Turismo y Gestion Municipal
Turismo y Gestion Municipal
Turismo y Gestion Municipal
Turismo y Gestión
Municipal
© 1997. Asociación Chilena de Municipalidades.
Nº de inscripción: 99.746. Santiago, Chile. Abril 1997.
ISBN: 956–7485–11–9
DSE–DOK 1796 C/c
3
E l desafío de asegurar un desarrollo turístico sostenible, con la participación de to-
dos los actores locales, se ha transformado en un objetivo prioritario de las nacio-
nes que han comprendido la capacidad de la industria turística para contribuir al bie-
nestar de la comunidad. Y no sólo por sus significativos efectos económicos, sino
también por su importancia en la valoración de ambientes naturales -como es el caso
de las áreas protegidas- y el resguardo del patrimonio cultural.
Tenemos la certeza que este Manual “Turismo y Gestión Municipal” -pionero en nues-
tro país, y fruto de un trabajo conjunto entre la Asociación Chilena de Municipalida-
des y el Servicio Nacional de Turismo-, será un valioso aporte para quienes han asu-
mido la tarea de consolidar nuestros destinos turísticos tradicionales y de abrir nue-
vas perspectivas para aquellas zonas que ven en esta actividad una clara opción de de-
sarrollo.
Con esta publicación, las autoridades locales y todos los interesados en el tema, po-
drán disponer de un documento de apoyo para orientar las funciones vinculadas a la
planificación turística, trabajo que compartimos y que confiamos continuará en es-
trecha relación con las municipalidades del país.
5
Víctor Leiva R.
Geógrafo, Doctor en Geografía, experto en turismo.
En la elaboración de este Manual, el autor contó con aportes y comentarios de Humberto Rivas O., geógrafo,
especialista en turismo y medio ambiente, y funcionario de SERNATUR.
La Fundación Alemana para el Desarrollo Internacio- La Asociación Chilena de Municipalidades fue creada
nal (DSE) fue creada en 1959 por la Federación y los al cabo de un rico proceso de concertación de esfuerzos
Lander (Estados federados), a iniciativa de los partidos políticos y técnicos en pos de fortalecer el creciente
políticos representados en el Parlamento Federal, con proceso de desarrollo comunal. El Congreso constitu-
el objetivo de promover las relaciones entre la Repúbli- yente realizado en Valparaíso y Viña del Mar, en mayo
ca Federal de Alemania y los países en desarrollo sobre de 1993, marca el inicio de una gestión que cobra cada
la base de un intercambio de experiencias. vez más relevancia en el ámbito de su competencia.
A fin de cumplir este cometido, la DSE realiza eventos La entidad está regida por cuatro principios fundamen-
dedicados al diálogo y programas para el perfecciona- tales que garantizan su vocación democrática y de au-
miento profesional, con lo cual presta apoyo a los pro- tonomía respecto del Estado central. En primer lugar,
yectos de desarrollo económico y social que ejecutan el carácter voluntario de la afiliación de municipios.
los países de Africa, Asia y América Latina. Segundo, la consideración equitativa de los municipios
independientemente de su tamaño y recursos. Tercero,
la Asociación se conduce con un principio de irrestri-
Campos prioritarios de acción: cto pluralismo político y partidario que se expresa
tanto en sus estructuras directivas y técnicas, como en
• Foro de Política de Desarrollo (EF) los procedimientos operativos. Finalmente, la Asocia-
• Centro de Educación, Ciencia y Documentación ción se reconoce como un organismo político y técnico
(ZED) salvaguardando ambos sentidos en su quehacer.
• Centro de Desarrollo Económico y Social (ZWS)
• Centro de Orientación Regional (ZA) Dos objetivos generales definen su acción: la promo-
• Centro de Promoción de la Administración Pública ción de la autonomía municipal, a través de la repre-
(ZOV) sentación de los intereses municipales –y de las activi-
• Centro de Fomento de las Profesiones Industriales dades que de ella se derivan–, y la búsqueda del perfec-
y Artesanales (ZGB) cionamiento de la gestión municipal, a través de la ac-
• Centro de Fomento de la Alimentación y la ción directa con los propios municipios miembros, me-
Agricultura (ZEL) diante programas y proyectos de capacitación, estudios,
• Centro de Promoción de la Salud Pública (ZG) edición de publicaciones técnicas, entre otros.
Santiago, Chile
8
Introducción La municipalidad en el desarrollo turístico local 11
índice
• Dimensión comunal del turismo 13
• El rol municipal 15
• Concepto de planificación 67
• Definiciones preliminares 83
Anexos 153
Nº 1. Descripción de los atracticos turísticos
Anexo
Normativo 183
I. Materias generales
Anexo
Bibliográfico 191
10
introducción
La municipalidad en el
desarrollo turístico local
Contenidos
• El rol municipal
Dimensión comunal ¿Es el turismo un lujo o una necesidad?
del turismo Por mucho tiempo se pensó que el turismo era un lujo reservado sólo a quienes dis-
ponían del tiempo libre y de los recursos económicos para practicarlo. Esta idea ha
evolucionado y, al menos en teoría, hoy se reconoce que el turismo es, por una parte,
una necesidad y, por otra, un derecho humano.
Aunque en las últimas décadas muchos chilenos han elevado su nivel de vida, lo que
se refleja en un aumento significativo del turismo interno, también es cierto que
grandes sectores de la población no practican el turismo, ya sea por falta de recursos
y/o de motivación para hacerlo. El Estado, y en especial las municipalidades, enfren-
tan por lo tanto el desafío de planificar el desarrollo turístico no sólo desde el punto
de vista económico –viéndolo como una fuente de generación de empleos e ingresos
comunales–, sino también teniendo en cuenta las necesidades turístico–recreativas de
la población local, con el propósito de que la mayoría tenga acceso a disfrutar de
equipamientos de este tipo próximos a su domicilio.
Finalmente, por la falta de conciencia sobre el aporte que hace el turismo y la recrea-
ción en la calidad de vida de las personas, los espacios turísticos de valor serán imple-
mentados, probablemente, con recursos privados y fines de lucro, lo que significa la
exclusión de quienes no pueden solventar el costo del esparcimiento.
El turismo es una actividad que, a nivel mundial, moviliza cada año a más de quinien-
tos millones de personas. Tiene, por consiguiente, grandes impactos económicos, so-
cio–culturales y ambientales en las comunas y localidades receptoras de estos grandes
flujos de personas.
Incluso cuando se habla de flujos turísticos internacionales, los impactos son observa-
bles en el nivel local, antes que regional o nacional. Esto porque los recursos turísti-
cos que atraen a los visitantes nacionales e internacionales se localizan en territorios
que caen directamente bajo la tutela de una administración municipal.
13
a ccesibilidad. En general, los impactos de la actividad turística han sido muy desigua-
les en las 342 comunas del país. Mientras unas comunas o localidades ya tienen una
imagen turística reconocida nacional y/o internacionalmente –Viña del Mar, La Se-
rena, San Pedro de Atacama, Puerto Varas, entre otras– y un desarrollo turístico per-
ceptible, existe un gran número de comunas y localidades que recién comienzan o
que aún no lo han iniciado1.
Es cierto que no todas las comunas tienen las mismas condiciones para favorecer un
turismo masivo, porque no poseen atractivos de un nivel que sustente la actividad tu-
rística permanente. Sin embargo, también existe “desconocimiento de la realidad tu-
rística circundante”, es decir, la percepción subjetiva de que su territorio no es digno
de llamar la atención de personas provenientes de otras comunas y, en consecuencia,
no se hace ningún esfuerzo concreto para valorizar algunos de sus aspectos particu-
lares.
Una postura ante el turismo es verlo como tabla de salvación para algunas regiones o
comunas en declinación, o como la “llave maestra para el desarrollo” de aquellas que
aún no lo han alcanzado. Pero, las grandes esperanzas en los beneficios de esta activi-
dad no siempre van acompañadas de voluntad política para planificarla u orientarla.
Y la experiencia muestra que si el turismo no se desarrolla de manera planificada
puede, en el mediano y largo plazo, llegar incluso a tener más consecuencias negati-
vas que positivas sobre la economía, la sociedad y el medio ambiente local, como lo
veremos en detalle más adelante.
Por ejemplo, de acuerdo a los estudios realizados por el Servicio Nacional de Turis-
mo en 1995, cuando un turista extranjero llega al país efectúa diversos gastos que se
distribuyen proporcionalmente como se observa en el esquema siguiente.
14
GRAFICO Nº 1. DISTRIBUCION PORCENTUAL DEL GASTO TURISTICO
otros no
especificados (9.9%)
alojamiento (34.8%)
compras (25.5%)
consumo de alimentos y
transporte interno (6.9%) bebidas (22.9%)
Cada uno de estos rubros es un eslabón de la cadena económica del turismo, cuyo
efecto multiplicador genera beneficios para los proveedores de bienes y servicios tu-
rísticos, para las comunidades residentes y para otros actores involucrados en el sec-
tor turismo.
Para lograr lo anterior es necesario internalizar que las actividades del tiempo libre
–entre las que se encuentran la recreación, el deporte y el turismo– no son suntuarias
y reflexionar sobre su creciente valor en la vida de los seres humanos en la sociedad
actual.
15
Como es evidente, la municipalidad no es la única responsable del desarrollo tu-
rístico comunal, ya que en esta actividad intervienen directa o indirectamente
muchos actores sociales, por ejemplo, comerciantes, empresarios turísticos, ser-
vicios públicos, entre otros. Sin embargo la municipalidad no puede renunciar a
su rol orientador de la actividad turística comunal.
Entre las funciones que debería asumir la municipalidad en este ámbito, la más im-
portante es, probablemente, la de tener una visión de conjunto –sistémica– del desa-
rrollo de la actividad y propender a crear las condiciones para atraer a los visitantes y a los
empresarios turísticos externos y locales.
16
capítulo
El turismo: conceptos y
I
características
fundamentales
Contenidos
• Principales características
del turismo
17
Desde principios del siglo XX hasta nuestros días, la cantidad de tiempo libre del
El “tiempo libre” que disponen las personas ha aumentado de manera significativa. Esto se explica, en-
como marco de tre otras razones, por el aumento de la productividad gracias a los avances de la tec-
desarrollo del nología y por los beneficios sociales logrados por los trabajadores, cuyas demandas se
centraron a menudo en la reducción de las jornadas de trabajo.
turismo
Si se tiene en cuenta, además, que gracias a los avances de la medicina se puede vivir
cada vez un mayor número de años después de retirarse de la vida activa, podemos
concluir que a lo largo de toda una vida humana el tiempo libre del que se dispone para
actividades no laborales o para el descanso pasivo, también ha aumentado de manera
significativa.
1. TIEMPO LIBRE
El “tiempo libre” puede ser definido como el conjunto de actividades que se cumplen des -
pués de haberse desprendido de las obligaciones profesionales (trabajo o estudio), familia -
res (trabajos domésticos y cuidado de los padres y/o de los niños), fisiológicas (comer, dor -
mir, higiene y otros cuidados personales) y sociales (reuniones y visitas sociales y religio -
sas) obligatorias.
Las actividades del tiempo libre pueden ser tan diversas como el deporte, los trabajos
voluntarios en la casa, juegos, caminatas, excursiones, trabajos manuales, hobbies,
militancia política, lectura, cursos nocturnos, y llevar a cabo las obligaciones sociales
Adaptación del esquema propuesto que resultan placenteras. En suma, una mezcla muy heterogénea de acciones y tareas
por G. Cazes (1992:7). del cuerpo y de la mente, que son satisfactorias porque se pueden elegir libremente.
Tiempo de vida
19
En la figura Nº 1 se puede observar que el turismo ocupa sólo una parte del tiempo
libre humano y que la variable principal que lo diferencia de otras actividades propias
del tiempo de ocio, es el desplazamiento o viaje que es necesario realizar para practi-
carlo.
En este Manual nos ocuparemos principalmente de las ocupaciones que se hacen del
Tiempo Libre Turístico o de Ocio Turístico, el cual a su vez se divide, según su duración
temporal, en excursionismo y turismo. Adicionalmente nos ocuparemos de “prácticas
diversas” –como los peregrinajes; las curas de salud, etc.–, y del tiempo de trabajo con
un componente turístico inherente –congresos, seminarios, etc.–, ya que aunque su
primera motivación no es eminentemente turística, implica desplazamientos fuera
del lugar de residencia habitual y, por lo tanto, sus impactos económicos, sociales,
ambientales, etc., son similares a los de cualquier tipo de turismo. A las actividades
mencionadas se las considera parte del turismo y se les denomina: “turismo religio-
so”, “turismo de salud” o “turismo de negocios”, según sea el caso.
Turismo
“El turismo comprende las actividades que realizan las personas durante sus viajes y es -
tancias en lugares distintos al de su entorno habitual, por un período de tiempo consecu -
tivo inferior a un año, con fines de ocio, por negocios y otros motivos”. Organización
Mundial del Turismo (OMT, 1993:2).
En la definición se puede observar que dos de los elementos principales del turismo
son:
• el desplazamiento
• la duración de la estadía en el o los lugares de destino, la que debe implicar
al menos una pernoctación fuera del lugar de residencia habitual.
20
FIGURA Nº 2. EL SISTEMA TURISTICO Y SUS IMPACTOS A NIVEL LOCAL
Demanda
Turista
Formas de Turismo
Destino Características
del turista del destino
Características Oferta
del turista
Generación de Atractivos turísticos
Permanencia la influencia Planta turística
Tipo de actividad Organización política
Nivel de satisfacción Estructura económica
Características socioe- Nivel de desarrollo
Capacidad de
conómicas Estructura social y
acogida
Organización
Procesos ambientales
Impactos
del turismo
Medidas de control
de impactos
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El turismo es un sistema compuesto por una gran cantidad de elementos, tanto de na-
turaleza tangible –personas, paisajes, ciudades, etc–, como intangible –motivaciones
para viajar, imágenes subjetivas de los lugares, etc.
Como se observa en la figura Nº 2, las dos variables fundamentales del sistema turís-
tico son la oferta y la demanda. De la compleja interrelación que se produce entre
ellas resultan una serie de repercusiones o impactos, tanto positivos como negativos
para la comuna, en materias económicas, sociales y ambientales.
Excursionismo
La oferta turística de una comuna corresponde al conjunto integrado por tres componen -
tes básicos: atractivos turísticos, planta turística, e infraestructura. Estos pueden ser pues -
tos en el mercado mediante procesos de gestión, desarrollados por los empresarios turísti -
cos, por las propias municipalidades y por otros actores.
22
Cada uno de estos elementos de la oferta cumple una función en el sistema turístico,
como se aprecia en el cuadro Nº 1.
23
Producto turístico
“Es la suma de componentes tangibles e intangibles, que incluye los bienes, recursos, in -
fraestructuras, equipamientos, servicios, ingeniería de gestión, imagen de marca y precio
que el turista percibe” (Valls, 1996).
Así, cuando un grupo de turistas decide visitar un balneario está decidiendo por un
tipo de producto turístico específico, diferente al que se puede encontrar en un área
lacustre o en una ciudad como Santiago.
ATRACTIVOS GESTION
BIENES Y PRODUCTO
IMAGEN
SERVICIOS TURISTICO
EQUIPAMIENTO E PRECIOS
INFRAESTRUCTURA
Para esto hay que identificar cuál es la oferta turística con que cuenta un área o loca-
lidad específica, y cómo se puede evaluar para incorporarla al producto turístico co-
munal.
Demanda turística
24
Demanda turística comprende el total de personas que viaja o desea viajar para usar las
instalaciones y servicios turísticos ubicados en lugares distintos al de residencia y trabajo
de los usuarios.
La demanda turística, al igual que la oferta, está determinada por factores exógenos y
por fuerzas del mercado, entre las que se destacan las siguientes:
Factores exógenos
En el punto sobre las características del turismo, se analizan con más detalles algunos
de los factores y fuerzas recién citados.
La importancia económica del turismo para una comuna puede ser enorme. Sin em-
bargo puede tener otras consecuencias, también importantes, sobre el medio am-
biente y la vida diaria de una parte de los habitantes permanentes de la comuna, tal
como se muestra en el punto sobre impactos del turismo.
25
? ¿A quiénes se les identifica como turistas?
Un excursionista o visitante del día, debe entenderse como: “Un visitante que no
pernocta en un medio de alojamiento colectivo o privado en el lugar visitado”
(OMT, 1993:3).
Turistas
VIAJEROS
(Pernoctan)
VISITANTES
Alojamiento colectivo
Alojamiento privado
El impacto económico del turismo de corta o larga duración que utiliza establecimien -
tos de alojamiento turístico colectivo para las pernoctaciones es, sin duda, de mayor inte-
rés para las comunas o localidades de acogida ya que movilizan más recursos –en es-
* En esta categoría se pecial los hoteles, moteles, residenciales y restaurantes– que los que ponen en funcio-
incluyen trabajadores fronterizos; namiento aquellos turistas que pernoctan en alojamientos turísticos privados, ya que
migrantes; nómadas; pasajeros en estos últimos, por lo general, sólo producen mayores demandas de algunos productos
tránsito; refugiados; diplomáticos;
alimenticios.
miembros de las FFAA; viajes
diarios de rutina.
Fuente: OMT. A partir de esta relación, la comunidad y todos los agentes que intervienen en el
26
ciclo de producción para el turismo (empresarios turísticos, comerciantes, artesa-
nos, oficinas municipales de turismo, informadores turísticos, etc.), participan en
una cadena de servicios que está presente durante todo el trayecto del viaje.
Estas tres formas de turismo, según la manera en que se combinen, dan origen a las
siguientes categorías de turismo (según terminología de la OMT):
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Estas formas y categorías de turismo han sido definidas con el objeto de poder medir
los flujos de personas que se desplazan con fines turísticos ya sea al interior de un
país o bien entre países. El cuadro Nº 2 presenta y ejemplifica esquemáticamente có-
mo se mezclan diferentes formas de turismo para dar origen a las categorías recién
mencionadas
En el caso del turismo internacional, según la distancia en kilómetros que los visitan-
tes recorren durante el viaje comúnmente se hablará de:
Desde este punto de vista, el turismo puede ser dividido en dos grandes categorías:
turismo de fin de semana o de corta duración; y turismo de vacaciones o de larga du-
ración.
