ca
Jú
Poco después de unir las coronas
o
Rí
de León y Castilla, Fernando III Albacete Játiva
comenzaba una imparable expansión
y
co
Chinchilla Almansa
Al
a costa de unos debilitados y desu- Denia
de
o
Rí
nidos musulmanes. Una tras otra, las
principales plazas de la Meseta Sur REINO DE VALENCIA
Villena
y Alto Guadalquivir fueron cayendo: Biar
CASTILLA Yecla Jijona
Cazorla y Quesada en 1231, Trujillo Hellín
Río
en 1233, Úbeda en ese mismo año, Mu
ndo Jumilla Elda Busot
Medellín, Alange y Magacela en
Río V
1234. Las disputas internas entre los Alicante
Cieza
inalo
musulmanes hicieron que el rey Elche
musulmán de Murcia, Ibn Hud, se
pó
Caravaca
Río
hiciera desde 1228 a 1236 con bue- Mula
S
Orihuela
eg
u
na parte de Al-Ándalus. Ibn Hud
ra
REINO DE Murcia tín
aceptará hacia 1234 comprar con el le n
MURCIA a da
pago de tributos a Fernando III la Gu
garantía de no intervención en sus Río Principales ciudades
dominios. Pero las disputas internas Límite del Reino de Murcia
ocasionaron enfrentamientos civiles en 1244
Lorca Cartagena
en Córdoba, lo que aprovechó Fer- Zona que pasó al reino de
nando III para conquistar la ciudad Valencia en 1304
en 1236. Poco después fueron cayen- Áreas en disputa entre
do, por conquista o capitulación, Granada y Castilla
GRANADA
sobre todo en 1240, Estepa, Porcu-
na, Marchena, Écija o Morón, entre
otras. Hubo avances en la comarca
del Júcar. Albacete, entonces una En 1243 Fernando III y su hijo Hud hijo, que permitió al rey de Cas-
aldea dada al alfoz de Alarcón, era Alfonso conseguían un tratado con tilla controlar con guarniciones gran
conquistado en 1241. el rey de Murcia, Muhammad Ibn parte del territorio murciano y del
he
Frontera aproximada en 1230
ar erc Lugar y fecha de conquista o comienzos de la repoblación
gó n Tiét Alb
Ala Río Río
Río cristiana
Río Tajo Conquistas del reinado de Fernando III
Cáceres
(1229) Conquistas del reinado de Alfonso X
REINO DE
Río S Conquistas del reinado de Sancho IV
ajo
Trujillo
PORTUGAL alor Rí
oT
(1233) oG
Conquistas portuguesas
Rí
ua
Mérida dia
Medellín (1234) n a
(1230)
Elvas (1229) Badajoz
(1230) Magacela (1234) CORONA DE REINO DE
Río
Évora Alange (1234) Zalamea (1235) CASTILLA Jabalón VALENCIA
na dia
Rí Hornachos (1235)
oS Gahete (1236)
Gua
M o r e n a
ad ila
Ard Zafra (1241)
S i e r r a
o Segura (1242)
Río
Río
Vejer (1264)
Tarifa (1292)
188
JURISDICCIONES DE LA ANDALUCÍA BÉTICA
AL FINAL DEL REINADO DE ALFONSO X
na
d ia
ua
Belalcázar
G
Moura
Río
Pedroche R. Guadalimar
ndula
Serpa Santisteban
Segura
Andújar
R. Já
Nódar Aracena Montoro Baeza
diel
Gibraleón Ge Bedmar
n
Martos
R. Ti
Alcalá G. Lucena
uiv
Menor
Marchena
alq
Osuna Estepa
Utrera
uad
Granada
Lebrija
R. G
Morón
Arcos REINO NAZARÍ DE GRANADA
Jerez
Málaga Almería
Pto. de Santa María R. Guadalete
Cádiz Realengo
Medina
Sidonia Áreas en disputa entre Portugal y Castilla
Señorío laico
Algeciras Señorío eclesiástico
Señorío de Orden Militar:
Orden de Santiago
Orden de Alcántara
Orden de San Juan
Orden de Calatrava
Bajo Segura, que quedaba en régi- conquistaba Jaén y conseguía al granadinos, que pudieron poner a
men de vasallaje a Castilla. Hubo, a mismo tiempo el vasallaje del rey prueba así su reciente compromiso
pesar de todo, resistencias en algu- de Granada Muhammad I. Éste con- de vasallaje con el monarca caste-
nas partes. El heredero Alfonso (X) seguía consolidar su dinastía naza- llano.
tuvo que conquistar Lorca y Mula en rí, pero sólo al sur del Valle del La conquista de Sevilla fue deci-
1244, y Cartagena, que fue incorpo- Guadalquivir. siva en el devenir de la reconquista.
rada definitivamente en 1245. En En 1247 se inició el asedio de Todavía quedaban territorios en
1248 tuvo que entrar con su ejército Sevilla. El 23 de noviembre de 1248 manos musulmanas, pero apenas ciu-
en Alicante, tras negarse la autoridad se conseguía la capitulación de la dades de primer orden. Correspon-
musulmana a aceptar las condicio- ciudad, la principal de Al-Ándalus dería ya a Alfonso X su incorpora-
nes de capitulación. por entonces. Fernando contó con el ción. Cádiz y Niebla, entre otras,
Entre 1244 y 1245 caía el foco apoyo de todo tipo de contingentes pasaban a manos cristianas entre
de Arjona. En 1246 Fernando III militares castellanos, pero también 1262 y 1264.
189
JURISDICCIONES DE LA ACTUAL EXTREMADURA EN EL SIGLO XIII
Y COMIENZOS DEL SIGLO XIV
gón
Ala
Béjar
Río
Granadilla
te
Jer
Río
Coria
Plasencia Río Tiétar
Galisteo
gón
Ala
Río
Río Tajo
Alburquerque Jurisdicción
de Toledo
adajira
ia
Alange
ad
Río Matachel
Gu
Río Gu
Río
Benquerencia
Río
Alconchel G uad
Valencia del ám ez
Jerez de los Ventoso
Caballeros Realengo
Jurisdicción Señorío laico
de Sevilla Llerena
Señorío de Orden Militar:
Orden de Santiago
Orden de Santiago
Orden de Alcántara
Orden de San Juan
Orden del Temple
Duero y Sierra Morena. En Andalu- premió con donadíos, los mayores recién llegados. De ellos, seis de
cía sí, de modo que, aunque se fun- de los cuales eran de varios cente- cada diez procedían de Castilla. El
daron también grandes concejos de nares de hectáreas. Eran el 2,10% de modelo empleado en Murcia fue
realengo y se formaron caballeros los beneficiarios, pero se quedaron semejante.
villanos, buena parte de las tierras con el 12% de las tierras repartidas. Tras la revuelta mudéjar de Anda-
fueron a parar a aquéllos. Esto se El resto, más del 88% de las tierras, lucía en 1264 muchas tierras queda-
aprecia en los repartimientos. En correspondió a heredamientos me- ron vacías y se produjo un reajuste
ellos sólo se repartían, detallada- dios y pequeños, que correspondie- agrario. Los beneficiarios fueron los
mente, los bienes confiscados o ron a cerca de dos millares de pro- grandes propietarios. Este fenómeno
abandonados por los musulmanes pietarios, caballeros modestos y acabó convergiendo con la señoriali-
desaparecidos o emigrados. En el peones. El repartimiento de Sevi- zación posterior y acabó influyendo
repartimiento de Sevilla de 1253 se lla fue referencia de otros conoci- en el triunfo del latifundismo andaluz.
repartieron 200.000 ha. Se aprecia dos de Carmona, Écija o Jerez, entre En Murcia hubo también revuel-
que a cuarenta y cuatro nobles se les otros. Y sirvió para acoger a los ta mudéjar en ese mismo año. Tras
190
POBLAMIENTO Y PROGRESO DE LA GRAN PROPIEDAD intervenir Jaime I en la repoblación
EN LA HUERTA DE MURCIA (ss. XIII-XIV) de esta región aprovechando esta cir-
cunstancia, Alfonso X retomó el con-
Río Segura trol en 1266, reconoció propiedades
Aljufía importantes a algunos nobles y órde-
Alquibla
NACIMIENTO DEL REINO dad se estableció como Muhammad mad I. En 1265 Alfonso X atacó
NAZARÍ DE GRANADA I. Cuando se afianzó Fernando III de Granada, que había interrumpido el
Castilla, los granadinos aceptaron una vasallaje y el pago de parias por Cas-
El reino nazarí o nasrí de Grana- posición de vasallaje y sumisión fren- tilla. La relación se reanudó después
da se extiende desde 1238 hasta 1492. te a Castilla, lo que les aseguró su de 1273, al morir Muhammad I. Pero
Los nasríes eran un linaje de antiguo supervivencia durante dos siglos más. en ocasiones Granada conspiró con-
origen sirio. Después del hundimien- Pagarían tributo a cambio de no ser tra Castilla. Desde 1275 se produjo
to almohade y los enormes avances atacados. El pago de parias, que ase- el desembarco de meriníes –mari-
cristianos que siguieron Muhammad guraban la paz con Castilla en 1246, níes o benimerines– norteafricanos,
ibn Nasr logra mantener su pequeño tras la toma de Jaén, se renovó unos apoyados por el sultán granadino
sultanato de Arjona, reforzado con años después en favor del futuro Muhammad II. Ese año y en 1277 y
Guadix y Baza. Desde la muerte de Alfonso X, a quien ayudaron incluso 1278 los africanos atacaron ciuda-
Ibn Hud en 1237, que había contro- en las conquistas del Guadalquivir. des de la Andalucía cristiana. La con-
lado varias taifas en Murcia y el Gua- Las relaciones con Castilla empeo- quista de Tarifa por los castellanos
dalquivir, Muhammad ibn Nasr, en raron desde la sublevación de los en 1292 frenó estas incursiones
1238, se hace con el control de Alme- mudéjares andaluces en 1264, que momentáneamente.
ría, Málaga y Granada. En esta ciu- contaron con el apoyo de Muham-
191
24
NAVARRA
CATALUÑA
LEÓN / CASTILLA
(unidos en 1230)
PORTUGAL ARAGÓN
Morella
(1232)
REINO NAZARÍ
Grandes líneas de la reconquista desde las Navas
Cádiz (1262) (fechas de la reconquista cristiana definitiva)
Líneas de conquista portuguesas
Líneas de conquista castellano-leonesas
Líneas de conquista catalano-aragonesas
194
LOS REINOS CRISTIANOS EN 1230 (UNIÓN CASTELLANO-LEONESA)
Oviedo
Santiago Lugo
Vitoria REINO DE ROSELLÓN
NAVARRA
León Pamplona PALLARS
Burgos Logroño Jaca La Seo de Urgel
Tuy Nájera Huesca URGEL AMPURIAS
Tudela CORONA Gerona
Braga Toro Soria ARAGÓN
Zamora Zaragoza Lérida Barcelona
Oporto Salamanca Segovia Tarragona
REINO DE
PORTUGAL Ávila Molina
Coímbra Teruel
Coria
Toledo Cuenca
Mallorca
Cáceres Valencia
Mérida
Lisboa CORONA DE
Elvas
Évora Badajoz CASTILLA
Murcia
Córdoba
Jaén
MUSULMANES Cartagena Fronteras entre estados cristianos
Sevilla Granada
Frontera con los musulmanes
Almería
Málaga Territorios musulmanes
Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
Oviedo
Santiago Lugo
Vitoria REINO DE
ROSELLÓN
NAVARRA
León PALLARS
Logroño Pamplona Jaca La Seo de Urgel
Burgos
Tuy Nájera Huesca URGEL AMPURIAS
Tudela Gerona
Braga Toro Soria
Zamora Zaragoza Lérida Barcelona
Oporto Salamanca Segovia Tarragona
REINO DE CORONA DE
PORTUGAL Ávila Molina ARAGÓN
Coímbra Teruel
Coria
Toledo Cuenca
Mallorca
Cáceres Valencia
Mérida CORONA DE
Lisboa CASTILLA
Elvas
Évora Badajoz
Alicante
Murcia
Córdoba
Jaén
Cartagena Fronteras entre estados cristianos
Niebla Sevilla Granada
Frontera con los musulmanes
Almería
Málaga Territorios musulmanes
Cádiz MUSULMANES Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
195
LOS REINOS CRISTIANOS EN 1264
Oviedo
Santiago Lugo
Vitoria REINO DE
ROSELLÓN
NAVARRA
León PALLARS
Logroño Pamplona Jaca La Seo de Urgel
Burgos
Tuy Nájera Huesca URGEL AMPURIAS
Tudela Gerona
Braga Toro Soria
Zamora Zaragoza Lérida Barcelona
Oporto Salamanca Segovia Tarragona
REINO DE CORONA DE
PORTUGAL Ávila Molina ARAGÓN
Coímbra Teruel
Coria
Toledo Cuenca
CORONA DE Mallorca
Cáceres Valencia
CASTILLA
Mérida
Lisboa
Elvas
Évora Badajoz
Alicante
Murcia
Córdoba
Jaén
MUSULMANES Cartagena
Sevilla Granada
Almería
Málaga Fronteras entre estados cristianos
Cádiz Frontera con los musulmanes
Territorios musulmanes
Ciudades cristianas
Ciudades musulmanas
EL ESPLENDOR cas y así pudo esperar los últimos años Corona eran tierras ganadas al Islam
CASTELLANO del reinado de su padre como herede- por este monarca. En las nuevas tie-
CON FERNANDO III ro del trono de León. Los éxitos anda- rras Fernando III compensó los esfuer-
luces le convertían en el hombre más zos de las Órdenes Militares en algu-
Hacia 1217 existía fuerte rivalidad importante de la península. El vasa- nos sitios, sobre todo en tierras
entre Fernando III y Alfonso IX. llaje de Murcia frenaba las aspiracio- jienenses y de la frontera con Grana-
Amplios sectores de la nobleza leo- nes aragonesas. El tratado de Almiz- da, al tiempo que articuló el territorio
nesa no querían que el trono de León ra de 1244 daba ventaja a Castilla, al a partir de la fórmula de grandes con-
acabase unido al de Castilla en la quedar en el reparto de las fronteras cejos urbanos realengos, con extensos
mano de Fernando. Alfonso IX tenía como áreas castellanas las ciudades y alfoces, algo que extendió a Córdoba,
dos hijas de su primer matrimonio con comarcas de Almansa, Orihuela, Andújar, Jaén, Úbeda y Baeza. Lo
Teresa de Portugal, Sancha y Dulce. Elche, Villena y Alicante. mismo ocurrió con Murcia y Carta-
Se decidió en la corte leonesa que el Los últimos años del reinado de gena.
trono pasaría a estas hermanastras de Fernando III fueron de éxitos mili- En los últimos años de su reinado
Fernando III, pese a que Alfonso IX tares rotundos: Jaén en 1246 y Sevi- Fernando III dictó importantes medi-
había aceptado en 1218 que le suce- lla en 1248. El balance territorial de das sobre oficios artesanales y regu-
diera este último, hijo de su segundo la expansión castellana bajo Fernan- ló en varias cartas las relaciones de
matrimonio. En pleno reinado Fer- do III era impresionante. Cuando la monarquía con las fuerzas del rei-
nando III pudo evitar la guerra de Cas- murió en 1252 la Corona de Castilla no, nobleza, iglesia y concejos. De
tilla con leoneses y portugueses, que había aumentado en 100.000 km2 su todos modos, en esta labor política
apoyaban a las infantas. Logró que las superficie en comparación con el y normativa fue mucho más desta-
infantas renunciasen a sus derechos a comienzo del reinado. Más de la cuar- cado el reinado de su hijo y sucesor,
cambio de compensaciones económi- ta parte de la superficie total de la Alfonso X.
196
ALFONSO X. ciones, pero que complicaron mucho conquistadas forma parte de una
REFORMAS INSTITUCIONA- la biografía política del monarca y ambiciosa y muy avanzada actuación
LES Y RELACIONES CON LAS su entorno. basada en el refuerzo de los conce-
FUERZAS DEL REINO Como conquistador, Alfonso X jos de realengo. En el valle del Gua-
había participado antes de ocupar el dalquivir, Alfonso X organizó los
El reinado de Alfonso X es consi- trono en las conquistas andaluzas. Y concejos de Sevilla, con su reparti-
derado uno de los más importantes fue él quien agregó Gibraleón y Nie- miento de 1253, de Carmona y de
de la Edad Media por muchos moti- bla en 1262. El reino era vasallo de Écija, entre las ciudades conquista-
vos. Se valora así al apreciar los his- Castilla desde 1248. La sierra gadi- das poco antes. Y extendió la fórmula
toriadores el sentido de estado y la tana, Arcos y las localidades de la a Cádiz, Gibraleón, Huelva o Jerez.
trascendencia de las medidas y rea- bahía de Cádiz pasaron a manos cris- Las sierras andaluzas, orientadas a
lizaciones del mismo, en el plano tianas en 1264. Con ello se comple- la defensa frente a Granada, queda-
jurídico, político y cultural. Sin taba la incorporación de la Andalu- ron en manos de Órdenes Militares.
embargo, fue un reinado lleno de cía Bética, a salvo de Tarifa y su área. Alfonso X consiguió así una Anda-
problemas, ensombrecidos hoy día La fórmula para organizar la vida lucía Bética de potentes y predomi-
por la altura histórica de las realiza- local y urbana de las tierras recién nantes concejos urbanos de realen-
7
Oviedo Santander
A T L Á N T I C O
Lisboa Badajoz 3
Alicante
M a r
Sevilla Córdoba Jaén
Silves
1 Murcia
6
Niebla Granada
REINO DE GRANADA M e d i t e r r á n e o
Jerez de la Frontera
1 Repoblaciones urbanas en el Valle del Guadalquivir: siguiendo la misma política que en Córdoba y Jaén, refuerzo del realengo con los nuevos
concejos de Sevilla. Arcos, Écija, Carmona, Pto. de Santa María, Niebla, Huelva, Gibraleón. Refuerzo del realengo urbano de Murcia con los
nuevos concejos de Orihuela y Lorca.
2 Fundación de villas nuevas en el norte: cerca de 15 en Rioja, Álava y Guipúzcoa (Briones, Navarrete, Salvatierra, Buradón, Campezo,
Contrasta, Arceniega, Ordicia, Tolosa, Segura, Bergara y Mondragón; Orduña); 2 en Castilla norte y León norte (Aguilar de Campóo, Laciana);
17 polas en Asturias (Villaviciosa, Gijón, Somiedo, Lena, Ribadesella...); 4 en Galicia (Balonga, Puentedeume, Monterrey, Ortigueira).
3 Fundación de Ciudad Real, concejo realengo en plena región de Órdenes Militares.
4 Otorga Fuero Real. Unificación jurídica para los concejos del centro peninsular.
5 Otorga privilegios a los caballeros y homogeneiza las categorías fiscales y sociales de los concejos del centro peninsular.
6 Dotación de patrimonio y recursos concejiles: dehesas, bienes de propios. Validez general.
7 Impide la aparición en las ciudades de privilegios corporativos de los oficios. Validez general.
197
go. Lo mismo hizo al añadir Orihue- envuelto en promesas económicas de rio, como las soldadas o tierras que
la y Lorca a la constelación de gran- los candidatos, creó situaciones deli- los nobles recibirían, así como dona-
des concejos de Murcia y Cartage- cadas entre 1254 y 1273. En ese año, díos importantes en las nuevas zonas
na. Aparte del sur, la política de el apoyo concluyente del Papado, que conquistadas, y aseguraba el mante-
impulso concejil se concretó en otras al final fue definitivo, se decantó en nimiento de los señoríos existentes.
