Ladrillos Refractarios
Ladrillos Refractarios
Ladrillos Refractarios
1.-INTRODUCCIÓN.
1.-Alta refractariedad.
2.- Estabilidad volumétrica a las temperaturas de operación.
3.- Estabilidad química (frente a gases, vapores y escorias).
4.- Resistencia al choque térmico.
5.- Alta resistencia mecánica en caliente.
6.- Alta densidad.
7.- Baja conductividad térmica.
8.- Alta resistencia a la abrasión.
9.- Baja conductividad eléctrica a altas temperaturas
Dado que algunas de las propiedades que debe cumplir el refractario ideal son contrapuestas, hay
que llegar, generalmente, a una solución de compromiso. Las propiedades de un refractario aislante
ideal:
2.- DEFINICION:
El ladrillo refractario es un tipo de material cerámico que posee una serie de características
especiales, lo que permite hacer un gran uso de éste dentro de instalaciones industriales o en
trabajos de estufas domésticas. Las caras de estos ladrillos son lisas. Esta peculiar
característica disminuye la adherencia con el mortero, logrando la resistencia a
altas temperaturas y la abrasión. Por sus buenas propiedades térmicas este material es
considerablemente costoso.
Los ladrillos refractarios actualmente son empleados para revestir calderas, ollas de
aceración, parrillas, hornos rotatorios de cementeras, por mencionar algunas, en donde éstos
deben estar adheridos uno con uno con tierra refractaria y para lograr mejorar la firmeza del
pegado también se puede agregar cemento; dándonos por resultado una mezcla que tendrá
una apariencia barrosa; esta mezcla permite que el pegado en la tierra sea suficientemente
resistente para los procesos.
El manejo de estos ladrillos no es tan simple como manejar ladrillos comunes, debido a que por
sus mismas propiedades reacciona de manera explosiva con otros materiales que no sean los
correctos.
Al igual que la tierra refractaria, los ladrillos refractarios además de cumplir con su función de
refractar, son excelentes contenedores de calor, es decir, mantienen el calor al que son
expuestos durante sus diferentes usos.
Una de las peculiaridades de este tipo de material es que son fabricados en calidades variadas,
dependiendo de la concentración de alúmina y con base en esta concentración el ladrillo resiste
mayores temperaturas o puede ser usado para distintos medios. Las concentraciones van desde
el 36% hasta el 99% de alúmina aunque también se puede emplear sílice.
Principalmente cuando se quiere recubrir hornos destinados para la fundición de acero, el tipo
de ladrillo empleado es el de dióxido de silicio, en algunos casos cuando los ladrillos comienzan
a licuarse estos trabajan con temperaturas superiores 3000 °F (1650 °C).
Para poder crear estos ladrillos es necesario que sus componentes estén expuestos a bajas
presiones y que sean a su vez, quemados a temperaturas muy altas. Las excepciones a este
proceso son aquellos ladrillos que son químicamente ligados, o los que utilizan
el alquitrán, resina o gomo para permanecer aglutinados.
3.2.1 Refractariedad: Estos materiales están constituidos por cristales circundados de una fase
vítrea, cuando ya tiene estabilizada su estructura.
Al aumentar la temperatura, lo hace también el porcentaje de vidrio, disminuyendo el de la
fase cristalina. Es entonces cuando la fase vítrea se empieza a transformar en una
masa viscosa, iniciándose así el proceso de ablandamiento. Se trata de determinar la
temperatura a la que el material se desmorona y aparece líquido o grumos.
El ensayo se realiza calentando probetas del material en forma de cono (cono pirométrico)
dentro del horno, junto a conos de material con puntos de fusión conocidos, colocados sobre
una placa. El punto de fusión estará determinado cuando la punta del cono, producto del alabeo,
toque la placa sobre la que se apoya. La refractariedad se da en grados centígrados.
3.2.2 Dilatación Térmica: Modificación reversible del volumen por influencia de la temperatura.
En la imagen siguiente, se indican dilataciones lineales reversibles de algunos ladrillos
refractarios según el componente utilizado en su fabricación.
La dilatación térmica tiene gran importancia en la práctica, ya que se tiene que calcular las
compensaciones por dilatación de los revestimientos de grandes instalaciones, evitando
así problemas de presión en los bordes y roturas de los ladrillos por resistencia insuficiente a
los cambios bruscos de temperatura.
3.2.3 Variación Lineal Permanente: Después del calentamiento a alta temperatura y
posterior enfriamiento final, frecuentemente quedan modificaciones de longitud
(dilataciones o contracciones), que se diferencian de la dilatación reversible. Si el ladrillo
presenta una contracción post-horno excesiva, crecen las juntas en proporción y se
producen fugas debido al aflojamiento de la mampostería. En caso contrario, la
dilatación post-horno también es peligrosa, porque pueden producirse roturas de
mampostería por cargas de presión.
En el caso específico del alto horno el mayor desgaste que sufre el material refractario
es por abrasión por lo cual se utiliza Silimanita (refractario 62% alúmina), en
zonas donde se acumula el carbono se utilizan ladrillos sillico aluminosos (45%
alúmina) con rangos de porosidad entre 18% - 20% ya que la acumulación de material provoca
tensiones que agrietan el material.
5.2 CONVERTIDOR LD
El revestimiento de seguridad para evitar eventuales perforaciones está compuesto
por ladrillos de magnesita cocida (ladrillo refractario). EL revestimiento de seguridad debe
estar correctamente balanceado para que el desgaste de material sea homogéneo,
debido a este hecho varía la calidad o el espesor de los materiales refractarios utilizados, en
función de las solicitaciones en cada una de las regiones del LD.