28
Ejemplo: viaje por el fin de semana de un habitante de la ciudad de Copiapó a la lo-
calidad de Flamenco, localizada en el litoral de la Tercera Región.
29
Aunque para los desplazamientos hay una motivación principal, las personas suelen
tener también motivaciones secundarias para visitar un determinado lugar. Así, una
persona que se desplaza por motivos religiosos o de salud bien puede aprovechar la
ocasión para visitar a parientes y/o amigos y/o para recorrer una comuna, ciudad, re-
gión, o país con fines meramente turísticos.
De acuerdo con los tipos y la calidad de los atractivos turísticos (descritos más ade-
lante) que posea una comuna o localidad, ella estará en condiciones de desarrollar al-
guna o algunas de las formas de turismo que se señalarán a continuación.
Dado que no hay completo acuerdo sobre las denominaciones de algunas formas de
turismo, para evitar confusiones en este Manual incluiremos, principalmente, aque-
llas formas reconocidas por la Organización Mundial del Turismo (1994; 1996), or-
ganismo rector de esta actividad a nivel mundial. Sin perjuicio de lo anterior, en al-
gunos casos describiremos otras formas de turismo no citadas explícitamente por la
OMT, y que nos parecen de interés para el caso de las comunas chilenas.
◆ Turismo urbano
Como su nombre lo sugiere, esta forma de turismo consiste en visitas realizadas a centros
urbanos de distintas dimensiones (grandes ciudades hasta pequeños pueblos) con el fin de
conocer o revisitar sus lugares de interés, entre los cuales se pueden incluir: parques, mu -
seos, edificios de valor arquitectónico y/o históricos, comercios, restaurantes, etc.
A menudo las áreas urbanas que poseen atractivos e instalaciones turísticas, además
de atraer visitantes hacia sí mismas, sirven de base de operaciones para la realización
de visitas por el día (excursiones) hacia localidades vecinas. Entre las ciudades turísti-
cas chilenas que cumplen este rol podemos mencionar:
– Valdivia, como base para hacer visitas a Niebla, Corral, Mehuin, etc.
– Puerto Natales, como base para visitar las Torres del Paine, las Pingüineras, etc.
– La Serena, como base para visitar el Valle del Elqui, Coquimbo, Tongoy, etc.
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◆ Turismo cultural
? ¿Qué medidas específicas se pueden tomar para usar racionalmente los recursos culturales?
Una de las formas de turismo que se ha desarrollado con mayor fuerza y rapidez en
las últimas dos décadas es el llamado turismo de resort del estilo Club Mediterráneo,
presente en muchas partes del mundo y en Puerto Velero y Las Tacas en la IV re-
gión de nuestro país.
– Complejo turístico
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La instalación de un complejo turístico de este tipo puede tener en el corto y largo
plazo, consecuencias económicas, ambientales, sociales, positivas y negativas, situa-
ción que debe ser conocida y prevista por las autoridades, los asesores municipales
y los otros actores locales (vecinos, comerciantes, empresarios turísticos, etc.).
Estos tres conceptos a menudo se toman como si fueran sinónimos, sin embargo
existen algunas diferencias en cuanto al grado de uso que cada uno de ellos hace del
espacio natural que es interesante clarificar. Estas formas de turismo, junto con el
agroturismo, el turismo de pueblos y el camping, se consideran formas de “turismo
rural”, concepto bastante acertado para englobar todas las formas de turismo no–ur-
banas y que poco a poco comienza a ser usado por los especialistas.
– Turismo de naturaleza
Es entendido como un segmento turístico con una demanda especial, que se caracteriza en pro -
mover actividades relacionadas con la naturaleza pura, en atractivos paisajes naturales poco
intervenidos, preferiblemente en áreas protegidas (Ecotourism Working Group, 1995:3). Las
actividades que se pueden realizar van desde observación de la flora y la fauna hasta el turis -
mo de aventura, pasando por la pesca y caza, fotografía, deportes, etc.
– Turismo de aventura
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Es una forma de turismo “activo” que, tal como se indica en el cuadro Nº 4, puede
tener impactos negativos a causa del sobreuso, en el caso en que la municipalidad y/o
los responsables locales de esas actividades no velen por un uso sostenible de los re-
cursos naturales.
El municipio que cuente con atractivos aptos para la práctica de este tipo de tu-
rismo –montañas, ríos caudalosos, cavernas, etc.– debe estar muy atento para
medir frecuentemente el estado en que éstos se encuentran y tomar las deci-
siones correctoras como limitar el acceso, por ejemplo, si fuera necesario para
preservar los atractivos y mantener en el tiempo la actividad turística.
Un riesgo que la municipalidad debe evitar a toda costa es que empresas de tu-
rismo de aventuras que tributan en otras comunas, a menudo muy lejanas, sa-
quen un provecho económico de los atractivos turísticos del territorio sin gene-
rar un justo beneficio. Esto constituye una verdadera “exportación de riqueza”
generada con los recursos comunales hacia otras comunas, a menudo más ricas.
Por ejemplo, ¿qué beneficios obtiene la comuna de Puerto Aysén de las innumera-
bles visitas a la Laguna San Rafael, que se encuentra en su territorio? Probablemente
muy pocos. Sería por lo tanto interesante reflexionar sobre este tema en muchas
otras comunas del país que se están en una situación parecida.
Las municipalidades cuentan con instrumentos legales que les permitirían obtener
beneficios para la comuna del uso que los privados hacen de sus recursos turísticos.
Así lo muestra el caso de la Municipalidad de Pucón que cobra, amparada por la ley,
un derecho de zarpe a las embarcaciones que prestan servicios turísticos de rafting en
su territorio jurisdiccional.
– Ecoturismo
El impacto que las actividades ecoturísticas tienen sobre el medio ambiente normal-
mente es pequeño (más reducido que el del turismo de aventuras) debido, principal-
mente, a que sus cultores suelen ser personas de alto nivel cultural que presentan in-
clinaciones ambientalistas, lo que los impulsa a disfrutar del medio ambiente natural
sin dañarlo. Adicionalmente el grado de actividad física y de riesgo del ecoturismo es
inferior al del turismo de aventura.
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El desarrollo del ecoturismo, al igual que el de aventura, requiere de guías califi-
cados para orientar y enseñar a los visitantes; y de vigilancia y control permanen-
te del estado del medio natural para advertir oportunamente sobre posibles ma-
los usos o sobreutilización de los recursos.
Guías bien entrenados, senderos atractivos bien señalizados ayudan en gran forma al
desarrollo de un turismo sustentable.
Estas dos formas de turismo son bastante similares en cuanto al medio en el que se
desarrollan y a los impactos sociales y económicos que ellas pueden tener en las co-
munas, sin embargo como veremos tienen algunos aspectos que las diferencian.
– Agroturismo
Esta forma de turismo recién comienza a desarrollarse en nuestro país. En la XII re-
gión, alrededor de una veintena de casas y bodegas de antiguas estancias ovejeras han
sido habilitadas por sus dueños para recibir turistas. En estos casos se trata de perso-
nas de un nivel social medio alto o alto que cuentan con residencias aptas para recibir
visitantes de su mismo nivel, aprovechando además que la temporada turística en la
XII región se extiende desde octubre a mayo.
Una limitación importante que se presenta para el desarrollo de este tipo de turismo
es que la mayoría de las personas que viven de manera permanente en los sectores
rurales es de condición social media baja y baja, por consiguiente bastante inferior a
la de los potenciales visitantes. Los campesinos ven limitadas sus posibilidades de de-
sarrollar esta actividad en su vivienda, ya que ésta a menudo no cuenta con algunas
características mínimas de confort (buenos servicios higiénicos y duchas, camas ade-
cuadas, etc.).
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Si se desea desarrollar esta forma de turismo en la comuna será necesario apoyar
a los campesinos interesados, orientándolos por una parte sobre las posibles
fuentes de financiamiento para su proyecto y entregándoles capacitación y aseso-
ría técnica en temas tales como: contabilidad elemental, cocina, diseño y cons-
trucción básica, calidad de los servicios ofrecidos, etc. Este último aspecto es fun-
damental, ya que en muchos casos los habitantes urbanos que eligen esta forma
de turismo, aunque estén deseosos de tomar en contacto con la vida rural, proba-
blemente no estarán muy dispuestos a dormir en una habitación y/o usar un ser-
vicio higiénico insalubre, como tampoco a ingerir alimentos de dudoso aspecto
y/o calidad.
Con esta asesoría técnica y financiera sería posible que estos campesinos habiliten es-
pacios para acampar y/o algunas habitaciones en su propia casa o en una construcción
separada, en las que puedan ofrecer alojamiento a algunos visitantes.
Por lo general la habilitación no debe implicar una gran inversión porque, en la ma-
yor parte de los casos, la actividad turística debe ser vista sólo como una posibilidad
de ingresos suplementarios. Ello dada la marcada estacionalidad de los flujos turísti-
cos, aunque algunos sectores rurales vecinos a las grandes urbes pueden beneficiarse
del turismo de fin de semana y especialmente del excursionismo durante gran parte
del año.
Al servicio de alojamiento puede agregarse otros, tales como: alimentación con platos
típicos de la cocina regional o local y animaciones diversas: paseos a caballo, camina-
tas guiadas, espectáculos folclóricos, artesanías, etc. y, evidentemente, la “oportuni-
dad de familiarización con trabajos agropecuarios”, tales como ordeña, arreo y/o
marca de ganado, trilla, etc.
– Turismo de pueblos
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Por razones similares a las del agroturismo, el turismo de pueblos está poco de-
sarrollado en nuestro país, y los campesinos que quieren sacar partido de el re-
quieren de los mismos apoyos que los que desean desarrollar el agroturismo, es
decir, que habrá que capacitarlos para entregar servicios de calidad y asesorarlos
para la obtención de créditos.
La práctica del camping y el uso de casa rodantes se está haciendo cada vez más co-
mún en nuestro país, en especial con turistas argentinos que nos visitan en gran nú-
mero.
El municipio debe velar por la limpieza y protección del medio ambiente, ya sea
directamente en aquellos campings de su propiedad o a través de la orientación a
los propietarios de campings privados, sobre los beneficios de cuidar el equilibrio
del sistema natural, evitando el sobreuso y el deterioro.
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Esta forma de turismo tiene algún grado de desarrollo en nuestro país tanto en sus
escasos ríos navegables: Calle–Calle, Valdivia, Tornagaleones, como en sus la-
gos –Villarrica, Todos Los Santos, Llanquihue, etc.– y canales: Moraleda, canales
chilotes, etc. En menor medida, cruceros marítimos de larga distancia.
Del mismo modo que con el turismo de aventuras, es posible que los municipios no
se beneficien con el aprovechamiento turístico de los recursos hídricos existentes en
el territorio comunal y, paradojalmente, sí lo hagan empresas de otras regiones y co-
munas a veces bastante lejanas.
Para que la comuna y sus habitantes reciban los frutos de esta forma de turismo
es necesario crear infraestructuras mínimas tales como embarcaderos y locales de
ventas de productos propios; y ofrecer algunos circuitos turísticos de corta dura-
ción en tierra, para incentivar a las embarcaciones que transportan visitantes a
detenerse en algunos lugares de la comuna.
◆ Turismo residencial
Se sabe que el estado de Florida en Estados Unidos, las Islas Canarias y en general el
sur de España, la Costa Azul francesa son destinaciones muy valoradas por los jubila-
dos para pasar la última etapa de sus vidas. Encuestas de opinión indican que los
adultos mayores desean sobre todas las cosas disfrutar de un “buen clima” con escasas
precipitaciones y asoleado, especialmente en invierno (Besancenot, 1990:142).
Esta forma de turismo corresponde más bien a la realidad de los jubilados europeos o
norteamericanos que a la de los chilenos. A pesar de que no existen muchos estudios
al respecto, se puede decir que en nuestro país el turismo residencial de la tercera
edad está muy poco desarrollado.
La OMT (1996:86) reconoce que esta práctica puede tener tanto impactos positivos
(pago de contribuciones, compras en la comuna, etc.) como negativos (pérdida de
identidad cultural, sobrecarga de la infraestructura local, etc.) sobre la economía y el
espacio local.
◆ Turismo juvenil
Los jóvenes pueden practicar cualquiera de las formas de turismo existentes con la
sola condición de que cuenten con los recursos para hacerlo. La particularidad de lo
que se denomina turismo juvenil es que, por lo general, es menos exigente desde el
punto de vista de la calidad del alojamiento. Esto no significa que a los jóvenes les
guste alojar en lugares insalubres o inseguros, sino que están más dispuestos que los
adultos para alojar en albergues menos confortables y tranquilos, y para compartir
habitación y otros servicios con otras personas.
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Aunque el gasto turístico de los jóvenes es inferior al de los adultos, cuando los
flujos de jóvenes son masivos, su presencia puede ser un aporte significativo para
el comercio local, en especial para los pequeños comerciantes y locales de diver-
sión. Además los jóvenes de hoy son los adultos del futuro que constituirán po-
tenciales visitantes, dependiendo de la calidad de su experiencia juvenil en la co-
muna o localidad.
Igualmente, la presencia de los jóvenes puede hacer proliferar las discotecas y otros
locales de diversión destinados a ellos, con el consecuente bullicio hasta horas de la
madrugada, lo que en muchos casos genera conflictos con los visitantes adultos y/o
con los residentes permanentes.
◆ Turismo gastronómico
Si somos rigurosos en cuanto a los conceptos, sería más correcto hablar de excursio-
nismo gastronómico, ya que por lo general cuando lo que motiva es alguna especiali-
dad culinaria, los desplazamientos suelen ser de una duración inferior a un día.
38
Formas de turismo motivadas por negocios y motivos profesionales
Se puede decir que la organización de eventos tales como festivales, ferias, exposicio-
nes, espectáculos deportivos y culturales, etc., es un elemento destacado en las mo-
dernas estrategias de marketing orientadas a la creación de imagen local.
A menudo con estos eventos se trata de dar animación a recursos ya existentes con la
venida de público. Es una especie de “campanazo” para llamar la atención del merca-
do turístico. Sin embargo, para que estos eventos tengan tal efecto es necesaria una
continuidad en el tiempo, es decir, que se repitan con una frecuencia conocida (en lo
posible cada año), para que realmente “entren” en la imagen mental de un número
significativo de personas.
Para lograr lo anterior se requiere, en primer lugar, que el evento a realizar ten-
ga relación con los recursos y las potencialidades locales y, en segundo lugar, de-
be ser muy bien planificado desde el principio en todos sus aspectos, principal-
mente en lo relativo a la publicidad y comercialización.
39
El municipio debe ser muy cuidadoso al momento de negociar con “patrocina-
dores privados”, ya que por lo general los objetivos de éstos son de muy corto
plazo por lo que se corre el riesgo de que se “apoderen” del evento para lograr
sus propios objetivos de imagen y lo transformen, quizás, radicalmente en rela-
ción a los que el municipio deseaba.
– Turismo deportivo
Una ciudad que cuenta con instalaciones deportivas de gran calidad y capacidad
puede sacar mucho beneficio de la organización de manifestaciones deportivas
diversas (campeonatos nacionales o regionales, por ejemplo), con la condición de
que las planifique con tiempo en conjunto con todos los actores pertinentes, es
decir, el municipio, los organizadores del evento, la policía, representantes de los
habitantes, etc.
– Turismo religioso
40
El municipio, en conjunto con las autoridades religiosas locales, basados en su
conocimiento de los impactos de las fiestas religiosas que se celebran en los san-
tuarios de la comuna, deben planificar cuidadosamente el desarrollo de éstas, con
el objeto de que no pierdan su sentido religioso original y que, además, sus im-
pactos sociales (delincuencia, alcoholismo, etc.) y ambientales negativos (basuras,
destrucción de la vegetación, etc.) se reduzcan al mínimo.
La OMT (1996:88) entiende esta forma de turismo como “de visita a los lugares de pro -
cedencia propia o ancestral”.
Consiste por lo tanto en visitas motivadas por el deseo de reencontrarse con sus raíces, ya
sea en los lugares donde se pasó parte de su vida o aquellos donde vivieron los antepasados
de la familia.
En algunas fechas del año que podríamos denominar “claves”, entre las que se desta-
can: Fiestas Patrias, Día de Todos los Santos, Semana Santa, Navidad y Año Nuevo,
se producen desplazamientos masivos principalmente desde las grandes ciudades ha-
cia el resto del país o región, motivados por el deseo de las personas de pasar estas
fiestas en familia.
Otro ejemplo de este tipo de turismo sería un viaje de personas de origen alemán que
viven en Chile, hacia la localidad de Alemania desde donde vinieron sus antepasados.
– Turismo medicinal
41
En la actualidad la manifestación más clara de turismo medicinal es el termalismo.
En nuestro país existen aún algunos centros termales –Mamiña, Panimávida, Socos,
Quinamávida, Palguin, etc.– que atraen a un cierto número de visitantes, aunque mu-
chos menos de los que asistían hace algunas décadas.
Así, por ejemplo, una baja significativa del precio o “tipo de cambio” del peso argen-
tino en Chile –es decir, una disminución importante de la cantidad de pesos chilenos
que se entregan por cada peso argentino– puede tener como consecuencia una dismi-
nución de los flujos de turistas argentinos hacia nuestro país porque éste se vuelve
para ellos “relativamente más caro”. Al contrario, esta situación podría significar un
aumento de los flujos turísticos de chilenos hacia Argentina (turismo emisor), dado
que ese país se vuelve “relativamente más barato” para nosotros, al tener que dar me-
nos pesos chilenos par cada peso argentino. Esto, evidentemente en el caso de que
todas las otras variables permanezcan constantes.
Del mismo modo, una crisis económica ya sea en Chile o Argentina, acompañada de
altos índices de desempleo, también puede provocar disminuciones significativas en
los flujos turísticos entre ambos países.