áreas: fundación de Villa Real –Ciu- favor de Rodolfo de Habsburgo. Sin embargo, tantas novedades fue-
dad Real– en 1255, islote realengo La malograda aspiración imperial ron percibidas como amenaza, espe-
en una región dominada por las del monarca, pretensión que resultó cialmente por la nobleza vieja arrai-
Órdenes Militares; privilegios varios cara e impopular pero que parece haber gada entre el Duero y el Cantábrico.
a los potentes concejos del sur del obsesionado a Alfonso X durante años, Ya en 1254 la Casa de Haro –Die-
Duero; fundaciones de villas nuevas no fue la causa, pero sí parece haber go López de Haro–, al frente de una
en el País Vasco, Rioja y frontera con acentuado dos de los problemas inter- facción nobiliaria, aliada con el infan-
Navarra –cerca de quince en esta nos del reinado: la crisis fiscal y finan- te don Enrique, protagonizó una rebe-
zona–, Galicia, norte de León y Cas- ciera y el malestar de la nobleza. lión. Brotaba la tensión entre los Haro
tilla y, sobre todo Asturias, donde lle- En cuanto a la crisis, las primeras y los Lara, que había aparecido en el
gó a fundar diecisiete polas o pue- décadas del reinado fueron pésimas: siglo anterior. La facción de los Lara
blas nuevas. Alfonso X intentó inflación y descontrol monetario. Las era dirigida por Nuño González de
normalizar el gobierno de los con- cortes recién creadas fueron el ins- Lara, que arrastraba otro gran con-
cejos extendiendo en muchas partes trumento empleado para fijar precios junto de nobles, por el momento lea-
el Fuero Real y la caballería villana. y salarios según regiones, establecer les a Alfonso X, como también lo era
Las relaciones del reinado de Al- una política monetaria, una política el infante don Ma-nuel. Los Haro
fonso X con el reino nazarí de Gra- impositiva y, de algún modo, por conspiraban, en cambio, y buscaban
nada se complicaron cuando éste apo- todo ello, una política económica. apoyo en Aragón. Los rebeldes fue-
yó las revueltas mudéjares en 1264. Las Cortes de Sevilla de 1252, lue- ron derrotados. Años después, las
La represión de estas revueltas en el go las de Jerez de 1268 y otras fue- banderías encabezadas por los Haro,
Guadalquivir hizo emigrar a muchos ron las primeras instituciones que sir- los Lara y otros muchos nobles, así
musulmanes hacia el reino de Grana- vieron para esta nueva forma de como miembros de la familia real,
da. Luego cada cierto tiempo, desde organizar desde la monarquía la vida entre ellos don Felipe, protagoniza-
1275, la llegada de benimerines des- económica del reino. Aparte de ello ron una rebelión más consistente y
de África con el apoyo de Granada desde la corte se tomaron medidas amplia. Ocurría en 1272 y 1273. La
impidió mejorar las relaciones de Cas- sobre importaciones y exportacio- antigua nobleza se oponía funda-
tilla y Granada, basadas en el vasalla- nes, cosas vedadas y política adua- mentalmente a la voluntad de dero-
je de esta última pero también en la nera, entre otros asuntos. gar el viejo derecho señorial –el más
desconfianza mutua. En cuanto a las relaciones con la tarde llamado, al recopilarse, Fuero
Entre los fracasos más importantes nobleza, las causas que se han esgri- Viejo de Castilla– y a la fundación de
de Alfonso X hay que destacar el lla- mido para explicar la desafección de pueblas nuevas en el norte, a costa de
mado fecho del imperio. Federico II una parte de la misma han sido varia- tierras de señorío o influenciadas por
Staufen, emperador del Sacro Impe- das. Entre ellas, la impopularidad del los magnates y los infanzones norte-
rio, dejó al morir en 1250 un vacío fecho del imperio. Asimismo las ños. Pero además en esos años, des-
de poder conocido como “interreg- ambiciones de algunas facciones de de 1272, muchos concejos realengos
no”. El emperador, según el sistema miembros de la familia real, que se vieron amenazada la autonomía muni-
de designación, era elegido por las vieron perjudicados y agraviados en cipal. El Fuero Real, que desde 1255
grandes autoridades entre los ale- comparación con Alfonso X y sus quería Alfonso X imponer en los con-
manes: los tres arzobispos electores dominios. Pero más decisivas fueron cejos, establecía la desaparición de la
de Maguncia, Colonia y Treveris las actuaciones del rey en las fuen- pluralidad foral y prescribía alcaldes
y los cuatro electores laicos, esto es, tes de derecho y del estado, que no regios para regir las ciudades, entre
los duques de Baviera y Sajonia, el fueron comprendidas por algunos otras normas nuevas. De modo que
conde palatino de Renania y el mark- nobles, así como la citada fundación muchos concejos se unieron a los des-
grave de Brandemburgo. Una deci- de villas nuevas. Alfonso X concibió contentos. El código no se aplicó.
sión colegiada de esa índole llevó a una monarquía por encima de las Más problemas que los concejos
complejas negociaciones diplomáti- fuerzas del reino, con capacidad aferrados a sus fueros municipales
cas. El trono imperial era aspiración legislativa, progresos sólidos de la causaba al rey la revuelta nobiliaria.
de Conrado IV, que lo ocupaba como unificación jurídica, abolición de No sólo no se apaciguó tras los
descendiente directo, Ricardo de derechos obsoletos, contención enfrentamientos de 1273. Al contra-
Cornualles, hermano del rey inglés, de los privilegios enquistados de la rio, encontró en 1275 en el pleito
Rodolfo de Habsburgo y Alfonso X vieja nobleza, robustecimiento de las dinástico un nuevo motivo para oxi-
de Castilla. Los derechos de este últi- instituciones centrales, refuerzo del genarse. Ese año moría el heredero,
mo procedían de su madre, Beatriz realengo concejil en territorios tra- el infante Fernando de la Cerda.
de Suabia, descendiente de Federico dicionalmente señoriales y extensión Hubo defensores de que el trono
I Barbarroja. Al morir Conrado IV de las regalías, entre otras noveda- pasase en su momento al segundo
en 1254, las tensiones entre los can- des. Este proyecto de estado de Al- hijo, Sancho –el futuro Sancho IV–
didatos se agudizaron. El apoyo de fonso X, basado en un ideal de sobe- mientras que otro sector apoyó los
ciudades italianas y alemanas, las ranía monárquica más que en la derechos de los hijos del heredero
luchas entre güelfos y gibelinos y la pirámide feudal tradicional, preveía muerto, los infantes de la Cerda. Esta
diplomacia internacional, todo ello una retribución al servicio nobilia- facción salió a la postre perdedora,
198
pero la disputa duró un par de gene- muy destacables, sobre todo en el de los estamentos, comenzaron su
raciones y fue causa de conflictos. ámbito cultural y en lo referente a andadura en el reinado y se reunie-
Los últimos años del reinado de las reformas jurídicas e institucio- ron en numerosas ocasiones, nada
Alfonso X están marcados por el nales. En cuanto a su obra literaria menos que 24 veces entre 1252 y
enfrentamiento. Tanto es así que des- y doctrinal, fue un reinado cumbre, 1282. Las innovaciones fiscales fue-
de 1282, el infante Sancho, con sus gracias a su labor personal y la de ron enormes. Se crearon desde 1269
aliados, comenzó de hecho a actuar su corte como centro del saber: servicios no foreros, a modo de im-
como rey en vida de su padre. Se for- impulsó la Universidad de Sala- puestos directos otorgados en cortes,
maron incluso unas primeras her- manca como centro del saber de toda una novedad; se establecieron
mandades de villas y ciudades opues- nuevo cuño, obra literaria de las las tercias reales, los diezmos de la
tas al rey. De poco sirvió que Alfonso Cantigas de Santa María, tratados mar, las aduanas y almojarifazgos y
X, en sus últimos años, intentase científicos –ajedrez, astronomía...– otras rentas fiscales.
solucionar el problema cambiando y, fundamentalmente, obra jurídica. Fueron, todas ellas, grandes trans-
varias veces de testamento, con afán En este orden, el Fuero Real, el formaciones. Algunas acabaron cua-
apaciguador, o proponiendo solucio- Espéculo y Las Partidas son consi- jando en los reinados siguientes. Pue-
nes de reparto del reino entre los inte- deradas respectivamente piezas de decirse que, aunque todavía el
resados. Al final, acabó en guerra con maestras de la legislación munici- llamado Estado Moderno estaba aún
su propio hijo. A la muerte del padre, pal, del derecho regio nuevo a par- lejano, sobre todo porque éste requie-
Sancho IV comenzó el reinado con tir del ius commune y del saber jurí- re unas bases sociales que no se
muchos partidarios, pero también con dico enciclopédico. daban aún, no cabe duda de que el
focos resistentes entre la nobleza cas- La corte cambió profundamente, proyecto estatal de Alfonso X había
tellana. con la introducción de los alcaldes dado pasos muy sólidos y decididos
Hay que señalar finalmente a pro- de alzada y una nueva oficialidad de en esa dirección.
pósito del reinado de Alfonso X que, tesoreros y contadores. Las Cortes,
pese a los fracasos y la debilidad de entendidas como cámara con capa-
sus últimos años, tuvo realizaciones cidad legislativa y con participación
CRISIS SUCESORIAS DE LA Sancho IV puedo centrarse en los tud del rey por Alfonso de la Cerda,
MONARQUÍA CASTELLANA últimos años de su vida en la guerra el infante don Juan –tío de Fernan-
A FINALES DEL SIGLO XIII contra los moros. do IV– y por la descendencia de don
Ésta consistía en la entrada espo- Manuel, hermano de Alfonso X. Las
En 1284 llegaba al trono Sancho IV rádica de benimerines con la com- sublevaciones nobiliarias, que tenían
(1284-1295). Contaba con el apoyo plicidad granadina. Atacaban nú- a menudo unos efectos de violencia
de la mayoría de las fuerzas nobilia- cleos cristianos del Guadalquivir en vertical como malfetrías fueron con-
rias, dirigidas por Lope Díaz de rápidas incursiones. Era prioritario tenidas al principio del reinado por
Haro, y de las ciudades y villas. controlar el Estrecho. Se conquistó las ligas de concejos, en concreto las
Éstas formaron una hermandad Tarifa en 1292. Pero fue muy com- hermandades de 1295 y 1297. Pero
general en 1284. La hermandad era plicado defender la plaza, en manos no fueron suficientes. Hubo también
una liga de concejos. El resenti- del leonés Alfonso Pérez de Guz- tensiones fronterizas con Portugal,
miento de los Lara y de los partida- mán, el Bueno. Tarifa sufrió un ase- que se saldaron con el Tratado de
rios de los infantes de la Cerda, alia- dio meriní en el verano de 1294, pero Alcañices.
dos contra los Haro, causó luchas la plaza resistió. Cuando en 1312 moría Fernan-
nobiliarias. Los enemigos de Sancho El reinado de Fernando IV (1295- do IV el reino estaba convulso. Las
IV contaron con la colaboración de 1312) comenzó con su minoría y la grandes parcialidades nobiliarias
Aragón. Los años 1288 a 1291 fue- regencia de María de Molina. Mo- pugnaban entre sí y generaban vio-
ron los más críticos. El rey acordó la mentos de extrema debilidad que lencias sobre los campesinos. Y el
paz con Jaime II de Aragón en Mon- apenas comenzaron a remitir en nuevo rey, Alfonso XI, tenía apenas
teagudo en 1291 y aplacó las rivali- 1302, cuando el rey tenía 16 años. un año. La inestabilidad política con-
dades de la nobleza con privilegios Los grandes enemigos estuvieron tinuaría en las décadas siguientes.
y trasvase de rentas. De este modo, acaudillados en la infancia y juven-
199
R E A J U S T E S E N L A F R O N T E R A C O N P O RT U G A L
S E G Ú N E L T R ATA D O D E A L C A Ñ I C E S ( 1 2 9 7 )
Ribadavia iño
oM Allariz
Bayona Rí Celanova
Tuy Verín
La Guardia
Braganza
Chaves Alcañices
Braga
Guimaraes
Fermoselle
Oporto Río Duero
Lamego Numao
Castelo Rodrigo
Pinhel A
Viseu Almeida
Vilar Maior Castelo Bom
Guarda a Ciudad Rodrigo
Cõ Alfaiates
R.
Coímbra Sabugal Trevejo
Idanha Coria
Leiria Alcántara
o
Taj
Tomar Río Herrera
Marvão Valencia de Alcántara
Crato
Alburquerque
Santarem Arronches
Avis Ouguela
Campo Maior
Sintra Elvas Badajoz
Lisboa
Évora Olivenza
(Convertida en villa al año
Alcácer do Sal de pasar a Portugal)
na
d ia
Mourao
a
Gu
B Encinasola
Río
Beja Moura
Serpa Aroche Aracena
C
Mértola Nódar Alájar
Monchique Gibraleón
Niebla
Lagos Ayamonte
Silves D Tavira Huelva
Faro
200
25
LA EXPANSIÓN sión y la iniciativa fue impulsada por sodio es conocido como “Vísperas
DE LA CORONA DE ARAGÓN los catalanes. En su búsqueda de Sicilianas”, ya que el tañido de vís-
POR EL MEDITERRÁNEO posesiones y enclaves comerciales peras de las campanas de Palermo
(1276-1302) la corona tuvo varios enemigos exte- anunció el levantamiento popular a
riores. Aparte de algunos italianos, finales de marzo. La insurrección
La corona de Aragón destacó en el gran rival fue la Casa de Anjou, antifrancesa y el apoyo pedido a Ara-
los reinados de Pedro III (1276- que ambicionaba los mismos objeti- gón sirvió de coartada para que
1285), su hijo Alfonso III el Franco vos. Pedro III desembarcara con su ejér-
(1285-1291) y el hermano de éste, Por su matrimonio con Constan- cito en la isla, tomándola en el vera-
Jaime II el Justo (1291-1327), por su za de Suabia, Pedro III alegaba tener no de 1282.
expansión en el Mediterráneo occi- derechos sobre Sicilia. La isla había La reacción de los enemigos fue
dental. No hubo guerra con los pertenecido en el siglo XIII a la dinas- instantánea: excomunión papal, ata-
musulmanes en el Mediterráneo, sal- tía alemana de los Staufen, pero des- ques franceses en Cataluña y ataques
vo por la conquista de Menorca de 1264, con el apoyo papal, pasó a desde Navarra, en manos de una
–fines de 1286, principios del 1287– Carlos de Anjou, hermano de Luis dinastía francesa. El rey de Mallor-
y su incorporación a la Corona, tras IX de Francia. Los derechos de la ca se unió al bloque antiaragonés. Se
haber estado bajo los musulmanes línea Staufen, despojada de la isla, sucedieron años de intrincados epi-
pero como vasallos de la Corona des- recayeron poco después en la espo- sodios bélicos y diplomáticos. El tra-
de la capitulación de 1231. En cam- sa de Pedro III. Durante años el rey tado de Anagni de 1295 acordaba el
bio los conflictos se dieron con los aragonés preparó una flota, con un matrimonio de Jaime II de Aragón
otros estados cristianos domi-nado- ficticio objetivo africano, y en 1282 con Blanca de Anjou. La isla, no
res del Mare Nostrum. El co-mercio alentó la sublevación de los sicilia- obstante, estuvo en los años siguien-
fue el móvil principal de la expan- nos contra Anjou y Francia. Este epi- tes en manos del hermano del ara-
202
LA CORONA DE ARAGÓN Y MURCIA EN EL REINADO DE JAIME I
Montpellier
Toulouse
REINO DE FRANCIA
Narbona
Foix Carcasona
Saint-Bertrand-de-Comminges
VALLE DE ARÁN
REINO DE NAVARRA PALLARS SOBIRÁ Perpiñán
et
Río T Colliure
agón
R. Ar Sort
R. Jaca
Eb
Ribagorzana
ro Castellón de Ampurias
Noguera
La Seo
llego
Huesca de Urgel er
Río T
R. Gá
Monzón Gerona
URGEL
t
Río Llobrega
Tudela
REINO DE Balaguer
Tarazona ARAGÓN Manresa
R. C
Zaragoza in ca
lón
gre Barcelona
Francolí
Se
CalatayudÊ Mequinenza
R.
va
Caspe
uer
Tarragona
H
tín
Alcañiz
Río
ar
CORONA
oM
DE CASTILLA Tortosa
e
Rí
lop
da
ua
Río
G
R.
Morella
Taj
Teruel (1232)
o
Valencia (1238)
REINO DE
Cab
VALENCIA
iel r
Río Júcar
CORONA Alzira (1242)
DE CASTILLA Játiva Ibiza (1235)
(1244)
Denia (1245)
Biar
Villena
Río Vinalopó Alicante
Río Elche
Seg
u ra Orihuela
REINO DE Murcia
MURCIA
Lorca
Cartagena
Reino de Aragón
Condados catalanes de los condes-reyes de Barcelona
Condados vasallos o aliados de la Corona de Aragón: Pallars Sobirá, Urgel, Ampurias
Reino de Valencia, conquistado entre 1229 y 1244 (entre paréntesis, las fechas de la conquista)
Reino de Mallorca, conquistado entre 1229 y 1231. Ibiza en 1235
Frontera de Cataluña con Francia según el Tratado de Corbeil (1258)
Reino de Murcia (vinculado a la Corona de Castilla). Intervención de Jaime I en Murcia en 1265-1266
203
R I VA L I D A D M E D I T E R R Á N E A D E L O S A N G E V I N O S
Y LA CORONA DE ARAGÓN (1276-1302)
Milán
Turín Verona Padua Venecia
Golfo de Asti
Vizcaya REINO DE FRANCIA Módena
Gascuña Languedoc Saluzzo Génova Bolonia Rávena
Vitoria Toulouse Aviñón Condado REINO DE
REINO Montpellier de Provenza Lucca Rep. de
(1204-1349) (Anjou) Rep. de Urbino Venecia Split HUNGRÍA
DE Pamplona Niza Pisa Florencia
Narbona Marsella
NAVARRA Génova Ancona
Perpiñán ESTADOS Serbia
Tudela Huesca Rosellón Siena
Calvi Bastia Pitigliano DE LA M A R Dubrovnik
Zaragoza Cataluña Gerona
Perugia ADRIÁTICO
CORONA Lérida Córcega IGLESIA REINO
DE ARAGÓN Barcelona Roma Manfredonia
Tortosa Anagni
Teruel Bonifacio Pontecorvo
Cuenca Gaeta DE
Port Fangós MAR MEDITERRÁNEO Benevento Bari
Olbia Nápoles
Alghero Sassari Salerno Tarento
CORONA (1282)
Valencia
Messina Reggio
(1282) Trapani Palermo
Catania
Sicilia
(1282)
Siracusa
Túnez A Djerba
gonés, Federico, que no reconoció el de 1304 y de Elche en 1305, en vir- Mallorca debía jurar al de Aragón e
tratado. Los Anjou no lograron recu- tud de los cuales los territorios de la integrarse en las cortes catalanas, sin
perar la isla, el tratado de Caltabe- actual provincia alicantina quedaron disponer de unas propias. Jaime II se
llota de 1302 favoreció los intereses incorporados a Aragón y los de Mur- alió con Francia y los Anjou y resi-
de Federico y éste logró imponer una cia a Castilla. Las tensiones con Cas- dió a menudo en Perpiñán. Provocó
dinastía propia en la isla e indepen- tilla no cesaron, sin embargo, y fue- la enemistad de los aragoneses. Has-
diente de la corona de Aragón duran- ron en el siglo XIV un factor que ta el punto de que Alfonso III y lue-
te cerca de un siglo. desencadenó conflictos frecuentes y, go Jaime II de Aragón ocuparon la
Durante todo este período las en ocasiones, guerras abiertas. isla desde 1285 hasta 1298. Luego
relaciones con Castilla fueron ten- El reino de Mallorca, por su par- Jaime de Mallorca recuperó sus
sas. Alfonso III y Jaime II apoyaron te, tuvo desde su comienzo como dominios. Aun así, el reino estuvo
a los infantes de la Cerda, profundi- estado independiente en 1276, muchos desde el reinado de Sancho I bajo la
zando en las disputas dinásticas cas- problemas. Jaime II de Mallorca constante presión de la corona de
tellanas, y pugnaron también por (1276-1311) heredó un reino muy Aragón y formalmente en relación
obtener a costa de Castilla Murcia y heterogéneo geográficamente, lo que de cooperación y vasallaje con res-
el sureste. Este último conflicto se no favorecía la estabilidad. Por el tra- pecto a la corona.
solventó en los acuerdos de Torrellas tado de Perpiñán de 1279 el rey de
SOMETIMIENTO DEL REY de las instituciones aragonesas. El garquías sociales a obtener privile-
A LOS ESTAMENTOS contexto de la conquista siciliana, gios que se consideran esenciales en
A FINALES DEL SIGLO XIII que supuso el enfrentamiento de la historia del llamado pactismo ara-
Pedro III con el Papado y Francia, gonés.
Los últimos años del siglo XIII favoreció la sublevación nobiliaria. Aparte de reforzarse el papel de
fueron importantes para la historia La debilidad del rey llevó a las oli- las cortes, que venían celebrándose
204
desde mediados del siglo XIII de for- Corona de Aragón basadas en la comercial barcelonesa en Cataluña,
ma regular, los nobles aragoneses necesidad de los monarcas de con- la nobleza rural en Aragón y las éli-
formaron una Unión Aragonesa, que vocar a los estamentos. En las ciu- tes ciudadanas valencianas en el rei-
exigió al rey firmar el llamado Pri- dades los interlocutores regios eran no homónimo. En general estos esta-
vilegio General de Aragón en 1283. los sectores elitistas, no los popula- mentos ofrecen un perfil oligárquico,
El rey se comprometía a gobernar res. Estos últimos protagonizaron una sobre todo en Aragón y Cataluña.
con el consentimiento de la nobleza. revuelta social en Barcelona en 1285, Hay también zonas que no se ajus-
El mismo año las Cortes de Barce- dirigida por el menestral Berenguer tan al modelo. Es el caso de los con-
lona obligaban a Pedro III a recono- Oller, que se enfrentó sin éxito a las cejos del Bajo Aragón –Calatayud,
cer los privilegios de las élites cata- oligarquías ciudadanas. Daroca, Albarracín o Teruel–, organi-
lanas: mantenimiento del derecho La estamentalización política fue zados desde mediados del siglo XIII en
feudal catalán y necesidad de con- uno de los rasgos de la sociedad polí- “comunidades de aldeas”, con escaso
vocar a las cortes para tomar deci- tica aragonesa, con un determinado acento aristocrático y menor centrali-
siones que afectasen a Cataluña. A perfil hegemónico en cada sitio: zación villana que en el caso de los
partir de estos pactos de 1283 se aparte de las élites urbanas, capitali- concejos castellanos de la época.
desarrollaron instituciones en la zó el poder regional la burguesía
os a
la Casa de Champaña, con Teobal-
R. M
do I (1234-1253), tanto él como sus
sucesores, Teobaldo II (1253-1270) Breteuil Namur
y Enrique I (1270-1274), favorecie- Cambrai
ron una orientación del reino hacia
Laon
a
Francia, país donde solían residir los
osel
Rouen
R. M
monarcas. Instituciones fiscales, o R. S Reims
de la administración del estado en a
Meaux Chalons
–como el senescal, lugarteniente París
regio–, fueron importadas de allí. Chartres
La nobleza navarra, temerosa de Sens Troyes
Perche Orleans
perder privilegios y superada la ten-
sión inicial a la llegada del champa- a Tours
R. Loir Blois
ñés, consiguió no ser desplazada por Sancerre
los franceses y, sobre todo, logró Nantes
pronto que el derecho tradicional, el
Fuero Antiguo de Navarra, que
empezó a recopilarse desde 1238,
R. Loira
R.
burgos navarros vieron respetados G aro
na
sus fueros y estatutos locales. Las
ciudades principales, entre ellas las
llamadas “Buenas Villas”, por imi- Arles
Toulouse
na
tación francesa, formaron una espe- aro
R. Eb R. G
cie de élite de ciudades, pero con un ro Carcasona
afán de cooperación con el rey. Y se
normalizaron desde mediados del
siglo reuniones de cortes, en las que
el monarca pudo negociar con los
estamentos, especialmente las ciu- Reino de Navarra
dades, el valor de la moneda y los Condado de Champaña
impuestos. Herencia de Blanca, madre de Teobaldo I de Navarra
Los problemas dinásticos apare- Señoríos en feudo cedidos por Teobaldo I al rey de Francia en 1234
cieron a la muerte de Enrique I en
205
O R G A N I Z A C I Ó N T E R R I T O R I A L D E N AVA R R A E N E L S I G L O X I I I
ur
R. Ado
Dax
FRANCIA
Bayona
Fuenterrabía
R.
San Sebastián Sauvaterre
Niv
Tierras de
e
Ultrapuertos
Osses
ón
ervi
Tolosa Pied-de-Port
CASTILLA Valcarlos
Merindad de
Pamplona
Huarte-Araquil Roncesvalles
Vitoria
R. Arga
lazar
ti
ra
R. E
R. Ira
Merindad de
or
bro
d
Pamplona
Za
Estella
R. Sa
Roncal
R.
R. Ega Estella
Marañón Monreal
San Vicente Sonsierra Labraza Los Arcos
Merindad de
Laguardia Artajona Sangüesa Sangüesa
Briones Viana Jaca
Tafalla R. Aragón
Mendavia
Logroño Olite Ujué ARAGÓN
Nájera
CASTILLA Caparroso
illa
gua
ajer
Calahorra
re
R. N
R. I
Arnedo Merindad de
La Ribera
Alfaro
Ejea
Fitero
Tudela
Tudején
a rb
R. A
Tarazona
R.
Eb
Límite de merindad ro
Límite actual de Navarra
1274. Se decidió el matrimonio de Al año siguiente, Felipe IV Le Bel se 1305, y de Felipe su esposo, ocupa-
Juana, su hija, con Felipe, segundo- convertía en rey de Francia y también ron el trono navarro, aunque sin resi-
génito del rey de Francia, todavía en Felipe I de Navarra por su matri- dir en el reino, los reyes de Francia
menor. La boda se celebró en 1284. monio. Después de Juana, muerta en hasta 1328.
