Guía de Lectura de Don Juan Tenorio
Guía de Lectura de Don Juan Tenorio
Guía de Lectura de Don Juan Tenorio
José Zorrilla,
Don Juan Tenorio.
GUÍA DE LECTURA Y
ACTIVIDADES
I.- ANTES DE LA LECTURA
Don Juan Tenorio es la obra del teatro
español más representada en todos los tiempos. Se
estrenó en Madrid el día 28 de marzo de 1844 y,
desde entonces, se suele poner en escena cada año,
en torno al Día de Difuntos, sea en teatros
comerciales a cargo de actores profesionales, o en
salas diversas y con actores aficionados. Tanta fue (y
es) la popularidad de esta obra, que el nombre del
protagonista ha pasado al léxico español como
nombre común. Y así decimos de alguien que es un
donjuán, de la misma manera que podemos decir que
es un quijote, un lazarillo o una celestina. Se trata de
una característica singular de las grandes obras.
2. Como puedes apreciar por el significado de los dos términos, don Juan Tenorio
es un reñidor, una persona que se mete fácilmente en peleas, y un seductor.
¿Qué entiendes tú por seductor? Compruébalo en el diccionario.
5. Ya sabes que la obra se escribió y estrenó en Madrid a mediados del siglo XIX,
pero ¿en qué lugar y en qué época sitúa Zorrilla la acción del Tenorio?
1
José Zorrilla, Don Juan Tenorio.
6. La preceptiva clásica establecía que las obras de teatro tuvieran tres actos:
uno para la presentación de la acción, el segundo para el nudo o desarrollo, y
el tercero para el desenlace. ¿Respeta Zorrilla esta regla? ¿Cuántos actos
tiene el Tenorio?
8. Y una última cuestión previa: ¿esta obra de teatro está escrita en prosa o en
verso?
PRIMERA PARTE
ACTO I
2
José Zorrilla, Don Juan Tenorio.
Escena V
9. Aparece en la hostería don Gonzalo de Ulloa, enterado –como toda Sevilla–
de la apuesta entre los dos libertinos. ¿Qué le pide al hostelero?
Escenas VI-VII
10. Don Gonzalo no puede creer que Tenorio sea capaz de haber hecho una
apuesta así. ¿Qué interés mueve al Comendador en este asunto?
Escena VIII
11. El que aparece ahora es don Diego, que entra embozado, es decir, con la
capa a la altura del labio superior para que no se le reconozca. ¿Dónde se
sienta?
Escena IX
12. El escenario se va poblando de personajes. Entran Avellaneda y Centellas,
que confiesan a Buttarelli que han estado al servicio del Emperador. ¿En qué
guerra?
Escena X
13. ¿Por quién apuesta Centellas y por quién Avellaneda?
Escena XI
14. La teatralidad del Tenorio, uno de sus grandes valores, se pone de manifiesto
al final de esta escena, con las campanadas del reloj y la entrada de curiosos
enmascarados. ¿Qué hora suena en el reloj? ¿Qué clase de reloj sería?
Escena XII
15. Esta es la escena principal del primer Acto y una de las más famosas del
Tenorio. Sentados a una mesa, rodeados por amigos y curiosos, don Juan y don
Luis dan cuenta de lo apostado. ¿Qué cantidad presenta don Juan y cuál
don Luis? ¿Quién gana la apuesta?
16. No contento con su derrota, don Luis echa en cara a don Juan que le falta
un tipo de mujer en la lista de sus conquistas. ¿Cuál?
17. ¿Acepta el reto don Juan?
18. Esta nueva y diabólica apuesta provoca la reacción de don Gonzalo y de don
Diego. ¿Qué le niegan a don Juan? ¿Qué advertencia religiosa le hace don
Diego?
19. ¿Cuál es la actitud y respuesta de don Juan?
Escena XIII
20. Retirados don Gonzalo y don Diego, Tenorio recuerda a Mejía la apuesta
sobre doña Inés y doña Ana. ¿Cuál es el precio para el perdedor?
Escenas XIV-XV-XVI
21. Cuando van a salir a la calle, se presenta una ronda de alguaciles que detiene
a los dos seductores. ¿Por qué motivo?
ACTO II
3
José Zorrilla, Don Juan Tenorio.
Escena I
2. Don Luis Mejía llega embozado a la ventana de la casa de su prometida. ¿De
qué desea avisarla?