42
Esta sensibilidad del turismo respecto de los cambios que se producen en el entorno
social, económico y político, tanto inmediato como más distante, debe obligar a los
políticos y a los responsables locales del turismo a ser muy cautos al momento de ha-
cer pronósticos sobre los impactos sociales, económicos y ambientales que producirá
el desarrollo del turismo en la comuna en los años venideros. El descubrimiento y/o
puesta en valor de un atractivo turístico puede provocar un explosivo interés por sa-
carle el máximo provecho en el corto plazo, lo que puede conducir a un rápido dete-
rioro o agotamiento del atractivo, con lo que el crecimiento económico generado por
el turismo no pasará de ser un breve espejismo.
La población flotante puede ser definida como el universo de personas que visita una loca -
lidad turística durante un período de tiempo variable, desde pocas horas hasta un número
indefinido de días.
Los factores que influyen en la estacionalidad pueden estar relacionados con el tipo de
atractivos que ofrece la comuna: nieve, playas, culturales, etc., con las características del
mercado turístico: fechas de las vacaciones escolares, distribución anual de los días fe-
riados, nivel socioeconómico de los visitantes, etc., con la localización geográfica de la
comuna, etc., o de una combinación de estos factores.
En cuanto a los factores relacionados con el tipo de atractivos podemos decir que la
llamada “temporada alta” en las comunas que basan su actividad turística en los de-
portes invernales, ocurrirá evidentemente en invierno, mientras que en las comunas
de turismo balneario ésta será en verano.
En el caso chileno, por lo general, la temporada alta tiene una duración de 2 a 3 me-
ses –mediados de diciembre a mediados de marzo– en las destinaciones turísticas
–comunas y localidades– típicamente “de verano”, tales como playas, lagos, ríos, etc.
Y de 2 a 4 meses, en las destinaciones turísticas “de invierno”, dependiendo de las
condiciones climáticas, especialmente la duración de la nieve apta para la práctica de
los deportes invernales.
43
Entre los principales factores relacionados con las características del mercado turísti-
co, se debe mencionar la marcada inclinación a tomar las vacaciones anuales de una
sola vez y de preferencia en verano, coincidiendo con las vacaciones largas de los es-
tudiantes. Esta situación está cambiando y ya existe una tendencia cada vez mayor a
parcelar las vacaciones con el objeto de poder salir más frecuentemente pero por pe-
ríodos de tiempo menores.
Esta situación es más marcada aun en las localidades en las que la estación alta ocurre
en invierno (centros de esquí de montaña), en los que no cuentan con la posibilidad
de contratar un número importante de estudiantes, dado que por lo general las vaca-
ciones de invierno son significativamente más cortas que la temporada de deportes
de invierno.
44
Algunas formas de disminuir la estacionalidad
Aunque es muy difícil eliminarla completamente, existen algunas formas que permi-
ten reducir en una cierta medida la estacionalidad del turismo, como por ejemplo:
Quizás el aspecto más original del turismo es el desplazamiento fuera del lugar de re-
sidencia habitual que el consumidor debe realizar hacia el producto turístico (los
atractivos turísticos y las instalaciones para alojamiento y alimentación principalmen-
te) que él desea consumir. Esto además implica una puesta en contacto directo del vi-
sitante exterior con los habitantes de la comuna o localidad, con su cultura y su terri-
torio, lo que como veremos más adelante puede tener tanto efectos positivos como
negativos.
A causa de la distancia a la que ellos se encuentran, a menudo los bienes o servicios turís -
ticos son adquiridos sin conocerlos, guiados solamente por la publicidad o por opiniones
de otras personas que ya los han usado. En beneficio de los visitantes en tanto consu-
midores, y para mantener y/o mejorar la imagen de una localidad o comuna, es indis -
pensable que alguien (el municipio en conjunto con las asociaciones de empresarios,
por ejemplo) se ocupe de medir y controlar la calidad de los bienes y servicios entrega-
dos (Boullón, 1990:76).
45
Un municipio localizado a proximidad de un gran centro emisor de visitantes
(grandes ciudades) bien podría incentivar la localización de este tipo de activida-
des (piscinas, parques acuáticos, zoológicos, parques de atracciones, etc.) en su
territorio con el objeto de atraer parte de dichos visitantes potenciales.
Es de suma importancia internalizar que, por sus características, los bienes y servicios
turísticos son perecibles, lo que significa que aquellos que por alguna razón no fue-
ron vendidos en su preciso momento, será imposible “venderlos después” y recupe-
rar los ingresos que ellos habrían producido.
Esto significa, por ejemplo, que es imposible vender algún tiempo después las noches
de hotel, los tours, los asientos de buses, etc., que por alguna razón (mal tiempo, ac-
cesos interrumpidos, cierre de un local, etc.) no se vendieron durante la primera se-
mana de enero, incluso si las semanas siguientes son excelentes en cuanto a los nive-
les de demanda alcanzados.
46
capítulo
Impactos generados II
por la actividad
turística a nivel local
Contenidos
El turismo en sus aspectos económicos ha sido muy bien estudiado desde hace varias
décadas. Pero recién hace 15 ó 20 años han recibido atención sus efectos sobre otros
aspectos tales como la vida social y el medio ambiente. A continuación se describen
los principales impactos económicos, sociales y ambientales que es necesario conocer
cuando se planifica el desarrollo turístico comunal.
impactos
económicos del El gasto turístico se asocia al consumo realizado por los visitantes, en términos
del valor de los bienes y servicios (alojamiento, alimentación, transportes, com-
turismo pras, etc.) utilizados durante su desplazamiento y su permanencia en el lugar de
destino (Naciones Unidas, 1994).
No es fácil separar o identificar, dentro del gasto total realizado por el conjunto de
las personas que se encuentran en un mismo momento en un país, región o comuna,
lo que corresponde exclusivamente a gasto turístico. Por ejemplo, ¿cómo saber con
plena exactitud qué parte de los viajes aéreos nacionales e internacionales son por
motivos turísticos? O, ¿qué parte del consumo nacional o regional de bebidas co-
rresponde a gasto turístico? Pero sí se puede afirmar que el turismo es una importan-
te actividad generadora y redistribuidora de recursos económicos.
El turismo emisor, por su parte, debe ser considerado como una importación, debido a
que el gasto que hacen las personas que residen en el país cuando viajan al extranjero
49
representa una salida de divisas hacia otros países, del mismo modo que cuando se ad-
quiere algo producido en el extranjero, como petróleo, automóviles, piñas, etc.
Es evidente, entonces, que lo más conveniente para un país es que el gasto de los tu-
ristas que llegan a él sea superior al que producen sus habitantes cuando visitan países
extranjeros.
El turismo interior, es decir aquel que realizan dentro del país, tanto las personas
que residen de manera permanente en Chile como los extranjeros que nos visitan,
tiene un importante rol de redistribución de dinero en el propio país. Cuando las
personas que residen en la ciudad de Santiago se desplazan, por ejemplo, a San Pe-
dro de Atacama con fines turísticos (u otros), a lo largo de la ruta y en su lugar de
destino final demandan una serie de bienes –bencina, comestibles, artesanías, etc.– y
servicios –hotel, transporte, entrada a atractivos turísticos, etc.–. Este consumo es pa-
gado con dinero que han generado en su lugar de trabajo o de residencia habitual,
por ejemplo, Santiago.
Este hecho es de suma importancia para las economías locales dado que ingresan re-
cursos económicos externos al circuito económico comunal.
Las comunas que poseen mayores atractivos o aquellas que han sabido valorizarlos,
captarán una parte más significativa del volumen total de dinero que los visitantes es-
tán dispuestos a gastar con fines turísticos.
Si en la comuna no existen suficientes personas con capacidad empresarial y/o los re-
cursos financieros para hacerse cargo de la puesta en valor, administración y gestión
de los atractivos turísticos existentes y/o de los servicios asociados, es muy probable
que personas y/o empresas externas a la comuna lo hagan, produciéndose una verda-
dera “exportación de la riqueza”.
50
? ¿Cómo evitar o disminuir la exportación de riqueza hacia otras comunas?
Por otra parte, al haber mayor empleo (o menos desempleo) las demandas de subsi-
dios y otras ayudas sociales disminuyen, lo que significa un ahorro de recursos para el
municipio, que pueden ser destinados a otros fines.
En muchos casos los flujos de visitantes que recibe una localidad, aunque sea durante
un breve período del año, ayudan a justificar y a hacer más rentables algunos proyec-
tos de inversión, por ejemplo, asfaltar caminos de acceso y calles, construcción o ex-
tensión de las redes de servicios básicos, instalación de teléfonos, etc. Estas mejorías,
además de servir a los turistas durante su estadía en la comuna, favorecen durante to-
do el año a los residentes permanentes.
Esta es una de las principales causas o argumentos con las cuales se puede despertar
el interés de las autoridades políticas para que impulsen el desarrollo turístico comu-
nal. Por su relevancia, nos detendremos con mayor detalle en este punto.
51
dos, en las que se desempeñan garzones, maestros de cocina, personal de gerencia
y administrativo, vendedores, guías turísticos y otros.
Para que la población local se vea favorecida con la creación de empleos en su comu-
na es necesario que cuente con la calificación necesaria para ocuparlos. De otro mo-
do, los puestos de trabajo mejor remunerados del sector turismo serán llenados por
personas provenientes de otras comunas, las cuales no necesariamente fijarán su resi-
dencia en ella.
52
En comunas grandes tanto desde el punto de vista demográfico como territorial
y que además posean una clara vocación turística, sería deseable introducir en los
programas de la educación media técnico–profesional algunas materias relacio-
nadas con servicios turísticos.
No existe una receta para la creación de empleos, sin embargo las acciones que se
emprendan con el objeto de aumentar los flujos turísticos hacia la comuna ten-
drán directa o indirectamente un impacto en la creación de empleos. Por ejem-
plo, una campaña promocional consistente, acompañada de una buena calidad de
los bienes y servicios entregados a los visitantes, debería producir, en el mediano
y largo plazo, un aumento de las visitas a los atractivos que ofrece una comuna, y
consecuentemente, mayores necesidades de personal de distinto nivel.
Para atraer a inversionistas que los financien es clave un buen Plan de Desarrollo
Turístico Comunal. En él deben quedar meridianamente claros los objetivos co-
munales en este tema, y las condiciones básicas de operación que se ofrecen, co-
mo posibilidades de compra de sitios urbanizados o urbanizables, vías de acceso
expeditas, datos sobre la disponibilidad real de mano de obra, informaciones so-
bre los flujos turísticos actuales y potenciales, etc.
El turismo de congresos atrae a personas que por lo general tiene un nivel cultu-
ral y/o económico superior al turista promedio. Además a menudo demanda ser-
vicios no habituales en otros tipos de turismo: secretarias, traductores, redes
computacionales, servicios audiovisuales, espectáculos especiales, instalación de
carpas o stands, etc. (OEA, 1993: 3–20).
53
• Aumentando el tiempo de estadía de los visitantes en la comuna
a) Exportación de la riqueza
54
c) Inflación estacional
La OMT (1994:35) plantea que el desarrollo del turismo puede tener tanto im-
Principales pactos positivos como negativos sobre las prácticas sociales y culturales de las comu-
impactos socio– nidades donde éste se desarrolla. A continuación presentaremos los más importantes.
culturales del
turismo
1. PRINCIPALES BENEFICIOS SOCIO–CULTURALES DEL TURISMO
El desarrollo del turismo bien planificado puede otorgar, entre otros, los siguientes
beneficios:
a) Calidad de vida
Ejemplos: Pavimentación de caminos hacia algunos lagos –Todos Los Santos, Puye-
hue– del sur de Chile; apertura de la Carretera Longitudinal Austral, etc.
En muchos casos el interés de los turistas por conocer aspectos de la cultura local
permite mantener o hace revivir algunas prácticas que forman parte de la herencia
cultural. Los ingresos económicos generados por el turismo permiten financiar la
mantención o restauración de sitios históricos y/o arqueológicos, el funcionamiento
de grupos de danzas típicas, y en general mantener vivas una serie de actividades ar-
tísticas, estilos de vida, ceremonias, formas económicas tradicionales, que de lo con-
trario podrían perderse por completo.
55
c) Creación y/o mantención de infraestructura
El interés mostrado por los visitantes por ciertas manifestaciones culturales locales
puede provocar en la población residente un sentimiento de orgullo y deseo de pre-
servarlas. Esto es muy positivo, especialmente en culturas tradicionales que corren el
riesgo de ser absorbidas o reemplazadas por prácticas tomadas de otras culturas más
dinámicas pero no necesariamente mejores.
e) Intercambio cultural
A pesar de los beneficios que puede traer para una comuna o localidad el desarrollo
del turismo, existe el riesgo de que surjan algunos problemas socio–culturales que
pueden poner en cuestión el futuro de la actividad turística en la comuna, especial-
mente cuando dicho desarrollo ha sido espontáneo (no planificado).
56
Algunos de estos impactos negativos son los siguientes:
En las primeras etapas del desarrollo de la actividad, cuando aún el número de visi-
tantes es pequeño, su presencia generalmente es bien aceptada por la población local.
Pero cuando la población flotante supera en una o más veces a la población local,
surge, principalmente en las personas que no se benefician directamente con el turis-
mo, sentimientos de rechazo hacia los visitantes de los cuales se dice que “invaden”
“su” ciudad o pueblo y privan a los residentes –o al menos les dificultan– del acceso
a los servicios, calles, comercio, restaurantes, etc.
Aunque en algunos casos el interés demostrado por los turistas sirve para rescatar o
fortalecer antiguas tradiciones culturales, existe el riesgo de que con el fin comercial
de “explotar al turista”, se pierda la autenticidad de la música, ceremonias, artesanías,
etc., aprovechando el desconocimiento que éste tiene de las reales características de
estas manifestaciones culturales. Es así como muchas tradiciones se transforman en
meros espectáculos para los turistas.
Las “trutrucas” de plástico, las mismas artesanías “típicas de la zona” (con honrosas
excepciones) vendidas desde Arica a Magallanes a las que sólo se les cambia el nom-
bre de la localidad, los ponchos “artesanales” ecuatorianos o peruanos vendidos co-
mo chilenos, etc., son algunos ejemplos de esta degradación de prácticas culturales
autóctonas.
El rico intercambio cultural que puede darse cuando los visitantes no superan en nú-
mero a los habitantes locales, frecuentemente se transforma en confrontaciones cul-
turales cuando la presencia de visitantes es masiva. Peor aún si ella ocurre en locali-
dades rurales pobres, en las que los visitantes mayoritariamente urbanos y relativa-
mente más ricos, imponen algunas de sus prácticas culturales y provocan, por una
parte, un sentimiento de rechazo o resentimiento de parte de la población local, pero
al mismo pueden generar un “efecto demostrativo”, especialmente entre los jóvenes,
que los impulsa a adoptar algunos de los comportamientos y/o hábitos (música estri-
dente, consumo de drogas, forma de vestir y hablar estandarizadas, etc.) de los visi-
tantes, lo que atenta contra la riqueza de la diversidad cultural local.
57
d) Agravamiento de problemas sociales
El turismo, con sus flujos masivos de personas, puede profundizar en las comunas o
localidades de destino problemas sociales tales como: la drogadicción, la prostitución,
el alcoholismo, el vandalismo, la delincuencia, etc.
Basta leer los diarios o ver los noticieros de televisión para darse cuenta que en perío-
do de vacaciones en los balnearios este tipo problemas sociales aumenta considera-
blemente. Es sabido que los delincuentes, traficantes, comerciantes sexuales, etc. “si-
guen” el desplazamiento de los consumidores.
Igual que en el caso de los impactos económicos negativos, los problemas socio–eco-
nómicos y culturales que pueden surgir a causa del turismo son evitables o reduci-
bles cuando éste se desarrolla de manera gradual (no explosiva) y planificada. Esto
permite a la comunidad adaptarse a los cambios, y que las personas se preparen para
obtener los legítimos beneficios del desarrollo de la actividad turística comunal.
Existe una clara interdependencia entre turismo y medio ambiente. Por una par-
Principales te, el último es el sustento para el desarrollo del primero; por otra, el desarrollo del
impactos turismo puede generar recursos para la mantención, mejoramiento y puesta en valor
ambientales del de los recursos del medio ambiente.
Por ahora mencionaremos sólo algunos de los principales impactos positivos y nega-
tivos del turismo sobre el medio ambiente.
58
1. IMPACTOS AMBIENTALES POSITIVOS DEL TURISMO
Hoy se aprecia una clara tendencia de los viajeros por visitar sitios naturales, que
requieren de una preocupación por mantener el equilibrio entre la magnitud del
desarrollo turístico y la capacidad de acogida de los ecosistemas.
Por otra parte, la práctica del turismo ha permitido incorporar progresivamente a las
comunidades locales a los beneficios económicos generados por la afluencia de visi-
tantes, y en la medida que su crecimiento responde a condiciones de sustentabilidad,
ha contribuido al logro de sustanciales mejoras en el medio ambiente.
• Ayuda a mejorar la calidad ambiental de ciertas áreas dado que a los turistas
les gusta visitar lugares atractivos, limpios y sin polución.
• Aumenta la conciencia ambiental local cuando los residentes, especialmente los jóvenes,
observan el interés de los turistas en la conservación.
– Mantener la calidad del ambiente del cual dependen las comunidades locales
– Crear empleo local.
– Estimular la creación de industrias.
– Generar divisas al municipio provenientes de la demanda turística nacional o internacional.
– Diversificar la economía local, principalmente en áreas rurales y en las cercanías de áreas silvestres protegidas.
– Estimular el mejoramiento de la infraestructura de transportes, las comunicaciones y los servicios básicos.
– Crear instalaciones recreativas que contribuyen a financiar la protección de los sitios arqueológicos y del pa-
trimonio histórico.
– Estimular la utilización productiva de los terrenos destinados a la agricultura.
– Mejorar la autoestima de la población local a través del conocimiento de la cultura.
59
2. IMPACTOS AMBIENTALES NEGATIVOS DEL TURISMO
Sin embargo, es importante conocer qué tipo de impactos son los más frecuentes, de
tal forma que las autoridades locales y especialmente las municipalidades que cuentan
con un patrimonio natural poco alterado, puedan tomar las medidas oportunas de
control para reducir dichos impactos.