206
26
G E O G R A F Í A D I O C E S A N A D U R A N T E L A R E C O N Q U I S TA ( s s . V I I I - X I I I )
208
EL ESPACIO URBANO ECLESIÁSTICO Y LA CIUDAD MEDIEVAL: LEÓN (ss. XII-XIV)
18 1 Puebla de
Renueva
Arrabal de
Río San Mamés
Bernesga
1 Puerta
del
Castillo
3
2
3
13
15 CIUDAD VIEJA 4
Pta. de 10 4 Puerta
Cauriense
Barrio de
San Lorenzo
Burgonuevo
8
2
Barrio de 6
San Marcelo
10
7
Puerta
14 del Obispo 5
7
Puerta Arco
BURGO del Rey
5
Barrios de San Pedro
Barrio de NUEVO 8 y de San Salvador
Francos
9
Puerta Barrio de
Gallega San Martín
11
6
eja
Puerta Cal
16 de Moros a Vi
es
Puerta
Pr
Moneda
Barrio
Falcón
9
0 100 m
12
Puebla de
Santo Sepulcro
Puebla de
San Lázaro
17
15 Parroquias y Collaciones: 1. San Juan de Renueva / 2. San Isidoro / 3. Santa Marina / 4. San Lorenzo / 5. San Pedro de los Huertos
6. Santa María de la Regla / 7. San Salvador de Palat de Rey / 8. San Salvador del Nido / 9. San Martín / 10. San Marcelo /
11. Santa María del Camino / 12. Santo Sepulcro
Otras iglesias: 13. San Pelayo / 14. Santiago / 15. Convento de Santo Domingo / 16. Convento de San Francisco / 17. San Lázaro /
18. Hospital de San Marcos
209
se redujo el poder de los obispos, capitular o catedralicio, que recibía material de la Iglesia. Además la
pero el Papado incrementó su capa- rentas de sus posesiones señoriales Iglesia era una gran potencia inmo-
cidad de intervenir en las diócesis. sólo donde las tenía, como cualquier biliaria, sobre todo en los barrios más
Papado y monarcas competían a otro señorío. Desde la Plena Edad antiguos y céntricos de las ciudades.
veces para que el cabildo catedrali- Media se solía ya dar una separación El espacio urbano de la ciudad de
cio, a quien correspondía la elección, entre la mesa del obispo y la mesa León puede servir de ejemplo.
seleccionase a determinado obispo. del cabildo, como haciendas segre- El cabildo como institución era una
La Iglesia diocesana estaba orga- gadas según los ingresos de unos u instancia muy jerarquizada. El obis-
nizada en parroquias, agrupadas en otros. Hay que tener en cuenta, por po encabezaba la institución, pero
arciprestazgos o arcedianatos, que otra parte, que las propiedades de los había una variada oficialidad de canó-
eran distritos diocesanos de rango cabildos catedralicios no eran úni- nigos –varias decenas por cabildo–,
intermedio y que hacían de puente camente rurales. En las ciudades dis- tales como vicario, arcedianos, chan-
entre el obispo y los párrocos. Los ponían, aparte de basílicas y ca- tre, deán o prior, maestrescuela y otras
obispos en la diócesis percibían los tedrales, de casas y otros muchos dignidades, amén de otros curas y
diezmos. Se repartían entre prelado, solares y predios urbanos. El gótico, capellanes. Además, los clérigos racio-
párrocos y arcedianos o arciprestes. el gran arte urbano floreciente en el neros recibían parte o “ración” de las
Pero por otro lado existía el dominio siglo XIII, debe mucho a este auge rentas capitulares.
ÓRDENES RELIGIOSAS Y Muchas casas cistercienses acumu- ción a laicos, construcción de con-
REFORMAS ESPIRITUALES laron en los siglos XII y XIII impor- ventos urbanos –a menudo extramu-
tantes patrimonios, como Morerue- ros– y no monasterios rurales, recur-
En los siglos XI al XIII en los rei- la o Carracedo, en el área leonesa, sos procedentes de las limosnas y no
nos hispánicos se sucedieron las mis- Sobrado en Galicia, Poblet o Santes de los dominios, preparación inte-
mas reformas que acaecieron en la Creus en Cataluña. Otras fundacio- lectual, implicación en las contro-
Cristiandad en lo que se refiere a nes eran femeninas, como Vallbona versias apologéticas, ideal personal
órdenes religiosas. El monacato o Las Huelgas, ya que la orden cis- de pobreza voluntaria y cercanía a
benedictino fue objeto de la reforma terciense ofrecía una alternativa de las preocupaciones sociales fueron,
cluniacense del siglo X , de origen retiro, oración y vida comunitaria entre otros, rasgos propios de esta
francés. Los grandes monasterios para las mujeres de todos los estra- revolución religiosa. La orden de
vieron reforzada su posición patri- tos sociales. Hacia 1300 el impulso predicadores, fundada por Santo
monial frente a los pequeños ceno- inicial de los cistercienses se había Domingo de Guzmán en 1216, y la
bios, muchos de los cuales fueron agotado. Ya por entonces la renova- de los frailes menores, fundada por
absorbidos por aquéllos. Los abades ción espiritual venía canalizada por San Francisco y aprobada en 1223,
de las grandes casas benedictinas otras órdenes. fueron las principales. Tuvo también
–Silos, Sahagún, San Pedro de Car- Una parte de los clérigos regulares buena acogida la extensión de la
deña, Leire o Ripoll, por poner algu- y canónigos, adscritos a la regla de rama franciscana femenina, la de las
nos ejemplos– eran grandes autori- San Agustín, había fundado un nuevo clarisas. Y en el caso concreto de
dades de sus respectivos reinos o tipo de monasterio basado en el de los dominicos, acabaron en pocas
territorios y los dominios de sus Premontré, fundado hacia 1120 por décadas controlando los nuevos ins-
grandes casas se extendían a menu- San Norberto. Los premonstratenses trumentos de la Iglesia del XIII ,
do por centenares de lugares. levantaron monasterios semejantes a como la Inquisición, la lucha con-
San Bruno, en la búsqueda de un los del Císter, en áreas rurales, y lle- tra la herejía y la enseñanza de la
retiro contemplativo y vida extrema, varon vida ascética. Algunos, como el Teología.
fundó la Cartuja a fines del siglo XI, de Santa María en Aguilar de Cam- Hubo en el siglo XIII otras Órde-
pero no tuvo mucho éxito en la penín- póo, llegaron a ser muy poderosos. nes análogas a las de franciscanos y
sula en los primeros siglos. Hacia Pero los premonstratenses también dominicos, como los mercedarios,
1100 tuvo más fortuna la reforma ini- ejercían una acción pastoral y de cura orden nacida en Cataluña e inicial-
ciada en Cîteaux. No socavó el poder animarum, lo que les hacía estar más mente especializada en la redención
patrimonial de los viejos monasterios cerca de la sociedad. Hubo una rama de cautivos, o los carmelitas, nacida
de “monjes negros” o benedictinos, premonstratense femenina, tutelada de un ideal neoeremítico surgido en
pero el Císter generó un nuevo ciclo por la masculina, así como monaste- Tierra Santa tras los fracasos cruza-
de fundaciones. El sentido espiritual rios dúplices. De todos modos, la ver- dos, o los agustinos, basados en la
era diferente, con mayor ascetismo y dadera novedad ya en el siglo XIII, regla de San Agustín pero con un
austeridad personal –también llevada pese a seguir su curso todos las órde- acento mendicante y no monacal.
a los edificios–, abandono del mundo nes anteriores, no venía de ellas, sino Aparte de las Órdenes citadas,
y retorno al trabajo, a veces en áreas de las órdenes mendicantes. otras congregaciones son de difícil
despobladas o agrestes. Desde San En efecto, desde principios del encuadramiento. Los canónigos
Bernardo de Claraval († 1153), los siglo XIII las órdenes mendicantes, regulares de los cabildos, colegiatas
ideales religiosos de estos nuevos compuestas por frailes y no por mon- y algunos clérigos parroquiales adop-
“monjes blancos” habían quedado jes, constituían toda una vanguardia taron desde el siglo XII o XIII un esti-
fijados. El primer monasterio hispá- espiritual en Europa. Vuelta al evan- lo de vida comunitario que se ase-
nico fue el de Fitero en 1140. gelio, especialización en la predica- meja al del clero regular, sin serlo.
210
MONASTERIOS CISTERCIENSES (ss. XII-XIII)
Alicante
Elche
Monasterios cistercienses
Monasterios cistercienses femeninos
211
E X PA N S I Ó N D E L A O R D E N P R E M O N S T R AT E N S E H A S TA 1 3 0 0
San Juan de
Gaztelugache
El Tejo
Villamediana
Aguilar de Campóo Bujedo
Arenillas de S. Pelayo Sordillos Quintanilla
Villoria Villapedro
Santa Cruz de Ribas Fuente de la Encina
Ibeas de Juarros S. Pelayo de Cerrato
Villamayor Reinoso de Cerrato Mur
Retuerta Brazacorta Bellpuig
Toro La Vid Almazán Fondarella
Fresnillo de
las Dueñas
Medina del Campo
Alba de Tormes Segovia
Ciudad Rodrigo Ávila
Toledo
Adoptaron una regla sencilla, la de sia, fue el de las Órdenes Militares. ponente tanto militar como religio-
San Agustín generalmente, y lleva- Una de ellas, San Juan del Hospital, so. Sus integrantes o freires, nobles
ron vida en común, pero sin renun- fundada hacia 1130 en Tierra Santa, por regla general, se atienen a la
ciar a la actividad pastoral caracte- tuvo presencia en los reinos hispá- regla cisterciense, según el modelo
rística. Clérigos de la abadía de nicos, sobre todo al norte del Duero, diseñado para Tierra Santa por San
Burgohondo de Ávila, la clerecía de aunque también en el reino de Tole- Bernardo. En algunas Órdenes los
San Marcos de Salamanca o los do. La del Santo Sepulcro, nacida al votos se interpretaban de forma laxa
canónigos de San Isidoro de León calor también de la primera cruzada, y, de hecho, algunas de ellas, como
son ejemplos de estas formas singu- tuvo poca presencia en Aragón y casi la de Santiago, permitían el matri-
lares de canónicas. La congregación nada en Castilla. La del Temple, monio. Pero en general la regla ser-
de San Rufo en Cataluña o los cléri- nacida en 1120, fue disuelta en 1312. vía para disciplinar esta militia que
gos de la colegiata de Roncesvalles Las llamadas Órdenes hispánicas se no podía perder de vista la misión
en Navarra respondían también a fundan en la segunda mitad del siglo para la que fueron fundadas, esto es,
estas formas especiales de congre- XII . Las principales fueron las de hacer la guerra contra los musul-
gación religiosa. Calatrava, fundada en 1158, Santia- manes.
Por supuesto, otro fenómeno dife- go, hacia 1170, y Alcántara, a
rente, pero también ligado a la Igle- comienzos del XIII. Tenían un com-
212
E X PA N S I Ó N D E Ó R D E N E S M E N D I C A N T E S : L O S C O N V E N T O S
FRANCISCANOS EN EL SIGLO XIII
Vivero
Avilés Gijón Castro
La Coruña Ribadeo Santander
Urdiales
Betanzos Mondoñedo Oviedo
Lugo Medina de Pomar Orduña
Santiago Vitoria Pamplona
Villafranca del Bierzo Frías
Pontevedra Estella Sangüesa Collioure
León Miranda de Ebro Laguardia
Orense Astorga Carrión Burgos Jaca
Allariz Sahagún Logroño Calahorra
Bayona Ampurias
Benavente Palencia Castrojeriz Huesca Vic
Tudela Tarazona Monzón
Mayorga Villalón Reinoso del Cerrato Gerona
Balaguer Cervera
Valladolid Soria Borja
Zamora Toro Almazán Villafranca del Penedés
Peñafiel Zaragoza Lérida
Tordesillas
Medina del Campo Cuéllar Ayllón Calatayud Cariñena Montblanc Barcelona
Rapariegos
Salamanca Sepúlveda Daroca Tarragona
Arévalo Segovia Atienza Tortosa
Ávila Guadalajara
Ciudad Rodrigo Alcocer Morella
Barco de Ávila Vinaroz Ciudadela
Madrid Teruel
Plasencia Huete
Talavera Cuenca
Toledo Murviedro
Palma
Valencia
Ibiza
Badajoz Ciudad Real Albacete Játiva
Córdoba Baeza
Úbeda Murcia
Jaén
Sevilla
Conventos franciscanos
Jerez Implantación de la rama femenina (clarisas)
C O N V E N T O S D E Ó R D E N E S M E N D I C A N T E S : E X PA N S I Ó N D E L O S C O N V E N T O S
DOMINICOS EN EL SIGLO XIII
Ortigueira
La Coruña
Toledo
Valencia
Játiva
Córdoba
Murcia
Écija
Sevilla
Jerez
213
27
LOS REGÍMENES JURÍDICOS mas o Usatges se recopilaron en el ción nobiliaria. En Navarra, desde la
TRADICIONALES siglo XII. Su uso, inicialmente reser- primera redacción en 1238, el Fue-
EN NAVARRA vado a los condados adscritos al ro Antiguo incluía las tradiciones
Y CORONA DE ARAGÓN Casal de Barcelona, se expandió más jurídicas del reino que el rey debía
tarde a toda la región. También se jurar, respetando los derechos y pre-
En la Cataluña altomedieval había extendió a Mallorca en el XIII, coe- rrogativas de los nobles. Con poste-
tenido vigencia el Liber. No así en xistiendo con las cartas y costums rioridad el texto, luego llamado Fue-
Aragón o Navarra. En Cataluña el locales de la isla. ro General de Navarra, fue refor-
declive del Liber se fue supliendo a El Fuero de Aragón refundía a mado y objeto de numerosos amejo-
lo largo del siglo XI con las decisio- mediados del siglo XIII el derecho ramientos.
nes dominiales y jurisdiccionales del consuetudinario de este reino, pero
ámbito de los condados. Estas nor- era sobre todo un código de orienta-
LOS FUEROS MUNICIPALES comerciantes. Sus mejoras posterio- Valencia. En las Cortes de 1261 la
res añadieron componentes de go- Costum de Valencia se territorializa-
Los fueros municipales son las bierno y autonomía municipal. Fue ba como fuero del reino, imponién-
principales fuentes de derecho para la base de otros textos, directamen- dose ya en todo él a finales del XIII
villas y ciudades en los siglos XII- te o a través del Fuero de Estella, con y principios del XIV, si bien este dere-
XIII. Son sólo un tipo de fuero, pero influencia en villas de Navarra y Gui- cho valenciano chocó con el fuero de
el más importante, porque se corres- púzcoa. En Cataluña, más que los base aragonesa y nobiliaria del nor-
ponde con los sistemas concejiles. El fueros se encuentran las llamadas te de la región.
despliegue de fueros municipales se cartas de población o de franquicia. Las familias de fueros municipa-
ajustó a familias jurídicas concretas Cuando, desde el siglo XII, se desa- les de la Corona de Castilla presen-
adaptadas para extender un determi- rrollaron municipios con autonomía, tan una enorme variedad fruto de su
nado modelo normativo a aquellos a estas cartas se añadieron normas historia. Algunos fueros locales no
sitios en los que los reyes, que eran locales, llamadas costums. alcanzaron la plenitud de normas
casi siempre quienes los concedían, El reino de Valencia, desde la municipales, como ocurre con cier-
entendían que había afinidad. Con repoblación de la ciudad, de ajusta a tos textos derivados de León ciudad
los fueros municipales llegaba la este modelo, con la peculiaridad de y con los fueros dados por señores
autonomía municipal, la regulación que la Costum de la ciudad, fijada eclesiásticos. Los fueros municipa-
de los mercados locales y la justicia entre 1238 y 1239 y basada en el les de Castilla y León, derivados de
local. derecho común, se exportó luego a tradiciones jurídicas anteriores, fue-
El Fuero de Jaca, entre 1063 y la mayor parte de las localidades del ron dados por los reyes. En las tie-
1077, se basaba en el derecho de reino. A este estatuto básico se remi- rras al sur del Duero, salvo en Tole-
francos, adecuado a burgenses y tieron los llamados Furs del reino de do, las tradiciones jurídicas antiguas,
216
F U E R O S M U N I C I PA L E S Y C A RTA S A F I N E S : F O C O S
Llanes S. Sebastián
(1206-1228) (c. 1180)
Vitoria Pamplona
León (1181)
(1017) (1129)
(premunicipal) Nájera
(1076) Estella Jaca
Sahagún Logroño (1090, (1077, 1134)
(1085-1152) (1095) 1164)
Tudela
Benavente Soria (1119-1124)
(1167) Zaragoza Lérida
(1120) Calatayud (1150)
Sepúlveda (1120-1131) (1119-1134
(1076)
Ledesma Salamanca Daroca
(1161-s. XIII) (ss. XII-XIII) (1142) Tortosa
Medinaceli
Ciudad Rodrigo Ávila (c. 1094) Molina (1149)
(c. 1190-1211) Alba de Tormes (1142)
(1140-s. XIII) Guadalajara
(1133)
Teruel
Escalona Madrid (1177)
(1130, 1142) (1202) Cuenca
Cáceres Toledo Uclés (finales s. XII-med. XIII)
(1231) (1101, 1118, 1166) (1179)
Valencia
(s. XIII)
Usagre
(1242)
Sevilla
(1250)
217
FUEROS MUNICIPALES EN LOS TERRITORIOS DE LA CORONA DE CASTILLA
F. BENAVENTE Áreas del interior del Reino Leonés (repoblaciones interiores, villas del Bierzo…)
(1167 y añadidos) Núcleos realengos de Galicia (La Coruña, Betanzos…)
F. LLANES (1206, 1228) —Villas o polas asturianas (XIII-XIV)
F. NÁJERA
(1076) Rioja
JACA
F. LOGROÑO Reino de Castilla Áreas de Navarra
(1095, mejora 1157) norte (Base F. ESTELLA)
(desde s. XIII, Área repoblaciones zona de Burgos
junto Fuero Real) Costa cántabra (Castro Urdiales, Laredo…)
Villas vascas (ss. XIII-XIV) directamente
o desde F. VITORIA (1181)
San Sebastián (c. 1180)
F. TOLEDO Francos
(1101, 1118, 1166) Castellanos Toledo, s. XIII
Mozárabes Córdoba (1241)
(Fuero juzgo) Sevilla (1250) Ciudades de Andalucía y Murcia
Carmona (1252)
F. SEPÚLVEDA Extremaduras históricas castellanas: zona segoviana y Roa, Soria-Medinaceli
(1076) UCLÉS (1179) F. TERUEL–CUENCA
(y afines) Influye directamente en F. CUENCA
vió para algunas villas de la Extre- y un pasado musulmán, por lo que dos por la legislación regia, los actos
madura castellana y buena parte de sirvió para la ciudad y como mode- de gobierno de reyes y señores juris-
la Meseta Sur; y el fuero o fueros de lo asimismo para las grandes urbes diccionales y los acuerdos y orde-
Toledo –1101, 1118, 1166–, con de Andalucía Bética y Murcia. nanzas municipales, que fueron ya
varios textos diferenciados –para Los fueros municipales en la Baja decisivos en la Baja Edad Media.
mozárabes autóctonos, para francos Edad Media perderían su vigencia
y para repobladores o castellanos– –salvo excepciones– al ser sustitui-
218
FA M I L IA D E F U EROS DE CIUD A D RODRIGO- CIM A -C OA
R. R. Duero
To rm
e s
Castelo-Melhor
Castelo-Rodrigo
R.
(1211-1237) oa
guÁ
C
eda
CIUDAD RODRIGO
Castelo-Bom (c. 1190-1211)
Alfaiates
(1209-1229)
ón
lag
.A
R
Coria
(1222-1227)
R. Tajo
Cáceres
(1231-1235)
a
Montánchez an
di
Gua
R.