Escena II
3. Aparece en escena Pascual, sirviente de doña Ana, a quien Mejía confiesa su
temor porque Tenorio gane la apuesta. Por eso, le pide que lo deje entrar en
casa de su prometida y pasar la noche vigilando. ¿A qué hora le promete
Pascual que le franqueará la entrada?
Escenas III-IV
4. Mejía llama a la ventana. Aparece su prometida y conversan. Por el diálogo
entre ambos nos enteramos de la fecha de la boda. ¿Cuándo será?
Escena V
5. Tenorio, como Mejía, ha conseguido salir en libertad, pues el buen alcaide
prudente se avino (v.1090), es decir, que don Juan lo convenció, con su palabra
o con su dinero, que ambas cosas son posibles. En la calle descubren a
Mejía hablando con doña Ana. ¿Qué encargo hace don Juan a Ciutti?
Escena VI
6. Don Luis y su prometida se despiden en la reja hasta la hora convenida. ¿A
qué hora han quedado?
Escena VII
7. En esa calle oscura y solitaria se encuentran Tenorio y Mejía. Riñen y cuando
sacan las espadas... ¿Qué le ocurre a don Luis?
Escenas VIII-IX
8. Don Juan observa que alguien se aproxima. Es Brígida, aya de doña Inés y
alcahueta al servicio de don Juan. Ella es la portadora de la carta y la que ha
suscitado en la novicia el deseo de conocer a don Juan. Y es Brígida también
la que –al describir a doña Inés– despierta en don Juan la súbita pasión por
ella. ¿Qué le facilita Brígida a don Juan para acceder hasta el convento? ¿Y a
cambio de qué?
Escenas X-XI-XII
9. Despedida Brígida, don Juan se aproxima a la reja de doña Ana de Pantoja y
habla con Lucía, criada de la prometida de don Luis, a quien consigue sobornar
para que le facilite la entrada en esa casa. Don Juan tiene el camino libre
para ganar la doble apuesta. ¿A qué hora realizará las conquistas?
ACTO III
ACTO IV
Escenas IV-V-VI
7. La paz del amor pronto deja sitio a la riña. Vengo a mataros, don Juan, exclama
5
José Zorrilla, Don Juan Tenorio.
SEGUNDA PARTE
ACTO I
6
José Zorrilla, Don Juan Tenorio.
ACTO II
Escena I
2. Don Juan está contando a los invitados sus peripecias en Italia y la increíble
compra de la casa en que están, cuando –tras el brindis por el descanso eterno
del Comendador– suena un aldabonazo. ¿Cuántas llamadas se producen
(y dónde) hasta la aparición del Comendador?
Escenas II-III-IV
3. La entrada del Comendador coincide con el desmayo de Centellas y
Avellaneda,
desvanecimientos necesarios para el desenlace de la obra. ¿Qué le
anuncia don Gonzalo a don Juan? ¿A qué lo invita?
Escena V
4. Cuando Centellas y Avellaneda recobran el sentido, don Juan se siente –ironías
de este Tenorio– un burlador burlado. ¿De qué se acusan unos y otros?
5. El Acto II acaba en un duelo, ¿quién mata a quién?
ACTO III
Escena I
1. Volvemos al cementerio, al panteón de los Tenorio. Don Juan entra en escena
hablando consigo mismo y se dirige hasta el sepulcro del Comendador, que
se cambia en una macabra mesa. ¿Qué tres elementos aparecen sobre la mesa
y qué simbolizan?
Escena II
2. Aparece la Estatua de don Gonzalo para corresponder al convite de don Juan
y para anunciarle que está a punto de morir y de condenarse al infierno por
no haberse arrepentido y por no creer en la vida eterna. En esto, se ve pasar
un entierro. ¿Por quién doblan las campanas? ¿Quién es el muerto?
3. La Estatua afirma:
El capitán te mató
a la puerta de tu casa (vv. 3718-3719).
¿Es esta la solución de Zorrilla? ¿Se salva don Juan o se condena? ¿Por
qué?
Es muy extensa y abarca, además del teatro, los tres géneros principales de
poesía: lírica, narrativa y dramática.
• Teatro: más de treinta obras avalan la producción dramática de Zorrilla, la
mayor parte de ellas escritas entre 1839 y 1849. Sus obras reflejan temas y
situaciones de épocas pasadas, al estilo del teatro del Siglo de Oro (Lope,
Calderón, Tirso...), que conocía perfectamente. Las obras más significativas son:
– El zapatero y el rey (basada en la figura del rey don Pedro),
– El puñal del godo (sobre el rey don Rodrigo y el conde don Julián),
– Don Juan Tenorio,
– Traidor, inconfeso y mártir (basado en la leyenda del pastelero que suplantó al
rey de Portugal, don Sebastián, desaparecido en la batalla de Alcazarquivir).