1
Se incluyen principalmente los
impactos sobre el medio natural
60
IMPACTOS AMBIENTALES NEGATIVOS... (continuación)
61
IMPACTOS AMBIENTALES NEGATIVOS... (continuación)
62
IMPACTOS AMBIENTALES NEGATIVOS... (continuación)
Elaboración propia basado en: APEC (1996); Ecotourism Working Group (1995); Houseal (1979); Hunter y
Green (1995); IUCN (1996); Mathieson y Wall (1982); OMT (1992 y 1996); Pearce (1988) y Rivas (1995).
63
capítulo
III
Planificación participativa
del desarrollo
turístico comunal
Contenidos
• Concepto de planificación
Con la planificación se desea cambiar un estado de cosas actual que no nos satisface
completamente por otro que percibimos como preferible para nuestros objetivos.
Intervenciones previstas
SITUACION
DESEADA
(Imagen-Objetivo)
Planificación
SITUACION
SITUACION ACTUAL (Prognosis)
FUTURA
Por mucho tiempo se pensó que la planificación era una actividad reservada solo a los
“expertos” en el tema, los que siguiendo una serie de pasos metodológicos preesta-
blecidos y compartidos casi unánimemente –diagnóstico, objetivos y políticas, pla-
nes, programas y proyectos, ejecución, control y evaluación–, producían diferentes
instrumentos de planificación, entre ellos, los planes de desarrollo.
En los últimos años, visto que por su falta de realismo muchos de los planes técni-
camente intachables que estos expertos diseñaron desde sus oficinas no condujeron
a los resultados esperados, surgió una nueva corriente de planificación, en la cual
participan directamente en el proceso aquellas personas que teóricamente serán
afectadas, positiva o negativamente, por los resultados de la planificación.
1. LA PLANIFICACION PARTICIPATIVA
67
dana, se “validan socialmente” los planes elaborados, con lo cual éstos tendrán mayo-
res probabilidades de concretarse que otros en los que la participación ciudadana ha
sido casi inexistente (caso de la planificación tradicional).
Esto último debido a que cuando las personas perciben que realmente se les toma en
cuenta, estarán más dispuestos a apoyar de palabra y acción las iniciativas de desarro-
llo que se propongan. Pensemos, por ejemplo, en ¿cómo crear una imagen de cálida
acogida a los visitantes si la población local no está involucrada, ni suficientemente
informada sobre ese objetivo?
Así, por ejemplo, en una propuesta de desarrollo turístico comunal, los empresarios
(sector privado) podrían desear que los atractivos turísticos de propiedad pública
existentes en el territorio comunal se liciten y se entreguen a la administración del
sector privado. Las organizaciones sociales (sector social), por su parte podrían estar
demandando que dichos atractivos sean de libre acceso para la población local. Mien-
tras que el alcalde y/o el concejo comunal (sector político), basados en informes y
propuestas de los profesionales de la Secretaría Comunal de Planificación y Coordi-
nación y de la Corporación Nacional Forestal (sector público), deseen darles un des-
tino de zona protegida.
68
Aunque los planificadores debemos ser imaginativos, también debemos ser rea-
listas, y en el trabajo diario no siempre es posible implementar soluciones ópti-
mas desde el punto de vista técnico (“lo que debe ser”). Para poder lograr los
acuerdos pertinentes y, a menudo, el financiamiento que permita actuar en algu-
na dirección, es necesario “negociar” con los actores sociales implicados y llegar
así a lo que podríamos llamar soluciones intermedias o “satisfactorias” (“lo que
puede ser”). Es decir, que por un lado toman en cuenta los intereses de dichos
actores, pero por otro, velan por el desarrollo armónico e integral de la comuna.
Una práctica errónea como ésta se agrava porque su producto (el plan) tiene pocas
probabilidades de cumplir con los objetivos que se planteen, principalmente por la
falta de implicación de la mayor parte de los potenciales beneficiarios de los resulta-
dos esperados.
Las oportunidades son aquellos hechos, elementos, acontecimientos, etc., que de-
penden o son decididos por actores externos al municipio pero que constituyen
una alternativa para el crecimiento y desarrollo del turismo en la comuna.
Ejemplos:
– La apertura de un nuevo camino que cruza el territorio comunal decidida por
el Ministerio de Obras Públicas constituye una oportunidad para desarrollar
proyectos turísticos en zonas que antes eran casi inaccesibles.
– La decisión por parte de un empresario privado de construir un gran comple-
jo turístico ambientalmente sustentable dentro del territorio comunal.
69
Las amenazas son situaciones que atentan contra la supervivencia y/o limitan las
posibilidades de crecimiento y desarrollo de la actividad turística comunal.
Ejemplos:
El ambiente interno en el análisis FODA está constituido por aquellos hechos y ele-
mentos que pueden afectar positiva o negativamente a la actividad turística, pero que
son propios o internos del municipio y sobre los cuales éste tiene capacidad de con-
trol. Estos hechos y elementos corresponden a las fortalezas y las debilidades, las cua-
les pueden entenderse de la siguiente manera:
Las fortalezas corresponden a las destrezas y recursos con que cuenta el munici-
pio para desarrollar el turismo.
Ejemplos:
Las debilidades corresponden a las carencias o déficits del municipio para desarro-
llar el turismo.
Ejemplos:
70
La realización de un taller completo de Planificación Estratégica (del que el análisis
FODA es solo una parte) es muy recomendable a pesar de que para algunas comunas
pueda resultar demasiado caro. Esto último se debe a que se requiere de personal es-
pecializado (un animador o facilitador que conozca perfectamente la metodología),
de una convocatoria adecuada (invitar a quien corresponda), de un local apropiado
(suficientemente amplio para permitir plenarios y trabajos en grupos), y de ciertos
materiales tales como: tarjetas de distintas dimensiones y formas, pizarrones en los
que se puedan clavar las tarjetas, plumones para escribir, alfileres, etc.
Idealmente su duración es de 2 ó 3 días, durante los cuales hay que cubrir gastos de
alimentación y, a veces, alojamiento, para un número de personas comprendido entre
15 y 25, que son las cantidades óptimas para la realización de un buen taller.
plan comunal de Partiendo de la base que la comuna es un sistema y teniendo en cuenta que el turis-
desarrollo turístico mo es sólo uno de sus sectores de actividad (subsistemas), el Plan Comunal de Desa-
rrollo Turístico debe ser uno de los planes sectoriales (existen planes sectoriales de
educación, salud, vivienda, infraestructura, etc.) contenidos en el Plan de Desarrollo
Comunal (PLADECO). Si este último no existe, es indispensable formularlo antes de
empezar a elaborar el plan de desarrollo turístico, de otra forma no tendrían ningu-
na coordinación entre sí y estarían probablemente condenados al fracaso.
71
• La Política Nacional de Turismo
En cuanto a los requisitos básicos que se le debe exigir a un Plan Comunal de Desa-
rrollo Turístico es que sea un instrumento útil para el logro de los objetivos plantea-
dos para lo cual debe tener las siguientes características:
– Ser lo suficientemente explícito (es decir, claro) como para demostrar a las autori-
dades políticas y a la comunidad que los objetivos que se plantean son alcanzables
dentro del marco temporal propuesto.
– Demostrar que los medios con que se cuenta para llegar a los objetivos son, den-
tro de las restricciones, los mejores, y que además son de una eficacia probada.
72
– Debe demostrar que los medios (por ejemplo, programas de marketing, capacita-
ción de recursos humanos, etc.) por los que se plantea llegar a los fines deseados
(ej.: aumentar la frecuentación turística de la comuna), son realmente compatibles
entre sí. En otras palabras, saber si son aquellos que nos conducirán al logro de los
objetivos deseados.
La ejecución del plan representa una excelente oportunidad para diseñar un sistema
de información sobre la actividad turística. La base de datos para alimentar el sistema
debe proporcionar antecedentes actualizados para la formulación del plan y debe
complementarse durante todo su desarrollo.
Algunos de los contenidos de la base de datos de este sistema son los siguientes:
73
Para el caso específico de la demanda, la frecuencia de las evaluaciones debe ser ma-
yor en los primeros cuatro o cinco años de medición, en especial durante la tempora-
da alta, período en el cual idealmente estas evaluaciones deberían hacerse semanal-
mente. Si por alguna razón ello no es posible, al menos se podrían efectuar una vez al
mes, que es la frecuencia que después del cuarto o quinto año es ideal mantener.
Durante el resto del año, también es recomendable hacer mediciones de flujos de vi-
sitantes, en especial en algunas “fechas claves” en las que la experiencia nos indica
que la cantidad de visitantes aumenta. Con la ayuda de un calendario del año siguien-
te, podremos detectar las fechas y días de la semana en que caerán eventos tales co-
mo: Fiestas Patrias, fiestas locales (rodeos, festivales, peregrinaciones, etc.), Semana
Santa, fines de semana largos, etc.
Esta observación del calendario junto con la experiencia de años anteriores, nos per-
mitirá prever, a grandes rasgos, los flujos de visitantes que probablemente recibire-
mos en distintas fechas. Sin embargo ello no es suficiente para planificar el desarro-
llo turístico comunal.
Para que el esfuerzo de recolectar informaciones sobre las características de los flujos
de visitantes se justifique y sea un verdadero aporte y guía para los planificadores pú-
blicos y privados del turismo, es necesario que éste sea concebido desde el principio
como una tarea permanente en el tiempo, con el objeto de crear series de datos (in-
formaciones) cada vez más completas que permitan, por una parte, comparaciones in-
ter–anuales y, por otra, la detección de algunas tendencias y/o cambios (aumentos,
disminuciones, cambios cualitativos de los visitantes, etc.) de la actividad turística lo-
cal. Los análisis y/o proyecciones sobre la evolución futura de la actividad turística
basados en series de datos incompletas pierden parte de su credibilidad.
Dado que el costo de construir estas series de datos cada vez más largas puede ser a
veces demasiado alto para ser asumido por un solo municipio, nuevamente se justifica
lograr la concertación de todos los actores locales (incluso municipios vecinos) que
pudiesen interesarse en contar con estos antecedentes y, por lo tanto, deberían com-
prometer aportes económicos proporcionales por varios años para el financiamiento
de esta actividad.
En este marco, un rol que debe asumir la municipalidad es el de reunir a todos es-
tos actores y mostrarles los beneficios que a corto, mediano y largo plazo les aca-
rreará recibir en forma periódica estas series de datos. Esto no siempre es fácil si
consideramos que se trata de hacer ver a los empresarios, particularmente a quie-
nes tienen una visión cortoplacista, que el dinero que ellos aportan hoy les traerá
interesantes beneficios en un futuro quizás no muy lejano.
74
Para que estos actores se sientan interesados en participar en este esfuerzo es ne-
cesario que perciban que las informaciones que se obtendrán serán fidedignas,
oportunas y permanentes y que, por lo tanto, les servirán para respaldar sus deci-
siones al momento de planificar sus actividades.
En los años siguientes, junto con plantear las preguntas apropiadas para recolectar la
referida información–base, se pueden ir agregando otras preguntas que permitan
captar nuevas informaciones que se considera necesario disponer de ese momento en
adelante, o sencillamente para evaluar algún hecho puntual de un año específico (ej.,
impacto de una sequía sobre la frecuentación turística).
Hay que estar muy atentos para no extender demasiado la encuesta o entrevista
con el objeto de no fatigar y/o aburrir a las personas que, recordemos, responden
voluntariamente a nuestras preguntas. Su aburrimiento y/o fatiga podrían falsear
sus respuestas y por lo tanto afectar negativamente la calidad y fiabilidad de la in-
formación obtenida.
Por lo anterior, el citado proceso debe ser y parecer a los ojos de todos, una actividad
realizada con el máximo de seriedad y de rigor científico posibles. Esto obliga a de-
dicarle un tiempo suficiente de reflexión que involucra al menos los siguientes pasos:
75
1º. Discutir y ponerse de acuerdo con todos los usuarios interesados (municipalidad,
empresarios privados, etc.) sobre cuáles son las informaciones que se necesitan o
se desean.
3º. Establecer una metodología práctica de cómo se aplicarán en terreno (días, horas,
frecuencias, lugares, capacitación y número de encuestadores, etc.) el o los instru-
mentos que se han confeccionado.
Esto no significa necesariamente que tanto las técnicas como los instrumentos de re-
colección de información que se han construido, así como las frecuencias con las que
éstos se aplicarán, sean inflexibles o que no sean perfectibles. Sin embargo, es necesa-
rio estar conscientes de que cualquier cambio posterior en uno o varios de esos as-
pectos, dificultará las posibilidades de poder seguir comparando datos similares. Por
ello, antes de efectuar cambios en los instrumentos o las técnicas utilizadas, se debe
realizar una profunda reflexión sobre la real necesidad de hacerlo, para minimizar las
pérdidas de información.
Esta forma de proceder presenta la doble ventaja de que, por una parte, los instru-
mentos de información que se confeccionarán responderán verdaderamente a la ne-
cesidad real de los usuarios y, por otra parte, posibilitará la obtención de un financia-
miento compartido de los costos que esta actividad de recolección de datos impli-
que, disminuyendo así los riesgos de que las informaciones se recolecten por una sola
y única vez por falta de financiamiento.
Una de las funciones que se verán reforzadas con la creación de un sistema de este ti-
po es la de información al público, por cuanto la oficina de información turística mu-
nicipal requerirá una permanente transferencia de datos del sistema, (ver capítulo
VII).
76
Calendarización de la ejecución del Plan de Desarrollo Turístico
Este equipo debe estar liderado por el Secretario Comunal de Planificación y Coor-
dinación y el responsable de la unidad de turismo municipal, además de contar con la
colaboración de 3 ó 4 profesionales de otras direcciones de la municipalidad (Direc-
ción de Obras, DISECO, Dirección de Aseo y Ornato, por ejemplo).
Es interesante contar con una persona que conozca de técnicas de planificación parti-
cipativa, con el fin de que colabore en la programación y realización de los talleres en
que los actores locales podrán hacer sus aportes y críticas a los trabajos de gabinete y
terreno que coordinará el equipo municipal.
77
Sin embargo, no existe claridad acerca de la estructura funcional que dentro de la
DIDECO debe hacerse cargo de las funciones relacionadas con el turismo comunal.
La experiencia ha demostrado que aquellas municipalidades que han organizado una
unidad dedicada específicamente a este tema, están en condiciones de enfrentar con
mayor éxito su gestión.
Lógicamente que la necesidad de crear una unidad de turismo dependerá tanto del
tamaño del municipio como de la importancia que tiene o que se le desea asignar a la
actividad turística en su territorio.
La necesidad de articular en todas las etapas del proceso de planificación turística co-
munal una coordinación con todos los actores involucrados en el desarrollo turístico,
sean éstos del sector público o privado, surge como un imperativo para asegurar no
sólo que las prioridades planteadas en el plan y los instrumentos empleados para el
logro de objetivos cuenten con un amplio consenso y respaldo, sino para establecer
un mecanismo de diálogo y retroalimentación permanente respecto de la “trayecto-
ria” de las variables que intervienen en la actividad turística.
78
En Chile existe un número importante de agrupaciones empresariales de base local,
regional y nacional que reúne a los empresarios del sector, tanto a nivel sectorial
(ejemplo: Asociaciones de Empresarios Hoteleros y Gastronómicos), como a nivel
territorial, donde se han integrado las municipalidades (ejemplos: Comités Comuna-
les de Turismo).
Entre las agrupaciones privadas que cumplen una función que trasciende el ám-
bito gremial, y que frecuentemente están realizando aportes en temas relevantes
para el sector turismo, se cuenta la Asociación Chilena de Empresas de Turismo
(ACHET), la Federación Nacional de Cámaras de Turismo, la Asociación Gre-
mial de Empresarios Hoteleros de Chile (HOTELAM), la Asociación Chilena
de Gastronomía (ACHIGA), la Federación Gremial de la Industria Hotelera y
Gastronómica de Chile (HOTELGA) y la Asociación Gremial de Organizadores
Profesionales de Congresos, Exposiciones y Seminarios de Chile (OPCE), a los
cuales se suman más de 50 comisiones, comités, corporaciones y cámaras de tu-
rismo distribuidas a lo largo de todo el país (SERNATUR, 1997).
79
capítulo
IV
Primera etapa del Plan Comunal
de Desarrollo Turístico:
diagnóstico participativo y
prognosis del sector turismo
Contenidos
• Definiciones preliminares
• Fases del diagnóstico turístico
Definiciones 1. ¿QUE ES UN DIAGNOSTICO TURISTICO?
preliminares El diagnóstico turístico es un estudio que tiene como objetivo principal conocer la si-
tuación actual y potencial de la actividad turística en la comuna. Para llevarlo a cabo
es necesario analizar, tanto sus Fortalezas y Debilidades, como sus Oportunidades y
Amenazas (Análisis FODA), tal como ellas han sido definidas en el capítulo anterior.
El análisis debe ser a la vez explicativo y predictivo, ello quiere decir que por una
parte, se deben descubrir en la medida de lo posible, las causas que explican la actual
situación (positiva o negativa) y, por otra, debe entregar elementos que permitan
predecir con algún grado de certeza lo que ocurrirá con el turismo comunal en los
próximos años, de continuar la actual tendencia.
83
2. DIAGNOSTICO DE GABINETE Y DE TERRENO Y SU VALIDACION SOCIAL
El diagnóstico debe ser hecho con la información que se encuentra en los distintos
documentos disponibles (censos de población; datos turísticos del Instituto Nacional
de Estadísticas, INE; diagnósticos anteriores; etc.), esto es lo que podemos llamar un
diagnóstico de gabinete.
Sin embargo, la mayor parte de esa información debe ser actualizada, corroborada y
complementada por medio de un diagnóstico de terreno, en el que con la participa-
ción de encuestadores capacitados se debe cubrir todo el territorio comunal, con el
objeto de identificar los atractivos, los equipamientos turísticos existentes y la in-
fraestructura de apoyo a las actividades turísticas, entre otros aspectos.
Al mismo tiempo, se requiere una evaluación del estado actual en que ellos se en-
cuentran. Especial énfasis se debe poner en conocer la potencialidad del lugar para el
desarrollo de actividades turísticas, su propiedad (pública o privada), así como las
oportunidades para la localización de proyectos de inversión privada.