Mérida
Usagre
(1242-1275)
Sepúlveda
Béjar Zorita
Huete TERUEL
Plasencia
CUENCA
Consuegra Alarcón
Alcázar
Alcaraz
Iznatoraf
Baeza Úbeda
219
E X T E N S I Ó N D E L F U E R O D E B E N AV E N T E Y B E N AV E N T E - L L A N E S
Ribadeo-Castropol
(1299)
Navia Luarca Villaviciosa
(1270) (Valdés) Gijón (Maliayo)
Puentedeume (1270) (1270) (1270)
(1270) Burgo Colunga
La Coruña (1220) Salas Siero LLANES
(1270) (1270)
(1208) (1270)
Grado Nava
Betanzos (1270)
(a. de 1225) (1256) Langreo
Sta. María (1338)
Parga de Balonga Cangas Sobrescobio
(1270) (1255) Somiedo Pola
(1225) (1269) (1344)
de Lena
(1266)
Puebla de
Muros S. Mamés
de Laciana
Villafranca (1270)
Llamas de
del Bierzo la Ribera
(1192) (1271)
Ponferrada
Friera
Molinaseca Mansilla
(1196) (1181)
Laguna Coyanza
(1205)
F. Escalona
refundido
(h. 1142) Fuero refundido
de TOLEDO
(h. 1166)
Alicante
(1252)
Orihuela
(1265)
Mula (1245)
Murcia
Córdoba (1266)
Niebla Sevilla (1241)
(1283) (1250) Carmona
(1252) Cartagena
(1246)
Arcos
(1256)
220
EXTENSIÓN DEL FUERO DE LOGROÑO
Bermeo
(1236)
Plencia
(1299) Lequeitio
Laredo (1325)
(1200)
Castro-Urdiales Guernica
(1163) Munguía Ondárroa
Portugalete (1376) Rigoitia (1366) (1327)
(1322) (1376) Marquina Deba
(1355) (1383) Cestona
Bilbao
(1300) (1383)
Larrabezua Guerricaiz Elgoibar
(1376) (1366) (1346) Azpeitia
Balmaseda Ermua (1310)
Lanestosa (1199) Miravalles Éibar
(1287) Durango (c. 1290) (1346) Azcoitia (1324)
(1375) (c. 1290) Placencia
Villaro (1343) Tolosa
Arceniega (1338) Elorrio Villarreal (1256)
(1272) (1356) Elgueta Bergara (1383)
(1335) (1268)
Ochandiano Mondragón Villafranca
(1254-1289) (1260) (1256)
LA ADMINISTRACIÓN cia de todos los que tenían acceso al sos, fue la de las tenencias, que fue-
DEL REINO Y DEL rey en determinadas reuniones, o ron castillos regios colocados bajo
TERRITORIO EN CASTILLA curia extraordinaria, formada por un dominans o senior, un noble que
(SIGLOS XI-XIII) magnates y grandes dignatarios ecle- actuaba desde ellos en nombre del
siásticos como obispos y abades. rey. Merinos reales y jueces partici-
La cúspide del reino está repre- Formaban un consejo del rey, aun- paban también en la administración
sentada por el monarca y su curia, que no se llamase así. del realengo de estas circunscrip-
de origen altomedieval. Al círculo En cuanto a la administración ciones, en concreto en la recauda-
cortesano más reducido –alférez, territorial, la institución esencial, ción fiscal y la administración de jus-
mayordomo...–, se añade la presen- identificada con los alfoces y comi- ticia respectivamente. En los siglos
221
XII y XIII entraron en declive las fuerzos de centralización de la cialmente el reinado de Alfonso X
tenencias y se fue consolidando otra monarquía, en este caso en el ámbi- fue destacado en estos cambios. El
forma de administración por encima to de la administración territorial. reinado fue reformista también al
de ellas y al mismo tiempo por enci- Pero también la corte y el sistema instituir alcaldes de corte y de alza-
ma de los señores y los concejos, al legal experimentaron semejantes da, leyes para todo el reino y un dere-
menos en algunas regiones. Fueron impulsos centralizadores. En el siglo cho nuevo de base romana y común
las merindades menores, al frente XIII los recursos fiscales mejoraron con vocación de unificar la antigua
de las cuales actuaron merinos, pero y se modernizaron. Se pasó de la vie- dispersión jurídica: Fuero Real,
no ya de la tenencia sino territoria- ja fiscalidad dominial y del realen- Espéculo y Siete Partidas. Aunque
les. En Castilla estos distritos se go señorial –infurciones, marzadgas, había habido con anterioridad reu-
agrupaban en la Merindad Mayor de caloñas, yantares, fonsadera...– a niones extraordinarias de la curia,
Castilla. Hubo otro Merino Mayor o nuevos tributos con vocación de como en León en 1188, no fue has-
Adelantado Mayor para León y Astu- impuestos, como servicios y mone- ta 1252, o quizá en 1250 con Fer-
rias y otro para Galicia. Al sur del das, que tendrán validez universal nando III, cuando en Castilla apare-
Duero la potencia de los concejos y, –para todos los súbditos, no ya sólo cieron las cortes, como cámara
al sur del Tajo, la de las Órdenes los vasallos del realengo– y el nue- legislativa, cauce de cuadernos de
Militares hizo que estas grandes cir- vo soporte legal de las cortes, así peticiones y de diálogo estamental.
cunscripciones regionales no se como tercias reales e impuestos En Castilla nobles e Iglesia no solían
extendieran aquí. Sin embargo, vol- sobre tránsito y compraventa, tales acudir a las cortes, de modo que fue
vieron a aparecer –el nombre será como montazgos y diezmos aduane- siempre genuinamente una cámara
Adelantamiento– en tierras del sur, ros –diezmos de la mar, almojari- de representación de las ciudades.
en Andalucía y Murcia. Merinos y fazgos–, que abrieron la puerta a una
Adelantados representaban los es- futura fiscalidad centralizada. Espe-
LAS INSTITUCIONES semejante a Castilla. Y también aquí rra el nacimiento de las cortes se sue-
DE LA MONARQUÍA en la segunda mitad del siglo XIII se le situar hacia 1245. Pero, al igual que
EN LA CORONA DE ARAGÓN superpuso una institución territorial en Castilla, hubo reuniones en la
Y NAVARRA más amplia, la de las juntas y sobre- segunda mitad del siglo XII en que los
junterías, que fueron distritos am- reyes habían incorporado ciudadanos
Los condados catalanes tenían una plios del reino: Zaragoza, Huesca, a la curia amplia.
estructura peculiar. El conde era la Calatayud, Daroca, Albarracín, En Aragón, durante los primeros
cima de la soberanía. Desde la Alta Teruel, Tarazona, Sobrarbe-Riba- años del reinado de Jaime I estas pre-
Edad Media el de Barcelona tutela- gorza y Jaca. En Cataluña actuaron sencias ciudadanas en la curia abrían
ba varios de ellos. Y desde la for- bailes y vicarios, veguers en catalán. el camino a una cámara representa-
mación de la Corona de Aragón el Las veguerías en la Plena Edad tiva, que se traducirá en las cortes,
conde de Barcelona unía su figura a Media fueron ya distritos y los cuyo despegue se suele situar en
la de rey. veguers eran los delegados en ellos 1261. En las cortes de la corona,
El funcionamiento del poder del poder regio-condal. Se estable- separadas para Aragón, Cataluña y
monárquico aragonés o navarro se cieron así, por debajo de la escala de Valencia, hubo tres brazos, el ecle-
basaba también en el rey y la curia. los condes, cerca de una veintena de siástico, el nobiliario y el real. Pero
Asimismo en estos reinos desde el veguerías. la gran diferencia con Castilla fue el
siglo XI existieron tenencias, llama- En Navarra se superpusieron tam- desarrollo en el último tercio del
das así o bien honores. bién a las tenencias las merindades siglo XIII de instituciones de lo que
En cada parte de la corona de Ara- o distritos del reino, que también se ha llamado pactismo, que suponía
gón desde mediados del XIII actua- cuajaron en el siglo XIII: Estella, la obligación de los reyes de contar
ron delegados del poder real, Pro- Pamplona, Tudela y Sangüesa. El con la aprobación de los estamentos
curador o lugarteniente real, que territorio de Ultrapuertos tenía una sociales superiores, en cada una de
gobernaba en nombre del rey en cada personalidad aparte dentro del reino. las cortes de cada territorio, para
uno de ellos, y Baile General, ocu- En el siglo XIII las coronas de Nava- gobernar y recaudar tributos. Este
pado del patrimonio real. Delegados rra y Aragón desplegaron una nueva régimen nació en 1283 y garantiza-
regios en una escala menor fueron fiscalidad –monedaje, bovatge...–, así ba a la institución y a las élites de la
los bailes. Los merinos regios tuvie- como instituciones de representación sociedad un papel clave en el siste-
ron en el reino de Aragón un papel estamental como las Cortes. En Nava- ma político.
222
BAJA EDAD MEDIA
(siglos XIV-XV)
28
G E O G R A F Í A D I O C E S A N A E N E L S I G L O X I V
Mondoñedo
Oviedo
Lugo OBISPADOS EXENTOS Pamplona
Santiago
Astorga León Sto. Domingo
Burgos Calahorra Huesca Urgel
Orense Gerona
Tuy PROVINCIA ECLESIÁSTICA Vic
Palencia Tarazona Lérida
Braga Zaragoza
Zamora Osma Barcelona
PROV. EC. DE BRAGA DE ZARAGOZA
Oporto Salamanca Sigüenza Tarragona
(1318) Tortosa
Lamego Segovia
Viseo Ciudad Rodrigo
Albarracín
Guarda Ávila PROVINCIA
Coímbra Coria Plasencia Cuenca ECLESIÁSTICA
Segorbe DE TARRAGONA
Idanha PROVINCIA Toledo
Mallorca
ECLESIÁSTICA
PROVINCIA Valencia
DE SANTIAGO
ECLESIÁSTICA
Lisboa Mérida
DE TOLEDO
Évora Badajoz
PROVINCIA OBISPADOS
ECLESIÁSTICA Córdoba EXENTOS
DE LISBOA Jaén
PROVINCIA
(1393) Cartagena
Sevilla
Silves ECLESIÁSTICA
REINO DE GRANADA
(desde 1393 en prov. Lisboa) DE SEVILLA
Cádiz
Algeciras
Límite de las provincias eclesiásticas
Arzobispados
Obispados
226
G E O G R A F Í A D I O C E S A N A E N E L S I G L O X V
Mondoñedo
Lugo Oviedo
OBISPADOS EXENTOS Pamplona
Santiago
León
Sto. Domingo
Astorga Burgos Jaca Urgel PROV. EC.
Orense Palencia Huesca
Tuy Calahorra DE TARRAGONA
Braga Zamora Tarazona Lérida Vic Gerona
Osma Zaragoza
PROV. EC. DE BRAGA
PROV. EC. Barcelona
Oporto Salamanca Sigüenza DE ZARAGOZA
Lameo Tarragona
Ciudad Rodrigo Segovia Albarracín Tortosa
Viseo
Ávila
Coímbra Coria
Plasencia Cuenca
PROVINCIA Segorbe
PROVINCIA Idanha ECLESIÁSTICA Toledo Mallorca
ECLESIÁSTICA DE SANTIAGO
DE LISBOA PROVINCIA Valencia
Mérida ECLESIÁSTICA
Évora Badajoz DE TOLEDO PROVINCIA
Lisboa
ECLESIÁSTICA
DE VALENCIA
Córdoba (1492)
Jaén
Sevilla Guadix
Silves Granada Cartagena
PROVINCIA
ECLESIÁSTICA PROV. EC. DE GRANADA (1492)
DE SEVILLA
Almería
San Marcial de Rubicón Cádiz Málaga
Límite de las provincias eclesiásticas
Las Palmas Arzobispados
1485 Obispados
REFORMAS Y CAMBIOS había tenido especial auge antes en tenses, o la de algunas congregacio-
RELIGIOSOS los reinos hispánicos, y que vivió una nes de clérigos regulares, como San
pequeña edad dorada en estos siglos, Isidoro de León o Párraces.
El descrédito de la Iglesia empu- con monasterios muy prestigiosos Para las Órdenes mendicantes los
jaba a la renovación. Papado y con- como la Cartuja de Miraflores. Todo siglos XIV y XV fueron de esplendor.
cilios diseñaron campañas de depu- ello eran respuestas monacales a una Pero sus caminos fueron diferentes.
ración y exigencia. Sin embargo, las conciencia de crisis espiritual de la Los franciscanos se identificaban
reformas más potentes nacieron fue- Iglesia. más que ninguna otra congregación
ra de la jerarquía propiamente dicha. Y aparecieron también nuevas con el tejido social y las sensibilida-
Incluso las órdenes más antiguas órdenes. En 1373 unos hermanos des cotidianas de los laicos, hombres
aparecen en la época ofreciendo beatos castellanos, Pedro Fernández y mujeres, sobre todo urbanos. Pero
renovadas expectativas de cambio. Pecha (†1402) y Fernando Yáñez la orden, que en su línea oficial se
Los benedictinos promovieron des- Figueroa, fundaron la Orden de San extendía sin parar, se vio desgarra-
de el siglo XIV una reforma monás- Jerónimo, que fue muy popular en da por radicalismos heterodoxos,
tica interna basada en la estricta los siglos siguientes. La sencilla regla aunque también por proyectos de
observancia, como se denominaba agustiniana sirvió para nutrir la con- observancia, como los “descalzos”,
la vuelta a la austeridad originaria. gregación de nuevos adeptos: obe- en la línea de los jerónimos o afín,
El monasterio de San Benito de diencia, ascetismo y recogimiento pero sin romper con la orden. Los
Valladolid desde 1390 significó el interior fueron los fundamentos de dominicos evolucionaron en estos
despegue de esta corriente, jalonada la Orden. Instituciones como Santa siglos reforzando más que nunca sus
en el siglo siguiente por la adopción María de Sisla o Santa María de posiciones de poder, con el control
de las reformas por parte de otros Guadalupe dieron fama a los jeróni- de las nacientes universidades –Sala-
monasterios, como el de Montserrat, mos. Contaron pronto con una rama manca, Lérida, Valladolid–, como
que adoptó la observancia a finales femenina. Y además, gracias al res- interlocutores del Papado, como pre-
de la Edad Media. El Císter también paldo de la propia monarquía, lide- dicadores y como destacados pole-
cambió. Así como otra rama de mon- raron y absorbieron la reforma de mistas. Ello no les impidió compa-
jes blancos, los cartujos, que no otras órdenes, como los premonstra- ginar en muchos conventos estas
227
M O N A S T E R I O S J E R Ó N I M O S
(F.) Femeninos
condiciones con una vuelta a la pure- nueva identidad de los laicos como hacia 1380-1390, o Alonso de Espi-
za evangélica, llevando a cabo su receptores de una política de adoctri- na, hacia 1460.
propia observancia, siempre con el namiento, catequesis o de campañas Para los laicos la religiosidad de
control de la teología académica que efectivas de predicación, tareas éstas la época ya no era sólo algo colecti-
les convertía en intelectualmente en las que destacaron personajes vo o sin emoción, sino que se empe-
hegemónicos dentro de las Órdenes como Ramón Llull († 1316), Fran- zaba a vivir de forma personal. Algo
y casi de la Iglesia. cesc Eiximenis († 1409) o Vicente que también se relaciona con un
Fue característico de la Iglesia y la Ferrer († 1419). Ellos lograron sacar alcance de la educación y la forma-
religiosidad medieval un mayor pro- la religión de los conventos o las igle- ción religiosa y cultural más amplio
tagonismo de la sociedad y los laicos, sias y convirtieron los problemas de y más extenso socialmente. No se
que se traduce en diversos fenóme- espiritualidad, devoción y moralidad olvide que el período bajomedieval
nos de naturaleza dispar: auge de las en fenómenos de opinión pública. viene caracterizado por individuos
devociones populares, cofradías, órde- Otros predicadores orientaron sus más libres, estados más fuertes y
nes terceras o de laicos, beaterios, imprecaciones a denostar a judíos y saberes más laicos.
entre otras expresiones de este tipo; conversos, como Ferrán Martínez,
228
29
La Corona de Castilla
en la Baja Edad Media:
cambio de dinastía, conflictos políticos
y reformas institucionales
CONFLICTOS INTERNOS cia en la corte de aristócratas insu- ya por su mujer, la hija de Juan de
Y GUERRA CIVIL misos. Entre sus enemigos elimina- Haro el Tuerto, con quien se había
dos se encontraban el citado Juan el casado en 1331. Alfonso XI consi-
El reinado de Fernando IV (1295- Tuerto, asesinado en 1326. El seño- gue también apaciguar hacia 1337 al
1312), como lo había sido el ante- río de Vizcaya, que éste detentaba, infante don Juan Manuel tras una
rior, fue muy inestable. Destaca la pudo ser reclamado por el rey poco década de desencuentros intermi-
figura de la madre del rey, María de después –1333–, pero ello provocó tentes tras repudiar Alfonso XI a su
Molina, que actuó como regente, al la futura enemistad hacia Alfonso XI hija tras una promesa incumplida de
tener nueve años el nuevo monarca. de Juan Núñez de Lara, miembro del matrimonio. Ya aliados Alfonso XI
Los Lara y Haro, apoyados por fac- linaje de la Cerda –hijo de Fernando y don Juan Manuel combatieron jun-
ciones de la familia real, provoca- de la Cerda, nieto de Alfonso X–, tos en El Salado. Antes, en 1331, el
ban un clima inestable, con el telón que reclamaba el señorío de Vizca- rey había obtenido también el vasa-
de fondo de las aspiraciones de
los infantes de la Cerda, Fernando
(† 1322), fusionado con los Lara, y
Alfonso († 1334), en quien continuó GUERRA CIVIL CASTELLANA E INTERVENCIÓN EXTERNA
el linaje de la Cerda. El linaje de don A) Guerra de los dos Pedros (1356-1365)
Manuel, padre del célebre escritor,
era asimismo influyente, ya que don
Manuel fue hijo de Fernando III y Miranda Pamplona
por tanto hermano de Alfonso X. NAVARRA
Don Juan Manuel continúa esta Haro
estirpe de sangre real. Contra las Nájera
Tudela
pretensiones nobiliarias se convo-
Tarazona ARAGÓN
caron cortes y se organizaron varias Soria
hermandades, sobre todo en la Borja Zaragoza
Meseta del Duero, en 1295 y 1297. Sitges Barcelona
Cariñena
Desde 1301 mejoró la atmósfera Medinaceli Calatayud
política, con la mayoría de edad del
Tortosa
monarca ese año. En 1304 se acor-
daba la pertenencia de Murcia a CASTILLA
Castilla. Teruel
María de Molina, que ya había sido
regente, aún tendría que serlo de nue- Segorbe
vo en el reinado de Alfonso XI (1312- Murviedro Palma
1350). Este rey llegó al trono con un Valencia
año de edad. La regencia la ocupa- Chiva
ron el infante don Juan –hijo de Gandía
Jávea Denia Ibiza
Alfonso X–, el infante don Pedro
–hijo de Sancho IV– y María de Elda Calpe
Molina. La abuela regente y algunos Alicante
Crevillente Elche
concejos y hermandades lograron Orihuela
proteger en los primeros años al rey. Guardamar
Murcia
En ellos destacan la Hermandad de Cartagena
1312-1313 y la Hermandad General
de 1315 así como, con otro cariz,
algunas rebeliones altonobiliarias.
Éstas se agudizaron desde 1319, al
morir en una campaña militar los dos
infantes regentes, pero, sobre todo,
Campaña de Pedro I en 1356: ocupación de Alicante
se exacerbaron a la muerte de María
de Molina en 1321. Se mostraron 1357: ocupación castellana de Tarazona
especialmente influyentes por enton- 1358: contraofensiva aragonesa por la Rioja, Soria y Medinaceli, y en la zona de Murcia
ces los tutores del rey, que fueron el Ataque naval castellano de 1359: toma de Guardamar, victoria sobre la flota catalana en
titular del señorío de Vizcaya Juan Sitges, fracaso de la toma de Barcelona
de Haro el Tuerto –hijo del infante Ataque aragonés y Trastámara en el Ebro en 1360: victoria castellana en Nájera
don Juan y María de Haro–, el infan- Ataque castellano contra Zaragoza en 1362
te don Felipe –hijo de Sancho IV– y
Invasión castellana en 1363: toma de Tarazona, Cariñena, Teruel, Segorbe, Murviedro,
el infante escritor don Juan Manuel Chiva y asedio de Valencia; paz de Murviedro
–nieto de Fernando III y sobrino de
Ofensiva castellana de finales de 1363 y 1364: toma de Alicante, Crevillente, Elche, Denia;
Alfonso X. Desde la mayoría de edad sitio de Valencia
de Alfonso XI en 1325 fue impo-
1365: retirada de Pedro I tras la recuperación de Murviedro por Pedro IV y al tener que
niéndose la estabilidad. Algunos atender la entrada en Castilla de las Compañías Blancas de Du Guesclin en apoyo de
métodos expeditivos acabaron con Enrique Trastámara
la vida o simplemente con la influen-
230
GUERRA CIVIL CASTELLANA E INTERVENCIÓN EXTERNA
B) Compañías blancas francesas (1366)
NAVARRA
CASTILLA Estella
Río
Ebr
o
Miranda ARAGÓN
Laguardia
Logroño Calahorra
Briviesca
Alfaro Ejea
Nájera
16 de marzo en Calahorra
la
Proclamado rey Enrique II Tudela
Río Najeril
Cascante
Burgos 8 marzo. Entrada de
las Compañías Blancas Magallón Río E
b ro
Primeros de abril. Toma de Burgos Tarazona
Coronación de Enrique II Borja
CASTILLA Zaragoza
ARAGÓN
Soria
Río Duero
llaje de Alfonso de la Cerda. En 1332 ron un frente a la postre vencedor. La guerra acentuó luego su inter-
Alfonso XI se hacía coronar en Las Enrique enlazó con Juana Manuel, nacionalización: los ingleses apoya-
Huelgas de Burgos ante una estatua de la estirpe regia del infante don ron a Pedro I desde 1362, mientras que
articulada de Santiago, realizaba una Juan Manuel. Con el título de con- Enrique Trastámara contaba con el
investidura de caballeros y fundaba de de Trastámara Enrique podía apoyo francés. El condestable Bertrand
la Orden de la Banda. aspirar al trono. Aragón le apoyó Du Guesclin invadió Castilla en 1366
En los últimos años del reinado, para perjudicar a Pedro I. Se prepa- con sus francesas Compañías Blancas.
desactivados los peligros internos ró una poderosa bandería, respal- Ese año Enrique Trastámara era pro-
–salvo Juan Núñez de Lara–, el rei- dada por la propaganda política, que clamado rey por sus partidarios. El
nado destacó por las reformas insti- acusó al rey de numerosos delitos y mismo año se incorporaba al bando
tucionales, municipales y jurídicas despropósitos: asesinato de muchos petrista el príncipe de Gales, el Prín-
emprendidas por Alfonso XI. El rey nobles, simpatías projudías, inca- cipe Negro, como fue conocido. La
reanudó también la guerra contra los pacidad para reinar. Pedro I, llama- alianza de Pedro I con los ingleses se
moros, con la victoria de El Salado do el Cruel o el Justiciero, según el concretó también en 1366 en el Trata-
en 1340 y la toma de Algeciras en punto de vista, contó en los prime- do de Libourne, por el que los ingle-
1344, que otorgaba a Castilla el con- ros años con un valido, Juan Alfon- ses ayudarían al rey a cambio del
trol del Estrecho. so de Aburquerque. Pero no pudo Señorío de Vizcaya. Desde ese año
Pedro I (1350-1369) llegó al tro- evitar las guerras: contra Aragón, la hasta el final tuvo lugar la guerra civil
no con 15 años. Entre las intrigas llamada “guerra de los dos Pedros”, en sentido más estricto y directo. Hubo
que hubo en su tiempo, hubo una desde 1356; y sobre todo el con- varias alternativas, incluso con algu-
línea que acabó siendo especial- flicto civil castellano, que comenzó na importante victoria petrista –segun-
mente preo-cupante. Se trataba de en 1350. Enrique Trastámara encon- da batalla de Nájera en 1367– hasta
la influencia que tenían en la corte tró apoyo francés. Pero fue derrota- que llegó la victoria de Enrique Tras-
y entre los nobles los hijos bastar- do en la primera batalla de Nájera támara, culminando la guerra en 1369
dos de Alfonso XI y Leonor de en 1360. Por entonces el enfrenta- con la muerte de Pedro I en Montiel,
Guzmán. Enrique, Fadrique, Tello y miento se desarrolló sobre todo en a manos de su hermanastro.
otros cinco hermanos más forma- el marco de la guerra con Aragón.
231
GUERRA CIVIL CASTELLANA E INTERVENCIÓN EXTERNA
C) Invasión inglesa (1367)
Roncesvalles
Bañares Logroño
a Burgos
Santo Domingo Nájera
Calahorra
Batalla de Nájera
(3 abril 1367)
Rí
oE
br
o
CASTILLA
Najerilla
Itinerario de la invasión inglesa por Eduardo de Gales (Príncipe Negro) en 1367, en apoyo de Pedro I. Victoria de Pedro I en Nájera
Contraofensiva de Enrique II Trastámara en la primavera de 1367
232
REYES DE CASTILLA EN LA BAJA EDAD MEDIA (1252-1504)
Dinastía Trastámara
Catalina
(= Enrique III de Castilla)
Catalina = Enrique III el Doliente Fernando
(hija del duque (1390-1406) (I, rey de Aragón, 1412-1416)
de Lancaster)
María = Alfonso V
Rey de Aragón
María de Aragón (1) = Juan II = (2) Isabel de Portugal Alfonso V Juan = Juana Enríquez
(hija de Fernando (1406-1454) Rey de Aragón (II de Aragón)
de Antequera) (1416-1458) (1458-1479)
233
GUERRAS DE CASTILLA CON PORTUGAL
na del propio Juan II, su primo, y
sobre todo por Álvaro de Luna, con-
A) Invasiones castellanas (1384-1385)
destable de Castilla desde 1423. Esta
última bandería nobiliaria acabó ven-
ciendo, tras alguna pequeña guerra,
en 1430, por primera vez, y de nue-
vo en 1445 en la batalla de Olmedo.