• Poesía: entre 1837 y 1840 Zorrilla publicó ocho volúmenes de poesía, lo que
muestra el incansable ritmo creador en su juventud.
Entre los poemas líricos –cuyos temas principales son la religión popular y la
8
José Zorrilla, Don Juan Tenorio.
Los 3815 versos del Don Juan Tenorio se nos presentan estructurados en
dos partes desiguales.
• La segunda parte, por el contrario, tiene el ritmo pausado que marcan un reloj
de arena (v. 3692), el doblar de las campanas (v. 3709) y el canto de los salmos
(v. 3714), y solo dos escenarios: el panteón de los Tenorio y el comedor de don
Juan. La reflexión sustituye a la acción y el drama se acerca a la moralidad de los
autos sacramentales. Zorrilla construye, pues, su obra sobre una estructura dual:
dos partes, dos mujeres seducidas (doña Inés y doña Ana), dos burladores (don
Juan y don Luis), dos padres (don Gonzalo y don Diego), dos rivales que piden
venganza (don Gonzalo y don Luis), dos amigos (Centellas y Avellaneda), dos
criadas alcahuetas (Brígida y Lucía), dos sombras que se disputan el alma de don
Juan (la de doña Inés y la de don Gonzalo), dos caras del mismo hombre: un don
9
José Zorrilla, Don Juan Tenorio.
Juan dispuesto para la vida, otro don Juan preparado para la muerte; una actitud
para la condena, otra para la salvación.
LOS PERSONAJES
• Doña Inés es el personaje clave de la obra: «quien no tiene carácter, quien tiene
defectos enormes, quien mancha mi obra es don Juan; quien la sostiene, quien la
aquilata,la ilumina y la da relieve es doña Inés; yo tengo orgullo en ser el creador
de doña Inés y pena por no haber sabido crear a don Juan», dice el autor en sus
Recuerdos. Joven cándida y buena, nada de amores sabe, pues «vivido en el
claustro habéis/casi desde que nacisteis» (vv. 1438-1440). Se enamora de don
Juan casi por hechizo, y poco a poco el fuego amoroso la lleva hasta una pasión
arrebatadora («yo voy a ti / como va sorbido al mar ese río», vv. 2251 y ss.).
Don Juan la abandona y doña Inés muere, pero ella ha apostado con Dios la
salvación de los dos o su condena; doña Inés es la esencia del amor cristiano, un
ángel de amor capaz de sacrificarse por la salvación del libertino. Intermediaria
entre el cielo y la tierra, representa el triunfo absoluto del amor frente al honor
familiar, la venganza y la muerte.
• Ciutti tiene sus antecedentes literarios en la figura del «gracioso» del teatro del
Siglo de Oro, pero fue un personaje real: un camarero del Café del Turco, situado
en la calle Sierpes de Sevilla.
• Lucía representa la criada infiel y materialista que por dinero vende a su señora,
doña Ana de Pantoja.
• Buttarelli era una persona real: un hostelero de la calle del Carmen, en Madrid,
famoso por las chuletas y los tortellini que preparaba.
El resto de personajes –Pascual, Avellaneda, la abadesa, etc.– quedan trazados
muy superficialmente; doña Ana de Pantoja, por ejemplo, solo aparece en dos
rápidas escenas del Acto II y su encuentro con don Juan se sobrentiende. Ello
demuestra que el interés de Zorrilla estaba en la caracterización de don Juan y
doña Inés, y en la evolución psicológica de ambos personajes.
El propio Zorrilla había escrito antes del Tenorio algunas obras en las que
aparece
ya la figura del seductor: Vivir loco y morir más (1837), El capitán Montoya («es
de las armas la joya / y de las hembras imán») y Margarita la tornera (1840), lo
que demuestra que el tema del burlador rondaba su mente antes de decidirse a
realizar la refundición del drama de Tirso y sustituir en los escenarios el de
Zamora, como fue su propósito. Pero cada Don Juan es hijo de su tiempo.