Mientras más temprano se haga intervenir y lograr consensos entre estos actores
sociales en el proceso de planificación del desarrollo turístico comunal, mayores
son las probabilidades de que estos se sientan motivados para apoyar las medidas
que se tomen con ese fin.
Este análisis de los procesos es de especial interés dado que permite, basado en la ex-
periencia, una mejor predicción de la situación futura que presentará el sistema, en el
caso de que se lo deje evolucionar libremente. Esta subetapa del diagnóstico, deno-
minada pronóstico o prognosis, según la Real Academia Española (1992: 1674), con-
siste en un “conocimiento anticipado de algún suceso” y es la que le permite ser pre-
dictivo además de explicativo.
84
Para el caso de una comuna que presenta como situación actual un alto grado de
deterioro ambiental, el conocimiento de los distintos procesos que condujeron a
esa situación (por ejemplo, un proceso de desarrollo turístico espontáneo y/o
procesos de erosión de suelos debidos a técnicas de cultivo poco apropiadas), fa-
cilitará en gran medida una buena predicción de la evolución futura de esa situa-
ción.
Adicionalmente, ello permitirá escoger de manera más acertada las acciones que se-
ría necesario emprender (por ejemplo, un plan de reforestación con especies nativas
y limitación del acceso a los lugares más afectados), con el objeto de revertir esa si-
tuación no deseada y conducir a la comuna hacia la imagen–objetivo que sus autori-
dades y habitantes desearían.
Por lo general esta información se recolecta por medio de los diagnósticos de gabi-
nete y de terreno, sin que sea necesaria la participación ciudadana en su elaboración.
Sin embargo, debe ser presentada a la comunidad al final de la etapa, junto con los
diagnósticos de oferta y demanda, para su validación social.
Tal como se indicó antes, la oferta turística de una comuna corresponde al conjunto
integrado por tres componentes básicos:
a) atractivos turísticos,
b) planta turística e
c) infraestructura.
85
Estos pueden ser puestos en el mercado mediante procesos de gestión, desarrollados
por los empresarios turísticos, por las propias municipalidades y por otros actores.
Un buen conocimiento de estos elementos permitirá a los planificadores de los secto-
res público y privado evaluar las verdaderas potencialidades del turismo comunal y
elaborar planes y proyectos turísticos realistas.
Uno de los factores determinantes, tal vez el principal, para desarrollar actividades
turísticas, es la existencia de recursos o atractivos turísticos que motiven el interés de
viajar. Si bien existen numerosos ejemplos de lugares que en un principio no conta-
ban con recursos y que debido a la imaginación y al esfuerzo financiero se han con-
vertido en centros del turismo internacional, lo cierto es que las posibilidades de in-
corporar el turismo como una fuente de beneficios para la comunidad se ven amplia-
mente favorecidas cuando se dispone de atractivos.
En zonas limítrofes donde existe una conexión internacional a través de algún paso
fronterizo o vía de navegación, la integración no sólo tiene un carácter nacional. A
modo de ejemplo, la experiencia de las regiones de la zona austral, en materia de pro-
moción turística, demuestra la importancia de establecer un mecanismo de trabajo
sistemático con las autoridades argentinas, lo que permitirá enfrentar en forma con-
junta los mercados internacionales.
86
Los recursos incluyen a los denominados atractivos turísticos, que son los elementos
determinantes para motivar, por sí solos o en combinación con otros, el viaje turísti-
co hacia una localidad. Por lo tanto, entendiendo que estos constituyen el soporte
básico de la actividad turística, cuando no existe una capacidad de atracción actual o
potencial para un grupo de personas (demanda), por muy pequeña que sea, no se dan
las condiciones mínimas para que se estructure una oferta turística.
Con el objeto de obtener una detallada descripción de las características de los luga-
res que motivan la visita de turistas, se presenta a continuación la clasificación de
atractivos propuesta por CICATUR–OEA (1979), que resulta útil para el trabajo de
los responsables del turismo a nivel local, por cuanto ha sido la empleada tradicional-
mente por el Servicio Nacional de Turismo.
• Sitios naturales
• Museos y manifestaciones culturales
• Folklore
• Realizaciones técnicas, científicas o artísticas contemporáneas
• Acontecimientos programados (festivales; ferias artesanales; etc.)
87
Para realizar un inventario es necesario elaborar un instrumento de recopilación de
los datos de terreno, denominado comúnmente ficha de Atractivos Turísticos, cuyo
contenido y formato estándar permite su fácil manejo y archivo. Esta ficha es la base
para alimentar el componente de atractivos turísticos del sistema de información (en
el anexo Nº 2).
Para que se desarrolle una demanda turística se requiere que existan condiciones que
motiven la atracción de un sitio.
d) Accesibilidad
¿Cómo llegan los turistas al lugar?
f) Estacionalidad
¿Cuál es la época más apropiada para el turismo?
88
Jerarquías de atractivos turísticos:
– Atractivos de jerarquía I :
Con algún rasgo llamativo, capaz de interesar a turistas que viajen a
la zona o de motivar corrientes locales.
– Atractivos de jerarquía 0 :
Sin méritos para ser incluido en ninguna categoría.
Por otra parte, este método puede combinarse con un análisis de las condiciones que
presenta el atractivo para la localización de proyectos turísticos, tema que será trata-
do en este Manual en otro apartado.
Cuando se habla de actividades se debe precisar que estas presentan tal diversidad
que sería difícil enumerarlas en su totalidad. En el anexo Nº 3 se han resumido las
principales actividades turísticas que se practican en Chile, según la siguiente clasifi-
cación:
– Actividades de esparcimiento
– Actividades deportivas
– Actividades vinculadas al ambiente natural
– Actividades vinculadas al patrimonio histórico cultural
– Actividades vinculadas a la producción
– Asistencia a eventos programados
– Otras actividades complementarias
Existen numerosos ejemplos de lugares que sin tener una atractivo turístico de je-
rarquía o que no teniendo un atractivo de calidad internacional, se consolidan a
partir de las actividades que el turista realiza.
89
Actualmente la competitividad de los destinos turísticos está fuertemente ligada a es-
te factor. Así, una localidad ubicada en la ribera de un lago, que presenta óptimas
condiciones para transformarse en un centro de deportes náuticos, no tiene nada que
ofrecer si no cuenta con los medios para la práctica de esos deportes, es decir, sin la
posibilidad de que el turista pueda navegar, bañarse o asistir a alguna competencia en
el lago.
Un aspecto interesante es que con el correr del tiempo cada localidad se pueda iden-
tificar a través de una actividad turística básica que actúa como polo de atracción para
el turista y para nuevas actividades, contribuyendo en forma determinante a fortale-
cer su imagen turística, como se aprecia en los ejemplos del cuadro Nº 5.
Por ejemplo, para las comunas costeras y lacustres es interesante constatar que de
acuerdo a un estudio realizado por la empresa consultora MORI en diciembre de
1995, se concluía que el 51% de los chilenos que tomarían vacaciones en los meses
de verano de 1996 prefería la playa. El resto declaró que viajaría al campo (22%), a
los lagos y al sur (13%), otros destinos (7%) y no sabe o no responde (7%).
Esta tendencia, constatada por dicho estudio concuerda claramente con la evolución
de la oferta turística hotelera a nivel nacional, que muestra una clara concentración
en el litoral, donde cada año concurren miles de viajeros a pasar sus vacaciones, ge-
nerando al mismo tiempo una amplia oferta de actividades en torno a la playa (con-
cursos, festivales, actividades deportivas y otras), que involucran un fuerte compro-
miso del municipio para financiar espectáculos que les permitan competir con otros
destinos y convertirse en los “lugares más atractivos del verano”.
El carácter masivo de este atractivo y las múltiples actividades organizadas en los bal-
nearios del país, explican la necesidad de decidir cómo adecuar el espacio para recibir
visitantes y qué inversiones son prioritarias para satisfacer sus requerimientos de ser-
vicios básicos.
90
CUADRO Nº 5. ALGUNAS ACTIVIDADES QUE CONTRIBUYEN A FORTALECER LA IMAGEN TURISTICA
Para evaluar el desarrollo de las actividades turísticas es necesario que los responsa-
bles del sector turismo identifiquen los factores que determinan su factibilidad, los
cuales dependerán del tipo de actividad. Así, en cada comuna y en función de los
atractivos turísticos con que cuenta se pueden formular, como un ejercicio básico,
preguntas como las siguientes:
– Si un turista llega a la zona, ¿qué podemos ofrecerle para que permanezca más de
un día o por lo menos se quede en nuestra comuna durante el día?
91
– ¿Estamos en condiciones de asegurarle algún tipo de entretención a todos los visi-
tantes (adultos, jóvenes, niños)?
Estas son sólo algunas de las interrogantes que la municipalidad debe enfrentar como
parte de su función en materia de turismo. Para el caso específico de cada actividad
es importante evaluar las condiciones en que estas se pueden desarrollar, el equipa-
miento disponible o necesario, la procedencia de la demanda turística y la compatibi-
lidad con otras actividades turísticas, entre otros indicadores. La ficha de actividades
turísticas que se incluye en el anexo Nº 4 puede servir para ese propósito.
92
CUADRO Nº 6. PRINCIPALES COMPONENTES DE LA PLANTA TURISTICA A NIVEL LOCAL
Turístico privado
– Viviendas propias
– Habitaciones alquiladas en casas
particulares y en otras
– Hospedajes proporcionados
gratuitamente por familiares o amigos
– Otros alojamientos particulares
Alimentación Restaurantes
Fuentes de soda
Heladerías
Lugares de expendio de comida típica
Esparcimiento Discotecas
Casinos
Cines y teatros
Clubes deportivos
Espectáculos
Parques temáticos
Por su parte, las instalaciones facilitan el uso específico del atractivo y permiten la
práctica de un deporte o de una actividad turística, complementando la dotación de
servicios básicos. De acuerdo a la Organización Mundial del Turismo, se distinguen
a nivel local tres tipos de instalaciones: costeras, de montaña y de valorización del re-
curso turístico o generales.
93
? ¿Cómo se evalúa la planta turística?
Algunos de los elementos que componen la planta turística, tales como los restauran-
tes y hoteles, se evalúan de acuerdo a los servicios ofrecidos y en función de ciertos
parámetros de tipo físico.
Categoría Tipo
Instalaciones de
valorizaciones o generales Piscinas
Vestuarios
Juegos infantiles
Canchas de fútbol
Canchas de golf
Puentes
Pasarelas
94
El otorgamiento por parte de SERNATUR de alguna de estas categorías dependerá
del grado de cumplimiento de los requisitos exigidos en cada caso, lo que según el
procedimiento vigente en Chile es evaluado por una comisión mixta conformada por
representantes del sector privado y por SERNATUR, una vez que el empresario lo
solicita, en cada región.
Sin embargo, no cabe duda que cualquier mejoramiento de la red vial comunal, par-
ticularmente en zonas montañosas que pueden albergar a ecoturistas o la extensión
del servicio de agua potable en la costa, genera un nuevo estímulo para los viajes y
un incentivo para la instalación de algún servicio turístico. La experiencia demuestra
que localidades que en un principio no contaban con un acceso adecuado y que reci-
bían un escaso volumen de turistas, se transformaron rápidamente en destinos, inclu-
so masivos, cuando se produjo un cambio en esas condiciones.
La importancia de una red vial eficiente es que en la conexión entre las rutas de
transporte terrestre, acuático y aéreo, se pueden estructurar circuitos o corredores
turísticos, que permiten el desplazamiento de los visitantes a través de un recorri-
do que por lo general involucra a varias comunas.
95
Por otra parte, es importante considerar que los circuitos turísticos se desarrollan so-
bre una red vial que es aprovechada por múltiples usuarios para movilizar productos
de distinta naturaleza y con requerimientos de infraestructura diferentes. Así, en una
comuna integrada a un circuito turístico, los flujos de visitantes que se desplazan en
vehículos livianos o en buses, comparten y también compiten por el uso de los cami-
nos con el transporte de carga. El tránsito de vehículos pesados requiere de una in-
versión periódica en obras de mejoramiento vial, especialmente en áreas del interior
del país que no cuentan con caminos adecuados a su demanda y, por lo tanto, se hace
necesaria una evaluación permanente de parte del municipio de las condiciones de
acceso hacia sus atractivos turísticos.
Como parte importante de la oferta turística local, un circuito reúne todos los ele-
mentos que pueden configurar un producto. Para facilitar el análisis de un circuito
pueden emplearse fichas, las cuales sintetizan la información recopilada tanto en te-
rreno, como a través de otros métodos indirectos (estudio en mercados emisores, en-
trevista a operadores, etc.). Ver anexo Nº 5, ejemplo de Ficha de circuito turístico.
Los medios de transporte permiten el desplazamiento hacia los sitios turísticos y los
centros urbanos, determinando la posibilidad de organizar circuitos. Se clasifican en
aéreos, acuáticos y terrestres.
96
Entre los antecedentes que serán de utilidad, se cuentan:
– Lugares de interés para motivar viajes que no estén cubiertos por servicios de
transporte.
Para el desarrollo y operación de la actividad turística es preciso contar con una base
institucional que permita el funcionamiento del sector y siente las bases para su ges-
tión. Según la terminología empleada por CICATUR–OEA (1979), estos elementos
forman parte de lo que se denomina superestructura; pero nos parece más apropiado
hablar de elementos institucionales, siguiendo las recomendaciones de la Organiza-
ción Mundial del Turismo.
97
CUADRO Nº 8. PRINCIPALES ELEMENTOS INSTITUCIONALES DEL SECTOR TURISMO
Categoría Ejemplos
98
3º Dentro del conjunto de población que reside en un país o una ciudad se pue-
de contabilizar la demanda real (actual) que es la que viaja al lugar turístico;
pero también existe una demanda potencial, que podría viajar y está motivada,
y no lo hace por alguna causa temporal. Un tercer grupo corresponde a la de-
manda diferida, que podría viajar si tuviese la motivación, pero no lo hace
porque no conoce el lugar.
Aunque pueden cambiar de una comuna a otra, los informantes claves más consultados
pueden ser los propios prestadores de servicios turísticos (hoteleros y dueños de restau-
rantes, funcionarios de agencias de viajes, etc.) y algunos jefes de servicios públicos (via-
lidad, capitanías de puertos, etc.); carabineros; funcionarios municipales, etc.
99
Actualmente en nuestro país no se dispone de registros estadísticos sobre la lle-
gada de turistas a nivel local, y en lo relacionado con el turismo internacional, la
única información confiable sobre la llegada de turistas es la que elabora el Servi-
cio Nacional de Turismo, basado en los datos proporcionados por Policía Inter-
nacional y Carabineros de Chile para los pasos fronterizos, incluyendo el aero-
puerto internacional de Santiago.
Las pernoctaciones se refieren al número de días que permanecen los turistas en una
localidad. El dato se registra en el lugar de alojamiento.
Para obtener una estimación del total de turistas que llegan a todos los medios de
alojamientos (colectivos y privados) de la comuna, se realizan los estudios de “pobla-
ción flotante”. En Chile existen varios estudios de este tipo y actualmente se están
desarrollando otros que cuentan con financiamiento del Fondo Nacional de Desa-
rrollo Regional.
Número de pernoctaciones
Promedio de pernoctación = ————————————
Número de llegadas
Gasto turístico
100
El gasto turístico se distribuye en:
• Viajes
Corresponde al gasto por compra de pasajes aéreos o en otro medio de transporte
empleado para viajar a un país o lugar en el exterior.
• Alojamiento
Corresponde al gasto realizado para pago de hoteles y cualquier otro sistema de
alojamiento empleado en los países o localidades de destino.
• Comidas y bebidas
Corresponde al gasto efectuado por consumo de alimentos y bebidas durante el
viaje.
• Transporte
Corresponde al gasto de combustible o pasajes originados en el país o localidades
de destino.
• Compras
Corresponde a los gastos de compras y souvenir durante el viaje.
• Otros
Cualquier otro gasto no especificado anteriormente.
El registro del gasto de los turistas en Chile se obtiene mediante encuestas realizadas
por SERNATUR en cinco de los principales puntos de ingreso al país. Estos lugares
son los siguientes:
– Aeropuerto de Chacalluta
– Paso Fronterizo de Chacalluta (carretera)
– Paso Fronterizo Los Libertadores
– Aeropuerto Comodoro Arturo Merino Benítez
– Paso Fronterizo Cardenal Samoré (ex–Puyehue)
A nivel comunal, una encuesta destinada a medir el gasto turístico permite cono-
cer la proporción del consumo en bienes y servicios que realizan los turistas du-
rante su permanencia (estructura del gasto) y el aporte directo (volumen de in-
gresos) del turismo a nivel local. Para tales efectos se puede desagregar esta infor-
mación de acuerdo al lugar de residencia, motivación, permanencia y período de
visita, entre otros antecedentes, que facilitarán el análisis del comportamiento
económico de la demanda.
101
Estacionalidad de la actividad turística
ti
Tasa de Estacionalidad Turística (Et) = —————————- x 100
T
A nivel nacional, por ejemplo, la llegada de turistas extranjeros registra para el primer
trimestre de 1995 una tasa de estacionalidad turística del 41.5%.
ti
Indice Espacial de Frecuentación Turística (IEFT) = —————————
S
Es una medida muy simple para establecer la proporción de turistas que viaja a una
localidad de destino con respecto al total de población de la ciudad o país de origen.
ti
Tasa de salida de vacaciones a una localidad (Tv) = —————— x 104
P
102
donde: ti = número de turistas procedentes de una ciudad o país en el período i
(mes, semana, período peak)
P = población total residente en la ciudad o país de origen
Para tal efecto, se emplean cuestionarios que se aplican con el apoyo de un equipo de
encuestadores a través de consulta directa al turista, o como ocurre a menudo, a un
representante del grupo familiar.
Al respecto, y como ejemplo de los datos que proporciona un estudio de este tipo, se
puede mencionar que una reciente investigación del mercado europeo, realizada para
el Servicio Nacional de Turismo, por un consultor internacional, arrojó como resul-
tado que el principal interés por viajar a Chile radica en sus atractivos naturales. A la
pregunta sobre ¿Qué piensa encontrar en Chile?, las respuestas fueron: primero, el
paisaje y la naturaleza; segundo, el arte y la cultura y, tercero, el exotismo o singulari-
dad del país (Figuerola, 1996:30).