Durante aquellos años los linajes
nobles estuvieron en algún grado
Braganza aliados con una u otra facción. Des-
Chaves de 1445 Álvaro de Luna, convertido
en valido todopoderoso, ejerció un
gobierno personal. Al final, se for-
mó una liga nobiliaria nueva contra
Oporto Lamego R. Duero R. T
orm él. Cayó en desgracia y fue ejecuta-
es
Trancoso do en 1453. En 1454 moría Juan II.
Derrota castellana de
R.
Trancoso (05-85/06-85)
Al llegar al trono Enrique IV
Ág
Celorico (1454-1474) el hombre fuerte, a
ued
Mondego Ciudad
a
modo de valido, fue Juan Pacheco.
Guarda Rodrigo Su estrella duró hasta 1462. Desde
Coímbra entonces el hombre fuerte fue Bel-
Derrota castellana de trán de la Cueva. A él se achacó la
Aljubarrota (14-08-85) Entrada de Juan I paternidad biológica de la hija de
Leiría en Guarda (13-12-83)
Enrique IV, Juana, nacida en 1462,
Tomar R. Tajo
rumor favorecido por el hecho de que
Aljubarrota el primer matrimonio del rey con
Blanca de Navarra fue anulado por
Santarem Conquista de el Papa por no haberse consumado.
Santarem (12-01-84)
Con Enrique IV las luchas nobilia-
rias internas comenzaron a arreciar.
Lisboa
Atoleiros La última década del reinado fue
especialmente inestable. Una gran
Cerco de Lisboa Derrota castellana de liga altonobiliaria protagonizó un des-
marzo a septiembre Atoleiros (06-04-84)
(1384) tronamiento simbólico contra el rey
–Farsa de Ávila, 1465– y luego una
guerra. Encontraron en el hermanas-
R. Guadiana
234
GUERRAS DE CASTI LLA CO N PORTUG A L
tugal, entre 1475 y 1479. Alfonso V
de Portugal apoyó los derechos dinás-
B) Ofen s ivas ang l o po r t ug ue s a s e n Ca s t i l l a ( 1 3 8 6 - 1 3 8 7 )
ticos de un sector de la nobleza caste-
llana, alineado con Juana la Beltrane-
Entrada en La Coruña (25-07) ja, su sobrina. En 1476 los Reyes
Católicos obtuvieron una gran victo-
La Coruña Asedio a Benavente ria en Toro. Los enfrentamientos en la
(04-87) frontera con Portugal, en los que des-
Santiago
Ourense: corte transitoria tacó Ciudad Rodrigo, fueron incli-
Muros del duque (09-86) nando la balanza hacia Castilla. La
Pontevedra León victoria castellana robusteció la figu-
Monforte Astorga la
Ribadavia Es
R. ra política de la reina. Y además, en
Vigo Orense Valencia de Don Juan
Bayona comparación con el anterior, el reina-
Benavente Saqueo de Valderas por do de Isabel la Católica fue visto por
R. Miño Ponte Verín Valderas los ingleses (04-87/05-87)
do Mouro Villalobos Castroverde
muchos, ya en su época y a los pocos
Braganza Tábara años, como un momento de restaura-
Chaves Alcañices Villalpando
ción de la autoridad perdida y del pres-
Tratado de Ponte do Mouro Valladolid
Zamora Toro tigio de la monarquía. Y ello vino ava-
[en Monçao] (no v. 86)
lado por la alianza con Aragón, la
R. Duero Ledesma ormes
T dignificación de la acción de gobier-
Salamanca no, la recuperación del orden judicial,
R. Co
P R I N C I PA L E S N E X O S D I N Á S T I C O S D E L O S T R A S T Á M A R A
María = Alfonso V Isabel = (2) Juan II de Castilla (1) = María Alfonso V Juana = (2) Juan II (1) – (2) Blanca = Martín
Rey de Aragón de Portugal Rey de Castilla de Aragón Rey de Aragón Enríquez Rey de Navarra Reina de de Sicilia
(1406-1454) (1416-1458) Rey de Aragón Navarra
(1425/1441-1479) (1425-1441)
Isabel Juan = Margarita María = Manuel I Juana la Loca = Felipe de Habsburgo (2) Catalina = Enrique VIII
(† 1498) († 1497) de Austria († 1517) Rey de Portugal († 1555) el Hermoso († 1536) Rey de Inglaterra
235
M E R I N D A D E S D E C A S T I L L A
(1352: Libro Becerro de las Behetrías)
M AR CANT ÁBRI CO
Cabeza de merindad Santander
Límite de merindad San Vicente de la Barquera Santoña Laredo
SANTILLANA Castrourdiales
Localidades importantes va ASTURIAS DE
De
R.Miera
R. SANTILLANA
ón
Límite de la Merindad
R. P
SEÑORÍO DE VIZCAYA
As
R. N
Mayor de Castilla (incluida
R.
R.
as
Be
en el Libro Becerro)
a
Potes
nsa
R. Saja
say
LIÉBANA- Vega del Pas
a
PERNÍA CASTILLA
Reinosa Espinosa VIEJA
erga
R. Ebro
Cantamuda MEDINA DE Orduña
MERINDAD DE
R. Pisu
Cardaño Santullán
Villalba de Losa
ALLENDE DE EBRO
POMAR
REINO CERVERA AGUILAR DE R.
Eb
DE LEÓN CAMPÓO ro Vitoria
R. Carr
R. Ebro
Sedano Oña Frías
Herrera de Amaya BURGOS- Miranda
ión
Pisuerga Pancorbo
SALDAÑA Urbel UBIERNA REINO DE
VILLADIEGO BRIVIESCA
NAVARRA
MONZÓN
BUREBA Haro
Cea SALDAÑA VILLADIEGO STO. DOMINGO DE LA CALZADA
Cerezo
Sahagún Melgar Ubierna Belorado Logroño
CASTROJERIZ Burgos Nájera R.
CARRIÓN Osorno CASTROJERIZ Villafranca Eb
ro
Arlanzón RIOJA-MONTES DE OCA
CARRIÓN
Astudillo CASTROJERIZ
Paredes de Nava Muñó MERINDAD
MONZÓN
CANDEMUÑÓ DE LOGROÑO
Lara Barbadillo
PALENCIA PALENZUELA Covarrubias
Salas de los Infantes
CAMPOS rga Lerma
ue R. Arlanza
Medina de Rioseco Pis Baltanás
R.
Dueñas SANTO DOMINGO DE SILOS CONCEJO DE SORIA
CERRATO
INFANTAZGO
Valladolid
Torrelobatón CONCEJO DE
CON
CON
UCERO
CEJ
Tordesillas
CON ESTEB
CON SMA
CON ONTE
SAN
DE
R. Duero Duero
CEJ
DE
CEJ
OD
CON ORTIL
CON UÉLLA
CO LME
DE
DE C
DE
O
CEJ
CEJ
M
CEJ
OD
CONCEJO
ER
OD
NC
P
CEJ
CEJ
O
DE MEDINA
OD N
O
E
OA
O
E PE
EJO DO
CUR
O
A
E
JO
ÑAF
LO
I EL
R
IEL
LAS TRANSFORMACIONES consejos de gobierno estables en los realengo, sino que alcanzaba a todos
DEL ESTADO municipios, con la implantación del los súbditos a través de instituciones
EN LOS SIGLOS XIV Y XV Regimiento; despliegue, todavía no territoriales generales. Los concejos,
consolidado, de delegados regios en sobre todo allí donde se extendían
La tendencia principal fue la cen- los municipios o corregidores inci- casi de forma exclusiva, daban cohe-
tralización política, sustentada en ins- pientes; primacía de la legislación sión al territorio, pero subordinados
tituciones monárquicas fuertes que central y de las cortes, tal como reco- a las instituciones centrales indica-
no se subordinaban a la nobleza, en gía el Ordenamiento de Alcalá de das. Adelantados y Merinos Mayo-
una fiscalidad indirecta moderna 1348; mayoría de justicia para el rey res constituían los altos cargos de la
legada al tejido económico del país frente a las demás jurisdicciones; y administración territorial en otras
y no a las exigencias de las cortes y creación de impuestos avanzados, regiones. Incluso en algunas que
en una sociedad política en la que las como la alcabala, un porcentaje estaban tradicionalmente muy frag-
élites urbanas y nobiliarias encon- sobre las compraventas, destinado a mentadas, como por ejemplo, los
traban acomodo y recompensas fuer- ser el sostén de las finanzas públicas territorios de Castilla la Vieja, agru-
tes sin controlar directamente los en el futuro. La administración terri- pados en la Merindad Mayor de Cas-
aparatos de estado. torial también reforzó las posiciones tilla, funcionaban una veintena de
El reinado de Alfonso XI fue ya de la monarquía. El poder regio ya circunscripciones, llamadas merin-
avanzado en reformas: creación de no llegaba a sus vasallos a través del dades menores.
236
C O R T E S D E C A S T I L L A
C O R T E S D E C A S T I L L A
León
Burgos
Soria
Toro Valladolid
Zamora
Salamanca
Segovia
Ávila
Madrid Guadalajara
Toledo
Cuenca
Murcia
Córdoba
Jaén
Sevilla
237
ALDEAS DE LA MERINDAD DE LIÉBANA Y PERNÍA
(Libro Becerro de las Behetrías, 1352)
REINO
DE LEÓN
Beges
ASTURIAS DE SANTILLANA
Lebeña
Cabañes
Pendes = Noval
Colio Castro
Viñón Cobeña
Trillayo Salarzón
Pumareña S. Pedro (Bedoya)
Argüébanes Armeño Tama
Lon Rases Aliezo Esanos
Turieno Llayo (S. Sebastián)
Tanarrio Puente Hojedo Cahecho
Monasterio de Baró Potes Frama Luriezo
S. Juan de Naranco Mogroviejo a Mº Sto. Toribio Cambarco
v Aniezo
Espinama De Valmeo Torices
Cabezón de
Pembes Tudes Liébana
Campollo S. Andrés
Piasca Buyezo
R. Cosgaya Perrozo S. Mamés
Dobárganes Toranzo Tollo Lamedo
Los Cos
La Vega ó S. Vicente Lerones Belmonte Lombraña
Entrerrías
Vejo Bores de Pujayo Dolaye Cotillos Sta. Eulalia
Pollayo Soberado Yebas Barreda Dos Amantes Uznayo
Lomeña Obargo Valdeprado
Villaverde Tresabuela
Barago Pesaguero Salceda
Ledantes Barrio Avellanedo
Dobres Cueva
Vendejo
Llánaves
Armada
Caloca
Piderasluengas
REINO Casavegas
Camasobres
DE LEÓN
Rueda
su
Vado
erg
Barcenilla Salinas
a
Quintanilla de
Riopisuerga Quintaluengos Quintanahernando
Dehesa
Límite de merindad de Montejo
Límite de actual provincia
Colmenares
SALDAÑA Merindad castellana o Reino colindante
El siglo XIV, o para ser más exac- Tras el reinado de Pedro I, que no instituciones centralizadoras muy
tos, el período entre 1252 y 1350 fue alteró la situación, la dinastía Tras- importantes. La Audiencia Real, a
uno de los de mayor dinamismo de támara robusteció también estas ten- modo de cámara suprema de justicia,
las Cortes de Castilla, con numero- dencias, si bien con un acento insti- nació en 1371. Los oidores o jueces
sas convocatorias –42 reuniones en tuyente y de apoyo social muy de este tribunal superior resolverían
ese intervalo– y presencia de multi- característico. Durante los primeros los casos principales, en grado de ape-
tud de ciudades. reinados Trastámara se crearon dos lación o directamente los contencio-
238
sos jurisdiccionales. El Consejo Real Todo ello constituía una serie de toma de decisiones. Por otra parte en
se instituyó en el reinado de Juan I, pasos de gigante hacia la centraliza- el siglo XV se desarrollaron tenden-
quedando regulado en 1385. Tenía ción de la monarquía castellana, que cias de tipo “absolutista” en la
algunas atribuciones judiciales, pero se aceleró en el siglo XV. Durante los monarquía castellana, tanto en el dis-
sobre todo era un órgano político que reinados de Juan II, Enrique IV e Isa- curso político, como en algunas prác-
ejercía con el rey el gobierno del rei- bel I todas estas instituciones del ticas, entre ellas la de gobernar por
no. También durante los primeros estado permitían a la monarquía provisiones y pragmáticas regias. A
Trastámara las Cortes de Castilla intervenir en los municipios realen- diferencia de las del siglo anterior,
gozaron de una vida muy activa y fun- gos, obtener recursos en abundancia las cortes del XV entraron en declive
cionaron como verdadera cámara de todos los súbditos y poder con y apenas acudían 17 ciudades. Se tra-
legislativa. Se reunían a menudo y a ellos transferir rentas importantes a taba de las capitales de los “reinos”
ellas acudían numerosas ciudades. Por los principales señores, con lo que la –la noción de reino era una referen-
ejemplo, a las de Madrid de 1391 acu- alta nobleza de servicio pudo vivir cia geográfica–, es decir, León, Bur-
dieron 50. Otras importantes refor- del estado. Para la fiscalidad fue muy gos, Toledo, Jaén, Córdoba, Murcia
mas del estado acabaron por cristali- importante la alcabala. Por ejemplo, y Sevilla; y junto a ellas, las otras
zar durante estos primeros reinados en 1429 representaba el 75% de los ciudades de realengo de primera
Trastámara: la generalización de la ingresos ordinarios de la monarquía. línea: Salamanca, Zamora, Toro, Ávi-
alcabala, que se convirtió en un El rey de Castilla obtenía sus princi- la, Soria, Segovia y Cuenca; a ellas
impuesto que gravaba el 10% de los pales ingresos sin depender de las se añadían tres “villas” –no eran
intercambios, que revolucionó la Cortes –que también votaban servi- “ciudades” porque no eran sedes
hacienda castellana; y la institucio- cios y monedas– ni de los nobles, lo episcopales–, esto es, Valladolid,
nalización de los corregidores. que permitió mayor autonomía en la Madrid y Guadalajara.
239
30
242
GRANDES de sometimiento de los reyes a las res- diente desde 1276. Su historia aca-
CIRCUNSCRIPCIONES pectivas oligarquías de cada reino. Con bó en 1344 y, definitivamente, en
DEL REINO DE VALENCIA Alfonso el Benigno (1327-1336) y 1349, cuando Pedro IV venció a Jai-
EN 1304-1305 Pedro el Ceremonioso (1336-1387) se me III de Mallorca en Llucmajor,
iniciaba un declive de la dinastía rei- donde murió este último. Durante esa
REINO nante, el Casal de Barcelona. guerra Montpellier y Carlades fue-
DE GOBERNACIÓN Durante el reinado de Pedro el ron trasvasados a Francia y por ello
ARAGÓN DE
CASTELLÓN Ceremonioso se suscitaron de nuevo ya no se añadió a la corona con los
(V. d’Uixó) problemas con los estamentos. En demás estados de Jaime de Mallor-
1347 y 1348 se reabrió la organiza- ca. Tras 1349 las Islas Baleares fue-
ción de la Unión Aragonesa, contro- ron un apéndice de Cataluña.
GOBERNACIÓN lada por los principales nobles y apo- El monarca tuvo que hacer frente
CORONA DE VALENCIA
DE yada por el Conde de Urgel, Jaime. a la guerra con Castilla, la “guerra
Valencia
CASTILLA Pero la derrota de los unionistas fren- de los dos Pedros”, entre 1356 y
te a los realistas en Épila (1348) per- 1365, con graves quebrantos para sus
mitió a la monarquía limitar políti- recursos. En la guerra hubo alterna-
Játiva camente el poder de la aristocracia y tivas diversas. La paz de Terrer de
GOBERNACIÓN sellar una alianza de largo plazo con 1361 no tuvo consecuencias y fue un
DE JÁTI VA los concejos de Aragón. En los mis- respiro momentáneo. Un momento
Yecla mos años Pedro el Ceremonioso, delicado fue el tratado de Murviedro
GOBERNACIÓN apoyado por muchas villas realistas, –actual Sagunto–, de 1363, en que
DE ORIHUELA combatió y venció a la Unión Valen- Castilla reclamó a Aragón Alicante,
Orihuela ciana, de corte distinto de la arago- Elche, Guardamar y Orihuela. El tra-
nesa, ya que fue dirigida por la oli- tado no se cumplió y las hostilidades
garquía de la ciudad de Valencia, siguieron hasta 1365.
Cartagena celosa en defender sus prerrogativas Pedro IV continuó la expansión
Tratado de Torrellas (1304)
políticas frente al intervencionismo mediterránea de sus predecesores.
Tratado de Elche (1305) regio. La derrota de la Unión Valen- Pudo acercarse a Sicilia gracias a la
ciana en 1348 no anuló, sin embar- política matrimonial. Un primer paso
go, el régimen municipal, abierto allí fue su boda con Leonor de Sicilia en
a los estamentos y gremios, predo- 1349 y un segundo fue el propósito
minantemente a sus sectores más hacia 1379 de casar a su nieto Mar-
rebeliones promovidas por los geno- altos. tín con la reina de Sicilia, María,
veses y revueltas sardas. Pedro el Ceremonioso logró rein- todavía niña. Toda esta política exte-
Desde 1283 funcionaban en Catalu- corporar los territorios del reino de rior dejó exhaustas las arcas regias,
ña y Aragón instituciones “pactistas”, Mallorca, que había sido indepen- lo que obligó al monarca a someter-
CASTILLA VALENCIA 13
23 Alghero Sassari
Olbia
Mar Gaeta DE
Benevento
Bari
Nápoles
Valencia Palma Salerno Tarento
Amalfi
CERDEÑA Tirreno NÁPOLES
Oristano
Alicante
Mediterráneo Cagliari
(Anjou 1266-1442)
Murcia
243
REYES DE ARAGÓN Y MALLORCA EN LA BAJA EDAD MEDIA (1276-1516)
R e i n o s d e A r a g ó n y Va l e n c i a , C o n d a d o d e B a r c e l o n a , R e i n o d e M a l l o r c a
Jaime II Pedro III el Grande = Constanza de Suabia Isabel = Felipe III Violante
Rey de Mallorca (1276-1285) de Francia =
(1276-1311)
Conde Rosellón y Cerdaña,
Alfonso X de Castilla
señor de Montpellier
Pedro
Conde de Urgel
Dinastía Trastámara
Duarte I = Leonor Alfonso V el Magnánimo Juan II = (1) Blanca de Navarra María = Juan II
Rey de Portugal (1416-1458) (1458-1479) Rey de Castilla
= (2) = Juana Enríquez
María de Castilla Carlos
Príncipe de Viana Fernando II el Católico = Isabel I de Castilla
(1479-1516)
se a las cortes para conseguir recur- con Martín el Joven, a principios del za en Aragón, nobleza rural y oli-
sos. En las últimas décadas del rei- XV gracias al matrimonio en 1391, garquía barcelonesa en Cataluña y la
nado funcionó por ello un verdade- como estaba previsto, de su reina élite urbana en Valencia.
ro gobierno de los estamentos y un María de Sicilia y Martín el Joven, En conjunto, los últimos reinados
declive de la capacidad de maniobra hijo de Martín el Humano. Con la de la Casa de Barcelona, sobre todo
del poder central. El declive se acen- isla se incorporaban de derecho sus el de Pedro el Ceremonioso, aunque
tuó en los reinados de Juan I (1387- dependencias griegas de Atenas y sacudidos por crisis frecuentes, fue-
1396) y Martín el Humano (1396- Neopatria. Los últimos reinados de ron importantes en la configuración
1410). Destacaron por el deterioro la dinastía destacaron también por la institucional, a partir del patrón ya
de la situación en el Mediterráneo, intensificación del control de cada instalado del pactismo. Estas nove-
salvo por la recuperación de Sicilia, estado por los estamentos: alta noble- dades fueron numerosas. Entre ellas,
244
C ATA L U Ñ A Y E L R E I N O D E M A L L O R C A
REINO DE FRANCIA
PRINCIPADO
DE CATALUÑA
Ciudadela
Pollensa
Inca
Alaró Ciutat de Mallorca
CORONA DE Llucmajor
Valencia Santueri
CASTILLA
REINO DE VALENCIA
Ibiza
la creación de la institución del here- Se mantuvieron y reforzaron las nidades de aldeas del sur del mismo;
dero –ducado de Gerona– desde fórmulas de administración territorial el ejercicio del poder regio en el rei-
1351. Asimismo, se reforzó la dele- de cada estado: las veguerías o dis- no de Valencia venía jerarquizado por
gación del poder regio en cada esta- tritos regios, con un consell bajo las el Procurador General, el Bayle Gene-
do en la figura del Procurador o órdenes del veguer, fueron las uni- ral y, a escala local, los batlles.