El burlador de Tirso se condena, porque para el dramaturgo barroco, la salvación
sólo se consigue con una vida de fe, no de pecado: no hay salvación posible
para quienes –como su don Juan– desprecian la gracia de Dios y su misericordia;
en cambio, el don Juan romántico de Zorrilla alcanza la salvación por el amor de
doña Inés. El mismo Zorrilla era consciente de que en la conversión de su don
Juan, por la intercesión de doña Inés, radicaba la originalidad de su obra, y así lo
dejó escrito en el capítulo XVIII de sus Recuerdos del tiempo viejo.
ESQUEMA MÉTRICO
• Primera parte:
– Acto I: redondillas (vv.1-72); quintillas (73-102); redondillas (103-254); romance
(255-380); redondillas (381-440); quintillas (441-695); redondillas (696-835).
– Acto II: redondillas (vv.836-1119); versos sueltos (1120-1121); redondillas
(1122-1141); ovillejos (1142-1201); redondillas (1202-1249); octavillas (1250-
1345); redondillas (1346-1365); ovillejos (1366-1425); redondillas (1426-1433).
– Acto III: romance (vv.1434-1547); redondillas (1548-1647); octavillas
(1648-1655); redondilla (1656-1659); octavillas (1660-1675); redondilla (1676-
1679); octavilla (1680-1687); redondilla (1688-1691); octavillas (1692-1707);
redondilla
(1708-1711); octavilla (1712-1719); redondilla (1720-1723); octavilla
(1724-1731); redondillas (1732-1771); sextilla (1772-1777); quintillas (1778-
1797); redondillas (1798-1909).
– Acto IV: romance (vv.1910-2025); redondillas (2026-2173); décimas (2174-
2223); (2224-2447); romance (2448-2563); redondillas (2564-2639).
• Segunda parte.
– Acto I: redondillas (vv. 2640-2923); décimas (2924-3113); redondillas
(3114-3217); quintillas (3218-3227).
– Acto II: redondillas (vv. 3228-3491); décimas (3492-3511); redondillas
(3512-3599).
– Acto III: cuartetos endecasílabos (vv. 3600-3643); redondillas (3644-3727);
quintillas (3728-3737); redondillas (3738-3765); décimas (3766-3815).
RASGOS LINGÜÍSTICOS
CAE EL TELÓN.
tranquilo sobre los laureles de la obra, que yo tengo por la peor de todas las que
se han escrito en mi tiempo, por más que esté escrita con la frescura de la
juventud y vestida con una gala de versificación fascinadora».
Pero el Tenorio hizo fortuna, a pesar de las injustas e interesadas críticas de
Zorrilla, quien deseaba hacer una segunda versión de esta obra para poder cobrar
derechos de autor (en 1844 no existía ninguna ley de propiedad intelectual –la
primera en España se promulgó en 1879, sin efectos retroactivos– y Zorrilla veía
que todos se enriquecían anualmente con el Tenorio, menos él). Pero la
refundición no fue posible, no porque los editores se negaran, sino porque –como
reconoció el mismo Zorrilla– el pueblo se la sabía de memoria y por no volvérsela
a aprender, la aceptaba con todos sus desatinos. En cualquier caso, nunca estuvo
en su mente cambiar el final, porque a pesar de las críticas negativas recibidas,
era precisamente la misericordia de Dios y no su poder justiciero lo que Zorrilla
quiso resaltar. La clemencia del autor hacia don Juan es la misma compasión que
Zorrilla anhelaba de su padre, cuyo afecto había perdido al escaparse de su casa
en 1836. A pesar de los desatinos, a pesar de las variadas incoherencias (la carta,
por ejemplo, es una carta de amor escrita por don Juan antes de conocer a doña
Inés, antes de enamorarse de ella, antes de apostarse con Mejía la seducción de
una novicia y antes de saber que don Gonzalo va a imponer la reclusión de su hija
para siempre en el convento), a pesar de «las horas de doscientos minutos» para
dar tiempo a que don Juan haga lo que hace en la primera parte, Don Juan
Tenorio ha gozado siempre del fervor popular:
Don Juan no me deja ni envejecer ni morir; […] por él soy el poeta más conocido
hasta en los pueblos más pequeños de España; y por él solo no puedo ya en ella
morir en la miseria y en el olvido (Zorrilla, Recuerdos…).
Los críticos, lectores y espectadores de Don Juan Tenorio han discutido mucho
sobre las claves del éxito de esta obra: ¿es el «final feliz» lo que gusta al público?,
¿la eficacia teatral?, ¿la versificación? He aquí la opinión de algunos estudiosos
del drama:
4. ¿Cuál es la clave del éxito del Tenorio? Añade tu opinión a lo que otros han
dicho.
17