Para identificar quién es el visitante y cuáles son sus motivaciones e intereses de viaje,
se deberá analizar, entre otros los siguientes antecedentes:
– Lugar de residencia
– Edad
– Sexo
– Nivel educacional
– Ingresos del grupo familiar
– Composición del grupo familiar
– Mercados de origen (según corresponda internos o externos)
– Lugares visitados
– Motivaciones
– Servicios utilizados
– Cuantificación aproximada de gastos en alojamiento, alimentación,
transporte y otros.
103
capítulo
Otras fases del Plan Comunal
de Desarrollo Turístico:
V
Propósitos y objetivos.
Programas y proyectos.
Fuentes de financiamiento.
Control y evaluación.
Contenidos
• Propósitos y objetivos del plan
comunal de desarrollo turístico
objetivos del plan Al parecer no existe completo acuerdo sobre si la imagen–objetivo turística se cons-
comunal de truye antes o después del diagnóstico. En todo caso, es difícil imaginar que se pueda
construir una imagen de futuro realista a partir de la nada, es decir, sin un diagnósti-
desarrollo co, por muy elemental que este sea.
turístico
La imagen–objetivo, por lo general, se ubica en el largo plazo (más de 6 ó 7 años), in-
dependiente incluso de la duración del plan, puede ser entendida como un modelo de
la realidad que se quiere alcanzar en un lapso determinado de tiempo. No obstante,
dicha imagen no debe ser una visión demasiado idealista o desprovista de realismo,
sino que al contrario, debe tener en cuenta los recursos con que se cuenta para alcan-
zarla.
Una vez conocidas por medio del diagnóstico las fortalezas, oportunidades, debilida-
des y amenazas del sector turismo de la comuna estamos en condiciones de discutir y
lograr un consenso entre todos los actores sociales involucrados en el turismo, en
cuanto a cuál es la imagen–objetivo turística que se quiere para la comuna.
Lograr una imagen turística consensuada puede ser un proceso lento y requerir
de mucha discusión entre actores, sin embargo una vez lograda, las probabilida-
des de que cada uno de ellos ponga todo de su parte para alcanzarla es mucho
más alta que cuando se impone una imagen o esta se decide por votación. En este
último caso podría ocurrir que aquellos que fueron minoría no se plieguen al
plan comunal de desarrollo turístico que se elaborará con el objeto de alcanzarla.
En el marco del turismo, la imagen mental puede definirse como “una expresión
de todos los conocimientos objetivos, impresiones, prejuicios, imaginaciones y
pensamientos emocionales que un individuo o grupo tienen respecto de un ob-
jeto o lugar particular” (Lawson and Baud-Bovy, 1977:10).
Esta definición nos sugiere que las imágenes que se tiene de los objetos y lugares son
creadas tanto con elementos objetivos (la realidad espacial percibida directamente
por el individuo) como subjetivos (la publicidad, opiniones de amigos, aportes de los
medios de comunicación, etc.), por lo cual ellas pueden variar enormemente de un
individuo a otro, según características tales como: edad, sexo, nivel socioeconómico,
107
nivel de estudios, nacionalidad, lugar de residencia habitual (campo o ciudad), gustos
de las personas, etc.
Una vez conocidos y validados socialmente los resultados del diagnóstico explicativo
y predictivo que se ha realizado, y habiendo determinado consensuadamente la ima-
gen–objetivo, se está en condiciones de formular los objetivos y metas de desarrollo
turístico comunal.
Los objetivos pueden ser entendidos como planteamientos que describen los propó-
sitos de un determinado plan o simplemente como situaciones deseadas. En el caso
específico de los objetivos del Plan Comunal de Desarrollo Turístico, éstos deben re-
flejar claramente los deseos de los actores sociales involucrados, esto sin perder nun-
ca de vista, tanto las fortalezas o potencialidades como las debilidades o limitaciones
(de recursos humanos o económicos) detectadas en el diagnóstico. Por ejemplo, un
objetivo sectorial de turismo podría ser “Aumentar la capacidad hotelera de la co-
muna”.
Estas magnitudes y plazos deben ser realistas y tener en cuenta, por lo tanto, los re-
cursos con los que se cuenta para alcanzarla. En el caso del objetivo presentado como
ejemplo en el párrafo anterior, al plantearlo en términos de meta, su redacción sería
como sigue: “aumentar en un 30% el actual número de camas disponibles en la co-
muna, en un período de 4 años”.
Jerarquización de objetivos
108
• Objetivos específicos: Son un nivel de planteamientos más específicos que los
anteriores en los que se establecen las contribuciones que desde cada sector se
harán para el logro de los objetivos globales o estratégicos, y por su intermedio
acercarse a la imagen–objetivo. Ejemplos:
Estos objetivos y metas también deben ser producto de un trabajo participativo con
todos los actores implicados en la actividad turística. El rol de los profesionales mu-
nicipales en este trabajo colectivo debería ser el de ayudar a priorizar entre los múlti-
ples objetivos que pueden surgir de la discusión.
Se puede decir que “si todo es prioritario nada es prioritario”, por lo que se hace
necesaria una selección de aquellos objetivos que parecen ser los más importan-
tes de alcanzar con el objeto de no distraer recursos en temas secundarios.
De gran utilidad para realizar correctamente esta tarea, es plantear los objetivos se-
gún una técnica (participativa) propuesta por la PPO o Planificación por Objetivos
(de la Lastra, 1992; Vallespín, 1993), la que en términos simples consiste en “la
transformación de todas las condiciones negativas (problemas), en condiciones positi-
vas (objetivos) que resuelven los problemas previamente identificados”. (Vallespín,
1993: 37).
109
3. FORMULACION DE UNA ESTRATEGIA DE DESARROLLO PARA EL
TURISMO COMUNAL
Respecto de los objetivos estratégicos del sector turismo, según la realidad local, el
énfasis puede centrarse en aspectos tales como los siguientes:
110
El Servicio Nacional de Turismo ha desarrollado diversos estudios (planes maestros)
que incluyen, desde una perspectiva estratégica, la delimitación de áreas turísticas a
nivel regional. Si bien estos planes no se definen como un instrumento normativo,
constituyen un valioso antecedente para cualquier municipio.
Programas y Una vez planteados los objetivos y las estrategias de desarrollo, es necesario em-
prender acciones concretas que conduzcan a su logro. En ese marco, los programas y
proyectos del los proyectos son la forma más directa de intervenir sobre el medio (la realidad espa-
plan comunal de cial) con el objeto de modificarlo en el sentido que se desea, es decir, hacia la ima-
gen–objetivo planteada.
desarrollo
turístico
111
1. CONCEPTOS DE PROGRAMAS Y PROYECTOS
No siempre es posible cumplir con cada una de las etapas o pasos que se proponen en
el modelo del anexo Nº 7, sin embargo consideramos que es una buena guía que de-
be adaptarse a las necesidades y/o posibilidades de cada caso. Se recomienda presen-
tar y registrar los proyectos en la base de datos turísticos del municipio, empleando
112
una ficha que identifique las principales características del proyecto, sus beneficiarios
y demanda potencial, entre otros aspectos que se incluyen en el modelo propuesto
(ver anexo Nº 7).
Entre los proyectos que una municipalidad puede proponer para el sector turismo,
sea bajo su responsabilidad o mediante el compromiso de otras instituciones, se en-
cuentran:
del plan comunal La elaboración del Plan Comunal de Desarrollo Turístico puede ser financiada por
de desarrollo algunas de las siguientes vías. La primera es postular a financiamiento al Fondo Na-
cional de Desarrollo Regional (FNDR), por medio del cual, entre muchas otras
turístico cosas, se puede financiar este tipo de estudios. Será, sin embargo, necesario con-
vencer a los miembros del consejo regional para que otorguen los recursos perti-
nentes.
113
dentro de ella, con el objeto de que vele por la realización de un plan verdaderamen-
te participativo.
Las principales fuentes de financiamiento y los requisitos para este tipo de proyectos
son ampliamente conocidas por las municipalidades razón por la cual en este manual
nos limitaremos sólo a mencionar las principales de ellas:
114
3. FUENTES DE FINANCIAMIENTO PARA PROYECTOS TURISTICOS PRIVADOS
Mayores informaciones sobre estos cuatro fondos: Banco del Estado de Chile– Subgerencia de Pequeña
Empresa. Morandé esq. Alameda, Santiago. En regiones: Sucursales del Banco del Estado.
Banestado Leasing
115
b) Créditos y subvenciones otorgados por CORFO
Destinatario : Microempresas
Objetivo : Crédito para financiamiento de capital de trabajo (materias primas, etc.) o
para activos fijos (maquinarias, etc.)
Monto : De 8 a 80 UF, si se hace vía una ONG.
De 15 a 200 UF, si se hace vía un banco comercial
El programa ofrece además otros servicios básicos financiados a través de proyectos FOSIS:
capacitación, asistencia técnica, asesoría en gestión.
116
d) Corporación de Finanzas Internacionales y Nacionales para la Mujer en Chile
Mayores informaciones sobre este crédito: FINAM. Manuel Montt 101 Providencia, Santiago.
T.: 235 13 30 – 235 13 31 – 235 13 32
Mayores informaciones sobre este crédito: Corp Banca. Huérfanos 1067. Santiago.
T.: 699 33 88 Fax.: 696 02 71, y todas las sucursales Corp Banca.
Mayores informaciones sobre este fondo: Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (SENCE).
Huérfanos 1273, pisos 11 y 12. T.: 696 82 13. Fax: 696 75 78 y Oficinas regionales de SENCE.
evaluación del El proceso de planificación se caracteriza, entre otras cosas, por su permanente re-
plan comunal de troalimentación, lo que le permite introducir las medidas correctivas en el caso de
que se esté avanzando en una dirección no deseada.
desarrollo
turístico
La ejecución del plan debe estar sujeta a un permanente control y evaluación, pa-
ra la cual es necesario contar con instrumentos de evaluación (o indicadores) pre-
definidos, los que pueden ser de distinta naturaleza. Se debe hacer una evalua-
ción global del plan, y también una más específica a nivel de programas y pro-
yectos.
117
En el caso de la evaluación de los programas de inversión en infraestructuras (hote-
les, caminos, marketing, etc.) o promoción turística, se pueden determinar algunos
indicadores objetivos tales como: el avance físico de la pavimentación de un camino,
la cantidad de nuevas camas turísticas, aumento de los flujos turísticos, etc.
En otros programas menos concretos, pero igualmente importantes –como por ejem-
plo, uno de mejoramiento de la calidad de la atención a los visitantes–, la evaluación
es algo más subjetiva y difícil en el corto plazo.
Con el objetivo de facilitar dicha tarea, en el anexo Nº 8 se propone una ficha que
sintetiza algunos de los más importantes indicadores de la actividad turística co-
munal, la que podrá ser de utilidad para el seguimiento anual de la actividad por
parte de la municipalidad.
118
capítulo
El ordenamiento territorial y la
VI
protección del medio ambiente:
condicionantes básicas
para un desarrollo turístico
sostenido
Contenidos
• Instrumentos de ordenamiento
turístico del territorio comunal
• Gestión del municipio para la
protección del medio ambiente
Instrumentos de A nivel local, se debe definir con la mayor precisión posible cuál es la dimensión
física de las actividades turísticas puesto que esta se traduce en demandas por el terri-
ordenamiento torio y sus recursos. De esta forma, quienes tienen la responsabilidad de la gestión
turístico del territorial estarán en mejores condiciones de priorizar la localización de programas
de desarrollo para el sector turismo.
territorio comunal
El ordenamiento territorial consiste esencialmente en buscar un desarrollo equilibra-
do del espacio geográfico por medio de la localización y distribución racional de las
actividades sobre dicho espacio. En este sentido, a nivel comunal se requiere una
adecuada identificación del territorio que presenta la mejor “aptitud para el turismo”
y la eficiente aplicación de los instrumentos de planificación física que permiten re-
gular su uso.
Las unidades territoriales que se identifican para la planificación del desarrollo turís-
tico corresponden a zonas, áreas y centros turísticos. La definición de cada unidad es
la siguiente:
• Zona turística
• Area turística
Está constituida por un espacio geográfico extenso, en el que se concentran varios lu-
gares de interés de tipo homogéneo o complementario. Debe contar con atractivos
turísticos relativamente contiguos y de categorías y jerarquías variables y comprende,
por lo general, uno o varios centros urbanos de cualquier magnitud (SERNATUR,
1978:81).
121
• Centro turístico
Estos centros cumplen varias funciones (estadía, distribución, escala, excursión), sien-
do las de estadía y de distribución unas de las más importantes en el contexto re-
gional.
Para cumplir estas funciones, los centros deben contar con una amplia oferta de equi-
pamiento y servicios turísticos, además de su conexión con la red de transportes y
comunicaciones de nivel nacional o internacional, conforme a su jerarquía. Su área o
radio de influencia es variable, estimándose en un máximo de 2 horas de distan-
cia–tiempo, lo que permite visitar en un día los atractivos ubicados en dicha área
(Boullón, 1985:70).
Circuito o corredor turístico, corresponde a una vía de conexión cuya función es impor-
tante para vincular zonas y áreas turísticas (SERNATUR, 1994:77). El área de in-
fluencia del corredor se extiende, según sus características, hasta varios kilómetros
hacia sus costados, dependiendo de los atractivos que sean posibles de visitar desde la
ruta principal.
122
En la figura Nº 6 se presenta esquema de un circuito turístico internacional, el que
debe ir acompañado de un mapa rutero más detallado.
La Región de Coquimbo se levanta en el llamado Norte Chico del país. Limita al norte con la Región de Atacama, al oriente con la República de
Argentina, al sur con la Región de Valparaíso y al occidente con el Océano Pacífico.
El clima es suave, agradable y con escasas variaciones de temperatura, con una media anual de 14.7° C. La temperatura mínima media de
11.2° C indica un clima moderado, sin fríos extremos, apto para ser visitado todo el año.
Su relieve es único en el contexto nacional. La Cordillera de Los Andes es alta y abrupta por la ausencia de volcanes y trabajo erosivo de las
aguas, alcanzando una altura media de 5.000 mts. hasta frente a La Serena, descendiendo al sur hasta la costa de los 4.000 ms. n.m. Toda la
región es cruzada por cordones montañosos, que dan origen a los valles transversales que la caracterizan.
La vegetación natural presenta formaciones típicas de zonas áridas y semiáridas, pero en escasa cantidad, subsistiendo algunas áreas bosco-
sas, como el Parque Nacional Fray Jorge, con vegetación propia de Chile.
Valles y ríos, unidos a las condiciones del clima, han permitido desarrollar la actividad agrícola. En la costa, donde hay mayor humedad, predo-
mina la fruticultura de papayas, lúcumas, chirimoyas y olivos, en combinación con una intensa chacarería.
Al interior, es la viña el cultivo por excelencia, destinada a la mesa o a la producción del pisco. Nuevos frutos han arraigado en la zona y nue-
vas tecnologías de riego permiten incrementar sustancialmente la superficie disponible para la exploración de productos destinados a la expor-
tación, tanto en congelados como en deshidratados.
CUADRO DE DISTANCIAS
123
2. INSTRUMENTOS NORMATIVOS DE PLANIFICACION FISICA
Los principales objetivos de los planes reguladores urbanos son, por lo tanto:
Estos planes son un instrumento de planificación física del turismo –poco empleados
en Chile–, que se originan a partir de la facultad que tiene el Servicio Nacional de
Turismo de declarar zonas o centro de interés turístico a una sector del territorio.
124
Estos planes pueden surgir como una iniciativa del sector privado cuando se requiere
definir el uso del suelo para un proyecto turístico o para un complejo turístico inmo-
biliario, como es el caso de los desarrollos más recientes que se observan en el litoral
de las zona central y en la región de Coquimbo, principalmente.
Para tal efecto, se recomienda tener en cuenta los siguientes criterios básicos que de-
terminarán las normas:
125
– Tipo de desarrollo turístico
– Imagen turística deseada para el desarrollo turístico
– Condiciones ambientales del área
– Capacidad aceptable de usuarios por unidad de superficie
– Actividades turísticas previstas para el área donde se localiza el proyecto
– Mitigación de los efectos ambientales negativos inducidos por el proyecto
– Resguardo de la accesibilidad al borde costero y lacustre
municipio para la En nuestro país, cada temporada son miles los veraneantes que se dirigen hacia algún
protección del balneario de la zona central o del norte, o hacia los lagos del sur para integrarse en la
cadena productiva local y contribuir durante cada día de su permanencia con la eco-
medio ambiente nomía de esos territorios.
Aunque estos beneficios son evidentes, tal como lo hemos sostenido en capítulos an-
teriores, la actividad turística local requiere una permanente evaluación del impacto
que produce sobre el medio ambiente.
Existe una estrecha relación entre turismo y calidad ambiental. Los recursos turísticos
atraen por su valor estético, recreativo o científico–educativo. Estos factores son espe-
cialmente sensibles a las actividades humanas, y un crecimiento no planificado o no
controlado del desarrollo turístico puede destruir dichos recursos y, en consecuencia,
reducir drásticamente los impactos positivos de las inversiones turísticas. Tal situación
se ha podido observar principalmente en las zonas costeras del Mediterráneo, el Cari-
be, el Atlántico y en el litoral chileno, por mencionar sólo algunos ejemplos.
Este indicador define el umbral o límite a partir del cual se generan efectos negativos
sobre las condiciones físicas, biológicas, sociales y psicológico–perceptivas que carac-
terizan el medio ambiente turístico. La capacidad varía según la estación y depende
de factores tales como las pautas de comportamiento de los turistas, el diseño y la
gestión de las instalaciones, el carácter dinámico del medio ambiente y las actitudes
cambiantes de la comunidad receptora.
126
La concentración de la actividad turística en el borde costero y en algunos sectores
lacustres del país ha sido un factor determinante para los frecuentes problemas que
tienen que enfrentar las autoridades locales en cada temporada turística.