Gobernador General, capaz de asu- dades esenciales en Cataluña y, en un Entre las grandes instituciones cen-
mir el mando y de nombrar lugarte- escalón más bajo, subveguerías y bat- trales, además de los típicos oficios de
niente en su lugar y que se había ins- lles locales, como instrumentos de la corte, se fortalecieron el Consejo
tituido a mediados del siglo XIII; intervención superior en las localida- Real y la Audiencia, como órganos de
existió también, desde este mismo des; en Aragón seguían funcionando gobierno regio y judicial respectiva-
siglo XIII, la figura del Bayle Gene- merindades y baylías, de origen anti- mente. Uno y otro órgano se acoplaron
ral en cada estado. Se creó un Maes- guo, y juntas y sobrejunterías, más a cada estado. Además, éstos tenían
tre Racional, como máxima autori- recientes, que eran los grandes dis- también instituciones propias: el Justi-
dad hacendística de la corona. tritos del reino, además de las comu- cia de Aragón, en ese reino, fue inter-
245
A S I E N TO S D E L A S C O RT E S D E L A C O R O N A D E A R A G Ó N
DURANTE LA BAJA EDAD MEDIA
Perpiñán
Villafranca
de Conflent Colliure
Sos del Rey Católico
Jaca
Aínsa Puigcerdá Camprodón Figueras
Uncastillo
Sádaba Besalú
Berga Torroella de Montgrí
Ejea de los HUESCA BARBASTRO
Caballeros
Almudévar San Esteban VIC GERONA
TARAZONA Tauste de Litera Santpedor
Monzón
Alagón Tamarite de Litera Manresa
Sariñena Cervera
Magallón LÉRIDA
BORJA Caldas de Montbuy
Tárrega Igualada
ZARAGOZA Villagrasa
Fraga Piera BARCELONA
Montblanc Villafranca del Penedés
CALATAYUD Arbós
Sarreal
TARRAGONA
DAROCA Alcañiz Cambrils
Montalbán TORTOSA
Morella
ALBARRACÍN
Peñíscola
TERUEL
Castelfabib
Ademuz
Castellón de la Plana
Villarreal
Burriana
Alpuente SEGORBE
Liria Murviedro
VALENCIA
Corbera Cullera
Alzira
JÁTIVA
Onteniente
Bocairent
Alcoy
Biar
Pernáguila
Jijona
Alicante
246
C E N T R O S A D M I N I S T R AT I V O S D E L A C O R O N A D E A R A G Ó N
EN L A BAJA EDAD MEDIA
Perpiñán
Villafranca de Conflent
Broto
JACA
Puigcerdá Camprodón
Uncastillo
Ribes
Besalú
Ripoll
Ejea de los HUESCA Berga GERONA
Caballeros
BARBASTRO VIC
Tauste Tamarite de Litera Santpedor
Zuera
Sariñena Manresa
TARAZONA Alagón LÉRIDA Cervera Caldas de Montbuy
ZARAGOZA Igualada
Tárrega
Ricla Piera
Montblanc BARCELONA
CALATAYUD Sarreal Villafranca del Penedés
Alcañiz TARRAGONA
DAROCA
Montalbán TORTOSA
Morella
ALBARRACÍN
Peñíscola
TERUEL
Castelfabib
Jerica Villarreal
Burriana
Alpuente
Murviedro
Liria
VALENCIA
Corbera
Alzira
JÁTIVA
Onteniente
Bocairent
Biar Alcoy
Caudete Penáguila
Jijona Villajoyosa
Alicante
247
locutor del monarca ante las altas fuer- nes. Había siempre un brazo real o ciu- manentes. En el caso de Cataluña se
zas del reino y garante de las liberta- dadano, uno eclesiástico y uno nobi- instituyó en 1359 la Diputación del
des o privilegios aragoneses; también liario, dividido en el caso del reino de General, luego llamada Generalidad,
las cortes eran separadas, en cada caso Aragón entre alta y baja nobleza, ricos- con la finalidad de ejercer el control de
con sus tres brazos o estamentos corres- hombres y caballeros. Derivadas de las la fiscalidad en el período en que no
pondientes, que acudían a las reunio- cortes se crearon las diputaciones per- había cortes reunidas.
V E G U E R Í A S Y S U B V E G U E R Í A S D E C ATA L U Ñ A ( 1 4 0 1 )
LOS TRASTÁMARA lona de 1413 los Usatges, las com- Casal de Barcelona, desde Armen-
EN LA CORONA DE ARAGÓN petencias de las cortes y de la Dipu- gol I de Urgel († 1010) hasta 1231;
tación del General. No sólo fue ésta entrega en 1236 de Jaime I a los
La muerte en 1409 del heredero la actitud en Cataluña, la región con Cabrera; condado independiente de
al trono, seguida de la muerte del rey mayores reticencias iniciales hacia nuevo hasta la anexión a la Corona
Martín I el Humano en 1410, abrió el nuevo monarca, sino también en con Jaime II de Aragón, a finales del
una crisis dinástica en la Corona. Aragón y Valencia, cuyas institucio- siglo XIII; desde el reinado de Alfon-
Varios candidatos aspiraron al trono nes pactistas fueron refrendadas des- so IV el Benigno, casado con la here-
en el interregno. El Compromiso de de el comienzo. dera de Urgel, de nuevo con dinas-
Caspe en 1412 ponía fin a estas ten- El Compromiso de Caspe, además tía propia pero vinculada a la casa
siones, pasando la corona al castella- del cambio de dinastía, supuso tam- real barcelonesa –Jaime I de Urgel,
no Fernando de Antequera. La dispu- bién el fin de la independencia de † 1347–; y finalmente, planteando
ta dinástica la resolvió una comisión Urgel. Este viejo condado había teni- ya en Caspe aspiraciones al trono
de nueve electores, tres por cada do una variada historia de relaciones aragonés, con Jaime II de Urgel. Este
territorio de la Corona, y supuso la con el poder condal barcelonés y lue- último fracaso propició una rebelión
llegada al trono de la dinastía rei- go catalán: independiente desde épo- –junto con Antón de Luna y otros
nante en Castilla, los Trastámara. ca carolingia hasta Wifredo el Vello- nobles aragoneses– contra Fernando
Fernando de Trastámara, rey de Ara- so; de nuevo con dinastía propia, I, el nuevo rey. El monarca asedió al
gón, juraba en las Cortes de Barce- aunque en vasallaje o alianza con el rebelde en Balaguer en 1413 y obtu-
248
PRETENDIENTES AL TRONO DE ARAGÓN EN EL COMPROMISO DE CASPE (1412)
[en rojo, el candidato escogido]
Pedro IV = Leonor de Sicilia Jaime († 1347) Alfonso († 1412) Juan de Prades († 1414)
(1336-1387) Conde de Urgel Duque de Gandía Duque de Prades
Rey de Aragón Conde de Ribagorza
Pedro († 1408)
Conde de Urgel
Alfonso († 1425)
Duque de Gandía
vo la victoria. Jaime II de Urgel fue General o Generalidad, Cortes, ins- ca o partido popular en la ciudad de
desposeído del Condado, que pasó tituciones hacendísticas e institucio- Barcelona en 1453 y 1454, frente a
definitivamente a la corona arago- nes territoriales. Los Trastámara no los señores feudales y la burguesía
nesa y a la dinastía reinante. El últi- trastocaron esta peculiar simetría catalana. Ganó así la enemistad de
mo conde independiente de Urgel imperfecta de estados diferenciados. oligarquías del Principado, decanta-
murió en prisión en 1433. Como Trastámara que eran, los das por el pactismo frente al rey.
Los Trastámara en la Corona de reyes del XV favorecieron la intro- En el reinado de Juan II de Ara-
Aragón no cambiaron el régimen misión de la corona en los aconte- gón destacó la guerra civil catala-
político. No lo hicieron ni Fernando I cimientos de Castilla y Navarra, aun- na, entre 1462 y 1472. Arrancaba de
de Aragón (1412-1416) ni Alfon- que no se involucraron siempre un malestar estamental previo y de un
so V el Magnánimo (1416-1458) ni personalmente. No lo hizo sobre todo problema dinástico, ya que Juan II,
Juan II de Aragón (1458-1479). Pero Alfonso V, que concentró grandes como rey de Navarra también, obs-
sí robustecieron el poder central y energías en la política mediterránea, truyó los derechos del príncipe de
cierta autonomía de los reyes. Eso sobre todo la gran empresa exterior Viana en 1460, quien gozó de las
sí, en momentos de debilidad, las de la conquista del reino de Nápo- simpatías de los altos estamentos
fuerzas centrífugas intentaban incre- les, efectuada en 1442. Al año catalanes. En 1461 moría el prínci-
mentar su poder, a costa del control siguiente se proclamó rey de Nápo- pe y la cuestión dinástica se disipó,
regio del Consejo Real, de la Audien- les. El reinado de Alfonso V el Mag- pero el enfrentamiento siguió. La
cia y de los Gobernadores. De hecho, nánimo se caracterizó también por Generalidad aglutinó a las fuerzas
instituciones típicamente pactistas el freno regio a las pretensiones esta- sociales y políticas contrarias al inter-
prosperaron con los Trastámara. La mentales catalanas. El monarca, que vencionismo regio y celosas de man-
Generalidad valenciana se institu- actuó a menudo desde lejos por tener las prerrogativas de las institu-
cionalizó en 1418 y la Diputación medio de la delegación de su espo- ciones locales y señoriales. El rey
General de Aragón en 1436. Cada sa María de Castilla o su hermano fue apoyado por algunos mercade-
parte de la corona mantuvo sus ins- Juan, apoyó a los remensas en su res, el pueblo menudo y gran parte
tituciones autónomas: Diputación conflicto de 1448-1455 y a La Bus- del campesinado. Hubo batallas y
249
LA CORONA DE ARAGÓN EN EL MEDITERRÁNEO
(REINADO DE ALFONSO EL MAGNÁNIMO, 1416-1458)
POSESIONES Perigueux
Lyon
INGLESAS
Burdeos REINO DUCADO DE Bérgamo
Treviso Aquilea
SABOYA DUCADO Verona
GOLFO DE Turín Milán
Venecia
VIZCAYA DE FRANCIA DE MILÁN Padua
GASCUÑA Asti
Languedoc Parma REP.
Vitoria Aviñón Saluzzo Módena
REINO Toulouse CONDADO Génova Rávena
Montpellier Bolonia
DE Pamplona DE PROVENZA Lucca DE
NAVARRA
Narbona Niza REP. DE Florencia
Marsella Pissa Urbino Split
Huesca Perpiñán REP. DE VENECIA
Tudela GÉNOVA Ancona
FLORENCIA
CATALUÑA 23 ESTADOS
Zaragoza 14 Siena MAR
CORONA Lérida Gerona Bastia DE LA
ARAGÓN Barcelona
Calvi Perugia ADRIÁTICO Dubrovnik
CÓRCEGA IGLESIA
DE Tortosa MAR
Teruel Roma
Bonifacio REINO Manfredonia
Cuenca Anagni 1444
1420
MAR Pontecorvo A Albania
CASTILLA 143
2 Olbia Gaeta Benevento
VALENCIA
Alghero Sassari TIRRENO Nápoles DE
Bari
Valencia Amalfi Salerno Tarento
Palma CERDEÑA
1421
NÁPOLES
Oristano
MEDITERRÁNEO
Alicante Cagliari
Murcia
14
21
1442
Territorios de la Corona
Anexiones anteriores: Ampurias (1402), Sicilia (1391-1409), Urgel (1413) Trapani Messina Regio
Palermo
Incorporado por Alfonso el Magnánimo en 1442 Catania
SICILIA
Enemigos de la Corona de Aragón Siracusa
Túnez
3
A Malta
143
y Djerba
luchas en el campo y las ciudades. Aun así, intervino decisivamente en y otros malos usos. Otra reforma ins-
La victoria sonrió al bando realista algunos asuntos catalano-aragoneses. titucional afectó a la Generalidad cata-
en 1472. A pesar de su derrota, la Quizá el caso más conocido es que fue lana. Se instituyó desde 1493 un pro-
Generalidad no perdió sus atribu- bajo su mandato cuando se resolvió cedimiento de insaculación –era el
ciones, ni tampoco las cortes. el viejo conflicto remensa. Hubo una vigente en los municipios– para ele-
Con Fernando II (1479-1516) una guerra remensa en 1484-1485 y al año gir a los miembros de la institución,
buena parte de las iniciativas regias se siguiente la Sentencia Arbitral de Gua- con el efecto, aunque moderado, de
centró en Castilla y en la política uni- dalupe otorgó la emancipación a los socavar la cooptación oligárquica
taria ejercida junto a su esposa Isabel. campesinos catalanes sometidos a ese antes vigente.
NAVARRA ses y personaje clave en las conspira- patrones habituales de una monar-
ciones contra el rey francés. El inten- quía cada vez más centralizada. El
Durante las primeras décadas del to de conquistar y mantener el princi- territorio estaba organizado en
siglo XIV los reyes navarros fueron pado de Acaya en las remotas tierras merindades: La Ribera, Sangüesa,
los de Francia, Felipe IV, Luis X, de Albania, que llevó a cabo, entre Estella y Pamplona-Las Montañas.
Felipe V y Carlos el Calvo, y no es otros, un hermano de Carlos II, ase- A ellas se unió en 1407 la merindad
difícil entender que el reino fue saté- guró este dominio a los navarros des- de Olite. En el nivel siguiente halla-
lite de aquél. Quizá por ello no se de 1383 hasta 1402. Fue una expedi- mos bayles y sozmerinos. Ultrapuer-
alteraron las relaciones políticas ante- ción muy del gusto de los nobles de tos era una circunscripción especial,
riores, basadas en el pacto entre el la época, pero ha de considerarse exó- formada por algunas ciudades, cas-
monarca y los grandes estamentos. tica dentro de la historia navarra. Car- tellanías y bailías. Además de ello
La llegada de la dinastía Evreux, con los III se implicó mucho más en los había jurisdicciones con autonomía,
Felipe, marido de Juana II (1328- problemas peninsulares. Su matrimo- como algunos castillos regios, comu-
1349), acercó tímidamente las preo- nio con Leonor de Castilla y luego la nidades de valle y sobre todo ciertas
cupaciones de Navarra a las penin- boda, en 1420, de su hija Blanca con Buenas Ciudades o Buenas Villas,
sulares. Juan, infante de Aragón y luego rey, una especie de élite urbana que con-
Con Carlos II (1349-1387) y Car- anclaron definitivamente el destino de taba con comunicación fluida con los
los III (1387-1425) el poder regio Navarra y su realeza al de los demás reyes. Se trataba de Pamplona, Este-
estuvo muy unido a los problemas reinos hispánicos. lla, Sangüesa, Laguardia, Olite –des-
franceses, pero sobre todo en el rei- A esas alturas la estructura admi- de 1407–, Tudela, Tafalla, Los Arcos,
nado del primero, aliado con los ingle- nistrativa del reino respondía a los Viana y Saint-Jean Pied-de Port.
250
R E Y E S D E N AVA R R A E N L A B A J A E D A D M E D I A .
DINASTÍAS FORÁNEAS (1234-1512)
(Dinastía de Champaña)
Teobaldo I = Margarita de Borbón
(1234-1253)
Conde
de Champaña
(Dinastía Evreux)
Juana de Francia = Carlos II el Malo
(1349-1387)
Carlos VI
Rey de Francia
(1380-1422)
Carlos III el Noble = Leonor de Castilla
(1387-1425)
Martín el Joven = (1) Blanca I (2) = (1) Juan II de Aragón (2) = Juana Enríquez
Rey de Sicilia (†1409) (1425-1441) Rey de Navarra (1425-1479)
Rey de Aragón (1458-1479)
(Dinastía Foix)
Carlos VII
Rey de Francia
(1422-1461)
Juan de Albret = Catalina de Foix Francisco Febo Germana de Foix = (2) Fernando (1) = Isabel de Castilla
(1483-1512) (1479-1483) El Católico Reina de Castilla
Rey de Castilla y Aragón
251
DOMINIOS FRANCESES DE LAS DINASTÍAS FORÁNEAS Carlos, con quien se enfrentó en una
DE NAVARRA. CASA DE EVREUX (ss. XIV-XV) guerra civil desde 1449 hasta la
muerte del príncipe en 1461, quizá
Cambrai Namur por envenenamiento. Toda la alta
Cherburgo (1354) Longueville nobleza se implicó en la guerra, con-
Rouen vertida en una lucha entre beamon-
Poutoise teses, partidarios de Carlos de Via-
Evreux Chalons
Meulan na, y agramonteses, contrarios a él,
Mantes
París aunque hubo, sin duda, muchas alter-
Mortain Chartres nativas, grados de implicación y
(1328) Nemours Troyes
Sens coyunturas en esa guerra nobiliar.
Orleans La victoria de Juan II abrió cami-
Nantes no a un breve reinado de su hija Leo-
nor y, sobre todo, a la llegada de la
Dijon dinastía de su marido, Gastón de
Foix. En la descendencia de ambos
recayó el trono a la muerte del lon-
Limoges gevo Juan II. El nuevo rey, Francis-
co Febo (1479-1483), muerto pre-
Angulema (1336) maturamente, y luego su hermana,
Perigueux Lyon la menor Catalina de Foix (1483-
Burdeos 1512), volvieron a arrastrar al reino
a una orientación francesa. Y no sólo
por el matrimonio de la reina con un
Nimes Albret, linaje con fuerte arraigo en
Montpellier Arles los Pirineos occidentales y Guyena,
Tolouse sino porque el reino quedó bajo la
Carcasona regencia de Magdalena de Francia,
Reino de Navarra
hermana de Luis XI. Frente al parti-
Condado de Evreux (1321-1404) do francés, una gran parte de la alta
Señoríos patrimoniales de los Evreux
Condados de Angulema, Mortain y Longueville (s. XIV)
Adquisiciones de Carlos II en Normandía
(1354-1404) y Montpellier (c. 1370)
Condado de Nemours (1404-1461)
Bayona
Fuenterrabía
San Sebastián
TIERRAS DE Sauvaterre
Guernica ULTRAPUERTOS
Las Buenas Villas participaban en Bilbao Mauleon
las cortes, institución diseñada para St. Etienne Osses
Durango de Baigorri Oloron
controlar los impuestos y con parti- Tolosa
MERINDAD DE Valcarlos Saint Jean Pied-de-Port
cipación de los tres estados o brazos.
Comarca de Laguardia PAMPLONA
La corte regia, que contaba con un (a Castilla desde 1461) Huarte-Araquil Roncesvalles
tribunal, una Cámara de Cuentas
–desde Carlos II– y un Consejo Real, Pamplona MERINDAD DE
Vitoria MERINDAD SANGÜESA Roncal
se reforzó con la concentración de DE ESTELLA Monreal
las funciones administrativas y tri- Marañón Estella
butarias en Olite, convertida en capi- S. Vicente Laguardia Los Arcos
de Sonsierra Sangüesa
tal por Carlos III. En 1423 se creaba Labraza Tafalla
Briones Ujué Jaca
la institución del heredero con el Logroño Viana Mendavia Olite Sos
nombre de Príncipe de Viana. Nájera MERINDAD DE
La llegada al trono de los Trastá- OLITE (desde 1407)
Calahorra Caparroso
mara, con Juan II de Aragón y de
Arnedo MERINDAD DE
Navarra (1425-1479) no alteró la LA RIBERA
estructura institucional, pero sí las Alfaro
Fitero Ejea
relaciones con la nobleza y con otros Comarca de Los Arcos Tudela
reinos hispánicos. El papel ingenua- (a Castilla entre 1463-1753) Tudején
Comarca de Fitero
mente previsto por su suegro para él Tarazona (de Navarra desde 1373)
de ser simplemente rey consorte no
fue aceptado por Juan II. Impidió la Límite de merindad Tierras disputadas tras 1512 y perdidas en 1530
sucesión en el Príncipe de Viana, Áreas atribuidas a Castilla Límite actual de Navarra
252
nobleza navarra apoyó al hombre
DOMI NI OS FRANCESES DE LAS DI NASTÍ AS FO R Á N E A S fuerte de los reinos hispánicos, Fer-
D E NAVARRA. CASAS DE FO I X Y ALBRE T ( 1 46 4 - 1 5 1 2 ) nando el Católico. Por su segundo
matrimonio pudo alegar también
Namur Mosa derechos dinásticos. Fernando el
Católico acabó enfrentándose a Fran-
cia y a los Albret, con éxito, incor-
porando Navarra a sus estados penin-
Rouen
sulares en 1512.
Sena
París Chalons Mosela
Chartres
Troyes
Orleans
Limoges
Lyon
Perigueux
Burdeos
Ródano
Albret Garona
MARSAN Nimes
Auch Montpellier Arles
BEARN Toulouse
Lescar Tarbes FOIX
Olorón Foix Carcasona
BIGORRE
Reino de Navarra
Condado y dominios patrimoniales de Foix
Señorío de Albret
Áreas con señoríos de la Casa de Albret
253
31
256
llana se complementó con el ámbito corona desplegaron instituciones co- na del Campo en época de los Reyes
del suroeste o sevillano, con proyec- merciales y construyeron lonjas, Católicos.
ción de Ultramar. Por su parte el como es el caso de Palma de Mallor- Al final del siglo XV la economía
comercio de la Corona de Aragón, ca, Barcelona y Valencia. y la población estaban en pleno ciclo
especialmente el catalán, se apoyó Además del comercio exterior, en expansivo. En magnitudes cuantitati-
en bases sólidas, como el reino de todos los reinos hispánicos ganaron vas, la Corona de Castilla destacaba
Nápoles, amplió los productos de en sinergia e intensidad los circuitos por su peso demográfico. Y dentro de
exportación y se expandió al Medi- de comercio regional e interregional ella, dos regiones especialmente, la
terráneo oriental y al norte de Áfri- y surgieron centros especializados y cuenca del Duero y el valle del Gua-
ca. Las principales ciudades de esta modernos, como las ferias de Medi- dalquivir.
