Mariano Coronas. (2002). Aula de Infantil. [Versin electrnica].

Revista Aula de Infantil 6

Acerquemos los libros a los nios y nias

Mariano Coronas

Aqu estamos, todos en casa.

Horas interminables delante del televisor, otros ratos jugando con todo aquello que despierta el inters y la imaginacin de
los nios y nias... otros sin hacer nada, pero finalmente llega la pregunta: Y ahora qu hacemos?

Estoy aburrido qu hago? Ve a la habitacin a jugar y estate tranquilo...

- Por qu no me lees un cuento...?

Antes de comenzar a desgranar los contenidos del declogo que sigue a estas lneas, convendra decir que un documento
de este tipo es, sobre todo, una manera de promover o de propiciar la reflexin (en este caso, en el seno de la familia) y
quiz pueda ser tambin una fuente de sugerencias de acciones que llevar a cabo para promocionar la lectura, para
acercarse a los libros, para apreciar la cultura... Una familia comprometida con la lectura es aquella que...

1.Anima a leer, incluso antes de que su hijo o hija sepa leer. Proporcionar a nios y nias libros bien ilustrados para que
hojeen y se recreen mirando las imgenes.

Los libros sin texto tambin se leen, es evidente. Las personas adultas podemos hacer de mediadores con los pequeos,
pero tambin favorecer el que ellos interpreten lo que ven dibujado o fotografiado a su manera y que dialoguemos sobre
esas interpretaciones. Un libro siempre es una oportunidad para la sorpresa.

2.Cuenta cuentos a sus hijos e hijas, les recita rimas y poesas, se las lee en voz alta y llena sus odos de musicalidad y de
magia.

A lo largo del da (y probablemente, unos das ms que otros) hay algunos momentos especiales para que -desde los
primeros meses o aos- nios y nias oigan las ms hermosas palabras rimadas y cantadas; acompaadas de juegos con
las manos y de clida musicalidad. Para ello podemos utilizar libros que contienen retahlas, folklore infantil, letrillas,
canciones, historias rimadas... y aprovechar las que nosotros conocemos, las que nos cantaron y contaron...

3.Que da ejemplo leyendo libros, revistas, peridicos y permite que sus hijos e hijas los sorprendan frecuentemente con
uno de ellos en las manos. Reconociendo que nada es infalible y que ninguna prctica nos asegura el xito, parece
razonable pensar que si nuestros hijos e hijas nos sorprenden frecuentemente con material de lectura en nuestras manos,
es posible que sientan una creciente curiosidad por saber qu guardan, qu contienen esos libros, revistas o peridicos...

4.Que acompaa a sus hijos e hijas a visitar exposiciones, que asiste a funciones de tteres o teatro y a otros espectculos
culturales para ir afinando la sensibilidad y la imaginacin de sus pequeos. Es evidente que los caminos que conducen a la
lectura y al libro son diversos y, en ocasiones, variopintos. Todo aquello que potencie y desarrolle la sensibilidad y la
imaginacin parece encaminado a ofrecer argumentos favorables para el acercamiento a todas las manifestaciones de la
cultura.

5.Que comparte y comenta las lecturas de sus hijos e hijas. Desde que nuestros hijos e hijas son pequeos, podemos
hojear con ellos y leerles libros, haciendo distintas voces segn sea el personaje que habla, abundando en gestos y
expresividad y haciendo de la lectura un tiempo agradable y divertido. Es adecuado estar siempre dispuestos a abrirles un
libro para ayudarles a desvelar su contenido y hablar y comentar cmo son, cmo se comportan, qu han hecho, qu
podran hacer quienes lo protagonizan.

6.Que acompaa a sus hijos e hijas a los lugares donde estn los libros -libreras y bibliotecas- para mirar y seleccionar
juntos y los anima a acudir a la biblioteca escolar del colegio. Interesarse, acompaar y ayudar a elegir, orientando a las
criaturas sobre lo ms adecuado a su edad, a sus intereses. El padre y la madre pueden buscar previamente asesoramiento
en el profesorado especializado, en las personas encargadas de la biblioteca, etc.

7.Que fomenta y cuida la biblioteca familiar o personal y destina en su casa un espacio adecuado para ello. Es una buena
prctica, favorecedora del aprecio por los libros y la lectura, el hecho de formar, desde los primeros aos, la biblioteca
personal del nio o de la nia: un espacio de fcil acceso donde se irn colocando los libros regalados o comprados.

8.Es aquella que aprecia y lee, con sus hijos e hijas, las publicaciones que se hacen en el colegio, cuando llegan a nuestras
casas esas publicaciones debemos tomarlas con inters y lerselas o leerlas y comentarlas con los pequeos.

9.Que comprende que la compra de un libro no es algo excepcional, aunque en las fechas sealadas -cumpleaos, reyes,
etc.- no debe faltar, sino que lo considera parte de los gastos de educacin de sus hijos e hijas. Los libros son portadores
de la fantasa, de los recuerdos, de la historia, de la cultura... Deben ser alimento cotidiano para el cerebro y no deberan
faltar en la infancia de ningn nio, de ninguna nia.

10. Que se ocupa de ver algunos programas de televisin, pelculas de vdeo, etc., con sus hijos e hijas y que, juntos,
comentan y comparten la experiencia.

Nada lograremos oponiendo la lectura o los libros a los medios audiovisuales. Es preferible la estrategia de la convivencia a
la del enfrentamiento (como en la vida). Por tanto, cuando podamos, veamos tambin los programas, las pelculas, los
vdeos que ellos y ellas ven para poder intercambiar opiniones y contrastar pareceres o para poderles explicar
determinadas escenas o situaciones que, a edades tempranas, es probable que no entiendan.

Hemos hablado de:

Bibliografa

CORONAS, M.La biblioteca escolar. Un espacio para leer, escribir y aprender.Pamplona, Gobierno de Navarra, 2000.

CORONAS, M.Eligiendo senderos. Una seleccin bibliogrfica.Gobierno de Aragn, Huesca, 2001

Direccin de contacto

Mariano Coronas
[email protected]