Los componentes básicos que un municipio debe identificar para un manejo adecua-
do de su capacidad de acogida, son los siguientes:
• Objetivos de gestión
De allí, que sólo mediante la aplicación de una planificación integral que incorpore la
variable ambiental como un componente básico para la toma de decisiones desde el
nivel local, se podrá aspirar a un desarrollo turístico sostenible que efectivamente in-
volucre a la comunidad residente y a todos los actores que directa o indirectamente
se ven beneficiados con el turismo.
127
La municipalidad cuenta con diversas facultades en materia de medio ambiente, co-
mo es el caso de la autorización de proyectos de inversión y de la promulgación de
ordenanzas locales, lo cual permite influir decisivamente en la consolidación de su
imagen turística. Por ejemplo, la Ilustre Municipalidad de La Serena ha establecido
una “Ordenanza Comunal sobre Protección y Conservación del Medio Ambiente”
(Decreto Nº 762 del 30 de julio de 1993).
Los programas que se recomienda incorporar en la gestión del municipio para la ac-
tividad turística se pueden sintetizar en los siguientes puntos, que se desarrollarán
con detalle:
Las recomendaciones en materia de planificación del uso del suelo pueden adop-
tarse como una decisión “de consenso” con el propósito de establecer límites a la
expansión del equipamiento e infraestructura que, aun cuando en el corto plazo
contribuya a inducir nuevos flujos turísticos, en el mediano o largo plazo puede
ocasionar el deterioro del medio receptor.
128
a) Protección del patrimonio histórico–cultural
Las medidas que pueden incorporarse en la planificación turística comunal son las si-
guientes:
Uno de los efectos que tiene esta declaración es que cualquier acción de restaura-
ción o transformación que se pretenda ejecutar en un monumento nacional re-
querirá la autorización del Consejo. También se puede solicitar la declaratoria de
protección y conservación del aspecto típico o pintoresco de una población o lu-
gar donde existan ruinas arqueológicas, o ruinas y edificios declarados monu-
mentos históricos, originando las denominadas zonas típicas.
129
En estas zonas típicas incluso deberán regularse los anuncios, avisos o carteles, los es-
tacionamientos de automóviles y expendio de gasolina y lubricantes, los hilos telegrá-
ficos o telefónicos y, en general, las instalaciones eléctricas, los quioscos, postes, loca-
les o cualquier otra construcción permanente o temporal.
Las actividades vinculadas a las playas constituyen las de mayor demanda para los tu-
ristas que viajan a muchas regiones del país. Para un adecuado control del estado de
salubridad de estas, especialmente en caletas que muestran gran concentración de ha-
bitantes, se proponen las siguientes medidas de protección:
130
– Delimitación de zonas activas para baño en función de las condiciones locales
de profundidad, corrientes, oleajes, etc. Se recomienda señalizar con “boyas”
los sectores de baño incorporando la máxima superficie útil.
Teléfonos públicos
Vestuarios
Duchas en balnearios
Lavabos
Baños
Basureros
Maquinaria para limpieza de la playa
Lanchas para recogida de desperdicios en el sector de la playa activa
131
A modo de ejemplo, es común que se solicite la concesión para instalar camping, hote-
les y marinas, las que se otorgan por un período fijo con posibilidades de renovación.
El trayecto hacia los distintos lugares de destino turístico requiere de medidas especí-
ficas de protección y rehabilitación, particularmente en los sectores sometidos a in-
tensa actividad productiva.
Las principales medidas globales que se proponen para la protección de las rutas y
corredores turísticos y su aprovechamiento escénico, son las siguientes:
Por otra parte, entre las medidas correctoras específicas que se recomienda aplicar
para mitigar efectos negativos producidos por uso intensivo en rutas turísticas, son
las siguientes:
En este contexto, los parques y reservas nacionales y los monumentos naturales, que
han incorporado espacios para la recreación a nivel comunal, representan un valioso
capital para el fomento de nuevas formas de turismo y para la educación ambiental de
la población.
132
CUADRO Nº 10. FACTORES A CONSIDERAR PARA UN MANEJO ADECUADO DE LAS AREAS
SILVESTRES PROTEGIDAS PARA EL DESARROLLO TURISTICO
• El creciente interés de los turistas por viajar hacia destinos donde el ecoturismo y las ac-
tividades de aventura presentan favorables condiciones de desarrollo: montañas, desierto,
lagos, canales, ventisqueros, volcanes, etc.
En consideración a estas características, las comunas pueden lograr, a través del turis-
mo, un modelo propio para el uso de los recursos naturales y un mecanismo eficiente
para aplicar los principios del desarrollo sustentable.
133
La operación de actividades turísticas en su interior está regida por un sistema de
concesiones y actualmente existe un reglamento que norma el desarrollo del rafting,
las cabalgatas y el andinismo.
Para su puesta en marcha identificamos las siguientes cuatro etapas básicas del pro-
grama:
134
– Elaboración de un Código del Turista.
Con esta orientación conviene incluir en los planes de estudio de los colegios y
liceos de la comuna, alguna unidad donde se trate el tema del turismo, desde su
múltiple perspectiva socio–cultural, ambiental y económica.
En los últimos años este producto presenta una creciente importancia debido a su
asociación con un medio donde se combina el atractivo natural con la actividad de la
población residente.
135
• Establecer los centros poblados que cumplirán el rol de receptores y distribuido-
res de los circuitos.
• Preparación de planos y folletería sobre las características del medio rural, sus tra-
diciones, costumbres, artesanías y toda información que permita un adecuado en-
cuentro entre los visitantes y la comunidad residente.
Circuitos urbanos
Asimismo, es necesario elaborar folletería y otros documentos con datos precisos so-
bre el patrimonio turístico de la ciudad, que sea puesta a disposición de los guías y
turistas individuales.
• Análisis de los puntos de vista y perspectivas lejanas para determinar el valor visual
del atractivo.
136
• Preparación de folletería, planos y descripción detallada del circuito para los tu-
ristas.
137
capítulo
VII
La promoción
turística a nivel local
Contenidos
• Un plan de marketing turístico
• Instalación de oficinas de
información turística
Cuando un viajero toma un bus, avión o un vehículo para dirigirse al campo, la playa
o la montaña, por lo general ha recibido alguna información sobre el lugar de desti-
no. De allí, que el denominado producto turístico (ver Figura Nº 3) constituye el ele-
mento motivador de ese viaje y la promoción tiene el propósito de atraer y entusias-
mar a los turistas a través de un conjunto de acciones para las cuales es preciso contar
con especialistas.
La segmentación del mercado turístico está basada en el hecho de que los consumi-
dores son heterogéneos en cuanto a sus necesidades y deseos. La segmentación es la
división del mercado en términos de necesidades y de motivaciones de compra, y
permite definir grupos de potenciales compradores del producto.
141
Las principales ventajas que ofrece la segmentación para la gestión turística local son:
– Definición más precisa del mercado, en función de las necesidades de los consu-
midores.
– Identificación de las necesidades de los consumidores todavía no satisfechas, que
pueden representar una oportunidad de negocio.
– Posibilidad de adaptación a los eventuales cambios de la demanda.
– Optimización de la actuación comunicativa al conocer a ciencia cierta el público
objetivo.
La agrupación de los turistas en segmentos homogéneos se puede establecer según cuatro cri-
terios básicos:
– Edad
– Sexo
– Número de personas en el núcleo familiar
– Nivel de estudios
– Profesión/Ocupación
– Posición social
– Nivel de ingresos
– Nivel de educación
– Nacionalidad
– Motivaciones
– Estilos de vida
– Personalidad
– Expectativas
– Ideología
– Hábitos de información
– Hábitos de compra
– Hábitos de uso
– Frecuencia de uso
– Fidelidad de marca
– Fuentes de información
– Actitud hacia el producto
– Sensibilidad a un factor de marketing
142
Estas informaciones específicas para cada comuna probablemente no existen en nin-
gún registro estadístico regional o nacional, por lo que es necesario obtenerlas direc-
tamente por medio de encuestas, entrevistas, observaciones en terreno, etc.
Por otra parte, la municipalidad debe tener presente que en su gestión se pueden ejecu-
tar programas y proyectos específicos para potenciar productos como los siguientes:
– Circuitos de aventura
– Ecoturismo
– Agroturismo
– Circuitos históricos–culturales
– Pesca deportiva
– Ski
– Eventos artísticos
En esta etapa corresponde afinar la imagen turística que consensuadamente, (es de-
cir, aquella acordada entre todos los actores ligados a la actividad), se desea proyectar
a los visitantes. En general, la mayoría de los destinos turísticos del país se asocian
con la naturaleza, tema que ha sido aprovechado frecuentemente en los mensajes pu-
blicitarios.
143
Existe una estrecha relación entre el producto turístico y los temas seleccionados
para la promoción turística. Así, aquellos destinos ubicados en zonas lacustres,
asociarán su publicidad a las actividades náuticas y al paisaje, como una forma de
posicionar esa imagen.
Los materiales más empleados corresponden a folletos, afiches, mapas y planos tu-
rísticos y hojas informativas.
144
• Publicidad en periódicos y revistas orientadas al consumidor. Para una promoción
dirigida a un objetivo concreto, las publicaciones especializadas son muy impor-
tantes.
• Publicidad en radio y televisión. Esta puede resultar cara pero es con frecuencia
muy efectiva en la comercialización masiva.
En Chile se ha observado en los últimos años una creciente participación de las mu-
nicipalidades en acciones promocionales que se manifiestan en actividades tan diver-
sas que incluyen desde fiestas de “inauguración o lanzamiento” de la temporada, has-
ta asados que buscan batir un récord mundial.
145
Instalación de 1. FUNDAMENTACION
oficinas de La importancia de contar con una oficina de información turística abierta al público
información radica en que ésta se transforma en un medio directo y eficaz para mostrar la oferta
turística comunal.
turística
Una oficina de información es la imagen de la comuna, por lo que es de interés
de todas las personas e instituciones vinculadas a la actividad turística que fun-
cione en forma eficiente y que disponga de información actualizada.
La oficina debe reunir antecedentes detallados sobre todos los lugares del país que
sean de consulta frecuente, respecto de atractivos, equipamiento, infraestructura y
otros antecedentes complementarios.
• La oficina debe ser atendida por personal idóneo, en lo posible dirigidas por téc-
nicos en turismo con el apoyo de estudiantes en práctica, cuando no se dispone de
recursos para contratar profesionales.
• Para una adecuada capacidad de atención cada oficina debe contar con una pareja
de informadores de ambos sexos.
146
Material básico:
– Folletos de la localidad
– Folletos de la región
– Folletos de otras zonas del país de consulta frecuente
– Calendario de eventos de la localidad
– Plano de ubicación urbana
– Mapa de ubicación del lugar y sus atractivos cercanos
– Mapa rutero regional
– Mapa de localidades limítrofes
– Afiches de la zona
El material tiene la función de responder algunas de las consultas más frecuentes que
enfrentan los informadores turísticos, entre las que destacan las siguientes:
– Playas
– Lugares de pesca
– Parques nacionales
– Museos
– Barrios pintorescos
– Hoteles
– Residenciales
– Campings
– Restaurantes
147
CUADRO Nº 12. ALGUNAS CARACTERISTICAS DEL MATERIAL PROMOCIONAL
148
c) Desarrollar una función de apoyo en la evaluación de las acciones
promocionales
públicos en materia Aunque la municipalidad cuente con un presupuesto suficiente para desarrollar sus
de promoción propias campañas promocionales, no es posible lograr un posicionamiento adecuado
sin la participación de los prestadores de servicios quienes, en definitiva, son los que
turística venden el producto, y del organismo estatal que informa y promociona la oferta tu-
rística del país a nivel nacional e internacional.
Los roles que cada uno de estos actores puede asumir para facilitar la gestión munici-
pal se analizan en lo que sigue.
149
1. SECTOR PRIVADO
En Chile el sector privado cuenta con distintas instancias de organización que pue-
den ser un factor catalizador para la gestión municipal. Los empresarios locales se
han agrupado en asociaciones, corporaciones, comités, comisiones y cámaras de tu-
rismo, etc., en las que se reúnen hoteles, restaurantes, empresas de transporte y otras
que constituyen un importante núcleo de trabajo para apoyar a una comuna que tie-
ne carácter turístico.
Las actividades más frecuentes que el sector privado puede realizar para apoyar la
función de información, son las siguientes:
2. SECTOR PUBLICO
Diversas municipalidades del país han establecido una relación de trabajo con
SERNATUR, que les ha permitido incorporarse en las acciones promocionales
que se desarrollan a nivel nacional e incluso internacional.
Por otra parte, este Servicio puede colaborar con el municipio en materias tales como:
150
– Capacitación de informadores turísticos
– Organización de la oficina de información turística
– Programación de eventos
– Diseño de material promocional
• – Ministerio de Educación
Participación en el diseño de campañas de educación ambiental
Muy a menudo entre comunas que ofrecen atractivos turísticos similares y que se
orientan a un mismo segmento del mercado se produce una fuerte competencia. Esto
es válido tanto para comunas vecinas como para comunas alejadas unas de otras y no
es negativo ya que obliga a las autoridades y las empresas turísticas privadas locales a
mejorar la calidad de los bienes y servicios de su oferta.
Sin embargo, una competencia encarnizada entre comunas vecinas en cuanto a in-
fraestructuras turísticas (locales para grandes exposiciones, grandes centros recreati-
vos municipales, por ejemplo), podría tener como consecuencia una sobreoferta de
algún atractivo, lo que perjudicaría a ambas comunas.
Acciones concertadas como las señaladas, permiten sacar mejor partido de la ve-
cindad, especialmente por contribuir a una reducción de sus costos. Para llevarlas
a cabo se necesita principalmente una buena dosis de imaginación, de organiza-
ción de los actores implicados (municipalidades, empresarios turísticos privados,
la población local, etc.) y de alguna capacidad de gestión como para diseñar pa-
quetes turísticos integrados que inviten a los visitantes a permanecer en la zona
más tiempo y/o regresar a ella en el futuro.
151
Turismo y Gestión Municipal
Anexos
Anexo Nº 1: Descripción de los atractivos turísticos
155
Caídas de agua Altura, caudal, número de saltos
Paisaje del entorno
Cambios estacionales
Flora y fauna
156
Obras de arte y Autor
técnica Descripción de sus aspectos más relevantes
Antigüedad y estado de conservación
Causas del interés turístico
157
Realizaciones Explotaciones Causas del interés turístico
técnicas, científicas silvoagropecuarias Posibilidades de visita
o artísticas
contemporáneas Explotaciones Causas del interés turístico
industriales Posibilidades de visita
158
Anexo Nº 2: Ficha de atractivos turísticos comunales
Categoría :
Región : Tipo :
Provincia :
Administración del lugar
Comuna :
Privada Pública
Concesión Otra
Accesibilidad
1.
2.
3.
Tipos: Pavimento (P) Ripio (R) Tierra (T) Estado: Bueno (B) Regular (R) Malo (M)
159
Distancia desde localidades principales
Actual Potencial
Especificar:
Actuales Potenciales
160
Tipo de uso turístico
Demanda turística
Hotel Mirador
Motel/cabañas Muelle
Residencial Piscina
161
Bar Canchas de tenis
Cine Caballos
Teatro Botes
Energía Guía
Cambio de moneda
Comercio turístico
Otros__________________________________
__________________________________
__________________________________
162
Principales limitaciones para el uso turístico del lugar
1. Físicas Clima
Agua
Topografía
Vida silvestre
Paisaje
Impactos socioculturales
3. Accesibilidad
4. Tecnológicas
5. Equipamientos/instalaciones
6. Otras:_______________________________________________________________________
_______________________________________________________________________
_______________________________________________________________________
163
Observaciones
Fecha: __________________________________________________________________________
Responsable: __________________________________________________________________________
164
Anexo Nº 3: Actividades turísticas más comunes que se practican en Chile
165
Anexo Nº 4: Ficha de actividades turísticas
Localización de la actividad
Descripción de la actividad
Especificar:_____________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________
Demanda turística
Local Regional
Nacional Internacional
166
Principales segmentos del mercado
Nacionales ________________________________________________________________________
________________________________________________________________________
Internacionales________________________________________________________________________
________________________________________________________________________
Horario de la actividad
Principalmente en la mañana
Principalmente en la tarde
Principalmente en la noche
Todo el día
Mirador
Muelle
Rampa
Piscina
Juegos infantiles
Senderos habilitados
a motor
167
Canchas de tenis
Canchas de golf
Canchas de fútbol
Otras
Otros Otros
168
Grado de compatibilidad con otras actividades turísticas que se desarrollan en el mismo lugar
1. Ambientales Especificar:
2. Equipamiento/instalaciones Especificar:
3. Servicios Especificar:
4. Acceso Especificar:
5. Costo Especificar:
6. Socioculturales Especificar:
7. Otras
169
Observaciones
Fecha :
Responsable :
170
Anexo Nº 5: Ficha del Circuito turístico Puerto Montt–Laguna San Rafael1
Acceso
Puerto Montt: Principal centro urbano de la región de Los Lagos, centro artesanal (Angelmó), costanera, Museo Juan
Pablo II, Chinquihue, gastronomía marina.
Navegación: Golfo de Ancud, Archipiélago de Chiloé, Golfo de Corcovado, Reserva Nacional Archipiélago de las
Guaitecas, Canal Pérez Norte, Canal Pérez Sur, Canal Moraleda, Puerto Aguirre, Canal Ferronave, Canal Pilcomayo,
Canal Costa, Elefantes, Canal Témpanos, Laguna San Rafael.
Parque Nacional Laguna San Rafael (1.742.000 hás.): El glaciar se ubica a 350 millas al sur de Puerto Montt, se
extiende por 15 kms. de largo y aprox. 2 kms. de ancho. Tiene más de 400.000 hás. de hielos. Ventisquero que
desemboca en el mar, con una pared de hielo de más de 70 mts. de altura, desde su base se desprenden témpanos
que se dispersan por toda la laguna, dando origen al río Témpanos.
Las especies más representativas de la flora son: coigüe, tepa, tineo, mañío macho, etc. Entre la fauna destacan
numerosas aves como el cisne de cuello negro, caiquén y cormorán y entre los mamíferos se puede observar coipos y
lobos de mar.