NOBLEZAS, SEÑORÍOS estas ventajas. Todos los reinos expe- to a todos ellos emergió una autén-
Y CAMPESINADO rimentaron procesos semejantes. tica nueva “nobleza de servicio”,
En Castilla, durante los siglos XIV- representada por linajes como los
Los dominios antiguos basados en XV se produjo el declive de los Álvarez de Toledo, Pacheco, Estúñi-
la propiedad y los derechos disper- linajes que, convencionalmente, son ga, López Dávalos, Hurtado de Men-
sos fueron sustituidos por los seño- considerados vieja nobleza: los cas- doza, Quiñones o Pimentel.
ríos jurisdiccionales. La nobleza pro- tellanos Haro y Lara, Castro, Rojas, La incorporación a la condición
tagonizó cambios, como una mejor Manuel, Téllez de Meneses, Girón, señorial de estratos medios urbanos,
adaptación jurídica –entre otros, Ponce, Guzmán, Vega, Castañeda. la influencia creciente de las grandes
triunfo de la institución del mayo- Eran también vieja nobleza, o tenía casas y la fragmentación de las juris-
razgo–, pero sobre todo destacó una precedentes antiguos Ayala, Mendo- dicciones concejiles hicieron dismi-
alta nobleza, en parte nueva y en par- za, Enríquez, Velasco o Manrique, nuir el mapa del realengo a costa de
te renovada. En los siglos XIV y XV pero lograron reciclarse. La antigua la creación de pequeños concejos
hubo relevos en su seno. La trans- nobleza del reino leonés había entra- señorializados y del paso de villas rea-
formación vino de las conexiones de do en decadencia mucho antes: los lengas a villas señoriales. La zona
sus capas altas con la monarquía, la Traba, Froilaz, Alfonso o Muñoz entre el Duero y el Tajo es un buen
hegemonía sobre áreas comarcales acabaron desapareciendo en la cons- ejemplo y se comprueba al comparar
amplias y el disfrute de rentas juris- telación nobiliaria. Sólo algunos la situación del siglo XIII y el siglo XV.
diccionales y del estado. La peque- como los Osorio, en varias ramas, se Pero también el avance de la señoria-
ña nobleza local no pudo alcanzar adaptaron a los nuevos tiempos. Jun- lización se detecta en otras regiones,
R. Duero
R. Duero Segovia
Segovia
Salamanca
Salamanca Ávila
Ávila
Córdoba Córdoba
Jaén Jaén
Huelva Sevilla
Sevilla Huelva
Cádiz Cádiz
257
POSESIONES SEÑORIALES DE DON GARCÍA ÁLVAREZ DE TOLEDO (DUQUE DE ALBA)
Y LOS NOBLES RIVALES DE LA ZONA DURANTE SU MANDATO (1464-1488)
ZAMORA VALLADOLID
SALAMANCA
SEGOVIA
1
4
Alba
2 3
CIUDAD RODRIGO ÁVILA
5
Salvatierra
Miranda
6
Béjar Piedrahíta
7 Señorío de Valdecorneja
Granadilla El Barco
8 Candeleda
10
Coria Plasencia
9 Oropesa
0 20 km
1. San Felices
CÁCERES
2. Salmoral
3. Mancera
Posesiones de don García Álvarez de Toledo - Casa de Alba 4. Narros
5. San Miguel de Serrezuela
Posesiones de los Álvarez de Toledo - Casa de Oropesa (con Tornavacas y Jarandilla)
6. Solmirón
Posesiones de los Estúñiga: rama de Béjar y Plasencia
7. Abadía (agregado a Granadilla)
Posesiones de los Estúñiga: rama de Candeleda 8. Garganta la Olla
Límites de provincias actuales 9. Pasarón
Principales ciudades ambicionadas por don García Álvarez de Toledo 10. Torremenga
como el valle del Guadalquivir. Los nobleza local y rural. Ocurrió espe- villas y a las Hermandades, en el
estados señoriales, basados en gran- cialmente en territorio vizcaíno y caso de Vizcaya y Guipúzcoa –la de
des villas y en la jurisdicción, cam- guipuzcoano, donde no tuvo presen- este territorio histórico logró agluti-
biaron el mapa de influencias. Los cia la alta nobleza, a diferencia del nar a todas las villas realengas de la
grandes linajes controlaban espacios territorio alavés, donde sí se implan- provincia–, acabó desactivando, en
casi subregionales. Puede apreciarse taron grandes casas nobiliarias. Las época de los Reyes Católicos, la vio-
en el mapa de la actual región de Cas- luchas de los banderizos guipuz- lencia endémica y el caos generados
tilla y León, con grandes casas seño- coanos y vizcaínos implicaron sobre por los linajes banderizos. En Álava
riales al frente de grandes señoríos. todo a nobles medios o modestos la alta nobleza no sufrió este desgaste
En la mitad sur predominaron los –parientes mayores e hidalgos rura- o derrota política y no se generó en
señoríos de las Órdenes Militares. les–, si bien el desarrollo de las lu- ese territorio un discurso de mitolo-
En algunas regiones de Castilla sí chas acabó contaminando a muchas gía de país genuino y de la hidalguía
se mantuvo una vieja y pequeña villas. Al final, el apoyo del rey a las universal como el que, ya en el siglo
258
Z ONAS DE I NFL UENCI A DE LO S G RANDES L IN A J E S
siguiente, sí se propagó por el área
vizcaína y guipuzcoana.
NOBI LI ARI O S ( úl t i m o t erc i o s i g l o XV )
El reino de Aragón contaba con
una nobleza alta y media extendida
Mendoza
por todo el reino, entre los que des-
Quiñones Guzmán tacaron algunos linajes, como los
Quiñones Manrique Velasco Luna. El radio de otros linajes era
Osorio de Lemos LEÓN comarcal. En Cataluña de la vieja
Osorio de Astorga BURGOS nobleza condal apenas permanecían
Acuña
Bazán Manrique en la cumbre casas como la de Car-
Pimentel dona, Pallars o Montcada. Junto a
Enríquez Manrique Arellano ellos, nuevos linajes, ligados a los
Enríquez Velasco
VALLADOLID condados de Ribagorza, Urgel y
SORIA ÁGREDA
ZAMORA Ampurias, habían recibido el apoyo
Cueva regio desde la formación de la Coro-
TORO Tovar
SEPÚLVEDA Mendoza na de Aragón y tenían gran poder en
MEDINA ARÉVALO Cerda el norte de Cataluña. También había
Cueva
SALAMANCA en esta región una nobleza comarcal
SEGOVIA
y local compuesta por varios cente-
CIUDAD RODRIGO
ÁVILA
nares de linajes de caballeros o gene-
Álvarez de Toledo rosos, como se les denominaba. En
Estúñiga el reino de Valencia, tras el declive
Álvarez de Toledo Zonas de hegemonía nobiliaria de las primeras casas –Montagut,
ÁVILA Ciudades y grandes villas de realengo Montcada, Rocafull, Zapata– la lle-
gada de los Trastámara aupó a miem-
bros nuevos de alta nobleza, que
cobraron importancia frente a aque-
MAR CANTÁBRICO
Posesiones originarias: valle del Torío
Laguna de Negrillos y sus aldeas
12 lugares del Páramo
Benavides y 18 lugares
Llamas de Ribera y 9 lugares más Tineo
Ordás y 8 lugares OVIEDO
Luna de Suso, con Canales y 15 lugares Allande
Luna de Yuso, con Barrios y 17 lugares
Villamayor de Riello, con 20 lugares
Cangas
Omaña, con 22 lugares Somiedo
Lillo
Pola de Gordón y 15 lugares más
Laciana, con Villablino y 15 lugares Laciana Babia
Ribadesil de Suso, con Palacios y 6 más Luna Gordón
Ribadesil
Ribadesil de Yuso y 7 más Omaña
Babia de Suso, con 10 lugares Torío
Ordás
Babia de Yuso, la Majúa y 8 más Llamas
Palat de Rey Sobarriba
Torío, con 7 lugares
Concejos asturianos de Cangas, Tineo, Allande
Benavides LEÓN
S. Miguel
Velliza en Tierra de Campos Castrillo del Camino Vilecha
San Pelayo Torneros
Barrientos Onzonilla
Posadilla Páramo
Laguna de
Jamuz Negrillos
Concejos o villas
Castillos
Aldeas o lugares
Velliza
259
M A Y O R A Z G O D E Á L VA R O P É R E Z O S O R I O , M Á R Q U É S D E A S T O R G A ,
EN EL REINADO DE ENRIQUE IV
ASTURIAS
CANTABRIA
Posesiones gallegas
Sarria, Meira de Jusá, Chantada
Triacastela, Deade, San Julián
Prioro
Valle de Sabero
LUGO Quiñones
Guzmán
Valdellorma
Tierra y Comarca de Cepeda Alfoz de Aguilar
Osorio de Lemos Morgovejo y Valderrueda
Valle de Cogordero
Antoñán LEÓN
Valle de Turienzo
Bustillo
Posesiones señoriales de los Osorio de Astorga (no se incluyen castillos ni lugares o derechos aislados)
Bazán Grandes linajes nobiliarios de la zona
Límite provincial actual
lla primera nobleza repobladora, momentos. El control de los nobles cia arbitral de Guadalupe. El cam-
modesta y atomizada. Los nuevos sobre el campesinado dependiente pesinado de Aragón estaba mayori-
linajes valencianos del siglo XV, era particularmente intenso en la tariamente sometido a señorío, con
como los castellanos, debían mucho mitad norte de Cataluña. Hacia 1366 22.000 hogares señoriales frente a
de su influencia a la relación con los había en Cataluña, aparte de 94.000 12.000 realengos. Los campesinos
monarcas y los avatares del estado. hogares de realengo, 40.000 hogares aragoneses protagonizaron también
Los Borja son buen ejemplo de ello. campesinos dependientes de señores revueltas contra los señores. En
Pero también nobles de origen cas- laicos. De ellos una parte significa- Mallorca hubo conflictos sociales
tellano, como los Sandoval. En Nava- tiva, más del 50% en las comarcas campesinos con mayor acento de
rra durante la Baja Edad Media pros- más septentrionales de la región, eran lucha antifiscal y antiurbana. Los
peraron linajes nuevos, tanto de remensas. Precisamente en la Cata- forans se levantaron en 1450 y en
origen francés como autóctono, tales luña Vieja estalló en el siglo XV la 1462 y, en ambos casos, fueron vio-
como los Beaumont, los Agramont, guerra remensa. Hubo levantamien- lentamente reprimidos.
los Peralta o los Ezpeleta. tos en 1413, 1432, 1455 y 1462. Las En la Corona de Castilla, donde la
En cuanto a la situación del cam- tensiones continuaron tras la guerra mayor parte del campesinado no
pesinado en la Baja Edad Media, fue civil. Este mal uso fue suprimido por dependía de los señores, salvo en lo
muy desigual según las regiones y la monarquía en 1486 por la senten- referido a la jurisdicción, hubo levan-
260
tamientos contra la señorialización lucía, más allá de luchas judiciales y campesinado gallego se propagó por
en muchas partes, pero de base con- legales, se desataron de forma siste- muchas comarcas de Galicia. Mu-
cejil y poco violentos generalmente. mática conflictos abiertos y san- chos castillos de los señores, inclui-
El objetivo era casi siempre evitar grientos. Hubo excepciones célebres, do el arzobispo de Santiago, fueron
caer bajo señorío, pese a que éste no como el caso de Fuenteovejuna en la quemados por los insurrectos, levan-
incidía en la propiedad de la tierra zona de Córdoba en 1476, donde se tados contra los abusos y rentas exce-
estrictamente. Hay que distinguir, no dio muerte al señor. Otras veces las sivas que soportaban. La pacifica-
obstante, situaciones diversas, ya que luchas sociales tuvieron lugar en un ción trajo consigo un cambio en las
en ocasiones, sobre todo si los nú- contexto de pugna de los pecheros formas de dominación rural, con el
cleos señorializados no eran villas contra el patriciado urbano, como se inicio del declive de los castillos y la
importantes sino modestos núcleos observa en la cuenca meridional del apertura a modos de hegemonía rural
con sociedad básicamente rural, la Duero o áreas del centro peninsular. basados en pazos aristocráticos. Tam-
opresión agraria y rentista de los El conflicto de base campesina bién hubo movimientos campesinos
señores sí podía ser abusiva. Y por más extremo se dio en Galicia en la en otras áreas, como el País Vasco,
ello hubo luchas de este tipo también segunda mitad del siglo XV. Es el del durante las últimas décadas del siglo
de aldeas contra señores. No obs- movimiento irmandiño. Durante los XV, ocluidos y desvirtuados en par-
tante, ni en las Mesetas ni en Anda- años 1467-1469 la insurrección el te por las luchas banderizas.
I M P L A N TA C I Ó N D E L A S Ó R D E N E S M I L I TA R E S E N L A M I TA D S U R
DE CASTILLA (ss. XIII-XV)
PORTUGAL
Guadalajara CORONA DE
Coria ARAGÓN
Madrid Zorita
Huete
Talavera Cuenca
Alcántara Uclés
Toledo
Cáceres Mora Villaescusa
Trujillo
Valencia de Consuegra
Alcántara
Calatrava la Vieja Albacete
Badajoz Mérida Magacela Ciudad Real Chinchilla
Almagro
Capilla
Salvatierra Alcaraz
Alconchel Alange
Calatrava la Nueva Montiel
Jerez C. Llerena Moratalla Cieza
Segura
Sabiote Calasparra
Murcia
Córdoba Porcuna
Bedmar Aledo
Lora Martos Jaén
Prego Alcaudete
Ayamonte Sevilla Cartagena
GRANADA
Morón Alcalá
Osuna Estepa
Orden de San Juan del Hospital (nacida en 1 130)
Jerez
Orden de Santiago (nacida en 1170)
Cádiz Orden de Alcántara (nacida en 1218; sucede a la de Pereiro, nacida en 1177)
Medina Sidonia
Orden de Calatrava (nacida en 1157-1158)
Otras: Temple/Cristo (ésta sucede en 1319 a aquélla, disuelta);
Sta. M.ª de España (disuelta en la de Santiago en 1280)
Jerez Ciudades realengas
Uclés Castillos y núcleos destacados de las Órdenes Militares
261
S E Ñ O R E S E N E L T E R R I T O R I O A L AV É S D U R A N T E E L S I G L O X V
Sarmiento
Marquínez
Salinillas Buradón
Salinas de Añana
Peñacerrada Ayala Avendaño
(y “Tierras del conde”)
Mendoza Mújica
Manrique Sánchez de Arce
Hurtado de Mendoza Realengo (comarca de Vitoria)
Sarmiento Otros
Gauna Laguardia, Labraza
Rojas (Reino de Navarra hasta 1461)
Guevara Villas
0 10 20 km
262
PARIENTES MAYORES O LINAJES DE VIZCAYA Y GUIPÚZCOA EN LA ÉPOCA TRASTÁMARA
Aróstegui
Plencia Areilza Bermeo MAR CANTÁBRICO
Madariaga
Ercilla Fuenterrabía
Munguía Meñaca
Lequeitio
Sopelana Urdaibai Arteaga
Salazar Butrón Belandiz
Asua Yarza Ondárroa
Portugalete Sangroniz Rigoitia San Sebastián Ugarte
Meceta Guernica Arancibia Motrico Guetaría
Susunaga Rentería
Bilbao Múgica A2 Barroeta Zarauz Orio
Garay Jáuregui Larrabezua Sasiola Murguía
Leguizamón Meceta Marquina Deba Zumaya
Puente Larrea Irazábal Usúrbil Hernani
Mendieta Arana A1 Ugarte Irarrazábal Cestona
B Loizaga
A3 Guerricaiz
Maruri Otales A6 Elgoibar Alzaga
Salcedo Cortázar Beláustegui
Aedo Iraeta
Bedia Eibar Gamboa
Lanestrosa Ibarguren Lejarazu A7 C2
Miravalles A5 Placencia Olaso
Bérriz Ermua
Balmaseda Miravalles Durango Zaldívar Unzueta Loyola Azpeitia
Olarte Isasi C1
Abendaño Arandia Ibarra Elgueta Berástegui
Urquiaga Azcoitia Emparán
Villaro Elgueta Tolosa
Láriz Ibargoyen Bergara Gaviria Yarza
A4 Marzana Elorrio Villarreal Amézqueta
V. Ordizia
Gortázar Mondragón Arriarán Lazcano
Aguirre C3
Ochandiano Guevara
Cerain
Orduña Oñate Segura
Léniz D
Cegama
C4
Aedo Linajes
Butrón Linajes más importantes
Léniz Villas realengas de Guipúzcoa y del Señorío de Vizcaya
Demarcaciones territoriales
A Merindades de la Tierra Llana de Vizcaya: 1) Uribe, 2) Busturia, 3) Zornoza, 4) Arratia, 5) Bedia, 6) Marquina, 7) Durango
B Encartaciones de Vizcaya
C Alcaldías mayores o realengo no avillazgado de Guipúzcoa: 1) Alc. de Sayaz, 2) Alc. de Aiztondo, 3) Alc. de Arería, 4) Otras áreas no avillazgadas
D Señorío de los Guevara en Oñate
263
MOVIMIENTO IRMANDIÑO
(SEGUNDA GUERRA IRMANDIÑA, 1467-1469)
9 Vivero
3 8
8
9 5 5
4
Ferrol 8
Puentedeume Mondoñedo
La Coruña Betanzos 5
Mariñas de Betanzos 9 5 Villalba 5
2 2 5 9 9
Bergantiños 4
2 5 3
2 9 9
9
9
9 Castroverde
Santiago Lugo
4 9 9
2 1
9
1 1 2 1
1 1 Portomarín
Muros 4
Noya 1 1 1 2 4 9
Padrón 3
9 Deza Sarria
1 Tabeiros
9 Cordeiro
1 1 Camba 1 4
1 9 1 3
9 Lemos
Salnés
Pontevedra 7 4 3
1 6
6 6 6
9
Ribeiro Orense 3
7 7 6
6 3
9 Sande
9 Celanova
Tuy
6
Comarcas afectadas
Localidades principales
Fortalezas destruidas por los irmandiños y señorío al que pertenecían
1 Mitra compostelana 6 Ribadavia
2 Moscoso 7 Sotomayor
3 Lemos 8 Pardo de Cela
4 Ulloa 9 Otras casas nobiliarias
5 Andrade
EL MUNDO URBANO do otros concejos independientes, servado muchas casas fuertes y pala-
BAJOMEDIEVAL como puede apreciarse en relación al cios que construyeron las principa-
alfoz concejil de San Sebastián, del les familias de la ciudad. En cada
La remodelación del mapa de con- que nacieron otras villas sitio adaptaron el ejercicio de esta
cejos y municipios se completó en los La baja Edad Media fue la época hegemonía a los diferentes regíme-
últimos siglos. Por un lado, de las del patriciado urbano, si bien la com- nes municipales, variados según la
grandes demarcaciones o Tierras se posición del mismo difiere de unas geografía. En las ciudades del cen-
siguieron segregando pequeños con- a otras ciudades. Estos grupos diri- tro y sur de Castilla el Regimiento
cejos –conversión en aldeas en villas gentes se aseguraron en todas partes estuvo compuesto normalmente por
para sí o concejos independientes–, el gobierno municipal, el acceso a cargos vitalicios, pero fueron incor-
que acabaron señorializados. En el las principales fuentes de riqueza de porándose capas emergentes. En las
norte la tardía fundación de villas no sus respectivas urbes –ya fuera el villas cantábricas las elecciones
impidió que desde el principio tuvie- comercio, los inmuebles, las propie- anuales para alcaldías y otros cargos
sen un pequeño término concejil asig- dades rústicas– y las mayores cotas no impidieron la preponderancia de
nado. Pero en algún caso de estos tér- de influencia integral en la vida las élites. En las ciudades catalanas
minos concejiles inicialmente social y ciudadana. En algunas ciu- o en Valencia, las elecciones anua-
asignados a una villa fueron nacien- dades, como Salamanca, se han con- les, lastradas por filtros participati-
264
E VO L U C I Ó N D E L O S T E R R I TO R I O S E N T R E E L D U E R O Y E L TA J O
( S E C TO R O C C I D E N TA L , 1 2 5 0 - 1 4 0 0 )
Toro Tordesillas
Zamora
Medina Olmedo
Madrigal
(c. 1302-1354)
Arévalo
Ledesma
Salamanca
San Felices
de los Gallegos Alba
(1284)(c. 1350)
Ávila
Ciudad Rodrigo Las Navas
Salvatierra
(1372)(1372)
El Mirón Villatoro (principios del s. XIV)
Cespedosa (1393)(1393) (1254)(1369)
Miranda Puente Congosto Villafranca (1256)
(1393)(1393) Piedrahíta (1254)(1369)
Béjar La Horcajada (1254)(1369)
Tierra de Montemayor (1373, 1396) El Barco
Granadilla (1254)(1369) Bohoyo Mombeltrán La Adrada
(1325-1329) (1401) (1393)(1393)
Granadilla (1393)(1393)
(Llamado El Colmenar)
Realengo Candeleda Arenas
Señoríos eclesiásticos y de Orden Militar
Tierra de
Señoríos laicos Plasencia
(primera mitad s. XIV)
Ciudades Oropesa
Villas principales (1286)
(1366)
(1286) Fecha de segregación de la Tierra concejil
(1366) Conversión en señorío nobiliario (sin tener en
cuenta el señorío en manos de familiares del rey)
vos de sesgo elitista, y la estamenta- de pocos miles de habitantes. En ellas como Teruel, Huesca o Calatayud se
lización basada en las ya consolida- residió la mayor parte de la población moverían en una horquilla entre
das mano mayor, mano media y urbana. Por encima sólo algunas ciu- 2.500-8000. En el Reino de Valencia
mano inferior, no rompió la prepon- dades alcanzaron cifras de población sólo la capital llegó a ser gigante, con
derancia de las oligarquías en los importantes. Barcelona había sido 40.000 habitantes a mediados del
consejos municipales. Ello fue así una ciudad gigante a mediados del siglo XV. Es posible que a fines de
salvo en momentos concretos de la siglo XIV, con más de 40-50.000 siglo alcanzara los 70.000 y sería la
historia. Cuando en varias de estas habitantes. Pero las estimaciones indi- mayor ciudad de la península. A
ciudades los gremios lograron acce- can que en el siglo siguiente su pobla- mucha distancia, en una horquilla
der a algunos escaños locales, gene- ción estaría más cerca de los 30- entre 2.500-8.000 durante el siglo XV
ralmente se trató de aristocracias cor- 35.000 que de las cifras anteriores. Castellón, Morella, Játiva, Alcira,
porativas o empresariales, no tanto Era la gran ciudad catalana, de todos Segorbe, Onteniente y Orihuela. En
menestrales, que tuvieron en sus modos, seguida de Lérida y Gerona. las Baleares, la ciudad de Mallorca
manos muy escasos recursos de Estas ciudades alcanzaron en el siglo tendría entre 15-20.000 habitantes a
acción ciudadana. XIV la cifra de 10.000, pero se ha mediados del XV. Cerca de 5.000 o
En cuanto a la red urbana bajome- supuesto que decayeron en el siglo algo más tendrían también las prin-
dieval, los datos demográficos casi siguiente. Tarragona, Tortosa, Man- cipales ciudades navarras, Pamplo-
siempre remiten a fechas tar-días. resa pudieron superar los 5.000 hacia na, Tudela o Estella. En cuanto a las
Como en otras partes de Europa, la 1400. En Aragón Zaragoza tenía a de la Corona de Castilla, ninguna ciu-
ciudad típica castellana, catalana o mediados del XV unos 20.000 habi- dad del tercio norte superaba los
valenciana era una ciudad pequeña tantes, mientras que poblaciones 5.000 en el siglo XV, si bien Vitoria,
265
J U R I S D I C C I O N E S E N T R E E L D U E R O Y E L TA J O
( S E C TO R O C C I D E N TA L ) ( S . X V )
Toro
Zamora Tordesillas
PORTUGAL
Medina Olmedo
Bobadilla
Fuente del Sol
Vilvestre Madrigal
Abadengo de
Saucelle la Armuña Arévalo
Abadengo de
Ledesma
Ciudad Rodrigo
Cerralbo
Yecla de Yeltes Arauzo El Bohodón
Sobradillo Salamanca Peñaranda
San FelicesVillalba de Santiago de Villanueva de Gómez
los Llanos Matilla de los Caños
de los Gallegos la Puebla Narros
Alba Mancera
San Muñoz Vecinos Valverde de Salmoral
Gonzaliáñez Alaraz
PORTUGAL
Tamames Serranos
Ávila Las Navas
Zarzoso Señorío de obispo y
Ciudad Rodrigo Salvatierra Gallegos cabildo de Ávila
Villatoro Valdemaqueda
El Bodón Miranda Cespedosa El Mirón Villafranca
Fuenteguinaldo Puente Congosto Piedrahíta
Béjar La Horcajada
Tierra de El Barco
Granadilla Montemayor La Adrada
El Payo Bohoyo Mombeltrán
Granadilla
Candeleda Arenas Navamorcuende
Realengo Plasencia Castillo de Bayuela
Montesclaros
Tierra de Cardiel
Señoríos eclesiásticos y de Orden Militar Garganta Plasencia Velada
la Olla Cervera San Román
Señoríos laicos Torremenga de los
Oropesa Montes
Ciudades Pasarón
Villas principales-Capitales de villa y tierra
Puebla
Pequeños señoríos laicos El Torrico
1 1
1 3
0 5 km 0 5 km 0 5 km
3
1 3 1 3 1
5 4 5 4
4
6
0 5 km 0 5 km 0 5 km
266
E L E S PA C I O U R B A N O A R I S T O C R Á T I C O E N E L O T O Ñ O D E L A E D A D M E D I A
(SALAMANCA EN EL SIGLO XV)
La Magdalena
San Mateo
San Juan
de Barbalos
14
Sta. Eulalia
Sto. Tomé
3
17 16 13
Sta. M.ª de 12
Sancti Spiritus
los Caballeros
15
10
9
2 San Julián San Cristóbal
San Blas 5 San Martín
San
Benito 6
San Justo
4
1 7
8 11
San Isidro
San Román
San Adrián
2
3
Sto. Tomás
Iglesia Mayor
1
San Cebrián
San Juan
del Alcázar 18
Arroyo de
los Milagros San Polo
Arroyo de
Sto. Domingo
267
REINOS HISPÁNICOS Y CIUDADES PRINCIPALES EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XV
Santander
Bilbao
Oviedo
Santiago Vitoria
Reino de León Reino de Castilla Pamplona
Galicia Burgos Perpiñán
Reino de Logroño Huesca Cataluña
León Palencia
Reino
Valladolid Tarazona Manresa Vic Gerona
Toro Soria de
Zaragoza Lérida
Zamora Tordesillas Extremadura Aragón
Barcelona
Madrigal Medina Castellana Calatayud Tarragona
Salamanca Arévalo
Segovia CORONA DE Tortosa
Ciudad Rodrigo
Ávila Madrid ARAGÓN
Alcalá Morella
Talavera Castellón
Cuenca
Villarreal
Cáceres Toledo Reino de Reino Mallorca
Toledo Valencia
Badajoz de Alzira Reino de Mallorca
CORONA DE CASTILLA
Chinchilla Xátiva
Valencia
Reino Reino
de Reino de Jaén de
Córdoba Úbeda Murcia Orihuela
Andújar Baeza
Reino de Sevilla Murcia
Córdoba Jaén
Sevilla Carmona Écija
Jerez Marchena
Pto. de Sta. María Utrera Ciudades “gigantes”. Se aproximan a los 40.000 habitantes
Ciudades grandes. cerca de 10.000 habitantes o más
Otros núcleos
Límites entre las monarquías peninsulares
Límites entre “reinos” en la corona de Castilla
Límites entre los estados de la corona de Aragón
Bilbao, Santiago –menos probable- 5.000 y 10.000 tuvieron Ávila, nuevo aparecen ciudades de primer
mente San Sebastián, Laredo o La Zamora, León o Palencia. En la orden. Los datos de finales del XV
Coruña– se aproximaron a esa cifra. Meseta sur Toledo destacaba, sin señalan a Sevilla con 45.000 habitan-
En la cuenca del Duero Valladolid y duda, con 30-40.000 a finales del tes, Córdoba entre 20.000 y 30.000 y
Salamanca, con 25.000 y 18.000 siglo XV, mientras que entre 5.000 y Jaén con unos 20.000. Superaban
habitantes respectivamente a finales 8.000 estarían Madrid, Cuenca, Tru- entonces los 10.000 Jerez, Écija,
del XV, eran las mayores. Medina jillo, Guadalajara o Mérida. Chinchi- Andújar, Baeza, Úbeda. Y otros núcle-
hacia 1500 pudo superar los 15.000. lla estaría entre 6.000-10.000. Murcia os estarían entre 5.000-10.000, tales
Segovia o Burgos en esa época con- tendría a finales del XV entre 13.000 como Carmona, Marchena, Utrera o
tarían cada una con 10-15.000. Entre y 15.000 habitantes. En Andalucía de el Puerto de Santa María.