171
Capacidad de alojamiento (año 1995)
Posibilidad de integrarse
a la oferta turística Puede integrarse a la oferta actual en corto plazo. Este circuito
es realizado por varios barcos que zarpan desde
Puerto Montt u otros lugares de la isla de Chiloé.
172
Anexo Nº 6: Cuestionario para identificar el perfil del turista
1. Lugar de residencia
a. Santiago b. Otro
Especificar:
2. Sexo
a. Femenino b. Masculino
3. Estudios cursados
a. Básicos b. Medios
e. Otro:
4. Estado civil
a. Soltero b. Casado
c. Viudo d. Otro
5. Edad
c. Entre 26 y 30 d. Entre 31 y 35
e. Entre 36 y 40 f. Entre 41 y 45
g. Entre 46 y 50 h. Entre 51 y 60
i. Entre 61 y más
c. 4 - 6 d. 7 y más
173
7. Relación de parentesco con sus acompañantes (si corresponde)
a. Amigo b. Familiares
c. Viaja frecuentemente
e. Más de 15 días
a. Auto b. Bus
c. Tren d. Avión
e. Mixto
a. Hotel b. Motel/cabaña
a. Vacaciones b. Negocios
g. Otros:
174
13. Actividades turísticas realizadas durante la estadía
k. Otras:________________________________________________________________________________
b. Televisión
c. Radio
e. Oficina de información
f. Agencias de viajes
g. Otras:________________________________________________________________________________
15. ¿Qué tipo de atractivo turístico es el que más ha visitado o apreciado durante su permanencia en la
zona?
c. Lagos d. museos
k. Termas l. Ciudades
ñ. otros:________________________________________________________________________________
175
Anexo Nº 7: Ficha para la identificación de proyectos
Localidad:________________________________________________________________________________
4. Mercado potencial
Nombre : _________________________________________________________________
Empresa/institución : _________________________________________________________________
Dirección : _________________________________________________________________
Ciudad/localidad : _________________________________________________________________
176
6. Origen de la iniciativa (indicar con una X)
Otro (especificar):__________________________________________________________________________
Terreno Capital
Tecnología Mercado
Otro (especificar):__________________________________________________________________________
Nombre : _________________________________________________________________
Empresa/institución : _________________________________________________________________
Dirección : _________________________________________________________________
Ciudad/localidad : _________________________________________________________________
Terreno Capital
Tecnología Mercado
Otro (especificar):__________________________________________________________________________
10. Tiempo estimado desde el inicio de la ejecución del proyecto hasta su puesta en el mercado
Número de meses
Monto total:__________________________________________
177
13. Requerimientos de inversión (indicar con una X o especificar, si corresponde)
Adquisición de terrenos
Infraestructura vial
Aporte de capital
Otros requerimientos:_______________________________________________________________________
_______________________________________________________________________________________
Fecha :___________________________________________________
178
Anexo Nº 8: Ficha de seguimiento del Plan Comunal de Desarrollo Turístico
Comuna :
Superficie comunal :
Población total 1996 :
Localidad principal :
179
Proposición de proyectos para el sector público
Llegadas % Llegadas %
180
Principales segmentos de mercado 1997
Llegadas %
Observaciones
Fecha :______________________
Responsable :___________________________________
181
Turismo y Gestión Municipal
Anexo Normativo
Marco normativo e institucional del desarrollo turístico local
La actividad turística se rige por normativas que no están definidas con carácter exclusivo para el sector, pero que tie-
nen un efecto importante para su desarrollo.
A nivel del territorio comunal no existe un marco legal específico para el turismo, sino para actividades que son de
interés para los turistas. Las principales normativas relacionadas con el sector se encuentran en los siguientes cuerpos
legales.
I. Materias generales
La prestación del servicio hotelero está regulada por las normas generales de construcción, higiene y de todas aque-
llas que se aplican a un establecimiento que atiende público y expende alimentos y bebidas.
La función turística se define tanto por el equipamiento disponible, como por los servicios que se ofrecen. La única
normativa específica se desprende de los Decretos Supremos Nº 227 de 1987 y 701 de 1992, que reglamentan la cali-
ficación, la clasificación y el registro de establecimientos de alojamiento turístico, correspondientes a hoteles, apart
hoteles, moteles, residenciales y camping.
La aplicación de estos reglamentos es una atribución de SERNATUR y rige para efectos de definir qué clase de esta-
blecimiento corresponde (hotel, residencial, etc.) y qué categoría (estrellas) se le asigna.
Sin embargo, estos cuerpos legales operan sólo a solicitud del interesado, por lo que no es obligatorio que un hotel
adquiera una categoría específica.
La Ley de Rentas Municipales (D.L. Nº 3063 de 1979) faculta a las municipalidades a otorgar patentes temporales, de
hasta 4 meses de duración, en balnearios o lugares de turismo para el funcionamiento de negocios y actividades en-
tre las cuales se incluyen las de expendio de bebidas alcohólicas (Art. 28 de la Ley de Rentas Municipales).
A solicitud de la municipalidad, el Presidente de la República, por medio del Ministerio del Interior, determina los bal-
nearios y lugares turísticos en los que se puede otorgar este tipo de patentes temporales, las que se incluirán en el
decreto ley correspondiente.
c. Beneficios para las comunas turísticas en la distribución del Fondo Común Municipal (FCM)
Es evidente que las comunas que durante los períodos de vacaciones reciben volúmenes de visitantes (población flo-
tante) que a menudo superan en varias veces a la población permanente deben incurrir en mayores gastos para poder
entregar a éstos algunos servicios básicos tales como: aseo y ornato (principalmente de playas y otros espacios pú-
blicos), recolección de basuras, mantención de calles y veredas, etc.
Por esta razón, teniendo en cuenta la capacidad de generar ingresos propios permanentes que tiene cada una de las
municipalidades que se encuentran en ese caso, en la distribución del Fondo Común Municipal (FCM) se intenta
favorecer en alguna medida a aquellas que tienen ingresos propios promedio por habitante inferiores al promedio
nacional.
185
El Decreto Nº 1.824 del 30 de junio de 1995 que aprueba el reglamento que determina la forma de recaudación de los
recursos del FCM estipula que para el cálculo del coeficiente utilizado para distribuir el 90% de dicho fondo, un 15%
será distribuido “en proporción directa a la población de cada comuna considerando para su cálculo la población flo-
tante en aquellas comunas que se señalan en el decreto supremo expedido a través del Ministerio del Interior para
estos efectos” (Diario Oficial del 29 de junio de 1995:2).
En el mismo decreto más adelante se señala que para determinar la población ponderada de las comunas que reci-
ban un flujo significativo de población flotante en ciertas épocas del año, se efectuará una diferenciación entre co-
munas turísticas y comunas con turismo social, según se establezca a través del decreto supremo antes referido pro-
cediéndose de la siguiente forma:
1º Se determinará el número de roles existentes en la comuna al 31 de diciembre del penúltimo año del trienio inme-
diatamente anterior. El Servicio de Impuestos Internos informará a la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Admi-
nistrativo el número de roles existentes.
2º Para calcular la población flotante en las comunas turísticas se considerará el número de roles multiplicado por cua-
tro y dividido por tres, en tanto que para determinar la población flotante de las comunas con turismo social se con-
siderará el número de roles multiplicado por ocho y dividido por tres.
3º A la población determinada de conformidad al inciso segundo de esta letra se le sumará la cifra determinada de
acuerdo al número precedente. El producto total de la suma dará como resultado la población ponderada que corres-
ponde asignar a cada comuna balneario.
Aunque al parecer no existe una clara definición sobre los criterios utilizados para determinar la calidad de comuna tu-
rística o la de comuna de turismo social, de la lectura del procedimiento recién transcrito podríamos deducir que se de-
sea beneficiar en mayor medida, por contar (probablemente) con menos recursos propios, a estas últimas, y algo menos
a las primeras por ser (probablemente) administraciones comunales relativamente menos pobres.
El listado de las comunas clasificadas como turísticas o como de turismo social se encuentra en el Decreto Nº 1.825 del
30 de junio de 1995, en el que se fijan los coeficientes de distribución del FCM y de sus suplementos y se determina la
ponderación de población flotante (Diario Oficial del 29 de noviembre de 1995:4).
El Decreto Nº 301 del Ministerio de Salud, del año 1984, establece los requisitos para el funcionamiento sanitario de
los camping y campamentos de turismo. Estas medidas constituyen un requisito para el otorgamiento de la patente
municipal, por lo que corresponde al municipio verificar que el informe de salud esté en conformidad a dicho decreto.
De acuerdo a la normativa actual (Decreto Ley Nº 3.516), en el seno de la Comisión Mixta de Agricultura, Vivienda y
186
Turismo se evalúan las solicitudes de cambio de uso del suelo y la división de predios rústicos para fines no agríco-
las, ganaderos o forestales.
La superficie mínima es de 0,5 hás. (5.000 m2). Recientemente se propuso una modificación a la ley (actualmente en
discusión en el parlamento), para que la subdivisión predial tenga un mínimo de 3 hás.
Los criterios de decisión que se recomiendan para el trabajo de la Comisión Mixta deberían considerar los siguientes
factores:
• Condiciones ambientales del sitio seleccionado para la instalación del proyecto turístico.
• Características del entorno.
• Emplazamiento del proyecto.
• Relación del sitio con otros sitios turísticos.
• Plan seccional.
• Evaluación del Impacto Ambiental del proyecto turístico (si corresponde).
Uno de los principales problemas que actualmente enfrentan los municipios de la zona litoral es el acceso al borde cos-
tero, el cual se encuentra regulado a través del Decreto Nº 1.939 del Ministerio de Bienes Nacionales, cuyo reglamento
no ha sido aplicado.
La principal consecuencia de la falta de aplicación de este decreto radica en la dificultad de asegurar el acceso libre a
las playas, que son bienes de uso público y que en el acelerado proceso de crecimiento de las inversiones ubicadas en el
litoral han sido sistemáticamente “privatizadas”.
No obstante, el propio decreto establece que deben definirse franjas de ingreso a las playas, tarea en la cual el munici-
pio, conjuntamente con los organismos competentes, debe actuar oportunamente mediante la verificación que los pro-
yectos que se localizan en la línea de costa contemplen sectores para el ingreso a las playas en los terrenos que corres-
ponden a bienes públicos.
Este mecanismo de protección ambiental está contenido en la Ley de Bases del Medio Ambiente (Ley Nº 19.300) y su
relación con la actividad turística radica en el hecho que se establece la obligatoriedad de someter al sistema de eva-
luación del impacto ambiental algunos proyectos turísticos localizados fuera del radio urbano.
Una vez que el reglamento de la ley entre en vigencia, se precisarán cuáles son los proyectos que ingresarán a dicho
sistema.
La participación de la municipalidad y del Servicio Nacional de Turismo, entre los organismos que entran en el siste-
ma establecido por CONAMA, asegura la incorporación de sus opiniones como contrapartes preocupadas por el res-
guardo ambiental de los recursos turísticos .
Corresponde a la aplicación de la normativa del Consejo de Monumentos Nacionales, en aquellas localidades que
cuentan con obras del patrimonio cultural, tema que fue tratado en el Capítulo VI de este Manual.
187
II. Normativa que rige las funciones del Servicio Nacional de Turismo y
sus Direcciones Regionales
El Servicio Nacional de Turismo (SERNATUR), organismo estatal creado mediante el Decreto Ley Nº 1.224 del 22 de oc-
tubre de 1975 y publicado en el Diario Oficial del 8 de noviembre del mismo año, constituye una instancia a la que debe
recurrir la municipalidad para respaldar sus programas y proyectos en materia de turismo.
Las principales funciones del Servicio Nacional de Turismo son las siguientes:
1. Proponer al Supremo Gobierno la Política Nacional de Turismo y, una vez aprobada, velar por su cumplimiento.
2. Preparar los planes y programas de desarrollo turístico, en conformidad con la política nacional de turismo y en con-
cordancia con los planes y políticas nacionales de desarrollo.
Las Direcciones Regionales de Turismo prepararán y propondrán, anualmente, a la Dirección Nacional del Servicio
Nacional de Turismo, los planes, programas y proyectos de desarrollo turístico que tendrán aplicación en las respec-
tivas regiones, correspondiéndole a ésta su armonización y compatibilización con la política nacional de turismo.
3. Orientar, coordinar e incentivar las actividades de los sectores público y privado hacia el cumplimiento de los planes,
programas y proyectos turísticos.
En el ejercicio de esta facultad, el Servicio Nacional de Turismo podrá celebrar convenios de colaboración técnica y
financiera.
6. Difundir, en el territorio nacional o en el extranjero, los recursos y atractivos turísticos del país, pudiendo emplear
cualquier medio apto para el efecto.
La Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica, antes de otorgar su calificación a una beca de estu-
dios turísticos, deberá contar con el informe favorable del Servicio Nacional de Turismo.
8. Intervenir en la capacitación de los recursos humanos requeridos por la actividad turística, para lo cual deberá comu-
nicar al Ministerio de Educación Pública las observaciones que le merezcan los planes y programas de estudios pre-
parados por los respectivos institutos de enseñanza.
9. Velar por la veracidad de la información que de los valores turísticos divulguen nacional e internacionalmente el sec-
tor privado y aquellas entidades del sector público que presten servicios turísticos.
Toda persona natural o jurídica será responsable de la veracidad del contenido de la información que divulgue.
Sin perjuicio de lo dispuesto precedentemente, con anterioridad a la impresión del material de promoción que se edi-
te para divulgar los valores turísticos, podrá requerirse del Servicio Nacional de Turismo la correspondiente confor-
midad con el texto y el material gráfico utilizado.
10. Convenir, con personas naturales o jurídicas, nacionales, extranjeras o internacionales, la instalación de oficinas de
información turística en el país o en el extranjero, pudiendo, en este último caso, designar representantes que ejer-
cerán las actividades de promoción turística del país que en cada caso se determinen.
188
11. Estimular la realización en el país de congresos, conferencias seminarios y de otras reuniones o certámenes de inte-
rés turístico.
En el ejercicio de esta facultad, el Servicio Nacional de Turismo podrá apoyar técnica y/o financieramente la realiza-
ción de estas reuniones, para lo cual se deberá dictar una resolución fundada.
12. Declarar “Fiesta Nacional” a aquellos certámenes que, por su trascendencia, constituyan instrumentos de promoción
turística nacional o internacional. La declaración se hará por resolución fundada. En el ejercicio de esta facultad no
se podrá disponer del apoyo financiero del Servicio.
13. Propiciar el otorgamiento de créditos de fomento u otros beneficios a la actividad turística, para lo cual podrá propor-
cionar a los organismos nacionales o internacionales de financiamiento, los estudios y antecedentes técnicos que lo
justifiquen.
14. Informar a los organismos públicos de financiamiento las solicitudes de crédito de fomento al turismo.
16. Calificar si una empresa, establecimiento o entidad cumple con los requisitos turísticos exigidos por las normas que
rigen su actividad específica.
17. Registrar o inscribir en el registro de respectiva actividad a todas las personas, empresas, establecimientos o entida-
des que tengan patente de turismo.
18. Clasificar a los prestadores de servicios turísticos en la forma establecida en los respectivos reglamentos.
21. Dictar las normas a las cuales deberán sujetarse las residencias particulares que se destinen transitoriamente al alo-
jamiento de turistas.
22. Declarar zonas o centros de interés turístico nacional, previo informe del Ministerio de Defensa Nacional.
23. Informar al Ministerio de Defensa Nacional las solicitudes de concesión de playas de mar y riberas de lagos y ríos
para el uso exclusivo de particulares. Los informes que se evacuen deberán incluirse en el expediente a que alude el
artículo 28º del Decreto Supremo Nº 223, del Ministerio de Defensa Nacional (M), de 1968.
24. Cooperar y asesorar a los organismos pertinentes en la preservación, puesta en valor y explotación del patrimonio ar-
tístico, cultural e histórico, para lo cual podrá suscribir los convenios correspondientes.
25. Propender a la simplificación de las normas y procedimientos requeridos para el ingreso, permanencia y salida de los
turistas del territorio nacional, pudiendo proponer a los servicios competentes las respectivas medidas de facilita-
ción. Para tal efecto podrán crearse comisiones consultivas ad–honorem.
26. Celebrar convenios con personas naturales, jurídicas, o con organismos públicos, nacionales, extranjeros o interna-
cionales, con el objeto de promover y facilitar el intercambio y desarrollo turístico.
Las adquisiciones a título oneroso se harán a través de propuestas privadas, salvo que el Director Nacional precisa-
mente y por resolución fundada, exima a una determinada adquisición de dicho trámite.
189
La enajenación a título oneroso de material de promoción turística se hará en forma directa, salvo que por circuns-
tancias especiales se determine efectuarlas en una forma diversa.
30. Convenir con personas naturales, jurídicas o con organismos públicos nacionales, extranjeros o internacionales, la
colaboración o coordinación necesaria para el mejor cumplimiento de las funciones del Servicio.
31. Preparar anualmente el Presupuesto de Entradas y Gastos del Servicio que será presentado al Presidente de la Repú-
blica para su aprobación.
32. Enajenar u otorgar en concesión bienes que integran su patrimonio, con el objeto de destinarlos a la actividad turísti-
ca nacional.
La enajenación a título oneroso y el otorgamiento en concesión de los inmuebles de propiedad del Servicio se harán
por propuesta pública, cuyas bases serán determinadas en la resolución en que se contenga el llamamiento.
33. Crear comisiones consultivas ad–honorem integradas por representantes de los sectores público y privado relaciona-
dos con la actividad turística, para el mejor cumplimiento de sus objetivos.
34. Celebrar los convenios y ejecutar los actos que sean conducentes al cumplimiento de sus fines.
Si bien estas funciones se aplican en cualquier ámbito territorial, es indudable que la comuna constituye un es-
pacio adecuado para poner en marcha un proceso sistemático de planificación turística (hasta ahora inexistente
en el país), el que podría desarrollarse en conjunto con SERNATUR.
Para tal efecto se requiere establecer un eficiente canal de comunicación permanente con la respectiva Direc-
ción Regional de Turismo. La definición de una estructura interna, como la sugerida en este Manual, sin duda
contribuye favorablemente a ese objetivo
190
Turismo y Gestión Municipal
Anexo Bibliográfico
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