LAS MINORÍAS Ávila, Segovia y las capitales anda- Murcia. Aparte de ello, había more-
luzas en Castilla. En la corona de rías en ciudades como Toledo, Ávi-
Los judíos y mudéjares eran mino- Aragón, Barcelona, Lérida, Tarra- la, Burgos, entre otras. También se
rías religiosas que vivían entre los gona, Zaragoza, Valencia y Palma de ha supuesto que podría haber unos
cristianos según sus respectivas con- Mallorca. En el reino de Navarra, pocos centenares de miles de mudé-
fesiones. Hacia 1300 había más de Pamplona, Estella y Tudela. jares o moros en los reinos hispáni-
un centenar de comunidades judías, En el caso de las comunidades cos. Gozaron también de autonomía
organizadas en aljamas y con auto- musulmanas o mudéjares, predomi- las aljamas musulmanas, con sus
nomía administrativa y judicial. La naban más en el medio rural. Sobre autoridades, sus mezquitas y sus
población judía sería de 100-200.000 todo las morerías eran abundantes en escuelas religiosas reconocidas.
personas. Sobre todo eran impor- las zonas rurales del Valle del Ebro, La represión de los mudéjares tras
tantes las aljamas de Toledo, Burgos, Valle del Guadalquivir, Levante y sus revueltas de la segunda mitad del
268
Á R E A S D E M AY O R C O N C E N T R A C I Ó N D E M U D É J A R E S Y J U D Í O S E N L A C U E N C A D E L E B R O
EN LA BAJA EDAD MEDIA (de la Ribera navarra al Delta)
Sos
Uncastillo
Puibolea Ballestar
Sádaba Huesca Naval
Cadreita Chimillas
Valtierra Alerre La Puebla de Castro
Tierz Fañanás Salina
Arguedas Huerrios Ola de Hoz
Ejea Banariés
Corella Murillo de las Limas Cuarte El Pueyo de Fañanás
Ablitas Tabernas Blecua Barbastro
Cintruénigo Tudela Vicién
Murchante Novales Argavieso
Fontellas Sangarrén
Cascante Ribaforada
Torres de Barbués Monflorite San Esteban de Litera
Monteagudo Barillas Tauste
andre
Almuniente Monzón
Vierlas Pedriz Cortes R. Tamarite de Litera
Tarazona Malón Fl
R. Gállego
um Pueyo de Santa Cruz
R. Alc
Torrellas Cunchillos Fréscano
en
re
Grisel
Cinca
Borja Bisimbre Binaced
eg
Trazmoz
S
va
Ariza de la Sierra de Huerva Belchite Flix
uer
Terrer Codos
H
R Escatrón Caspe Ribarroja
ivas
Letux Vinebre
R.
Paracuellos de Jiloca . Jil
oc Lagata de Ebro
a Maella Garcia
Villafeliche Hijar Samper Ascó
de Calanda
tín
Mora de Ebro
R. Aguasv
ar
Murero
M
lo
Miravet
Báguena Huesa del Común Benifallet
R. Gu
Burbáguena
Calanda Tivenys
Cherta
269
VIOLENCIA ANTISEMITA EN LOS TERRITORIOS DE LA CORONA DE CASTILLA (ss. XIV-XV)
1366. Matanzas de judíos en Briviesca, Aguilar, Valladolid y Toledo 1469. Ataques a recaudadores judíos en Tolosa
siglo XIII fue el acontecimiento más va y cotidiana, eso sí. Ahora bien, tituyendo en importancia al antiju-
duro para la minoría, a salvo de otros desde la Peste Negra y la guerras daísmo propiamente dicho. Fueron
factores de discriminación: el pago de inmediatamente posteriores se inició aumentando las persecuciones con-
un pecho especial y la discriminación un ciclo de persecuciones agudas. tra los conversos. La Inquisición,
social y jurídica en al ámbito cotidia- Hubo muchos ataques a juderías, a fundada en 1478, acabó conven-
no. Pero los mudéjares, ya en los siglos menudo dirigidos desde el poder, ciendo a los Reyes Católicos de la
XIV y XV, salvo en relación con Gra- tanto en Navarra como en la Corona expulsión de los judíos. En 1492 se
nada y la colaboración esporádica de de Aragón y en Castilla. Los acon- decretó la expulsión de Castilla y
algunos con africanos invasores, no tecimientos más graves tuvieron Aragón. Navarra adoptó la medida
fueron fuente de graves conflictos. lugar en 1391. Fue un pogrom ini- en 1498. La expulsión de 1492 fue
Diferente fue la situación de los ciado en Sevilla pero extendido a un hecho traumático. Unos 80.000
judíos. Desde el siglo VIII hasta varias ciudades de Andalucía, Mese- judíos o más abandonaron los reinos.
mediados del siglo XIV no hubo per- ta Sur, Levante y Cataluña. Aparte Pero los que se quedaron, que engro-
secución generalizada contra ellos, de causar varios miles de muertos, saron los ya muy numerosos contin-
salvo esporádicos ataques localiza- provocó un súbito incremento de las gentes de conversos, acabaron en los
dos y espontáneos. Padecían cierta conversiones. En el siglo XV el lla- años siguientes siendo objeto de las
discriminación fiscal, administrati- mado “problema converso” fue sus- persecuciones inquisitoriales.
270
32
La culminación de la Reconquista
con la incorporación de Granada
y la unión dinástica de Castilla y Aragón
con los Reyes Católicos
EL REINO NAZARÍ HASTA níes y granadinos en la batalla del clan de origen norteafricano –“Banu
LA GUERRA DE GRANADA Salado. Desde la toma de Algeciras Sarray”– desde 1419, en que consi-
en 1344, tras largo asedio, apenas guen poner en el trono a Muhammad
Después de los últimos ataques hubo algunas incursiones en la zona IX y a uno de los suyos por visir, pro-
meriníes a Tarifa entre 1292 y 1294 del Estrecho, como en 1350 en Gi- tagonizaron las principales revueltas
se produjo un cierto paréntesis en el braltar, en cuyo sitio murió el propio internas del siglo XV. Los grandes
conflicto armado entre Castilla y Alfonso XI. rivales de los abencerrajes fueron los
Granada. Hubo disputa en la fronte- Internamente, en el siglo XIV los miembros de otro clan de origen en
ra jienense por el control de fortale- nazaríes alcanzaron su máximo Fez, los zegríes. Ambos clanes estu-
zas en época de Fernando IV. La inte- esplendor. De la segunda mitad del vieron detrás de muchos de los rele-
gración del reino nazarí en la política siglo data la construcción de la vos de la dinastía nazarí.
de hegemonía castellana no era fácil. Alhambra. Hacia 1367-1368 los gra- En cuanto a la guerra, Juan II rea-
Los granadinos pagaban fuertes nadinos inician una guerra en las brió hacia 1431 la guerra en la fron-
parias. En varias ocasiones pidieron fronteras con Castilla, apoyando tam- tera, sobre todo en la zona de Jaén y
y apoyaron nuevos intentos de inva- bién a Pedro I frente a Enrique II. En Ronda. Durante décadas no hubo
sión de la Península desde África, esos años atacaron Jaén, Córdoba y grandes avances, pero sí mucha ten-
protagonizadas por los meriníes. Úbeda, y en 1369 Algeciras. sión bélica y asedios de castillos
Éstos se apoderaron de Ceuta en Tras algunos años, ya con los Tras- fronterizos en las zonas limítrofes
1309. En 1333 recuperaron también támara, Castilla preparó una gran ofen- entre Granada y Castilla, con éxitos
Gibraltar. siva. Destacan las acciones de Fer- parciales para éstos: incorporacio-
Desde 1327 Alfonso XI realizó nando, tío y tutor de Juan II, entre nes de Xiquena y El Castellar
campañas en las sierras al norte del 1406 y 1410 en la frontera. Fernando (1433), Huéscar y Solera (1434),
reino nazarí. Los cristianos conquis- conquistó Zahara en 1407 y Anteque- Huelma (1438). Durante el reinado
taban en 1341 Priego, Rute y Alca- ra en 1410, siendo conocido por ello de Enrique IV los castellanos pre-
lá la Real. También se luchó en el como “Fernando de Antequera”. sionaron en la frontera y alentaron
Estrecho. En abril de 1340 era des- Unos años después en Granada la anarquía interior granadina, pero
truida la flota castellana en el Estre- hubo disputas internas, entre ellas las no hubo resultados claros en la gue-
cho. Unos meses después, el 30 de protagonizadas por los llamados rra hasta la época de los Reyes Cató-
octubre, Alfonso XI vence a meri- “Abencerrajes”. Los miembros de este licos.
LA UNIÓN DE CASTILLA de ambas coronas quedaban unidos. 1484 en Aragón. Los programas de
Y ARAGÓN CON LOS REYES Rigieron sus reinos de forma unita- gobierno y la correlación de fuerzas
CATÓLICOS ria, si bien tan sólo se trataba de una dieron a Fernando e Isabel estabili-
unión dinástica, no una unión entre dad política en sus respectivos esta-
Desde 1468 Isabel había sido los respectivos estados. La guerra con dos, de modo que las instituciones
aceptada como heredera de Castilla. Portugal entre 1475 y 1479 absorbió monárquicas se reforzaron en la épo-
En 1469 contraía matrimonio con el las energías de los primeros años. ca, se desactivaron las banderías
heredero aragonés, Fernando el Cató- Luego la prioridad fue la guerra de nobiliarias, se solucionaron proble-
lico. Isabel I heredaría el trono cas- Granada y la regulación de los pro- mas anteriores –usurpaciones, remen-
tellano a finales de 1474 y Fernando blemas religiosos. La Inquisición se sas, etc.– y se institucionalizó con
el de Aragón en 1479. Los destinos instituyó en Castilla desde 1478 y en mayor estabilidad la vida urbana en
272
todas partes. Por ello, Isabel y Fer- y castellanos. Pero fueron estos últi- Canaria, lograda en 1483. Poco des-
nando pudieron protagonizar una polí- mos los que salieron beneficiados, pués se trasladaba a Las Palmas el
tica conjunta como reyes de ambas desde las conquistas del normando antiguo obispado de Rubicón. Entre
coronas unidas, o reyes españoles, en Jean de Bethencourt, vasallo de Cas- 1492 y 1493 se conquista la Palma y
cierto sentido. América y Granada fue- tilla, con la toma entre 1402 y 1404 entre 1493 y 1496 Tenerife. Aún que-
ron grandes hitos –aunque con un pro- de Lanzarote y Fuerteventura, así daba controlar y repoblar buena par-
tagonismo más castellano que hispá- como Hierro, al año siguiente. Los te de las islas, que contaban con
nico en ambos casos–, así como la Bethencourt establecieron un señorío varios miles de aborígenes, que ofre-
expulsión de los judíos, todo ello en en esas islas, que duró unas décadas. cieron resistencia en Gran Canaria y
1492. Implicados también en una El Papa reconoció en 1436 la misión Tenerife. La incorporación a Casti-
política cada vez más internacionali- para evangelizar las islas. En Lanza- lla se llevó en esa década y en las
zada en el Mediterráneo, contaron rote se había fundado en 1404 el obis- siguientes mediante una combina-
con el respaldo papal, que desde el pado de San Marcial del Rubicón. ción de varias estrategias: capitula-
19 de diciembre de 1496 les recono- Desde el segundo cuarto del siglo XV ción, evangelización forzada e inten-
cía la condición de “Reyes Católi- algunos castellanos, como Enrique de to de erradicación de los cultos
cos”. Desde entonces llevaron a cabo Guzmán –conde de Niebla–, Guillén indígenas, pacto con las autoridades
una política de alianzas matrimonia- de las Casas y otras familias –Peraza, isleñas, eliminación militar de las
les para sus hijos de gran envergadu- Herrera–, pactando con los nativos, resistencias guanches, instalación de
ra, centrada en los Habsburgo, Ingla- controlaron algunas zonas – incluso colonos procedentes de Castilla –en
terra y Portugal. algunas islas, como La Gomera– y pocas décadas acabaron cuadrupli-
Durante el reinado de los Reyes establecieron señoríos. cando a la población originaria– y
Católicos culminó también la con- Pero en época de los Reyes Cató- mestizaje con la población autócto-
quista de Canarias. A mediados del licos, tras varias décadas de disputas na. Si nos fijamos bien, comproba-
siglo XIV ya se había fundado el obis- con Portugal, fue la monarquía cas- mos que eran fórmulas nuevas, que
pado fallido de Telde, se habían insta- tellana la que tomó las riendas de la recuerdan ya y se corresponden con
lado misioneros y las islas habían sido conquista. Desde 1478 los castella- los mecanismos empleados en la
objeto de disputas entre portugueses nos emprenden la conquista de Gran colonización americana.
Huéscar 1434
JAÉN Quesada
Gua
oG 1434 Orce
na
Cabra 1488
Montejícar Baza
Priego Alcalá la Real 1489 Albox Huercal-Overa
Lucena 1341 1341 Piñar
Colomera 1486 Iznalloz Purchena
Marchena Estepa Rute 1341 Zurgena
Moclín 1486 arro Guadix 1489 Río Almanzora
Osuna Benamejí Iznájar Montefrío Illora 1486 Río D Vera 1488
1341
Archidona GRANADA Lacalahorra Velefique
Mojácar 1488
Morón Loja 1492
Campillos 1462 1486 Fiñana Gérgal
dalhorce Dílar Sorbas
Pruna 1327 Teba 1330 Río Gua Alhama 1482 Padul
1489
Antequera Río Andarax
Olvera 1327 Cañete 1410 Vélez de Orjiva
Zafarraya
Arcos de Zahara Setenil Ardales 1330 Benaudalla Berja ALMERÍA
Comares
la Frontera 1407 1485 Álora 1489
Ronda 1484 Cártama Vélez-Málaga Torrox Salobreña
Grazalema 1485 Tolox 1487 Dalías
Montejaque 1485 Nerja Motril Adra
Ubrique Coín Mijas MÁLAGA1487
Almuñécar
Alcalá de 1489
los Gazules Gaucín Fuengirola
Río Gua
Medina 1456 M E
Sidonia El Castellar
1433
MAR
Gibraltar 1309, 1462
Conquistas cristianas entre 1292 y 1462
Algeciras 1344
Frontera del reino de Granada en 1480
Tarifa 1292
Ceuta 1415 (Portugal) 0 40 km 1487 Fechas de conquista cristiana
273
LA CONQUISTA cambio de vasallaje y pudo estable- tería –hasta 50.000 infantes–, además
DE GRANADA cerse en Guadix, desde donde con- de ballesteros, caballería y avanzada
taba con el apoyo de Almería. Pero logística, uso sistemático de la arti-
Al comienzo del reinado de Isa- luego, presionado por El Zagal, su llería, propaganda, empleo de recur-
bel en Castilla la anarquía interna era tío, que tomó Almería en 1485 y lue- sos financieros considerables, entre
acusada en Granada. Tras algunas go Granada, Boabdil huyó a Vera y otros. Los enormes costes fueron sos-
escaramuzas en la frontera y varias Córdoba. Tan sólo un tiempo más tenidos por unos eficaces mecanis-
treguas, desde 1482 los cristianos ini- tarde pudo Boabdil recuperar el tro- mos de extracción fiscal entre los cas-
ciaron una guerra de conquista. Con no de Granada, en 1486, pero para tellanos, que pagaron cuantiosos
el apoyo de los Abencerrajes, Boab- ello tuvo que hacer concesiones a impuestos para la guerra de Granada
dil, hijo de Muley Hacén, se suble- Fernando el Católico y luchar con- entre 1482 y 1491. La guerra, con
vó contra el padre y gobernó desde tra El Zagal y los zegríes. En los varias batallas campales y asedio de
el verano de 1482 en Granada, mien- años de guerra civil granadina, entre ciudades, se fue decantando hacia
tras Muley Hacén y El Zagal gober- 1483 y 1487, el reino se debilitó y Castilla, con toma de importantes pla-
naban en Málaga y Ronda. Cuando ello facilitó enormemente los avan- zas. Málaga cayó en 1487, Guadix,
en 1483 cayó prisionero de los cas- ces cristianos. Baza y Almería en 1489. En abril de
tellanos Boabdil, Muley Hacén recu- Para los castellanos, la de Grana- 1491 la ciudad de Granada quedó
peró el trono, en abril de ese año. da fue una guerra a gran escala y con sometida a asedio, asentándose el
Unos meses después Boabdil fue ciertos componentes modernos: des- campamento de los Reyes Católicos
liberado por Fernando el Católico a pliegue masivo de ejércitos de infan- en Santa Fe. Granada, desunida inter-
R EC U PER A C I ÓN C R I S TI A N A D E LA PEN Í N S U LA Y R EI N OS
HI S PÁ N I C OS ( s s . V I I I - X V ) [ Map a res u men ]
Santiago Covadonga
Oviedo
(c. 800) 1
Lugo
Pamplona
León
800 Tuy 856 Burgos Nájera
854 884 923 Huesca Gerona
2 1096
800-1000 Braga Zamora 1
893 Lérida Barcelona
Oporto Zaragoza 1149 801
868 Salamanca Segovia 1118 800
4 1035
Tortosa Tarragona
3 Teruel 1148 1117 1085
Ávila
1035 1171
1157
1085 Toledo 1085 1212
Cuenca
1177
Cáceres Valencia
Lisboa 1229 1238 Mallorca
1147 Calatrava 1147 5 1229
1157 Badajoz 6
1230 Navas de Tolosa Murcia
1212 1243
6 Córdoba
1236
Jaén
1246 Cartagena
Sevilla
1248 1245
Granada 1264
7 1492
Cádiz
1262-64
1264
Área 1 Expansión hasta el 800 ( Territorios sin control efectivo) Reino de Portugal
Área 2 Expansión hasta 1035 Área 5 Expansión hasta 1212 Corona de Castilla (Reinos de León y Castilla)
Área 3 Expansión hasta 1085 Área 6 Expansión hasta 1264 Reino de Navarra
Área 4 Expansión hasta 1157 Área 7 Expansión hasta 1492 Corona de Aragón
274
namente bajo el último rey Boabdil, Muchos granadinos se fueron. orden cristiano. Desde 1499, presio-
acabó capitulando. El 2 de enero de Otros permanecieron. Las condicio- nados para bautizarse, protagoniza-
1492 los Reyes Católicos entraban en nes de la repoblación imitaron las de ron revueltas que desembocaron en
la ciudad. Boabdil, tras una estancia los repartimientos anteriores, lle- una gran rebelión de 1500. En 1502
breve en las Alpujarras, se exilió al gando varias decenas de miles de se obligó a los que permanecieran en
norte de África. pobladores cristianos al reino de Gra- suelo hispánico a aceptar el bautis-
Con la conquista de Granada se nada, convertido en un “reino” más mo. Nacían así los moriscos, que fue-
completaba el proceso histórico de de Castilla. Los musulmanes que se ron muy numerosos en el antiguo rei-
Reconquista cristiana y de configu- quedaron pronto se sintieron des- no de Granada.
ración de los reinos hispánicos. contentos o coaccionados por el
275